La Revolución
Sandinista
años de
y sus
Fredy Franco (*)
verdadera 1- Una Revolución
H
ace 33 años hubo un verdadera revolución popular en Nicaragua, la Revolución Sandinista, porque transformó radicalmente las estructuras, relaciones, visiones y concepciones que existían en el país desde hace siglos, construyendo nuevas realidades políticas, económicas, sociales y culturales en beneficio del pueblo y la nación nicaragüense, que implicaron avances sociales, inclusión social, redención del oprimido, liberación humana. Ese cambio radical implicó la construcción de un nuevo Estado, de un nuevo Ejercito y una nueva Policía, con clara vocación popular y nacional; construyó un nuevo sistema económico, de economía mixta, rectoreado por el Área Propiedad del Pueblo y por diversas formas colectivas de la economía y la producción, asegurando que la riqueza nacional se distribuyera equitativamente en beneficio de todos. Construyó un nuevo tipo de relaciones sociales por las políticas de igualdad y justicia social sustentada en los derechos plenos en salud, educación, cultura, empleo, seguridad social, vivienda, reforma
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victorias urbana y rural que aseguró tierra para el campesino y lotes para los pobladores, entre otros, todo lo cual permitió el ascenso social del pueblo y la construcción de una sociedad equitativa. Igualmente se hizo realidad el protagonismo político del pueblo desde el poder público y el poder social a través
de la democracia participativa, inaugurada por la Revolución; el establecimiento de un nuevo tipo de relaciones internacionales, relaciones dignas, de respeto a la soberanía, independencia y autodeterminación, reivindicando las causas justas de la humanidad, con un gran protagonismo en el escenario internacional.
llama viva de la 2- LaRevolución Claro está que el escenario de oposición y confrontación creado por los enemigos del pueblo (el imperialismo estadounidense y la oligarquía), a través de la guerra y el bloqueo, limitó que estos avances fueran más plenos y profundos; sin embargo, es innegable que la sociedad y la nación nicaragüense ya no fueron las mismas, porque se crearon nuevas instituciones, un nuevo ordenamiento jurídico, nuevas relaciones económico-sociales y el protagonismo popular. Pese al revés electoral de 1990 y los 16 años de neoliberalismo, los enemigos del pueblo no pudieron revertirlos completamente, pues se mantuvo viva la llama de la Revolución en muchos de los cambios alcanzados en los años 80 y, sobre todo, en la conciencia, en la organización y movilización del pueblo para defender sus conquistas y enfrentar las políticas neoliberales. De 1990 al 2006 se gobernó desde abajo, se resistió y se acumuló en experiencia política y en la recuperación de espacios de poder en los poderes públicos, en los gobiernos municipales y en el poder social (organización popular) que, junto a las consecuencias profundamente negativas de las políticas neoliberales, permitió que el FSLN, fuerza política conductora de la Revolución, con su política de alianzas y con un programa de unidad nacional y reconciliación, le permitiera volver al Gobierno Nacional por la vía de los votos.
terrenal: 4- Paraíso el ideal socialista
CCC - Jairo Cajina
La política de unidad nacional y de beneficio popular debe permitir avanzar sostenida y sustantivamente el desarrollo nacional y la superación de la pobreza. Para lograrlo tiene como premisas lo avanzado hasta la fecha con el apoyo del ALBA y la rendición de frutos de la política económica y desarrollo social formulado por el FSLN traducida en:
etapa de la Revolución: 3- IIcontinuidad y avances A partir del año 2007 se inauguró la II etapa de la Revolución Sandinista, en medio de grandes adversidades económicas internacionales y una situación de bancarrota nacional, con una economía estancada, desnacionalizada, con más del 80% de la población en pobreza y más del 60% de la población económicamente activa en desempleo; con altos niveles de migración al extranjero y con un promedio de 8-10 horas diarios de apagones, entre otras expresiones del desastre neoliberal. Había que sacar al país del atolladero, y eso lo ha comenzado a lograr el FSLN con una política de unidad y consenso nacional, con el dialogo social y el compromiso de gobierno, trabajadores y productores/empresarios para sacar adelante la economía, superar la pobreza y avanzar en la equidad social. Esta situación está avanzando con el impulso de una política económica que busca el crecimiento económico con desarrollo social, este último sustentado en más de 50 programas sociales y en la participación social que hace realidad y multiplica la solidaridad; en la que el Pueblo es Presidente y el Presidente es Pueblo, en la que a las responsabilidades del Estado en el desarrollo se combina la participación popular para hacer más pertinentes, amplios y profundos los avances sociales que se construyen. El gobernar en condiciones de paz y para el pueblo, pese al boicot de los enemigos históricos del mismo, ha permitido la solución de muchos problemas económicos-sociales que tuvo que atender prioritariamente el FSLN, situación que fue reconocida por el pueblo reflejándose en el apoyo mayoritario en las elecciones nacionales del año 2011, cuando se ratificó el apoyo y la continuidad de la Revolución con el 63% de los votos. El 10 de enero de 2012, cuando inicia un nuevo mandato de Gobierno Nacional del FSLN encabezado por el comandante Daniel Ortega, es la continuidad de las transformaciones, de mayores cambios, de hacer más y mejor de lo que se ha hecho en términos de políticas de desarrollo económico-social y de empoderamiento popular.
Democratización de la economía, privilegiando a los pequeños y medianos productores; fortalecimiento de sectores claves de la economía, combinando el desarrollo equilibrado del mercado externo e interno, dando valor agregado a los procesos económicos; y los frutos de los proyectos de gran impacto: los energéticos que debe llevar a la independencia energética en el mediano plazo, la Refinería, el Gran Canal, etc. que llevará a Nicaragua a ser el Paraíso Terrenal. Paraíso que soñaron nuestros indígenas y que se avisora más temprano que tarde con una política de desarrollo incluyente, sustentable y sostenible en los social y ambiental, en que la riqueza debe ser producida y distribuida de manera justa para hacer realidad la felicidad plena de los seres humanos, que es lo que reivindica esencialmente la Revolución. Luego de un tercio de siglo la Revolución continúa por su vigencia y porque es un proceso permanente que debe alcanzar nuevos peldaños de avances sociales, haciendo “camino al andar”, buscando las mejores rutas para avanzar, pero con el horizonte claro, que es el ideal socialista que reivindica el FSLN, meta estratégica a alcanzar para hacer realidad los sueños revolucionarios de nuestros héroes y mártires, de nuestros grandes inspiradores y conductores, en especial de Sandino y Carlos Fonseca. _______________ (*) Profesor Universitario. Secretario Nacional Comisión de Asuntos Jurídicos y Éticos del FSLN (CAJE-Nacional).
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