Suplemento Especial - 2015
A los 100 años de la muerte de Elena G. de White, un grupo de jóvenes de la carrera de la Terapia Física de la Universidad de Montemorelos han decidido recordar algunos pasajes de la vida de esta profeta de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.
Este es un suplemento especial de la Revista Familia y Fe, donde recordamos algunos pasajes importantes de la vida de Elena G. de White quien fue la profeta del Señor, para la Iglesia Adventista del Séptimo Día.
Hernández, Saúl Marcelo, Pedro Sánchez, Paola Segura, Arlie Solórzano, Salmer Solórzano, y; Cindy Tass.
Estos pasajes fueron escritos por:
Dios te bendiga, y ruego al Señor que estos breves artículos sean de inspiración y motivación.
Marcela Mata, Stell Cabrera, Mario Campos, Eugenia Contreras, Etnie Constant, Edgar Carpintero, Alison Garibaldi, Maritza Gómez, Evelyn
Todos ellos trabajaron con entusiasmo y estoy agradecido a cada uno.
Yván Balabarca C. Director
que ella revela.
¿Porque los escritos de EGW se consideran como la luz menor si también fuero inspirados por Dios?
Algunos han especulado argumentando que hay grados de inspiración. Consideran que profetas como Débora, Natán y Agabo poseían un grado de inspiración inferior al de los escritores canónicos. De acuerdo con este concepto consideran que Elena G. de White poseía un grado de inspiración inferior. Pero la Biblia no dice nada en cuanto a grados de inspiración ni apoya esa idea en ninguna forma. Los adventistas creen que todas estas especulaciones no sólo son ociosas sino peligrosas. Las mentes limitadas, ¿cómo pueden esperar que comprenderán el misterio de la manera en que Dios, por medio del Espíritu, ilumina la mente de sus portadores escogidos?”
“El Señor ha enviado a su pueblo mucha instrucción, línea sobre línea, precepto sobre precepto, un poquito aquí y un poquito allá. Poco caso se hace de la Biblia y el Señor ha dado una luz menor para guiar a los hombres y mujeres a la luz mayor. ¡Oh, cuánto bien podría haberse realizado si los libros que contienen esta luz fueran leídos con una determinación de practicar los principios que contienen! Habría una vigilancia, una abnegación y un esfuerzo resuelto mil veces mayores. Y muchos más se regocijarían ahora en la luz de la verdad presente”.
“Luz menor” es una frase que indica no un grande de inspiración menor como lo aseguran los pasajes antes mencionados sino porque tuvieron un alcance menor, y entiéndase esto como local o con un límite de tiempo en una ocasión puntual. Vemos el ministerio de Juan el Bautista, de Agabo, Hulda o Natán, siendo usados por el Señor pero no escribieron; sus ministerios proféticos llevaron al pueblo a una mejor compresión de la Escritura y de la voluntad del Señor como lo hizo el ministerio de Elena G. de White.
“El profeta Juan era el eslabón que unía las dos dispensaciones. Como representante de Dios, se dedicaba a mostrar la relación de la ley y los profetas con la dispensación cristiana. Era la luz menor, que había de ser seguida por otra mayor. La mente de Juan era iluminada por el Espíritu Santo, a fin de que pudiese derramar luz sobre su pueblo; pero ninguna luz brilló ni brillará jamás tan claramente sobre el hombre caído, como la que emanó de la enseñanza y el ejemplo de Jesús. Cristo y su misión habían sido tan sólo obscuramente comprendidos bajo los símbolos y las figuras de los sacrificios. Ni Juan mismo había comprendido plenamente la vida futura e inmortal a la cual nos da acceso el Salvador”. Cito estos párrafos para una mejor claridad: “Los adventistas del séptimo día no consideran que los escritos de Elena G. de White sean un sustituto ni una adición al canon sagrado. Para los adventistas la Biblia es única y suprema como la prueba de fe y práctica cristianas (PE 78). Los escritos de Elena G. de White son -de acuerdo con sus propias 890 palabras"una luz menor para, guiar a los hombres y las mujeres a la luz mayor" (3MS 32). Los escritos del espíritu de profecía no presentan un nuevo camino de salvación, sino tienen el propósito de que los hombres comprendan y aprecien la Biblia, y aprovechen la fuente de salvación
PRIMEROS ESCRITOS DE ELENA G. WHITE Marcela Mata Bonilla La escritora norteamericana Elena G. de White, escribió más de 5,000 artículos de periódicos y 40 libros. Actualmente existen copilaciones de sus 50,000 páginas de manuscritos, más de 1,000 títulos en inglés. Es considerada como la escritora femenina más traducida en toda la historia de la literatura, y la autora estadounidense más traducida en cualquier género. Ella recibió de Dios desde muy temprana edad (17 años) hasta su muerte (1827-1915) un aproximado de 2,000 visiones y sueños, las cuales ocurrieron entre menos de un minuto de duración hasta 4 horas. Elena a partir de sus 17 años tuvo varias visiones las cuales conto personalmente a sus amigos y transcribió en cartas para enviar el mensaje que Dios le indicaba, años más adelante se convirtieron esa cartas fueron plasmada en un pequeño panfleto. En Abril de 1846, se publicó en la prensa el primer panfleto titulado “Al Pequeño Remanente Esparcido por Todas Partes”, era una sola página tamaño grande, en el mismo se tomaron alrededor de tres columnas para redactar las primeras visiones de Elena G. de White, una de ellas fue la que tuvo en Febrero del 1845 sobre el Santuario Celestial y los eventos relacionados a los 2,300 días. Este panfleto fue costeado por H. S. Gurney, Herrero de Fairhaven, Massachusees y se imprimieron 250 ejemplares los cuales fueron distribuidos en Portland. CONTENIDO DEL PANFLETO Elena, en Dic 1844, el espíritu santo