Edición No.2
LOS IMPRESCINDIBLES EDIFICIOS POR TODOS LADOS
DE LOS AGUACEROS DE MAYO Y EL SOPOR DE LA MELANCOLIA APORTANDO UNA CAPACITACIÓN HUMANA EN BUSCA DE MEJORES AGENTES
Guatemala, febrero 2012
EDITORIAL El arte como expresión es la manera de comunicación más rica que existe, desde los mismos orígenes del hombre… hasta la música, la pintura, la escultura, el arte digital y todas aquellas formas de expresar, con sublimidad y sentido, que hoy dan valor a la cultura y le dan forma a la realidad que el artista percibe y que comunica. El arte como instrumento de comunicación enseña, trasciende los linderos de la imaginación del que lo aprecia, le transmite conocimiento, percepción y sentido, buscando encontrar, en el artista, sus propias expresiones, su deleite y su manera de percibir el mundo, por eso es esencial para la civilización, porque repercute, transmite, divulga y, por supuesto, crea cultura. Entonces el arte también se convierte en medio para sensibilizar… ya no es su fin simplemente comunicar, sino en esa relación entre artista y admirador nace un sentido de correspondencia… ya el arte se instrumentaliza para mejorar la sociedad, porque es allí donde la persona moldea su propia realidad conociendo la capacidad creativa de otro ser humano y le genera admiración… eso hace al espectador más empático, porque empieza a jugar con sus emociones, las exalta, las “desempolva”, lo hace “más” humano. Los niños de Guatemala, están viviendo en un mundo altamente violento, los medios de comunicación en nada ayudan a mejorar la sensibilidad; la atrofian, exaltan la violencia en una espiral in crescendo… cultivando el morbo, por lo que ya la trompada no admite asombro… ahora es el descuartizamiento… el muerto tendido en la calle ya no es impactante… es cotidiano. Pero el arte recupera el espacio escaldado… esa piel cuya costra de insensibilidad como medida de protección se autoprotege cierra los espacios a la creación, a las bellas artes, al disfrute pleno de la vida y el cultivo de los talentos… por eso la Revista Guatemalidad apuesta a apoyarse en la expresión artística, en el místico sentido de convivencia musical que Efraín Recinos reclama como un futuro cercano. Guatemala es un país formado por gente que es altamente sensible… y, lamentablemente también, muy insensible… por lo tanto, usando dos palabras que están de moda GUATEMALIDAD y GUATEMORFOSIS, la Asociación Efraín Recinos busca coadyuvar para popularizar la sensibilidad, el apego a lo positivo, la exaltación de los valores de los cuales el guatemalteco debe sentirse sanamente orgulloso y agradecido. No podemos permitir que un país como Guatemala, donde nacen valores de la calidad de Mario Monteforte Toledo, de Efraín Recinos, de Guillermo Monsanto, de Pepo Toledo, de María Victoria, don Jorge Castañeda, de Carolina Escobar Sarti, de González Goyri y de tantos otros valores, puedan haber muchos otros, de ese quilataje, que aún no han sido descubiertos.
