Nuestros Cuentos Policiales 6º

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NUESTROS CUENTOS POLICIALES

6º Grado “A” y “B” | 2011


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FUNDAMENTACIÓN Ante todo quisiera decir que toda producción escrita constituye un acto de valentía, de compromiso y generosidad, ya que implica un acto de buena fe al decidir socializar el conocimiento con otros que no han compartido el proceso del acto de escribir. En esta publicación, los lectores descubrimos un mundo de creatividad, afecto y apertura. Y nos maravillamos por ello.

Promover la escritura de los niños a partir de textos literarios también permite que se acerquen al sentido de esos textos y a sus modos de construcción. De hecho, escribir provoca habitualmente una mayor lucidez lectora. Como sabemos, la escritura es una herramienta intelectual que propicia el desarrollo del pensamiento, pues

promueve

procesos

de

objetivación

y

distanciamiento respecto del propio discurso. En este 2

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sentido, las consignas de escritura inspiradas en textos literarios leídos permiten que los chicos se tomen un tiempo para reflexionar acerca de lo que ese texto les hace imaginar y pensar. Cuando hablamos de escritura a partir de textos literarios no nos referimos a que los chicos respondan a preguntas. Muy por el contrario, hablamos de tareas de escritura de textos completos. En el caso de los textos ficcionales, se trata de desplegar algún aspecto que se presenta en los textos leídos o por leer “jugando su mismo juego”; por ejemplo, incluir determinados personajes o motivos, implicarse en algún género particular, en este caso “el cuento policial”. Así como la lectura de literatura “ofrece un espacio de ensayo para la vida”, la propuesta de que los chicos escriban textos ficcionales corre en el mismo sentido. Como señala Gianni Rodari en el prólogo de su ampliamente citada Gramática de la fantasía: .

Yo espero que estas páginas puedan ser igualmente útiles a quien cree en la necesidad de que la imaginación ocupe un lugar en la educación; a quien tiene confianza 3

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en la creatividad infantil; a quien conoce el valor de liberación que puede tener la palabra. “El uso total de la palabra para todos” me parece un buen lema, de bello sonido democrático. No para que todos sean artistas, sino para que nadie sea esclavo. Gianni Rodari, Gramática de la fantasía, Buenos Aires, Colihue, 1997 (fragmento).

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Asesinato familiar Almorzando en mi casa, yo el Dr. Boesh atendí el teléfono fijo. Era una señora mayor pidiendo que la ayudara en un caso en que intervenía su hijo y su nieto, lamentablemente, muertos en el momento en que llamó. Quedamos en vernos en su casa a las 16:00 hs. Sin apuros, salí de mi casa veinte minutos antes para asegurarme de llegar a tiempo. La señora me esperaba obviamente con dudas. El asesinato había ocurrido por la mañana en la casa del hijo que ya era grande. Éste tenía un hijo de siete años. La madre del niño había muerto, hacía tres meses, de un tumor en la cabeza. Le pregunté a la señora si podíamos ir a al departamento donde había ocurrido el crimen y así fue. Cuando llegamos al departamento empecé a sacar fotografías al desorden del living y de la habitación. 5

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Le pregunte si era normal o así había quedado la casa después del crimen. La segunda opción fue la acertada. El crimen había sido terrible, salvaje. Habían empleado seguramente armas y navajas por las manchas de sangre en el sofá y las paredes. -El cadáver del niño fue examinado y se pudieron sacar tres balas de su cuerpo y con respecto a mi hijo tenía grandes cortes en las piernas- contó la señora. Las ventanas estaban totalmente cerradas. La puerta trasera también, no había nada forzado igualmente seguía sacando fotografías. La cocina y el baño realmente estaban normales. Ese día no saqué muchas pistas de la escena del crimen. Ya en mi casa, acostado en la cama, miraba las fotos que

había

sacado.

Las

ventanas

estaban

perfectamente cerradas, pero al hacer un zoom a la 6

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que estaba al lado de la heladera pude ver rayones en el marco, como los que se le hacen al auto. Pero esos rayones eran de un gancho que posiblemente se había empleado para llegar hasta adentro de la casa. Esa ventana estaba justo en frente del techo de la casa de los Gónzalez. Ya sabía por dónde habían entrado pero ¿Quiénes eran? Tenía que prestar atención a la cocina y observé que uno de los cajones (el de más arriba) estaba un poco abierto, pero eso no era evidencia. Aun más cerca, se notaba una mancha de sangre con forma de mano. Llamé a la señora, que me atendió prácticamente dormida. -¿Si? –dijo. -Necesito que ya vayamos a la escena del crimen, tengo noticias – respondí. En el departamento, le mostré las evidencias y le pregunté algo que creía que no me iba a responder. 7

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-¿Cuántos

cuchillos

tenía

el

juego

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que

usaban?¿Sabe?-pregunté con intriga. -Usaban un juego de doce cubiertos, que les regalé cuando se casaron-respondió con seguridad. Caminé hasta la cocina. Abrí totalmente y conté los cuchillos de izquierda a derecha, de arriba abajo: 1,2,3,4,5… -Acá falta un cuchillo, hay once - dije feliz, porque todas las piezas calzaban. Llamé a la policía y le conté todo. Media hora después la policía científica ya estaba buscando el cuchillo. Horas pasaron, más o menos seis y el cuchillo no aparecía. Hasta que un policía entre las hojas de un arbusto que estaba debajo de la ventana de la cocina encontró el cuchillo con un tono rojizo supongo que era sangre seca. La policía se lo llevó directamente al laboratorio. El crimen ya se desentrañaba. 8

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A la semana siguiente las huellas dieron como resultado, que pertenecían a un vendedor de cigarrillos ilegalmente importados que quería arreglar deudas que tenia con la nuera de la señora. Eso ya no es importante ya que el asesino fue descubierto y encarcelado.

FIN.

Autores: Bina Facundo – Joaquín Monti

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La Copa Ensangrentada Martes 7 de enero de 2010, primer día de investigación

Dos ancianos, que vivían con sus hijos, amanecieron muertos. Fue en la mañana del 7 de Enero, en su cama de dos plazas de aquella casa que se encontraba en el barrio de Bajada Grande, ciudad de Paraná. En la escena del crimen, se encontraron, un cuchillo ensangrentado y pastillas de droga arriba de la mesa de luz, al lado de la lámpara. Era raro, el hijo de las víctimas, no se encontraba en la casa al amanecer de ese día, sino que decía haber salido con su novia en su nueva moto marca Honda.

-Mansión de la familia en Bajada

Grande

(DERECHA)

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Paraná


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Los vecinos dicen haber escuchado gritos y ladridos de los perros del barrio, pero no estaban seguros si provenían de esa casa. Pero con esas pastillas de droga sobre la mesa de luz, complican todo el caso. Yo soy un detective de la policía del barrio, no soy nada especial. Tengo 28 años, nada más. Se me dio la oportunidad de resolver este caso y no la desaproveché, ya que si lo resuelvo, sería un gran logro para mí. Subí al taxi en la esquina de Catamarca y Laprida con mi portafolio, ya listo para comenzar la investigación. El taxi me dejó en la Avenida Estrada, Barrio de Bajada Grande. Me cobró $20 pesos y al darse vuelta para recibir mi dinero, vi en su guantera, un papel doblado y lo que vi que decía era: “Contramos Miércol a 20:3 arque Berd”, deduje en el instante que lo que decía ese mensaje

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completo era: “Nos encontramos el Miércoles a las 20:30 en el Parque Berduc”. Al entrar en la casa no encontré ninguna pista.

Miércoles 8 de Enero de 2010, segundo día de la investigación

Tomé devuelta el taxi, pero esta vez no encontré ninguna pista en este. Me cobró lo mismo y me dejó en el mismo lugar. Como la casa daba al río se me ocurrió fijarme si podría haber algo en él. Al fijarme, descubrí una lancha blanca estacionada en el “puerto” de la casa. Al fijarme dentro, encontré un cadáver que tenía colgado una cadena de oro con un rubí en la punta con un signo grabado en él. El signo era un ojo dentro de un rombo que a su vez estaba dentro de un círculo. Y también había en el bote, $20 y un papel que decía: “Nos

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encontramos el Miércoles a las 20:33 en el Parque Berduc”. Deduje que era el taxista, pero ¿Quién lo habría asesinado? Decidí ir al encuentro del taxista con el hombre, que seguramente participó en el asesinato.

Jueves 9 de Enero de 2010, tercer día de la investigación

Contaré todo lo sucedido ayer. Tomé de vuelta un taxi, pero esta vez lo tomé en calle Catamarca y 25 De Junio. Luego de decirle al taxista que me llevara a Bajada Grande, noté que era el mismo taxista. Aproximadamente 5 minutos después, noté que estábamos entrando a un Galpón. El taxista, con un arma de fuego, forzó mi salida del vehículo. En ese preciso momento, sentí que algo me golpeaba por atrás. Quedé inconsciente. 13

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Viernes 10 de Enero de 2010, primer día cautivo

Cuando me desperté, me encontraba atado a una silla de plástico en una habitación. Solo un tenue haz de luz caía sobre mi cuerpo. Una puerta de madera se encontraba enfrente mío y una persona con una camisa negra y unos pantalones beige se encontraba al lado de la puerta, era como un patovica. También esa persona tenía unos anteojos negros. Al cabo de 10 minutos, entró una persona morocha y con un cigarrillo en su mano, seguida del taxista, -¿Cómo estás pasando tu estadía?-Me preguntó el hombre -¡¿Quién sos?!-Grité -Soy la persona que hizo lo que está hecho-Me respondió 14

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-¿Acaso tu eres el asesino?-Le pregunté -Soy el tipo que estabas buscando-Comenzó a decir,- Así es, yo maté a la pobre pareja Rodríguez. Los asesiné como comadrejas. -Bueno, la recompensa ¿Para cuándo?-Dijo el taxista -Te la daré, así que quédate tranqui- Dijo el asesino -Bueno-Dijo el taxista-¡Más te vale que me la des! ¿eh?-Vos tranqui, solo vete-Le dijo el asesino y luego le dijo al hombre de camisa negra que lo ayudara a llevarme al patio. Me azotaron con un fierro.

