Aceites esenciales o esencias (Terpenoides) Los aceites esenciales son sustancias olorosas volátiles, solubles en alcohol, muy concentradas. Están compuestos por mezclas de sustancias líquidas que se localizan en cualquier zona de la planta, desde la raíz a los frutos. Algunas especies contienen incluso cientos de componentes químicos de naturaleza diversa, desde los carburos terpénicos (mezcla de cicloalcanos o cicloparafinas), alcanfores, alcoholes, aldehídos, cetonas y otros, que actúan en sinergia. Puesto que la variedad y la heterogeneidad de aceites esenciales y sus efectos es tan variada y amplia, resulta muy difícil establecer generalidades para todos ellos. Dependiendo de las propiedades de la planta, cada aceite esencial tiene capacidad para actuar en distintos sistemas del organismo. Las plantas con esencias se emplean en terapéutica como antisépticas de las vías respiratorias y urinarias, antiespasmódicas y en uso externo como cicatrizantes y antiinflamatorias. Plantas ricas en aceites esenciales son el eucalipto (Eucalyptus globulus), hinojo (Foeniculum vulgare), hisopo (Hyssopus officinalis), manzanilla (Matricaria recutita), limonera (Melissa officinalis), menta-poleo (Mentha pulegium), poleo de roca (Micromeria fruticosa), tomillo (Thymus vulgaris), romero (Rosmarinus officinalis), salvia (Salvia lavandulifolia)
Alcaloides (Alcaloides) Los alcaloides son uno de los principios activos más importantes en la medicina. Se trata de sustancias derivadas de los aminoácidos, compuestas de nitrógeno, hidrógeno, carbono y oxígeno con propiedades alcalinas o básicas y que tienen la capacidad de combinarse con sustancias ácidas para crear sales. A excepción de los hongos (que tienen poca cantidad) los alcaloides están ampliamente presentes en el reino vegetal. Los alcaloides conforman un grupo muy variado y heterogéneo en cuanto a su composición y acción en el organismo. Destacan por su notable efecto biológico en el cuerpo humano y en la mente y normalmente se los asocia con drogas psicotrópicas (morfina, colchicina, atropina…). La humanidad los ha utilizado desde el principio de los tiempos con fines religiosos y la industria farmacéutica los utiliza frecuentemente por su alta actividad farmacológica. Puesto que se trata de un grupo cuya composición química y acción en el organismo es extremadamente variada, resulta complicado ofrecer pautas generales. Existen algunas plantas con alcaloides alucinógenos (mescalina), otros venenosos (brucina), en raíces (belladona), en cortezas (quina), en hojas (tabaco, té, coca), en semillas (cacao, café)… Dependiendo de su estructura y origen se utilizan con distintos fines: o o
Analgésicos. Contra dolores muy fuertes (morfina) Psicotrópicos. Alucinógenos (cannabis), narcóticos (dormidera, cocaína) o estimulantes (mate, cacao, café, tabaco)
o
Sistema circulatorio. Algunos reducen la presión arterial (rauwolfia vomitoria), mientras que otros tienen propiedades hipertensivas (retama negra)
o
Sistema respiratorio. Otros alcaloides se utilizan para despejar las vías respiratorias y dilatar los bronquios (retama negra), aunque altas dosis puedes provocar parada
respiratoria.
Principios amargos Los “principios amargos” agrupan sustancias de diversa composición química (suelen presentar un anillo lactónico) que tienen en común el sabor amargo. Este sabor amargo las hace útiles farmacológicamente ya que producen un aumento de la secreción gástrica y una estimulación del apetito (deben tomarse media hora antes de las comidas). En muchos casos, también tienen una acción colerética y colagoga. Un buen amargo de la medicina popular es la centáurea o hiel de tierra (Centaurium sp pl) y también la corteza de naranja amarga (Citrus aurantium). Otras plantas que tiene estos compuestos son la achicoria (Cichorium inthybus) o el cardo (Cynara cardunculus) Existen tres tipos de sustancias amargas: o Amara tónica. En esta categoría se incluyen las sustancias amargas puras. Se utilizan de manera general para tonificar el sistema digestivo, el apetito y la secreción de jugos gástricos. Ejemplos son la alcachofa, lechuga, escarola, centaura menor, genciana… o Amara aromática. En esta categoría se incluyen las sustancias amargas que van acompañadas de un componte aromático o esencia. Tienen una acción muy similar a los amargos puros en el organismo humano, pero los efectos se ven potenciados por la acción de los aceites esenciales que los acompañan (por ejemplo, algunos aceites esenciales actúan también sobre las funciones hepáticas y de vesícula o tienen propiedades antisépticas que refuerzan el trabajo digestivo o intestinal). Como ejemplos, la artemisa, ajenjo, angélica, cardo santo… o
Amara acria. Como su nombre indica combina dos sabores, el amargo y el picante. Este tipo de sustancias son particularmente eficaces actuando sobre el sistema circulatorio y algunos ejemplos son el jengibre y la pimienta.