vino sobre ella y le mostro en visión la peregrinación del pueblo de Dios rumbo a la ciudad celestial, un camino angosto lo dirigía a aquella ciudad con una luz brillante detrás de ellos que iluminaba sus pies, pero muchos se cansaron y se regresaron, pensando que Jesús no los llevaría por un lugar tan lejos, la luz que representa el espíritu santo de Dios se fue retirando de ellos por haber creído en la verdad y luego dudar de que Jesús los guiaba por el camino correcto, se fueron perdiendo uno a uno en la oscuridad, no pudieron regresar a la santa ciudad. La visión no explicaba él porque del chasco pero sí dio a entender que Dios estaba guiando y continuaría conduciendo a los fieles mientras viajaran hacia la ciudad celestial, aquellos que confiaran en la luz que los guiaba. En la visión sobre el Santuario Celestial, Elena vio a Jesús que se levantaba del lugar donde intercedía y rodeado de ángeles en un hermoso carruaje se dirigía al lugar Santísimo para sentarse en su trono. Vio al Padre saliendo del trono e ir al lugar Santísimo a ministrar como el gran sumo sacerdotes y se sentaron juntos Padre e hijo. (Publicada en Marzo 1846 The Day-Star). Año 1851, se publicó el primer libro de Elena con un poco
más de material que el panfleto, contenía 64 páginas titulado: A Sketch of the Christian Experience and Views of Ellen G. White (Una reseña de la experiencia cristiana y las visiones de Elena G. de White) El motivo de Elena Harmon para contar el mensaje que recibía de Dios fue gozo y la paz que ella sintió al ver a Jesús. Dios la eligió como su mensajera pero nunca la obligo a obedecerle, él le mostro su pecaminosidad y Elena no quiso vivir más en ella. Todo aquello que ella experimento en visión la hizo amar más la venida de Jesús; al despertar y recuperar sus fuerzas de la visión, se comprometió con Dios en oración a servirle no importando el precio que pagaría por ello. Ella guiada por el Espíritu Santo pudo contar aquellas visiones y pudo escribir a muchos que estaban en error notificándole la verdad que Dios le había revelado al respecto. A pesar de sus debilidades físicas fue restaurada por Dios y su pluma no dejo de escribir el mandato divino.
Elena G. De White y su esposo, el pastor Jaime White, habían estado trabajando arduamente uno al lado del otro en la causa de Cristo. Ellos planeaban seguir así, juntos para seguir predicando la palabra de Dios. Y aunque el pastor ya había sufrido tres veces de parálisis, gracias a los designios de Dios había logrado recuperarse y regresar a sus acCvidades normales. Para 1811, logró cumplir sesenta años de edad con un cuerpo y una mente acCvos y vigorosos. Al contar de nuevo con buena salud de cuerpo y mente. Después de pasar esa primavera y verano en BaLle Creek, decidieron viajar a la costa del Pacífico para poder escribir tranquilos. Un Cempo antes de parCr, ella le insisCó a su esposo que era indispensable buscar un lugar para escribir sin distracciones. Pero él le respondió que antes de parCr debían arreglar algunos asuntos, ya que su vida estaba dedicada para la edificación de sus insCtuciones. Y si Dios le había renovado las fuerzas después de sus parálisis, senQa que debía conCnuar con su obra para poder seguir con su misma capacidad. Uno de los compromisos de los que hablaba el pastor White era un congreso campestre en CharloLe, a mediados del verano, el 23 y 24 de julio. Durante el camino al congreso, el pastor no dejaba de alabar a Dios, tanto por su misericordia, como por sus bendiciones recibidas. Pero al mismo Cempo, se le veía algo solemne. Hablaba sobre todo de que veían el futuro algo nublado e incierto, pero que el Señor no quería que se afligiera por ello, ya que Él le daría la gracia para enfrentar cualquier dificultad. Al emprender el viaje a CharloLe, el clima cambió de imprevisto. Primero se senQa un calor sofocante que se convirCó en un frío que calaba hasta los huesos. Entonces fue cuando el pastor sinCó un frío que recorrió todo su cuerpo, pero lo ignoró, ya que se senQa bien de salud. Al llegar, inició sus trabajos en el congreso como siempre. Les comentó sobre el placer que le causaba hablar a los hermanos que mostraban gran interés en los temas del Señor. Al volver, el pastor sinCó un ligero malestar en su cuerpo, situación a la cual le restó importancia. Ya en casa, conCnuaron con su ruCna, ir por la mañana al bosque cercano y unirse en oración. Diariamente rogaban a Dios para saber cuál era la manera más correcta para actuar, ya que frecuentemente recibían peCciones para asisCr a otros congresos, y les era
complicado negarse a esas invitaciones. El sábado siguiente, fueron al bosque y el pastor se puso a orar en tres ocasiones. Como respuesta, recibieron paz y luz en sus corazones. La semana siguiente los dos enfermaron y fueron al hospital. El médico le dijo a Elena que Jaime estaba muy grave, y al verle el rostro, comprendió que estaba muriendo. Ella le preguntó si Jesus era precioso, a lo cual respondió que sí, y dijo que ya no tenía deseos de vivir. Pasaron la noche orando por él, pero la tarde siguiente murió tranquilamente. La muerte de Jaime cayó sobre ella terriblemente. Esa noche Elena estuvo entre la vida y la muerte, pero gracias a la bendición de Dios y los cuidados de los doctores salió adelante. En el funeral, tesCficó sobre la esperanza crisCana durante las horas de dolor y aflicción, habló sobre la misericordia y el amor de Dios. Ahora ella recordaba que Jesus murió para hacernos la muerte más ligera, para tener gozo y esperanza aún en esos momentos, ya que en la mañana de la resurrección todos nos volveremos a ver.
