Capítulo 9
Puesta en marcha de una ESAE rápida
En el presente capítulo se explica cuándo se requiere una evaluación rápida de la seguridad alimentaria en emergencias, se recuerdan las actividades que entraña su organización y se brindan orientaciones para la primera fase (Actividades 1 a 4) de la organización de una ESAE rápida, que por lo común deberá complementar la investigación inicial precedente y basarse en ella, en especial al comienzo de una nueva situación de emergencia. Si se acomete una ESAE rápida sin que se haya realizado antes una investigación inicial —lo que podría darse en el caso de una reevaluación o de una evaluación rápida localizada cuando durante un conflicto urgente se abriera el acceso a una zona nueva— se comenzará de cero por las actividades que se describen en este capítulo. Los principales elementos y actividades necesarios para poner en marcha una ESAE rápida son: •
Saber cuándo debe realizarse una ESAE rápida: véase → sección 9.1
•
Saber qué conlleva la organización y realización de una ESAE rápida (cuáles son sus actividades esenciales): véase → sección 9.2
•
Establecer acuerdos de colaboración con asociados o consolidar los que ya existan: véase → sección 9.3
•
Comenzar a recopilar, examinar y compilar los datos secundarios: véase → sección 9.4
•
Definir una «hipótesis de trabajo» que sirva de base para la planificación de la evaluación (y de cualquier asistencia inmediata para salvar vidas): véase → sección 9.5
•
Definir los objetivos y el calendario de la evaluación: véase → sección 9.6
N.B. Durante todo el proceso de evaluación se seguirán realizando las actividades de recopilación y examen de datos secundarios iniciadas en esta fase.
9.1 ¿Cuándo debe realizarse una evaluación rápida? Las ESAE rápidas se practican en contextos muy diversos, sobre todo: •
como complemento de una investigación inicial tras una crisis de inicio repentino que haya puesto de manifiesto la necesidad de realizar una evaluación más detallada;
•
como complemento de una investigación inicial de los primeros indicios de una crisis de inicio lento que haya determinado la necesidad de realizar una evaluación «rápida» (en lugar de una evaluación «detenida»);
•
cuando surge una nueva crisis durante la ejecución de una operación de urgencia o una operación prolongada de socorro y recuperación (por ejemplo, un nuevo movimiento importante de
60 ■ Capítulo 9: Puesta en marcha de una ESAE rápida
refugiados o personas desplazadas en el interior del país; una inundación que afecte a las personas que ya se han visto damnificadas por un conflicto, como ocurrió en Somalia en 1996 y en Aceh en 2005); •
cuando una zona inaccesible deviene de repente accesible, normalmente en una situación de conflicto (como sucedió con frecuencia en Liberia y Sierra Leona en los años 90 y en Darfur en 2004); o
•
como parte de un proceso periódico de las operaciones prolongadas cuyos responsables realizan evaluaciones locales cada pocos meses que sirven de base para la planificación de la asistencia necesaria para las siguientes semanas o meses (como ocurrió en Angola en los años 90).
La ESAE rápida emplea técnicas de «valoración rápida», entre las que destacan algunas de carácter participativo. A veces podrá realizarse también una encuesta rápida sobre hogares, que debe poder responder a las siguientes preguntas: •
¿Puede o no la población damnificada por una perturbación/crisis satisfacer sus necesidades alimentarias básicas? En caso negativo, ¿por qué no?;
•
¿Cuáles son las posibilidades de que el grupo afectado se recupere sin asistencia?;
•
¿Quién necesita asistencia y por qué? ¿Qué nivel y género de asistencia se necesita?;
•
¿Durante cuánto tiempo se necesitará la asistencia?;
•
¿Cuáles son las necesidades de recursos y logísticas?;
•
¿Cuál es la capacidad nacional y local para hacer frente a la situación?; y
•
¿Se necesita asistencia internacional?
Asimismo, esta encuesta deberá determinar valores de referencia relativos a las variables fundamentales, que puedan utilizarse para la posterior evaluación del impacto y el seguimiento de la situación.
9.2 Actividades que conlleva la organización y realización de una ESAE rápida Como se muestra en el Diagrama 1-E (en el Capítulo 1), la organización y realización de una ESAE rápida entraña 15 actividades distintas. Estas actividades se describen en los capítulos 9 a 10, donde se agrupan en seis fases principales, como se enseña en el Cuadro 9-A.
Cuadro 9-A Fases (grupos de actividades) de la organización y realización de una ESAE rápida Fase
Actividades del proceso de evaluación
Capítulo en el que se brindan orientaciones
Puesta en marcha – establecimiento de asociaciones y objetivos, y examen de los datos secundarios
1a4
9
Diseño y planificación de la evaluación
5 a 10
10
Recopilación de datos sobre el terreno
11
11
Procesamiento y análisis de los datos
12
12
Determinación y evaluación de las opciones de respuesta
13
13
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 61
Preparación y difusión del informe
14 a 15
14
A lo largo de todo el proceso de evaluación, el acopio y la compilación de los datos secundarios se realizan en paralelo con las Actividades 3 a 11 y fundamentan el diseño y planificación de la evaluación, así como el análisis final. Esta función debe encomendarse a individuos especializados, que se dedicarán a buscar y compilar datos secundarios de todas las fuentes a que puedan tener acceso en el centro de la capital o provincia en que trabajen. La etapa del diseño y la planificación es decisiva, aunque a menudo no recibe la atención suficiente. La calidad de los productos de la evaluación depende en gran medida del empeño que se ponga en el diseño y la planificación de ésta. El proceso de planificación requiere una buena gestión y experiencia en la planificación del acopio de los datos primarios (mediante métodos de valoración rápida y encuestas) y en el procesamiento y el análisis de esos datos, así como conocimientos especializados en el ámbito de la seguridad alimentaria. Cuando se dispone de buenos datos de referencia anteriores a la crisis (en particular los que se obtienen gracias a los sistemas de alerta rápida), y de modo especial cuando se dispone de un plan para contingencias actualizado preparado conjuntamente entre las partes encargadas de poner fin de la crisis, debería de ser posible diseñar, planificar y llevar a cabo sin demora la investigación inicial y una evaluación rápida. Por añadidura, en este caso el análisis y los productos de la evaluación estarán bien fundamentados. A falta de buenos datos de referencia anteriores a la crisis o de un plan para contingencias actualizado, al inicio de la evaluación tendrá que dedicarse una cantidad considerable de tiempo y esfuerzo a la búsqueda y compilación de datos anteriores a la crisis, así como al establecimiento de relaciones de trabajo con los asociados en la evaluación.
9.3 Establecimiento y consolidación de los acuerdos de colaboración con los asociados
Proceso de evaluación
Actividad 1 Producto previsto: Máxima colaboración entre los asociados en la realización de una evaluación rápida, y coordinación con otras evaluaciones sectoriales.
¿Por qué?
El esfuerzo conjunto de todas las partes que se ocupan de la seguridad alimentaria debería posibilitar: i) que la información y recursos disponibles para la evaluación se emplean tan eficaz y eficientemente como sea posible, y ii) que se alcanza el máximo consenso sobre las conclusiones y, gracias a ello, la colaboración en la organización de las respuestas adecuadas.
¿Cuándo?
Tan pronto como se decida la realización de una ESAE, y continuamente durante el proceso de evaluación.
¿Por quién?
El PMA y los asociados que colaboren en la evaluación desde el principio.
¿Cómo?
Habrá que aprovechar los acuerdos de coordinación, las asociaciones y los contactos existentes con entidades gubernamentales, organismos de las Naciones Unidas y ONG. Se contribuirá a establecer acuerdos de coordinación, cuando sean necesarios, y a garantizar su eficacia. Se establecerán progresivamente nuevas asociaciones y contactos para impulsar: a) la colaboración entre las entidades competentes en materia de seguridad alimentaria y nutrición; y
62 ■ Capítulo 9: Puesta en marcha de una ESAE rápida
b) la coordinación con las evaluaciones que se realicen en otros sectores y con el gobierno y los organismos de las Naciones Unidas que procuren asegurar una coordinación general e intersectorial.
Impulsar la colaboración entre las entidades competentes en el ámbito de la seguridad alimentaria y la nutrición En teoría, una ESAE debería constituir un proyecto de colaboración entre el PMA, el gobierno, los asociados de las Naciones Unidas y las ONG que ya se ocupan del sector de la alimentación y la nutrición (especialmente las que cuentan con una trayectoria y experiencia contrastadas en la evaluación de las necesidades alimentarias en determinadas localidades) (véase la sección 2.2). Asimismo, podrá invitarse a los representantes de los principales donantes a participar en las visitas sobre el terreno, especialmente a los que tengan personal con conocimientos técnicos pertinentes. No obstante, sobre todo cuando se responda a una crisis de inicio repentino, la evaluación no deberá retrasarse indebidamente para integrar a nuevos asociados, y deberá basarse en la colaboración establecida durante la investigación inicial e incluir a nuevos asociados cuando sea posible. Cuando exista un grupo de coordinación sobre seguridad alimentaria (o un asunto similar), se deberá trabajar con ese grupo y por conducto de él para: •
cerciorarse de que se produce una colaboración y coordinación efectivas entre todos los asociados en la evaluación; y
•
acordar un plan de evaluación general, métodos (incluido el uso de modelos de informe) y la utilización compartida del transporte disponible, de ser posible.
Para ello, podrá ser conveniente la creación de un grupo de trabajo especial sobre la ESAE. Podrá asignarse a distintos subgrupos la responsabilidad de: compilar y examinar los datos secundarios (véase la Actividad 2); convenir métodos (véase la Actividad 5) y preparar o adaptar instrumentos adecuados de recopilación de datos (véase la Actividad 7); preparar el suministro y los aspectos logísticos (véanse las Actividades 8 y 10), etc. Si no existe un grupo de coordinación (o el que existe no es eficaz), deberá tomarse la iniciativa de desarrollar rápidamente un mecanismo de coordinación para la seguridad alimentaria en situaciones de emergencia que permita: •
invitar a los posibles asociados y partes interesadas a una reunión, en particular a todas las entidades gubernamentales y de otro tipo competentes;
•
invitar a la entidad gubernamental más competente a copresidir la reunión, de ser posible; y
•
proponer que en un inicio el grupo se centre en coordinar las actividades de evaluación y acordar métodos unificados y modelos de informe. Si, partiendo de esta base, fuera posible llegar a un acuerdo sobre un plan de evaluación general y la utilización compartida del transporte disponible, se habrá hecho un importante paso adelante.
En cualquier caso, deberá procurarse la máxima colaboración y coordinación —o cuando menos el intercambio de información— en todo el proceso de evaluación.
Asegurar la coordinación intersectorial La coordinación de las evaluaciones incumbe al gobierno —normalmente a una entidad encargada de la gestión de catástrofes o a una comisión de socorro, a veces a la Oficina del Primer Ministro—. Amén de la coordinación interna entre las entidades gubernamentales (por ejemplo, los ministerios de salud, bienestar social, agricultura, desarrollo rural, transporte, etc.), debería existir un foro para el intercambio de información y la coordinación entre las entidades gubernamentales, la comunidad de asistencia humanitaria internacional y las organizaciones no gubernamentales nacionales. Los equipos de las Naciones Unidas de apoyo a los países, dirigidos por los coordinadores residentes de las Naciones Unidas, garantizan la coordinación en el seno del sistema de las Naciones Unidas, pero pueden
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 63
incluir también a la Cruz Roja y a ONG importantes, y su finalidad es respaldar las actividades gubernamentales en materia de coordinación. Cuando sobreviene una catástrofe natural importante o una situación de emergencia compleja, se movilizan recursos específicos a tal efecto (véase la siguiente subsección). La oficina del PMA en los países debe cooperar plenamente en todos estos mecanismos de coordinación y hacer todo lo que sea necesario y posible para garantizar la eficacia del intercambio de información y la coordinación entre el proceso de evaluación de la seguridad alimentaria y las evaluaciones que se estén realizando en otros sectores afines, principalmente las que se refieran a la vivienda, el suministro de agua, la salud pública y la recuperación agrícola y económica, incluidos los problemas de seguridad y protección.
Colaboración con los equipos de las Naciones Unidas para la evaluación y coordinación en caso de desastre y las dependencias de coordinación de la OCHA Se exhorta a los equipos de las Naciones Unidas de apoyo a los países, dirigidos por los coordinadores residentes de las Naciones Unidas, a que realicen una evaluación consolidada e intersectorial de las necesidades de asistencia internacional. Tras una catástrofe natural importante, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) movilizará rápidamente al equipo de las Naciones Unidas para la evaluación y coordinación en caso de desastre con objeto de ayudar al coordinador residente y al gobierno a gestionar el proceso de evaluación intersectorial, definir las necesidades de asistencia internacional y coordinar el recibo de suministros para atender las necesidades iniciales a corto plazo. La información sobre esas necesidades se dará a conocer luego mediante los informes de situación publicados por la OCHA desde Ginebra. Los equipos de las Naciones Unidas para la evaluación y coordinación en caso de desastre están integrados por expertos específicamente capacitados en gestión de emergencias que proceden de varios países donantes y por funcionarios con formación similar elegidos de entre los organismos de las Naciones Unidas. Normalmente, llegan a la zona en el plazo de 2 a 3 días y permanecen en ella unas semanas. Las atribuciones típicas/genéricas de los equipos para la evaluación y coordinación en caso de desastre figuran en el Anexo A5.
Cuando se produzca una situación de emergencia compleja importante podrá nombrarse a un coordinador de asuntos humanitarios de las Naciones Unidas, y la OCHA podrá establecer una dependencia de información y coordinación humanitarias (ICH) para respaldar al coordinador en lo siguiente: la coordinación de la asistencia internacional; la garantía de la coordinación intersectorial y la gestión de la información; y la preparación de llamamientos unificados. En general, al comienzo de una operación se emite un llamamiento urgente y, al final de cada año civil, un llamamiento unificado ordinario. En ambos casos, el PMA será el responsable en el seno de las Naciones Unidas de las evaluaciones de la seguridad alimentaria en emergencias, aunque deberá: •
colaborar con los equipos de las Naciones Unidas para la evaluación y coordinación en caso de desastre y las dependencias de ICH, y aprovechar el apoyo que a veces éstos pueden prestar en materia de gestión de los conocimientos especializados, la logística y la información; y
•
trabajar con ellos para asegurar que toda la información que se dé a conocer relativa a la situación de la seguridad alimentaria y las necesidades anejas sea lo más exacta posible y cuente con la aprobación del PMA.
9.4 Acopio, examen y compilación de datos secundarios
Proceso de evaluación
Actividad
2
64 ■ Capítulo 9: Puesta en marcha de una ESAE rápida
Producto previsto: Sacar el máximo provecho de la información que ya existe, incluida la información sobre los antecedentes y los datos sobre la situación actual.
¿Por qué?
Los documentos, informes y bases de datos existentes siempre contienen numerosos datos útiles. La búsqueda y utilización óptima de esos datos puede ahorrar mucho tiempo y aportar información sobre los antecedentes, información sobre los efectos de crisis anteriores y sobre las respuestas a las mismas, datos actuales sobre zonas que el equipo de evaluación no puede visitar, y datos y análisis sobre sectores afines que pueden ayudar a interpretar la información sobre la seguridad alimentaria y la nutrición y el análisis de las opciones de respuesta. La información procedente de los datos secundarios se empleará en las Actividades 3, 5, 6, 8 y 10, así como en los análisis finales de las Actividades 12 y 13.
¿Cuándo?
El proceso de acopio, examen y compilación de datos secundarios deberá comenzar inmediatamente y continuar durante todo el proceso de evaluación, simultáneamente con las Actividades 4 a 12.
¿Por quién?
El acopio y examen de los datos secundarios a nivel nacional (o provincial) deberá encomendarse a individuos especializados, mientras otros planifican el proceso de evaluación y realizan el trabajo de campo.
¿Cómo?
Se buscará activamente datos sobre los antecedentes que guarden relación con todos los aspectos de la seguridad alimentaria (incluidos los medios de subsistencia) y el estado nutricional en la zona (o zonas) de interés, información sobre crisis anteriores y sobre la situación actual. Se examinará la pertinencia, idoneidad y fiabilidad de los datos disponibles y se organizarán por temas de importancia para la evaluación.
Dónde buscar los datos secundarios Deberán examinarse los perfiles de la seguridad alimentaria existentes, los análisis exhaustivos realizados de la seguridad alimentaria y la vulnerabilidad, otros análisis de referencia sobre vulnerabilidad y otros informes y documentos preparados por el PMA, el gobierno u otras organizaciones. En una operación en marcha, se examinarán los informes de evaluaciones anteriores, los informes periódicos de los organismos operacionales o de ejecución y cualesquiera evaluaciones que se hayan llevado a cabo. Se hará una selección de los sitios web enumerados en el Anexo A4 y se contactará a: •
entidades gubernamentales competentes (departamentos, oficinas de estadística y otras entidades);
•
institutos de investigación nacionales y regionales;
•
ONG que operan en la zona de interés, incluidas, aunque no sólo, las organizaciones asociadas del PMA; y
•
representantes locales de otros organismos de las Naciones Unidas, el Banco Mundial y bancos regionales de desarrollo.
Se contactará a expertos especializados en las zonas y poblaciones concernidas. Se estará al corriente de los informes de los medios de comunicación. Se asistirá a reuniones de coordinación y planificación sectorial e interinstitucional y se recopilarán y pedirán copias de los documentos.
Qué buscar y compilar de los datos secundarios
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 65
Se buscarán datos sobre la situación actual y el acontecimiento (o acontecimientos) que la causaron, en especial: •
la naturaleza, alcance y magnitud de la perturbación/crisis;
•
las zonas geográficas afectadas, indicando las zonas que se cree que se han visto gravemente afectadas (o menos gravemente afectadas);
•
los grupos de población que se estima que se han visto gravemente perjudicados (o menos gravemente perjudicados);
•
la disponibilidad de alimentos: niveles actuales de existencias; perspectivas sobre las cosechas; funcionamiento de los mercados; precios de mercado;
•
el acceso a los alimentos (cómo sobrevive la población) y qué tipo de asistencia se está prestando ya o se prevé prestar; fuentes de alimentos e ingresos; poder adquisitivo (relación del intercambio para el trueque); niveles de gastos esenciales; estrategias de supervivencia y su sostenibilidad; oportunidades para la recuperación de los medios de subsistencia;
•
la utilización de los alimentos y la nutrición; y
•
los factores contextuales, que incluyen: la situación política y de seguridad; las condiciones macroeconómicas; el contexto social; las condiciones climáticas; etc.
Se buscarán datos sobre los antecedentes de la crisis relacionados con la zona geográfica (o zonas geográficas) y las poblaciones concernidas, en especial: •
la zona (o zonas): las principales características geográficas, agrícolas y económicas de la zona afectada, incluidas cualesquiera zonas agroecológicas o de subsistencia distintas que ya se hayan detectado;
•
la población: la población total de la zona (o zonas), el desglose demográfico y la distribución entre las distintas localidades; los distintos grupos de población de la zona (o zonas), diferenciados por características socioeconómicas (principales medios de subsistencia) y/o socioculturales (especialmente étnicas) y sus cifras;
•
producción de alimentos: datos sobre la producción de alimentos en los últimos años, con inclusión de zonas cultivadas, rendimientos, utilización de fertilizantes; motivos de los cambios y tendencias;
•
sistemas de mercado: descripciones de los flujos comerciales normales de productos básicos (de poder ser, un mapa que muestre las cantidades); datos sobre los precios de mercado de los últimos años; motivos de los cambios y tendencias;
•
acceso a los alimentos y medios de subsistencia: para cada grupo de población distinto, descripciones de: las pautas de supervivencia y cómo han cambiado en los últimos años, junto con los motivos de esos cambios; su dependencia relativa de las distintas fuentes de alimentos e ingresos, con las variaciones estacionales; las estrategias de supervivencia que suelen adoptar en situaciones difíciles y cómo han cambiado en los últimos años;
•
utilización y consumo de alimentos: hábitos normales de alimentación, prácticas de alimentación de lactantes y niños pequeños, utensilios de cocina y combustible;
•
perfiles nutricionales y de salud: prevalencia normal de la malnutrición (incluidas las carencias de micronutrientes) y las enfermedades transmisibles, con las variaciones estacionales normales y cualesquiera variaciones entre distintas zonas geográficas y grupos de población; causas aparentes de la malnutrición; prevalencia del virus de la inmunodeficiencia humana y el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (VIH/SIDA) y otras enfermedades crónicas;
•
agua y saneamiento: naturaleza y calidad de las fuentes normales de agua, cantidades disponibles a los hogares y utilización que hacen éstos de las mismas, y medidas de saneamiento aplicadas (en distintas zonas geográficas y por distintos grupos de población); y consiguientes riesgos para la salud, con sus variaciones estacionales;
66 ■ Capítulo 9: Puesta en marcha de una ESAE rápida
•
calendarios estacionales: para cada zona agroecológica o de subsistencia distinta, calendarios que muestren: las principales actividades agrícolas; las variaciones estacionales habituales en la disponibilidad de alimentos, las existencias y los precios, y las fuentes de alimentos e ingresos de los hogares; períodos normales de hambruna; pautas de migración de los pastores; características epidemiológicas estacionales; reactivaciones estacionales de los conflictos (en conflictos prolongados de baja intensidad); etc.
•
cuadro o cuadros cronológicos: para cada crisis de inicio lento (de origen natural o económico), situación de conflicto civil o represión, o crisis en una zona que padezca inseguridad alimentaria crónica o un deterioro de la seguridad alimentaria: un cuadro cronológico que muestre los acontecimientos que han afectado directa o indirectamente a los medios de subsistencia y la seguridad alimentaria en determinadas zonas geográficas o grupos de población durante los últimos años (por ejemplo, en los últimos 2 a 5 años); y
•
efectos de las crisis anteriores y respuestas a ellas: los efectos sobre la seguridad alimentaria de crisis anteriores parecidas, y cómo sobrevivió y se recuperó la población.
Examen y compilación de los datos secundarios Deberán examinarse todos los datos secundarios escrupulosamente para evaluar su pertinencia, idoneidad y fiabilidad (véase el Cuadro 9-B). Los encargados del examen de esos datos secundarios deberán hacerse las siguientes preguntas: •
¿Son coherentes los datos y carecen de errores de cálculo?
•
¿Fueron acertados los métodos aplicados para la recopilación de los datos?
•
¿Abarcan los datos efectivamente las zonas geográficas y/o los grupos de población concernidos, o existen ámbitos sobre los que los datos son exiguos?
•
¿Se explican con claridad los motivos de los cambios importantes en las variables de la seguridad alimentaria? ¿Se argumentan?
Se examinará a conciencia cualesquiera informes y evaluaciones de intervenciones en casos de crisis acaecidas en contextos parecidos, puesto que pueden aportar conocimientos sobre los efectos y las opciones de respuesta que de lo contrario podrían pasarse por alto. Esos datos se compilarán de manera que puedan manejarse fácilmente, se organizarán por temas y se preparará una portada para cada tema en la que se enumerarán los datos e informes disponibles y, de ser posible, se resumirán los argumentos más importantes. Cuadro 9-B Evaluación de la pertinencia, representatividad, idoneidad y fiabilidad de los datos secundarios Pertinencia e idoneidad •
Pertinencia: ¿Se corresponden los datos con los indicadores importantes identificados para la evaluación? En caso negativo, ¿existe una conexión clara, aceptada y definida con el indicador de la evaluación que permita que esos datos puedan sustituir el indicador?
•
Comprobar el ámbito geográfico (representatividad): ¿Abarcan los datos un ámbito igual, inferior o mayor que la zona de interés? (Por ejemplo, puede que los datos de una ONG representen solamente la zona en que trabaja). ¿En qué medida estos datos pueden combinarse y compararse con otros datos? (Los datos nutricionales pueden representar fronteras administrativas, mientras que los datos sobre seguridad alimentaria pueden representar zonas de economía alimentaria).
•
Comprobar la fecha: ¿Representan los datos un punto concreto en el tiempo o la estación, o un promedio de varios años? ¿Cuál era la situación cuando se recopilaron los datos?
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 67
¿Cuáles podrían ser las limitaciones si se emplearan esos datos hoy en día? ¿Qué ajuste se necesita para las variaciones estacionales? Fiabilidad •
Reputación: ¿Cuánta fiabilidad tiene la organización, organismo o departamento gubernamental que recopiló los datos? ¿Son sus resultados aceptados ampliamente en el país y coherentes con las conclusiones de otros? ¿Existe la posibilidad de que los datos estén tergiversados (por ejemplo, en un intento de obtener más ayuda)?
•
Metodología: ¿Hay una descripción de la metodología utilizada para acopiar los datos, incluido el procedimiento de muestreo utilizado? En caso negativo, téngase cuidado al utilizar los datos.
•
Muestreo y confianza: ¿Cuál fue el marco del muestreo (a qué población pretende representar la muestra)? ¿Cuál fue el tamaño de la muestra y cómo se eligió? ¿Se han calculado intervalos de confianza?
•
Control de la calidad: ¿Hay una descripción de las medidas utilizadas durante el acopio de los datos para supervisar su calidad, así como una validación de los instrumentos (mediante la triangulación, la supervisión de los trabajos de campo, el filtrado de datos)?
•
Análisis e integridad: ¿Qué métodos se emplearon para el análisis (estadísticos o de otro tipo)? ¿Se dispone de los datos brutos? ¿Están las variables comunicadas en el análisis en consonancia con las preguntas o temas del cuestionario o la lista de temas para debate?
[Adaptado de las Directrices de seguimiento y evaluación, Módulo 7, Elección de los métodos e instrumentos para el acopio de datos]
9.5 Definición de la hipótesis de trabajo
Proceso de evaluación
Actividad Producto previsto: Una hipótesis de trabajo relativa a la naturaleza y el alcance del impacto sobre la seguridad alimentaria y los grupos de subsistencia afectados.
¿Por qué?
Esta situación hipotética servirá de base para la definición (en la Actividad 4) de las zonas, grupos y aspectos específicos de la seguridad alimentaria en que se centrará la evaluación.
¿Cuándo?
En el plazo de 1 ó 2 días tras la decisión de emprender una ESAE rápida.
¿Por quién?
El PMA y los asociados que colaboren desde el principio en la evaluación.
¿Cómo?
Se examinará y confirmará (o refinará) la hipótesis de trabajo inicial formulada durante la investigación inicial, de haberse llevado a cabo, teniendo en cuenta cualesquiera datos secundarios nuevos recibidos desde entonces. En el caso de que no se haya realizado una investigación inicial, se formulará de cero una situación hipotética sobre la base de los datos anteriores a la crisis disponibles en la actualidad.
En el Diagrama 8a (en el Capítulo 8) se esboza el proceso de formulación de una situación hipotética.
3
68 ■ Capítulo 9: Puesta en marcha de una ESAE rápida
Partiendo de la información adicional que se haya obtenido desde que se estableciera la hipótesis de trabajo inicial (estimación óptima), se refinará el cuadro de los posibles efectos de la crisis sobre la seguridad alimentaria en distintas partes de la zona afectada y entre distintos grupos de población, a fin de preparar una hipótesis de trabajo actualizada. Esta hipótesis representa la última estimación óptima relativa a la situación presente y a su posible evolución. Para ello, deberá utilizarse el modelo contenido en el Cuadro 9C (el mismo propuesto para las conclusiones de la investigación inicial). Cuadro 9-C Modelo para una situación hipotética Componente analítico
Hipótesis de trabajo
Perturbación/naturaleza de la crisis
El ciclón y la marea de tormenta aneja causaron graves daños en el cinturón litoral e inundaciones en el interior
Zona geográfica afectada (o zonas geográficas afectadas)
Distritos A, B y C, y valles en D y E
Grupos étnicos y de subsistencia en la zona (o zonas); sus vulnerabilidades
Comunidades de pescadores en la costa y los ríos. Pequeños agricultores y jornaleros en los valles.
Cifras sobre la población (totales y desglosadas por zona y grupo de población, de ser posible).
Total: 650.000; 120.000 en el distrito A; …
Disponibilidad (y mercados) de alimentos Posible impacto en el suministro (y la demanda) de alimentos
Destrucción de los cultivos en pie y de las existencias domésticas y comerciales en las zonas; impacto reducido en la producción nacional
Posible impacto sobre los mercados (precios y sistemas)
Etc.
Probables reacciones compensatorias del gobierno, comerciantes y otros interesados Probables efectos netos (necesidades y riesgos imperantes) Medios de subsistencia y acceso de los hogares a los alimentos Posible impacto sobre los medios de subsistencia y el acceso de los hogares a los alimentos Probables estrategias de supervivencia de los hogares Probable función de las redes de seguridad social tradicionales/comunitarias y la solidaridad Probable función y eficacia de los programas gubernamentales y de otro tipo en marcha Probables necesidades y riesgos imperantes Utilización de los alimentos y nutrición Posible impacto sobre la utilización de los alimentos
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 69
Situación nutricional actual y posibles efectos Efectos netos probables (necesidades y riesgos imperantes)
Sobra la base de esta información y estas conjeturas se podrá: •
definir los objetivos y el cometido de la evaluación (Actividad 4), incluidos los temas, zonas geográficas y grupos de población en que deberá centrarse;
•
establecer un orden de prioridad entre las zonas que requieren la intervención (es decir, formular una estrategia de muestreo —Actividad 6—); y
•
comenzar a preparar copias de los documentos básicos y resúmenes concisos y sinópticos de los datos facilitados por los informantes clave, y agruparlos en juegos de material informativo para los equipos de evaluación que recopilarán datos sobre el terreno (Actividad 8).
9.6 Definición de los objetivos y el calendario de la evaluación
Proceso de evaluación
Actividad Producto previsto: Acuerdo sobre los productos previstos de la evaluación y sobre el plazo para la terminación de la evaluación y la presentación del informe.
¿Por qué?
Con demasiada frecuencia, distintas personas —los que participan en la evaluación y los que esperan las conclusiones— albergan distintas expectativas. Para evitar malentendidos, es fundamental que todas las personas concernidas acuerden tanto los objetivos —los motivos de la evaluación y los productos específicos previstos— como el calendario para lograr estos productos. Si éstos no se acuerdan de manera directa, cabe esperar que se produzcan desacuerdos y demoras en todas las actividades sucesivas y que sea difícil llegar a un acuerdo sobre las conclusiones y recomendaciones.
¿Cuándo?
En el plazo de 1 ó 2 días tras la decisión de realizar una evaluación rápida.
¿Por quién?
El PMA en colaboración con todos los asociados en la evaluación desde el principio.
¿Cómo?
Se examinarán los objetivos típicos (Cuadro 9-D) y se adaptarán a la situación. Se decidirá el calendario a tenor de la magnitud de la emergencia, la urgencia de la necesidad de movilizar y prestar asistencia y los recursos disponibles para realizar la evaluación.
Definición de los objetivos de la evaluación Los objetivos enumerados en el Cuadro 9-D se modificarán y adaptarán a la situación, y este cuadro se utilizará para acordar los productos específicos previstos de la evaluación rápida.
Cuadro 9-D Objetivos típicos de una ESAE rápida •
Calcular el alcance, la gravedad y la probable duración de los cambios derivados de la crisis en la disponibilidad de alimentos (incluido el funcionamiento del mercado), los medios de subsistencia, el acceso a los alimentos de los hogares y su utilización por éstos;
4
70 ■ Capítulo 9: Puesta en marcha de una ESAE rápida
•
Identificar: o el ámbito geográfico de las zonas en que se ha visto afectada la seguridad alimentaria directa o indirectamente; o cualesquiera diferencias en la gravedad y probable duración del impacto entre distintas zonas y sobre distintos grupos socioeconómicos de población; y o las causas inmediatas y las posibles causas subyacentes de la inseguridad alimentaria actual y de cualquier género de malnutrición que se observe.
•
Determinar: o la capacidad de los distintos grupos para hacer frente a la situación; y o si en la zona se dispone de suficientes alimentos de óptima calidad —si el problema es o será de «disponibilidad» o de «acceso»— y el grado en que los aspectos ligados al mercado pueden estar contribuyendo al problema y/o los mercados pueden contribuir a su resolución.
•
Identificar el tipo (o tipos) de medidas o asistencia —alimentarias y no alimentarias— que podría ayudar a garantizar que las personas, en especial los hogares y los individuos más vulnerables, tengan acceso a: o alimentos suficientes de óptima calidad para satisfacer sus necesidades nutricionales, y o los suministros, servicios y protección no alimentarios para mantener (o restablecer) la salud nutricional y el bienestar, sin recurrir a estrategias de supervivencia perjudiciales o no deseables
•
Identificar los recursos y la capacidad (de las comunidades y los posibles asociados) disponibles actualmente para aplicar medidas e intervenciones tendentes a colmar las necesidades alimentarias y de otro tipo de la población, así como solventar cualquier dificultad;
•
Identificar cualesquiera posibilidades inmediatas para iniciar la asistencia en favor de la recuperación autónoma y la seguridad alimentaria a más largo plazo de la población; y, sobre esta base: •
Proponer medidas e intervenciones de ayuda específicas —alimentarias y no alimentarias— que puedan ayudar a los grupos de población afectados a satisfacer sus necesidades de seguridad alimentaria a corto y más largo plazo, y especificar las ventajas y desventajas de las distintas opciones de respuesta; y
•
Determinar si será necesaria una evaluación de la seguridad alimentaria detenida y, en caso afirmativo, proponer el plazo y los elementos básicos de su cometido. Si se decide que la asistencia alimentaria constituye una respuesta adecuada: los encargados de la evaluación rápida deberán también proponer: •
Los tipos de asistencia alimentaria y de otro género necesarios;
•
El número de personas que se beneficiará de la asistencia y el período durante el cual lo hará; y
•
De ser posible, cómo deberá suministrarse, orientarse, distribuirse y supervisarse la asistencia alimentaria y de otro tipo. Ello incluye la compilación de los datos necesarios para la planificación y la presupuestación de las actividades, incluidos los datos sobre indicadores clave necesarios para establecer valores de referencia con arreglo a los cuales se evaluará el rendimiento de los programas, y para respaldar la elaboración de propuestas de proyectos específicas y creíbles (para los próximos 6 a 12 meses) que se presentarán a los donantes para obtener financiación.
Se tendrá cuidado en asegurar que los objetivos son concretos y realistas. Cuando se requiera asistencia inmediata para salvar vidas y mantener la salud nutricional, se dará prioridad a la evaluación de esas necesidades y los medios para poner los alimentos a disposición de las personas más necesitadas. Aun así, se tendrán siempre presentes las repercusiones a largo plazo de las medidas adoptadas y la importancia de buscar oportunidades para apoyar la recuperación —y para evitar que las personas adopten estrategias de supervivencia negativas o perjudiciales— tan pronto como sea posible. Cuando se produzca una crisis durante la ejecución de una operación, la evaluación deberá incluir un examen rápido del estado de los programas de ayuda alimentaria y de los programas afines existentes, el impacto de la nueva crisis (por ejemplo, nuevos desplazamientos de población) sobre esos programas y la capacidad de las distintas actividades programáticas en curso de ampliarse o adaptarse para atender las necesidades adicionales.
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 71
Adopción del calendario para la terminación de la evaluación El calendario se determinará en función de la urgencia con que deban adoptarse las medidas, así como del alcance geográfico y la complejidad de la situación. Como se menciona en la sección 1.1, debe lograrse un equilibrio entre las necesidades contrapuestas de velocidad y exactitud (incluida la representatividad) de las observaciones y conclusiones, tomando en cuenta el contexto. Por regla general: •
en el plazo de una semana deberá terminarse la evaluación «rápida» de la zona afectada por la catástrofe o de la nueva zona que hasta ese momento haya sido inaccesible.
•
en el caso de las zonas extensas que incluyan varias zonas agroecológicas y económicas y grupos de población, la evaluación «rápida» podrá requerir hasta seis semanas.
Cuando la vida y los medios de subsistencia de las personas se enfrentan a un riesgo inminente, podrá planificarse la evaluación de manera que permita aportar información básica rápidamente para que puedan movilizarse y asignarse recursos mientras se sigue reuniendo información más detallada, y deberá instruirse a los equipos de evaluación para ello. Cuando parece que existe una crisis de la disponibilidad de alimentos, y especialmente cuando los recursos alimentarios de los países vecinos también parecen estar limitados de modo que no pueden tramitarse los recursos alimentarios con rapidez, habrá una presión añadida para aportar información básica con prontitud.
Preparación de un presupuesto para la evaluación Deberá garantizarse que se dispone de un presupuesto realista antes de que comiencen las actividades sobre el terreno. Una evaluación rápida puede llegar a costar hasta 30.000 dólares EE UU en función del alcance geográfico, la topografía de la zona y la variedad de las zonas de subsistencia y los grupos socioeconómicos afectados. Para empezar, se examinarán las siguientes partidas: •
gastos de dietas para el gobierno y otros participantes (en el caso de que no puedan sufragarlas sus propias organizaciones);
•
gastos de transporte (billetes, alquiler y/o combustible y gastos de mantenimiento de vehículos, barcos, helicópteros, aviones, según las necesidades);
•
gastos de seguridad;
•
gastos de formación;
•
gastos en telecomunicaciones;
•
gastos incidentales de los equipos mientras trabajan sobre el terreno;
•
equipo, incluido material de acampada, de ser necesario (se recurrirá a la compra o alquiler cuando no se pueda pedir prestado); y
•
gastos de impresión y reproducción de los juegos de material informativo, los instrumentos de recopilación de datos, el informe final, etc.
Se alentará a todos los organismos asociados a participar en los gastos, pagando como mínimo los gastos (incluidas las dietas) de su propio personal.
Capítulo 10
Diseño y planificación de una ESAE rápida En el presente capítulo se describen las actividades que conllevan el diseño y la planificación de una evaluación rápida de la seguridad alimentaria en emergencias. El diseño minucioso y la planificación concienzuda son esenciales para el éxito de cualquier evaluación. Si no se presta la atención suficiente a estos aspectos vitales (como ha ocurrido a menudo en el pasado), la evaluación no dará los productos previstos a tiempo o con la calidad necesaria y, a causa de ello, las decisiones programáticas se adoptarán con retraso o no estarán bien fundamentadas. Cuando se ha formulado una hipótesis de trabajo inicial (Actividad 3 —véase la sección 9.5—) y se han definido los objetivos de la evaluación (Actividad 4 —véase la sección 9.6—), las actividades fundamentales que entraña el diseño y la planificación de una ESAE rápida son: •
Elaboración de un plan, calendario y presupuesto para la evaluación: véase → sección 10.1. Observación: Deberá elaborarse rápidamente un proyecto inicial de plan, calendario y presupuesto para orientar el resto del proceso de diseño y planificación, y se irá refinando a medida que se vayan definiendo los distintos componentes del plan.
•
Definición de las necesidades en materia de recopilación de datos (teniendo en cuenta los datos de que ya se dispone): véase → sección 10.2.
•
Decisión sobre los métodos de recopilación de datos: véase → sección 10.3.
•
Decisión sobre el plan y el procedimiento de muestreo: véase → sección 10.4. Observación: Las necesidades de recopilación de datos, los métodos y el plan de muestreo que se propongan tendrán que examinarse a la luz de los recursos humanos y de otro tipo disponibles. Si no pueden movilizarse recursos suficientes, tendrá que ajustarse el plazo y/o las propuestas, aunque deberán tenerse en cuenta los efectos de estos ajustes e indicarse en el informe final. Una de las decisiones básicas será si se lleva a cabo una encuesta rápida sobre hogares o se recurre únicamente a los datos recabados mediante técnicas de valoración rápida, o sea: entrevistas con informantes clave y grupos, más datos secundarios.
•
Diseño, o adaptación, de los instrumentos de recopilación de datos: véase → sección 10.5.
•
Preparación de juegos de material informativo, suministros y equipo: véase → sección 10.6.
•
Contratación, reunión y capacitación de los equipos de evaluación sobre el terreno: véase → sección 10.7.
•
Organización del transporte, la seguridad y las comunicaciones: véase → sección 10.8.
El proceso se ilustra gráficamente en el Diagrama 10a, tomado del Diagrama 1e (del Capítulo 1) en el que se esboza todo el proceso de evaluación.
74 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
Diagrama 10a:
Actividades del diseño y la planificación de una ESAE rápida
4. Definición de los objetivos y del plazo [véase ç.6]
6. Definición de la información necesaria y de los métodos de recopilación de datos y muestreo [véase 10.2, 10.3 y 10.4]
5. Elaboración de un plan para la evaluación [véase 10.1]
7. Diseño/adaptación de los instrumentos de recopilación de datos [véase 10.5]
8. Preparación de suministros, equipo y juegos de material informativo [véase 10.6]
9. Constitución y capacitación del equipo (o los equipos) de evaluación [véase 10.7]
10. Organización del transporte, la seguridad y las comunicaciones [véase 10.8]
10.1 Elaboración de un plan, calendario y presupuesto para la evaluación
Proceso de evaluación
Actividad 5 Producto previsto: Un plan por escrito en el que se especifique: i) lo que se hará para preparar y realizar el acopio de datos sobre el terreno y para completar el proceso de evaluación; ii) cómo y cuándo se realizará y quién se encargará de ello, y iii) los recursos necesarios y de dónde se obtendrán.
¿Por qué?
Para garantizar que todos los preparativos necesarios se hacen a tiempo y que las encuestas sobre el terreno se llevan a cabo con la mayor facilidad posible y que la evaluación obtiene los productos previstos oportunamente.
¿Cuándo?
La planificación deberá comenzar en cuanto se hayan definido los objetivos de la evaluación. El calendario que se prepare en esta fase tendrá que examinarse, y tal vez revisarse, cuando se hayan definido los métodos de recopilación de datos y de muestreo en el marco de la Actividad 6 (véase el Diagrama 10c).
¿Por quién?
Un grupo de trabajo designado integrado por individuos del PMA y asociados que colaboren en la evaluación.
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 75
¿Cómo?
Sobre la base de la hipótesis de trabajo actualizada, los objetivos y el plazo acordados para la evaluación y las decisiones sobre los métodos y los procedimientos de muestreo, en concreto el número de lugares que habrá que visitar, se preparará: •
un calendario en la forma de un diagrama de barras en que se muestre cuándo se realizarán las distintas fases y cuándo deberán completarse;
•
un plan de acción en que se especifique brevemente (probablemente en la forma de una matriz) qué se realizará en cada fase, los recursos humanos y materiales necesarios y quién se encargará de completar las actividades dentro del plazo fijado; y
•
un presupuesto preliminar.
Elaboración de un calendario En el plan de la evaluación debe indicarse claramente la manera en que se completarán las actividades restantes del proceso y quién se encargará de cada una de ellas. El plan deberá ponerse por escrito y a disposición de todos los interesados. En el Diagrama 10b se da un ejemplo de un posible calendario para la planificación y la ejecución de una evaluación rápida en el plazo de tres semanas. Se incluyen las Actividades 1 a 4 precedentes para dar una visión de conjunto. En el caso de que se produzca una crisis en una zona geográfica restringida, el proceso entero podrá comprimirse en una única semana. En una crisis importante que afecte a una zona amplia, podrá prolongarse durante seis semanas. En la práctica, podría ocurrir que la evaluación no pudiera completarse según lo previsto, dentro del plazo fijado y con los recursos humanos y de otro tipo disponibles. En este caso, el problema deberá estudiarse con todas las partes colaboradoras con objeto de o bien movilizar más recursos, o bien adoptar la decisión de ampliar el plazo o de prescindir de algunos aspectos, teniendo plena conciencia de las posibles consecuencias que de ello puedan derivarse para la calidad y fiabilidad de los datos y para las conclusiones que podrán extraerse. El calendario tendrá que actualizarse consecuentemente; de hecho, deberá considerarse como un documento de trabajo que se perfecciona continuamente, especialmente durante los primeros días de la planificación. Sin embargo, cuando se hayan decidido los métodos, se hará todo lo posible por adherirse al calendario acordado hasta ese momento.
76 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
Diagrama 10b
Posible calendario para la evaluación
Actividad 1 1. Establecer/reconfirmar los acuerdos de colaboración con los asociados 2. Compilar y examinar los datos secundarios 3. Examinar la hipótesis de trabajo derivada de la investigación inicial 4. Definir los objetivos y el plazo de la evaluación 5. Elaborar el plan de la evaluación 6. Definir la información necesaria Decidir los métodos de recopilación de datos y el procedimiento de muestreo 7. Diseñar/adaptar los instrumentos de recopilación de datos Ensayar previamente los instrumentos de evaluación (con la capacitación del equipo) Ultimar los instrumentos de evaluación 8. Preparar el juego de material informativo, los suministros y el equipo 9. Identificar y contratar a los miembros del equipo Orientar/capacitar al equipo (o los equipos) 10. Organizar el transporte, la seguridad y las comunicaciones 11. Recopilar datos en los lugares 12. Procesar y analizar los datos 13. Determinar y analizar las opciones de respuesta 14. Redactar el informe 15. Presentar las conclusiones Ultimar y difundir el informe
Tiempo (días) Segunda semana
Primera semana 2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
Tercera semana 14
15
16
17
18
19
20
21
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 77
El tiempo necesario para el diseño y la planificación hasta la Actividad 10 inclusive depende del nivel de preparación. Ambas actividades deben poderse completar en 1 ó 2 días, siempre que se haya realizado una buena planificación para contingencias para este tipo de situación (y se haya instruido a personal para los equipos de evaluación por adelantado). De lo contrario, será necesaria una buena gestión para completar esta fase en un plazo de entre 5 y 7 días. El tiempo necesario para la capacitación de los equipos de evaluación sobre el terreno depende de los métodos y técnicas que se apliquen y de la experiencia de los individuos disponibles en la utilización de esos métodos y técnicas. Deberá consagrarse el tiempo suficiente a la capacitación para asegurar que todos los equipos reúnen los datos correctamente y de manera razonablemente uniforme (véase la sección 10.7). El tiempo necesario para la recopilación de datos sobre el terreno obedece a: •
el número de lugares que se visitarán y el tiempo que habrá que permanecer en cada lugar – ello depende de: i) el plan de muestreo que, a su vez, depende de la heterogeneidad de la zona y población concernidas, y ii) los métodos y técnicas de acopio de datos que se utilizarán. Tal vez tengan que hacerse concesiones (véase más abajo);
•
el tiempo necesario para viajar de un lugar a otro – ello depende de la ubicación de los lugares que, a su vez, viene determinado por el plan de muestreo, y del terreno y los medios de transporte disponibles. No hay que infravalorar el tiempo necesario; y
•
el número de equipos de evaluación – ello depende de la disponibilidad de: i) personal con conocimientos y aptitudes pertinentes; y ii) transporte y recursos logísticos anejos.
En el Cuadro 10-A se indica el tiempo que de ordinario se requiere para las entrevistas. Véase la sección 10.4 relativa al número de lugares que tendrá que visitarse y el número de entrevistas necesarias en cada lugar. En la práctica, normalmente los equipos tendrán que visitar y completar las entrevistas en uno o dos lugares por día. Cuadro 10-A Indicaciones aproximadas del tiempo necesario para las entrevistas •
Medio día en cada sede provincial o de distrito. (Un día entero si se trata de una crisis de inicio lento.)
•
Entre una hora y una hora y media por cada entrevista con un grupo. (Dos horas por cada entrevista con un subgrupo para recabar datos para los análisis económicos de los hogares.)
•
Un máximo de tres a cuatro entrevistas con grupos por día y por pareja de entrevistadores. (Dos a tres para el acopio de datos económicos sobre los hogares.)
