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Publicación internacional de los adventistas del séptimo día

Vol. 12 No. 2

Experiencias de 10

El dilema de los

antibióticos

fidelidad 24

Fieles hasta la

muerte

27

Moisés:

amigo de Dios


Vol. 12 No. 2

N O TA

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D E

TA P A

Experiencias de fidelidad

Vivir una vida de fidelidad significa cosas diferentes para diferentes personas.

14 Lo que Dios unió

C R E E N C I A S F U N D A M E N T A L E S

Bill y Heather Krick

Un buen matrimonio no es todo color de rosas, pero puede ayudarnos a llegar al cielo.

22 Ejemplos de fidelidad D E V O C I O N A L

8 Seguidores fieles P A N O R A M A

M U N D I A L

Chantal J. Klingbeil

La fidelidad a Dios desde diversas perspectivas.

24

H E R E N C I A

Ted N. C. Wilson

Los seguidores de Cristo son fieles a su Palabra.

11 Las cartas y los manuscritos D es c u b rir el de P rofe c í a

D on

A D V E N T I S T A

Fieles hasta la muerte

Merle Poirier

Hubo un tiempo cuando viajar al campo misionero era tan peligroso como ser misionero.

de Elena White

Tim Poirier

Un nuevo recurso del Patrimonio White ayuda a brindar contexto a muchos de sus consejos.

Alcanzar al mundo

D E PA R TA M E N T O S 3 I N F O R M E

M U N D I A L

3 Noticias breves 6 Noticia destacada

10 S alud M undial El dilema de los antibióticos

R E S P U E S TA 26

A P R E G U N T A S BÍB L I C A S

Símbolos y metáforas

27 E S T U D I O BÍB L I C O Moisés: amigo de Dios I N T E R C A M B I O 28 I D E A S

spanish.adventistworld.org www.adventistworld.org: Disponible en línea en diez idiomas

Publicado por la Asociación General de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.

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Adventist World | Febrero 2016

D E

Cristo nuestra justicia Durante los próximos cinco años, Adventist World ofrecerá artículos relacionados con tres puntos de énfasis mundial de la Iglesia Adventista: Cristo nuestra justicia, la fidelidad, y la participación total de los miembros. Este logotipo adjunto, que aparecerá de tanto en tanto, indica un énfasis en nuestro deseo de compartir el mensaje y alcanzar al mundo para Cristo.


¿Cuánto lleva ser fieles?

D

INFORME MUNDIAL Andrew McChesney

Se inaugura primera iglesia adventista en el

norte de Siberia Los miembros oraron 23 años por un templo

E S D

e niños, medíamos todo en días, en particular respecto de esas cosas que prometían cambio o nos producían alegría. Sabíamos los días que faltaban para nuestro cumpleaños; cuántos días hasta comenzar y meses hasta terminar la escuela. Así también medíamos la justicia propia: ¿Cuántos días sin pelear con mis hermanos? ¿Cuánto había pasado desde la última mentira? ¿Cuántas semanas lograba decir el versículo de memoria en la Escuela Sabática sin equivocarme? Nuestras definiciones de todo, incluida la fidelidad, requerían el paso del tiempo. Y en especial con la fidelidad, se requería de mucho tiempo. Solo las promesas de larga data eran consideradas «fieles», como si hubiera alguna fecha secreta pero inamovible en la cual nuestros esfuerzos finalmente valdrían algo. Ese pensamiento creció, en parte, de lo que conocíamos y conocemos de Dios. Las Escrituras celebran su fidelidad inquebrantable, expresada a lo largo de los siglos y milenios. En efecto, la fidelidad de Dios –su amor constante a lo largo del tiempo– es una de sus cualidades más mencionadas. Nosotros cambiamos, fallamos y quebrantamos nuestras promesas, pero Dios permanece. Como nos lo recuerda Pablo: «Sea Dios veraz y todo hombre mentiroso» (Rom 3:4). Y sin embargo, es la genialidad del evangelio lo que nos permite compartir –mediante la gracia– lo más celebrado del carácter divino. La fidelidad de Dios a su pacto, que sustenta al universo y también al corazón del que sufre, nos pertenece, gracias a la fe en el que nunca cambia. «Creyó Abraham a Dios y le fue contado por justicia» (Rom. 4:3). La historia de la fidelidad siempre comienza con Dios. Pero las Escrituras enseñan que –mediante la gracia y la fe– también puede llegar a ser parte de nuestra historia. Al leer esta edición especial de Adventist World, dedicada a enfatizar el segundo de los grandes temas de la iglesia mundial para este quinquenio, lo invito a permitir que el Espíritu lo ayude a crecer mediante la gracia hasta alcanzar la altura que usted posee gracias a la fidelidad de Cristo.

RESPUESTA A LA ORACIÓN: La nueva iglesia en Nyagan.

C

reyentes emocionados viajaron largas distancias para asistir a la inauguración de la primera iglesia adventista en el norte de Siberia, una región fría e inhóspita de tierras árticas donde los miembros son pocos y viven aislados. La iglesia de Nyagan, una ciudad de 56 mil habitantes a 2500 kilómetros al noreste de Moscú, es una respuesta a 23 años de oraciones de los primeros adventistas de la ciudad y otras personas, dijo Vasily Stefaniv, presidente de la Misión de Siberia Occidental de la Iglesia Adventista. «Mientras se reunían a adorar en los hogares de diversos miembros de iglesia, soñaban con un templo, un lugar modesto de adoración –dijo Stefaniv–. La inauguración es una clara evidencia de la respuesta a sus oraciones».

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INFORME MUNDIAL La Misión de Siberia Occidental cuenta con 1156 miembros y 31 congregaciones, según las últimas estadísticas. Toda la División Euroasiática tiene unos 115 mil miembros y casi tres mil congregaciones. En Siberia, los adventistas viajaron desde los pueblos y aldeas más cercanas, ubicadas inclusive a quinientos kilómetros de Nyagan, para llegar el viernes y participar de la práctica de un coro

A G

La nueva iglesia es la primera de la Misión de Siberia Occidental en la región septentrional, donde la presencia del mensaje adventista es escasa, explica la División Euroasiática, que supervisa la misión. «Los hijos de Dios viven separados por muchos kilómetros, y no hay iglesias –dijo Stefaniv–. Por ello, la inauguración de la iglesia de Nyagan fue un evento muy esperado y celebrado por todos».

para el culto de dedicación del sábado. El sermón se centró en Salmos 37:3, 4, que dice: «Confía en Jehová y haz el bien; habitarás en la tierra y te apacentarás de la verdad. Deléitate asimismo en Jehová y él te concederá las peticiones de tu corazón». «En efecto –dijo Stefaniv–, en la dedicación de esta casa de adoración, el Señor cumplió el deseo de muchos corazones». n

Andrew McChesney

Delbert Baker

asume la conducción de la Universidad Adventista del

D Delbert Baker

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Adventist World | Febrero 2016

África

elbert W. Baker, experimentado administrador que también fue vicepresidente general de la iglesia mundial, ha asumido el liderazgo de la Universidad Adventista de África cerca de Nairobi (Kenia). Baker dijo que aceptó este cargo de rector, «convencido de la providencia divina». La Universidad Adventista de África, que fue establecida en 2005 para ofrecer educación de posgrado a obreros y líderes adventistas del continente africano, cuenta con un Seminario Teológico y una Escuela de Posgrado que ofrece títulos en las áreas ministerial, de liderazgo y de salud. La universidad también es sede del único Centro White en el continente.

Baker, que fue vicepresidente general de la Asociación General entre 2010 y 2015, posee amplia experiencia en educación, dado que durante catorce años fue rector de la Universidad Oakwood en Alabama (Estados Unidos), y también asistente especial del rector y director de diversidad, durante cuatro años, en la Universidad de Loma Linda. La Universidad Adventista de África está jugando un papel clave en la capacitación de líderes adventistas que puedan servir en una región de gran crecimiento de la feligresía, explicó el exrector general Brempong Owusu-Antwi. La universidad graduó 348 estudiantes entre 2010 y 2015 y, en el año académico 2015, cuenta con 649 alumnos. n


F a m i g l i e t i / I A D Á n ge l

REGALO INSPIRADO: Mildred de Cubilla entrega una Biblia a Juan Carlos Valera, presidente de Panamá, y a su esposa Lorena Castillo de Valera.

División Interamericana

Adventista entrega Biblia a la de

U

primera dama Panamá

na adventista entregó una Biblia de estudio, especial para mujeres, a la primera dama de Panamá, durante el desfile que celebró el 112° aniversario de la independencia de ese país de América Central. Mildred Cubilla, docente de la Escuela

Adventista Metropolitana, entregó una Biblia publicada por el Departamento de Ministerios de la Mujer de la Iglesia Adventista mundial a la primera dama Lorena Castillo Valera, mientras ella observaba el desfile con su esposo, el presidente Juan Carlos Valera.

Andrew McChesney

Adventistas ayudan a afectados por en

inundaciones India

L

os adventistas han interrumpido sus tareas habituales para distribuir elementos de ayuda humanitaria que se necesitan con desesperación mientras Chennai (Madrás), una ciudad india de nueve millones de habitantes, y las regiones aledañas se recuperan de la inundación producida por las lluvias más fuertes registradas en cien años. Las aguas comenzaron a retirarse en el estado de Tamil Nadu, donde murie-

ron al menos 280 personas a comienzo de diciembre después de casi cuarenta días de lluvias producto, según se cree, del cambio climático. «El deslumbrante diciembre se ha transformado en el desastroso diciembre –dijo Daniel Devadhas, presidente de la Unión del Sudeste de la India, que ayuda a coordinar los esfuerzos asistenciales–. Esta gente ha perdido todo. No tienen dónde refugiarse, ni tampoco

«Esta es una Biblia que la Iglesia Adventista ha preparado para las mujeres», dijo Cubilla al matrimonio presidencial mientras los estudiantes de la Escuela Adventista Metropolitana ejecutaban sus instrumentos de percusión y marchaban al son de la banda frente al palacio presidencial, durante la celebración anual de la independencia. «Quisimos darle esto para que sea su principal guía al dirigir este país junto con su esposo», dijo Cubilla, ofreciéndole la Biblia como un regalo de parte de la escuela. Castillo de Valera escribió más tarde en Facebook que había orado pidiendo un mensaje de Dios al abrir la Biblia por primera vez. «Abrí la Biblia en Salmos 112, justo en los 112 años de independencia. No podía ser más claro –dijo–. El Señor sigue guiándonos. GRACIAS». El Salmo 112 describe el estado bienaventurado de los justos y comienza con las palabras: «Bienaventurado el hombre que teme a Jehová y en sus mandamientos se deleita en gran manera». n

alimentos. La catástrofe ha afectado a la clase media y también a la clase alta». Todos los empleados de la Iglesia Adventista, con excepción de los instructores bíblicos, han sido enviados para distribuir alimentos, prendas de vestir y ropa de cama, dijo Devadhas. La Unión del Sudeste de la India coordina los esfuerzos en sociedad con ADRA India, Canal Hope India, la Unión Sur-Central de la India, y muchos estudiantes y miembros de la iglesia. Hasta el momento, Devhadas dijo que los miembros de iglesia de las zonas sur y norte de Chennai han recibido 18.150 kilogramos de arroz, 6800 kilogramos de dhal (lentejas partidas), 20.000 litros de aceite, 2000 sábanas, 2000 colchonetas, 5000 litros de agua mineral, miles de prendas de vestir, y 15.000 raciones de comida. n

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INFORME MUNDIAL

¿Qué dijo

Elena White sobre el

islamismo? P i x a b ay

¿

En sus escritos, solo menciona una vez a esa religión

D

ijo algo Elena White sobre el surgimiento y la amenaza del islamismo militante? En sus escritos hay una sola referencia a los musulmanes, o «mahometanismo» (como se conocía al islamismo en sus días). Se encuentra en The Home Missionary de septiembre de 1892, en el cuarto párrafo: «El Salvador ha dicho: “El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que se niega a creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él”. Y dice otra vez: “Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado”. »El mahometanismo tiene sus conversos en muchas tierras, y sus partidarios niegan la divinidad de Cristo. ¿Se propagará esta religión, y los defensores de la verdad no manifestarán un intenso celo para derribar el error, y enseñar a las personas sobre la preexistencia del único Salvador del mundo? »¡Oh, cuánto necesitamos personas que busquen y crean la Palabra de Dios, que presenten a Jesús al mundo en su naturaleza humana y divina, declarando con poder y con

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la demostración del Espíritu, que “en ningún otro hay salvación, porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos”! ¡Oh, cuánto necesitamos de creyentes que representen a Cristo en vida y carácter, que lo ensalcen ante el mundo como el esplendor de la gloria del Padre, proclamando que Dios es amor!» Los profetas no parecen haber recibido mensajes relacionados con cada movimiento político o religioso que surgió en este mundo. Por ejemplo, no hay nada en la Biblia o los escritos de Elena White sobre la Alemania nazi, por más que esto tuvo un impacto importante sobre el mundo de la primera mitad del siglo XX. Lo mismo puede decirse del comunismo, que añadió un desafío directo a la religión y por cierto a la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Parece ser que los mensajes de los profetas dan énfasis a cuestiones y actores claves dentro del gran conflicto ahora en curso. A Elena White se le mostró un poder diferente en el centro mismo del conflicto para estos últimos días. Y ese poder no fue el islamismo. n

Nota del editor: Tres personas han sido bautizadas después de nueve meses de trabajo de dos misioneros adventistas en una aldea de China. Otras doce están estudiando la Biblia. Los esfuerzos de compartir a Jesús presentan grandes desafíos. Muchos siguen creencias tradicionales y supersticiones. Presentamos aquí un relato testimonial de una de las bautizadas.