Eugenia Samantha Contreras De León
LA MUERTE DEL PASTOR JAIME WHITE
El llamado a Australia
clausura de la escuela biblica y la mayoria de los estudiantes entraron al ministerio de las publicaciones en varias colonias australianas.
Enero de 1875 en la dedicación del colegio BaLle Creek, Stephen N. Haskell escuchó a Elena de White hablar sobre una vision acerca de prensas publicando en Australia. En 1885 Haskell fue enviado a Australia. Pronto hubo una iglesia de 90 miembros, que aumentaron a 700, con muchos jovenes ansiosos de esparcir el mensaje, a Haskell le parecio una oportunidad para que Elena visitara el campo trayendo fuerza espiritual e inspiracion con la idea de abrir una escuela preparatoria. Elena no esperaba recibir invitaciones para, queria descanso, quietud y publicar La Vida de Cristo. Habia comprado un lote en Petoskey y estaba constuyendo una casa para trabajar y fue en ese momento que llego la invitacion para ir a Australia. Aunque estaba dudosa por no haber recibido ninguna luz directa del cielo, decidio viajar. En Diciembre de 1891 llegaron a la casa publicadora y oficinas centrales de la asociacion en Merlbourne, lugar que se le habia mostrado en visión en 1875. El plan era tener su oficina en Melbourne, escribir la vida de Cristo y visitar las Iglesias principales. Elena alquiló una casa a 8 km de la ciudad, compro un caballo, un carruaje y un faeton con dos asientos. Compro una vaca que le diera leche y empleo a una niña para que ayudara con el trabajo domesCco. Elena sufrio por once meses de fiebre paludica y reumaCsmo inflamatorio ante largos m e s e s d e s u f r i m i e nto y t rata m i e nto s hidroterapicos ineficientes, pidio a los hermanos que la unigiesen y orasen por su curacion. Mientras escribia sobre la vida de Cristo y seguia predicando sentada desde la plataforma.
El dia que termino la escuela, se convocó a una reunión de los miembros de la junta direcCva. Elena tenia un mensaje especial desde hace 12 meses para Faulkhead, tesorero de la casa publicadora. Cuando la familia Faulkhead se hizo SDA, inmediatamente se lo empleo como tesorero de la Echo Publishing Company. El estaba estrechamente vinculado con la Logia Masonica. Al principio prestaba buen servicio pero a medida que pasaba el Cempo se absorvia en las Logias Masonicas y su interes por las cosas de Dios disminuia.
Cabrera Martinez, Stell Geraldine
En Agosto de 1892 se inauguro la escuela con 25 estudiantes. Elena se encargo de varios estudiantes durante el primer periodo de la escuela y pagaba los gastos de 6 alumnos en 1893. Comenzando Julio, Elena empezo a senCrse fuerte. En ese periodo se hizo la
Cuando Elena llego a Australia en 1891, ella escribio de manera general las situciones que se le habian revelado incluyendo una carta al señor Faulkhead, la cual le habia sido impedida enviar por el espiritu santo. Faulkhead busco a la Elena y ella le conto lo que se le habia mostrado en vision acerca de su caso. Le dijo que sabia lo que estaba hacienda con sus asociados. Le dijo que lo vio colocar las monedas mas pequeñas en las ofrendas del sabado y las mas grandes en las arcas de la Logia. Hablo sobre el peligro de esa coneccion y el camino riesgoso que estaba transitando. El perderia su alma a menos que cortara cada lazo que lo ataba a esta asociacion. Faulkhead reconocio que este mensaje provenia verdaderamente de Dios y acepto la luz que el señor le habia enviado por medio de Elena. Despacho las cartas de renuncia pero tuvo que completer su cargo por 9 meses mas. Despues escribio una carta a Elena diciendo que su periodo en el cargo como maestro de la Logia Masonica habia expirado. Expreso su graCtud a Dios por haberle enviado el mensaje con ella a Cempo y por haberlo apartado de ese camino. Esta experiencia lleno de confianza los corazones de los miembros de la iglesia en Australia, conCnuo sirviendo por muchos años en la casa publicadora, dando su Cempo y fuerzas para esparcir el mensaje.