CONSEJO EDITORIAL
Editor General: Aldo Bonilla Diseño y diagramación: Mynor Hernández
Redactores invitados: Jerry Cleaves Ilka Oliva
Asociación Efraín Recinos El arte no solo se centra en la pintura, viviendo en un país con una primavera eterna, nos permite una amplia gama de colores, culturas, pensamientos y un fin en común entre todos los buenos guatemaltecos, el conseguir un desarrollo como país que nos permita llevar una vida mejor. Esta gran paleta de componentes culturales que forman nuestro país, motiva a nivel de cada uno de sus habitantes el ingenio y la chispa creativa, que nos permite mejorar como sociedad, aportando a Guatemala, gente con valor y compromiso, elementos positivos que ellos inculcan en sus respectivos hogares, cada uno de nosotros dentro de nuestros respectivos hogares somos los creadores de nuestra propia obra de arte, independientemente del trabajo que hagamos. La asociación Efraín Recinos, es la suma de muchas personas, un conjunto de muchas cualidades y especialidades, pero con un mismo fin en común —aportar por medio del arte algo positivo para el país—, siendo el legado artístico del Maestro Efraín Recinos el medio para lograr nuestro objetivo y los miembros de la asociación las herramientas para lograrlo. La participación de la sociedad en la sensibilización de las personas por medio del arte, nos brinda la oportunidad de demostrar que el arte está al alcance de todos y que todos podemos influir de manera positiva en nuestra sociedad. Seamos parte de algo nuevo, permitiendo que todos formemos parte de algo bueno. Así que la invitación es abierta, para todas las personas que quieran unirse o que se sientan identificados con nuestro trabajo, a participar como miembros activos o voluntarios, para prolongar el legado artístico del maestro Recinos y lograr de esta manera una sensibilización por medio del arte, aumentar nuestro sentido de pertenencia, y demostrar que como pueblo Guatemala puede ser mucho mejor. Francisco Sagastume Presidente
LOS IMPRESCINDIBLES Por Jerry Cleaves
“Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay otros que luchan muchos años y son muy buenos. Pero hay quienes luchan toda la vida, y esos son los imprescindibles”. Bertolt Brecht Los guatemaltecos somos gente fuerte y luchadora y no nos damos por vencidos fácilmente. Nuestra herencia ancestral, historia, y hasta los fenómenos naturales, nutren y robustecen nuestro espíritu de lucha. Los buenos chapines generalmente somos colaboradores, amables, nobles, afectuosos, creativos, dinámicos y muy trabajadores. Sobre esas fortalezas, resalta el hecho que somos “luchadores natos”. Para nosotros no existe adversidad que nos doblegue el espíritu de lucha. Ni las inundaciones, ni los terremotos, ni la carencia de oportunidades, ni los más oscuros pasajes de nuestra historia nos han doblegado. No importa que tengamos que enfrentar, nada nos detiene. En ocasiones, nos damos una tregua por sentirnos solos o cansados, pero al final del día, echamos para delante. Lo hacemos en la escuela, el campo, la ciudad, el deporte, la industria, las letras, el arte, la medicina y en todas las profesiones y oficios.
Ejemplos de lo anterior lo evidencian tres jóvenes que ya han llegado a la cima del Monte Everest, la obra de Efraín Recinos, gente joven construyendo casas en “Un techo para mi país”, fundaciones creando clínicas para niños con cáncer, asociaciones trabajando con niños desamparados y miles de héroes anónimos que día a día luchan por un mañana mejor. Algo que caracteriza a todos estos hombres es que no se detienen nunca, y si lo hacen, es para rectificar caminos, tomar aliento y continuar. No cabe duda, que estos hombres y mujeres son los “imprescindibles” de nuestra tierra y sociedad. Los trascendentes. Los que nos inspiran y contagian su pasión por Guatemala y la valentía para enfrentar cualquier reto. Ni siquiera la cruda violencia que vivimos a diario ni la disfunción gubernamental les hace titubear para alcanzar sus metas. Ese espíritu de lucha también tiene otro nombre: GUATEMALIDAD. Nuestra GUATEMALIDAD es más que sentirnos orgullosos por La Antigua Guatemala, Tikal o Atitlán. Va más allá del genial diseño y colorido de los trajes típicos y de nuestra diversidad étnica o pluriculturalidad. GUATEMALIDAD, es también, un espíritu inquebrantable de lucha que día a día construye nuestro país. Popularmente, se dice que los chapines somos “aguantadores”. En realidad, lo que
Nuestra GUATEMALIDAD es más que sentirnos orgullosos por La Antigua Guatemala, Tikal o Atitlán.
