íc nos DE PUERTO RICO
> martes, 31 de diciembre de 2024
Pinta el escenario surrealista de los íconos boricuas
ó Williams Carmona se inspiró en el concepto para el desarrollo de la obra pictórica
Alexandra Acosta Vilanova >aacosta@elvocero.com
@Ale_AVilanova
Cuba es un recuerdo, Puerto Rico es una vivencia para el artista Williams Carmona, quien reside aquí por más de 30 años. Por eso, cuando visita cualquier otro país, asegura ser boricua, y entonces, se encuentra con la emoción del extranjero, intrigado por la cantidad de íconos que han marcado épocas en la cultura popular.
Que si Tito Trinidad, que si Gilbertito Santa Rosa, que si Dayanara Torres. “Soy de un país donde su cultura me llena de orgullo”, establece Carmona, quien ha reunido en una misma obra pictórica a 11 figuras destacadas en Puerto Rico dentro de la imagen de un pilón de madera en medio de un escenario surrealista.
La pieza sirve como portada a la edición especial Figuras Íconos de Puerto Rico, de EL VOCERO, que rinde tributo a las aportaciones de Adriana Díaz, Alexandra Fuentes, Antonio Martorell, Carmen Jovet, Dayanara Torres, Gilberto Santa Rosa, Jorge Rivera Nieves, Luisito Vigoreaux, Raymond Arrieta, Emmanuel “Sunshine” Logroño y Félix “Tito” Trinidad.
Carmona se unió a este medio para representar el trascendente talento que emerge de “un solo lugar y corresponde al mismo lugar”.
“Todos son figuras emblemáticas que
tienen una connotación, un nombre. Lo que hago es tratar de una manera surrealista encerrarlos a todos dentro de un escenario. Y como todos son artistas en cierto sentido de la escena, por eso es que los pongo a todos
en ese escenario. Creé esta explanada única, donde pasa en un lugar único. Siempre he concebido que la vida es un teatro que está muy bien montado por el ser humano. Todas estas figuras tienen inclusive caracteres muy diferentes, pero todas forman parte de lo que es el ejemplo social”, ilustró el artista. El pilón es donde se hace el verdadero mofongo y en algunos lugares del campo, donde se machaca maíz o harina, lo que refleja para Carmona una estampa costumbrista del archipiélago.
“Dayanara y Tito, son gente que marcaron una época, gente que paraliza un País entero. Cuando una figura de esta índole, como Tito Trinidad, paraliza un país entero para ver una pelea, eso es mucho decir. Tú formas parte de la memorabilia de un país. Puerto Rico es una cantera de talentos”, sostuvo.
Crear la pieza es también un momento especial de agradecimiento a maestros que han sido parte de su propio camino artístico, como Martorell.
“Fue una de las personas que me ayudó cuando llegué a Puerto Rico, que me enseñó el mundo de lo que se vivía en Puerto Rico, sobre todo en el arte. Y yo le tengo muchísimo aprecio a él y mucho agradecimiento”, resaltó.
Williams Carmona estudió en la Universidad de Bellas Artes en La Habana. Al igual que muchos de sus contemporáneos, abandonó Cuba en los años 1990 debido a la restricción de las libertades artísticas, sociales, culturales, económicas y de cosmovisión. Ha expuesto en galerías mundialmente reconocidas, y ha formado parte de exposiciones y colecciones de múltiples museos y coleccionistas en América y Europa.
EL VOCERO reconoce la conexión de 11 figuras con su pueblo
Jan Figueroa Roqué >EL
EL VOCERO reconoce a 11 íconos puertorriqueños destacados en la cultura popular, el deporte y las artes, que tienen conexión especial con el pueblo.
“Nuestro trabajo nos expone constantemente a historias de carga negativa y que no aportan a mejorar emocionalmente nuestra comunidad. Sin embargo, también somos testigos de lo que muchos puertorriqueños hacen solamente por ser como son: humildes, cariñosos, desprendidos, dispuestos a ayudar. En fin, seres huma-
nos excepcionales. Por eso tomamos la decisión de que a través de nuestras plataformas compartamos ejemplos de estas personas que sirven como bujías inspiradoras para la generación actual y las venideras”, destacó Salvador Hasbún, presidente de EL VOCERO
Adriana Díaz, Alexandra Fuentes, Antonio Martorell, Carmen Jovet, Dayanara Torres, Gilberto Santa Rosa, Jorge Rivera Nieves, Luisito Vigoreaux, Raymond Arrieta, Sunshine Logroño y Tito Trinidad completan la lista de las figuras a destacar. Hasbún resaltó que “reconocemos y homenajeamos
a 11 puertorriqueños que con su trayectoria profesio-
nal han despuntado, pero lo han hecho aún más como
persona, como ser humano. Cuando uno se encuentra en la calle, en un restaurante, en un evento, en cualquier sitio con uno de ellos, siente ese calor humano de inmediato y el carisma que los ha convertido en figuras íconos de Puerto Rico”.
Por su parte, Carlos Otero, director editorial de EL VOCERO , coincide en que estas “figuras están en el corazón de nuestros lectores, las sienten cercanas por su don de gente y de una manera u otra reflejan algunos de los valores que nos identifican como pueblo, como la empatía, la amabilidad, el esfuerzo y dedicación a las
aspiraciones, el respeto y el orgullo por la Isla”.
Para Mariam Echevarría Báez, nueva directora asociada de EL VOCERO , “son íconos porque han logrado trascender sus disciplinas naturales, volviéndose parte del imaginario popular. Son esos con los que hemos crecido, reído, celebrado, llorado, cantado, solidarizado. Con sus trayectorias no tan solo han ganado un público, de cierta manera, una familia extendida”. A través del proyecto los lectores podrán adentrarse de una forma distinta a estas personalidades y sus diversas trayectorias.
> maRTes, 31 de diciembRe de 2024
ADRIANA DÍAZ 4
“Todo
lo que represento es Puerto Rico”
ó La tres veces jugadora olímpica en el tenis de mesa y máxima medallista boricua en los Juegos Panamericanos destaca la conexión
con su país y los
suyos
Alexandra Acosta Vilanova >aacosta@elvocero.com
@Ale_AVilanova
P¿or qué irse de un lugar tan bonito como este? Es la estampa verdísima de las palmas que rompen el patrón de la montaña y el árbol de plátano caído sobre la grama húmeda del frío de la mañana. Es también el sonido o el mínimo que se escucha de coquíes y pajaritos. La ciudad queda descartada. Por eso, porque nació aquí, creció aquí y aquí se siente querida, Adriana Díaz siempre regresa a casa: Utuado.
“Siempre ha sido mi lugar favorito”, dice quien ha visto muchísimos paisajes, porque su carrera en el deporte le requiere viajar y viajar, competir, entrenar y compartir en escenarios distintos a la tropicalidad puertorriqueña.
Ella se asemeja a su pueblo: calmada, sutil e introvertida, pero cuando la conoces mejor, es bastante extrovertida, asegura. Quiere considerarse una persona alegre, que lucha por sus sueños, divertida, que le gusta reír y hacer
reír a los demás.
Puerto Rico reconoce su nombre. Es tres veces jugadora olímpica en el tenis de mesa y máxima medallista boricua en los Juegos Panamericanos.
A los 4 años ya jugaba con la raqueta, a los 15 debutó en los Juegos Olímpicos Río 2016 y dentro del mar de banderas asiáticas, la suya se colocó a los 22 en el top 10 del ‘ranking’ de las mejores tenimesistas del mundo. Ahora, en sus recientes 24, venció el miedo a crecer. Cree que será una etapa bonita, el momento de no arrepentirse, de hacer las cosas bien, de viajar el mundo, de luchar con el corazón, y “espero que me vaya muy bien”.
Su país primero
“Soy bastante perfeccionista, me gusta hacer las cosas a mi manera también. Me encantaría ser un poquito menos egoísta, pero siento que es algo que va con mi carrera un poco. Siempre me pongo primero”, señala. Pero cuando dice ponerse primero se refiere a que, además de priorizar su bienestar, incluye todas sus creencias: Puerto Rico, el deporte, los derechos y la representación de las muje-
res y su familia.
“Si hubiese nacido en otro país sería muy difícil tener esa conexión con ese pueblo que tanto me quiere a mí y que es mutuo. Creo que he tenido bastante suerte de nacer en un país en donde apoyan a los suyos, donde el deporte es número uno y yo siempre voy a estar agradecida con todo ese apoyo que la gente de Puerto Rico me ha dado, porque soy lo que soy gracias a eso. Todo lo que represento es Puerto Rico”, expresa mientras viste la chaqueta que llevó en las Olimpiadas de París en julio de este año.
