Adventist World Spanish - December 2020

12/2020 De obstáculos a oportunidades Página 10 La Palabra, la comunión, la mesa y la oración Página 24

Actualización urgente ChurchOS 21.0 ofrece importantes actualizaciones de seguridad, estabilidad y facilidad de uso para la vida eclesiástica postpandemia.

Recomendada para todos los miembros. ¿Desea instalarla?

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Un regalo interminable Página 28

Un pueblo resiliente BILL KNOTT

10 De obstáculos a oportunidades

Una mejor comunión, tecnología y cultos de adoración a pesar del Covid-19.

S. Joseph Kidder y Willie Edwards Hucks II

16 Perspectiva mundial Dios tendrá un pueblo Ted N. C. Wilson 18 Informe especial Cómo el Covid-19 ha afectado la educación adventista Julián Melgosa 20 Voces jóvenes Números en rojo Carolina Ramos 21 Fe en acción ¿La Gran Comisión o la gran sugerencia?

Rachael C. Duncan 22 Descubramos el Espíritu de Profecía La konflikto de la epokoj Beth Thomas 24 La Iglesia La Palabra, la comunión, el pan y la oración Alain Coralie

26 Respuesta a preguntas bíblicas Crimen y castigo 27 Salud y bienestar Fatiga de pantalla 28 ¿Puedo contarle una historia?

Un regalo interminable 30 Fe en crecimiento Cuando Dios hizo regresar el avión

En las primera seis semanas de la pandemia global del Covid-19, los profetas culturales comenzaron a predecir cuán dramáticamente alteraría la crisis el futuro de la fe. Columnas de diarios y revistas se llenaron con descripciones aún más funestas de estructuras sociales que cambiarían para siempre por las interrupciones extendidas, incluso en la iglesia local.

Los sermones a los que estábamos acostumbrados desaparecerían: el futuro se vería dominado por comunión informal y enseñanzas distendidas. Proliferarían los grupos pequeños y las iglesias filiales.

Las iglesias quedarían en silencio, como monumentos de una era desaparecida. La música de la iglesia –los grandes himnos y emotivos cánticos– sucumbirían a melodías cantadas simultáneamente por diez o veinte personas ancladas frente al Zoom.

Parecía que el futuro confirmaría a los que esperaban desmantelar la vida de las iglesias así como muchos la valoramos: en un edificio; cantando al unísono o en armonía; aquietando nuestro espíritu en la ministración semanal de la Palabra; hallando gozo en creyentes que podemos saludar, disfrutar y abrazar. Todo esto desaparecería para ser remplazado por todo lo virtual.

Es un acto de misericordia que el futuro casi nunca se desarrolla como lo predicen las voces más estridentes. Hace nueve meses, la crisis dio lugar a una multitud de nuevas maneras de asistir a la iglesia: algunas temporarias y adaptadas al momento; otras, ganancias a largo plazo para el pueblo tan paciente de Dios. La necesidad ha probado una vez más ser madre de la invención, y una explosión de talentosa creatividad ha disparado un crecimiento inesperado en muchas iglesias. Otras congregaciones luchan por sobrevivir en este largo período de gestación, orando en soledad por el pronto final de la noche.

En verdad, el pueblo de Dios ya ha estado muchas veces en una situación similar. En cada siglo, desde que Jesús ascendió, los que «guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús» han soportado momentos difíciles y dolorosos, que en ocasiones se extienden por años y aun décadas. Sus libertades se han visto restringidas; sus movimientos, observados y regulados. «Anduvieron sin rumbo por desiertos y montañas, por cuevas y cavernas» (Heb 11:38, NVI). Incontables millones perdieron la vida ante tiranías más letales de lo que alguna vez será esta pandemia.

Aun así, la iglesia lo soportó, porque en la misma naturaleza de la iglesia de Cristo está el soportar la dificultad y la adversidad. El apóstol Pedro, que sabía mucho del sufrimiento, nos recordó: «Queridos hermanos, no se extrañen del fuego de la prueba que están soportando, como si fuera algo insólito. Al contrario, alégrense de tener parte en los sufrimientos de Cristo, para que también sea inmensa su alegría cuando se revele la gloria de Cristo» (1 Ped. 4:12-13, NVI). Se predicó la Palabra y se entonaron armoniosos cánticos. Se hicieron discípulos y la testificación se multiplicó. Hombres y mujeres se reunieron para contagiar nueva fe, compartir una sagrada comida y celebrar nueva vida.

En gracia, la iglesia de Cristo perseveró. Por gracia, su iglesia perseverará. La vida resucitada de Cristo también está en su pueblo.

Creemos en el poder de la oración, y aceptamos pedidos de oración que compartimos en nuestro culto semanal de cada miércoles por la mañana. Envíe sus pedidos a prayer@adventistworld.org, y ore por nosotros mientras trabajamos todos juntos en pro del progreso del reino de Dios.

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Instantánea

La oración se ha vuelto aún más esencial para las congregaciones, instituciones y líderes adventistas durante la pandemia actual. La imagen muestra a Leonard Johnson, secretario ejecutivo de la División Interamericana, junto a Elie Henry, presidente del territorio, y a Filiberto Verduzco, el tesorero, en momentos de oración antes de una crucial sesión de la junta, el pasado 10 de julio.

Fue una reunión por Zoom que analizó las finanzas en la región.

Libna Stevens, División Interamericana

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Noticias breves

687.432 Número de aumento de miembros en 2018, sobre la base del informe presentado ante la Junta Directiva por G. T. Ng, secretario ejecutivo de la Asociación General.

La feligresía mundial llegó a 21.414.779 a fines de 2018. Ng recordó que la Iglesia Adventista opera en 215 de los 235 países reconocidos por las Naciones Unidas.

«Jamás nos quedaremos sin dinero antes de que el Señor decida que tenemos que quedarnos sin dinero.

Seremos fieles, y haremos lo mejor con lo que el Señor nos ha encomendado. El resto depende del Señor. Él nos ayudará».

—Juan Prestol-Puesán, tesorero de la Asociación General, al concluir el informe financiero ante la Junta Directiva el 8 de octubre, en el que reconoció el impacto financiero significativo de la pandemia global, incluido un déficit estimado de 26 millones en el presupuesto de la Asociación General.

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Tiempo dedicado a pensar en la vida de Jesús En la Encuesta Global a los Miembros de Iglesia 2017-2018 comisionada por la Asociación General, los investigadores preguntaron cuánto tiempo pasaban los miembros pensando en la vida de Jesús.

Una o más veces al día (50,98%) Más de una vez por semana (23,12%) Una vez por semana (12,23%) Menos de una vez al mes (9,34%) Jamás (4,33%) Fuente: Equipo de Investigación y Evaluación de la ASTR, en colaboración el Equipo de Investigación de Metaanálisis de la Universidad Andrews, n = 51,507

«Si queremos ser como Cristo, tenemos que estar dispuestos a identificar y cuidar a los que están desprotegidos, heridos y sin defensor».

—David Williams, profesor e investigador adventista de la Universidad Harvard, durante una presentación a la Junta Directiva de la Iglesia Adventista el 12 de octubre. Williams disertó sobre cómo enfrentar la violencia doméstica y el abuso en el marco de la iniciativa «enditnow».

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Número de años que James Nix, quien fue director del Patrimonio White y hace poco se jubiló, sirvió a la Iglesia Adventista en diversas funciones. Nix recibió un Premio a la Trayectoria el 11 de octubre, coronando así sus veinte años al frente del Patrimonio White. En 1981 colaboró con el establecimiento de Adventist Historic Properties, Inc., que actualmente se denomina Ministerio de Herencia Adventista.

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Número de adventistas que aprobaron el examen nacional de médicos licenciados en Filipinas, administrado en marzo y septiembre por la Comisión de Regulación Profesional del país. Saw Samuel, presidente de la División de Asia Pacífico Sur con sede en las Filipinas, les recordó a los nuevos médicos el llamado especial que tienen como médicos misioneros.

Noticias breves

«En lo que respecta al tema del racismo y la actual demanda global de justicia racial, se espera más de los cristianos. Esto se debe a que se identifican con corazón de Dios, quien ama a todos».

—Ganoune Diop, director del Departamento de Asuntos Públicos y Libertad Religiosa, el 11 de octubre al hablar durante una sesión del Concilio Anual de la Junta Directiva de la Asociación General, que se enfocó en reconocer y combatir el racismo, tribalismo, etnocentrismo, casteísmo, clanismo, clasismo y cualquier ideología y práctica supremacistas en la sociedad y en la iglesia.

«Sentimos que estamos pagando una deuda debido a la ayuda que cada uno de nosotros ha recibido de Dios como “extranjeros y peregrinos” sobre la tierra. Es algo que nos impulsa a ayudar a otros, en especial a los vulnerables».

—Robert Mandache, presidente de la Asociación de Muntenia, Rumania, durante la apertura oficial del Centro Educativo «Esperanza para los inmigrantes» en Bucarest, el 7 de octubre. ADRA Rumania, y varias organizaciones de la Iglesia Adventista y donantes anónimos, contribuyeron para que el proyecto se hiciera realidad. El centro ofrece cursos de idiomas en rumano, inglés y árabe, además de clases de costura, música y cortes de cabello para hombres.

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Número de familias afectadas por la inundación en el distrito de Bakan, provincia de Pursat, Camboya. Las familias recibieron asistencia alimentaria de la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA), en cooperación con la Misión Adventista de Camboya y las autoridades locales. Más de 39 mil hogares se vieron afectados por la secuencia de tormentas tropicales que afectó al país entre el 6 y el 13 de octubre.

ADRA Camboya AdventistWorld.org Diciembre 2020

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Noticia en detalle

Hablantes de suajili ahora pueden leer Adventist World en su lengua materna

Ministerios de Adventist Review lanza nueva aplicación de canal de WhatsApp.

Marcos Paseggi, Adventist World

Un nuevo canal de WhatsApp permitirá que millones de miembros de iglesia y otros hablantes de suajili lean la revista Adventist World, y otros contenidos relacionados, en su lengua materna. El nuevo recurso, un servicio para África Oriental y Central y la diáspora africana, fue lanzado durante las reuniones de la Junta Directiva de la Iglesia Adventista el pasado 12 de octubre.

Los líderes de la iglesia enfatizaron que el nuevo producto destaca la importancia tradicional que ha disfrutado la revista como herramienta de evangelización en África, y abre un sinnúmero de posibilidades, dado que alcanzará a millones con el mensaje adventista.

«Adventist World ha sido una herramienta de evangelización en nuestra región –dijo Blasious Ruguri, presidente de la División de África Centro-Oriental–. Los miembros la aprecian mucho». Añadir una opción digital en suajili a la edición impresa en inglés puede reforzar aún más este uso para la evangelización.

sable de la publicación de Adventist World, dijo que en 2008, el entonces presidente de la Iglesia Adventista, Jan Paulsen, les presentó el desafío de imprimir y distribuir una edición en suajili en África Oriental. Por diversas razones, no fue posible en ese entonces.

Knott explicó la importancia estratégica de la iniciativa. «Los adventistas que hablan y leen suajili suman más de 2,3 millones de miembros, lo que representa alrededor del once por ciento del total», informó.

La pandemia del Covid-19 llevó a Ministerios de Adventist Review y otros a reimaginar cómo cumplir con la misión. «Tuvimos que cambiar de compañías impresoras cuando algunas cerraron temporariamente –contó Knott–. Pasamos algunas ediciones de ser impresas a ser digitales, lo que nos llevó a pensar en nuevas maneras de cumplir nuestra promesa de tener una edición de Adventist World en suajili».

UNA LARGA TRAVESÍA

La nueva oferta se basa en la aplicación popular de medios sociales WhatsApp, una plataforma gratuita

Bill Knott, director ejecutivo de Ministerios de Adventist Review y respon-

CÓMO FUNCIONA LA APLICACIÓN

Ministerios de Adventist Review 6

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de mensajería instantánea que permite que los usuarios envíen mensajes de texto y de voz, hagan llamadas de voz y video, y compartan imágenes, documentos y otros medios. Una vez registrado, el usuario recibe acceso a una traducción en suajili de los artículos de Adventist World y de noticias publicadas cada mes.

Knott dijo que se espera que el canal de WhatsApp que incluye Adventist World sea enviado a cien mil formadores de opinión, a quienes se instará entonces a que compartan la revista con sus contactos. «Hemos pasado de un enfoque en papel, impresión y logística para esta edición especial a una distribución de persona a persona mediante sus dispositivos, lo que se esparcirá viralmente a los adventistas y a los que aún no lo son», expresó.