queremos decir es que somos unos luchadores incansables y damos la cara cuando de trabajar y progresar se trata. No nos intimida la adversidad, sólo la respetamos. Los imprescindibles saben bien que sin una auténtica participación no hay compromiso, y que sin compromiso, tampoco llega la plena realización de la persona. La invitación que nos hacen los imprescindibles es a que nos comprometamos con nosotros mismos, con nuestras metas personales, con nuestras familias y amigos. Sobre todo, que nos comprometamos con un proyecto de nación y sigamos dando lo mejor de nosotros mismos. Como bien dijo el imprescindible Juán Pablo II: “El compromiso es la respuesta valiente de quienes no quieren malgastar su vida sino que desean ser protagonistas de la historia personal y social”. Por una Guatemala en paz.
EL CHAPÍN UNIVERSAL
EDIFICIOS POR TODOS LADOS Por Aldo Bonilla
Dedicamos esta sección de la Revista a reconocer el trabajo de guatemaltecos de alto quilataje que dedican sus talentos, sus capacidades para construir un mejor país. Hoy tenemos el gusto de presentarles al joven arquitecto Israel Figueroa, de 23 años de edad, egresado de la Universidad de San Carlos de Guatemala, ha estudiado además Dibujo y pintura en varias escuelas nacionales, actualmente trabaja para una firma de arquitectos guatemaltecos. Israel, un arquitecto modernista, joven, entusiasta y que reconoce la importancia de las tecnologías de la información y las comunicaciones como herramientas para hacer más eficiente su trabajo. Hoy es un reconocido experto en el manejo del programa gratuito de GOOGLE que se llama Sketch Up* y que sirve para crear objetos tridimensionales, especialmente arquitectónicos y que se suben a la página de Google EARTH en internet. -Nunca imaginé- dice Israel- que lo que suelo utilizar como herramienta diaria para mi trabajo, me sirviera para aportar y sacar del anonimato el nombre, imagen y características arquitectónicas de nuestra querida ciudad de Guatemala, y, poco a poco, posicionarla como una ciudad geolocalizada y modelada. Mucho menos imaginé poder estar escribiendo estas líneas, tratando de explicar la experiencia que he tenido con
estos temas y el potencial que cada uno puede tener en las metas que se proponga. Hace algún tiempo que trabajo en una empresa guatemalteca dedicada a la construcción, y remodelación, fui contratado para realizar presentaciones rápidas, las cuales, fuera cual fuera su grado de complejidad, requerían ser realizadas en tiempos bastante cortos y necesitaban de una calidad bastante alta, yo solía utilizar complicados programas para presentaciones en 3D en los cuales tomaba mucho tiempo modelar lo que se requería, por lo que antes de iniciar mi carrera laboral en ese lugar tuve que buscar alternativas que me permitieran realizar mi trabajo de una manera mas rápida, sin perder la calidad. Un día navegando por internet en un reconocido foro de urbanismo y arquitectura, me llamó la atención un tema que mostraba la realización de presentaciones en tercera dimensión ó 3D. Lo más interesante de esto es que, para esto, se utilizaba un programa de computación muy versátil, y que no requería grandes cantidades de memoria o hacía más lenta la computadora y por tanto podía ser utilizada en cualquier computadora. Se trataba del programa Google Sketchup Pro. En la universidad y en muchos lugares me topé con que se impartían cursos sobre este programa, pero simplemente no me quedaba tiempo para tomarlos, por lo que decidí tratar de comprenderlo y manejarlo de una manera autodidacta… Tras realizar varios diseños con mucho entusiasmo y luego de colocarlos en el foro que antes mencioné, me contacté con un amigo, conocedor del tema, el cual amablemente me ofreció ayuda en varios tópicos del programa, me indicó los errores que cometía y como solucionarlos. Esto me sirvió para que poco a poco pudiera ir perfeccionando los diseños. No pasaron dos semanas desde que empecé a
utilizar este programa y en mi trabajo ya requerían que realizara estas presentaciones rápidas, por lo que fue necesario que pusiera de todo mi empeño esfuerzo y dedicación, por las noches solía practicar y diseñar muchas cosas, descubriendo las cualidades del programa, tratando de entender ciertos comandos y funciones. Frecuentemente utilizaba este programa para realizar diseños arquitectónicos propios, debido a mi profesión, y esto me llevó a descubrir la arquitectura de distintas ciudades del mundo a través de Google Earth, notando así, que la capa de edificios 3D, la ciudad de Guatemala aún no se había desarrollado como debiera, aún siendo la ciudad de Guatemala la más moderna de la región. Debido al amor que tengo por este país, decidí darme a la tarea de modelar algunas de los principales complejos arquitectónicos de la ciudad, con el fin de ser apreciados por navegadores de otras partes del mundo. A estas alturas la capa de edificios 3D cuenta ya con unas cuantas decenas de modelos hechas por mi persona, posicionando así a la ciudad de Guatemala como una de las más densas en la capa de la región centroamericana.
