Rio de vida en racimos by amarillascom

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PRÓLOGO

n el umbral de mi vida me detendré para pensar un minuto en lo que hasta ahora ella ha sido. Si la propia realidad no es más que un simple pasar por las cosas, cuando algo ocurre creo estar tan aferrado a ese acontecimiento que pienso no terminará nunca, más enseguida me doy cuenta que todo aquello que hace unos instantes ocurrió, no es mas que un recuerdo. Los hechos que el tiempo trae consigo entran en mi vida como en una burbuja, es por eso que me siento envuelto dentro de ese marco invisible que es la vida y flotando en ella giro en mis recuerdos. De ésta forma me confunde el tiempo, y parado en el umbral de mi pasado y de mi futuro, recurro a las letras que estampé en versos por casi treinta años de escritura que una vez más me hacen reflexionar. Desde mi comienzo a la edad de trece años, voy registrando paso a paso en cada una de las etapas de mi vida, sentimientos de amor en todas sus expresiones, alegrías, tristezas y otras percepciones que logro captar del mundo que me rodea y envuelve. Así, ascendiendo en el tiempo escribo las vivencias de mi Infancia, mi Adolescencia, toda mi Juventud y parte de mi vida Adulta. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

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Río de Vida en Racimos, es en verdad la síntesis de estas Cuatro Etapas de mi Existencia. El cause de acontecimientos que se pueden comentar se van cuajando en versos, grano a grano uniéndolos cual fuesen Racimos que prenden de un marco invisible. Mi querido Lector, a quien van dirigidas estas palabras deberá tener presente que al recorrer las páginas de esta obra irá avanzando junto al Autor por un camino en que gradualmente se asciende en la vida de un hombre. Tomando en cuenta para ello cada una de las etapas y las fechas registradas en la mayoría de los Poemas, y poniéndose en el lugar de éste y de acuerdo a la edad, podrá evaluar e interpretar con mayor voluntad los versos que a través del recorrido de los años he logrado componer con la finalidad de legárselos gentilmente a los que acepten mi obra, y por otra parte para cumplir con el sano anhelo de permanecer en la memoria de mi familia y todos mis seres queridos cuando ya no pueda acompañarlos a quienes dedico con todo cariño éste Libro. Les invito con toda humildad a ingresar en el viaje de mi vida. El Autor Valentín A. Gajardo Ríos Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

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INTRODUCCIÓN veces tu recuerdo ha llegado con una ¿Cuántas melodía causando en mi corazón una herida? El ave se ha creado su felicidad, sus ansias de vuelo, su libertad. Es libre porque el destino es así para ella, como para la rama seca que no puede sentir, como el hielo no siente que es helado, como las llamas no sienten su calor. Nada se puede unir tan fácilmente como dos de una misma especie. Dos gotas de lluvia se juntan y forman una sola, luego se unen con otras, dejan parte de ellas en las otras y llevan parte de las otras en ellas. Es el destino. Es así porque debe ser así. Una cosa ocurre porque debía ocurrir y si uno trata de que no ocurra, es porque el destino decía que uno trataría de esquivar ese acontecimiento. Cierta vez, determinada persona leyó su destino y vio como cierto individuo lo tomaba por el cuello y lo Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 8 estrangulaba. Para evitar que esto ocurriera tomó un arma y quiso matar a ese individuo, no muriendo éste en el instante lo tomó por el cuello y lo estranguló. Tal vez si esa persona no hubiese querido evitar al destino, no habría muerto. En consecuencia el destino no se puede burlar jamás, y jamás significa mucho, va más allá de que se acaben todos los mundos del Universo. Después de esto queda nada, y la nada no está tan cerca como se puede imaginar una mente humana, por que no es la luz, ni tampoco la oscuridad, es algo inagotable. Como esto hay cosas y más cosas, las personas deberíamos limitarnos quizás a vivir de las cosas sintéticas, no tratar de dibujar el silencio ni de dar forma a un día. Nunca se podrá poner límite al tiempo en general, porque somos mucho menos que un átomo en todo, porque cada persona no es capaz de expresar ni un segmento de lo que su mente y el subconsciente le dice. ¿Qué pasaría si todos fuéramos felices? La vida sería tan monótona que cada uno de nosotros querría sentir al menos un poco de dolor. ¿Y si todo el mundo fuera inagotable de riquezas? Pues nadie querría trabajar ya que todos tendríamos el dinero suficiente para pagar. Llegaría el momento en que todos nos quedaríamos inactivos y los bienes no se encontrarían por ninguna parte. Todo es como debe ser y así es, es el destino, una recta que no se detiene ante nada y nada puede curvarla. En todo esto quien desempeña uno de los papeles más importantes es el amor. Un criminal fugitivo huye de la justicia para no ser condenado a la muerte porque resulta que descubrió que estaba enamorado de la vida. 09.01.1975 Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