IMPORTANCIA PARA LA MISIÓN

Los líderes de la iglesia enfatizaron que en muchos lugares de África, el suajili se está convirtiendo en la lingua franca, dado que un número creciente de personas se comunica en esa lengua. «Es un idioma magnifico –enfatizó Ted N. C. Wilson, presidente de la Iglesia Adventista–. Esta aplicación constituye una maravillosa oportunidad de dar un gran impulso al suajili para presentar la obra mundial adventista».

Ruguri dijo que confía en que Adventist World «seguirá siendo una herramienta de evangelización, un factor unificador» para la iglesia.

«En especial en esos lugares donde la gente piensa que la Iglesia Adventista es una iglesia pequeña, pero cuando abren la revista, se dan cuenta de que es una iglesia mundial», expresó.

Noticia en detalle

Líderes adventistas llaman a enfrentar la pandemia de salud mental

Varios departamentos de la iglesia se asocian para apoyar una iniciativa asistencial.

Marcos Paseggi, Adventist World

Ministerios Adventistas de Salud

«Cada año, en el mundo se suicidan unas 800 mil personas. Eso representa un suicidio cada cuarenta segundos», dijo Torben Bergland, psiquiatra y director asociado de Ministerios Adventistas de Salud, en un video promocional que un grupo de líderes adventistas está usando como llamado a actuar para enfrentar problemas de salud mental.

«Por cada suicidio, hay más de veinte que lo intentan. Por cada suicidio, hay más de mil que sufren de una enfermedad mental, un total de alrededor de mil millones de personas, mayormente por ansiedad y depresión. Las cifras de suicidios no son siquiera la punta del vasto iceberg del sufrimiento humano», dijo Bergland.

El video buscó presentar lo que los líderes de salud de la iglesia han denominado Iniciativa de Salud Mental Covid-19, y fue transmitido en vivo a cientos de miembros de la Junta Directiva de la Asociación General el 8 de octubre.

UNA SITUACIÓN DESESPERANTE

Peter Landless, director de Ministerios Adventistas de Salud, reconoció que las cuestiones de salud mental

han estado por años en el radar de los ministerios adventistas. La desesperante situación se ha visto exacerbada por las prolongadas cuarentenas impuestas en 2020 como resultado de la actual pandemia.

Para el psicólogo Julián Melgosa, director asociado de Educación Adventista, es una situación que ha producido un incremento dramático en los niveles de angustia y salud mental como resultado de las interrupciones a la vida diaria, el estrés y el aislamiento. «Un informe reciente del Centro de Control y Prevención de las Enfermedades de los Estados Unidos indicó que los trastornos de ansiedad en la población general se triplicaron, y que se cuadruplicaron los trastornos depresivos», expresó.

Katia Reinert, que es enfermera de familia y directora asociada de Ministerios de Salud, destacó que entre todos los grupos etarios, los jóvenes parecen ser los que más sufren. «En el grupo etario de 18 a 24, el 75 por ciento informó estar luchando con su salud mental o abuso de sustancias, y un 25 por ciento informó haber considerado el suicidio en los últimos treinta días. Es algo serio», expresó.

UN LLAMADO A LA ACCIÓN

Bergland dijo que dado el estado actual de las cosas, los miembros y líderes de la Iglesia Adventista necesitan actuar. «Tiene que ser cuestión de suma urgencia para cada líder, pastor, educador, padre y amigo –dijo Bergland–. Si queremos alcanzar a las personas con verdades presentes y eternas, tenemos que ministrar también a sus necesidades actuales. Es lo que hizo Jesús».

Elaine Oliver, directora asociada de Ministerios de Familia, mencionó que varios departamentos de la iglesia mundial se han asociado para enfrentar esta cuestión. «Salud, Jóvenes, Familia y Educación están trabajando juntos en esto», dijo.

Las acciones de la iniciativa incluyen compartir recursos recomendados sobre cómo apoyar la salud mental.

Los coordinadores también esperan llevar a cabo una campaña de medios sociales en varias plataformas. También dijeron que organizarán webinars, entrevistas y paneles en línea.

Bergland concluyó enfatizando que sociedades como estas pueden ayudar a salvar la brecha. «Si podemos unirnos y trabajar juntos, podremos marcar una diferencia», expresó.

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Enfoque regional División Sudasiática

1.138.508 Número de miembros de la División Sudasiática al 30 de junio de 2020.

«El ochenta por ciento de los que asisten a la iglesia en la sección de Jharkhand Occidental lo hacen en iglesias construidas por Maranatha.

Como resultado directo de los templos que Maranatha construyó en la región, esa zona es el primer campo misionero de sostén propio en la Unión Norte de la India».

29 de abril de 2019 Fecha en la que el Colegio Terciario Adventista del Noreste, ubicado en Khliehtyrshi, India, recibió su autorización oficial de parte del gobierno regional del estado de Meghalaya.

Después de recibir la autorización, la Junta Internacional de Educación de la Asociación General llevó a cabo una inspección antes del cierre por el COVID-19, y recomendó la acreditación de la institución. Esta se encuentra al pie del Himalaya y al sur de Bután, Birmania al este y Bangladés al sur y el resto de India del otro lado de un angosto puente terrestre hacia el oeste.

—Vinish Wilson, director de Maranatha en India.

«El Covid-19 ha traído muchos desafíos a nuestras reuniones en la iglesia para el estudio, los cultos y la comunión. Pero esos mismos desafíos han abierto ante nosotros una multitud de oportunidades: más estudio personal de la Palabra de Dios, cultos en línea, el fortalecimiento de la unión familiar y la oportunidad de compartir con nuestros vecinos.

La fe tiene el poder de transformar cada ‘no’ en un poderoso ‘sí’».

— Ezras Lakra, presidente de la División Sudasiática, en un encuentro de planificación y liderazgo con líderes de la iglesia.

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Número de idiomas hablados en el territorio a los que se tradujo la iniciativa de evangelismo digital «Profecías bíblicas develadas», de Radio Mundial Adventista. La serie se ofreció del 3 al 16 de octubre de 2020 en inglés, bengalí, boshpuri, hindi, malabar, marathi, mizo, santali, tamil y télugu.

Adventist World Digest, una selección trimestral con lo mejor de la revista, es publicada en la División Sudasiática en 14 idiomas.

2000 Número de iglesias construidas desde 1998 en el territorio de la División Sudasiática por parte de Maranatha Volunteers International, un ministerio adventista de apoyo con sede en los Estados Unidos.

El equipo administrativo del Colegio Adventista del Noreste con miembros del equipo de inspección de la Asociación Adventista de Acreditación en la primera fila.

Lisa Beardsley-Hardy 8

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Perspectiva

William Ackland Adventist Record, y Adventist World

fizkes / iStock / Getty Images Plus / Getty Images

El toque de Dios cuando más lo necesitamos En 2020, hemos recordado nuestra necesidad y deseo humanos innatos de ser tocados.

Si preguntara cuál es el sentido sobresaliente, ¿qué respuesta me darían?

El goloso diría que el mejor sentido es el del gusto. El ingeniero de sonido, o alguien como Graeme Clark, que inventó el implante coclear, diría que el oído es el sentido más importante.

Si le hiciéramos la misma pregunta a un oftalmólogo, sin duda diría que la vista es el más grande de todos los sentidos. Pero si se lo preguntáramos a Hellen Keller, que no podía ver ni escuchar, ¿qué habría dicho? Creo que habría dicho que el tacto es indispensable, primordial.

NUESTRO SENTIDO PREEMINENTE

Si lo pensamos reflexivamente, creo que tenemos que concordar con Helen Keller. Trate de imaginar qué pasaría si perdiera repentinamente todo sentido del tacto; no solo en las manos sino en todo su cuerpo.

Pronto estaría lleno de moretones.

Pero eso no es lo peor. No podría sentir el toque de una mano amada,

ni cuando otro lo besara, ni podría responder. No sabría cuánto masticar la comida, porque su lengua no sentiría nada. En el otro extremo, no podría saber cuándo usar sus órganos excretores. Eso sí que sería un problema, ¿no es así?

El sentido del tacto nos fue dado por nuestro Hacedor por razones tales como el placer, la seguridad, el consuelo y nuestras necesidades emocionales.

En el mundo del Covid-19 en el que estamos viviendo ya por un tiempo, se han reducido significativamente los contactos a los que estamos acostumbrados con nuestros seres queridos y amigos. Ya no nos damos la mano, abrazamos o besamos.

EL TOQUE DE DIOS

En la Biblia, se menciona mucho la acción de «tocar». Las descripciones que hacen los Evangelios del ministerio de Cristo revelan que el tacto ocupó un lugar significativo en su ministerio de sanar y resucitar a los muertos. No solo eso: imagine el gozo de los niñitos cuando Jesús los bendijo, colocó sus manos sobre ellos y les dio un cariñoso abrazo.

La primera advertencia contra el uso inapropiado del tacto la dio el mismo Dios, cuando advirtió a Adán y Eva que no comieran del árbol del conocimiento del bien y del mal, ni que lo tocaran, o morirían (Gén. 3:3). Mucho después, se le advirtió a Israel que no

tocara alimentos u otras cosas inmundas (véase Lev. 11-15). Dios también advirtió que no había que tocar con fines dañinos a sus ungidos y profetas (1 Crón. 16:22). En los días de Cristo, se produjo una gran demostración de fe cuando una mujer tocó el borde del manto de Jesús y fue inmediatamente sanada de su hemorragia.

Cuando Myra Brooks Welch escribió el bien conocido poema «El toque de la mano del Maestro», poco podría haberse imaginado cuán popular se tornaría esa obra, aun en nuestros días. El poema relata la historia de un viejo y desvencijado violín que está por ser vendido en una subasta a solo tres dólares. Pero entonces aparece un violinista y ejecuta el instrumento, después de lo cual es vendido por tres mil. El poema resulta llamativo porque el autor, mediante la figura del viejo violinista, dirige nuestra atención al Maestro de los maestros que, con su toque, transforma por completo nuestra vida.

William Ackland es jubilado y vive en Cooranbong, Nueva Gales del Sur, Australia.

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Enfoque

De obstáculos Feature

Cómo las iglesias están superando los desafíos del Covid-19

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oportunidades 10

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Fotografía: Jukan Tateisi

D S. JOSEPH KIDDER

urante la primera semana de marzo, yo (Willie) estaba enseñando Ministerio Pastoral en California. Aunque esa región que bordea el Océano Pacífico constituía el epicentro creciente de la que pronto sería declarada pandemia, ninguno de los veinte en ese pequeño salón de clases expresó alguna preocupación. Pero para fines de la segunda semana de marzo, las escuelas primarias, secundarias y terciarias, además de las iglesias, comenzaron a cerrar.

Bienvenido a la vida en el mundo del Covid-19, donde la norma está dada por la enseñanza, el aprendizaje, la Escuela Sabática, los cultos y las reuniones de oración a distancia. En efecto, tanto la vida académica como eclesiástica se vieron alteradas de manera drástica. Ante las primeras señales de diseminación viral seguimos reuniéndonos, aunque con la advertencia de no estar muy cerca de los demás. Nada de darse la mano, abrazarse o comer juntos.

Las semanas se transformaron en meses. Pronto se sintió el impacto en la adoración, la comunión y la misión. Los profesores de teología no habíamos preparado a los alumnos para esa eventualidad. Los pastores experimentados tampoco estaban listos para el tsunami que azotó las costas de nuestros templos.

A medida que el año inimaginable de 2020 se transforma en el 2021, estamos convencidos de que esta nueva normalidad tiene que ser más que reconsiderar la antigua. Implica, por el contrario, reimaginar una mejor normalidad. Y esta mejor normalidad tiene que impactar cinco áreas de la vida eclesiástica: el culto, la comunión, el ministerio, la misión/evangelismo y la oración. Según Hechos 2 y 4, estas conforman el centro mismo de la vida cristiana. En lugar de que el Covid-19 ponga fin a la vida de la iglesia que nos resulta conocida, sirve en realidad para un propósito mayor: llevarnos a la vida de la iglesia como Dios la ve.

EL CULTO DURANTE Y DESPUÉS DEL COVID-19

WILLIE EDWARD HUCKS II

Esta pandemia afectó a las personas de diversas maneras. Algunos de los que antes estaban indecisos se tornaron activos en el culto y el ministerio. Muchos se volvieron más espirituales y comenzaron a tomar a Dios muy en serio.

Pero una encuesta de Pew1 halló que al menos la tercera parte de los que antes asistían regularmente a la iglesia no se preocupan por seguir los cultos en línea.

Para los que ya tenían una afiliación tenue con la iglesia, la desconexión puede llegar a ser permanente.

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Podemos decir que en las iglesias adventistas sucede lo mismo. Las que han abierto sus puertas a cultos presenciales tienen una asistencia del treinta al sesenta por ciento menor que antes del Covid-19.