Elena G. de White Educadora Solórzano Gonzalez, Salmer Lizbeth En el año 1872 los adventistas del séptimo día comenzaron a recibir consejos concernientes a la educación cristiana. El primer artículo abarcante sobre el tema mencionado se tituló “La educación debida”, y ha sido publicado en Testimonies for the Church 3:131-160. En las 30 páginas de este artículo es posible encontrar, cada principio fundamental que debiera dirigir la educación y la enseñanza de los niños y jóvenes. Por muy revolucionarios que puedan haber parecido algunos de estos conceptos en el momento cuando fueron escritos, hoy son reconocidos como válidos y apoyados por pensadores pedagógicos progresistas. Los adventistas pueden considerarse legítimamente como muy favorecidos por haber aparecido estos esquemas básicos de los principios educacionales en su literatura en una época tan temprana. (CM 5.5) Una de las cosas que ella menciono en los escritos de testimonios para la iglesia califica a la educación como uno de los ¨trabajos más bonitos jamás asumido por hombres y mujeres para hacer frente a las mentes juveniles. Los padres y los maestros están ciertamente descalificados para educar adecuadamente a los niños si no han aprendido la lección primera de dominio propio, paciencia, humildad y amor. ¡Qué importante cargo para los padres, tutores y profesores! Hay muy pocos que se dan cuenta de las necesidades más esenciales de la mente y la forma de dirigir el intelecto en desarrollo, los pensamientos y los sentimientos crecientes de la juventud.¨ (T3 131.1) Fina lm e nt e , e n e l a ñ o 19 0 3 , el l i b r o L a educación, obra maestra en el terreno de la formación del carácter, fue ofrecido al público lector en general. Pero las detalladas instrucciones especiales, dirigidas específicamente a los adventistas, no pudieron incluirse en esta obra tan popular destinada a una distribución más bien general; y como los libros anteriores sobre el tema se habían agotado, una parte considerable de los mencionados consejos específicos de gran valor para nosotros, ya no podía conseguirse. Para remediar esto, en 1913 se publicó el libro que ahora ofrecemos al público hispano como una adición más a la excelente “Biblioteca del Hogar
Cristiano”. (CM 5.3) La señora de White ya en sus últimos años de vida expreso su tristeza por no haber podido publicar un libro en el que se demuestre la responsabilidad de la madre para con los hijos y la influencia que esta tiene sobre ellos en el libro El Hogar Adventista y la conducción del niño. Únicamente el estudio cuidadoso y puede revelar la tremenda y extensa influencia resultante de la educación debida de los hijos como cumplimiento de la responsabilidad que Dios ha encomendado a los padres (CN 13.3) El mundo está lleno de hombres y mujeres de mentes obtusas, que han llegado a esa condición debido a que desarrollaron sólo un grupo de sus facultades, mientras que las demás se atrofiaron por falta de uso. La educación de la mayoría de los jóvenes es un fracaso. Estudian demasiado mientras descuidan los aspectos prácticos de la vida. Los hombres y las mujeres se convierten en padres sin considerar las responsabilidades y su descendencia humana. Así la raza se está degenerando rápidamente.—Consejos sobre la salud, 176 (1872) Nuestro Padre celestial dirigía personalmente su educación. A menudo iban a visitarlos sus mensajeros, los santos ángeles, que les daban consejos e instrucción. Con frecuencia, cuando caminaban por el jardín “al aire del día”, oían la voz de Dios y gozaban de comunión personal con el Eterno. Los pensamientos que él tenía para con ellos eran “pensamientos de paz, y no de mal”. Sólo deseaba para ellos el mayor bien. (ED98 21.1)
VISIÓN DEL CIELO (E.G.W)
Gómez Cruz, Maritza
El Señor le mostró a una gran mujer llamada Elena G. White a través de una visión sobre otros mundos que ningún otro humano podría imaginar. Pero Dios le dio alas y a un ángel para que le acompañara desde la ciudad que se encontraba a un lugar brillante y glorioso donde la hierba era de un verde vivo y las aves gorjeaban un dulce canto. En aquel lugar los moradores tenían diversas estaturas; ellos son nobles, majestuosos y hermosos, que al verlos manifiestan la imagen de Jesús, y su semblante refulgía de santo júbilo, como expresión de la libertad y dicha, que en aquel lugar disfrutaban. Entonces ella al ver todo ese lugar majestuoso le pregunto a uno de ellos: ¿Por qué eran mucho más bellos que los habitantes de la tierra? Y él le respondió: "Hemos vivido en estricta obediencia a los mandamientos de Dios, y no incurrimos en desobediencia como los habitantes de la tierra." Al ver esto me hace recordar que si nuestros primeros padres no hubiesen pecado nosotros tuviéramos la dicha de disfrutar todas las maravillas que tenía preparado para nosotros. Mientras ella iba caminando iba observando las flores, los diversos tipos de árboles de frutos que se encontraban en el lugar, hasta que a los lejos vio dos árboles, se detuvo a contemplar uno de los árboles que al obsérvalo encontró mucha similitud al árbol de la vida. El fruto de ambos árboles eran hermosos, frondosos y únicos de todo el lugar, de los cuales se les tenían prohíbo comer el fruto del árbol. El ángel y ella seguían caminando y mirando todas las maravillas que Dios había creado. Y el ángel le dijo: "Nadie ha probado aquí la fruta del árbol prohibido, y si de ella comieran, caerían." De pronto el ángel y ella se trasportaron a un mundo que tenía siete lunas; donde ella pudo ver al anciano Enoc y de repente ve que en su brazo derecho el llevaba una esplendente palma, donde en cada una de las hojas se leía escrita la palabra: "Victoria." Y en su cabeza tenía una brillante y hermosa guirnalda blanca con hojas, que en centro se leía la