Desea todas las metáforas bonitas para la Isla: que brille Puerto Rico, que su nombre se ponga en el mapa, que esté en alto el País.
“Hay mucho talento aquí. Hemos tenido actores, cantantes, atletas, actrices, y me encantaría que le demos énfasis a eso positivo porque hay muchos logros que hemos hecho y somos una Isla tan pequeña, así que me encantaría que se siga apoyando el deporte, a los niños, que son cosas que realmente hacen que el País se una”, enfatizó.
El soporte más importante
Al igual que es atesorado el apoyo que recibe de la gente, Adriana se desborda de aprecio y amor por su familia, quienes entienden su estilo de vida, porque han estado en primera fila como el soporte más importante.
“He tenido mucha suerte de tener-
He tenido bastante suerte de nacer en un país en donde apoyan a los suyos, donde el deporte es número uno y yo siempre voy a estar agradecida con todo ese apoyo que la gente de Puerto Rico me ha dado, porque soy lo que soy gracias a eso. Todo lo que represento es Puerto Rico.
Adriana Díaz Tenimesista
los a mi lado”, afirma la tenimesista. Tampoco se imagina una vida sin hermanas. Es lo mejor que le ha pasado. Melanie (28), Gabriela (26) y Fabiola (22) son sus mejores amigas y, aunque actualmente viven en distintas partes del mundo, persiste la cercanía.
“Somos cuatro, yo soy la tercera, y creo que de todas he aprendido algo. Mis dos hermanas mayores, siempre han sido bastante responsables y nos han enseñado a mí y a Fabiola, la pequeña, cómo lidiar con algunos problemas de la vida. Eso es algo que siempre estaré agradecida. Y mis padres, porque a pesar de todos los altibajos que uno tiene, ellos han demostrado que la familia es primero y que pase lo que pase, siempre vamos a estar para todos nosotros”, sostuvo.
Aunque el tenis de mesa demanda disciplina y compromiso, hay un momento en que Adriana suelta la raqueta.
Con la sonrisa anticipó que en “Navidad siempre es como que sagrado para la familia, especialmente en Puerto Rico. Creo que esos son los momentos que siempre estamos esperando. Durante el año siempre estamos viajando, compitiendo. Gabriela tiene trabajo, Fabiola estudia, así que yo creo que en Navidad es el momento donde todos podemos reunirnos como familia y olvidarnos un poquito de nuestras vidas individuales”.
> mArTes, 31 de diCiembre de 2024
ó La comunicadora asegura que su naturalidad le ha ganado un espacio en los medios por las pasadas dos décadas
Jan Figueroa Roqué >EL VOCERO
Alexandra Fuentes puede ir caminando por la calle, encontrarse con alguna admiradora y saludarla como si la conociera hace años.
A lo largo de 20 años, la comunicadora ha procurado mantenerse accesible para su audiencia, sencilla y con calidez humana. El vínculo que ha creado la presentadora de televisión, considera, se basa en simplemente en ser ella misma.
Su carrera comenzó en Zúmbate y continúo por varios programas como Sálvese Quien Pueda, Anda Pa’l Cará y Dando Candela, hasta llegar a tener a su propio ‘talk show’, que comenzó bajo el nombre Alexandra de Noche y años después evolucionó a Alexandra a las 12, por Telemundo.
ALEXANDRA FUENTES
“Siempre
he sentido el cariño de la gente”
“Tengo una responsabilidad bien grande cada vez que prende esa pantalla. A mí me gusta ser muy natural, que la gente sepa cómo yo soy. Y afortunadamente, así me han aceptado. Pero estar frente a una pantalla en donde tienes miles y miles de personas, pues es una gran responsabilidad. Así que cuido mucho mis palabras y ‘delivery’, cuido mucho y valoro esa conexión con mi público que definitivamente, toma tiempo uno ganársela, pero ya que uno la gana, tiene que seguir cultivándola para poder mantenerse haciendo lo que tanto se disfruta”, expresó Fuentes.
Cuando su esposo David Bernier aspiró a la gobernación, recuerda que el cariño del público se transformó, por lo que ahora considera que hay un antes y un después de la campaña política de 2016.
“Siempre he sentido el cariño de la gente, he recibido cosas muy bonitas, pero después de la campaña política como que todo fue diferente. Después de la campaña política, vino La casi casi primera dama, donde hice casi 60 funciones, después de la campaña política, a pesar de que ese momento fue tan duro, porque hay gente que se solidariza contigo, pero hay gente que no… Una vez que se acabó, se apagó esa discrepancia por los asuntos políticos, todo como que empezó a florecer. Creo
que se me dieron muchas oportunidades después de la campaña de conectar más con la gente y de tener ese contacto más directo”, admitió.
Una mamá “bien protectora”
Su familia, particularmente sus hijos, le aportan un brillo especial, ya que son “mi mayor preocupación, mi mayor amor y mi todo”.
“Soy una mamá que a lo mejor se preocupa demasiado y a veces me digo: ‘suelta un poquito de soga a ver cómo es la respuesta’. Pero mis hijos son mi vida. Si mis hijos están bien en la escuela, en lo social, en los asuntos de los deportes, en el caso de Miranda, pues todo lo demás cae”, resalta emocionada.
A 16 años de haber debutado en la maternidad, Fuentes está convencida de que su centro y su mayor logro en la vida es su familia. En 2007 se casó con Bernier, a quien le prometió acompañarlo en las buenas y las malas.
“Me describo como una esposa amorosa y una esposa líder. También me describo como una esposa comprensiva y una esposa que los momentos en que David más me necesite, voy a enrollarme las mangas y me voy a poner las botas, porque él lo sabe”, resalta.
Sus hijos Adrián, de 16, y Miranda, de 13 años, han ido cambiando sus intereses y disminuyendo su presencia
Tengo una responsabilidad bien grande cada vez que prende esa pantalla. A mí me gusta ser muy natural, que la gente sepa cómo yo soy. Y afortunadamente, así me han aceptado... Cuido mucho y valoro esa conexión con mi público que definitivamente, toma tiempo uno ganársela.
Alexandra Fuentes Presentadora
en redes sociales. Ambos “saben que ir con la tía a Plaza Las Américas es más ‘relax’ que ir con papá y mamá”.
“No creo que resientan nada. Son felices de los papás que tienen, del amor que le hemos dado y la pasan muy bien con nosotros”, dijo entre risas la también actriz, quien ha hecho radio, teatro y cine.
“Me falta mucho por hacer” La productora agradece también su formación familiar.
“Vengo de Cidra. Tengo una mamá ama de casa, un papá mecánico, un papá que lo que hacía era, además de darnos mucho cariño, pues trabajaba mucho. No podía sacar de su tiempo de trabajo para llevarme a los ‘castings’, hacer otras cosas que me permitieran estas oportunidades”, recordó.
Cuando comenzó a tener más independencia y mientras estudiaba Relaciones Laborales, asistía a audiciones en busca de una oportunidad.
Dos décadas más tarde, persiste como una de las presentadoras más reconocidas de Puerto Rico.
“Quiero seguir aprendiendo y eso, eso es parte de lo que diariamente esta profesión te da… Estoy dispuesta a seguir siendo una esponja. Durante mi paso por la televisión, por la vida como mamá, como esposa, como amiga y como puertorriqueña”, subrayó.
EL MEJOR
DE LA HISTORIA
NUESTRO ÍCONO
NACE Y SE HACE A LA PARRILLA
En BK® celebramos a nuestro ícono con mucho orgullo (y apetito). Sí, todos sabemos que es el mejor Whopper® de la historia y, seamos sinceros, no necesitaría explicación… ¡pero la daremos por puro placer! Por su trayectoria legendaria, su toque inconfundible y ese saborcito a la parrilla que lo hace irresistible, hoy, junto a otros grandes íconos de Puerto Rico que nos pre eren, celebramos la leyenda que enciende nuestras parrillas: el Whopper®.
> martEs, 31 dE diciEmbrE dE 2024
ANTONIO MARTORELL A la altura de su sombrero
ó Es pintor, serigrafista, actor, escritor, dibujante, ilustrador, diseñador de escenografía, pero, sobre todo, maestro de la creación
Alexandra Acosta Vilanova >aacosta@elvocero.com
@Ale_AVilanova
Los pelos blancos de la barba de Antonio Martorell parecen pequeñas sonrisas, de las mismas que provoca en quien lo escucha hablar. De silencio, seriedad y vergüenza no tiene ni un pelo. Esos se le cayeron a temprana edad, en plena pubertad. Algún desorden hormonal habrá actuado a los 14, cuando se empezó a quedar calvo.