•
Hasta 45 minutos por hogar en el caso de las encuestas sobre hogares basadas en un cuestionario.
•
Un mínimo de tres a cuatro horas en cada aldea, localidad urbana o campamento elegidos tratándose de un equipo de cuatro personas (este tiempo mínimo aumentará si la comunidad no es homogénea o si debe realizarse una encuesta sobre hogares).
El tiempo necesario para el procesamiento y el análisis de los datos depende del número de entrevistas, la cantidad de datos que haya que recabar y los recursos movilizados para el procesamiento de los datos, especialmente si se realiza una encuesta sobre hogares y se procesa un número elevado de cuestionarios. El procesamiento de los datos a menudo requiere más tiempo y recursos de lo previsto. Deberá planearse con detalle la forma en que se procesarán los datos, qué aptitudes y material se necesitarán, quién se encargará de ello y dónde. Deberá calcularse el número aproximado de personas y horas necesarias para ello. Como regla aproximativa, se destinará el mismo número de personas-hora al procesamiento y análisis de los datos que a su recopilación. Véase la sección 11.6 para obtener información más detallada sobre el tipo de medidas necesarias. Se añadirán 3 ó 4 días para redactar y ultimar el informe tras la terminación del análisis. Planificación de la recopilación, el procesamiento y el análisis de los datos
78 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
Las fases básicas de la definición de las necesidades de recopilación de datos, los métodos, los procedimientos de muestreo y las disposiciones para el análisis de los datos (Actividad 6) se ilustran en el Diagrama 10c. En la sección 10.2 se dan orientaciones sobre la definición de las necesidades de recopilación datos. En las secciones 10.3 y 10.4 se tratan las cuestiones de la determinación de los métodos de recopilación de datos y la estrategia de muestreo más adecuados, teniendo en cuenta el tiempo y los recursos disponibles.
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 79
Diagrama 10c Fases de la definición de las necesidades de recopilación de datos, la elección de los métodos y la planificación del procesamiento y análisis de los datos Objetivos, calendario y plan de la evaluación
Acuerdo sobre los métodos analíticos que se aplicarán
Definición de las necesidades de información
Identificación de los datos ya disponibles
Definición de las necesidades de recopilación de datos
Cálculo de los recursos humanos y de otro tipo disponibles
Decisión sobre los métodos para la recopilación de datos
Definición de la estrategia de muestreo
Definición de las necesidades de procesamiento y análisis de los
datos
Definición recursos necesarios para acopio y análisis de datos
Examen de los recursos necesarios. Si los recursos son insuficientes, se movilizarán recursos adicionales o se revisará el plan de la evaluación
Ultimación del plan de la evaluación
80 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
Cuando se hayan definido los métodos que se aplicarán, deberán especificarse los procedimientos que se seguirán para el procesamiento y el análisis de los datos recabados por los equipos de evaluación sobre el terreno y los recursos y el tiempo que se necesitarán: •
En la sección 11.6 se facilitan orientaciones sobre el procesamiento de los datos (tanto los datos cuantitativos como cualitativos). Para los datos recabados mediante técnicas de valoración rápida se prepararán (especificarán) las matrices resumidas iniciales que cada equipo debe producir. Para los datos de la encuesta sobre hogares, la planificación se centrará en dónde se procesarán los cuestionarios completados y quién se encargará de ello, y en cómo los presentará cada equipo sobre el terreno.
•
En el Capítulo 12 se facilitan orientaciones generales sobre el análisis, mientras que en los capítulos 4 a 7 de dan indicaciones en relación con cada tema. En la fase de la planificación, deberá prepararse un plan de análisis. Para los datos recabados mediante técnicas de valoración rápida, deberá especificarse: i) los análisis básicos (tabulaciones cruzadas) que cada equipo realizará en la primera fase del análisis; ii) si podrán contratarse los servicios de un analista independiente para que trabaje con cada equipo de evaluación sobre el terreno sin demorar indebidamente el proceso de análisis; y iii) cómo se realizará el análisis general final y quién se encargará de realizarlo. Para el análisis de los datos de las encuestas sobre hogares, tendrán que preverse también las tabulaciones cruzadas y especificarse quién llevará a cabo el análisis y la interpretación detallados de los datos y después se combinarán los datos de la encuesta sobre hogares con los recabados en las entrevistas con grupos comunitarios e informantes clave.
Importancia de una mirada independiente al analizar los datos recopilados con técnicas de valoración rápida Un analista que no haya participado en la recopilación de los datos aportará una visión fresca y una perspectiva imparcial al análisis de los datos registrados. Esto puede ayudar a identificar las correlaciones que apuntan los datos y las cuestiones que merecen un examen en el seno del equipo, y evitar al mismo tiempo los sesgos derivados de las impresiones de los miembros del equipo para las cuales se disponga de datos limitados. A continuación, el equipo y el analista pueden debatir y acordar las conclusiones (la historia que cuentan los datos).
Preparación de un presupuesto para la evaluación Deberá asegurarse que se cuenta con un presupuesto realista antes de dar inicio al trabajo de campo. Una evaluación rápida puede llegar a costar hasta 30.000 dólares EE UU en función de la extensión geográfica y la topografía de la zona y de la variedad de las zonas de subsistencia y los grupos socioeconómicos afectados. Para empezar, se examinarán las siguientes partidas: •
gastos de dietas para el gobierno y otros participantes (si no puede sufragarlas su propia organización);
•
gastos de transporte (billetes, alquiler y/o combustible y gastos de mantenimiento de vehículos, barcos, helicópteros, aviones, llegado el caso, dietas para los conductores);
•
gastos de seguridad (en caso de que sea necesario contratar a guardianes o escoltas);
•
gastos de capacitación (alquiler de locales/alojamiento; transporte; materiales; honorarios para los instructores; dietas para los aprendices, etc.);
•
gastos en telecomunicaciones (facturas telefónicas, incluidos los teléfonos por satélite si se necesitan; adquisición de radios, etc.)
•
gastos incidentales de los equipos mientras se encuentran sobre el terreno;
•
equipo, incluido material de acampada, de ser necesario —véase el Cuadro 10-A— (compra o alquiler cuando no se pueda pedir prestado); y
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 81
•
gastos de fotocopiar los juegos de material informativo, los instrumentos de recopilación de datos, el informe final, etc.
Se alentará a todos los organismos asociados a participar en los gastos, pagando como mínimo los gastos (incluidas las dietas) de su propio personal.
Proceso de evaluación
10.2 Definición de las necesidades en materia de recopilación
Actividad 6a
de datos
Producto previsto: Consenso sobre: i) los datos básicos necesarios y el marco analítico que se empleará; y ii) las correspondientes necesidades relativas al acopio de datos, teniendo en cuenta la información (datos secundarios) ya existente.
¿Por qué?
Para: i) permitir que puedan sacarse conclusiones pertinentes relativas a la población de interés y/o sus subgrupos; y ii) evitar que los equipos de evaluación ocupen su tiempo —y el de los interlocutores— en el acopio de datos que no se utilizarán o que ya existen.
¿Cuándo?
Tan pronto como se hayan definido o acordado los objetivos y el cometido de la evaluación.
¿Por quién?
El PMA y los asociados que participen en la evaluación desde el inicio.
¿Cómo?
Si existe un plan para contingencias detallado, se examinará rápidamente lo que haya podido acordarse en relación con los marcos para el análisis de datos y las correspondientes necesidades de información, y se determinará si son adecuados en la situación actual. En el caso de no serlo, se redefinirán las necesidades. Si no se han acordado con antelación las necesidades de información, se recurrirá a las directrices que figuran más abajo para decidir las necesidades.
Para definir las necesidades de recopilación de datos deberá: 1. Acordarse la manera de analizar los efectos a corto y medio plazo de la perturbación/crisis sobre: •
la disponibilidad de alimentos en la zona, el funcionamiento de los mercados y los precios de mercado;
•
los medios de subsistencia y el acceso a los alimentos de los hogares, con inclusión de las posibles insuficiencias del acceso a los alimentos en los hogares, de haberlas, teniendo en cuenta las estrategias de supervivencia que no son perjudiciales; y
•
el estado nutricional y cualesquiera riesgos de malnutrición, incluidas las carencias de micronutrientes, entre la población afectada.
2. Definirse la información necesaria para esos análisis. 3. Examinarse los datos de que ya se disponga y detectarse lagunas y los datos que haya que comprobar. Las lagunas y lo que haya que comprobar son los datos que los equipos de evaluación deberán recopilar.
Acuerdo sobre los análisis que se aplicarán
82 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
En el Anexo 3 se enumeran los análisis que hay que realizar, el tipo de información necesaria y las posibles fuentes de esa información para cada uno de los tres temas, más el análisis del contexto. En él se reúnen los cuadros relativos a los análisis e información necesarios de los capítulos 4 a 7. Se examinarán las entradas del análisis en la parte superior de cada cuadro y se determinará si satisfacen las necesidades en la situación en cuestión, o si puede ser necesario adaptarlas. Se intercambiarán ideas con los asociados y se procurará alcanzar un acuerdo sobre cómo se analizará cada uno de los temas de la evaluación que se esté organizando. Esta primera fase es esencial para decidir los datos que habrá que recabar y los métodos que habrá que aplicar, así como para la planificación del propio análisis. Obsérvese que: •
La evaluación de la disponibilidad de alimentos a nivel nacional puede que no sea necesaria en el caso de una catástrofe localizada en una zona que normalmente no contribuye significativamente a la producción alimentaria nacional. Aun así, será importante realizar una evaluación de la situación del suministro alimentario local, que incluya la estabilidad de los suministros y la probabilidad de que se produzca una alteración, en cualquier zona que no esté bien conectada por vías de transporte con otras partes del país.
•
La evaluación y el análisis de los medios de subsistencia y el acceso a los alimentos de los hogares, incluidas sus estrategias de supervivencia, constituyen el eje central de toda ESAE y deben siempre asentarse como mínimo en análisis rápidos de las necesidades no alimentarias esenciales, los mercados y los factores contextuales. La decisión del método que se aplicará para calcular la insuficiencia del acceso a los alimentos de los hogares es fundamental para definir la información que se recabará.
•
La evaluación de la situación nutricional tal vez no sea necesaria (no sea una prioridad) en el caso de una crisis de inicio repentino, a menos que la malnutrición sea ya una preocupación en materia de salud pública antes de la crisis o exista un riesgo de deterioro considerable. Sin embargo, si se requerirá asistencia por un período prolongado, será necesario establecer un valor nutricional de referencia en el plazo de unas semanas y, de ahí en adelante, seguir de cerca el estado nutricional a efectos de presentación de informes.
¿Qué es ‘normal’? En la mayoría de los casos, la situación actual se comparará con lo que se considera normal a fin de determinar el impacto de la perturbación/crisis. No obstante, en algunas situaciones el concepto ‘normal’ puede resultar difícil y poco útil. Cuando por ejemplo viene produciéndose una crisis prolongada durante más de diez años con inseguridad alimentaria grave crónica y altos niveles de malnutrición (emaciación) que fluctúan en función de la estación, o cuando la situación viene deteriorándose gradualmente a lo largo de varios años, puede ser imposible definir una ‘norma’ que sea aceptable o realista para la elaboración de programas de urgencia. Por añadidura, muchos informantes quizá no puedan recordar o identificar un año normal o bueno. En estos casos tendrá que llegarse a una solución que permita comparar la situación actual con una ‘norma’ teórica que se estime adecuada para la zona.1
Definición de la información necesaria: datos que hay que recopilar Una vez se hayan decidido los análisis que se aplicarán, en particular el método que se utilizará para evaluar la insuficiencia del acceso a los alimentos y los factores contextuales que revisten una importancia crítica en la situación imperante, se definirá la información necesaria para completar los análisis previstos en relación con cada uno de los siguientes tres temas: disponibilidad y mercados de alimentos, medios de subsistencia y acceso 1
Véase Harmer A y Macrae J (2004): Beyond the continuum: the changing role of aid policy in protracted crises, informe de investigación del Grupo de Políticas Humanitarias (Instituto de Desarrollo de Ultramar), nº 18, julio de 2004. Los autores señalan que en estas situaciones tal vez convenga reconocer que la situación probablemente no volverá a la normalidad, de modo que los programas de urgencia tendrán que ser indefinidos y no se aplicará ninguna estrategia de retirada viable a menos que se apliquen simultáneamente iniciativas de desarrollo que puedan tener un fuerte impacto.
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 83
a los alimentos y utilización de los alimentos y nutrición. Se incluirá información sobre la situación actual y datos anteriores a la crisis con los que se comparará la situación actual. Se consultará de nuevo el Anexo A3 y se examinarán los tipos de información que suelen requerirse y las fuentes típicas de esa información. Este anexo servirá de referencia para la planificación, aunque se confeccionarán listas específicas para la situación concreta de que se trate. Se examinarán las listas cuidadosamente con todos los asociados que colaboren en la evaluación y se garantizará que: •
se incluyen todos los datos necesarios para los análisis previstos;
•
todos los temas enumerados son necesarios para los análisis previstos —queda claro cómo se utilizarán los datos sobre cada tema—; y
•
resulta evidente cómo y dónde pueden recabarse los datos.
Podría ser provechoso enumerar los temas de los datos en un cuadro de tres columnas en que se especifique el tema de los datos, cómo se utilizarán y cómo y dónde se recabarán. Distintas organizaciones e individuos propondrán la inclusión de nuevos temas. Se rechazará toda propuesta de incluir temas que no parezcan esenciales para los análisis previstos. Algunos asociados pueden albergar preocupaciones más generales que afecten a otros sectores y, en consecuencia, es importante que los responsables de la ESAE colaboren con las evaluaciones que se realicen en otros sectores, evitando reunir datos que no revistan un interés específico para la ESAE. A continuación, se compararán esas listas con la información que hayan aportado los datos secundarios y, así, se determinarán los datos que habrá que recopilar, que incluirán: i) datos sobre la situación actual y su evolución prevista; ii) lagunas en los datos anteriores a la crisis; y iii) determinados datos ya disponibles sobre la situación actual o las situaciones anteriores a la crisis que se quiera cotejar. Esta lista final servirá para adaptar o desarrollar los instrumentos de recopilación de datos en el marco de la Actividad 7 (véase la sección 10.5). Cerciorarse de que se tendrán todos los datos necesarios Al enumerar los datos necesarios (y posteriormente al formular las preguntas que se harán en distintas entrevistas), deberá garantizarse que todos los datos necesarios estarán disponibles cuando se proceda a la fase del análisis. Por ejemplo, si se propone reunir datos sobre las existencias de maíz de la última cosecha deberá contarse con un valor de referencia con el cual puedan compararse las respuestas. Si el 25% de los hogares responde que todavía conservan existencias, esta información tendrá muy poco valor a menos que se sepa cuál es la norma en la época del año en cuestión (p. ej., debería ser el 60%). A menos que se disponga de esa información gracias a los datos secundarios, será necesario también hacer acopio de datos sobre la situación normal, ya sea mediante el mismo cuestionario, ya mediante entrevistas con comunidades o subgrupos.
10.3 Decisión sobre los métodos de recopilación de datos
Proceso de evaluación
Actividad 6b
Producto previsto: Consenso sobre los métodos que se aplicarán para recopilar los datos primarios.
¿Por qué?
Para: i) garantizar que los datos primarios se recaban eficazmente y de manera adecuada dadas las circunstancias locales, y ii) velar porque puedan compararse las conclusiones de distintos equipos de evaluación.
84 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
¿Cuándo?
Tan pronto como se hayan definido las necesidades ligadas al acopio de datos.
¿Por quién?
El PMA y los asociados que participen en la evaluación desde el inicio.
¿Cómo?
Si existe un plan para contingencias detallado, se examinará rápidamente todo lo que haya podido acordarse en relación con los métodos para la recopilación de datos primarios, y se determinará si son adecuados en la situación actual y, de no serlo, se convendrán los métodos que se aplicarán. Si no se han acordado los métodos de recopilación de datos con antelación, se recurrirá a las directrices que figuran más adelante para decidir la combinación idónea de métodos. Se tendrán en cuenta el tiempo y los recursos humanos y de otro tipo disponibles. Se movilizarán rápidamente recursos adicionales, de ser necesarios. En el Cuadro 10-B se muestran posibles métodos. La decisión fundamental consiste en si se aplican solamente técnicas de valoración rápida o si se lleva a cabo también una encuesta sobre hogares.
En toda ESAE rápida se utilizará una combinación de las siguientes técnicas de «valoración rápida» para reunir información sobre la situación en la comunidad: •
entrevistas con informantes clave a nivel nacional, provincial, de distrito y local; y
•
entrevistas con grupos comunitarios en determinadas comunidades (véase el Cuadro 10-C).
Además, normalmente se procurará recopilar datos más detallados sobre la situación de los hogares mediante uno de los siguientes métodos: •
entrevistas con subgrupos en el seno de las comunidades seleccionadas (véase el Cuadro 10-C); o
•
una encuesta sobre hogares rápida basada en una muestra de hogares elegidos mediante muestreo probabilístico.
Cuando se decida cuál de estos métodos se utilizará, se escrutarán las ventajas e inconvenientes resumidos en el Anexo B1, el tiempo y los recursos disponibles y si será posible realizar correctamente una encuesta sobre hogares. En determinadas comunidades podrá organizarse una encuesta sobre hogares rápida (utilizando un cuestionario estructurado) si: •
se dispone de tiempo, aptitudes y otros recursos para planificar y llevar a cabo el acopio, procesamiento y análisis de los datos dentro del plazo de la evaluación; y
•
se dispone de datos suficientes para establecer un marco óptimo para el muestreo probabilístico (véase el Anexo C9) y será posible visitar lugares y hogares elegidos al azar, es decir: no existen obstáculos importantes para acceder a la población de interés.
Podrá efectuarse una encuesta sobre hogares en el marco de una reevaluación durante una operación en curso o la evaluación inicial de una crisis de inicio lento cuando ya existan cuestionarios idóneos ensayados sobre el terreno, así como un cuadro de encuestadores con experiencia en la realización de entrevistas a nivel de los hogares. En otras situaciones, puede ser difícil organizar rápidamente una encuesta sobre hogares, especialmente en una situación de conflicto o cuando las poblaciones han sido recientemente desplazadas. Cuadro 10-B Métodos e instrumentos de recopilación de datos y su uso Método de recopilació n de datos
Encuesta por muestreo (entrevista en hogares)
Entrevista de carácter informal
Debate participativo en profundidad
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 85
Uso
Encuesta sobre los medios de subsistencia/ seguridad alimentaria de los hogares
Tipo de instrumento
Cuestionario estructurado
Guía para las entrevistas de carácter informal
Datos cuantitativos
Datos cuantitativos y cualitativos
Entrevista en hogares con encuesta sobre nutrición ¹
Entrevista con informant es clave
Entrevista con grupos comunitarios ²
Entrevista con subgrupos ²
Grupo de debate ²
Guía sobre los temas de debate Datos cualitativos
Tipo de datos
(algunos cualitativos)
(algunos cuantitativos)
Enfoque (contenido del instrumento )
Preguntas plenamente estructuradas en secuencia lógica, en su mayoría con opciones previamente codificadas
Un número limitado de preguntas abiertas que permite a los participantes debatir cuestiones y procurar el consenso
Nivel de interacción
Bajo
Preguntas cerradas y abiertas en secuencia lógica
Medio
(preguntas y respuestas)
(diálogo entre los informantes y el entrevistador)
Entrevistador Recopilador de datos
¹
²
Encuestador
y una persona encargada de tomar nota de las entrevistas con grupos y subgrupos comunitarios
Alto (debate e intercambio dinámicos de opiniones entre los participantes)
Coordinador y persona encargada de tomar nota
Se trata de entrevistas realizadas conjuntamente con una encuesta antropométrica. Además de recopilar datos sobre salud pública pueden recopilar también información sobre la seguridad alimentaria de los hogares. También se celebran debates en grupo para obtener más información sobre las causas de la malnutrición. Véase el Cuadro 10-C para una explicación de ‘grupo comunitario’ y ‘subgrupo’. La composición de un grupo de debate es la misma que la de un subgrupo.
Cuadro 10-C Grupos y subgrupos comunitarios •
Un grupo comunitario es un grupo mixto que incluye hombres, mujeres y jóvenes de todos los subgrupos de la comunidad (aldea, campamento, barrio urbano).
•
Un subgrupo es un grupo de personas más o menos homogéneo, de condición social similar, procedente de un grupo de subsistencia determinado. Normalmente, se organizan subgrupos distintos para mujeres y hombres.
Los grupos comunitarios pueden aportar datos sobre i) los recursos disponibles, los cambios operados y los procesos que tienen lugar a nivel comunitario (p. ej., impacto sobre los recursos naturales como la tierra y el abastecimiento de agua, las distribuciones de socorro), y ii) las relaciones con instituciones de fuera de la comunidad (p. ej., servicios sociales gubernamentales, ONG o mercados de los distritos). Las reuniones con los grupos comunitarios permiten comprender mejor la influencia mutua entre los distintos grupos de la comunidad. Los subgrupos pueden aportar datos sobre la situación y las perspectivas de los subgrupos concretos representados por los distintos grupos de debate. Pueden incluir datos cuantitativos —como las tierras que posee un hogar «típico» perteneciente al subgrupo— y datos cualitativos como las fuentes de ingresos de un hogar típico, las causas subyacentes de su inseguridad alimentaria y cómo prevén las personas del subgrupo que evolucionará la situación en los próximos meses. Son una buena manera de dialogar con mujeres o grupos marginados, especialmente si esos grupos no se sienten a gusto expresando sus opiniones (e incluso
86 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
participando) en reuniones comunitarias numerosas. El tamaño de los grupos: Un subgrupo debería ser pequeño, normalmente integrado por entre ocho y diez individuos, de modo que sea posible el diálogo en profundidad. Un grupo comunitario tendrá que ser necesariamente mayor, aunque deberá estar limitado a 20 (máximo 30) personas, de ser posible. Podrán tratarse varios temas, si bien ninguno a fondo. Aptitudes y conocimientos necesarios: Se requieren los mismos conocimientos y aptitudes en materia de coordinación para realizar todas las entrevistas/debates con grupos. También será fundamental contar con experiencia en la aplicación de técnicas participativas específicas. Véase el Anexo C3 para obtener más directrices al respecto.
10.4 Decisión sobre el plan (y el procedimiento) de muestreo
Proceso de evaluación
Actividad 6c
Producto previsto: Acuerdo sobre los métodos de muestreo que se aplicarán para recopilar los datos primarios.
¿Por qué?
Para: i) posibilitar conclusiones válidas y fiables relativas a la población de interés y/o sus subgrupos, y ii) velar porque puedan compararse las conclusiones de distintos equipos de evaluación.
¿Cuándo?
Tan pronto como se hayan decidido los métodos de recopilación de datos.
¿Por quién?
El PMA y los asociados que participen en la evaluación desde el inicio.
¿Cómo?
Si existe un plan para contingencias detallado, se examinará rápidamente lo que haya podido acordarse en relación con el método y los procedimientos de muestreo, se determinará si son adecuados en la situación actual y, de no serlo, se llegará a un acuerdo sobre el método y los procedimientos que se aplicarán. Si no se ha acordado un método y procedimientos de muestreo con antelación, se utilizarán las directrices que figuran más adelante y se pedirá la opinión/orientación de expertos en muestreo para decidir el método y los procedimientos adecuados. Se tendrá en cuenta el tiempo y los recursos humanos y de otro tipo disponibles. Se movilizarán rápidamente otros recursos si los que existen no son suficientes para abarcar una muestra suficientemente amplia que permita confiar en las conclusiones. De lo contrario, se revisarán los datos necesarios (definidos en el marco de la Actividad 6a) y los métodos acordados (en el marco de la Actividad 6b).
Independientemente de si se aplican únicamente técnicas de valoración rápida o se realiza también una encuesta rápida sobre hogares, deberá adoptarse un procedimiento de muestreo que permita confiar en la posibilidad de obtener una visión y unos conocimientos razonablemente exactos de la situación del conjunto de la población afectada y/o de los subgrupos específicos identificados deliberadamente en ella. Esto no se logrará, por ejemplo, si se visitan solamente las aldeas cercanas a la carretera principal o si se entrevista únicamente a las personas que hablan un determinado idioma. Hace falta un procedimiento para seleccionar los lugares que se visitarán y las personas que participarán en las entrevistas con informantes clave y grupos, así como los hogares que se incluirán en la encuesta rápida sobre hogares. En el Cuadro 10-D (que reproduce el Cuadro 3-I del Capítulo 3) figuran los métodos de muestreo generalmente utilizados con determinados métodos de recopilación de datos. El muestreo probabilístico se emplea para seleccionar una muestra de lugares y/u hogares de entre un conjunto mayor que representa características concretas de la zona y población afectadas. De esta manera se reduce la probabilidad de que se tergiversen los
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 87
datos conscientemente (para favorecer un programa específico) o inconscientemente (como consecuencia de ideas preconcebidas). El muestreo intencional se emplea para asegurar que las diversas condiciones presentes en la zona se plasman en la muestra y/o para distinguir distintos grupos en la población y reunir datos de ellos por separado. Los conocimientos especializados necesarios para formular un plan de muestreo adecuado dependen de la situación y los métodos de recopilación de datos que se apliquen. El proceso es relativamente sencillo en el caso de una ESAE que se sirva de técnicas de valoración rápida, aunque aun así deberá tenerse cuidado. Es mucho más complicado cuando se trata de una encuesta sobre hogares, especialmente si la población es heterogénea o el impacto de la perturbación/crisis varía a lo largo y ancho de la zona afectada. Cuanto más compleja sea la situación (o cuando tengan que hacerse concesiones en razón de las limitaciones de tiempo y recursos), más conocimientos especializados en estadística y experiencia en el diseño de encuestas se necesitarán para formular un plan de muestreo adecuado. La mayor parte de los errores que se comete durante el muestreo no puede corregirse en la fase de análisis, de modo que antes de adoptar cualquier decisión sobre el muestreo deberá movilizarse a expertos competentes.
Cuadro 10-D Métodos de muestreo utilizados normalmente con determinados métodos de recopilación de datos Técnicas de valoración rápida
Encuesta por muestreo
Selección de lugares
Selección de grupos
Selección de informante s clave
Visitas aleatorias a los hogares
Selección de lugares o sublugares
Selección de hogares
√
-
-
√
√√
√√
Muestreo probabilístico •
Muestreo aleatorio simple, aleatorio sistemático o en dos etapas ¹
Muestreo no probabilístico •
Muestreo intencional
√√²
√√
√√
√³
√²
-
•
Muestreo acumulativo rápido
-
-
√
√³
-
-
¹
²
³
√√ = método de muestreo utilizado con más frecuencia (o siempre). √ = método de muestreo utilizado a veces. El método concreto de muestreo probabilístico utilizado depende de la información disponible sobre la población de interés —véase el Anexo C9—. En la práctica, la mayoría de las encuestas sobre hogares realizadas en el marco de una ESAE se basan en el muestreo en dos etapas. El muestreo intencional se utiliza en la primera etapa de un proceso de muestreo en dos etapas cuando la zona y/o la población es heterogénea o el impacto de la crisis varía entre las zonas afectadas, y hay que garantizar la inclusión de todos los tipos de zona o grupo de población, o se quiere poder distinguirlos y compararlos entre sí. Los hogares para las visitas aleatorias pueden seleccionarse intencionalmente cuando la finalidad sea observar la situación de un tipo de hogar específico y predeterminado. Cuando se haya visitado uno o dos hogares, los demás podrán identificarse mediante el muestreo acumulativo rápido. Sin embargo, si la finalidad es cotejar el panorama general obtenido gracias a otros análisis, deberá utilizarse el muestreo probabilístico.
Fases de la formulación de un plan de muestreo Existen seis fases importantes en la elaboración de un plan de muestreo para una ESAE, como se muestra en el Diagrama 10d. En el Anexo C9 se facilitan directrices detalladas y prácticas para cada fase. En el Anexo C8 se explican los conceptos básicos del muestreo.
88 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
Diagrama 10d
Proceso de adopción de decisiones sobre el plan de muestreo
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 89
Fase 1: Definición del tipo y tamaño de la población de interés (unidad de muestreo y universo del muestreo)
Fase 2: Preparación de una lista y/o mapa de todos los posibles lugares de muestreo Fase 3: Examen del nivel de homogeneidad/heterogeneidad de la población de interés
Cuando la población es homogénea y el impacto de la perturbación/crisis es parecido en todas las zonas
Encuesta sobre hogares (combinada con técnicas de valoración rápida)
Cuando la población es heterogénea o el impacto de la perturbación/crisis es diferente en distintas zonas
Fase 3a: División de la población de interés en subgrupos (estratificación)
Técnicas de valoración rápida solamente
Fase 4a: Decisión sobre el método de muestreo y determinación del número de lugares que se abarcará y de hogares que se entrevistará
Fase 4b: Determinación del número de lugares que se abarcará y de grupos que se entrevistará
(método de muestreo y tamaño de la muestra)
(tamaño de la muestra)
Fase 5a: Selección de lugares para la muestra (p.ej. aldeas, barrios, campamentos)
mediante muestreo probabilístico (1ª etapa del muestreo)
Cuando el lugar es grande en cuanto al tamaño de la población o la zona geográfica
Fase 5b: Selección de lugares para la muestra (p.ej. aldeas, barrios, campamentos)
mediante muestreo intencional (no probabilístico) (1ª etapa del muestreo)
Cuando el lugar es pequeño en cuanto al tamaño de la población o la zona geográfica
Fase 6a: Selección de hogares para la muestra mediante muestreo probabilístico (2ª/3ª etapa del muestreo)
Fase 5aa: Selección de sublugares (p.ej. caseríos, cuadras)
mediante muestreo probabilístico (2ª etapa del muestreo)
Fase 6b: Selección de informantes clave y formación de grupos para entrevistas mediante muestreo intencional (2ª/3ª etapa del muestreo)
Fase 6c: Selección de hogares para visitas aleatorias mediante muestreo intencional (y acumulativo rápido)
90 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
Las primeras tres fases son las mismas en cada ESAE: 1. Definición de la población de interés (conocida como ‘universo del muestreo’) y obtención de un cálculo aproximado del número total de personas concernidas. Puede tratarse de la población total de la zona afectada por la perturbación/crisis, los refugiados en una zona concreta o, en una situación de conflicto en que determinadas zonas son inaccesibles, la población de la zona que sea accesible. 2. Preparación de una lista y/o mapa de todos los posibles «lugares de muestra» (que establece el «marco de la muestra»). Se trata de las unidades de menor nivel para los que existen datos de población, por ejemplo aldeas, barrios urbanos o campamentos de refugiados o personas desplazadas, y deberán incluir cálculos aproximados de la población (número de hogares y/o personas) en cada una de ellos. 3. Determinación de si la población es razonablemente homogénea y/o los efectos de la perturbación/crisis son parecidos en líneas generales en toda la zona de interés, o si es necesario distinguir distintos subgrupos («estratificar» la población) y evaluar su situación y sus necesidades por separado (véase la siguiente subsección). Las siguientes tres fases —en las que se adopta una decisión sobre los métodos de muestreo, se determina el tamaño de la muestra, se selecciona los lugares y se elige a quién se entrevistará— entrañan distintas opciones en función de si se lleva a cabo una encuesta sobre hogares (complementada con algunas entrevistas con informantes clave y grupos) o si la ESAE se basa enteramente en técnicas de valoración rápida (entrevistas con informantes clave y grupos). En ambos casos, el tamaño de la muestra y el proceso de selección tendrán que ser parecidos en cada subgrupo distinto de la población, si se ha decidido en la fase 3 que esa diferenciación (llamada «estratificación») es necesaria. Por este motivo, tal vez sea necesario limitar el número de subgrupos que habrá que distinguir y encontrar un punto intermedio entre lo que podría ser deseable y lo que puede ser factible. Las subsecciones que figuran a continuación incluyen breves observaciones sobre el proceso y un perfil de las cuestiones relativas a dos decisiones que son fundamentales en todos los casos: 1) si es necesario distinguir entre distintas subzonas o subgrupos dentro de la zona o población total (fase 3); y 2) el tamaño de la muestra adecuado (fase 4). Se va a organizarse una encuesta sobre hogares, la elección del método de muestreo también será decisiva (fase 4a). En el Diagrama 10e se figura un árbol de decisiones. Si hay que distinguir entre diferentes subzonas o subgrupos de población, habrá que aplicar el mismo método de muestreo a cada subzona o subgrupo. Diagrama 10e sobre hogares
Elección del método de muestreo adecuado para una encuesta
¿Se dispone de una lista completa de todos los hogares de la población o puede confeccionarse fácilmente? No
Sí
¿Se dispone de una lista completa de todas las comunidades (aldeas, barrios o campamentos) o puede confeccionarse fácilmente? No Muestreo en dos etapas
Sí Muestreo por conglomerados o muestreo por conglomerados en dos etapas
Muestreo aleatorio simple o muestreo sistemático
[Adaptado de las directrices temáticas del enfoque analítico de VAM, Muestreo, PMA-ODAV 2005]
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 91
En muchas ESAE rápidas no puede disponerse rápidamente de listas completas y se utiliza el muestreo en dos etapas. El muestreo por conglomerados o sistemático puede ser aplicable en algunos campamentos de personas desplazadas. El método elegido y el mismo tamaño de la muestra se aplicarán a cada subgrupo de población, en el caso de que se estratifique la población. Cuando se recurra al muestreo en dos etapas, el muestreo no probabilístico a veces puede aplicarse a la primera fase del muestreo para seleccionar los lugares (p. ej., cuando no puede disponerse de un marco de muestreo como una lista o mapa, o cuando sea difícil construir uno). Aun así, debe hacerse todo lo posible por construir un marco de muestreo fiable que permita el muestreo probabilístico. En la segunda etapa del muestreo, los hogares o individuos deben seleccionarse con arreglo al muestreo probabilístico. Decisión de si conviene distinguir entre zonas o grupos: estratificación (fase 3) Para determinar si la zona y población afectadas deberían examinarse como una única entidad o si las distintas zonas y/o grupos de la población deberían examinarse (evaluarse) por separado, deberá responderse a las siguientes preguntas: a) Homogeneidad/heterogeneidad: ¿Es la población en su mayoría homogénea o heterogénea? ¿Se han dejado sentir de modo más o menos parecido los efectos de la perturbación/crisis en toda la zona o varían considerablemente de una localidad (lugar) a otra o entre grupos distintos de la población? ¿Pueden clasificarse zonas y grupos en consecuencia? b) Necesidad de distinguir/comparar: ¿Es necesario, o sería conveniente, distinguir y comparar las diferentes categorías? c) Viabilidad: ¿Se dispone de tiempo y de recursos humanos y logísticos suficientes para aplicar un procedimiento de muestreo que permita hacer comparaciones válidas? En el caso de que haya que hacer concesiones en los procedimientos de muestreo (en especial con el tamaño de la muestra, véase infra), ¿será posible sacar conclusiones válidas? Si se decide que es necesario un determinado grado de diferenciación (denomino ‘estratificación’), deberán definirse las categorías que se emplearán y acto seguido asignarse los lugares/comunidades de la zona afectada a las diversas categorías/estratos (véase el Cuadro 10-E para obtener ejemplos). Al estratificar de esta manera se asegura que todas las categorías se incluyen en la muestra y, si se aplica un procedimiento de muestreo adecuado, puede hacerse un cálculo general más exacto o, si el tamaño de la muestra de cada categoría es también adecuado, hacerse comparaciones entre las distintas categorías (véase el Cuadro 10-F).
Cuadro 10-E Ejemplos de categorías que diferencian zonas o lugares/comunidades Zonas geográficas
Características agroecológicas; principales actividades de subsistencia («zonas de subsistencia»); jurisdicciones administrativas, distancia del centro de la perturbación.
Lugares/comunidades
Para la población residente: distancia de las carreteras; cercanía a zonas urbanas; acceso a los mercados; principales estrategias de supervivencia o, especialmente en situación de conflicto, identidades étnicas, religiosas o políticas predominantes. Para las personas desplazadas (refugiados o personas desplazadas en el interior del país): cercanía a las zonas urbanas; diferencias étnicas; acceso a las tierras agrícolas u otros recursos naturales, el empleo, los mercados u otras fuentes de sustento (alimentos e ingresos).
Cuadro 10-F ¿Por qué conviene estratificar? Existen dos razones distintas para estratificar una población heterogénea: 1.
Para obtener un cálculo más exacto del conjunto de la población mediante la composición de una muestra en la que cada categoría esté representada en proporción a su tamaño (es decir: si las familias de pescadores constituyen el 20% de la población total de la zona, también representarán el 20% de la muestra).
2.
Para obtener cálculos independientes para cada categoría distinta y poder compararlos entre sí;
92 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
la muestra de cada zona o grupo distintos tendrá que incluir el mismo número de hogares, como se requeriría en el caso del conjunto de la zona o población si no se hicieran comparaciones.
Ejemplo
Estratificación de una ESAE rápida realizada en una situación de sequía en Kenya (2004) El estudio del PMA realizado en Kenya para abordar la vulnerabilidad a la inseguridad alimentaria empleó un sistema de muestreo basado en tres estratos: 1.
Se analizaron los datos secundarios para identificar y caracterizar los distritos más vulnerables, a partir de los cuales se elaboraron los perfiles de la seguridad alimentaria en las comunidades.
2.
En cada uno de estos distritos se determinaron zonas de subsistencia.
En cada zona de subsistencia, se eligió al azar una serie de comunidades para la muestra y se les hicieron entrevistas.
Ejemplo
Estratificación en una encuesta realizada en campamentos de refugiados La misión de evaluación realizada conjuntamente entre la ACNUR y el PMA en el Sudán oriental en 2003 permitió distinguir: •
campamentos «basados en la tierra» en que los refugiados tenían acceso a la tierra y podían explotarla;
•
campamentos «basados en los salarios» cercanos a zonas urbanas en que los refugiados pudieron encontrar trabajo;
•
campamentos de acogida en que se alojaba a los nuevos refugiados, aunque contaban con pocos o ningún medio de subsistencia.
Determinación del tamaño de la muestra: número de lugares que se abarcará y de entrevistas que se realizará (fase 4) Independientemente de los métodos aplicados para la recopilación de datos y el muestreo, el tamaño de la muestra debe estar claramente justificado —un cálculo en el caso del muestreo probabilístico o una base lógica en el del muestreo no probabilístico—. Para las ESAE rápidas basadas en técnicas de valoración rápida no hay una fórmula para calcular el tamaño necesario de la muestra. Es necesario seguir hasta que se estime que se dispone de un cuadro razonablemente preciso de la situación de cada zona geográfica o grupo de población de interés. Cuanto más heterogénea sea la zona o población de que se trate, más serán los lugares y hogares que tendrán que incluirse en la muestra (y mayor será la importancia de la triangulación entre las distintas fuentes de información). Cuando las deliberaciones con grupos procedentes de un tipo concreto de zona y grupo de población —los que reúnan una serie de características particulares comunes— comiencen a proporcionar un cuadro coherente, entonces podrá considerarse que se dispone de todo lo necesario. La experiencia demuestra que para cada grupo socioeconómico por zona de subsistencia deberá completarse un mínimo de entre 6 y 8 (preferiblemente entre 8 y 12) entrevistas con subgrupos2. Normalmente, esto supone visitar el mismo número de aldeas por zona, como se muestra en el Cuadro 10-G. En la práctica, el número de lugares y de unidades en cada lugar que puede abarcarse depende del número de equipos, el tamaño de esos equipos y el tiempo disponible (véase la sección 9.7). Deberá tratarse de movilizar un número suficiente de equipos y miembros de equipo para abarcar una cantidad suficiente de lugares. En algunos casos, tendrán que hacerse concesiones y calcular el número de lugares y hogares que podrán abarcarse con los recursos y el tiempo disponibles, aunque entonces tendrá que irse con mucho cuidado en cuanto a extrapolar las conclusiones al conjunto de la población. En el Cuadro 10-G se indica el número de lugares y entrevistas que de ordinario hace falta para efectuar una ESAE basada en técnicas de valoración rápida (sin llevar a cabo una encuesta sobre hogares). La experiencia indica que se requiere un mínimo de entre 6 y 8 entrevistas con grupos para cada zona o grupo de población distintos. 2
Fuente: Food Security Analysis Field Kit (Estuche de campaña para el análisis de la seguridad alimentaria), PMA-Food Economy Group, Dependencia de Apoyo Técnico, Sierra Leona, 2002.
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 93
Cuadro 10-G Números recomendados de lugares y entrevistas para una ESAE que emplee solamente técnicas de valoración rápida (sin encuesta sobre hogares) Número de subgrupos de población
Número de lugares
Número de entrevistas con grupos por lugar
Número total de entrevistas con grupos ¹
1
3a4
2
6a8
2
6a8
2
12 a 16
3
9 a 12
2
18 a 24
4
12 a 16
2
24 a 36
5
15 a 20
2
30 a 40
6
18 a 24
2
36 a 48
¹ Se recomienda un mínimo de entre 6 y 8 entrevistas con subgrupos (y/o entrevistas con informantes clave) por cada zona o grupo de población distintos. Aun así, será necesario realizar más entrevistas si la información obtenida mediante las primeras 6 a 8 entrevistas no ofrece un panorama coherente o si se plantean nuevas cuestiones durante el acopio de datos (p. ej., como consecuencia de las primeras entrevistas) que requieran corroboración.
En el caso de las encuestas sobre hogares, el tamaño de la muestra depende de varios factores, entre los que cabe mencionar la proporción o el promedio de lo que se intenta medir, la precisión requerida y el método de muestreo aplicado. No guarda relación con el tamaño de la población, a menos que el número total sea relativamente reducido (unos miles de hogares o menos). En el Cuadro 10-H se presentan posibles tamaños de muestra para las ESAE rápidas que apliquen el muestreo en dos etapas. Los tamaños de muestra recomendados están sombreados y aportan una precisión de ±10% o mayor, en función de la proporción de lo que se esté midiendo. Cuadro 10-H
Número de lugares y muestras (hogares) para las encuestas sobre hogares 1
Número de subgrupos
1 La población es homogénea y el impacto de la perturbación/crisis es en líneas generales el mismo en todas las zonas geográficas objeto de la evaluación.
2
Para el muestreo en dos etapas ¹
Recomendado
Concesión Mínimo
2³ Hay dos grupos de subsistencia o socioeconómicos distintos, o
Recomendado
Concesión
dos zonas geográficas donde el impacto de la perturbación/crisis es distinto.
3
Número total de muestras (n)
4
5
Número de lugares
Número de muestras por lugar ²
(seleccionados en la fase 4)
(seleccionados en la fase 6a)
30
7
25
9
20
11
30
5
25
6
20
8
100
20
5
420
30×2 = 60
7
(210 por cada subgrupo)
25×2 = 50
9
20×2 = 40
11
300
30×2 = 60
5
(150 por cada subgrupo)
25×2 = 50
6
20×2 = 40
8
20×2 = 40
5
210
150
200 Mínimo
(100 por cada subgrupo)
94 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
¹ La mayoría de las encuestas sobre hogares realizadas en el marco de una ESAE se basa en el muestreo en dos etapas. En el caso de que se aplique el muestreo en una única etapa, el número total de hogares pasaría a ser la mitad de las cifras mostradas, o sea: recomendado 105 y mínimo 50 por cada subgrupo. ² Deberá entrevistarse a un mínimo absoluto de cinco hogares por lugar. ³ Si hay tres subgrupos, el tamaño total de la muestra y el número de lugares se calcularán multiplicando por tres el número de muestras (tercera columna) y el número de lugares (cuarta columna) para un subgrupo. Si hay cuatro subgrupos, se multiplicará por cuatro, etc.
Cuando la población es heterogénea o el impacto de la perturbación/crisis sobre la seguridad alimentaria es distinto en distintos subgrupos de subsistencia (o socioeconómicos), o cuando el impacto de la perturbación/crisis es distinto en distintas zonas geográficas, la población de interés deberá dividirse en subgrupos (estratos) —la fase 2a del proceso esbozado en el Diagrama 10d— y se elegirá el mismo número de lugares (se recomiendan 30) y hogares (se recomiendan 210) en el seno de cada subgrupo. Si no fuera posible abarcar ese número de lugares y hogares en cada subgrupo, se consultará a un experto en muestreo de la oficina regional o la sede —en la Dependencia de Evaluación de las Necesidades de Urgencia (ODAN) o la Dependencia de Análisis y Cartografía de la Vulnerabilidad (VAM)— para obtener asesoramiento técnico sobre cómo actuar. Ejemplo
Estratificación en la ESAE rápida que se realizó tras la catástrofe del tsunami en Indonesia (enero de 2005)
La evaluación se sirvió de dos niveles de estratificación, uno basado en la distancia de la costa y el otro en las características agroeconómicas. 1) Estratificación basada en la distancia de la costa: •
comunidades situadas a menos de 1 kilómetro de la costa (alta probabilidad de verse directamente afectadas);
•
comunidades situadas entre 1 y 10 kilómetros de la costa (probabilidad moderada de verse afectadas); y
•
comunidades situadas a más de 10 kilómetros de la costa (baja probabilidad de verse indirectamente afectadas). Según se informó, la distancia máxima a la que llegó el tsunami tierra adentro fue de 10 kilómetros.
2) Estratificación basada en zonas agroecológicas (zonas rurales que se caracterizan por pautas de explotación de la tierra y sistemas de subsistencia/agrícolas diferentes y que se seleccionan mediante datos por satélite —teleobservación— y estadísticas gubernamentales): •
Agricultura 1: cultivo del arroz en tierras bajas
•
Agricultura 2: cultivo intensivo mixto en tierras altas
•
Explotación forestal: medios de subsistencia basados en los bosques
•
Pesca 1: pesca de altura
•
Pesca 2: piscicultura continental
•
Actividades urbanas
En cada una de las zonas antes mencionadas, se seleccionaron tres localidades con alta densidad de población —aldeas, campamentos para personas desplazadas en el interior del país, distritos urbanos—: uno a menos de 1 kilómetro de la costa, otro entre 5 y 10 kilómetros y otro a más de 10 kilómetros de la costa. El estudio no pretendía ser representativo. La selección intencional de los lugares tenía por finalidad ahorrar tiempo y a la vez aportar suficiente información para calcular el número aproximado de personas damnificadas, el grado en que habían sido damnificadas y los mecanismos de recuperación y supervivencia de los hogares.
10.5 Diseño/adaptación de los instrumentos de recopilación de datos
Producto previsto: Instrumentos de recopilación de datos adaptados a las necesidades de la situación particular (en especial a las aptitudes y conocimientos del personal que se encarga de recopilar los datos sobre el terreno) y que faciliten el registro exacto y sistemático de los datos y su procesamiento y análisis.
Proceso de evaluación
Actividad 7
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 95
¿Por qué?
Las necesidades de recopilación de datos varían en función de la situación particular y de los datos ya disponibles (véase la sección 10.2); las preguntas deben adaptarse a la situación local y a la capacidad de los entrevistadores o encuestadores. Los instrumentos de recopilación de datos deben, en consecuencia, acomodarse a cada evaluación.
¿Cuándo?
Los instrumentos deberán elaborarse (o adaptarse) tan pronto como se haya determinado la información necesaria, y perfeccionarse tras su ensayo sobre el terreno.
¿Por quién?
Un grupo de trabajo reducido integrado por funcionarios del PMA y asociados que participen en la evaluación desde el inicio.
¿Cómo?
