LIDERAZGO

Ediciรณn especial. Nro. 1 - 2015. Director: Yvรกn Balabarca Cรกrdenas

LIDERAZGO

Familia y fe es una revista digital diseñada ser un vehículo de esperanza.

Joseph, Johnton Landero Domínguez, José Mancilla Núñez, Marvin Rubén

En esta ocasión queremos hacerte llegar los siguientes artículos sobre LIDERAZGO, a través de una edición especial, y gracias a los siguientes jóvenes mexicanos, de la Universidad de Montemorelos, quienes han escrito para ti.

Pronto serán pastores, y terminarán la predicación del evangelio.

Gratitud a todos y cada uno de ellos:

Morin Pérez, Ángel Oriz Sánchez; Daniel Ortega Verdugo, Andrés Perez Aquino, José Miguel Pérez Sotelo, Francisco Javier Pineda Jonguitud, Irving Ramos López, Daniel Rodríguez, Jairo Ruiz López, Joani Ruiz Montejo, Timoteo Santos Mendoza, Javier Joel Sanvi, Kossibi Silvestre Villa, Humberto

Cipriano Urbano, Uridan De la Cruz Frías, Juan Carlos Estefes Soto, Gerardo Gamas Vasquez, Ricardo Grajales Suarez, Heber Gutierrez López, Nehemías Hernández Gomez, Manuel

Suarez Chable, Miguel Ángel Vásquez Ribon, Marco Antonio Villegas García, Omar Zárate Serrano, Elair Zamora Martinez, Julio Cesar

DIOS BUSCA LIDERES “CEROS” El cero es eso, un cero, es decir “nada”.

El cero es definido como la representación gráfica de la nada, sin valor en si mismo y con la capacidad solo de representarse a si mismo, porque la nada es la nada.

príncipe de un imperio, pero un día, por su gran entusiasmo y su poco juicio, tuvo que huir porque comeBó un error. Quiso ayudar a Dios a cumplir sus propósitos, teniendo como resultado verse solo en el desierto. Luego de cuarenta años de preparación en la High School del Señor, con la oveja de catedráBca y el clima de instructor, aprendió a ser manso y humilde (caracterísBcas de un cero).

Ahora estaba listo para ayudar al Señor a desarrollar sus maravillas (las del Señor).

Otro amigo fue Sansón.

Un cero no es uno, pero tampoco es menos uno, es cero.

Este muchacho se creía lo máximo, pero desarrolló una adicción que luego de algunos días lo terminó de hundir, se hizo adicto a las mujeres y luego al sexo. Aparentemente Sansón se había echado a perder por su suficiencia propia.

Aunque era consiente que su fuerza era de Dios, no fue capaz de luchar contra sus propios hábitos pecaminosos.

Pero ¿Qué quiere decir esto?, pues que un cero puede ser algo muy valioso dependiendo de los números que tenga adelante.

Con el Bempo, luego de ser traicionado por Dalila, terminó ciego y moliendo granos en Filistea. Allí aprendió a ser un cero.

En otras palabras un cero no es alguien que no es nada, sino

Un LIDER “0” es quien está dispuesto a negar su propio ser para converBrse en un cero, pero no un cero a la izquierda sino un cero listo para ser usado por otro numeral puesto delante.

El cero es algo y Bene senBdo cuando Bene algo valioso adelante. Mientras Bene algún numeral “grande” por delante, el cero ayuda al numeral a crecer y se ve ayudado por el numeral por que recién Bene senBdo. Un cero es entonces algo valioso cuando está acompañado.

En la Biblia tenemos algunos ejemplos de personas que decidieron ser ceros: Moisés llegó a ser educado en la corte de Egipto y fue el

alguien que Bene algo o todo para ser lo máximo, pero no pierde de vista que es lo que es gracias a Dios, y al Él se debe.

Sansón tuvo que tocar fondo para ser un cero.

Tenemos el caso también de Gedeón, quien luego de haber parBcipado en el ejército, se reBró a su chacra y se convirBó en uno más. El tenía todo para ser un líder, y pudo haberlo hecho cuando estaba en el ejército, pero no sabemos le porqué, se anuló y se convirBó en un chacarero temeroso, a tal punto que, como sus compatriotas, dudaba de la ayuda de Dios. Literalmente se volvió uno más, un mediocre.

Pero Dios ve lo que podemos llegar a ser, no lo que somos, y lo visitó en su mediocridad para invitarlo a ser un líder, un gran líder de Israel. Quien sabe que unos años antes, Gedeón no hubiese podido ser un gran líder por su orgullo y suficiencia propia, notoria en el incidente de ir despidiendo gente convocaba para la batalla, sino que tuvo que ser preparado en la soledad de la chacra para ser un líder humilde y totalmente dependiente (hasta temeroso) de Dios para llegar a ser osado, valiente, hábil y corajudo. Todo porque puso sus habilidades naturales y aprendidas en las manos de Dios.

David fue un muchacho que fue elegido por Dios por ser ya un cero. Era totalmente dependiente de Dios. En el episodio con Goliat, David puso en evidencia su total dependencia del

Todopoderoso al aceptar el desa^o del gigante. “Será como un león o como un oso”, es decir, “en el nombre del Señor, a lo grande lo veo chico y a lo chico ni lo veo”.

Pero cuando con el correr del Bempo el Berno Davisito se convirBó en el rey David, pues el orgullo y la arrogancia parieron suficiencia propia, que lo llevó hacia su caída con las muchas mujeres que tuvo.

Con todo Dios siguió usando a David.

Un líder sensacional fue Salomón y es un gran consuelo por que si Dios aceptó su arrepenBmiento después de todo lo que hizo, pues también puede aceptar el tuyo y el mío.

“Después de haber sido uno de los mayores reyes que hayan empuñado un cetro, Salomón se transformó en licencioso, instrumento y esclavo de otros. Su carácter, una vez noble y viril, se trocó en enervado y afeminado. Su fe en el Dios viviente quedó suplantada por dudas ateas. La incredulidad destruía su felicidad, debilitaba sus principios y degradaba su vida. La jusBcia y magnanimidad de la primera parte de su reinado se transformaron en despoBsmo y Branía. ¡Pobre y 42 frágil naturaleza humana! Poco puede hacer Dios en favor de los hombres que pierden el senBdo de cuánto dependen de él.” (Patriarcas y profetas, págs. 42, 43).

Aun así, Salomón fue un líder poderoso antes y después de su caída. Su sabiduría comenzó cuando reconoció su incompetencia, ¡pero que estamos diciendo! ¡Era Salomón, el

hijo de David, un estudiante poderoso, príncipe de Israel y hábil políBco! Pero a pesar de sus dones y habilidades, reconocer que era necio y joven le granjearon la bondad y bendición del Señor.

