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Donald Trump se entrega a la justicia americana

sidente se declaró "no culpable" de los 34 cargos en su contra que fueron presentados por la fiscalía relacionados con la presunta falsificación de registros comerciales y conspiración para cometer fraude.

Donald Trump se entregó ante la justicia de Estados Unidos este martes 04 de abril de 2023.

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El expresidente de Estados Unidos comparece ante el Tribunal Criminal de Manhattan, Nueva York, para responder por los cargos relacionados con el pago a una ex actriz pornográfica que son considerados ilegales por la fiscalía. Trump, de 76 años, se convirtió así en el primer expresidente de EE.UU. en enfrentar cargos penales.

El fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, ha estado investigando un pago de US$130.000 realizado por el exabogado de Trump, Michael Cohen, a la actriz Stormy Daniels.

El dinero fue entregado a cambio de su silencio sobre una supuesta relación extramarital. En la audiencia, el expre-

El caso es rechazado por el exmandatario, quien considera que está motivado políticamente y es parte de una "cacería de brujas" en su contra para coartar sus aspiraciones presidenciales en la elección de 2024. Partidarios y opositores de Trump se manifestaron a las afueras del tribunal, sin que hubiera confrontaciones físicas.

Juan Manuel Merchan, un estadounidense nacido en Bogotá de padres colombianos, es el juez que preside la audiencia. Se trata de un integrante de la Corte Suprema de Nueva York, considerado como un veterano del sistema judicial del estado, con más de 12 años de experiencia. "Me odia", dijo el expresidente en su red social, Truth Social, el pasado viernes, una presunta referencia a que no es la primera vez que los dos se enfrentan.

Guerra contra las pandillas en El Salvador

"Más del 90% de la población está de acuerdo con el estado de excepción y quieren que se extienda, y los únicos que se quejan son los activistas que no saben qué ocurre en el país y la oposición política". Así de tajante se muestra el vicepresidente de El Salvador, Félix Ulloa. Se jacta de estar ganando la guerra contra las pandillas "sin derramamiento de sangre" y niega que las fuerzas del orden estén deteniendo a ciudadanos solo por tener tatuajes o por una llamada anónima.

Aunque reconoce que, con una operación de esas dimensiones en marcha y cuando los encarcelados en un año superan los 65.000, es posible que se haya cometido algún error y arrestado a algunas personas sin vínculos con la Mara Salvatrucha o el Barrio 18. "Pero lo perfecto es el enemigo de lo bueno", insiste. Esta es la entrevista que le ofreció en exclusiva a la BBC cuando el régimen de excepción cumple un año, y en la que también aborda las acusaciones —"poco serias"— de que dos funcionarios de alto rango del gobierno negociaron con las pandillas.

El estado de excepción en El Salvador ya cumplió un año. Pero como su nombre indica, se supone que iba a ser excepcional, temporal.

¿Cuánto tiempo deben esperar los salvadoreños que dure esta situación en la que se le otorgan poderes especiales a la Policía? Como dices, de excepción significa que es temporal.

De acuerdo a nuestra Constitución, se puede dictar un régimen de excepción por 30 días. Pero si las condiciones continúan, la Asamblea tiene el derecho de extenderlo por otro periodo exactamente igual. Hasta este momento lo hemos extendido hasta un año, y si la condición que lo generó sigue, el estado de excepción continuará. No se puede establecer una fecha límite, dependerá de las condiciones en el terreno.

Suena a que su fin sigue totalmente abierto: podría durar otra semana, un año más, otros cinco años…

En los 80 en El Salvador vivimos bajo un estado de excepción por más de seis años, porque estábamos en una guerra civil. Y el gobierno lo fue extendiendo cada mes hasta que firmamos los Acuerdos de Paz. Ahora llevamos un año y si las condiciones siguen, lo extenderemos. Mis expectativas son que antes o después ganaremos esta guerra contra las pandillas y que ya no lo necesitaremos, que volveremos a la normalidad. Pero hay algo que hay que aclarar aquí: el estado de excepción no implica la restricción de las libertades públicas. No está restringido el derecho a la libre circulación, a la libertad de expresión ni nada por el estilo. Solo hay dos garantías que han sido suspendidas, y son garantías personales de quien ha sido procesado. De acuerdo a nuestra Constitución, una vez que has sido capturado tienes el derecho de ser enviado ante un juez en un plazo de tres días, en 72 horas. Bajo el estado de excepción tenemos el derecho de tener a esa persona en detención preventiva por 15 días. Esa es una de las garantías que han sido suspendidas. Y la segunda es el derecho a la privacidad. Es decir, que ni la Policía ni ninguna autoridad tiene el derecho a intervenir tus comunicaciones o dispositivos personales como el teléfono o la computadora. Pero bajo el estado de excepción esta garantía está suspendida, porque la Policía, el juez y el representante del fiscal general necesitan revisar las computadoras de los miembros de las pandillas. Estas son las dos únicas garantías constitucionales que están siendo afectadas, y tengo que aclararlo porque en Europa, en Estados Unidos, la percepción sobre el estado de excepción es que El Salvador vive bajo una especie de toque de queda. Una vez, en un país europeo, me dijeron que estaban preocupados por el confinamiento de la población salvadoreña, porque, decían, a partir de las diez de la noche nadie podía circular por las calles. Esa es una percepción errónea del estado de excepción.

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