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SOLO UNA FLOR. ¿ Si tantas flores hay en los campos, porqué tan sólo una he de querer?. ¿porqué será ella entre tantas la que mi corazón hace estremecer?. Como si un sismo recorriera mi cuerpo todo entero éste se agita haciéndome sentir que no he muerto y que aún mi corazón palpita. Oigo voces y no las escucho, veo luces en las tinieblas, mueren rosas sin haber muerto hay cristales que se quiebran. Y hay plantas sin tener huerto. Siento aguas que no mojan, siento llamas que no queman. Lloran ojos sin tener lágrimas, hay almas en dolor y no se quejan. Mientras yo estampo mi vivir habiendo cosas y más cosas. Habiendo dichas y desdichas y mientras tanto tú en tu felicidad y yo en mi soledad por sobre todas las cosas sólo a tu lado es bella la realidad. Vivir y morir contigo cuantas veces sea posible. Soportar el tiempo y amarguras, traspasar los umbrales más horribles, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 10 sintiéndote junto a mí para pronto despertar y sentir que no es así. Se me está escapando la vida sin ti ya no puedo ser feliz. 11.12.1974

LLUVIA DE NOVIEMBRE. Es nostalgia lo que la lluvia trae, es el amor el que mi corazón invade. Es Noviembre y sin embargo llueve y son gotas de cristales las que del cielo caen. Ayer brillaba un sol radiante, hoy un manto gris cubre su semblante. El rumor de la lluvia ya no me hace daño. Mi corazón ya no se agita como otras veces, ¿Trae la lluvia el desengaño? Y los cielos lloran, ¿ porqué? Ya se nos va otro año, uno más en mi vida. Uno más para que cicatricen todas las heridas. 30.11.1974

LLORA MI AMIGO. Mira como la lluvia cae, esa infinidad de gotitas cristalinas Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 11 todas ellas en una misma dirección. Escucha el murmullo que forman al estrellarse contra la tierra y confundiénsose con él llega como perdida entre la lluvia una melodía. Y el viento apenas se da cuenta que juega entre todas las cosas: Entre los verdes follajes mojados. ¡Sobre una hoja mira! Muchas gotitas descansan y se unen con otras. No, no es una lluvia triste, es primavera, ¿Pero por qué llueve? Todo me hace sentir nostalgia pero no pena, mi corazón ya no desespera como otras veces. Esta vez los cielos no lloran de tristeza, sólo son lágrimas de corazones que no pueden olvidar. Aunque difícil sea, con un amor se alegra el alma. ¿Pero por qué llueve? Los cielos que ayer resplandecían y el sol tostaba mi piel hoy se ha ocultado. ¿Sentirán pena por alguien? Tal vez mientras yo puedo olvidar un poco alguien sufre y se desespera. Pero para mí todo ya no es tristeza. Quisiera caminar, correr bajo la lluvia, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 12 que ésta empapara mis cabellos, que se deslizara por mis manos, por mi rostro. Pero me quedo aquí observando la lluvia que parece ignorarme. ¿Qué me pasa? Quizás no estoy contento, quizás yo mismo me engaño, no sé si estoy equivocado y los cielos lloren por mis ojos que ya están cansados del sufrir de ayer y tal vez del de mañana. ¿Es que acaso es imposible la felicidad? Dime tu amigo, dime ves esas lágrimas que aparecen en mis ojos. ¿No estoy feliz, verdad? Pero estoy contigo y tú lloras, ¿Por qué? Lloras porque no puedes olvidar. Ves que estaba equivocado, yo no estoy contento ni tú. Marchemos bajo la lluvia y perdámonos en ella. ¿Se podrá olvidar así? Sigamos el curso que nos hemos trazado y ya dejemos estas lágrimas que nos nublan aún más la mirada. No te veo pero estás aquí, llorando conmigo y con los cielos. ¿Verdad que no me engaño? Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 13 La lluvia ya no me moja el rostro, pero mis lágrimas sí. Amigo dime, ¿Porqué hemos dejado en este mundo tantas lágrimas juntos?. Sigamos tras la felicidad hasta encontrarla. No la dejemos escapar aunque por un poco de ella toda la eternidad debamos pagar. Y esa lluvia y ese murmullo ya no es grato para mí, comienza a herir mis sentidos y me hace sentir cansado. Quédate junto a mí y ayudémonos a sufrir. Mira la lluvia como golpea la ventana, al igual que nuestros ojos ella también está mojada. Son las lágrimas del cielo y las nuestras las que cristalizan las miradas. 30.11.1974

LLEGA EL OTOÑO. La niebla cubría los cielos, la noche fría ya estaba, poco a poco los astros se marchaban dejando sólo las luces nevadas. Un figura que pasa, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 14 borrosa se ve su silueta, bordada de espesa niebla, paso raudo e inquieto camina aquella persona. Una pareja se besa, el calor de sus corazones sus cuerpos puede entibiar, no pudiendo a ellos llegar la mano helada de la noche. Como haciéndose un reproche el otoño se encuentra inquieto, sabiendo que ya es triste al hacer padecer de frío a ese bosque desnutrido que una vez protegió al herido por el puñal del calor. Y la niebla que no ve todo esto cada vez más espesa cae sobre los cuerpos de distintas criaturas sin saber que pronto la vida será más dura con el entrar del invierno, con las lluvias que caerán empapándolos a todos ellos dejarán caer las nubes lágrimas de los cielos mostrando la tristeza en la estación de los llantos y que un corazón en quebranto no puede ya soportar. 25.04.1974 Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

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NUBES EN LA NOCHE. Nubes que cabalgan la noche aves nocturnas nevadas, como ojos se aparece una estrella aquejumbrada. Pasan y pasan sin nada, sin una huella siquiera, van el cielo galopando sobre un corcel de viento, destrozando con su aliento palidecidos follajes, por el otoño que lento ha impuesto su tristeza. Llegó la estación del poema, llegó la estación del lamento. 1974.