Está claro que la manera en que los feligreses reaccionan ante la pandemia depende en gran medida de sus experiencias pasadas y situación presente. Algunos experimentan una fe renovada, mientras que otros pasaron por una crisis de fe. Muchos se volvieron plenamente devotos seguidores de Cristo al ver que Dios obró en sus vidas y en las de sus seres queridos. Experimentaron sanaciones milagrosas, vieron el poder de Dios y anhelaron más de él. Otros, sin embargo, se alejaron de Dios por el desánimo, crisis de fe y la alienación de la familia de la iglesia.

Clasificamos a los que se alejaron de la iglesia en cuatro categorías. (1) Los débiles en la fe que se alejaron aún más de Dios. (2) Los que tienen miedo de asistir por razones de salud.

(3) Los chasqueados con Dios por las pérdidas durante la crisis: la muerte de un ser querido o las restricciones.

(4) Los que por conveniencia pueden haberse quedado en casa y dependen de Internet para su crecimiento espiritual.

Las iglesias, como siempre, necesitan tener un énfasis doble: discipular a los creyentes y evangelizar al mundo. Hoy día, eso es aún más importante. Si la iglesia quiere ser saludable y fiel a su misión, necesita hacer deliberadamente todo lo que pueda para recuperar a sus miembros y asimilar a la vida de la iglesia a los que buscan a Dios.

Al escribir este artículo, repasamos las publicaciones y buscamos historias inspiradoras de diversas partes del mundo sobre iglesias, pastores y miembros durante y después de la cuarentena. Descubrimos que del diez a quince por ciento de las iglesias hizo poco o nada durante la pandemia. Por otro lado, alrededor 12

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del diez al quince por ciento hizo muchas cosas, como visitar a sus miembros, estar presente en los medios sociales, dar estudios bíblicos y llevar a cabo reuniones de evangelización. El resto de las iglesias ofreció cultos y Escuelas Sabáticas por Zoom.

Obtuvimos muchas lecciones.

Cuanto más hicieron los miembros por suplir las necesidades de otros, más pudieron conservar un elevado porcentaje de sus miembros y amigos conectados a la iglesia. Asimismo, los diezmos y las ofrendas se incrementaron, incluso más que antes de la llegada de la pandemia. También más miembros se mostraron activos, en especial con la tecnología y los medios sociales. También aprendimos que no hay sustituto para el viejo sistema de visitas y para tocar vidas de manera personal y auténtica.

Aquí compartimos varias lecciones que las iglesias harían bien en tener presentes.2 NUEVAS OPORTUNIDADES: CULTOS MÚLTIPLES

Históricamente, la iglesia ha dedicado tres o cuatro horas los sábados por la mañana para el culto y los ministerios. La pandemia nos desafió a pensar creativamente para desarrollar otras opciones, nuevos formatos y nuevos lugares.

Los pastores nos dijeron que la pandemia creó un nuevo reavivamiento y despertar espiritual para muchos, y oportunidades de ser creativos e innovadores al comunicar el evangelio.

Muchas iglesias tuvieron una asistencia en línea que excedió por mucho la asistencia anterior a la crisis.

Una iglesia de Chicago que tenía unos ciento cincuenta miembros antes de esta crisis ahora tiene más de mil quinientos en línea. Muchos están llegando a ser serios buscadores de Dios, hallando esperanza y consuelo en él.

Hyveth Williams, profesora de homilética del Seminario Teológico Adventista y pastora de una iglesia

adventista cercana, nos dijo que desde que pasaron a usar Zoom y diversas plataformas digitales, su audiencia se incrementó marcadamente. La asistencia anterior a la pandemia no llegaba a cien personas.

Hoy día, unas veintidós mil siguen los cultos cada fin de semana desde casi cada continente. «Dios está haciendo grandes cosas –dice Williams–. Nos ha bendecido en abundancia».

Esto sucedió en muchas iglesias, más allá de su tamaño. Rodney Mills, secretario ejecutivo de la Asociación de Upper Columbia, en el estado de Washington, dijo: «Cuando los pastores confesaron que sus conocimientos tecnológicos eran muy limitados, muchos jóvenes aceptaron el desafío y crearon gran presencia de la iglesia en los diversos medios sociales. Muchos de esos jóvenes que estaban inactivos en sus iglesias ahora se encuentran activos».

Muchas iglesias comenzaron a transmitir en vivo. Pero eso es lo menos que puede hacer una iglesia.

Vemos iglesias presentes en todos los medios sociales todo el tiempo. Otras están ofreciendo cultos en varios horarios, (sábado por la mañana, la tarde y la noche) y también repitiendo el ciclo los domingos y otros días de la semana.

NUEVO FORMATO: ÉNFASIS EN DIOS

Después de hablar con muchos pastores, el consenso es que los servicios de adoración hoy tienen que ser simples, enfocados y más breves.

Es mejor ofrecer cultos simples; los cultos cortos y enfocados hacen que la audiencia desee más.

Kevin Smith nos dijo: «Solo tenemos un breve servicio de cantos, de cinco a siete minutos, una corta historia para los niños, y un sermón de veinticinco a treinta y cinco minutos».

Siguió diciendo: «Acorten el sermón y háganlo más específico. Si lo hacen, aumentarán las posibilidades de recordar sus puntos principales».

La adoración es por definición conectarse con Dios y experimentarlo de manera íntima y personal. La adoración tiene lugar cuando el corazón de Dios toca nuestro corazón. Por ello, ¿por qué incluir algo que no se enfoque en Dios y el evangelio?

Ante cada elemento del culto, pregúntese: «¿Se enfoca esto en Dios?»

De no ser así, quite ese elemento o colóquelo al comienzo del encuentro.

Partes como los anuncios, bienvenida y saludos pueden ocupar un lugar legítimo, pero deberían cumplirse de una manera que no interrumpa el énfasis en el Señor y el flujo lógico de la experiencia de adoración.

Transmita en vivo elementos del culto, creando así el beneficio adicional de un tiempo de mayor énfasis e impacto pasado juntos. La experiencia de adoración debería ser elevadora, positiva y llena de esperanza. «Si hay un momento en el que las personas necesitan esperanza, es hoy», dijo Moise Ratsara, pastor en Kalamazoo, Míchigan. Establecer una comisión de adoración puede ayudarlo a no desviarse del objetivo. Esa comisión debería incluir no solo a personas con talento musical sino también a quienes tienen conocimientos tecnológicos.

LUGARES NUEVOS, LUGARES DIFERENTES

Debido a las limitaciones de espacio, las iglesias están hallando maneras creativas de hacer que sus miembros regresen y de atraer a otros.

Algunos están convirtiendo sus estacionamientos para que los miembros asistan al culto desde sus autos; otros, en iglesias al aire libre que respetan las pautas de distanciamiento social.

Algunos están usando el patio de sus escuelas para reunirse, y aun otros ofrecen cultos múltiples dentro de sus templos para maximizar el número de personas que pueden asistir.

No hay límite para la creatividad si somos humildes y estamos dispuestos a ser guiados por Dios y a liberar el poder creativo de la congregación.

ORE MUCHO

La efectividad de un culto no proviene de la excelente manera en la que se lleva a cabo el servicio, o los talentos de los líderes de adoración, o la efectividad de los sermones.

Proviene de la convicción del Espíritu Santo. El poder del Espíritu Santo convence corazones y cambia vidas.

A partir de la investigación, la observación y entrevistas, descubrimos que las iglesias donde Dios es adorado y glorificado, y donde las personas son cambiadas y transformadas, son iglesias que oran mucho. Oran antes, durante y después de los cultos. Los pastores, los líderes y los miembros dedican tiempo antes de la Escuela Sabática y el culto divino a orar en sus asientos por todo el que viene a la iglesia, pidiéndole a Dios que se revele y haga algo maravilloso en medio de ellos. Si quiere mejorar sus cultos, ore mucho.

COMUNIÓN DURANTE EL COVID-19

En febrero de 2020, la iglesia a la que asisto (Willie) añadió un segundo culto, precedido por un interludio de treinta minutos dedicado a la comunión. Durante media hora, los que acababan de terminar la Escuela Sabática podían reunirse con los que estaban llegando al segundo turno y disfrutar de un refrigerio con jugos de frutas, bebidas calientes (hace frío en Míchigan en febrero), frutas y bocadillos dulces. A pesar de los atractivos bocadillos, lo más destacado de esos

La comunión entre hermanos en tiempos del Covid-19 Use correos electrónicos, mensajes de texto y boletines de anuncios con mayor frecuencia, para comunicar la vida de la iglesia, enfatizando que la congregación sigue siendo familia y que la iglesia siempre será más que un edificio. n Emplee cualquier oportunidad para llevar a cabo eventos. Celebre cumpleaños, aniversarios, graduaciones, etc. n Maximice el uso de Zoom y sus salas grupales de maneras creativas para interactuar socialmente. No limite el Zoom a la Escuela Sabática, el culto divino, la reunión de oración, la junta y las asambleas. n Haga de Zoom y otras plataformas interactivas su colega en koinonía, remplazando así el novel coronavirus con otra cosa novedosa que resulte atractiva tanto para los jóvenes como para los ancianos.

Ian Flores

n

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momentos en el comedor de la iglesia era la koinonia, la comunión, las oportunidades de conocerse más, en especial para los que traían visitas y amigos de la comunidad.

Después del 7 de marzo, todo se detuvo de manera inesperada y repentina. Lejos de ver esta nueva realidad como permanente, ahora tuvimos que reimaginar el concepto de koinonia (comunión). Al hacerlo, nos vimos forzados a examinar nuestra teología de la iglesia, en un esfuerzo por redefinir el significado de iglesia. Y no solo ha sido nuestra iglesia. Analizar el concepto de iglesia puede ser lo mejor que les suceda a las congregaciones, en mucho tiempo.

A corto plazo, las iglesias recurrieron a la tecnología de Zoom. Los pastores y otros descubrieron rápidamente la versatilidad que ofrece esta plataforma. Sus salas grupales permiten desde la participación entre dos personas hasta la interacción de grupos más grandes.

Sus limitaciones, sin embargo, también quedaron en evidencia. Los

participantes podían conservar el relativo anonimato desconectando el video. Antes de marzo de 2020, una persona podía evitar la comunión con otros tomando la decisión consciente de no asistir a eventos grupales, fueran cultos, reuniones de oración o actividades sociales. Después de marzo de 2020, los feligreses pueden tratar los eventos de la iglesia como una opción que eligen o no: ingresando y saliendo de la vida de la iglesia (sea propia o de otros), probando lo que quieren mientras minimizan los contactos visuales o auditivos. Pueden entrar en el mundo de otros participantes mientras ejercen la autonomía de determinar su propia exposición.

El Covid-19 ha posicionado a la iglesia de hoy para que innove en lo que respecta a crear un ambiente para la comunión, brindando avenidas únicas para la comunión cara a cara que afirma a la iglesia de Dios, o sea, su cuerpo de creyentes.

La iglesia está posicionada de manera única para ministrar a las personas

Cómo mejorar los cultos en tiempos del Covid-19

Luis Quintero

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como nunca antes. Estar en cuarentena durante meses creó un anhelo y un deseo de conectarse con otros. Los cristianos pueden ser instrumentos para aliviar la soledad y el aislamiento de muchos. La clase de Escuela Sabática a la que asisto (Joseph) pasó a transmitir en línea a comienzos de marzo. Pronto comenzaron a sumarse personas ajenas a nuestra iglesia. Nos encontraron en Internet. Sentían soledad y nuestro grupo pequeño llevó hasta ellos la presencia y el amor de Dios.

Los primeros cristianos enfatizaron claramente la importancia de la comunión (Hechos 2:42).

En el Nuevo Testamento, el concepto de koinonia expresa la idea de estar juntos para beneficio mutuo. «Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras, no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca» (Heb. 10:24, 25).

Muchas personas nos han dicho en los últimos meses que se dan cuenta de que aunque las puertas de la

n Cada experiencia de adoración debería ser positiva. Las personas tienen que salir sintiendo esperanza e inspiración. n Eduque deliberadamente a su congregación respecto de cómo adorar y por qué hacerlo. n Que la historia de los niños dure solo cinco minutos. Asegúrese de que el que la cuenta tenga entusiasmo y pueda conectarse bien con los niños. n Pida la opinión periódica de los miembros y del equipo de liderazgo. Esto ayudará a definir las áreas de servicio que son beneficiosas y aquellas en las que aún es necesario trabajar. n Practique todos los elementos del culto, no solo la música. Elena White escribió: «[Los líderes de adoración] debieran dedicar tiempo a la práctica, a fin de emplear este talento para la gloria de Dios». Es mediante la práctica deliberada que podemos perfeccionar los talentos que Dios nos ha dado con el propósito de darle la gloria.

iglesia han estado cerradas, eso no significa que la iglesia ha cerrado.