1. Se enumerarán los distintos tipos de entrevista para los que se necesitan instrumentos. 2. Se enumerarán los datos que habrá que recabar en cada tipo de entrevista. 3. Se adaptarán o prepararán instrumentos: se examinarán los instrumentos que ya existen, de haberlos, gracias a los planes para contingencias o a evaluaciones anteriores y se adaptarán según sea necesario, o se prepararán instrumentos nuevos. 4. Todos ellos se traducirán y ensayarán sobre el terreno.
Lista de los distintos tipos de entrevista para los que se necesitan instrumentos Todas las ESAE rápidas necesitarán guías para la realización de entrevistas de carácter informal específicas para: •
las entrevistas con funcionarios y otros informantes clave en los planos provincial y de distrito; se especificará la lista básica de informantes clave que todos los equipos de evaluación deberían procurar entrevistar, utilizando el Cuadro 10-J como guía;
•
los instrumentos para los estudios del mercado;
•
las entrevistas con dirigentes comunitarios, extensionistas, ONG y otros informantes clave a nivel comunitario; se especificará una lista básica que incluya a los tipos concretos de extensionistas y otros informantes clave; y
•
las entrevistas con grupos comunitarios, es decir: grupos que incluyan a individuos en representación, en la medida de lo posible, de los distintos subgrupos de la población (véase el Cuadro 10-C). Se especificarán los distintos tipos de grupos de los cuales se estime conveniente recabar distintos tipos de datos.
Si se va a realizar una encuesta rápida sobre hogares, se precisará también un cuestionario sobre hogares estructurado. En cualquier caso, se estudiarán los varios grupos de subistencia existentes en la población afectada y si se necesitarán instrumentos distintos para recopilar los datos relativos a los diferentes grupos, como agricultores, pastores, poblaciones urbanas y personas desplazadas.
Cuadro 10-I Informantes clave típicos a nivel provincial y de distrito (y datos necesarios) Informantes clave Jefe de la administración provincial o del distrito
Tema de los datos necesarios Su descripción de: lo ocurrido; las principales características de la situación actual; las causas subyacentes, incluidas las relaciones
96 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
de poder entre los distintos grupos; los principales problemas de tipo práctico, en especial de logística y seguridad (si procede); y datos sobre la población que incluyan el número de personas desplazadas (si las hubiere). Especialistas sectoriales: los funcionarios encargados de los departamentos de agricultura, ganadería, pesca, recursos hídricos, trabajo, economía, transporte, carreteras, bienestar social, salud, los institutos de investigación en estos sectores, etc.
Datos secundarios y sus opiniones profesionales sobre: los efectos a corto y largo plazo de la perturbación/crisis; la situación actual, las causas subyacentes, cómo es probable que evolucione la situación y los principales riesgos; los problemas importantes y las posibilidades de solucionarlos y fomentar la recuperación.
El sector privado/comercial: comerciantes; transportistas; cámara de comercio local; asociaciones de empresarios, comerciantes, molineros, etc.
Sus perspectivas sobre: los efectos a corto y largo plazo de la perturbación/crisis sobre la producción alimentaria, el empleo, el comercio (especialmente el flujo de alimentos básicos de los productores a los consumidores) y los precios.
Asociaciones y ONG locales: asociaciones de mujeres; cooperativas, etc.
Sus perspectivas sobre: el impacto y la capacidad de recuperación de los distintos grupos; las causas subyacentes de los problemas; las posibilidades de solucionar los problemas inmediatos y de fondo y fomentar la recuperación.
Funcionarios del PMA, otro personal de las Naciones Unidas y ONG que trabajen en la zona afectada (o las zonas afectadas).
Datos secundarios y sus experiencias y opiniones sobre: lo que ha ocurrido; los efectos a corto y largo plazo de la perturbación/crisis sobre la seguridad alimentaria y los medios de subsistencia; las causas subyacentes, incluidas las relaciones de poder entre los distintos grupos; los principales problemas y las posibilidades de darles solución.
Lista de la información que hay que recabar durante cada tipo de entrevista Sobre la base de las necesidades relativas al acopio de datos definidas en el marco de la Actividad 6 (véase la sección 10.3), se enumerará la información que deberá recabarse de los distintos informantes clave y grupos. En el Cuadro 10-J figuran las preguntas básicas que a menudo debe formularse a los informantes clave a nivel provincial, de distrito y comunitario. En los cuadros 10-K y10-L se indican los tipos de datos que a menudo hay que recabar en las entrevistas con grupos comunitarios y las entrevistas con subgrupos, respectivamente. Estos cuadros se utilizarán como guías, aunque se prepararán otras listas basadas en la situación local y la correspondiente información específica necesaria. Algunas de las preguntas que se repitan en las listas se formularán a varios interlocutores para triangular entre distintas fuentes. Se incluirán también preguntas para cotejar los datos secundarios de que ya se dispone. No obstante, se procurará mantener esas duplicaciones al nivel mínimo necesario para la triangulación y el cotejo.
Cuadro 10-J Preguntas básicas para todos los informantes clave En todas las situaciones: • Cifras relativas a la población (número de personas, hogares, datos demográficos exhaustivos e importantes, como el número de niños pequeños y hogares encabezados por mujeres); • Los principales subgrupos (socioeconómicos, étnicos o políticos) de la comunidad; • ¿De qué datos se dispone sobre la situación anterior a la crisis? ¿Cuáles son las causas subyacentes de la crisis? • ¿Cuál es la situación actual? ¿Cómo se prevé que evolucionarán las cosas? ¿Por qué? ¿Qué factores podrían influir en la evolución de la situación?
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 97
• ¿Qué ha cambiado (en relación con el suministro alimentario, los mercados, los medios de subsistencia, el acceso a los alimentos y su utilización por los hogares, el estado nutricional)? ¿Por qué? • ¿Cómo se recuperan la población, las comunidades y las instituciones locales? ¿A qué estrategias se recurre para sobrevivir? ¿Qué ocurriría si no se prestara asistencia? ¿Por qué? • ¿Qué zonas y grupos se ven más gravemente afectados? ¿Por qué? ¿Quién se beneficia de la situación actual? • ¿Cuáles son los obstáculos y los futuros riesgos para los medios de subsistencia? • ¿Qué posibilidades existen de proteger y apoyar los medios de subsistencia y reforzar los esfuerzos de la población y las comunidades por subsistir y recuperarse? ¿Cuáles son los obstáculos? ¿Por qué? ¿Qué puede hacerse para reducir o superar los obstáculos? • ¿Existen factores específicos (de seguridad, políticos, culturales o de otro tipo) que influyan en la situación de la que hay que estar informado? • ¿Dónde debería ir el equipo para comprender cabalmente la situación y sus necesidades concomitantes? ¿Con quién más debe hablarse? y, en el caso de la población desplazada: • ¿Cuántas personas han sido desplazadas? ¿Por qué? ¿Dónde están? ¿Cuándo puede preverse que vuelvan a sus hogares? • ¿Cómo subsisten mientras tanto? ¿Cómo obtienen actualmente los alimentos, los ingresos y el suministro y los servicios no alimentarios esenciales? • ¿Cuál es la relación entre la población desplazada y la población de acogida? ¿Cuáles son las consecuencias para ambos grupos? y, en el caso de que algunas zonas sean inaccesibles: • ¿Qué se sabe de la situación en las zonas cercanas que actualmente son inaccesibles? ¿De dónde procede la información? ¿Cuán fiable es? • ¿Entran o salen alimentos y otros productos de estas zonas? • ¿Cuáles son las perspectivas de acceder a esas zonas para evaluar la situación o prestar asistencia, en caso de que se necesite?
Cuadro 10-K Temas típicos de las entrevistas con grupos comunitarios • Cuál ha sido el impacto en los medios de subsistencia, y qué se necesita para ayudar a la recuperación; • Cómo hacen frente a la situación actual la comunidad en su conjunto y los distintos subgrupos en su seno; • Las posibilidades y prioridades para el restablecimiento de los medios de subsistencia, el suministro alimentario y los sistemas de distribución y comercialización; principales obstáculos; • Consideraciones estacionales: cuáles son las principales preocupaciones en relación con la plantación, la cosecha y otras actividades estacionales en los meses venideros, así como los riesgos para la salud; • Si todos tienen un acceso inocuo a los alimentos básicos y a los alimentos adecuados para los niños pequeños y otras personas dependientes, como los enfermos y ancianos; • Si todos tienen acceso a suficiente agua y combustible para cocinar y pueden preparar alimentos para toda la familia y los niños pequeños; y
98 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
• De qué riesgos es consciente la comunidad y le preocupan (p. ej., riesgos para la salud debidos a las condiciones insalubres; peligro de nuevas catástrofes o conflictos; problemas de inseguridad).
Cuadro 10-L Temas típicos de las entrevistas con subgrupos • Cómo vivían los hogares de este subgrupo antes de la perturbación/crisis (sus medios de subsistencia, principales fuentes de alimentos e ingresos, principales gastos); • Cómo y por qué ha afectado la perturbación/crisis a sus medios de subsistencia (incluidos sus principales bienes), fuentes de alimentos e ingresos y gastos; • Las perspectivas de recuperación: cuándo prevén que se recuperarán sus medios de subsistencia; los requisitos previos para la recuperación; • Qué consumen en la actualidad; sus actuales fuentes de alimentos e ingresos; cómo prevén que cambiarán las cosas en las próximas semanas; • Qué apoyo reciben a través de sus redes de seguridad social y cómo ha afectado la perturbación/crisis a esas redes; • Cómo preparan los alimentos en la actualidad: si gozan de un acceso inocuo a agua suficiente y de los medios para preparar y cocinar los alimentos; y • Las prioridades actuales de las personas de este subgrupo de población.
Adaptación o desarrollo de los instrumentos de recopilación de datos Cada instrumento se ajustará a las necesidades concretas de la situación y se traducirá al idioma local. Véase el Anexo C6 para obtener directrices específicas sobre el diseño de un cuestionario estructurado para las encuestas sobre hogares y el Anexo C7 para el diseño de las guías para las entrevistas. Al diseñar instrumentos para las entrevistas de carácter informal (o los debates en grupo) deberá estudiarse cuidadosamente el tipo de datos que se pretende recopilar y los conocimientos y aptitudes que deberá tener el personal encargado de su recopilación. Estos dos aspectos determinarán la elección entre dos tipos de instrumentos distintos: •
Listas breves de temas, que presentan un número limitado de preguntas abiertas para alentar a los participantes a debatir cuestiones y procurar el consenso; o
•
Guías para la realización de entrevistas de carácter formal, que ofrecen una mezcla de preguntas cerradas y abiertas en secuencia lógica, así como un modelo para que el encargado de tomar nota pueda registrar lo que se dice.
El método de la lista de temas a menudo se emplea en los debates en grupo que se celebran en el ámbito del desarrollo. En el marco de una ESAE, puede ser adecuado cuando la entrevista con grupos complementa una encuesta sobre hogares y tiene por finalidad proporcionar datos sobre perspectivas y opiniones que refuercen los datos más cuantitativos reunidos mediante el cuestionario dirigido a los hogares. Sin embargo, si en una evaluación rápida se aplican solamente técnicas de valoración rápida, se requerirán entrevistadores/coordinadores altamente cualificados para: i) orientar las deliberaciones sobre la base de preguntas abiertas y recabar los datos específicos necesarios sobre el acceso a los alimentos, el consumo y las estrategias de resistencia de los hogares; y después ii) analizar esos datos. El método de la guía para la realización de entrevistas de carácter formal hace posible que las entrevistas con grupos y el acopio de la información esencial corra a cargo de entrevistadores capacitados, aunque no altamente cualificados. Facilita asimismo la trascripción de las notas en hojas de análisis. (Pueden encontrarse «guías» de muestra de este tipo en el CDROM.)
Se utilizarán los instrumentos existentes cuando se disponga de modelos adecuados de evaluaciones anteriores o se hayan preparado en el marco de los planes para contingencias elaborados para hacer frente al tipo de
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 99
situación imperante. Estos instrumentos constituirán el punto de partida y en caso necesario se adaptarán a la luz de la información específica necesaria determinada en relación con la Actividad 6. Ensayo previo y traducción de cada instrumento Las siguientes fases son fundamentales para cualquier instrumento nuevo de recopilación de datos, especialmente los cuestionarios estructurados: •
Solicitar a expertos locales que examinen el instrumento para asegurarse de que todas las preguntas son adecuadas, teniendo en cuenta los tabúes o cuestiones sensibles a nivel local, así como información detallada sobre los sistemas locales de medición (p. ej., unidades de volumen para los cereales, el aceite vegetal, etc.).
•
Ensayar previamente el instrumento antes de practicar una evaluación completa, lo que ofrece la posibilidad de: i) descubrir si alguna pregunta puede ser malinterpretada y debe formularse de nuevo; ii) identificar cualesquiera preguntas que los informantes encuentren difícil contestar y, en consecuencia, no aporte información útil; iii) introducir mejoras en la estructura para facilitar el proceso de entrevista o el procesamiento de los datos; y/o iv) calcular la cantidad aproximada de tiempo necesario para realizar una entrevista —como elemento esencial de la planificación del trabajo de campo—.
•
Traducir al idioma local (o los idiomas locales): se trata de un requisito fundamental para reducir al mínimo las diferencias que puedan surgir cuando distintos encuestadores hacen las preguntas. Cuando se haya finalizado la versión original (en inglés, francés o cualquier otro idioma) del cuestionario, se pedirá a un experto local que lo traduzca al idioma local. A continuación, se buscará a un segundo experto para que lo vuelva a traducir al idioma original. Se comparará esta última versión con la original para comprobar si el texto del cuestionario es claro e inequívoco.
Cuando sea posible, se combinará el ensayo sobre el terreno de los instrumentos con la orientación/capacitación de los equipos o encuestadores de la evaluación (Actividad 9). Deberá tenerse en cuenta que las entrevistas requerirán más tiempo durante la fase de ensayo previo y capacitación que durante la evaluación real sobre el terreno. El proceso se acelerará, especialmente en el caso de las encuestas sobre hogares, a medida que los entrevistadores se familiarizan con el cuestionario y el orden de las preguntas.
Lo que puede indicar el ensayo previo •
¿Están dispuestos los informantes a responder a las preguntas del formulario que se pretende utilizar? ¿Hay preguntas especialmente difíciles o delicadas?
•
¿Son adecuadas las categorías de respuesta codificada?
•
¿Comprenden los entrevistadores las preguntas? ¿Es alguna de las preguntas especialmente difícil o delicadas? (La
capacitación adicional puede centrarse en estas preguntas.) •
¿Malinterpretan los informantes las preguntas? ¿Hay palabras ambiguas o difíciles de comprender? (El ensayo previo
debería señalar los cambios necesarios en el texto o las mejoras necesarias en la traducción.) •
¿Permite el cuestionario avanzar sin dificultades? ¿Pueden los entrevistadores seguir las instrucciones fácilmente?
•
¿Hay espacio suficiente en el formulario y están las respuestas claramente codificadas? (El ensayo previo debería mostrar las mejoras necesarias en el formato antes de que se imprima el cuestionario final.)
•
¿Cuánto dura una entrevista? (La respuesta a esta pregunta ayudará a decidir cuántos entrevistadores hacen falta y cuánto durará el trabajo de campo.) [Adaptado de Urban Inequities Survey Manual, borrador, Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU-Hábitat), Nairobi 2005]
Proceso de evaluación
10.6 Preparación de juegos de material informativo,
Actividad 8
100 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
suministros y equipo
Producto previsto: Los juegos de material informativo, los suministros y el equipo necesarios para los equipos de campo se reúnen y están listos para ser utilizados cuando los equipos están preparados para desplazarse al lugar de la evaluación.
¿Por qué?
Puede perderse mucho tiempo (de los equipos de evaluación y de sus interlocutores) si los miembros del equipo de evaluación no conocen los datos ya disponibles, y si los suministros y el equipo no están disponibles cuando los necesitan los equipos sobre el terreno.
¿Cuándo?
Antes de que los equipos de evaluación estén listos para desplazarse a la zona afectada para comenzar las encuestas sobre el terreno. Antes de la orientación/capacitación de los equipos, de ser posible.
¿Por quién?
Un individuo designado o un grupo de trabajo reducido.
¿Cómo?
Deberá definirse el contenido de los juegos de material informativo y, sobre la base de los métodos de recopilación de datos que se utilizarán y las condiciones generales en la zona, los suministros y el equipo que los equipos necesitarán para vivir y trabajar. Se organizará la impresión de todos los formularios y la reproducción de los documentos necesarios. Se pedirán prestados, se adquirirán o se alquilarán los suministros y el equipo necesarios.
¿Qué deberá incluirse en los juegos de material informativo? Deberá garantizarse que todos los equipos de evaluación conocen la información de que ya se dispone sobre la situación actual y la situación anterior a la crisis. Para ello: •
•
Deberá suministrarse a cada miembro de equipo lo siguiente: o
una síntesis de la información relativa al conjunto de la zona afectada y a las zonas específicas a las que se desplazarán (véase el Cuadro 10-M);
o
un mapa de la zona;
o
información detallada sobre los procedimientos de muestreo que se utilizarán;
o
directrices sobre los métodos de valoración rápida y las distintas técnicas participativas que se aplicarán;
o
copia de todos los instrumentos y guías para la recopilación de datos que se utilizarán a nivel de distrito, comunidad y hogar;
o
una lista de términos y expresiones básicos (con sus equivalentes en los idiomas locales, de ser posible) y los pesos y medidas locales;
o
instrucciones para las comunicaciones, y direcciones de contacto en caso de emergencia; y
o
directrices sobre seguridad, llegado el caso.
Deberá proporcionarse a cada equipo copia de todos los informes y otros documentos pertinentes.
Se compilarán y harán copias de estos «juegos de material informativo» en buena hora, y se entregarán a los equipos durante la orientación/capacitación. Cuando se trate de documentos importantes y sea posible, se entregará a los equipos una copia impresa y el archivo electrónico.
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 101
Cuadro 10-M Información típica sobre seguridad alimentaria que habrá de incluirse en los juegos de material informativo •
Mapas de carreteras y topográficos referentes a la zona de la muestra
•
Mapas de las zonas de subsistencia, si los hay disponibles; de lo contrario, mapas agroecológicos y de la explotación de la tierra
•
Datos sobre la población desglosados por la unidad administrativa más reducida posible (en el caso de las poblaciones residentes) y por localidad (en el de las personas desplazadas)
•
Información de referencia (normal, anterior a la crisis) sobre la seguridad alimentaria y los medios de subsistencia
•
Informes recientes sobre la seguridad alimentaria de la zona
•
Datos recientes sobre la producción agropecuaria
•
Fotografías aéreas, especialmente para las situaciones de emergencia de inicio rápido y complejas
•
Información sobre la observación de la Tierra/índice normalizado diferencial de la vegetación (en caso de malas cosechas).
Reunión de los suministros y el equipo Se estudiará cuidadosamente qué actividades realizarán los equipos y se enumerarán todos los artículos que podrán necesitar. Se calcularán las cantidades que necesitarán sobre la base de los lugares que visitarán, el número de grupos y hogares que entrevistarán y el tiempo que estarán sobre el terreno. En el Cuadro 10-N se indica la clase de artículos que pueden hacer falta. Además, deberá suministrarse dinero en efectivo al jefe del equipo para los gastos diarios del equipo. Las dietas necesarias para pagar los gastos personales durante la evaluación normalmente se entregarán a cada miembro del equipo por adelantado, y correrán a cargo de sus propias organizaciones. (En muchos casos, estas dietas formarán parte de sus prestaciones, y no constituirán la totalidad de las mismas.)
Cuadro 10-N Tipo de suministros y equipo que los equipos de evaluación pueden necesitar Artículos Artículos para las entrevistas a nivel de distrito Copias suficientes de lo siguiente: • guías para las entrevistas en los distritos/hojas de recopilación de datos Copias de lo siguiente: •
procedimiento de muestreo y una tabla de números aleatorios (para la selección de los lugares que habrá que visitar en el distrito)
•
un glosario: conceptos y definiciones de las palabras clave que figuran en los instrumentos empleados a nivel de distrito
Artículos para las entrevistas y los análisis de los mercados a nivel de comunidad Copias suficientes de lo siguiente: •
guías para las entrevistas con comunidades y subgrupos y hojas de registro
•
guías de observación (paseo de identificación) y hojas de registro
• guías para las entrevistas sobre los mercados/hojas de registro de datos Materiales necesarios para las técnicas participativas (p. ej., rotafolios, rotuladores de fibra, sacos de habas para los montoncitos proporcionales; modelos de calendario estacional) Básculas para pesar las medidas locales Copias de lo siguiente:
Cantidad
102 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
•
directrices para la realización de entrevistas con comunidades y subgrupos y para la utilización de las técnicas participativas elegidas (p. ej., cartografía de los recursos de las aldeas, calendarios estacionales, planes de actividades, etc.)
•
un glosario: conceptos y definiciones de palabras clave que figuran en los instrumentos empleados a nivel comunitario
Artículos para las entrevistas en los hogares (si se lleva a cabo una encuesta sobre hogares) Copias suficientes de lo siguiente: • cuestionarios para los hogares Copias de lo siguiente: •
el procedimiento de muestreo para la selección de los hogares
• tablas de números aleatorios Tiza, o cinta adhesiva y rotuladores, para la numeración de las casas Básculas, tablas para medir la altura y hojas para registrar los datos relativos al peso para la talla, si se hace acopio de datos antropométricos.
Suministros para los equipos •
Botiquín de primeros auxilios en cada vehículo (suministros para tratar enfermedades comunes y lesiones menores)
•
Rádio y/o teléfono por satélite (si se trabaja en zonas inseguras o aisladas)
•
Teléfonos celulares (cuando se trabaje en zonas cubiertas por operadores locales)
•
Lámparas (para trabajar de noche)
•
Computadora portátil (si lo permiten las condiciones de seguridad y se dispone de electricidad)
•
Agua y alimentos, en caso de que pueda ser difícil obtener suministros en las zonas que habrá que visitar
•
Mosquiteros y/o repelentes de insectos, de ser necesario
•
Equipo de acampada, si procede
Artículos para cada miembro del equipo Sujetapapeles Libretas Calculadora Bolígrafos Lápices
Sacapuntas Gomas de borrar Grapadoras y clips Regla
[Adaptado de Field Trip Checklist, PMA Kenya]
10.7 Reunión y capacitación de los equipos de evaluación
Proceso de evaluación
Actividad 9
Producto previsto: Se constituye un número suficiente de equipos, cada uno de ellos con los conocimientos y aptitudes necesarios y un equilibrio entre mujeres y hombres, y se les orienta (capacita) para llevar a cabo i) el acopio de los datos necesarios y ii) el análisis preliminar de los datos cualitativos mientras se encuentran sobre el terreno.
¿Por qué?
Los equipos deben alcanzar un equilibrio en cuanto a los conocimientos y aptitudes y el número de mujeres y hombres para llegar a comprender razonablemente los distintos aspectos de la situación de la seguridad alimentaria y las necesidades de todos los segmentos de la población. Asimismo, deben tener óptimos conocimientos lingüísticos, recibir orientación/capacitación y realizar ejercicios prácticos
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 103
supervisados sobre el terreno para que puedan compararse los datos reunidos por distintas personas y equipos. ¿Cuándo?
Tan pronto como se hayan producido las versiones experimentales de los instrumentos de recopilación de datos; antes de que los equipos comiencen el trabajo de campo.
¿Por quién?
Individuos elegidos por un grupo de trabajo reducido. Se constituirán en equipos, que recibirán orientación/capacitación a cargo de un coordinador designado para el trabajo de campo y un instructor con experiencia en capacitación en materia de encuestas sobre el terreno.
¿Cuál debería ser la composición de los equipos de evaluación sobre el terreno? Cuando sea posible, se procurará acordar con todas las organizaciones participantes la composición de los equipos de evaluación. La composición depende del tipo de crisis, así como del contexto en cuestión y la escala de la evaluación. En el Cuadro 10-O figuran las competencias que normalmente hacen falta. Deberán tenerse en cuenta las características étnicas o religiosas que puedan impedir a algunas personas trabajar en determinadas zonas, especialmente en situaciones de conflicto. Si la evaluación corre a cargo de múltiples equipos, cada equipo deberá mantener el mayor equilibrio posible en cuanto a las competencias técnicas y lingüísticas, el número de hombres y mujeres y la representación de organismos. Se procurará que el personal menos experimentado coincida con el personal experimentado, a fin de favorecer el aprendizaje. Cuando sea posible, se incluirá a personal del PMA y a representantes de organismos gubernamentales, ONG y donantes en todos los equipos. Se procurará seleccionar a más personas del número mínimo necesario para los equipos, de modo que pueda excluirse de los equipos finales sobre el terreno a cualesquiera personas que no ejerzan correctamente las actividades durante la orientación/capacitación. Los traductores deberán ser elegidos de entre los miembros del equipo o contratados para que acompañen al equipo durante el trabajo de campo, de ser posible, y deberán tener experiencia en técnicas de entrevista. No deberá confiarse en la posibilidad de encontrar a traductores sobre el terreno y se tendrá cuidado cuando se recurra a traductores de la comunidad objeto de la visita: pueden traducir de forma «selectiva» y tergiversar la verdad.
Cuadro 10-O Aptitudes y conocimientos necesarios para los equipos de una ESAE rápida Aptitudes y conocimientos técnicos en el equipo
Aptitudes y conocimientos personales de todos los miembros del equipo
104 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
•
Firme liderazgo y coordinación (jefe del equipo)
•
•
Familiaridad con el contexto local: conocimientos a nivel local
Sólidas dotes para las relaciones interpersonales y la comunicación
•
Capacidad para trabajar en equipo
•
Experiencia en situaciones parecidas
•
Sentido común y experiencia pertinente
•
Análisis de la seguridad alimentaria, los medios de subsistencia y la vulnerabilidad
•
Curiosidad
•
•
Objetividad y capacidad analítica
Nutrición (y salud pública)
•
•
Buenas dotes para las entrevistas
Economía y mercados
•
•
Conciencia de las diferencias culturales
Sociología/antropología
•
•
Análisis desde una perspectiva sexiespecífica
Sensibilidad respecto de las cuestiones de igualdad entre el hombre y la mujer
•
Análisis político (en una situación de conflicto o represión)
•
Conciencia de los problemas de seguridad
•
Buena salud y movilidad
•
Análisis de la seguridad/las amenazas (en una situación de conflicto)
•
Dotes de negociación
•
Conocimientos del idioma local
•
Dotes de coordinación de grupos
• Dotes de presentación y redacción También se valora la capacidad para formular proyectos.
¿Qué se exige a los jefes de los equipos sobre el terreno? El jefe del equipo debe contar con firmes dotes para las relaciones humanas, la negociación y la solución de conflictos para poder trabajar eficazmente con todos los asociados. También es importante que pueda impartir capacitación. Deberán prepararse las funciones específicas de los jefes de los equipos sobre el terreno, que deberán ser aprobadas por el grupo básico de las organizaciones que colaboren en la organización de la evaluación. Este mismo grupo básico deberá seleccionar a los jefes de equipo. Los jefes de los equipos sobre el terreno se encargan de organizar y dirigir todas las actividades del equipo, supervisar al personal de apoyo, como los conductores, gestionar los fondos para los gastos sobre el terreno y cerciorarse de que el equipo completa su labor puntualmente y según lo previsto. Las responsabilidades específicas dependen de si se realiza o no una encuesta sobre hogares, los conocimientos, las aptitudes y la experiencia de otros miembros del equipo y las medidas adoptadas por el equipo básico encargado de la planificación de todo el proceso de evaluación. Entre las responsabilidades podrán incluirse algunas de las funciones que se enumeran en el Cuadro 10-Q, o todas ellas. Cuadro 10-P Responsabilidades típicas de los jefes de los equipos sobre el terreno Preparación para el trabajo de campo •
Examinar/ayudar a compilar el juego de material informativo para el equipo y asegurarse de que el equipo y cada uno de sus miembros dispone de copias suficientes de todas las instrucciones, instrumentos de recopilación de datos y mapas necesarios (véase 10.3); identificar y buscar soluciones para cualquier problema previsible;
•
Familiarizarse con la zona en que trabajará el equipo y hacer (o confirmar la idoneidad de) los preparativos del viaje y el alojamiento;
•
Contactar a las autoridades locales para informarles de la evaluación y obtener su apoyo y cooperación (o asegurarse de que ya se ha hecho);
•
Dirigir la orientación/capacitación de los posibles miembros del equipo y evaluar su rendimiento; y
•
Obtener todos los adelantos de dinero efectivo, los suministros y el equipo necesarios para que el equipo complete su labor.
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 105
Es importante que el jefe lo prepare todo cuidadosamente para facilitar la labor del equipo sobre el terreno y conservar la moral de sus miembros. Durante el trabajo de campo •
Dirigir y supervisar el trabajo de los miembros del equipo (teniendo en cuenta sus competencias lingüísticas y de otro tipo) y asegurar una distribución equitativa del volumen de trabajo;
•
Presentar el equipo a los dirigentes a nivel de provincia, distrito y comunidad y entrevistar a esos dirigentes; agradecerles su colaboración al final de la visita del equipo;
•
Seleccionar, en consulta con otros miembros del equipo y los informantes clave a nivel de distrito, de ser necesario, los lugares que habrán de visitarse;
•
Asegurarse de que la formación de grupos y la selección de hogares para las entrevistas se realiza de conformidad con el procedimiento de muestreo convenido;
•
Observar de forma aleatoria las entrevistas realizadas por otros miembros del equipo, facilitando orientación cuando sea necesario de forma inmediata o más tarde;
•
Facilitar exámenes diarios (al final del día) de las actividades del equipo y establecer el programa y las prioridades del día siguiente;
•
Facilitar un análisis preliminar de los datos recopilados mediante técnicas de valoración rápida (es decir: los datos dimanantes de las entrevistas con informantes clave y grupos) mediado el trabajo de campo o cada tres o cuatro días; y
•
En el caso de realizar una encuesta sobre hogares: allegar y comprobar todos los cuestionarios completados al final de cada día; introducirlos en sobres y remitirlos a la dependencia central encargada del procesamiento de datos conforme a los procedimientos establecidos (véase la sección 7.5); comunicar a los encuestadores cualesquiera problemas encontrados en sus cuestionarios.
El establecimiento y mantenimiento de un espíritu de equipo positivo y un ambiente de trabajo agradable es importante para la calidad general de la evaluación.
Movilización de coordinadores competentes para las entrevistas y debates con grupos Las buenas dotes de coordinación de grupos son absolutamente esenciales para los equipos o subequipos que recopilen datos a nivel comunitario. La coordinación eficaz de grupos en el marco de una ESAE requiere: •
dotes para las relaciones humanas —en concreto ser una persona que sepa escuchar—, curiosidad, capacidad analítica y sentido del humor;
•
experiencia en la aplicación de técnicas participativas, en particular paseos de identificación, mapas de comunidades, la fijación de plazos, montoncitos proporcionales y clasificación por comparación de pares; y
•
una comprensión de los temas que habrá que analizar.
Se procurará encontrar, entre los funcionarios del PMA y otros asociados, el mismo número de mujeres y hombres con dotes demostradas de coordinación, experiencia en la aplicación de técnicas participativas y conocimientos sobre las cuestiones ligadas a la seguridad alimentaria. Se pondrán a prueba sus conocimientos y aptitudes, sin dar por sentado que toda persona que diga tener experiencia sea un buen coordinador. En caso de que no puedan encontrarse suficientes mujeres y hombres que reúnan todas estas aptitudes, experiencia y conocimientos: •
se movilizará a individuos que ya tengan una competencia demostrada en materia de coordinación, cuando sea posible, y se les instruirá rápidamente sobre los temas que habrá que examinar, de ser necesario. Puede encontrarse a individuos con conocimientos y experiencia en grupos de debate entre el personal del PMA, entidades gubernamentales (especialmente organismos de desarrollo comunitario
106 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
y rural) y ONG que vengan utilizando enfoques participativos en el marco de programas de desarrollo en el país. •
si no es posible movilizar a suficientes individuos con competencia y experiencia en coordinación, se elegirá a individuos que cuenten ya con conocimientos sobre seguridad alimentaria, tengan experiencia en la realización de encuestas sobre el terreno y sepan trabajar en equipo, y se les instruirá rápidamente en temas de coordinación y utilización de técnicas participativas.
Orientación/capacitación de los equipos sobre el terreno Cada equipo deberá participar en una sesión de orientación/capacitación sobre el terreno antes de comenzar la recopilación de datos y preferiblemente antes de desplazarse a la zona de interés. Dado que los participantes aportan diversos conocimientos, aptitudes y experiencias al equipo, es fundamental que cada equipo tenga la posibilidad de examinar las expectativas y funciones de sus miembros y asegurarse de que todos ellos comprenden el proceso de evaluación y análisis previsto y están familiarizados con los métodos de muestreo y acopio de datos que se utilizarán. La orientación/capacitación, que deberá impartir un instructor experimentado con la colaboración del jefe del equipo sobre el terreno, normalmente incluirá los siguientes elementos: •
Información sobre los resultados de la investigación inicial y otros datos secundarios básicos;
•
Examen de la hipótesis de trabajo y el cometido del equipo;
•
Examen de los marcos analíticos propuestos y de la información necesaria;
•
Estudio de las normas culturales locales y acuerdo sobre los planteamientos y el comportamiento adecuados de todos los miembros del equipo;
•
Examen del plan de muestreo;
•
Recibo y examen de los juegos de material informativo (véase la sección 10.6);
•
Ensayo sobre el terreno de los instrumentos de recopilación de datos; y
•
Examen de las disposiciones en materia de logística y seguridad para el trabajo de campo real, y acuerdo sobre el calendario de viajes.
En teoría, podrán consagrarse entre 3 y 5 días a esta orientación/capacitación, aunque tendrá que impartirse más rápidamente cuando se haga frente a una crisis de inicio repentino. Cuando se tenga que instruir a los miembros del equipo para realizar entrevistas detenidas con subgrupos con el fin de recabar datos concretos sobre las fuentes de alimentos e ingresos y los gastos, se requerirá más tiempo, incluidos varios días para la realización de prácticas supervisadas. En el Anexo C5 se describen posibles programas de capacitación para encuestadores y supervisores. Planificación anticipada de la capacitación: A continuación figuran algunas cosas que tendrán que hacerse en todos los casos: •
Asegurarse de que el espacio y las instalaciones son adecuados para el número de participantes y que existen suficientes lugares para practicar la selección de los hogares y las entrevistas;
•
Disponer las bebidas y aperitivos;
•
Cerciorarse de que hay copias de todos los cuestionarios e instrucciones para los encuestadores y supervisores (ya traducidas);
•
Preparar todo el material didáctico necesario; y
•
Organizar el transporte y otro apoyo logístico necesario para los ejercicios prácticos sobre el terreno.
Evaluación del rendimiento: Si algún encuestador o supervisor no desempeña correctamente sus funciones, no se le incluirá en el equipo de evaluación final.
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 107
Informar a todos los participantes, incluidos los conductores Deberá informarse a todos los participantes en la evaluación sobre el terreno sobre sus principales objetivos y los métodos que se emplean. En concreto, se explicará a los conductores la importancia de seguir procedimientos adecuados de muestreo y de llegar a los lugares y hogares seleccionados, aunque se encuentren lejos de las buenas carreteras, y de no interferir en las entrevistas. Los conductores pueden colaborar enormemente si comprenden lo que se necesita y por qué. De lo contrario, pueden evitar ir a determinados lugares, o provocar o inducir determinadas respuestas de las personas entrevistadas. [Adaptado de Urban Inequities Survey Manual, borrador, ONU-Hábitat, Nairobi 2005]
10.8 Organización del transporte, la seguridad y las comunicaciones
Proceso de evaluación
Actividad 10
Producto previsto: La organización del transporte, la seguridad y las telecomunicaciones para los equipos de evaluación sobre el terreno se ultimará antes de que los equipos se desplacen a la zona de interés.
¿Por qué?
Los equipos de evaluación pueden consagrar gran parte de su tiempo a organizar el transporte e intentar enviar mensajes, en lugar de «evaluar», si no se han hecho los preparativos por adelantado. La seguridad de los equipos también puede verse en peligro en zonas de conflicto y otros entornos inseguros si la organización del transporte, la seguridad y las telecomunicaciones no se lleva a cabo correctamente. Todas las misiones de evaluación en las que participa personal de las Naciones Unidas deben cumplir la normativa sobre seguridad de las Naciones Unidas.
¿Cuándo?
Los preparativos comenzarán cuando se hayan seleccionado los lugares que se visitarán. Se velará porque los preparativos se hayan terminado antes de que los equipos se dirijan a la zona de interés.
¿Por quién?
Un grupo reducido de «logística para la evaluación» (o un individuo) designado por el grupo de coordinación de la evaluación (cuando exista uno); de lo contrario, por el director del PMA en el país.
Itinerario, transporte y alojamiento Se planificará el itinerario (o itinerarios) del equipo (o los equipos) teniendo en cuenta los medios de transporte disponibles, el tiempo que requieren los viajes y cualesquiera restricciones de movimientos debidas a la inseguridad o a otros factores. Se organizará el transporte (en especial los conductores y el combustible) y el alojamiento en todas las localidades. Si determinadas zonas están aisladas o extensamente damnificadas, y probablemente falten suministros y servicios en cualesquiera de las localidades donde pernoctará el equipo, éste deberá ser tan autónomo como sea posible. Comunicaciones y seguridad Deberá garantizarse la disponibilidad de servicios de telecomunicaciones para poder informar periódicamente a la oficina del PMA más cercana, así como las medidas de seguridad que se describen brevemente en el Cuadro 10-Q.
108 ■ Capítulo 10: Diseño y planificación de una ESAE rápida
Cuando los equipos de evaluación que incluyan a funcionarios de las Naciones Unidas y otros asociados vayan a zonas que entrañen peligro para la seguridad, se acordará la colaboración práctica en materia de seguridad, como por ejemplo, medidas para el traslado/evacuación de la zona, llegado el caso. (Recuérdese: las ONG no se ven afectadas por la política, las decisiones y los planes de seguridad de las Naciones Unidas, de modo que pueden responder a las amenazas y los incidentes concretos para la seguridad de manera distinta a como lo harán las Naciones Unidas.)
Cuadro 10-Q Consideraciones en torno a la seguridad Todo nuevo funcionario tendrá que recibir información completa sobre el país y la situación de seguridad antes del despliegue. Se garantizará la obtención de cualesquiera autorizaciones de seguridad necesarias por parte de las autoridades nacionales competentes. Se garantizará la disponibilidad de servicios de telecomunicaciones para que los equipos puedan informar periódicamente de los resultados a la oficina del PMA más cercana. Durante el trabajo de campo, se recomienda a los equipos que se pongan en contacto con las autoridades locales periódicamente para informarles sobre los progresos realizados. Si una de las zonas por visitar se incluye en la fase 1 o superior del plan de seguridad de las Naciones Unidas: •
se asegurará que el oficial designado encargado de la seguridad aprueba las visitas sobre el terreno;
•
se garantizará que los servicios de comunicación y todos los demás mecanismos cumplen las normas mínimas de seguridad operacional de las Naciones Unidas (véanse estas normas en el CD-ROM);
•
todos los miembros del equipo completarán las sesiones de información sobre temas de seguridad;
•
se organizará una sesión informativa sobre seguridad para cada equipo; y
•
se designará a un oficial de seguridad sobre el terreno para que acompañe la misión, de ser necesario.
Véase el Capítulo 13 de Emergency Field Operations Pocketbook (Libro de bolsillo para las operaciones de emergencia sobre el terreno) del PMA para obtener directrices sobre seguridad personal (13.1) e información sobre las etapas del plan de seguridad y las normas operacionales de las Naciones Unidas (13.2) y la colaboración entre las Naciones Unidas y las ONG en materia de seguridad (13.4). Para obtener más orientaciones, véase: → Seguridad sobre el terreno, Naciones Unidas → Información sobre temas de seguridad – memorando explicativo, Naciones Unidas/ACNUR → Programa de capacitación e información sobre temas de seguridad – guía para participantes, PMA → Directrices publicadas por el Equipo de Coordinación de Medidas de Seguridad de las Naciones Unidas en los países
Capítulo 11
Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno 1 En el presente capítulo se facilitan directrices sobre la manera de recopilar los datos sobre el terreno —en la sede de provincia o distrito y en las comunidades y hogares— y de organizar el procesamiento inicial de los datos que estén listos para su análisis. Los temas e indicaciones fundamentales guardan relación con: •
Cómo proceder durante las visitas sobre el terreno: véase → sección 11.1.
•
Recopilación de datos a nivel de provincia o distrito: véase → sección 11.2.
•
Recopilación de datos a nivel de comunidad: véase → sección 11.3.
•
Observación de las condiciones y recopilación de datos de los hogares: véase → sección 11.4.
•
Recopilación de datos sobre el mercado: véase → sección 11.5.
•
Procesamiento de los datos reunidos sobre el terreno: véase → sección 11.6.
Para cerciorarse de que puedan hacerse comparaciones entre los datos recabados en distintas localidades y por distintos equipos sobre el terreno, es vital que todos los equipos empleen los métodos acordados (en la fase 6 —véase 10.3—), sigan los procedimientos de muestreo convenidos (en la fase 6 —véase 10.4—) y lleven a cabo sus indagaciones y anoten sus conclusiones mediante los instrumentos de recopilación de datos elaborados (en la fase 7 —véase 10.5—).
1
Este capítulo se basa, entre otras, en las siguientes fuentes: Misiones de evaluación rápida de la seguridad alimentaria en Kenya, Grupo Directivo de Kenya para la Seguridad Alimentaria, 2004; documentos de la Dependencia de Apoyo Técnico del PMA y Food Economy Group, PMA Sierra Leona, 2002; UNHCR/WFP Joint Assessment Guidelines, 2004; Participation guide, borrador, Red de aprendizaje activo sobre responsabilidad financiera y rendimiento en la asistencia humanitaria (ALNAP) 2004.
102 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
11.1 Cómo proceder durante las visitas sobre el terreno
Proceso de evaluación
Actividad 11 Producto previsto: Un proceso de diálogo eficaz con funcionarios, dirigentes comunitarios, otros informantes clave y representantes de la población, que favorezca la recopilación de datos fiables sobre el impacto en la seguridad alimentaria de distintos grupos de población en el seno de la zona (o las zonas).
¿Por qué?
Las visitas sobre el terreno deben producir los datos necesarios tan rápidamente como sea posible de manera que se asegure: i) la recopilación de datos de calidad y fiabilidad aceptables; ii) la posibilidad de comparar las conclusiones de distintos equipos; y iii) que los equipos de evaluación ocupan solamente el tiempo mínimo necesario de los funcionarios, dirigentes comunitarios y otros interlocutores sobre el terreno.
¿Cuándo?
Desde el principio del trabajo de campo hasta el final.
¿Por quién?
Todos los equipos y subequipos de evaluación sobre el terreno.
¿Cómo?
Mediante la buena organización y el trabajo en equipo en cada equipo de evaluación, y la adhesión a un procedimiento acordado y bien comprendido que permita a los equipos aprovechar su tiempo con la mayor eficacia posible.
Como parte del proceso de planificación de la evaluación (véase la sección 10.1) debería haberse elaborado y acordado un procedimiento para el acopio de datos sobre el terreno, adaptado a las circunstancias concretas actuales; debería haberse explicado y utilizado durante la orientación/capacitación de los equipos sobre el terreno, lo que debería garantizar también una uniformidad razonable del registro de los datos entre los distintos equipos destacados sobre el terreno (véase la sección 10.4). El procedimiento consistirá más o menos en lo siguiente: 1. Visita a la sede de la provincia o distrito: o
Reunión con el jefe administrativo; el comité local de gestión de catástrofes (o un órgano equivalente); los funcionarios competentes; ONG y otros organismos que trabajen en la zona afectada (o las zonas afectadas).
o
Visita a mercados y conversaciones con los comerciantes.
2. Visita a determinadas comunidades (aldeas, barrios urbanos y/o campamentos de personas desplazadas) elegidas mediante el procedimiento de muestreo convenido: o
Observación de las condiciones.
o
Reunión con los dirigentes, informantes clave a nivel local (como maestros, personal de salud y de otros ámbitos) y un grupo de la comunidad (una selección de gente corriente de distintos grupos socioeconómicos de la comunidad).
o
Visita al mercado local y conversaciones con los compradores y vendedores. (A menudo puede realizarse en paralelo con las entrevistas o las visitas a los hogares, que llevarán a cabo otros miembros del equipo de evaluación —véase infra—.)
Cuando se apliquen solamente técnicas de valoración rápida: o
Reunión con varios subgrupos en representación de las distintas subsecciones de la comunidad (normalmente basados en los principales medios de subsistencia aunque también, cuando sea el caso, en otras características sociales o étnicas).
o
Visita a unos cuantos hogares para hacerse una idea de las condiciones y comprobar la plausibilidad de los datos recabados del grupo y los subgrupos comunitarios y de otras fuentes.
Cuando se vaya a realizar una encuesta sobre hogares:
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 103
o
Entrevista con el número necesario de hogares seleccionados mediante el procedimiento de muestreo acordado, y llenado del cuestionario. (Esta tarea será realizada por los encuestadores capacitados.)
Se aprovecharán al máximo los viajes de una comunidad a otra: se observará (y registrará) el estado de las carreteras; los cursos de agua y los cultivos en pie; la presencia o ausencia de puestos de venta, etc. Téngase en cuenta que se están recopilando datos específicos para complementar lo que ya se conoce gracias a los datos secundarios, y para comprobar la pertinencia de esos datos si es preciso, con objeto de responder a las principales preguntas del análisis que se realizará en el marco de la Actividad 12. Estas preguntas se muestran en el proceso de análisis que figura en el Diagrama 3b del Capítulo 3, y se reproducen infra. Sin embargo, habrá que estar alerta por todo lo «inesperado» que pudiera acontecer y listo para replantearse las suposiciones, llegado el caso. 2 Ä Identificación de la zona y la población ¿Qué zonas están afectadas? ¿Dónde hay que evaluar?
Características anteriores a la crisis: ¿Qué grupos son vulnerables?
3 Ä Impacto
4 Ä Reacciones
¿Qué ha cambiado? ¿Qué cambiará? (¿En qué estación del año estamos?)
¿Qué medidas se han adoptado? ¿Qué otras medidas hay previstas?
5 Ä Necesidades y riesgos imperantes
6 Ä Causas y contexto
¿Cuál es la situación actual y la prognosis? ¿Cuáles son los problemas actuales y futuros?
¿Cuáles son las posibilidades de respuesta?
¿Cuáles son los posibles riesgos?
¿Cuáles las repercusiones?
¿Cuáles los obstáculos?
11.2 Recopilación de datos a nivel de provincia y distrito
Proceso de evaluación
Actividad 11a Producto previsto: Compilaciones de i) los datos disponibles a nivel de provincia y distrito relativos al estado de los medios de subsistencia y de la seguridad alimentaria en diferentes zonas geográficas y de diferentes subgrupos de población; ii) las opiniones referentes a los problemas prioritarios y las opciones de respuesta para solucionarlos; iii) las cifras sobre la población, incluido el número estimado de personas desplazadas, cuando proceda. Más una lista de los lugares de la provincia o distrito que visitarán los equipos de evaluación, si el muestreo es intencional.
¿Por qué?
Para aprovechar la información y los puntos de vista del personal entendido a nivel de provincia y distrito, en especial los comerciantes, sobre la situación actual y las zonas afectadas, así como los datos anteriores a la crisis que puedan allegarse en este nivel. Para hacer participar a las autoridades de provincia y distrito en el proceso de evaluación y ayudar a asegurar su interés en él: su compromiso de aplicar cualesquiera respuestas que se recomiende, o de colaborar en su aplicación. Para cumplir el protocolo y garantizar cualquier asistencia necesaria por parte de las autoridades locales.