El decidió ser un cero.

Elías el Bsbita fue un poderoso hombre de Dios. Era un profeta, un hombre de Fe y Obras. Estaba tan confiado del Señor, que un día oró y el cielo se cerró tres años. Ese era Elías. Un hombre que comía de lo que los cuervos le traían en su pico y quien fue capaz de desafiar a cuatrocientos hombre él solo.

Pero todo hombre que es un cero, puede llegar a creer que es uno. Entonces viene la caída. Cuando pensó que era alguien importante y su ego se sinBó amenazado por Jezabel, la reina pagana de Israel, huyó.

Tuvo el Señor que buscarlo para ubicarlo, y con dulce ternura y paciencia lo llevó a su realidad. El era parte de una maquinaria sostenida por el Señor, una poderosa maquinaria que sacaba su fortaleza de las rodillas dobladas ante Jehová.

Daniel se mantuvo firme ante el Rey de Babilonia, ¡ante el rey del imperio más poderoso del mundo! ¡Qué virilidad! El era lo que era, por que comprendió que dependía totalmente de Jehová de los Ejércitos, del Rey de los cielos.

Nehemías hizo gala de gran liderazgo y habilidad políBca. De ser un empleado domésBco (copero) pasó a ser el líder religioso y políBco de la Nación Hebrea. Con una habilidad sanBficada por el Señor, fue capaz de solicitar permiso y materiales al rey de Persia para regresar a su terruño y reconstruir la ciudad de Jerusalén. ¡Qué valor y fortaleza! Plantarse firme ante el rey del Imperio de turno no para solicitar dinero ni un servicio especial, sino para reconstruir una ciudad. ¡que carácter para mantenerse firme frente a la envidia y los ataques de sus enemigos vecinos.

Un líder cero es capaz de ser nada ante sus ojos. Pero esto no quiere decir que es dejado, sin preparación y necio, sino que Bene muchas habilidades naturales y culBvadas pero reconoce que lo que es no viene de él mismo sino del Señor. Un líder cero es alguien capaz de considerarse nada, pero capaz también de ser, junto con su Señor, TODO.

Yván Balabarca Cárdenas

LIDERAZGO DEL PASTOR EN SU FAMILIA El liderazgo en la familia pastoral es una parte fundamental y primordial, un pastor primero debe ser líder y sacerdote de su propio hogar con las personas que le rodean y que son su núcleo. El ejemplo de la familia pastoral en liderazgo y amor como un líder siervo por sus seguidores o personas a cargo es de suma importancia y la Biblia lo explica con el siguiente texto: “Maridos, amada a vuestras mujeres, así como Cristo amo a la iglesia, y se entregó a si mismo por ella” (Efesios 5:25). ¿Cuál es el ideal de Dios para los Líderes Pastores? ¿Qué espera Dios, y que tienen derecho a esperar las esposas de sus compañeros? Nada menos que el hecho de que sean imitadores del amor de Jesús.

Poco se habla acerca del tema pero la sierva del Señor, Elena G. de White, habla claro referente a este aspecto y dice: “Debe existir en la familia del predicador una unidad que predique un sermón eficaz sobre la piedad práctica. Al hacer fielmente su deber en el hogar, en cuanto a refrenar, corregir, aconsejar, dirigir y guiar, el predicador y su esposa se vuelven más idóneos para trabajar en la iglesia, y multiplican los agentes con que realizar la obra de Dios fuera del hogar. Los miembros de su familia vienen a ser miembros de la familia del cielo, y son un poder para bien y ejercen una influencia abarcante”. (Obreros Evangélicos, pág. 216).

Otra parte primordial en el liderazgo del Pastor es en la

Irvin Pineda Jonguitud Estudiante de Teología Universidad de Montemorelos

educación de los hijos y la biblia es clara cuando dice: "Instruye al niño en su camino y aun cuando fuere viejo no se apartará de él" (Proverbios 22:6). Los hijos y su esposa son propiedad de Dios, son de mucho valor y deben ser de gran estima, y así formar sus caracteres constantemente para ser ejemplos para los fieles, y para conducirlos a la patria celestial.

Dos citas muy importantes para reflexionar son: “El que está ocupado en la obra del Ministerio Evangélico debe ser fiel en su vida familiar. Es tan esencial que como padre utilice los talentos que Dios le ha dado a fin de hacer del hogar un símbolo de la familia celestial, como que en el Ministerio utilice los poderes dados por Dios para ganar almas para la iglesia. Como sacerdote en el hogar, y como embajador de Cristo en la iglesia, debe ejemplificar en su vida el carácter de Cristo Debe ser fiel en velar por las almas como quien tiene que dar cuenta”. (Reflejemos a Jesús cap. 14 de junio) “En su servicio no debe verse descuido o una tarea mal hecha.

Dios no tolerará los pecados de los hombres que no tienen un claro sentido de las sagradas responsabilidades que significa aceptar un cargo como Pastor de una iglesia. El que no resulta un fiel y sabio Pastor en el hogar, seguramente no podrá ser un fiel Pastor del rebaño de Dios en la iglesia”.- Manuscrito 42, de

“El éxito del ministro depende grandemente de su comportamiento fuera del púlpito. Cuando termina de predicar y deja el púlpito, su obra no ha terminado; sólo ha comenzado. Es entonces cuando él debe practicar lo que ha predicado. ” Fragmento de: Ellen G. White. “El Ministerio Pastoral” p, 159 La ética es el código de conducta de un pastor, es un desaMío serio para mejorar la forma de vivir, de su comportamiento en el hogar y con la sociedad.

Este estilo de vida tendrá que ser modiMicado en forma estrictamente, porque a un pastor se le demanda “mayor responsabilidad”.

ÉTICA Y LIDERAZGO PASTORAL Humberto Silvestre Villa

Un pastor es responsable ante la comunidad que lo rodea. Esto es un asunto bastante serio porque tendrá que dar cuentas de sus acciones primeramente ante Dios, tiene mas responsabilidad que cualquier otra persona. Por eso debe ser ejemplo, ante la sociedad, ya que su comportamiento, sus palabras, enseñanzas y su estilo de vida ha de ser un reMlejo total de Cristo, tendrá que estar en sintonía con el modelo de Jesús y conocer los secretos de su liderazgo para incorporarlos a su ministerio.

