Adventist World December 2023 Spanish

12/2023 La psicología de la felicidad Página 14 A la conquista del enemigo interno Página 16 Visiones de plenitud y misión Página 24

La lucha interior

10 Bajo asedio

Cinco veces Justin Kim

Ron Coffen

12 La importancia de la salud emocional JongKeun Han

14 La psicología de la felicidad Darren Morton

16 A la conquista del enemigo interno Candis Braxton Imagen de portada: Vitaliy Gavrushchenko

19 Voces jóvenes Cuando Dios nos llama al cambio Lynette Yoon 20 Perspectiva global Una vida más abundante Ted N. C. Wilson 22 Fe en acción El Dios de Abraham, Sansón y Nabucodonosor Patricia Gustin 24 Descubramos el Espíritu de Profecía Visiones de plenitud y misión Theodore Levterov

26 Respuestas a preguntas bíblicas Un himno y el Cristo cósmico 27 Salud y bienestar Vivir una vida plena 28 ¿Puedo contarle una historia?

El buzón 231

Cinco veces. Hay pocos temas donde Jesús dice lo mismo en cinco ocasiones. En la mayoría de los casos, el mismo pensamiento es citado en múltiples lugares, como sucede en Mateo, Marcos y Lucas. Pero en Mateo 6, Jesús repite una frase cinco veces (vers. 25, 27, 28, 31 y 34), y en el mismo marco. ¿Cuál es esa frase? «No os angustiéis». No se preocupen, dice Jesús. Es fácil decirlo, pero difícil o imposible, de practicar. ¿Cómo no preocuparse? Dentro del ciclo de 24 horas, ¿cómo no pensar en pequeños conflictos que se transforman en guerras mundiales, u otra pandemia o catástrofe biológica, o economías que se encaminan a la ruina? O todas esas cosas juntas, y aún más. Quizá usted es el tipo de persona que se pregunta: «¿Qué pasará con mi vida, mis finanzas, mis relaciones, mis hijos y nietos, mi matrimonio y mi jubilación?» (Es posible que usted no estaba angustiado antes de leer este artículo).

Hacia el fin de Mateo 6, Jesús pronuncia las famosas palabras: «Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas» (vers. 33). Buscar denota ir en pos de algo que uno carece. Primeramente denota el orden y la prioridad asignadas, ya sea de tiempo, énfasis, cantidad o intensidad. En pocas palabras, reino y justicia apuntan a que vivamos la vida de Cristo interna y externamente, con los frutos y el carácter de Cristo.

La frase de interés, sin embargo, es todas estas cosas. El versículo 32 dice que los gentiles las buscan y, por inferencia, los verdaderos seguidores de Dios no lo hacen. En segundo lugar, el Padre sabe que necesitamos «todas estas cosas». Y si buscamos esas cosas, estamos otra vez declarando por inferencia que el Padre no lo sabe.

En otras palabras, la ansiedad de los hijos niega la omnisciencia del Padre. ¿Dicta nuestro estado emocional nuestra teología interna? ¿Cuáles son todas esas cosas? Mateo 6:19, 20 dice que son los tesoros terrenales. El problema es, ya sea la polilla (el deterioro biológico), el óxido (la corrosión ambiental) o los robos; esas cosas terrenales que tanto buscamos en último término se perderán. En lugar de buscarlas con ansiedad, Dios nos dará todas estas cosas si lo buscamos primero a él. Él y todas estas cosas no se mezclan; es necesario elegir a quién serviremos. Como dice Jesús, los «verdaderos judíos» buscan a Dios, pero los «gentiles» buscan todas estas cosas.

«No os angustéis» nos llama a invertir en el cielo con la mejor tasa de interés del universo. No es una orden o consejo, sino una promesa (en cinco ocasiones) que tiene el poder creativo de reorganizar nuestra vida espiritual, si tan solo adoptamos las palabras de Cristo por la fe. Así como la luz surgió de la nada, que su paz pueda nacer de nuestra ansiedad.

30 Fe en crecimiento «La luz brillante de la esperanza» Creemos en el poder de la oración y aceptamos pedidos de oración que compartimos en nuestro culto semanal de cada miércoles por la mañana. Envíe sus pedidos a prayer@adventistworld.org y ore por nosotros mientras trabajamos todos juntos en pro del progreso del reino de Dios.

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Instantánea

Ana-Marija Bulajic, creadora de contenido de Montenegro, graba a Williams S. Costa Jr., director de comunicación de la Asociación General, mientras ora durante el evento de GAiN Europa en Budva (Montenegro).

Tor Tjeransen / Adventist Media Exchange (CC BY 4.0)

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Noticias breves

«Los cineastas son narradores modernos, y ayudan a salvar la brecha entre el mundo secular y el religioso, guiando en último término a las personas hacia el reino de Dios».

–Heshbon Buscato, director de Departamento de Comunicación de la División de Asia-Pacífico Sur, habló durante el taller de cinematografía y actuación. Más de cincuenta participantes de las regiones Central y Sur de las Filipinas se reunieron en Cebú City. Los asistentes se vieron expuestos a diversos aspectos de cinematografía y actuación, incluida teoría y práctica cinematográfica, principios básicos de dirección, administración de la producción y flujo de trabajo, operaciones de drones, escritura de guiones, desarrollo de argumentos, narración visual, actuación, peinado y técnicas de maquillaje en la producción cinematográfica.

80

El número de personas que se reunieron en el Colegio Universitario Adventista Fulton en Sabeto (Fiyi), para asistir a la Capacitación en Discipulado Digital 2023. El evento fue promovido por el Departamento de Jóvenes de la Unión Misión del Transpacífico, y enfatizó la necesidad de usar las herramientas de la era digital permaneciendo anclado en la fe. El programa exploró el área multifacética de la tecnología, destacando su potencial para el progreso del evangelio y los desafíos que presenta.

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El mensaje adventista de salud y la salud mental Se les preguntó a los miembros de iglesia si estaban de acuerdo con la siguiente declaración: El Mensaje Adventista de Salud enfatiza la salud física, la salud mental, el bienestar emocional, el apoyo social y las relaciones como parte del crecimiento espiritual.

«Esta institución no solo ha preparado a los estudiantes académicamente, sino que ha inculcado en ellos los valores del servicio y la compasión. Es un rayo de esperanza e ilustración en la región».

–Roger Caderma, presidente de la División de Asia-Pacífico Sur, respecto de la celebración del centenario de la misión y el servicio del Colegio Superior y Seminario Adventista Lakpahana. La institución, que se encuentra en Mailapitiya (Sri Lanka) celebró su asombrosa trayectoria, durante cinco días.

Muy de acuerdo 59% De acuerdo 33% No estoy seguro 6% En desacuerdo 1% Muy en desacuerdo 1%

Use el QR para leer el informe completo.

N=56.715 Fuente: Encuesta Mundial de Miembros de Iglesia 2017-18, p. 66-67 Datos de la Secretaría de Archivos, Estadísticas e Investigaciones de la Asociación General.

«Queremos que los participantes aprendan dos cosas en nuestro centro: cómo adoptar un estilo de vida óptimo y cómo seguir avanzando con una mentalidad positiva […]. Para mí, la medicina debería basarse en esas cosas. Implica pasar tiempo de calidad con los pacientes, trabajar con ellos y adoptar un enfoque integral».

–Andrea Matthews, directora médica del Centro Médico de Estilo de Vida ELIA. Este primer centro en la División del Pacífico Sur ha surgido como un rayo de esperanza para los que enfrentan problemas relacionados con su estilo de vida. Se encuentra en el Hospital Adventista de Sídney, y ya ha producido resultados notables desde su lanzamiento oficial el 26 de marzo.

Noticias breves

«La gente de las grandes ciudades a menudo vive sola, sin apoyo o grupo social […]. En la División Interamericana, hemos visto que los ministerios de grupos pequeños pueden ayudar a suplir las necesidades emocionales y espirituales no solo de los feligreses sino de la comunidad».

–Melchor Ferreyra, director de Ministerios Personales de la División Interamericana y productor ejecutivo de la serie televisiva Conocidos, una nueva serie en Hope Channel Interamérica. Los ocho episodios de la serie cuentan la historia de varios personajes que se encuentran y se conocen gracias a un grupo de estudios bíblicos. Conocidos fue creada para poner de relieve la red de amistades sanas que se puede experimentar gracias a los grupos pequeños.

Más de 100 El número de coordinadores y líderes hispanos de la División Norteamericana que se reunieron para compartir esfuerzos efectivos del ministerio regional y para ayudar a crear nuevas estrategias para alcanzar a las comunidades hispanas. Cada día, los líderes de ministerios hispanos de las Uniones y Asociaciones compartieron iniciativas ministeriales y experiencias de crecimiento de iglesia de las nueve Uniones donde prestan servicios.

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Más de 194.000 El número de bautismos que se produjeron después de la campaña de evangelismo Esperanza para África. La campaña de septiembre, patrocinada por Hope Channel en colaboración con la División de África Centro-Oriental y Radio Mundial Adventista, contó con el establecimiento inédito de veinte mil sitios de descarga en once países de la región. La campaña se distribuyó ampliamente en dos satélites, televisión terrestre en los canales nacionales de Hope Channel, sitios web, la aplicación de Hope Channel, la plataforma de video YouTube, y varias plataformas de medios sociales.

(->) Fotografía: Hope Channel AdventistWorld.org Diciembre 2023

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Noticia en detalle

Secretario de la Asociación General llama a reenfocarse en la misión

Erton Köhler sugiere transformar los desafíos en oportunidades.

Marcos Paseggi, Adventist World

Dios ha llamado a la Iglesia Adventista para este momento de cambios, desafíos y oportunidades sin precedentes, dijo Erton Köhler, secretario de la Asociación General, el 8 de octubre, cuando presentó su informe durante el Concilio Anual 2023.

«Los cambios no son nuevos para nosotros –dijo Köhler en su mensaje a los cientos de miembros de la Junta Directiva de la Asociación General (EXCOM) reunidos en Silver Spring, (Maryland, EE. UU.)–. Pero los cambios de hoy son diferentes: son rápidos, de alto impacto y profundos».

Añadió: «No tengamos temor a los cambios que pueden forzarnos a dejar de lado lo que nos resulta cómodo, estar despiertos y usar todos nuestros recursos y las mejores iniciativas para compartir el mensaje bíblico de esperanza para este mundo».

Ante esta realidad, Köhler celebró el reenfoque misionero actual de la denominación. Al mismo tiempo, llamó a la iglesia para que siga enfrentando los desafíos con el poder del Espíritu Santo y acciones misioneras osadas.

que Misionero», enfatizó, en referencia a una iniciativa de la iglesia mundial que busca redireccionar los esfuerzos de planificación y los fondos, para alcanzar a otros para Cristo, en especial en las zonas que presentan mayores desafíos. Reenfoque Misionero no solo implica enviar misioneros e integrar esfuerzos, sino también «ajustar cómo cumplimos la misión de alcanzar con eficiencia a ese mundo que enfrenta profundos cambios».

Ya se están cosechando resultados, informó Köhler. «Después de unos meses de oración, discusión y evaluación, muchas de nuestras organizaciones e instituciones han establecido planes de adoptar y enviar misioneros a algunos lugares difíciles –dijo–. Impresiona ver cómo diversas organizaciones e instituciones pensaron más allá de sus fronteras geográficas e hicieron sacrificios para ser parte de esta iniciativa mundial. Algunos de los territorios que necesitan apoyo extra para cumplir su misión ahora están también contribuyendo para ayudar a otros».

DESAFÍOS APREMIANTES

LA FUNCIÓN DE REENFOQUE MISIONERO

«Una de las prioridades que enfrentamos en este tiempo se llama Reenfo-

Köhler dedicó considerable tiempo enumerando algunos de los desafíos apremiantes que está enfrentando la Iglesia Adventista en procura de

El secretario de la Asociación General Erton Köhler presenta su Informe de Secretaría en el Concilio Anual 2023 en Silver Spring, Maryland, el 8 de octubre.

Lucas Cardino / AME (CC BY 4.0) 6

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cumplir su misión. Mencionó las consecuencias del Covid-19 y las guerras actuales, que han aumentado la inestabilidad política global y disparado el número de refugiados.

También mencionó una crisis ecológica sin precedentes y una inestabilidad de la economía mundial, además de desafíos sociales, incluida una generación de nativos digitales que son «débiles emocionales pero que, al mismo tiempo, están ansiosos por defender la justicia y buscan constantemente una vida con sentido», dijo Köhler.