¿COMO? ¿Cómo se puede escribir un poema? ¿Cómo se puede dar melodía a una canción? ¿Como se deja de llorar de amor teniendo un corazón destrozado el que ya no siente nada, el que vive triste y desolado, por eso llora desconsolado?. ¿Cómo se deja de sufrir? Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 16 ¿Cómo se deja de sangrar? ¿Como se deja de llorar si no se pueden empapar todas las lágrimas que salen de tus ojos, todo el dolor que sientes, todo el amor en sollozos?. 11.06.1974

HASTA PRONTO. Las hojas que en el suelo yacían muertas, los árboles pálidos y sin ropaje, la lluvia que nos sorprendió en el otoño de nubes todos sus encajes. Verte partir quedando triste, amándote en la esquina de mis recuerdos, el viento que juega en tus cabellos y mi corazón que apenas palpita, ya casi muerto. 12.04.1975

ELEGÍA PARA UN QUERER. No sé si sólo pasó por mi mente, No sé que pudo ser. Quizás fue una blanca paloma que llegó en mi atardecer. Mi atardecer era triste, vino a alegrar mi soledad con unos momentos tan sanos sin un grano de maldad. Pude oír la melodía, la que canta el amor. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 17 Pude sentir sus tiernos labios acariciarme con pasión. Oí clarines llorar, También violines gemir. Oí una voz gritar sentir envidia de mí. Vi la tarde llegar y el sol escapar. Sentí llegar a mi alma campanas de dulce doblar. Pude observarte en silencio y besarte nuevamente. Pude rozar tu suave piel y desearte eternamente. Quise quererte tanto y que el amor rebosara en mí. Quise llenarte de gozo y que junto a mí fueras feliz. Fuiste un tesoro que mi vida invadió. Fuiste pétalo hermoso que la vida me brindó. Hubiese podido romper tu voluntad pudiendo hacerte mía, pero el arrepentimiento vino a mí, sólo por respeto a tu vida. Sentí que la vida se me iba por los senderos más floridos. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 18 Sentí tus tiernos labios en los míos adormecidos. ¿Pero por qué te tuve yo? ¿El destino lo quiso así?. Quisiera tenerte siempre y a la eternidad contigo ir.

Si me diste tanto amor porqué ahora me olvidas, o quizás fui sólo un juguete en las manos de tu vida. No sé si tú me engañaste, algo confuso hay en mí por ello no puedo olvidar sus labios más hermosos que un rubí. Tú quizás no te dieras cuenta, pues muy bien me escondí bajo una trinchera de dolor todo esto yo sufrí. Es por eso que quizás tú de mí te olvidaras creyendo que una farsa con tu corazón yo jugaba. Y si hubo una canción que a los dos nos pudo unir, ¿es posible que haya algo que nos pueda dividir?. Fue tan corto el tiempo Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 19 en que me diste tu amor, y es tan grande el olvido y más grande el dolor. Fueron cortos esos momentos. Inquietos a la vez. Como un rayo pasaste por mi vida para olvidarme después. 1973.

INCOGNITA. Cual un cisne herido de muerte lanza por primera y última vez la melodía que antes nunca pudo interpretar, como demostrando a la vida, o quizás despidiéndose de ella para dejar el ingrato mundo. ¿Querría cantar al universo cosas inexplicables?. Tiempo, luz e infinidad de continuo se harán seguir en la ruta de la vida tan llena de crueldad, eso que llaman vida y tan difícil de explicar. ¿Quizás sólo sea un sueño del que no podemos despertar?. Dimensiones y proporciones de continuo se harán también seguir no existiendo jamás el futuro, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 20 el presente ni el pasado. Quizás en todos tengamos que vivir. Si en un momento estamos, quizás ya transcurrió teniendo ente nosotros un espacio exterior. Deja libre una pregunta, ¿Cuántos más podrán existir?. No lo sabrá jamás el hombre, no podría llegar allí. Y si un sol nos alumbra, ¿Cuántos más podrán haber?. Podría explotar una mente no llegando a lograr el objetivo indefinido tratando de explicar. Sólo somos una incógnita en un valle de dimensiones. Es mejor dejar al destino que él tome decisiones. 1973.

PABLO. Tú que eres como el agua en los cristales. Tú que has escrito tanto y el enjambre de tus versos nunca nadie podrá olvidar, ya que los versos más hermosos sólo tú podrás crear. Siempre están copiando todo lo que tus ojos mirando están: La roja amapola que un niño fue a cortar. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 21 Así estos versos yo te he de dedicar por tu éxito, por tu orgullo y por tu paz. 1971.