Compuestos azufrados (Heterósidos) El azufre es uno de los elementos con mayor capacidad para desintoxicar el organismo. Los compuestos azufrados (o sulfurados) son fácilmente reconocibles en los alimentos gracias a su color blanco (ajo, cebolla, puerro, rábano, espárrago…). También encontramos compuestos azufrados en el brócoli, coles de bruselas y todo tipo de coles o en la mostaza. Estos son algunos de los efectos del azufre en el organismo humano: o
o
o
Desintoxicante. La propiedad más destaca del azufre en el cuerpo humano es su capacidad para desintoxicar el organismo de sustancias tóxicas derivadas de una mala alimentación, acidosis, hábitos poco saludables, productos procesados, etc. Articulaciones. El azufre es un componente del colágeno, necesario para la buena salud de huesos y articulaciones. Además, ayuda a mantener lubricadas las articulaciones y a reparar el cartílago dañado. Ensayos clínicos han demostrado su efectividad en el tratamiento de la osteoartritis y la artritis reumatoide. Otros. Los compuestos azufrados también tienen una notable acción antibiótica, intervienen en la regulación del sistema nervioso, intervienen en algunos procesos metabólicos del hígado y ayudan a mantener la salud de la piel, cabello, uñas y dientes.
Flavonoides (Polifenoles) Compuestos polifenólicos solubles en agua ampliamente distribuidos en las plantas superiores, principalmente en las partes aéreas: hojas, flores y frutos. Existen diversos tipos de flavonoides
• •
Flavonas, que se presentan en numerosos alimentos y plantas de color amarillo y anaranjado (flavus significa amarillo). Las flavonas están presentes en la prímula, el espino blanco o la manzanilla. Antocianinas, responsables del color rojo, azul o violeta de algunos alimentos y plantas como el arándano (Vaccinium myrtillus), malva, zarzamora, vid roja (Vitis vinifera), etc.
De manera general, los flavonoides actúan en el cuerpo humano sobre estas áreas: o
o
Sistema circulatorio. Disminuyen la presión sanguínea, son cardiotónicos, mejoran la circulación en general, evitan la formación de trombos y ayudan a reparar los capilares rotos. Depurativos. Son diuréticos y estimulan las funciones del hígado y el riñón. Ayudan a depurar los metales pesados como el plomo y el aluminio y algunas sustancias tóxicas de la alimentación industrial (aditivos, etc)
o
Antioxidantes. Al reducir el efecto de los radicales libres, los flavonoides actúan contra el cáncer y protegen de los rayos UV.
o
Colesterol. Los flavonoides regulan el colesterol y la concentración de triglicéridos
o
Otros. Además, los flavonoides tienen propiedades antiinflamatorias, analgésicas y antimicrobianas. y acción vitamínica P y favorecedores de la regeneración de la rodopsina retiniana. Acción antiinflamatoria.
Glucósidos o Heterósidos Son uno de los compuestos más importantes en cuanto a su actividad farmacológica. Están formados por una parte de azúcar (glucosa) y otra de no- azúcar. Esta parte de no-azúcar (llamada genina o aglicona) (compuesto con un radical alcohol) es la que normalmente tiene mayor efecto farmacológico y dependiendo de su naturaleza se clasifica en distintos tipos:
o salicílicos (estas aspirinas vegetales están presentes en el sauce, el abedul, la ulmaria,
o
las rosáceas o incluso en la vainilla y son antiinflamatorios, provocan sudor, bajan la fiebre y tienen acción antirreumática y diurética), corteza del sauce (Salix alba), yemas de álamo hidroquinónicos (su principal acción se debe a la hidroquinona, funcionan principalmente como antisépticos de las vías urinarias y genitales y se encuentran en el madroño, la gayuba y el arándano),
o cardiotónicos (llamados así por su acción tonificante sobre el corazón, ya que reducen el ritmo cardíaco y aumentan la contracción. Su uso debe realizarse siempre bajo prescripción médica, ya que puede resultar tóxico. Algunas de las especies donde los encontramos son la adelfa, la digital, convalaria, evónimo…),
o saponinas, etc…
Saponinas Glucósido cuya genina es un sapogenina (derivado del ciclopentanoperhidrofenantreno) Sustancias solubles en agua, que al mezclarlos con el agua disminuyen su tensión superficial produciendo abundante espuma (forma emulsiones con aceite o resina). Las saponinas son glucósidos con propiedades parecidas a las del jabón (de ahí su nombre). Actúan ejerciendo una acción irritante sobre las mucosas. o Acción expectorante. Las saponinas tienen una acción expectorante muy beneficiosa en caso de tos crónica, bronquitis, asma, catarros, etc. deben emplearse con precaución ya que a dosis altas son irritantes o Acción depurativa. Las saponinas tienen la capacidad de limpiar la sangre y se utilizan frecuentemente en medicina natural para realizar curas y detoxificaciones del organismo. o
Acción antiinflamatoria. Por su acción antiinflamatoria, también están indicadas en caso de edema, reuma o afecciones de la piel.