Otro desafío se relaciona con la comprensión que tiene la sociedad de la sexualidad humana, dijo Köhler, la polarización social y el cinismo hacia toda autoridad, además de los desafíos resultantes de la tecnología.

OPORTUNIDADES PARA LA MISIÓN

El desafío, enfatizó Köhler, es ver estos cambios y problemas globales como oportunidades para la misión.

Respecto de la inversión financiera de la iglesia en la misión, «si Dios envía más, invirtamos más», expresó.

También enfatizó la importancia de mantener viva nuestra identidad.

Ante ese contexto, la mejor manera de acercarse a la generación actual es destacando el mensaje bíblico de esperanza, dijo Köhler. «Un mundo sin esperanza busca una iglesia esperanzada».

La tecnología también cambia la ecuación de la misión, porque puede llegar a todos, en todas partes y en todo momento. «Tenemos todo lo que necesitamos para avanzar con un sentido de urgencia. Promovamos cambios dirigidos por Dios y basados en su Palabra. Eso es lo que llamamos Reenfoque Misionero en momentos de cambio».

Noticia en detalle

Niños y adolescentes de Panamá reciben el desafío de depender de Jesús

El evento buscó ayudarlos a tomar decisiones y prepararlos para el liderazgo.

Kayc James y Libna Stevens, Noticias de la División Interamericana

Edith Ruiz de Espinoza directora de Ministerios del Niño y el Adolescente de la División Interamericana, ora en el escenario durante la ceremonia de apertura.

Unión Misión Panameña

Cientos de niños y adolescentes de 7 a 14 años viajaron desde diversos rincones de Panamá para participar de un congreso nacional, donde se les enseñaron principios bíblicos y aprendieron más sobre el amor y propósito de Jesús para sus vidas.

Los jovencitos llegaron con sus maestros y líderes para pasar dos días participando de una serie de mensajes espirituales, oración y actividades sociales en el auditorio de la Escuela Adventista Metropolitana de la capital, Ciudad de Panamá, entre el 22 y 23 de septiembre.

«Para nosotros, este es un evento fundamental e importante, para ayudar a que los niños y adolescentes crezcan en la fe y fortalezcan su relación con Dios desde temprano. Implica invertir tiempo y recursos para que puedan aprender a confiar en Dios, tener más confianza y llegar a ser líderes espirituales», dijo Rosalinda De Gracia, directora de Ministerios del Niño y el Adolescente de la Unión Misión Panameña.

JESÚS, UN REFUGIO SEGURO

Bajo el lema «Jesús, nuestra Roca eterna», el evento procuró dar un claro mensaje y brindar herramientas para que los niños y adolescentes tomen decisiones sabias y tengan

la seguridad de que Jesús como la «Roca» es su protección y salvación.

«Quisimos reafirmarles que Jesús es un refugio seguro, nuestra fuerza, nuestro ayudador, consolador, defensor y el mejor guía y amigo que pueden tener», dijo De Gracia.

La joven delegación representó a los casi trece mil niños y adolescentes de las iglesias y grupos de Panamá y además, casi cincuenta de los niños que asistieron no eran adventistas.

En el programa de apertura, un grupo de delegados más jóvenes se vistieron de blanco y portaron coronas, señalando las ropas blancas que vestirán los redimidos en el cielo.

«Me gustó cómo estábamos todos de blanco –dijo Sofía Hernández, de 9 años–. Quiero ir al cielo y ver a todos los niños, y ver a Jesús de blanco igual que yo».

El evento procuró dejar impresiones duraderas. Los jóvenes aprendieron sobre los beneficios de los abrazos, la creación, la importancia del descanso sabático, el uso de los medios sociales y sus peligros, y la importancia del matrimonio como institución bíblica establecida por Dios entre un hombre y una mujer.

EN LA TIENDA DE ORACIÓN

Los jóvenes delegados hicieron fila frente a la tienda de oración, donde había pastores listos para escuchar y orar por sus preocupaciones y pedidos.

«La fila se hizo tan larga que otros dos pastores tuvieron que acudir a ayudar», dijo De Gracia. Muchos de los ruegos incluyeron pedir que sus padres encuentren trabajo, o no se divorcien, y oraciones pidiendo sanación.

«Un niño en particular pidió que oraran para que él y su familia consiguieran comida, porque sus padres no tenían trabajo y estaban pasando hambre», dijo De Gracia. Poco después, se notificó a los líderes de la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) en Panamá para que visitaran su hogar llevando alimentos y otras ayudas.

JESÚS ES EL FUNDAMENTO

La oradora principal fue Edith Ruiz de Espinoza, directora de Ministerios del Niño y el Adolescente de la División Interamericana; ella desafió a los jóvenes delegados para que se aferren a Jesús y que él sea el fundamento y la fuente de sabiduría en sus vidas, al dedicarse a sus actividades diarias.

«Ustedes son una luz para Cristo, y necesitan iluminar a los que los rodean», les dijo.

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Noticia en detalle

En Zambia se inaugura Centro Adventista de Capacitación Laboral

Las instalaciones ayudarán a luchar contra la falta de mano de obra.

Ezra Muntanga y Noel Sibanda, División de África Meridional y Océano Índico, y Adventist World

El 8 de octubre, los miembros de las Sociedades de Dorcas y Organización de Hombres Adventistas (DORCAMO por su sigla en inglés) celebraron la apertura oficial de la primera fase del nuevo Centro de Capacitación Laboral en Choma (Zambia). A la ceremonia asistieron cientos de miembros y líderes de la Asociación Sur de Zambia.

Las instalaciones, que se espera ofrezcan varias iniciativas de supervivencia después de terminadas, fueron comisionadas por Felix Mutati, ministro de Ciencia y Tecnología de Zambia. En un discurso dado en su nombre por el director asistente de planificación, Michael Inambao dijo: «Es una ocasión trascendental que marca un paso adelante significativo en nuestro compromiso con la educación, la capacitación y el desarrollo comunitario como nación […]. En nombre del presidente Hakainde Hichilema, el gobierno se siente agradecido por el sacrificio y la dedicación al edificar estas instalaciones». Además añadió que el gobierno de Zambia está muy interesado en ver que organizaciones como la Iglesia Adventista trabajen

con ahínco para suplementar los esfuerzos del gobierno para reducir el desempleo. «Estoy agradecido de ver que la Iglesia Adventista mejora la vida de la gente y las comunidades –expresó–. Es un testimonio del compromiso inquebrantable para marcar un impacto positivo no solo en el ámbito espiritual sino también en los aspectos prácticos de la vida».

Explicó que las nuevas instalaciones son «un reflejo de nuestra creencia compartida en la importancia de equipar a los individuos con las habilidades y el conocimiento que necesitan para destacarse en este mundo cambiante. Encarna la creencia y el compromiso adventista con el desarrollo integral».

Zambia y África en general enfrentan actualmente el desafío de tener mano de obra no calificada, explicaron los funcionarios de gobierno. «Actualmente, nos alegra ver que la Iglesia Adventista está haciendo frente a algunos de esos desafíos», dijeron.

Mutati aprovechó el momento para publicitar los cursos que algún día se ofrecerán en el centro: metalurgia, mecánica, alimentación, corte y confección, plomería, albañi-

Uno de los salones de clase en el que los miembros de la comunidad de Choma podrán aprender corte y confección.

Ezra Muntanga 8

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lería y revocado. También mencionó otras ofertas futuras como cursos de electricidad y emprendimientos, programas preescolares y opciones de actividad física y consejería, además de iniciativas que beneficien a los necesitados.

Los cientos de miembros de iglesia y de la comunidad que asistieron a la ceremonia incluyeron a los líderes y miembros de DORCAMO, que llegaron para ser testigos de la realización de «un sueño tan largamente esperado» en la provincia. Miriam Scott, expresidenta de Dorcas en la región asistió y donó un buey para alimentar a los delegados al fin de la ceremonia.

Otros asistieron desde diversos lugares de la Asociación de Zambia del Sur para apoyar la iniciativa. Entre ellos estuvo el presidente de la Asociación, Gladwin M. Mang’watu, todos los directores de departamentos y los líderes de distrito.

Bednock Banji, director de Ministerios Personales compartió la historia de la iniciativa. Explicó que el centro se inició en 2005 cuando se compró el terreno. «Debido a la falta de fondos, no se pudo comenzar inmediatamente con las obras –dijo–.

De los quince planes aprobados por el Concejo Municipal de Choma, el que primero se abrió fue la sección de corte y confección y alimentación», contó Banji.

La estructura actual fue construida por DORCAMO mediante contribuciones recolectadas en diversas maneras.

«Hasta el momento, unos 26 mil miembros han colaborado para recolectar fondos para este noble proyecto –dijo Banji–. Alabamos a Dios por estas nuevas instalaciones, que traerán desarrollo y equiparán y capacitarán también a la comunidad local».

Enfoque misionero

Marcos Paseggi, Adventist World

Líderes de la Asociación General llevan a cabo una ceremonia especial para dedicar a la familia Contero, de España, que prestará servicios en Suiza.

Lucas Cardino / AME (CC BY 4.0)

La misión adventista está viva En todo el mundo hay miebros dedicados a compartir la esperanza en Cristo.

Según Jesús, sus seguidores pueden elegir cómo responder cuando creen que el Señor «se tarda en venir» (Luc. 12:45). Por un lado, pueden dormirse (ver Mat. 25:1-13) o comenzar a golpear a los criados (ver Luc. 12:45).

Por otro lado, pueden velar (ver Mat. 25:13) y mantenerse activos, administrando las propiedades de su Señor y cumpliendo con sus pedidos (ver Luc. 12:35-44). Como adventistas, podemos estar agradecidos que un porcentaje significativo de miembros y la mayoría de los líderes han elegido la segunda opción.

Los adventistas hemos sido elegidos de manera singular para la misión, recordó Ted N. C. Wilson, presidente de la Asociación General, a los miembros de la Junta Directiva que se reunieron para el Concilio Anual 2023 en la sede de la iglesia en Silver Spring (Maryland, Estados Unidos). Es una misión abarcadora que, durante 160 años, ha hecho que los misioneros vayan a todas partes para compartir el mensaje divino con los que buscan esperanzas.

«La obra mundial de Dios está floreciendo porque somos escogidos para la misión –dijo Wilson–. Nada puede detener la misión divina».

En 2024, la Iglesia Adventista conmemorará 150 años desde que envío a su primer misionero de ultramar. Según David Trim, director de la Secretaría de Archivos, Estadísticas e Investigaciones de la iglesia, esos serán «150 años de que la Iglesia Adventista puso al mundo por encima de intereses locales».

Aun los actuales cambios y desafíos inéditos, dijo el secretario de la Asociación General Erton Köhler, deberían ser vistos como oportunidades para la misión. «Todos pueden hacer algo para mantener el énfasis en la misión y ayudar a enfrentar los vastos desafíos en todo el mundo», enfatizó.

Los programas e iniciativas oficiales de la iglesia mundial y comentarios e informes ocasionales muestran que muchos adventistas fieles están manteniendo viva la pasión por la misión. Los seguidores de Cristo interesados en la misión no se circunscriben a una región o edad.

Desde los jóvenes voluntarios de Misión Caleb en Puerto Rico hasta los médicos misioneros en Chad, y desde los obreros de ADRA Rumania hasta los jubilados voluntarios en los Estados Unidos, miles siguen dejando lo que les resulta cómodo para servir y ayudar a transformar vidas mediante el poder del Espíritu Santo.

Los líderes adventistas siguen trabajando en sociedad con otras organizaciones y compañías para hallar maneras innovadoras de hacer misión. Hasta están entrenando a un

robot para que dé estudios bíblicos y comparta las creencias bíblicas adventistas. Se han desarrollado nuevas herramientas para conectar a los interesados en la obra misionera con oportunidades de servicio.

Sin embargo, no importa cuántos programas e iniciativas produzcan las organizaciones de la iglesia y sus ministerios de apoyo, las necesidades siguen siendo enormes.

A pesar de ello, ningún programa o iniciativa tendría éxito sin la aceptación de los miembros. Es esa pasión por la misión inculcada mediante relatos misioneros mundiales, pero también en cada Escuela Sabática, iglesia local, salón de clases, clínica, fábrica de alimentos y centro de medios que mantiene en movimiento a la misión adventista.

Y durante el Concilio Anual 2023, un programa misionero del 6 de octubre sirvió para que los líderes reflexionen y se vuelvan a comprometer con la misión adventista.