¿Cuándo?
Tan pronto como el equipo llegue a la sede de provincia o distrito, o a la mañana siguiente. En el caso de una catástrofe/crisis repentina, estas reuniones deberán completarse rápidamente (p. ej., en 3 ó 4 horas, de modo que el equipo pueda trasladarse rápidamente a (algunas de) las comunidades afectadas). En el caso de una crisis de inicio lento, podrá tardarse más (p. ej., 1 día).
¿Por quién?
Todos los equipos y subequipos de evaluación sobre el terreno.
104 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
¿Cómo?
Reuniones individuales y/o en grupo con las autoridades gubernamentales pertinentes en la sede de provincia o distrito —normalmente el jefe administrativo, funcionarios sectoriales competentes y, cuando sea necesario, autoridades de seguridad— y con las principales ONG, otros organismos o instituciones establecidos y operativos en las zonas concernidas.
Informar a las personas por adelantado Se contactará, o enviarán mensajes, al jefe administrativo de cada provincia o distrito que se tenga intención de visitar, tan pronto como se hayan preparado el itinerario y el calendario propuestos. Se les hará saber: •
la finalidad de la misión (se les enviará una copia del cometido, de ser posible);
•
la fecha y hora en que está prevista la llegada del equipo y cómo llegará (p. ej., por carretera, en avión);
•
con quién desea encontrarse el equipo el día de su llegada o a la mañana siguiente;
•
el deseo de intercambiar información e ideas sobre la situación; y
•
si se necesitará su asistencia para el transporte y el alojamiento, o autorizaciones para visitar cualesquiera de las zonas afectadas.
Si se necesitarán autorizaciones de seguridad o de otro tipo de las autoridades nacionales, se les comunicará que se han obtenido (o que se están tramitando). Modo de proceder El método concertado deberá adaptarse a las estructuras administrativas y de coordinación que existan a nivel local y al número y la dispersión geográfica de las entidades que habrá que entrevistar. El equipo deberá reunirse primeramente con el jefe administrativo u otros funcionarios pertinentes de la provincia o distrito y acto seguido con el comité local de gestión de catástrofes (o un órgano equivalente), si existe. Estas reuniones servirán para obtener un cuadro general de la situación, los problemas y las expectativas desde la perspectiva de los funcionarios y otros interesados presentes de la provincia o distrito. A menos que la situación sea de conflicto o represión, será conveniente pedir a uno o dos individuos entendidos que acompañen al equipo (o subequipos, si está prevista la división) en las visitas a las comunidades. Después, el equipo se dividirá para: •
mantener distintos encuentros con distintos funcionarios, ONG y otras instituciones fundamentales para recabar datos y opiniones más detallados sobre temas específicos relativos a la crisis y la zona. En el Cuadro 6-J se indica el tipo de informantes clave que con frecuencia conviene entrevistar, aunque deberá seguirse el procedimiento y emplearse las guías para la realización de entrevistas elaborados en el marco de la Actividad 7; y
•
visitar los principales mercados mayoristas y minoristas para observar la actividad comercial y conversar con los comerciantes. Esta función deberá asignarse a un miembro del equipo. Éste deberá basarse en las directrices generales que figuran en la sección 11.4 y servirse de la guía específica para la realización de entrevistas elaborada en relación con la Actividad 7.
En el caso de una catástrofe repentina o en cualquier situación de inseguridad, será importante reunirse con los servicios locales de emergencia y protección civil, así como con la policía. De todas formas, normalmente serán miembros básicos de los comités locales de gestión de catástrofes. En una situación de conflicto, será necesario reunirse con los comandantes militares o sus oficiales civiles de enlace. En todas estas reuniones/entrevistas, se formulará el tipo de preguntas que se presenta en el Cuadro 10-K. Posteriormente, se triangularán (cotejarán) los datos y respuestas obtenidos en este nivel con las observaciones e información obtenidas en las comunidades visitadas. No se abusará del tiempo de los informantes más de lo necesario.
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 105
Datos necesarios a nivel de provincia y distrito En el marco de la Actividad 6 se habrán definido los datos específicos que se recopilarán en éste y otros niveles, con inclusión tanto de los datos anteriores a la crisis como de los datos sobre la situación actual. El equipo de evaluación habrá de asegurarse de: •
verificar y refinar, si es preciso, el calendario estacional para la zona y el cuadro cronológico de los acontecimientos que han afectado a los medios de subsistencia y la seguridad alimentaria de la zona en los últimos años;
•
verificar y refinar, si es preciso, los mapas de las zonas geográficas (basados en los datos agroecológicos y sobre medios de subsistencia anteriores a la crisis y/o los informes iniciales de la gravedad del impacto general de la crisis en diferentes zonas) y la lista de los subgrupos de población que hayan podido verse damnificados en distinta medida y/o puedan ser vulnerables a distintos factores en la situación actual;
•
recopilar los datos demográficos disponibles, incluido el número de desplazados y la tasa con que las personas llegan o se van, en el caso de que haya desplazamiento de población;
•
allegar información detallada sobre cualesquiera obstáculos para el transporte y señalarlos en un mapa; y
•
recopilar datos sobre el estado de salud y los riesgos concomitantes, y cualesquiera preocupaciones ambientales o de seguridad. Se trata de aspectos para los que se recurrirá en gran medida a los datos secundarios obtenidos en este nivel.
Si en una situación de conflicto hay zonas cercanas que actualmente son inaccesibles, se preguntará a los informantes qué conocen de la situación en esas zonas y si consideran que su información es fidedigna.
Tras completar estas reuniones, se volverá a reunir al equipo en un lugar tranquilo y privado para: •
intercambiar y poner en común rápidamente la información;
•
seleccionar las comunidades (aldeas, campamentos, barrios urbanos) que se visitarán en la provincia o distrito, teniendo en cuenta las propuestas de una gran variedad de informantes clave, si se aplica el muestreo intencional; y
•
planificar el itinerario y el programa para las visitas a las comunidades en colaboración con informantes locales entendidos.
Selección intencional de las comunidades que se visitarán Si se recurre a técnicas de valoración rápida, normalmente las comunidades que se visitarán se elegirán de forma intencional, sobre la base de los criterios acordados en el marco de la Actividad 6 (definición de la información necesaria y los métodos —véase la sección 10.1—). Por lo común, se incluirá a comunidades consideradas típicas de cada uno de los distintos subgrupos socioeconómicos o zonas geográficas identificados. Una buena idea es confeccionar una lista que incluya más comunidades del número mínimo necesario, por si la indagación no pudiera llevarse a cabo en una o más de ellas (p. ej., debido a un funeral el mismo día en que llega el equipo de evaluación).
106 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
Existen otros aspectos concretos de las actividades que habrán de realizarse en las comunidades que deben resolverse también a nivel de provincia o distrito. Por ejemplo: •
la ubicación de las aldeas, si son accesibles, y si el equipo (o los equipos) necesitará (o necesitarán) un guía local;
•
el mejor momento del día para visitar las comunidades, teniendo en cuenta las pautas diarias de actividad de las comunidades;
•
los horarios de los mercados locales, las ceremonias religiosas u otros actos que se celebren durante la semana que puedan interferir en las actividades que se lleven a cabo en las comunidades;
•
si es necesario informar a las aldeas por adelantado de la llegada del equipo. (Puede ser una buena idea si la evaluación se practica en un período del año con mucha actividad, en cuyo caso muchos aldeanos —o al menos los que serán buenas fuentes de información— pueden abandonar la aldea muy temprano por la mañana y no regresar hasta tarde. Puede también ser una mala idea si el mensaje no se transmite correctamente o da lugar a grandes expectativas.);
•
si los equipos necesitarán pruebas de que su visita ha sido autorizada por la administración provincial o de distrito; y
•
cualesquiera posibles problemas de seguridad.
11.3 Recopilación de datos a nivel de comunidad
Proceso de evaluación
Actividad 11b Producto previsto: Datos sobre la población, y datos e ideas sobre: i) el desglose socioeconómico de la comunidad; ii) las cifras de las personas en cada grupo distinto y la situación de sus medios de subsistencia y su seguridad alimentaria (y nutricional); y iii) la capacidad de la comunidad y de los diversos grupos para hacer frente a la crisis actual y recuperarse. En el caso de las poblaciones desplazadas, sus cifras y las tasas de llegada y partida.
¿Por qué?
Es en las comunidades donde se conocerá y verá de primera mano el impacto de la perturbación/crisis sobre la población y sus medios de subsistencia, y se tendrá la oportunidad de ver las cosas desde su perspectiva, valorar su capacidad y los problemas, riesgos y dificultades específicos con que se enfrentan, así como la gravedad de esos problemas y riesgos. Todo ello debería ayudar a dejar a un lado las ideas preconcebidas y determinar qué tipo de asistencia necesita realmente la población, de necesitarla. Lo que se llegue a conocer en este nivel será la piedra angular del análisis de si se necesita o no asistencia y, en caso afirmativo, en qué debería consistir y si debería ser selectiva y de qué manera.
¿Por quién?
Todos los equipos y subequipos de evaluación sobre el terreno.
¿Cómo?
Mediante las observaciones y los encuentros con los dirigentes y los grupos comunitarios, amén de los encuentros con subgrupos reducidos en representación de los distintos grupos socioeconómicos (o sociales y étnicos) de la comunidad. En la mayoría de las evaluaciones rápidas, las entrevistas con subgrupos serán la principal fuente de información sobre el impacto en los medios de subsistencia de las personas y su acceso a los alimentos, y sobre la evolución prevista de la situación. Cuando se realice una encuesta sobre hogares, se efectuarán menos entrevistas con subgrupos (o ninguna).
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 107
La ‘comunidad’ puede ser una aldea, campamento, punto de abastecimiento de agua para el ganado (en el caso de las comunidades de pastores), una ciudad pequeña o un barrio de una gran ciudad. En este nivel, se recopilarán datos mediante: •
la observación, mientras se pasea por el lugar y se visitan unos cuantos hogares;
•
una entrevista con un grupo comunitario mixto que incluya hombres, mujeres y jóvenes de todos los subgrupos de la comunidad;
•
una o más entrevistas con informantes clave de la comunidad, por separado o en grupo, por ejemplo: dirigentes comunitarios, maestros, líderes religiosos, agentes de salud y extensionistas que vivan o trabajen en la comunidad;
y mediante: •
entrevistas con subgrupos más o menos homogéneos de personas de condición social parecida pertenecientes a cada subgrupo importante de subsistencia y/o social (o étnico) de la comunidad, normalmente con grupos de hombres y mujeres separados; y
•
visitas aleatorias a varios hogares elegidos para i) comprobar la plausibilidad de los datos recopilados en la entrevista y debates con el grupo, y ii) mejorar la comprensión del equipo acerca de la situación mediante la observación personal;2
•
la administración de un cuestionario para la encuesta sobre hogares a varios hogares seleccionados al azar, habiéndose determinado el número por adelantado en el marco del plan de muestreo (véase la sección 6.1).
o:
Pueden utilizarse determinadas técnicas participativas con los grupos y subgrupos comunitarios. En general, debería actuarse como se describe infra. Hay que recordar que para reunir buena información hay que granjearse la confianza y el respeto de la comunidad. Sus primeras impresiones del equipo son fundamentales, por lo que al llegar habrá que comportarse con modestia y respeto. En toda situación de conflicto o represión, habrá que ser extremadamente consciente de la situación y cuidadoso con las preguntas que se formulen (véase el Cuadro 11-A). Véase el Anexo C3 para obtener orientación general sobre la realización de entrevistas con grupos.
Cuadro 11-A Consideraciones específicas que hay que tener en cuenta al visitar comunidades y realizar entrevistas en una situación de conflicto o represión
2
Un método más rápido adoptado por ejemplo en la evaluación realizada entre los refugiados en Irán en 2002 consiste en: i) identificar a diez mujeres entendidas y a diez hombres entendidos de la comunidad mediante conversaciones con el dirigente comunitario, los líderes de opinión y personas encontradas durante el paseo de identificación; ii) reunirse con ese grupo (20 personas) en un lugar adecuado —¡jamás en casa del dirigente de la comunidad!— y después iii) reunirse con los hombres y las mujeres por separado.
108 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
•
Se tendrá cuidado de con quién se va: Cuando en una visita los miembros del equipo se reúnan con personas que se identifican con una parte del conflicto, se evitará estar acompañado por alguien que pueda identificarse con otra parte, o de quien se sospeche que pudiera pertenecer a otra parte, o alguien que pertenezca a un grupo con una historia de animosidad cultural hacia las personas objeto de la visita. Esto es aplicable al propio personal nacional y al conductor, así como a los funcionarios locales o el personal de otras organizaciones.
•
A veces puede distinguirse a las personas por su origen étnico y en ocasiones por su vestimenta, pero también puede ser difícil distinguir entre distintos grupos: En algunos casos no existen características obvias que permitan distinguir entre las distintas partes en un conflicto, y nunca podrá saberse a buen seguro quién está presente o la lealtad de las personas con quien se habla.
•
Se movilizará a antropólogos que conozcan los idiomas locales: Esto permitirá: i) comprender lo que pasa y la influencia mutua entre distintos grupos, y ii) «leer entre líneas» lo que se dice (o no se dice), e interpretar el lenguaje corporal. Esto ayudará a evitar el empeoramiento de las tensiones.
•
Los miembros del equipo se presentarán y explicarán el objetivo de su visita: Se explicarán las relaciones con el gobierno y todas las demás partes.
•
Se insistirá en la independencia del equipo: Se evitará ir acompañado por funcionarios gubernamentales, de ser posible, aunque se pedirá a los agentes de salud y extensionistas locales que acompañen al equipo. Se encontrarán maneras de hablar con todos los grupos de la comunidad, no solamente con los que se presenten como «dirigentes».
•
Hay que prever que la información esté tergiversada: Muchas personas tendrán interés en presentar un panorama tergiversado de la situación o tendrán miedo de decir la verdad, especialmente en presencia de otras personas.
•
Hay que ser consciente de la situación: Las personas con quien se encuentren y hablen los miembros del equipo pueden estar amenazadas o correr un grave peligro simplemente por el hecho de ser vistas hablando con los miembros del equipo.
•
No se harán preguntas delicadas: Nunca se preguntará por las filiaciones. Se evitarán las preguntas directas sobre cualquier tema que pueda tener significación política o militar.
•
Nunca se provocará una discusión: ¡hay mucho en juego para las personas implicadas!
•
No se preguntarán nombres: Si se pregunta el nombre al interlocutor, éste tal vez tenga menos disposición a hablar honestamente, y se le podría poner en peligro si las anotaciones de los miembros del equipo cayeran en manos de la persona «equivocada».
•
Se evitarán las multitudes.
•
Hay que estar listo para retirarse si la situación es (o pasa a ser) tensa.
En cualquier situación de represión evidente: los miembros del equipo deben recordar lo que se les ha dicho; anotar la mínima información posible en el momento; y redactar sus notas cuando hayan abandonado la zona. Las personas tienden a hablar menos y a ser menos honestas si ven que todo lo que dicen se pone por escrito. Podrían verse en peligro si esas notas cayeran en manos de la persona «equivocada». N.B. Si se empeoran las tensiones, no solamente aumentarán los problemas locales, sino que también se debilitará la capacidad de la Organización para trabajar eficazmente en cualquier lugar de la zona.
Contactos iniciales Inmediatamente después de la llegada, el equipo de evaluación contactará a los dirigentes comunitarios locales para: •
presentarse, explicar la finalidad de su visita y cómo desearía proceder, y pedir su aprobación del proceso y preguntar si desean formular alguna pregunta al respecto;
•
pedirles su ayuda para la organización de un encuentro con un grupo de mujeres, hombres y jóvenes en representación de todos los segmentos de la población (un «grupo comunitario»);
•
informarse acerca de los proveedores de servicios locales (p. ej., maestros, agentes de salud, extensionistas) en la comunidad y pedir un encuentro con ellos;
•
pedir información detallada sobre la cantidad de personas de la comunidad (con el desglose demográfico, si se dispone de él) y, en el caso de las personas desplazadas, el número de personas que han llegado o se han marchado el día anterior y en la última semana; y
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 109
•
preguntar de nuevo si tienen preguntas que deseen formular.
Al reunirse con los proveedores de servicios locales y otros informantes clave a nivel local, se les pedirá que propongan a otras personas con quien pudiera ser útil hablar. (No se recurrirá solamente a los informantes clave que propongan los dirigentes comunitarios.) Si se obtienen cifras distintas de fuentes distintas para el número de personas de la comunidad, o si el número que se da parece sospechoso (implausible), se calculará grosso modo ese número antes de dejar la comunidad (véase el Anexo B2). Mientras algunos de los dirigentes reúnen a las personas que formarán el grupo comunitario, se pedirá a otros que acompañen al equipo en un paseo por la comunidad —un «paseo de identificación»— (véase el Cuadro 11-B). Si en el equipo hay cuatro o más personas, el equipo podrá dividirse en parejas y pasear en direcciones distintas. En el caso de que deba hacerse un cálculo aproximado del número de personas de la comunidad, una pareja se encargará de ello, mientras los demás emprenden el paseo de identificación. Se comenzará por bosquejar un mapa de la comunidad para identificar los recursos que se han perdido y los que todavía puedan servir para la recuperación, así como los medios de subsistencia, los servicios comunitarios y otras actividades en curso o que hayan cesado. Esta medida puede ser particularmente conveniente tras una catástrofe repentina o en una situación de conflicto.
Cuadro 11-B Paseo de identificación Qué hacer
Se paseará de un extremo al otro de la comunidad con uno o dos miembros de la comunidad (preferiblemente un hombre y una mujer) como guías. Se les preguntará acerca de lo que se observe sobre la marcha. Se preguntará a los guías y a las personas que se encuentre en el camino que expliquen lo que ha ocurrido y por qué las cosas están como están.
Si se parte de cerca del centro de la comunidad, se hará rodar una botella (o un lápiz) y se caminará en la dirección en que se detenga, después se volverá al centro y se caminará en la dirección opuesta.
Se efectuarán desvíos para visitar lugares de interés específico, como centros de socorro, mercados, clínicos, escuelas y fuentes de agua, y se volverá después a la dirección original.
Si un lugar importante no ha podido ser visitado por encontrarse lejos de la dirección elegida, se le hará una vistita especial.
Se visitarán hogares seleccionados al azar, por ejemplo cada décima casa. En los hogares que se visite, se preguntará si se puede ver a personas enfermas o a niños o adultos muy delgados. (Si no se pregunta, quizás no se tenga ocasión de verlos.)
Se anotará la hora del día.
Qué observar y anotar y sobre qué preguntar
El alcance de los daños; qué se ha visto afectado y qué no.
Qué hacen las mujeres, los hombres y los niños; su condición física.
La producción alimentaria y otras actividades económicas.
Si los servicios de enseñanza, salud y otros servicios sociales funcionan.
La variedad y cantidad de alimentos y otros productos esenciales disponibles en los hogares y mercados.
El nivel de actividad y los precios en los mercados.
La preparación de los alimentos y los hábitos de comer y beber.
Fuentes/abastecimiento, recogida e instalaciones de almacenamiento de agua.
110 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
El estado general de limpieza/saneamiento; cualesquiera peligros evidentes para la salud.
Cualesquiera signos evidentes de malnutrición (edema, delgadez extrema, bocio).
El estado general de las carreteras; los medios de transporte disponibles.
La importancia y los límites de las observaciones La observación es un parte importante de toda evaluación, pero no siempre es fácil interpretar lo que se observa. Es sumamente útil para generar preguntas complementarias en las entrevistas posteriores. Existen varias razones por las que hay que ser cuidadoso al interpretar lo que se observa: •
Casi con toda seguridad la muestra de observaciones será pequeña y elegida intencionalmente; tal vez no sean representativas de la situación general en la comunidad. Supongamos que alguien observa un grupo de cabras en una aldea y parecen estar en malas condiciones: ¿es este pequeño grupo típico del conjunto de la aldea o es que los animales más sanos han abandonado ya la aldea hasta el día siguiente?
•
La interpretación de lo que se ve puede muy bien requerir conocimientos especializados. Este es el caso, por ejemplo, del estado de los cultivos, el estado nutricional de los niños y la condición física de los animales.
•
Las observaciones solamente serán útiles si se tiene algo con que compararlas. ¿Se habría visto lo mismo si se hubiera visitado la aldea a la misma hora del día y la misma época del año antes de que se desencadenaran los problemas actuales? Por ejemplo, puede observarse que a las márgenes de las carreteras se vende mucho carbón, pero puede que esto sea perfectamente normal en esta zona y época del año.
Las observaciones de las personas que conocen bien la zona revisten mucha más importancia que las de las personas que visitan la zona por primera vez.
Si se lleva a cabo una encuesta sobre hogares, llegados a este punto habrá que seleccionar los hogares que se encuestarán, de conformidad con el procedimiento de muestreo convenido. Los encuestadores podrán entonces comenzar las entrevistas en los hogares mientras el resto del equipo continúa la entrevista con el grupo comunitario y unas cuantas entrevistas con los subgrupos. Realización de la entrevista con el grupo comunitario y los informantes clave Se dará inicio a la entrevista dando las gracias a los participantes por prestar su tiempo. El entrevistador se presentará, explicará la finalidad de su visita y pedirá a los participantes que le cuenten a qué se dedican. (Se estudiará cuidadosamente si es una buena idea o no anotar los nombres de los informantes. En algunas comunidades, el no hacerlo sería considerado como una muestra de mala educación. En otras situaciones, puede aumentar las expectativas de los entrevistados de recibir asistencia en el futuro o, por el contrario, coartar la voluntad de las personas de hablar abiertamente.) Se tomará buena nota de los subgrupos de población representados y después, durante la entrevista, se intentará que el mayor número posible de participantes —y personas de todos los subgrupos— contribuya al debate. Se recabará información sobre los temas enumerados en la guía para la realización de entrevistas con grupos comunitarios (preparada en el marco de la actividad 7), aunque esta guía se utilizará con flexibilidad, no como si fuera un cuestionario. Se dará la posibilidad a los participantes de que expresen sus propias preocupaciones y perspectivas. Véase el Anexo C3 para obtener orientaciones generales sobre la coordinación de las entrevistas/debates con grupos. Se emplearán las técnicas participativas que se hayan acordado en el plan de la evaluación.
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 111
A menudo será útil, si se dispone de tiempo, empezar por: •
examinar y elaborar rápidamente un mapa esquemático en que se señalen los recursos que se han perdido y los que todavía puedan servir para la recuperación, así como los medios de subsistencia, los servicios comunitarios y otras actividades en curso o que hayan cesado;
•
confirmar el cuadro cronológico de los acontecimientos que han afectado el bienestar de la comunidad en los últimos meses o años;3 y
•
confirmar el calendario estacional, para aclarar el contexto actual y cómo puede evolucionar la situación en los próximos meses, incluidos cualesquiera riesgos estacionales que deban tenerse en cuenta.
Al analizar los medios de subsistencia y departir sobre las instituciones con que coopera la comunidad, podría ser útil construir un diagrama de Venn para dejar constancia de las diversas instituciones y la importancia relativa de cada una de ellas para la comunidad (véase el Anexo C17). (Si el grupo es amplio y heterogéneo, puede que los montoncitos proporcionales y otras técnicas participativas no sean adecuadas.) Si hay cuatro o más miembros del equipo de evaluación, dos miembros del equipo deberían llevar a cabo la entrevista con el grupo comunitario: uno se encargaría de coordinar la entrevista y el otro de tomar nota. Al mismo tiempo, los otros miembros del equipo deberían reunirse con los informantes clave identificados y procurar alejar a los dirigentes comunitarios y los curiosos de la entrevista con el grupo comunitario, para que pueda proceder sin distracciones ni interferencias. Si no pueden organizarse reuniones paralelas con el grupo comunitario y los informantes clave, se tendrá que o bien: i) intentar persuadir a los dirigentes y el resto de la comunidad de que guarden una distancia respetuosa, y después reunirse con los informantes clave después de terminar la entrevista con el grupo comunitario; o bien ii) combinar los dos grupos en una única reunión. La segunda opción, aunque no es la ideal, podría ser necesaria en el caso de una crisis de inicio repentino, cuando no se disponga de mucho tiempo. Otra opción sería comenzar con una reunión conjunta (con el grupo comunitario y los informantes clave juntos), completar el calendario estacional y el mapa comunitario conjuntamente —así como el cuadro cronológico si se trata de una crisis de inicio lento o en curso— y después separar los dos grupos para debatir cuestiones relativas a los medios de subsistencia, el acceso a los alimentos y su utilización, y los factores que afectan a estas cuestiones. Si se llevan a cabo entrevistas con subgrupos, tendrá que pedirse a los informantes clave y/o el grupo comunitario que identifiquen los subgrupos. Identificación y formación de los grupos Se pedirá a los informantes clave y/o el grupo comunitario que enumeren: •
los principales medios de subsistencia de los hogares de la comunidad (p. ej., agricultores de subsistencia, asalariados, pequeños comerciantes, jornaleros); y
•
cualesquiera otros factores que distingan a unos hogares de otros y afecten a su capacidad para hacer frente a la crisis actual (p. ej., condición social, origen étnico).
Sobre esta base, se procurará acordar un número reducido de subgrupos que hayan sido damnificados en distinta medida, y con distinta capacidad para hacer frente a la situación y recuperarse. Todos juntos, los subgrupos enumerados deberían constituir la mayoría de la comunidad. Si existen importantes desigualdades de riqueza en el seno de cada grupo de subsistencia, se realizará una clasificación en función de la riqueza (véase el Anexo C19) para determinar cómo diferencia la comunidad los hogares o grupos más pobres de los que son menos pobres. Cuando se hayan identificado los distintos subgrupos, se pedirá a los dirigentes comunitarios y a los informantes clave locales que reúnan a unos cuantas mujeres y hombres (entre cuatro y seis de cada uno) para representar a cada subgrupo. Si no se dispone de mucho tiempo, tal vez sea conveniente reunirse solamente con 3
El cuadro cronológico será especialmente importante en una emergencia de inicio lento o una crisis prolongada en curso.
112 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
los grupos más pobres y, quizás, sólo con mujeres, si la experiencia local indica que saben más que los hombres sobre los alimentos y cómo sobreviven los hogares. No obstante, es preferible reunirse también con hombres, dado que tienen asimismo perspectivas importantes y en muchas sociedades los hombres gestionan los recursos en el hogar (es decir, supervisan la plantación y la cosecha de los cultivos, deciden cuándo y dónde vender el ganado, compran los alimentos básicos, etc.). Realización de las entrevistas con subgrupos Se llevarán a cabo entrevistas separadas con las mujeres y los hombres en representación de cada subgrupo (o sea: una con las mujeres de los hogares de agricultores de subsistencia, una con los hombres de los hogares de agricultores de subsistencia, etc.). Se procederá de la siguiente manera: •
Se les dará las gracias por prestar su tiempo, se harán las presentaciones (normalmente debería haber dos miembros del equipo, un hombre y una mujer; uno para coordinar, el otro para tomar nota) y se les explicará la finalidad de la actividad: ayudar a «comprender cómo los hogares como el suyo hacen frente a la situación actual, cómo ven el futuro y qué problemas y obstáculos concretos afrontan».
•
Si se sospecha que el grupo no es homogéneo, se pedirá a cada participante cómo se ganan la vida normalmente los miembros de su hogar y cómo viven (sobreviven) en la actualidad. Esto debería permitir comprobar si el grupo es en efecto representativo del grupo socioeconómico/de subsistencia previsto.
•
Después se les pedirá que dejen a un lado su propia situación doméstica y hablen en nombre del subgrupo de población al que han sido elegidos para representar (p. ej., agricultores pobres o jornaleros) y respondan a las preguntas desde el punto de vista de un hogar «típico» de su subgrupo, no desde el de su propio hogar.
En el caso de que no sea posible organizar subgrupos de mujeres, se hará todo lo posible por recabar las opiniones de las mujeres durante las vistas aleatorias a los hogares (véase infra). En el marco de la Actividad 7 se habrá elaborado una guía para la realización de entrevistas con subgrupos. Esta guía deberá utilizarse con flexibilidad para reunir información sobre los temas enumerados. Deberá asegurarse que: •
se obtienen los datos específicos necesarios para el análisis del impacto sobre los medios de subsistencia y el acceso a los alimentos de la población y de cómo sobrevive (especialmente si no se realiza una encuesta sobre hogares paralela); y, al mismo tiempo
•
se alienta a los participantes a expresar sus propias preocupaciones y perspectivas sobre cuestiones que afecten a la situación actual y futura de sus medios de subsistencia y seguridad alimentaria, y se registra debidamente toda diferencia de opinión sobre cuestiones específicas que pueda surgir en la reunión con la comunidad.
Podrán utilizarse los montoncitos proporcionales (véase el Anexo C15) para conocer la importancia relativa, en valores porcentuales, de las diferentes fuentes de alimentos o ingresos, y la clasificación por comparación de pares (véase el Anexo C16) para simplemente clasificar las cosas por orden de importancia. Véase el Anexo C3 para obtener orientaciones generales sobre la coordinación de las entrevistas con grupos.
11.4 Observación de las condiciones y acopio de datos de los hogares
Producto previsto: Si la ESAE se sirve solamente de técnicas de valoración rápida, observaciones de unas cuantas visitas aleatorias para mejorar la comprensión del equipo acerca de la situación y confirmar o aclarar cuestiones que hayan surgido durante los debates en grupo. Si se realiza una encuesta sobre hogares: cuestionarios rellenados del número de hogares necesario, elegidos
Proceso de evaluación
Actividad 11c
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 113
conforme al procedimiento de muestreo convenido.
Visitas aleatorias a unos cuantos hogares La finalidad de estas visitas es verificar la plausibilidad de los datos recabados (la información obtenida) del grupo y los subgrupos comunitarios y comprobar de primera mano la situación. Se evitará visitar solamente las casas más cercanas o las que determinados miembros de la comunidad quieran mostrar. Hay dos posibilidades para elegir las casas que se visitarán: •
A raíz de los debates con los informantes clave a nivel local o el grupo comunitario podrán identificarse algunos tipos distintos de hogar en el seno de la comunidad y se pedirá a los informantes que lleven al equipo a un hogar típico de cada grupo. Una vez en el hogar, se pedirá a sus miembros que propongan otro.
•
Con el mapa esquemático de la comunidad podrán identificarse las zonas en que parecen estar concentrados los distintos grupos de subsistencia: los que tengan distintos niveles de acceso a los recursos, o que se hayan visto afectados de distinta manera. Se visitará algunas de estas zonas distintas (o todas ellas) y se elegirá al azar tres casas en cada una de ellas.
Cualquiera que sea el enfoque adoptado, no deberá asumirse que lo que se presencie en los hogares es representativo del conjunto de la comunidad y no deberán compilarse pseudoestadísticas basadas en las visitas aleatorias. Sin embargo, podrá contextualizarse la información recabada en reuniones y determinarse los aspectos que haya que estudiar más a fondo. En el Cuadro 11-C se proponen aspectos que habrán de estudiarse y sobre los que habría que preguntar durante esas visitas aleatorias a distintas casas.
Cuadro 11-C Visitas aleatorias a distintas casas Durante las visitas aleatorias a los hogares deberían indagarse aspectos concretos que haya que aclarar y confirmar tras los debates en grupo. Pueden incluir los siguientes: Estado material: idoneidad de la vivienda, vestimenta, material de dormir y artículos domésticos; Actividades de subsistencia: indicios de cualesquiera actividades o bienes productivos; cómo (y dónde) producen los miembros del hogar los alimentos u obtienen sus ingresos; Almacenamiento de alimentos: mecanismos e instalaciones para el almacenamiento de alimentos en el hogar; indicios de pérdidas incurridas durante el almacenamiento; Preparación de los alimentos: disponibilidad de los utensilios necesarios, hornos, locales para la molienda, agua y combustible para cocinar; preparación de alimentos que sean fáciles de digerir para niños muy pequeños, enfermos y ancianos, aparte de las comidas para la familia; Prácticas de cocina: si las prácticas de cocina consumen poco combustible; Prácticas de alimentación y cuidado de lactantes y niños pequeños: si se practica la lactancia natural y cómo se alimenta a los niños pequeños; cualesquiera riesgos evidentes para la salud de los lactantes y niños; Abastecimiento de agua: cantidad de agua almacenada, idoneidad de los contenedores de agua e la higiene del agua (en especial si los contenedores están cubiertos); Higiene y saneamiento: estado general de limpieza; sistemas de eliminación de desechos (sólidos y líquidos); indicios de la higiene personal; Salud: presencia de niños o adultos enfermos. Cuando se observen problemas, podrán formularse preguntas pertinentes como: ¿Dónde hay que ir para recoger combustible y agua? ¿A cuánta distancia está ese lugar? ¿Cuáles son las necesidades no alimentarias más importantes y cómo se compensan las necesidades alimentarias y las no alimentarias? ¿Han cambiado las prácticas de alimentación de los niños? ¿Son conscientes los adultos de los peligros de las prácticas deficientes? ¿A cuánta distancia están los retretes? ¿Hay miembros enfermos o han estado enfermos recientemente? En caso afirmativo, ¿dónde procuraron tratamiento? ¿Cómo obtuvieron medicamentos? ¿Cuáles son sus percepciones de la calidad del servicio?
114 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
Realización de una encuesta sobre hogares: entrevistas en hogares Si se va a llevar a cabo una encuesta sobre hogares, los encuestadores deben seleccionar el número necesario de hogares conforme al procedimiento de muestreo convenido y comenzar pidiendo educadamente al jefe de cada hogar seleccionado si están dispuestos a participar en la encuesta. En el Cuadro 11-D se explica cómo puede utilizarse una baraja de cartas para seleccionar las casas al azar.
Cuadro 11-D Cómo utilizar una baraja de cartas para el muestreo Las cartas pueden ser un instrumento útil para el muestreo. Pueden utilizarse más fácilmente que las tablas de números aleatorios. Pongamos por caso que hubiera que elegir 25 hogares mediante muestreo probabilístico de un total de 240 hogares en 30 cuadras. Si se dispusiera de tiempo suficiente, podría elaborarse una muestra de 24 hogares en una única etapa, por ejemplo: se elegiría sistemáticamente 1 hogar de cada 10 hogares (=240 / 24) utilizando un mapa. Sin embargo, si no se tiene un mapa y no se dispone de tiempo para preparar uno, entonces el muestreo en dos etapas es útil y eficaz. Primeramente, se enumerarán todas las cuadras (sistemáticamente o al azar) comenzando por la «cuadra 1» hasta la «cuadra 30». En segundo lugar, se elegirán tres cuadras y luego se escogerán ocho hogares en cada una de las cuadras seleccionadas, de la siguiente manera: 1) 2) 3) 4) 5) 6) 7) 8)
se extraerán tres cartas, a saber: el «joker» o comodín (como cero «0»), «1» y «2» se mezclarán las tres cartas se extraerá una para la selección del primer dígito (p. ej., «1») se elegirán diez cartas, a saber: «joker» o comodín (como cero «0»), «1», «2»; hasta el «10» se mezclarán las diez cartas se extraerá una de ellas para la selección del segundo dígito (p. ej., «7») se creará el número combinando los dos números antes obtenidos (p. ej., «17») se repetirán los pasos 1 a 7 dos veces más para obtener dos números más (p. ej., «09» y «23») 9) se seleccionará la «cuadra 9», la «cuadra 17» y la «cuadra 23» 10) se escogerán ocho hogares mediante muestreo aleatorio con cartas o muestreo sistemático con un intervalo de muestreo adecuado (el número de hogares en la cuadra dividido entre 8). Si no se dispone de una baraja de cartas pueden improvisarse cartas escribiendo los números en diez trocitos de papel. Joker
1
2
♠
3
♠ ♠
♠ ♠ ♠
………
Se utilizarán estas tres cartas para elegir al azar el primer dígito
Se utilizarán estas diez cartas para elegir al azar el segundo dígito
Cómo acercarse a los hogares durante una encuesta sobre hogares
9 ♠ ♠ ♠ ♠♠ ♠ ♠ ♠ ♠
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 115
Los encargados de realizar la encuesta se presentarán y explicarán que se está llevando a cabo una encuesta para comprender cómo obtienen y utilizan las personas sus alimentos, así como otros artículos y servicios fundamentales, y que desean formular una serie de preguntas al respecto. Si se van a tomar medidas antropométricas a los niños para establecer una correlación entre el estado nutricional y los indicadores de la seguridad alimentaria o características socioeconómicas, se explicará que también se desea pesar y medir a los niños mayores de 6 meses y menores de 5 años de edad. Se insistirá en que son ellos quienes deben decidir si participan o no en la encuesta, pero que su participación sería muy bienvenida. Se les comunicará cuánto durará la entrevista. No debería durar más de 45 minutos. Se les explicará que sus respuestas (y las medidas a sus niños, si se toman) se combinarán con los datos de todos los demás hogares participantes. Los datos no se facilitarán por separado. Sus datos serán confidenciales. Se les preguntará de nuevo si desean participar en la encuesta.
Importancia de mantener alta la moral de los encuestadores en una encuesta sobre hogares Es importante mantener alta la moral del equipo para asegurar la calidad de la encuesta y que la tarea de entrevistar no se convierte en una rutina. A continuación se plantean algunas propuestas: •
Se evitará que los encuestadores pasen más de dos semanas consecutivas lejos de sus familias, si es posible.
•
Se asegurará que los encuestadores saben exactamente cuánto y cuándo cobrarán y se evitarán las demoras en el pago. Se garantizará que el dinero para los gastos (p. ej., prestaciones para comidas) se paga por adelantado.
•
Cuando sea posible los encuestadores trabajarán en parejas. Podrán llevar a cabo entrevistas simultáneas en casas vecinas. Esto aumenta la sensación de seguridad y así pueden ayudarse a tomar decisiones sobre la búsqueda de las casas, etc.
•
Dentro de las limitaciones que imponga el volumen de trabajo, se procurará que los entrevistadores dispongan como mínimo de una pequeña pausa al mediodía y al final de cada día laborable para descansar, así como un día libre durante los fines de semana. De lo contrario, se cansarán excesivamente y esto afectará a la calidad de su trabajo.
[Adaptado de Urban Inequities Survey Manual, borrador, Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU-Hábitat), Nairobi 2005]
11.5 Recopilación de datos sobre los mercados
Producto previsto: Una descripción de cómo funcionan actualmente los mercados de la zona en comparación con la época anterior a la perturbación/crisis, y datos específicos sobre i) los niveles y las tendencias de los precios de los alimentos comparados con lo que sería normal para la estación, ii) la escala de salarios, iii) la relación del intercambio para los productores de ganado y otros productos, y iv) las posibilidades de comprar alimentos a nivel local, en el caso de que se considere adecuada una respuesta basada en la ayuda alimentaria.
Proceso de evaluación
Actividad 11d
116 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
¿Por qué?
La mayoría de las personas (especialmente los pobres) depende de los mercados para satisfacer algunas de sus necesidades alimentarias (o todas ellas) y conservar sus medios de subsistencia —para obtener los ingresos (de la venta de productos, el trabajo o los servicios) e insumos necesarios para las actividades productivas—. En consecuencia, es fundamental saber cómo ha afectado la perturbación/crisis a los mercados, cómo funcionan actualmente y cómo cabe suponer que se comporten en los próximos meses para comprender la situación de los medios de subsistencia y la seguridad alimentaria de los hogares, así como la situación general del suministro alimentario y la disponibilidad de alimentos en la zona. También es necesario analizar el mercado para determinar si, en el caso de que se considerara adecuado aplicar una respuesta basada en el suministro alimentario, podrían comprarse los alimentos a nivel local sin desbaratar indebidamente el mercado.
¿Dónde?
En la sede provincial y de distrito y los lugares/comunidades visitados en la zona afectada, así como en las ciudades cercanas, incluidos los cruces fronterizos en el caso de zonas cercanas a la frontera con los países vecinos.
¿Por quién?
Un miembro de cada equipo de evaluación elegido por sus conocimientos sobre cuestiones económicas/comerciales, así como otros miembros del equipo a quienes puede encomendarse la recopilación de datos específicos en los mercados locales, después de recibir orientación al respecto.
¿Cómo?
Mediante encuentros y conversaciones con comerciantes y transportistas mayoristas y minoristas, visitas a mercados de alimentos y de otro tipo, observaciones sobre los productos disponibles y los que no lo están, comparaciones de precios con los valores normales para la estación, formulación de preguntas a los compradores y vendedores sobre los motivos de cualesquiera diferencias y si las pautas del comercio han cambiado. (Los datos allegados sobre el terreno que se describen en esta sección complementarán y se analizarán conjuntamente con los datos secundarios y de otro tipo recopilados a nivel nacional sobre las operaciones comerciales en el conjunto del país, que se describen en el Capítulo 4.)
El análisis del mercado es importante en cualquier zona en que una parte considerable de su población dependa de los mercados para satisfacer alguna de sus necesidades alimentarias (o todas ellas) o conservar sus medios de subsistencia —para obtener sus ingresos (de la venta de productos, trabajo o servicios) o los insumos necesarios para las actividades productivas—. En consecuencia, deberá estudiarse la situación de los mercados de: •
alimentos básicos (tanto los mercados al mayor como al por menor);
•
combustible para cocinar y doméstico;
•
trabajo;
y otros mercados que revisten una importancia particular para la seguridad alimentaria de la población de interés, como por ejemplo el mercado ganadero y el mercado de los servicios financieros que proporciona créditos o microfinanciación a los productores y comerciantes. Deberá estudiarse: •
cómo funciona normalmente el mercado;
•
cómo funciona en la actualidad y, si no funciona normalmente, por qué;
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 117
•
cuál es el precio de los alimentos de primera necesidad, los cultivos comerciales y los productos no alimentarios básicos en comparación con el precio normal para esta época del año y, si hay diferencia, por qué (si se trata de un cambio en la oferta o la demanda);
•
las perspectivas de la oferta, la demanda y los precios en los próximos meses; y
•
si será posible y conveniente comprar alimentos a nivel local y, de ser así, cuándo y en qué medida.
Durante una evaluación rápida, el objetivo es hacerse una idea de las condiciones del mercado, verificar la plausibilidad de la información recibida de otras fuentes e identificar los aspectos sobre los que haga falta investigar más a fondo. Con la evaluación detenida se obtendrá información más detallada y precisa, toda vez que los datos relativos a los cambios de los precios y la disponibilidad estarán a cargo del personal supervisor durante las actividades periódicas de supervisión. En todos los casos, deberá comenzarse por: •
•
conocer los pesos y medidas empleados en los mercados locales; o
comprobar a qué corresponden esas medidas en kilogramos (o libras) y metros (o pies y pulgadas);
o
registrar los datos en función de los pesos y medidas locales, y convertirlos después (al preparar el informe) en unidades «internacionales»;
o
utilizar las propias escalas para comprobar de forma aleatoria las cantidades que estén pesando en realidad los comerciantes.
ponerse de acuerdo sobre las variedades y calidades específicas de los alimentos o la edad y el sexo del ganado para el que se recopilarán los datos sobre la disponibilidad y los precios.
Los mercados son un buen lugar para recabar información que no se limite al mercado El principal objetivo de la recopilación de datos en los mercados es comprender las condiciones del mercado. Sin embargo, los mercados de distrito pueden ser también un buen lugar para recabar información sobre lo que está ocurriendo en la localidad y sus alrededores. Se aprovechará esta oportunidad sobre todo si no se puede viajar extensamente.
Descripción y clasificación del mercado de alimentos Se procurará determinar la importancia del mercado y cómo se vincula con otros mercados antes de intentar averiguar los cambios en los precios. Para allegar esta información, se preguntará: •
¿Qué zona abastece el mercado? ¿Quién vende y quién compra en el mercado? ¿Vienen los agricultores de todo el distrito para vender en el mercado o venden en otra parte?
•
¿Es el mercado normalmente excedentario o deficitario? Un mercado excedentario es aquél en que, en un año normal, los productos se comercializan al exterior, es decir: los comerciantes compran productos en ese mercado para venderlos en otros mercados. Un mercado deficitario es aquél en que, en un año normal, los comerciantes traen más productos de otros mercados de los que se llevan.
•
¿De dónde proceden los suministros durante las distintas estaciones? ¿Qué proporción procede de la producción local y qué proporción de otros mercados o zonas? ¿Qué otras zonas? ¿Cuáles son los obstáculos (en tiempos normales y en la actualidad) para la introducción de suministros de otras zonas?
•
¿A dónde se llevan los productos locales durante las distintas estaciones? ¿En qué proporción? ¿Hacia dónde? ¿Cuáles son los obstáculos (en tiempos normales y en la actualidad) para el transporte de suministros a otras zonas?
•
¿Es competitivo el mercado? Si hay muchos comerciantes, probablemente compitan entre sí. Si son pocos los comerciantes, es posible que exista (o se cree) un oligopolio, y que los comerciantes fijen los
118 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
precios. Se procurará averiguar aproximadamente cuántos comerciantes operan, si se reúnen periódicamente o si pertenecen todos a la misma familia. ¿Han organizado una cooperativa o asociación? Qué buscar y con quién hablar en un mercado Es posible hacerse una buena idea de lo que se vende y de quién lo vende dando un paseo por el mercado. Al pasear, se observará lo que se compra y vende y se hablará con una pequeña muestra de comerciantes, compradores y vendedores de los principales productos alimentarios básicos comúnmente producidos y vendidos en la zona. Se utilizarán como guía las reglas de conducta que figuran en el Cuadro 11-E y se recordará que: •
hay que procurar entrevistar a una mezcla equilibrada de comerciantes muy pequeños (que vendan menos de 50 a 500 kilogramos de productos) y comerciantes que vendan más. Cuando sea posible, se incluirá a los agricultores que vendan directamente sus productos en el mercado y a los intermediarios.
•
que al entrevistar a los comerciantes de animales, se procurará hablar con los que vendan distintos tipos de animales (con inclusión de animales de carga) y con distintos tamaños de hatos.
•
no se confiará en la información que dé un único comerciante.
Estas entrevistas deberán ir a cargo de personal nacional, cuando sea posible, para aumentar las posibilidades de obtener información exacta sobre los precios (para evitar que los comerciantes abulten los precios cuando su interlocutor es un extranjero). Cuando haya distribuciones de alimentos en curso en la zona, se comprobarán los precios antes y después de esas distribuciones. En las zonas con déficit de alimentos en que pueda necesitarse asistencia de socorro, se procurará averiguar el precio en la explotación (es decir: el precio que percibe el agricultor) y los precios al por menor (o sea: los precios que pagan los consumidores). En estos casos, se prestará atención a los comerciantes que compran directamente a los agricultores y los que venden directamente a los consumidores. En las zonas con excedentes de alimentos la atención se centrará en una muestra mayor de comerciantes, que incluya a los mayoristas. Las conversaciones con los comerciantes mayoristas ayudarán a comprender cómo funcionan los mercados de diversos tipos de productos; los vínculos y relaciones con los mercados del resto del país y los países vecinos; las variaciones estacionales en la oferta y la demanda de los mercados; los factores que influyen en los precios; y las posibilidades de comprar alimentos o productos no alimentarios a nivel local. Asimismo, se procurará entrevistar a pequeños molineros: normalmente conocen bien la situación actual de la oferta y la demanda. Cuando haya personas desplazadas, podrá recabarse información en cualquier momento en los mercados no organizados que funcionen diariamente en el asentamiento. Las indagaciones en los mercados locales cercanos deberán llevarse a cabo en los días de mercado.