H

ace unos meses, dos misioneros se mudaron a mi aldea. Me dijeron que eran cristianos que creían en Jesús. ¿Qué es un cristiano? ¿Quién es Jesús? Jamás había escuchado esas dos palabras. Los misioneros alquilaron una casa y prepararon un lugar para tener reuniones. Le llamaron iglesia, y explicaron que allí se adoraba al Señor del universo. Conocía muchos dioses, como el dios de la cosecha y el dios del trueno, pero Jesús era totalmente nuevo para mí. Los misioneros abrieron la Biblia, y me contaron cómo se creó la Tierra, el sol, la luna y el resto de la naturaleza. También me dijeron que Jesús vendrá muy pronto a este mundo, y que nos llevará al cielo donde ya no habrá muerte, catástrofes o angustia. Después de pasar varios meses con esos misioneros, me di cuenta de que eran buenas personas. Querían a los aldeanos; se interesaban por cada uno. Después de participar durante meses del grupo de estudios bíblicos, entendí la verdad y decidí seguir a Jesús. Él es el único Dios del universo. Cada sábado nos reunimos en una casa. Supongo que para ustedes es común asistir a la iglesia, pero para mí


D a n i e l

J i a o

Una iglesia pequeña en una aldea remota de la China.

Hermana M, como se lo contó a Audrey Folkenberg, directora de desarrollo, Unión Misión de la China

«Conocía los

dioses del trueno y la cosecha, »

pero no a Jesús

Testimonio: Una mujer recién bautizada cuenta cómo llegó a conocer al Señor del sábado en la China era una práctica extraña. Cada sábado, tuve que luchar por el privilegio de adorar al Creador. Mi esposo, un agricultor tradicional chino, cree en el dios de la cosecha. Estaba en desacuerdo con mi religión, y no creía que Jesús podía darle una buena cosecha. No quería discutir con él, porque lo amo. Lo único que podía hacer era orar por él. Los misioneros me dijeron que el Espíritu Santo nos guiaría a ambos. Cuando llegó el tiempo de la cosecha, se me hizo difícil guardar el sábado. Mi esposo me necesitaba para la cosecha. ¡Pero yo realmente quería ir a la iglesia! Un sábado por la mañana, mi

iglesia había planificado un servicio de Comunión. Era la primera vez que yo participaría de algo así. Me preparé sigilosamente para salir, aunque estaba preocupada de que mi esposo fuera hasta la iglesia para buscarme y llevarme de regreso a la granja. Cuando salí de la casa para buscar la bicicleta, mi esposo estaba allí, en la puerta principal de la casa. Me golpeó y me condenó. Tomó mi Biblia y tiró la bicicleta al piso. Lloré porque no podía ir a la iglesia. Oré silenciosamente para que el Espíritu Santo ablandara el corazón de mi esposo. De repente, llegó un hombre que

necesitaba que mi esposo le ayudara. Con ojos airados, me miró y se fue a ayudarlo. Ahora sí podía ir a la iglesia. Me sentía muy agradecida por la oportunidad de adorar a Dios ese sábado. Mi esposo aún se aferra con fuerza a sus creencias tradicionales. Le he explicado que no soy supersticiosa, y que la iglesia es un buen lugar donde aprender de la verdad. Le digo que Jesús lo ama siempre, y le ruego que acepte al Dios real que lo protege. Él ahora me permite ir a la iglesia. Durante la semana, trabajo duro para ayudarlo en la granja. Sigo orando para que mi esposo me comprenda y un día finalmente acepte a Cristo. n

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P A N O R A M A

M U N D I A L

E

l mes pasado, en esta columna, analizamos el fundamento de nuestra salvación: Cristo, nuestra justicia. Este es uno de los tres componentes de una vida cristiana saludable en la que nos enfocaremos como iglesia durante los próximos cinco años. Los otros dos componentes son la fidelidad y la participación total de los miembros. Acaso leyeron el artículo «Llamados a ser fieles: Ahora es el tiempo», donde analizamos cómo Dios está llamando a su pueblo remanente en todas partes para que sea fiel a él mediante una conexión y comunión diaria (publicado en julio de 2015). En el artículo de este mes me gustaría enfocarme en un aspecto especialmente importante de la fidelidad: en ser fiel a la Biblia, que es la Palabra de Dios.

proteger, ensalzar y promover el poder salvífico de la segura Palabra. El mundo que nos rodea se está desintegrando. La gente está preocupada por su seguridad y por cuál será el próximo acontecimiento terrible y repentino. Millones de migrantes procuran escapar de la brutalidad, incertidumbre y confusión total. Lo desconocido se ha vuelto el enemigo. La gente no cree que el mundo que nos rodea va en la dirección correcta, y tiene razón. Estamos viviendo en el fin de los tiempos, según la interpretación profética adventista y la aplicación hermenéutica correcta de las Escrituras. Lo que necesitamos no es una solución política, militar o social, sino un retorno a un fundamento cierto: la segura Palabra de Dios. Certeza de la Palabra de Dios

Nuestra sagrada responsabilidad

Una de las más grandes batallas que enfrentamos es respecto de la autoridad de la Palabra de Dios. El diablo siempre ha detestado la Palabra de Dios, y hace todo lo posible para neutralizar su efecto. Como adventistas del séptimo día, es nuestra sagrada responsabilidad

El apóstol Pedro nos brinda gran seguridad sobre la certeza de la Palabra de Dios: «No os hemos dado a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo siguiendo fábulas artificiosas, sino como habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad […]. Tenemos también la palabra profética

más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día amanezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones. Pero ante todo entended que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada, porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo» (2 Ped. 1:16, 19-21). La gente siempre necesitó un fundamento seguro. Podemos contar con la segura palabra profética, algo que necesitamos hoy más que nunca. La Biblia brinda la única esperanza para el futuro, porque señala el mensaje del evangelio de Cristo, su justicia, su salvación, su ministerio en el Lugar Santísimo del Santuario celestial y la redención final de su pueblo al momento de su segunda venida. Es nuestro enorme privilegio compartir este mensaje mediante el poder del Espíritu Santo. El pueblo del Libro

Los adventistas hemos atesorado por mucho tiempo la Biblia, y hemos sido conocidos como «el pueblo del Libro».

Ted N. C. Wilson

Seguidores fieles

Porque él es fiel f o t o g r af í a :

H i e u

Le


Lo que necesitamos no es una solución política, militar o social, sino un retorno a la segura Palabra de Dios . A pesar de ello, en esta era de relativismo y falta de absolutos, ¿somos conocidos aún como «el pueblo del Libro»? Por supuesto, no creemos en la «bibliolatría». No adoramos la Biblia, sino al «Verbo» hecho carne, a Jesucristo nuestro Señor. Él es el «Verbo», y lo que está en su libro es importante. ¡Qué privilegio escuchar la Palabra de Dios, seguir sus instrucciones y comprender sus directivas para vivir una vida victoriosa mediante el poder justificador y santificador de Cristo! Cómo leer la Palabra de Dios

La Palabra de Dios, sin embargo, está siendo ignorada cada vez más. Se está volviendo una moda interpretar y aplicar erróneamente lo que está indicado con claridad en las Escrituras. Está siendo reinterpretada por los que participan de la alta crítica, o el enfoque histórico-crítico de las Escrituras. De esta manera se colocan por sobre las Escrituras, y la interpretan según sus propias normas y enfoques. Es importante nuestra manera de leer la Palabra de Dios, porque eso nos ayuda a distinguir entre la verdad y el error. La iglesia se verá inundada de apostasía y falsas doctrinas. Pero la Palabra de Dios es segura, y su iglesia saldrá triunfante de los ataques del maligno. Tenemos que seguir y promover fielmente el método histórico-bíblico de interpretar las Escrituras, permitiendo que la Biblia se interprete a sí misma, línea tras línea y precepto tras precepto. Un excelente documento titulado «Métodos de estudio de la Biblia» (https:// www.adventist.org/en/information/ official-statements/documents/article/go/ 0/methods-of-bible-study/) explica con detenimiento cómo estudiar fielmente la Palabra de Dios. Ese documento fue votado el 12 de octubre de 1986 en el Concilio Anual de la iglesia mundial llevado a cabo en Río de Janeiro (Brasil). Como adventistas, deberíamos adherir cuidadosamente a los métodos

de estudio de la Biblia descritos en este documento. Tenemos que seguir la perspectiva historicista de la profecía y la comprensión bíblica. No permitan que los aparten de la comprensión historicista y la interpretación histórico-bíblica de las Escrituras. Sean fieles, y permanezcan firmes de parte de la Palabra de Dios. Notemos la siguiente instrucción inspirada sobre la aceptación de la Biblia tal cual se expresa: «Dios espera más de sus seguidores de lo que muchos piensan. A menos que queramos edificar nuestra esperanza de alcanzar el cielo sobre un cimiento falso, hemos de aceptar la Biblia tal como está escrita y creer que el Señor quiere decir lo que dice» (Testimonios para la iglesia, t. 5, p. 171). Productos de la inspiración divina

Al enfrentar los últimos días de la historia de este mundo, sabemos que se producirá un esfuerzo decidido por parte de Satanás de destruir la efectividad de la Biblia y el Espíritu de Profecía. Nos rodea la neutralización de la Palabra de Dios. El método histórico-crítico aplicado a la Palabra de Dios reduce la efectividad de su autoridad. El plan de Satanás es socavar el simple «Así dice el Señor» de Dios. Vemos algunos esfuerzos decididos de atacar el Espíritu de Profecía y dejarlo «sin efecto alguno». La Palabra de Dios y el Espíritu de Profecía son productos de la inspiración divina y, por lo tanto, constituyen relatos certeros que describen el gran conflicto entre el bien y el mal, entre Cristo y Satanás. Es por eso que el diablo está decidido a destruir la verdad que se encuentra en la Biblia y el Espíritu de Profecía. Gracias a Dios, sabemos que el enemigo no tendrá éxito, pero en el proceso, muchos serán engañados. Dios nos ha dado un mandato del cielo de ser defensores fieles de su Palabra, porque esta ha mostrado ser verdadera y tener poder para transformar la vida de las perso-

nas. Los dilemas de este mundo nos dicen que nos encontramos al filo de la eternidad. Dios quiere trabajar en nosotros y por medio de nosotros. Estamos viviendo en el último período laodicense, cuando el cristianismo es muy superficial. El diablo procurará distraernos de la Biblia y la verdad. Usará todos los medios posibles: la recreación, los medios, los entretenimientos, el trabajo, la música, los desacuerdos y peleas internas, las enseñanzas falsas, las discordias familiares, los problemas económicos y todo lo que nos quite tiempo de la Palabra de Dios. Respondamos con fidelidad

A pesar de ello, Dios es fiel. Por su poder, respondámosle con fidelidad. Él nos llama a ser fieles en nuestra relación personal con él, fieles a su Palabra, fieles en el estudio diario de la Biblia, fieles en el estudio del Espíritu de Profecía y fieles en nuestra vida constante de oración. En un mundo lleno de cada vez más violencia, bombardeos, tiroteos y muertes trágicas, seamos fieles al plan de restauración divina al momento de su segunda venida. Jesús nos dice: «¡Sé fiel hasta la muerte y yo te daré la corona de la vida!» (Apoc. 2:10). Por la gracia de Dios, seamos campeones de la Palabra de Dios y ensalcemos a Cristo, que es el Verbo. Que la Biblia cobre vida y sea el fundamento de nuestras creencias. Estamos enfrentando una batalla, y tenemos que saber en qué creemos. Hay absolutos, y estos se encuentran en la Palabra de Dios. Jesús dice: «Vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona» (Apoc. 3:11). ¡Seamos fieles a Dios y a su Palabra! n

Ted N.C. Wilson es

presidente de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.

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S alud

mundial

Peter N. Landless y Allan R. Handysides

El dilema de los

antibióticos Hace poco me diagnosticaron neumonía, y el médico me prescribió antibióticos. Me sentía muy mal, pero como no me gusta tomar medicamentos, solo tomé los antibióticos hasta que me sentí mejor. ¿Es posible usar lo que queda en otra ocasión?

S

u pregunta destaca conceptos muy importantes. Los antibióticos son medicaciones muy útiles para luchar contra las infecciones y enfermedades causadas por bacterias. Trabajan matando las bacterias o impidiéndoles que se reproduzcan. Son muy útiles para controlar las infecciones y ayudar a que el sistema inmunológico del cuerpo elimine las bacterias perjudiciales. Sir Alexander Fleming descubrió el primer antibiótico en 1928. Recién en la década de 1940 se usó la penicilina para tratar a los soldados heridos de la Segunda Guerra Mundial. Su éxito inauguró una emocionante era de progresos en el uso de antimicrobianos (antibióticos) para luchar contra las bacterias. Desde entonces se han producido muchas clases de antibióticos, hasta llegar al tipo de antibiótico llamado «de diseño», que apunta a mecanismos sumamente específicos de control de la multiplicación y destrucción de las bacterias. A pesar del entusiasmo que ha provocado este proceso de descubrimiento y mejora de los antibióticos, el proceso ha estado plagado de numerosos problemas. Algunas personas no toleran

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Adventist World | Febrero 2016

ciertos antibióticos; la intolerancia va desde la alergia severa (anafilaxis) que puede inclusive provocar la muerte, a sarpullidos cutáneos, diarrea suave o moderada, e infecciones adicionales con hongos como el Cándida. Asimismo, numerosas bacterias han desarrollado la capacidad de crear resistencia a los antibióticos; el mismo Fleming notó esta característica poco después del surgimiento de la penicilina. Esto ha provocado la necesidad de usar combinaciones de antibióticos, y también desarrollar lo que se conoce como antibióticos específicos de tercera y cuarta generación. Por años se ha reconocido el mecanismo mediante el cual las bacterias desarrollan resistencia; estos microorganismos sufren cambios genéticos, gracias a los fagos y los plásmidos. Esas pequeñas moléculas, o «paquetes» de ADN (material genético) pueden ser transferidos de una bacteria a otra. Hace poco, científicos chinos notaron un desarrollo muy significativo y preocupante: la capacidad de ciertas bacterias de transferir esa resistencia en forma horizontal entre las diversas cepas bacterianas. Esto fue observado en la supervisión rutinaria de animales

para el consumo, como es el caso de los cerdos. Fue la primera vez que se observó tal resistencia a la colistina, el antibiótico polimixina. Esto ha causado gran consternación en el mundo científico, que teme que si continúa desarrollándose semejante resistencia, el uso práctico y útil de los antibióticos podría llegar a su fin. Aunque la resistencia descrita se limita en el presente a China, se anticipa que se esparcirá por todo el mundo. De regreso a su pregunta: Siempre complete el tratamiento con antibióticos, aun si se siente mejor antes de terminarlo. Esto disminuirá la resistencia al antibiótico. Jamás deberían quedar sobras de antibióticos en su botiquín, y anime a todos los que pueda para que sigan su ejemplo. n

Peter N. Landless es cardiólogo nuclear certificado y director del Departamento de Ministerios de Salud de la Asociación General.