Esto ha llamado la atención de algunas empresas y personas que me han solicitado la creación de varios modelos de sus edificaciones a lo cual con gusto he trabajado para realizarlo. Me ha llenado de satisfacción haber podido modelar algunas de las obras arquitectónicas más representativas de la ciudad como lo son: El Palacio Nacional de la Cultura y el Centro Cívico de la ciudad, Joya del Modernismo, en donde destaca una de las mayores obra arquitectónicas de todos lo tiempos de la Ciudad de Guatemala, el Centro Cultural Miguel Ángel Asturias, obra del connotado Arquitecto,el Maestro Efraín Recinos, un personaje sumamente apreciado y admirado por mi persona. Con esto quiero demostrar que si utilizamos correctamente las herramientas que tenemos a mano y nos esforzamos, alcanzaremos muchas de las metas propuestas y satisfacciones personales, más aún si son en beneficio de nuestro país. Citando la famosa filosofía de vida del Maestro Efraín Recinos: “Si las cosas no se hacen con amor, mejor no hacer nada”.
El Arquitecto Israel Figueroa puede ser contactado en israelfigueroa.arq@gmail.com
* “SketchUp es un programa informático de diseño de computadores televisión y modelaje en 3D para entornos arquitectónicos, ingeniería civil, diseño industrial, GIS, videojuegos o películas. Es un programa desarrollado y publicado por Google. Google comenzó un proyecto de trabajo con pre-adolescentes para despertar en ellos el interés de utilizar esta herramienta. SketchUp permite conceptualizar y modelar imágenes en 3D de edificios, coches, personas y cualquier objeto o artículo que imagine el diseñador o dibujante. Además el programa incluye una galería de objetos, texturas e imágenes listas para descargar.”
Google Earth según Wikipedia es “…un programa informático similar a un Sistema de Información Geográfica (SIG), que permite visualizar imágenes en 3D del planeta, combinando imágenes de satélite, mapas y el motor de búsqueda de Google que permite ver imágenes a escala de un lugar específico del planeta.”
Para ver el Teatro Nacional en 3D en Google Earth da click en: http://sketchup.google.com/3dwarehouse/details?mid=8cd542d976a4b2df447775d932e7b856&prevstart=0
PLUMA INVITADA
DE LOS AGUACEROS DE MAYO Y EL SOPOR DE LA MELANCOLIA
Por la Escritora Ilka Oliva, guatemalteca residente en Estados Unidos, mayo 18 de 2008.