Cuadro 11-E Acercarse a los comerciantes La información sobre el mercado puede ser de carácter confidencial y a menudo los comerciantes no están dispuestos a dar información a extraños, especialmente si no tienen permiso o no pagan impuestos. Es muy probable que faciliten precios manipulados si creen que hablan con un comprador: quizás haya que «regatear» para obtener un precio razonable. Reglas de conducta: •
se presentará la finalidad del examen como: «Comprender mejor las condiciones del mercado y los precios». No deberá decirse que se están evaluando las transferencias de ayuda alimentaria, la reventa o el impacto de la ayuda alimentaria en el mercado, dado que esto condicionará las respuestas.
•
deberá asegurarse que el comerciante sabe que el miembro del equipo no está ahí para
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 119
comprobar permisos o recaudar impuestos. Es mejor no llegar al mercado en un vehículo que lleve distintivos o matrículas del gobierno, las Naciones Unidas o una ONG. •
el miembro del equipo procurará recordar lo que se le cuente y no tomar notas, salvo de los precios, puesto que esto suele poner nerviosos a los comerciantes.
•
Siempre se cotejarán las respuestas de los comerciantes con las de los minoristas y compradores.
Deberá tenerse presente que se está alterando su trabajo, por lo que se acabará rápido. La entrevista normalmente será de carácter informal.
Conocer las condiciones del mercado de alimentos Se comprobarán los precios actuales de los alimentos de primera necesidad y se preguntará en qué se diferencian esos precios de los «normales» para esa época del año o de los precios en la misma época del año pasado4. Si se considera que son bastante diferentes, se averiguará por qué. Los motivos pueden obedecer a factores relativos a la oferta, tales como:
•
las perspectivas de malas cosechas para la campaña;
•
las malas cosechas de la última campaña;
•
los comerciantes no pueden introducir productos básicos en el mercado debido al estado de las carreteras o a la falta de transporte; o
•
los comerciantes retienen los cereales para aumentar los precios.
Podrían también estar relacionados con las tendencias de la demanda, tales como:
•
más personas de lo normal compran cereales a nivel local;
•
los comerciantes vienen de fuera para comprar grandes cantidades; y
•
la inmigración ha provocado un aumento de las personas que compran alimentos.
Se preguntará si se han producido cambios importantes en lo que compran las personas. Si compran menos productos caros y relativamente más alimentos baratos, esto podría indicar que sufren un descenso de los ingresos. Se preguntará a los vendedores y compradores cómo prevén que cambiarán los precios y la disponibilidad en los próximos meses. Conocer las condiciones del mercado ganadero En las zonas en que la ganadería desempeñe un papel importante en la economía local, se comprobarán las condiciones del mercado ganadero preguntando:
4
•
el precio de un animal sano comparado con el precio normal para esta época del año. Si los precios no son los normales, ¿por qué?
•
las condiciones corporales de los animales en venta. ¿Son más o menos sanos de lo habitual en esa época del año? ¿Son más gruesos o más delgados?
•
La edad y el sexo de los animales en venta comparado con lo normal. ¿Se venden más o menos animales jóvenes? ¿Hay más o menos hembras en venta? ¿Hay más o menos animales de tiro en venta?
Téngase en cuenta que el concepto ‘normal’ no es sencillo, especialmente cuando la producción local de cultivo o ganado normalmente varía considerablemente de un año a otro, o cuando existe una elevada tasa de inflación, o en situaciones de crisis prolongada.
120 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
•
Los motivos de que los comerciantes hayan puesto en venta sus animales (se preguntará a unos cuantos vendedores). Esto dará una idea de si se vende a precios desfavorables en la zona.
Se preguntará a los vendedores y compradores cómo prevén que cambiarán los precios y la disponibilidad en los próximos meses. Conocer las condiciones del mercado de trabajo remunerado En las zonas en que el trabajo remunerado temporal sea una fuente significativa de ingresos para los hogares pobres o sea una fuente secundaria de ingresos importante, se averiguará: •
¿Cuál es el jornal en el mercado inmediato para la mano de obra no cualificada? (El salario en el mercado inmediato es el salario que perciben las personas que «aparecen el mismo día», no el de las personas contratadas para varios días. Éste a veces recibe el nombre de «salario para la mano de obra temporal».)
•
¿En qué se diferencia este salario de la norma para esta época del año? Si el salario es considerablemente superior o inferior a lo normal, se averiguará por qué. La razón radicará o bien en la oferta (más o menos personas que buscan trabajo) o bien en la demanda (más o menos personas contratadas), o en la inflación general.
•
¿De dónde vienen los trabajadores? Si proceden de localidades mucho más alejadas de lo habitual, podría ser un indicio de que existe una mayor oferta de mano de obra, es decir: más personas buscan trabajo temporal.
•
¿Cuántos días al mes trabajan?
•
¿Emigran los trabajadores de la zona? En caso afirmativo, ¿adónde van y por qué?
Es más difícil recabar información sobre el mercado de trabajo que sobre los mercados de alimentos y ganado. A veces el mercado de trabajo tiene una ubicación física, por ejemplo un lugar al lado de la carretera donde los trabajadores se reúnen cada mañana en espera de trabajo, pero a menudo no es éste el caso, por lo que habrá que indagar de manera informal cuando se presente la ocasión. Por ejemplo, puede ser posible realizar una entrevista muy rápida con un grupo de trabajadores en un campo o una obra de construcción, o buscar al principal hacendado (y principal empleador) en una aldea para conversar sobre cuestiones relativas al trabajo temporal. Y, por supuesto, en las entrevistas oficiales realizadas con los grupos o subgrupos comunitarios pueden incluirse preguntas sobre el trabajo temporal. Evaluación de la capacidad adquisitiva local Llegados a este punto, las indagaciones sobre el mercado deberán dar una idea de si los precios actuales de los alimentos de primera necesidad son bajos en comparación con los precios normales para la época del año y podrían indicar la existencia de excedentes. Deberá comprobarse:
5
•
Si se están transportando alimentos fuera de la zona y, de ser así, en qué cantidades.
•
¿Adónde se llevan los alimentos? ¿Se llevan muy lejos o solamente a los mercados cercanos? ¿Se transportan más lejos de lo habitual? (Cuanto más lejos se transporten los alimentos, más probabilidades habrá de que existan importantes excedentes.)
•
¿Cómo se transportan los alimentos, en grandes camiones (más de tres toneladas), burros o bicicletas? Puede obtenerse una idea aproximada del número medio de camiones que se cargan cada día, o incluso del número de bicicletas o burros.5
•
Si hay obstáculos importantes para sacar alimentos de la zona y, en caso afirmativo, cuáles son. (Las compras locales pueden ser especialmente eficaces cuando los comerciantes privados no pueden transportar por sí mismos las existencias.)
Un estudio realizado en el África meridional en 2004 reveló que se estaba transportando una cantidad sorprendente de alimentos de Mozambique a Zimbabwe en bicicletas: ¡había muchas bicicletas!
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 121
Podrá deducirse que existen excedentes de alimentos, pero que los alimentos no están siendo enviados al exterior, si se ve o escucha que:
•
las existencias de alimentos comienzan a pudrirse o a infestarse gravemente como consecuencia de la deficiente reposición de las existencias;
•
los productos alimentarios básicos se almacenan al aire libre porque los graneros están llenos; o
•
hay quejas de que faltan sacos.
11.6 Procesamiento de los datos recopilados sobre el terreno
Proceso de evaluación
Actividad 11e
Producto previsto: Los datos recopilados se resumen en matrices o se introducen en una base de datos para su análisis. Los registros originales en papel se guardan de forma segura y sistemática, de modo que puedan recuperarse cuando sea necesario.
¿Por qué?
Para que los datos puedan analizarse eficazmente y puedan consultarse los distintos registros cuando sea necesario.
¿Cuándo? ¿Por quién?
Los datos obtenidos en las entrevistas con informantes clave y grupos y subgrupos comunitarios deberían ser procesados inicialmente el mismo día por el equipo de evaluación, que interrumpiría sus actividades durante unos días para completar el procesamiento (y el análisis inicial sobre el terreno) de los datos recabados hasta entonces. Los cuestionarios de la encuesta sobre hogares deberían ser procesados diariamente por el jefe/supervisor del equipo sobre el terreno a medida que los vayan entregando los encuestadores, y deberían remitirse al centro de procesamiento de datos (CPD) central cada pocos días mientras prosigue la encuesta. El CPD debería comenzar a procesar los cuestionarios inmediatamente cuando lleguen del exterior y completar el procesamiento en el plazo de 2 ó 3 días después del recibo de los últimos cuestionarios.
¿Cómo?
Los protocolos normalizados para la gestión y el procesamiento de los registros en papel deben elaborarse en el marco de la Actividad 7 y observarse escrupulosamente durante el trabajo de campo. Los datos procedentes de las entrevistas con los informantes clave, los grupos y los subgrupos comunitarios deberían trascribirse en matrices resumidas (si el número de registros es reducido) o introducirse en una hoja de cálculo, como Excel (si el número es grande) y examinarse para que sean completos y coherentes. Las hojas de registro o libretas originales deben archivarse cuidadosamente. Los cuestionarios de la encuesta sobre hogares deberían verificarse sobre el terreno, introducirse en sobres y cajas claramente marcados y transportarse al CPD, donde se gestionarán correctamente y los datos se introducirán en un programa óptimo de gestión de datos (como EpiInfo) y se filtrarán. Los cuestionarios se catalogan y almacenan por comunidad, distrito y provincia.
Técnicas empleadas para gestionar los datos
122 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
Todas las evaluaciones recopilarán datos cuantitativos y cualitativos 6 y habrá que recurrir a una combinación de técnicas para procesar y analizar esos datos, como se indica en el Cuadro 11-F. En cualquier caso, el procesamiento y análisis de los datos será mucho más fácil si estos aspectos se examinan debidamente durante el diseño de los instrumentos de recopilación de datos (Actividad 7, véase la sección 8.3). Cuadro 11-F
Técnicas para gestionar (y analizar) los datos Número de entrevistas
Datos de la encuesta sobre hogares
Datos de la valoración rápida
Muchas
Pocas
Método de almacenamiento/gestión de datos
Método de análisis
Base de datos u hoja de cálculo amplias
Análisis mayoritariamente estadístico
Base de datos u hoja de cálculo sencillas Modelos de matriz resumida
Análisis mayoritariamente cualitativo
Documento descriptivo
Procesamiento de los datos de las entrevistas con informantes clave, grupos y subgrupos comunitarios Se prepararán listas de todas las distintas entrevistas por tipo (grupo comunitario, subgrupo del tipo 1, subgrupo del tipo 2, etc.) y zona (normalmente por zona de subsistencia). Estas listas se completarán cada día, se asignará un número a cada entrevista de la lista correspondiente y se escribirá el mismo número en el registro original de la entrevista. (Se tendrá mucho cuidado de registrar los datos geográficos —nombre de la comunidad, distrito, y provincia, y códigos cuando sea necesario— así como información sobre los participantes, normalmente el sexo y el rango de edad. Todo ello será útil al comprobar la información durante la consolidación y el análisis de los datos.) Cada dos o tres días se trascribirán los datos en matrices en formato Word o en una hoja de cálculo (p. ej., en Excel), asignando una matriz/hoja a cada tema de los datos reunidos, por ejemplo fuentes de alimentos, fuentes de ingresos. La matriz de las fuentes de alimentos se parecerá a la que figura en el Cuadro 11-G infra. En el caso de las fuentes de alimentos, los datos podrán ser proporciones (como en el Cuadro 11-G), clasificaciones (la más importante, la siguiente, etc.) o estimaciones de las cantidades reales (en kilogramos o medidas locales), en función de las preguntas formuladas. Los datos de los otros temas pueden consistir en texto, incluidas las respuestas del grupo y las observaciones y dictámenes de los entrevistadores sobre el grado de acuerdo e importancia (como indique la intensidad de las opiniones expresadas). Cuadro 11-G Ejemplo de una matriz para resumir las respuestas sobre las fuentes de alimentos Zona de subsistencia: xxxx Entrevista #
6
Producción doméstica
Tipo de subgrupo: p. ej., agricultores pobres Compras en el mercado
Donaciones
Ayuda alimentaria
Etc.
Algunos datos cualitativos podrán recopilarse mediante preguntas abiertas en cuestionarios para las encuestas sobre hogares, así como en reuniones con informantes clave, grupos y subgrupos comunitarios mediante las guías para la realización de entrevistas de carácter informal. En esas reuniones también se recabarán algunos datos cuantitativos, se realice o no una encuesta sobre hogares.
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 123
1
40%
30%
5%
25%
2
30%
35%
10%
30%
etc.
Pueden prepararse distintos textos descriptivos anotando las características de la situación general en cada comunidad, por ejemplo. Se procurará ser objetivo y evitar las tergiversaciones, captando al mismo tiempo las impresiones de los miembros del equipo encargado de realizar las entrevistas, que puede que no se incluyan en las notas. Se dará a todos los miembros del equipo la posibilidad de aportar sus observaciones y se tomará buena nota de ellas: los que no se encarguen de tomar notas durante las entrevistas pueden aportar información valiosa que no hayan intercambiado con nadie.
Cuadro 11-H Procesamiento de las respuestas a preguntas abiertas Los datos de las entrevistas con grupos incluirán respuestas a muchas preguntas abiertas; los cuestionarios de las encuestas sobre hogares pueden también incluir algunas respuestas de este tipo. En la mayoría de los casos habrá que, como segunda etapa del procesamiento, traducir la información de la respuesta a categorías y asignar un código numérico a cada categoría. Esto facilitará el análisis posterior de los datos y asegurará al mismo tiempo que las respuestas originales siguen estando disponibles para examen durante el análisis, en caso necesario. Por ejemplo, si se pregunta ¿por qué hay mujeres en la comunidad que no acuden a las visitas prenatales cuando están embarazadas?, las respuestas pueden referirse a los costos prohibitivos, la calidad de la atención, la distancia que hay que viajar, la preferencia por la atención de salud tradicional, la desconfianza hacia el sistema y la falta de dinero. Estas respuestas pueden codificarse de la siguiente manera: 1=costo, 2=distancia de viaje, etc. Estos códigos deben aplicarse coherentemente a todos los cuestionarios. Puede que se trate de un proceso largo y que las respuestas se interpreten subjetivamente, pero permite allegar datos mediante preguntas abiertas. (En consecuencia, permite la inclusión de preguntas en el instrumento de recopilación de datos sin constreñir las respuestas a una lista predeterminada, que podría limitar las respuestas y dar lugar a datos inútiles.)
Procesamiento de los cuestionarios completados de una encuesta sobre hogares El procesamiento de los cuestionarios para los hogares entraña las siguientes fases. Se describen a continuación: 1. Gestión de los cuestionarios en papel sobre el terreno 2. Gestión de los cuestionarios en papel en el centro de procesamiento de datos 3. Elección o elaboración de una metodología o programa para la entrada de datos 4. Entrada de datos 5. Filtrado de datos 1. Gestión de los cuestionarios en papel sobre el terreno Debe organizarse un sistema para garantizar que cada cuestionario completado pueda identificarse y ubicarse fácilmente en fecha más tardía. Esto puede ahorrar muchos quebraderos de cabeza y mucho tiempo en el procesamiento de datos y es especialmente importante en el caso de una encuesta que abarque a muchas comunidades o hogares. Los artículos necesarios se enumeran en el Cuadro 11-I. Cuadro 11-I
124 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
Artículos necesarios para la recopilación y gestión de los datos (lo que necesita cada equipo de evaluación) Material para el acopio de datos: • Suficientes cuestionarios en blanco, guías para entrevistas y otros formularios necesarios • Sobres de plástico para los cuestionarios (por si llueve) • Portapapeles para todos los encuestadores • Listas claras de los lugares de la muestra • Instrucciones para completar el cuestionario • Códigos para cada provincia, distrito, aldea, etc. Material para gestionar adecuadamente los cuestionarios completados: • Sobres grandes para los cuestionarios completados • Cuadros recapitulativos • Grapadora con grapas • Bolígrafos (azules o negros - NO bolígrafos rojos) para rellenar los cuestionarios • Cajas para organizar los sobres cuando se hayan rellenado los cuestionarios • Rotuladores para etiquetar los sobres y las cajas
A medida que los encuestadores rellenen los cuestionarios, deberían: •
introducir todos los cuestionarios de una misma comunidad (por ejemplo aldea, campamento o barrio urbano) en un sobre bien etiquetado grande para mantenerlos juntos. Se escribirá claramente el nombre de la aldea, distrito, provincia, etc. en cada sobre. Se emplearán sobres distintos para cada comunidad.
A medida que los jefes de equipo vayan recibiendo los cuestionarios completados de los encuestadores, deberán: a) Examinar cada cuestionario, para comprobar que esté completo y debidamente rellenado, y que la información dada es razonable. (Se trata de un asunto particularmente importante si los encuestadores trabajan con un amplio margen de autonomía y existe la más mínima sospecha de que puedan inventarse la información en los cuestionarios.) Cuando convenga, el jefe del equipo podrá introducir las primeras correcciones/alteraciones en los cuestionarios, como se describe en el Cuadro 11-J. b) Rellenar un cuadro recapitulativo para cada comunidad (es decir: para cada sobre) con: •
el nombre y códigos de la localidad; el nombre de los encuestadores; el número de cuestionarios completados; la fecha;
•
observaciones sobre el proceso de acopio de datos, como los problemas encontrados, las razones de que se hayan completado pocos cuestionarios, etc.;
•
sus observaciones sobre la comunidad y su cooperación en la evaluación o encuesta.
c) Colocar los sobres en cajas, si es necesario (una caja por cada distrito, por ejemplo). d) Enviar los cuestionarios completados al centro de procesamiento en lotes, tan a menudo como sea posible. Esto permitirá comenzar el proceso de comprobación y entrada de datos mientras sigue la recopilación de datos sobre el terreno.
Cuadro 11-J Corrección de errores sobre el papel •
Cuando el jefe del equipo o cualquier otro comprobador corrija errores o introduzca cambios en los cuestionarios completados, utilizará un bolígrafo ROJO para dejar claro cuáles son los datos originales y qué se ha añadido o cambiado posteriormente. Solamente se suministrarán bolígrafos rojos a las personas encargadas de introducir cambios o correcciones.
•
Siempre se tacharán las respuestas erróneas con una barra oblicua. NO se borrarán las respuestas, ni se
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 125
utilizará papel líquido ni goma de borrar. De esta manera, en el caso de que se introduzca una corrección, la respuesta original será todavía legible. •
No se rellenarán jamás las respuestas que falten, a menos que se sepa al 100% cuál sería la respuesta. ¡Es preferible que falten datos a que sean erróneos!
2. Gestión de los cuestionarios en papel en el centro de procesamiento de datos Debe implantarse un sistema en el centro de procesamiento para asegurar que las siguientes tareas se completan sistemáticamente a medida que los sobres o cajas de cuestionarios llegan del exterior: a) Organizar los cuestionarios en grupos, normalmente por provincia, distrito, u otra división geográfica. b) Asignar un único código de identificación (CI) a cada cuestionario, diferenciándolo de todos los demás cuestionarios de la encuesta. c) Examinar el número de cuestionarios y la manera en que se han completado. Para obtener orientaciones específicas sobre estos procesos, véase el Anexo C.11. 3. Elección o elaboración de una metodología o programa para la entrada de datos Si hay que introducir los datos en una base de datos, existen varios tipos de programas informáticos habituales para introducir y gestionar los datos de la encuesta y llevar a cabo un análisis. Los programas recomendados para la entrada y gestión de datos son EpiInfo 7 y Excel. (Podrá utilizarse Word para almacenar datos en texto descriptivo). Se han elegido por su amplia disponibilidad: EpiInfo puede bajarse gratuitamente de internet y Excel viene en la mayoría de paquetes de programas de Microsoft office y es la hoja de cálculo habitual en el PMA y muchas otras organizaciones. Pueden utilizarse otros paquetes de programas de bases de datos, como Access, para una gestión y análisis más avanzados de los datos. CSPRO es un programa gratuito de entrada de datos (disponible en www.census.gov) que tiene la ventaja añadida de exportar fácilmente datos a una gran variedad de modelos de programas de análisis. 4. Entrada de datos Para obtener información sobre la entrada de datos y el uso de EpiInfo a este respecto, véase el Anexo C.11. 5. Filtrado de datos Por ‘filtrado de datos’ se entiende el proceso de organización y corrección de datos en una base de datos. Estos cambios pueden ser sencillos y claros, como la recodificación de los datos sobre propiedad de la tierra reunidos en varias unidades distintas en una unidad normalizada, o puede basarse en elecciones subjetivas, como por ejemplo cómo armonizar respuestas contradictorias. Cuando mejor sea la organización del instrumento de la encuesta, la calidad del acopio de datos durante la proceso de encuesta, el diseño de la metodología o programa de entrada de datos, y la exactitud de la entrada de datos, menos filtrado de datos se necesitará. En el Cuadro 11-J se describen algunas técnicas sencillas. Cuadro 11-J Técnicas sencillas para el filtrado de los datos A continuación se proponen algunas técnicas sencillas para el filtrado de los datos. Pueden utilizarse otras técnicas en función del tipo de preguntas formuladas y las relaciones entre las preguntas, pero éstas son las básicas: • 7
Buscar valores atípicos. Los ‘valores atípicos’ son respuestas a una pregunta que se sitúan en los EpiInfo es un programa creado por los Centros de los Estados Unidos de América para el Control y la Prevención de Enfermedades. Puede descargarse gratuitamente de la web en la siguiente dirección: www.cdc.gov/EpilInfo/, donde puede encontrarse también apoyo en línea. Es ampliamente utilizado por los organismos internacionales de asistencia humanitaria y para el desarrollo (entre ellos el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, ACNUR y ONG importantes en el sector de la salud y la nutrición), por lo que podrá conseguirse apoyo de colegas a nivel local.
126 ■ Capítulo 11: Recopilación y procesamiento de los datos sobre el terreno
extremos o fuera del margen de las respuestas posibles. Por ejemplo, una edad de 140 años es claramente un valor atípico y debería eliminarse de la base de datos. A veces, la gama de posibles respuestas puede estrecharse todavía más gracias a la información de otras preguntas. Por ejemplo, si se anota que la edad de un cabeza de hogar es de 4 años, esta respuesta es claramente errónea y debe eliminarse. •
Buscar respuestas contradictorias. Por ejemplo, si un hogar informa de que no tiene acceso a la tierra, pero también informa de que produce una gran cantidad de maíz, lo más probable es que una de estas dos respuestas sea incorrecta. Otro ejemplo podría ser un hogar que informe de que no ha sufrido ninguna perturbación, y que luego clasifique sus tres peores perturbaciones o sus respuestas a perturbaciones experimentadas. El filtrado de estos errores a menudo implica una elección subjetiva. Si se toma una elección subjetiva y afecta a una gran cantidad de datos, debería informarse de esta elección con sus resultados. Otra posibilidad sería que no se hiciera ningún cambio y que se citaran los errores, dejando constancia de la poca fiabilidad de los datos.
•
En relación con el código de la ubicación geográfica, habrá que buscar aldeas o distritos que no existan en las provincias encuestadas. Hay que recordar que si esos datos se corrigen, entonces también habrá que cambiar el código de identificación único (si se basa en esos datos).
•
Comprobar que cuando se informa de las partes de un todo, éstas constituyan verdaderamente el todo. Por ejemplo, si un hogar informa de que tiene cinco niños de 16 años y de edades inferiores, y luego informa de que dos muchachos y una muchacha van a la escuela y una muchacha no va a la escuela, entonces hay un error. De nuevo, habrá que tomar una elección subjetiva si no existe más información para aclarar la cuestión.
Capítulo 12
Análisis de los datos; formulación de hipótesis de planificación En el presente capítulo se facilitan breves indicaciones generales sobre cómo analizar los datos y formular una hipótesis de planificación (o varias hipótesis de planificación alternativas) sobre cómo puede evolucionar la situación. Se facilitan orientaciones sobre: • el análisis de los datos cualitativos y cuantitativos, véase → sección 12.1 • el establecimiento de los parámetros básicos, véase → sección 12.2 • la formulación de hipótesis de planificación, véase → sección 12.3 En los capítulos 4 a 7 se describe el procedimiento de análisis de cada uno de los tres temas principales de la ESAE, las causas y el contexto general. Los análisis y la hipótesis o las hipótesis de planificación servirán de base para la identificación y el análisis de las posibles opciones de respuesta, como se describe en el capítulo 13.
Proceso de evaluación
Actividad 12 Producto previsto: i) Valoraciones o descripciones de los efectos netos de la perturbación/crisis y las medidas compensatorias (es decir: las necesidades por atender) en relación con cada uno de los tres temas ligados a la seguridad alimentaria. ii) Una descripción general de los problemas, que incluya las causas inmediatas y subyacentes, la evolución prevista de la situación y los riesgos y contingencias que deben tenerse en cuenta. iii) Una o más hipótesis de planificación. iv) Un resumen de los factores contextuales que deben tenerse en cuenta al examinar la idoneidad y viabilidad de las distintas posibles opciones de respuesta (en el marco de la Actividad 13).
¿Por qué?
Para decidir qué grupos necesitan asistencia (de haberlos), el tipo o tipos de asistencia más adecuados y cuándo se necesitará.
¿Cuándo?
Mediado el trabajo de campo, se realizará un análisis preliminar de los datos obtenidos en las entrevistas con comunidades y subgrupos, y en los dos días que sigan a la terminación del trabajo de campo se realizará el análisis final. El análisis de los datos derivados de los cuestionarios para los hogares se realizará cuando se haya completado la entrada y el filtrado de los datos (en el mejor de los casos, durante los dos días que sigan a la entrega de los últimos cuestionarios rellenados a la dependencia central de procesamiento de datos).
198 ■ Capítulo 12: Análisis de los datos; formulación de hipótesis de planificación
A continuación, se procederá al análisis general de los datos sobre los diversos temas y a la interpretación de esos datos a la luz de los factores contextuales. El proceso entero se completará a tiempo para que las conclusiones puedan examinarse con las partes interesadas unos días antes de que el equipo de evaluación presente su informe. ¿Por quién?
El análisis inicial de los datos recopilados por cada equipo sobre el terreno puede ir a cargo de un analista que no haya participado en la recopilación de los datos, quien después examinará sus conclusiones con el equipo competente para llegar a conclusiones comunes. El análisis final y la interpretación de los datos irá a cargo de todo el equipo de evaluación. Se podrá contratar o consultar a otros expertos locales para examinar y debatir la interpretación de las conclusiones.
¿Cómo?
Se reunirán los datos resumidos de las entrevistas con la comunidad y los subgrupos en una nueva serie de matrices, y a continuación: •
de los datos cuantitativos, se calcularán promedios, medianas y proporciones;
•
se examinarán los datos cualitativos para determinar pautas y correlaciones y, de este modo, preparar una descripción de la situación y deducir las causas de los problemas y las posibles tendencias futuras. Los datos de los cuestionarios para los hogares se analizarán estadísticamente mediante los programas informáticos apropiados para producir frecuencias, promedios y totales, según proceda, más intervalos de confianza y correlaciones. Las respuestas a todas las preguntas abiertas deberán clasificarse y codificarse según se describe en el Cuadro 11-H.
Los datos cuantitativos son datos que se expresan en valores numéricos, frecuencias, tasas o proporciones, como por ejemplo el número de comidas diarias, el número de encuestados que respondieron a una determinada pregunta de una determinada manera, las tasas de malnutrición, las proporciones de los ingresos perdidos. Los datos cualitativos son datos que se expresan en palabras, y no en valores numéricos: incluyen opiniones, explicaciones, observaciones, etc.
12.1 Métodos de análisis de datos cualitativos y cuantitativos Deberán estudiarse todos los datos de manera objetiva y sistemática conforme a las fases acordadas en el marco del diseño de la evaluación (véase la sección 10.1), y seguidamente deberán realizarse los análisis suplementarios que las conclusiones iniciales indiquen que podrían resultar de utilidad y aportar nuevos conocimientos. Habrá que ser objetivo: se dejarán a un lado todas las nociones preconcebidas y se estudiará el contenido de los datos. Se examinará cada una de las matrices en que se resumieron los datos en la fase inicial del procesamiento de los datos (véase la sección 11.6): •
Se detectarán cualesquiera «valores atípicos»: respuestas que son muy distintas de las demás respuestas de las entrevistas con los hogares o grupos del mismo subgrupo de población en la misma subzona, o cuyos valores son muy superiores o muy inferiores a los demás. Se comprobará el registro original y se corregirá el resumen si se ha cometido un error al transcribir los datos. Si no se trata de un error, se excluirá la respuesta del análisis.
•
Para los datos (numéricos) cuantificados, se calcularán rangos, medianas o puntos medios, o las frecuencias de determinadas respuestas codificadas.
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 199
Acto seguido, se crearán otras matrices para reunir los distintos datos de modo que puedan determinarse pautas y diferencias entre las distintas zonas y grupos de población. Por ejemplo, se hará una tabulación cruzada de las insuficiencias previstas del acceso de los hogares a los alimentos con arreglo a las características de la zona y la población. Si todo apunta a que pudieran existir diferencias considerables incluso entre los hogares de un mismo subgrupo de población, se procurará averiguar si las diferencias pueden tener su correlación con diferencias en otros datos de que se disponga sobre los hogares (p. ej. tamaño del hogar, sexo del jefe del hogar, etc.). Se compararán los resultados con los datos disponibles sobre la situación anterior a la crisis y los datos relativos a otros grupos de población y zonas. Habrá que preguntarse: ¿Son plausibles los datos y cualesquiera cambios que reflejen? ¿Cuál podría ser el motivo de los cambios? ¿Cuál es la significación de los cambios y las maneras con que la población intenta subsistir? Recuérdese que el análisis de los datos recabados mediante técnicas de valoración rápida deberá realizarse por fases, comenzando durante el proceso de recopilación de datos, como se indica en el Cuadro 12-A infra: Cuadro 12-A Fases del análisis de los datos cualitativos Cuándo
Cada tarde
Dónde
Sobre el terreno Examinar y debatir las observaciones de ese día con otros miembros del equipo
Análisis diario FInalidad
Determinar preguntas y cuestiones que habrán de abordarse al día siguiente
Examinar y buscar soluciones a cualesquiera problemas metodológicos Cuándo
Medidado el trabajo de campo
Dónde
Sobre el terreno Compilar y analizar las observaciones de las diversas entrevistas (mediante rotafolios u hojas electrónicas de cálculo)
Preparar productos provisionales (en la siguiente sección
Análisis provisional
puede encontrarse una lista de productos) Finalidad
Examinar los progresos realizados en la respuesta a las preguntas básicas planteadas en la descripción de los problemas, determinar la necesidad de seguir con el trabajo de campo, y el tipo de trabajo de campo necesario (entrevistas más uniformes para aumentar el tamaño de la muestra, entrevistas más centradas para investigar temas específicos, etc.)
Cuándo
Cuando se haya completado el trabajo de campo
Dónde
Sobre el terreno o en la sede Completar el análisis provisional y preparar los productos
Análisis final Finalidad
finales
Resumir las observaciones y sacar conclusiones de las mismas
Análisis de los datos cualitativos
200 ■ Capítulo 12: Análisis de los datos; formulación de hipótesis de planificación
Las técnicas más comunes son el análisis descriptivo, el análisis del contenido y el análisis inductivo, que a menudo se aplican en secuencia. •
Con el análisis descriptivo los resultados se organizan de manera lógica y se redactan en forma de texto. Se trata de una simple «comunicación de los resultados», una pura descripción de las experiencias, percepciones y prácticas de las personas. El análisis descriptivo se centra en el examen de la información, la identificación de las conexiones, las pautas y los temas comunes, la ordenación de los hechos y su presentación tal como son, sin añadir ninguna observación sobre su importancia.
•
El análisis del contenido se centra en el análisis de los informes descriptivos de las tendencias, temas o acontecimientos. Puede utilizarse para resumir información descriptiva o transformarla en información cuantitativa, y a menudo se emplea para establecer categorías de codificación para las tabulaciones cuantitativas. Los datos (de matrices, estudios de casos, entrevistas) se organizan por temas antes de ser resumidos. La utilización de citas directas y anécdotas es importante para resumir eficazmente la esencia de lo que se dijo o determinó. Cuando más de una persona trabaje con los datos, será importante que cada una haga su análisis del contenido y posteriormente comparen los resultados.
•
El análisis inductivo permite extraer temas, pautas o categorías de los datos en lugar de decidirlos antes de la recopilación y el análisis. Los analistas pueden utilizar las categorías elaboradas por las personas que llevaron a cabo la evaluación o preparar sus propias categorías sobre la base de su interpretación de los datos (tipologías construidas por los analistas). La finalidad principal de las tipologías es describir y clasificar la información. Existen varios programas informáticos, como Nudist, que ayudan en el proceso de clasificación.
Análisis de los datos cuantitativos El análisis de los datos cuantitativos debe planificarse con antelación de manera parecida a como se planifica la encuesta real. El análisis debe comenzar con estadísticas descriptivas sencillas, como frecuencias, tendencias centrales (media, modo, etc.) y gráficos sencillos. El promedio o media se utiliza para las variables numéricas y se obtiene con la suma de todas las puntuaciones o respuestas y dividiendo ese valor por el número de observaciones. La mediana es la observación media, indica que la mitad de las observaciones son inferiores y la otra mitad superiores a la mediana. No está influida por valores extremos. Por ejemplo, la mediana de los siguientes números (3, 6, 6, 7, 9, 13, 17) es 7, porque la mitad de las puntuaciones están por debajo y la otra mitad por encima. El valor más frecuente recibe el nombre de ‘modo’. Si varios valores comparten la mayor frecuencia, cada uno de ellos es un modo. ‘Media’ y ‘mediana’ dan una idea de centro, pero no de cuán dispersa o compacta es la distribución. La medida de la dispersión utilizada más comúnmente es la desviación estándar, que mide la dispersión respecto de la media. Los datos cualitativos darán sentido a los productos cuantitativos y ambos deberán presentarse de manera complementaria en el informe final. Asimismo, tal vez convenga preparar un informe independiente sobre las conclusiones cualitativas, especialmente cuando existan muchos datos, como ocurre a menudo. Los porcentajes y proporciones se utilizan y conocen ampliamente: son uno de los instrumentos más importantes para el análisis de los datos cuantitativos. Las proporciones se expresan con arreglo a la unidad y los porcentajes con arreglo a la centena. En otras palabras, un porcentaje es una proporción multiplicada por 100. No se calcularán porcentajes para menos de 30 casos. Los cuadros comunes derivados del análisis incluyen tablas simples o tablas de la distribución de la frecuencia (que utilizan una variable) y tablas bidireccionales o tabulaciones cruzadas (que utilizan dos variables). Las tablas bidireccionales o tabulaciones cruzadas son el instrumento básico para mostrar la relación entre dos variables.
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 201
Cuadro 12-B Ejemplo de un cuadro de distribución de la frecuencia Distribución del porcentaje de encuestados por valoración del cambio de la situación económica del hogar en el año que precede a la encuesta, por características socioeconómicas Características socioeconómicas Edad 15 a 34 35 a 49 49+ Sexo Mujer Varón Educación Sin escolarizar Enseñanza primaria incompleta Enseñanza primaria completa+ Situación económica Rico o pudiente Pobre o muy pobre Total
Empeoramiento (%)
Porcentaje total
Mejora (%)
Sin cambios (%)
15,6 14,3 10,2
50,9 40,0 44,4
33,4 45,6 45,4
100,0 100,0 100,0
9,7 18,1
39,8 51,0
50,4 30,8
100,0 100,0
3,7 15,9
42,6 47,5
53,7 36,7
100,0 100,0
20,3
42,9
36,8
100,0
30,2 6,9 13,5
58,8 39,8 44,8
11,0 53,3 41,7
100,0 100,0 100,0
Cuadro 12-C Observaciones sobre la obtención de rangos y puntos medios Cuando la cantidad que haya que analizar sea pequeña, no se justifica un análisis estadístico detenido. A continuación figuran las normas generales aplicadas en los análisis de la economía alimentaria para derivar rangos y puntos medios de 8 a 12 entrevistas. 1. Se enumeran los distintos resultados
2. Se ordenan en sentido ascendente
3. Se eliminan los valores superiores e inferiores para definir el rango. Se redondean los rangos al 5% más cercano.
28 32 38 38 42 35 21 28
21 28 28 32 35 38 38 42
21 28 28 32 35 38 38 42 Rango = 28% - 38% Redondeado al 5% más cercano = 25% - 40%
4. Se compara la mediana (valor medio) con el punto medio del rango.
21 28 28 32 ⎤ mediana = 35 ⎦ (32+35) ÷ 2 = 33,5 38 38 42 Mediana = 33,5% Punto medio del rango = 32,5%
202 ■ Capítulo 12: Análisis de los datos; formulación de hipótesis de planificación
5. Si la mediana y el punto medio del rango son parecidos, entonces se adoptará el punto medio para el cálculo. Si son dispares, se volverá a examinar el rango para comprobar si el valor superior o inferior que define el rango es un valor atípico. De ser así, se excluirá el valor atípico y se volverá a calcular la mediana y el punto medio. Si siguen siendo diferentes, se elegirá el que se considere más representativo. Fuente:
Food Security Analysis Field Kit, Analysis Guides, Dependencia de Apoyo Técnico del PMA-Food Economy Group, Sierra Leona, 2002
Cuando los datos se utilizan para analizar comportamientos, actitudes, opiniones, percepciones y creencias se emplearán algunas variables «explicativas» o independientes, que ayudarán a explicar el resultado de una variable dependiente. En el ejemplo que figura en el Cuadro 12-B, la valoración del cambio en la situación económica del hogar es la variación dependiente y puede analizarse mediante diversas variables independientes o explicativas como la edad, el sexo, la educación y la situación económica. Téngase en cuenta que los porcentajes deben crearse en la dirección de la variable independiente. Se trata del instrumento más básico para comparar y explicar las diferencias entre los subgrupos de la población de interés. Los análisis más complejos incluirán variables secundarias, que son nuevas variables creadas mediante la combinación matemática de una o más variables primarias. Por ejemplo, si se han recopilado datos sobre el tamaño medio de las explotaciones agrícolas en acres y el número total de acres cultivados, entonces puede crearse una nueva variable que represente la proporción de tierras cultivadas respecto de las tierras agrícolas. Se obtendrá así la proporción de tierras agrícolas que se estaba explotando. No habría ninguna necesidad de formular esta pregunta en el estudio.
Cuadro 12-D Análisis (comparación) de los distintos tipos de variables Se trabajará con dos tipos principales de variables en los análisis de datos cuantitativos: •
Variables continuas: variables que no tienen intervalos o niveles fijos, p. ej., la edad, el índice de masa corporal, los porcentajes de gastos en alimentos.
•
Variables categóricas: variables que tienen niveles o categorías específicos que normalmente se codifican y etiquetan, p. ej., el tipo de cultivo (1 = trigo, 2 = arroz, 3 = maíz, 4 = sorgo, 5 = mijo). Para simplificar el análisis, normalmente puede convertirse o recodificarse una variable continua en una variable categórica. Un buen ejemplo de ello es la edad de los niños. A menudo se allegan datos sobre los niños de 0 a 59 meses. El método habitual para analizar los datos relativos a los niños es mediante grupos de edad: 0 a 5 meses, 6 a 11 meses, 12 a 17 meses, 18 a 23 meses, 24 a 35 meses, 36 a 47 meses y 48 a 59 meses. Al recodificar, se asignaría un código a cada rango de edad, p. ej. 0 a 5 meses = 1, 6 a 11 meses = 2 y así sucesivamente. Al analizar las variables conjuntamente, las técnicas dependerán de los tipos de variables que se quiera comparar: •
Cuando se comparen dos variables categóricas, deberá utilizarse la tabulación cruzada. Si una de las variables categóricas es una bivariante afirmativa o negativa (con solamente dos niveles) y se asigna 0 al ‘no’ y 1 al ‘sí’, entonces pueden hacerse comparaciones de medias. El programa informático de análisis pedirá que se especifique la variable «dependiente» y la «independiente». Habrá que asegurarse de que la bivariante sea la variable «dependiente» y la otra variable categórica sea la «independiente».
•
Cuando se comparen una variable continua y una variable categórica normalmente se utilizarán comparaciones de medias (véase supra). Por ejemplo, puede compararse el porcentaje total de gastos en alimentos (una variable continua) con la principal actividad generadora de ingresos (una variable categórica), siendo la principal actividad generadora de ingresos la variable «independiente» y el porcentaje de gastos en alimentos la variable «dependiente».
•
Cuando se comparen dos variables continuas habrá que recodificar una de ellas en una variable categórica. Por ejemplo: si quiere comprobarse si existe una relación entre la
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 203
puntuación z del peso para la edad de los niños y la edad, lo mejor sería en primer lugar recodificar la edad de los niños en grupos de edad y después utilizar una comparación de medias tomando el grupo de edad como variable «independiente» y la puntuación z como variable «dependiente».
12.2 Establecimiento de los parámetros básicos La primera fase del análisis es establecer los parámetros básicos, como las zonas geográficas y los subgrupos de población que hay que distinguir, el calendario o calendarios estacionales de la zona o zonas concernidas y el cuadro cronológico de los acontecimientos que han afectado a la seguridad alimentaria en las distintas zonas en los últimos tiempos. Para ello: •
Se examinarán los mapas de las zonas geográficas que se utilizaron para planificar la evaluación (que se basaron en los datos disponibles sobre las zonas de subsistencia y agroecológicas anteriores a la crisis e informes iniciales sobre la gravedad del impacto general de la perturbación/crisis en diferentes zonas). Se perfeccionará ese mapa a la luz de los datos recabados, de ser necesario.
•
Se examinarán los subgrupos de población identificados al comienzo por su carácter distintivo y porque puedan haberse visto afectados de distinta manera y sufrir diferentes vulnerabilidades en la situación actual. Se confirmarán o revisarán esas distinciones a la luz de los datos recabados sobre el terreno.
•
Se examinará el calendario estacional que se utilizó al planificar la evaluación y se corregirá o perfeccionará a la luz de los datos recabados, de ser necesario. (El calendario debe incluir los ciclos normales de cultivo, los niveles de existencias alimentarias, las posibilidades de empleo, otras actividades de subsistencia, y cualesquiera períodos durante los cuales sea difícil acceder a determinadas zonas y el comercio y los flujos de ayuda puedan interrumpirse. Deberán prepararse calendarios distintos para las distintas zonas geográficas o agroecológicas, de ser necesario.)
•
Se examinará el cuadro cronológico preparado durante la investigación inicial y se corregirá, perfeccionará o ampliará, según proceda, a la luz de los datos recabados. (El cuadro debe mostrar los principales acontecimientos que hayan afectado a toda la zona o a determinadas subzonas, y cómo han afectado a cualquiera de los tres temas, o a todos ellos, ya sea directa o indirectamente, mediante los cambios en los factores contextuales. Se prepararán cuadros separados para las diferentes zonas geográficas si existen variaciones significativas entre ellas. De ser posible, se presentarán en paralelo en la misma página.)
12.3 Formulación de hipótesis de planificación Sobre la base de los parámetros básicos (véase la sección 12.2) y el análisis de los problemas, causas y factores contextuales (sección 12.6), se actualizará y elaborará la «hipótesis de trabajo» empleada al planificar la evaluación para establecer una hipótesis que sirva para planificar la respuesta. Se utilizará el modelo que figura en el Cuadro 8-A (en el Capítulo 8) y el Cuadro 9-C (en el Capítulo 9). Para cada elemento de la hipótesis se examinará lo siguiente: •
la situación actual;
•
la evolución prevista de la situación; y
•
cómo puede cambiar esa evolución (para bien o para mal) si se producen determinados actontecimientos o si no se adoptan determinadas medidas.
204 ■ Capítulo 12: Análisis de los datos; formulación de hipótesis de planificación
Se preparará la hipótesis de planificación «más probable». Se especificarán los acontecimientos (uno o dos) que pudieran dar lugar a una evolución considerablemente distinta de la situación y se prepararán distintas hipótesis al respecto, en particular las situaciones hipotéticas más «optimistas» y «pesimistas».
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 209
Capítulo 13
Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección En el presente capítulo se dan orientaciones sobre cómo determinar si es necesaria una respuesta ligada a la seguridad alimentaria y, en caso afirmativo, qué tipo de respuesta puede convenir, qué proceso de selección (cuando proceda) deberá seguirse y si se necesita o no asistencia externa. En esta fase del análisis, debería disponerse ya de la respuesta a varias preguntas básicas, como por ejemplo: •
¿Quién padece un problema de inseguridad alimentaria y en qué zonas?;
•
¿Cuál es la magnitud del problema: cuántas personas hay afectadas, cuán grave es el problema, cuándo ocurrirá y por cuánto tiempo?;
•
¿Qué tipo de problema se sufre: disponibilidad reducida de alimentos, acceso inadecuado a los alimentos, malnutrición, etc.?; y
•
Las principales causas del problema: por ejemplo, si el problema es la disponibilidad de alimentos, ¿está localizado (y obedece a una falta de integración de los mercados) o es de alcance nacional? Si el problema es de acceso, ¿qué ha cambiado en los medios de subsistencia y las estrategias de obtención de alimentos de los hogares o en el contexto social, económico y de seguridad que haya reducido su acceso a los alimentos?
Sobre esta base, debería poderse responder a las preguntas fundamentales planteadas en el Diagrama 1a (en el Capítulo 1), que se reproduce en la siguiente página como Diagrama 13a. Los pasos clave a este respecto son: •
Decidir si es necesaria una respuesta y, en caso afirmativo, qué tipo de respuesta: véase → sección 13.1;
•
Examinar las diversas respuestas que pueden estudiarse: véase → sección 13.2;
•
Examinar las diversas opciones de selección que pueden estudiarse: véase → sección 13.3;
•
Identificar opciones de respuesta y selección que puedan ser adecuadas y viables: véase → sección 13.4;
•
Determinar las ventajas e inconvenientes de las diversas opciones de respuesta y selección: véase → sección 13.5;
•
Recomendar un conjunto de intervenciones complementarias: véase → sección 13.6; y
•
Determinar si hace falta asistencia externa: véase → sección 13.7.
En este capítulo se propone cómo analizar las opciones disponibles y se dan algunas indicaciones de las circunstancias en que determinados tipos de respuesta pueden o no ser adecuados. No se facilitan recetas para las respuestas. El equipo de evaluación, en consulta con otros planificadores y expertos técnicos con experiencia, deberá formular (y explicar) sus propios dictámenes sobre las respuestas que podrían ser adecuadas y factibles, así como sobre la que considera que es la mejor respuesta, en la situación en cuestión. Para obtener más orientaciones: → véase el manual de orientaciones sobre programas; y
210 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
→ contáctese al Asesor de Programas Regionales Diagrama 13a Decisiones de primer orden sobre seguridad alimentaria que toda ESAE debe fundamentar
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 211
¿Existen (o existirán) problemas ligados a la seguridad alimentaria (que afecten en especial a los medios de subsistencia) o la malnutrición derivados de la perturbación/crisis que requieran algún tipo de intervención?
No
Sí
No hace falta ninguna medida en materia de seguridad alimentaria
¿Qué tipo (o tipos) de intervención convendría realizar?