Practicará cada día lo que predica, porque un ministro, que ha sido llamado a predicar el evangelio, ha de mostrar total integridad, un compromiso de entrega y dedicación incondicional a Dios. Debe ser sensible a la palabra inspirada por Dios y caminar diariamente con él. Si cada día se esfuerza y vive da acuerdo a la perspectiva bíblica, tendrá éxito en sus planes, así sus metas serán alcanzadas. Satanás siempre estará haciendo grandes esfuerzos para debilitar la relación que existe entre los pastores y Dios. ”Sed sobrios y velad, porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente anda alrededor buscando a quien devorar”. 1 Pedro 5:8. Si obedece esta enseñanza, estará alerta a las trampas y diMicultades que el enemigo le ponga día con día.

El pastor debe de entender perfectamente el gran conMlicto que hay entre Dios y Satanás, así comprenderá la responsabilidad que tiene como ministro, tendrá la plena conMianza en que Dios es vencedor.

Así como triunfo sobre el mal, de tal manera socorrerá a sus hijos a que se esfuerzan por llevar una vida de dedicación y salir victoriosos. Él nos observará e imprimirá las insignias de nobleza que solo el imprime en el carácter de los pastores que se dejan guiar por él, que escuchan, obedecen y hacen lo que el ha mandado. Es importante que nosotros nos aferremos a las promesas de nuestro Señor Jesús, teniendo todos los días una comunión personal con

él, así como lo hizo Jesús nuestro modelo perfecto, cuando estuvo en esta tierra. La lectura de la Biblia será siempre el factor determinante en la estructura mental, espiritual y emocional del pastor.

Cuando el pastor se encuentre viviendo en completa armonía con lo que predica será como una Mlor, que esparce el aroma, a todos los que lo rodean, entonces los llenara de él aroma y del maravilloso amor que solo de Cristo puede recibir.

PADRES FORMANDO LÍDERES Daniel Alberto Oriz Sánchez

reflejado en la escuela e iglesia, pero para esto “desde la niñez, ha de moderarse y formarse el carácter del niño de acuerdo con el plan divino. Han de instilarse las virtudes en su mente abierta”, y más aún, hacer caso del consejo que el apóstol Pablo nos da: “Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo.” Creciendo de acuerdo a estos mandatos nuestra vida tendrá éxito en la obediencia y servicio que a Dios le agrada, sobre todo cuando “los niños, aun en tierna edad, podrían ayudar haciendo pequeños mandados de misericordia y amor en beneficio de otras personas” creyendo que ellos tienen una gran obra por hacer en el Plan Divino, el máximo ideal es que “los niños han de ser preparados para llegar a ser misioneros; debe ayudárseles a comprender distintivamente lo que tienen que hacer para ser salvos” y no solo ellos, sino ver de qué forma pueden llevar a otros a la Salvación en Cristo y “ellos mismos lleguen a ser obreros celosos y dediquen sus talentos a hacer saber a otros lo que se les ha hecho saber a ellos.” Administrando cada capacidad de liderazgo para la misión de la Iglesia y sirviendo de tal forma que, al igual que el joven Timoteo puedan decir de nosotros: “Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza.”

“Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él” es un texto poderoso en cuanto a la educación correcta que deberá dirigir, educar y desarrollar a los niños en su crecimiento en el hogar que “es donde ha de empezar la educación del niño y allí es donde deben echarse los cimientos de una vida de servicio” y, al estar en esta escuela “nuestros niños han de prepararse para asistir a la escuela de la iglesia”. De esta forma “se puede enseñar a los niños a prestar servicio” de tal manera que, al igual que Cristo se pueda decir de ese niño que “crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él.”

Santa Biblia. Nueva Reina Valera 1960. Miami, EE.UU. Sociedad Bíblica Emanuel. Proverbios 22:6 Elena G. de White, Conducción del Niño. Medellín, Colombia.

Asociación Publicadora Interamericana. 1957.

Elena G. de White, Consejos para los Maestros. Medellín, Colombia.

Asociación Publicadora Interamericana. 1957.

Elena G. de White, El Hogar Cris8ano. Medellín, Colombia. Asociación Publicadora Interamericana. 1957 Santa Biblia. Nueva Reina Valera 1960. Miami, EE.UU. Sociedad Bíblica Emanuel. Lucas 2:40 Elena G. de White, Conducción del Niño. Medellín, Colombia.

Asociación Publicadora Interamericana. 1957.

Ibíd. Cap. 36 “Ventajas de los Primeros Años.”

Santa Biblia. Nueva Reina Valera 1960. Miami, EE.UU. Sociedad Bíblica Emanuel. Efesios 6:1 Elena G. de White, El Hogar Cris8ano. Medellín, Colombia. Asociación Publicadora Interamericana. 1957

“Desde la infancia, debería enseñarse a los niños que realicen las cosas que se adecúan a su edad y capacidad. Los padres deberían animar a sus hijos a ser más independientes.” Tomando en cuenta la ayuda de los niños al darles responsabilidades en el hogar, van creciendo con ese pequeño liderazgo que más tarde se verá

Elena G. de White, Consejo para los Maestros. Medellín, Colombia.

Asociación Publicadora Interamericana. 1957 Elena G. de White, Consejos sobre la obra de la Escuela Sabá8ca.

Medellín, Colombia. Asociación Publicadora Interamericana. 1957 Santa Biblia. Nueva Reina Valera 1960. Miami, EE.UU. Sociedad Bíblica Emanuel. 1 Timoteo 4:12

Mucho se ha hablado sobre este cuestionamiento, desempeñen como líderes, ahora bien la pregunta natural que surge es: ¿Todos son llamados a ser líderes o solo unos sin embargo no se ha llegado a una conclusión absoluta ante dicho tópico. Pero ¿Qué dicen la Biblia y el Espíritu cuantos? de Profecía al respecto?

La respuesta a esta cuestión es un Sí, todos son llamados a ser líderes. Jesús en cierta ocasión dijo “Ustedes En la Biblia encontramos versículos como: son la Luz del mundo…” (Mateo 5:14) esto refiriéndose a todos los que habían aceptado su mensaje. Sin embargo a “Antes que te formase en el vientre te conocí, y pesar de esta gran verdad no todos son líderes ¿Por qué? antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones”. (Jeremías 1:5) “Porque será grande delante de Dios. No beberá vino ni sidra, y será lleno del Espíritu Santo, aun desde el vientre de su madre. Y hará que muchos de los hijos de Israel se conviertan al Señor Dios de ellos”. (Lucas 1:15-1) Los anteriores versículos evocan la idea que el liderazgo es de forma natural, que un líder de cierta forma nace ya con las cualidades que le darán el éxito.