o
Otros. Otras acciones de las saponinas son como tonificantes venosos y reguladores del colesterol. coadyuvantes de la acción de otras plantas, ya que en general facilitan la absorción de los principios activos por el organismo, incrementando en consecuencia su eficacia
Ejemplos de plantas ricas en saponinas son la Zarzaparrilla (Smilax sp.), la Hiedra (Hedera helix), el rusco (Ruscus aculetus), la saponaria (Saponaria officinalis), castaño de indicas, ginseng, vara de oro, escrofularia, violeta, margarita…
Mucílagos Son glúcidos, muy variables en cuanto a su composición, pero como constituyentes mas extendidos, destacan la glucosa, la arabinosa, la xilosa y el ácido galacturónico. Los mucílagos tienen el aspecto de una masa amorfa de color blanquecino que con el agua forma soluciones viscosas pero no pegajosas (geles) ya que los hidratos de carbono se hinchan y aumentan de volumen. La industria farmacéutica utiliza frecuentemente los mucílagos para dar consistencia a ciertos fármacos y hacerlos más fácilmente administrables. Algunas plantas y alimentos ricos en mucílagos son el lino, las semillas de chía, malvavisco, las algas marinas, membrillo, aloe o tila. Los mucílagos actúan sobre todo como protectores de las mucosas reduciendo la irritación ya que actúan sobre los tejidos y las mucosas, revistiéndolos de una capa protectora plástica eficaz frente a agentes irritantes tanto químicos como mecánicos. Además, por su capacidad para retener grandes cantidades de agua con el consiguiente aumento de volumen, tienen un efecto
laxante mecánico y sirven también para producir sensación de plenitud en regímenes de adelgazamiento. Se utilizan frecuentemente para: o o
Sistema respiratorio. En el tratamiento de tos, bronquitis, catarros e irritaciones de garganta Alteraciones de la piel. Puesto que calman la irritación, tienen un efecto beneficioso en el tratamiento de las enfermedades de la piel.
Contienen mucílagos diversas especies de la familia de las malváceas, como la malva (Malva silvestris) y el malvavisco (Althaea officinalis). Son frecuentes en algunas semillas como las del lino (Linum usitatissimum) y las de zaragatona (Plantago psyllium) o las de crespo gallo (Salvia verbenaca)
Taninos (Polifenoles) Son sustancias de origen vegetal carentes de nitrógeno en su molécula y solubles parcialmente en agua y en alcohol La principal característica de los taninos es que desnaturalizan las proteínas lo que se traduce farmacológicamente en un efecto astringente, antiinflamatorio y hemostático. Los taninos están ampliamente repartidos entre las plantas, y parece ser que juegan un papel disuasorio para insectos y herbívoros, ya que dotan de sabor desagradable a las partes de la planta que los contienen. También son muy frecuentes en los frutos inmaduros, siendo los responsables del sabor astringente y desagradable de estos.