(Documentar las razones y seguir supervisando la situación, de ser necesario)
En función de la disponibilidad de alimentos, la situación del mercado, las posibilidades de empleo y las causas de la vulnerabilidad
------ y/o ------
Transferencias de alimentos
Medidas no alimentarias
¿Qué tipo (o tipos) de intervención alimentaria es adecuado y factible? ¿Cuándo? ¿En qué escala? ¿Cómo orientar la ayuda? ¿Cómo realizarla?
¿Qué tipo (o tipos) de intervención no alimentaria es adecuado y viable? ¿Cuándo? ¿En qué escala? ¿Cómo orientar la ayuda?
¿Puede el gobierno y los organismos locales no gubernamentales prestar asistencia con los recursos nacionales?
Análisis complementario de las partes competentes para definir los pormenores y determinar si se necesita o no asistencia externa
Sí
Medidas nacionales; no hay necesidad de asistencia externa
No
Asistencia internacional para complementar las medidas nacionales
Información para la planificación inicial y la preparación de un presupuesto
.
212 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección Proceso de evaluación
Actividad 13 Producto previsto: i) Una matriz en que se enumeren los problemas relacionados con la seguridad alimentaria y la nutrición que haya que abordar, las opciones de respuesta y selección que puedan ser adecuados y las ventajas e inconvenientes de cada opción; y ii) un conjunto recomendado de medidas.
¿Por qué?
Para que las autoridades y directores de programas pertinentes puedan adoptar decisiones fundamentadas sobre las respuestas alimentarias y no alimentarias, necesitan información sobre las posibles opciones de respuesta que se base en un análisis minucioso y se presente de manera concisa y fácil de comprender.
¿Cuándo?
Puntualmente, para que el informe de evaluación pueda completarse para la fecha especificada en el cometido de la evaluación. La matriz deberá elaborarse varios días antes de entregar el informe, de modo que el contenido pueda examinarse con los asociados y los distintos expertos y, llegado el caso, perfeccionarse antes de ultimar el informe de la evaluación.
¿Por quién?
El equipo de evaluación, en colaboración con funcionarios con experiencia en el diseño de programas, nutricionistas y otros expertos técnicos.
¿Cómo?
Sobre la base del análisis de los datos relativos a la situación de los medios de subsistencia, la seguridad alimentaria, la nutrición y los factores contextuales, y las situaciones hipotéticas formuladas, el equipo de evaluación deberá responder a las siguientes preguntas fundamentales: •
¿Hace falta una respuesta?;
•
¿Qué tipo de respuesta (o respuestas) y selección podría ser adecuado?;
•
¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes de las posibles opciones de respuesta?; y
•
¿Hace falta asistencia externa?
Al responder a estas preguntas, como se indica en las secciones 13.1 y 13.4 a 13.6 infra, el equipo podrá preparar la matriz necesaria. (En las secciones 13.2 y 13.3 se indican las diversas opciones de respuesta y selección disponibles.)
13.1 Decisión de si es necesaria una respuesta y, en caso afirmativo, qué tipo de respuesta Las preguntas de base son: ¿Ha provocado la perturbación/crisis una alteración de la disponibilidad de alimentos, los medios de subsistencia y el acceso de los hogares a los alimentos, o del estado nutricional (o plantea una amenaza inminente para los medios de subsistencia, el acceso a los alimentos o el estado nutricional), que las comunidades y hogares afectados no puedan afrontar y subsanar por sus propios medios? ¿Cuáles son los riesgos específicos para la vida y los medios de subsistencia de las personas y qué ocurriría si no se ejecutara ninguna respuesta, o si ésta fuera inadecuada, en el plazo especificado? La respuesta a estas preguntas constituirá un dictamen basado en los análisis realizados en el marco de la Actividad 12 (véase el Capítulo 8). Si se determina que hace falta una respuesta, habrá que identificar las opciones de respuesta y selección que podrán ser adecuadas y factibles según la hipótesis o las hipótesis de planificación formuladas, y especificar las ventajas e inconvenientes de cada opción. Para ello, habrá que tener en cuenta las siguientes cuestiones determinantes:
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 213
•
qué está haciendo la población para hacer frente a la situación, cuáles son sus propias prioridades y el tipo (o tipos) de asistencia que consideran prioritario (especialmente las mujeres);
•
la magnitud de la asistencia necesaria y cuándo la necesitarán los beneficiarios previstos;
•
los distintos niveles de asistencia que necesitan los distintos grupos de diferentes zonas, las características de los distintos grupos y la proporción de la población que representan;
•
los factores sociales, políticos y de seguridad y otros factores contextuales que influyen en la viabilidad e idoneidad de las distintas opciones de respuesta y selección;
•
cualesquiera preocupaciones ligadas a la protección y si determinadas respuestas pueden aumentar los riesgos para la seguridad personal que corren las mujeres, los hombres y los niños, o bien disminuirlos; y
•
las enseñanzas extraídas de operaciones de urgencia y recuperación ejecutadas en el pasado.
Asimismo, habrá que tener cuenta de las estrategias y protocolos nacionales existentes para las respuestas de urgencia y el desarrollo sostenible, así como las directrices y valores de referencia contenidos en los documentos del PMA y las normas internacionales pertinentes, como los del Manual Esfera. Las opciones de respuesta y la selección están estrechamente vinculadas y deben examinarse conjuntamente a la luz de: •
los problemas y riesgos específicos que haya detectado la evaluación en relación con los medios de subsistencia y la seguridad alimentaria (disponibilidad, acceso y utilización), la nutrición y los medios de subsistencia de los diferentes grupos de población y la sostenibilidad de las estrategias de supervivencia;
•
la viabilidad, la posible eficacia y los posibles efectos colaterales, sobre la base de un análisis de los factores contextuales que incluyan, entre otras cosas, la seguridad, la capacidad institucional y las preocupaciones sociales, políticas y de género; y
•
los gastos, la eficacia en función del costo y los recursos disponibles.
Puede considerarse que el primer paso para una buena selección de los beneficiarios es elegir la intervención correcta (es decir: una intervención que llegue a los beneficiarios previstos y que les resulte más atrayente a ellos que a los grupos de población no beneficiarios). Aspectos problemáticos y objetivos anejos Los siguientes importantes conjuntos de problemas pueden plantearse por separado o conjuntamente. Hay que definir objetivos (productos perseguidos) para cada uno de ellos: •
Problemas de disponibilidad de alimentos: las cantidades y la variedad de alimentos disponibles en la zona no son suficientes. Los objetivos se centrarían en aumentar la disponibilidad de alimentos en la zona. Para ello tal vez haya que importar alimentos, coordinar las importaciones de los sectores comerciales o mejorar el funcionamiento del sistema de mercado, si éste es parte del problema;
•
Problemas de acceso a los alimentos, que obedecen a la erosión o destrucción de los medios de subsistencia: los hogares carecen (o carecerán) de acceso a suficientes alimentos, al tiempo que conservan los activos productivos de que depende su seguridad alimentaria a largo plazo, en especial su acceso a los productos no alimentarios básicos. Los objetivos incluirían que los hogares damnificados puedan restablecer los medios de subsistencia sostenibles y, entre tanto, tener acceso a alimentos suficientes durante un período determinado. Para ello puede hacer falta transferir alimentos, dinero u otros recursos no alimentarios y adoptar medidas para proteger, restablecer o aumentar los activos productivos de los hogares o (re)crear un entorno en que se estimule la producción, el empleo y la demanda de bienes;
•
Problemas de utilización cuando la población tiene acceso a los alimentos pero no puede utilizarlos eficazmente por algún motivo (p. ej., no cuentan con los medios necesarios para prepararlos, o las enfermedades les impiden absorber y aprovechar plenamente los nutrientes que contienen), o cuando
.
214 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
los hogares y las comunidades carecen de los conocimientos o la capacidad para cuidar adecuadamente a los niños pequeños, los ancianos y las personas que padecen enfermedades crónicas. Los objetivos se centrarían en superar el problema o problemas específicos. Para ello pueden hacer falta varias actividades que van del suministro de utensilios y combustible para cocinar a las intervenciones en materia de salud, agua y saneamiento para reducir la diarrea y otras enfermedades; y •
Problemas de malnutrición cuando los niveles de emaciación son anormal e inaceptablemente elevados, o existe un riesgo importante de que lo sean, y haya riesgo de carencia de micronutrientes. Los objetivos serían corregir o prevenir la malnutrición entre la población o determinados subgrupos de población. Para ello puede optarse por la distribución de alimentos terapéuticos y suplementarios, alimentos enriquecidos y la educación sobre temas de nutrición, amén de otras medidas alimentarias y no alimentarias de alcance más general, en función de la naturaleza y las causas subyacentes de la malnutrición.
Los problemas de disponibilidad y acceso son distintos, pero las intervenciones para abordar uno de ellos pueden también afectar al otro, por lo que deben estudiarse las posibles correlaciones y efectos colaterales. Por ejemplo, una distribución gratuita de alimentos encaminada a aumentar el acceso aumentaría inmediatamente la disponibilidad de alimentos en la zona de distribución, lo que puede ser o no deseable. De modo análogo, una intervención en el mercado que aumente la disponibilidad de alimentos a menudo reducirá también los precios de los alimentos, lo que aumentará el acceso de los hogares pobres aquejados de inseguridad alimentaria, aunque se perjudicará los medios de subsistencia de los agricultores locales que intenten vender sus productos en ese momento.
13.2 ¿Cuáles son las diversas respuestas que pueden estudiarse? En el Cuadro 13-A se resumen las principales opciones de respuesta utilizadas recientemente por el PMA y otros organismos en operaciones (de socorro y recuperación) urgentes y humanitarias prolongadas. En el Anexo B5 se dan indicaciones más detalladas sobre las circunstancias en que puede convenir cada una de estas opciones de respuesta, así como la información necesaria para adoptar una decisión al respecto.1 En función de las circunstancias y las posibilidades prácticas, las respuestas pueden aplicarse uniformemente a lo largo y ancho de la zona afectada o circunscribirse a determinadas zonas geográficas. Algunas pueden centrarse en tipos específicos de hogares (véase la sección 13.3), mientras que otras, por su naturaleza, se centran en tipos específicos de personas (lo que necesariamente beneficia a los hogares a que pertenecen esos individuos). La asistencia puede suministrarse directamente a los hogares o personas, o indirectamente por conducto de una intervención en el mercado, por ejemplo. Si bien los hogares constituyen el principal foco de atención al abordar los problemas de acceso a los alimentos, tal vez hagan falta medidas complementarias en algunos casos para atender las necesidades alimentarias de individuos que no se beneficien de las medidas directas en apoyo de los hogares. Estas medidas pueden incluir: programas de atención basados en los barrios y los hogares de las comunidades con una alta prevalencia del VIH/SIDA; alimentación suplementaria además de la ración general; apoyo a la alimentación escolar; o suministro de alimentos a instituciones como orfanatos u hospitales (véase «Alimentos para las instituciones» infra).
1
Para diversas de las opciones de respuesta, en el Anexo B5 también se proponen los datos suplementarios que se necesitarán para diseñar la intervención correspondiente.
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 215
Cuadro 13-A Opciones de respuesta, según el tipo de problema (* = programas que el PMA tal vez no pueda respaldar directamente)
1) Respuestas a los problemas relacionados con la disponibilidad de alimentos, y el acceso a los alimentos y los medios de subsistencia a) Transferencias de alimentos en apoyo de los hogares Distribución gratuita de alimentos
Distribución gratuita de raciones a los hogares necesitados. Las raciones se diseñan para colmar las insuficiencias del acceso de los hogares a los alimentos. Pueden ser generales, suministradas a todos los hogares de una zona o grupo de población determinados, o selectivas, suministradas a los hogares de determinados grupos.
Alimentos por trabajo (APT)
Ración alimentaria como pago por el trabajo realizado, por ejemplo para rehabilitar o crear la infraestructura necesaria para determinadas actividades de subsistencia (canales de riego, estanques piscícolas, carreteras rurales, espolones) o servicios comunitarios (centros de salud). Esta modalidad puede incluir también incentivos para el trabajo después de una catástrofe que requiera poca supervisión técnica (p. ej., en actividades generales de limpieza después de una inundación o un ciclón).
Alimentos para la capacitación
Alimentos suministrados para incentivar (alentar) a las personas pertenecientes a hogares que padecen inseguridad alimentaria a recibir capacitación técnica para aumentar sus activos productivos, su producción alimentaria y sus opciones de generar ingresos.
Intercambio por productos
Alimentos suministrados a los hogares campesinos damnificados a cambio de sus propios productos (incluido el ganado) para los que no haya temporalmente mercado a nivel local.
b) Transferencias de alimentos en apoyo de las personas (de las que se benefician también sus hogares) Programas de atención basados en los barrios y los hogares
Alimentos suministrados a huérfanos y niños vulnerables cuando existe una elevada prevalencia de VIH/SIDA.
Alimentación escolar
Suministro de una comida equilibrada o un refrigerio para niños y jóvenes en la escuela.
Alimentos para otras instituciones de servicios sociales
Alimentos suministrados a los orfanatos; centros para niños no acompañados; hogares de ancianos o personas con discapacidades; hospitales y centros de salud que atiendan a pacientes hospitalizados.
c) Transferencias de efectivo y otros recursos no alimentarios en apoyo de los hogares Programas de transferencia de efectivo*
Dinero efectivo distribuido a los beneficiarios seleccionados.
Dinero por trabajo (DPT) *
Pago en efectivo por el trabajo realizado (modalidad parecida a la de APT).
Cupones para alimentos*
Los beneficiarios reciben cupones que intercambian por alimentos en las tiendas designadas.
Transferencias no alimentarias*
Productos o servicios no alimentarios (p. ej., agua, escolarización, atención de salud) provistos gratuitamente o a precios subvencionados o mediante cupones, ahorrando de esta manera dinero para la compra de alimentos.
Apoyo no alimentario a las actividades de subsistencia *
Insumos productivos o servicios (o cupones para obtener esos insumos o servicios) para mantener, reconstruir o restablecer los bienes de capital de los individuos y hogares que padecen la inseguridad alimentaria pero son económicamente activos. Los insumos productivos pueden incluir, por ejemplo, semillas, herramientas, fertilizantes, infraestructura de riego, piensos u otros insumos ganaderos, instrumentos y material para los artesanos. Los servicios pueden incluir atención veterinaria, servicios de extensión, un mayor acceso a los pastos y servicios financieros, como los préstamos de urgencia para las actividades productivas.
d) Intervenciones en el mercado para aumentar la disponibilidad y facilitar el acceso de los hogares
.
216 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
Programa de asistencia a mercados*
Determinados productos alimentarios básicos (normalmente de «segunda opción») se ponen a disposición de los comerciantes y minoristas para que los vendan a precios controlados.
Apoyo a los mercados
Reducción de los obstáculos logísticos (p. ej., reparación de puentes o carreteras) o concesión de créditos a los comerciantes.
2) Respuestas a los problemas relacionados con la utilización de los alimentos Material para la preparación de los alimentos*
Productos necesarios para preparar alimentos, como baterías de cocina, combustible para cocinar y agua. Este tipo de intervención es la que se suele llevar a cabo para las poblaciones de desplazados y refugiados.
Intervenciones en el ámbito de la educación nutricional, la salud, el agua y el saneamiento *
Intervenciones pensadas para mejorar las prácticas de alimentación y cuidado, evitar la pérdida de nutrientes durante la preparación de los alimentos y prevenir y tratar la diarrea u otras enfermedades que afectan a la absorción y aprovechamiento de los nutrientes por el cuerpo.
3) Respuestas a la malnutrición a) Corrección de los niveles elevados de malnutrición aguda total
Alimentación terapéutica
Tratamiento médico y nutricional para salvar la vida de las personas gravemente malnutridas. El tratamiento puede suministrarse en el lugar (en centros de salud o los centros de alimentación terapéutica establecidos especialmente) o —cuando los casos estén geográficamente dispersos— mediante una ración para llevar a casa con un seguimiento a nivel de comunidad a cargo de agentes de salud capacitados (atención terapéutica comunitaria).
Alimentación suplementaria
Distribución de alimentos para complementar la energía y otros nutrientes existentes en los regímenes alimenticios básicos de los individuos que tienen necesidades nutricionales especiales o que padecen malnutrición. Puede tratarse de una ración para llevar a casa o de alimentos listos para comer o gachas para comer en el lugar. Estos alimentos complementan la parte individual de la ración general, de haberla.
Medidas de salud pública *
Medidas para mejorar el saneamiento, el suministro de agua, los servicios de atención de salud y su utilización, las vacunas contra el sarampión, el tratamiento antihelmíntico, etc.
b) Corrección o prevención de las carencias de micronutrientes Enriquecimiento de los alimentos
Alimentos enriquecidos con nutrientes específicos (en especial vitaminas y minerales) que se suministran cuando los regímenes generales carecen gravemente de ellos.
Suplementos de nutrientes *
Distribución periódica de suplementos de determinados nutrientes (p. ej., cápsulas de vitamina A) cuando el régimen alimenticio carece gravemente de ellos.
Transferencias de alimentos, transferencias de efectivo y cupones Transferencias de alimentos: Distribución de alimentos como artículos de socorro mediante distribuciones gratuitas de alimentos (destinados a comunidades o determinados subgrupos de población), APT, intercambio por productos o programas de asistencia a los mercados. Las distribuciones de alimentos pueden llevarse a cabo con alimentos básicos comprados a nivel local o importados, en función de la situación de la oferta en el país2. Estas transferencias aumentan automáticamente la disponibilidad, a menos que los alimentos distribuidos se compren a nivel local. Transferencias de efectivo: Distribución de dinero efectivo como artículo de socorro a los beneficiarios previstos mediante donaciones en efectivo, dinero por trabajo o la compra de productos. Estas transferencias aumentan la demanda de mercado de alimentos. Cupones: Distribución de cupones emitidos en valores monetarios o intercambiables por cantidades físicas de determinados productos alimentarios o no alimentarios. 2
El PMA estudia la posibilidad de comprar a nivel local si el país dispone de productos adecuados, las compras no alterarán indebidamente los mercados locales y los precios son competitivos frente a lo que le costaría al PMA suministrar los mismos productos de otras fuentes.
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 217
Alimentos por trabajo Alimentos ofrecidos como pago total o parcial por el trabajo realizado en el contexto de unos trabajos comunitarios en favor de los beneficiarios seleccionados. En el caso de una operación de urgencia, esta modalidad de asistencia puede incluir actividades en que los beneficiarios reciben alimentos a cambio de invertir su tiempo en trabajos que requieren poca supervisión, pero que permiten a la comunidad comenzar el proceso de recuperación y facilitan el suministro de asistencia de socorro. Valga de ejemplo la retirada de escombros y las operaciones de limpieza general inmediatamente después de una catástrofe repentina, o un mantenimiento de los activos que requiere mucha mano de obra en el marco de un programa de alimentos por activos.
Ejemplos de respuestas consistentes en transferencias de efectivo
Dinero por trabajo: En 2000-2001 Oxfam ejecutó un programa de dinero por trabajo en Kitgum
(Uganda), una zona con altos niveles de inseguridad a causa de la guerra. Los beneficiarios comunicaron que destinaron el dinero principalmente a la compra de alimentos. Con todo, también se destinaron a otros gastos, como las tasas académicas, los uniformes y la compra de activos, como cabras. No se registró ninguna diferencia en el modo en que los hombres y las mujeres gastaron el dinero ganado. [Khogali H (2002) Cash: an alternative to food aid. Oxfam, Oxford.] Donaciones en efectivo: Parte de la respuesta de urgencia de Save the Children UK a las inundaciones de Bangladesh de 1998 consistió en una donación en efectivo. Se efectuaron pagos excepcionales a 6.800 hogares. Además de las donaciones en efectivo, en torno a 300 niños trabajadores recibieron dinero efectivo para compensar las pérdidas de ingresos ocasionadas por las inundaciones. Los objetivos de las donaciones variaban. En un subdistrito, sirvieron para sustituir directamente las distribuciones de alimentos, dado que los mercados de alimentos locales funcionaban bien. Esto dio a los hogares la posibilidad de comprar alimentos con sus propios medios. En otras zonas, las donaciones sirvieron para ayudar a la rehabilitación, ayudando a las familias a rembolsar los préstamos recibidos en la forma de dinero en las semanas posteriores a las inundaciones. [SCF (1998). Flood in Bangladesh: Save the Children UK: Flood Recovery Plan 1998 – informe final, Save the Children, Londres]
¿Cuándo puede ser apropiada la alimentación escolar? Cuando las personas están desplazadas durante un período largo o los niños están traumatizados por su exposición a la violencia, es importante fijar objetivos educacionales y psicosociales, que pueden estar respaldados por la alimentación escolar. Si bien en este caso la alimentación escolar no tendría objetivos ligados específicamente a la «seguridad alimentaria», seguiría formando parte de una estrategia de asistencia coherente y general. Habrá que tener cuidado al estudiar la posibilidad de recurrir a la alimentación escolar para abordar problemas relacionados con el acceso a los alimentos entre los grupos más desfavorecidos de la sociedad, toda vez que son los niños pertenecientes a estos grupos los que con menos frecuencia van a la escuela. Podrá estudiarse la alimentación escolar con fines de transferencia de alimentos si: •
hay en marcha un programa de alimentación escolar con una amplia presencia en la zona afectada y el análisis del equipo de evaluación ha determinado que el aumento de las distribuciones a través de este programa constituirá una manera eficaz de respaldar los hogares que necesitan asistencia; o
•
los niños y jóvenes tienen necesidades nutricionales específicas que las raciones generales típicas no satisfacen y el análisis del equipo de evaluación ha determinado que la alimentación escolar constituye la manera más idónea de atender las necesidades de esas personas (en lugar de incrementar la ración
.
218 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
general). Entre los beneficiarios puede haber huérfanos y niños vulnerables de zonas con una alta prevalencia de VIH/SIDA. En determinados casos, pueden fomentarse las actividades extraescolares, como la formación profesional de los huérfanos y niños vulnerables, a través de escuelas comunitarias (temporales). Ampliación de las actividades de los proyectos existentes Asimismo, habrá que tener cuidado al estudiar la posibilidad de ampliar cualesquiera proyectos de ayuda alimentaria en curso para satisfacer las necesidades de urgencia. La ampliación de todo proyecto de distribución de alimentos a grupos vulnerables, alimentos por trabajo o u otro proyecto de ayuda alimentaria en la zona afectada puede ser una forma rápida y conveniente de transferir más alimentos a la zona pero: •
los miembros del equipo de evaluación tendrán que preguntarse si los alimentos se destinarán a los hogares que hayan determinado que necesitan asistencia; y
•
se planificará una estrategia de retirada gradual desde el principio en consulta con todas las partes interesadas, los beneficiarios y los asociados.
Necesidad de obrar con cuidado y de contar con una estrategia de retirada gradual al ampliar una actividad de desarrollo Puede resultar difícil reducir y volver a definir los objetivos de los programas que han sido «alterados» para atender necesidades urgentes. Por ejemplo, un programa nutricional que pase de la prevención a la curación probablemente tendrá dificultades para volver a su carácter original. Un programa que suministre alimentos para incentivar el trabajo de la comunidad y se dedique a suministrar alimentos por trabajo durante una emergencia experimentará dificultades parecidas.
Alimentos para las instituciones: análisis atento de las repercusiones La alimentación institucional puede ser necesaria durante algunas emergencias para facilitar una «red de seguridad social» en beneficio de las personas vulnerables hasta que las estructuras locales (públicas o privadas) se recuperen lo suficiente como para reasumir (o asumir plenamente) la responsabilidad de atender las necesidades. Todo apoyo del PMA en este sentido debe considerarse una medida a corto plazo, y no respaldará la atención institucional que no redunde en beneficio de los individuos damnificados. En general:
3
•
Se evitará sustituir las soluciones informales basadas en la familia o la comunidad. Si existe la tradición de atender a los huérfanos (o los ancianos o personas con discapacidad) en el seno de la familia extensa o en familias de acogida, se estudiarán las posibilidades de apoyar esas soluciones basadas en la familia, por ejemplo suministrando raciones alimentarias a las familias que cuiden a otros durante un período de ajuste;
•
Se prestará apoyo a corto plazo a las instituciones existentes, de ser necesario. Pueden necesitarse alimentos para los hospitales, las instituciones para ancianos y personas con discapacidad y los orfanatos existentes durante la fase aguda de una crisis, aunque no deben pasar a depender del PMA;
•
No se fomentará la creación de nuevas instituciones. Los huérfanos y niños no acompañados3 en particular reciben mejor atención en una estructura familiar; los orfanatos son el último recurso, teóricamente temporal, para los niños que no tienen absolutamente ninguna otra opción. La creación de centros residenciales puede también atraer a clientes menos vulnerables e incluso contribuir a separar a los niños de sus familias; y
Un niño (o menor) no acompañado es un niño (un individuo que todavía no tiene la mayoría de edad legal) que no está acompañado por un progenitor, tutor u otro adulto que por ley o costumbre se encargue de él (UNICEF 1985). En emergencias, los niños a menudo se separan de sus familias y el hecho de que un niño no esté acompañado no quiere decir necesariamente que sea huérfano.
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 219
•
Se consultará al UNICEF antes de formular cualesquiera recomendaciones sobre la asistencia necesaria a los orfanatos o centros establecidos para el cuidado temporal de niños no acompañados, a fin de garantizar que toda medida aplicada redunda en beneficio de los niños.
En cualquier caso: •
Se estudiarán las posibilidades de establecer asociaciones con otras organizaciones en el marco de las cuales el PMA pueda suministrar alimentos enriquecidos con vitaminas (como mezclas de maíz y soja o aceite enriquecido con vitamina A) como complemento de otra asistencia. Esto puede reducir el riesgo de depender absolutamente del PMA, así como los riesgos para los niños u otros individuos en el caso de que se interrumpa la ayuda del PMA; y
•
Se definirá la estrategia de retirada para reducir progresivamente el apoyo.
13.3 ¿Cuáles son las diversas opciones de selección que pueden estudiarse?4 ¿Por qué hay que seleccionar? La selección es el proceso por el cual se eligen las zonas y poblaciones que recibirán un recurso y posteriormente se les proporciona ese recurso. Un sistema de selección comprende mecanismos para definir los grupos beneficiarios, identificar miembros de los grupos beneficiarios y garantizar que la asistencia llega a los beneficiarios previstos 5 . Hay cuatro razones fundamentales para que los encargados de una evaluación propongan que la asistencia sea selectiva: •
Para garantizar que la ayuda se recibe en función de las necesidades;
•
Para evitar los daños que puedan derivarse de una gran inyección de recursos (p. ej., alteración de los precios y el comercio o desplazamiento de las redes tradicionales de reciprocidad social);
•
Para asegurar la utilización eficiente y eficaz de los recursos de ayuda. Esto implica asegurar que i) los recursos para «emergencias» se utilizan con responsabilidad y eficacia, y ii) el programa de urgencia no desvía los recursos humanos y de otro tipo de las actividades de desarrollo a más largo plazo más de lo necesario; y
•
Porque se dispone de recursos insuficientes para satisfacer las necesidades de todos los posibles beneficiarios como consecuencia de los obstáculos financieros, políticos, logísticos, de seguridad y de otro tipo. (En algunas situaciones, sin embargo, puede ser más conveniente y factible reducir las raciones de todos los beneficiarios que seleccionar a unos para que reciban más que otros).
Existen dos tipos básicos de selección: i) selección geográfica; y ii) selección de hogares o beneficiarios en las zonas o comunidades. La selección geográfica se practicará siempre para circunscribir la asistencia (de socorro y recuperación) urgente y humanitaria prolongada a zonas que hayan sido afectadas significativamente por la perturbación/crisis, incluidas las zonas a las que se desplazan o emigran las personas. En muchos casos, la asistencia también será selectiva en esas zonas y se prestará más asistencia en las localidades que se hayan visto más damnificadas, toda vez que puede que no se preste asistencia en otras localidades. Para ello habrá que clasificar las localidades sobre la base de los niveles de insuficiencia del acceso de los hogares a los alimentos o cualesquiera métodos que se hayan adoptado para describir la gravedad del impacto de la 4
Esta sección se basa en documentos existentes del PMA; Taylor A, y Seaman J S (2004), Targeting Food Aid in Emergencies, serie de suplementos especiales de la Emergency Nutrition Network, nº 1, Julio 2004; y otras fuentes. 5 Esta es la definición que actualmente figura en el Manual para el diseño de los programas del PMA. Se prevé que a finales de 2005, la Junta Ejecutiva del PMA reciba un documento sobre políticas relativo a la selección que puede actualizar esta definición y las orientaciones facilitadas en esta sección.
.
220 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
perturbación/crisis sobre los medios de subsistencia y la seguridad alimentaria y los consiguientes problemas relacionados con la disponibilidad de alimentos, el acceso a los alimentos y la nutrición. Aun así, el suministro de diferentes niveles de asistencia (en especial diferentes niveles de asistencia alimentaria) a diferentes localidades puede crear tensiones sociales en algunas situaciones. Cuando las personas se hallan desplazadas, las diferencias en los niveles de asistencia pueden provocar nuevos traslados de la población hacia las localidades o campamentos que reciben más asistencia. En consecuencia, habrá que examinar atentamente cualesquiera recomendaciones sobre los diferentes niveles de asistencia necesarios en localidades distintas. La selección de los beneficiarios en el seno de una comunidad puede proponerse cuando algunos hogares o individuos tengan mayor necesidad de asistencia que otros. Las principales opciones de selección son: •
Selección de hogares, por separado o en grupos, en función de: la situación socioeconómica; la enfermedad crónica de uno o más de sus miembros; el estado nutricional de los niños; o el sexo del jefe de la familia;
•
Selección de intervenciones que puedan ser «autoselectivas» por su interés sólo para los hogares pobres y afectados por la inseguridad alimentaria, por ejemplo: los productos alimentarios de «segunda opción» para las intervenciones en los mercados6 o la modalidad de alimentos por trabajo; y
•
Selección de individuos en función de: el estado nutricional; el estado fisiológico, como las mujeres embarazadas o las madres lactantes; las personas con discapacidad o los ancianos; los niños en edad escolar; o las personas que asistan o residan en instituciones.
Son varios los factores que pueden tenerse en cuenta al decidir si una intervención debe ser selectiva, y las opciones de selección varían en función del tipo de intervención. Las opciones para que una intervención en el mercado sea selectiva son limitadas, dado que este tipo de intervenciones benefician a todos los que tengan acceso a los mercados intervenidos. Puede practicarse una cierta selección geográfica mediante, por ejemplo, la elección de comerciantes y las condiciones de los acuerdos suscritos con ellos. La única selección de hogares posible es «autoselectiva», mediante el suministro de productos alimentarios básicos que atraigan solamente a las personas sumamente necesitadas. En el Anexo B6 se indican las circunstancias en que pueden convenir las diversas formas de selección de hogares, así como la información necesaria para decidir. En la práctica, la selección de hogares solamente será adecuada cuando:7 •
hay diferencias que pueden percibirse inmediatamente entre la población beneficiaria prevista y la población no beneficiaria, y ésta representa una parte considerable de la población total;
•
es posible desde el punto de vista operacional, eficaz en función del costo y aceptable desde los puntos de vista cultural, político y social llevar a cabo una distribución selectiva, que no sufra las interferencias de los grupos más poderosos;
•
los organismos de ejecución cuentan con una presencia larga en las comunidades o con profundos conocimientos de las mismas; y
•
la comunidad comprende y coopera con la estrategia de selección.
En la práctica, pueden cometerse errores en cada etapa del proceso de selección que jamás se eliminarán completamente. Los mejores sistemas de selección, que permiten reducir al mínimo los errores, son los que emplean múltiples enfoques simultáneamente, p. ej., la selección de algunos hogares según criterios socioeconómicos y la selección de niños malnutridos en el marco de un programa alimentario para garantizar una red de seguridad social para los que estén excluidos de la distribución a los hogares.
6 El uso de productos alimentarios básicos de «segunda opción» puede también ayudar a reducir la apropiación indebida especialmente, aunque no sólo, en situaciones de conflicto. Por ejemplo, durante la guerra civil de mediados de los años noventa en Liberia se suministró sorgo en lugar de arroz. 7 Adaptado de Sharp K (2001), An overview of targeting approaches for food assisted programming, CARE, EE.UU.
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 221
Uno de los requisitos previos esenciales para que la selección sea eficaz es que la comunidad participe de alguna manera en el proceso, aunque deberá garantizarse también que los grupos marginados, en especial las personas que viven con el VIH/SIDA, no están excluidos. La selección puede mejorarse específicamente haciendo participar a las mujeres en el proceso. La transparencia en el uso de la información y en la comunicación de los pormenores del sistema de selección a la comunidad afectada es otro requisito previo para el éxito.
13.4 Identificación de las opciones de respuesta y selección que puedan ser adecuadas y factibles ¿Qué es ‘adecuado’? ¿Qué es ‘factible’? Evidentemente, es importante que las opciones de respuesta seleccionadas sean adecuadas (es decir: puedan satisfacer las necesidades de la manera más sostenible posible) y factibles (es decir: prácticas dadas las posibilidades y limitaciones locales). En este contexto, ‘adecuado’ significa: •
que coincide con el perfil y las prioridades de los hogares o individuos necesitados. No tiene sentido, por ejemplo, ejecutar programas de alimentación escolar si los grupos necesitados no pueden o no quieren enviar a sus hijos a la escuela (p. ej., porque viven lejos, o no se pueden permitir las tasas académicas o los uniformes). De modo análogo, tampoco tiene mucho sentido ejecutar un proyecto de alimentos o dinero por trabajo en el punto álgido de la campaña agrícola, cuando los hogares necesitados estarán trabajando en sus propias tierras;
•
que aborda las causas inmediatas de la inseguridad alimentaria. Si el problema guarda relación con la utilización (p. ej., no hay una escasez de alimentos, sino que faltan los medios para prepararlos), entonces la respuesta más adecuada es aquélla que aborda el problema, no la que aumenta la disponibilidad de alimentos (p. ej., una ración general sin cocinar cuando sería más adecuada una ración cocinada); y
•
que impulsa en lugar de socavar la economía local y la sostenibilidad de los medios de subsistencia locales. Distintas respuestas tendrán distintos efectos en distintas situaciones y es importante elegir la respuesta que más beneficios reporte y cause los menos daños posibles dadas las circunstancias. Para ello, por ejemplo, tal vez sea necesario abordar un problema de disponibilidad de alimentos mediante una intervención en el mercado en lugar de una distribución general de alimentos. La razón es que la intervención en el mercado puede estimular el comercio local y tiene menos posibilidades de minar la producción local que una distribución general de alimentos.
‘Factible’ significa: •
que es aceptable para la población beneficiaria. Esto es particularmente importante en el caso de las decisiones sobre la selección, así como el tipo de asistencia prestada y las modalidades de ejecución en general. Si la selección, o el modo de seleccionar, no es aceptable para los beneficiarios (y para los que no recibirán asistencia), las comunidades locales a menudo encontrarán maneras de subvertir el sistema;
•
que puede aplicarse de manera oportuna y periódica, teniendo presentes los plazos para elaborar diferentes intervenciones y la dificultad de mantener las distribuciones, tanto las de alimentos como las de otros productos. Por ejemplo, puede darse el caso de que una intervención de efectivo pueda llevarse a cabo más rápidamente que una distribución alimentaria, si los alimentos tienen que importarse al país. O que una distribución gratuita de alimentos sea más rápida que un proyecto de alimentos por trabajo, dado que la modalidad de alimentos por trabajo requiere más insumos, gestión y supervisión técnica que una distribución gratuita;
•
que puede aplicarse a una escala acorde con la magnitud del problema. Los factores que hay que tener en cuenta son: la extensión geográfica, el número de personas al que habrá que ayudar y la
.
222 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
cantidad de asistencia. Por ejemplo, es difícil establecer proyectos de trabajos que puedan ayudar a muchas personas de comunidades dispersas por una extensa zona; •
que es aceptable para los asociados locales y dentro de su capacidad. La capacidad debe valorarse en función de: la competencia y probidad del personal; el acceso al equipo y los conocimientos técnicos necesarios; y las normas de gestión, contabilidad y seguimiento. Los asociados pueden incluir la administración y los organismos no gubernamentales locales, así como a los comerciantes en el caso de las intervenciones en el mercado;
•
que es posible habida cuenta de la infraestructura y la situación local, con inclusión de: la capacidad de transporte y almacenamiento, los servicios bancarios (especialmente pertinentes en el caso de las transferencias de efectivo), la seguridad local y los conflictos; y
•
que es compatible con las políticas gubernamentales y de los asociados. Los donantes pueden preferir un sistema de cupones alimentarios antes que una distribución de dinero, por ejemplo. O un gobierno puede preferir la modalidad de alimentos por trabajo antes que la distribución gratuita. Evidentemente surgen problemas si estas preferencias entran en conflicto con la necesidad principal: que el programa pueda satisfacer las necesidades existentes.
¿Cómo decidir? La guía que figura en el Diagrama 13b puede ayudar a identificar respuestas que puedan ser adecuadas. Se podrán valorar mejor las opciones si se responde a las preguntas en secuencia. Las hojas de trabajo que figuran en los cuadros 13-C, 13-D y 13-E infra, y las ventajas e inconvenientes típicos de los diversos tipos de respuesta que se muestran en el Cuadro 13-H (al final de este capítulo), pueden ayudar a decidir qué respuesta puede ser la mejor en la situación de que se trate. Al utilizar la guía, obsérvese que: •
Habrá que examinar los tipos de intervención propuestos, lo que significa que habrá que examinar su viabilidad y posibles efectos colaterales negativos, y no elegirlos a ciegas. También habrá que examinar las posibles sinergias o complementariedades entre diferentes respuestas (véase la sección 13.6);
•
En muchos casos, las respuestas a las diversas preguntas puede que no sean concretas. Cuando la respuesta parezca ser ‘No’, habrá que preguntarse «¿Por qué?» y «¿Qué medidas están aplicando ya los hogares?». Esto ayudará a identificar la mejor manera de ayudar y, al mismo tiempo, las causas subyacentes que hay que abordar además de los problemas inmediatos;
•
Las transferencias de alimentos pueden consistir en productos alimentarios importados o comprados a nivel local. El recurso a productos importados normalmente es conveniente sólo cuando existe un problema de disponibilidad de alimentos en el país. Las transferencias de alimentos comprados a nivel local pueden ser adecuadas si hay alimentos disponibles en el país pero no puede confiarse en que el mercado responda o las transferencias de efectivo no son adecuadas o factibles;
•
La finalidad de la guía es ayudar a determinar las intervenciones que puedan ser adecuadas para abordar los problemas relacionados con la seguridad alimentaria. Las condiciones que se plantean en esta guía no son las únicas en que pueden llevarse a cabo estas intervenciones. Algunas de las i que se mencionan pueden también ser adecuadas en otros contextos. Por ejemplo, la alimentación escolar puede ser necesaria (estar justificada) a efectos educativos y psicosociales con independencia de los objetivos ligados a la seguridad alimentaria; y las intervenciones relacionadas con el agua, la salud y el saneamiento serán necesarias por derecho propio en muchas situaciones;
•
La guía no incluye todas las posibles opciones de respuesta y las consideraciones enumeradas en la sección 13.2 y el Anexo B5. Por ejemplo, puede estudiarse la posibilidad de ejecutar un programa de alimentación suplementaria a corto plazo incluso cuando las tasas de malnutrición aguda total no son «elevadas» (en comparación con los criterios típicos para los programas de alimentación suplementaria), pero van en aumento. Véase el recuadro infra en que se da un ejemplo del uso «preventivo» de la alimentación suplementaria;
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 223
•
La formulación de las recomendaciones sobre las respuestas a los problemas de malnutrición debe estar a cargo de un nutricionista competente, o basarse en su asesoramiento; y
•
Las preguntas hacen referencia a todo el período de la situación hipotética, no sólo a la situación imperante al realizar el análisis.
.
224 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección Diagrama 13b Guía para determinar las respuestas que pueden ser adecuadas Inicio:
no
sí ¿Tienen los hogares productos para intercambiar?
¿Tienen los hogares acceso seguro a alimentos adecuados?
* = Actividades programáticas que el PMA tal vez no pueda apoyar directamente.
Se estudiará la modalidad de intercambio por productos
La aplicación de muchas de las opciones de respuesta indicadas depende de la colaboración con asociados.
continuar
no sí sí
¿Hay posibilidades de aumentar la producción/ingresos? Se estudiarán sólo las necesidades no alimentarias
Se estudiará la modalidad de apoyo a actividades de subsistencia *
no
continuar
cont.
¿Hay alimentos adecuados en los mercados locales a precios razonables?
¿Sería factible una intervención en el mercado?
no
Se estudiará la posibilidad de transferir alimentos importados
no
¿Con cuánta urgencia se necesitan las transferencias? ¿Pueden trabajar los miembros de hogares con inseguridad alimentaria?
sí sí
Se estudiará la posibilidad de transferir alimentos comprados a nivel local
Se estudiará la modalidad de asistencia/apoyo al mercado *
cont.
no
sí
¿Hay una tasa elevada de malnutrición aguda total?
no
sí
¿Tienen las personas suficiente dinero para comprar alimentos?
no
¿Hay personas que no pueden satisfacer sus necesidades alimentarias en los hogares?
no
sí cont.
Se estudiará la modalidad de alimentación terapéutica y/o suplementaria
¿Serían factibles las transferencias de efectivo u otros recursos no alimentarios?
sí
¿Hay riesgos de carencias de determinados micronutirentes?
no
sí cont.
Se estudiarán programas de atención a barrios, alimentación escolar, alimentación institucional, según proceda
Se estudiará la posibilidad de transferir dinero u otros recursos no alimentarios*
¿En qué medida pueden organizarse los sistemas de trabajo?
Se estudiará la modalidad de alimentos por activos o alimentos por trabajo
Se estudiará una distribución general gratuita de alimentos
¿Hay objetivos nutricionales específicos?
Se estudiará una red de seguridad social para determinados grupos vulnerables
¿Qué factores contextuales limitan la viabilidad de determinadas respuestas?
Se estudiará la modalidad de dinero por trabajo *
¿Qué combinación de respuestas atendería mejor todas las necesidades de recursos oportunamente?
Se estudiará la distribución de dinero, cupones de alimentos, otras transferencias no alimentarias *
¿Tienen los hogares los medios yes para preparar los alimentos y la capacidad para dispensar cuidado?
¿Hay problemas de diarrea u otras enfermedades que afecten a la utilización de los nutrientes?
no
sí
cont. Se estudiará la provisión de alimentos enriquecidos y/o el enriquecimiento de alimentos a nivel local
Distribuir hornillos, utensilios, combustible, agua para cocinar o apoyo social *
Fomentar las intervenciones de salud, agua y saneamiento
Ninguna otra medida
no
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 225
Ejemplo de la utilización de la guía para decidir las opciones de respuesta Se registra una pérdida de posibilidades de trabajo local e ingresos de efectivo de los agricultores pobres, lo que da lugar a la inseguridad alimentaria en los hogares. En los mercados locales sigue habiendo alimentos a precios prácticamente normales. Las tasas de malnutrición todavía no han aumentado. Los agricultores pobres podrían plantar cultivos comerciales para la próxima segunda campaña, pero no tienen las semillas para hacerlo. La guía propondría lo siguiente: • Hay posibilidades de que las personas aumenten la producción; se procurará garantizar el suministro de los insumos productivos necesarios (semillas); • En el mercado local hay alimentos; las personas no tienen dinero (de modo que las intervenciones en el mercado no servirían para nada), pero pueden trabajar, lo que indica que la modalidad de dinero por trabajo podría se adecuada. Sin embargo, si esta modalidad no fuera factible en la medida y el momento necesarios, o si una gran inyección de dinero pudiera tener efectos inflacionistas graves, entonces podría ser adecuada la modalidad de alimentos por trabajo sobre la base de la compra de alimentos a nivel local; y • Las tasas de malnutrición no son elevadas, de modo que no hace falta ninguna alimentación terapéutica o suplementaria.
Ejemplo de la utilización preventiva a corto plazo de la alimentación suplementaria En Aceh en 2005, tras la catástrofe del tsunami, el equipo de evaluación detectó un aumento de la malnutrición (emaciación) entre los niños y recomendó: i) una distribución general «preventiva» de alimentos suplementarios para los niños menores de 5 años y las madres en los campamentos de desplazados donde la situación nutricional fuera ya preocupante o mostrara una tendencia al deterioro; y ii) una distribución selectiva de alimentos suplementarios a las comunidades no desplazadas por conducto de determinadas instituciones colaboradoras. El equipo consideró que la mera adición de una pequeña cantidad a la ración general no pondría fin a la creciente malnutrición, dado que los alimentos se reparten entre todos los miembros del hogar, por lo que el niño no colma sus necesidades adicionales con la cantidad suplementaria. Había firmes indicios de que la malnutrición iba en aumento en determinados campamentos de personas desplazadas dentro el país como consecuencia de la superpoblación y el deficiente saneamiento, aunque no se disponía de datos empíricos suficientes en ese momento para concluir que se reunían los criterios habituales para recibir alimentación suplementaria general.
Transferencias alimentarias y no alimentarias; distribuciones gratuitas o por trabajo No existen reglas fijas para determinar si dadas las circunstancias lo que más conviene son transferencias de alimentos, dinero u otros recursos, pero hay una serie de cuestiones que hay que examinar además de las consideraciones generales sobre la idoneidad y viabilidad expuestas al principio de esta sección. Algunas de ellas se enumeran a continuación. Preguntas relevantes para elegir entre las transferencias de alimentos o de efectivo •
¿Hay cantidades suficientes del tipo de alimentos necesario en la zona? (En caso afirmativo, las transferencias de alimentos, en especial las transferencias de productos importados, tal vez no sean adecuadas. Habrá que estudiar la posibilidad de efectuar transferencias de efectivo o de alimentos comprados a nivel local.);
•
¿Obstaculizan las restricciones impuestas por el gobierno u otras partes el movimiento de los alimentos o el dinero? (En caso afirmativo, una u otra transferencia tal vez no sean adecuadas.);
226 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
•
¿Pueden y quieren los comerciantes responder rápidamente al aumento de la demanda y suministrar los productos necesarios para satisfacer las necesidades nutricionales en el marco de un mercado competitivo? (En caso afirmativo, las transferencias de efectivo pueden ser adecuadas.);
•
¿Cómo evolucionan los precios? ¿Es probable que los programas de transferencia de efectivo causen inflación? (En caso afirmativo, las transferencias de efectivo tal vez no sean adecuadas, a menos que sean muy reducidas con respecto al mercado total de la zona.);
•
¿En qué estación se está? ¿Intentan los agricultores locales vender sus productos? (Si los agricultores intentan vender (p. ej., después de la cosecha), las transferencias de alimentos pueden disminuir los precios y perjudicar los medios de subsistencia de los agricultores, a menos que las distribuciones sean reducidas en comparación con la demanda local en la zona.);
•
¿Hay obstáculos para el transporte o falta de fondos que impidan a los comerciantes traer alimentos suficientes? (En caso afirmativo, pueden reducirse los obstáculos al transporte —p. ej., reparación de un puente— o concederse créditos a los comerciantes?);
•
¿Qué infraestructura existe para garantizar la entrega y distribución oportunas y periódicas de los alimentos (transporte, almacenes, etc.) o el dinero (servicios bancarios)? ¿Cuán fiable es? (Si no existen medios de transporte y locales de almacenamiento, hará falta apoyo logístico específico para suministrar la ayuda alimentaria. Si no se dispone de servicios bancarios fiables, puede ser difícil llevar a cabo las transferencias de efectivo.);
•
¿Cómo se utilizarían los recursos (alimentos o dinero) transferidos a los hogares? ¿Quién controlaría su uso (hombres o mujeres)? (Si las mujeres controlaran los alimentos pero no el dinero, y existiera un alto riesgo de que los hombres no utilizaran el dinero en beneficio de la familia, puede ser preferible la distribución de alimentos.);
•
¿Qué recursos pueden movilizarse y distribuirse a tiempo?; y
•
¿Cuáles serían los riesgos para la seguridad asociados a la manipulación y la distribución de determinados productos alimentarios o de dinero?