De tanto en tanto, hay agoreros que proclaman que la misión adventista está muerta. Los detractores denuncian los fondos gastados en la misión mientras recolectan fondos para esparcir aún más su visión pesimista. Pero los que aman la misión del Señor siguen adelante, porque aún hay un mundo sediento de esperanza, que sueña con una salida. Es el privilegio de cada miembro participar de ese mandato dado por el mismo cielo.

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Enfoque

Bajo asedio Cómo luchar contra las aflicciones emocionales y cogitivas RON COFFEN

Imagen: PDQ1000 / iStock / Getty Images Plus / Getty Images

H

ebreos 11 enumera héroes de la Biblia reconocidos por Dios.

Fueron personas de fe. ¿Qué significa ser una persona de fe? ¿Eran perfectos? ¿Intrépidos? «Por fe», ¿evitaron todas las adversidades físicas, 1 la angustia emocional2 y angustia cognitiva3? No, es la respuesta al realizar un rápido repaso de sus vidas.

Aun así, Dios los reconoce en el Capítulo de la Fe. Dice que tienen un corazón conforme a su corazón; colabora con ellos en una celebración de su fidelidad mientras ellos enfrentaban simultáneamente angustia emocional y cognitiva y conductas inadaptadas. De manera similar, Jesús indica que los que murieron en un accidente trágico no eran más pecaminosos que los demás (Luc. 13:4) y que la lluvia (tanto física como metafórica) cae sobre los justos y los injustos. En un mundo envuelto en el caos del Gran Conflicto, el tiempo y la ocasión producen aflicción a todas las personas (Ecl. 9:11).

No hay promesa, en este mundo, que garantice que las adversidades físicas y la angustia emocional y cognitiva dejarán libres a los fieles.

Los disparadores son eventos que se producen justo antes del comienzo del episodio de angustia. Un disparador psicológico para alguien con un temperamento reactivo puede ser la muerte inesperada de un amigo cercano, lo que puede causar angustia emocional, preocupación por la muerte de otros seres queridos, potenciales enfermedades, o potenciales crisis financieras.

Los factores de continuidad son eventos que mantienen el episodio de angustia. Un factor psicológico de continuidad puede ser faltar al trabajo toda vez que uno siente la posibilidad de ser juzgado, no encajar en el equipo, o equivocarse socialmente en el trabajo. Al faltar, se atribuye la reducción inmediata de la angustia a esa ausencia; por ello, uno evita más y más el trabajo, lo que en realidad mantiene la ansiedad.

Dios creó las emociones para alertarnos claramente sobre las necesidades insatisfechas. Las emociones no nos dicen cómo resolver el problema, pero lo señalan y brindan energía.

Rechazar la señal exacerba la angustia.

EN BUSCA DE SOLUCIONES

FACTORES CONTRIBUYENTES

Entonces, ¿cuáles son las causas de aflicciones que perturban la salud mental? Vivir en un mundo después de cientos de generaciones de la creación ordenada perfectamente por Dios, nos coloca a todos en un campo de batalla donde hay tres factores principales detrás de la angustia mental: factores de larga data, disparadores, y factores de continuidad.

Los factores de larga data pueden ser genéticos, congénitos o producirse temprano en la vida. Aunque pueden causar angustia directamente, a menudo solo nos ponen en riesgo.

Un ejemplo físico de ese tipo es tener 2,10 metros de altura: no causa traumatismos, pero nos pone en riesgo de traumatismos en una sociedad donde las puertas suelen tener dos metros.

Cuando una persona de fe experimenta angustia cognitiva y emocional, Dios a veces resuelve el problema milagrosamente, pero no se nos prometen resoluciones rápidas.

Por el contrario, Dios declaró que estar solo no es bueno, y proveyó una comunidad de apoyo compuesta por individuos que se cuidan mutuamente con sabiduría, conocimiento y discernimiento para sanar a los que sufren (Efe. 4:11-12, 1 Cor. 12:7-11).

Esos ayudadores a menudo emplean modos de soluciones, lo que incluye cambios internos (como aprender algo nuevo o adquirir una habilidad diferente); cambios externos (como por ejemplo la medicación, el ejercicio y una dieta para ayudar a que el cuerpo y los químicos vuelvan a funcionar óptimamente); y el

Dios creó las emociones para alertarnos claramente sobre las necesidades insatisfechas. manejo de la situación (lo que incluye cultivar habilidades mentales y emocionales para manejar la angustia crónica; por ejemplo, cultivar el humor en conexión con el desafío, ajustar las expectativas, o hablar periódicamente con personas que brinden apoyo ante esa dificultad).

Este mundo es un campo de batalla del Gran Conflicto. Aun cuando las personas de fe estén del lado ganador, experimentaremos angustias hasta que Dios lleve la batalla hasta su final. Hasta entonces, sea un apoyo seguro de sí mismo y de los que se ven asediados por la angustia emocional y cognitiva.4 Para este artículo, mi definición de adversidad física es un estado corporal que interfiere con el funcionamiento óptimo. Describe el fin opuesto del elemento físico de la definición que hace la Organización Mundial de la Salud de salud: «un estado de completo bienestar […] físico y no meramente la ausencia de enfermedades o afecciones». (https://www.who.int/about/governance/constitution).

2 Para este artículo, mi definición de angustia emocional es un estado fisiológico generado psicológicamente que crea impulsos conductuales y que interfiere con el funcionamiento óptimo. Esta definición se basa en la definición que hace la Asociación Psicológica Estadounidense sobre emociones: «reacciones mentales conscientes […] experimentadas subjetivamente como fuertes sentimientos […], típicamente acompañadas de cambios fisiológicos y conductuales en el cuerpo». (https://www.apa.org/topics/emotions).

3 Para este artículo, mi definición de angustia cognitiva es un estado mental que interfiere con el funcionamiento óptimo, en el que los pensamientos propios llevan a anticipar resultados indeseables. Esta definición deriva de la definición que hace la Sociedad Psicológica Estadounidense de angustia: «estrés que resulta de verse abrumado por exigencias, pérdidas o amenazas percibidas. Posee un efecto perjudicial, al generar malas adaptaciones físicas y psicológicas». (https:// dictionary.apa.org/distress and cf. https://dictionary.apa.org/stress).

4 Véase Elena White, Patriarcas y profetas (Mountain View, Cal.: Pacific Press Pub. Assn., 1954), p. 218.

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Ron Coffen es un psicólogo y profesor, director del Centro de Consejería Comunitaria, que brinda servicios con la compasión y la solicitud de Cristo, en la Universidad Andrews en Berrien Springs, Míchigan, Estados Unidos.

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Enfoque

La importancia de la salud emocional Cómo recibir consuelo para ofrecerlo a otros

H

ace unos años, me encontré con una mujer que había sido adventista por mucho tiempo. Llegó a mi iglesia a visitar a su sobrina. Parecía muy inteligente, y cantaba bien. Después del culto tuvimos una breve conversación.

Me dijo: «Perdí a mi esposo hace varios meses. Una noche nos fuimos a dormir normalmente, pero cuando me desperté, descubrí que estaba muerto a mi lado. Después del funeral, sentía ansiedad cada noche, con temor de que alguien viniera a quitarme la vida». Pocos meses después de conocerla, escuché que había sucumbido a la demencia.

JONGKEUN HAN

DESCUBRIR LAS NECESIDADES EMOCIONALES

Por más de treinta años, he sido pastor de la Iglesia Adventista. Tengo fe y entusiasmo por el evangelio; he llevado a las personas a Cristo y servido al pueblo de Dios. Creer en la Palabra de Dios y vivir por fe se encuentran en el centro de mi vida. Al reflexionar en mis años de servicio, veo que la mayoría de mis sermones han sido sobre la fe. En mi consejería pastoral, he hablado de la fe. Creo que la fe debería ser aplicada a todos los aspectos de la vida. Pero esto me llevó a ignorar y suprimir mis emociones más profundas.

Mi esposa es una mujer diligente. Es atenta y se relaciona bien con la gente. Como esposa de pastor, lleva una pesada carga, y la ha manejado con buen espíritu. Hubo 12

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Imagen: SeventyFour / iStock / Getty Images Plus / Getty Images

momentos, en el pasado, cuando grité y le expresé mi enojo en privado. Después de ello, me daba cuenta de que no había razón de comportarme así. No obstante, aunque me disculpaba, la culpa no desaparecía porque creía que, si hubiera tenido suficiente fe en Jesús, jamás la habría maltratado. En ese entonces, no me daba cuenta de que tenía emociones malsanas que no habían sido atendidas. Pensaba que la fe y la salud emocional eran lo mismo. Por ello, tenía mucha fe en que no sentiría enojo, ansiedad, depresión, desilusión y frustración. Si sentía esas emociones, entonces pensaba que significaba que no tenía una fe sólida.

Mi título doctoral es en el área de ministerio familiar.

Escribí mi tesis sobre «Prevención y educación sobre violencia doméstica». Mientras estudiaba sobre el tema, investigué sobre el abuso físico y emocional en las relaciones íntimas.

Al mismo tiempo, vi que era abusivo emocionalmente con mi amada esposa. Mi voz podía ser áspera, la ignoraba y violaba su espacio. Me sorprendí al descubrir que era un cónyuge con emociones malsanas y además, pastor. Aunque creía ser un pastor con una sólida fe en Jesús.

DESCUBRAMOS LA SALUD BÍBLICA PLENA

En la Biblia hallamos respuestas emocionales a las dificultades. El temor es la primera respuesta emocional a una situación negativa mencionada en las Escrituras. Adán comió del fruto prohibido por Dios y se escondió debido a que sintió temor (Gén. 3:10). El temor se convirtió en una emoción común en la experiencia humana. Job, un hombre de fe, expresó su lucha emocional al hablar de «suspiros», «quejidos», temor, susto, sin paz ni sosiego, sin reposo, «solo agitación» (Job 3:24-26, NVI). Moisés se sintió tan abrumado que le pidió a Dios que lo matara, porque «la carga» de liderar a los quejosos israelitas era «demasiado pesada» para él (Núm. 11:14, 15).

Los seres humanos respondemos a eventos negativos con emociones semejantes: temor, ansiedad, enojo, desilusión, depresión, remordimiento y culpa. Las emociones son respuestas naturales que surgen de lo profundo, pero, cuando no se les hace frente, eso lleva a un estado emocional insano. Con el tiempo, eso nos producirá afecciones mentales como la ansiedad y la depresión. Es importante cuidar nuestra salud emocional.

Pablo escribe: «Que Dios mismo, el Dios de paz, los santifique por completo, y conserve todo su ser –espíritu, alma y cuerpo–, irreprochable para la venida de nuestro Señor Jesucristo» (1 Tes. 5:23, NVI). Hay una trinidad de la salud: del cuerpo (física), alma (espiritual), y espíritu (emocional).

Son tres elementos separados pero muy interconectados.

Así como los cristianos fieles pueden perder la salud física, también pueden perder la salud emocional.

He llegado a comprender que a menudo cuando yo u otros miembros de iglesia demostramos actitudes

Me sorprendí al descubrir que era un cónyuge con emociones malsanas y además, pastor.

Aunque creía ser un pastor con una sólida fe en Jesús.

inaceptables, eso se debe a emociones malsanas que no han sido tratadas.

EL MINISTERIO DE CONSUELO EMOCIONAL

Peter Scazzero lo resume bien cuando escribe: «La espiritualidad cristiana, sin una integración de salud emocional, puede ser mortal: para uno mismo, para la relación con Dios y para los que nos rodean».* Después de estudiar consejería psicológica me convertí en un consejero profesional. Mi iglesia votó en 2022 establecer un «Centro de Evangelismo Internacional de la Salud Mental», y comenzó un «Ministerio de Consuelo Emocional». Se trata de un ministerio de salud mental enfocado en la salud emocional.

El profeta Isaías escribe: «¡Consolad, consolad a mi pueblo!» (Isa. 40:1, NVI). El Ministerio de Consuelo Emocional busca en primer lugar animar a los miembros para que hallen consuelo para sí, y en segundo, para que consuelen a sus familias. En tercer lugar, para que consuelen a sus vecinos. Nuestro objetivo es que cada miembro de la iglesia sea un consolador. Pablo dice en 2 Corintios 1:3 y 4: «Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre misericordioso y Dios de toda consolación, quien nos consuela en todas nuestras tribulaciones para que, con el mismo consuelo que de Dios hemos recibido, también nosotros podamos consolar a todos los que sufren» (NVI).

Todos necesitamos consuelo de parte de Dios y también de otras personas.

Peter Scazzero, Emotionally Healthy Spirituality: Unleash a Revolution in Your Life in Christ (Thomas Nelson, Nashville Tennessee, 2006) p. 9. *

Jongkeun Han es pastor y presidente del Centro Internacional de Evangelismo de la Salud Mental en Santa Maria, California, Estados Unidos.