Sábado 11 de Enero de 2010, segundo día cautivo

Amanecí, tal como dijo, en el patio. Muchas ruedas de tractor es se encontraban tiradas en el piso. También había un perro de raza 15

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Doberman atado a mi derecha, muchos alambres de púas sueltos y también charcos de agua. Al término de 20 minutos aproximadamente, llegó el asesino arrastrando el cuerpo del taxista. -¿Sabés lo que hice?-Me preguntó el asesino -Lo mataste-Dije y bajé la cabeza -Así es-Me dijo-Y haré lo mismo contigo si puedo-¿Por qué no lo haces entonces?-Pregunté -Ha, muy fácil-Respondió y se fue. En ese instante recordé el cuchillo que se encontraba en mi bolsillo, lo saqué como pude y intenté cortar las cuerdas que me ataban. Saqué mi celular y mandé un mensaje a la policía con el siguiente

código:

33#Y74%9,

el

código

que

significaba que debían ir al lugar en el cual el celular se encontraba. Es decir, es un código de alerta.

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Luego de 1 hora, durante la cual me escondí del asesino, llegó la policía y revisó toda la casa. No encontraron al asesino, solo un papel que decía: “Chau Vida”, el cual estaba sostenido por una copa de vino quebrada y ensangrentada con un libro de ritos satánicos debajo. Nunca se supo donde quedó el cuerpo. Se dice que algún día volverá a la vida y me matará. Pero yo no lo creo. -Copa con libro de ritos debajo (DERECHA)

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El cadáver que había encontrado en la lancha nunca se supo de quién era. Fue enterrado como “Anónimo”.

ARCHIVOS DE LA POLICIA DE PARANA (04-10-11)

Autores: Agustín Germanier y Juan Manuel Díaz

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James Bond tras las pistas

Para empezar me presento; yo soy el detective ya retirado James Bond. Hace unos meses, renuncié a la compañía de investigación “West End”. Es un lugar para personas muy inteligentes, hay que tener mucha lógica para poder deducir tantos misterios. Me divertía mucho en esos tiempos, pero un día me cansé de ese ambiente tan denso y nervioso... Y renuncié; ya que no le caía bien a mi jefe... Ahora vamos al caso: Una mañana de otoño, poco después de mi renuncia, el 30 de junio de 2002, iba yo en el auto con destino al bar “Café y resto” a desayunar con un viejo amigo, cuando alcancé a escuchar por la entrecortada radio lo siguiente:

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“Persona import... muert... señorita Mery All...s compañía de... prrmprrrm... a cargo. Luego daremos... infor…ción”. Por lo que yo entendí, desgraciadamente había muerto la señorita Mery Allans la esposa del duque de Francia, una antigua conocida mía. También logré escuchar que la compañía West End estaba a cargo de este caso. -Necesito saber si es así; verán que este caso, aunque estoy retirado, me interesa mucho. Solo que yo no quiero saber nada con West End- me dije a mi mismo. Necesitaba pistas, lo único que vino a mi mente

en

ese

momento, fue conducir hacia el palacio del duque, ya que él me conocía.

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Cuando llegué al palacio, me encontré con él, el Duque Francis Allans. Estaba devastado, sentado en su escritorio, en una fría habitación. Y ya sin el cálido humor de la señorita Mery me explicó lo siguiente: - “Esa noche yo me había ido a una reunión, cuando regresé Mery no estaba, pregunté por ella y me dijeron que había salido del palacio a encontrarse con La Princesa de Inglaterra, sin ninguna preocupación me acosté a eso de las 2:55 am. No sé exactamente a qué hora, recuerdo haber escuchado a Mery, recostarse y saludarme con un cálido “Que descanses”. En ese momento no noté nada raro pero ahora que lo pienso no sé cómo no me di cuenta que deben haber sido las 5:40 aproximadamente. Tan cansado estaba que lo único que hice fue seguir durmiendo. Esta mañana cuando desperté no estaba recostada al lado mío. El 21

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ama de llaves me dijo que creía que había bajado a desayunar; por lo tanto bajé pero no estaba en la cocina, ni había rastros de que había desayunado”. Fue allí cuando me di cuenta de que algo no cerraba, cómo podía ser que ella había bajado a desayunar si estaba todo como lo había dejado la noche anterior. La única forma de saber si eso era cierto, era preguntarle a la misma persona que lo dijo; el ama de llaves. Para nuestra sorpresa ella no estaba, y le preguntamos a la cocinera dónde se encontraba. Nos dijo que Levina Mateu (ama de llaves) no había venido a trabajar ese día, porque Mery le había dado el día libre. Fue ahí cuando me di cuenta de que el duque había soñado todo lo de esa noche. Pero lo que era un hecho fue la desaparición de Mery. 22

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Pensé entonces que lo primero que teníamos que hacer era encontrarla y pedí al Duque todas las llaves y el permiso para entrar en todas las habitaciones.

Inmediatamente

planifiqué

mi

recorrido, primero las habitaciones, luego los salones del palacio y por último el patio, sótano, y altillo. Subí a las habitaciones, y a pesar de fijarme en placares, debajo de las camas, baños y debajo de las alfombras

Mery

no

estaba,

y

tampoco

se

encontraba en los salones. Sólo me quedaban los exteriores, para lo que le pedí ayuda al Duque. Sin haber tenido éxito en el parque nos dirigimos hacia el sótano, y horrorizadamente, encontramos el cadáver con un cuchillo clavado en el centro de su corazón.

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Llamamos a la policía que se hizo cargo del cuerpo, y nos dio una serie de ayudas para la investigación: 1-Solo alguien con fuerza podría haber incrustado el cuchillo de esa manera. 2-¿Qué persona podría tener acceso al sótano? 3-El crimen fue realizado con rapidez, por eso solo una persona que conocía bien el palacio podría haber hecho esto tan fácilmente. Averigüé entonces si había alguien más en la casa, o si habían tenido visitas en el palacio; esto fue lo que anoté en mi agenda: -Jardinero: había realizado su último trabajo en el parque el día anterior a la desaparición y no volvería hasta la semana siguiente. -Cocinera: Hasta ese momento había permanecido en el palacio, pero al parecer no estaba enterada de 24

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la ausencia de Mery. Su trabajo era simplemente cocinar y no mantenía una amistad o algo parecido con la víctima. -Ama de llaves: No había asistido al trabajo, a pedido de Mery. Ella estaba encargada de limpiar la casa y por eso tenía acceso a casi todas las habitaciones del palacio. A veces ayudaba a Mery con algunas labores que ella le pedía como por ejemplo retirar encargos o pedidos. -George Vooper (primo de Mery): Según el duque, Mery no tenía una buena relación con George, ya que hace unos años habían tenido una pelea y no llevaban una relación muy afectiva. Sin embargo George sería quien cobraría la suma como herencia, nada despreciable de más o menos de U$ 28.000.000 cuando falleciera Mery.

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-Chad Vooper (primo de Mery): Es el hermano de George Vooper, pero a diferencia de él, compartía muchas cosas con Mery, y le tenía mucho afecto. Él no recibiría la herencia, a causa de un problema legal. Visitaba muy frecuentemente el palacio, por cuestiones de trabajo. -Eva Joil (BFF): Era su mejor amiga desde primaria. Vivieron juntas unos años y Mery le tenía suma confianza. Supuestamente se encontrarían, pero el Duque no sabía si se habían juntado. Según

mis

anotaciones,

había

bastantes

sospechosos, entonces decidí que lo mejor era hablar con todos ellos y tratar de llegar a conclusiones. Localicé a la mayoría de ellos, excepto a Eva Joil que no contestaba el teléfono.

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La primera persona en entrevistar era la cocinera; una señora robusta y baja, de pelo castaño y voz ronca. Esto fue lo que me dijo: -Como te habrás dado cuenta, hasta hace unas horas yo no estaba enterada de que la señora había muerto- dijo en un tono asustado- Yo no pude haber sido la culpable, ya que a los únicos lugares que tengo

acceso son, cocina,

lavadero e

invernadero. Estas palabras parecían ciertas y el duque me lo confirmó diciéndome que jamás la cocinera había estado en otros lugares. La cocinera dejó de ser una sospechosa. La segunda persona con la que dialogué fue con George Vooper parecía buen hombre pero nuestra conversación fue corta, sobre todo de su parte:

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-Si ustedes creen que yo mataría a mi prima por la tonta pelea que tuvimos hace unos años están verdaderamente maleducadamente-

equivocadosEn

mi

opinión

dijo deberían

investigar a empleados del palacio ya que son las personas que conocen mejor el lugar. Y por si acaso el día de la desaparición yo estaba en Roma, por un viaje de trabajo. Hubo un silencio en el que saltó a mi cabeza el tema de la herencia, pero no dije nada. Cuando terminé de hablar con él vi llegar juntos a Chad V. y al ama de llaves. Intrigado pregunté por qué habían llegado juntos y para mi sorpresa me dijeron que ellos se habían hecho muy amigos debido a su trabajo en el palacio y por cuestiones personales. Les pedí que hablaran por separado y haciendo un gesto extraño, aceptaron, primero hablé con el ama de llaves, quién parecía muy 28

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relajada, ella era una persona amable y tranquila. Me trató educadamente. Yo fui quién empezó la conversación: -¿Tenía usted una buena relación con Mery?pregunté. -No lo creo -respondió fríamente. -¿Y por qué razones usted dice no ser la persona culpable del delito? -Para empezar no podría haber escondido el cadáver en el sótano por dos razones: -Ese día yo no tenía la llave del sótano, ya que se la había entregado al jardinero para que pudiera obtener las herramientas eléctricas para arreglar el jardín. Además yo no podría haber tenido la fuerza para mover el cuerpo de Mery.

