Matrimonio y ruptura del Diseño Divino MTh. David Cua Rodríguez
Génesis 2:16-17 16 Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; 17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás. La caída:
Afectó su capacidad de relacionarse. El hombre se esconde de Dios (Génesis 3:9–10) Se avergüenza de sí mismo (Génesis 3:7- 8) Toma distancia del prójimo acusándolo (Génesis 3:12) Hace violencia a la naturaleza (Génesis 3:14–24)
Alienación, la Imago Dei y el carácter relacional del hombre. Hombre y mujer se acusan, no se ven como iguales. Se pierde su carácter de idoneidad y complementariedad y se convierten en motivo de conflicto. La mujer, antes vista como compañera es ahora la causa del problema (Génesis 3:12) El hombre se convierte en un ser acusador incapaz de asumir su responsabilidad. La diferenciación sexual, elemento que hacía posible la complementariedad ahora los desubica, disocia y desequilibra. La mujer queda dividida entre dos direcciones: Una que la atrae hacia su marido Otra que la atrae hacia su autonomía. (Génesis 3:16)
El nombre de la mujer es cambiado: ya no es “Ishah” (varona) término que destaca su identidad (Génesis 2:23), sino “Eva” (madre de todos los vivientes) término que resalta su función (Génesis 3:20). La idoneidad ha quedado subordinada a la utilidad. La mujer pasa a ser un medio para lograr un fin. La sexualidad se ha reducido a sexo. El sujeto se ha reducido a objeto. Encontramos aquí las raíces profundas e históricas del machismo. Se puede decir entonces que la caída, afectó la base misma del matrimonio y la familia.
Nuestra Actualidad: Se presentan dos fenómenos: Cuando el hombre asume su posición de autoridad, la entiende como su derecho a ejercer una dictadura. Pero también en muchos hogares el problema radica en que no existe ninguna autoridad.
Restauraciรณn de la Familia
A través de Cristo: Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. 15 Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar. (Génesis 3:14-15) La presencia de Jesucristo marca el advenimiento de una nueva era el Reino de Dios anuncia las «buenas nuevas» de la restauración de la imago Dei. La nueva era en Cristo da el surgimiento de la nueva humanidad. Las divisiones dadas a lo largo de la historia (raza, educación, sexo, clase) desaparecen (Gálatas 3:28).
Modelo de Familia: Efesios 5:21-33 Unidad del Matrimonio Génesis 2:24 – Efesios 5:31. Modelo del Matrimonio Cristo y la Iglesia.
a) El modelo implica un motivo: •
El trato entre esposo y esposa está mediado por el amor.
•
El hombre ve en la mujer un objeto de amor, así como Cristo ve a la Iglesia.
•
El hombre está llamado a amar a la mujer, este amor no apunta a una obligación. El amor queda así rescatado de la dictadura de los sentimientos.
Este “amad” no es misericordia o lástima, ni sobreestimar al uno y subestimar al otro. Este “amad” es la valoración del otro que provoca en mí acciones y no sólo sentimientos. Este “amad” es entrega, no de cosas, es decir, relación mediada por el consumismo sino de uno mismo. Es por eso que entregar mi ser me valora y valora al otro. Al entregar mi ser, hago disponible lo que soy y mi presencia para que el otro cuente conmigo, y en ese encuentro ambos hallamos la realización plena.
b) El modelo nos ofrece un ideal: El hombre ha de buscar para la mujer, lo que Cristo busca para la Iglesia, santificarla, es decir “apartada” “especial” Queda descartado para el hombre el buscar en el matrimonio a una empleada, una oficinista, un medio para la expresión de su sexualidad o una madre solamente, para sus hijos. Al entrar a formar una sola carne, el hombre, por su entrega, busca la promoción de ella. El hombre no puede aspirar a nada menos, por que él mismo se desvaloriza. El hombre debe de proveer crecimiento e identidad sólo así el marido inspirará respeto en su mujer y ésta, a su vez, valorará al hombre.
c) El modelo brinda una estructura: Pablo anota que el marido es cabeza de la mujer, la cual ha de ser su «cuerpo» y quien debe sujetarse a su marido. el texto no está hablando de condición sino de posición, y esto significa función y no clasificación, es decir, no significa superioridad o inferioridad. Los estudiosos de la familia como sistema ven a la pareja como un sub-sistema y admiten el hecho de que autoridad o liderazgo, interdependencia y distribución de papeles son esenciales para que un sistema funcione.