Sabían intelectualmente que la iglesia no era un edificio, pero ahora saben en la práctica que la iglesia es una comunidad comprometida con la adoración y la comunión. La creatividad los acerca mutuamente mientras anticipan un futuro mejor.

Las iglesias a las que asistimos representan a otras repartidas en todo el mundo que han participado de maneras únicas para celebrar la comunión bíblica. En nuestros boletines, recordamos cumpleaños y aniversarios de casados. Sin embargo, durante la pandemia, muchas iglesias no tienen boletines. La tecnología salva la brecha, dado que las iglesias usan alertas de texto y mensajes de voz para compartir los últimos anuncios.

Lo mismo sucede durante la época de graduación. Los jóvenes se emocionan al saber que el pastor y los demás miembros los recuerdan en esos momentos especiales.

Muchas iglesias han descubierto nuevas maneras de expresar el concepto bíblico de comunión, la koinonia: los miembros de iglesia se reúnen para hacer una caravana de vehículos frente a la casa del que celebra un cumpleaños, termina la escuela secundaria, o marcar presencia frente a los que dependen del culto o la comida de los sábados para aliviar su soledad. En algunas ocasiones, hasta hemos realizado fiestas en el estacionamiento de la iglesia, en las que se respetó el distanciamiento social e individuos designados recolectaron presentes de los que pasaban, colocándolos en mesas preparadas para la ocasión.

Mi hija (Willie) y su esposo, que se casaron en mayo de 2020, se vieron sorprendidos con una fiesta sorpresa en el estacionamiento, que incluyó bocinazos de los autos mientras salían de la iglesia.

Muchos eran miembros de una

iglesia a la que habíamos asistido hacía algunos años.

El novel coronavirus ha logrado para muchos lo que parecía imposible. Nos ha mostrado la verdadera definición de iglesia, de comunión.

La comunión no necesita tener lugar exclusivamente en un templo o en el hogar de otra persona. La comunión es un estilo de vida que afirma a cada individuo y fortalece al cuerpo que participa de ella, creando recuerdos y el acercamiento mutuo de los santos.

COMENZAR OTRA VEZ

El temor presente en la mente de muchos es que la adoración y la comunión se detuvieran por completo por el Covid-19. Estos ejemplos prueban exactamente lo opuesto, dado que cada desafío brinda oportunidades de repasar qué camino adoptar en la vida de la iglesia. No solo que los pastores y otros líderes han descubierto maneras nóveles de reinventar cómo ofrecer la Escuela Sabática, la reunión de oración y los programas de jóvenes, sino que han sido testigos de un crecimiento en la asistencia en niveles que jamás imaginaban, expandiendo así el alcance de sus ministerios.

Ojalá que pueda decirse lo mismo de su iglesia. www.pewforum.org/2020/08/07/attending-and-watching-religious-services-in-the-age-of-the-coronavirus/ Consultado el 8 de septiembre de 2020.

2 No nos referimos a lo que pueden hacer las iglesias para incrementar la seguridad de sus miembros y visitas. Esta información está disponible y debe adaptarse a las pautas de cada región o país.

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S. Joseph Kidder, D.Min., es profesor de Teología Pastoral y Discipulado en el Seminario Teológico Adventista de la Universidad Andrews.

Willie Edward Hucks II, D.Min., es profesor asociado de Teología Pastoral y Homilética, y director del Departamento de Ministerio Cristiano en el Seminario Teológico Adventista.

Fotografía: Pichsakul Promrungsee / iStock / Getty Images Plus / Getty Images

¿Qué se necesita?

El ministerio efectivo post-Covid-19 no necesariamente requiere equipos de alta tecnología para alcanzar a los miembros.

A continuación se presentan algunas sugerencias para conectarse digitalmente con los miembros durante una pandemia sin gastar mucho: n Iglesias de todo el mundo han usado teléfonos celulares para transmitir cultos, conciertos, bodas y funerales, entre otros.

Es relativamente fácil organizar una transmisión en vivo en YouTube o Facebook. n Pocas iglesias cuentan con un presupuesto para costosas cámaras HD o 4K, pero cada vez hay mayor disponibilidad de alternativas de bajo costo y excelente calidad que van más allá de la cámara de un teléfono celular. n Invite a los adolescentes y jóvenes para que ayuden a establecer una estrategia viable de comunicación para su iglesia en su contexto particular. Esto también los ayudará a encontrar un papel vital en su congregación. n Establezca grupos de chat en aplicaciones gratuitas de medios sociales, como por ejemplo Google Hangouts, WhatsApp, Facebook, etc. Muchos miembros ya están familiarizados con estas herramientas. n No olvide a los miembros que no tienen teléfono celular, computadora o tableta.

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Dios tendrá un pueblo Características del movimiento del fin

Este artículo es un resumen de un sermón presentado en el Concilio Anual el 10 de octubre de 2020.

Se han conservado elementos de la presentación oral. El sermón completo está disponible en https://www. pastortedwilson.org/news/god-willhave-a-people/.—Los editores.

A

l fin del tiempo Dios tendrá un pueblo, un pueblo que permanecerá fiel a la verdad pura, a un mensaje bíblico pleno, a la misión que les encomendó el mismo Dios. Se apoyarán en Cristo para todas sus necesidades. Aceptarán plenamente la justicia de Cristo y su poder en ellos para desarrollar el carácter con su ayuda, en espera de su segunda venida.

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Elena White escribió: «“Y cuando el fruto está maduro, en seguida se mete la hoz, porque la siega ha llegado” (Mar. 4:29). Cristo espera con un deseo anhelante la manifestación de sí mismo en su iglesia. Cuando el carácter de Cristo sea perfectamente reproducido en su pueblo, entonces vendrá él para reclamarlos como suyos. Todo cristiano tiene la oportunidad no solo de esperar, sino de apresurar la venida de nuestro Señor Jesucristo. Si todos los que profesan el nombre de Cristo llevaran fruto para su gloria, cuán prontamente se sembraría en todo el mundo la semilla del Evangelio.

Rápidamente maduraría la gran cosecha final y Cristo vendría para recoger el precioso grano».1

En los últimos días, el pueblo de Dios renunciará a formulaciones egoístas y humanas. Serán humildes y leales a Dios, sin exhibir un espíritu de rebelión o egocentrismo, pero sometiéndose al amor de Cristo. Este pueblo suplicará por la caída de la lluvia tardía del Espíritu Santo. Ensalzarán la Palabra de Dios y creerán cada palabra que procede de la boca de Dios. Proclamarán los mensajes de los tres ángeles de Apocalipsis 14 y del cuarto ángel de Apocalipsis 18, llamando a las personas para que salgan de la confusión y regresen a la verdadera adoración a Dios. Reconocerán el sábado como sello especial de Dios en oposición a la marca de la bestia, que se manifestará en el futuro como aceptación del domingo –o de cualquier otro día– como el día de adoración defendido por la bestia.

Este pueblo no se dejará llevar por las desviaciones culturales de la verdad bíblica. No se desalentará o distraerá por lo considerado políticamente correcto en los ámbitos social, cultural, religioso, económico o político. Estarán alineados plenamente con los planes bíblicos de Dios, sus revelaciones proféticas, su poder de salvación, su Santa Palabra, las instrucciones del Espíritu de Profecía, su amor predominante, sus mandamientos y sus planes para la iglesia.

El pueblo de Dios predicará, vivirá y testificará a otros de su amor eterno, su gracia, su justicia, su salvación, los mensajes de los tres ángeles y el pronto regreso de Cristo.

Dios tendrá un pueblo de quién dirá: «“¡Tú eres mi pueblo!”, y él dirá: “¡Dios mío!”» (Ose. 2:23).

Dios tendrá un pueblo de personas que lo amarán tanto que se conectarán con él cada día. No importa lo que les suceda, son resilientes y hacen del Señor su refugio y fortaleza. Se mantienen fieles mediante el poder del Espíritu Santo ante las agencias y fuerzas del mal,

Fotografía: Nicholas Jeffries

que jamás los conquistarán. Dios se encuentra del lado de su pueblo fiel.

A lo largo de las edades, Dios ha tenido un pueblo. Hebreos 11 presenta a algunas de las personas maravillosamente fieles a Dios, quienes vencieron tremendos desafíos por la fe que reflejará el pueblo de Dios hacia el fin del tiempo.

TIEMPOS DIFÍCILES

Durante los últimos ocho meses, este mundo ha caído en la confusión y el desorden. La pandemia del Covid-19 ha traído destrucción física y gran confusión. Muchos han muerto. El mundo se ha visto afectado drásticamente por desaceleración económica, lo que produjo inestabilidad financiera y pérdida del empleo. Las relaciones raciales y humanas han puesto presión adicional sobre la sociedad. Han heho que a la gente le resulte más difícil mostrar respeto y dignidad humana a los hijos de Dios, no importa de dónde sean, o su trasfondo educacional o socioeconómico. Las calamidades naturales han creado caos. El diablo ha atacado el matrimonio bíblico según lo expresan las Escrituras. Sus ataques contra el sábado se volverán mucho más fuertes. La libertad religiosa y la libertad de conciencia se verán amenazadas en todo el planeta.

Este es ahora el mundo en el que vivimos: un mundo en el que Dios tiene un pueblo que llevará a otros hacia el Único que puede dar estabilidad, comprensión, esperanza y un cambio completo de corazón.

Nuestras acciones mutuas serán una testificación dirigida por el cielo que mostrará que realmente somos el pueblo de Dios.

Las profecías de Daniel, Mateo y Apocalipsis se están cumpliendo en su momento preciso. Hermanos, preparémonos para el futuro colocándonos por completo en manos de Dios, siguiendo su Palabra así como está escrita, leyendo y siendo instruidos

mediante el Espíritu de Profecía, por oración sincera y súplicas a Dios, y al permitir que el Espíritu Santo guíe nuestras palabras y acciones.

Al ver lo que sucede, vemos también que miembros fieles de la iglesia podrían verse tentados a dirigirse en diversas direcciones dictadas por la sociedad. Algunos podrían alinearse con enfoques escépticos de la Biblia y el Espíritu de Profecía, prefiriendo enfocarse en la corrección filosófica, académica y política, centrada en ideas humanistas. Algunos son tentados a alinearse con estructuras terrenales, pensando que resolverán los problemas culturales, sociales, económicos y educacionales del mundo.

Están los que desean descentralizar la iglesia y enfocarse tan solo en la congregación local, olvidando que este es un movimiento adventista mundial.

EL PUEBLO DE DIOS

El diablo tienta a las personas en muchas direcciones. Dios, sin embargo, tendrá personas que reconocerán la gran necesidad del poder transformador de Dios en sus vidas; que caerán sobre sus rodillas y se humillarán ante el Señor y su Palabra; que aceptarán el mensaje de esperanza para los últimos días y la advertencia que se les pide que proclamen; que mostrarán dignidad y respeto a todos, reflejando su amor por el Maestro y su obra transformadora en sus vidas mientras se entregan al reavivamiento y la reforma.

Este es el pueblo de Dios en el tiempo del fin, descrito en estas palabras: «Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer y se fue a hacer la guerra contra el resto de la descendencia de ella, contra los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo» (Apoc. 12:17). Se nos dice asimismo: «El testimonio de Jesús es el espíritu de profecía» (Apoc. 19:10). Dios ha bendecido a su pueblo de los últimos días con enseñanzas invalorables

Este es ahora el mundo en el que vivimos: un mundo en el que Dios tiene un pueblo que llevará a otros hacia el Único que puede dar estabilidad, comprensión, esperanza y un cambio completo de corazón. en los escritos de Elena White. Ella escribió: «En un sentido muy especial, los adventistas del séptimo día han sido colocados en el mundo como centinelas y transmisores de luz. A ellos ha sido confiada la tarea de dirigir la última amonestación a un mundo que perece. La Palabra de Dios proyecta sobre ellos una luz maravillosa. Una obra de la mayor importancia les ha sido confiada: proclamar los mensajes del primero, segundo y tercer ángeles.

Ninguna otra obra puede ser comparada con esta y nada debe desviar nuestra atención de ella».2 El Señor nos está llamando para que seamos parte de su pueblo que, en los días finales, no importa qué nos arroje el diablo –pandemia, tensiones, inestabilidad, catástrofes naturales, apostasía, guerras, persecución– será el pueblo de Dios que se mantendrá de parte de él al apoyarse plenamente en Jesús.

Elena White, Palabras de vida del gran Maestro (Mountain View, Cal.: Pacific Press Publ. Assn., 1971), p. 47.

2 Elena White, Testimonios para la iglesia (Doral, Fl.: Asoc. Publ.

Interamericana, 1998), t. 9, p. 17.

