por Ala Plástica
EL EXPERIMENTO NEOFEUDAL Cuando Eduardo Molinari nos convocó a participar de una investigación colectiva para una publicación en el marco de su proyecto BOGSAT supimos que estábamos frente a la posibilidad de examinar en directo la estructura de algunos acontecimientos clave que se han sucedido en los últimos tiempos en el área de la Cuenca del Plata1 relacionados directamente con el proceso de transnacionalización de los territorios y de desestabilización política a gran escala que benefician básicamente a sectores agroindustriales –monocultivos transgénicos– corporaciones biotecnológicas como Monsanto, Syngenta, Bayer, Cargill, ADM y Bunge, terratenientes y pooles de siembra que controlan millones de hectáreas (Los Grobo, CRESUD, El Tejar, Maggi, etc.…) Aquella tarde de junio en La Puerto Rico, un bar notable ubicado en el casco histórico de Buenos Aires, fue el escenario donde comenzamos a desplegar en el aire la cartografía de un territorio que días más tarde comenzaríamos a recorrer, en el que se superponen capa sobre capa distintos niveles de organización espacial y política y en el que cohabitan los rastros de las poblaciones guaraníes de las comarcas bajas y selváticas originarias de América, las divisiones realizadas por españoles y portugueses en su proceso de conquista, las misiones jesuíticas y su estrategia evangelizadora que desde 1585 y hasta 1767 se extendiera en estas regiones, los modelos nacidos de la revolución francesa que dieron inicio a las repúblicas actuales, los ideales de unificación de una patria grande latinoamericana, la influencia de los flujos inmigratorios provenientes de España, Italia, Alemania, Polonia y de Medio Oriente del s. XIX y XX, hasta la actual encrucijada donde aquel objeto concreto, único y también unificador de las legalidades, de las acciones, integrador de niveles, dimensiones, temporalidades y especialidades que es el estado empieza a perder su sustento desde
Francotirador observa a seguidores del presidente paraguayo Fernando Lugo manifestándose frente a la casa de gobierno luego de su destitución. EFE - Junio de 2012
1 La Cuenca del Plata, tiene una superficie de 3.200.000 km², aproximadamente un tercio del área total de los EEUU y casi igual al área de todos los países que componen la Unión Europea. Desde su divisoria de aguas correspondiente abarca parte de Argentina, Brasil, Bolivia, Paraguay y Uruguay. El nombre “del Plata” parece deberse a un remoto influjo del Cerro Rico de Potosí y al mito del Rey Blanco que los indígenas pasaban de boca en boca hasta llegar a oídos de los tremebundos conquistadores europeos. En este sentido la Cuenca del Plata lleva una designación de gran valor simbólico y una experiencia práctica que denota desde el inicio de la interferencia de la conquista, la consolidación de los ríos como vías de extracción de materia del sistema.