palabra: "Pureza." Conforme iba contemplando vio que alrededor de la guirnalda había diversos tipos de piedras preciosas con colores diferentes que resplandecían más vivamente que las estrellas y, reflejando su resplandor en las letras, se magnificaban. Después vio que en la parte posterior de la cabeza llevaba un moño que sujetaba la guirnalda, y en él estaba escrita la palabra: "Santidad." Sobre la guirnalda ceñía Enoc una corona más brillante que el sol. Y entonces ella le pregunto: ¿Este es el lugar adonde te transportaron desde la tierra? Y Enoc le respondió: "No es éste. Mi morada es la ciudad, y he venido a visitar este sitio." Y a Elena G. White le sorprendió la respuesta de Enoc porque andaba por allí como si estuviese en casa. Y entonces ella le suplico al ángel acompañante que la dejara permanecer en ese lugar. Porque no podía sufrir el pensamiento de volver al mundo tenebroso de la tierra. Es admirable como la Sra. Elena G. White tuvo la oportunidad de visitar otros mundos y ver las maravillas de Dios, y lamentable lo que surgió con el planeta Tierra. Pero en este escrito Dios nos lo dejo para que nos preparemos todos los días y cuando cristo venga por segunda vez nos pueda mostrar todo lo que tiene preparado para nosotros y vivir esa experiencia que vivió la Sra. Elena G. White. (Primeros Escritos. Págs. 39 y 40)
La historia del Conflicto de los Siglos
Marcelo Dávalos, Saul Jaime y Elena White viajaban a LoveL´s Gove, Ohio para tener una reunión con una pequeña escuela-‐hogar. El 14 de marzo de 1848, su mensaje fue interrumpido por una visión que tardó dos horas, incluyo importantes revelaciones: la rebelión de Lucifer en el cielo, la caída del hombro y el plan de salvación, el ministerio, el sacrificio de Cristo, la iglesia apostólica y la obra de los apóstoles, la gran apostasía, la reforma del siglo XVI el movimiento advenCsta, los mensajes de los tres ángeles, la restauración de la verdad, el segundo advenimiento, el milenio y la erradicación final del pecado.³ En su viaje de regreso a BaLle Creek, Elena sufrió un ataque de parálisis en Jackson, Míchigan. Mientras plaCcaba con la hna. Palmer, de repente no pudo hablar, la lengua se le entumeció…Mientras conCnuaban orando fervientemente por ella, de pronto sinCó una sensación de hormigueo en su brazo y pierna y alabó a Dios porque el poder de Satanás había sido quebrantado y había sido parcialmente sanada. Cuando llegaron a BaLle Creek fue puesta en su cama y gradualmente se fue recuperando como para poder escribir. Ataque de Satanás: En una visión subsecuente ocurrida tres meses después en BaLle Creek el Señor le reveló que el repenCno ataque que había sufrido en casa de la hna. Palmer en Jackson, se debió a que Satanás había tenido la intensión de quitarle la vida para obstruir la obra que tenía que hacer de escribir, pero que ángeles fueron enviados en su rescate. Tema de la visión: 10 años antes, a ella se le había mostrado en visión d e t a l l e s d e e s t e g r a n conflicto entre el bien y el mal, pero ahora, después de esta visión el Señor le indicó que debía escribir lo que había visto. El tema era: EL GRAN CONFLICTO ENTRE CRISTO Y SATANÁS. Aunque debía escribir, por un Cempo no pudo. S p i r i t u a l G i o s , Vo l . 1 Finalmente completó un p e q u e ñ o l i b ro d e 2 1 9 p á g i n a s q u e s e l l a m ó : Spiritual Gi?s, Vol. 1 (en 1858) el vol. II en 1860. Este t e m a d e l a G r a n
Controversia fue expandido a lo largo del Cempo de su vida, por ejemplo, más adelante (entre 1860 y 1864) se escribió el vol. 3 y 4 de Spiritual Gi+s. Serie -‐ Espíritu de Profecía En la década de 1870 y 1880 ella desarrolló el tema de la Gran Controversia y Spiritual Gi+s, dio lugar a una serie de 4 libros que se llamó: “Espíritu de Profecía”. El cuarto tomo de esta serie fue escrito hasta 1884, tres años después de la muerte de su esposo. Serie – EL CONFLICTO DE LOS SIGLOS. Posteriormente, durante los úlCmos años de su vida (1888 -‐1915) ella agregó más detalles, dando paso a la serie que hoy conocemos como la serie: El Conflicto de los Siglos. Visión PerspecCva diferente. Esta visión puso a los advenCstas del SépCmo Día en una posición única, con una perspecCva definida de la operación de la Providencia en la historia de nuestro mundo. Un punto de vista completamente diferente de la mayoría de los historiadores seculares que veían y ven los eventos de la Historia como el resultado de la casualidad o de sucesos naturales. Visión que permiCó a E.G.White trazar un bosquejo de la historia del Gran Conf… Mediante estas visiones Elena G. White fue instruida a trazar un bosquejo de la historia del gran conflicto entre el bien y el mal; entre Cristo y Satanás. La pregunta que surge es: Siendo una mujer con tan poca educación formal escolarizada (3er. Año prim.) y con una salud tan endeble, ¿Cómo lo pudo hacer?
Elena G. White, Spiritual Gi+s, vol. 2, pág. 271. Elena G. White, Spiritual Gi+s, vol. 2, pág. 272.
