El sector de la cosmética es un sector de primer nivel, con un mercado de gran relevancia y complejidad, no sólo por la feroz competencia nacional e internacional entre fabricantes, sino también por el éxito de ventas de las marcas del distribuidor. Además, en la Comunidad Europea se aplica a este sector una legislación rigurosa con la imposición de fuertes responsabilidades respecto de la seguridad de productos y garantías de los mismos, y por la regulación de la intromisión en la clientela o encroachment, aspectos ambos que representan la cara oculta de la distribución en el sector de la cosmética. Este trabajo analiza todo este entramado, intentando aportar un poco de luz jurídica y concluyendo con unas estrategias para los departamentos de marketing de los distintos distribuidores de este sector.