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Quedé satisfecho con su declaración y llamé a Chad. Él a diferencia de Levina, estaba algo nervioso: Esta vez también fui yo quién comenzó la charla: -Me han contado que tú y Mery se llevaban muy bien ¿no es así? -Claro, verás me siento muy apenado por su muerte, yo jamás podría hacerle algo así, la quería mucho y ella me había tratado toda la vida muy bien, mepasto daba muchas cosas y bienes. -¿Puedes decirme cuál era tu trabajo aquí?- le dije pensativo. -Sí-respondió- Yo reparo los electrodomésticos que tienen problemas a diario, soy el “técnico” del palacio. Terminó nuestra conversación y busqué a Francis para pedirle si me podía comunicar con Eva J.

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Me dijo que ella había salido del país por problemas familiares, pero que no había cometido el crimen ya que se había ido 3 días antes del asesinato. Tomé mi celular y llamé inmediatamente a la policía para denunciar a Chad Vooper, como asesino y a Levina Mateu como su cómplice. Verán, el ama de llaves mintió totalmente y lo dijo todo; El 30 de junio, Levina vino al palacio junto a Chad (quien haría un supuesto trabajo), y él mismo mató a Mery. Gracias a las llaves que Levina tenía, con SU FUERZA Chad llevó el cadáver hasta el sótano. Cómo llegué a mis conclusiones: -Primero Levina Mateu no le dio las llaves del sótano al jardinero, porque como ya anoté en mi agenda él había realizado su último trabajo la semana anterior al crimen (cosa confirmada por el duque). 31

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-Segundo si Levina no tenía la fuerza para mover el cuerpo de Mery quién más lo había hecho de no ser el propio Chad Vooper quién aprovechó para vengarse de no obtener ni un centavo como herencia.

Y así fue como le gané el misterio a West End jajajaja…

Autores: Emilia Serra – Justina Iturraspe

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Asesinato en la mansión

Todo ocurrió en la mansión Prediggi, cuando la hija, la mucama, el mayordomo y la cocinera lloraban exageradamente por la muerte de la señora Prediggi. La encontraron en su habitación, con sus costillas quebradas, un corte perfecto, profundo y certero en el abdomen y varios rasguños en la cara. Su alcoba era una escena de horror, estaba todo tirado y ensangrentado. La mucama rápidamente llamó a la

A.D.P

(Asociación de Detectives Profesionales). Pasaron 15 minutos hasta que llegó un hombre robusto, alto 33

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y con cara muy severa, su nombre era Winston Garano. -Bbu... bbue... buenos días seseñor.- Dijo la mucama con voz entrecortada. -Buenos días.- contesté.- Usted debe ser la que me llamó para que investigue una muerte. -Si, si de hecho quisiera que suba hasta la habitación. Subí y al ver todo el desorden y a la señora tirada, ordené: - ¡que nadie se mueva ni toque este lugar! Todo indicaba que esto era un asesinato, el corte en el abdomen no había sido con cuchillo sino que parecía hecho con tijeras filosas o algo punzante. En la habitación un olor dulzón se esparcía, no era muy común. Me daba la impresión de que era un perfume parisino. Toda esta situación me hizo dar cuenta que resolverlo no sería fácil. 34

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Me dirigí hacia Lucy, la hija de la señora, para que me contara acerca de su madre, si tenia cosas pendientes, enemigos y para saber los movimientos de estos últimos días. - Por lo que escuché la otra noche, cuando pase por la puerta de su habitación, ella iba a recibir una gran suma de dinero pero no se cuándo, dónde, ni quién se lo entregaría- Me dijo Lucy acongojada. Cuando terminé de hablar con ella, salí al hall de entrada, donde se encontraba el mayordomo y la mucama murmurando y teniendo conversaciones entrecortadas.

Pude

descifrar

las

siguientes

oraciones: ta…noch…stacion…renes…nce…edia. No entendí, pero deduje el siguiente mensaje: “esta noche en la estación de trenes, once y media”. Llegué a la conclusión de que ellos podrían ser los asesinos, pero igual no les dije nada, iría esa noche para atraparlos. Esperé durante media hora y llegaron, los vi y 35

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me escondí detrás de un árbol. -¿cuándo llegará la señorita Prediggi?, se está tardando

mucho-

preguntó

el

mayordomo preocupado. Salí de mi escondite y grité- no se muevan sé que son los asesinos. - ¿Los asesinos? - rió la mucama- nosotros no mataríamos a la señora ni que nos despidiera, era muy buena, además vinimos solamente porque teníamos que entregarle dinero a la familia Prediggi en secreto. - Eso es cierto - afirmó el mayordomo- pero debido a lo que pasó creímos que vendría su propia hija, capaz que ella sabría sobre el dinero. -Discúlpenme por desconfiar de ustedes-

dije

apenado. -No,

no

tiene

porque

disculparse-

dijo

el

mayordomo - ¿Usted nos puede llevar a la casa de la 36

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señora Prediggi?- preguntó el mayordomo. -Si, claro- respondí. El lunes por la mañana me dirigí a la mansión y toqué muy fuerte la puerta. Parecía que no habia nadie y de golpe se escuchó una voz muy grave como recién levantada. -Ya voy, ya voy puede esperar- Dijo la señorita Prediggi. -Buenos días señorita, me gustaría pasar y almorzar con usted ya que estoy muy

apenado porque no

puedo resolver el caso. -Claro que sí como no. La comida era blanco de ave con una ensalada exótica, le sentí un gusto muy raro como si estuviera perfumado. Entonces 37

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pregunté:

-¿quién

realiza

estas


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exquisiteces? -La famosa cocinera Berta que hace mucho tiempo que trabaja en esta casa. Si quiere se la presento ya que ese día que usted vino no se encontraba aquí. Desde el fondo del comedor apareció una mujer mayor, desgarbada pero de modales muy finos. Era francesa. Hablé con Berta y me contó de su gran experiencia en cocina y que a las aves acostumbraba cortarlas con tijera. En

ese

momento

decidí

llevarla

conmigo acusada de asesinar a la señora. Una vez en la ADP Berta me relató los motivos del crimen. La señora Prediggi la chantajeaba con contarle a la mucama que Berta era su madre y que la habia abandonado para no perder su buena relación con sus padres.

Esto la ponía en una

situación muy incómoda. Berta el día del crimen 38

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subió con la bandeja del desayuno a la alcoba de la señora y cuando esta se descuidó, le pegó tirándola al piso y le clavó con saña las tijeras de la cocina. El olor que se sentía era el perfume frances que Berta acostumbraba usar. FIN

Autores: Serena Fouces – Mora Ramírez

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El Caso Bertown Jeason Bertown nació en Buenos Aires en 1962. Desde su infancia le gustaba leer muchas novelas y ver películas. En especial de detectives. Pero luego en 1989 cuando el tenia 36 años, todo cambió. Sus padres habían muerto en un accidente automovilístico en el año 1969. En su trabajo no le pagaban y lo despidieron. Nadie lo quería y su única compañía eran su libreta, su reloj y su mascota Filegar que era un gato que tenía desde su infancia. Vivía en un departamento deshabitado de Buenos Aires, en la esquina de 9 de Julio, en frente a una estación de servicio. El departamento estaba lleno de polvo y las paredes estaban un poco derruidas. Recuerdo muy bien sus palabras: “no

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importa lo que tenga, importa como esté y como me sienta”. Una mañana Jeason decidió ir a tomar un café, pero necesitaba dinero. Por esa razón es que estaba sentado en la vereda de la calle 9 de Julio con Filegar (su gato), esperando a que alguien quisiera que le lavara el auto. Pasaron 20 minutos hasta que un hombre alto con un gorro negro y de traje bajó de un auto de patente DHF 320. Jeason aprovechó la oportunidad y le dijo al hombre: -Eh don ¿le lavo el auto?El hombre le respondió: -Está bienA Jeason se le dibujó una sonrisa en el rostro. Luego de lavar el auto el hombre volvió y le pagó $30. El hombre le habló de una propuesta de negocio en la que pedía que le buscara pistas para resolver el caso de su ex-mujer. 41

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Al otro día murio Rozalinda Gomes (la ex-esposa del hombre)

fue

encontrada

ahorcada en el patio de su casa, se notaba una gran cortadura en su brazo izquierdo y una gran mancha de sangre en la pared. En ese momento un detective entraba en el caso y se diriguia a la casa de la victima, estando alli buscaba y buscaba pero no podia encontrar niguna pista mas que la mancha de sangre y una pequeña huella de sangre. Cuando llevaron a examinar la mancha resulta que la huella era de uno de los policías que accidentalmente se apoyo sobre la mancha y dejo sus huellas. Pasaron 2 semanas y Jason Bertown estaba sentado en su casa sin saber como resolver su caso, pensando y 42

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pensando se le ocurrió la idea de que el hombre de la estación de servicio le pidió que investigara las pistas del caso y como no había ninguna pista podría ser que el hombre estuviera mintiendo. Al otro día el policía apreso al hombre de la estación el cual confesó su crimen en el juzgado donde se hallaba sentado Jason Bertown. Se desato una gresca entre el hombre y Jason: él le pregunto cómo lo supo-tu me habías dicho que buscara las pistas del caso, pasaron 30 días y no encontré ninguna pista, en mi casa pesando me pregunté si podía ser que tu me hallas mentido y te seguí por 4 días-. -En uno de los días te juntaste con un colega en un bar y te escuche hablando de cómo me habías mandado a buscar pistas falsas, en ese entonces vine aquí y te denuncie, eso fue todo lo que paso-. A la mañana siguiente salió en el diario ENSERRADO EL EX-ESPOSO DE Rosalinda Gomes, DETECTIVE 43

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CONTRATADO PARA TRABAJAR CON LA POLICIA, GOLEARON BOCA Y RIVER… -Al fin cumplí mi sueño de ser detective, mis casos recién empiezan y de la mejor manera

FIN Autores: Horacio Gayoso – Ciro Duré

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Muerte en Hawaii Este crimen sucedió en Paraná, Entre Ríos, por ese lugar al que le dicen “El Rosedal”. Por la tarde, allí, se encuentran todos los enamorados, pero por la noche, el lugar se vuelve bastante clandestino. Muy cerca, se encuentran hoteles, kioscos y nuestras

casas.

