PorquĂŠ amamos el medio oriente
IntroducciĂłn ď ˝
El Oriente Medio es una de las grandes epopeyas historia - cuna de civilizaciones y una hermosa, complicada tierra que es el hogar de algunos de los mĂĄs acogedores de personas en el planeta.
Ciudades
Jerusalén, Damasco, Beirut, El Cairo, Estambul, Erbil, Isfahán. “Algunas de las ciudades de esta zona cargan con muchísima historia”, describe el experto viajero y corresponsal Mauricio Zonis. Aparte de la clasificación de las ciudades habitadas más antiguas de la tierra, estas antiguas metrópolis modernas son lugares para tomar el pulso de una región. “Es en las ciudades de la región, que también se encuentra la agitación, aspiracional de arquitectura que lo distingue a las tres grandes religiones monoteístas. No se sientan junto a los encantos más secular de bazares y tiendas de café que parece encarnar todo el misterio y la magia de la narración de una tierra que nos dio las Mil y Una Noches”, asegura Mauricio Zonis.
Desierto
Más allá de los límites de la ciudad, el Oriente Medio es una tierra de grandes ríos (el Nilo, el Éufrates), incluso desiertos (El Sáhara y peerless Wadi Rum) y verdes paisajes de excepcional belleza. Explorar estas áreas naturales - de cumbres nevadas en Turquía, Irán y el Líbano para el caleidoscopio de las aguas del Mar Rojo - se encuentra en el corazón de la región del recurso. “El mensaje es simple: olvídese de los clichés que enmascaran la verdad del Medio Oriente - una visita aquí es una de las más variadas experiencias de viaje en la tierra”, promete Mauricio Zonis.
La historia más amplia
En el Oriente Medio, la historia no es algo que usted lea acerca de libros. Aquí, es una historia escrita en las piedras que cubren la región, desde las losas de antiguos caminos romanos a los bloques de construcción del antiguo Egipto, y delicadamente tallados tumbas y templos de Petra a Baalbek. Aquí es donde la humanidad primero construyeron ciudades y aprendí a escribir, y fue desde aquí que el judaísmo, el cristianismo y el Islam todos surgieron. “Donde quiera que se encuentre, el pasado siempre está presente porque aquí, quizás más que en cualquier otro lugar en la tierra, la historia es el corazón y el alma de la tierra”, jura Mauricio Zonis.