Su madre lo llevó a un dermatólogo que le arrancó tres o cuatro pelos, los puso bajo el microscopio, los estudió y recomendó el regreso a las tres semanas. De vuelta con el especialista, arrancaron cuatro pelos más y hasta ahí duraron las visitas.
“Me negué a regresar y ya se me siguieron cayendo los pelos, pero nadie me los arrancó. Cuando estaba en la
universidad, recuerdo que en mi graduación se creían que yo era un profesor colado en el programa porque no solo estaba calvo, sino que tenía barba”, narró Martorell.
Para entonces, era demasiado vanidoso para llevar peluca o algo que no fuera suyo. Ahí, a los 16, llegó su primer sombrero. Dice que son chéveres porque no solo cubren, sino que visten, saludan, protegen del sol y la lluvia.
“Ese es también otro de los secretos de mi eterna juventud, que la gente me dice ‘pues está igualito’. Igualito, porque yo comencé viejo, calvo y con la barba entrecaná. No he cambiado tanto, el peso más o menos es el mismo y me muevo y grito y fastidio igual que antes... Es que yo como envejecí pronto, y en el ojo público, y la gente ha visto a través de décadas mi imagen, pues el cambio ha sido relativamente sutil y poco, mientras que, en la demás gente, se evidencia más el cambio. Pero entonces todo el mundo
me regala sombreros y yo los compro también. Tengo cientos de sombreros y de todas las temporadas”, contó.
Hombre de gente
La apariencia del artista podría ser una razón de su gran reconocimiento en la escena cultural puertorriqueña. Pero es su sabiduría, su sensible palabra y atento trazo, lo que sobresalen en el ícono, que pronto cumplirá 86 años de una vida sostenida en la fe hacia el prójimo.
Entiende que la notoriedad de su figura se la debe en parte a los medios.
“Desde muy temprano tuve por un lado la suerte de que mi trabajo atraía a los medios y en una ocasión alguien preguntó que por qué me cubrían a mí y no a los otros. Y el periodista en cuestión dijo, ‘bueno, porque él hace las noticias y nosotros somos profesionales de la noticia’”, recordó.
“Estoy comprometido con las luchas de nuestro pueblo desde que tengo conciencia de ello. En algún momento el maestro José Antonio Torres Martínez, gran artista y amigo, me dijo: ‘Toño, como están las cosas, hay que prepararse siempre para lo peor. Puede haber un momento en que las
Los maestros nunca mueren, viven en uno. Uno se debe a lo aprendido y el deber de uno también es pasar adelante lo aprendido como uno lo recibió. Es un regalo consecuente que sigue un viaje eterno, infinito.
Antonio Martorell Artista
fuerzas represivas actúen y que tú sufras esa represión. Más vale que la gente sepa quién tú eres para que cuando desaparezcas, te echen de menos’”, cuenta con la jocosidad que le persiste en cada conversación.
Otras razones emergen, como su don de gente, que quizá brota de su crianza parlanchina y charlatana. Piensa además en el taller de puertas y ventanas de su abuelo carpintero, donde se enamoró de la madera.
Aclaró “no aprendí ni a serruchar ni a clavar, mi pobre abuelo frustrado de eso, porque yo llegaba allí y me zambullía en las montañas de aserrín y viruta, mascaba madera, conozco el olor y el sabor de todas las maderas que se puede imaginar. Y entonces el taller de costura de mi madre, que era costurera, además de comerciante, porque mi tía tenía una tienda de misceláneas. Allí, sin yo saberlo, me inicié en el arte de la instalación, porque uno de mis primeros trabajos fue ayudar a mi madre en las vitrinas que daban a la calle en la avenida Ponce de León, en Santurce, a ubicar los objetos lo más atractivos posible para que el cliente que pasaba por la calle se detuviera y entrara a comprar”.
Maestro eterno
Martorell es muchas cosas: pintor, serigrafista, actor, escritor, dibujante, ilustrador, diseñador de escenografía y, sobre todo, maestro de la creación. La palabra maestro, que una diversidad de gente le atribuye, tiene varios orígenes en su vida. Uno de ellos, su aprendizaje con Lorenzo Homar y Rafael Tufiño en el Taller de Gráfica del Instituto de Cultura Puertorriqueña a principios de la década del 1960; y su estancia, de casi una década, en México, donde ofreció clases en la Escuela Nacional de Bellas Artes La Esmeralda. Igual explicó que “en México, la palabra ‘maestro’ es muy socorrida, como un modo de dirigirse al otro como hermano o che. Entonces entre nosotros, nos llamamos ‘maestros’ unos a los otros. Siempre. No importa que su rol principal sea de aprendiz y el otro de maestro, porque además, esto va al meollo del asunto: uno aprende tanto de sus aprendices como sus aprendices del maestro. Es un diálogo constante en el trabajo lo que enriquece la producción artística”. “Los maestros nunca mueren, viven en uno. Uno se debe a lo aprendido y el deber de uno también es pasar adelante lo aprendido como uno lo recibió. Es un regalo consecuente que sigue un viaje eterno, infinito”, sostuvo. Martorell seguirá trabajando junto a sus amigos desde su querido Taller de La Playa en Ponce. No hay día que le falte el propósito placentero de crear desde el amor.
> martes, 31 de diciembre de 2024
¿QUÉ ES UN ÍCONO ?
Originaria del griego, la palabra ícono aludía en principio a las representaciones pictóricas en las iglesias, y según lo define el diccionario de la Real Academia Española habla del “signo que mantiene una relación de semejanza con el objeto (religioso) representado”.
Sin embargo, en la actualidad,
cuando se utiliza la palabra ícono la RAE también señala que “se está extendiendo su empleo con el sentido de ‘persona que se ha convertido en símbolo o representante de algo’. En ello se cuentan personas que forman parte de la cultura de masas, la cultura pop y reciben el reconocimiento de todos.
Estas figuras íconos las encontra-
mos en las diferentes disciplinas de la sociedad, como las artes, la música, el deporte, la moda y otras, ya que no solamente se refiere al entretenimiento. También son íconos las personas reconocidas por sus luchas sociales, o que se destacan en diversas áreas como el ambiente, la economía y en diversos sectores y gestiones.
> martEs, 31 dE diciEmbrE dE 2024
CARMEN JOVET
“Me apasiona la búsqueda de la verdad”
ó La Mujer Noticia posee más de medio siglo de labor ininterrumpida en los medios de comunicación
Alexandra Acosta Vilanova >aacosta@elvocero.com
@Ale_AVilanova
Su primer recuerdo es la casa de su titi Fela. Ahí siempre había comida en abundancia, no porque bastara el dinero, sino porque según afirma, Fela hacía como el milagro de los panes y los peces de Jesucristo, multiplicaba los alimentos para que nadie se quedara sin comer. Carmen Jovet rememora también la casita familiar de madera a la orilla del río Yagüez, una barriada que ya no existe en Mayagüez, pero persiste en su memoria, y en el poema que escribió en segundo grado, el mismo que la convirtió en la nena de la escuela que escribe y declama.
“Yo creía que era una mansión. Para mí era un palacio”, dice Jovet sobre el sentimiento que provocaban sus pri-
meras rimas. En ese tiempo, ya conocía de cuentos y princesas. No existían Disney y sus historias, estaba su papá, que era un narrador.
“Mi papá era la oveja negra de su familia. Todo el mundo había ido a la universidad y él se fue de bohemio a compartir con los líderes políticos de aquella época, Muñoz Marín, Ramos Antonini y otros. Y lo que hacían era beber, dialogar de temas y escuchar música. Y como mi papá era músico, él vivía así, a su manera, en la tertulia, amaneciéndose todas las noches. Una vida intensa, grandes experiencias. Y cuando no estaba tocando, estaba componiendo. Pero la estabilidad económica de mi casa la proveía mi mamá. Mi papá era fabuloso, pero era un bohemio, jangueaba nada más y nada menos que con Daniel Santos, que era terriblito. Pendencieros, románticos, enamorados, músicos, combinación bien peligrosa, pero era
muy buen padre”, describió. Jovet no cree en culpar o reprocharles a los padres nada. Entiende que vivieron sus circunstancias, cometieron sus errores, y cada cual tendrá en sus manos su propio destino. Pero eso sí, de su progenitora aprendió mucho, sobre todo a trabajar.