ODA A ISLA NEGRA. Isla Negra, pequeña parte de Chile, residencia de un gran Poeta, donde su voz cansada implora eterna paz. Racimo de versos por bella te escribo. En tus noches de blanca luna y de hermosura infinita ruidos lejanos oirá el Poeta al estar inspirado y ser recordado por el brusco cerrar de una ventana. Allá a lo lejos, en las sombras, el aullar de los perros, las siluetas de frondosos y siniestros árboles se pierden en tu hermosura. En ti algún día el Poeta tal vez encuentre Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 22 el olvido de algún amor perdido. 1971.

PACÍFICO TE DIERON POR NOMBRE. Es nuestro Mar una extensa belleza que se hiergue de Norte a Sur. a lo largo y por la ladera, nuestra franja corona de azul. Con tus playas bordadas de arena se ilustra el más bello paisaje y tus aguas las surcan los barcos emprendiendo el marino su viaje. Tus entrañas que guardan riquezas, alimento es para mi hermano extraídas por el pescador que trabaja con redes en las manos. En verano te pueblas de aves, majestuosas gaviotas aladas que veloces surcan los aires sobre tus quietas aguas saladas. Una lancha navega en la tarde, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 23 el mar encendido se puede ver, noche caerá ya muy pronto con el mágico atardecer. Y en invierno que solo te quedas, ni gaviotas se oyen cantar y al pasar las nubes tan altas te dejarán caer lágrimas de su llorar. Inspiración de poetas habéis sido como ningún otro Mar pudo antes, todos ellos os llevan prendidos formando de su alma un parte. Isla de Pascua en ti es el Edén con sus grandes y esbeltos moais de piedra y hechos por el viento en Chile solamente los hay. Y un veintiuno de Mayo cuántos valientes cayeron, que con la espada en la mano al enemigo combatieron. Arturo Prat y su gente en vano no dieron sus vidas, y en tus aguas victoriosas no sintieron sus heridas. Desde entonces nuestro Mar en una rada de gloria guarda con el selo de una madre el noble sueño de la Esmeralda. 1974.

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ALMA DE GITANOS. Tienen alma de gitanos y siempre por el mundo van procurándose un destino que no logran alcanzar. Yo recuerdo que hace un tiempo en otro lugar se encontraban donde tenían un huerto que ellos mismos cultivaban.

Pero dejaron ese huerto y hacia otro lugar marcharon se quedaron sólo un poco y ese lugar también abandonaron. Hoy se encuentran donde están con deseos de volver a marchar yo no quiero seguir con ellos quiero en este lugar terminar. Aquí yo he crecido, y mis sueños me he forjado, tengo el alma llena de fantasías de todo este lugar amado. Amo las hojas de los árboles, el agua y el cielo azul, las estrellas de la noche vestidas de fino tul. Cuánto han sufrido Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 25 en cada sitio que han estado. Cuántas alegrías han tenido, y cuántas lágrimas han dejado. Son mis padres los que tienen esa alma creen ver en cada lugar distinto el marchar de la noche y el nacer del alba. Es verdad lo mucho que los quiero, también que lo hacen por nosotros pero quiero quedarme aquí y no ir lugar tras lugar, uno tras otro.

Mi Madre también ya está cansada y no quiere seguir caminando cada vez que está conmigo me lo cuenta mientras sus lágrimas va secando. ¿Qué puedo hacer yo en todo esto? Nada más que decirles basta, consolarla hasta que el deseo de quedarse en mi Padre nasca. Pero él busca nuevas tierras con la vista y los sentidos, desespera en su lecho para luego quedarse dormido. Soñará quizás con un palacio, con futuro lleno de dulzura lo refleja su mirada dura pero llena de ternura. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 26 Yo que de él quizás todo eso he heredado, pues también soy un vagabundo, pero sólo en mi fantasía en la cual vago por el mundo. Es la realidad más dura que los sueños, es verdad porque es la vida. Cuando niño le prometí castillos a mi Madre cuando solía encontrarla dormida. Aún no he podido dárselos, soy muy joven todavía, pero sigo prometiéndoselos noche a noche y día a día. 23.05.1975

DESILUSIÓN. Pasando el tiempo, con él una esperanza aún y llega el dolor de la desilusión destrozando el corazón, como el rompimiento de cristales, con una lágrima que cae escapando penas del alma llana de alegría, sofocada de tristeza, anhelante de ser amada. Llevando la vista al cielo, implorando compasión, creyendo que llueve con sol siendo las lágrimas grises que ya te cubren los ojos, como lagos misteriosos que dejan ver en el fondo Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 27 reflejado un corazón lastimado por el amor incapaz de volver a querer como si existiera una sola mujer. Dejando estampada en la vida una imagen de tristeza. Destino cruel forjó de un golpe la vida dando la espalda al amor para que no exista en el futuro otro dolor, otra desilusión, para un hombre que amó.

RECUERDOS EN LA NOCHE. Solo quedé en las sombras, la noche fría ya estaba, y mis ojos que lloraban presintiendo el resplandor de un amor pasajero para olvidar el que ayer siendo cruel y embustero puede quererle tanto, viviendo en un quebranto hasta hoy mismo que lloro sin poder olvidar aún esos momentos que añoro, y que deseo volver a vivir sabiendo que he de sufrir, porque si malo fue su cariño se volvería a repetir.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 28 Pero no has de venir porque de otros ya vives engañando y mintiendo como lo hiciste conmigo, burlándote del mundo mismo sin saber lo que cometes, hiriendo con el cinismo de demostrar tu amor, burlándote del dolor del que puede morir llorando, por una mujer que amando puede olvidar tan pronto, despertando luego en otro tal como lo hizo en mi ese amor tan fuerte y que por el he de sufrir. 1974.