Ellen G. de White menciona que el liderazgo es un llamado de Dios: “Los que aceptan puestos de responsabilidad en la obra de Dios deberían recordar siempre que al llamarlos a esta obra el Señor lo ha llamado también a andar con prudencia delante de él y delante de los hombres”. (Liderazgo cristiano, pag. 31) Nótese que Ellen G. de White de manera implícita menciona que el liderazgo es un llamado de Dios, pues dice: “el Señor lo ha llamado también a andar con prudencia delante de él y delante de los hombres.” El Señor se ha tomado la tarea de llamar a personas comunes como nosotros para que se

Ellen G. White menciona en “El camino a Cristo”, que un líder debe escuchar y responder el llamado divino a ganar a otras personas para el reino de Dios.

Al decir que un líder debe de responder al llamado deja abierta la posibilidad de rechazar el llamado, entonces he ahí la respuesta del porque no todos son líderes a pesar de que nacen para esto, simplemente porque no quieren.

Cabe aclarar que el hecho de que nazcamos y seamos llamados para ser líderes en diferentes áreas, no implica que automáticamente poseamos las cualidades de un líder, sino que las tenemos que desarrollar con base en una estrecha comunión con Dios.

Blackaby y King mencionan: “…acepte por fe que Dios lo capacitará y lo preparará para hacer todo lo que él pida, aun en el caso de que el mandato este fuera del ámbito de intereses anteriores, talentos reconocidos o experiencia previa”. (Blackaby y King, pag. 72-77) Entonces llegamos a la conclusión que nacemos para ser líderes, pero necesitamos de igual forma hacernos LÍDERES, desarrollando a lo largo de nuestra vida las cualidades de uno.

EL LIDER: ¿NACE O SE HACE? Juan Carlos De la Cruz Frías

El liderazgo y su influencia En el trato con sus semejantes, los líderes deberían de tener en cuenta que el cielo contempla cada una de sus acciones y palabras que de ellos es emiBda. La influencia que ellos tengan es la demanda de la cual se le exigirá, por cuanto se les ha puesto como mayordomos en la causa del señor.

Deben ser como Cristo en su trato con sus hermanos, siendo íntegros, Bernos y compasivos. (O. E. Pag. 511) El poder de las palabras Cada vez que el líder haga caso a las sagradas escrituras, brotarán de él palabras de simpaoa, que tendrán la aprobación del cielo y el sello no de hombres finitos sino del Eterno. Sus palabras serán para las personas que le rodean una atmósfera de fragancia, que moBvará a la iglesia de Dios a trabajar en su obra y a apoyar las ideas del líder guiado por Dios.

PVGM 318-­‐321. 232 Si mediante nuestro ejemplo ayudamos a otros a desarrollar buenos principios, les damos poder para el bien. A su vez ellos ejercen la misma influencia benéfica sobre otras personas y en esa forma cientos y miles son afectados por nuestra influencia inconsciente. Cada acto de nuestra vida afecta a otros para bien o mal. Nuestra influencia Bende a elevar o a degradar; es senBda por otros, hace que los demás obren impulsados por ella y en un grado mayor o menor es reproducida por otros. Por lo cual, deberemos pedir a cada momento la dirección divina. (TesBmonies for the Church, tomo 2, pág. 133)

Todo líder que realmente ha sido converBdo y transformado por el espíritu de Dios, permiBrá salir de su boca solamente palabras de vida eterna, que consuelen a los desvalidos, que alienten a los necesitados y que sean una bendición para todas aquellas personas que le rodean.

Será consciente de que debe de administrar de una forma correcta el talento del habla que Dios le ha dado y estar conBnuamente perseverando con el fin de honrar a Dios con el don que se le ha otorgado. (Advent Review and Sabbath Herald, 28 de abril de 1903.)

El poder de los actos Todo hombre que es un real seguidor de Cristo, tendrá en cuenta que él no vive más para sí, ahora ya le es imposible. Y que cuanto más amplia sea su esfera, mayor será el bien que puede hacer.

EL LIDER Y SU TRATO CON SUS SEMEJAN TES

El carácter es poder. El tesBmonio silencioso de una vida sincera, abnegada y piadosa, Bene una influencia casi irresisBble. Al revelar en nuestra propia vida el carácter de Cristo, cooperamos con él en la obra de salvar almas.

Solamente revelando en nuestra vida su carácter, podemos cooperar con él. Y cuanto más amplia es la esfera de nuestra influencia, mayor bien podemos hacer. Cuando los que profesan servir a Dios sigan el ejemplo de Cristo pracBcando los principios de la ley en su vida diaria; cuando cada acto dé tesBmonio de que aman a Dios más que todas las cosas y a su prójimo como a sí mismos, entonces la iglesia tendrá poder para conmover al mundo.-­‐

Marco Antonio Vásqeuz Ribón

La educación hoy en día es una de las bases más fuerte de nuestra sociedad, de ella depende mucho un futuro mejor o peor que el actual, pero para saber cómo mejorar primero debemos saber de manera clara que es la educación, según

LIDERAZGO EN LA EDUCACIÓN Marvin Rubén Mancilla Núñez

Elena de White, una autora reconocida crisBana, dice que: “La verdadera educación significa más que la prosecución de un determinado curso de estudio. Significa más que una preparación para la vida actual. Abarca todo el ser, y todo el período de la existencia accesible al hombre. Es el desarrollo armonioso de las facultades ^sicas, mentales y espirituales. Prepara al estudiante para el gozo de servir en este mundo, y para un gozo superior proporcionado por un servicio más amplio en el mundo venidero”. Ahora entendiendo pues lo abarcante de la educación hace falta preguntarnos: ¿será que la educación que recibimos es la adecuada para mejorar nuestra sociedad?, ¿será que estamos mejorando nuestra educación? Elena White nos responde “Según se hayan educado los jóvenes y en la medida en que su carácter fuese amoldado en la infancia por hábitos virtuosos, de dominio propio y temperancia, será su influencia sobre la sociedad. Si se los deja sin instrucción ni control, y como resultado llegan a ser tercos, intemperantes en sus apeBtos y pasiones, así será su influencia futura en lo que se refiere a amoldar la sociedad.

Las compañías que frecuentan los jóvenes ahora, los hábitos que adquieran y los principios que adopten indican cuál será el estado de la sociedad durante los años venideros.”

Por eso es que es tan importante tomar enserio que educación estamos recibiendo o que educación estamos brindando ya que de ella depende nuestro futuro y el de los demás, pero ahora habiendo tantas fuentes que nos ofrecen lo que llamamos la educación, ¿en dónde podemos encontrar la verdadera educación?, ¿Qué libro o que norma debe tomar el primer lugar en ella? Elena White nos

dice: “Las Sagradas Escrituras son la norma perfecta de la verdad y, como tales, se les debería dar el primer lugar en la educación. Para obtener una educación digna de tal nombre, debemos recibir un conocimiento de Dios, el Creador, y

de Cristo, el Redentor, según están revelados en la Sagrada Palabra”.