Allan R. Handysides es ginecólogo certificado y exdirector del Departamento de Ministerios de Salud de la Asociación General. f o t o g r af í a :

C ha r l es

W i l l i a m s


D es c u b rir

el

D on

de

P rofe c í a

Lea las cartas y manuscritos de Elena White (en inglés) en EGWWritings.org y en la aplicación EGWWritings2 (para productos iOS).

Las

cartas y manuscritos de Elena White

Tim Poirier

Lo que usted necesita saber sobre la nueva colección en línea

E

n julio de 2015, al cumplirse el centenario de la muerte de Elena White, el Patrimonio White puso a disposición las cartas y los manuscritos de Elena White. Toda la colección, que puede consultarse en forma gratuita en su sitio web y aplicaciones (www.egwritings.org), está compuesta por más de ocho mil documentos que equivalen a unas cincuenta mil páginas. Estos materiales antes podían leerse y estudiar solo en copias en papel en la sede central del Patrimonio White, y en las filiales de investigación en diversos países del mundo.

¿Por qué no se publicó antes?

Aunque se los llama manuscritos inéditos, es importante destacar que muchos de los documentos –en efecto, alrededor de dos terceras partes de ellos– ya han sido impresos parcial o I m áge n es :

Pat r i m o n i o

W h i t e

totalmente en las muchas compilaciones y publicaciones a lo largo de los años. Los materiales más sensibles, que a menudo se refieren a las fallas personales de algunos individuos, han seguido mayormente sin publicarse hasta 2015, pero con el paso de más generaciones desde la época de sus destinatarios originales, se decidió que podían ser puestos a disposición de todos. Otro factor es el avance de la tecnología. Si se imprimiera y vendiera en librerías toda la colección, ocuparía el espacio de más de cien volúmenes, y su costo sería prohibitivo. Sin embargo, gracias a la era digital, si alguien quiere leer toda la carta de la cual solo se cita un fragmento en una de las compilaciones, es posible acceder a los materiales en pocos segundos con el mouse, o por medio de la aplicación «EGW Writings».

Materiales complementarios

Algunos pueden preguntarse qué interés guardan todos estos materiales cuando ya tenemos todas las obras de Elena White publicadas. Es una buena pregunta, porque no hay nada malo en confinar el estudio a los miles de artículos y decenas de libros y folletos que publicó Elena White durante su vida. En efecto, ella dijo de sí misma: «Si deseáis saber lo que el Señor ha revelado por medio de ella, leed sus obras publicadas».1 Podemos considerar sus cartas, sermones, diarios y otras comunicaciones inéditas como materiales complementarios que ofrecen una vislumbre no solo de sus creencias y enseñanzas proféticas, sino también de su vida personal como esposa, madre, consejera y pionera de iglesia.

Vol. 12 No. 2 | Adventist World

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D es c u b rir

el

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de

P rofe c í a

Algunas importantes distinciones

Al mismo tiempo, es importante reconocer algunas de las principales distinciones entre sus manuscritos inéditos y sus obras publicadas. Lo principal es que lo que escribió en sus artículos y libros tenía por propósito hablar a la iglesia en general. En contraste, las cartas personales de Elena White estaban dirigidas a individuos en circunstancias particulares; a menudo tenían que ver con cuestiones de interés local, tales como lo que era más útil para un sanatorio específico, o que el «Hermano Smith» necesitaba más apoyo de los demás creyentes. Es posible derivar principios de esas comunicaciones, pero es importante entender su contexto histórico para no aplicar erróneamente las instrucciones dadas. En 2014, el Patrimonio White comenzó a brindar ese trasfondo con la publicación del tomo 1 de Las cartas y manuscritos de Elena White, edición anotada, que cubre los primeros quince años de su ministerio. Se espera conseguir pronto el financiamiento que permita seguir adelante con este proyecto. Otra distinción entre la colección inédita de Elena White y sus obras publicadas es el nivel de atención que dio a materiales que jamás esperó que fueran publicados. En otras palabras, piense en la diferencia que hay en la manera en que usted escribe un correo electrónico informal y otro que sabe que será publicado en línea y leído en todo el mundo. En el segundo caso, usted analiza cada oración para asegurarse de expresar con exactitud sus pensamientos y evitar malentendidos. Y si comparte un borrador con amigos o colaboradores, estos le pueden sugerir maneras de organizar o redactar mejor la comunicación. Lo mismo sucede con las cartas y los manuscritos de Elena White. Al comparar lo que escribió primero como carta y que más tarde incorporó como parte de un artículo o libro, no debería sorprendernos que existan

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La imagen de fondo aquí y en la página anterior constituye un ejemplo de las correcciones editoriales que hacían los asistentes literarios de Elena White bajo su supervisión. El mueble que guarda sus cartas y manuscritos se encuentra en las oficinas del Patrimonio White en Maryland (EE. UU.). F o t o g r af í a :

Pat r i m o n i o

W h i t e


mejoras editoriales. Esa era la tarea de sus asistentes de redacción: no escribir contenidos, sino ayudar a preparar los materiales para su publicación. Guillermo White, hijo de Elena, explicó que «Los obreros de experiencia de mamá […] están autorizados a tomar una oración, párrafo o sección de un manuscrito e incorporarlo a otro manuscrito donde se expresa el mismo pensamiento aunque con menos claridad. Pero ninguno de los obreros de mamá está autorizado a añadir algo a los manuscritos incorporando pensamientos propios».2 Los documentos eran revisados y aprobados por Elena White antes de imprimirlos o enviarlos por correo. De manera similar, un cambio de circunstancias podía llevar a que Elena White eligiera añadir u omitir oraciones o párrafos enteros al usar una carta o manuscrito en una publicación posterior. ¿Fue inspirado absolutamente todo lo que escribió Elena White?

Quizá lo que presenta el mayor desafío respecto de las cartas y manuscritos de Elena White es lo siguiente: ¿Podemos establecer una clara línea divisoria entre sus consejos inspirados y lo que es tan solo una opinión humana? La colección tiene cartas escritas a líderes adventistas bien conocidos, pero también contiene cartas dirigidas a «Mi querido hijo Edson», o «Mi querida sobrina Addie», o «Mi querida nieta Mabel». La cuarta parte de las cartas preservadas estaban dirigidas a su propia familia. ¿Escribió esas cartas bajo la influencia de la inspiración? ¿Qué decir de las cartas escritas a los administradores de su propiedad en los Estados Unidos mientras trabajaba por la iglesia en Europa y Australia? Se nos recuerda que al menos veinte libros del Nuevo Testamento son en realidad cartas escritas a iglesias o individuos, y está bien que consideremos que fueron escritas bajo la influencia de la inspiración. De manera similar, Elena

White usó cartas para transmitir instrucciones que recibió por inspiración del Espíritu. Al mismo tiempo, expresó claramente que no esperaba que tomáramos todo lo que dijo o escribió como revelación de Dios. Elena White explicó que «hay oportunidades cuando deben declararse cosas comunes, pensamientos comunes deben ocupar la mente, deben escribirse cartas comunes y se debe dar información que ha pasado de un obrero a otro. Tales palabras, tal información, no son dadas bajo la inspiración especial del Espíritu de Dios. Se hacen preguntas a veces que no tienen nada que ver con temas religiosos, y esas preguntas deben ser contestadas. Conversamos acerca de casas y tierras, transacciones comerciales y ubicación para nuestras instituciones, sus ventajas y desventajas».3 «En mis palabras, cuando hablo acerca de estos temas comunes, no hay nada para inducir a la mente a creer que recibo mi conocimiento en una visión del Señor y que presento eso como tal».4 También deberíamos recordar que la mera ausencia de frases tales como «Se me mostró» no significa automáticamente que los consejos dados no estén en armonía con la luz recibida sobre el tema.5 Aunque acaso es imposible establecer una regla que divida claramente lo inspirado de lo no inspirado, suele ser el caso que se torna evidente a partir del mensaje en sí, cuál es la autoridad que afirma tener una determinada comunicación. ¿Faltan documentos?

Los usuarios que accedan a las cartas y manuscritos en la nueva base de datos acaso se pregunten por qué hay cierta discontinuidad en la secuencia de archivos. Por ejemplo, a la Carta 20 (1889) puede seguirle la Carta 22 (1889). ¿Qué sucedió con la Carta 21? ¿Por qué no está? Hay varias razones para estas «brechas», pero en ningún caso significa que se han retenido documentos. En la mayoría de los casos se halló que el documento estaba fechado

erróneamente y ha sido archivado nuevamente con un nuevo número en el año correcto. En otros casos, se halló que el documento era un duplicado de uno que ya estaba en el archivo, o que era una transcripción de una fuente publicada ya disponible. Asimismo, en algunos años –en 1904, por ejemplo–, las secretarias de Elena White solo asignaron números impares a las cartas y pares a los manuscritos. La base de datos pronto será actualizada para indicar la razón de cada número «faltante». Estas son algunas de las cuestiones que hay que tener en cuenta al investigar los materiales inéditos de Elena White. Afortunadamente, hay nuevas herramientas y recursos que nos ayudan a apreciar el contexto de estos escritos: publicaciones tales como la Enciclopedia sobre Elena White, biografías eruditas de líderes adventistas, y el acceso digital a los documentos históricos de la iglesia. Asimismo, el Patrimonio White está colocando en su sitio web las decenas de miles de páginas de correspondencia escrita a Elena White por parte de miembros y líderes de la iglesia, lo que brinda «el otro lado» del diálogo que motivaron sus cartas. Ya sea leamos en los diarios de Elena White la narración de sus actividades diarias, un testimonio en duros términos a un líder infiel, o un llamado maternal desgarrador a un hijo extraviado, somos privilegiados de hallar en sus escritos perspectivas y principios guiadores que aún son relevantes para nuestro tiempo y circunstancias. n 1 Elena

White, Testimonios para la iglesia, t. 5, p. 651. 2 Guillermo White, a G. A. Irwin, 7 de mayo de 1900, citada en Herbert E. Douglass, Mensajera del Señor, p. 110. 3 Elena White, Mensajes selectos, t. 1, p. 44. 4 Ibíd., p. 43. 5 Véase Elena White, Testimonios para la iglesia, t. 5, pp. 61-63.

Tim Poirier es vicedirector del Patrimonio White en Silver Spring (Maryland, Estados Unidos).

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Creen c ias

fundamentales

S

e escucharon risas cuando Bill pronunció esas categóricas palabras hace ya diecisiete años, como parte de los votos matrimoniales que él mismo escribió. «Lo que Dios unió» (Mar. 10:9) ese día en un compromiso exclusivo se ha fusionado con un vínculo más poderoso que el mejor adhesivo del mercado. Las investigaciones confirman los beneficios de un matrimonio a largo plazo. Un estudio publicado en The Journal of Clinical Oncology halló que un matrimonio feliz y saludable puede beneficiar a un paciente de cáncer aún más que la quimioterapia.1 Un matrimonio fiel y estable proporciona un sistema inmunológico más fuerte, una mejor recuperación en caso de cirugía, mejor tolerancia al dolor y menor riesgo de enfermedades cardiovasculares.2 Es interesante que convivir con alguien no ofrece los mismos beneficios de salud, ni la misma satisfacción. Un estudio mostró que solo el treinta y seis por ciento de las parejas que conviven dijeron estar «muy satisfechas», mientras que el cincuenta y siete por ciento de las parejas casadas se ubicó en esa categoría.3 La fidelidad es lealtad, constancia, fiabilidad, confiabilidad y estabilidad. Significa «cumplir con la palabra, las promesas y los votos empeñados»,4 sin esquivar el deber, y poner primero al cónyuge aun cuando nuestra tendencia es otra. Con profundo asombro, acabamos de celebrar el quincuagésimo aniversario de casados de los padres de Heather. Experimentamos en carne propia lo que cincuenta años de matrimonio aportan a una familia. Como «clavo hincado en lugar firme» (Isa. 22:25), el matrimonio largo, estable y feliz de ellos ofrece seguridad a sus hijos y a sus nietos. Dios usa las uniones sólidas y duraderas para fortalecer a la sociedad y testificar a otros, revelándose así a la humanidad, Elena White observó: «Mediante […] los más profundos y tiernos lazos que el corazón humano pueda conocer en la tierra, procuró revelársenos».5 «Una familia bien orde-

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NÚMERO 23 Bill y Heather Krick

Lo que

Dios

unıó

Los beneficios de la devoción nada y disciplinada habla más en favor del cristianismo que todos los sermones que puedan predicarse».6 Una familia tal expresa sin palabras: «Somos felices. No anhelamos otra cosa, ni queremos revolotear de una flor a otra como una mariposa. Estamos contentos con el plan divino». La sociedad, por el contrario, cuestiona seriamente ese sistema exclusivo y su potencial para la felicidad y el éxito. Según una investigación de Gallup, más de la mitad (el cincuenta y dos por ciento) de los jóvenes estadounidenses de entre veinte y veintinueve años dicen que ven tan pocos matrimonios buenos o felices que cuestionan el matrimonio como forma de vida.7 Un estudio de Pew Research reveló que casi el cuarenta por ciento de los estadounidenses de todas las edades cree que el matrimonio «se está volviendo obsoleto».8 Legisladores de Ciudad de México llegaron a proponer un contrato matrimonial por dos años, según el cual los cónyuges no tendrían que efectuar un compromiso de fidelidad a largo plazo, sino que podrían renovarlo después de dos años, si son felices.9

En su libro El mito de la monogamia, la destacada escritora Peggy Vaughan afirma que el sesenta por ciento de los hombres y el cuarenta por ciento de las mujeres casados ha cometido adulterio. Tomando en cuenta las superposiciones, el ochenta por ciento de los matrimonios se ve afectado por la infidelidad.10 La fidelidad parece estar camino a la extinción, pero es una cualidad digna de conservar, aun en circunstancias difíciles. Abigail y Nabal: la fidelidad vale la pena

Nabal, cuyo nombre significa «necio» o «insensible», terminó casado de alguna manera con Abigail, virtuosa y sabia, cuyo valor era superior a las piedras preciosas (1 Sam. 25; Prov. 31:10). El incidente principal de la vida de casados de esta acaudalada pareja tuvo lugar mientras David huía de Saúl y escuchó que Nabal estaba trasquilando sus ovejas. David y sus hombres habían protegido a los pastores de Nabal, y ahora le pidió que les devolviera el favor, dándole comida para sus hombres. Nabal respondió de una manera egoísta y descortés, y David se enfureció.