Aunque algunos de ellos pueden ser muy beneficiosos, algunos otros pueden llegar a resultar tóxicos y antinutritivos, es decir, en altas cantidades reducen la asimilación de algunos nutrientes. Algunas plantas con taninos son el té verde, corteza de roble, arándanos, hojas de gayuba, manzana, zarzamora, granada, vino tinto y en general las frutas verdes. Como ejemplos de plantas ricas en taninos cabe mencionar a la Salicaria (Lythrum salicaria) y las agallas del rebollo (Quercus faginea), o el zumaque (Rhus coriaria)
Los taninos ejercen estas funciones sobre el cuerpo humano: o o
Trastornos del aparato digestivo. Los taninos ayudan a controlar la diarrea, los cólicos y las flatulencias Inflamaciones. Los taninos ayudan a cicatrizar las heridas y a mejorar las hemorroides y las enfermedades de la piel
o
Acción vasoconstrictora. Tienen una acción astringente y vasoconstrictora que favorece la coagulación de la sangre
o
Acción antioxidante. Los taninos también ejercen una labor importante frenando la acción de los radicales libres
Cumarinas (Polifenoles) Las cumarinas son unos compuestos aromáticos que, aunque son levemente tóxicas para el hígado de los humanos, ofrecen otras posibilidades medicinales muy interesantes. El haba de
Tonka, la canela de Cassia, el gordolobo, o el trébol del olor son especies de gran riqueza en cumarina, aunque en menor medida también la contienen la canela común o la manzanilla. Las cumarinas se utilizan con distintos fines medicinales: o
o o
Anticoagulante. El dicumarol constituye un eficaz anticoagulante y esta es una de las propiedades más destacadas que utiliza la industria farmacéutica (por ejemplo warfarín) como tratamiento para evitar la trombosis Edema. Otro de los usos frecuentes de las cumarinas es como anti-edematosos, ya que tienen propiedades que reducen el albumen extracelular. Otros. Otros usos en medicina son: antiinflamamtorio, analgésico, antitumoral, osteoporosis, asma…
Resinas Son exudados vegetales propios de algunas familias de plantas originados por polimerización y oxidación de derivados terpénicos. Se trata de sustancias sólidas o semisólidas, insolubles en agua y no volátiles. A temperatura ambiente son sólidas, pero se convierten en líquido con el calor. En la naturaleza no se presentan aisladas, sino asociadas a aceites esenciales constituyendo el conjunto oleoresinas o bálsamos. Las resinas se emplean fundamentalmente, por sus propiedades irritantes, como revulsivos. Algunos bálsamos son muy apreciados como antisépticos y expectorantes respiratorios. Un ejemplo es la resina de los pinos, siendo la más utilizada la del pino rodeno (Pinus pinaster). Otras resinas son el elaterio (Ecballium elaterium) o la jalapa (Mirabilis jalapa), la brionia (Bryonia dioica)
Gomas y gomorresinas Las gomas son mezclas heterogéneas de polisacáridos (con acido glucuronico unido a los monosacaridos) que con el agua caliente forman soluciones pegajosas. Son útiles como emulsionantes y estabilizantes de preparados. Según su grado de solubilidad se distinguen: las gomas solubles que forman con el agua soluciones coloidales y las insolubles que forman geles. Las gomorresinas son mezclas de gomas y resinas (eventualmente oleoresinas) que secretan las plantas de modo natural o provocado mediante incisiones. Tenemos el bálsamo de Perú (Myroxylon balsamum) y la trementina (Pinus sp.)
Vitaminas Son sustancias orgánicas imprescindibles para el correcto funcionamiento del cuerpo humano que, al ser incapaz de sintetizarlas, debe adquirirlas con la dieta. Se establecen dos grandes grupos en base a la su solubilidad: hidrosolubles y liposolubles (A, D, E y K).
Las plantas, o al menos ciertas partes de ellas (frutos, semillas, etc.), son ricas en todas estas vitaminas pero, para que sean aprovechables al organismo, las plantas o sus partes deben consumirse frescas, ya que en caso contrario las vitaminas se alteran y pierden sus propiedades. Así pues, las plantas ricas en vitaminas estarán indicadas en casos de avitaminosis o deficiencia vitamínica Algunos ejemplos son: ricas en vitamina B2 o ribioflavina son zanahoria (Daucus carota),, alcachofa (Cynara scolymus) o las avellanas (Corylus avellana), en Viatmina B1 o tiamina las hortalizas y legumbres.
Minerales Estos minerales se encuentran como sales disueltas en el conjunto del vegetal. Las sales de potasio ejercen actividad diurética mientras que el yodo de las algas marinas actúa sobre el tiroides. El silicio, presente en ortigas (Urtica urens) y cola de caballo (Equisetum sp.) ejerce una actividad remineralizante.
Aceites Son sustancias formado básicamente por glicéridos, es decir, ésteres de la glicerina con diversos ácidos grasos tanto saturados y, sobre todo, insaturados (linoleico, oleico, araquidónico, etc...). Su interés farmacológico es de diversa índole, ya que por un lado algunos contienen vitaminas esenciales (vitamina F), mientras que otros representan la base para síntesis de las prostaglandinas. Así mismo, los aceites ricos en ácidos grasos insaturados son eficaces coadyuvantes en el tratamiento de la arteriosclerosis y de la hipercolesteremia. Por otro lado, los aceites se emplean como excipientes de numerosos preparados dermatológicos, teniendo por si mismos una acción lenitiva y protectora de la piel. Son frecuentes en frutos y semillas, como oliva (Olea europaea) y girasol (Helianthus annuus). Algunas plantas como el helecho macho (Aspidium filix mas) los acumulan en las raíces.