Ahora según Elena G. de White hay tres factores que influyen en la educación de cualquier persona (o por lo menos deberían influir), ellas son: el hogar, la escuela y la Iglesia, es decir la educación debe ser una educación integral, no llevada a cabo desde un solo punto o factor, pero sobre todo en la verdadera educación se nos invita a prestar atención al más grande profesor y prepararnos en la verdadera sabiduría, la que nos servirá en la vida venidera: “La verdadera educación es una ciencia grandiosa, porque se funda en el temor del Señor, que es el principio de la sabiduría. Cristo es el más grande Maestro que este mundo haya conocido; y no es del agrado del Señor Jesús que los súbditos de su reino, por los cuales murió, sean educados de manera tal que sean inducidos a colocar la sabiduría de los hombres en primera línea y releguen la sabiduría de Dios, según se revela en su Santa Palabra, a la úlBma fila. La verdadera educación preparará a los niños y los jóvenes para la vida presente y la venidera, para una herencia en la patria mejor, es decir, la celesBal.”

(LA EDUCACIÓN ELENA G. DE WHITE "El temor de Jehová es el principio de la sabiduría".)

(FELICIDAD Y ARMONÍA EN EL HOGAR ELENA G. DE WHITE 1.

La Atmósfera del Hogar. ) (LA EDUCACIÓN ELENA G. DE WHITE "El temor de Jehová es el principio de la sabiduría". pág. 17) (Capítulo 2—Los fundamentos de la verdadera educación.

LIDERAZGO CON ADOLESCENTES Una de las grandes preocupaciones tanto de padres, educadores, centros sociales juveniles e incluso las iglesias, se deben a ¿Cómo dirigir a sus jóvenes?, ¿Qué hacer con ellos?, ¿Cómo les voy a enseñar?, etc.

Hay tantas preguntas que salen cuando tratamos con los adolescentes. Pero ¿por qué a ellos?, ¿por qué tanta necesidad de tenerlos bien?, ¿Qué acaso no son ellos los que deben seguir nuestros ejemplos y aprender por si solos con nuestras formas de hacer las cosas?

Hay tanta preocupación con tal de no perderlos, porque somos conscientes una vez más de que ellos son la fuerza de hoy y el futuro de mañana. Aun así, y sabiendo lo que son y lo que se convertirán el día de mañana, no damos tregua a nuestras malas acciones y en vez de enseñarles los golpeamos con nuestras palabras hirientes y nuestros juicios precipitados. Sin embargo claman ayuda aunque no lo digan, desean ser escuchados aunque no griten, desean ser vistos aunque no se vean.

El mundo cada día invierte miles de dólares para llegar a ellos y hacerlos suyos, pues son la base del consumismo y de todo, si tan solo nosotros, pudiéramos ver los alcances de nuestras malas decisiones y malos procederes para con ellos, de seguro cambiaríamos nuestra forma de ser.

Dirigir a adolescentes es la tarea más delicada que pudiera existir, no porque no se pueda, sino porque es la edad donde cada joven adquiere y va creando su personalidad. Es en esta etapa cuando cada uno sueña, y cree que si se pueden alcanzar las cosas; no hay para él barreras; y cada desafío es una experiencia de vida.

Llámese física o intelectual, los retos son el motor mismo de la adolescencia, por eso al querer llamar su atención no debemos olvidar algunos consejos: 1. Llamarlos por su nombre de manera amable 2. Felicitarlos por los logros anteriores (si los hay) 3. Pensar que ellos son unos campeones (porque si lo son) 4. Ayudarlos con proyectos (solo si ellos lo piden) 5. Establecer en ellos retos alcanzables 6. No pasar por alto la supervisión de los retos, (esto sirve para medir el avance, de ser posible cada vez que usted vea que avanza felicítelo, eso asegura su confianza en querer terminar)

7. Cuando el proyecto o el reto esté terminado, celébrelo. No emita juicio solo vea el lado positivo, después guarde silencio, solo escuche.

8. Deje pasar un poco de tiempo, el que crea usted necesario (esto le dará tiempo a él a formular mejor sus capacidades y de igual forma también a usted le hará bien para descubrir que hizo bien y corregir si algo salió mal) 9. Comience con nuevos retos…

Un viejo amigo dijo una vez; “si queremos tener lo que siempre hemos tenido, debemos hacer lo que siempre hemos hecho, ahora si queremos hacer lo que nunca hemos tenido, debemos hacer lo que nunca hemos hecho” Los adolescentes son la fuerza y la alegría de cada lugar, de cada espacio y su lugar es único, no lo podemos comprar mucho menos arrebatarlo pues ellos son los dueños, sin embargo de nosotros depende que ellos se mantengan en esa cumbre de éxito que solo a ellos les pertenece.

Timoteo Ruiz Montejo Estudiante de Teología UM

Cuando se habla de liderazgo, nuestros pensamientos inmediatos son dirigidos hacia la dirección de grandes empresas o instituciones. Si incluimos nuestra iglesia pensamos en lideres mundiales, administradores de campo o en los pastores distritales que atienden la iglesia local.

Sin embargo existe un liderazgo de poca relevancia ante nuestra moderna sociedad, pero de gran importancia y cuyos resultados trascienden asta la eternidad. Elena G. de White reMiriéndose a la paternidad expresa; “No hay cometido mayor que el que ha sido conMiado a los padres en lo que se reMiere al cuidado y la educación de sus hijos. Los padres echan los fundamentos mismos de los hábitos y del carácter. Su ejemplo y enseñanza son lo que decide mayormente la vida futura de sus hijos”.

El papel que realiza el padre en el hogar va mas allá de proveer el sustento económico, tiene que ver con un aporte integral que provee lo necesario para un desarrollo optimo de los hijos.

“Todos los miembros de la familia giran alrededor del padre. Es el legislador y en su conducta viril ilustra las virtudes más austeras: la energía, la integridad, la honradez, la paciencia, el valor, la diligencia y la utilidad práctica.... El padre es en un sentido el sacerdote de la familia, que dispone sobre el altar de Dios el sacriMicio matutino y vespertino. La esposa y los hijos deben ser alentados a participar en esta ofrenda y también en el canto de alabanza. A la mañana y a la noche, el padre, como sacerdote de la casa, debe confesar a Dios los pecados cometidos durante el día por él mismo y por sus hijos. Los

Liderazgo en la Paternidad José Miguel Pérez Aquino

pecados de los cuales ha tenido conocimiento y también los que permanecen secretos, que sólo vió el ojo divino, deben ser confesados. Esta norma, celosamente observada por el padre cuando está presente, o por la madre cuando él está ausente, resultará en bendiciones para la familia”.