“Mi mamá era enfermera y trabajaba en un hospital y a veces hacía tres turnos. Comparado con lo que yo hago, hago nada. Mi mamá podía hacer un 7:00 a.m. a 3:00 p.m., un 3:00 p.m. a 11:00 p.m., y si no había llegado la enfermera de las 11:00 p.m., triplicaba ese turno de ser de 11:00 p.m. a 7:00 a.m. Después llegar a casa a recogernos para llevarnos a la escuela y a preparar algo de almorzar para nosotras, cuando regresábamos de la escuela, a recostarse un par de horas para luego volver a trabajar”, narró.
Labor incansable Hoy, Jovet ocupa cinco trabajos sostenidos por una extensa preparación en los medios de comunicación. Es La Mujer Noticia porque dedica mínimo tres horas diarias al estudio. Necesita estar lista para hacer las preguntas precisas y ripostar respuestas.
El que me conoce me va a apreciar, al que le cuentan como soy, posiblemente no le cuenten la historia completa. Yo lo que le pido es que me escuchen, no que estén de acuerdo conmigo, que me escuchen y que me analicen por lo que he hecho con mi vida en estos 54 años de vida profesional continua.
Carmen Jovet Periodista
Conoce de antemano las respuestas de sus entrevistados. Es más de medio siglo de periodismo e investigación, que en la actualidad dedica a los espacios como Directo y sin Filtro por ABC Puerto Rico y En Caliente de NotiUno. “A mí me apasiona la búsqueda de la verdad. Saber qué cosas de las que se escriben, de las que se publican en las redes, de las que hablan, son ciertas y son falsas para poder adjudicar con sobriedad y justicia. Porque con los sedimentos de la verdad no nos lleva a la justicia. Ahora mismo tengo un problema. Incursiono en las redes sociales con muchísimo éxito. Mi hermana siempre me decía cuidado, las redes se enredan y ese es un pensamiento tan poderoso. Eso se me quedó grabado y lo tengo entre ceja y ceja”, destaca, porque ya ha sido víctima de la inteligencia artificial y la producción de noticias falsas. Aunque, “con todo lo que me preocupan las redes sociales, la gente me anima. El que me conoce me va a apreciar, al que le cuentan como soy, posiblemente no le cuenten la historia completa. Yo lo que le pido es que me escuchen, no que estén de acuerdo conmigo, que me escuchen y que me analicen por lo que he hecho con mi vida en estos 54 años de vida profesional continua. En una entrevista reciente con EL VOCERO me dejó saber algo que yo creía pero que no había comprobado: que hay mucha gente que me quiere, que hay mucha gente joven, 17, 18, 20 años que quiere saber de mí”.
Una noticia pendiente
La Mujer Noticia ha sido parte de la investigación en casos como la masacre en el Cerro Maravilla y las denuncias de abuso sexual en la agrupación Menudo, así como ha cuestionado a sospechosos del crimen, gobernantes, artistas y colegas. Al menos queda una noticia que desearía informar y todavía no ha surgido: “Que Puerto Rico resolvió su sempiterno dilema con el estatus, que por fin salió de ser una colonia de los Estados Unidos, la más antigua. Afortunadamente he visto cosas buenas. Antes, solo los independentistas hablaban de la colonia. Ahora, el PNP (Partido Nuevo Progresista) describe a Puerto Rico como una colonia. Los líderes asociacionistas describen a Puerto Rico como una colonia, y el Partido Popular, aunque no tiene una definición o no ha dado a conocer una definición del Estado Libre Asociado, sí dijo por escrito en su Junta de Gobierno, que querían una definición fuera de la cláusula territorial y colonial. Hemos avanzado. No puedo dar la noticia de que dejamos de ser la colonia más antigua del mundo, pero estamos en camino”.
2025
Gracias por dejarn ser parte de tus ment especiales.
Seguirem sirviendo alegría ee nuevo año.
Felicidades! !
DAYANARA TORRES y su vida “inimaginable”
Alexandra Acosta Vilanova >aacosta@elvocero.com
@Ale_AVilanova
Dayanara Torres no le tiene miedo a la edad. Cumplió recientemente 50 años, y aunque se siente igual, porque es un número más, recuerda cuando calculaba de pequeña la edad que tendría en 2025 y lo lejos que imaginaba su actual realidad.
Tampoco se veía en el lugar en que está ahora como actriz, presentadora, filántropa y ex reina de belleza. Tenía metas y sueños, pero lo suyo pasó de la noche a la mañana.
“Alguien me ve en la calle, me pregunta de Toa Alta, y ahí empezó y fue como una bola que sigue rodando, rodando, rodando sin parar. Gracias a Dios que me dejé ir, que acepté, que vine a aprender, todas estas personas me ayudaron, de una cosa fui a la otra, de Miss Puerto Rico a Miss Universo, de Miss Universo seguí adelante. Este sueño y esta vida que estoy viviendo a lo mejor no me la podía imaginar, porque es demasiado para una nena del campo que jugaba con las vacas al frente y cortando camomila. Pero sí yo quería cosas así, inimaginables”, dijo.
De aquella nena del campo todavía queda bastante en la Dayanara que reside en Miami y es figura pública desde
que ganó Miss Universe en 1993, a los 18 años. Cada vez que puede visita el campo en el que viven amigos de Los Ángeles. Le gustan los caballos, levantarse por la mañana y recoger los huevitos que las gallinas acaban de poner, porque aparte de que la remontan a su niñez, siente que conecta con su padre, José Torres.
Cuando intenta abundar sobre el progenitor, que falleció en 2017, se le aguan los ojos y se le quiebra la voz. “Es que lo extraño mucho”, explica.
Conectada a su niña interior
Siempre que regresa a Puerto Rico visita el restaurante Cayo Caribe. Hace su usual pedido del menú y mira a la mesa donde su padre se sentaba. Allí se ha encontrado con un señor en la barra “que era el mismo él”.
“Mi papá era la persona más alegre, nunca lo vi triste y mira que las pasaba negras a veces en cuestiones de que no teníamos dinero, los recursos, no teníamos lujos, pero mi papá siempre fue una persona feliz”, narró.
Entonces, se aseguró de como madre, ser el padre que su progenitor fue con sus hijos. Ha tratado de sacar todos los días, con cualquier ocurrencia, una sonrisa en sus hijos Cristian y Ryan, que juntos son “un equipo de tres”.
“Creo que lo logré porque esos nenes son los más felices, y educados, bien portados. Me aman, me aman
una cosa. Mis hijos me cuidan, yo no abro puerta, yo no cargo paquetes y en ningún momento yo les digo ‘haz esto, ábreme esto, cárgame esto’. Esos nenes son una bendición”, sostuvo la actriz.
También exalta el vínculo que atesora con su hermana Jinny, su defensora ante el ‘bullying’ en la escuela.
“Si yo hoy me levanto con un dolor de estómago, no me siento bien, he llorado, ella me llama y pregunta: ¿Estás bien? Igual, si yo la llamo, ella: ‘¿Pero, cómo tú sabías?’ Y aunque le llevo cuatro años, ni somos gemelas, siento que somos almas gemelas”, describió.
Dayanara lleva más de tres décadas de trayectoria y ha figurado como uno de los íconos más queridos en la Isla.
Enfrentarse al escrutinio público “quizá pueda ser algo difícil, pero creo que como he mantenido mi personalidad, desde siempre soy así y la gente me ha conocido de esa manera, no se me ha hecho difícil. Al contrario, me enorgullece saber que, aunque fue en el 93 (el Miss Universe), es lindo saber que los represento y que estoy haciendo un buen papel. Así como algo a mí me llenó de inspiración, yo puedo ser esa persona para alguien”.
Se renueva en Puerto Rico
Su misión de enaltecer nuestra cultura, así como mensajes hermosos y de aprendizaje, se extiende a los pro-
ó Miss Universe 1993 continúa representando a Puerto Rico en diversos escenarios
Este sueño y esta vida que estoy viviendo a lo mejor no me la podía imaginar, porque es demasiado para una nena del campo que jugaba con las vacas al frente y cortando camomila.
Dayanara Torres Presentadora
yectos que acepta en el cine y la televisión. Por eso se ha destacado en la animación del Dick Clark’s New Year’s Rockin’ Eve con transmisiones desde San Juan durante despedida de año, que realiza hoy por tercera ocasión desde el Distrito T-Mobile para ABC.