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Ted N. C. Wilson es presidente de la Iglesia Adventista. Se pueden consultar artículos y comentarios adicionales de la presidencia en Twitter: @pastortedwilson y en Facebook: @Pastor Ted Wilson.

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T Informe especial

Cómo el Covid-19 ha afectado la educación adventista Desafíos y oportunidades

odos hemos atravesado, en un momento u otro, por una crisis que alcanza a un país o grupo de países, debido a una catástrofe natural o disturbio sociopolítico. A veces somos testigos de cómo todo un continente sufre cambios significativos que afectan por un tiempo las economías y los estilos de vida. Los efectos catastróficos de la pandemia del Covid-19, sin embargo, son únicos por sus consecuencias mundiales en casi todos los aspectos de la vida. Eso incluye a la educación adventista.

El sistema mundial de educación adventista brinda servicios a cerca de dos millones de estudiantes y emplea a más de cien mil docentes, ofreciendo enseñanza cristiana desde el preescolar hasta los niveles de posgrado. Las instituciones educativas adventistas enfrentaron muchos desafíos, pero también encontraron muchas oportunidades en medio de esta pandemia. Aquí exploramos algunos de ellos.

DESAFÍOS

Entre marzo y abril de 2020, según cuándo golpeó el Covid-19 a una determinada región, la educación adventista entró en cuarentena. Esto incluyó el cierre de escuelas, colegios y universidades, y la transición de una modalidad presencial a la enseñanza en línea. Todas las instituciones enfrentaron los rigores de cambios inesperados e inéditos durante el año lectivo en ambos hemisferios. Muchas instituciones de educación superior se las arreglaron bien, porque ya habían estado ofreciendo algún tipo de educación a distancia. Otras se encontraron frente a una infraestructura insuficiente y la preparación limitada de sus profesores y estudiantes. En su mayor parte, las escuelas primarias y secundarias no estaban preparadas para la nueva modalidad y además enfrentaron problemas financieros.

Muchas instituciones adventistas de los países europeos continuaron recibiendo fondos del gobierno (por lo general para pagar los salarios docentes). En otros lugares, como en Nueva Zelandia, los estudiantes recibieron computadoras portátiles y iPads, que serán propiedad de la institución después de la pandemia. En regiones menos acaudaladas, las escuelas tuvieron que suspender la enseñanza. Algunos procuraron usar materiales en papel que los docentes distribuyeron en los hogares de los estudiantes y luego recogieron para evaluarlos. Desafortunadamente, para el tercer mes de la pandemia, algunas escuelas pequeñas y rurales tuvieron que cerrar.

Estos son acaso los desafíos más comunes que enfrenta la educación adventista: ■ Implementar la enseñanza en línea cuando los docentes carecían de experiencia en esta modalidad.

■ Hallar alternativas de evaluación válidas y confiables que aplicar a la distancia.

■ Enseñar a los estudiantes que carecían de dispositivos o conexiones a Internet.

■ Sufrir fuertes pérdidas financieras debido a los menores ingresos de padres que perdieron el trabajo y no podían pagar los aranceles escolares.

Fotografía: August de Richelieu

■ Cerrar residencias estudiantiles y enviar a los estudiantes a sus casas, con devoluciones de pagos por pensión y alojamiento.

■ Perder subvenciones de la iglesia debido a la falta de contribuciones de los miembros.

■ Reducir los salarios docentes y de personal auxiliar a la mitad, o reducir personal dándoles licencias o despidiéndolos.

■ Ser incapaces de planificar las finanzas, debido a una reducción anticipada pero desconocida de las matriculaciones.

■ Tratar de preservar la vida espiritual en línea (todo lo posible), a pesar de interrumpir viajes misioneros, cultos estudiantiles o actividades misioneras en la comunidad.

Las instituciones educativas adventistas de todas partes han enfrentado desafíos significativos, pero para algunas, la situación es grave. Pensemos, por ejemplo, en lo que sucede en la División de África Centro-Oriental donde Juvenal Balisasa, el director del Departamento de Educación estima que el treinta por ciento de las escuelas primarias y secundarias cerrarán definitivamente si las cosas no cambian en los próximos meses. Esto significaría perder cuatrocientas instituciones en esa parte del mundo. En menor medida, la situación es similar en otras regiones.

OPORTUNIDADES

Aparte de sus luchas, las instituciones adventistas están desarrollando nuevas fortalezas. Prácticamente cada zona del mundo aplicó una creatividad y una adaptabilidad sin precedentes de parte de los docentes, con colaboración de padres y estudiantes, para lograr ofrecer una educación de buena calidad a pesar de las circunstancias.

Después de ser testigos de los esfuerzos de las escuelas, muchos padres ahora sienten mayor aprecio por la educación adventista. El padre de un alumno que asiste a una escuela de la División del Pacífico Sur escribió este mensaje a los docentes: «Los aprecio mucho. Gracias por adaptar

los materiales y las plataformas a la enseñanza a distancia. Ustedes son más que docentes; veo que les gusta ser mentores de los jóvenes».

Varias regiones reportaron que se sumaron más estudiantes a la educación adventista porque, por contraste, era una mejor opción durante la pandemia. Las expectativas de los alumnos son mayores debido a la mejor calidad que tienen las escuelas a los ojos del público. Este ha sido el caso en instituciones de Centroamérica, Australia, Samoa, Tonga y África Centro-Oriental.

Estos momentos adversos han producido mayor cercanía mutua, cercanía con Dios y un reavivamiento y reforma generales. Según informes del África, la mayoría de las familias han disfrutado de más tiempo juntos, más lectura de la Biblia y más oración. En Asia y las Américas (del Norte, Central y del Sur) se ha observado un incremento de voluntarios en varios servicios misioneros y comunitarios. En ellos, los estudiantes han distribuido alimentos y han brindado educación para la salud, en línea, en sus respectivas comunidades.

Karla León, docente de una escuela adventista en Costa Rica, diseñó clases de Biblia con música por medio de Zoom. La madre de una niñita se interesó y comenzó a participar en las actividades bíblicas. Poco después, ella y su familia aceptaron la doctrina del sábado y ahora lo están guardando en forma regular.

La enseñanza en línea se ha convertido en el modo predominante donde está disponible. Las instituciones avanzadas en tecnología suelen colaborar compartiendo recursos con otras que tienen menos. Asimismo, los administradores han analizado su actitud hacia la enseñanza en línea y la comunicación digital y es probable que en el futuro cercano promuevan e inviertan aún más en esta área. Ciertos países ya se han fijado blancos para incorporar más educación híbrida una vez que termine la pandemia. Brasil ha decidido que sus instituciones ofrezcan un mínimo de veinte por ciento de enseñanza en línea.

En muchos casos, las instituciones adventistas han hecho esfuerzos extraordinarios para cumplir con su misión, y esos esfuerzos han sido reconocidos públicamente. Por ejemplo, una escuela en Corea del Sur fue reconocida como la mejor escuela de aprendizaje en línea de la provincia de Gangwon. Los estudiantes de la Universidad Norteña del Caribe ganaron un concurso de las Naciones Unidas, titulado «Reducción de las inequidades en educación», que consistió en educar a los jóvenes y al público sobre el tema. Su propuesta fue de llevarlo a cabo mediante una educación cristocéntrica.

Aun la carga financiera causada por la pandemia ha motivado a las instituciones para que desarrollen ideas y prácticas innovadoras. Las instituciones de la División de África Meridional y Océano Índico y de la División Sudamericana han estado recolectando fondos gracias a la fabricación de máscaras, desinfectantes y otros artículos necesarios en esta época. En diversas partes, muchos están descubriendo que algunas reuniones cara a cara pueden llevarse a cabo fácilmente con resultados similares mediante videoconferencias, ahorrando así tiempo, dinero y energía.

No podemos saber si el crecimiento que resultará de la experiencia superará las pérdidas, pero podemos aferrarnos a las muchas promesas de Dios, como la que dice: «El Señor te protegerá; de todo mal protegerá tu vida. El Señor te cuidará en el hogar y en el camino, desde ahora y para siempre» (Sal. 121:7, 8, NVI).

Oren por favor por las instituciones educativas adventistas en todo el mundo, en especial en zonas donde más ha golpeado la pandemia. Podemos apoyar al personal educativo y a los estudiantes con nuestras palabras y brindar apoyo moral y financiero según nuestras capacidades.

Julián Melgosa nació en España, y actualmente es director asociado del Departamento de Educación de la Asociación General.

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Voces jóvenes

Números en rojo E

n la actualidad, todo lo que vemos son números. La pantalla del televisor y nuestros dispositivos electrónicos nos brindan muchas estadísticas. El 2020 fue un año de contagios, cuarentenas, desilusiones, sueños trastocados, algunos pensamientos de esperanza, incertidumbre y miedo. Es difícil no preguntarnos qué sucederá más adelante.

Cuando les pregunté a mis alumnos adolescentes por sus temores, me hablaron de sus preocupaciones respecto del futuro, sus decisiones ante esas incertidumbres, y cómo los afectan esas decisiones. No respondieron a una encuesta formal; fueron tan solo expresiones espontáneas de sus corazones atribulados cuando les pregunté por sus pedidos de oración para apuntarlos en mi libreta.

Parece que todo giraba en torno al crecimiento o la disminución de unas cifras.

En mi casa, los números también fueron importantes. Los papeles con registros de la temperatura, los niveles de saturación de oxígeno y el aumento de los latidos se expresan en cifras. En mi caso, la pandemia me tocó de cerca; tan de cerca que llegó a mi casa.

Los periódicos informan la tasa de inflación en números rojos. Las deudas contraídas por una gran parte de la población mundial también se reflejan en números rojos. ¿Podemos realmente entender algo basados en esos números? ¿Podemos planificar realmente lo que sucederá a continuación? ¿Deberíamos limitarnos a esperar lo mejor?

Se nos dice que sigamos avanzando; se nos ordena que sigamos avanzando.

Se nos faculta para que actuemos, y se nos promete una esperanza. La Biblia que poseo desde que cumplí nueve años tiene las palabras de Jesús en letras rojas.

En la Escuela Sabática, cuando era niña, subrayé los versículos 33 y 34 de Mateo 6 en rojo porque tenía que memorizarlos: «Buscad primeramente el reino de

Dos números que importan: Su reino está en primer lugar, y un día a la vez.

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Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Así que no os angustiéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su propia preocupación.

Basta a cada día su propio mal».

A mí me parece que esa es una respuesta. Dos respuestas, en realidad. Dos números que importan: Su reino está en primer lugar, y un día a la vez.

Recuerdo haber acompañado a una amiga a una reunión de Alcohólicos Anónimos donde cada participante repetía una consigna más antigua que cualquier organización: «Un día a la vez».

Recuerdo entonar cánticos sobre esos dos números en la iglesia. Son conceptos inculcados hace mucho y, sin embargo, un tanto olvidados.

No importa cuántos seguidores tengamos en nuestros canales de medios sociales o cuán bien los hayamos usado para compartir el evangelio con otros.

Tampoco importa cuántas publicaciones se hayan descargado o cuántas personas se sumen a la transmisión de la reunión de evangelización. Al final del día y del año, somos responsables de cómo respondimos personalmente a esos dos números: su reino está en primer lugar, y tenemos que vivir un día a la vez.

Estamos agradecidos por los progresos de la misión y continuamos haciendo lo mejor que podemos para alcanzar a tantos como sea posible con el evangelio. Hemos visto milagros en medio de terribles circunstancias. Sabemos que lo mejor aún está por venir.

Pero no tenemos todas las respuestas y tendremos que continuar haciendo ajustes sobre la marcha. En estos momentos, es bueno saber que podemos conectarnos con nuestro Padre celestial todos los días; que podemos confiar y aferrarnos a él en medio de la incertidumbre… a pesar de todos los números en rojo. Después de todo, el pintó la seguridad de su promesa en rojo carmesí sobre la cruz. Lo que sigue ahora es el cumplimiento de sus promesas.

Carolina Ramos estudia traducción, enseñanza de inglés y educación musical en la Universidad Adventista del Plata en Argentina.

Fe en acción

¿La Gran Comisión o la gran sugerencia? ¿Qué muestran nuestras acciones?

E

l libro de los Hechos es más que una lectura fascinante. En efecto, contiene el modelo de una iglesia pujante y exitosa. Los miembros de la Iglesia Primitiva estaban llenos del Espíritu Santo y encendidos por el Señor. ¿Su deseo? Cumplir la Gran Comisión. Sabían que la Gran Comisión era exactamente eso: una comisión. No era por cierto la Gran Sugerencia.

