2018 AUTOPSIA PSICOLOGICA
Abog. Juan Carlos Alvarado
07/08/2018
¿Qué es una autopsia Psicológica? Una de las técnicas más importantes y utilizadas en la comprensión de los comportamientos criminales es la del peritazgo psicológico. En el cual el psicólogo despliega todos sus conocimientos en el ámbito legal y psicológico. Entre estos peritajes se encuentra la denominada Autopsia Psicológica. Este procedimiento es considerado como un proceso de recolección de datos del occiso que permite reconstruir su perfil psicológico y el estado mental antes del deceso. Para el desarrollo de dicho procedimiento, es necesario el trabajo interdisiciplinario entre médicos, abogados psiquiatras y psicólogos forenses. (Acevedo, Nuñez y Pinzón, 1999). La Autopsia Psicológica como técnica pericial surge en los EE.UU. como una necesidad administrativa de definir la etiología médico legal en los casos de muertes dudosas donde no se contaba con los elementos suficientes para afirmar si se trataba de un suicidio o un accidente. Sin embargo, a pesar que esta técnica es bastante conocida y utilizada en EE.UU. no se ha establecido un procedimiento estandarizado para llevarlo a cabo.
Diversos autores Litman, Curphey, Shneidman, Farberow y Tabachnick, 1952; Shneidman, 1960-1964 (Citados por Shneidman, 1994b) plantean que para la realización del PAP se debe tener en cuenta varias categorías entres las cuales menciona: el estilo de vida del occiso, historia de vida, problemas económicos o sociales, relaciones interpersonales, rasgos de la personalidad, intentos anteriores de suicidio, posibles enemigos, entre otros.
¿Qué propósito persigue una autopsia psicológica? Según Ebert (1991), los principales objetivos de la Autopsia Psicológica se dividen en cuatro: 1. Primer Objetivo: Determinar la manera de la muerte en casos de equívocos que necesitan ser distinguidos. Las maneras de muerte son: a) natural, b) accidental, c) suicidio y d) homicidio; este tipo de sistema es conocido por la sigla NASH. Generalmente, en algunos casos, la manera de muerte es bastante clara, lo que no ocurre con el modo como sucedieron los hechos. 2. Segundo Objetivo: Averiguar el momento y el tiempo en el cual se produjo la muerte; para esto, el investigador debe indagar acerca de diferentes situaciones de la vida del occiso y tratar de relacionarlas con el hecho.
3. Tercer Objetivo: Obtener la información suficiente para evaluar los datos obtenidos de diversos intentos de suicidio, con el fin de prevenir dichos intentos y la letalidad de los mismos. 4. Cuarto Objetivo: Según el mismo autor, es terapéutico para la familia y los amigos del occiso. La entrevista y la investigación en general son mecanismos terapéuticos para estas personas, ya que permite comunicar pensamientos y sentimientos sobre la persona fallecida, de igual forma, la percepción que cada uno tiene sobre la muerte de aquella persona cercana, que por lo general es de culpa, dolor, vergüenza, resentimiento, entre otras. De igual manera, la Autopsia Psicológica tiene como función ayudar a esclarecer los caso de muerte dudosa: suicidio, homicidio y accidente, donde ni el médico legista, ni el investigador policial tienen suficientes elementos para decidir, lo anterior se puede determinar: 1. Valorando los factores de riesgo suicida, de riesgo heteroagresivo o de riesgo de accidentalidad. 2. Valorando el estilo de vida del occiso. 3. Evaluando el estado mental en el momento de la muerte. 4. Estableciendo las áreas de conflicto y motivacionales. 5. Diseñando el perfil de personalidad del occiso. 6. Esclareciendo si existían señales de aviso presuicida. 7. Esclareciendo si existía un estado presuicida.
