cartografia biográfica
fotografías alfredo méndez
Cartografía Biográfica La motivación para estructurar este trabajo nace de la idea : desorientación, extravío, pérdida, vacío, en la creación, en la producción y construcción de obra. Se hace indispensable establecer ciertos parámetros de búsqueda para entender qué se ha perdido, cuándo y dónde. Lo concreto es mi persona y su biografía. Su representación sensible la he de buscar en la emoción de lo vivido. Las emociones dejan huellas en el cuerpo y en la memoria. Las imágenes, a veces borrosas , de la infancia me animan a dibujar un recorrido, un mapa biográfico. Tomo la ciudad como referente ubicacional, su arquitectura como cuerpo histórico. Su antes y después ¿Qué había? ¿Que hay ahora? ¿Dónde comienzan y terminan los límites, dónde está el centro? Hago una analogía con la búsqueda del centro , su trazado y fundación. “Para encontrar el centro me relaciono con mi sombra” . Desde ahí nace el mapa biográfico, la nueva cartografía que sirve de modelo para la construcción. En el centro comienza, como un punto, la expansión de sus límites. Tomo el gesto primario pre-incaico y me dejo llevar por la naturaleza, por el curso de las aguas, la salida y entrada del sol, la noche. En este encuentro “sagrado” e íntimo, viajo en el tiempo hacia la ciudad primera, donde nada había más que una ilusión con futuro. Esta es la “imagen imposible” que vive en lo más profundo de cada ser.
El valle sagrado de “La isla de Santiago del nuevo extremo” fue determinado por el curso de las aguas del río Mapocho. La figura primera que marcó la tierra es trapezoidal, casi un triángulo. Sobre esta superficie “sagrada”, fértil y brillante la cultura pre-inca lo asume como una tierra sagrada para la adoración del sol. Siendo un valle, estudiando los ciclos agrícolas, logran trazar y dibujar un centro utilizando como puntos de referencia los solsticios de verano e invierno. En estas fechas, a la salida del sol desde el oriente, el cerro Hueltén (Sta. Lucía) y el Tupahue (San Cristóbal) respectivamente marcaron con su sombra al amanecer un punto que marcaba el inicio de la siembra y luego de la cosecha. El cruce de ambas sombras con sus líneas invisibles, marcaron el lugar exacto para la ceremonia sagrada. A la llegada de los españoles, heredan el legado indígena y sobre el campo sagrado fundan la ciudad colonial, ubicando la plaza de armas en el mismo terreno. Construyen la catedral encima de este punto ceremonial y la ciudad comienza su expansión clásica con un centro “desplazado”. Es decir, que la proporción de acercamiento de los bordes del cuadrante “damero” y los límites de la primera fundación de la ciudad son asimétricos, estando hacia el sur más cerca del río Mapocho que su lado norte de la actual Alameda respectivamente.
santiago 1541
z
rio
centro
alameda
(...) Por múltiples razones(históricas, económicas, religiosas, militares), Occidente ha comprendido demasiado bien esta ley: todas sus ciudades son concéntricas; pero también, en conformidad con el movimiento mismo de la metafísica occidental, para la que todo centro es el lugar de la verdad, el centro de nuestras ciudades está siempre lleno : lugar marcado, es en el que se conjuntan y condensan los valores de la civilización : la espiritualidad (con las iglesias), el poder ( con los ministerios y oficinas), el dinero ( con los bancos), el comercio ( con los grandes almacenes), la palbra ( con la ágora : cafés y paseos) : ir al centro es reencontrar la “verdad” social, es participar de la soberbia plenitud de la realidad. (...) pag. 48. El Imperio de los signos / Roland Barthes
Roland Barthes, El Imperio de los signos, p.48
http://www.scoop.it/t/santiago-de-chile http://cartografiabiografica.blogspot.com
santiago del nuevo extremo 2013