Se dice que no existe mayor prueba del éxito de un líder, que lograr que sus seguidores realicen una labor, que no quieren hacer y la realicen con gusto. La congruencia en la vida del padre es la mejor herramienta para lograr éxito en su liderazgo. “Dios ordena a los padres, como preparación para enseñar sus preceptos, que los guarden en su corazón. “Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón—dice Jehová —; y las repetirás a tus hijos”. Para interesar a nuestros niños en la Biblia, nosotros mismos hemos de tener interés en ella. Para despertar en ellos el amor hacia su estudio, nosotros mismos debemos amarlo. La [169] instrucción que les demos irá acompañada del peso de la inMluencia que le presten nuestro propio ejemplo y espíritu”.

“Los padres cristianos tienen el privilegio hoy día, así como lo fue para el pueblo de Dios de la antigüedad, de llevar a sus hijos consigo a la Tierra Prometida”.

Elena White, Profetas y Reyes, p. 184.

Elena White, El Hogar Cristiano, p. 189.

Elena White, La Educación, p. 168, 169.

Elena White, The Signs of the Times, 24 de noviembre de 1881.

Dios es un ser de orden. Esta cualidad divina la podemos ver desde el inicio de la acBvidad creadora de Dios. En Génesis capítulo 1 se presenta la condición de esta Tierra antes de la intervención del Creador. Su estado era según la expresión del Texto sagrado, “caos total” (NVI), estableciendo la condición de la materia previa a la aparición de Dios.

Seguimos notando este “hábito” divino en el Texto sagrado al establecer indicaciones especificas al pueblo de Israel sobre cómo debían establecerse en el campamento (Números cap.3) evidenciando así el interés de Dios de mantener el orden.

EL ORDEN

Omar Villegas García

La sierva del Señor también demostró mucho interés por este asunto. Por ejemplo en el libro “Consejos sobre la salud”, capitulo 46 hace la siguiente declaración: “El orden es la primera ley del cielo y el Señor desea que su pueblo revele en sus hogares el orden y la armonía que prevalecen en las coretes celes@ales”. (Ella hace mucho hincapié en ello e invita a pracBcar este hábito celesBal. En un ministro definiBvamente que es esencial. Un ser que trabaja con el cielo debe ineludiblemente caminar por la misma senda. Elena G de White lo subraya nuevamente diciendo: “El verdadero hijo de Dios será ordenado y limpio” consejos sobre la salud, capitulo 46. En esta declaración se establece un parte aguas. No hay más que decidir. Y es en este punto en el que un verdadero líder se reconoce. Sus hábitos hablaran de su persona y ejercerán una influencia posiBva o negaBva en las personas sobre las cuales ejerce su liderazgo.

Esto claro está, debe verse en el hogar del líder espiritual. No podría el líder exhortar a las personas a pracBcar hábitos que en su casa no se pracBcan. La indicación de la pluma inspirada es: “ Todo lo concerniente a nuestras personas y hogares, debe ser ordenado y atrac@vo” consejos sobre la salud capítulo 46. O sea, que el buen líder comienza su influencia con sus seguidores inmediatos, en este caso, su familia. Un verdadero liderazgo se evidencia en casa. Con aquellos que realmente conocen tu grado de integridad y ellos son el parámetro fiel para ser evaluado.

El líder aprende y entonces enseña. Su campo de trabajo son todas las personas. Los niños parBcularmente un campo que debe ser atendido con especial interés ya que el hábito del orden se pueden adoptar con mayor facilidad en la niñez, que es cuando los pequeños están prestos a aprender y pracBcar lo que se les ha enseñado. La recomendación de Dios a

través del ministerio de Elena G de White es: “Para enseñar a los niños hábitos de orden se necesitara ocupar un poco de @empo cada día; pero este no es @empo perdido” Consejos sobre la salud, capítulo 46.

Dejando en claro que es necesario tener paciencia para desarrollar en ellos esta preciosa virtud.

El líder espiritual necesita pues desarrollar este hábito celesBal. Es imprescindible para su ministerio. El consejo de Elena G de White es claro, se debe desarrollar esta preciosa virtud para ejercer un liderazgo eficaz.

LA IMAGEN DEL LIDER Y SU INFLUENCIA

Julio Zamora

El líder no deben converBrse en la imagen de otro en pensamiento, senBmiento, o en una imitación absoluta. Si Dios lo ha hecho pastor del rebaño, le ha dado calificaciones para realizar esa obra. {VEUC 329.1}. El como buen líder debe de tener un carácter autenBco e individual, solo debe ser el reflejo del carácter de Cristo. No debe de permiBr que el bullicio de las acBvidades, las redes sociales, personas públicas de influencia, comentarios de personas sin sabiduría moldee su Criterio, personalidad y muchos menos su carácter. La influencia del líder y respuesta a sus iniciaBvas dependerá de su imagen. No solamente lo que el hombre puede ver tales como su vesBmenta, la voz, el peinado, medio de transporte, su familia, uso de palabras, cuidado y arreglo personal; sino su trato con las personas, su devoción privaba y publica a Dios, conocimiento de formas y procesos administraBvos, conocimiento básico de los medios donde se desenvuelve, dominio de su carácter como de su familia. Las personas que están bajo este liderazgo, idenBficaran la calidad de persona y de líder que está al frente de ellos.

Como la flor se vuelve hacia el sol para que los brillantes rayos le ayuden a perfeccionar su belleza y simetría, así debemos volvernos hacia el Sol de jusBcia, a fin de que la luz celesBal brille sobre nosotros y nuestro carácter se transforme a la imagen de Cristo. {CC 68.2}. La primera necesidad del líder debe ser buscar a Cristo. El amor y el poder transformador de Cristo, ha de hacer de un hombre de bajos principios y sin refinamiento, en un hombre que no dude en avanzar de parte de la jusBcia, en un hombre de principios inamovibles, son gustos refinado llenos de humildad, un hombre digno de confianza, que refleje a Cristo como su guía. Cada día debe tomar Bempo para pasar en constante devoción con su Señor por medio de la oración y el estudio de

la Biblia. Sin embargo eso no debería restarle el interés en avanzar en nuevos conocimientos. Tomar Bempo para estudiar revistas de conocimiento de las ciencias, economía, familia de otras religiones, periódico, noBcieros, estar al día con lo que acontece en el mundo. Parte de eso es estar actualizado en lo que a medios de comunicación se refiere, tales como la uBlización de redes sociales, y el uso de equipo tecnológico.

