EN MOVIMIENTO
Boletín de orientación para activistas y allegados de ALIANZA PAIS. Nov. 7, 2010. Núm. 25 Alianza Mujer:
Flores al Altar de la Patria, manifiesto y taller “Nuestro partido y su programa de gobierno plantean con claridad el derecho de las mujeres a vivir en una sociedad democrática, de igualdad, sin ningún tipo de discriminación e injusticia. Debemos mantener una actitud crítica y activa frente al gobierno y su política neoliberal que profundiza la pobreza y la desigualdad. La mujer dominicana, 52 por ciento de la población, quiere, exige igualdad de oportunidades”. Es uno de los párrafos del manifiesto de Alianza Mujer leído por Ángela Henríquez en el Altar de la Patria, este domingo 7 de noviembre, al momento de depositar una ofrenda floral en ese lugar sagrado. Le acompañaban 48 mujeres aliancistas llegadas de distintas provincias del país y del Distrito Nacional. Luego del acto, las mujeres se dirigieron al lugar donde habría de realizar un taller sobre Género y Política, dirigi- En el recuadro, Angela Henríquez, lee la proclama. do por Chiqui Vicioso. Al final, aprobarían un plan de tra- Muestras de otros momentos de la ofrenda. bajo. Rosina Rodríguez, Coordinadora de Alianza Mujer, ase.Punto y aparte. guró que estas actividades significaban el verdadero arranque de la entidad femenina afiliada a Alianza País. ¡Que me devuelvan mis video-
juegos!
Arriba, Guillermo Moreno mientras se dirige a las participantes en el taller. A su derecha la educadora Chiqui Vicioso. A su izquierda Rosina Rodríguez y Alma Inoa, de la coordinación de Alianza Mujer. Abajo, Chiqui Vicioso iniciando el encuentro educativo.
Que son muchos y muy diversos. No los dejé en ninguna parte por descuido; me los han hurtado de mil formas y modos. La Ley, según los casos, tienes sus nombres técnicos que a veces me confunden: prevaricación, sustracción, fraudes, extorción, dolo, sobre-precios, comisiones, boato, tráfico de influencia, donaciones forzadas… ¡Uf! ¡De cuántas maneras me dejan con las manos en la cabeza! Disponemos, bien lo sé, de guardianes de la Ley, uniformados unos, con togas otros. Pero no hay suerte. Es decir, hay suerte pero parecen andar huyéndonos e ir a parar a casa de gente muy amiga de video-juegos ajenos. Yo solo sé que a mí hay que devolverme los míos, que son muchos y variados. Me los han robado y alguna vez tendrán pagar la afrenta. (Acepto cualquier consejo moralizante, por radio, TV o prensa, pero antes devuélvanme lo mío, que son demasiados años de aguante). LUM.