³ Revista advenCsta, diciembre 2005, Pág.21
Régimen alimenticio de Elena G. de White Mario Campos En 1844, Dios le dio a Elena G. De White una visión sobre las ventajas de tener una dieta vegetariana. Elena siempre fue una gran consumidora de carne, hasta que tuvo esa vision. A los diecisiete años de edad, pesando solo ochenta libras (36kg) Elena acepto dejar de consumir carne, y seguir la dieta que Dios le había revelado en su vision. El esposo de Elena dijo, “Cuando tuvo su primera visión, ella era una inválida demacrada, abandonado por sus amigos y los médicos le dijeron que iba a morir. Su condición nerviosa era tal que no podía escribir, y dependía de alguien en la mesa para ayudarle a a comer y a servile agua. Dado a que Elena era muy débil en question de salud, ella pensaba que la carne era dispensable para su dieta, para poder tener fuerza. Ella se consideraba una gran consumidora de carne. Elena de White recibió su primera gran visión de la reforma de salud el 6 de Junio de 1863, en la casa de Aarón Milliard. En esta visión, por primera vez, se le urgió al pueblo de Dios a abstenerse de alimentos como carne en general y de la carne de cerdo en particular. Elena decidido aceptar la vision que Dios le mando, y se expreso sobre ella como, “ Una gran luz del señor.” Una vez que la vision fue aceptada, Elena dejo de consumir carne es su
totalidad, y también dejo de consumir mantequilla y de las tres comidas. Elena, expresa los resultados de una dieta vegetariana como, “Mis antiguos sentimientos débiles me han dejado, así como también el problema de la pérdida de apetito. Y a la edad de 82 años podía declarar, "tengo una mejor salud hoy en día, a pesar de mi edad, de lo que tenía en mi juventud." Todo esto no vino sin una gran lucha, Elena tuvo que luchar contra la tentación día tras día. Hubieron días que Elena sufrió de hambre pero cuando se sentía débil y ganas de darse por vencida, se ponía sus brazos sobre su estómago, y decía:" No lo haré, no probare un bocado. Comeré comida sencilla, o no comere nada. Cuando hice estos cambios, tuve una batalla especial para luchar “ Elena, tuvo mucha fuerza de voluntad para vencer la tentación y para darnos el ejemplo de seguir el llamado de Dios. En unas ocasiones especiales, Elena, si consumió pequeñas porciones de carne. En 1890 Elena declaro: "Cuando no podía obtener la comida que necesitaba, me he comido a veces un poco de carne", pero incluso en este caso "Estoy cada vez más temerosa sobre consumir carne." Y once años más tarde (1901) Elena admitió abiertamente que "A veces tenia el deseo de comer un poco de carne.” Para ella, la dieta no era una profesión de fe, sino que debía de desarrolarse con criterio.
Elena de White y sus hijos
Hernández Mendoza, Evelyn Azeneth
Elena Harmon de White tuvo cuatro hijos, uno de los cuales murió a los tres meses de haber nacido, y los otros tres se enfrentaron al peligro de contraer dioeria. Sucedió en las primeras semanas de febrero, los dos chicos se quejaron de un fuerte y severo dolor de garganta presentando también fiebre alta; ya era innegable, tenían dioeria. Afortunadamente Elena y Jaime habían leído un reporte en el periódico escrito por el doctor James Jackson en el que se describía la enfermedad y su cura; prontamente se dispusieron a llevar a cabo el tratamiento, éste incluía lo que hoy se conoce como hidroterapia, compresas, descanso, aire libre y un ambiente libre de ansiedad. El doctor informó que ningún paciente había muerto en los casos en que habían seguido las instrucciones firmemente, Elena y Jaime, quienes ya consideraban los grandes remedios de Dios, al agua, la luz y el aire, se evocaron a las instrucciones decididamente y con fervor. Al viajar un sábado y haber cumplido con la predicación del evangelio en el lugar, regresaron prontamente para volver al cuidado de sus hijos. Esa misma noche fueron llamados por una familia amiga puesto que el hijo mayor había enfermado; fielmente les reprodujeron los métodos tomados en cuenta para la sanación posiCva de sus hijos, y al ser tesCgos de la buena recuperación de los chicos, la familia comenzó a realizar el tratamiento en su pequeño hijo. Tiempo después los White debieron realizar un viaje largo, dejando a los chicos al cuidado de un hermano.
En el trabajo los jóvenes debían preparar unas telas para la venta, luego de un descanso tuvieron un paseo por el río y al regresar Henry se recostó sobre las telas húmedas y durmió con las ventanas abiertas, lo cual le causó un resfrío que con el pasar de los días empeoró hasta volverse una neumonía. Los padres de Henry hablaron con él sobre la muerte, cosa que no afectó al muchacho de manera negaCva sino posiCva, le hizo prometer a su madre que lo enterrarían en BaLle Creek junto a su hermano para despertar en la resurrección, “Morir tan feliz es un privilegio” y “El cielo es dulce” fueron contadas como sus úlCmas palabras. Jaime White estaba seguro de que su hijo estaría bien al despertar el día de la resurrección. Ambos padres y los dos hijos que quedaron sinCeron el golpe intensamente, pero estaban seguros que debían conCnuar con la obra que se les había asignado hasta el día en que su amado Salvador volviera. Al pasar los años, Elena y Jaime comenzaron a preocuparse por las conductas de Edson, quien había cambiado en sobremanera portándose de manera impredecible y mostrando poco interés en los asuntos espirituales, Elena se culpó a ella y a su esposo pero no dejó a un lado la responsabilidad del muchacho de hacerse cargo de sí mismo. Ellos comeCeron un error que muchos padres cometen hoy en día, Elena solía defender tanto a Edson que Jaime comenzó a pensar que se estaban formando bandos. Pero entonces, la semilla puesta en él en la infancia dio frutos, a la edad de 44 años regresó a la iglesia con un fervor que se describe como experimentado en la niñez, fue entonces cuando se dedicó a la predicar la palabra mediante escuelas a lo largo del río Mississippi para la gente de color. A diferencia de él, su hermano Willie, se convirCó en un predicador y publicista de renombre entre la población advenCsta, formó junto con su padre la Pacific Press AssociaCon lo cual reportó innumerables beneficios. Fue una ayuda para su madre y para las publicaciones en Europa.