“Me fascina porque no hay público como el público puertorriqueño. A veces en el ‘show’, yo tengo que tener el micrófono del oído en lo más alto posible, aunque cuando me hablen me duela, porque es que cuando la gente empieza a aplaudir, a emocionarse y a gritar. ¿Sabes a qué lo puedo comparar? A cuando gané en Miss Universe. Esa emoción, esa vibra que se te paran los pelos, que uno está como iluminada, así me siento”, expresó quien se aproxima a la cuarta temporada del podcast Laboratorio de la Felicidad.
Entre sus metas para el nuevo año está viajar mucho más a Puerto Rico.
“Cada vez que llego me voy con más energía, o sea, como que recargo, como vengo, recargo y me encanta estar aquí. La gente es tan linda. No existe persona que no me dé un abrazo. No es solamente el cariño, son bendiciones, yo he pasado muchas situaciones de salud y muchas cosas que no he dicho y sentir que una persona, gente mayor, gente joven mandando bendiciones, que todo salga bien, bendiciones a mis hijos, esos son regalos para mí. Siempre me voy renovada”, afirmó.
Un año que viene y otro que se va.
Nuestra gran familia les desea un feliz
> Martes, 31 de dicieMbre de 2024
GILBERTO SANTA ROSA “No soy perfecto... pero trato de serlo”
ó El Caballero de la Salsa rememora
la influencia de su progenitora a nivel artístico y personal
Alexandra Acosta Vilanova >aacosta@elvocero.com
@Ale_AVilanova
En la calle Loíza hay una casa que no encaja con el resto de la urbanización de Ocean Park. Es una pagoda, un estilo arquitectónico asiático en forma de cúpula y extremos puntiagudos, que tras su construcción, llamó la atención de locales y extranjeros, en una zona que tenía trayectoria turística. Ahí se paseaban las personas por la curiosa e inusual estructura en el Caribe o para toparse al celebrado cantautor y dueño de la casa, Tito Rodríguez.
Gente como doña Ana, una fanática pasiva de Rodríguez, era de las primeras en pasar todos los domingos frente a la pagoda. Cuando falleció el músico en 1973, su hijo de 11 años le prometió: “Yo me voy a hacer cantante y te voy a comprar esa casa”.
El niño que ya cantaba, grabó profesionalmente en la adolescencia, llegó a lo que dice ser su escuela y ejército, la orquesta de Willie Rosario, le creció el bigote, se lanzó como solista y fue bautizado como El Caballero de la Salsa. Entonces, un día, regresó “de la manera más casual” a la pagoda. “Yo mantengo una conexión de música y artículos relacionados al señor Rodríguez. Después de sus hijos, creo que soy uno de los que debe tener la colección más completa. Y me dio curiosidad y dije, ‘caramba, yo nunca he entrado a esa casa. Me gustaría entrar’. Toqué la puerta y el señor José Aponte muy amablemente me miró y me dijo ‘¿qué haces por ahí?’ Le hice el cuento, me invitó a pasar, me dio un pequeño ‘tour’ y le dije: si algún día usted quiere vender esta casa, por favor llámame. Ese mismo día me dijo ‘bueno, ¿tú me quieres comprar la casa? Dame una oferta. El asunto fue que nos tardamos muchos años en hacer el negocio y por fin lo hicimos”, contó Gilberto Santa Rosa.
El Caballero
Han pasado décadas desde que la pagoda es la oficina del intérprete.
Pienso que el respeto y la educación son algo que no se pueden perder. Mi mamá decía que la educación no tenía que ver con ningún oficio, ni ninguna posición, ni ninguna clase social.
Gilberto Santa Rosa Artista
Cumplir la hazaña se sintió espectacular. La primera en entrar por la puerta de la casa fue su madre, una mujer que recuerda sencilla, clara de sus valores y creencias. Tenía la virtud de decir las cosas tal cual, y sin ofender a nadie. A ella le debe en parte, comportarse como caballero.
“Pienso que el respeto y la educación son algo que no se puede perder. Mi mamá decía que la educación no tenía que ver con ningún oficio, ni ninguna posición, ni ninguna clase social. La educación es una cosa que el ser humano tiene que cultivar y ella me inculcó eso. Yo pienso que por ahí viene la cosa. Tú sabes, yo trato de ser un caballero dentro y fuera de eso. No soy perfecto ni me las doy de eso, pero trato de serlo”, sostuvo.
En la parte artística, fue el locutor Robertito Sánchez quien comenzó a presentarlo como El Caballero de la Salsa. Era una época en la que, según
narra, sus compañeros acostumbraron a cantar letras “eróticas” que hoy día serían “un paseo”. Él se mantuvo en una línea más romántica, que le parecía a Sánchez muy caballeroso. El nombre se fue regando “y así se quedó”.
“En realidad, y lo digo con la mayor humildad, era una extensión de mi personalidad, porque a todo el mundo lo trato con respeto. Siempre fue muy respetuosa mi manera de presentarme en el escenario, todas esas cosas. Entonces yo creo que eso fue lo que él captó y se sintió muy bien, se siente muy bien todavía cuando me llaman así, porque me da curiosidad que la gente en la calle me dice ‘el caballero’. A mí me gusta eso”, contó.
Todo tipo de historias
Su personalidad igualmente ha cosechado frutos en el respeto y la
credibilidad que le otorga el público consistentemente a lo largo de casi 50 años de carrera en la salsa, el bolero y la balada.
Tiene historias conmovedoras junto a sus seguidores, y otras “locas” también como el niño de New Jersey al que sus padres nombraron Gilbertosantarosa.
“Recibí una carta una vez. Una no, varias. Inclusive recibí después el documento de una pareja que decidió ponerle a su hijo Gilbertosantarosa Rodríguez Pérez. Me escribieron primero para pedirme permiso. Yo le dije señores, yo me siento muy honrado, pero me parece... digo ya el muchachito se debe haber cambiado el nombre hace rato. Después me escribieron, porque ellos tenían miedo que yo fuera a tomar alguna acción legal. Yo creo que quien los iba a demandar era el niño”, bromeó el multiganador del Grammy.
¡
Sigue creciendo !
> martes, 31 de diciembre de 2024
JORGE RIVERA NIEVES y su intensa responsabilidad periodística
ó El comunicador
quería ser abogado y estudió psicología
JAlexandra Acosta Vilanova >aacosta@elvocero.com
@Ale_AVilanova
orge Rivera Nieves llega pitando al estudio de Telenoticias, como avisando que viene por ahí, como preguntando quién anda ahí, porque aprendió bien que curiosear es naturaleza del periodista. Viste gabán negro y corbata roja que combina con su compañera ancla, Ivonne Solla. Si no fuera por el vestuario que le requiere su trabajo en pantalla, estaría en pantalones cortos y chancletas. En dos horas transmite el noticiario y hojea las invitaciones más recientes que recibe desde su correo electrónico. Visitas a escuelas, universidades, eventos de reconocimiento y dedicatorias. Quiere asistir a todas, pero físicamente no da. Está a dos pasos de cumplir medio siglo en Telemundo Puerto Rico. Casi lo reclutan de Wapa en 2003 con una oferta “irresistible”, pero ganó la contraoferta y la instrucción que “de aquí usted no
El
se va”. Rivera Nieves quería ser abogado, estudió psicología, terminó en radio, aprendió a leer al revés, desarrolló una voz y décadas han pasado desde que se siente como pez en el agua.
Como presentador oficial de noticias fluye al aire, bromea en las pausas con los técnicos, pero siempre consciente y atento de lo que comunica.
“Es una responsabilidad inquebrantable que estés actualizado sobre lo que afecta al país, lo que afecta nuestra comunidad, lo que afecta el mundo. Por eso le digo a los estudiantes que un periodista para mí es un aprendiz de todo, maestro de nada. Debemos dominar el ABC, el 123, lo básico de cada tópico: ciencias, matemáticas, deporte, música, arte, política, economía. El acervo cultural de una nación, de un país, de un pueblo. Entonces, estamos listos para lo que venga. Si surge que la situación es bien complicada y difícil, que no panda el cúnico, como decía el Chapulín”, aconseja.
Aplomo, sensibilidad y empatía
En su trabajo ha reportado noticias de interés humano hasta situaciones más incómodas, como cuando quedó “en una pieza” porque conocía a la sospechosa de un asesinato o cuan-
do comunicó en directo la muerte de un amigo, así como la entrevista que trancó sus palabras, porque se proyectó en el padre que reclamaba a su bebé secuestrada.