La tarde del “sábado chiquito” como llamaban al día viernes en Guatemala, Martina salió de su trabajo, a miles de kilómetros de distancia del país tercermundista (como lo llamaban los extranjeros pero para ella era ! esa joya invaluable que añoraba volver a ver). Había partido 16 años atrás en un día soleado de octubre, como todo aquel que emigra: pensando regresar en dos años, porque decían los que iban de visita: que en el norte la paga era buena. Ir a fajarse durante un par de años se levantaba la cabeza y regresar con algo de qué disponer. Pero entre tanto tushte nadie le dijo: mirá Martina en el camino arriesgarás la vida…, nadie le mencionó de las humillaciones, de las horas sobrecargadas de trabajo, de las noches de insomnio, de los días siempre iguales, nadie le dijo que allí su color canela era sinónimo de peligro, de desasosiego para todo aquel anglosajón chanchuyero que se cree el Tata de la tierra. Ajena a todo esto Martina agarró camino, se despidió de toda su parentela; se realizaron brindis con la bebida principal de su pueblo: la “chicha”. Mataron un coche y tres gallinas, se echaron en el comal pishtones, ticucos y tascales; se hicieron expresamente quesadillas de arroz, semitas, salpores de maicillo y fresco de carambola. Cambió sus yinas y las chinitas por los tenis color azul con que se cruzó dos desiertos; y como prueba de aquella aven-
tura, guarda dos piedras: una de cada uno que las recogió en la penumbra de la media noche cuando en lugar de “andar ligero” iba despepitada corriendo y jadeando como una desquiciada, en medio de un resto de nopales que mudos fueron testigos de tan espeluznante hazaña, acompañada de otros emigrantes que al igual que ella; corrían sumergidos en un estado de enajenación: con los ojos vidriosos y el corazón en la boca. Pero ella siempre fue una niña con suerte, así se lo había cantado la comadrona a su mamá el día que nació , cuando la vio envuelta en una manteca blanca y llegó boca abajo como los machos, se escuchó la voz de la comadrona rugir con las siguientes palabras: “mirá Tencha la niña viene con suerte, he visto parir tantas yeguas y sólo dos crías han venido al mundo con la misma manteca que viene la güira, ella será una mujer con suerte, te acordarés de lo que te estoy diciendo”. Y Martina creció creyéndoselo, al poner los pies en tierra del tío Sam; trabajó con familias que la acogieron y protegieron. Hasta ese momento sólo había recibido amor y buen trato. Durante toda esa semana había pasado sintiendo esas punzadas nostálgicas, tan comunes en la primavera, los días le parecían una eternidad “salvo” por la tibieza del hogar en donde laboraba, esa familia mitad anglosajona y mitad rusa la había acogido en su seno como un miembro más, en las tardes esperaba ansiosa la llegada del bus escolar para ver a ese par de ojos azules que le recordaban el color del cielo; esos ojos pertenecían a Sagesse el hijo menor del matrimonio, un ishto canche, blanco como la leche y travieso como sólo él. Martina se bebía las tardes en compañía de su “Guapo” como llamaba al niño, inventando juegos caseros, volvía a ser niña durante horas, él era su maestro de inglés de cabe-
cera y ella su maestra de español. Blanco y negro, café con leche, el dúo dinámico, ellos tenían su propio lenguaje que consistía; en señas y miradas, su propio espacio. Él la había salvado (sin saberlo) del abismo adyacente de la monotonía y de transitar por una vida sin color. Pero esa semana ni Sagesse con todo su resplandor pudo cambiar el panorama, los días nublados pesaban, el algodón de la espesa neblina fue emisario de “los aguaceros de mayo”. Quiso correr hasta desmayarse y perder la razón, quiso no sentir, quiso no desear, intentó huir, pero era el mes de las flores y cedió, se entregó sin oponer resistencia al sopor de la melancolía, dejó que la hiciera trizas y ésta más arrrecha que ella se tomó el trabajo en serio y la zambulló hasta lo más profundo de sus entrañas allá donde aún vivía latente el rescoldo de su juventud, allá donde las tardes de antaño estaban estampadas a fuego lento en su memoria, donde no existía el tiempo ni el espacio; solamente la frágil tranquilidad. “No me tentés” le gritó Martina “porque quiero irme de reculada al pasado y volver a escuchar las mismas expresiones que decían mis tatas”: “aquellos torrenceales”, “llovía hasta por los codos”, “caían cántaros de agua”, “callate que se nos viene el temporal encima”. Pero en el presente era sólo un eco en su memoria que llegaba a visitarla siempre en mayo en el mes de las flores. Durante el trayecto a su casa, conducía su automóvil comparando el paisaje, transformaba los árboles de los jardines de las mansiones, en el verde de las montañas, el ruido de las fuentes, en el quejumbroso llanto de las quebradas, el asfalto perfecto de las anchas carreteras; con el lodazal de sus calles pueblerinas. Esa tarde la infaltable lluvia de mayo la llegó a acariciar, le susurró cantos que le enviaban los grillos, le dijo que las chicharras antes de despedir el verano la llamaron como todos los inviernos, le comentó que el pueblo estaba creciendo, que las tumbas del panteón ya tenían nuevos muertos y que el adobe del tapial del cerco de la niña Pepa ya se estaba cayendo. Le contó que el clavel rojo que ella sembró cerca de la orqueta en donde estaba la olla con el cebollín sembrado, floreaba un “tanatal” y que la esperaba coqueto para intentar seducirla como en tantos otros viejos inviernos. Le dijo que las nigüas andaban haciendo se las suyas, que las solitarias andaban de temporada de “vacas gordas” entrando y saliendo sin remilgos por todo aquel orificio que se les pusiera al brinco. Sonrió, mejor dicho Martina soltó varias carcajadas que con el favor del viento escuchó su abuela en Guatemala, que en ese momento se encontra-
Foto: Andrea Pennington www.flickr.com/photos/andrea-pennington/
Foto: Oscar Zambrano www.flickr.com/photos/oscarzambrano/
ba arreando los pollos para meterlos al gallinero total eran las seis de la tarde y el tapesco los esperaba impaciente. “¡Ay papo!” Dijo la abuela, y le contestó a la nieta: “tené cuidado porque aunque allá no hayan solitarias también es peligroso ponerlo al brinco…” Con ese rocío transformado en gotas, la lluvia tenue la acarició durante horas mientras la ponía al día de los por menores que acontecían en el pueblo, le comentó que desde que ella se fue ninguna niña se encarama al palo de jocote propiedad de doña Toña (su abuela) porque ella decía que argeñan la fruta, le contó que las guías de ayote hacían enredaderas entre las tejas y se confundían con las guías del güisquilar pero; que niña Toña no las cortaba porque sabía: “que llegarás en cualquier momento y te hará tu sopa favorita revuelta con el chipilín y las hojas de chiltepe”. Martina sollozaba mientras su piel color barro confundía sus lágrimas con la lluvia. Era ese ya conocido dolor: el del destierro. Mientras que en ese lugar de aquel país la gente embelequera comentaba las primeras lluvias de la primavera, quejándose porque ensuciaban los zapatos y los carros, ella sólo deseaba volver a chapotear entre el lodazal, hacer barcos de papel y dejarlos partir en el río que se formaba en el me-
dio de la calle. Mientras caminaba buscaba sobre la grama encontrar los zompopos de mayo, cuando vino a sentir ya estaba empapada de pies a cabeza pero; su alma intacta seguía tibia. Durante toda la noche la lluvia estuvo acariciando la ventana de su alcoba, ésta inventaba diferentes sonidos para festejarla, mientras la otra fingía dormir, esperaba escuchar la lámina tronar, las tejas traquetear pero no había ni láminas ni tejas; todo absolutamente todo estaba solamente en sus recuerdos, tentó entre la oscuridad la mesa en donde tenía la lámpara y enloquecida buscó el candil y la media de gas, juraba que los había dejado allí junto con los fósforos y las dos rajas de ocote, también en las mismas se levantó y fue a revisar si había puesto la tranca en la puerta, pero no había tranca; en su lugar encontró dos chapas con llave. Comprendió dolorosamente que no estaba en Guatemala. Indiscutiblemente pensó: es la enfermedad que sufre todo aquel que extraña, añora y desea volver al nido, invocado en la fría erosión que causa la distancia. Se asomó a la ventana y observó el cielo escampado con pequeños brochazos de colores pastel, era la alborada del día sábado y musitó: ¡sábado día de tamales!