IMPORTANCIA Y TRASCENDENCIA DEL TEMA La Necropsia Psicológica es la caracterización retrospectiva de la personalidad y la vida de una persona ya fallecida, utilizando por supuesto un método indirecto o diferencial, se trata de obtener información del occiso a través de terceras personas que en vida lo conocieron íntimamente. La Necropsia Psicológica es una técnica pericial psicológica forense que sirve para definir la causa o motivo psicológico y jurídico de muertes dudosas en donde la extinción de la vida es causada por el occiso o por otros agentes. La Necropsia Psicológica es la exploración retrospectiva e indirecta de la personalidad de la vida de una persona ya fallecida, se trata de hacer una evaluación psicológica después de su muerte y de como era la persona en vida, su comportamiento y estado mental, tras una reconstrucción social, psicológica y biológica postmortem. La necropsia psicológica es una técnica pericial-psicológica -forense que surge en los Estados Unidos de Norteamericana en la década de los sesenta, como respuesta a una necesidad de definir la causa médico legal de muerte dudosa, en donde no existía elementos suficientes para determinar si se trataba de un suicidio, homicidio o un
accidente; tiene las siguientes aplicaciones en la investigación criminológica, en el derecho penal en el derecho civil en la prevención de muerte violenta. La Necropsia Psicológica es un proceso indirecto de recolección y análisis de información respecto al comportamiento de una persona que ha fallecido, teniendo como objetivo acercarse a la comprensión de la circunstancias de su muerte; vale señalar que estamos en condiciones de dar una definición de la necropsia psicológica que viene a ser entendida como "un proceso retrospectivo de búsqueda de datos que permiten reconstruir la personalidad y el estado mental de una persona antes de su deceso por causa dudosa (homicidio, suicidio, muerte natural o accidental)". La Necropsia Psicológica es la reconstrucción psicosocial-patológica postmortem de la exploración retrospectiva de la personalidad en forma indirecta a través de los familiares, amigos y compañeros de estudio, trabajo y otros del occiso (a); es decir una exploración mediata de la vida psíquica o estado mental de la persona fallecida. En el campo forense nace la expresión y es allí donde se aplica en el análisis de las circunstancias de muerte de una persona. En el caso de muertes violentas, la manera como ocurre la muerte puede corresponder a homicidio, suicidio o accidente. En estas opciones pueden surgir dudas que lleven la investigación a necesitar de datos psicológicos del occiso para esclarecer la forma de su deceso. El método de la Necropsia Psicológica nació para ser aplicado a casos en lo que la manera de muerte resulta dudosa; además de la aplicación en su esclarecimiento, este procedimiento puede servir como instrumento de investigación de primer orden en aéreas de psicología y criminología también puede aplicarse en estudios de victimologia, con una utilidad diversa; por ejemplo para establecer hasta que punto el occiso pudo provocar la circunstancias en la que murió (victima provocadora), colocándose en una situación que podría haber evitado; este método se crea para ser administrado a casos en los que la manera de muerte resulta dudosa y que puede servir como herramienta de investigación en el ámbito de la criminología y de la victimologia. En la investigación de asesinatos u homicidios violentos, el análisis del estado mental de las victimas puede arrojar datos relevantes para la prevención del delito y la predicción de los mismos; asimismo este estudio psicológico de las victimas puede contribuir como terapia para los familiares afectados y allegados a éstas, e incluso para la propia sociedad.
PRINCIPIOS BÁSICOS DE LA NECROPSIA PSICOLÓGICA La victima deja “evidencia psicológica” en la escena del crimen, en los espacios que habitó y en sus conductas manifestadas. Por medio de este principio se buscan la huellas o trazos psicológicos que el psiquismo y la conducta de una persona han dejado en vida; pudiendo describir, explicar y comprender el desarrollo probable de la personalidad de una persona fallecida, detectar, factores de riesgo suicida o descartarlos, evaluando el estado mental al momento de la muerte establecer áreas de conflicto y de crisis a través de sus vínculos parentales, familiares y amicales. El problema de la presentación de los resultados de la necropsia psicológica va a tener un orden de probabilidades que va ha mostrar los resultados según Núñez de Arco en el
método que él le llama de la estrella de cuatro puntas que se analiza mediante el estado depresivo de la victima; el apoyo familiar y psicosocial; la biografía de la victima y sus características de personalidad; y que se va ha determinar cuando crece una de las puntas mas afectadas en la victima. Al determinar el estado mental de una persona antes de su muerte vamos ha saber lo que ha pensado, sentido y que motivos rigieron su conducta y sus relaciones con el hecho que estamos explorando; así mismo vamos a establecer si las conductas realizadas por una persona fallecida fueron dadas en circunstancias que la hacían incapaz de administrar su bienes, tomar decisiones o dirigir su comportamiento; con respecto a su capacidad cognitiva estableceremos su coeficiente intelectual y estado de resistencia o indefensión de una persona fallecida y el rol que cumplió en los hechos investigados así como el perfil psicológico y su relación con el hecho investigado.
APORTE CRIMINALISTICO AL MARCO TEORICO ACTUAL Esta técnica está fundada en los métodos de investigación criminalística y psicológica por un lado, usa las entrevistas de la psicología clínica y social y por otro ámbito la técnica de investigación de la escena del crimen, de forma abierta, es decir; a partir del cadáver en el lugar de la escena de los hechos, usada en criminalística. A través del método de las entrevistas recolectaremos la información requerida con las personas allegadas en cercanía al sujeto a investigar desde el foco u origen del hecho, hacia fuera, hacia los contornos, en círculos concéntricos a la persona investigada; familiares cercanos, vecinos; amigos íntimos, compañeros de estudio o de trabajo; otras personas que lo hayan conocido, educadores, psicólogos, médicos, etc. El propósito de ello está en que conforme nos alejamos del sujeto, obtendremos datos que al final podremos de nuevo corroborar con la familia y los vecinos, actualmente la tendencia hacia la exploración de una autentica compilación biográfica es un inmenso estudio de investigación que muchas veces viene a demostrar que la muerte no es un hecho azaroso o de repente sino de alguna forma “el fin de un largo y complejo proceso”. Por ello la necropsia psicológica no busca ni más ni menos que una reconstrucción de las motivaciones psicodinámicas y crisis existenciales del occiso. Por otro lado; la Necropsia Psicológica es muy utilizada en el suicidio definido por SHNEIDMAN como “el acto humano de autolesionarse con la intención de acabar”, abarca una infinidad de estados motivacionales conscientes e inconscientes. A partir de estos antecedentes y previa revisión de todos los modelos, escalas, guías y formularios, se ha creado un modelo llamado MAP-I (Modelo de Autopsia Psicológica para suicidas), y es completamente estructurado y sistematizado, de forma tal que se disminuye al mínimo el margen de sesgo, pues todos los exploradores tienen que realizar la exploración de la misma manera, guiándose por un instructivo adjunto al MAP-I con posibilidad de respuesta cerrada, precisamente para evitar la inclusión de elementos subjetivos en la valoración de cada caso y además para hacerlo verificable por terceras personas y así garantizar su valor como prueba pericial. Más de la tercera parte de las víctimas estudiadas hicieron verbalizaciones suicidas, siendo estas, los comentarios pesimistas acerca del futuro, la desesperanza y la expresión de sentimientos de soledad, inutilidad, incapacidad o incompetencia.