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Enfoque

La psicología de la felicidad Cómo tomar la decisión de florecer en la vida DARREN MORTON

E

n 1997, el doctor Martin Seligman fue elegido presidente de la Asociación Psicológica Estadounidense y decidió invertir sus energías e influencia en un nuevo campo. Notó que, tradicionalmente, la psicología solo se había enfocado en lo negativo –en dedicarse a remediar los estados psicológicos disfuncionales– por lo que, por el contrario, decidió investigar y promover lo que denominó Psicología Positiva.

En un comienzo, las publicaciones de Psicología Positiva se enfocaron en la felicidad: ¿Qué la causa? ¿Cómo se logra? ¿Para qué sirve? Sin embargo, aunque la felicidad es una búsqueda noble, el campo de la psicología positiva ha notado que se necesitan más que tan solo sonrisas y risitas para progresar en la vida. En tiempos más recientes, Seligman señaló que existe un ideal mayor: florecer.

Analicemos cinco maneras abarcadoras de lograrlo.

LAS CINCO ÁREAS

Emoción positiva. Las emociones positivas son fundamentales para una vida floreciente. No obstante, representa mucho más que tan solo emociones o placeres baratos. Tratar de desarrollar el bienestar y felicidad sobre la base única de la felicidad, resulta problemático.

El placer jamás es permanente, y la risa siempre tiene límites. Para crear una vida que florezca mediante la búsqueda del placer, habría que dedicarse en todo 14

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momento a buscarlo. En efecto, varios estudios han hallado que el placer no contribuye a la evaluación de la satisfacción general de la vida en la misma medida que otros factores que se analizan más abajo.

Participación. El doctor Mihaly Csikszentmihalyi, investigador pionero en el campo de la psicología positiva, ha estudiado de manera intensa una experiencia que denomina «flujo».

Para él, flujo es un estado de concentración y disfrute mayor que se produce en actividades tales como el arte, el juego y, créase o no, incluso el trabajo.

No es de sorprender que los individuos que reportan altos niveles de flujo que llevan a la participación en las actividades diarias, también Imagen: Catalin Pop

reportan altos niveles de satisfacción y prosperidad en la vida. Dado que la «participación» es un contribuyente poderoso a la capacidad de florecer, es ideal hallar un empleo que nos resulte atractivo, porque pasamos mucho tiempo trabajando. Espero que usted se identifique con su trabajo, pero de no ser así, y aunque las circunstancias le impidan hacer cambios, es aún más fundamental que participe periódicamente de deportes o distracciones: esas cosas que hace solo por placer sin una recompensa extrínseca.

Realización. Un sentido de realización, éxito o dominio de una habilidad ayuda a florecer. A veces, los logros se miden por medio de estándares acordados, tales como competiciones, premios o actuaciones a un determinado nivel. Tener un sentido de realización puede enriquecer la vida, más allá de la emoción positiva o la participación.

Relaciones. Juntos es mejor, y Dios nos diseñó para florecer en comunidad. Los humanos somos criaturas relacionales, y nuestros sentidos más profundos de bienestar tienen que hacerse realidad al amar y ser amados. Buscamos la conexión, y esa conexión nos ayuda a florecer.

Significado. Tener un sentido de significado es una necesidad humana fundamental. Es difícil, quizá imposible, vivir una vida realmente floreciente sin significado. En este sentido, puede considerarse el más importante de todos los ingredientes. Se puede vivir una vida llena de diversión, participar de las actividades diarias, alcanzar logros destacados y tener relaciones positivas, y aun así, preguntarse: ¿Cuál es el objetivo de todo esto?

El doctor Seligman define el significado como tener un «sentimiento de pertenencia y de servicio a algo más grande que uno».1 En tiempos más recientes, Emily Esfani Smith expandió la definición de Seligman en su libro El poder del significado,

donde exploró cuatro caminos hacia el significado.

CUATRO CAMINOS

El primero es la pertenencia, lo que incluye conectarse con otros y sentir que pertenecemos a algo más grande que uno mismo. Como hemos analizado, estamos diseñados para existir en comunidad, y esto da significado a nuestra vida. Para mí, confiar en que pertenezco a algo más grande que yo crea un sólido sentido de valía personal y una identidad robusta. Es necesario saber que somos una persona de valor.

Cuando mi hijo del medio –Elías– era pequeño, lo besaba cada noche mientras lo metía en la cama y le decía: «Papá te ama». Todas las noches me preguntaba: «¿Por qué?»

Era como un juego, dado que cada noche le daba una razón diferente: «Porque eres bueno para trepar a los árboles», o «Porque eres tan inteligente». Fue solo después de un tiempo que me di cuenta qué inadecuadas eran mis respuestas, y cambié mi forma de responder. Esa noche, cuando le di el beso de las buenas noches y le dije «Papá te ama», como era de esperar, me preguntó: «¿Por qué?» Sin dudar le contesté: «Porque eres mío. Y nada que hagas –bueno o malo– puede cambiar eso».

Isaías 43:1 enfatiza esa idea: «Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, Jacob, y Formador tuyo, Israel: “No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú”».

Comprender y reconocer el amor de Dios nos da propósito. El propósito incluye contribuir y servir a algo que nos trascienda. Es interesante que tener propósito en la vida está asociado con vivir más. En un estudio, las personas con mayor nivel de «propósito en la vida» tenían una probabilidad casi cincuenta por ciento menor de morir2 de cualquier causa.

El tercer camino es la trascendencia, que se refiere a la experiencia de verse elevado a algo que está más allá de

Para florecer en la vida, se necesita más que sonrisas y risitas. uno mismo. Las personas experimentan trascendencia de diversas maneras: mediante la naturaleza, el arte, la música o las prácticas religiosas. La trascendencia lleva a momentos de asombro, y eso nos recuerda que en la vida hay más que solo lo común.

Por último, el cuarto camino hacia el significado es la narración de historias.

Contar historias ha sido parte de la civilización humana desde la antigüedad, y la narración está presente en las comunidades indígenas. Las historias nos ayudan a encontrar sentido en el mundo y en cómo lo experimentamos, y esta es una manera en que creamos significado. Las historias compartidas con otros pueden ser profundamente significativas. ¿Qué historia estamos contando? ¿Cuál es el papel que usted está realizando? Seamos o no intencionales al respecto, estamos contando una historia en nuestra forma de vivir. ¿Cómo quiere que se cuente la historia? ¿Cómo quiere usted que termine? Jamás es demasiado tarde para escribir un nuevo capítulo.

Seligman, Martin E.P., Flourish: A Visionary New Understanding of Happiness and Well-Being, (Atria Books, 2012).

2 Boyle P.A., Barnes L.L., Buchman A.S., Bennett D.A., «Purpose in Life is Associated with Mortality Among Community-dwelling Older Persons», Psychosom Med. 2009 Jun;71(5):574-9. doi: 10.1097/ PSY.0b013e3181a5a7c0. Epub 2009 May 4. PMID: 19414613; PMCID: PMC2740716.

1

El doctor Darren Morton es escritor, profesor de tiempo parcial y director de Medicina de Estilo de Vida y el Centro de Investigaciones en Salud de la Universidad Avondale en Australia.

Este artículo ha sido adaptado de una lección que escribió para The Lift Project, una organización cuya misión es «elevar diez millones de vida» en todo el mundo.

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Enfoque

Ayude a su enemigo interior

Mi lucha contra los pensamientos negativos.

CANDIS BRAXTON

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uedé parada en la ducha y comencé a llorar.

Había pasado una semana desde mi cirugía oral y estaba luchando por quedarme quieta. Había sido mucho más fácil cuando los medicamentos para el dolor me dejaban atontada, sin otra opción. Pero ahora, los medicamentos eran demasiado fuertes para el dolor más suave que sentía, y tenía que arreglármelas para descansar sin ellos. Pero mi diálogo interno me estaba agotando. Me hallé otra vez en una pelea con el negativismo, que estaba ganando la partida. No era un nuevo contrincante mental. Era, más bien, un viejo adversario. Y desde su perspectiva, el descanso que mi cuerpo creía necesitar no tenía sentido.

Esa semana, las cosas no eran particularmente difíciles. La cirugía había salido bien. Manos solícitas me habían confortado cuando desperté, desorientada. Fuertes brazos me habían sostenido, ayudándome a llegar a casa sin problemas. Los amigos me habían traído comida y me habían visitado para asegurarse de que todo estuviera bien. Y gracias a los medicamentos, había tenido veinticuatro horas de sueño tranquilo e ininterrumpido, mientras los niños se las arreglaban solos. El amor que recibimos esa semana aligeró la recuperación. Entonces, no necesitaba descansar.

«No hay nada que descansar. Levántate y muévete. Vamos. A trabajar», me exigió mi Monólogo Interno Negativo* (de aquí en más MIN). Pero cada vez que lo escuchaba y procuraba cocinar, lavar la ropa o ayudar a uno o dos clientes, mi cuerpo y mi alma me recordaban que estaba agotada. Aún necesitaba tiempo y reposo para que sanaran las heridas de la boca y para que mi cuerpo se recuperara de los medicamentos. El MIN, sin embargo, se rehusaba a reconocer esa realidad. Sus esfuerzos, por el contrario, se enfocaban en llevarme a actuar movida por la culpa, minimizando las implicaciones de la cirugía, como había sucedido con los eventos significativos de mi niñez, algo que fortaleció su dominio sobre mi vida.

LOS PEQUEÑOS GRANDES EVENTOS

Estaba en la fila del supermercado de mi barrio un viernes por la tarde cuando la persona delante de mí mencionó casualmente que yo había sido atacada sexualmente aún antes de poder hablar. La violencia sexual era una realidad silenciosa que afectó a muchas ramas de mi árbol genealógico, por lo que la noticia no me sorprendió. Lo que sí me sorprendió, sin embargo, fue la idea de que, dado que había pasado hacía mucho, eso no debía afectarme. Desde la perspectiva de mi informante mi matrimonio era saludable, y tenía un hogar estable y una hermosa familia. Está claro que me sabía salvado de daños «reales». Pero no sabía de mis luchas internas relacionadas con la intimidad física y mi tendencia a descartar los sentimientos relacionados con esas luchas.

Mucho antes de conocer su nombre, el MIN había establecido una voz en mi vida que tuvo un eco en los sentimientos de las personas que me rodeaban. Aunque desde lo profesional, teológico y experiencial estaba en desacuerdo con la evaluación de mi informante de que el tema no me había afectado, en lo profundo, luchaba con Imagen: Golubovy / Marjorie Anastacio / iStock / Getty Images Plus / Getty Images

El hecho de que mis experiencias pasadas habían llegado al presente, sin embargo, señalaba que me habían afectado mucho más de lo que me atrevía a admitir.

rechazar esa conclusión: «No es para tanto –el MIN se burló cuando me subí otra vez al auto–.

No te acuerdas de nada. ¿De qué te vas a sentir mal? Otros han pasado por cosas peores. Deja de llorar». Pero los brazos de mi esposo cuando llegué a casa me comunicaron algo muy diferente. Allí estaba segura. No tenía que ser fuerte; sus brazos podían sostenerme.

Cuando finalmente fui a ver a un terapeuta, me di cuenta de que un encuentro que había estado desestimando desde que me sucedió en la adolescencia era, en efecto, un ataque sexual, y que estaba mostrando síntomas de Trastorno de Estrés Postraumático. Imágenes de ese encuentro adolescente aparecían ocasionalmente en la mente, y me hacían sentir incómoda cuando alimentaba a mi bebé o interrumpían momentos íntimos con mi esposo. No eran experiencias en las que uno pudiera simplemente apretar los dientes y seguir adelante, sino señales de traumas no procesados.

Me agitaba fácilmente, estaba nerviosa, anticipando un peligro inminente. En consecuencia, mis respuestas a las infracciones más pequeñas se veían drásticamente magnificadas. Mis modos regulares de interacción se basaban en ataques de ira y retraimiento.

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Si Jesús dice que puedo tener una mente sólida y una influencia honorable, ¡eso es lo que quiero para mí!

Debido a esos ataques, sentía que no merecía estar cerca de mi esposo o hijos, y que era mejor para todos si me retraía. Entonces, ese pensamiento se tornaba en autocrítica, más aislamiento y, cuando se volvía realmente peor, aparecían ideas suicidas. «¿Qué es lo que te pasa, Candis? Tienes una buena vida. ¡Recupérate!» me exigía el MIN. Pero no podía hacerlo, por lo que busqué ayuda profesional.