Primero, lo primero, nosotras somos dos amigas, Aitana y Belén, tenemos doce años, vamos a la misma escuela, aunque no compartimos los mismos deportes, somos amigas, yo, Aiti, hago danza, y Belu hockey. Esto que les contaré nos pasó en las vacaciones de verano... Nos encontrábamos un día en la playa almorzando cuando de repente, nuestros papás comenzaron a hablar sobre una oferta de un viaje a Hawaii.

Todos aceptaron y decidieron ir a tan

esperado viaje en las vacaciones, obviamente solo 45

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iban los padres, ya que nos quedamos con nuestros hermanos mayores, varones solo hay uno, Lucio, hermano de Belu que también como hermana la tiene a Sol , son mayores que ella. Clara es mi hermana mayor, pero tambien tengo una hermana menor, Jana, y estas son nuestras amigas: -Emilia(Emi) -Paola(Pao) -Dolores(Dolo) -Justina(Justi) -Serena(Sere) -Mora(Mori) -Florentina (Flor) -Juana (Juani) Todo sucedió el 14 de diciembre, cumpleaños de Belu. Nos organizamos para hacer un pijama 46

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party en lo de ella. Todas llevaron sus bolsas de dormir, a eso de las once y media comimos pizza y empanadas, cantamos el feliz cumpleaños, miramos una pelicula de terror, que Paola no vio, ya que tiene terror y asco. Después de la terrorifica pelicula nadie quiso acostarse al lado de la ventana, dormimos todas juntas. Eran las cuatro y media y todas seguiamos despiertas mirando el noticiero. Es interesante

ya

que

a

veces

tiene

cosas

extraordinarias. Al dia siguente fuimos todas juntas a patinar, andar en bicicleta y skate por el rosedal (lugar en el que se encuetra mi casa), fuimos a mi casa a buscar la cámara de fotos cuando de repente a Emilia se le escapó Coco. Ella por miedo, no nos quiso decir nada. Hasta que después de un rato descubrimos que Coco no estaba. Salimos a la calle a buscarlo, tocamos timbre en todas las casas del barrio, y nada. Después de una hora de intensa busqueda oímos un grito, 47

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-HAAAHAA, AUXILIO!-¿Qué pasa? ¿Quién es? ¿De dónde viene? Preguntó Florentina. -Debe ser de algunas de estas casas.. dijo Dolores. -No sé, averiguemos! Exclamó Serena. -Y Mora? Preguntó Paola. -Ella estuvo conmigo, pero después se fue... dijo juana Mora, nadie supo donde estaba tampoco en qué momento había desaparecido o se había ido. -No creo que se haya ido - dijo serena -Nos hubiera avisado. -Vamos a separarnos cinco buscan a Coco y las otras a Mori.

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- Juana, Sere, Justi y Emi vayan por la izquierda y las otras vengan conmigo- Dijo Belu. La búsqueda de Mora seguia, y la de coco también, eran las 24:36, y este caso seguia en pie. Organizamos para que el grupo que iba con Emi, se tomara un descanso en la casa de Aiti un rato, mientras nosotras seguiamos buscando. Cuando se fueron a la casa escuchamos unos gritos de asombro... -Haay! Estaban acá, los buscamos por todas partesno se supo quien lo había dicho. Pero estábamos seguras que provenia de la casa, fuimos corriendo cuando de repente vimos a las chicas asombradas de ver lo que había alli, Mora y coco jugando a la pelota. Ella nos dijo que quería ir al baño, por esa razón no nos había avisado. 49

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Al fin y al cabo todo salió bien, nos quedamos comiendo pizza y tomando coca cola. Oimos en el noticiero, la muerte de

una

anciana de calle Mitre llamada Patricia Figueroa Agüero Gaitán de los Pingüinos de Madagascar, se dice que era la anciana “de la casa sin puerta”(es una casa que esta enfrente de la casa de Aiti y no tiene puerta) Al otro dia, horario al que deberian haber llegado nuestros papás, no lo habían hecho. Recibimos dos llamadas al mismo tiempo, una que parecia ser de una anciana con voz ronca, y la otra...

Autores: Aitana Churruarín – Belén Leneschmidt

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En busca del asesino (diario del HC) Por la mañana después de una noche de fiestas en el hotel cinco estrellas “The National” de Miami, el 27 de diciembre del 2010 apareció un hombre muerto al lado de la piscina con su cuerpo incrustado con la punta de una sombrilla; el estaba todo ensangrentado y su cuerpo astillado de vidrios, seguramente por la ventana donde fue despedido. Fue encontrado por la encargada de limpieza, Jenny Boa Vista. Yo el detective Horacio Cane, fui llamado para resolver este caso; tengo 49 años, hace 24 años que me dedico a esta profesión. Hoy 28 de diciembre fui a investigar la escena del

crimen,

donde

deduje

que

al

actor

multimillonario Max Cligh había caído por una ventana, ahora lo que me faltaba era saber por cual,

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lo que seria una pista para saber si fue un suicidio o un asesinato. Entonces me dispuse a recorrer todas las habitaciones que había en el hotel y preguntarles a los huéspedes si no habían notado ningún movimiento extraño esa noche. Allí lo vi la habitación de Marilyn Peace, la 341 tenía la ventana del living que daba a la piscina sin un vidrio sano, todos desparramados por el suelo; pregunte pero nadie me supo responder con claridad lo que paso. Ahí lo tenía mi primer sospechoso. La segunda sospechosa, Jenny Boa Vista, luego de encontrar a Max no volvió a tocar el tema, entonces decidí ir a revisar su casa; luego de buscar y buscar encontré en el sótano dentro de una bolsa de consorcio el uniforme de trabajo con rastros de sangre y astillas de vidrio.

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El

tercer

sospechoso

José

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Ramires

el

empresario más rico de Miami; hasta que en 2004 Max Cligh hizo un negocio que lo llevo a la fama; desde ahí el señor Ramires le tuvo mucho rencor. Ese sería un buen motivo para matarlo. El viernes 30 de diciembre cite a los tres sospechosos a declarar. Marilyn Peace (Huésped de la habitación 341) fue la primera

en

declarar

y

esta

fue

nuestra

conversación: -¿Donde estuviste el día lunes?- Pregunté para dar

inicio

a

la

declaración.

-Estuve… en... en... la… la… peluqueríaTartamudeo

la

joven.

-¿A qué se debe el vidrio roto de su habitación?- Dije intentando sacar información. -Se debe a que el otro día me pelee con mi amiga y revolee un palo de escoba que fue a 53

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parar directamente al vidrio de la ventanaRespondió con claridad. -¡Ja ja! ¿Usted cree que yo soy tonto?- Le dije -¡SOY INOCENTE!- Exclamó Haci siguió la conversación pero no logre sacar ningún dato interesante. La verdad que me pareció una verdadera mentira la pelea que tuvo con la amiga. Jenny Boa Vista (Encargada de limpieza) nuestra conversación: -¿Por qué escondías tu uniforme del trabajo?pregunté -No lo escondía si no que lo estaba por tirar porque se me había arruinado limpiando la habitación 341- Respondió la empleada. -¿Usted sabe cómo se rompió la ventana?– la interrogue -Por lo que me contó la huésped, ella estaba 54

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barriendo y sin querer azotó el palo contra el vidrio y me llamo para que la ayude-dijo con tranquilidad -ahí fue cuando juntando los vidrios me corte y ensucie el uniforme con sangre y astillas de vidrios- me explico. Me pareció que la señorita Boa Vista decía la verdad, pero no eso no quiere decir quesea inocente, porque faltaba analizar de quien era la sangre e interrogar al último sospechoso. José Ramires (Empresario) no quiso declarar, lo único que dijo fue: -Max era mi… amigo. Es imposible que creas que yo lo pude haber matado- me dijo enojado. Gracias a las declaraciones, sospechas e investigaciones deduje que el asesino fue…….

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El caso fue resuelto yo el policía Augusto Pérez les explicare porque escribo yo y no Horacio Cane. A él lo mataron a noche y por lo que veo es que fue antes de escribir el asesino de Max Cligh que es el mismo que mato a Horacio. El asesino se declaro culpable en una carta que dejo

en

la

comisaría,

esta

decía:

Vengo a declararme culpable de los crímenes de Max Cligh y Horacio Cane. A Max lo mate por haberme despedido y dejarme en la ruina; como el confiaba tanto en mi yo le pedí que cuando se fueran todos los invitados de la fiesta valla a la terraza del hotel para hablar con migo. Lo espere en una esquina, cuando llego empezamos a discutir, yo me enoje y empecé a pegarle con una botella de vidrio que había en el suelo; cayo desmallado

y

todo

ensangrentado.