ES EL VIENTO. Es el viento el que silba una canción de lamento, acompasado por la lluvia que golpea con furia mi rostro, que empapa mis cabellos y se desliza por mis ojos, como lágrimas, como sollozos. Es el viento tan frío como un corazón que no ama, como un alma que no siente. Es el viento el que juega entre pálidos follajes, el que corre en la soledad del paisaje. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 29 Es el viento tan huracanado, es la lluvia tan helada y es la noche tan oscura, que me hace sentir amargura y me siento como una hoja que yace muerta por las garras del otoño. Es el viento, es la lluvia y es la noche lo que siento dentro de mí, y yo me siento parte de ellos, como una gota de lluvia en un momento de tristeza. 24.06.1974

OJALÁ. Soy un soñador bajo la lluvia que no ve la realidad, soy un soñador y por lo mismo estoy odiando mi vida. Quiero olvidar, ojalá pudiera. Quiero amar, pero a quien me quiera. No más sueños ni falsas promesas, no más alegrías entre penas. Quiero vivir la realidad, ojalá pudiera. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 30 Que la lluvia en verdad me moje, que el frío en realidad yo sienta. Quiero amarla y ser feliz, Pero que ya no me mienta. 27.05.75 Cansado y triste ya estoy como un vagabundo cualquiera. Quiero correr y ahogarme bajo la lluvia, ojalá pudiera. A ella ya no le importo, engañado yo estaba. Fui y seré un soñador, por eso pensé que me amaba. Y al verla tan feliz y tan sonriente de su farsa hoy pude darme cuenta. Quiero amarla y ser feliz, pero que ya no me mienta. 29.05.75

LLOVIZNA EN MIS OJOS. Nublado se oscureció, el otoño se hacía ver con un manto gris oscuro, era triste el atardecer. Una llovizna después, quiso llorar de pena el cielo. Lejos, tan lejos de mí se marchó el amor que anhelo. Después todo fue lluvia, hasta mis ojos lloraban, la amargura que sentía Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 31 y el cariño que no estaba. Calmóse luego la fuerza conque el otoño pudo llorar. Algo me quema en el pecho mi amor no puede esperar. 1974.

A MI MADRE. Hoy poseo una Joya, la más cara de todas. Una, pero viviente orgulloso de tenerte cerca de mi Madre mía. Siento miedo de perderte y que solo me dejaras; pero mejor no pensar, pensar en esas cosas cuando no se han de esperar. Un corazón yo poseo lleno de amor para ti, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 32 el cual espera que en la vida nunca te alejes de mí. 1972.

PAZ Y AMOR. La paz y el amor son virtudes de Dios, y aquel que las posea será sin duda feliz, feliz por mucho tiempo, tiempo inolvidable, inolvidable para quien sea su dueño, dueño que lo cuidará para que no se convierta en sueño, sueño que es verdadero, verdadero en muy pocos quienes se conforman con nada, con algo, con muy poco. 1972.

QUISIERA. Mi mente está ya cansada de pensar tanto en ti y se me nubla la mirada de un rojo carmesí. Tu cintura es tan débil siento ganas de tocarla, pero después me arrepiento por el temor de dañarla. Tus labios hermosos quisiera yo besar, pero si lo lograra Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 33 no los podría dejar. 1972.

LO QUE ES MI AMOR. Mi amor es una flor que ya está florecida, ella conoce mi pasión que durará toda la vida. Sus pétalos se abrirán dando pasos al querer, mis labios querrán besarte al llegar el atardecer. Si esa flor se marchitara yo moriría de pena, y mi alma quedaría en una eterna condena. 1972.

COMO ES MI AMOR. Amor sin amor se apaga, dicho que es verdadero, pero mi amor no se apaga tan fácil como el fuego. Además es algo grande, grande como tan noble, y por siglos seguirá tan firme como la rama de un roble. Mi amor es transparente, como el agua en una fuente, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 34 cristales que son quebrantes pero mi amor es más fuerte. 1972.

TU MIRADA. Me gusta tu mirada porque es como inocente, tanto me gusta y me agrada que me es insuficiente. Tus ojos ya cansados de mirar tanta belleza, suavemente se cerrarán con una inmensa tristeza. Tu mirada es penetrante ante mi corazón, y quiere llegar hasta el fondo para extraer mi amor. 1972.

MI AMOR SEGUIRA. Si al pasar el tiempo y con él la vida se va, aunque pasen y pasen los años, mi amor seguirá. Nunca sabré hasta dónde mi amor podrá, lo más probable que siga con la infinita eternidad. Si en todo éste tiempo Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 35 no descubres lo que siento por ti. Será mejor que lo sepas para no hacerme infeliz. 1972.

AMOR DESESPERADO. Siento muy dentro de mí un amor desesperado, y por tu ingrato querer me quedaré apasionado. Cuando al pensar en ti siento ganas de llorar, llorar lágrimas amargas que es inútil empapar. Nunca pensé quererte tanto, como lo iba a imaginar pero yo mismo soy testigo que no lo puedo evitar. 1972.