Preguntas relevantes para determinar si los programas de trabajos serían adecuados •
¿Pueden realizarse trabajos públicos que beneficien a las comunidades afectadas y dar trabajo a un número suficiente (provechoso) de personas durante el período en que necesitan asistencia? (En caso negativo, los proyectos de trabajos no serán adecuados como respuesta básica al problema de acceso.);
•
¿Sería posible y podría contarse con la colaboración de asociados fiables para organizar y supervisar esas actividades? Se reúnen los requisitos técnicos y otros requisitos no alimentarios para esos proyectos? (En caso negativo, los proyectos de trabajos no serán adecuados.);
•
¿Será posible organizar proyectos de trabajos en todas las zonas afectadas? En caso negativo, están las distintas zonas a suficiente distancia para aplicar estrategias de asistencia distintas en diferente zonas sin crear tensiones sociales? (En caso negativo, los proyectos de trabajos tal vez no sean adecuados como respuesta básica al problema de acceso.);
•
¿Cuándo pueden aplicarse los proyectos de trabajos? ¿Pueden participar los beneficiarios previstos en los proyectos de trabajos en ese período sin perjuicio de otras actividades necesarias para su propia recuperación? (Si, por ejemplo, las personas necesitan preparar su propia tierra en un determinado período para la próxima campaña de plantación, no puede preverse que participen en un proyecto de trabajos públicos en ese período.);
•
¿Cuentan todos los hogares necesitados con un adulto apto para realizar trabajos manuales y hacerlo sin poner en juego sus actividades productivas y de atención? (En caso negativo, puede darse trabajo de ayuda a los miembros de los hogares que no cuenten con un adulto apto para realizar trabajos manuales o hay que ofrecerles una «red de seguridad social» complementaria?); y
•
¿Son culturalmente aceptables los tipos de trabajos disponibles teniendo en cuenta las divisiones normales del trabajo basadas en criterios de género, étnicos o de otro tipo?
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 227
Si se considera que los proyectos de trabajos son adecuados, habrá que responder a otras preguntas fundamentales: •
¿Debería haber criterios de selección? ¿El sueldo debe ser igual o inferior a la escala de sueldos actual en el mercado? Si el sueldo se fijara por debajo de la escala de sueldos del mercado con fines de autoselección, ¿obtendrían los beneficiarios suficientes alimentos para colmar su insuficiencia del acceso a los alimentos y la de sus hogares? (Cuando hay pocas posibilidades de empleo y una gran cantidad de mano de obra subempleada, o cuando los sueldos locales son bajos o se pagan con irregularidad, las tasas de adhesión pueden ser muy altas y entonces un programa de trabajo por debajo de la escala de sueldos en el mercado puede ser adecuado. Cuando los sueldos son muy bajos y los precios de los alimentos muy altos, un programa de trabajos que ofrezca sueldos por debajo de la escala de sueldos en el mercado puede no ser adecuado.)
Análisis de las posibles opciones de respuesta Sobre la base de las respuestas a las preguntas antes planteadas, la guía que figura en el Diagrama 13b y la matriz de las opciones de respuesta contenida en el Anexo B5, se determinará las opciones de respuesta que pueden o no convenir en la situación imperante. Partiendo de esta base, se llenará rápidamente la hoja de trabajo que se presenta en el Cuadro 13-C. Se consultará la columna 3 del Anexo B5 para comprobar que se dispone de la información necesaria para decidir y, de no ser así, ver la información adicional que hay que recabar. (En el CD-ROM se incluye una versión de esta hoja de trabajo lista para usar.)
Cuadro 13-C Hoja de trabajo para determinar las opciones de respuesta adecuadas y factibles Opción de respuesta
¿Adecuada?
¿Factible?
Razones
* = Medidas que el PMA tal vez no pueda apoyar
Sí
directamente.
No
Sí
No
Opciones para abordar los problemas del acceso inadecuado a los alimentos, o los riesgos para los medios de subsistencia, de algunos o todos los hogares • Distribución general gratuita de alimentos • Alimentos por trabajo (APT) • Alimentos para la recuperación (APR) • Dinero por trabajo (DPT) * • Programas de transferencia de efectivo * • Cupones de alimentos • Intercambio por productos • Programa de asistencia al mercado * • Apoyo al sistema de mercado * • Apoyo no alimentario a las actividades de subsistencia * • …
Opciones para abordar los problemas del acceso inadecuado a los alimentos de determinadas personas • Alimentación escolar • Alimentos para las instituciones de servicios sociales (habrá que especificar cuáles) • Programas de atención a los barrios • …
Opciones para abordar los problemas nutricionales • Alimentación suplementaria selectiva, para llevar a
.
228 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
casa • Alimentación suplementaria selectiva, para consumir en el lugar • Distribución general de alimentos suplementarios, para llevar a casa • Distribución general de alimentos suplementarios, para consumir en el lugar • Programa de alimentación terapéutica, en el lugar • Atención terapéutica comunitaria • Medidas para abordar las causas no alimentarias de la malnutrición * • …
Análisis de las posibles opciones de selección Con respecto a la asistencia para abordar los problemas del acceso de los hogares a los alimentos, deberá determinarse si la selección geográfica o la selección de hogares es deseable o no y, de serlo, qué opciones de selección podrían ser posibles. Se utilizará la matriz de las opciones de selección del Anexo B6 para determinar el tipo de selección que puede ser o no adecuado en la situación de que se trate, consultando la columna 2. Sobre esta base, se llenará rápidamente la hoja de trabajo que se presenta en el Cuadro 13-D. Se consultará la columna 3 del Anexo B6 para comprobar que se dispone de la información necesaria para decidir y, de no ser así, ver qué información adicional hay que recabar. (En el CD-ROM se incluye una versión de esta hoja de trabajo lista para usar.)
Cuadro 13-D Hoja de trabajo para determinar posibles opciones de selección geográfica y de hogares para las respuestas tendentes a abordar los problemas del acceso inadecuado de los hogares a los alimentos o los riesgos para los medios de subsistencia
Opción de selección
¿Pertinente?
¿Factible?
Sí
Sí
No
Razones
No
Selección geográfica basada en: •
insuficiencias del acceso a los alimentos de los hogares corrientes
•
categorías de gravedad del impacto o la inseguridad alimentaria
Selección de hogares basada en: •
Situación socioeconómica
•
enfermedades
•
estado nutricional de los niños
•
aspectos sexiespecíficos (p. encabezados por mujeres)
ej.,
hogares
También será útil tomar nota de qué criterios pueden ser preferibles, y qué criterios habrá que aplicar si los recursos son particularmente escasos.
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 229
13.5 Determinación de las ventajas e inconvenientes de las diversas opciones posibles de respuesta y selección Se preparará una matriz parecida a la que figura en el Cuadro 13-E, en consulta y colaboración con planificadores de programas procedentes de todas las principales partes operacionales (entidades gubernamentales competentes, funcionarios de programas del PMA, organismos de las Naciones Unidas asociados y ONG). Se completará la matriz estudiando las ventajas e inconvenientes específicos de cada opción en la situación objeto de análisis. Esta matriz servirá de base para proponer un conjunto específico de medidas (véase la sección 13.6) y mostrará también a los encargados de adoptar decisiones las otras opciones que se estudiaron (y que todavía serían posibles), con las ventajas e inconvenientes que llevaron a la recomendación final. El contenido de la matriz debe basarse en los datos recabados, así como en el análisis realizado y presentado en el informe. Obsérvese que ‘inconvenientes’ incluye cualesquiera posibles efectos colaterales negativos que podría tener un tipo concreto de respuesta, así como los posibles costos y dificultades que podrían encontrarse durante la aplicación de la intervención. Para preparar esta matriz, se consultarán: •
las preguntas planteadas en la sección 13.4 supra;
•
las observaciones que se exponen infra sobre las circunstancias en que las transferencias de alimentos o de efectivo pueden o no ser adecuadas; y
•
el Cuadro 13-H (al final de este capítulo) en que se resumen algunas de las ventajas e inconvenientes a menudo determinados para cada una de las principales opciones de respuesta tendentes a abordar los problemas de acceso a los alimentos. Se incluyen asimismo las ventajas e inconvenientes que hay que estudiar al elegir entre las modalidades de alimentos suplementarios y terapéuticos para llevar a casa o consumir en el lugar, en el caso de que esos programas sean necesarios para corregir los problemas de malnutrición.
Cuadro 13-E Ventajas e inconvenientes de las diversas opciones de respuesta y selección que se consideren adecuadas y factibles (las entradas figuran solamente a título ilustrativo) Opción de respuesta o selección
Ventajas específicas
Inconvenientes específicos
Observaciones
Problema nº 1: [p. ej., determinados hogares tienen un acceso inadecuado a los alimentos durante un período específico] Causa(s): … Objetivo: … 1
Distribución general de alimentos
1a
-- selección basada en la comunidad
1b
-- únicamente selección geográfica
2
Alimentos por trabajo
3
Dinero por trabajo
4
Apoyo al mercado
.
230 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
5
…
Problema nº 2: [p. ej., malnutrición entre los niños] Causa(s): … Objetivo: … 1
Programa selectivo de alimentación suplementaria, alimentos para llevar a casa
2
Programa selectivo de alimentación suplementaria, alimentos para consumir en el lugar
3
….
Problema nº 3: [p. ej. los medios de vida de los agricultores de subsistencia y los jornaleros están en peligro] Causa(s): … Objetivo: … 1
Alimentos por trabajo para reparar la infraestructura de riego
2
Dinero por trabajo para reparar la infraestructura de riego
3
…
…
¿Cuándo pueden ser adecuadas las transferencias de alimentos o de efectivo? Depende en primer lugar de la disponibilidad de alimentos y la situación del mercado, aunque también deben atenderse los aspectos sociales, nutricionales y de seguridad. Aunque no son factores determinantes, puede ser útil calcular el valor de transferencia y la eficacia en función del costo de las raciones propuestas, como se describe a continuación. Valor de transferencia: Cuando los alimentos se ofrecen como pago o incentivo (p. ej., en actividades de alimentos por trabajo o alimentos para la recuperación), o cuando se están estudiando otros tipos de transferencias de alimentos en una situación en que los beneficiarios pueden canjear una parte de la ración por alimentos o productos no alimentarios disponibles a nivel local, deberá calcularse el valor de transferencia de la ración (el valor de la ración en el mercado local), como se muestra en el Cuadro 13-F, y compararlo con los jornales que se estén pagando en ese momento en la zona.
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 231
Cuadro 13-F Ejemplo de cálculo del valor de transferencia de una ración Una ración de APT comprende: 2,5 kg de cereales + 300 g de habas + 200 g de aceite vegetal Los precios en el mercado local (en equivalentes de dólares EE.UU.) son los siguientes: Producto
Precio en el mercado local ($EE.UU.)
Cereales
0,08/kg
Habas
0,20/kg 0,90/litro = 0,90/0,921 = 0,978/kg
Aceite vegetal 1
El peso específico (densidad) del aceite es 0,92 kg/litro
El valor de la ración diaria en el mercado local es: (2,5 × 0,08) + (0,3 × 0,2) + (0,2 × 0,978) = 0,2 + 0,06 + 0,195 = 0,455 $EE.UU. Si la ración se distribuye durante 60 días, el valor de transferencia total es: 0,455 $EE.UU × 60 = 27,30 $EE.UU.
Eficacia en función del costo: Cuando existe la posibilidad de comprar a nivel local o de intercambiar productos básicos8, cuando los beneficiarios canjean una parte considerable de la ración por productos locales o si pueden efectuarse transferencias de efectivo (a cargo de un organismo que no sea el PMA) en lugar de transferencias de alimentos. Se comparará el costo que supone para el PMA la entrega de productos básicos a los beneficiarios con: i) el valor en el mercado local del mismo tipo de productos básicos; y ii) el costo de prestar la asistencia necesaria de otra manera (p. ej., mediante una transferencia de efectivo). La comparación con el valor en el mercado local se hace calculando para cada producto la proporción del precio en el mercado local con respecto al costo total que supone para el PMA y sus donantes entregar el producto a los beneficiarios desde una fuente externa. El resultado de esta comparación se conoce como ‘valor Alfa’. En el cuadro 13-G se da un ejemplo de este cálculo. Si el valor Alfa es considerablemente inferior a 1 (como en el ejemplo del Cuadro 13-G) o si la asistencia puede prestarse por medios más económicos, puede que las transferencias de alimentos no sean la opción más eficaz en función del costo. Sin embargo, deben tenerse en cuenta los factores contextuales en cualquier decisión o recomendación final sobre la idoneidad de la asistencia alimentaria o de otro tipo. Cuadro 13-G Ejemplo de cálculo de la proporción del precio en el mercado local con respecto a los gastos del PMA (valor Alfa) Precios en el mercado local (en equivalentes de $EE.UU.) y costos de compra del PMA o los donantes: Producto
Precio en el mercado local ($EE.UU.)
Costo FOB para el PMA ($EE.UU.)
Cereales
0,08/kg = 80/t
120/t
Costos de entrega para el PMA: flete marítimo + seguro (para los cereales) transporte 8
interno,
almacenamiento
80/t y
50/t
Véase Emergency Field Operations Pocketbook del PMA, 7.3 Exchanging commodities.
.
232 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
manipulación (TIAM) [Ejemplo]
La proporción (valor Alfa) es en consecuencia: 80 / (120+80+50) = 80 / 250 = 0,32
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 233
¿Cuándo pueden ser o no adecuadas las transferencias de alimentos o de efectivo? Las transferencias de alimentos probablemente serán más adecuadas que las transferencias de efectivo cuando: •
exista una grave escasez de alimentos (y en consecuencia la necesidad de aumentar la disponibilidad de alimentos);
•
los mercados sean inestables debido a la inseguridad; o
•
los precios probablemente no sean bajos cuando los productores locales intenten vender.
Cuando las estructuras sociales y tradiciones de la sociedad dificulten la selección de los hogares en función de las necesidades, las transferencias de alimentos pueden permitir un cierto grado de (auto) selección si se utilizan productos básicos de segunda opción. A menudo se apunta que los alimentos también pueden ser más adecuados cuando las mujeres controlan los alimentos en el hogar pero no otros recursos (especialmente el dinero), cuyo control de ordinario está a cargo de los hombres. Con todo, algunos estudios recientes han indicado que hay pocos datos de que los hombres se apropien indebidamente de las transferencias de efectivo para fines distintos de la alimentación y el bienestar de la familia.9 Las transferencias de alimentos pueden ser menos adecuadas cuando: •
los mercados puedan garantizar la disponibilidad de alimentos en la zona a precios razonables si hay poder adquisitivo previo; o
•
los gastos o pérdidas generales por el deterioro o robo puedan ser elevados.
Las transferencias de efectivo son adecuadas única y exclusivamente cuando: •
el mercado pueda garantizar una oferta suficiente de alimentos rápidamente; y
•
una inyección de dinero pueda estimular la economía local sin causar inflación, en especial un aumento de los precios de los alimentos.
La experiencia con programas de transferencia de efectivo es relativamente limitada y gran parte de ella se ha adquirido gracias a proyectos relativamente pequeños; aun así, cada vez más se consideran una respuesta que puede ser eficaz y adecuada en muchas emergencias. Sigue habiendo una serie de factores que merecen un examen detenido cuando se trata de este tipo de programas. Incluyen: •
¿Qué nivel de poder adquisitivo hace falta y a qué distancia de la oferta para asegurar un influjo de alimentos u otros productos?;
•
¿Cómo evolucionarán los precios tras una inyección de dinero?;
•
¿Qué nivel de influjo de dinero hace falta para que la inflación sea inevitable?;
•
¿Cómo gastan el dinero los beneficiarios (género/situación económica) en diversas circunstancias (emergencia/no emergencia)?; y
•
¿Cuáles son los riesgos para la seguridad en situaciones de conflicto e inestabilidad política?
Los impactos sobre el mercado de las transferencias de alimentos y efectivo son bastante distintos y dependen de la situación del mercado: •
Las distribuciones de alimentos pueden bajar el precio de los alimentos y de este modo beneficiar a toda persona que compre alimentos, incluidas las personas que no hayan sido elegidas, aunque perjudicando posiblemente a los agricultores que tengan alimentos de primera necesidad para vender, y los comerciantes; y
9
Véase, por ejemplo, Khogali H (2002) Cash: an alternative to food aid, Oxfam-GB; Harvey P (2005) Cash and vouchers in emergencies, documento de debate, Instituto de Desarrollo de Ultramar, Londres.
.
234 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
•
Las distribuciones de efectivo tienden a aumentar los precios, como mínimo al principio, beneficiando a los agricultores, aunque en detrimento de las personas que compran alimentos pero no recibieron dinero efectivo.
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 235
13.6 Recomendación complementarias
de
un
conjunto
de
intervenciones
Por último, sobre la base de la matriz preparada, deberá recomendarse la que parezca ser la mejor respuesta o, lo más probable, la mejor combinación («conjunto») de respuestas para abordar el problema o los problemas detectados. En teoría, el «conjunto» deberá abordar las causas subyacentes y los problemas inmediatos. Como mínimo, deberá abordar los problemas inmediatos (salvando vidas, corrigiendo la malnutrición, protegiendo los medios de subsistencia y respaldando la recuperación) en la medida de lo posible, y causar los mínimos efectos colaterales negativos, directos o indirectos. Deberá explicarse el razonamiento de la recomendación (por qué se considera que el conjunto propuesto es el mejor en la situación imperante). Para formular el conjunto de respuestas no solamente deberán tenerse en cuenta las ventajas e inconvenientes de cada posible opción de respuesta, sino también las correlaciones entre ellas. Deberá procurarse que la respuesta (o la combinación de respuestas): •
garantice el mayor impacto posible sobre los problemas más importantes; con
•
los mínimos riesgos de que se produzcan efectos colaterales negativos (dañinos) o el fracaso debido a dificultades operacionales.
Asimismo, deberán identificarse posibles sinergias y aprovecharse. Por ejemplo: •
Las modalidades de APT o DPT pueden ayudar a crear la infraestructura necesaria para proteger y recuperar los medios de subsistencia, y sirven al mismo tiempo para transferir recursos y permitir a los beneficiarios acceder a alimentos adicionales;
•
La distribución de alimentos gratuitos, dinero o cupones puede ayudar a los hogares pobres a superar los problemas inmediatos de acceso y, al mismo tiempo, proteger sus activos de subsistencia al eliminar el riesgo de tener que sacrificar esos activos para obtener alimentos u otros productos necesarios para la supervivencia; y
•
Si no hay suficientes alimentos en los mercados locales (un problema de disponibilidad) y las personas no tienen dinero (un problema de acceso), puede estudiarse la posibilidad de llevar a cabo una combinación de asistencia al mercado y algún tipo de transferencia de dinero.
Debe también estudiarse si parte de la asistencia (o toda ella) debe ser selectiva y, en caso afirmativo, qué mecanismos y criterios de selección deben utilizarse a la luz de la situación hipotética formulada en el marco de la Actividad 12 y la matriz (Cuadro 13-C). Por ejemplo, si muchos hogares (aunque no todos) cuentan con miembros aptos para trabajar y existen proyectos de trabajos, podrá estudiarse la posibilidad de combinar: i) la modalidad de alimentos o dinero por trabajo junto con ii) una red de seguridad social de distribución selectiva de alimentos gratuitos, dinero o cupones para los hogares «vulnerables» que no cuentan con un adulto apto para trabajar. Para estos grupos vulnerables puede proponerse primeramente la selección de hogares con arreglo a criterios socioeconómicos (de ser posible), y si los recursos son escasos, recurrir a criterios más específicos. Se procurará ver las cosas desde el punto de vista de los beneficiarios previstos. ¿Qué es lo que tendría más sentido para ellos? Recuérdese que la combinación de enfoques es probablemente la mejor manera de abordar las diferentes necesidades de los diferentes grupos, además de reducir los riesgos en el caso de que uno de los enfoques tropezara con dificultades prácticas inesperadas durante la aplicación. Habrá que procurar no proponer un conjunto demasiado complejo. La capacidad institucional y administrativa puede ser limitada en comparación con las necesidades, y la coordinación de múltiples actividades y agentes probablemente plantee problemas. Se tendrá en cuenta la experiencia adquirida en anteriores operaciones de urgencia y asistencia humanitaria prolongada en la misma zona general. ¿Cuál debería ser la estrategia de retirada gradual? Puede incluir: la creación de capacidad de los homólogos gubernamentales, el refuerzo del seguimiento de la seguridad alimentaria, la identificación de valores de referencia para la mejora de la situación de la seguridad
.
236 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
alimentaria, el establecimiento de prioridades entre las intervenciones programáticas, las zonas geográficas o los subgrupos para la reducción progresiva de la ayuda, etc.
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 237
13.7 ¿Hace falta asistencia externa? Se trata de una resolución que debe formularse sobre la base de: •
la escala y los posibles costos de la operación de asistencia necesaria;
•
los medios a disposición del gobierno para prestar la asistencia necesaria a su propia población (es decir: información sobre la situación macroeconómica; asignaciones presupuestarias del gobierno y la medida en que están financiadas; y las reservas de divisas); y
•
si las condiciones políticas, los conflictos o la inseguridad pondrán en peligro la seguridad alimentaria de algunos grupos de población si no se presta asistencia externa.
Se están preparando directrices al respecto. Mientras tanto, se contactará a la oficina regional y la Dependencia de Análisis Económico (PSPE) en la sede del PMA para obtener asesoramiento y asistencia. Cuadro 13-H Ventajas e inconvenientes frecuentemente identificados de las distintas opciones de respuesta Tipo de respuesta
Ventajas
Inconvenientes
Opciones de respuesta para abordar los problemas relacionados con el acceso inadecuado a los alimentos de algunos o todos los hogares Transferencias de alimentos (distribución gratuita de alimentos, APT)
Transferencias de efectivo
•
Los alimentos abordan directamente el consumo deficiente y las carencias nutricionales. Lo más probable es que se consuman, dado que su conversión es menos fácil que en el caso del dinero.
•
Los alimentos son un recurso que las mujeres normalmente gestionan en el hogar.
•
Las transferencias de alimentos son eficaces y necesarias cuando ningún mercado puede satisfacer todas las necesidades de la población.
•
El dinero efectivo permite a los hogares definir sus propias prioridades de gastos.
10
•
La distribución de alimentos a menudo es costosa debido a los elevados gastos generales de 10 transporte, almacenamiento y administración.
•
Los alimentos son voluminosos y por ello son difíciles de transportar por los beneficiarios. A menos que haya puntos de distribución cercanos a sus casas, el transporte del lugar de distribución al hogar puede conllevar un gasto considerable para los beneficiarios.
•
Una cadena de suministro larga antes de que los alimentos lleguen efectivamente al punto de distribución puede ocasionar demoras en la distribución de los alimentos.
•
El suministro de alimentos puede alterar el mercado y la economía local, reducir los ingresos de los productores locales y constituir un desincentivo para la producción alimentaria local del futuro si la distribución se efectúa en gran escala, o prosigue por un período prolongado y cuando los agricultores locales procuran vender sus propios productos.
•
Los productos suministrados en concepto de ayuda alimentaria tal vez no colmen todas las necesidades de nutrientes de la población o satisfagan las preferencias y gustos locales.
•
Los alimentos pueden utilizarse como arma en situaciones de conflicto, y las facciones beligerantes pueden imponer obstáculos administrativos.
•
El dinero no puede utilizarse en una economía de trueque, solamente en una economía monetaria.
Los gastos que conlleva el transporte, el almacenamiento y la manipulación de los productos alimentarios desde el punto de origen hasta los lugares de distribución a menudo representan varias veces el costo de la compra de los productos, especialmente cuando hay grandes distancias y dificultades logísticas. 11 Un estudio que comparaba el costo de la modalidad de APT con la de DPT en la República Democrática del Congo determinó que el costo para los donantes de un día de trabajo en el marco de un proyecto de DPT era aproximadamente 1/5 del costo de un día de trabajo en el marco de un proyecto de APT (Levine y Chastre, Missing the Point – an analysis of food security interventions in the Great Lakes, Humanitarian Practice Network, documento de la Red nº 47, Instituto de Desarrollo de Ultramar (ODI) 2004; 13).
.
238 ■ Capítulo 13: Determinación y análisis de las opciones de respuesta y selección
(distribución de dinero, dinero por alimentos)
•
•
Proyectos de trabajos públicos (APT, DPT)
Cuando se pueden comprar algunos alimentos en el mercado, el dinero efectivo puede complementar la distribución de alimentos al permitir a los beneficiarios compensar una posible falta de variedad en las raciones de alimentos. Las transferencias de efectivo pueden ayudar a las personas a restablecer los medios de subsistencia, así como respaldar la subsistencia. Pueden formar parte de un conjunto de medidas para la recuperación.
•
Las inyecciones de dinero efectivo pueden ayudar a estimular la economía y fomentar la productividad.
•
El dinero en efectivo es más eficaz en función del costo que otras opciones de respuesta, ya 11 que los costos de distribución son mínimos .
•
Los proyectos de trabajos dan trabajo a las personas desocupadas y, en consecuencia, conlleva importantes beneficios psicológicos y económicos.
•
Los proyectos de trabajos pueden contribuir a mejorar el acceso a los alimentos y la disponibilidad de los mismos para el conjunto de la comunidad gracias a la creación de un activo comunal (APT o DPT) o la creación de las condiciones para la recuperación (APR).
•
•
La selección de los beneficiarios puede se difícil, dado que el dinero atrae a toda la población.
•
Las inyecciones de dinero pueden causar inflación, a menos que los comerciantes del mercado estén listos y puedan aumentar inmediatamente la oferta.
•
Las mujeres, que normalmente se encargan de dar de comer a la familia, tal vez no ejerzan el control sobre el dinero y la manera en que se gasta.
•
(Los donantes tal vez estén menos dispuestos a dar dinero que alimentos para la distribución, especialmente cuando se necesitan grandes cantidades.)
•
Los proyectos de trabajos son difíciles de organizar rápidamente en gran escala en condiciones de crisis agudas: a menudo las necesidades administrativas no pueden gestionarse en una emergencia. Se adaptan mejor a las crisis de inicio lento, la fase de recuperación después de una catástrofe natural repentina y las emergencias complejas prolongadas (si las condiciones de seguridad lo permiten).
•
Los proyectos de trabajos no ayudan a los hogares cuando no hay personas aptas para el trabajo (como es el caso a menudo de los hogares más pobres), o cuando todas las personas aptas están plenamente ocupadas por ejemplo en la preparación de la tierra y la plantación para la próxima cosecha.
•
Los proyectos de trabajos pueden aumentar la carga sobre las mujeres, si tienen que realizar el trabajo.
En algunos casos, los proyectos de trabajos son autoselectivos (sólo participan los que verdaderamente están necesitados).
Manual del PMA sobre las ESAE – Primera edición ■ 239
Apoyo a los medios de subsistencia Proyectos de apoyo a los medios de subsistencia
•
Los proyectos de apoyo a los medios de subsistencia protegen la seguridad alimentaria a largo plazo y fomentan la recuperación y la autosuficiencia.
•
Se basan en los recursos existentes en los hogares y las comunidades.
•
Abordan algunas de las causas fundamentales de la inseguridad alimentaria y la pobreza y por ello contribuyen a prevenir la inseguridad alimentaria en el futuro.
•
Pueden no colmar las necesidades de los hogares sumidos en la miseria que no dispongan de activos de capital o no sean económicamente activos.
•
Un proyecto de apoyo a los medios de subsistencia tal vez no sea adecuado cuando las personas pierden su base de subsistencia, aunque sí puede impartirse capacitación técnica para los futuros medios de subsistencia.
•
Puede ser difícil aplicar proyectos de apoyo a los medios de subsistencia en situaciones de conflicto o 12 crisis políticas, aunque puede hacerse.
•
Los proyectos de apoyo a los medios de subsistencia requieren una planificación minuciosa, una buena gestión y (con frecuencia) una fase experimental en pequeña escala para comenzar. Pueden ser difíciles de aplicar a gran escala.
Opciones para abordar los problemas nutricionales o los problemas ligados al acceso inadecuado a los alimentos de determinadas personas Alimentación escolar
Alimentación suplementaria en el lugar
Alimentación suplementaria para llevar a casa
•
Si los niños y jóvenes no reciben suficientes alimentos en casa, los alimentos que reciban en la escuela aumentarán la calidad y cantidad de su ingestión de alimentos (siempre que no coincidan con un descenso igual de la ingestión de alimentos en casa).
•
Al aumentar su ingestión de alimentos, mejora la capacidad de aprendizaje de los niños. A largo plazo, el aprendizaje les dará más oportunidades económicas que pueden mejorar su seguridad alimentaria.
•
Da la oportunidad de ofrecer suplementos de micronutrientes a los niños.
•
Puede mantener y aumentar la asistencia a la escuela, especialmente durante los períodos de crisis, lo que aumenta los beneficios educativos y la eficacia de las escuelas como conducto para la aplicación de medidas de salud como el tratamiento antihelmíntico.
•
Los funcionarios observan cómo se consumen los alimentos y tienen un contacto más regular con las madres y las personas encargadas del cuidado de otros, de modo que pueden apoyar mejor la recuperación.
•
La alimentación escolar sólo beneficia a los niños que van a la escuela. Algunos (quizás muchos) de los niños pertenecientes a los hogares más aquejados por la pobreza y la inseguridad alimentaria tal vez no van a la escuela y, en consecuencia, no se benefician del programa de alimentación escolar.
•
Costo de oportunidad (tiempo) para la persona encargada del cuidado de otros.
•
Es más costoso para el organismo de ejecución.
•
Riesgo de propagar infecciones en los centros de alimentación atestados de gente.
•
El beneficiario puede recibir menos alimentos en casa por recibir un «suplemento».
•
Menos costo de oportunidad (tiempo) para las madres o personas encargadas del cuidado de otros.
•
El alimento puede compartirse con los miembros del hogar, de modo que hay que suministrar alimentos adicionales para compensar este reparto.
•
Menos costos para el organismo de ejecución; más rápido de aplicar.
•
Posible riesgo para la seguridad, etc.
12
Véase Jaspars S y Shoham J [2002]. A critical review of approaches to assessing and monitoring livelihoods in situations of chronic conflict and political instability (SCCPI), documento de trabajo del ODI 191.
.
Capítulo 14
Preparación del informe sobre la ESAE En el presente capítulo se exponen brevemente orientaciones sobre: • la preparación y presentación de un informe resumido preliminar, véase → sección 14.1 • la preparación y difusión del informe final, véase → sección 14.2
Sobre la base del contenido del informe y la información suplementaria disponible en la oficina en el país, debería ser posible, si fuera necesario, acordar una estrategia de asistencia con el gobierno y otros asociados, preparar un documento de proyecto —una operación de urgencia (OU) o una operación prolongada de socorro y recuperación (OPSR) del PMA— y defender convincentemente ante los donantes la importancia de sus contribuciones. Asimismo, debería justificar la necesidad de adoptar medidas no alimentarias para complementar la ayuda alimentaria (o para sustituir la ayuda alimentaria) para resolver los problemas ligados a los medios de subsistencia y la seguridad alimentaria.
14.1 Preparación y presentación de un informe resumido preliminar Compilación de información durante el trabajo de campo Deberá comenzarse a compilar información básica para el informe durante el trabajo de campo, con reuniones vespertinas de todos los miembros del equipo de evaluación para debatir las observaciones y progresivamente compilar material, especialmente datos e informes recabados de especialistas clave. Estos debates ayudarán a definir la información y las tendencias básicas, en particular las cuestiones intersectoriales, y asegurar que no se olvidan aspectos importantes. Preparación y presentación de un proyecto de informe resumido En el plazo de 1 ó 2 días después de la terminación del acopio de datos sobre el terreno, los especialistas técnicos del equipo (p. ej., nutricionistas, agrónomos, antropólogos) deberán presentar al jefe del equipo un resumen preliminar de sus observaciones. En el plazo de 2 ó 3 días después de completar el acopio de datos sobre el terreno: •
el jefe del equipo y uno o dos miembros del equipo designados como relatores deberán preparar un breve resumen preliminar (de entre 3 y 4 páginas) de las observaciones generales y las conclusiones y recomendaciones provisionales del equipo; y
•
el equipo deberá presentar estas observaciones preliminares y sus conclusiones y recomendaciones provisionales (con inclusión de las ventajas e inconvenientes y las repercusiones de las diversas
234 ■ Capítulo 14: Preparación del informe sobre la ESAE
respuestas posibles) al grupo básico de asociados en la organización de la evaluación, entre ellos el director del PMA en el país y otras entidades gubernamentales fundamentales, los organismos de las Naciones Unidas concernidos, los donantes importantes y las ONG indispensables en una reunión informativa convocada específicamente para este fin. Se trata de una medida importante para aprovechar las contribuciones de última hora y garantizar la aprobación de todas estas partes y su apoyo a las recomendaciones, de ser posible. El informe resumido se refinará durante los 2 días que sigan a la reunión, y la versión refinada se presentará al grupo básico de asociados y al director del PMA en el país, la oficina regional y la Dependencia de Evaluación de las Necesidades de Urgencia (ODAN) (en la sede del PMA).
14.2 Preparación y difusión del informe final Preparación y distribución de un proyecto de informe completo En el plazo de unos días (un máximo de 10) después de la presentación del informe resumido preliminar, el equipo deberá terminar el análisis y preparar un proyecto de informe completo y distribuirlo a todos los que hayan recibido el informe resumido. El informe deberá ser claro y conciso —no ocupar más de 20 páginas de largo, más los anexos— y presentar las observaciones y el análisis de manera razonable y lógica. Se utilizará el modelo que figura en el Cuadro 14-A. Se evitará el lenguaje que pueda resultar ambiguo o equívoco. Se evitará también la jerga y el uso excesivo de siglas. Cuadro 14-A Modelo típico de informe de ESAE Resumen (<1 página) 1. Objetivos y metodología de la evaluación • objetivos de la evaluación; • cómo se recopilaron los datos primarios, número y distribución de los lugares visitados y grupos comunitarios/hogares entrevistados, y cómo se seleccionaron; • fuentes de datos secundarios utilizadas; • enfoque/métodos aplicados para analizar los datos; y • limitaciones de los datos y base para la generalización de la muestra a la población; incertidumbre/fiabilidad de los datos y conclusiones consiguientes; recomendaciones sobre la labor posterior a la recopilación y el análisis de datos, si procede. 2. Antecedentes socioeconómicos: situación anterior a la crisis en las zonas afectadas • población y grupos de subsistencia, sus perfiles típicos respecto de la seguridad alimentaria y vulnerabilidades; • situación macroeconómica, sistemas de producción, pautas comerciales, políticas fiscales y de otro tipo que afecten a la seguridad alimentaria; y • estructuras políticas y sociales: sistemas de apoyo social, cómo funcionan, a quién protegen/no protegen; estructuras de gobierno y sus repercusiones para la seguridad alimentaria de los distintos grupos. 3. Impacto general y demográfico • naturaleza de la perturbación/crisis; sus efectos generales sobre la población y la infraestructura en distintas zonas; • total de víctimas mortales; hogares sin sostén de la familia; menores no acompañados, etc.; y • número de personas desplazadas; duración prevista del desplazamiento; si los desplazados
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 235
han perdido todos sus medios de subsistencia. 4. Disponibilidad y mercados de alimentos • repercusiones sobre las existencias de alimentos a nivel local y nacional, y sobre las previsiones de la producción alimentaria; cambios de los volúmenes previstos de importaciones; medidas adoptadas por el gobierno y otros agentes para incrementar el suministro; y • repercusiones sobre los precios y la integración de los mercados; obstáculos logísticos o reglamentaciones administrativas que impidan la circulación de bienes; medidas del gobierno, los comerciantes u otros agentes para reparar la infraestructura y facilitar el funcionamiento del mercado; capacidad del mercado para satisfacer la demanda de alimentos en la actualidad y en el futuro. 5. Medios de subsistencia y acceso de los hogares a los alimentos • efectos sobre las economías locales, las posibilidades de empleo y la demanda de productos y servicios locales; medidas que se estén adoptando para restablecer la actividad económica; consideraciones estacionales; cuándo y en qué medida se prevé que se recuperen la actividad y la demanda de productos y servicios locales; • para cada grupo de población distinto: efectos sobre los medios de subsistencia, fuentes de alimentos e ingresos (comprendidos los derechos de afiliación a redes sociales/partidos políticos) y gastos obligatorios (por ejemplo, alquiler, combustible, agua, vivienda, salud, amortización de préstamos, etc.); equilibrio entre las necesidades alimentarias y las no alimentarias; tipo y sostenibilidad de las estrategias de supervivencia adoptadas; cuándo y en qué medida se prevé recuperar los medios de subsistencia; insuficiencias actuales del acceso a los alimentos y cómo se prevé que evolucionen; y • medidas adoptadas por el gobierno y otros agentes para garantizar el acceso de los hogares a alimentos adecuados; cuánto tiempo podrían aplicarse estas medidas con los recursos disponibles. 6. Consumo y utilización de alimentos, y estado nutricional y de salud • impacto sobre los regímenes alimenticios de cada grupo de población distinto; su aptitud para preparar alimentos; • estado nutricional actual y peligros para el mismo; índices de mortalidad relacionados con enfermedades; preocupaciones ligadas al agua, el saneamiento y otros aspectos de la salud pública que pongan en peligro la vida y el estado nutricional de las personas; y • medidas adoptadas por el gobierno y otros agentes para abordar los problemas de la utilización y el consumo de alimentos, la malnutrición y los principales peligros para la salud pública. 7. Problemas y peligros actuales y futuros para la seguridad alimentaria y los medios de subsistencia; asistencia necesaria • síntesis de la situación actual, posible evolución y peligros para el suministro alimentario, los mercados, los medios de subsistencia, el acceso de los hogares a los alimentos y el estado nutricional; • situación hipotética (o situaciones hipotéticas) para los próximos 6 a 12 meses; • número de personas necesitadas de ayuda en distintas zonas o grupos de población; niveles de asistencia necesarios; períodos durante los cuales se requerirá la asistencia; y • qué ocurriría si no se interviniera o si se hiciera de manera inadecuada durante el período crítico especificado. 8. Opciones de respuesta y de selección de los beneficiarios • posibles respuestas alimentarias y no alimentarias a problemas ligados al suministro/disponibilidad de alimentos (de existir), los mercados, el acceso de los hogares a los alimentos, la malnutrición, y la seguridad alimentaria a largo plazo (medios de subsistencia); ventajas y desventajas de cada una de las posibles respuestas; • obstáculos sociales, políticos, de seguridad y logísticos; posibles efectos negativos de las estrategias de asistencia en la actualidad y en el futuro; y • capacidad (comprendidos los recursos) de las comunidades, las organizaciones no
.
236 ■ Capítulo 14: Preparación del informe sobre la ESAE
gubernamentales (ONG), las autoridades locales y el gobierno para prestar asistencia o ejecutar programas con ayuda exterior. 9. Recomendaciones y actividades propuestas para después de la evaluación • recomendación de un conjunto de respuestas para abordar con las mayores garantías los problemas detectados, aduciendo razones. • para cualquier género de ayuda alimentaria: tipos y cantidades de productos básicos, cuando se necesiten, fuentes propuestas (compra a nivel local u otro tipo de fuente), selección de los beneficiarios y medidas de ejecución; y • aspectos/indicadores específicos que habrán de escrutarse durante los próximos 3/6/12 meses; planes (o recomendaciones) para las evaluaciones complementarias, de ser necesarias. Anexos Mapa de las zonas afectadas Instrumentos de evaluación utilizados Calendarios estacionales (y cualesquiera otros diagramas sucintos importantes) Calendario de las actividades y las visitas a los lugares de la evaluación Miembros del equipo de evaluación
Téngase en cuenta que las conclusiones de una ESAE tienen múltiples finalidades y se comunican a varios públicos, entre los que destacan los siguientes: •
directores, que necesitan información fidedigna y transparente para adoptar decisiones fundamentadas sobre la escala y el alcance de una crisis;
•
programadores, que recurren a los informes de ESAE para diseñar intervenciones adecuadas y operacionalmente factibles; y
•
personal en todos los niveles, que necesitan información oportuna y exacta que pueda comunicarse al gobierno, los donantes y otros agentes humanitarios con fines de programación, movilización de recursos y fomento.
Siglas y expresiones (jerga) habituales del PMA que habrán de evitarse, o explicarse, cuando se comuniquen las conclusiones de la ESAE al público general • OU, OPSR, OE, VAM
• Cesta de alimentos
• Agotamiento de activos
• Ración cocinada, ración/alimentos sin
• Grupo vulnerable • Seguridad alimentaria/acceso a los
alimentos/disponibilidad de alimentos/utilización de los alimentos • Estrategias de supervivencia • Mitigación de las dificultades
cocinar
• Diferencia entre:
malnutrición aguda y grave retraso del crecimiento y emaciación alimentación suplementaria y terapéutica
Finalización y difusión del informe Tras dejar unos días para que todos los interesados examinen y formulen observaciones sobre el proyecto, se finalizará el informe y se enviará a todas las entidades gubernamentales, organismos de las Naciones Unidas, ONG y donantes pertinentes, así como a la oficina regional del PMA y la ODAN (en la sede del PMA).
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 237
En el Cuadro 14-B figura una lista de comprobación para evaluar la calidad del informe de ESAE. Cuadro 14-B Lista de comprobación para determinar la calidad del informe de ESAE Análisis de los problemas •
¿Contempla el informe las diversas zonas geográficas y grupos de población mediante la información recabada, el análisis y las conclusiones?
•
¿Se identifican en el informe las causas inmediatas y subyacentes del problema?
•
¿Figura en el informe una indagación lógica de cómo sobrevivía la población antes del peligro/perturbación y del impacto que han tenido estos acontecimientos sobre su capacidad para satisfacer sus propias necesidades (es decir, la disponibilidad de alimentos e ingresos y el acceso a ellos)?
•
¿Aporta el informe un análisis sustantivo del momento en peligro/perturbación en relación con el posible alcance de la crisis?
•
¿Cuáles fueron los indicadores clave utilizados para medir los cambios (la gravedad) de la situación de la seguridad alimentaria derivada del peligro/perturbación?
•
¿Se analizan sistemáticamente en el informe las estrategias que normalmente aplica la población para compensar la reducción de recursos y el grado en que se puede recurrir a estas opciones actualmente (de inmediato y a plazo medio)?
que
sobrevino
el
Metodología y análisis •
Sobre la base de la descripción de la metodología, ¿se comprende y comparte plenamente la lógica y la suposición de su aplicación y el razonamiento utilizado para extraer las conclusiones?
•
¿En qué medida ha integrado el proceso (planificación, coordinación y participación de la evaluación) a las partes interesadas clave y garantizado la identificación de éstas con la evaluación?
•
¿Pueden identificarse elementos básicos que pongan en tela de juicio la exactitud de las suposiciones y las conclusiones obtenidas a partir del análisis de los datos? (es decir, tamaño de la muestra, método de muestreo, tergiversaciones, métodos de recopilación de la información, generalización excesiva).
•
¿Hasta qué punto se tienen en cuenta en el informe las dimensiones sociopolíticas mediante el proceso de recopilación y análisis de la información y la formulación de las conclusiones?
•
¿Tienen sentido todas las cifras? ¿Hay una secuencia lógica entre la población total y la población afectada? Conclusiones y recomendaciones •
¿Culminan las conclusiones y recomendaciones en una estrategia de intervención que explique y aborde las causas subyacentes del problema? En caso negativo, ¿cuál es el motivo?
•
Se identificarán los argumentos fundamentales que llevan a la conclusión final del informe y se confirmará si se llega a las mismas conclusiones partiendo de estos mismos argumentos.
•
Si el informe saca en conclusión que la ayuda alimentaria constituye una intervención adecuada, ¿se examinan los siguientes puntos? o La interdependencia de los insumos de ayuda no alimentaria y alimentaria como parte de la estrategia de ayuda alimentaria; o La finalidad y posible función de la asistencia alimentaria; o La posibilidad de comparar resultados entre las zonas; y o Cualesquiera posibles efectos negativos de la estrategia de asistencia recomendada.
•
Por último, ¿tienen sentido las conclusiones, dada la experiencia del equipo en la zona?
.
Capítulo 15
Organización de una ESAE detenida En el presente capítulo se ofrecen breves orientaciones sobre la organización de una evaluación detenida de la seguridad alimentaria en emergencias, que abarcan los siguientes aspectos: • Inicio del proceso de evaluación, véase → sección 15.1 • Definición y movilización de los conocimientos y aptitudes necesarios para realizar una ESAE detenida, véase → sección 15.2 • Muestreo para una ESAE detenida; participación de expertos en muestreo, véase → sección 15.3 • Supervisión del proceso de evaluación, véase → sección 15.4 La finalidad de una ESAE detenida, independientemente de si se realiza al principio de una crisis de inicio lento o en una crisis prolongada, es generar un perfil económico de los hogares para cada subgrupo distinto de la población, así como conocimientos específicos de la situación de la seguridad alimentaria, las causas de la inseguridad alimentaria y la malnutrición (de haberla) y las perspectivas de recuperación de cada subgrupo. Debería posibilitar que las respuestas y los mecanismos de selección de los beneficiarios se acomoden a las circunstancias y necesidades particulares de los diversos grupos de población. Una ESAE detenida requiere conocimientos y aptitudes específicos, así como bastante tiempo, y, en muchos casos, el diseño de la evaluación, la recopilación y el análisis de los datos y la preparación del informe se encarga a una organización especializada, consultores, un instituto (local o internacional) o una empresa. Habitualmente, la oficina del PMA en el país dirige el proceso, y se asegura de que el cometido es idóneo, se siguen los procedimientos y se da la coordinación necesaria con los asociados y el apoyo para el trabajo de campo. Debe designarse a un director de la evaluación en la oficina del PMA en el país para que se encargue de asegurar que la evaluación procede satisfactoriamente y que se consiguen los productos previstos. Deberá contar con experiencia personal en evaluaciones y encuestas sobre el terreno y poder consagrar parte de su tiempo a la gestión y supervisión del proceso, en lugar de simplemente aguardar el informe.
15.1
Inicio del proceso de evaluación
Las evaluaciones detenidas requieren una planificación y preparación minuciosas, partiendo de la información disponible de evaluaciones anteriores (investigación inicial o ESAE rápida) y de la supervisión (en el caso de una operación en curso). En esta sección se describen sucintamente las fases necesarias para planificar una evaluación detenida: •
Movilización de los asociados y de fondos; constitución de un grupo de acción
•
Definición del alcance, los objetivos y el plazo de la evaluación
•
Formulación del cometido de la evaluación
240 ■ Capítulo 15: Organización de una ESAE detenida
•
Examen de la estrategia propuesta para la recopilación de datos y el muestreo
•
Acuerdo sobre un calendario claro y el proceso de preparación del informe.