Por otro lado el líder se debe adecuar a las situaciones y entornos en los que se desenvuelva, no debe de actuar o mostrar una imagen que aunque en otro lugar parezca inofensivo. Siempre debe de analizar las costumbres y los entornos para que aun en la primera impresión se muestre como digno de confianza. Sea Cristo el modelo y la imagen a Seguir, y de esta manera los miembros bajo este liderazgo estarán influenciados bajo la presencia del Salvador mismo.

De esta manera cuando un líder sea que este en su casa, en la calle o en su centro de liderazgo estará llevando los rayos del amor del Salvador.

EL LIDERAZGO DE LA MUJER JOANI RUIZ LÓPEZ

Vivía en Israel una mujer ilustre por su piedad, y por medio de ella el señor decidió liberar a su pueblo, su nombre era Débora.

Nuestra cultura como la de muchos países nos ha dejado una herencia en cuanto al rol de la mujer y su desempeño al ejercer el liderazgo, sin embargo al estudiar la historia bíblica de la mujer llamada Débora, ella era reconocida como profetiza y el pueblo lo buscaba para pedir consejo y justicia, además es uno de los jueces en la temporada cuando Israel era gobernada por jueces, en este relato encontramos una perspectiva diferente a la que hemos aprendido, Débora no solo es destacada en la escritura por su liderazgo si no en las circunstancias en la que lo desempeño.

En una situación precaria de guerra y desolación cualquier hombre en la nación temía asumir un cargo tal como el que esta mujer desempeño pero vemos a Débora asumiendo y tomando el liderazgo no solo de una nación si no de una nación en guerra efectuando una gran liberación, pero ¿en qué radicaba la fuerza de su liderazgo? Encontramos elementos muy importantes en cuanto a su liderazgo y victorias sobre las guerras en la que ella estuvo involucrada directamente.

1. Ilustre. El diccionario lo traduce la palabra ilustre como alguien muy conocido ya sea por sus familia o por las cosas en las que se ha desempeñado y lo ha hecho bien, o por sus virtudes que es digno de reconocerlo.

2. Piadosa. La piedad tiene que ver con la empatía y aprender a ponerse en los zapatos de las personas especialmente en situaciones difíciles este era el sentimiento de esta mujer y el pueblo lo buscaba por sus sabios consejos y por su piedad.

3. Jehová estaba con ella y la usaba. Esto es lo más importante en su liderazgo pues Dios se agradó de ella. Y la uso para ejercer ahora no solo un liderazgo sino un liderazgo dirigido por Dios mismo y con la autoridad divina. ¿Si Dios puede hacer grandes maravillas con mujeres como Débora por que el liderazgo de la mujer se ve opacado tanto en la mayoría del relato bíblico como en la sociedad y a lo largo de los siglos? La influencia de la cultura en muchas ocasiones moldea nuestras acciones y esto no ha sido la excepción con respecto al liderazgo de la mujer, los hombres por su parte han creído que el liderazgo se hizo o lo ejercen solo ellos y han hecho creer a la mujer eso y ella se lo ha creído.

Pero gracias a Dios que el mismo a liderado excepciones como es el caso de Débora que sin importar su sexualidad Él la utilizo y fue un alivio su intervención en su tiempo y podemos observar a lo largo de la historia que la mayor parte de las ocasiones cada vez que una mujer entra a jugar el rol del liderazgo lo ha hecho muy bien, por ejemplo; Abigail esposa de Nabal, a la misma Elena G de White, tenemos la muy conocida madre Teresa de Calcuta, Juana de Arco, Merie Curie, Helen Keller, y la lista podría seguir mostrándonos el liderazgo tan valioso de la mujer.

HUMILDAD Y LIDERAZGO Joseph, Johnton

Una de las necesidades más apremiantes en el mundo presente es la de buenos líderes. En el mundo contemporáneo hay una seria falta de buenos líderes, y esto también es cierto en cuanto à la iglesia. Los conocimientos técnicos abundan, pero falta la sabiduría: la gente está confundida, desconcertada, enajenada. Para emplear las metáforas de Jesús, parecería que estamos “como ovejas que no Benen pastor”, y nuestros líderes a menudo parecen “ciegos guías de ciegos.” Qué carecería al líder que le impide desarrollar un liderazgo efecBvo y eficiente. En las siguientes líneas se analizará una de las caracterísBcas imprescindibles para un buen desarrollo del liderazgo.

Moisés, quien años más tarde llegó a ser el líder del pueblo escogido, recibió en las escuelas de Egipto la más elevada educación civil militar. Dotados de grandes atracBvos personales, de formas y estaturas nobles, de mente culBvada y porte principesco, y renombrado como jefe militar, llegó a ser el orgullo de la nación egipcia. Estas diferentes caracterísBcas ya hacían de él un líder del pueblo egipcio. Sin embargo, Moisés no estaba aún preparado para la obra de su vida. Todavía tenía que aprender a depender del poder divino. Había entendido mal el propósito de Dios. Su esperanza era librar el pueblo de Israel por la fuerza de las armas. Para ello, lo arriesgó todo y fracasó. Derrotado y desalentado, se trasformó en fugiBvo y desterrado en un país. Al igual que Moisés muchos líderes piensan que puedan lograr las cosas por la fuerza propia. Deberían aprender a depender del poder divino y reflejar en su carácter la humildad, que es la virtud que consiste en conocer sus propias limitaciones y debilidades y actuar de acuerdo a tal conocimiento. Moisés carecía de humildad. Por lo tanto en la universidad del desierto de Madian, él pasó cuarenta años recibiendo la enseñanza de la sabiduría divina a fin de prepararse a gobernar un pueblo ignorante e indisciplinado. Es interesante ver la acBtud de Moisés después de estos cuarenta años. Cuando Dios lo llamó; aquel hombre que había llegado a ser el orgullo de la nación egipcia manifestó su incapacidad de hablar bien. No se senoa a la altura de la tarea. Quizá ese fuera el prerrequisito críBco para la tarea del profeta: un senBdo de la propia indignidad e incapacidad para una tarea tan vital e importante. Del hombre violente y orgulloso, Moisés había llegado a ser el hombre más manso de toda la Berra.

La experiencia del desierto enseño a Moisés la humildad. De todos los profetas del anBguo testamento, sin lugar a dudas, Moisés tuvo la misión la más di^cil. La de liberar el pueblo de Ia esclavitud y luego llevarlo a la Berra promeBda. De hecho, Moisés llevó a cabo solamente una parte de la misión. Porque no pudo meter al pueblo en Canaán. Un trabajo que terminará su servidor Josué hijo de Nun. El úlBmo libro del pentateuco termina con este homenaje a Moisés diciendo que no hubo profeta como moisés en todo Israel quien haya conocido Jehová cara a cara. Moisés fracasó a la puerta de la Canaán terrenal pero no a la puerta de la Canaán celesBal porque aprendió a ser humilde y fue recompensado por su liderazgo.