Desde entonces han pasado unos dos mil años, cuando miles eran añadidos diariamente a la iglesia. En el presente no siempre se dan los mismos resultados. Entonces, ¿a qué se debe ese impresionante éxito temprano?

Era la conducta de la Iglesia Primitiva, motivada por la presencia del Espíritu Santo, lo que animó a incontables personas a comprometerse con Cristo. El ejemplo de los seguidores del Camino llevó a que otros buscaran tanto la sanación física como espiritual en nombre de Cristo.

UNA PREGUNTA FUNDAMENTAL

Como iglesia moderna, ¿qué ejemplo estamos dando? ¿Resulta nuestra relación cercana con Jesús en conductas que alientan a otros a unirse a la iglesia? ¿Hace nuestra vida que los demás se sientan atraídos a Cristo, y los persuade de buscar la sanación en su nombre? De lo contrario, ¿qué podemos hacer para reavivar las brasas menguantes de ese primer amor y testificar con efectividad a los que nos observan?

Las Escrituras ofrecen varios principios que, de incorporarse, transformarán a la iglesia desde adentro.

Haga lo que dice. Todos hemos escuchado la frase: «No quiero ir a la iglesia porque está llena de hipócritas». Desafortunadamente, esas personas no quedarán muy impresionadas si les recordamos que aún hay lugar para uno más. Aunque no podemos esperar perfección de nadie, podemos esforzarnos por practicar deliberadamente lo que predicamos (véase Rom. 2:21-24). Así como nuestra testificación positiva puede animar a otros a decidirse por Cristo, también podemos desanimar fácilmente a otros a unirse a la iglesia cuando descuidamos que «el amor sea sin fingimiento» (Rom. 12:9).

Satisfaga las necesidades. En un mundo donde abunda la pobreza y la necesidad, puede resultar tentador seguir en los pasos del sacerdote y el levita en la parábola del buen samaritano (Luc. 10:25-37) y mirar para otro lado. Pero las Escrituras nos exhortan a que seamos vigilantes y satisfagamos necesidades (véase Sant. 2:14-16). ¿Cómo se manifiesta la fe

Fotografía: kuarmungadd / iStock / Getty Images Plus / Getty Images

por medio de las obras? ¿Somos rápidos para notar a la madre sola con tres hijos que se sienta cada sábado en el último banco? ¿Le ofrecemos una caja de pañales o alguna cesta con alimentos? ¿Y qué de ese vecino insoportable al que se le rompió el automóvil? ¿Nos ofrecemos para llevarlo al trabajo? A nuestro alrededor abundan las necesidades; algunas son más imperiosas que otras. ¿Qué podemos hacer para satisfacerlas y atraer a otros hacia una comunión con Cristo?

Cumpla el propósito del cuerpo de Cristo. La iglesia comprende a un grupo diverso de individuos denominado el cuerpo de Cristo (1 Cor. 12:27). Por ello, si somos el cuerpo de Cristo, entonces somos sus manos y sus pies. ¿Cómo usó Cristo su cuerpo terrenal para el progreso del reino de Dios? Vio a los que el mundo pasaba por alto, rechazaba o ignoraba, y les ministró. Como iglesia, tenemos el privilegio de ministrar a los demás de la misma manera.

SEAMOS COMO JESÚS

Si instituimos intencionalmente estos principios guiadores y llegamos a ser un faro de esperanza para los demás, imagine cuán atractivo resultará eso para el mundo. ¡Es mejor que estemos preparados para la cosecha de bendiciones!

Rachael C. Duncan es miembro de la iglesia adventista Stonehill en Pflugerville, Texas, Estados Unidos.

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Descubramos el Espíritu de Profecía

La konflikto de la epokoj La obra de toda una vida

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dwin de Kock conoció la Iglesia Adventista en Sudáfrica a la tierna edad de cinco años, cuando su madre descubrió la verdad del sábado al leer los Diez Mandamientos. Años después se graduó de teología en el Colegio Terciario Helderberg, y luego obtuvo una licencia de maestro de pronunciación, títulos de grado y maestría en idiomas, y un título en educación. Durante más de cuarenta años, prestó servicios en escuelas secundarias y terciarias y en universidades tanto dentro como fuera de la organización adventista. Trabajó en Sudáfrica, Corea y los Estados Unidos, país donde junto con su esposa adquirieron la ciudadanía en 2000.

Mientras estudiaba en la Universidad de Stellenbosch en Sudáfrica, de Kock conoció a Nico van der Merwe, que lo introdujo al esperanto, un idioma inventado por Ludwik Lejzer Zamenhof, un judío polaco políglota.

Zamenhof publicó un pequeño libro en 1887 donde presentaba la gramática, el vocabulario básico, ejercicios y varios poemas que había escrito en esperanto. Este es un idioma construido. Su vocabulario

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fue reunido de elementos comunes al inglés, italiano, español, portugués y francés, a los que les sumó el griego clásico y el latín. Todos esos elementos son combinados en una gramática que, según de Kock, es una obra maestra de simpleza y flexibilidad.

Mediante el esperanto, dice de Kock, «Zamenhof quería permitir que todas las personas del planeta pudieran comunicarse con todos. Jamás procuró suplantar a un idioma existente». La idea era que si las personas aprendían su lengua materna más esperanto, eso resolvería los problemas de comunicación en el mundo y promovería la unidad internacional.

Cuando van der Merwe le prestó a de Kock una Biblia en esperanto, este último quedó intrigado por la lengua, en especial con los escritos de alta calidad que producían los que hablaban esperanto. Se esforzó por alcanzar fluidez en este raro idioma, comprendido por unos dos millones de personas.

De Kock escribió su primer poema en esperanto cinco meses después de aprenderlo. Después de comunicarse con escritores de otras partes del mundo, su poesía pronto fue incluida en revistas y libros. Esto llevó a la obra de su vida: una obra épica titulada La konflikto de la epokoj (El conflicto de los siglos).

LA LITERATURA CLÁSICA

Una épica es un poema ambicioso del tamaño de un libro, a veces con cientos de páginas, sobre un tema de gran importancia. A menudo, subyacente al tema se encuentra la cosmovisión de su escritor, aun de la nación o grupo especial al cual pertenece. Épicas famosas son La ilíada y La odisea atribuidas a Homero, un griego que vivió alrededor del año 750 a.C. o aun antes; La eneida, de Virgilio (70-19 a.C.), un romano que escribió en latín; La divina comedia, de Dante Alighieri, en italiano (c.

1265-1321); Los lusíadas, de Luís Vaz Fotografía: Nate Rayfield

de Camōes, en portugués (c. 15251580); y El paraíso perdido, de John Milton, en inglés (1608-1674).

De Kock comenzó a trabajar en su poema épico en 1959. Debido a varias interrupciones, para 1992 solo había terminado poco más de la tercera parte del libro. No fue sino hasta 2015 que se sintió inspirado de acometer otra vez la tarea. La terminó en 2018, a los 88 años.

La obra de de Kock, si bien comparte el nombre con El conflicto de los siglos de Elena White, no es una traducción de los cinco volúmenes de la serie, sino una descripción del tema del gran conflicto presente en todas las Escrituras, entremezclado con una exposición de varias profecías. En términos teológicos, afirma de Kock, esta épica es totalmente adventista y contiene todas sus doctrinas fundamentales.

Con la clara influencia de los escritos de Elena White y las Escrituras, esta épica destaca cómo se reconcilian la Ley y el amor mediante el don divino incomparable de su Hijo para salvar al mundo caído. También enfatiza el valor de siquiera un solo ser humano desde el punto de vista de Dios.

De Kock es el protagonista de La konflikto de la epokoj, pero su personaje representa a cada persona que lucha contra una carga de pecado y angustia, de duda e incertidumbre.

Cada ser humano necesita iluminación, orientación y salvación.

En su poema, de Kock lleva a sus lectores por un viaje imaginario por el tiempo y el espacio, comenzando con la caída de Lucifer, a lo que siguen las de Adán y Eva, y culminando con la tierra renovada, donde el pecado y los pecadores ya no serán más.

Mientras está en ese viaje se encuentra con cuatro personajes bíblicos que actúan como sus compañeros e intérpretes: Enoc, que no conoció la muerte; Moisés, resucitado tiempo después de morir; Esdras e Isaías, que representan parte de los levantados de los muertos al momento

De Kock aspiró a crear una obra maestra poética en esperanto. de la resurrección de Cristo. Durante la expedición, de Kock también está acompañado por su ángel guardián.

De Kock aspiraba a crear una obra maestra en esperanto, pero más que eso, quería contrarrestar la influencia ideológica de los incrédulos como el poeta de esperanto William Auld quien escribió La infana raso (La raza infante) en 1956 donde, en 169 páginas, presentó seductoramente la cosmovisión de la evolución atea.

«Como cristiano adventista, quise ponerme del lado de mi Señor y Salvador Jesucristo, con la esperanza de que algunos de mis lectores se sientan atraídos a él y sean salvados por la eternidad», dice de Kock.

La konflikto de la epokoj es, hasta donde sabe de Kock, la única obra impresa en esperanto que refleja tanto las ideas de Elena White como las raíces escriturales del tema del gran conflicto. De Kock es considerado por algunos, el poeta más destacado de esperanto del mundo.

Acaso él nunca conozca el impacto que su poema y obras subsiguientes tengan sobre los casi dos millones de personas que hablan esa lengua, pero su contribución a la literatura en esperanto brinda una voz y cosmovisión adventistas necesarias a este nicho especializado.

Beth Thomas es una escritora independiente que vive en Míchigan, Estados Unidos, con su esposo y dos hijos.

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La Palabra, la comunión, la mesa y la oración

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La iglesia como comunidad de adoración

i hay una gran lección que he aprendido de la pandemia del Covid-19, es que la mayoría de los cultos del sábado no son un lujo sino una necesidad. A pesar del papel importante de la tecnología moderna, tenemos que admitir que Zoom, Facebook Live u otras plataformas digitales no pueden remplazar el encuentro físico del pueblo de Dios. Alistarse, vestirse bien, salir de casa para encontrarse con Dios y otros creyentes no es simplemente una cuestión de forma.

Es una afirmación de nuestra creencia de que Jesús es Señor y de que pertenecemos a la familia de Dios.

El acto de reunirnos expresa una característica destacada de la naturaleza de la iglesia como comunidad de adoración. Es importante recordar que cuando Dios llama a un pueblo, es por el propósito principal de adoración.

Dios se lo dijo claramente a Moisés con estas palabras: «Cuando hayas sacado de Egipto a mi pueblo, todos ustedes me rendirán culto en esta montaña» (Éx.

3:12, NVI). Repitió lo mismo a faraón: «¡Deja ir a mi pueblo para que me rinda culto en el desierto!» (Éx. 7:16, NVI).

De la misma manera, el Nuevo Testamento señala que la adoración es el objetivo último de la salvación. En Pentecostés, por ejemplo, la predicación apostólica llevó a bautismos masivos, a lo que inmediatamente le siguió el culto corporativo en forma regular (Hech. 2:41-47).

La fe en Cristo es personal, pero la fe cristiana no es individualista. Los creyentes del Nuevo Testamento se deleitaban en reunirse. Como comunidad llamada por Dios, nosotros también proclamamos «las obras maravillosas de aquel que [nos] llamó de las tinieblas a su luz admirable» (1 Ped. 2:9,

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NVI). Por ello, podemos decir que la iglesia es el resultado de la actividad redentora de Dios, y que la adoración es su propósito último.

ELEMENTOS CLAVES DE LA ADORACIÓN CORPORATIVA

La pregunta es: ¿De qué manera manifiesta la iglesia su naturaleza en la adoración corporativa? Hechos 2:42 es considerado a menudo como el versículo que establece las cuatro características o columnas de la iglesia: «Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones». Este versículo encierra cuatro aspectos importantes relacionados con la vida y la adoración de la iglesia temprana. Brinda un modelo fundamental que debemos seguir.

La Palabra: Mediante la proclamación del evangelio, Dios está reuniendo personas de toda nación, tribu, lengua y pueblo, para alabanza

Fotografía: doidam10 / iStock / Getty Images Plus / Getty Images

de su gloria (Efe. 1:3-14; Apoc. 14:6, 7; 7:9-17). Mediante la Biblia Dios nos habla con más claridad. No es de sorprenderse entonces que la vida y la adoración de la iglesia tienen que ser moldeadas por la Palabra de Dios.

Los primeros discípulos «perseveraban en la doctrina de los apóstoles».

De manera similar, es fundamental que nosotros hoy entendamos la verdad de Dios al darle una atención aplicada a la Palabra. La primacía de la Palabra nos une en Cristo, preservándonos del error y la discordia. Por esa razón, los Reformadores insistían que la adoración debía ser «de acuerdo con las Escrituras». La vida y la adoración de la iglesia tienen que estar completamente centradas en la Palabra, enfocadas en Cristo y dirigidas por el Espíritu.