Las evaluaciones detenidas requieren considerables recursos y, en consecuencia, la decisión de realizar una evaluación de este tipo debe estudiarse cuidadosamente. Puede necesitarse una evaluación detenida cuando: •
sea fundamental tener información más detallada, que incluya comparaciones estadísticas y las causas subyacentes, para ayudar a las poblaciones damnificadas a colmar sus necesidades alimentarias y no alimentarias básicas y proteger sus medios de subsistencia, su salud y su bienestar.
•
se necesite información para desglosar el impacto de una perturbación sobre la disponibilidad de alimentos, el acceso a los alimentos y la utilización de éstos por los distintos grupos de hogares (ya sea, por ejemplo, por categorías de medios de subsistencia, ya por ubicación geográfica);
•
sea deseable comprender el impacto de las intervenciones de emergencia.
Movilización de los asociados y de fondos; constitución de un grupo de acción En la operación de urgencia del PMA debería haberse previsto si será necesaria una evaluación detenida después de que se haya estabilizado la situación de emergencia. A veces ocurre que hasta que no se tiene más información sobre el alcance de la perturbación y su impacto sobre los hogares, no se es plenamente consciente de la necesidad de realizar una evaluación detenida. Si no se prevé la realización de una evaluación detenida, entonces probablemente habrá que movilizar recursos adicionales. La persona responsable en la oficina en el país de la gestión de la ESAE detenida debe contar con experiencia previa en evaluaciones, o determinar con la oficina regional o la ODAN el cometido y la entidad competente que realizará la evaluación. Hay dos posibilidades para realizar una evaluación detenida: i) la oficina en el país organiza la evaluación con los asociados pertinentes; y ii) la evaluación se encomienda a un organismo u otra institución competente. En cualquier caso, deberá establecerse un grupo de acción para concertar los planes y el diseño de la evaluación. Los recursos necesarios para realizar una ESAE dependen de varios factores, entre los que destacan: •
el tamaño de la muestra necesaria para la encuesta cuantitativa
•
el tipo y volumen de información cualitativa necesaria para complementar la encuesta cuantitativa;
•
la cantidad de asistencia externa necesaria para gestionar y realizar la evaluación; y
•
los gastos ligados a la logística de la encuesta.
Hay también otros muchos gastos que dependen del contexto en que se realiza la evaluación detenida. Estas evaluaciones no son necesariamente más caras que las evaluaciones rápidas de gran alcance, pero pueden serlo si se incluye una encuesta sobre hogares de cierta extensión. Las encuestas del orden de 1.800 a 2.000 hogares pueden fácilmente llegar a costar más de 100.000 dólares EE.UU. y consumir bastante tiempo y esfuerzos del personal. Otro elemento importante aparte del costo financiero de realizar una evaluación detenida es el nivel de esfuerzo requerido. Desde la planificación inicial hasta la redacción del informe este tipo de evaluaciones pueden llegar a durar de uno a tres meses. Requieren una gestión diaria por parte del personal del PMA o del personal contratado (a menudo la gestión de las evaluaciones detenidas está a cargo de un coordinador de la evaluación dedicado exclusivamente a esta tarea, que puede ser un funcionario del PMA o un consultor). Será conveniente establecer un grupo de acción para: •
acordar el cometido y la selección del equipo o los consultores de la evaluación;
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•
dar ocasión a que se produzca un debate técnico sectorial e intersectorial;
•
asegurar la colaboración de todas las partes sobre el terreno para facilitar la evaluación;
•
granjearse el interés y apoyo de los diversos organismos para la evaluación;
•
ayudar a solucionar cualesquiera problemas que se planteen durante la evaluación; y
•
examinar el informe y colaborar en la puesta en práctica de las conclusiones y recomendaciones.
El grupo de acción normalmente estaría integrado por: el PMA (en especial los coordinadores de VAM, nutrición y seguridad alimentaria en emergencias), uno o más representantes del gobierno nacional y la administración local, representantes interinstitucionales, uno o dos representantes de los principales donantes y representantes de las principales ONG participantes comprometidas con la seguridad alimentaria y la respuesta de urgencia. Definición del alcance, los objetivos y el plazo de la evaluación La evaluación detenida será necesaria cuando haya que estudiar todos los aspectos contenidos en el Cuadro 15A, o sólo algunos de ellos, en función de la situación y las necesidades de la operación. Los objetivos deben determinarse atentamente a la luz de las cuestiones específicas que haya que resolver y las decisiones en materia de programación y gestión que haya que adoptar en los próximos meses. Deben concertarse entre todas las partes interesadas. Cuadro 15-A
Posibles objetivos de una ESAE detenida
Los objetivos específicos se definirán en función de las necesidades de cada evaluación, aunque podrán incluir algunos de los siguientes elementos —o todos ellos— (u otros específicos del contexto o evaluación de que se trate): a) Grupos de población/subsistencia: Identificar grupos socioeconómicos en el seno de poblaciones definidas que tengan distintas estrategias de supervivencia, definir sus características y calcular aproximadamente su tamaño. b) Medios de subsistencia y acceso a los alimentos de los hogares: Identificar los grupos socioeconómicos que experimentan (o experimentarán) una insuficiencia del acceso a los alimentos inducida por la crisis, describir el impacto sobre sus medios de subsistencia, calcular la gravedad de la insuficiencia y los períodos durante los cuales se dejará sentir, y recomendar medidas que puedan impulsar la recuperación de los medios de subsistencia sostenibles y el restablecimiento de la seguridad alimentaria de los hogares. c) Consumo y utilización de los alimentos: Determinar qué consumen actualmente los hogares de cada grupo socioeconómico, el uso que hacen de la ayuda alimentaria y otros recursos o prestaciones, cualesquiera problemas encontrados en el uso de determinados productos o la preparación de alimentos para las comidas familiares, y recomendar cualesquiera cambios necesarios en la asistencia alimentaria y no alimentaria actual. d) Selección de los beneficiarios: Determinar si debe diseñarse o no la asistencia (y, en caso afirmativo, cómo debe hacerse) y destinarse por separado a los distintos grupos u otros estratos definidos, o cómo pueden mejorarse los actuales mecanismos de selección de los beneficiarios. e) Riesgos y situaciones hipotéticas de cambio: Identificar acontecimientos que puedan cambiar la situación de la seguridad alimentaria en los próximos meses, y determinar los posibles efectos sobre los distintos grupos de población de contingencias tales como las malas cosechas, un nuevo estallido de la violencia, cambios en la normativa gubernamental, una reducción de las distribuciones debida a las interrupciones del proceso de tramitación, o cambios en la composición de la cesta de alimentos o los criterios de selección de los beneficiarios. f) Capacitación y aumento de la capacidad: Aumentar la capacidad nacional y la capacidad de otras organizaciones participantes en la evaluación para planificar, gestionar y llevar a cabo evaluaciones.
242 ■ Capítulo 15: Organización de una ESAE detenida
El plazo de la evaluación debería fijarse a la luz de lo siguiente: •
la información necesaria para fundamentar los procesos de planificación y presupuestación de programas del gobierno, el PMA (p. ej., la preparación de una revisión o ampliación de una OU, una nueva OPSR o una revisión de una OPSR) y otras organizaciones;
•
el ciclo de cultivo y los períodos en que pueda disponerse de cálculos fiables de la última o la próxima cosecha;
•
factores estacionales que puedan afectar a la capacidad del equipo de examen o reevaluación para visitar determinadas localidades pertinentes; y
•
la existencia de conocimientos especializados, o de informes de estudios especializados, que puedan necesitarse para que el examen o reevaluación aborde de manera adecuada determinadas cuestiones prioritarias.
Formulación del cometido de la evaluación El cometido de la evaluación debe ser preciso y bastante detallado. No debería ser ambiguo ni dar pie a malas interpretaciones en cuanto a la población que hay que abarcar, los productos previstos, o las premisas o hipótesis que habrá que demostrar. Es importante que el cometido se formule detenidamente. Cuanto más tiempo y recursos se inviertan en la preparación de un cometido idóneo, mayor será la calidad, pertinencia y provecho de los resultados. Sin embargo, ¡el cometido deberá sencillo! Se procurará no pedir datos adicionales que «puedan ser útiles». La atención se centrará en los aspectos fundamentales para comprender la situación de la seguridad alimentaria o la autonomía y diseñar intervenciones adecuadas, así como en la información que pueda realmente obtenerse en las circunstancias imperantes. Habrá que ser realista en cuanto al tiempo necesario: se dispondrá de tiempo suficiente y, si el tiempo tiene que ser limitado, también lo será el cometido. Cuando la evaluación se lleve a cabo por contrata, el cometido deberá especificar que: •
las organizaciones o los consultores deben facilitar un proyecto de plan de la evaluación como parte de su propuesta antes de la selección;
•
la organización o los consultores elegidos deben facilitar un plan detallado de la evaluación para su examen y aprobación antes de comenzar el trabajo de campo, que incluya los métodos e instrumentos de recopilación de datos y los procedimientos de muestreo que proponen;
•
se presentará un proyecto de informe inicial que se irá perfeccionando en función de la información sobre los resultados de los examinadores. (El plazo de la evaluación debe contemplar este proceso de examen y perfeccionamiento.)
Tal vez sea necesario traducir el cometido a un idioma local para su uso en el país.
15.2 Definición y movilización de los conocimientos y aptitudes necesarios para realizar una ESAE detenida Las principales actividades que entraña la organización de una ESAE detenida son parecidas a las de la ESAE rápida, descritas en la Parte IV (capítulos 9 a 14). Las competencias necesarias de los miembros del equipo de evaluación son parecidas a las que se presentan en el Cuadro 10-P de la sección 10.7 referente a una ESAE rápida. Sin embargo, las evaluaciones detenidas recurren en mayor medida a las encuestas cuantitativas sobre hogares y su plan de muestreo, necesidades de personal y gestión del proceso de recopilación y análisis de los datos exigen más recursos. En consecuencia, el conjunto de conocimientos y aptitudes necesarios deben referirse a los métodos cuantitativos, así como a las estadísticas básicas y el diseño de encuestas, la seguridad
Manual sobre las ESAE – Primera edición ■ 243
alimentaria, la seguridad de los medios de subsistencia, el acopio de datos cualitativos y el análisis e interpretación de datos. Contratación y capacitación del personal La composición del equipo de evaluación depende del tipo de crisis, así como del contexto en cuestión y de la escala de la evaluación. Si la evaluación está a cargo de múltiples equipos, cada equipo debería mantener el mayor equilibrio posible en cuanto a las competencias técnicas, los conocimientos lingüísticos, la representación gubernamental e institucional y el sexo de sus miembros. Si bien probablemente los datos no sean analizados por los propios equipos de evaluación, los miembros del equipo deben estar familiarizados con las técnicas de encuesta y las cuestiones sobre recopilación y análisis de datos cuantitativos. El coordinador o director de la evaluación, los supervisores sobre el terreno y los entrevistadores deben seleccionarse e instruirse cuidadosamente. En el caso de una ESAE detenida en gran escala, será útil constituir un equipo de apoyo básico, que incluya a coordinadores de evaluación y asistentes técnicos de la Dependencia VAM del PMA, ONG participantes y otras organizaciones de apoyo técnico, para: •
prestar apoyo a los equipos encargados de las encuestas sobre el terreno;
•
transferir los instrumentos de recopilación de datos completados del terreno al punto de entrada de datos (de ser necesario); y
•
reunirse semanalmente durante la fase de recopilación de datos para garantizar el control de la calidad en todas las zonas de muestreo.
Atribuciones del coordinador de la evaluación detenida El coordinador desempeña muchas funciones, pero principalmente se encarga de gestionar el proceso y actuar como conducto de información para todos los participantes en la evaluación. Debe poder gestionar el proceso desde el comienzo hasta el final. En el Cuadro 15-B se indican esas funciones. Cuadro 15-B Atribuciones típicas para la coordinación de la encuesta (ejemplo de las cláusulas de un contrato con una institución nacional) Un comité de supervisión comisionado por … será el principal encargado de coordinar la encuesta. La asistencia técnica estará a cargo de una empresa de consultoría internacional, que comenzará con la formulación del marco del muestreo y la preparación de los instrumentos de la encuesta, se ocupará de la capacitación y el ensayo experimental, perfeccionará los cuestionarios y acabará con el análisis de los datos y la asistencia en la preparación del informe. … coordinará la contratación del personal de campo, con inclusión de los supervisores y los encuestadores sobre el terreno. En el marco de los parámetros antes fijados, … necesita la asistencia de un coordinador de la encuesta, que deberá desempeñar las siguientes funciones: •
Familiarizarse plenamente con el alcance de la encuesta y su contribución a la evaluación de la vulnerabilidad, la selección de los beneficiarios y la supervisión de las intervenciones en caso de sequía.
•
Prestar apoyo a …, el PMA y …, así como al grupo de acción técnico en la preparación de la encuesta.
•
Recabar la información solicitada por el grupo de acción técnico y cualquier otra parte pertinente.
•
Actuar de punto de contacto con la empresa de consultoría internacional que facilita la asistencia y capacitación técnicas a la encuesta, y mantener comunicación con sus consultores.
•
Estar listo para viajar a lugares previamente determinados en … para observar y formular
244 ■ Capítulo 15: Organización de una ESAE detenida
observaciones sobre la encuesta experimental. •
Ayudar a reestructurar los instrumentos de la encuesta en caso necesario, conforme a los resultados obtenidos de la experimentación.
•
Ayudar a identificar, contratar y orientar a los coordinadores de la encuesta, los encuestadores, el personal de entrada de datos y otro personal temporal necesario para llevar a cabo y completar la encuesta.
•
Organizar la logística de todas las sesiones de capacitación, incluida la identificación de los lugares de capacitación, la coordinación de la gestión de los lugares y la comunicación con todos los participantes.
•
Gestionar, traducir y reproducir los cuestionarios.
•
Supervisar la entrada de datos para garantizar la terminación oportuna de todas las tareas, incluido el recibo y la gestión de los formularios de la encuesta, la entrada ordenada de datos en las computadoras por parte del personal competente y la gestión de las copias impresas y electrónicas de los datos sobre los hogares.
•
Participar en la coordinación y la logística durante todas las sesiones de capacitación, los ensayos previos sobre el terreno y los períodos de recopilación de datos sobre el terreno.
•
Prestar otros servicios afines según sea necesario o se requiera. [Adaptado de CARE/PMA Eritrea, 2003]
Supervisores de encuestas Asimismo, las evaluaciones detenidas precisan de uno o más supervisores de encuestas. Los supervisores se encargan de los equipos de encuestadores y del personal de apoyo logístico, como los conductores. La principal responsabilidad del supervisor sobre el terreno es garantizar que los encuestadores reúnen datos de alta calidad y que los hogares encuestados responden correctamente a las preguntas. En el Cuadro 15-C figura una lista completa de las atribuciones típicas de los supervisores. Cuadro 15-C Atribuciones típicas de los supervisores •
• • • • • • • •
Familiarizarse plenamente con el alcance de la encuesta y su contribución a la evaluación de la vulnerabilidad, la selección de los beneficiarios y la supervisión de las intervenciones en caso de sequía. Participar en todas las sesiones de capacitación sobre encuestas, incluido el ensayo previo de los cuestionarios cuantitativos y los perfiles de temas cualitativos. Supervisar a los encuestadores durante las encuestas cuantitativas sobre hogares, brindando orientaciones sobre técnicas de entrevista y solucionando problemas. Establecer enlaces con la administración local y los dirigentes comunitarios, e informarles de la finalidad de la encuesta y obtener su cooperación. Realizar controles aleatorios de la calidad de las encuestas sobre hogares para cerciorarse de que se recaba información exacta y fiable. Examinar diariamente los progresos de la encuesta para determinar si existen problemas y si la encuesta se realiza conforme al calendario. Organizar y controlar toda la logística de las encuestas sobre el terreno, incluida la utilización de vehículos, la gestión del carburante, las dietas de los encuestadores, etc. Realizar entrevistas con los grupos de debate en cada zona de la encuesta (con la ayuda de los consultores internacionales); Facilitar periódicamente información al coordinador de la encuesta sobre los progresos de la encuesta y cualesquiera cuestiones que tengan que señalarse a la atención del grupo de acción técnico;
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• •
Gestionar la necesidad y el uso de los servicios de traducción; y Reunir los formularios de la encuesta y transferirlos al punto correspondiente de entrada de datos, ya sea una oficina del PMA sobre el terreno o …. [Adaptado de CARE/PMA Eritrea, 2003]
15.3 Muestreo para una ESAE detenida; participación de expertos en muestreo La finalidad de las ESAE detenidas es comprender las causas subyacentes y distinguir con más precisión entre distintas zonas geográficas y grupos de población. En consecuencia, es fundamental utilizar métodos estadísticos sólidos y recurrir a un tamaño de la muestra suficientemente representativo estadísticamente, por lo que deberá movilizarse a expertos competentes para determinar la combinación más adecuada de métodos de recopilación de datos y muestreo. Entre los aspectos que merecen especial atención destacan: la unidad y el marco de la muestra; el tamaño de la muestra; y los métodos de muestreo. Para obtener directrices sobre muestreo para realizar una ESAE detenida, véase el módulo sobre muestreo en el sitio web de la Dependencia del PMA sobre Análisis y Cartografía de la Vulnerabilidad (VAM) (http://www.vam.wfp.org). En el Cuadro 15-D se plantean algunas cuestiones que conviene comprobar en la propuesta técnica que presente la organización o el consultor encargado del diseño de la evaluación. Cuadro 15-D Qué hay que comprobar en un plan de muestreo para una ESAE detenida •
• •
•
• •
¿Se especifica claramente una unidad de muestreo? => ¿En qué se centrará la encuesta: determinados tipos de hogar (p. ej., de personas desplazadas en el interior del país, refugiados, agricultores) o individuos (p. ej., niños, madres, ancianos)? ¿Es claro el marco de la muestra? => ¿En qué zona se centrará la encuesta: el país entero o una o más provincias, distritos o campamentos específicos? ¿Se argumenta el tamaño de la muestra propuesto? => Si se calcula partiendo de la teoría estadística, ¿cuál es el indicador o indicadores clave en que se basa el cálculo? Si no se calcula sobre la base de la teoría estadística, ¿cuál es el motivo y la justificación del tamaño de la muestra propuesto? Si el tamaño de la muestra propuesto es diferente de lo que indica el cálculo, ¿se explica claramente la diferencia y las repercusiones para la fiabilidad de los resultados? => Es probable que haya que hacer concesiones en razón del tiempo, la logística, los recursos humanos o motivos de seguridad, pero deben explicarse las razones y las repercusiones. ¿Se especifica el método de muestreo y se explican los motivos de su elección? => Debe explicarse la ventaja del método propuesto frente a otros métodos. ¿Qué procedimiento se seguirá en el caso de que no haya respuesta, en el caso de que los individuos u hogares de la muestra no puedan entrevistarse o declinen responder? => La propuesta debería especificar las instrucciones que se impartirán a los encuestadores (p. ej., si hay que regresar, cuándo hay que regresar, cuántas veces hay que regresar y si hay que sustituir o no) y cómo se reflejarán esas lagunas en el informe final.
Ejemplos de tergiversaciones en la muestra debidas a la falta de respuestas La encuesta X no pudo incluir a los hogares pertenecientes al grupo tribal A porque eran reacios a compartir información con extraños. => «Las entrevistas en hogares dejaron fuera a muchos hogares del grupo tribal A.»
246 ■ Capítulo 15: Organización de una ESAE detenida
La encuesta Y no pudo entrevistar a las amas de casa que por la mañana se encontraban recolectando leña fuera de sus casas. => «Probablemente quedaron fuera de las entrevistas con amas de casa las de los hogares que utilizan la leña para cocinar o cuya principal fuente de ingresos es la venta de leña.»
Participación de los expertos en muestreo: cómo elegir a un consultor Se prestará mucha atención al elegir a los consultores. Si bien el plan de muestreo es una ciencia exacta, la manera de interpretar y aplicar el plan de muestreo puede variar entre los estadísticos y elaboradores de encuestas. En el Cuadro 15-E se propone el posible contenido de un cometido referente al muestreo. En el caso de un consultor: Se examinará su experiencia e informes anteriores en el ámbito de las encuestas y evaluaciones. Se comprobará con cuánta claridad se definieron la unidad de la muestra, el marco de la muestra, el tamaño de la muestra y los métodos de muestreo. De ser necesario, se entrevistará al individuo. Cuando se trate de una institución u organización, o una empresa de consultoría: •
Se examinarán sus propuestas técnicas: se comprobará con cuánta claridad se han definido la unidad y el marco de la muestra, y si sus propuestas para el tamaño de la muestra y los métodos de muestreo se explican y son razonables.
•
Se examinarán su experiencia y aptitudes profesionales sobre el terreno: un jefe de equipo debería contar como mínimo con cinco años de experiencia sobre el terreno en la evaluación de la seguridad alimentaria con análisis cuantitativos. Como mínimo, uno de los miembros del equipo debería contar con conocimientos y aptitudes para utilizar el Programa estadístico para las ciencias sociales (SPSS, por sus siglas en inglés) u otros programas informáticos estadísticos.
Cómo facilitar el muestreo La oficina del PMA en el país se encarga de prestar el apoyo necesario a los consultores y de supervisar los progresos realizados, de modo que el proceso de muestreo pueda completarse satisfactoriamente. En concreto, la oficina debe: •
facilitar información al consultor: todo lo que esté disponible para el marco de la muestra, como listas de población o mapas, y datos de referencia de los indicadores clave;
•
supervisar y ayudar a resolver los problemas: si, por ejemplo, el acceso a los lugares previamente seleccionados es difícil, se examinarán las opciones y se acordará el modo de proceder.
Cuadro 15-E Cometido para una consultoría relativa al muestreo El objetivo de la evaluación normalmente guardará relación, entre otras cosas, con la identificación de los distintos grupos socioeconómicos de la población y la determinación (con un grado razonable de precisión) del déficit de alimentos (o la «insuficiencia del acceso a los alimentos») de los hogares de cada grupo y los factores subyacentes que contribuyen a su inseguridad alimentaria. Tareas en relación con el muestreo: En el marco de los productos previstos de la evaluación, los métodos convenidos para la recopilación de datos, los datos que se recopilarán y la manera en que se propone analizar los datos, el consultor deberá: •
aclarar la unidad (o unidades) de muestreo que se utilizará (hogar, comunidad o individuos);
•
definir el marco de la muestra y su justificación;
•
proponer el método adecuado (o los métodos adecuados) de muestreo;
•
especificar el tamaño de la muestra necesario para posibilitar conclusiones estadísticamente válidas. Puede incluir cualesquiera comparaciones necesarias entre distintas zonas o subgrupos de población;
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•
en el caso de que no sea factible (dado el tiempo y los recursos disponibles), especificar un tamaño de la muestra suficiente para poder hacer todas las comparaciones pretendidas de manera estadísticamente válida y proponer arreglos prácticos especificando claramente las posibilidades y las limitaciones con respecto a las conclusiones que podrán extraerse de los datos.
15.4 Supervisión del proceso de evaluación La realización de una evaluación detenida requiere una cantidad considerable de esfuerzos para la coordinación entre entidades gubernamentales nacionales y locales, el PMA y ONG asociadas, así como logística para el trabajo de campo. Todo ello puede ser complicado por motivos de seguridad. El director de la evaluación del PMA deberá seguir de cerca todas las fases de la planificación (en especial la elaboración del marco de la muestra, el diseño del cuestionario y el ensayo) y la recopilación, el procesamiento y el análisis de los datos. Se garantizará de modo especial que la entrada y filtrado de los datos se gestiona bien, sobre todo en el caso de las encuestas que abarquen todo el país, y que se movilizan los recursos y el personal suficientes puntualmente para desempeñar todas esas funciones. Con demasiada frecuencia los informes de evaluación se retrasan durante semanas porque el procesamiento de los datos dura más de lo previsto. El jefe del equipo de evaluación deberá facilitar lo siguiente al director de la evaluación: Antes de comenzar el trabajo de campo: •
Descripción de la estrategia de muestreo;
•
Plan de trabajo detallado que incluya los itinerarios y el calendario del trabajo de campo;
•
Plan de análisis y modelo del informe;
•
Resumen del análisis de los datos secundarios hasta la fecha; (si el acopio y análisis de los datos secundarios prosigue mientras el equipo recopila los datos primarios, este resumen deberá actualizarse posteriormente)
•
Copia de todos los cuestionarios y de otros instrumentos de recopilación y registro de datos;
•
Instrucciones para los equipos sobre el terreno y el cometido de los diferentes miembros del equipo;
•
Lista de todos los miembros del equipo y sus funciones.
Tan pronto como se haya completado el trabajo de campo: •
Un plan de trabajo actualizado para la terminación del análisis, la presentación del proyecto de informe y su ultimación tras el examen.
Glosario Acceso
Véase: acceso a los alimentos
Acceso a los alimentos (a nivel de los hogares)
Capacidad de un hogar para adquirir regularmente cantidades suficientes de alimentos mediante una combinación de su propia producción y reservas domésticas, compras, trueques, donaciones, préstamos o ayuda alimentaria.
Alimentación de grupos vulnerables
Suministro de alimentos a grupos nutricionalmente vulnerables, preferiblemente en las clínicas de salud maternoinfantil, para fomentar el crecimiento y la salud.
Alimentación escolar
Suministro de comidas o refacciones a los niños en edad escolar para mejorar la nutrición y fomentar la enseñanza.
Alimentación suplementaria
Distribución de alimentos para complementar la energía y otros nutrientes disponibles en los regímenes alimenticios básicos de las personas que tienen necesidades nutricionales específicas o que padecen malnutrición. La finalidad de la alimentación suplementaria es corregir o prevenir la malnutrición. Los beneficiarios se seleccionan con arreglo a criterios previos de malnutrición o riesgos nutricionales y dejan de recibir ayuda cuando se determina que ya no padecen malnutrición ni se encuentran en situación de riesgo. Cuando en una emergencia se organiza un programa de alimentación suplementaria en paralelo con una distribución general, las raciones del programa se suman a la ración que los beneficiarios recibirían normalmente como parte de la ración general de los hogares.
Alimentación terapéutica
Alimentación y tratamiento médico para rehabilitar a los niños gravemente malnutridos.
Alimentos por trabajo (APT)
Alimentos ofrecidos como pago total o parcial por el trabajo realizado en el contexto de unos trabajos públicos supervisados en favor de los beneficiarios previstos. En el caso de una operación de urgencia, esta modalidad puede incluir actividades en que los beneficiarios reciben alimentos a cambio del tiempo invertido en trabajos que requieren poca supervisión, pero que permiten a la comunidad comenzar el proceso de recuperación o facilitan la entrega de asistencia de socorro. Valga como ejemplo la retirada de escombros y las operaciones de limpieza general inmediatamente después de una catástrofe repentina, o el mantenimiento intensivo en trabajo de activos en el marco de un programa de alimentos por activos.
Análisis
Examen de una situación, de sus elementos y de las relaciones entre éstos. En el contexto de la evaluación (o seguimiento) de la seguridad alimentaria, el análisis es el proceso de examen de datos para determinar características, tendencias y relaciones para fundamentar recomendaciones o para preparar informes.
Análisis de las partes interesadas
Circunferencia braquial medio-superior
Análisis de los intereses y la influencia relativa de las distintas partes directamente interesadas involucradas.
La circunferencia de la parte superior del brazo medida en un punto intermedio entre el hombro y el codo es un indicador aproximativo de la emaciación en los niños de 6 a 59 meses de edad y las mujeres embarazadas. Observación: esta circunferencia se utiliza normalmente para el examen rápido y la preselección de los casos de malnutrición aguda entre los niños en situaciones de urgencia. Sin embargo, es menos exacto que el peso para la talla como indicador de la emaciación y no debería utilizarse con fines de evaluación.
Crisis de inicio lento
Crisis o emergencia de inicio repentino
Situaciones críticas que se desarrollan lentamente con el correr del tiempo, incluidas catástrofes naturales como la sequía, las malas cosechas, las plagas, las enfermedades y las crisis económicas, que minan la capacidad de las familias para colmar sus necesidades alimentarias. Calamidad que sobreviene con poco o ningún aviso y tiene un impacto negativo inmediato sobre la población humana, sus actividades y los sistemas económicos. Incluye las catástrofes naturales repentinas, como las inundaciones, los terremotos, los derrumbes de tierras y los ciclones, y las crisis de origen humano, como los conflictos y los desplazamientos forzosos de población.
Datos cualitativos
Observaciones que se refieren a categorías y no a valores numéricos, que con frecuencia están relacionados con actitudes, percepciones e intenciones. Observación: Cuando sea pertinente y posible, los datos deberían desglosarse por sexo, edad y otras variables apropiadas.
Datos cuantitativos
Observaciones que son numéricas. Observación: Cuando sea pertinente y posible, los datos deberían desglosarse por sexo, edad y otras variables apropiadas.
Datos de referencia anteriores a la crisis
Datos sobre la situación de la zona o zonas y de la población o poblaciones de interés anterior al impacto de una perturbación o crisis reciente. (Observación: es distinto de los “datos de la base de referencia de los programas”, que describen la situación anterior al inicio de una operación del PMA y con respecto a los cuales pueden evaluarse los cambios o hacerse comparaciones.)
Datos primarios
Datos recopilados mediante encuestas, reuniones, debates en grupo, entrevistas u otros métodos, que entrañan un contacto directo con los informantes —mujeres, hombres, muchachos y muchachas—.
Datos secundarios
Datos existentes recopilados (por el PMA u otros) antes del proceso de recopilación de datos en curso. Incluyen los datos del análisis y cartografía de la vulnerabilidad, datos de los sistemas de presentación de informes periódicos, informes y evaluaciones.
Desviación estándar (DE o puntuación Z)
Se trata del cálculo de la distancia entre la medición del individuo y el valor previsto (o mediana) de la población de referencia. La distancia se expresa en múltiplos de la desviación estándar de referencia.
Disponibilidad
Véase: disponibilidad de alimentos
Disponibilidad de alimentos
Cantidad de alimentos físicamente presente en un país o zona determinados, sea cual fuere su origen (producción nacional, importaciones comerciales o ayuda alimentaria)
Distribución general de alimentos
Programa de suministro de alimentos a los hogares para permitirles satisfacer sus necesidades nutricionales básicas. Estos programas pueden dirigirse a todas las familias de una población específica o bien a subgrupos seleccionados.
Emaciación (delgadez)
Indicador de la malnutrición aguda que refleja un proceso reciente y grave que ha provocado una pérdida considerable de peso. Normalmente es consecuencia de la inanición o de una enfermedad y está estrechamente relacionado con la mortalidad. Se calcula comparando los índices del peso para la talla de los niños con los de una población de referencia de niños bien alimentados y sanos.
Emergencia
Situación urgente en la que resulta evidente que se ha producido un acontecimiento, o una serie de acontecimientos, que causa sufrimiento humano o amenaza de forma inminente la vida o los medios de subsistencia humanos, y que el gobierno concernido no tiene medios para remediar; y se trata de un acontecimiento, o una serie de acontecimientos, manifiestamente anormal, que altera la vida de una comunidad a escala excepcional.
Encuesta antropométrica
Encuesta por muestreo en que se toman mediciones corporales especificas a niños de 5 a 59 meses de edad (y a veces a niños mayores y adultos) y se comparan con los valores estándar de referencia para obtener una medida de la prevalencia de la malnutrición proteinoenergética en la población encuestada. Observación: Las medidas preferidas para el estado nutricional en una emergencia son el peso para la talla para los niños pequeños, la circunferencia braquial medio-superior para las mujeres embarazadas y el índice de masa corporal para otros adultos. Deben utilizarse procedimientos de muestreo probabilístico objetivos.
Encuesta sobre hogares
Se selecciona una muestra aleatoria de hogares y se entrevista al miembro pertinente del hogar utilizando un cuestionario formulado previamente. Los entrevistadores reciben capacitación para realizar las entrevistas de manera estandarizada. Una vez realizadas todas las entrevistas se centraliza el análisis estadístico de los resultados.
Entrevistas de carácter informal
Enfoque informal de las entrevistas a los informantes clave seleccionados con este fin. Se prepara por adelantado una lista mental o escrita de ámbitos fundamentales o preguntas abiertas como parte de la orientación y capacitación del equipo de evaluación. Los temas de interés planteados en la conversación con los informantes clave podrán ser objeto de un seguimiento.
Error por exclusión
Proporción de los beneficiarios previstos que no recibe beneficios (personas que cumplen los criterios pero que sin embargo no reciben nada).
Error por inclusión
Proporción del total de receptores que no pertenece al grupo beneficiario previsto, o proporción de recursos dirigidos a personas que no figuran entre los beneficiarios previstos.
Estrategias de supervivencia
Actividades que realiza la población para obtener alimentos, ingresos o servicios cuando sus medios de subsistencia normales han sido destruidos. (Véase también: estrategias de supervivencia perjudiciales y estrategias viables, que deben diferenciarse.)
Estrategias de supervivencia perjudiciales
Estrategias que minan los futuros medios de subsistencia, la dignidad o la salud nutricional, aumentan la vulnerabilidad a largo plazo o son ilegales o inaceptables desde el punto de vista social. (Véase también: estrategias de supervivencia.)
Estrategias de supervivencia viables
Estrategias de supervivencia sostenibles y que preservan los futuros medios de subsistencia, la dignidad y la salud nutricional.
Evaluación
Estudio crítico de una situación antes de que se decida si se lleva a cabo o no una intervención y de qué manera. La evaluación es un proceso estructurado de recopilación y análisis de datos. En relación con las situaciones de urgencia, la evaluación de las necesidades de urgencia o de la seguridad alimentaria es el proceso de recopilación y análisis de datos (cuantitativos y cualitativos) para comprender la situación de la seguridad alimentaria y de cualquier amenaza afín para la vida, los medios de subsistencia, la salud y la dignidad, a fin de determinar si se requiere una intervención y, de ser así, la naturaleza de la misma.
Evaluación del mercado
Evaluación detenida de la seguridad alimentaria en emergencias (ESAE)
Evaluación que aporta información determinante sobre la dinámica del mercado, los precios de mercado de los productos clave, los créditos y deudas de los comerciantes, las transacciones alimentarias y de artículos no alimentarios, la disponibilidad de productos alimenticios básicos, y el acceso al mercado. Es necesaria para ajustar las intervenciones en beneficio de las personas necesitadas sin alterar las señales del mercado. Evaluación que se realiza mediante: i) una combinación de métodos de evaluación rápida y una encuesta sobre hogares basada en el muestreo probabilístico, o ii) métodos de evaluación rápida que incluyen múltiples entrevistas en profundidad a grupos reducidos de personas que representan a distintos subgrupos de la población afectada. La finalidad en ambos casos es generar un perfil económico de los hogares para cada subgrupo de población y una descripción detallada de la situación de la seguridad alimentaria, las causas de la inseguridad alimentaria y la malnutrición (de existir) y las perspectivas de recuperación para cada subgrupo.
Evaluación rápida de la seguridad alimentaria en emergencias (ESAE)
Evaluación en que el equipo de evaluación visita varios lugares para recopilar datos primarios mediante entrevistas a informantes clave y grupos y, a veces, mediante cuestionarios dirigidos a un número limitado de hogares. Su finalidad es posibilitar una comprensión suficiente de la situación para que a quien corresponda decida el tipo, la escala y el plazo de la intervención necesaria, si procediera. Una evaluación rápida de la seguridad alimentaria en emergencias normalmente permitirá producir un informe en un plazo máximo de seis semanas y, a veces, incluso en una semana.
Grupo comunitario (entrevista)
Grupo mixto que incluye hombres, mujeres y jóvenes de todos los subgrupos de la comunidad (aldea, campamento, barrio urbano).
Grupo de subsistencia
Grupo de personas que comparten los mismos medios básicos de subsistencia y estilos de vida —es decir, las mismas actividades principales de subsistencia, las actividades principales generadoras de ingresos y las prácticas sociales y culturales—, así como los mismos riesgos para la seguridad alimentaria. (En un mismo grupo de subsistencia puede haber subdivisiones en función de factores de riqueza o sociales.)
Hogar
Unidad social compuesta de individuos, entre los que existen relaciones familiares o sociales de otro tipo, que comparten los alimentos y tienen una base de recursos común.
Indicador
Factor o variable cuantitativo o cualitativo que constituye un medio sencillo y fiable para medir los logros o reflejar los cambios asociados a una intervención. Observación: Cuando sea posible y pertinente, los indicadores deberían posibilitar la recopilación de datos desglosados (por sexo, edad y otras variables pertinentes)..
Indicador sustitutivo
Indicador que se emplea para suplir a otro que es difícil de medir directamente.
Índice de masa corporal
Indicador utilizado para determinar el estado nutricional de los adultos y los niños mayores. Se calcula dividiendo el peso de un individuo en 2 kilogramos por su talla en metros al cuadrado (peso/talla ).
Inseguridad alimentaria
Situación en que los miembros de un hogar carecen de un acceso estable y seguro a una cantidad suficiente de alimentos inocuos y nutritivos para un crecimiento y desarrollo normales y una vida activa y saludable. Su causa puede ser la inexistencia de alimentos, un poder adquisitivo insuficiente, una distribución inapropiada o un uso inadecuado de los alimentos en los hogares.
Inseguridad alimentaria crónica
Situación en que las personas y los hogares sufren una incapacidad persistente para satisfacer sus necesidades de consumo de alimentos.
Inseguridad alimentaria transitoria
Situación de personas y hogares que, tras una crisis, no pueden satisfacer temporalmente sus necesidades alimentarias sin sacrificar activos productivos o minar su capital humano.
Insuficiencia del acceso a los alimentos (a nivel de los hogares)
Diferencia entre las necesidades nutricionales de los hogares —lo que precisan para restablecer o mantener una salud nutricional satisfactoria y llevar a cabo actividades productivas— y lo que pueden procurarse a sí mismos sin necesidad de adoptar estrategias perjudiciales.
Investigación inicial
Encuesta preliminar realizada tras el estallido repentino de una catástrofe o el recibo de un informe sobre una nueva crisis. Su finalidad es determinar si existe, o podría existir, un problema de seguridad alimentaria que merezca una respuesta inmediata para salvar vidas o una evaluación de la situación, y facilitar indicaciones preliminares sobre el tipo y la escala de la asistencia externa, si procediera, que podría necesitarse.
Listas técnicas
Contienen especialistas del PMA y consultores externos que prestan un apoyo básico en las operaciones de emergencia.
Llamamiento unificado
Documento de referencia para la comunidad internacional sobre la estrategia humanitaria, el programa y los fondos necesarios en respuesta a una situación de urgencia compleja. Los llamamientos unificados se suelen preparar para un período de doce meses (normalmente un año civil), aunque pueden abarcar un período inferior en situaciones de rápida evolución. El llamamiento puede incluir intervenciones de socorro humanitario e intervenciones de socorro de urgencia y de recuperación.
Malnutrición
En el contexto de la labor del PMA se denomina malnutrición a un estado de subnutrición derivado ya de una ingestión inadecuada de proteínas, energía o micronutrientes, ya de una enfermedad. Este estado se caracteriza por diversos síntomas como la emaciación, el retraso en el crecimiento u otros signos clínicos. Véase también: malnutrición aguda
Malnutrición aguda
Malnutrición proteinoenergética causada por una reciente carencia grave de alimentos o una enfermedad que haya ocasionado una pérdida considerable de peso o un edema nutricional. La malnutrición aguda se clasifica frecuentemente como sigue: •
la malnutrición moderada corresponde a una puntuación Z de –3 a <–2 del 70% al 80% de la mediana del peso para la talla;
•
la malnutrición grave corresponde a una puntuación Z de <–3 de <70% de la mediana del peso para la talla y/o edema nutricional; y
•
la malnutrición aguda total engloba los dos tipos de malnutrición antes mencionados y la que corresponde a una puntuación Z de <– 2 de <80% de la mediana del peso para la talla y/o edema nutricional.
Medios de subsistencia
Los medios de subsistencia comprenden la capacidad, los bienes y las actividades de un hogar necesarios para garantizar las necesidades básicas —alimentos, alojamiento, salud, educación e ingresos—.
Micronutrientes
Los micronutrientes incluyen todas las vitaminas y minerales. Son fundamentales para una amplia variedad de funciones y procesos del cuerpo.
Muestreo
Proceso de selección de un número limitado de unidades de análisis de una población de interés con la finalidad de extraer alguna conclusión sobre esa población.
Muestreo acumulativo rápido
Enfoque de muestreo en que los informantes identifican a otros miembros para que se incluyan en la muestra. (Conocido también como muestreo dendrítico.)
Muestreo intencional
Los entrevistados se eligen en función de la probabilidad de ser quienes pueden ofrecer un cuadro más completo de los fenómenos sobre los que se pregunta. El muestreo intencional se utiliza a menudo para elegir a entrevistados y participantes indispensables para las entrevistas a comunidades o subgrupos..
Muestreo no probabilístico
Muestreo que no sigue procedimientos que aseguren que cada unidad de la población estudiada tiene las mismas probabilidades de ser elegida. La muestra no es estadísticamente representativa del conjunto de la población de interés, si bien pueden extraerse algunas conclusiones siempre que se aplique sistemáticamente un procedimiento de selección claramente definido.
Muestreo por conglomerados
Muestra representativa en que unidades de muestreo, niños o adultos, consisten en grupos (conglomerados) y no en individuos por separado.
Muestreo probabilístico
Las distintas unidades de muestreo se seleccionan conforme a procedimientos que aseguran que cada unidad de la población de interés tiene la misma probabilidad de ser elegida. En consecuencia, se considera que la muestra es estadísticamente representativa de la población de interés.
Necesidades no alimentarias
Necesidades de los hogares que no son alimentarias, a saber: el alojamiento, el combustible, los utensilios de cocina, el agua, la atención sanitaria, la enseñanza básica y la seguridad personal.
Necesidades nutricionales
Cantidad de energía, proteínas, grasas y micronutrientes necesarios para que un individuo tenga una vida saludable.
Niño no acompañado
Niño (individuo que todavía no ha cumplido la mayoría de edad legal) que no está acompañado por un progenitor, un tutor u otro adulto que por ley o costumbre esté encargado de su cuidado. [UNICEF 1985]. En situaciones de emergencia, a menudo los niños se separan de sus familias y el hecho de que un niño no esté acompañado no quiere decir necesariamente que sea huérfano.
Parte interesada
Organismo, organización, grupo o individuo que tiene un interés directo en la operación de que se trate o en su evaluación.
Paseos de identificación
Paseo por una zona, buscando específicamente áreas de interés: zonas agrícolas, puntos de abastecimiento de agua, escuelas, mercados, centros de salud u hospitales, zonas donde se establecen los recién llegados, etc.
Personas desplazadas en el interior del país
Personas o grupos que han sido forzados u obligados a huir o abandonar su casa o lugar de residencia, como consecuencia en particular de conflictos armados, situaciones de violencia generalizada, violaciones de los derechos humanos o catástrofes de origen natural o humano, o para evitarlos, y que no han cruzado una frontera estatal reconocida a nivel internacional.
Planificación para contingencias
Proceso de establecimiento de objetivos, enfoques y procedimientos de los programas para responder a situaciones o acontecimientos específicos que puedan ocurrir, que incluye la identificación de esos acontecimientos y la formulación de situaciones hipotéticas y de planes adecuados para prepararse y responder a ellos de manera eficaz.
Preparación
Conciencia de los posibles efectos de una catástrofe o emergencia y preparación para intervenir con rapidez. Medidas adoptadas con anterioridad a una emergencia para facilitar una respuesta rápida, eficaz y adecuada a la situación.
Prevalencia general de la malnutrición aguda
Proporción total de niños moderada y gravemente malnutridos: el porcentaje de niños que padecen emaciación y cuyo peso para la talla sea inferior a una desviación estándar de –2 (o a –80% de la mediana de referencia) o con malnutrición edematosa. Observación: La prevalencia general de la malnutrición aguda también se conoce como malnutrición «total».
Redes de seguridad social
Instrumentos de políticas y programas como las subvenciones generales a los alimentos, transferencias de ingresos selectivas, obras públicas, alimentación escolar, fondos sociales, y pequeños créditos para reducir la pobreza y proteger la renta de los grupos particularmente vulnerables.
Respuestas/ transferencias no alimentarias
Medidas distintas de las transferencias de alimentos para abordar los problemas de inseguridad alimentaria de los hogares. Pueden incluir transferencias al contado, créditos, reducciones tributarias o la distribución de cupones u otro material (no alimentario)
Retraso en el crecimiento (baja talla)
Indicador de la malnutrición crónica. La prevalencia del retraso en el crecimiento refleja la situación nutricional de una población a largo plazo. Se calcula comparando los índices de la talla para la edad de los niños con los de una población de referencia de niños bien alimentados y sanos.
Seguridad alimentaria
Selección de los beneficiarios
Situación en que todas las personas gozan en todo momento de un acceso físico, social y económico a alimentos suficientes, inocuos y nutritivos que colman sus necesidades dietéticas y preferencias alimentarias para una vida activa y saludable. Proceso mediante el cual se seleccionan zonas y poblaciones para beneficiarse de un recurso que se les entrega. Un sistema de selección comprende mecanismos para definir a los grupos destinatarios, identificar miembros de los grupos beneficiarios y asegurar que la asistencia llegue a los beneficiarios previstos y satisfaga sus necesidades.
Situación de emergencia compleja
Crisis humanitaria en un país, región o zona donde se ha destruido sustancial o totalmente la autoridad como consecuencia de un conflicto interno o externo, y que requiere una intervención internacional que trasciende el mandato o la capacidad de un organismos particular o de un programa en curso de las Naciones Unidas en el país de que se trate.
Situación hipotética
Relación o sinopsis de la posible evolución de un acontecimiento que pudiera ocurrir, que constituye la base para la formulación de hipótesis.
Subgrupo (entrevista)
Grupo más o menos homogéneo de personas de condición social parecida procedente de un grupo de subsistencia concreto. Normalmente, se organizan subgrupos de mujeres y hombres por separado.
Técnicas de valoración rápida
Recopilación de datos mediante entrevistas de carácter informal con informantes clave y grupos y subgrupos comunitarios.
Transferencias de alimentos
Triangulación
Actividades de los programas mediante las cuales se facilitan alimentos (en especie) a los hogares o individuos beneficiarios. Incluyen distribuciones generales (gratuitas), distribuciones específicas a grupos vulnerables, alimentos por trabajo, alimentación suplementaria, alimentación escolar, etc. Triangulación significa aprender de distintos métodos, disciplinas, individuos o grupos, lugares y tipos de información a comprobar, comparar y verificar la información. El uso de la triangulación permite hacerse un cuadro más completo, holístico y contextual, y desvelar las dimensiones variadas de un fenómeno dado.
Utilización de los alimentos
Vulnerabilidad
Se refiere a: a) el uso por los hogares —preparación, consumo— de los alimentos a que tienen acceso, y b) la capacidad de los individuos para absorber y metabolizar los nutrientes: eficiencia de la conversión de los alimentos por el cuerpo. Presencia de factores que ponen a la población en peligro de padecer inseguridad alimentaria o malnutrición, incluidos los factores que afectan a su capacidad para hacer frente a esa situación. Observación: Ésta es la definición empleada por el PMA en relación con la seguridad alimentaria. La vulnerabilidad es consecuencia de la exposición a factores de riesgo y de los procesos socioeconómicos subyacentes, que reducen la capacidad de las poblaciones para afrontar esos riesgos.
Zona agroecológica
Unidad cartográfica de tierras, definida en términos de clima, relieve, suelo y cubierta vegetal, teniendo un rango determinado de potencialidades y limitaciones para su uso. [Guía general sobre zonificación agro-ecológica, FAO 1996]