Cuando

reaccione de lo que había hecho intente barrer los 56

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vidrios y borrar mis huellas digitales pero al ver que no lo lograba lo tire a la piscina, pero no cayo ahí sino que cayo en la punta de una sombrilla. Cuando lo vi muerto me asuste tanto que corrí a mi habitación y en la desesperación rompí la ventana. A Horacio Cane lo mate porque estaba a puto de publicar quien era el culpable de la muerte de Max. Cuando vi su sangre corriendo escribí esta carta para delatarme porque me sentí muy mal. Si quieren encontrarme vengan al salón del hotel. Yo Augusto fui al salón; y ahí me encontré con el asesino en llamas. Intente salvarlo pero ya era muy tarde. Les puedo decir que el asesino fue Marilyn Peace. Fin Autoras: Paola Haller y Dolores Ibañez

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Los Crímenes del Barrio Richmond

En una noche en el Barrio Richmond (Londres) seando a alguna persona, de repente se apagó repentinamente, en seguida todo estuvo en silencio absoluto, por unos segundos. Los vecinos acudieron a la policía enseguida mientras que algunos trataban de entrar a la casa para ver lo que había sucedido pero la puerta estaba cerrada con llave. Luego la policía y forzaron la puerta, la abrieron y todos se quedaron paralizados por el horror. La mujer había sido asesinada de una forma muy extraña: 2 apuñaladas en el torso, le habían cortado los dedos de sus manos y unas marcas en su cuello me decían que había sido asfixiada. La mujer vivía sola en su casa y se había postulado para ser Gobernadora. Me llamaron para resolver el caso, mi nombre es Dr. Saimon. 58

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A la semana siguiente de lo sucedido, seguía sin encontrar evidencias. Había ocurrido otro asesinato en la casa 256. La mujer más codiciada del barrio había sido asesinada con un disparo en la cabeza.

Como

no

encontré

cartuchos dentro ni fuera de la casa me di cuenta que era un franco tirador. Cuando empecé a investigar encontré algunos testigos y testimonios: -La Señora Elizabeth (Postulante gobernador) ese día estuvo todo el tiempo en su casa. Dijo el Sr Morgan (Vecino) escuchó un grito muy fuerte que parecía como si estuviesen torturando a alguien. -Un señor hace como una semana se mudó a este barrio él es muy extraño nunca se lo ve salir de su casa. 59

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Dijo La Sra. Rubby. Descubrimos que se llama William Parker (el hombre recién mudado), él

fue mi primer

sospechoso. Fui a revisar su casa lo que vi no fue nada extraño. Él vivía como cualquier otra persona del barrio. Su casa era un poco más pequeña que las demás. Pero algo despertó mi curiosidad,

unos

cartuchos de balas. Le pregunte qué hacían esos cartuchos de balas en su casa. Él respondió que nunca los había visto, que no sabía nada de armas. Pero no soy ningún tonto esos cartuchos no eran de francotirador y además si hubiese sido él no tiene sentido, ¡¿por qué se llevaría los cartuchos?! Mi siguiente sospechoso fue Morgan, también fui a su casa al igual que con William no vi nada extraño. Vi una soga detrás de un perchero. Era del mismo tipo de la que había encontrado.

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Claramente se trataba de dos asesinos diferentes. Cada uno trata de culpar al otro. Fui a hablar de nuevo con William y encontré unas interesantes pinzas con sangre, me las lleve sin que él lo se diera cuenta. Al día siguiente fui a entrevistar a Morgan, parecía que él no tenía nada que ver con el crimen hasta que encontré unos extraños rastros de piedra en las rodillas de un pantalón. A la mañana siguiente fui a revisar una colina me pareció el lugar justo para un franco tirador. Encontré unos extraños rastros de pólvora y un cartucho tirado en el piso entonces también vi unos agujeros. Saqué las piedras que había encontrado en el pantalón de Morgan y concordaban con los agujeros faltantes. Todo esto me llevaba a que Morgan. Había sido el autor del asesinato de Elizabeth. Otra investigación me llevaba a que el asesino de la primera mujer era William un análisis de ADN de sangre que encontré en las pinzas me lo confirmaba. Fui a encarcelar a 61

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los dos hombres, un interrogatorio me lo confirmó todo. Ellos eran los autores de los crímenes. El móvil que había llevado a Morgan a cometer el crimen, era que la mujer se había negado a besarlo y William lo cometió porque estaba en el partido contrario al de la mujer y ella estaba ganando según las encuestas. Autores: Gervasio Martínez Lacabe y Gino Fittipaldi.

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Muerte en el Bosque Un 7 de octubre del 2000 fue cuando ocurrió el homicidio. La familia González se fue de vacaciones a Las cataratas del Iguazú; se iban a alojar en un hotel lujoso con una habitación de cuatro camas, una amplia cocina y dos baños. Al llegar del viaje los chicos estaban listos para salir a jugar mientras sus padres bajaban el equipaje. La madre le dijo que volvieran antes de las 18:00 porque tenían que prepararse para cenar. Así quedaron de acuerdo, y los hermanos corrieron ansiosos al patio del hotel. El cual lindaba con un bosque de milenarios arrayanes. Entretenidos los niños en los juegos del jardín, un chistido hizo volver sus cabezas hacia el bosque, un niño vestido de forma muy extraña los invitaba a jugar con él.

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- Ustedes, hermanos, ¿quieren conocer los secretos de este bosque?, vengan conmigo. Agustina, dirigiéndose al niño: - Claro que sí, pero, ¿cómo sabes que somos hermanos?- Sólo lo supuse.Dalmiro, corrió detrás de su hermana. Los tres niños se perdieron en la espesura de ese inmenso bosque. - Me llamo Dante, vivo aquí desde que nací, mi padre es leñador, mi hermano mayor lo ayuda, y yo cuando puedo escapo de mi casa para no hacer los quehaceres domésticos con mi mamá. ¿Quieren conocer el cementerio de este pueblo?, es un largo camino, al final del bosque. Algo asustado preguntó Dalmiro - ¿Pero no nos perderemos? 64

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Agustina, niña de 12 años, apasionada por el suspenso – ¡Él conoce muy bien el lugar!

Llegando ya al cementerio Dante empezó a contarles sobre el cuidador, un tipo raro, sin familiares vivos. - ¡Ay qué miedo!- exclamó Dalmiro. - Pero tonto ¿por qué crees que está cuidando muertos? – dijo Agustina.

Al rato llegó el padre de Dante preocupado por su hijo que no regresaba a casa echándoles la culpa a los pobres hermanos. Y los obligó a ir con ellos a la casa.

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La casa estaba frente al cementerio, dentro de ella había un olor nauseabundo. Los niños fueron al cuarto de Dante. - ¿Me darías un vaso de agua? – preguntó Agustina. - Claro que sí. Bajá y buscá una jarra en la heladera- respondió Dante. Mientras tanto, los padres en el hotel esperaban a sus hijos que no regresaban; preocupados salieron a buscarlos, preguntaron en recepción, les dijeron que no los habían visto desde la tarde muy temprano. Ellos buscaron en el patio del hotel y vieron el bosque, inmediatamente cruzaron para allá. 66

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En 3 horas de búsqueda no encontraron nada, no se dieron cuenta que tenían frente a sus narices el cementerio. Le preguntaron al guardia y les dijo que estaban en la casa del leñador Pedro.

Se dirigieron hacia la casa, y en el cerco de la entrada, encontraron los pequeños cuerpos de sus hijos. En medio de una crisis de llanto, Silvia, la madre, abrazó y besó a sus niños; Carlos, el padre, pegó golpes desesperados en la puerta de entrada. Con cara inexpresiva atendió Pedro. -¿¡Tanto ruido, qué sucede!?A los gritos respondió Carlos - ¡Mis hijos, ¿qué fue lo que hizo? -¿Qué cree usted, pude hacer, estando dentro de mi casa con mi familia?-

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Detrás del hombre, apareció Dante con, sus mejillas rojas e hinchadas y llenos de lágrimas sus ojos. - ¡Niño! Tú me dirás lo que pasó, sé que estuviste con mis hijos en el cementerio y en el bosque.Dante estaba tan asustado que su cuerpo entero temblaba como una hoja y no podía dejar de llorar. En ese momento llegó

el guardia con sus

ayudantes; pidió permiso para entrar a la casa, mientras sus colegas revisaban con sumo cuidado los cuerpos tirados de Agustina y Dalmiro. El policía tenía fuertes sospechas sobre Pedro, y debía encontrar pruebas. Se dirigió al sótano, pero la puerta estaba trabada. Buscó herramientas, se dio cuenta que 68

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sólo estaba sostenida del otro lado, con un poco de presión logró abrirla. Estaba allí escondido el hijo mayor. Su ropa y sus manos manchadas con sangre, sostenían una cuchilla también ensangrentada. El muchacho paralizado por el miedo no dejaba de llorar mientras gritaba: - El me obligó a hacerlo, lo hizo antes con otros niños. Pero yo debía callarYa todo estaba claro, el guardia no se había equivocado. Pedro era el asesino del pueblo. Autoras: Valentina Aldaz y Sofía Sagemüller.

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El Asesinato Misterioso En 1998, el 23 de noviembre a las 12:10 pm. El señor Clavens fue asesinado, en un Hotel llamado Tiburines. Le habían dado un mes de vacaciones. Él decidió irse a Rosario del Tala con su mujer llamada Lucy. En el momento del asesinato se encontraba en su cama durmiendo. Su mujer se había ido a bañar. En el instante en que se metió a la ducha se encendió el televisor y entró la mucama junto a su ayudante para limpiar la habitación. Al salir del baño, se disponía a vestirse, cuando se encontró con una escena

impactante. El señor Clavens estaba

degollado. Ésta se desmayó, por la impresión y al ver tanta sangre derramada. Desde hacía 15 días, él venía escuchando sonidos muy extraños, como gritos, cadenas que se arrastraban, pasos, golpes, etc. 70

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Un día antes de su viaje había ido a visitar a su madre al cementerio. Desde ahí comenzó a llevar espíritus a su lado y él no lo sabía.