Aquí entra Abigail en la historia. El matrimonio con Nabal no habrá sido fácil, pero «no se daba cuenta Abigail que en la ayuda que diariamente estaba dando a Nabal iba desarrollando una claridad de percepción espiritual».11 La fiel Abigail estaba en sintonía con Dios, y estaba lista para hacer lo que fuera necesario para liberar a su esposo del problema. Sin tardar, cargó todo tipo de alimentos en asnos y envió a sus siervos a encontrarse con David. Al encontrarse con él, se echó la culpa por la conducta de su esposo, sin disimular la poco halagadora verdad sobre Nabal, pero en efecto, salvándolo sin que él lo supiera. David aceptó con humildad la reprensión discreta y los presentes de Abigail, evitando así la catástrofe. Más bendiciones

Los matrimonios fieles bendicen a la sociedad por medio de sus hijos. Los matrimonios sólidos suelen producir hijos con buena salud emocional, que llegan a ser los pilares de una sociedad robusta. Según Elena White, «el hogar es el corazón de la sociedad, de la iglesia y de la nación. El bienestar de la sociedad, el buen éxito de la iglesia y la prosperidad de la nación dependen de

la influencia del hogar».12 Los hijos de padres divorciados enfrentan tremendos obstáculos. Robert Emery, autor de La verdad sobre los niños y el divorcio, dice simplemente: «Quedan devastados».13 Los beneficios de «Lo que Dios unió» se extienden mucho más allá de los dos cónyuges. ¿Qué sucede si, en este mundo imperfecto, enfrentamos un divorcio, o nos encontramos en relaciones infelices, o somos solteros? La fidelidad de Dios aún llega hasta allí donde estamos. Él se ofrece a sí mismo, en una relación gloriosa que trasciende cualquier otra relación, y nos ayuda en cualquier problema que enfrentemos. Notemos estas dos promesas: «Porque tu marido es tu Hacedor (“Jehová de los ejércitos” es su nombre» (Isa. 54:5). «Palabra fiel es esta: Si somos muertos con él, también viviremos con él; si sufrimos, también reinaremos con él; si lo negamos, él también nos negará; si somos infieles, él permanece fiel, porque no puede negarse a sí mismo» (2 Tim. 2:11-13). Nuestro «proceso de selección» terminó en efecto hace diecisiete años, pero los dividendos de esa devoción siguen enriqueciendo y bendiciendo

nuestra vida diaria. Gracias, Señor, por establecer el matrimonio. Vemos los beneficios de la fidelidad en las familias comprometidas que hay en todo el mundo. Ayúdanos, Señor, a ser fieles. n 1 http://jco.ascopubs.org/content/early/2013/09/18/

JCO.2013.49.6489.abstract 2 www.macleans.ca/society/life/how-marriage-can-save-your-life/ 3 www.nytimes.com/2012/09/30/fashion/marriage-seenthrough-a-contract-lens.html?pagewanted=all&_r=0 4 Dictionary.com 5 Elena White, El camino a Cristo, p. 10. 6 Elena White, Recibiréis poder, p. 249. 7 www.gallup.com/poll/4552/singles-seek-soul-mates-marriage. aspx 8 www.pewsocialtrends.org/2010/11/18/the-decline-of-marriageand-rise-of-new-families/ 9 www.bbc.com/news/world-latin-america-15114406. 10 Peggy Vaughan, The Monogamy Myth (New York: William Morrow, 2003). Véase también David Barash y Judith Lipton, The Myth of Monogamy: Fidelity and Infidelity in Animals and People (New York: Henry Holt, 2002). 11 F. D. Nichol (editor), Comentario bíblico adventista (Buenos Aires: Casa Editora Sudamericana, 1993), t. 2, p. 574. 12 Elena White, El ministerio de curación, p. 269. 13 www.nytimes.com/2012/09/30/fashion/marriage-seenthrough-a-contract-lens.html?pagewanted=all&_r=0

Bill y Heather Krick

viven en California (EE. UU.), donde Bill es director de colportaje de la Asociación Central de California y Heather es la maestra de sus dos hijas, Savannah y Heidi.

El matrimonio y la familia El matrimonio fue establecido por Dios en el Edén, y confirmado por Jesús, para que fuera una unión para toda la vida entre un hombre y una mujer en amante compañerismo. Para el cristiano, el matrimonio es un compromiso con Dios y con su cónyuge, y es un paso que debería ser dado solamente por personas que participan de la misma fe. El amor mutuo, el honor, el respeto y la responsabilidad, son la trama y la urdimbre de esta relación, que debiera reflejar el amor, la santidad, la intimidad y la perdurabilidad de la relación que existe entre Cristo y su iglesia. Con respecto al divorcio, Jesús enseñó que la persona que se divorcia (a menos que sea por causa de fornicación) y se casa con otra, comete adulterio. Aunque algunas relaciones familiares están lejos de ser ideales, los socios en la relación matrimonial que se

consagran plenamente el uno al otro en Cristo pueden lograr una amorosa unidad gracias a la dirección del Espíritu y al amante cuidado de la iglesia. Dios bendice la familia y es su propósito que sus miembros se ayuden mutuamente hasta alcanzar la plena madurez. Una de las características del último mensaje evangélico es el creciente acercamiento entre los miembros de la familia. Los padres han de criar a sus hijos para que amen y obedezcan al Señor. Mediante el precepto y el ejemplo, debieran enseñarles que Cristo es un guía amante, tierno y solícito que anhela que lleguen a ser miembros de su cuerpo, la familia de Dios, que incluye tanto a los solteros como a los casados. (Gén. 2:18-25; Éxo. 20:12; Deut. 6:5-9; Prov. 22:6; Mal. 4:5, 6; Mat. 5:31, 32; 19:3-9, 12; Mar. 10:11, 12; Juan 2:1-11; 1 Cor. 7:7, 10, 11; 2 Cor. 6:14; Efe. 5:21-33; 6:1-4).

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N O TA D E TA PA

Experiencias de

fidelidad E l concepto de «fidelidad» está entretejido en toda la urdimbre del estilo de vida y sistema de creencias de una persona, y en especial de los cristianos. Algunos la describen como: permanecer leales a alguien o a algo más allá de las circunstancias. Otros dicen que implica «mantenerse firme» por las convicciones y los principios. Los términos usados para describirla incluyen palabras tales como fidelidad, devoción y fiabilidad. Evoca una imagen de lo mejor de la humanidad, no solo entre los seres humanos sino hacia el Creador. Abundan las historias de fidelidad a la

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familia, los amigos, el país y Dios, que nos inspiran y alientan a ser mejores, más solícitos y valientes. Triste es decirlo pero, por nuestras debilidades y a pesar de nuestras buenas intenciones, los seres humanos a menudo fallamos. No llegamos al pináculo de «la grandeza y la bondad» que queremos alcanzar. Dios, sin embargo, no tiene esas limitaciones. La fidelidad es parte de su carácter (Éxo. 34:6, NVI); ayuda a definir quién es él. «Grande es [su] fidelidad» (Lam. 3:23). Al describir los personajes de la Biblia que sufrieron reproches y persecución por «causa de su nombre», Elena White


Fidelidad ante

la adversidad

Julene Duerksen-Kapao «Confía en Jehová con todo tu corazón y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos y él hará derechas tus veredas» (Prov. 3:5, 6). a fecha cambió mi vida, mis planes y todas las cosas: 19 de agosto de 2009. En las semanas anteriores había viajado desde Nueva Zelandia a California (EE. UU.) para visitar a mi familia, y luego, durante un fin de semana con mi hijito de cuatro años a Melbourne (Australia), para hablar en un congreso de mujeres. Durante el evento, me sobrevino un dolor de cabeza que no se me iba con medicamentos, ni tomando agua o durmiendo. En los días que siguieron al regreso de Australia experimenté una confusión de síntomas extraños: visión borrosa, sensibilidad a la luz, dolores de cabeza, agotamiento, problemas de equilibrio, falta de apetito y debilidad. El 19 de agosto, un colega de la institución donde enseñaba me acompañó escaleras arriba y de pronto noté que no podía levantar el pie derecho sin tropezarme. «Deberías ir al hospital», fueron sus palabras después de enterarse de los demás síntomas. Los exámenes oculares, rayos X, electrocardiogramas y demás pruebas no brindaron respuestas claras. «Quizá tuviste un accidente cerebrovascular, o un tumor de rápido crecimiento», me dijeron. La última prueba era una resonancia magnética. Mientras yacía allí en el ruidoso aparato, con la cabeza sujeta con firmeza, oré con las palabras del Salmo 23: «Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno». No tenía idea qué me depararía el futuro, pero sabía que la mano de Dios estaba sobre mi vida. Le pedí que la resonancia diera alguna respuesta para que, más allá de lo que fuera, supiera qué tenía que enfrentar.

L

no celebra la fidelidad de estos hombres y mujeres, sino que da todo el crédito a Dios: «Estos ejemplos de constancia humana atestiguan la fidelidad de las promesas de Dios, su constante presencia y su gracia sustentadora» (Los hechos de los apóstoles, p. 460). Después de todo, solo Dios es verdaderamente fiel. Las breves narraciones que siguen provienen de diversas partes del mundo y describen experiencias personales de fe que revelan el carácter y el amor de ese Dios en quien creen y a quien adoran sus autores. Que estas historias lo inspiren a amar y confiar más en Dios. –Los editores

A eso de las 20.00, el médico me pidió que fuera a una sala privada. «Usted tiene esclerosis múltiple», me dijo. Esa era la respuesta: literalmente, «muchas cicatrices» en mi cerebro y médula espinal. Lloré. Oré. Cuestioné. Fui a casa. Descansé. Lloré un poco más. Mi esposo Rouru y nuestros dos hijos pequeños oraron mucho. No teníamos idea qué significaba eso y qué impacto tendría esa realidad sobre nuestras vidas. Menos de diez días después, fui admitida en el hospital por náuseas extremas, problemas de equilibrio y debilidad muscular. Perdí la capacidad de caminar y hablar. No podía mover la cabeza. Me embargaba la tristeza y el sentimiento de pérdida. Durante las siguientes nueve semanas, Rouru me sostuvo de la mano, cantó y rió conmigo, además de orar. En medio del caos, del desconocimiento, del temor y el sentimiento de pérdida, escuché a Dios. Una noche tuve un sueño en el cual me desperté ante una fuerte luz. Salté de la cama del hospital (aunque entonces no podía caminar) y corrí a la ventana. ¡Era la segunda venida! La paz y la calidez del amor de Cristo llenaron mi alma. Escuché sus claras palabras que decían: «Os digo un misterio: No todos moriremos; pero todos seremos transformados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta, porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles y nosotros seremos transformados» (1 Cor. 15:51, 52). En ese momento comencé una nueva vida, una vida de paz y aceptación total del caos que me consumía. Dios me mostró que todos tenemos cicatrices, algunas visibles y otras invisibles. Con la determinación de vivir y vivir bien, mi neurólogo, mi familia y yo escogimos el tratamiento más agresivo:

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N O TA D E TA PA seis meses de quimioterapia a partir de octubre de 2009. El primer tratamiento fue en el hospital; en el segundo, mi esposo empujó mi silla de ruedas; para el tercero, me trasladé con un andador; el cuarto, con muletas; para el quinto y el sexto, ¡comencé a caminar! ¡Cuando sucedió eso, las enfermeras de oncología me ovacionaron! La experiencia ha sido caótica, traumática, frustrante, bendecida y llena

de esperanza. Durante estos últimos años, mi fe ha sido probada y ha crecido dramáticamente. Me siento bendecida de experimentar mi quebrantamiento humano y de haber tenido la oportunidad de vivir conociendo mis cicatrices. Ahora estoy mejor. Trabajo tiempo completo en un empleo que me gratifica y desafía. Tomo medicamentos todos los días para prolongar las remisiones

fieles contra

viento y marea

Melodie Roschman

«

E

stán en todas partes y los están observando. Por eso, cuídense mutuamente y sean prudentes». Estas fueron las palabras de bienvenida de nuestro guía. Nos encontrábamos recorriendo Europa durante tres semanas, admirando increíbles edificios históricos, disfrutando de alimentos sabrosos, y realizando torpes intentos de aprender al menos algo de francés. Era casi un paraíso, con excepción, como se nos advirtió, de los carteristas y ladrones. «Marsella es una ciudad donde pueden sustraerles la billetera en un suspiro», se nos dijo. Más tarde, en París, vivíamos atentos: en el metro, en los mercados y hasta en la cima de la Torre Eiffel. Parecía ser que los carteristas nos perseguirían hasta allí. Los peores iban a ser los gitanos. Nos mostrarían sus niños, preguntarían por una dirección y mendigarían en las escalinatas de los edificios. Se nos advirtió que se aprovecharían de nuestra generosidad y nos robarían. Estábamos tan paranoicos con los gitanos que se convirtió en una chanza: –No puedo encontrar mis lentes de sol –decía Jillian. –Te los robé –replicaba Jenna–.