Si usted es como era yo, no habría sido una prioridad buscar ayuda profesional. Desde mi perspectiva limitada, la violencia sexual solo implicaba ser violada, y mis experiencias no llegaban a tanto. Si usted fuera como yo, probablemente habría pensado que, dado que no fui violada, no tenía nada por lo cual quejarme y tenía que estar bien. El hecho de que mis experiencias pasadas habían llegado al presente, sin embargo, señalaba que me habían afectado mucho más de lo que me atrevía a admitir. El MIN estaba satisfecho, porque esos eventos le daban poder de crear narrativas que afectarían mis creencias básicas sobre mí, influirían mis interacciones con el mundo y con las demás personas. El MIN buscaba minimizar esos eventos porque ambos eran la fuente de su fortaleza.

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MI VOTO Y EL SUYO

Decidí pelear contra el MIN cuando me di cuenta de que, de no controlarlo, mis peores temores se harían realidad: Inevitablemente, afectaría el pensamiento de mis hijos. Cuando me volví más consciente de cómo mis traumas infantiles no resueltos contribuían a los déficits emocionales desde donde operaba, y cómo contribuían a los patrones de disfunción en la relación con mis hijos y esposo, supe que tenía que hacer algo. No quería ser usada para traspasar ese daño a mis hijos. Me rehusé a ser la mediadora de la disfunción en sus vidas tanto como fuera posible. Fue entonces que prometí quebrar el ciclo de abuso y disfunción que había persistido durante generaciones en mi familia.

El MIN cobró fuerzas a partir de los ataques sexuales en mi niñez que, al igual que masivos aumentos de energía, crearon un cortocircuito en mi capacidad de procesar adecuadamente los ataques y encontrar sentido en los mensajes perjudiciales que los acompañaban. Para destruir el MIN, tuve que procesar adecuadamente los ataques sexuales, evaluar las implicaciones emocionales, sociales y espirituales de lo sucedido, y corregir los mensajes correspondientes. Si sé que los mensajes del MIN están llenos de mentiras y carecen de mérito, entonces tengo que fortificarme con lo que Dios me comunica como verdad. Enfrentar el MIN pasó a ser una parte esencial para que perdiese poder e influencia sobre mí. Cada vez que lo enfrentaba, sus mentiras perdían terreno y él, a su vez, se veía debilitado.

Hubo ocasiones, como lo revelaron mis sollozos bajo la ducha, cuando, aunque comprometida con el proceso, me sentí agotada. Me cansé de resistir la influencia paralizante del MIN al enfrentar las múltiples opciones del día. Me cansé de las dudas que a menudo provocaba en conexión con las decisiones que había tomado, bus-

cando hacerme creer que mi elección, una vez más, no era la mejor. Me cansé de sus mentiras reforzadas, que me decían que yo no era suficiente, que la productividad validaba mi existencia, y que ignorar mis sentimientos era la única manera de garantizar una conexión íntima con otros, incluidos mi esposo y mis hijos. Me cansé de tener que regular y reiniciar mis emociones para sentirme validada. Lo que me ayudó a dejar la melancolía y tomar otra vez el estandarte fue el consejo divino: Depende de mi fortaleza perfecta para esta lucha (2 Cor. 12:9); no te rindas, que yo no te defraudaré (Sal. 37:7), porque una mente libre del MIN es mi deseo para ti (2 Tim. 1:7). Si Jesús dice que puedo tener una mente sólida y una influencia honorable, ¡eso es lo que quiero para mí!

INVITACIÓN

Hacer frente a los traumas del pasado no es un proceso fácil. Se necesita tiempo y sentirse incompleto. Se necesita garra y dedicación.

Compromiso y oración. Cooperación con esas oraciones. Ayuda externa.

Apoyo de relaciones sanas. Se necesita un milagro. Se necesita a Dios. Sí, es difícil resolver los traumas del pasado. No obstante, si Dios dice que hay algo mejor más allá de esa prueba, entonces vale la pena. Dios está extendiendo una invitación para que su mente sienta plenitud, para que analice qué pensamientos y creencias sobre usted y su relación con otros están sesgados, y los transforme. El llanto puede durar por una noche, pero por favor, no lo dude: a la mañana vendrá la alegría. * El Monólogo Interno Negativo (MIN) se refiere a pensamientos en la mente de la autora que la desaniman o le producen temor. En este artículo, ella caracteriza el MIN como si fuera una persona que vive en su cabeza, aunque no se está refiriendo a una persona real.

Candis Braxton es terapeuta de matrimonio y familia en Fayetteville, Carolina del Norte, Estados Unidos.

Voces jóvenes

Cuando Dios nos llama al cambio

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rofesora Lynette, la quiero mucho.

No se vaya. No se vaya. ¡No se vaya!»

Mi corazón se quebrantó un poco al leer las palabras de mi alumna escritas sobre una fotografía de las dos. Había estado recibiendo muchas de esas notas y dibujos de mis estudiantes, a medida que se acercaba la fecha de mi partida.

Después de dos años como maestra misionera de inglés en esa escuela, era tiempo de hacer otra cosa. Era una situación agridulce. Estaba feliz de haber marcado una diferencia en esas preciosas Si Dios te llama vidas jóvenes. Me alegraba mudarme finala cambiar, no mente para vivir con mi esposo después de ser un «matrimonio de fin de semana» te desanimes si mientras culminaba con mis compromisos la transición es misioneros. Pero también iba a extrañar a mis niños. Y me sentía triste de perder la más difícil de lo comunidad y las estructuras que habían esperado. modelado mi tiempo en Corea hasta ese momento.

Lista para algo nuevo, me entusiasmaba la oportunidad de vivir un capítulo diferente.

Pero también me sentía algo abrumada por todos los cambios: mudarme y desempacar (la tercera vez que lo hacía en menos de un año); acostumbrarme a una nueva iglesia en la que a veces me sentía aislada por el idioma y las diferencias culturales; y aprender a moverme en una nueva comunidad.

Mi esposo me apoyaba mucho, y la gente de la iglesia era amable, pero a veces me sentía frustrada, irritada o simplemente agotada al procesar todas las cosas nuevas. Internamente, luchaba con «la manera en que se debían «

hacer las cosas». En realidad, era simplemente como lo prefería, o la manera en que estaba acostumbrada a actuar. Sabía que era una reacción de protección, y quería tener mayor gracia ante las diferencias que ahora encontraba, mientras también protegía mis valores y límites personales.

Después de un día en particular emotivo, me hallé pasando por las etapas de una transición. Según el Modelo de Transición de Bridges, era normal sentirse desanimada, apática y desorientada entre un fin y un nuevo comienzo. Esos sentimientos no durarían para siempre. Estar en un lugar emocional de grandes desafíos no significaba estar en el camino equivocado.

Dios a menudo nos guía para que cambiemos. Un cambio de corazón, de lugar, de carrera o estilo de vida. Nos dice: «No os acordéis de las cosas pasadas ni traigáis a la memoria las cosas antiguas. He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz, ¿no la conoceréis?» (Isa. 43:18, 19).

Pero a veces olvidamos que es difícil cambiar, aun cuando los cambios sean buenos.

Si Dios te llama a cambiar, no te desanimes si la transición es más difícil de lo esperado. Eso no necesariamente significa que escuchaste mal a Dios o que estás en el camino equivocado. Los cambios son difíciles. En ese proceso es normal pasar por entusiasmo, angustia, resistencia, ansiedad, exploración o esperanza. En todos los altibajos de la transición, Dios siempre está presente con fortaleza, apoyo y buenos presentes, para animarnos durante el proceso. Ante todos los cambios de la vida, él permanece constante.

«Jesucristo es el mismo ayer, hoy y por los siglos» (Heb. 13:8).

Lynette Yoon nació en Inglaterra, pero enseñó inglés en Corea del Sur y ahora vive allí.

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Perspectiva mundial

Una vida más abundante Es la que ofrece la Palabra de Dios

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uizá uno de los pasajes más profundos de las Escrituras se encuentra en Juan 1: «En el principio era el Verbo, el Verbo estaba con Dios y el Verbo era Dios.

Este estaba en el principio con Dios.

Todas las cosas por medio de él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho fue hecho. En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres». (vers. 1-4). ¡Hay poder en la Palabra! Crea vida, y «en él vivimos, nos movemos y somos» (Hech. 17:28).

Ese Verbo «se hizo carne y habitó entre nosotros» (Juan 1:14), y no dejó de hablar una vez que ascendió al cielo. Ese Verbo nos ha estado hablando desde el comienzo. Desde sus primeras palabras que registra Génesis 1:3: «Sea la luz», hasta su bendición en Apocalipsis 22:20: «Ciertamente vengo pronto», el Verbo no nos ha privado de su voz.

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La Palabra de Dios nos habla a todos los aspectos de la vida, y es allí donde leemos: «Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas y que tengas salud, así como prospera tu alma» (3 Juan 2). Nuestro Creador quiere que experimentemos buena salud: física, mental y espiritual.

«Muy íntima es la relación entre la mente y el cuerpo. Cuando una está afectada, el otro simpatiza con ella.

La condición de la mente influye en la salud mucho más de lo que generalmente se cree. Muchas enfermedades son el resultado de la depresión mental. Las penas, la ansiedad, el descontento, remordimiento, sentimiento de culpabilidad y desconfianza, menoscaban las fuerzas vitales, y llevan al decaimiento y a la muerte».1 Al considerar los aspectos importantes de la salud mental, me gustaría sugerir tres maneras en las que la Palabra de Dios puede contribuir de

manera poderosa para promover la buena salud mental.

CERTEZA

La Biblia brinda una guía confiable e invariable en un mundo incierto.

El mundo que nos rodea se está literalmente desmoronando.

Lo vemos en las pandemias, la inestabilidad social, las catástrofes naturales, la violencia descontrolada y muchos otros desafíos que hacen que las personas teman por su seguridad personal. La vida se ha vuelto incierta para todos los atrapados en estas destrucciones incontrolables. Esas personas necesitan escuchar el mensaje de esperanza y sanación que la Palabra de Dios, la Biblia, ofrece. No se necesita una solución política, militar o social, sino un regreso apasionado a los fundamentos bíblicos: la Palabra segura de Dios.

«La hierba se seca y se marchita la flor, mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre» (Isa. 40:8).

Todos hemos experimentado tormentas en la vida y, sin duda, experimentaremos otras más. Pero la Palabra de Dios ofrece el cimiento sólido sobre el cual podemos edificar nuestra fe.

Jesús nos dice: «A cualquiera, pues, que me oye estas palabras y las pone en práctica, lo compararé a un hombre prudente que edificó su casa sobre la roca. Descendió la lluvia, vinieron ríos, soplaron vientos y golpearon contra aquella casa; pero no cayó, porque estaba cimentada sobre la roca» (Mat. 7:24, 25).

PAZ

La Biblia ofrece paz en el presente.

Según la Organización Mundial de la Salud, «los trastornos de ansiedad son los trastornos mentales más comunes del mundo. En 2019 afectaron a 301 millones de personas».2 La gente está preocupada, porque observa con ansiedad que el mundo que los rodea se desmorona. La inspiración nos dice: «La paz permanente, el verdadero descanso del espíritu, no tiene más que una Fuente. De ella hablaba Cristo cuando decía: “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, que yo os haré descansar” (Mat. 11:28). “La paz os dejo, mi paz os doy: no como el mundo la da, yo os la doy” (Juan 14:27). Esta paz no es algo que él dé aparte de su persona. Está en Cristo, y no la podemos recibir sino recibiéndole a él».3 Cristo nos habla mediante su Palabra escrita hoy. Es al pasar tiempo con su Palabra, escuchar su voz y seguirlo que podemos encontrar su paz.

Leemos en El ministerio de curación: «No hemos de consentir en que lo futuro con sus dificultosos problemas, sus perspectivas nada halagüeñas, nos debilite el corazón, haga flaquear nuestras rodillas y nos corte los brazos. “Echen mano ... de mi fortaleza—dice el Poderoso,—y Fotografía: Allef Vinicius

hagan paz conmigo. ¡Sí, que hagan paz conmigo!” Isaías 27:5 (VM). Los que dedican su vida a ser dirigidos por Dios y a servirle, no se verán jamás en situación para la cual él no haya provisto el remedio. Cualquiera que sea nuestra condición, si somos hacedores de su Palabra, tenemos un Guía que nos señale el camino; cualquiera que sea nuestra perplejidad, tenemos un buen Consejero; cualquiera que sea nuestra perplejidad, nuestro pesar, luto o soledad, tenemos un Amigo que simpatiza con nosotros».4

La Palabra de Dios ofrece el cimiento sólido sobre el cual podemos edificar nuestra fe.