El liderazgo se ejerce sobre un grupo de personas que tienen un propósito en común; el trabajo en equipo busca dejar de enfocarse en el “yo” y crear un ambiente de colaboración donde la meta sea completada con un “nosotros”.

Un buen líder no puede excluir la idea del trabajo en equipo, por el contrario debe implementar una estrategia que construya un grupo de personas que compartan un sentido de pertenencia a un grupo de persona, que llamara “equipo”. Esta estrategia debe contar por lo menos: con objetivos comunes, confianza mutua, comunicación y responsabilidad y compromiso mutuo.

Uno de los retos más grandes del trabajo en equipo es la creación de un conjunto de personas que aporten lo mejor de ellos pero que tienen diferentes caracteres, aptitudes, experiencia y diferentes personalidades. Este es el reto del pastor de iglesia, que se enfrenta ante un grupo de personas que tienen que avanzar en unidad a fin de cumplir el propósito de la iglesia y de la misión que Dios le encomendó a su pueblo, pero que tienen formas de pensar y expectativas distintas.

El trabajo en equipo puede determinar el éxito o el fracaso de una iglesia. Así como un solo jugador de futbol no puede enfrentar al equipo contrario, aunque tenga las mejores condiciones técnicas y físicas, el pastor no puede dejar de prescindir de la iglesia para el cumplimiento de los objetivos, ni se debe dejar todo el trabajo a un grupo limitado de personas, en este caso ancianos o diáconos.

dependerán uno del otro y no podrán avanzar a menos que todos estén en condiciones de avanzar.

Otro de los factores clave para consolidar un equipo en la iglesia, es el establecimiento de objetivos comunes. El pastor debe hacer que las metas sean de conocimiento de toda la iglesia. Es importante que la misión de la iglesia se comunique en términos sencillos de entender y que se vean reflejados en objetivos a corto, mediano y largo plazo, que sean uniformes y que sean alcanzables y mesurables. El pastor debe definir qué espera de cada miembro y departamento para contribuir a cumplirla, a fin de que la iglesia no se vea a si misma trabajando al vacío o haciendo una tarea innecesaria o repetida.

Involucrar a las personas en las decisiones, hacen que el trabajo en equipo sea hecho con más compromiso y responsabilidad. Cuando una persona es parte de un equipo, sabe que los logros o fracasos son responsabilidad de todos y cada uno de los miembros. Esto es Unidad: compartir los logros y fracasos. No dejando de lado el reconocimiento de las fallas y el reconocimiento de los logros. Por eso el pastor debe tener en el control sobre los objetivos para notar cuando es necesario reconocer o recomponer el rumbo.

El pastor necesita ser un líder que guie y reúna los esfuerzos individuales. Debe involucrarse en cada esfera de acción con el fin de ganarse la confianza y de poner el ejemplo de humildad, trabajo y como trabajar en equipo.

Así que para que la iglesia avance en unidad es necesario crear un ambiente de confianza, es el elemento principal. Esto se logra estableciendo consonantes que procuren aumentar el conocimiento mutuo de los miembros de una iglesia o de un grupo de trabajo, conocerse unos a otros es fundamental en un equipo, puesto que

EL PASTOR Y EL TRABAJO EN EQUIPO Miguel Ángel Suarez Chablé

El liderazgo es, sin duda alguna, uno de los mitos más grandes del universo la realidad no es al cien por ciento verdad, si el líder nace o se hace o simplemente todos pueden ser un líder.

Cuando te das cuenta que estás al frente de un grupo de personas, ya sea en un puesto o porque han decidido seguirte, Benes que afrontar la realidad que hay en tu vida ¿Cómo obtener lo mejor de mi grupo? ¿Cómo mantenerlo unido? Y para responder estas dos preguntas es necesario recurrir al principio que nos manBene unidos como civilización, la necesidad de comunicarse.

En los diferentes Bpos de comunicación podremos observar que se da de dos maneras; horizontal y verBcal, y en el estricto senBdo del liderazgo crisBano, es necesario que se cumplan dos reglas: verBcal con Dios y horizontal con los hombres, ante esto la Pluma Inspirada afirma “Por la oración sincera nos ponemos en comunicación con la mente del Infinito.” CC. P20.

El líder debe entender que el proceso de comunicación es primordial para alcanzar los objeBvos en sus disBntos planos en el Bempo, la ideología secular dice que “el fin jus7fica los medios” y en el caso del liderazgo crisBano no aplica en lo absoluto, si nos dejásemos guiar por Dios comprenderemos que la manera de pedir las cosas es directamente proporcional al resultado que obtengamos de la peBción, tenemos que comprender que vivimos en un mundo de colaboración en el que vivimos en sociedades y todos necesitamos de todos, la sierva del Señor indica “el hombre debe ser el medio de comunicación con el hombre.”

En un mundo de hosBlidad en donde es di^cil confiar en un grupo de trabajo, en donde existen competencias de tres a uno, la comunicación se vuelve base “se trata de una combinación de un lenguaje emocional, la persistencia y la inteligencia. Cuando los líderes y los colaboradores no aprenden esta nueva dinámica de autoridad, suprimen la posibilidad de ayudar y de ser ayudados.”

La comunicación se erige como un ente unificador de elementos en torno a cualquier proceso humano y naturalmente, en todas las actividades organizacionales: “la comunicación es el entramado –el sistema nerviosoque mantiene unidos a los distintos elementos componentes de la organización. Sin comunicación, las organizaciones no pueden sobrevivir, se desintegran”.

Es por ello que el líder comprenderá que si desea el éxito tiene que realizar el proceso de comunicación en las direcciones ya citadas; con Dios a través de la oración y su palabra, con los hombres para mantener el sistema de la organización.

Problemas comunicativos siempre existirán, y siempre será imposible abordar todo el proceso, sin embargo, un líder que aplique el pilar del ingenio siempre encontrará la manera de dirigir el “caos” para su beneficio. Es por ello que es posible, en la medida que se trabaje en equipo, superar las barreras comunicativas.

White, E. G. (ed. 1993). El Camino a Cristo. Pacific Press Publishing AssociaBon. White, E. G. (1955). El Deseado de Todas las Gentes. Pacific Press Publishing AssociaBon. “Liderazgo y comunicación | Comunicación Organizacional, DirCom y Redes Sociales”.

ELÍAS, J; MASCARAY, J. (1998) Más allá de la comunicación interna. Barcelona: GesBón 2000.

El liderazgo es…

Andrés Ortega Verdugo