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¡Sorpresa! ¡En realidad soy gitana! Aunque sentíamos que no estaba bien, nos acostumbramos a evitar cualquier contacto visual y a avanzar muy juntos cuando pasábamos frente a manos vacías y suplicantes. En su mayor parte, los gitanos jamás fueron tan insistentes como nos habían dicho. Ningún bebé nos fue arrojado a los brazos. Nadie nos robó. Cuando estiraban las manos, sacudíamos la cabeza y los esquivábamos. Pretendíamos que eran invisibles. Un día, sin embargo, al salir de la Basílica del Sagrado Corazón, mi amigo Matt ya no pudo soportarlo. Miré y vi que estaba atrás, dando unos pocos euros a una anciana envuelta en un chal. Pronto se apresuró para alcanzarme. «No pude decirle que no», dijo simplemente. Al instante me sentí avergonzada al ver su generosidad instintiva más allá de las advertencias. El acto simple de Matt me recuerda las palabras del evangelista Tony Campolo: «Dios pone la riqueza en nuestras manos sin que le demos ninguna garantía de que la usaremos de una manera que le agrade. Él confía en nosotros. ¿No tendríamos que hacer con los demás lo que él hizo con nosotros? En ese gran día cuando esté de pie ante él, me preguntará si compartí

y disminuir la severidad de la recidiva. Juego con mis hijos. Y vivo con la esperanza de la segunda venida. n

Julene Duerksen-Kapao es gerente y

facilitadora pedagógica en la compañía de servicios comunitarios Te Aroha Noa. Vive con su esposo Rouru y dos hijos (Gwen, de 7 años, y Griffyn, de 10) en Palmerston Norte (Nueva Zelandia).

Mientras el resto de nosotros, por temor, tratábamos a esas personas como subhumanos, Matt se les acercó . mi riqueza con los necesitados. No creo que me sirva contestar: “Pensé en hacerlo, pero no parecían confiables”».1 Mientras el resto de nosotros, por temor, tratábamos a esas personas como subhumanos, Matt se les acercó; se agachó, sonrió y compartió lo que tenía con sus hermanos más pequeños. «Tuve hambre, y ustedes me dieron de comer; tuve sed, y me dieron de beber; fui forastero, y me dieron alojamiento; necesité ropa, y me vistieron; estuve enfermo, y me atendieron; estuve en la cárcel, y me visitaron» (Mat. 25:35, 36 NVI). n 1 Tony Campolo, Is Jesus a Republican or a Democrat? (W Publishing Group, 1995), p. 160.

Melodie Roschman es estudiante de posgrado en la Universidad McMaster en Hamilton (Ontario, Canadá), donde cursa Estudios de género, Literatura moderna y Resistencia pacífica. Posee un título de grado en Inglés y Periodismo de la Universidad Andrews.


una fe temeraria Olen Netteburg

A

l avanzar desde nuestro hospital en Béré (Chad) hasta Nigeria, se cruza junto a tribus que hablan nangere, maraba, lele, zime, moussaye, keira, tupuri, francés y árabe… y eso antes de llegar a la frontera con Camerún. Una mujer llegó a nuestro hospital. Nadie podía entenderla, pero traía su niñita enferma. Vimos que sufría de malaria, y le inyectamos quinina intravenosa. Estaba claro que la madre no tenía dinero, pero hicimos lo que siempre hacemos: tratamos a la niñita en forma gratuita y les dimos alimento a ambas. La niñita necesitó tres días seguidos de suero antes de volver a comer. Las dejamos allí durante cuatro días, mientras decidíamos qué hacer. Un día, noté que la madre estaba leyendo la Biblia y vi la palabra «hausa», un idioma del norte de Nigeria. Con timidez, pronuncié la única palabra hausa que conocía: «Sannu» (Hola). Sus ojos se iluminaron asombrados, y replicó con fuerza: «¡Sannu! ¡Sannu! ¡Sannu!», sacudiendo mi mano como si fuera una amiga de larga data. ¿Pueden imaginar una nación con más de ciento veinte idiomas, y que nadie entienda lo que decimos? Gracias a Dios, Naomie, una de las mujeres que trabaja con nosotros, vivió en Nigeria y hablaba hausa con fluidez. La llamé inmediatamente, y ella dialogó con la madre. Nos enteramos de que se llamaba Nagodé, y escuchamos su increíble historia. Un hombre de la tribu nangere de Chad se mudó a Nigeria buscando trabajo. Allí conoció a Nagodé y se casaron. Tuvieron una niña, que llama-

ron Bendita. El grupo terrorista Boko Haram comenzó a buscar y matar a los chadianos. En medio de una emboscada, su esposo huyó a la selva y desapareció durante meses. Y allí fue cuando se hizo evidente el optimismo de Nagodé, un optimismo absoluto y temerario. Nagodé se preguntaba si su esposo había regresado a Chad, de manera que hizo lo que haría cualquier optimista: se fue a buscarlo. Cruzó a Camerún y fue de iglesia en iglesia, pidiendo lo suficiente para llegar a la siguiente iglesia. Llegó a Chad y trató de averiguar dónde hallar la tribu nangere. Al alejarse cada vez más de su hogar, se hizo cada vez más difícil hallar personas que hablaran hausa. Comenzó a pasar días en cada aldea, buscando gente que hablara su lengua. Cuando llegó a Kelo, un pueblo a unos cuarenta y dos kilómetros de Béré, se enteró de que estaba cerca del epicentro de la tribu nangere. Así fue que caminó esa distancia de la misma manera que había hecho los cientos de kilómetros anteriores; a pie, y con sus dos únicas posesiones en la espalda: la niñita y su Biblia en hausa. En medio de todo, la fe optimista y temeraria de Nagodé en algo sobre lo cual no tenía pruebas, jamás flaqueó. Béré no fue el fin de sus problemas. Allí pasó tres días viviendo y durmiendo en el mercado, buscando que alguien la entendiera. No comió las pocas migajas que encontró, sino que se las dio a Bendita. Cuando la niñita se enfermó de malaria, un extraño las llevó hasta el hospital. Les dimos de comer. Cuando

En medio de todo, la fe optimista y temeraria de Nagodé en algo sobre lo cual no tenía pruebas, jamás flaqueó . Nagodé comenzó a recuperar las fuerzas, también comenzó a sonreír. Sus ojos cobraron vida, y los ojos de la niñita también. Y Nagodé siguió leyendo todos los días su Biblia en hausa. Nuestra empleada Naomie, madre sola con cuatro varones, vino a pedirme con lágrimas que le permitiera llevar a Nagodé y a Bendita a su casa. No conozco el fin de la historia. No sé si Nagodé encontrará a su esposo. No sé si ha sido asesinado por Boko Haram, si está escondido por los montes o buscando a su esposa e hija en Nigeria, Camerún o Chad. Pero sé que Dios puso a Naomie en el camino de Nagodé en el instante apropiado. Sé que Bendita habría sucumbido por la malaria sin los medicamentos gratuitos que proveen nuestros fieles donantes. El optimismo, la determinación y la fidelidad de Nagodé salvaron a Bendita, y acaso también a ella. Nagodé tiene un optimismo temerario que la impulsa a la acción. Creo que Pedro estaría de acuerdo que esa es una definición alternativa de fidelidad. Impulsada por su instinto maternal y la Biblia en hausa, Nagodé salió ciegamente a buscar aquello en lo cual tenía confianza y seguridad, más allá de lo

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N O TA D E TA PA

que cualquier persona consideraría un plan lógico, prudente o con evidencia de éxito. La madre y la niña fueron bien alimentadas y se fueron sanas y felices. Nagodé me agradeció sin cesar, deseándome las bendiciones de Dios

sobre mí por la atención gratuita que recibió Bendita en el hospital, atención que fue posible gracias a la fidelidad de los que nos apoyan. Y Nagodé acaso no sabe que su propia fidelidad y su temerario optimismo, ya han sido una bendición para mí. n

fiel en

guardar el sábado

Raymond Adivignon Hounnonkpe

E

l relato bíblico de Daniel y sus amigos –su compromiso de vivir de acuerdo con los principios divinos– ha sido un poderoso apoyo para mí en momentos difíciles. Seguir a Jesús significa llevar su cruz, lo que incluye ser fiel en guardar el sábado en un país como Benín. Crecí en Costa de Marfil. En 2001, viajé a Benín, donde viví con dos hermanos mayores mientras seguía estudiando. El más joven de mis hermanos era adventista. Comencé a asistir a la iglesia, y fui bautizado en mayo de 2007. Aunque era adventista, sin embargo, seguí dando exámenes en sábado hasta que recibí el diploma que me habilitaba para ingresar a la universidad. Entonces di el examen de ingreso a la carrera docente, y fui aceptado. Por ello, en noviembre de 2009 viajé a Natitingou, en el norte de Benín, para continuar allí mis estudios universitarios. En Natitingou teníamos clases y exámenes los sábados. Logré faltar a clases para ir a la iglesia, pero cuando había exámenes, faltaba a la iglesia para ir a presentarme a la universidad. Mi conciencia estaba atribulada, pero no sabía qué hacer. Iba a la iglesia de vez en cuando. Pedí a algunos hermanos de la iglesia que oraran por

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mí, pero sus oraciones no parecieron ayudarme. A mitad de mi segundo año de universidad, sin embargo, Dios me ayudó a tomar una de las decisiones más importantes de mi vida. El sábado tendría examen de cálculo. Dudé. ¿Debía dar el examen en sábado o no? El testimonio de mi pastor, que contó de la decisión de su hija de ser fiel al sábado, me fortaleció mucho. También releí la historia de Daniel y sus amigos, e historias de los reformadores en El conflicto de los siglos. Decidí no dar el examen, y no solo ese, sino todos los exámenes futuros. Estaba listo a inclusive abandonar mis estudios para dar gloria a Dios. No fue una decisión fácil, pero el Espíritu de Dios me ayudó. Cuando llegó el sábado, fui a la iglesia. La siguiente vez que fui a clase mis amigos no podían entenderlo. Varios de ellos me hicieron preguntas. Fue una oportunidad de compartir mi fe con ellos. No di el examen, y Dios me mostró su poder. Mis profesores decidieron darme la calificación que había tenido hasta entonces en la clase. Ese milagro me animó a ser aún más fiel a Dios. Hasta que terminé de estudiar en Natitingou, Dios me fortaleció para

Olen Netteburg y su esposa Danae son médicos en el Hospital Adventista de Béré, en Chad. Tienen dos hijos, Lyol y Zane, y dos hijas, Addison y Juniper. Si desea saber más sobre el trabajo que hacen en Chad, puede seguir su blog en missionarydoctors.blogspot.com

El testimonio de mi pastor, que contó de la decisión de su hija de ser fiel al sábado, me fortaleció mucho . ser fiel en mi decisión de santificar su día. Este no fue el último de mis desafíos. Al final de los tres años de estudio, la ceremonia de graduación tuvo lugar en sábado, pero elegí no ir, aunque, por la gracia de Dios, era el mejor estudiante de la clase. Una vez más, pude hablarles a mis amigos y profesores sobre el sábado. Entonces, en 2014, tuve la oportunidad de dar un examen de ingreso para estudiar estadística en Senegal. Cuando me enteré de que había clases los sábados, decidí no ir. Algunos de mis parientes no estaban de acuerdo conmigo, pero para mí, solo importaba la voluntad de Dios. Decidí continuar mis estudios cerca de mi hogar. Seguí teniendo exámenes programados para los sábados, pero siempre escogí guardar el sábado y no dar los exámenes. El examen final también estaba programado para un sábado, pero el


Señor intervino y los profesores me permitieron darlo otro día. Para muchas personas, es un gran desafío guardar el sábado. Mis experiencias me han ayudado a comprender que no debemos tener miedo de comprometernos plenamente con Dios. A

pesar de todos los obstáculos, Dios me ha sostenido vez tras vez. En el presente, curso un doctorado en matemática, y lo interesante es que lo hago supervisado por un profesor que en el pasado estaba decepcionado conmigo por mi postura sobre el sábado.

Regalar las

bendiciones de Dios

Faith Toh

E

n las colinas de Sabah, rodeada de las montañas de Malasia, yace una pequeña aldea. Para llegar al lugar es necesario recorrer treinta y seis kilómetros en un camino rural hasta un río. Cruzarlo no es sencillo. Durante los meses más secos, no es tan difícil, pero en la estación del monzón, el agua sube mucho y se torna prácticamente imposible. Si logra cruzar el río, queda otro trecho por un camino de tierra hasta la aldea de Bambangan. Es un lugar hermoso, y si se escala la colina más elevada, puede verse a la distancia el Monte Kinabalu. Los habitantes de Bambangan son agricultores de subsistencia. A unos cuarenta minutos de caminata, se encuentra la única escuela. La institución, que se llama Sekolah Rendah Advent Bambangan (o Escuela Primaria Adventista de Bambangan), emplea tres maestros, que enseñan del primero al sexto nivel. Este año se registraron cincuenta y tres niños, pero la asistencia puede llegar a solo veinte en la época de siembra, de cosecha o en la estación de las lluvias. En un lugar donde los padres apenas tienen lo suficiente para alimentar a sus hijos, pagar los gastos de estudios suele ser un lujo inalcanzable.