AMOR IMPOSIBLE. En las noches de luna los astros me contemplan, y por el amor que yo siento quizás me compadezcan. La palabra amor yo la escribiera con sangre, lo mismo que tu bello nombre si juraras por un momento amarme.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 36 Nuestro amor es imposible, el destino lo quiso así, pero quiero que tu sepas que no te olvidaré aquí. 1972.

NOCHE DE OTOÑO. La noche está estrellada en el otoño, la lluvia hace un rato que cesó. Quisiera hoy partir lejos del mundo y ahogar ese amor que mi corazón invadió. No sé cuanto te he querido, no sé si en verdad yo sufro pero al verte partir en silencio sentí en mi alma un susurro. Sería quizás el viento, quizás un suspiro dejé escapar. O tal vez sería la melodía de tu callado llorar. 30.05.75

UNA ESTAMPA DEL OTOÑO. Mientras la lluvia golpea fuertemente los techos de las casas cercanas y el viento remolineado hace caer las hojas muertas, pálidas por el otoño ya crecido, yo estoy aquí sin verte, temiendo que algo pueda sucederte. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 37 Los árboles se inclinan por la fuerza conque el viento sopla, y que viene desde de allá muy lejos, donde la lluvia es impenetrable a la vista del ser. Siento en mi pecho el dolor del amor desesperado, que semejan las hojas que van tocando el suelo y que no quieren abandonar la madre planta. Sigue cayendo la lluvia, es el otoño que aumenta, como aumenta mi amor por ti. Veo la lluvia cambiar de dirección y pienso como sería mi vida si mi amor también lo hiciera. ¿Por qué es así la vida? Ingrata en mi corazón, mientras que otros gozan del infinito calor, que sólo lo brinda el correspondido amor. La lluvia cae formando sin cesar un poema, como queriendo cantar la melodía, la más dulce para alegrar las almas vanas. Ahora el viento es más fuerte y los cielos comienzan a oscurecer, mientras que mi amor comienza a envejecer. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

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VENTANAS AL AMOR. Abiertas las ventanas del amor transmiten su calor como una paloma. Dos labios que se unen son como de dos flores el aroma. Los ojos que emanan ternura, las manos que brindan caricias, los brazos que oprimen el cuerpo arrancan de la vida todas las delicias. Las pieles que se rozan, los suspiros que se confunden, el dolor que no se siente, todo en dulzor se funde. La pasión que invade el aire, la habitación que los oculta, el destino que les rige. Dos enamorados no tienen culpa. 30.05.75

“TARDE... VIENTO...” Tarde... y el viento sopla arrastrándose y trayendo consigo penas lejanas, de una y de otras partes de la vida uniéndolas en su regazo. Viento... y una tarde calurosa de Enero Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 39 traen consigo nostalgia, uniendo las penas de las almas en sufrimiento. Y el adiós... con el rechazo unidos matan el corazón, de aquel que te siente llegar permaneciendo en él, inspirando la muerte misma en el pecho. 1975.

FRIO DE OTOÑO. Era una mañana de otoño y el frío que hacía casi calaba los huesos, porque la nieve allá arriba en la cordillera y los cerros desde lejos se veía. La ciudad estaba tranquila, ya casi no llovía, y las pocas gotas de lluvia que aún caían en los charcos de la calle y en la calzada se perdían. Vagaba triste y sin rumbo, las casas me contemplaban, entre penas daba tumbos y sentía como mi alma lloraba. Y un recuerdo latente me destrozaba la mente, me producía dolor Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 40 y sentía envidia de la gente que pasaban llanas e ignorando, sin saber del dolor ajeno y del recuerdo que me estaba matando, sin sentir lo que sentía, la vida yo estaba odiando. Hubiese querido irme lejos, sin tener que volver diciendo de todo yo me arrepiento, he sido un tonto eso es todo, basta ya no quiero seguir sufriendo. Pero al darme cuenta sólo aquí me encuentro escribiendo mis tristezas y con una recuerdo adentro. 30.05.75

ALEGORÍA PARA UN QUERER. I Cuando quiero escribir para ti la inspiración de mi mente se va. Cuando busco un consuelo en mi alma siento que tú ya no estás. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 41 Pienso tantas veces en ti que llenas todo, todo mi sufrir, te siento tan cerca de mí pero tú no estás aquí. Veo la tarde marcharse y siento nostalgia en todo mi ser, llegaste tú a mi vida haciéndome de nuevo nacer. Té extraño, te quiero y más te amo. En silencio yo sufro y suspiro por ti, mis ojos conservan tu imagen pero no estás aquí.

II Si yo fuese un poeta, tu serías mi mejor poema, tus manos la brisa y tus ojos las estrellas. La brisa que acaricia mi rostro y coge con dulzor extremo mis manos, las estrellas que alumbran mi alma, dos lunas entre grandes nublados.

Tus labios mi mayor satisfacción, tu rostro dulzor idolatrado, mi amor tan grande y tan noble, y mi corazón de todo ese amor embargado. Son tan largos los días sin ti Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 42 y tan cortos los momentos en que te veo, la vida es alegría y sufrir, ya no quiero sufrir más, ya no quiero.