La comunión: La iglesia no es un edificio sino un cuerpo de creyentes y la adoración es más que un mero encuentro social. Es la esfera especial

de la acción de Dios en la tierra. Su presencia construye, modela y anima a la iglesia. Elena White señaló que «aunque Cristo esté solamente entre unos pocos humildes, esta es su iglesia, pues solo la presencia del Alto y Sublime que habita la eternidad puede constituir una iglesia».* Los primeros cristianos se dedicaron a la comunión, y lo mismo debemos hacer nosotros. Como pueblo de Dios, ahora tenemos acceso al Padre en un Espíritu por medio de Jesucristo (Efe. 2:18). Nuestra comunión mutua está vinculada a nuestra comunión con Dios (1 Juan 1:3). Este elemento en común tiene que llevar a la edificación mutua.

Nos ministramos unos a otros mediante la predicación, el cántico, una palabra de aliento o simplemente una sonrisa, un abrazo o una mano ayudadora. Dios es glorificado cuando nos interesamos en otros y compartimos, revelando así el poder divino de salvar y transformar.

La mesa: Que los primeros cristianos partieran el pan probablemente se refiere a comer periódicamente juntos; la «Cena del Señor» era celebrada como parte de una comida más grande. Al rodear la mesa del Señor, la iglesia expresa su verdadero yo como comunidad. La mesa del Señor es una experiencia compartida en la que la iglesia celebra la orden de tomar el pan y la copa mientras proclama la muerte del Señor hasta que vuelva (1 Cor. 11:23-26). Durante la Cena del Señor, se nos recuerda que, como pueblo de Dios, somos parte de la historia de la salvación, que avanza hacia su glorioso punto culminante.

Aun así, no deberíamos limitar la acción de compartir la comida a la Cena del Señor. Hechos 2:46 describe de qué manera los primeros cristianos estaban continuamente «partiendo el pan en las casas». El contacto social alrededor de la mesa expresa nuestros vínculos familiares, en especial en una era cada vez más individualista. En esta comunión mutua, se nos recuerda y asegura que somos uno en Cristo.

Por esta razón, las comidas periódicas en común deberían ser una prioridad para los miembros de iglesia.

La oración: La adoración corporativa es más que edificación mutua. Cuando la iglesia se reúne para la adoración cumple aquello para lo que fue llamada: se vuelve a Dios. La iglesia primitiva era una iglesia de oración porque estaba plenamente enfocada y dependía totalmente de Dios. Pablo animó a la iglesia a orar «en el Espíritu en todo momento, con peticiones y ruegos» (Efe. 6:18, NVI). Asimismo, alentó a Timoteo para que dirigiera a la iglesia en «plegarias, oraciones, súplicas y acciones de gracias» (1 Tim. 2:1, NVI). Cada culto de adoración es una declaración de que Dios se merece toda la alabanza y la gloria. Es allí también que confesamos nuestro pecado y quebrantamiento frente a un Dios santo y compasivo. Esta dimensión vertical siempre tiene que predominar cuando nos reunimos; de otra manera, el culto de adoración se degenera en una actividad puramente humana.

CONCLUSIÓN

La adoración corporativa encarna la naturaleza de la iglesia. Cada encuentro de creyentes es una manifestación verdadera de la iglesia en este mundo. Reunirse para estar juntos es una necesidad vital. En Hebreos 10:25 se nos amonesta a que «no dejemos de congregarnos, como acostumbran hacerlo algunos, sino animémonos unos a otros, y con mayor razón ahora que vemos que aquel día se acerca». Fortalecidos por la adoración corporativa, llegamos a ser testigos del poder del evangelio (Hech. 2:47). * Elena G. White, Alza tus ojos (Buenos Aires: Asoc. Casa Editora Sudamericana, 1982), 313.

Alain Coralie es secretario ejecutivo de la División de África CentroOriental, con sede en Nairobi, Kenia.

Lea más sobre En qué creemos en www.adventist.org/en/beliefs/ AdventistWorld.org Diciembre 2020

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Respuesta a preguntas bíblicas

Crimen y castigo P

¿Cuál es el «infierno de fuego» mencionado en Mateo 5:22?

R

En pocas palabras: ¡Es algo que no queremos! La lectura literal del griego es «Gehenna de fuego», no «infierno». La palabra griega sería hadēs. La trayectoria del uso del sustantivo Gehenna muestra cómo un término geográfico llegó a designar un lugar de juicio para los malvados.

1. GEHENNA COMO TÉRMINO GEOGRÁFICO

El vocablo griego geenna, del cual proviene Gehenna, es una transliteración del hebreo gê hannôm, que significa «el Valle de Hinón». Ese era un valle literal ubicado en la sección sur de Jerusalén, que servía como frontera entre los territorios de Judá y Benjamín. En ese valle, los israelitas construyeron un lugar de adoración, denominado Tofet, donde se adoraban deidades paganas y donde Acab y Manasés adoraron a baales cananeos y ofrecieron sacrificios de niños a Moloc (2 Crón. 28:2, 3; 33:6; cf. Jer. 32:35). El valle estaba asociado con una rebelión contra Dios, debido al sacrificio de los niños. Jeremías anunció que el Valle de Hinom se convertiría en el «Valle de la Matanza», un lugar de castigo para el pueblo rebelde de Dios, un cementerio (Jer. 7:30-34; 19:1-9). Aunque no menciona específicamente el valle, Isaías usa los conceptos asociados con él para referirse al día final del juicio divino contra los malvados. Dios desciende con fuego para «juzgar a todo hombre» (Isa. 66:16). Al salir de la ciudad, los israelitas verán los cuerpos: «su gusano nunca morirá ni su fuego se apagará» (vers. 24).

2. GEHENNA COMO LA SUERTE FINAL DE LOS MALVADOS

Jesús une los mensajes de Jeremías e Isaías cuando habla de «la condenación del infierno», es decir, los condenados al Gehenna (Mat. 23:33; cf. 5:22), de donde 26

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los malvados no lograrían escapar. Gehenna es el fuego que, después de la resurrección, destruirá permanente y totalmente la vida y el cuerpo de los malvados (Mat. 10:28; Luc. 12:4, 5). En los sacrificios humanos, el niño era matado en primer lugar, y entonces su cuerpo se arrojaba al fuego para que estuviera con los malvados.

En efecto, Jesús se refiere a menudo a que todo el cuerpo es arrojado al Gehenna, el fuego del juicio divino (por ej., Mat. 5:29, 30; Mar. 9:43-48). Se dice que los malvados son arrojados al Gehenna, lo que implica el uso de fuerza (en griego: ballo, «arrojar» [Mat. 5:29; 18:8]), o como partiendo al Gehenna, lo que enfatiza la separación (aperchomai, «irse lejos, partir» [Mar. 9:43]).

En ninguno de los pasajes donde se usa el sustantivo infierno/Gehenna está presente la idea de que el alma inmortal, separada del fuego, se dirige allí para quemarse para siempre. Aunque los malvados son arrojados al fuego de la muerte eterna, los justos ingresan a la vida con el Señor (Mar. 9:43, 49; Mat. 19:8).

3. GEHENNA Y EL FUEGO ETERNO

Ya hemos observado que Gehenna designa el juicio por el fuego y es llamado «el fuego del infierno/Gehenna» (Mat. 18:9). Lo que ha confundido a algunos es que este «fuego […] no puede ser apagado» (Mar. 9:43; cf. Luc. 3:17). Esta frase simplemente significa que los seres humanos no tenemos control sobre él; seguirá ardiendo hasta que no quede nada que quemar. Jesús lo explica al citar Isaías 66:24. Gehenna es el lugar donde «su gusano [del pecador] nunca morirá ni su fuego se apagará».

El lenguaje es figurativo en el sentido de que las dos descripciones parecen ser incompatibles. ¿Está el cadáver siendo comido por gusanos, o ha sido quemado? La idea nos habla de aniquilación total. El gusano y el fuego seguirán obrando hasta que no quede nada. ¡Gracias, Jesús, por librarnos del Gehenna (la muerte eterna)!

Ángel Manuel Rodríguez se ha jubilado después de ser director del Instituto de Investigaciones Bíblicas de la Asociación General.

Tenemos más reuniones que antes, dado que el teletrabajo elimina el tiempo dedicado a viajar.

■ Es más difícil tomarse descansos porque no suele haber un cronograma central, por lo que pasamos de una reunión a otra.

■ Estamos concentrados en la pantalla durante períodos más largos, no solo mientras escribimos, atendemos los mensajes, planificamos y preparamos un cronograma, sino también durante nuestras reuniones y diálogos.

■ El tiempo extendido frente a la pantalla puede exacerbar la sequedad de los ojos. Eso puede afectar más a las personas mayores, pero no solo a ellas. Beber mucha agua ayuda a prevenir el problema.

■ Por Internet, nos perdemos los comentarios «al margen», pero tan ricos, de la comunicación cara a cara, como por ejemplo el lenguaje corporal y la comunicación con los ojos (solo una mirada fugaz), lo que aumenta el estrés.

■ Estamos «distanciados», y la bioquímica de la comunicación puede resultar menos placentera. Hay una menor producción de dopamina y menos generación de oxitocina que, se cree, facilitan la sincronía y la comunicación.

Cada uno de nosotros necesita tomar la decisión deliberada de ejercitarse y moverse por un equivalente de 250 pasos por hora.

Podemos caminar animadamente por la casa o el patio entre reuniones, o cada vez que completamos una hora. Necesitamos hidratarnos bien para mantenernos sanos (eso también garantiza visitas adicionales al baño: pasos extras, ¡y a veces apurados!).

Necesitamos equilibrio en nuestra vida y trabajo. Tenemos que prestar atención al consejo de que, no importa lo que hagamos, debemos hacerlo todo para gloria de Dios (véase 1 Cor. 10:31) y, al mismo tiempo, para mantenernos sanos.

■

Salud y bienestar

Fatiga de pantalla ¿Es eso motivo de preocupación?

Debido a la pandemia, he estado trabajando desde casa. Tengo 38 años y estoy sano, disfruto del trabajo y tengo muchas reuniones por Internet. Me siento más exhausto, y hasta más aislado al final del día, que cuando iba a la oficina. ¿Es motivo de preocupación?

D

urante la pandemia se han producido muchos cambios en nuestra manera de trabajar, adorar, socializar y jugar. Eso influye sobre nuestro bienestar general. Somos seres multidimensionales: con áreas física, mental, espiritual, emocional y relacional. La cuarentena y el distanciamiento social han incrementado el aislamiento y la soledad. Ese distanciamiento social, además del uso de máscaras y la vida sana son fundamentales para seguir bien en momentos como estos. Sin embargo, el distanciamiento social se ha vuelto tristemente literal, por lo que la soledad se ha disparado.

Podemos mantenernos conectados socialmente mediante la misma tecnología que facilita las reuniones de trabajo. Seguir conectados socialmente nos ayuda a mantenernos integralmente sanos, y ayuda a aquellos con quienes nos conectamos.

El trabajo a distancia ha sido clave como respuesta a esta pandemia. El distanciamiento social nos ha obligado a reunirnos usando tecnología que nos permite vernos y escucharnos. Nuestro día está lleno de Zoom, Skype, StreamYard, Teams y otras herramientas. Pasamos de una conferencia o charla en línea a la siguiente. Aunque podemos silenciar nuestros micrófonos y hasta interrumpir la transmisión de video, no nos tomamos descansos con tanta frecuencia como el cuerpo y la mente necesitan.

Nuestro cansancio y agotamiento al final del día de trabajo se ven incrementados por los siguientes factores:

Fotografía: fizkes / iStock / Getty Images Plus / Getty Images

Peter N. Landless es cardiólogo nuclear certificado y director de Ministerios Adventistas de Salud de la Asociación General.

Zeno L. Charles-Marcel es especialista certificado en medicina interna y director asociado de Ministerios Adventistas de Salud de la Asociación General.

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¿Puedo contarle una historia?

Un anuncio de la Panadería Chef del Cielo en una calle de Livingstone, Zambia.

DICK DUERKSEN

Un regalo interminable D

eseosas de aprender las jovencitas preguntaron si podían asistir a una escuela privada cercana. Un lugar conocido por el número de egresados que seguían estudios en la universidad.

—Lo siento –dijeron Stain y Gladys Musungaila a sus hijas–. No tenemos suficiente dinero para enviarlas a una escuela privada.

—Oremos por el dinero –respondieron sus hijas–. Dios siempre ha provisto lo que hemos necesitado, y estamos seguras de que proveerá otra vez. *** Así comenzó la aventura. Los padres y las niñas oraron de mañana, durante el día y de noche, recordándole a Dios sobre la escuela y los fondos que necesitaban.