ESPERANZA

regreso y el lugar magnífico que ha preparado para nosotros. «Entonces vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra habían pasado y el mar ya no existía más […]. Y oí una gran voz del cielo, que decía: “El tabernáculo de Dios está ahora con los hombres. Él morará con ellos, ellos serán su pueblo y Dios mismo estará con ellos como su Dios.

Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá más muerte, ni habrá más llanto ni clamor ni dolor, porque las primeras cosas ya pasaron”» (Apoc. 21:1, 3, 4).

La Palabra de Dios nos ofrece la esperanza y seguridad que necesitamos. Los animo a dedicarle tiempo todos los días, escuchando lo que Dios nos dice hoy para bien de nuestra salud espiritual, física, social y mental.

La Biblia brinda una esperanza que podemos reclamar para el presente y el futuro.

Cada vez hay más episodios importantes de depresión y sentimientos de desesperanza. Aunque es difícil conocer estadísticas mundiales, el Instituto Estadounidense de Salud Mental reporta que, según estimaciones, en 2021, 23 millones de adultos (a partir de los 18 años) en los Estados Unidos «sufrieron al menos un episodio depresivo». Asimismo, informó que «la prevalencia de adultos con un episodio depresivo importante fue la más elevada entre individuos de 18 a 25 años (18,6 por ciento)».5 Las personas, en especial los jóvenes, están buscando significado y propósito en sus vidas, y esperanza para el futuro. Se preguntan: «¿Por qué estoy aquí?» «¿Cuál es mi propósito?» «¿Es esto todo lo que hay en la vida?»

La Palabra de Dios nos señala una esperanza que podemos reclamar ahora y para el futuro. Jesús nos dice: «Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia» (Juan 10:10).

«Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz y no de mal, para daros el fin que esperáis» (Jer. 29:11).

Y además de saber que Dios quiere que disfrutemos de una vida abundante en el presente, podemos aguardar con ansias la esperanza última de su pronto

Elena White, El ministerio de curación (Mountain View, Calif.: Pacific Press Pub. Assn., 1959), p.185.

2 «Trastornos de ansiedad», Organización Mundial de la Salud, www.who.int/news-room/fact-sheets/detail/anxiety-disorders, visitado el 5 de octubre de 2023.

3 White, El ministerio de curación, p. 190.

4 Ibíd., p. 191.

5 «Depresión mayor», Instituto Estadounidense de Salud Mental, www.nimh.nih.gov/health/statistics/major-depression, visitado el 5 de octubre de 2023.

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Ted N.C. Wilson es presidente de la Iglesia Adventista. Puede seguirlo en X (ex-Twitter): @pastortedwilson y en Facebook: @Pastor Ted Wilson

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urante la hora de la oración matutina en un programa de capacitación de Misión Global en Sudán del Sur, tuve una experiencia totalmente inesperada. Cuando preguntamos quién tenía pedidos de oración, un joven al fondo del salón levantó la mano. «Oremos por Al Shabaab». ¿Al Shabaab?, pensé, recordando que ese grupo extremista era responsable de muchos ataques terroristas en África Oriental.

Entonces otro hombre levantó la mano y añadió: «Sí, y Boko Haram y también ISIS». ¿De verdad? Asumí que querían que oráramos pidiendo protección de esos grupos terroristas que habían asolado África y otras regiones del mundo. Tenía sentido.

Unos momentos más tarde, me arrodillé junto a mi compañero de oración, uno de los directores de Misión Global. Comenzó a orar: «Señor, esta mañana oramos especialmente por Al Shabaab y Boko Haram. Sabemos que eres el Dios de Nabucodonosor. Sabemos que enviaste sueños y visiones y transformaste el corazón de ese rey terrorista. Oro para que llegues al corazón de esos grupos malignos de nuestro mundo, así como lo hiciste con Nabucodonosor. Envía sueños y visiones; alcánzalos con manifestaciones de tu poder».

No estaba orando para ser protegido de los terroristas, por más importante que ello fuera. Oraba pidiendo que fueran transformados. Y la historia que le dio el valor de orar con semejante fe fue la historia de Dios y Nabucodonosor. (ver Dan.1-4). ¿ORAR POR LOS TERRORISTAS?

Fe en acción

Mi mente comenzó a procesar esa idea de orar por los terroristas. Nabucodonosor no fue el único terrorista que Dios cuidó y transformó. También estuvo Naamán, el sirio (2 Reyes 5). Dios actuó de manera sumamente inesperada en su caso. Usó una de las cautivas de Naamán –después de

El Dios de Abraham, Sansón y Nabucodonosor Es el Dios de todos

una incursión terrorista–; una joven esclava israelita que dio un testimonio. ¿Y qué decir de los ninivitas? (ver Jonás). La lista documentada de sus crueldades y atrocidades hace que las actividades de ISIS no parezcan tan atroces. Al mismo tiempo, Dios tuvo que trabajar con Jonás, un profeta prejuiciado, obstinado y reacio, para que Nínive tuviera la oportunidad de conocerlo. A Jonás no le importaban los ninivitas, pero a Dios sí. Recordar cuánto se había interesado Dios en esos malvados me llenó de humildad. Jamás había pensado en orar por los terroristas actuales. Al igual que Jonás, jamás esperaba que Dios los salvara. Jamás me interesé lo suficiente como para orar por ellos.

Esa experiencia de oración en Sudán del Sur llenó mis oraciones de nuevo énfasis y una nueva clase de poder. Comencé a orar de manera regular por los terroristas de todo el mundo, sabiendo que el Dios de Naamán, de los ninivitas, y de Nabucodonosor, se interesa por ellos y quiere que lo conozcan. Sus experiencias me recuerdan que nada es demasiado difícil para Dios. También revelan que él tiene formas de alcanzar el corazón de las personas, que nos resultan sorpresivas.

A los que hemos crecido siendo cristianos se nos suele recordar que servimos y oramos al Dios de Abraham, Isaac y Jacob. Cuando oro al Dios de esos patriarcas, recuerdo que mi fe está arraigada en el Dios que llama a personas comunes y las guía por los buenos y los malos momentos. Él perdona y guía. También puede hacer lo imposible.

Cientos de historias de la Biblia revelan que Dios obró con todo tipo de personas en todo tipo de situaciones.

EXPANDIR NUESTRAS ORACIONES

Desde ese día en Sudán del Sur, he expandido y enriquecido todas mis oraciones, al recordar y aplicar las historias de otras personas de la Biblia que interactuaron con Dios. Basar mis oraciones en el Dios que se revela mediante esas maravillosas historias ha incrementado enormemente mi fe. A continuación, menciono algunos ejemplos.

Ante situaciones imposibles, me ha resultado poderoso enfocarme en cómo Dios bendijo a Sara (Gén. 20; 21), Ana (1 Sam. 1) y Elizabeth (Luc. 1).

La disposición de Dios de trabajar con personas imperfectas y bendecirlas a pesar de sus fallas queda clara en las historias de Gedeón (Jue. 6), Sansón (Jue. 13-16) y Pedro (Juan 21:15-19).

Las historias de los llamados que Dios le hizo a Moisés (Éxo. 3), Isaías (Isa. 6) y Jeremías (Jer. 1) refuerzan mi fe en la capacidad de Dios de suplir mis deficiencias.

Cuando me siento abandonada, recuerdo al Dios de José, Elías y David La historia de Dios y el rey Manasés (2 Crón. 33) me recuerda que Dios puede perdonar aun los pecados más atroces cuando retornamos a él.

El Dios de Jonás, de Santiago y de Juan es un Dios paciente con los discípulos imperfectos, temperamentales y aun vengativos.

El Dios de María Magdalena, Zaqueo, los leprosos y la mujer junto al pozo de Samaria es el Dios que se interesa en los marginados de la sociedad.

Esta lista es tan solo el comienzo. Cientos de historias de la Biblia revelan que Dios obró con todo tipo de personas en todo tipo de situaciones. Esas historias constituyen una riqueza de «material de oración» que edifica la fe. Mediante esas historias, podemos recordarnos lo que Dios ha hecho en el pasado y está más que dispuesto a hacer en el presente y el futuro. Él es realmente el Dios de Abraham, Sansón y Nabucodonosor. Es el Dios de todos.

Patricia Gustin, ya jubilada, fue directora del Instituto de Misiones Mundiales de la Universidad Andrews en Berrien Springs, Míchigan, Estados Unidos.

Fotografía: Sergey Pesterev

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Descubramos el Espíritu de Profecía

Visiones de plenitud y misión Ciento sesenta años del mensaje adventista de salud

D

esde 1863, los adventistas del séptimo día hemos llegado a ser conocidos cada vez más por nuestra promoción de la vida sana. Varios estudios recientes han demostrado que disfrutamos de una mejor salud y vivimos en promedio de siete a diez años más que la población general.1 Elena White, cofundadora de la denominación, ha jugado un papel fundamental en el establecimiento de prácticas distintivas de estilo de vida que avalan muchos de los hallazgos científicos recientes.

White recibió sus dos principales visiones sobre salud en 1863 y 1865. En cierto sentido, las dos visiones probaron ser el punto de inflexión de la nueva denominación. Los adventistas no solo se convirtieron en reformadores de la salud, sino que también incluyeron la salud en su misión general al mundo. El mensaje de salud llegó a ser parte de su identidad distintiva.

LA VISIÓN DE SALUD DE 1863

Los adventistas que guardaban el sábado se organizaron oficialmente como Iglesia Adventista del Séptimo Día el 21 de mayo de 1863 en Battle Creek (Míchigan). Unas dos semanas después, el 6 de junio, Elena White recibió su primera gran visión sobre la salud. Su mensaje contenía principios generales centrales relacionados con la importancia de la vida sana, además de algunas instrucciones específicas a Jaime y Elena White.

El mensaje general de esa primera visión fue más bien simple: Los adventistas, incluidos Jaime y Elena, tenían que prestar más atención a su salud; esta faceta era importante. Asimismo, la visión describía la salud en términos abarcadores; la buena salud tenía que ser una experiencia integral; dependía de todo el estilo de vida. Eso marcó el comienzo del énfasis del pensamiento y los escritos de Elena White.

Un año después, escribió y elaboró aún más lo que se le había mostrado. En su larga exposición, publicada bajo el título «Salud» en Dones espirituales, tomo 4, escribió sobre la dieta y los peligros de la intemperancia; la importancia de controlar el apetito; la 24

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prohibición de comer carne de cerdo; el beneficio de una dieta vegetariana; el efecto venenoso de usar tabaco y otros estimulantes; la importancia de la higiene y el aire fresco; el equilibrio entre el trabajo y el descanso; los beneficios del agua; el uso de remedios naturales para sanar en lugar de las «drogas»; la importancia de creer en Dios, y otras aplicaciones prácticas de salud.2 Comenzó a describir la salud en términos abarcadores: conectada con los fundamentos físicos, emocionales y espirituales de la vida.3 LA VISIÓN DE SALUD DE 1865

Resulta curioso (o acaso no tanto) que pocos adventistas respondieron al mensaje de Elena White (o más

El mensaje de salud es una parte de nuestra identidad distintiva.

bien, de Dios) sobre la prioridad que tiene la salud. Después de todo, Jesús vendría pronto y la salud no era parte de la misión adventista, según pensaron. Pero el 25 de diciembre de 1865, Elena White recibió una segunda visión sobre salud en Rochester (Nueva York). «Se me mostró que nuestro pueblo observador del sábado ha sido negligente y no ha obrado en conformidad con la luz que Dios le ha dado con respecto a la reforma prosalud –escribió–, […] y que como pueblo hemos sido demasiado renuentes para avanzar a fin de aprovechar las oportunidades preparadas por la providencia de Dios según la dirección en que desea que vayamos. Se me mostró que escasaFotografía: Juliane Liebermann

mente se ha comenzado la obra de la reforma prosalud». Entonces destacó que muchos creyentes eran indiferentes, no creían en la importancia de la salud, o simplemente habían hecho un dios del «gusto» y el «apetito».4 No obstante, la visión sobre salud de 1865 no solo fue una advertencia contra la negligencia; percibió claramente que la salud tenía que llegar a ser una parte fundamental de la misión general de los adventistas. «Se me mostró que la reforma prosalud es parte del mensaje del tercer ángel y está tan íntimamente ligada a él como el brazo y la mano lo están al cuerpo humano. Vi que como pueblo debemos avanzar en esta gran obra», explicó Elena White.5 Los creyentes adventistas no solo tenían que practicar la reforma prosalud, sino que la iglesia tenía la obligación espiritual de enseñar a otros de su significación y beneficios.