Durante los últimos trece años, Ester Gerber ha estado apoyando fielmente la obra de la escuela y a los estudiantes, como mentora. Ester nació en una pequeña aldea de Alemania, siendo la sexta hija de una familia pobre. Aun cuando sus padres tenían muy pocos recursos, se esforzaron para que Ester se educara. A ella le apasiona la educación y siente que apoyar a esta escuela significa más que tan solo brindar dinero para ayudar a pagar los salarios de los docentes o patrocinar a los estudiantes. Dice Ester: «Hacer que el mundo sea un poquito mejor para otra persona no implica solo decir a esa persona: “Fue lindo conocerte. Hasta luego”. La gente necesita ser tratada con respeto, equidad y justicia, más allá de sus ingresos o educación […]. No importa de dónde venga una persona, siempre tiene que saber que es príncipe o princesa del Padre celestial». Esteban* terminó los estudios en la escuela de Bambangan. Durante el secundario se vio influido por malas amistades, y comenzó a avanzar por el camino equivocado. Tenía mucho potencial, pero no parecía interesado en aprender. Ester no cedió en sus esfuerzos sino que le dijo: «Bueno,

Nuestro Dios es maravilloso y poderoso. Nada es imposible para él. Tomemos la decisión de confiar en él. n

Raymond Adivignon Hounnonkpe cursa

estudios doctorales de matemática en Benín.

jovencito: no te voy a forzar, porque es tu decisión. Pero me gustaría que para tu último año cambiaras de colegio. ¿Qué te parece?». Esteban terminó cambiándose de escuela. «Durante los primeros dos meses, me mandaba mensajes –recuerda Ester–rogándome que le permitiera volver a su antigua escuela, porque se sentía muy miserable». Ocho meses después, sin embargo, Esteban comenzó a contarle a Ester el cambio que había experimentado en la nueva escuela. Se convirtió en un líder espiritual que participaba de las actividades de la iglesia. Ester nos dice: «Aún tiene cosas para mejorar, pero Dios lo ayudará. Es posible mejorar sus vidas y hasta su bienestar físico. Pero a menos que logremos darles las buenas nuevas y los ayudemos a aceptar a Cristo como su Salvador, no lograremos nada». Ester sigue siendo mentora de estudiantes, y se apresura a afirmar que «no es mi fe la que ayuda a que Bambangan siga adelante. Bambangan ayuda a que mi fe siga adelante. A veces, siento que no me quedan energías. Pero entonces, Dios me da fuerzas, y puedo volar y levantar las alas como las águilas. Dios realmente me ha bendecido, y ha bendecido a mi familia. Necesito compartir esa bendición con otros. No es que estoy dando algo, sino que estoy recibiendo mucho más». n *No es su nombre real.

Faith Toh, de Singapur, trabaja para Studio Elpizo. Vol. 12 No. 2 | Adventist World

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D evo c ional

Chantal J. Klingbeil

ejemplos

de

fidelidad

«Dijo, pues, Jonatán a su paje de armas: “Ven, pasemos a la guarnición de estos incircuncisos; quizá haga algo Jehová por nosotros, pues no es difícil para Jehová dar la victoria, sea con muchos o con pocos”» (1 Sam. 14:6). Jonatán, ¿cómo hiciste para entender tan bien la situación? (A menudo hallo que la vida es muy complicada. A veces parece imposible ser fiel a los que me rodean cuando no satisfacen mis necesidades). ¿Cómo pudiste ser fiel a tu padre, el rey Saúl, quien hasta trató de matarte en dos ocasiones? Me impresiona que fuiste leal y fiel a tu familia, y al mismo tiempo fuiste fiel a tu amigo David, que estaba siendo perseguido por tu padre. Siguieron siendo los mejores amigos y juraste lealtad a David, aun cuando te diste cuenta de que él recibiría el trono. ¿Cómo lo lograste?

sa de de hacer tal co : “Jehová me guar es o br an m m ho i s m su é a er «Y dijo vá. ¡No extend el ungido de Jeho » (1 Sam. 24:6). contra mi señor, gido de Jehová!” un el es ue cepcional. rq po , contra él a oportunidad ex un e st vi tu a ev nte tanto David, en esa cu rsiguiendo dura pe do ta es a bí ha te estaban El rey Saúl, que e cuenta que allí rs da sin a ev cu la cialmente tiempo, entró a esto esperar, espe et (D . os ad ap az n mi derecho. tus hombres ag considero que so e qu s sa co de a o yo creo cuando se trat e Dios actúa com qu r ve sin r ra pe ra mí). Habría Esperar y es a prueba de fe pa un es , rlo ce ha encial. La espada que debería a parecía provid st ha ti; al ra pa l ci eses como anim sido tan fá , y todos esos m ca ar o m in m su ca do El ja . a su fin habría de o, habrían llegado rt sie de o, el rg en ba o fugitiv ado. Y sin em quedado despej tiempos al trono habría úl. Esperaste los Sa a da vi la rle s de escogiste no quita r fiel a los tiempo ieto y esperar: se qu r ta Es s. io D de lograste? Dios. ¿Cómo lo

«Urías respondió a David: “El Arca, Israel y Judá habitan bajo tiendas ; mi señor Joab y los siervos de mi señor, en el campo; ¿cómo iba yo a entrar en mi casa par a comer y beber, y dormir con mi mujer? ¡Po r vida tuya y por vida de tu alma, nunca haré tal cosa!”» (2 Sam. 11:11). Aunque eras conocido com o «el hitita», fuiste fiel a tu país de adopci ón y fiel a tu Dios. (Me resulta difícil ser fiel cuando debo ir contra la corriente. Ser fiel significa aferrarse a algo aun cua ndo otros me decepcionan, aun cuando otros tratan de manipularme o sobornarm e). Fuiste leal y valiente. Estableciste norma s elevadas, y te mantuviste fiel a ellas. Era una parte tan intrínseca de tu ser que los regalos, el soborno o aun los placeres perfectamente permisibles no lograron dis traerte de esa lealtad y fidelidad. Nada pud o persuadirte de que fueras a tu casa y te tomaras un descanso mientras el Arca de Dios y el ejército del Señor se encont raran en batalla. Pagaste por tu fidelidad con tu propia vida. ¿Cómo lo lograste?

F o t o g r af í a :

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P i x a b ay / G ó m e z

S a n t o s


la «Entonces María dijo: “Aquí está ea form con o sierva del Señor; hágase conmig tu palabra”» (Luc. 1:38). ángel, Con tan solo la aparición de un ra bia cam a vid tu estuviste lista para que a da lina inc s má to por completo. (Me sien o fier Pre . gos ries ra cor no buscar una fe que Es ar. trol con do pue algo que creo que veo ningún difícil ser fiel a Dios cuando no ir de todos beneficio inmediato). ¿Qué dec ados para los planes cuidadosamente ide é dirán los tu boda? ¿Qué dirá José? ¿Qu ir avergonviv vecinos? ¿Y eso de tener que los de n ció zada? Aceptaste la humilla habiuna a as rab ent susurros cada vez que diten len ma s odo óm tación; soportaste inc no que algo ser por a dos; fuiste juzgad mente: eras. ¿Qué te hizo decir simple ? or» Señ del va «He aquí la sier

«¿Cómo, pues, haría yo este gran mal, y pecaría contra Dios?» (Gén. 39:9). José, estabas lejos de tu casa. Estabas solo en Egipto. Tus hermanos te habían vendido. (Una cosa es ser fiel cuando alguien está mirando. Resulta mucho más difícil cuando nadie se enterará. Es complicado ser fiel cuando el deber y el deseo van en direcciones opuestas). Tuviste que cuidarte solo, y entonces, la señora de Potifar decidió avanzar. Era una gran oportunidad. Te hizo una oferta que era difícil de rechazar, y aun así, la rechazaste y huiste, dejando tu ropa atrás. ¿Qué te llevó a ser fiel a tu jefe pagano? ¿Cómo pudiste ser fiel al mismo Dios que había permitido que fueras separado de todo aquello que daba sentido a tu vida?

«Elías le dijo: “No ten gas temor: ve y haz com o has dicho; pero hazme con ello primero una pequ eña torta cocida debajo de la cen iza, y tráemela. Despu és la harás para ti y para tu hijo”» (1 Rey. 17:13). Eras una pobre viuda de la ciudad de Sarep ta. El profeta te estaba pidien do lo último de aceite y harina que te quedaba. Tenía s que pensar en tu hij o. ¿Qué tenía este extranjero que te dio la seguridad de qu e lo que decía era verdad? ¿Por qué fuiste a tu casa y le preparaste pan con lo último qu e tenías? Supongo qu e no había mucho que perder ya que de todos modos sería tu última comida. (A veces me aferro con tanta fuerza a las cosas. Ser fiel a menudo im plica abandonar aque llo alrededor de lo cual gira mi vid a. Tener demasiado pu ede ser una maldición y no una be ndición). Renunciaste a tu última seguridad material y arrojaste a tu familia en brazos de un Dios desconocido. ¿Qué te llevó a dar est e paso de fe? Jonatán, David, Urías , María, José y la viuda de Sarepta, ninguno de ustedes eran perfecto s. Estoy segura de que todos tuv ieron momentos de du da y, sin embargo, la historia de sus vidas podría titula rse Fiel. La fe de ustedes fue la res puesta al encuentro qu e tuvieron con el Fiel. Recibieron vislumbres de ese Crea dor que no se limitó por lo visibl e, sino que pudo mirar el mundo vacío y sin forma y ve r allí árboles y animale s que con su palabra llamó a la exist encia. Ustedes entendie ron que había alguien que los amaba tanto y que les veía tanto potencial, que estaría dispuesto a morir an tes que pasar la eternidad sin usted es. Estuvieron dispuestos a abandonar la mane ra como creyeron que debían ser las cosas, y escogier on confiar en ese Dios aun cuando el resultado fuese tan diferente del que podrían haber im aginado. Gracias por compartir esa fe. El testimonio de su s vidas es un gran de safío para mí.

Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió» (Heb. 10:23) .

Chantal J. Klingbeil es directora asociada del

Patrimonio White de la Asociación General. Está casada con Gerald y tienen tres hijas adolescentes que los mantienen muy ocupados.

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H eren c ia

adventista

C

uando John Tay se encontró con Cristo, todo cambió. Como adolescente, le gustaba el mar y le llamaba la atención una pequeña isla del Pacífico llamada Pitcairn. Ahora, su amor era similar, pero diferente. Amar a Jesús significaba contar a todos de esa nueva amistad. Tay iba constantemente al muelle cuando llegaban los grandes barcos. Solía hablar con los capitanes sobre lugares lejanos, pero ahora les hablaba de Jesús. Les daba libros para leer. Seguía pensando en la isla de Pitcairn. ¿Conocían a Jesús los que vivían allí? El comienzo de una aventura

En 1886, Tay sintió que era momento de actuar. Se despidió de su esposa y su hogar en Oakland (California, EE. UU.), y viajó en cuatro barcos diferentes hasta llegar cuatro meses después a la isla Pitcairn. Permaneció allí hasta que llegó el siguiente barco, unas cinco semanas después. Durante esas semanas, predicó de Jesús. Cuando comía con la gente, hablaba de Jesús; dio muchos estudios bíblicos. Cuando se fue, todos los habitantes de Pitcairn estaban guardando el sábado y habían manifestado su deseo de ser bautizados. Tay prometió enviar un ministro que los bautizara y organizara una iglesia. En abril de 1888, la Iglesia Adventista acordó enviar a alguien. Le pidieron a Andrew Cudney, de treinta y cuatro años, un ministro de Nebraska (EE. UU.), que acompañara a Tay de regreso a Pitcairn. Cudney quería compartir a Jesús, por lo que no dudó. Alejándose de su esposa e hijos, respondió al llamado, aunque tenía que viajar ocho mil kilómetros y no tenía idea de cómo llegar hasta allí. Decidió ir para que la gente conociera a Jesús. Cudney y Tay llegaron a San Francisco (EE. UU.) en mayo de 1888. Aguardaron varias semanas, pero no

hallaron ningún barco que fuera al Pacífico Sur. Los líderes les aconsejaron que se separaran: Tay quedó en California, aguardando un barco que navegara a Tahití. Cudney salió en dirección a Hawái el 20 de mayo. El plan era tomar allí un barco para Tahití, y continuar junto con Cudney hasta Pitcairn. Parecía un buen plan, pero al llegar a Hawái, Cudney descubrió que no había barcos que fueran hacia Tahití. No sabía qué hacer. Regresar a California no parecía ser lo mejor, pero tampoco sabía cómo seguir adelante. Un creyente llamado N. Burgess ofreció adquirir una embarcación usada que estaban rematando. Él la repararía siempre y cuando se usara para ir a Pitcairn. Animado, Cudney aceptó el plan. Mientras esperaba, Cudney habló de Jesús a los habitantes de Hawái. Los animó, dio estudios bíblicos y antes de

salir para Tahití, organizó con nueve miembros la primera iglesia adventista en Honolulú. Nos vemos en Pitcairn

El 31 de julio, Cudney dejó Honolulú en el recién acondicionado Phoebe Chapman para encontrarse con Tay en Tahití. Justo antes de salir, escribió sobre su deseo de compartir a Jesús: «Un

John Cudney

Merle Poirier

Fieles hasta

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la

muerte

Personas comunes que respondieron al llamado de Dios a pesar de la incertidumbre


capitán inglés, de gran experiencia, cuya esposa guarda el sábado, está a cargo del barco. Habla los principales idiomas de esta región del Pacífico. Lo acompaña un sueco que habla cinco idiomas. Dos hombres van a cargo del mástil hasta Tahití, sin salario alguno […]. Parece que la mano de Dios está en esto. Los de la tripulación son desconocidos, pero la mayoría parece ser gente de buen corazón, y confío en que algunos aprendan a amar la verdad antes del fin de la travesía. Hoy salimos al mediodía, en dirección primero a Tahití, donde espero que me esté aguardando el hermano Tay. Entonces, iremos directamente a

revelaban la ansiedad de la iglesia por el barco desaparecido y su tripulación. Tay procuró hallar un barco que lo llevara a Pitcairn, pensando que Cudney se había ido sin él, pero cuando los capitanes se enteraban de que su intención era hablar de Jesús, nadie quería llevarlo. Después de esperar en Tahití durante seis meses, regresó a su casa. Un año después, sin saber nada de Cudney, se convencieron que se había perdido en el mar. Sin embargo su esposa guardó sus ropas por muchos años, esperando que un día fuera hallado en otra isla. Llamado a la acción

John Tay (sentado en la primera fila), fue parte de la primera tripulación del Pitcairn (vea más abajo) como carpintero del barco.