III Estos versos que yo escribo están escritos con llanto, con el llanto más profundo por seguirte amando tanto; en soledad y con tristeza presintiendo verte pronto a solas te seguiré esperando, siendo esa una esperanza que me arranca de los ojos el llanto, nublándome la mirada y no me deja seguirte hablando, atrangantándome las palabras cuando yo te estoy llamando.

IV Tu mirada que fulminó mi alma, las palabras que me hicieron amarte, son testigos de cuanto te he querido y cuanto he deseado estrecharte; en mis brazos besarte y besarte, tenerte siempre junto a mí y jamás por nada dejarte.

Tú me haces sentir cosas nuevas, me enseñas el verdadero amor, me haces sentir alegrías y me haces morir de dolor.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 43

V El calor que me da tu vida, el fulgor de tus miradas, la ternura de tu nombre, me llenan de ideas aladas, como mariposas en la brisa que bailan la melodía inmaculada, como hoja que el viento en otoño coge, como la más hermosa balada, como tu mano juega en el viento señalándome una llamada. 05.04.75

SILUETAS BAJO LA LLUVIA. Al ver las calles mojadas por la lluvia, y los vehículos con sus luces que traspasan y escurren entre tantas gotitas, me desespero y quiero verte, dejar ese orgullo que a los dos nos quita el amor, y con él, la felicidad. Y el frío me hace sentir más lejos de ti. La calzada me muestra imágenes grotescas, siluetas siniestras, oscuras y frías. 30.05.75

HOY UN MES. Hoy un mes de unión en nuestras vidas, un mes de penas, llantos y alegrías. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 44 Un mes que cicatrizó en mi alma la gran herida que tenía. Nunca pensé quererte tanto, jamás pensé que esto ocurriría, viviendo para ti, besándote día a día. 26.04.75

ÉGLOGAS DE UN AVE NEGRA. Voy a contar la historia que le ocurrió a un hombre que en su vida jamás amó, hasta que un mal día en su destino cruzó una mujer creída buena, y a él le juró darle su amor entero, pero sólo fue traición. Vivió feliz durante un tiempo, hasta que de la farsa pudo darse cuenta, tarde ya era entonces, para él, ella estaba muerta. No pudo acercárcele más. La vida se le estaba escapando, con la huida de ese querer el corazón se le estaba destrozando. Su alma era un ave negra, que por el mundo iba vagando, sus ojos no veían el sol Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 45 pues todo el día estaba llorando. Moríase poco a poco de pena, llanto y más llanto, el ave era cada vez más negra y por el mundo iba cantando. Entonaba las melodías, las más tristes que han existido. Seguía cantando y cantando todo su dolor sufrido. Dicen que una noche hasta la ventana de ella llegó, era su alma y eran sus ojos y sólo de ellos llanto brotó. Sin embargo la ingrata, no hizo más que reír y burlándose de éste, lo hundió en un más negro sufrir. Y dicen que desde entonces, el ave negra ya no cantó, voló lejos muy lejos, y desde entonces ya no volvió. La encontraron tendida, la muerte se la llevó, tras haber sufrido tanto su cantar nadie mas escuchó.

Quizás en el cielo un día la pobre ave pueda encontrar, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 46 el dulce descanso eterno y con el descanso toda la paz. Yo no soy un ave negra, quizás lo llegue a ser. Vagaré por el mundo entero, pues por tu amor me voy a perder. La noche que me envuelve es fiel testigo de mi sufrir, tú te has marchado lejos y yo de pena voy a morir. Quizás una paloma blanca con su cariño me haga olvidar, y las llagas que yo tengo quizás ella pueda curar. Quiero encontrarte paloma ¿Dónde podrás estar?. Arrulla tu melodía que yo la mía te voy a dar. ¿Por qué no fuiste tú la que yo encontré primero?. Pensar que no la tengo y que es ella a quien yo quiero. Arrulla paloma, cada vez más fuerte así yo te podré encontrar, y así tú me libras de la muerte.

La historia que yo he contado Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 47 no es más que una historia que me ha venido a la memoria al compararla con mi querer. (No es la historia de mi vida, pero quizás lo llegue a ser). Porque ha pasado el tiempo y de mí no se ha acordado no quiero vivir sin ella a pesar de todo lo que he llorado. Noche tras noche espero que de mí se llegue a acordar, podríamos ser felices, nos volveríamos a amar. No pierdo las esperanzas de volver tus labios a besar, quisiera que ocurriese ahora aunque ellos me hagan temblar. Nadie, sin embargo, sabe lo que con ello pueda pasar, quizás me quieras de verdad o tal vez me vuelvas a engañar. Es mejor dejar al destino que por los dos tome decisiones, que si hay alguien que de amores sabe, es él quien sabe de amores. 04.06.75

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Río de Vida en Racimos – Pag. 48

FRASES VAGAS. Gaviotas idas a la mar, aposento para un querer. Corazones que rebosan penas. Cariño sin contención.

Ventana mojada de lluvia, ojos húmedos de llanto. Cristales transparentes, alma semejante. Amar es el destino del hombre, es el gran drama, es su mayor título de gloria. No sé cuándo ni dónde pero sé que ocurrirá. 1973.