Esta segunda visión instó a los adventistas a que establecieran sus propias instituciones de salud, que apoyarían los emprendimientos médico misioneros de la denominación. En efecto, Elena White destacó que el evangelismo médico tenía el potencial de alcanzar a personas que no podían ser alcanzadas mediante otros tipos de evangelismo.

«Nuestro pueblo debiera tener una institución propia, controlada por ellos mismos, para beneficio de los enfermos y los sufrientes […] –escribió–. Una institución de esa naturaleza, debidamente dirigida, sería el medio adecuado para presentar nuestros puntos de vista a muchos a quienes sería imposible alcanzar por medio del procedimiento usual de predicación de la verdad. Cuando los incrédulos acudan a nuestra institución dedicada al tratamiento eficaz de las enfermedades, bajo el cuidado de médicos observadores del sábado, serán colocados directamente bajo la influencia de la verdad […]. Al ser puestos así bajo la influencia de la verdad, algunos no solo obtendrán alivio

de enfermedades corporales, sino que hallarán un bálsamo sanador para sus almas enfermas por el pecado».6 En cierto sentido, Elena White enfatizó la relación que tenía que existir entre el ministerio evangélico y el de salud. Después de todo, Jesús practicó ambos, enseñar y sanar, pero dedicó «más tiempo a la curación de los enfermos» que a predicar.7 Asimismo, sus prácticas de sanación trascendieron la sanación de las aflicciones físicas. Aprovechó «cada curación que hacía para sentar principios divinos en la mente y en el alma. Tal era el objeto de su obra».8 El ministerio de sanación de Jesús incluyó la sanación de toda la persona, y los adventistas tenían que seguir su ejemplo.

Con el tiempo, los adventistas respondieron a las visiones y llamados de Elena White, y la denominación llegó a ser una entidad líder en la promoción de la salud integral y la vida sana en todo el mundo.

En el presente, la Iglesia Adventista cuenta con el sistema de salud protestante más grande del mundo, con cientos de hospitales, clínicas y hogares de ancianos en diversas partes del mundo. Pero todo comenzó con un simple mensaje hace ciento sesenta años, de que la salud tenía que ser parte de la identidad y misión adventista al mundo.

Véase, por ejemplo, Gary E. Frasier, Diet, Life Expectancy, and Chronic Disease: Studies of Seventh-day Adventists and Other Vegetarians (New York: Oxford University Press, 2003); Dan Buettner, «The Blue Zones: Lessons for Living Longer from the People Who’ve Lived the Longest» (Washington, DC: National Geographic, 2008), pp. 123-165.

2 Elena White, Spiritual Gifts, t. 4 (Battle Creek, Mich.: Steam Press, 1864), pp. 120-151.

3 Herbert Douglas ha preparado una lista abarcadora donde enumera los principios de la primera visión de Elena White en su libro Mensajera del Señor. Véase Herbert E. Douglas, Mensajera del Señor: El ministerio profético de Elena G. White (Nampa, Id.: Pacific Press Publ. Assn., 2000), pp. 283-284.

4 Elena White, Testimonios para la iglesia, t. 1 (Doral, Fl.: Asoc. Publ.

Interamericana, 2003), pp. 426, 427.

5 Ibíd., p. 427.

6 Ibíd., p. 432.

7 Elena White, El ministerio de curación (Mountain View, Cal.: Pacific Press Pub. Assn., 1959), p. 12.

8 Ibíd., p. 13.

1

Theodore Levterov es editor asociado del Patrimonio White en Silver Spring, Maryland, Estados Unidos.

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Respuesta a preguntas bíblicas

Un himno y el Cristo cósmico

P

Leo que Col. 1:15-20 es un himno cristiano. ¿Es verdad? Y si es así, ¿qué propósito tiene?

R

Suele creerse que Col. 1:15-20 es un himno cristiano primitivo que expresa, de manera sucinta, elegante, profunda y poética, la magnificencia de Cristo como Creador y Redentor. Si se trata de un himno, contiene dos estrofas: Cristo el Creador (vers. 15-17); y Cristo el Redentor (vers. 18-20).

La segunda estrofa identifica al Hijo como la cabeza de su cuerpo, la iglesia, y como el comienzo de una nueva humanidad. El título «supremo sobre todos los que se levantan de los muertos» enfatiza su supremacía entre los que serán resucitados, porque sin su resurrección no hay resurrección de los muertos. El concepto de supremacía es definido aún más con la frase: «él es el primero en todo», es decir, el Hijo restaurará lo que era suyo cuando creó todo. Esto es posible gracias a su encarnación: «a Dios, en toda su plenitud, le agradó vivir en él». Se expresa el propósito de la encarnación: Reconciliar todas las cosas –en el cielo y en la Tierra– mediante su muerte sacrificial. De una u otra manera, se reconciliará a todo el cosmos con el Hijo (Fil. 2:9-11).

1. EL CRISTO CÓSMICO (VERS. 15-17)

3. COMENTARIOS SOBRE EL HIMNO

La primera estrofa nos da una vislumbre importante de la obra cósmica de Cristo. Él es presentado como «la imagen visible del Dios invisible […] supremo sobre la creación» (NTV).* Se desarrolla la significación de esos dos títulos al declarar que todas las cosas fueron creadas «por medio [«en»] de él»: es el Creador del cosmos, lo que significa que ha creado todas las cosas en el cielo y en la Tierra, sean visibles o invisibles, además de todos los seres celestiales («tronos, reinos, gobernantes y autoridades»). Se usan tres preposiciones para describir el acto de creación: Todo fue creado «en él» (en unidad con él; en la ausencia de pecado), «por medio [indica agencia] de él» (orientado hacia Cristo como su centro).

El himno sigue al aclarar que el Hijo de Dios no fue una criatura porque «existía antes de todas las cosas» y porque todo «fue creado por medio (dia) de él y para (eis) él». El texto finalmente especifica que «mantiene unida toda la creación» (vers. 17): Cristo es quien sostiene el cosmos y preserva su existencia. La primera estrofa nos dice quién es el Hijo con respecto a la creación (es la imagen del Dios invisible, el Creador y Sustentador), y su superioridad y supremacía sobre toda la creación (supremo sobre la creación) como su Creador y Sustentador.

La primera estrofa presenta al Hijo como el Creador, que en esencia difiere de su creación: él es divino. Se indican claramente su supremacía y primacía dentro de la creación. Dentro del cosmos, es la imagen del Dios invisible. Como imagen de Dios y primero de la creación, su responsabilidad primaria es revelar al cosmos la bondad de Dios. Es en ese momento de la historia cósmica que asume su papel más importante.

La primera estrofa describe la condición del universo en ausencia de un conflicto cósmico. La segunda estrofa presupone el conflicto cósmico y describe la obra del Hijo, que consiste en reconciliar todo el cosmos.

La efectividad de su obra ahora se hace visible en su supremacía dentro de la iglesia, y alcanzar dimensiones cósmicas mediante la reconciliación cósmica.

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2. CRISTO EL REDENTOR (VERS. 18-20)

Ángel Manuel Rodríguez se ha jubilado después de trabajar como pastor, profesor y teólogo.

Salud

Vivir una vida plena ¿Garantiza la salvación seguir el mensaje de salud?

He sido adventista practicante durante diez años. Acepto las enseñanzas de la Biblia sobre los alimentos puros e inmundos y la posición de la iglesia sobre el tabaco y el alcohol. Más allá de eso, elijo qué partes seguir o no del mensaje adventista de salud. He escuchado que algunos adventistas creen que seguir estrictamente el mensaje de salud garantiza la salvación. ¿Es esto así? ¿De qué manera puede justificarse?

E

n la Encuesta Global de Miembros Adventistas, se informó que el 47 por ciento de los encuestados creen que la adherencia completa al mensaje de salud garantiza la salvación. No existen consejos del Espíritu de Profecía que apoyen esta postura, que es claramente contraria a nuestra doctrina formal, según la resume el apóstol Pablo: «Porque por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe. Esto no procede de ustedes, sino que es el regalo de Dios y no por obras, para que nadie se jacte» (Efe. 2:8, 9, NVI).

Nuestras obras no nos garantizan la salvación, que es un don de la gracia divina. Oramos para que en el futuro no haya confusión en este sentido.

Algunos detalles adicionales de la encuesta pueden resultar útiles. Por ejemplo, confirmó que más del 80 por ciento de los encuestados aceptaba el mensaje adventista abarcador de salud, y que es central a las creencias de la Iglesia Adventista. Concuerdan asimismo que es confirmado por las ciencias de la salud, y que puede mejorar la calidad de vida y la longevidad.

Más del 90 por ciento de los miembros es abstemio, y el 97 por ciento se abstiene del tabaco. A pesar de la recomendación de la iglesia sobre una dieta vegetariana equilibrada, solo el 19 por ciento de los encuestados reportó ser vegetariano o vegano.

Desde la creación, Dios dio énfasis al bienestar integral, comenzando con nuestros padres en el Jardín del Edén: atención espiritual, ejercicio físico, alimentos nutritivos y tiernos vínculos relacionales entre los miembros de la primera familia. Después de la caída en el pecado y el diluvio, Dios dio instrucciones sobre alimentos puros e inmundos, la higiene y la limpieza.

Jesús se desarrolló integralmente en estatura (cuerpo), conocimiento (mente) y favor con Dios (espiritual) y sus prójimos (relacional; véase Luc. 2:52). Expresó claramente que vino para que tengan vida «en abundancia» (Juan 10:10).

Fotografía: Eduardo Barrios

Cuando se le preguntó por qué la naciente iglesia había recibido el mensaje de salud, Elena White respondió que era porque nuestra obra aún no estaba terminada.* La salud es importante para que podamos brindar nuestro servicio, pero también para que tengamos una mente clara y un discernimiento de las verdades eternas. No somos salvos por el mensaje de salud. La vida sana puede darnos claridad mental, para que podamos escuchar la voz del Espíritu Santo y refinar nuestra comprensión de la Palabra de Dios. Esto se aplica especialmente cuando nuestra mente no se ve nublada por el alcohol, el tabaco y otras drogas.

Vivir el mensaje de salud puede fortalecer nuestro andar espiritual. No lo aceptemos simplemente: ¡Adoptémoslo! «¡Confíen en el Señor su Dios y estarán seguros! ¡Confíen en sus profetas y tendrán éxito!» (2 Crón. 20:20, NVI). *Elena White, Mensajes selectos, t. 3 (Doral, Fl.: Asoc. Publ. Interamericana, 2000), p. 317.

Peter N. Landless es cardiólogo nuclear certificado y director de Ministerios Adventistas de Salud de la Asociación General.

Zeno L. Charles-Marcel es especialista certificado en medicina interna y director asociado de Ministerios Adventistas de Salud de la Asociación General.

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¿Puedo contarle una historia?

DICK DUERKSEN

El buzón 231 T

odos los días, a la hora de buscar el correo, Art descendía al vestíbulo de la escuela y caminaba lentamente hasta la pared donde estaban los buzones de bronce. Cada buzón tenía unos 10 centímetros, y un complejo sistema de candado con una clave. El buzón 231 era de él, y había estado vacío todo el mes de diciembre.

Hoy era 24 de diciembre, un día antes de Navidad. Art se detuvo frente a los buzones por largo tiempo, con ganas de salir corriendo. No obstante, estaba decidido a revisar el suyo, por si ese día pasaba algo diferente.

Finalmente, se adelantó e hizo girar el dial del código especial que abría el buzón 231. Su corazón estaba triste, pero esperanzado.

AÑORANZAS DE SU HOGAR

Art tenía 13 años, y era un niño indígena mohicano, que asistía a la escuela con internado del gobierno en Lawrence (Kansas, EE. UU.).

Le habría gustado vivir con sus padres, tres hermanas y dos hermanos, en su hogar de la Reserva Menominee en Wisconsin, pero no había escuelas allí en la reserva. El gobierno había elegido firmar un contrato con Haskell, una escuela privada en Lawrence, y los líderes del Concejo Tribal habían acordado que los niños podían ir allí.

Con excepción de los meses calurosos de verano y las dos breves semanas de Navidad, Haskell llegó a ser el hogar de Art. Esta escuela era administrada con mano dura al estilo militar. La comida no era la mejor; no se parecía a la que cocinaba la madre de Art allí en su hogar. Cada día, tenía que vestir la camisa del uniforme con cuadrados rojos y negros que lo catalogaban como «indígena», alguien que supuestamente tenía menos valor que sus maestros o las demás personas del pueblo.

