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Desconoce las razones de su despido

Glorimar Velázquez >gvelazquez@elvocero.com

El destituido director interino de la oficina de recursos humanos de Administración Central de la Universidad de Puerto Rico (UPR), Manuel Colón, sostuvo que desconoce las razones para su despido, y aseguró que no ha sido abordado en relación a la investigación sobre el contrato de digitalización de documentos en el Recinto de Ciencias Médicas (RCM), que se le concedió mientras fue decano en esta institución.

“Desconozco las razones por las que fui despedido. No me dieron ninguna razón. Me enviaron una carta por ‘email’, el sábado en la mañana, dejándome cesanteado”, expresó Colón a EL VOCERO

“Aparentemente la decisión la tomaron el viernes (pasado), porque el mensaje me llegó a las siete de la mañana del sábado”, añadió.

Al ser abordado en cuanto a la investigación del contrato, sostuvo que no ha sido citado ni cuestionado sobre el asunto.

“La verdad es que tengo que ser honesto, desconozco si la investigación terminó o no. Nunca me han citado ni se me ha preguntado. Las compañías salieron a desmentir que se había pagado algo que no se había hecho. Uno está en estas posiciones y uno firma un comprobante que llega con múltiples firmas, antes de hacer el pago. Nunca se me ha preguntado nada, desconozco dónde está parada la audito- ría”, explicó.

Fue en octubre del pasado año cuando la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU) denunció el otorgamiento de un contrato de digitalización de documentos en Ciencias Médicas a una empresa que se indicó no cumplió con el acuerdo, que tuvo un costo de $1,186,800.

La semana pasada, el presidente de la UPR, Luis Ferrao, destituyó a Colón, lo cual fue confirmado inicialmente por Iliana Rivera, de la oficina de prensa de la universidad. “Él era director interino. Fue decisión del presidente. Es un puesto de confianza, y ya pronto estarán nombrando a alguien en propiedad”, informó Rivera.

Este medio insistió sobre si el despido está relacionado con la investigación del de las comunidades marginadas y una gran responsabilidad histórica con la protección y puesta en vigor de la Carta de Derechos, así como con la elaboración de un marco jurídico que defina al País y responda a la visión de mundo de los puertorriqueños”. contrato que lleva a cabo la Oficina de Auditoría de la Junta de Gobierno UPR, pero Rivera respondió que no podía decir si había sido esa la causa.

Al preguntarle qué podría ofrecerle a la Junta de Gobierno, Lozada Rosas respondió que es la única mujer aspirando para la Junta por acumulación y que considera que falta representatividad femenina.

“No podemos llamarle un partido democrático cuando excluyes a más de la mitad de la población”, recalcó.

“Hace falta más mujeres, y sé que van a haber más mujeres corriendo en la papeleta. Yo no sé si voy a ganar, pero más que ganar es importante dar el paso adelante, atreverse y expresarse. Aquí hay mujeres muy capacitadas”, puntualizó.

Señaló que en la Pava hay una fuerte corriente machista que se da de forma automática.

“En ocasiones uno les plantea la deficiencia democrática por la falta de participación de unos sectores —particularmente de la mujer— y no te entienden. Es como que ‘Yo no veo ese problema’”.

“Me dijeron que fue por decisión del presidente, como es un puesto de confianza... No me dieron los detalles, solo me dijeron que fue una determinación del presidente y por tratarse de un puesto de confianza pues.. es de libre remoción”, agregó.

EL VOCERO solicitó información en cuanto al estatus de la auditoría, pero solo se indicó que seguía bajo la consideración de la Oficina de Auditoría.

En octubre pasado, Ferrao advirtió que la administración podría tomar “acciones disciplinarias” o legales cuando concluya la investigación.

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