“Usted tiene que mantener un aplomo, sensibilidad, mucha sensibilidad, empatía. Aunque si bien estamos enfocados en lo que estamos haciendo en el trabajo de informar, también somos personas de carne y hueso”, precisa el periodista.
Antes y después del perreo intenso
Justamente, teniendo presente que es de carne y hueso, no pretende ser lo que no es frente a una cámara. Le sobresale la elocuencia, la articulación, el humor y las ocurrencias, igual a la frase que marcó un antes y después en su cercanía con las audiencias: “El perreo intenso acaba de comenzar”, que daba paso al perreo combativo que se convocó a modo de protesta a favor de la renuncia a la gobernación de Ricardo Rosselló en el verano del 19.
La frase despidió el noticiario esa noche, pero se convirtió en un símbolo para la cultura popular a lo largo de un extenso repertorio de canciones, columnas, memes, camisetas, ‘posters’, entre otras manifestaciones que trascendieron la Isla. Hasta el colom-
me paso bromeando, tengo un carácter jovial, creo que lo heredé del viejo y siempre le busco el lado positivo a todo, pero dentro de lo enajenado que en algún momento pudiese parecer Jorge, es una persona con profundas convicciones, principios sólidos, siempre pensando en hacer el bien. Jorge Rivera Nieves Periodista
biano J Balvin invitó a Rivera Nieves a que abriera su concierto en el Coliseo de Puerto Rico, donde la ovación, los ‘flashes’ y las bullas brotaron el llanto del presentador de noticias.
Pensar en todo eso le quiebra la garganta.
“¿Qué es esto? ¿En qué se traduce toda esa experiencia? Lo veo sencillo. El peso de responsabilidad es mayor, porque de algún modo, Jorge ha tocado a muchas personas, aparentemente para bien. Entonces, Jorge no puede defraudar a esas muchas personas de todas las edades. El respeto se multiplica, comenzando con el respeto a mi persona, a mis hijas, a mi familia, a mis amistades, a nuestra gente, al país, a Puerto Rico. Pudiera ser fácil, en cierto modo. Yo me paso bromeando, tengo un carácter jovial, creo que lo heredé del viejo y siempre le busco el lado positivo a todo, pero dentro de lo enajenado que en algún momento pudiese parecer Jorge, es una persona con profundas convicciones, principios sólidos, siempre pensando en hacer el bien”, sostuvo. Así, el setentañero entusiasta de la historia y recomendador de libros seguirá intensificando su voz, porque envejecer es inevitable, pero crecer es opcional.
> martes, 31 de diciembre de 2024
LUISITO VIGOREAUX y su imaginación infinita
El productor cumplirá cuatro décadas de trayectoria en febrero
ó El creativo, seguidor de El Quijote, tampoco ve imposibles
Alexandra Acosta Vilanova
>aacosta@elvocero.com
@Ale_AVilanova
Luisito Vigoreaux no cursó el séptimo grado. Siempre inquieto y astuto, lo saltaron a octavo. Para el tiempo ya empezaba a leer a Miguel de Cervantes con Don Quijote de La Mancha, quien desde entonces ha sido su personaje favorito y que figura en decenas de piezas y cuadros en su hogar. Don Quijote en pintura, Don Quijote en alambre, Don Quijote en cerámica, Don Quijote en madera y Don
Quijote frente al molino recuerdan el ingenio del hombre con imaginación infinita, que, así como Luisito, prestó atención y se aventuró en su locura.
“El tipo estaba en su mundo. Él se dio su zona, su locura, y siguió consiguiendo cosas que ni él se dio cuenta que consiguió. Y bueno, es por tradición uno de los personajes de todos los siglos”, dice Luisito del Quijote, en lo que pareciera una autodefinición, pues ha cultivado, sin darse cuenta, un legado inmenso que le convierten “por tradición” en pilar para el entretenimiento y la cultura boricua.
Pero igual ha sido parte de la memoria colectiva por accidente. Asegura que no lo buscó, sino que estuvo en el lugar preciso en el momento preciso. De ahí le robó la atención televisiva al famoso Chavo del Ocho con Parejo, doble y triple junto a su hermano Roberto; ganó ‘ratings’ con programas como El show de Vigoreaux y produjo otros aclamados
como Entrando por la cocina, Sunshine’s Café y Eso vale. Su trabajo ha representado, además, un taller para la clase artística y que más allá de entretenimiento, regaló al espectador el sentido de pertenencia y reflexión que promueve el arte.
Un Quijote de su tiempo Luisito es un Quijote hasta cierto punto, considera. “Hemos tenido la oportunidad de abrirle las puertas a la gente. Hemos creado personajes para la historia, tanto en teatro como en la televisión. Quizás unos conceptos que existían los adaptamos a la época, ahora en lo cibernético, en la música, cuando surgió el movimiento urbano, que nadie los quería en la televisión, el primero que los llevó a la televisión fuimos nosotros”, sostuvo quien en plural incluye al talento que se ha sumado a su visión. El próximo 5 de febrero cumplirá 40 años como productor, oficio al que casi cierra la puerta. Estudió Ad -
Hemos tenido la oportunidad de abrirle las puertas a la gente. Hemos creado personajes para la historia, tanto en teatro como en la televisión.
Luisito Vigoreaux Presentador
ministración Internacional, trabajó en la banca y la publicidad. Entonces tocó la puerta Elín Ortiz con una propuesta televisiva, que inicialmente rechazó, pero persistió el vacío que había dejado su padre, el presentador Luis Vigoreaux tras su muerte en 1983.
Figura familiar por generaciones
Luisito se ha ganado el reconocimiento de los puertorriqueños, así como el cariño que se desborda en recuerdos. “Me encuentro gente que me dice ‘mira el primer televisor que hubo en casa lo ganamos en el programa de tu papá’ o consecuentemente los míos. ‘Yo me gané un viaje’, ‘Nosotros nos casamos en tu programa hace 25 años’”.
Al productor le entusiasma cada proyecto que emprende. “Yo no trabajo. Me lo disfruto todo. No veo imposibles”, recalca.
Aun así, tiene presente que “una vez un cliente me dijo: nadie es más importante que tú. Tú te tienes que poner los pantalones una pierna a la vez. Y eso se te queda. Tú sabes que a veces uno dice ‘ah, me va súper bien’, pero tú eres igual que los demás. Que te destacaste en una cosa que es más pública, menos pública, pero hay gente que hace labor mucho más impactante que las carreras de nosotros, que salvan vidas, ese tipo de cosas y tienen tanta importancia en la idiosincrasia de Puerto Rico que el entretenimiento”.
Luisito también ha dejado sigilosamente semillitas en causas filantrópicas y se convirtió para muchos niños en “el que siempre ayuda”.
Tras el encierro por el covid-19, alegró a unos cuantos con su fenómeno Vigorizante, que adentró su figura en las redes sociales y a las nuevas formas de entretenimiento y que le permite a las masas presentar sus inquietudes.
“Por eso se descubre tanto talento que antes no tenían la oportunidad. Puerto Rico, ¿qué éramos? 3 millones de habitantes. Tú pegabas un disco aquí, vendías 100 mil copias. Ahora los muchachos de nosotros venden 1 billón de copias. Estaba leyendo que Ricky Martin lleva ya 500 millones de personas que han visto su concierto con la Orquesta Sinfónica. ¿500 millones? ¿Cuántas generaciones de 3 millones tiene que haber en Puerto Rico? Eso es una eternidad. Y eso pues asusta. Pero es otro mundo. Para ser creativo es mucho más exigente porque ves más alternativas. Pero siempre uno se cuela. Siempre uno se cuela”, afirmó.
> martes, 31 de diciembre de 2024
RAYMOND ARRIETA trasciende la pantalla
ó Está próximo a cumplir 40 años como animador y comediante
Alexandra Acosta Vilanova
>aacosta@elvocero.com
@Ale_AVilanova
Y si la gente no me acepta?
¿Y si la gente no me acepta?”
Así rebotaban los pensamientos de Raymond Arrieta quien se acababa de graduar de Comunicación y había encontrado trabajo como locutor en Salsoul 98. Era 1988 y estaba ganando público en la calle con el ‘stand-up’. Se
le acabaron los chistes y ahora hace reír con sus propias anécdotas. Sabe que no puede inventar ser otra persona y “si a la gente, le gusta como soy, me salvé. Pegué”.
