¿CÓMO SE ESCOGIERON LOS COLORES DEL SEMÁFORO?
Sin importar el lugar del mundo en el que nos encontremos, los semáforos son siempre amarillo, verde y rojo. En la época actual, cuando estamos todos súper conectados no tiene nada de raro que surja una tendencia y se extienda por todo el planeta, pero a finales del siglo IXX la comunicación no era tan sencilla y sin embargo estos colores son universales. Los semáforos hacen parte de nuestro día a día, es difícil imaginarnos el tráfico sin ellos, aunque muchas veces cuando los vemos en rojo, desearíamos que desaparecieran. Invención Durante la revolución industrial, la mejor manera para mover mercancías y pasajeros era el ferrocarril, hasta tal punto que llegó el momento en que debieron regularse ciertas situaciones. Entonces nació el predecesor del semáforo, que era una lámpara de gas con una luz roja para parar y una verde para tener precaución, después se le adicionó una blanca para avanzar. En 1868, en un mundo en el que todavía las vías eran dominadas por las carretas y los coches de caballos, el ingeniero ferroviario británico John Peake Knight instaló el primer semáforo para regular el tránsito en las afueras del Palacio Westminster de Londres inspirándose en las luces que controlaban los trenes. Este semáforo era un rotativo que funcionaba con gas y tenía dos brazos que se levantaban para señalar el sentido que debía detenerse, para usarlo por la noche tenía una lámpara verde y una roja, colores que se seleccionaron por su gran visibilidad en la oscuridad. Este semáforo era manual y para que funcionara debía haber alguien controlándolo, hasta que un día de 1869 explotó una de sus luces de gas matando al policía que lo manejaba y fue retirando un año después. Tuvieron que pasar 40 años hasta que en 1910 el inventor estadounidense Ernest Sirrene inventara una señal de tráfico giratoria de control automático en Chicago, sin luces y con las palabras "detener" y "seguir". A partir de ahí varios inventores más probaron diferentes sistemas, algunas con palabras, otras con luces y manejadas de diferentes formas. No fue hasta 1923 que Garrett Morgan patentó una señal de tráfico automática y eléctrica, utilizando una unidad en forma de T con tres posiciones. Este semáforo tenía además de "detener" y "seguir", un tercer elemento que paraba el tráfico en todas las direcciones para dar tiempo a los conductores a detenerse o atravesar la intersección. Los colores Como ya vimos, el código de colores venía del sistema ferroviario, pero fueron elegidos porque cuentan con un espectro de visibilidad alto y pueden reconocerse con facilidad desde largas distancias, incluso con condiciones meteorológicas adversas. El rojo que utilizamos para parar, es el color con mayor longitud de onda dentro del espectro visible y se distingue desde más distancia, además en la mayoría de las culturas es un color brillante que se asocia con el peligro, por eso se utiliza para parar.
El verde comenzó a usarse en los ferrocarriles para tener precaución, pero su significado cambió con el tiempo hasta usarse actualmente para indicar que tenemos vía libre y podemos seguir. Este color se eligió porque también tiene una buena longitud de onda, además de un marcado contraste con el rojo. Psicológicamente, es el color de la esperanza, el que nos prepara para seguir adelante. El amarillo del semáforo lo introdujo en 1914 William L. Potts, con la función que actualmente conocemos, hacer de transición entre los otros colores para que el conductor esté preparado y el cambio no sea abrupto. Se eligió porque también tiene una longitud de onda muy amplia y cercana al rojo, lo que hacía que fuera perfecta para esa tarea. Para terminar con algunas curiosidades, en China el rojo es el color del Partido Comunista y quisieron cambiar su papel para que significara que se podía pasar, pero la cosa no funcionó. En Londres alrededor del palacio real hay semáforos para caballos, usados por los guardias reales para realizar su famoso cambio de guardia, la ciudad con más semáforos por habitante es New York, mientras que Makkinga (Holanda) no tiene ninguno y tampoco tiene ninguna otra señal de tráfico. Por: Adriana Gutiérrez