ELENA G. DE WHITE, LA MUERTE DE SUS HIJOS
Cindy Tass
Una de las preocupaciones más grandes que tenía Elena y el pastor Jaime White era el tener dejar a sus hijos a cuidado de otras personas, ya que ellos se ocupaban en sus responsabilidades y en la obra de sus publicaciones, por lo cual se la pasaban viajando de un lugar a otro y no tenían el Cempo de cuidar o convivir con sus hijos. William White, en ese entonces el más pequeño de su hermanos, fue el que más convivio con sus padres, ya que casi nunca se separaron de él. Edson White, lo pudieron cuidar muy poco sin embargo Henry White el mayor de los hermanos, fue el más ausente, pues llevó aproximadamente 5 años lejos de sus padres.
Muerte de Jonh Herbert White El día 20 de sepCembre de 1860, llegó el cuarto hijo al hogar de la familia White, Jonh Herbert. Pero desgraciadamente esta alegría y la sonrisa en sus rostros no duró por mucho Cempo, ya que al paso de tres meses la familia White sufre la primera pérdida de sus hijos, siendo así la muerte del pequeño Herbert, quién falleció el 14 de diciembre del mismo año. Los corazones de los padres y sus hermanos fueron desgarrados, ya que solo vivió 3 meses y no se senQan preparados para una perdida tan repenCna. Muerte de Henry Nichols White (1847-‐1863) Tres años después Elena y Jaime White se encontraban en Brookfield, New York. Estaban de visita con la familia Abbey y estaban considerando tomar dos o tres meses más para ir a Maine. Ellos esperaban ansiosamente las noCcias desde Topsham, de donde se encontraban sus hijos, estaban al pendiente de la correspondencia, las cuales informaban que sus hijos se encontraban bien y que todo estaba en orden. Mientras tanto, en Topsham, los hermanos Henry y Edson White se quedaron al cuidado del Hermano Howland. Un día se encontraban muy apresurados y ocupados trabajando en un
edificio de una Cenda que era alquilada a una cuadra de la casa de la familia Howland, en donde se encontraban poniendo unos diagramas sobre telas con el fin de tenerlos listos para la venta. Regresaban de una caminata junto al río, Henry extendió y acomodó las telas que se uClizarían para poner detrás de los diagramas y sin él pensarlo, se quedó dormido sobre las ellas, éstas se encontraban un p o c o h ú m e d a s . D e s a f o r t u n a d a m e n t e estaba corriendo aire frio que entraba por una v e n t a n a q u e q u e d ó abierta. Este pequeño descuido le trajo a Henry un severo resfriado. Cuando los hermanos White llegaron a Topsham u n v i e r n e s 2 7 d e noviembre, y ahí estaban e l l o s , s u s t r e s h i j o s esperando la llegada de sus padres en la estación. Sus padres los vieron a to d o s a p a re nte m e nte sanos, excepto a Henry, quien tenía el refriado. Cuatro días más tarde, el refriado de Henry empeoró y se convirCó en Neumonía, llamaron a un médico para que lo atendiera y Henry fue tratado de una manera convencional, lo cual se le indujo drogas venenosas, ya que el medico ignoraba el uso de la hidroterapia. Los Hermanos White y los Howlands oraban fervientemente para que Henry fuera curado lo más pronto posible, pero él decayó, su enfermedad fue empeorando cada vez más y sus padres hicieron el esfuerzo de hablar con él sobre la muerte. Henry tuvo la oportunidad de prepararse,
meditar su vida y confesarse a Dios, sus padres y sus hermanos y así poder morir en paz. Le pidió a su madre que lo enterraran junto con hermano Jonh Herbert para que pudieran levantarse juntos el día de la resurrección. Al pasó de los días Henry encontraba más debilitado y ya no había nada más por hacer más que esperar la hora de su parCda. Pero él a pesar de las circunstancias se encontraba esperanzado y con seguridad, reconfortando a sus padres y dándoles consuelo. En los úlCmos minutos le dio un beso a sus padres, hermanos y amigos y sus úlCmas palabras fueron “El cielo es dulce”.
