Orando Bíblicamente

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ORANDO BÍBLICAMENTE

Conferencia Anual 2013


ORANDO BÍBLICAMENTE “Entonces oró Jonás a Jehová su Dios desde el vientre del pez, y dijo: Invoqué en mi angustia a Jehová, y él me oyó; Desde el seno del Seol clamé, Y mi voz oíste.” (Jonás 2.1–2, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE ¿POR QUÉ ESTE TALLER?

Introducción


ORANDO BÍBLICAMENTE


ORANDO BÍBLICAMENTE


ORANDO BÍBLICAMENTE La oración cristiana contemporánea


ORANDO BÍBLICAMENTE La oración cristiana contemporánea


ORANDO BÍBLICAMENTE “He dicho que SOPLES!”


ORANDO BÍBLICAMENTE


ORANDO BÍBLICAMENTE “Aconteció que estaba Jesús orando en un lugar, y cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: Señor, enséñanos a orar, como también Juan enseñó a sus discípulos.” (Lucas 11.1, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE “Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.” (Romanos 8.26, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE

“Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites” (Santiago 4.3, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE Según Santiago, cuando nuestras son guiadas por nosotros mismos se convierten en expresiones de “codicia” y “envidia”, y esto tan sólo causa divisiones y tropiezo en el pueblo de Dios.


ORANDO BĂ?BLICAMENTE Para orar necesitamos ser


ORANDO BÍBLICAMENTE La oración entonces no es una herramienta humana, es más bien un medio divino de comunicar y establecer la voluntad de Dios en la vida de sus hijos.


ORANDO BÍBLICAMENTE “La oración es el medio por el cual nos ponemos de acuerdo con el Señor en cuanto a las cosas presentes, pues las eternas ya han sido establecidas en Cristo”


ORANDO BÍBLICAMENTE “El propósito de la oración es cubrir la brecha entre nuestra incapacidad espiritual y la grandeza de nuestro Padre Celestial ”


ORANDO BÍBLICAMENTE

¿CUÁL ES LA ACTITUD CORRECTA PARA ORAR?

Desarrollo 1


ORANDO BÍBLICAMENTE “Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.” (Mateo 6.5–6, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE “Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos. No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis.” (Mateo 6.7–8, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE


ORANDO BÍBLICAMENTE “Y ellos tomaron el buey que les fue dado y lo prepararon, e invocaron el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía, diciendo: ¡Baal, respóndenos! Pero no había voz, ni quien respondiese; entre tanto, ellos andaban saltando cerca del altar que habían hecho…


ORANDO BÍBLICAMENTE “... Y aconteció al mediodía, que Elías se burlaba de ellos, diciendo: Gritad en alta voz, porque dios es; quizá está meditando, o tiene algún trabajo, o va de camino; tal vez duerme, y hay que despertarle. Y ellos clamaban a grandes voces, y se sajaban con cuchillos y con lancetas conforme a su costumbre, hasta chorrear la sangre sobre ellos…


ORANDO BÍBLICAMENTE “... Pasó el mediodía, y ellos siguieron gritando frenéticamente hasta la hora de ofrecerse el sacrificio, pero no hubo ninguna voz, ni quien respondiese ni escuchase.” (1º Reyes 18.26–29, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE “Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos. No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque VUESTRO PADRE SABE DE QUÉ COSAS TENÉIS NECESIDAD, ANTES QUE VOSOTROS LE PIDÁIS.” (Mateo 6.7–8, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE ¿CÓMO ORAR BÍBLICAMENTE?

Desarrollo 2


ORANDO BÍBLICAMENTE

1. Reconociendo nuestra POSICIÓN


ORANDO BÍBLICAMENTE

“Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.” (Mateo 6.9, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE


ORANDO BÍBLICAMENTE

“Y Jehová dijo a Moisés y a Aarón: Por cuanto no creísteis en mí, para santificarme delante de los hijos de Israel, por tanto, no meteréis esta congregación en la tierra que les he dado.” (Números 20.12, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE

2. Sometiéndonos al Señorío


ORANDO BÍBLICAMENTE

“Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.” (Mateo 6.10, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE

“No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.” (Romanos 12.2, RVR60)


ORANDO BĂ?BLICAMENTE

3. Pidiendo por nuestras necesidades


ORANDO BÍBLICAMENTE

“El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy.” (Mateo 6.11, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE

“Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores.” (Mateo 6.12, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE “Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.” (Mateo 6.14–15, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE “Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén.” (Mateo 6.13, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE

Conclusión


ORANDO BÍBLICAMENTE El Señor Jesucristo: “Yendo un poco adelante, se postró sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú.” (Mateo 26.39, RVR60)

La primera iglesia: “Soberano Señor… mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra, mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús.” (Hechos 4.24–30, RVR60)

El Apóstol Pablo: “Respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí.Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.” (2 Corintios 12.8–9, RVR60)

El Apóstol Juan y la Iglesia: “El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús. La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. Amén.” (Apocalipsis 22.20–21, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE “Entonces oró Jonás a Jehová su Dios desde el vientre del pez, y dijo: Invoqué en mi angustia a Jehová, y él me oyó; Desde el seno del Seol clamé, Y mi voz oíste.” (Jonás 2.1–2, RVR60)


ORANDO BÍBLICAMENTE “Ve a Nínive y pregona contra ella” (1.2)

Tomaron a Jonás y lo echaron al mar (1.15)

Pero Jehová tenía preparado un gran pez (1.17)

Y se levantó para huir (1.3)

“Tomadme y echadme al mar” (1.12)

Estuvo Jonás en el vientre del pez tres días y tres noches (1.17)

Y la suerte cayó sobre Jonás (1.7)

Entonces oró Jonás a Jehová su Dios desde el vientre del gran pez (2.1)

“Levántate y clama a tu Dios” (1.6)


ORANDO BÍBLICAMENTE Tres días después Jonás pudo elevar una verdadera oración de fe, en la que pudo reconocer que estar en el vientre del pez es una muestra de la misericordia de Dios, arrepintiéndose y comprometiéndose a OBEDECER


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