El término suicidio definido por SHNEIDMAN como el acto humano de autolesionarse con la intención de acabar; abarca una infinidad de estados motivacionales conscientes e inconscientes. Penetrar en esa compleja dinámica intrapsíquica del suicida no es realmente fácil, sin embargo, existe un método para lograrlo: la autopsia (necropsia) psicológica. La Necropsia (autopsia) psicológica como técnica pericial ve la luz en los años 60 en Los Ángeles, California, como salida a una necesidad administrativa de definir la etiología médico legal de muertes dudosas, donde no había suficientes elementos para afirmar si se trataba de un suicidio o un accidente. A partir de estos antecedentes y previa revisión de todos los modelos, escalas, guías y formularios encontrados en la literatura revisada se creo un modelo al cual lo llamaron MAP-I (Modelo de Autopsia Psicológica para Suicidas) que, a diferencia de los cuales que eran abiertos o semiestructurados, este es completamente estructurado y sistematizado, de forma tal que se disminuye al mínimo el margen de sesgo, pues todos los exploradores tienen que realizar la exploración de la misma manera, guiándose por un instructivo adjunto al MAP-I con posibilidad de respuesta cerrada, precisamente para evitar la inclusión de elementos subjetivos en la valoración de cada caso y además para hacerlo verificable por terceras personas y así garantizar su valor como prueba pericial. Lo principal en este trabajo es el proceso en sí mismo, el modo de hacer las cosas, que en nuestro caso parte del propio lugar del hecho, el poder estar al lado de los investigadores policiales en la escena de la muerte es sumamente importante pues nos permite sugerir la ocupación judicial de notas, diarios, cartas, que quizá para ellos no tienen valor pues no son las clásicas; notas suicidas, pero para nosotros si lo tienen pues caracterizan al occiso y tal vez entre líneas esté la clave de tan triste final. Además en los espacios que habitó la persona deja siempre huellas psicológicas, su sello, su estilo de vida. La Necropsia Psicológica es una reconstrucción biográfica del fallecido que enfatiza en aspectos tales como la caracterización socio demográfico y caracterológico, stress recientes, enfermedad mental, señales de aviso pre-suicida, con especial focalización en los últimos días y horas. En el año 1994, a partir del Congreso Mundial de Ciencias Forenses efectuado en Queretano, México, este método comienza a utilizarse en los Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia de este Estado, también para la investigación de presuntos suicidios; el éxito alcanzado por los investigadores mexicanos con su aplicación es otra prueba más de la utilidad de esta metodología y de su posibilidad de generalización incluso a otros países del área con un sistema de investigación pericial diferente. Las personas entrevistadas se mostraron cooperadoras y accesibles y hasta se sintieron aliviados de poder verbalizar sus consideraciones acerca del fallecido y de las circunstancias que rodearon a su muerte. Secundariamente además se hacia mención, a algo tan importante que con frecuencia se olvida, por parte de las autoridades que es un suicidio y ahí queda todo, sin tener en cuenta el dolor y la pena de los que quedaron atrás, la incertidumbre, la culpa y muchas veces la desesperación que pueden precipitar quizá otro suicidio.
Aunque la mayoría de los informantes se mostraron cooperadores y accesibles, se encontró reacciones de defensa, de culpa, de angustia, de vergüenza, de impotencia, de negación de la realidad. Algunos lo veían como un crimen o un accidente y esto les quitaba la culpa, la transferían a otra persona o al azar, a la suerte, así dolía menos. La entrevista es más productiva pasados los quince a treinta primeros días y no encontramos diferencia entre los datos obtenidos un mes después y los obtenidos hasta seis meses después, es decir, que una vez pasado el primer mes no se pierde en claridad y detalle de la información siempre y cuando se entreviste a la persona adecuada. El contar con una metodología para el estudio del suicida permite diseñar estrategias de prevención al poder caracterizar el perfil psicosocial de las víctimas, establecer la población de riesgo y los factores asociados a esta conducta que tantas vidas cobra