Pitcairn, con tanta velocidad como nos la permita el viento».1 Mientras tanto, John Tay salió de San Francisco para Tahití el 5 de julio, llegando allí el 8 de agosto, donde aguardó que llegara Cudney. Cada día iba al puerto para averiguar por los barcos que llegaban, pero la embarcación de Cudney jamás llegó. En la Asociación General, también se aguardaban noticias del barco. La esposa de Cudney oraba por el paradero de su esposo. Las actas de reuniones registran oraciones y acciones que F o t o g r af í as : C e n t r o de I n v es t i gac i o n es A d v e n t i s t as

La iglesia no renunció al pedido de los habitantes de Pitcairn que aún aguardaban el bautismo. Debido a los desafíos que enfrentaron Cudney y Tay, la iglesia decidió construir su propio barco. El Pitcairn fue botado el 28 de julio de 1890, y llevó tres matrimonios misioneros, entre ellos, John Tay y su esposa. Al llegar a Pitcairn, ochenta y dos personas fueron bautizadas y se organizó una iglesia. Los restos del Phoebe Chapman fueron hallados en la costa occidental de Tahití en 1891. Aunque estuvo cerca, A. Cudney jamás llegó a destino. Él quería compartir a Jesús y, a pesar de los obstáculos, fue fiel a su llamado. Ahora aguarda la segunda venida de Cristo, cuando el Dador de la vida lo llamará otra vez. En esa ocasión lo llamará de su sepulcro en el océano. En ese momento escuchará: «Bien, buen siervo y fiel […]. Entra en el gozo de tu Señor» (Mat. 25:21). 1 Advent

Review and Herald, 21 de agosto de 1888, p. 539.

Merle Poirier es gerente

de operaciones de Adventist World.

Phoebe Chapman

Palabras

descuidadas La familia Chapman fue una de las primeras de Petaluma (California, EE. UU.), en aceptar la verdad de parte de John Loughborough. Varios pretendientes buscaban a Phoebe, la hermosa hija de la familia. Los Chapman cuentan que cierto día, un joven se acercó a Phoebe, e interesado en provocar una buena impresión le contó que él había nombrado el primer barco misionero adventista con su nombre: el Phoebe Chapman. Al escuchar eso, ella sacudió la cabeza y contestó: «Espero que se hunda».1 Más tarde, al escuchar la noticia del barco perdido, lamentó sus descuidadas palabras. Aunque lo que dijo no causó la tragedia, siempre conviene decir palabras de las que no tengamos que arrepentirnos. «Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad» (Fil. 4:8). 1 Mary

Colby Monteith, «California’s First Tent Campaign», Adventist Review, 28 de febrero de 1980.

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R espuestas

a

preguntas

b í b li c as

Símbolos ¿Dice Hebreos 10:19, 20 que el velo del templo representaba la carne de Jesús?

y

metáforas

Permítame citar el pasaje al que se refiere: «Así que, hermanos, tenemos libertad para entrar en el Lugar Santísimo [Gr. ton hagion, «el santuario»] por la sangre de Jesucristo, por el camino nuevo y vivo que él nos abrió [Gr. enekainisen, «inauguró»] a través del velo, esto es decir, de su carne [Gr. sarx, «carne»]». Los estudiosos de la Biblia han brindado tres interpretaciones principales de estos versículos. Necesitamos una interpretación con solidez contextual y que sea consistente con el mensaje de toda la epístola. 1. El velo es la carne de Cristo: Esta lectura se ve apoyada exclusivamente por el hecho de que en Hebreos, la frase «esto es» suele referirse al sustantivo o frase anterior. En este caso, quiere decir que Cristo inauguró un camino a través del velo, es decir, mediante el velo que es su carne. Permítame ofrecer unos pocos comentarios. En primer lugar, el explicativo «esto es» no siempre se refiere al sustantivo o frase inmediata anterior (Heb. 7:5; 13:15); la frase podría indicar «a través del velo», o a alguna otra cosa. En segundo lugar, la idea de que Cristo abrió un camino mediante el velo que es su sangre es, en el mejor de los casos, un tanto oscura. Si el velo era un obstáculo que tenía que ser removido para tener acceso a Dios, ¡esto quiere decir que la «carne» de Cristo tenía que ser removida para acceder a Dios! Dado que en ningún otro lugar de Hebreos se equipara al velo con la carne de Cristo, y en el pasaje no pasa de la mención, los estudiosos han explicado el concepto de diversas maneras. Una perspectiva común es que la preposición «a través [del velo/su carne]» es usada de dos maneras diferentes. A través del velo se referiría a pasar de un lado al otro, mientras que «a través de su carne» designaría a Cristo como instrumento de acceso. Esta distinción de uso es sumamente cuestionable. En tercer lugar, si el velo del Tabernáculo celestial es la carne de Cristo, el apóstol está usando una interpretación metafórica o aun alegórica del Santuario celestial. Esto se opone a la convicción del apóstol de que hay un Santuario en el cielo con un velo, donde se encuentra el trono de Dios. Por estas y otras razones, esta interpretación resulta poco fiable.

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2. La carne de Cristo es el camino: Se ha sugerido que la frase «esto es» se refiere a «el camino» («el camino […], esto es, su carne»). Esta lectura posible del texto evita los inconvenientes de la anterior. Cristo es identificado como el medio, el camino, nuestro acceso a Dios. Pero el hecho de que el explicativo «esto es» se encuentra muy lejos del «camino», lo debilita. Sin embargo, si asumiéramos que el sustantivo «el camino» tiene que ser repetido antes de «su carne», el problema quedaría solucionado. 3. «Esto es» se refiere al contenido de la oración: Según esta postura, «esto es» se refiere a la declaración de que Cristo «inauguró [traducido incorrectamente como «abrió»] un camino nuevo y vivo a través del velo por medio de/a través de su carne». En otras palabras, el nuevo camino de acceso a Dios es resultado de su encarnación, que hizo posible su muerte sacrificial. Esta idea aparece a menudo en Hebreos (por ej., 2:14; 6:19, 20; 9:12, 24-26). La idea de acceso a Dios por medio de Cristo es central al libro de Hebreos. Esta interpretación también es apoyada, según lo indican un número de estudiosos, por los versículos que estamos analizando. Algunos paralelos importantes entre los versículos 19 y 20 nos ayudan a aclarar el uso de «esto es». Versículo 19 entrar el Santuario por la sangre de Jesucristo

Versículo 20 un camino nuevo y vivo a través del velo esto es, de su carne.

La idea de entrar es desarrollada aún más gracias a la mención de un nuevo camino: el acceso al Santuario tiene lugar a través del velo. A través de la carne de Cristo se refiere claramente a la sangre de Cristo en la cruz como medio de acceso a Dios, no al velo del Santuario celestial. Esta interpretación parece ser la mejor desde el punto de vista gramátical, contextual y teológico. n

Ángel Manuel Rodríguez se ha jubilado después de trabajar para la iglesia como pastor, profesor y teólogo.


E studio

b í b li c o

Mark A. Finley

Moisés amigo de Dios L

a vida de Moisés es una historia de la conducción milagrosa y providencial de Dios. Aunque mostró rasgos de carácter comunes a toda la humanidad, su vida demuestra la gloria del perdón y el poder divinos. Moisés enfrentó grandes obstáculos, y los desafíos que tuvo podrían haberlo abrumado, pero miró más allá de los problemas y se sostuvo por fe, «como viendo al Invisible» (Heb. 11:27). En medio de los enormes desafíos, obstáculos y dificultades que enfrentó, Moisés cultivó una íntima amistad con Dios. Cerca del fin del libro de Éxodo se registra: «Jehová hablaba con Moisés cara a cara, como habla cualquiera con su compañero» (Éxo. 33:11). ¿Qué podría resultar más gratificante? Conocer íntimamente a Dios y hablarle como un amigo es el mayor gozo de la vida. En esta lección, repasaremos algunos de los eventos que moldearon la vida de Moisés, y la manera en que cultivó esa amistad con Dios.

1 ¿Qué eventos al momento del nacimiento de Moisés moldearon su vida? Lea Éxodo 1:7-12, 22. La vida de Moisés se vio impactada seriamente por el decreto de faraón de dar muerte a todos los bebés hebreos. A pesar de ello, en el caso de Moisés, Dios transformó esta maldición en bendición.

2

¿De qué manera fue preservada milagrosamente la vida de Moisés? ¿Cómo fue afectada su vida futura? Busque la respuesta en Éxodo 2:1-10. La vida de Moisés fue preservada providencialmente con un propósito especial. No solo fue criado hasta los doce años por su propia madre. Moisés recibió la mejor educación de Egipto pagada por el mismo faraón. Dios tiene un camino, aun cuando no parece haber ninguno y sus planes triunfan a pesar de la intervención humana.

3

Lea Éxodo 2:11-15. ¿Qué falla seria de carácter mostró Moisés? Moisés creía –sobre la base de su experiencia, educación y entrenamiento militar– que libraría a Israel de la esclavitud de Egipto. Creía que estaba listo para logar algo grande, pero Dios sabía que no estaba listo. Moisés tenía que aprender lecciones de humildad, paciencia y confianza; por eso fue enviado a cuidar ovejas.

4 Después de huir al desierto, terminó cuidando ovejas durante cuarenta años. Habrá pensado que Dios ya no podía usarlo. ¿Cómo se le reveló el Señor en el desierto? Lea Éxodo 3:2-10. Debido a sus fracasos anteriores, Moisés podría haber creído fácilmente que Dios lo había olvidado o que ya no podía usarlo. Pero Dios cuidó a Moisés en su deambular por el desierto como pastor de ovejas y, al momento adecuado, se le reveló. Moisés ahora estaba listo para liberar a Israel de la esclavitud de Egipto y ser el líder que el Señor quería que fuera.

5

¿Cuál fue la respuesta de Moisés, y cómo le respondió el Señor? Lea Éxodo 3:10, 11; 14-17. Cuarenta años antes, cuando Moisés sintió que estaba listo para librar a Israel, pero Dios sabía que necesitaba más preparación; por eso lo envió a cuidar ovejas durante cuarenta años. Cuando el Señor vio que Moisés había aprendido las lecciones necesarias, fue Moisés quien sintió que no estaba listo. Dios usa a los que se sienten inadecuados porque están listos para depender de él. Usa a los que se sienten débiles, porque él puede ser la fuerza de ellos.

6 A lo largo del libro de Éxodo, Dios reveló su poder para hacer milagros. Lea Éxodo 4:1-4, 13, 14; 6:6, 7, y enumere tres milagros que Dios llevó a cabo para demostrar su poder tanto a Israel como a las naciones paganas que lo rodeaban. 7

¿Cuál era el propósito último de Dios al levantar a Moisés para que dirigiera a Israel? Lea Éxodo 9:16. Dios levantó a Moisés con el expreso propósito de revelar su gloria al mundo. Así también nos ha levantado a cada uno dentro de nuestra esfera de influencia para revelarlo mediante nuestras palabras y ser testigos de su gloria. Nosotros también tenemos que mostrar el poder de Dios en nuestra vida para dar gloria a su nombre, para que, al igual que Moisés, también podamos ser sus amigos y representarlo bien en todo lo que hacemos. n

Vol. 12 No. 2 | Adventist World

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INTERCAMBIO DE IDEAS

La publicación inspira y alcanza a otras vidas y, por ello, me gustaría felicitarlos. Les pedimos que envíen más ejemplares para que podamos alcanzar a nuestros hermanos y hermanas de las zonas remotas del país. Clifford Keya Kenia En camino a Jericó (Noviembre 2015)

Cartas Agradecido

Me siento agradecido por la bendición de Adventist World. Cada mes la aguardo con gozo. Mediante esta revista descubro lo que está sucediendo en el mundo con nuestros hermanos y hermanas. Los artículos que más disfruto son los que hablan de experiencias misioneras, que me ayudan a enfocar mi ministerio y me dan nuevas ideas. Me gustaría que incluyeran más informes sobre la obra de los jóvenes en el campo misionero. Muchas gracias por la bendición de poder acceder a gran parte de esto en el sitio web. Luis Moreira Quito, Ecuador

Pedidos y

¡Este artículo me emocionó hasta las lágrimas! Necesitamos este tipo de artículo para mostrar a otros quién es nuestro Dios. En Génesis 19, Dios vio tan solo una familia justa. Conocemos la historia de Lot. Dios salvó su vida porque él estuvo dispuesto a dar a sus propias hijas para salvar la vida de extraños (los ángeles), que se alojaron bajo su techo. Puso la seguridad de ellos antes que la suya propia y la de sus hijas. Lot es sobrino de Abraham, quien estuvo dispuesto a dar a Isaac para obedecer a Dios. Tenemos que darlo todo para seguir a Jesús. Moni Dominic India/Estados Unidos Providencia

