GUÍA PARA SALIR VIERNES 19 DE FEBRERO DE 2010
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Insólito Recorrer el alcornocal de Valdelosa, en la provincia de Salamanca, es abrir las puertas a una experiencia absolutamente singular
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AÑEJO. El alcornocal de Valdelosa, en Salamanca, se conoce desde el siglo XV. / JAVIER PRIETO GALLEGO
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RUTASCON ENCANTO
EL NORTE DE CASTILLA / VIERNES, 19 DE FEBRERO DE 2010
El bosque de los tapones
SALAMANCA. El camino propuesto esta semana discurre entre alcornoques en el monte de Valdelosa. / REPORTAJE FOTOGRﾃ：ICO DE JAVIER PRIETO GALLEGO
RUTASCON ENCANTO
VIERNES, 19 DE FEBRERO DE 2010 / EL NORTE DE CASTILLA
Montones de corteza de corcho a la entrada de Valdelosa.
Los alcornoques tardan una década en recuperar la corteza.
Un paseo por el mayor alcornocal de Castilla y León, muy cerca de la localidad salmantina de Valdelosa JAVIER PRIETO GALLEGO
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a frío ver tanto árbol a medio vestir. O a medio desnudar, según como se mire el baile. Pero así es la vida de un alcornoque: a la que se descuida, llegan los sacadores y le levantan la falda al bosque, primero le rebanan las cortezas de abajo y luego las de arriba. Por eso, darse un garbeo por el mayor alcornocal de Castilla y León es como pasar revista a un ejército de gigantes a los que se les hubiera olvidado ponerse los pantalones. Algo que mueve a compasión cuando el termómetro está bajo cero y el aliento se petrifica a la altura de la nariz. Pero los alcornoques deben de estar acostumbrados a estos exhibicionismos y saben que debajo de una buena capa de corcho se esconde un muchachote fuerte y valiente, capaz de resistir el invierno más crudo. Además, los alcornoques saben que cada 10 años, cuando por fin han conseguido volver a vestirse con un confortable traje de gruesa y aislante capa de corcho, volverán los sacadores a dejarlos con su piel más sensible al descubierto. Bien es verdad que estas faenas arborícolas acostumbran a realizarse entrando el mes de julio cuando, la verdad, debe de ser un alivio quedarse como en mangas de camisa.
va hasta el pago de Las Cuatro Roderas. El inicio del paseo, que no ocupa más de tres horas, se hace por el camino que sale de la calle de San Roque hacia los antiguos lavaderos. Ahí se comienza a ver ya la señalización que guía sin posibilidad de pérdida a través de este sector del monte de Valdelosa. A efectos de ordenar la saca de corcho cada diez años, todo el alcornocal se halla dividido en diez sectores, a los que se acude de forma rotativa anualmente, dejando descansar los otros nueve. Por eso muchos de los árboles linderos de unos sectores con otros llevan dibujado en el tronco el número del sector al que pertenecen.
Entre huertas desordenadas
Carteles que informan sobre las especies que crecen en el monte de Valdelosa.
ALCORNOCAL DE VALDELOSA En marcha. Hasta la localidad de Valdelosa, en las proximidades de Salamanca, puede llegarse desde el desvío que surge en la N-630 muy cerca de Huelmos de Cañedo hacia Valencia de la Encomienda.
Salamanca
El paseo. Con inicio y final en los antiguos lavaderos de la localidad, tiene una longitud de 7 kilómetros que pueden realizarse bien en unas dos horas. Sin desniveles apreciables y bien señalizado, discurre por pistas forestales aptas para recorrer en bicicleta. En el camino hacia la localidad de Aldearrodrigo se localizan fácilmente dos de los ejemplares de alcornoque más espectaculares de este monte.
6.365 hectáreas El alcornocal de Valdelosa ocupa una superficie de 6.365 hectáreas y no hay otro igual en esta comunidad. Es uno de los más grandes de la península Ibérica, detrás de algún otro de Extremadura y Portugal. Por eso recorrerlo, además de una experiencia bien apetecible en cualquier momento, es abrir las puertas a una experiencia absolutamente singular. Las posibilidades son varias. En principio basta llegar a la localidad con ganas de perderse por cualquiera de las pistas que parten de ella y se dispersan en torno al pueblo. Pero quien prefiera una paseata tranquila y señalizada puede entregarse al recorrido que lle-
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Alcornocal de Valdelosa
Huertas
Zamocino 300 m
Información. Ayuntamiento de
Lavaderos: Inicio Huertas
Valdelosa: t 923 31 42 40. www.valdelosa.com
Valdelosa
Dormir. Teléfono de información institucional: 902 20 30 30.
La primera parte del recorrido –1,5 km.– discurre entre las huertas algo desordenadas que atienden los vecinos del pueblo. Pero la llegada a la embocadura del monte con más enjundia se anuncia a la vista del esqueleto –mucho más descarnado que un alcornoque sin nada de corteza– del pretendido Centro del Inter- Los alcornoques, pretación del Alcornocal –para otra vez las encinas y será–. Un poco más los robles de la adelante se alcanza la zona dan cobijo bifurcación a la que se regresará tras finali- a una variada zar el rodeo por el comunidad monte. Éste se coanimal mienza por el brazo derecho, al tiempo que se alcanza una pequeña charca, y continúa sin posibilidad de pérdida en los diferentes cruces que se van alcanzando. No es, ni mucho menos, el sector con árboles más ancianos, pero ofrece una interesante visión del ecosistema que conforma un alcornocal de estas dimensiones, con abundancia de otras especies –encinas y robles, sobre todo– cobijo a su vez de una variada comunidad animal que tienen en la bellota del alcornoque un suculento sustento apetecible en cualquier época del año. El alcornocal de Valdelosa es conocido desde el siglo XV, si bien el aprovechamiento y cultivo del corcho comienza a partir del momento en el que este material empieza a considerarse idóneo para la elaboración de tapones. En la actualidad, este alcornocal llega a ofrecer una producción anual cercana a los 200.000 kilos. Al pie del camino que lleva hacia Aldearrodrigo se localizan dos alcornoques mastodónticos de edad muchas veces centenaria: espectacular.
info@javierprietogallego.com