La apuesta resultó bien, porque son casi 40 años como animador y comediante en la televisión, aunque al final, Arrieta aún no se siente artista. Le gusta entretener y que la gente la pase bien, pero es más tímido de lo que su figura pública proyecta.
“Si llego donde hay mucha gente que no conozco, me pongo hasta nervioso. Pero quizás es también porque tengo miedo que alguien diga ‘mira, yo lo vi y ni siquiera me saludó’, ‘no me dio una sonrisa’ y estoy todo el tiempo como que pendiente a todo el mundo y que todo el mundo esté feliz”, reconoce, pues sabe la ilusión que representa conectar con quienes han seguido su paso por diversos programas
de la televisión local y han reído con Plinia, Trompetilla, El Primo y otros. “Inclusive ir al ‘mall’, ir a Plaza Las Américas, ir al supermercado, se me hace difícil. Me pongo nervioso y digo: ‘¿Por qué puerta puedo entrar? Entro por aquí, llego a la tienda, salgo por acá, pero nada’. Entonces tengo que calcular el tiempo por si acaso me paro a hablar con la gente. Y yo que siempre estoy de corre y corre”, contó.
Madura con su público
Agradece que “siempre he sentido el cariño, lo que pasa es que la gente va madurando conmigo también. Ahora las doñitas, las viejitas son locas conmigo y yo loco con ellas. Que si ‘mira ese chiste que tú hiciste todo fuerte, pero no dejo de verte’, ‘pórtate bien’, ‘ay, perdóname, es que yo te hablo a ti como si te conociera’. Como entro a sus casas a través de su televisor
como entro a sus casas a través de su televisor o pantalla... de verdad que siento el cariño de la gente. Y que me llamen por mi nombre, no me llaman nunca por un personaje, me llaman como raymond y eso me llena de satisfacción.
Raymond Arrieta Artista
o pantalla, pues me ven así. De verdad que siento el cariño de la gente. Y que me llamen por mi nombre, no me llaman nunca por un personaje, me llaman como Raymond y eso me llena de satisfacción”.
Fue también el cariño de un público, así como las ganas de aportar a la esperanza, el protagonista de la caminata Da Vida, que bajo el liderazgo de Raymond recaudó en 15 años cerca de $17 millones a favor del Hospital Oncológico.
“El que haga esto, tiene que hacerlo de corazón”, dice ante la dureza de las historias que encontró en el camino, en la gente que perdió la batalla contra el cáncer y aquellos sobrevivientes que energizaron el propósito.
El ciclo de jornadas tradicionales de Da Vida culminó en 2023, pero Arrieta confirmó que “venimos con algo grande el año que viene”, retomando el formato de caminata.
La seriedad en la comedia
La filantropía es parte de lo que Arrieta observó y admiró de su maestro José Miguel Agrelot. Del intérprete de don Cholito a su vez aprendió que la comedia es cosa seria.
“Uno lleva una responsabilidad. Tienes que estudiar. Cuando me gradué en la universidad, dije que no iba a estudiar más. Me pasé estudiando toda la vida porque un libreto es casi botella, porque los aprendes, terminas el programa y ya el libreto no funciona. Vamos pa’ el otro”, sostuvo quien, aunque no sabe si ha sido maestro de otros comediantes, celebra talentos emergentes como JC Martínez, quien recientemente se integró a Raymond y Sus Amigos, de Telemundo.
“Él me dijo: Raymond, yo te veía a ti desde pequeño y yo quería llegar ahí. Y mira dónde estoy, al lado tuyo”, recordó.
Arrieta evita opinar negativamente sobre talentos más jóvenes, pues en sus inicios fue muy criticado por comediantes establecidos que no entendían su propuesta.
“Lo mismo va a pasar de ahora. Vamos a ver la comedia en el futuro. Va a ser una comedia que sea más corta, unos chistes que a lo mejor nosotros no vamos a entender, pero todo va cambiando y hay que darles la oportunidad a todos”, señaló.
En su caso, “me he preguntado si me arrepiento de algo. Quizás se me ha ido la mano par de veces. Pero quizás si vuelvo a ese tiempo, me daría cuenta que a veces hay que hacerlo. Tienes que tirar para ver cómo reacciona la gente y después recoger. O sea, que no estoy como que muy arrepentido de nada”.
> martes, 31 de diciembre de 2024
TITO TRINIDAD Campeón de su gente
Jan Figueroa Roqué >EL VOCERO
Uno de los sueños más grandes de Félix “Tito” Trinidad es tener la oportunidad de estar frente a los millones de puertorriqueños dispersos por el mundo y devolverles el amor y cariño que le mostraron a lo largo de su carrera como boxeador profesional, en más de 40 combates.
El campeón vive agradecido con sus compatriotas, que a 16 de años de su última pelea, le mantienen el respeto y admiración que cuando ganaba frente a otros campeones como Fernando Vargas, Oscar de la Hoya, Héctor “Macho” Camacho, entre otros.
Antes de su debut como profesional, le recomendaban a su papá, Félix Trinidad, que cuidara de él, porque “ese muchacho va a ser un campeón”. Todo comenzó el 10 de marzo de 1990, cuando se enfrentó a Ángel Romero, en Miramar, y le ganó por nocaut. A esta pelea llegó porque no lo dejaron competir en unos Juegos Olímpicos por diferencias con el entonces presidente de la Federación de Boxeo.
Tito siguió en ascenso. Tuvo 45 combates, de los que perdió solo 3, incluyendo el último con Roy Jones Jr., el 19 de enero de 2008. Desde 2014 se convirtió
a todos mis fanáticos, especialmente los puertorriqueños, me gustaría tenerlos de frente para poder decirles el amor que tengo por ustedes. Los amo con mi corazón.
Tito Trinidad Excampeón Mundial
en un inmortal del deporte al ingresar al Museo del Salón de la Fama del Boxeo Internacional en Canastota, Nueva York.
En esta etapa de su vida y desde muy temprano en su carrera, tenía claro quién estaba detrás de su éxito. Su padre, Félix Trinidad, quien también fue campeón nacional y clave para alcanzar la cima del boxeo a los 17 años. Junto a su progenitor también estaba su tío, Juan Guzmán.
“Me dejé llevar siempre por ellos. No es lo que yo quería hacer. Siempre le tuve respeto a ellos y lo que me inculcaban. Me dejé ayudar por todos ellos... Mi padre siempre estuvo a mi lado”, insistió con orgullo.
En parte, gracias a su esquina, se convirtió en el primer puertorriqueño en ganar cuatros campeonatos mundiales, tres de ellos en distintas categorías. Obtuvo dos campeonatos en las 147 libras, uno en las 154 y el cuarto en las 160 libras.
“Perdí tres combates, pero le doy gracias a Dios que salí bien físicamente. Perdí combates fuertes y duros. No hay combates suaves, aquí uno va a enfrentarse a un excampeón, o como lo hice yo en tres ocasiones, a un campeón. No es fácil, pero se pudo… El boxeo es un deporte fuerte, pero es un deporte que, si uno lo sabe llevar y sabe quitarse a tiempo, uno puede salir bien”, reflexionó quien es consi-
derado uno de los mejores boxeadores de la historia en peso wélter.
“Yo soy así”
Si un fanático se encuentra con Tito en la calle, puede tener la seguridad que el púgil no le negará un saludo, una foto o un autógrafo, porque para él siempre es una manera de agradecer el cariño y respeto que ha sentido durante su trayectoria.
“El amor que siento por mi gente (es muy grande). Puerto Rico… cada vez que yo peleaba, me lo han dejado saber, se paralizaba… A todos mis fanáticos, especialmente los puertorriqueños, me gustaría tenerlos de frente para poder decirles el amor que tengo por ustedes. Los amo con mi corazón”, expresó emocionado.
La sensibilidad también se la debe a la conexión que ha entablado con Dios en los últimos años. El deportista reconoce que sin su fe no estaría donde está ni tampoco sería la persona que es con los demás, porque “el Señor me ha permitido que yo sea como soy”.
“No quiero delante de las cámaras hacerme que soy el más humilde, como que me ha dicho la gente… Es que yo soy así. Mis padres son así. Es la crianza que me dieron y eso lo da Dios. Tener unos padres humildes, trabajadores, dedicados a mi familia”, explicó a la
ó A 16 años de su última pelea, mantiene invicto el cariño de su público
la
vez que agradeció también a su mamá Irma Doris, por permanecer en los momentos más vulnerables de su vida. A sus 51 años reconoce que no es perfecto, “pero cada día decido ser un mejor ser humano”. En ese sentido, vive esperanzado con tener un “lugar especial en el cielo”, ya que le pide a Dios vivir “hasta los 100 años”.
