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Vidas en proyecto Algunas de las fotos fueron tomadas en los tiempos en los que Kike, como tantos jóvenes de su generación, pasó por el Proyecto Hombre para tratar de desengancharse de la droga. En la imagen, el joven Vierbücher aparece dentro de un tubo, el tercero por la izquierda.
El más lanzado de los hermanos Kike fue el penúltimo de cinco hermanos, Ricardo, Pako, Inés, Kike y Cristina, “pero era un bala” recuerda Pako, “No llegó a tener un trabajo estable, pero le llevábamos con nosotros cuando hacíamos reportajes de boda como Foto Luz, sobre todo cuando había que hacer vídeos. Venía él y Oskar Aldalur. A Kike también le gustaba mucho la fotografía, como a nosotros, y siempre llevaba con él una Minolta Reflex que he conservado hasta hace poco y alguna otra cámara de formato grande. De los tres hermanos era el más lanzado. Cuando había conciertos, da igual que fuera en Zumarraga, en Donostia, en
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Bizkaia... allá iba con la máquina hasta adelante, se metía en todas partes... no se cortaba nada. Una vez un amigo y él se empeñaron en que tenían que ir a Paris cuando Paris era una ciudad mucho más viva y bohemia que ahora... y mucho más peligrosa. Me contaba el amigo que fue con él que fueron atraídos por los garitos en los que había música en directo y que se encontraron con unas zonas del viejo París en las que daba miedo internarse, sobre todo siendo de fuera. Pero a Kike le daba igual. Aunque hubiera porteros en las entradas, algo les daba y conseguía colarse en todos los locales para hacer fotos. El amigo estaba literalmente acojonado y mi hermano para adelante, sin dejar un rincón sin entrar”. Uno de los temas más recurrentes de Kike eran las fotos que hacía a los miembros de su cuadrilla y que son las que ilustran la mayor parte de la exposición. “En estos paneles puede verse de todo, desde fotografías de encuentros con la cuadrilla en diferentes fiestas y juergas hasta las kedadas que hacían en sitios como caseríos o los chalets de Aparicio, en los
