El servicio de Radio María (Jean Paul Kayihura

María en nuestros días A través de la Virgen se renueva la Iglesia

La programación de cada Radio María ayuda a crecer en la fe y en la oración.

Bernhard Mitterrutzner

WFRM Editorial Office Coordinator

No es difícil entender que estamos en una fase particular en la historia de la humanidad. Constantemente se consolidan los signos, que Jesús nos recomendó que entendiéramos: “... cuando la rama se vuelva tierna y produzca hojas, sabed que el verano está cerca”. (Mt 24.32).

Uno de estos signos es María (ver Apocalipsis 12: 1),aparecida en muchos lugares como Madre y Reina para llamar a la Iglesia y a toda la humanidad a regresar a Dios. Guadalupe, París, Lourdes, Fátima, Ámsterdam, Kibeho, Medjugorje y otros santuarios generan un concepto general a través del cual Nuestra Señora quiere renovar a la Iglesia y a la humanidad, preparando a la venida de Cristo “con gran poder y esplendor”. (Mt 24.30). San Luis de Montfort ya lo había entendido hace trescientos años: “Ahora bien, si Jesucristo, Cabeza de la humanidad, ha nacido de Ella, los predestinados, que son los miembros de esta Cabeza, deben también, por consecuencia necesaria, nacer de Ella. Ninguna madre da a luz la cabeza sin los miembros, ni los miembros sin la cabeza. “ Y prosigue “ ... María es el camino por donde vino Jesucristo a nosotros la primera vez y lo será también cuando venga la segunda, aunque de modo diferente”.

Como red radiofónica mundial dedicada a la Virgen, tenemos el privilegio de ponernos a disposición para este plan de la Virgen. Sucede sobre todo a través de nuestra programación

con la cual ayudamos a millones de personas a crecer en la fe y en la oración.

Por eso también queremos llevar la oración y la espiritualidad de los diferentes santuarios marianos a nuestros oyentes. Hemos empezado, pues, a instalar estudios locales en Medjugorje (Europa), Kibeho (África) y Nazareth (Asia) con el equipo técnico necesario para dar a todas las radios la posibilidad de transmitir desde estos santuarios santas misas, rosarios, catequesis y testimonios.

De esta manera, queremos ofrecer a los enfermos, a los pobres y a todos aquellos que nunca pueden ir en peregrinación una oportunidad de participar en las gracias de estos santuarios.

¡La Virgen María seguramente se pondrá en camino para visitarlos personalmente! (ver Lc 1:39)