Lucy despertó de su desmayo y rápidamente llamó a la policía. Cuando llegaron a la escena del crimen, la mujer empezó a culpar a la mucama y su ayudante.

La policía designó a un detective para que resolviera el caso. Él se llamaba Anubadis. Su personalidad era muy especial. Tenía un acento francés, usaba un tapado a cuadros, pantalones de seda, zapatos muy grandes y era de piel negra.

Anubadis investigó el caso. La policía le pidió que hiciera una encuesta a los sospechosos. 71

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El detective se encontraba en una habitación con la mucama. Él pregunto: -¿Que llegó a ver antes de irse?Mucama:- yo alcancé a ver una sombra con un cuchillo, se dejó de ver en la entrada del bañoDetective:-¿que hizo usted? Mucama:-al verlo me asusté y salí corriendoDetective:-¿a

qué

hora

entró

usted

en

la

habitación? Mucama:- a las 12:15 Detective:- muchas gracias señora

Anubadis se encontraba en la habitación con el ayudante de la mucama. Detective:-¿qué vio? 72

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Ayudante:-al entrar a la habitación vi al señor Clavens degollado. Detective:-¿qué hizo usted? Ayudante:-Al ver esa escena tan impactante salí corriendo junto la mucama, pero quería investigar algo. Detective:- ¿a qué hora ocurrió el asesinato? Ayudante:- A las 12:30 Detective: La hora no coincide con la que nombró la mucama. Muchas gracias por su ayuda.

Lo que comprobó Anubadis fue lo siguiente: una sombra con un cuchillo entró al baño, mientras Lucy se duchaba. Así que se puso a pensar que Lucy era la asesina. Era su conclusión. Tiempo mientras ella dormía. Anubadis rondaba en su casa, vigilando. 73

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De repente comenzó a gritar dormida. Él se dirigió a la habitación donde se encontraba Lucy para preguntarle qué le pasaba. Despertó y Anubadis dialogó con ella. Este le preguntó por qué gritaba, y ella le contestó que estaba soñando, con espíritus protectores de su marido. Cuando el detective, le dijo que lo había soñado tal vez

por remordimiento, por la culpa de haber

matado a su marido. Lucy comenzó a llorar. En un momento declaró que ella lo había matado, porque los espíritus la obligaban. FIN Autores: Candelaria de Basily – Abril Viñuales

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El Ladrón de Órganos

Eran las 12:00 del mediodía y en la casa Thomson era un día soleado. Yo estaba comiendo el almuerzo, como un día normal. Pero cuando prendí la tele, en vez de ver noticieros presumidos y de más, vi algo que me asombró, algo que me lleno de horror. En una villa cerca de acá, un ladrón había robado una casa, raramente la hija de la familia había desaparecido sin dejar rastros. Finalmente la había encontrado, después de una semana, con el tórax abierto sin el intestino delgado con una estaca clavada en el medio de la cabeza, atada a un árbol. Era viernes, como todos los viernes fui al bar y me encontré con mi amigo Herbert que estaba investigando el caso de la chica fallecida. (Yo)-Herbert, ¿vio el caso de esta chica que se encontró hecha pedazos y atada a un árbol? 75

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(Herbert)-Si lo vi, y lo estoy investigando, es muy difícil adivinar quién fue el que hizo este desastre. Lo único que encontramos fue una botella de cerveza de este bar. (Tomamos unas cervezas, yo más que Herbert). El lunes viendo la televisión vi otra noticia sobre otro fallecido, masacrado, un

muchacho con el

lomo medio abierto, le habían sacado los pulmones, y para eso le habían tenido que haber roto las costillas. Lo encontraron colgado por el cuello en un árbol a cinco cuadras de mi casa. Cuando me volví a reunir ese viernes con Herbert en el bar, lo noté un poco decepcionado y le pregunte porqué. Él dijo que era porque la esposa se había separado de él. Le dije que encontraría el amor en otra mujer. Charlamos un rato y como siempre tomamos cervezas.

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- “No sé qué me pasa, pero siempre vuelvo sin conciencia a mi casa”, le dije yo a Herbert. (Herbert)-puede ser que alguien te lleve o que camines sonámbulo, pero lo importante es que volvés sano ¿no? (Yo)- Sí tienes razón. (Yo)- Herbert ¿te gustaría venir alguna vez a casa? Podrías al fin conocerla. (Herbert)-Mmm...No

tengo

esta

semana

ocupada. (Yo)- Vení cuando puedas. (Herbert)- Ok, si puedo paso a visitarte. (Volví a mi casa sin saber cómo). Ese sábado cuando me levanté amanecí con una mancha roja en la camisa, no le di importancia porque pensando que había sido la salsa de fideos del mediodía. Fui directo a la cocina, cuando prendí 77

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el televisor estaban pasando un documental sobre el calentamiento global pero de repente lo interrumpieron. Una noticia de la muerte de alguien. La fallecida me parecía conocida y me pregunté: ¿qué hace Herbert ahí? - Oh no!!! mataron a la esposa de Herbert y la destrozaron a dos cuadras de mi casa, Le abrieron la cabeza, le rompieron el cráneo, le sacaron un cuarto del cerebro y el otro pedazo le quedo colgando de la parte inferior. Traté de hablar con él pero no me atendió. Fui al velorio a las 2:30 y raramente no sentí tristeza tampoco felicidad. A la noche no quise ir al bar. Me dormí y a los 45 minutos aproximadamente, tuve un sueño. No eran fantasías, parecía muy real. Se trataba de que me levantaba de la cama e iba hacia la terraza y lo veía a Herbert corriendo por el medio de la calle .Un tipo raro lo alcanzaba y lo 78

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apuñalaba por el pecho. Me desperté y por miedo corri a ver la tv para ver si informaban algo raro...no había nada. Al rato me acordé que venía Herbert a mi casa la noche siguiente. Me dediqué todo el día limpiando, ordenando y preparando todo para cuando llegara el invitado. Salí al patio interno y sentí un aroma extraño como si algo estuviera en mal estado. De repente vi una puerta que nunca antes había visto. Al entrar quedé impactado por lo que había allí adentro. Había un pulmón humano tirado y un corazón arriba de una mesa con un puñal clavado, como yo soy sensible me desmayé al segundo. Cuando desperté, lo único que recordaba era que había estado organizando la casa. Desayuné y esperé ansioso al invitado, después de unas horas sonó el timbre de la puerta, era Herbert que venía muy elegante. Lo hice pasar muy ansioso, le enseñé toda mi casa, charlamos un rato. Al oscurecer lo invite a recorrer la casa. Fuimos hasta 79

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el patio interno. Cuando entramos vi una puerta, me parecía conocida. Después recordé todo muy detalladamente. (Herbert)-¿qué guardas allí?- mirando la puerta. (yo)-nada-respondí tímidamente. Pero su curiosidad lo atrajo y sin mi permiso abrió la puerta, al ver lo que había dentro dijo: (Herbert)- Fuiste tú, el maldito el que cometió todo estoReaccioné de mala manera y mi conciencia macabra hizo que lo matara con mis propias manos. Lle saqué los ojos y los recubrí con barro, le corte las piernas, los brazos y la cabeza. La cabeza quedó dentro de un balde. Yo me fui a otra ciudad para reiniciar mi vida, pero algún día volveré por ti...

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FIN Autores: Gianfranco Perissutti y Francisco De Lisa

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Desaparición en Hawaii

El 15 de octubre de 1998 mi hija Ester desapareció en Hawaii. Todo empezó aquella noche cuando ella estaba jugando afuera con sus amigas y no regresó. Yo estaba desesperada, no sabía qué hacer. Me encargué de comunicarle al barrio lo que había sucedido. Nadie había visto nada... salvo tres personas. A los dos días de su desaparición llamé a la policía. Las tres personas que vieron algo fueron a declarar. Una de ellas era la Señora Rodríguez, que la cuidaba cuando yo tenía que salir. Ella

había visto un

hombre encapuchado que la había llevado hasta una trafic blanca de patente 101FRD. Otro era el Carnicero Loco. Él había escuchado ruidos extraños 82

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y cuando había salido para ver, no había encontrado nada. Por último mi hermana María también había visto la trafic y los había perseguido hasta un galpón... Al día siguiente de las declaraciones, es decir el 18 de octubre, pasó por mi casa una trafic blanca pero no alcancé a ver la patente, el hombre de la trafic era joven y bastante delgado. Dentro de ella se escuchaban gritos como pidiendo auxilio. Yo salí corriendo pero no los alcancé. Yo sabía de un hombre al cual mi marido le debía mucha plata, no lo conocía.

El 20 de octubre llamaron a mi casa, como cualquier otro llamado. Era un hombre diciendo que tenía a mi hija. Para volverla a ver, me dijo, tenía que pagar la plata que debía mi marido. También dijo que le tenía que dar la plata antes del 1 de noviembre o 83

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sino... y se cortó la comunicación. Inmediatamente llamé a la policía, y me preguntaron si había quedado algún número marcado en mi teléfono, dije que no pero tenía un localizador de llamadas.