En la actividad misionera de los sábados por la tarde, conocimos a Leanne, una excatólica que recibió el libro El conflicto de los siglos. En lugar de aceptar el DVD de parte de mi esposa, prefirió el

libro que yo tenía en mis manos. Mencionó la terrible matanza de París ese último viernes (13 de noviembre), del cual nada sabíamos en ese momento. Le dije que parecía una repetición de lo que sucedió en París en la década de 1790. Ella, con la dirección del Espíritu Santo, abrió el libro en el capítulo 15 (La Revolución Francesa), y quedó asombrada de que el libro que tenía entre manos estaba tan actualizado como el periódico de ese día. ¡Alabado sea el Señor! Ella estaba ansiosa de leer el libro. Deseo muchas bendiciones para esta maravillosa revista. Billo Smith Queensland, Australia Buscamos legalismo, hallamos hipocresía (Noviembre 2015)

Gracias por publicar este artículo. Creo que destaca un tema que todos los cristianos deberíamos tener en cuenta. Alexandra Matthew Australia El legalismo nace de no entender la perfecta ley de Dios. El amor es la ley. Nuestro amado Mesías caminó y habló con amor perfecto, y por ello no era legalista. Obró en sábado, y fue juzgado por legalistas que decían que había quebrantado la Ley. Las obras que hizo Jesús en sábado fueron obras de amor

agradecimientos

Les pido que oren para que el Señor efectúe un cambio profundo y radical en mi vida, para que pueda revivir espiritual y moralmente, y en todas las áreas de mi vida. Que el Señor me dé su perdón, me limpie y santifique, porque quiero renovar mi pacto con él. Merizier, Haití

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Adventist World | Febrero 2016

Por favor, oren por mi novia y por mí. Estoy estudiando en otro país, y la relación está casi terminada. Oren por favor para que ella pueda acompañarme pronto. Nombre reservado, Brasil Solicito sus oraciones para que no retroceda en la fe: necesito que Dios

me ayude a guardar el sábado como indica la Biblia. Tabién oren por progreso en mis finanzas. Vincent, Zimbabue Mi familia está pasando por momentos difíciles. Oren por favor por nuestra situación financiera. Mi esposo nos abandonó a mí y a los niños. Mercy, Zimbabue


C o wa n

Pautas para las cartas: Envíelas por favor a letters@ adventistworld.org. Las cartas tienen que ser claras, con una extensión máxima de cien palabras. Incluya el nombre del artículo y la fecha de publicación. Coloque también su nombre, el pueblo o ciudad, el estado o provincia y el país desde donde nos escribe. Los envíos serán editados por razones de espacio y claridad. No todas las cartas serán publicadas.

F r ee i m ages . c o m / R i c k

por los demás, y fueron obras agradables al Señor que no se opusieron a los mandamientos. Es bueno hacer buenas obras en sábado. Tenemos que aprender a caminar en la bondad perfecta del Espíritu Santo. Es legalista obsesionarse con el respeto estricto a las leyes y reglamentos sin comprender o seguir el significado más profundo de la ley. Ama a Dios con todo tu corazón, mente, cuerpo y alma. Y ama a tu prójimo como o más que a ti mismo. Toda la ley se basa en esto. Por ello, cuando vivimos en amor, solemos estar en armonía con los mandamientos. Pero cuando procuramos vivir solo siguiendo los estatutos y mandamientos sin amor, esto es como trapos de inmundicia para el Señor, y es algo definitivamente legalista. No existe una ley contra los actos y pensamientos que son los frutos del Espíritu Santo. El amor es el significado y el centro de la ley y, cuando vivimos verdaderamente en amor, somos verdaderamente libres. ¡Aleluya para siempre y siempre, porque Dios es verdaderamente bueno y hermoso en todos sus caminos! Jason Gilbertson Hawái, Estados Unidos

De a dos

Cada día, respiramos unas 23.040 veces, y al hacerlo movemos 12,4 metros cúbicos de aire. Las respiraciones se producen en pares, con excepción de dos momentos de nuestra vida: al nacer, cuando inhalamos por primera vez, y al momento de la muerte, cuando exhalamos por última vez. Fuente: A Natural History of the Senses

Al menos la mitad del mundo (el Hemisferio Norte) aún está pasando por lo peor del invierno. Por ello, lo invitamos a probar estas infusiones para aliviar el dolor de garganta o conciliar el sueño si decide dormir la siesta:

la

hora del

té verde té oolong té de menta té blanco té rooibos Fuente: EatThis.com f o t o g r af í a : P IX A B A Y / La r i sa K o sh k i n a

Oren por favor por mi familia, porque no quiero que se pierdan. Estoy preocupada por nuestra salvación. Por favor, oren por nosotros y ayúdennos a ver cuán importante es estar listos para la segunda venida de Cristo, y cuán cerca está. Vicky, Reino Unido

Una vez le pedí al equipo de oración que orara conmigo. Confiaba solo en Dios para conseguir un buen trabajo y una esposa. Estoy feliz de contarles que Dios escuchó nuestras oraciones. Tengo un buen trabajo y una buena esposa. En efecto, si nos juntamos para orar, Dios nos responde. Peter, Malaui

Por favor, oren por mí, para que entregue todo mi corazón a Cristo y reciba un ascenso en mi trabajo. Peter, Sudáfrica Oraciones y alabanzas: Envíe sus pedidos de oración y agradecimientos por las oraciones contestadas a prayer@ adventistworld.org. Sea breve y conciso; dígalo en cincuenta palabras o menos. Los envíos serán editados por razones de espacio y claridad. No todos serán publicados. Incluya por favor su nombre y su país. También puede enviar sus pedidos por fax a: 1-301-680-6638; o por correo a Adventist World, 12501 Old Columbia Pike, Silver Spring, MD 20904-6600 U.S.A.

Vol. 12 No. 2 | Adventist World

29


INTERCAMBIO DE IDEAS S erm ó n

hace

65

años

En febrero de 1951, en una reunión de la Comisión Misionera de la Unión Angoleña llevada a cabo en Nova Lisboa (Angola), se estableció la Casa Publicadora Angoleña, bajo la conducción de E. L. Jewell. Ya en 1937, se imprimían las publicaciones de Escuela Sabática en una copiadora, y más tarde en una prensa Multigraph de la Escuela de Capacitación Bongo, en Lepi. Cuando se hizo evidente que era necesario tener más de una prensa para producir todas las publicaciones planeadas, se planificó la compra de una prensa más grande. La casa publicadora de Angola fue la primera vinculada con la casa editora en Portugal y pasó a llamarse Publicadora Atlántico Limitada – Filial Angola. Después de escoger un edificio en Nova Lisboa y de pedir una prensa de cilindro y una guillotina para papel Babcock, el consejo municipal decidió ampliar la calle, lo que obligó a reducir el tamaño del edificio y lo tornó inadecuado como planta impresora. En 1958 se completó una nueva planta en la Misión Bongo. La Casa Publicadora Angoleña ahora es administrada por la Unión Misión de Angola Sudoccidental. A fines de la década de 1970, fue trasladada a Huambo.

Cristianos

multiculturales Los adventistas de Norteamérica forman parte de uno de los grupos religiosos de mayor diversidad étnica y racial. El más de un millón de miembros está conformado así: blancos (37 por ciento) negros (32 por ciento) hispanos (15 por ciento) asiáticos (8 por ciento)

en

60

segundos

historia

Una del

corazón

El autor pronuncia palabras de despedida dedicadas a la familia de su iglesia.

D

urante mi año en Arizona, muchos de los miembros de la iglesia donde estaba se sentaron conmigo, oraron por mí y me mostraron el significado del amor. El 21 de diciembre de 2014 fue mi último almuerzo con la familia de la iglesia. Ya aguardaba con ansias regresar a mi pueblo y estar con mis amigos. Jamás había notado cuán importantes son las comidas. Como siempre, unos pocos miembros y ayudantes trabajaron en la cocina, para que todos pudiéramos disfrutar juntos de la comida. «¿Regresarás a nuestra iglesia en el futuro? –preguntó el pastor–. Te vamos a extrañar». Al escuchar sus voces allí en la cocina, comprendí el espíritu de amor. Quiero ser miembro de la iglesia, no solo por el conocimiento de los libros, sino también por la manera en que los miembros entonan cánticos y reciben a otros. Cada sábado, los miembros de la iglesia de Yuma hicieron un trabajo excelente. Fui muy afortunado. Ya de regreso en China, siempre recordaré mi experiencia. Una fotografía en mi repisa me muestra junto a mis amigos de la iglesia. Quisiera decirle algo a mi familia de la iglesia: «¡Soy parte de la familia para siempre!»

otros (8 por ciento)

Weining Wang vive en la China, después Fuente: WorldReligionNews.com

30

Adventist World | Febrero 2016

de pasar un año en Yuma (Arizona, EE. UU.).


5O

«He aquí, vengo pronto . . .»

PALABRAS O MENOS

Nuestra misión es elevar a Cristo, uniendo a los adventistas de todo el mundo en creencias, misión, vida y esperanza.

Mi

Editor ADVENTIST WORLD es una publicación internacional de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, editada por la Asociación General y la División de Asia-Pacífico Norte de la Iglesia Adventista. Editor ejecutivo Bill Knott Editor asociado

personaje favorito de la Biblia

Mi personaje favorito es Salomón, porque refleja mi deseo de recibir la sabiduría de Dios.

n

–Jeremy, Chile

Mi personaje de la Biblia favorito es Juan, el discípulo amado. Juan era uno de los «hijos del trueno», pero después de pasar tiempo con Jesús, llegó a ser «el discípulo amado». Juan aprendió y puso en práctica el amor, una de las enseñanzas más preciosas de Cristo.

n

–Hector, Mogi das Cruzes, Brasil

Mi personaje bíblico favorito es José. Al igual que un árbol de mango que da un fruto dulce después que lo lastimas, hizo un bien excepcional a sus hermanos aunque ellos se esforzaron por lastimarlo. Los ayudó a sobrevivir la hambruna, y los llevó a vivir en tierras fértiles.

n

–Godfrey, Lira, Uganda Para la próxima, díganos en 50 palabras o menos cuál es su himno favorito. Envíe su contribución a Letters@AdventistWorld.org, y en «Asunto» escriba «50 Palabras».

Vecinos en

crecimiento El sesenta por ciento de la población mundial vive en Asia, si bien la población de África está creciendo a un mayor ritmo. Según el informe Perspectivas sobre la Población Mundial, publicado por la División de Población de las Naciones Unidas, India está en camino de llegar a ser la nación más populosa dentro de siete años, por encima de China.

6

%

Gerente editor internacional Pyung Duk Chun Junta editora Ted N. C. Wilson, presidente; Benjamin D. Schoun, vice-­ presidente; Bill Knott, secretario; Lisa Beardsley-Hardy; Daniel R. Jackson; Robert Lemon; Geoffrey Mbwana; G. T. Ng; Daisy Orion; Juan Prestol; Michael Ryan; Ella S. Simmons; Mark Thomas; Karnik Doukmetzian, asesor legal. Comisión coordinadora de ADVENTIST WORLD Jairyong Lee, chair; Yutaka Inada, German Lust, Pyung Duk Chun, Suk Hee Han, Gui Mo Sung Editores de Silver Spring, Maryland, EE.UU. André Brink, Lael Caesar, Gerald A. Klingbeil (editores asociados), Sandra Blackmer, Stephen Chavez, Wilona Karimabadi, Andrew McChesney Editores de Seúl, Corea Pyung Duk Chun, Jae Man Park, Hyo Jun Kim Directora de operaciones Merle Poirier Director de asociaciones estratégicas Jared Thurmon Editores invitados Mark A. Finley, John M. Fowler Consultor E. Edward Zinke Gerente financiera Kimberly Brown Asistente administrativa Marvene Thorpe-Baptiste Junta administrativa Jayriong Lee, presidente; Bill Knott, secretario; P. D. Chun, Karnik Doukmetzian, Suk Hee Han, Yutaka Inada, German Lust, Ray Wahlen, Exoficio: Juan Prestol-Puesán, G. T. Ng, Ted N. C. Wilson Dirección y diseño gráfico Jeff Dever, Brett Meliti Consultores Ted N. C. Wilson, Juan Prestol-Puesán, G. T. Ng, Leonardo R. Asoy, Guillermo E. Biaggi, Mario Brito, Abner De Los Santos, Dan Jackson, Raafat A. Kamal, Michael F. Kaminskiy, Erton C. Köhler, Ezras Lakra, Jairyong Lee, Israel Leito, Thomas L. Lemon, Geoffrey G. Mbwana, Paul S. Ratsara, Blasious M. Ruguri, Ella Simmons, Artur A. Stele, Glenn Townend, Elie Weick-Dido A los colaboradores: Aceptamos el envío de manuscritos no solicitados. Dirija toda correspondencia a 12501 Old Columbia Pike, Silver Spring, MD 20904-6600, EE.UU. Número de fax de la oficina editorial: 1 (301) 680-6638 E-mail: worldeditor@gc.adventist.org Sitio Web: http://www.adventistworld.org/ A menos que se indique lo contrario, todas las referencias bíblicas pertenecen a la versión Reina Valera. Revisión 1995. ADVENTIST WORLD es publicada todos los meses e impresa simultáneamente en Alemania, Argentina, Australia, Austria, Brasil, Corea, Estados Unidos, Indonesia y México.

Vol. 12, No. 2

Fuente: The Rotarian

Vol. 12 No. 2 | Adventist World

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