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Sara Ramírez
AMOR Y RESPETO
El amor siempre es criticado por unas razones u otras. La libertad de expresión muchas veces hace que las personas creamos que tenemos la libertad de decir lo que queramos, sin pensar que eso puede herir a otras personas. El amor no tiene la obligación de cumplir unos objetivos ni de responder a unos ideales impuestos por la sociedad. Cada uno es libre de amar a su manera, y sobre todo, de amar a quien quiera. Al empezar una relación muchas personas se sienten presionadas a seguir los pasos que “todo el mundo sigue”; lo primero irse a vivir juntos, después tener hijos y casarse, para terminar pasando toda la vida entera juntos. Esto provoca el rechazo de muchas personas a las relaciones ya que si no cumples esto puede suponer un fracaso. Lo mismo pasa al acabar una relación, se supone que si algo se acaba es porque ha fracasado, pero esto no tiene por qué ser así. Puedes haber sido muy feliz con tu pareja pero que se acabe no significa que tengas que dejar de serlo, esa persona siempre va a ser importante en tu vida pero si ha dejado de aportarte cosas es momento de cambiar de vida. Atreverse es el primer paso para empezar bien una relación y hacer lo que te apetezca en cada momento también, sin ningún tipo de presión y sin ningún tipo de prejuicio. Amar siempre es bueno, ya sea hacia un ser querido o hacia tu pareja; pero no hay que confundir el amor con la toxicidad. Este es otro de los problemas que en parte también tiene mucha culpa la sociedad. Una relación toxica te puede hacer creer que estar todo el día con tu pareja es lo mejor, incluso que las relaciones se tengan que basar en eso; en no despegarse ni un solo momento el uno del otro. A veces, al estar dentro de una relación aceptas ciertos comportamientos que con otras personas no aceptarías por el simple hecho de que es tu pareja, sin darte cuenta de que eso puede hacerte daño, y mantienes esa relación hasta que te das cuenta de que estás en una relación tóxica e intentas salir de ella. La homosexualidad es otro de los temas que son muy criticados. Pese a que cada vez hay menos homofobia, el
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rechazo hacia esta tendencia sexual sigue existiendo a día de hoy. Hace poco se publicó una noticia de un chico llamado Samuel al que habían matado al grito de “maricón” cerca de una discoteca en La Coruña. Le metieron una paliza simplemente porque era homosexual. El odio de ciertas personas a esta tendencia sexual nos impide avanzar como sociedad, pese a esto, debemos seguir progresando para que nadie tenga que volver a sentir miedo. Aun así, la sociedad ha avanzado mucho, antes la mujer tenía que quedarse en casa para cuidar a los niños mientras que el hombre podía ir a trabajar. Junto con esto, los comportamientos machistas eran muy comunes y aceptar actitudes como insultos o agresiones físicas era algo que las mujeres tenían asumido. Ahora, a pesar de que queda mucho que avanzar, esto es impensable. Otro ejemplo son los matrimonios por conveniencia, antes la mayoría de las familias buscaban a alguien que encajara con sus intereses. Esto, desgraciadamente, sigue ocurriendo en países menos desarrollados. Por ello todos debemos aportar nuestro granito de arena para que la tolerancia y el respeto lleguen a todos los rincones del mundo y así evitar casos como los de Samuel u otros casos de homofobia, machismo, etc. Cada uno es libre de amar a su manera y de amar como quiera. El amor es querer incondicionalmente a alguien y hacerlo de una manera sana. Y si alguna vez te encuentras con una relación que no es sana, que eso no impida que conozcas a alguien y rehagas tu vida de la mejor manera posible. El amor es algo que debe hacerte feliz y nunca lo contrario, porque si no es así, no es amor. El respeto y dar lo mejor de ti es clave para que una relación salga a flote, sentir que tienes a alguien al lado que te hace sentir bien es algo que todo el mundo debería sentir alguna vez en la vida.
Octava
p l a n t a