Unos días después, la caminata matutina del papá se vio interrumpida por un extraño con un abultado paquete. «Señor Stain –dijo el extraño–.

Tengo un presente para usted» Stain se detuvo, saludó al hombre y aceptó el paquete de extraña forma.

—No funciona, pero me dicen que usted es una persona que puede arreglar muchas cosas. Mi esposa y yo pensamos que quizá podría hacerlo andar y usarlo para algo.

—¿Qué es? –preguntó Stain, levantando el paquete, a la vez que trataba de imaginar qué había adentro.

—Es una mezcladora para hacer pan, bastante usada –dijo el hombre–. El recipiente está abollado, y el motor ha dejado de girar. Usted puede hacerlo funcionar. Sé qué puede hacerlo.

Stain no estaba tan seguro. Le gustaba comer pan, pero no tenía idea cómo amasarlo. Y aunque Gladys era una cocinera maravillosa, siempre habían comprado el pan; nunca lo habían fabricado ellos mismos. ¿El problema con el motor? Pensó que acaso podía solucionarlo.

«Gracias, amigo», dijo Stain, y llevó el presente a su casa para mostrárselo a Gladys.

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*** Gladys se rio, y las chicas también.

Stain dejó el paquete y salió apresurado al trabajo. En el camino de regreso, se detuvo en una tienda y compró unos kilogramos de harina, por las dudas. Esa noche trabajó por mucho tiempo con el motor. Le quitó el óxido, acomodó y conectó los cables raídos, y le aplicó unos golpes, golpeteos y urgentes oraciones. La próxima mañana, el motor estaba farfullando y haciendo girar el vetusto recipiente. ¡Podían amasar pan!

Gladys se rio, y las chicas también. Pero esta vez sus risas tenían un dejo de esperanza. Stain comenzaba a soñar con tener una panadería con estantes llenos de panes, panecillos y quizá hasta unos cruasanes.

«La llamaremos Panadería Chef del Cielo –anunció Stain–, y ustedes podrán ir a la universidad».

Todos trabajaron, y sus sueños comenzaron a tornarse promisorios. Los clientes comenzaron a contar a otros sobre los «maravillosos panecillos» de la Panadería Chef del Cielo. Las chicas asistieron al nuevo colegio.

Stain y Gladys lucharon por mantener la panadería en funcionamiento mientras sus dos hijas, Chibale y Kunda, solicitaban ingresar a la Universidad Copperbelt a unos mil kilómetros de Livingstone (Zambia). A pesar del creciente éxito de la panadería, la familia solo tenía suficiente dinero para pagar el combustible del vehículo que llevó a sus hijas a la universidad.

No tenían para pagar los estudios.

La necesidad hizo que volvieran a orar como familia, incluyendo en esta ocasión Fotografías: Dick Duerksen

la urgencia de que la universidad comenzaba en dos días. Con esperanza, la familia salió para Copperbelt sin dinero para los aranceles, con tan solo las buenas calificaciones que habían obtenido sus hijas, esperando que eso les ayudaría a conseguir alguna beca en la universidad. Se alojaron por una noche en la casa de un hermano menor de Stain cerca de la universidad y a la mañana siguiente solicitaron una beca.

«No se preocupen –dijeron las jovencitas–. Dios ha provisto hasta ahora. Él no nos va a abandonar».

Toda la familia oró por Chibale y Kunda, y entonces Stain y Gladys regresaron a su hogar en Livingstone. «Dejamos a las chicas en manos del Dios viviente –recuerda Stain–, para que fuera lo que él quisiera».

Tres días después, recibieron un mensaje de que sus hijas habían recibido una beca completa en la Facultad de Ciencias. ¡Había tanto que celebrar! *** Dios siguió bendiciendo a los panaderos, y la primera panadería llevó a que surgiera una segunda, y entonces una tercera y luego una cuarta en Sesheke, a unos 200 kilómetros de Livingstone. Llegó el día en que «los mejores panecillos» estuvieron disponibles en todas partes.

«Noté que había muchos niños con cara de hambre que andaban cerca de

La mezcladora de pan original que inició todo el proyecto.

las panaderías –recuerda Stain–. Les pregunté por qué estaban allí, y todos me contaron la misma historia. Eran huérfanos, y tenían hambre».

Stain fue a su panadería más cercana y salió con varias bolsas llenas de panecillos recién horneados. «Uno para cada uno», les dijo. Aunque quería hacer felices a los niños «por un momento», se dio cuenta de que necesitaba hacer algo más.

Los húerfanos necesitan más que tan solo unos panecillos, pensó Stain. Por ello, Gladys y él comenzaron a hablar con sus amigos, reuniéndose con grupos de servicios locales y haciendo realidad sueños imposibles. Junto a las panaderías se abrieron escuelas para los huérfanos.

«Oramos muchísimo –dice Gladys–.

Sabíamos que nosotros mismos no podíamos hacer mucho, pero también sabíamos que como Dios nos había dado las panaderías, quizá él estaba listo para ayudar a hacer algo especial para los niños huérfanos. Esa herrumbrada mezcladora fue el regalo de Dios para nuestra familia. Ahora es un regalo para cientos de niños huérfanos solitarios».

Después de que sus hijas se graduaron de la universidad, Stain y Gladys dieron tres de las cuatro panaderías a sus encargados. «Esas panaderías fueron el regalo de Dios para nosotros –les dijo Stain a los asombrados encargados–. Ahora son un regalo nuestro para ustedes. Pero hay una condición: tienen que hacerse cargo de que los huérfanos de la escuela junto a la panadería siempre tengan suficientes panecillos, y un pollo todos los viernes».

Los encargados lanzaron grandes exclamaciones de alegría, se abrazaron y prometieron que así lo harían.

Las Panaderías Chef del Cielo aún operan en Livingstone y Sesheke junto con múltiples huertas que producen alimentos para los menos privilegiados, los huérfanos y los niños. Bajo el mostrador de la primera panadería está guardada una vieja y abollada mezcladora de masa. Es un regalo que continúa dando.

Editor Adventist World, es una publicación periódica internacional de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Su editor es la Asociación General, División de Asia-Pacífico Norte de los Adventistas del Séptimo Día®.

Editor ejecutivo/Director de Adventist Review Ministries Bill Knott Director de la publicación internacional Hong, Myung Kwan Comisión de coordinación de Adventist World Si Young Kim, presidente; Yukata Inada; Joel Tompkins; Hong, Myung Kwan; Han, Suk Hee; Lyu, Dong Jin Editores/Directores asociados, Adventist Review Ministries Lael Caesar, Gerald Klingbeil, Greg Scott Editores en Silver Spring (Maryland, EE. UU.) Sandra Blackmer, Stephen Chavez, Wilona Karimabadi Editores en Seúl (Corea del Sur) Hong, Myung Kwan; Park, Jae Man; Kim, Hyo-Jun Director de plataformas digitales Gabriel Begle Gerenta de operaciones Merle Poirier Coordinadora de evaluación editorial Marvene Thorpe-Baptiste Editores invitados/Consultores Mark A. Finley, John M. Fowler, E. Edward Zinke Gerenta financiera Kimberly Brown Coordinadora de distribución Sharon Tennyson Consejo de dirección Si Young Kim, presidente; Bill Knott, secretario; Hong, Myung Kwan; Karnik Doukmetzian; Han, Suk Hee; Yutaka Inada; Gerald A. Klingbeil; Joel Tompkins; Ray Wahlen; Ex-officio: Juan Prestol-Puesán; G. T. Ng; Ted N. C. Wilson Diseño y dirección artística Types & Symbols A los colaboradores: Aceptamos el envío de manuscritos no solicitados. Dirija toda correspondencia a 12501 Old Columbia Pike, Silver Spring, MD 20904-6600, EE. UU. Número de fax de la oficina editorial: 1 (301) 680-6638 E-mail: worldeditor@gc.adventist.org Sitio Web: http://www.adventistworld.org/ A menos que se indique lo contrario, todas las referencias bíblicas pertenecen a la versión Reina Valera. Revisión 1995. Usada con autorización.

Adventist World es publicada todos los meses e impresa simultáneamente en Alemania, Argentina, Australia, Austria, Brasil, Corea del Sur, Estados Unidos, Indonesia, México y Sudáfrica.

Vol. 16, No. 12

Dick Duerksen es un pastor y narrador que vive en Portland, Oregón, Estados Unidos.

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Fe en crecimiento

Páginas infantiles

Cuando Dios hizo regresar el avión

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atna estaba cepillándose los dientes, preparándose para ir al trabajo. Sus niñitas, de nueve y cuatro años, aún dormían, y su esposo pronto se despertaría.

De pronto escuchó algo como si fuera un trueno. La familia Samuel vivía en Kuwait, donde jamás habían escuchado truenos. En efecto, jamás habían escuchado ruidos atemorizantes. Era un lugar seguro para vivir.

Ese día, en su trabajo de enfermera, Ratna notó algo extraño.

Todos los pacientes susurraban entre ellos en los rincones. Al comienzo, no le prestó atención, pero después preguntó: —¿Qué es lo que pasa hoy?

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¿Por qué todos están hablándose en secreto?

—Iraq está aquí –le contestó alguien–. Era el 2 de agosto de 1990.

Iraq acababa de invadir a Kuwait.

Kuwait es un país pequeño y rico. Muchas personas de la India vivían y trabajaban allí. La familia Samuel –Pushparaj, Ratna, y sus hijitas Veena y Tina– disfrutaban de un buen pasar.

Pero las cosas cambiaron. A las dos de la mañana, Iraq había llegado con sus tanques y su ejército.

Durante las semanas siguientes experimentaron mucho temor.

Pushparaj continuó yendo a trabajar. Como él y otros hombres trabajaban de noche, las mujeres

y los niños permanecían juntos para sentirse más seguros.

Tina recuerda cuando estaban solas en su casa sin el papá. Había tanques de guerra afuera en la calle, y podían escuchar disparos.

La niña oraba y oraba. Entonces alguien comenzó a golpear a la puerta. ¡Era alguien que por cierto quería entrar! Siguieron orando.

Pronto se dieron cuenta de que era su papá, no los soldados. ¡La situación les produjo mucho miedo!

Decidieron regresar a la India.

Trataron de irse de allí, pero los soldados los detuvieron. Lo intentaron dos veces más y los volvieron a interceptar.

Entonces se involucró el gobierno de la India. Enviaron

Ilustración: Xuan Le

WILONA KARIMABADI

Tesoro bíblico «Clama a mí y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces».

Jeremías 33:3

aviones para sacar a la gente.

Se les dijo a los Samuel que podían llevar 7 kilogramos de equipaje (piensa cuánto suelen pesar las maletas cuando viajas: ¡Por lo general, más de veinte kilogramos cada una!). Así fue que en una pequeña maleta portátil colocaron su dinero, documentos importantes, fotografías, alimento para las niñas y oro. Se esperaban varios aviones, pero apareció solo uno para buscar a toda esa gente. Para que todos tuvieran lugar, les dijeron que tenían que viajar sin equipaje.

Ratna estaba tan nerviosa que se olvidó de las cosas importantes en su pequeña maleta y la dejó en la pista del aeropuerto.

Solo unos minutos antes de que el avión despegara, se dio cuenta de su error. Envió rápidamente a su esposo Pushparaj para que saliera del avión y buscara la preciosa maleta entre la pila de equipaje. Pero con los nervios, él trajo una equivocada.

Ratna se sentó en el avión y lloró. «¿Cómo podemos regresar a casa sin nada, Jesús?» –oró.

Después de volar durante una hora, el piloto anunció que había un problema. Dio media vuelta con el avión y se dirigió de regreso a Kuwait. ¡Jesús había respondido la oración de Ratna!

Cuando llegaron, todo el equipaje estaba seguro. Habían llegado más aviones. No solo

recibieron de nuevo la maleta de ellos, sino que todos pudieron viajar con sus equipajes.

Un año después, la familia Samuel regresó a Kuwait.

Otra vez era un lugar seguro.

Permanecieron allí varios años más, y entonces se trasladaron a Estados Unidos. Veena y Tina ahora tienen sus propios hijos.

Jamás olvidaron la historia de cuando Dios hizo regresar el avión. Es un recordatorio de que Dios nos ama mucho. Él hace que estemos seguros.

Esta historia apareció en KidsView de Marzo 2017.

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DÍAS DE ORACIÓN

EN BUSCA DEL REAVIVAMIENTO 6-16 de enero de 2021

«No será por la fuerza ni por ningún poder, sino por mi Espíritu, dice el Señor Todopoderoso».

ZACARÍAS 4:6, NVI

W W W.T E N D AY S O F P R AY E R . O R G