Pablo nos introduce no sobre la base de las diferencias entre hombre y mujer, ni en términos de calificar al hombre como más fuerte y racional, y a la mujer como más débil y emocional. Se establece por dos razones: • Por orden del Creador. • Por propósito. La relación cabeza-cuerpo, autoridad-sometimiento coloca a ambos hombre y mujer en una situación de interdependencia, esto hace que el liderazgo del sistema familiar tome la forma de co-liderazgo y jamás de dictadura. El liderazgo del hombre debe ser guiado por la Palabra de Dios, debe estar motivado por el amor, darse en el servicio y en el interés por amor a ella. La mujer, por su parte, estimula esto en el hombre por el respeto y la sujeción, es decir la realización de la vida.
Familias Cristianas
Los primeros matrimonios cristianos no estaban hechos, desde el punto de vista de la vida conyugal y de la disciplina sexual, para facilitarles la existencia. Las más mínimas razones provocaban divorcios tanto en judíos como en paganos. De cierto se oye que hay entre vosotros fornicación, y tal fornicación cual ni aún se nombra entre los gentiles; tanto que alguno tiene la mujer de su padre. I Corintios 5:1 Los matrimonios cristianos, estaban llamados a ser testimonio en un mundo en que el amor y el matrimonio estaban destrozados.
El matrimonio cristiano tiene por deber revelar la verdad a todo matrimonio, como la Iglesia tiene por deber revelar la verdad al mundo. El matrimonio cristiano debe de mostrar su fidelidad. El matrimonio cristiano debe de colocar en primer plano el crecimiento de la fe y conocimiento de Dios. El propósito del matrimonio es la santificación, esto quiere decir el carácter de Cristo como fruto del Espíritu. Gálatas 5:22-25 22 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. 24 Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. 25 Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu.
Roles en el Matrimonio
El esposo: Es la cabeza inmediata del hogar y es responsable que los principios de Dios sean practicados. (Efesios 5:23) Los esposos deben de amar a sus esposas sin egoísmo como Cristo a la Iglesia (Efesios 5:28-29) El esposo debe de tratar bien a la esposa (Colosenses 3:19) El esposo debe respetarla y honrarla (I Pedro 3:7) El esposo debe de ser proveedor (I Timoteo 5:8) El esposo debe de compartir la crianza de los hijos (Proverbios 15:20) El esposo debe instruir a los hijos en los caminos de Dios (Proverbios 22:6) El esposo debe cuidar el corazón de los Hijos (Efesios 6:4)
La Esposa: La esposa debe de amar y respetar a su esposo (Tito 2:4-5) La esposa debe amar y respetar al esposo como cabeza protectora (Efesios 5:33) La esposa debe de ser virtuosa (Proverbios 31:10-31) La esposa debe de hablar palabras bondadosas y amorosas (Proverbios 31:26-28) La esposa debe de saber que su primera responsabilidad es hacia su familia (Tito 2:5) La esposa debe de amar y criar a sus hijos (II Timoteo 1:5) La esposa debe de instruir a los hijos (Proverbios 22:6)
Los Hijos: Los hijos deben honrar a los padres (Éxodo. 20:12) Los hijos deben obedecer a los padres (Colosenses 3:20) Los hijos deben de seguir instrucciones (Proverbios 6:20-23) Los hijos deben (Proverbios 3:1-12)
de
ser
responsables
Los hijos también deben proveer a sus padres (I Timoteo 5:3 y 4)
Tomado de: Maldonado, J. (2006) Fundamentos bíblico-teológicos del matrimonio y la familia. Editorial Libros Desafío