Un papá y esposo incondicional Los valores del púgil también se trasladan a su faceta como papá de cinco mujeres. Ashley, Leysha, Alondra, Alayah y Larisha han sido testigos del amor incondicional que les ha mostrado su padre, quien asegura que, “aunque no hablamos mucho, siempre estoy presente para ellas, en las buenas y en las malas”.
Su ancla y centro es Sharon Santiago, con quien lleva casado tres décadas. Santiago lo ha acompañado en sus glorias, pero también en sus momentos más retantes. Por eso, le agradece estar a su lado “no por lo que tengo, si no por quién soy”.
“No soy perfecto, pero siempre trato de hacer lo mejor posible para que ella esté contenta, como mujer y como esposa. Ella siempre ha estado a mi lado, en los momentos buenos y los momentos menos buenos y eso vale mucho”, expresó.
Cuando reflexiona sobre su mayor logro en la vida, no titubea en decir que es su familia antes que las victorias internacionales.
Pero si de algo está seguro, es que, si naciera de nuevo, sería boxeador.
“El deporte del boxeo es el que más gloria le ha dado a Puerto Rico. Fui boxeador y sé lo sacrificado que es este deporte… Sé que el boxeo es el deporte más grande”.
Su estudio Mantek, así como su familia y sus seis perros, conforman parte de su felicidad. >Peter Amador/ EL VOCERO
ó
El productor, libretista, comediante, locutor y cineasta ha desarrollado y mantenido una relación con su audiencia por cerca de cinco décadas
Jan Figueroa Roqué >EL VOCERO
Cuando se entra al espacio seguro de Emmanuel “Sunshine” Logroño, se asoma una parte poco conocida del comediante, que en cinco décadas ha logrado una conexión única con el público que ha seguido y atestiguado su evolución artística.
Es sensible, apasionado, determinado y una persona con la que se conecta en cuestión de minutos. Así también es su arte. Sus personajes como Vitín, Don Eleuterio y Mami Por Favor han sido reflejo de una parte del puertorriqueño y han forjado un vínculo con la audiencia.
“Al principio me veían como una amenaza en el sentido de que mi comedia era diferente y mucha gente se asustaba. Recuerdo que una comentarista de farándula, cuando yo empecé Sunshine Café, me dijo que ella no ve ese programa porque es cafre. Ahí yo dije que, si hablar de la realidad de Puerto Rico es cafre, soy cafre y qué... De momento, el público, especialmente la juventud, me empezó a aceptar. Obviamente, primero fue la juventud y después los adultos se reguindaron y de ahí Sunshine Café fue un ‘boom’”, recordó Logroño.
El vínculo con la audiencia se puso en jaque cuando un grupo conservador boicoteó el programa para sacarlo del aire. Por eso considera que la cultura de cancelación “siempre ha existido en Puerto Rico”, pero entiende que, con las redes sociales, las presiones “ahora son más visibles”.
Sin embargo, nunca ha dejado que
los detractores se interpongan en su camino. La cancelación del programa hizo que se moviera y trabajara por un tiempo con Don Francisco en varios ‘sketchs’, hasta que se le informó que “la comedia hay que hacerla mexicana”, por el enfoque de audiencia que tenía la producción.
“Yo le digo: ‘mira Mario, yo no sé hacer comedia mexicana, así que nos vemos. Goodbye’”, recordó el también productor.
Siempre desde Puerto Rico
“Nací y me críe en Nueva York. Después vine para Puerto Rico y me terminaron de criar mis abuelos. ¿Por qué no regresé? Y tuve oportunidad de volver a vivir allá. Pero por alguna razón… no me sentía a gusto allá, ni cuando chiquito, ni cuando grande. Y donde en realidad me he sentido a gusto es acá (Puerto Rico).
Acá yo puedo fluir, allá no”, se sinceró. Este sentimiento se combina con lo que piensa del retiro. Para Sunshine esa palabra no existe, pues asegura que nunca dejará de trabajar, “porque retirarse es como que quedarte en tu casa esperando la muerte”.
“Yo estoy saludable, yo hago deporte. Se me siguen ocurriendo ideas y voy a seguir trabajando hasta que ya no pueda. Cuando físicamente no pueda hacerlo más, pues entonces… Pero no, el retiro no es una opción”, remarcó.
Esto lo internalizó cuando vio que su mamá dedicó 40 años de servicio a una empresa en Nueva York y cuando se retiró “prácticamente no tenía nada”.
“Quizás por eso no acepto la premisa del retiro… Cuando mi mamá
SUNSHINE LOGROÑO y su creatividad sin pausa
terminó se tuvo que retirar. Y después que se retiró, después de estar trabajando prácticamente toda una vida, se enfermó… Quizás si se hubiese quedado trabajando no se hubiese enfermado”, estableció.
Su espacio seguro
Para Sunshine la rutina diaria comienza a eso de las 10:00 a.m., cuando está listo para irse a Wapa Televisión y producir Pégate al Mediodía, que cumplió 15 años ininterrumpidos al aire. Luego regresa a su hogar, donde también ubica su espacio seguro: Mantek.
Mantek fue desarrollado hace poco más de 20 años, enfocado en la grabación y postproducción de audio. El nombre viene porque desde el inicio quería que tuviera algo que lograra una conexión con Puerto Rico.
“En algún momento de nuestras vidas, la manteca ha tocado nuestro paladar, así que le quise poner un nombre criollo. Y por eso ManteK Recording”, explicó.
Para el comediante este lugar es su segunda casa, donde puede elevar su creatividad a los más altos niveles. Es un espacio rodeado de arte realizado por el escultor Pepo García.
“Este es un estudio que está decorado como una casa, porque ese es el ‘feeling’ que yo quiero que la gente tenga cuando esté aquí”, añadió.
Para el actor, la creatividad comienza a aflorar en la madrugada, porque es cuando menos interrupciones recibe. En esas horas desarrolla sus próximos proyectos, en los que se encuentra un nuevo guión cinematográfico que no tiene nada que ver con Chona.
“Estoy escribiendo una película que es más de acción. Pero lo mío son “be movies”. Lo mío no son películas profundas, son películas que la gente vaya y se divierta”, reveló.
al principio me veían como una amenaza en el sentido de que mi comedia era diferente y mucha gente se asustaba... Una comentarista de farándula, cuando yo empecé sunshine café, me dijo que ella no ve ese programa porque es cafre. ahí yo dije que, si hablar de la realidad de Puerto rico es cafre, soy cafre y qué.
Emmanuel “Sunshine” Logroño Artista
El esposo, padre y abuelo
El lado artístico no es lo único que se puede ver en el espacio seguro de Sunshine. La sensibilidad que emana al hablar sobre su esposa, la productora Gilda Santini, su hija Joanne Tucci y su nieto, termina de llenar el cuarto.
Como abuelo se describe como “un desastre”, porque suele alcahuetear a su nieto, que estudia psicología en Boston. Mientras como padre recuerda que estuvo presente en los procesos de formación de su hija, quien es directora de arte en la industria cinematográfica del País.
Mientras que, como esposo, destaca que Gilda lo complementa tanto en lo personal como en lo laboral, ya que la productora es la que se encarga de vender cada una de las ideas que le surgen al también libretista.
“Cada cual compensa las debilidades del otro. Yo soy un desastre vendiendo y lo peor que tú puedes hacer es venderse uno mismo”, añadió.
Pero hay otros seres que tienen un lugar bien especial en el corazón del productor. Chabela, Billie, Marta, Gloria Angélica, Nico y Bobby son los que pueden calmarlo después de una jornada estresante.
“Siempre, de toda la vida, he tenido perros y siempre han estado conmigo. Una vez hice hasta una novela canina en Club Sunshine. Yo le ponía el vestuario y después le doblaba las voces”, recordó. Los seis perros que lo acompañan lo llenan de alegría. Casi todos son rescatados y han recibido su amor por cerca de seis años.
“Para mí los perros son hijos de nosotros… Lo cómico es que mi hija los rescataba y venían a parar aquí. Siempre dono comida y en dos ocasiones rescaté perritos”, agregó.
Sunshine, que no sabe cuándo adquirió su apodo, advierte mantendrá desde su esquina la lucha por asegurar espacios de trabajo para la clase artística.