El 21 de octubre fueron a mi casa los policías y detectaron que la llamada venia de la cuadra del carnicero. Ya estaba cansada pero decidí salir a caminar. Pasé por la cuadra de carnicero y en la puerta de su carnicería había una trafic blanca, la patente estaba cubierta con un papel, cuando lo saqué, sonó la alarma. Salí corriendo. El 25 de octubre. Estaba con mucho miedo de que le pasara al algo a Ester. Decidí ir a la carnicería y entrar. Cuando entré había un olor feo, fui al pasillo y escuché gritos. El

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carnicero decía: cállate o mato a tu madre. Me fui a mi casa. Decidí no contar nada a la policía. El 27 salí a buscar plata prestada, solamente junté $500 y me faltaban $1500. el 1 de noviembre salí a protestar por todo Hawaii hasta que me llamaron al mediodía y me dijeron que habían encontrado a mi hija muerta en la carnicería. Tenía que ver si de verdad era ella. Enseguida fui hasta allí y me di cuenta que era mi hija Ester. El 3 de noviembre le hicieron una autopsia. Había muerto a raíz de un disparo en la cabeza. Inmediatamente el carnicero fue preso. El 5 de noviembre fue enterrada con mucho dolor y tristeza. 5 años después.. 85

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Se descubrió que el carnicero no la había matado a Ester, sino que la había matado su propio padre Pablo. Pablo fue encarcelado 10 años y después el carnicero lo mató para vengarse de lo que había pasado 15 años atrás.

Autores: Clementina Muñoz y Julia Singer

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El Caso de la niña Martes 13 de diciembre 1999

Hace unos años en el barrio de “La favella”, vivía una joven niña de 10 años llamada María. Ella era muy amigable, bella, alta, fina. Tenía un aspecto de ser muy débil, sumamente delgada. Esto respondía a la pobreza en la que vivía. Había días que no tenia nada para comer. Era huérfana, sus padres habían fallecido cuando ella tenía apenas 5 años. Un día, María estaba sola y aburrida. Decidió ir a dar una vuelta por el barrio. El lugar era muy pobre, las casas no eran como ahora, sino que eran más precarias. La gente no era muy elegante ni muy formal. Mientras lo recorría, se cruzó con una mujer muy delicada llamada Carla, a la cual le dio lástima, por eso la adoptó. Al llegar a su casa, María conoció a la 87

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familia de aquella mujer. La niña le empezó a contar su pasado que no era tan agradable, ya que había quedado huérfana, un año después de eso, la habían secuestrado, y al año siguiente, la habían devuelto no en muy buen estado. En la mañana siguiente, la mujer, María, y su familia, llamaron a detectives para descubrir quien había secuestrado a la niña tiempo atrás. Cuando llegaron les contaron lo sucedido, los detectives comenzaron a buscar, como no dio resultado, dijeron que volverían en un tiempo. Mientras tanto, estaban investigando el caso de un secuestrador, que tal vez estaba relacionado con el pasado caso de María. Estaban rastreando huellas cerca de un puente colgante, donde habían encontrado

huellas de

zapatos, que los condujo hasta un árbol en cuya copa se encontraban prendas de vestir. Luego de 88

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esto, hallaron otras huellas que los llevaron a encontrar una casa abandonada. Al verla con claridad en una foto, María dijo que ella ya había visto esa casa antes, por eso los detectives, la familia y la niña sintieron curiosidad por ir hasta allí. Al entrar, descubrieron herramientas de maltrato. Luego, descubrieron una habitación donde hallaron pelos. Cuando fueron al laboratorio de investigación para analizarlos, pudieron dar con el criminal. La niña al verlo, insistió en negar la posibilidad de que fuera él. Los detectives prosiguieron la búsqueda. Hasta el día de hoy, siguen desapareciendo niñas y María está en peligro. Si alguien sabe algo, por favor, hable…. FIN Autores: Cristobal Venturini – Nicolás Monti

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El Criminal del 6º “B” Era viernes 13 de agosto de 1920. Se escucharon gritos de unas chicas en la casa de Forest. Los vecinos llamaron a La policía. La policía vino rápidamente con el detective Jordan. Entraron a la casa y vieron sangre en el suelo y la casa desordenada. Vieron revistas tiradas en el suelo, cajones, y un cigarrillo consumido por el criminal. El criminal había dejado una carta en el baño que decía:

“s m b n m e pq y r m h “

Entonces me lleve la carta a mi laboratorio. La carta no era fácil de descifrar. Entonces se la lleve a la policía y

se la di al oficial Ramón para que la

descifre. Mientras en la calle libertad al 3000 90

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encontraron una chica muerta de un navajazo en cuello y había una carta que decía: h d b c v ynmyebasp Luego me llamo por teléfono el detective Ramón y me dijo lo que decida la carta: SI ME BUSCAN NO ME ENCONTRARAN PORQUE YO ESTARE ROBANDO MAS HOGARES. Entonces yo le dije que le daría otro acertijo y que lo haría a cambio de $ 50.000 pesos. Colgué el teléfono. Mientras estaba en casa tipo 11:45 escuché un disparo de un arma, fui a la habitación de mi hijo y lo encontré tirado en el suelo,

sin

ningún

movimiento,

tieso.

Llamé

desesperado a mi compañero Ramón, luego a la ambulancia. La ambulancia llego rápidamente, y se llevaron a mi hijo. En el suelo había una carta que decía: "SOY YO. ESTOY CERCA. MAÑANA TE ESPERO EN MI CASA: LIBERTAD 140 A LA MEDIANOCHE" 91

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Entonces me asomé por la ventana, y vi a un pibe con una pistola, recargándola.

Me tiré por la

ventana. Caí de pie, seguí al hombre corriendo desesperadamente, cuando llegué a la esquina lo perdí. Me senté en el suelo, cansado y transpirado, cuando miro a mi alrededor veo un guante amarillo con manchas de sangre y mojado con transpiración . El criminal se dio cuenta que le faltaba un guante. Regreso por el. Cuando llegó a la esquina, me vio ahí sentado en el suelo con el guante en la mano. Me apuntó con el arma y lo vi

escondiéndose

detrás de un tacho de basura. Me levante rápidamente, saque mi arma del bolsillo y le dispare en el pie. El criminal salio ensangrentado

arrastrando su pie

por un callejón. Lo seguí varios

metros y lo perdí. Llame a mi compañero Ramón y no atendió. Regrese a mi casa y me acosté a las 1:30 de la madrugada.

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Al otro día me levante a las 9:40. Fui a ver a mi hijo al hospital. Le pregunte a la secretaria en que habitación estaba el y me dijo en la 25. Entre en la 25 y lo encuentro mejor que ayer. Lo interrogue para que me de pistas de el criminal. No me pudo responder porque no se acordaba de nada. Me quede un largo rato con mi hijo y me llamaron a mi celular, diciéndome que Ramón no

podía ir a

trabajar. Me quede con mi hijo hasta la medianoche. Después le dije que me tenía que ir.

Cuando llegue a la calle Libertad 140 antes de entrar, llame a la policía para que vengan por ayuda. Entre a la casa por la puerta trasera, veo manchas de sangre en el piso, entonces saco mi pistola, recorro la casa entera, la cocina, el comedor, el dormitorio, había gasas con sangre por todas partes ,y me dio mucho asco. 93

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Cuando me dirijo al baño, encuentro a mi amigo Ramón tirado en la bañera, con el agua toda roja por la sangre, con un balazo en el pie y otro en la cabeza, entonces descubro que Ramón era el asesino. Llego la policía y me preguntó si yo lo había matado, le conteste que no, entonces se llevaron a Ramón al hospital pero era demasiado tarde. Me fui caminando muy despacio, desilusionado por mi amigo Ramón, pensando todo lo que habíamos pasado juntos. Llegué hasta el hospital, pregunte por la salud de mi hijo, y me contestaron que ya podía regresar a casa. Juntos, mi hijo y yo, regresamos a nuestro hogar, cansados pero felices de poder estar juntos otra vez. Fin Autores: Tomás Bertot – Ignacio Aldasoro 94

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La Fecha Terrorífica Todos los martes 13 de agosto ocurría un misterio terrorífico y estaban averiguando el caso de la señora Shapiro. Lo que había sucedido ese día fue terrible...La señora Shapiro había sido asesinada en calle Mitre a las 12:30 saliendo de un restaurante... El detective Sheriff estaba investigando el caso. La policía había clausurado el lugar por este motivo. Luego descubrieron que había huellas de sangre que llegaban a una casa abandonada en la montaña. La policía y el Sheriff siguieron ese rastro. Cuando llegaron a la casa, miraron por la cerradura 95

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del


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picaporte y vieron una sombra de un hombre misterioso. Al día siguiente el Sheriff fue con agentes especiales para rodear la casa, pero no había nadie. Pensaban que el misterioso se había fugado. Rompieron la puerta para entrar y encontraron cuchillas con sangre seca. También una carpeta con una lista de personas para asesinar y estaba la señora Shapiro con todos sus datos. Su foto estaba tachada con una cruz. El Sheriff llamó al jefe de la policía para decirle que no había nadie. Entonces pusieron cámaras ocultas en la casa abandonada. En tres semanas estuvieron vigilando la casa. El Sheriff, que era el encargado de vigilar las cámaras estaba medio dormido y vio al hombre en la casa a través de las cámaras. El misterioso estaba limpiando una cuchilla con sangre seca y anotando en la carpeta. Él supuso que eran más nombres de personas para asesinar. Sin temor, fue a la casa a enfrentarlo porque la señora Shapiro había sido su 96

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amor verdadero. Cuando llegó, entró rápidamente sin que lo viera el misterioso asesino, lo arrestó y lo llevó a la cárcel. Cuando le vieron la cara era unos de los 10 más buscados del FBI, llamado Wilson Thomas. Lo arrestaron y le dieron cadena perpetua. A la señora Shapiro la habían congelado para que no se descompusiera su cadáver. Toda la familia y amigos de la difunta fueron a su velatorio. Estaban todos muy tristes... 20 AÑOS DESPUÉS... El Sheriff ya tenia 90 años y a los 80 le habían descubierto un cáncer cerebral. Lo llevaron al hospital con el doctor para que intentara operarlo para solucionar el problema, ya que el cáncer que él tenia era uno de los más difíciles de operar. Al día siguiente fueron a visitarlo sus amigos del FBI. Lo 97

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encontraron muy decaído y en muy mal estado. Les contó que durante esos días que había estado internado, había escuchado voces y veía sombras por toda la habitación y creía escuchar gritos de la señora Shapiro que el tanto había amado. Se sentía tan triste que le dio un paro cardiaco y falleció. El velatorio fue a la mañana siguiente. familiares, amigos le rindieron un homenaje. Ese mismo día los amigos del Sheriff se enteraron que el asesino de la señora Shapiro se había escapado de una de las cárceles más seguras del país. Todos estaban avisados para que estuvieran atentos, ya que era uno de los asesinos más buscados y peligrosos. Al día siguiente la policía recibió una denuncia de una señora dueña de una fábrica de armas, donde el asesino había entrado a robar. Había matado a cuatro empleados y se había llevado cuatro escopetas, una ametralladora y otros elementos. 98

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Finalmente la policía lo encuentró en un galpón abandonado con fotos de otras mujeres, que seguramente iba a asesinar. Cuando la policía llegó, le dijo: - ¡manos arriba! El asesino no hizo caso y le dispararon un tiro en la cabeza y murió. Las armas robadas fueron encontradas en la casa abandonada de la montaña.