Ya era inmortal, solo se convirti贸 en leyenda.
TRANSFORMARTE
APORTANDO UNA CAPACITACIÓN HUMANA EN BUSCA DE MEJORES AGENTES
Por Alejandra Morales Rodas
La Asociación Efraín Recinos, fue invitada nuevamente por CIDES y NAS para unirse a otras entidades y realizar una capacitación innovadora, enfatizando los valores humanos a través de la sensibilización artística. En esta oportunidad dicha capacitación se imparte a los agentes involucrados en el Programa “Escuelas Seguras”, ya que en los lugares en donde funciona se desarrollarán talleres de arte para niños y jóvenes.
Los agentes se preparan para formar parte de la comunidad en la que se insertan con el objetivo de prevenir el crimen y el narcotráfico, sobretodo en áreas en riesgo. Es en este punto donde la Asociación Efraín Recinos interviene a través de su programa TransformArte y forma a los agentes en valores a través del legado del Maestro Efraín Recinos. También se imparten talleres de didáctica como parte del programa y el Taller Arte con Valor.
Imagen: Alejandra Morales. Recursos Pedagógicos “Conociendo al Maestro Recinos”.
Imagen: Alejandra Morales. Escultura en bronce, homenaje al Maestro Recinos. Creador: Enrique Guzmán.
Un elemento clave del taller es reiterar la importancia de la motivación en los seres humanos y de como esta puede llegar a cambiar o a definir el rumbo de una persona y mucho más de los niños. Este taller se logra gracias a la participación de voluntarios de la Asociación y personas ligadas a la misma, ofreciendo también la capacitación en valores y en psicología aplicada en el ámbito social. La capacitación esta programada para realizarse en 6 sesiones, durante el mes de febrero de 2012. Continuará..... Imagen: Alejandra Morales. Emblema PNCG
Este taller y dentro del enfoque que se da para los agentes, se les da a conocer la obra del Maestro, así como los detalles artísticos del mismo, anécdotas, ideas y principalmente conocer un la vida de su creador. Así mismo, se les presenta la película realizada por la Fundación Mario Monteforte Toledo: “Algunas dimensiones de Efraín Recinos” en la cual se destaca la libertad ideológica en la época política y social que le tocó vivir, su opinión y su sentir respecto a la realidad social del país. Durante la primera semana del Taller se realiza una visita guiada al Teatro Nacional Miguel Ángel Asturias, trasladando a los agentes a la cuna y oficina del Maestro, para que conocieran un poco una de sus obras más emblemáticas. Recorrer sus pasillos, vivir los espacios y ser parte del legado Reciniano es parte de la experiencia sensorial que se desea transmitir a los agentes. Principalmente para que puedan captar la importancia de este personaje cultural de nuestro país.
Más información en: alemorales@efrainrecinos.org
Imagen: Alejandra Morales. Teatro Nacional Miguel ﾃ］gel Asturias
Somos una organización que, haciendo acopio del legado cultural y artístico del Maestro Efraín Recinos, promovemos el sentido de pertenencia, el nacionalismo en su más clara acepción y el respeto a los valores primigenios de la Nación. Cumplimos la función de ser ente promotor de paz en el proceso de reducción de la conflictividad y el reencuentro como sociedad guatemalteca.
Para más información: Ruta 7 6-42 zona 4 Torre 6-42 oficina 402 Ciudad de Guatemala, Guatemala, 01004 / Tel.: 2334 3543 / info@efrainrecinos.org