Art se sentía menospreciado y solo. Sentía una opresión en el pecho al punto que pensó que estaba quebrantado. Trató de no mirar a los demás estudiantes, seguro de que verían las lágrimas que le llenaban 28

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los ojos. Todo el tiempo deseaba estar con su familia allá en la Reserva Menominee. En especial en esa Navidad.

Su «hogar» no estaba realmente en Wisconsin; su «hogar» estaba en el este, en las montañas de lo que ahora se llamaba estado de Nueva York.

Pero, dado que el gobierno había querido esa tierra, toda su tribu de nativos mohicanos había sido «removida» y «trasplantada» a los extraños bosques y selvas de Wisconsin. Cuando llegaron, a cada mohicano se le asignó un nuevo nombre, y la familia recibió 36 hectáreas de tierra.

Cuando el abuelo de Art se paró frente al agente de asuntos indígenas en la nueva reserva, el hombre le dijo que todos los nombres nuevos ya habían sido usados. «Por eso, te daré mi nombre –le dijo el agente–. Vengo de Inglaterra, y mi apellido es Church. Tú serás el señor George Church».

Se asignó a alguien para que les enseñara a los indígenas a ser agricultores, pero eso no funcionó muy bien. El padre de Art escogió, por el contrario, ser constructor; un constructor carpintero que usaba árboles nativos y bloques de piedra para edificar casas para los demás nativos. Era un obrero esmerado, pero construir con piedra era un trabajo duro que demandaba mucha habilidad tanto de él como de todos sus hijos. Trabajaban largas horas, y construyeron poco a poco una empresa exitosa.

Fotografía: Cortesía del autor

Cuando cumplió 11 años, Art preguntó si podía ir a la escuela. Fue difícil para sus padres dejarlo ir, pero la familia finalmente acordó que aceptara un billete de tren de parte del agente de la reserva para viajar a la lejana Kansas.

Art estaba feliz de aprender, pero vivía esperando las vacaciones. En especial la Navidad.

EL MEJOR PRESENTE

Ese año, su tercero en la escuela Haskell, no había vacaciones de Navidad.

Una gran epidemia de gripe estaba abrumando al mundo, causando muchas muertes, en especial entre los nativos de las reservas. Los administradores de la institución, con temor de que los estudiantes trajeran la enfermedad de sus casas, habían cerrado la escuela, puesto a los estudiantes en cuarentena y cancelado todo viaje por vacaciones.

Nadie iría a casa para Navidad. Art sentía que la Navidad misma había sido cancelada, y sufría al pensar que acaso jamás volvería a su hogar.

El dial del buzón finalmente se destrabó, y pudo abrirlo. Adentro, había un pequeño sobre.

Art reconoció la escritura de su madre en el sobre, lo sacó rápidamente del buzón, lo ocultó en uno de los bolsillos de su abrigo, y salió corriendo. Su corazón desbordaba de felicidad, y sus pies danzaban con un ritmo alegre. ¡Una carta de su casa! ¡De su mamá!

Por un momento, todo pareció estar bien. Corrió a un lugar tranquilo bajo las escaleras de la residencia estudiantil, allí donde nadie lo encontraría, y con cuidado abrió el sobre. Adentro encontró una tarjeta muy simple hecha por su madre.

«Feliz Navidad, hijo», había escrito mamá con un lápiz de cera. Y había dibujado un hermoso corazón con las palabras: «No vemos las horas de que vengas a casa». Bajo el corazón, la mamá había escrito una frase familiar que resumía todo lo que Art sabía sobre Dios, Jesús, la Navidad y la familia.

«Te ama, mamá».

Había algo más. Mamá le había cosido

Era una fortuna para un muchachito que se vestía de rojo y negro, y que ahora derramaba lágrimas de gozo bajo las escaleras.

Editor Adventist World, es una publicación periódica internacional de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Su editor es la Asociación General, División de Asia-Pacífico Norte de los Adventistas del Séptimo Día®.

Editor/Director de Adventist Review Ministries Justin Kim Director de la publicación internacional Hong, Myung Kwan Comisión de coordinación de Adventist World Yo Han Kim, presidente; Tae Seung Kim, Hiroshi Yamaji, Myung Kwan Hong, Seong Jun Byun, Dong Jin Lyu Editores asociados/directores en Silver Spring (Maryland, EE. UU.) Sikhululekile Daco, John Peckham, Greg Scott Editores en Silver Spring (Maryland, EE. UU.) Enno Müller, Beth Thomas Editores en Seúl (Corea del Sur) Hong, Myung Kwan; Park, Jae Man; Kim, Hyo-Jun Director de plataformas digitales Gabriel Begle Director de integración de sistemas e innovación Daniel Bruneau Gerenta de operaciones Merle Poirier Coordinadora de evaluación editorial Marvene Thorpe-Baptiste Consultor E. Edward Zinke Gerenta financiera Kimberly Brown Coordinadora de distribución Sharon Tennyson

a la tarjeta una brillante moneda de 10 centavos. No le decía cómo gastarla o por qué la había enviado. Ni siquiera la mencionaba. Solo la había cosido con firmeza para que no se cayera. ¡La podía gastar como quisiera! ¡Diez centavos!

Era una fortuna para un muchachito que se vestía de rojo y negro, y que ahora derramaba lágrimas de gozo bajo las escaleras.

Pasó el dedo con cuidado sobre la moneda y leyó la tarjeta, una y otra vez.

La Navidad no se trata de regalos; ¡se trata de estar en familia! ¡Su familia lo amaba y quería que volviera a casa!

Art decía a menudo que la tarjeta que le envió la mamá, y la alegría de saber que lo amaba fue el mejor regalo que recibió alguna vez.

Jamás gastó la moneda.

Consejo de dirección Yo Han Kim, presidente; Justin Kim, secretario; Hong, Myung Kwan; Karnik Doukmetzian; SeongJun Byun; John Peckham; Hiroshi Yamaji; Joel Tompkins; Ray Wahlen; Ex-officio: Paul H. Douglas; Erton Köhler; Ted N. C. Wilson Diseño y dirección artística Types & Symbols A los colaboradores: Aceptamos el envío de manuscritos no solicitados. Dirija toda correspondencia a 12501 Old Columbia Pike, Silver Spring, MD 20904-6600, EE. UU. Número de fax de la oficina editorial: 1 (301) 680-6638 E-mail: worldeditor@gc.adventist.org Sitio Web: http://www.adventistworld.org/ A menos que se indique lo contrario, todas las referencias bíblicas pertenecen a la versión Reina Valera. Revisión 1995. Usada con autorización.

Adventist World es publicada todos los meses e impresa simultáneamente en Alemania, Argentina, Australia, Austria, Brasil, Corea del Sur, Estados Unidos, Indonesia, México y Sudáfrica.

Vol. 19, No. 12

Dick Duerksen es un pastor y narrador que vive en Portland, Oregón, Estados Unidos.

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Fe en crecimiento

Páginas infantiles

«La luz brillante de la esperanza»

S

ara era una niña dulce, siempre lista con una sonrisa y un saludo alegre.

Pero un día, una nube negra pareció nublar su corazón, y no podía explicar por qué. Se sentía triste y preocupada todo el tiempo, y sus amigos y familia notaron que algo andaba mal.

Una mañana de sol, mientras Sara estaba sentada sola bajo la sombra de un gran roble, su abuelita Rut se le acercó con una sonrisa. La abuelita podía entender cosas que nadie más entendía.

—Sara –dijo la abuelita–, puedo ver que llevas una pesada carga en tu corazón. ¿Te gustaría contarme qué te pasa?

Los ojos de Sara se llenaron de lágrimas.

—No lo sé, abuelita. Me siento triste y con miedo todo el tiempo.

No sé qué me pasa.

La abuelita colocó su brazo alrededor de Sara y la llevó a un lugar cómodo bajo el árbol. Tomó una pequeña Biblia del bolsillo y la abrió en un versículo que, sabía, 30

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brindaría consuelo a su nieta. Leyó en voz alta Filipenses 4:6-7 (NVI): «No se preocupen por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús».

Sara escuchó con detenimiento esas palabras y se enjugó las lágrimas.

—¿Pero sabes qué, abuela? ¿Cómo hago para dejar de estar ansiosa?

—Es un proceso, querida –respondió la anciana con una sonrisa cálida–. Al igual que cualquier viaje, comienza con un solo paso. Primero, oremos juntas para entregar todas tus preocupaciones a Dios. Él se interesa profundamente en ti, y quiere ayudarte.

Así fue como Sara y la abuelita se arrodillaron bajo el roble y oraron juntas, entregándole a Dios todos los temores y preocupaciones de la niña. Sara sintió un destello de esperanza, como si

una lucecita hubiera brillado en las tinieblas de su corazón.

Al levantarse, la abuela la tomó de la mano, y comenzaron a caminar por el sendero hacia la casa.

Por un momento estuvieron en silencio, pero entonces la abuela habló otra vez.

«Sara, no estás sola. Hay muchos otros en el mundo que sienten lo mismo que tú. Aun los grandes héroes de la Biblia como David enfrentaron momentos de tristeza y temor. En el libro de los Salmos, David habló de sus luchas. En un versículo, escribió: “El ángel del Señor acampa en torno a los que le temen; a su lado está para librarlos» (Sal. 34:17). Solo recuerda, querida, que jamás estás sola en tus luchas. Dios siempre está contigo, listo para ayudarte.

Sara escuchó atentamente, con los ojos llenos de esperanza.

La abuelita Rut le habló de otra persona de la Biblia, de un joven llamado José. «Sara, José también pasó por momentos muy difíciles.

Su madre murió cuando él era Ilustración: Mugi Kinoshita

BETH THOMAS

muy joven; sus hermanos le tenían tantos celos que lo vendieron como esclavo; y fue acusado de algo que no había hecho, y arrojado en la cárcel. Pero en Génesis 50:20, dijo: “Es verdad que ustedes pensaron hacerme mal, pero Dios transformó ese mal en bien para lograr lo que hoy estamos viendo: salvar la vida de mucha gente”. De alguna manera, José llegó a ver que, aun cuando las cosas parecían difíciles, Dios podía transformarlas en algo hermoso».

Mientras Sara pensaba en estas historias, sintió un destello de esperanza en el corazón. Quizá Dios también tenía un plan para su tristeza.

En las siguientes semanas y meses, Sara siguió orando y buscando ayuda de sus padres y un profesional. Aprendió a compartir sus sentimientos también con sus amigos, y ellos le ofrecieron su amor y apoyo.

Cierto día, mientras Sara estaba bajo el mismo roble, se dio cuenta de que la densa nube que la había envuelto había desaparecido.

Recordó otro versículo que la abuelita le había compartido: «El Señor está cerca de los quebrantados de corazón, y salva a los de espíritu abatido» (Sal. 34:18).

Sara supo que Dios había estado con ella todo el tiempo, guiándola en medio de las tinieblas de la ansiedad y la tristeza, y llevándola hacia la brillante luz de la esperanza y la sanación. Compartió su historia con otros, recordándoles que aun en los momentos más oscuros, no estaban solos. Con fe, oración y el apoyo de sus seres queridos, ellos también podrían hallar paz y sanación.

Beth Thomas es editora asistente de Adventist Review Ministries.

PREGUNTAS:

1 2

puedes recordar esto cuando te sientas mal?

3

¿Puedes pensar en una situación en la que algo que parecía malo terminó siendo bueno, como le sucedió a José?

4

¿Cuáles son algunas de las maneras en las que podemos hablar con Dios y pedirle ayuda cuando estamos tristes o ansiosos?

5

¿Cómo es que hablar con familiares de confianza o amigos, así como lo hizo Sara, la ayudó a sentirse mejor cuando estaba pasando por un momento difícil?

6

Recuerda que Dios te ama y que siempre está listo para escucharte, como lo dice el Salmo 34:17. ¿Cómo te sientes al saber eso?

¿Te has sentido alguna vez triste o preocupado como Sara?

¿Qué le dijo la abuela de Sara sobre la presencia de Dios en los momentos difíciles? ¿Cómo AdventistWorld.org Diciembre 2023

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DÍAS DE ORACIÓN

PRIORIDADES DE FE 10-20 de enero de 2024

«¡Él te ha mostrado, oh mortal, lo que es bueno! ¿Y qué es lo que espera de ti el Señor?: Practicar la justicia, amar la misericordia y caminar humildemente ante tu Dios» MIQUE A S 6:8 NVI

W W W.T E N D AY S O F P R AY E R . O R G

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