Autores: Lucas Narcotti y Octavio Panetta.

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Última Pistas Era un 20 de Julio de 1999, estábamos todos por subir a la montaña rusa cuando sucedió lo que yo menos esperaba. Tuve una visión, primero pensé que estaba alucinando, pero cuando me di cuenta ya todo había sucedido. En la montaña rusa iban mi novio, mis amigas (mellizas), y mi hermano. En la visión vi que la montaña se quebraba, todos caían y morían, los últimos que intentaban salvarse agarrándose de la montaña, eran ellos.

Yo gritaba desesperadamente, llamando a la policía y a la ambulancia creyendo que todo iba a salir bien. Pero me equivoqué, cuando terminé de hablar

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me di cuenta de que todos ya habían muerto en el instante. No lo podía creer. Unas semanas después de recuperarme comencé a mirar las fotos que había sacado el día de la tragedia. En la primera foto que observé, estaba mi novio y atrás el muñeco que representaba al diablo para asustar a las personas diciendo que nadie iba a salir vivo.

Y me acordé del pensamiento que tuve cuando el diablo lo dijo. Mi pensamiento era que nadie iba a salir vivo (fue lo peor). En la foto sentí que había algo raro pero no sabía qué. En la segunda foto que saqué estaban las mellizas, una de ellas estaba masticando chicle. Y luego me acordé que cuando estaba por empezar el juego, había pegado el chicle abajo donde estaban 101

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las ruedas y algo había caido. En ese instante, cuando observé bien la foto, me acordé que lo que había caído era una de las tuercas, y así se había ido desarmando. Pero luego me di cuenta de que ese chicle pegado no podría desarmar una montaña tan grande.

Días después empezamos el colegio, todos me miraban con cara de lástima, a mi me ponía peor. Faltaba solo una semana para la fiesta que hacíamos

todos

los

años

cuando empezábamos las clases. Las únicas amigas que me quedaban eran Milagros y Lara. Ellas se quejaban de su color de piel tan pálido porque no había sol y llovía. Uno de esos días fueron a un 102

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salón de bronceado, allí les dijeron que entraran sin bebidas pero igual las llevaron. La temperatura máxima era de 60° y ellas lo pusieron a 80°. Luego para divertirse más, pusieron música al máximo. Cuando buscaban los CD, sin darse cuenta, se aflojó una de las maderas que los sostenían. Cuando entraron a las camas solares, la madera se soltó y cayó arriba de las camas impidiendo que pudieran abrirlas. En el momento que se cayó hizo que se tumbara el vaso con la bebida, esta llegó hasta donde se conectaban los enchufes haciendo que subiera la temperatura. Al sentir tanto calor trataron de salir, pero no pudieron. Ellas gritaban desesperadamente, por desgracia nadie las oyó, haciendo el último intento un señor las escuchó. Pero cuando 103

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había llegado la puerta estaba trabada. Minutos después pudo abrirla, pero las pobres ya se habían quemado vivas. Cuando me enteré de lo sucedido fui corriendo a casa a ver las fotos que había sacado el día que nadie había salido vivo de la montaña rusa. En la siguiente foto estaba Milagros y Lara y atrás una imagen de un rayo, no sabía lo que estaba ocurriendo pero traté de observar mucho mejor para ver si encontraba alguna pista, pero mi trabajo observando fracasó. Me fui a dormir pensando en todo lo que estaba ocurriendo, y me puse a pensar; en la primera foto estaba mi novio, el murió en la montaña rusa y atrás de él estaba la montaña. Las mellizas murieron quemadas, y atrás de ellas ( en la foto) había un rayo de sol, eso lo explicaba todo, las fotos tenían pistas escondidas. 104

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Seguí mirándolas, estaba Santiago, lo fui a buscar rápidamente pero ya

estaba muerto, miré la

siguiente foto y estaba María. La fui a buscar lo más rápido que pude pero ya estaba muerta. En ese momento comprendí que yo no podría evitarlo porque a la muerte nunca le podrás ganar.

FIN

Autoras: Josefina Del Viso y Delfina Crespo

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Una Serie de Eventos Desafortunados Todo comenzó una noche en París a las 9:00 en punto, en la calle Rué de Rivoli, Un bancario, conocido por la familia Alphonse, encontró el cadáver de la señorita Ángela A. cerca de un bar en el patio de una biblioteca, envuelta en un nailon, con tres balazos en la espalda y varios papeles en la mano. Enseguida hubo un tumulto de gente, tantos ruidos se oían, que alertaron a la policía. Al investigar el cadáver, pidieron la ayuda del detective James Bornes. -Desde chica los padres de la señorita Ángela Quedaron en banca rota, por eso intentaron el suicidio-, Explicaba el ama de llaves a la comisaría. A los pocos días se murieron en un extraño suceso, por eso la señorita Ángela quedó huérfana al cuidado de su tía Margaret. La señora estaba medio

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loca y estuvo muchos años internada en un psiquiátrico, acompañada de la señorita Ángela A. A los 23 años de edad, la señorita Ángela, entró a la facultad de ciencias económicas con una beca por un año. Para cubrir los años que seguían, tuvo que tomar un préstamo del banco para pagar el alquiler y la escuela. Luego de unos años la señorita Ángela A. no pudo pagar más las deudas, ni los préstamos que había pedido. Debió internarse en una escuela de monjas, pagada por su tía. Mientras tanto, mantenía la deuda con el banco. La mañana del 23 el detective Bornes fue a la casa de Margaret. -El día 19, la señorita Ángela A. se fue de viaje a Alemania con $1.500 que me había robado de la caja fuerte.- Explicó Margaret. Además dijo que la noche de su muerte había estado en el bar Yubiota cerca de la media noche.

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A la mañana siguiente el detective visito “Yubiota” donde platico con el dueño llamado William, le explico que esa noche él había estado hablando con Ángela, y como a las 12:00 de la noche la señorita salió por la puerta trasera que desembocaba en un callejón, al salir se habían escuchado tres disparos.Había salido corriendo pero lo único que vi fueron algunas sombras.- Murmuraba William. Bornes salió, después de interrogar con William para ver la escena del crimen y lo único que encontró eran deudas tiradas en el suelo a nombre de la señorita Alphonse. A la mañana siguiente el detective visitó el banco que concurría la señorita Ángela A. y no quisieron decir nada.

El detective volvió furioso a su casa, porque no podía descifrar el asesinato, por eso en una pizarra empezó a anotar sus pistas: 108

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-Al someter al banquero a una serie de preguntas, descifró que la cuenta de la señorita Alphonse ya había sido retirada por una persona que no había dado nombre, pero solamente habían dejado una boleta a

nombre de Silvia Mochornisi, pero se

desconocía su identidad.

-Mientras que Bornes buscaba antecedentes de Silvia, había salido en el diario que la tía de Ángela A. había fallecido en un extraño suceso.

-Luego de unos días Bornes se enteró que Silvia Mochornisi era una mujer viuda con tres hijos y poco dinero, se ganaba la vida limpiando y cuidando la casa de los Alphonse, y que todo el dinero de Margaret había sido donado para ella, porque era la única que la acompañaba.

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A la mañana del 27 el detective se propuso a visitar la casa de Los Alphonse. Visitó la de los Padres de Ángela, y encontró un papel que decía que toda su fortuna se la heredaban a Silvia Mochornisi. El mismo papel lo encontró en la casa de Margaret, dedicándole su fortuna a ella. Bornes decidió interrogar a Silvia Mochornisi, la llamó a su celular, pidiéndole que se reuniera con él en la casa de los Alphonse. En la casa, Bornes le preguntó a Silvia si era una mujer de gran poder económico, y

ella me

respondió que sí, a partir de la muerte de Margaret, había subido su nivel económico. Bornes le cuestionó qué había hecho la noche del día de la muerte de la señorita Alphonse, y Silvia le respondió que había estado hablando con el bibliotecario, (a unas casas del bar Yubiota). 110

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Luego de una serie de preguntas Silvia no resistió más, y confesó que ella había sido la culpable de los asesinatos de las familias Alphonse, y se hacía pasar por un ama de llaves para matar a sus víctimas y heredar todo su dinero. En ese entonces entraron por la puerta un tumulto de policías armados, capturando así a la victima de todos estos eventos de series desafortunados. Luego de unos años Silvia Mochornisi no quiso permanecer en la cárcel el resto de su vida, por eso la noche del 30, se suicidó… Autoras: Juana La Barba – Florentina Castello

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Responsables Área Lengua: Prof. Marcela Martínez Área Informática: Prof. Adriana Marichal

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