Primera Visión de Elena G. White Arlie J. Solórzano Coll
La primera visión fue un acontecimiento muy importante para las personas de aquellos Cempos entre 1840 y el actual. La primera visión que la hna Elena G. de White obtuvo fue por la fecha de Diciembre de 1844, mientras ella se encontraba de visita en casa de la Sra. De Haines en Portland. Estaban reunidas ella y cuatro hermanas más, realizando el culto familiar, mientras se encontraban orando, el poder del espíritu santo se derramo sobre ella y sinCó como una luz la rodeaba y se elevaba más y más por encima de la Cerra. Ella trato de buscar al pueblo advenCsta pero no lo encontró. Fue que una voz le dijo que mirara un poco mas arriba y ella miró que ahí estaba el pueblo; caminando en un sendero angosto en dirección a una ciudad en la que en el otro extremo se veía. En el comienzo del sendero había una luz que brillaba y guiaba los pasos del pueblo para que no tropezaran. Por delante de ellos se encontraba Jesús, el los guiaba hacia la ciudad santa, pero habían personas que comenzaron a cansarse y a decir que pensaron que a ciudad estaba cerca, Jesús levantando su brazo derecho los alentaba en seguir avanzando. Otras personas negaron la luz que brillaba tras ellos diciendo que Dios no era el que los había ayudado hasta ahí, entonces para ellos se exCnguió la luz que estaba detrás; perdiendo la vista a Jesús sus pies tropezaron y cayeron fuero del sendero, al sombrío y perdido mundo. En visión se le revelo que escucharon la voz de Dios que era semejante al ruido de muchas aguas; que les anunciaba el dia y la hora de la venida de Dios. Pero a los malvados se les figuro que era como un estruendo de truenos y terremoto. Cumplido el Cempo Dios; derramó sobre ellos el Espíritu Santo y sus semblantes se iluminaron grandemente. La frente de las personas del pueblo se encontraban selladas, en sus frentes llevaban la palabra “Dios, Nueva Jerusalén” y también un estrella con el nuevo nombre de Jesús. De
pronto miraron hacia al oriente , donde observaron una pequeña nubecilla negra del tamaño de la mitas de la palma de un hombre, comprendieron que era la señal del hijo del hombre. Conforme se acercaba la nube se volvia mas brillante y refulgente en una nube blanca con el fondo semejante al fuego. En ella estaba sentado el hijo del hombre. La visión sigue diciendo que entraron a la santa ciudad donde Jesús sacaba coronas y las ceñía el mismo en cada cabeza de sus hijos, observo el árbol de vida y la santa ciudad, se sentó debajo del árbol a contemplar la gloria de aquel paraje, algunos de sus amigos les preguntaron que había pasado mientras ellos dormían, pero no pudo explicarles porque les resultaba insignificante frente a lo incomparbale que era el cielo. Todos ellos exclamaron ¡Aleluya! Muy poco nos ha costado el cielo”. Mientras tocaban sus arpas y sus ecos resonaban en la bóvedas del cielo. Cuando la hna Elena al salir en visión comenta que una melancólica sombra se extendía de cuanto miraba, lloró al encontrarse allí y experimento nostalgia. Relato aquella visión a los fieles de Portland quienes fielmente creyeron que aquella visión provenía de Dios. Aquella visión fue de aliento y consolación a su pueblo por la gran desilusión de aquel octubre del gran chasco.
Elena de White y sus últimos momentos Sánchez Lozano, Pedro Yusef
A ella le gustaba recibir visitas y más si eran obreros prominentes con quien se conocía por largo tiempo. Cuando
el pastor Campbell uno de sus visitantes le preguntó si ella tenía alguna luz en cuanto a si viviría hasta que Jesús regresase, ella replicó que no tenía ninguna luz sobre el asunto. Cuando él le expresó su preocupación en cuanto al bienestar de la causa en su ausencia, ella replicó con calma: “El Señor es perfectamente capaz de cuidar su causa”. En varias ocasiones, al decir que no esperaba vivir mucho, ella abría el camino para que hermanos que la visitaban planteasen preguntas similares. Al responder, ella iba hasta el armario de libros en su escritorio, abría las puertas donde podían verse sus libros y manuscritos, y declaraba: “Aquí están mis escritos; cuando yo falte, ellos testificarán por mí” (Carta de WCW, 9 de julio, 1922 [MR, p. 93]). {MV 569.1} El sábado 13 de febrero, Elena de White se fracturo la cadera al medio día, al entrar a su estudio, tropezó y cayo, lo cual le causo una fractura intracapsular del fémur izquierdo. Después del accidente ella sufría del dolor pero ella decía que era un dolor soportable, este accidente la forzó a estar en cama por un tiempo pero después le compraron una silla de ruedas. Su ingesta de alimentos fue disminuyendo con el tiempo, pero aun en sus malas condiciones ella nunca perdió su sentido del humor, en una ocasión Sara su secretaria y amiga por más de treinta años le estaba instando a que comiera ella respondió: “Bueno, Sara— dijo ella—, no quisiera morir antes de tiempo por comer en exceso” {MV 572.7}. En la mañana del 3 de marzo, a eso de las 10:00, Elena de White, tras despertar, llamó a su lado a su enfermera, la Sra. Hungerford, y comenzó a decirle qué había ocurrido su última visión. En la cual estuvo seleccionando y poniendo aparte libros que no son de beneficio alguno para los jóvenes. Ella del explico a su
hijo como que hay libros de vital importancia para los jóvenes y son descuidados porque no son tan interesantes para ellos. Después de esta visión ella expreso no tener más testimonios para el pueblo de Dios. La fuerza de Elena de White estaba decayendo muy rápido ella no estaba comiendo por lo cual su cuerpo se estaba consumiendo muy rápido. En la mañana del jueves 8 de julio ella expreso “No sufro mucho, gracias al Señor”. Luego agrego, dirigiéndose a Sara: “Ahora no pasará mucho tiempo”. El Jueves 15 de Julio W.C. White su hijo informo que se discontinuaron los tratamientos. El viernes 16 de julio, rodeada de familiares y amigos ella tomo sus últimos respiros su hijo describió la experiencia y escribió; Era como la extinción de una vela, tan callada. {MV 574.6} Elena de White había pedido que se la enterrase al lado de su esposo en el Cementerio de Oak Hill, en Battle Creek.