Un año después de la conclusión de la Guerra de los Cien Años, Aang y Zuko están trabajando en colaboración con el Rey Tierra Kuei para eliminar las colonias de la Nación del Fuego de las costas del Reino Tierra en el Movimiento de Restauración de la Armonía. Preocupado de que algún día llegar a ser como su padre, Zuko olbiga a Aang a hacerle una promesa poco después que terminara la guerra. Cuando Zuko intenta ir en contra de los deseos de Aang y Kuei permitiendo que una colonia de la Nación del Fuego bien integrada permaneciera en el Reino Tierra, lo que también conduce a Zuko a creer que todas las colonias debían quedarse, la promesa hecha por Aang se pone a prueba en su intento de mantener el equilibrio entre las Cuatro Naciones.