Mujercita de edad madura pero de vida joven. 26.06.75 ¿Por qué brilla tanto el sol estando en la estación de invierno? Será que todos ignoran lo que mi corazón está sufriendo. 1974.

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MI MADRE, LA VENTANA Y LA NOCHE. Ahí estaba mi Madre con la vista fija en el infinito, los limpios cristales no podían detener sus pensamientos, parecía verlos esparcidos en la habitación. Desde la oscuridad de la noche yo me hacía un reproche al ver su desesperación nítida pero tranquila, sus suspiros parecían canción. Jamás me habría atrevido a interrumpirla, ni a exhalar un suspiro mío que le hubiese quebrado la quietud. Ahí estaba mi Madre, sentada en un sillón frente a la ventana, analizando sus problemas, las cortinas corridas, con las manos trémulas. Las luces de la calle encendidas, con poco brillo hasta ella llegan. Podía ver la luna que tras la montaña aparecía, era como un gran disco de oro que desde la habitación se veía, las estrellas centelleantes, por un momento me parecía ver dos de aquellos diamantes bajo sus pupilas. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 50

Era un cuadro tierno, pero triste. Me decía a mí mismo: Está sufriendo ella de la cual tu naciste. Ve y ayúdale en su martirio, búscale rosas y claveles, violetas, jazmines y lirios. Vístela de naturaleza porque de ella está forjada, corónala con estrellas, ilumina su mirada. Pero me quedaba siempre observándola sin expresarle ni decirle nada. Así pasé largo rato, y cuando la luna se ocultaba ella suspiró lárgamente, se dio cuenta que yo estaba, me refirió un sentimiento con las palabras entrecortadas, mas yo pleno de ternura no me atreví a contestarle, le dirigí una mirada la que podría expresarle lo que en palabras debí decirle y en hechos presentarle. Que quietud existía entonces mientras ambos meditábamos. Que dulce era sentirla cerca y que grande lo que ganábamos: Yo, más que un cariño de Madre, una sincera amistad, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 51 unos consejos tan sabios, todo un mundo de verdad. Mi Madre estaba conmigo, ante nosotros la ventana. Parpadeaban las luces exteriores y los cristales se empañaban, las cortinas ondulaban, de dulce emoción me embargaba. Yo parado junto a ella, ella en un sillón sentada. Y ya no decíamos palabra sólo mirábamos la noche, la ventana parecía llorar sólo quietud, ni ruido, ni boche. Ninguno se atrevía a hablar. Era bello y nostálgico mas yo parecía clamar que aquel fuera un momento mágico y no la entera realidad. Cuando de pronto ella me dice: Hijo, ¿Qué no vas a salir?. Ve y diviértete mucho que yo estoy hecha para sufrir. Esas palabras que aún escucho, y de su corazón, el latir. Quedaba mi Madre sola, como sola pasaba siempre. Esta vez yo la acompañé en uno de esos pasajes que la vida le hacía presente, la habitación semioscura, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 52 de negros sus encajes.

Abrí la puerta con calma tratando de no hacer ruido. Dejaba a mi Madre sola entre los seres el más querido. Ahí quedaba mi Madre con la Noche y la Ventana, yo ya la había dejado, no la vería hasta mañana. 1975.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 56

INTRODUCCIÓN Muerte? ¿Qué es laMucho se habla acerca de ella y son muchas las preguntas que se hacen respecto a lo mismo, solo me limitaré a decir entonces:

EL DOMINIO DE LA MUERTE

í, la muerte tiene su dominio, ¿cómo explicarlo?, Así: La muerte domina antes de la vida, en la vida misma y más allá de ella. Se han preguntado alguna vez si alguna persona antes de nacer, antes de ser engendrado, ¿tuvo vida?. ¿Es que acaso vivimos?. ¿No han sentido muchas veces que su misma voz suena distante, que la cercanía de las gentes, de las cosas, de la naturaleza es lejana?. Me encontraba tendido en mi lecho, la habitación oscura, silente. Volví mi rostro hacia la ventana que quedaba a la altura de mi cama y comencé a meditar, así fui perdiéndome en pensamientos, en sueños, quizás no, porque no estaba dormido. Mi vista cruzó los cristales, perdí entonces el peso de mi cuerpo, la noción del tiempo, olvidéme del dolor, de las alegrías, de todo. Sin sentir nada más que como flotando en un espacio inexistente, con un cuerpo invisible y una mirada que quería abarcarlo todo. No sé si estaba cerca de la tierra o de las estrellas, solamente me sentía flotar. Desde la lejanía de todo y cerca de la nada mi mirada encontró mi casa, la vi claramente, quizás recordaba en sueños. Me vi yo mismo, acostado, durmiendo, en un sueño profundo, con un respirar tranquilo. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 57 ¿Pero dónde estaba yo, allá arriba o tendido en mi cama?. Un tumulto en mi mente, quebróse el silencio, me envuelve un remolino de nada, no de luz ni tampoco de oscuridad, un sobresalto, la habitación, la oscuridad, me toco las manos y ahí estaba, acostado como anteriormente lo estaba, ¿hacía mucho o poco rato?. Quizás en una fracción de segundo mi espíritu abandonó mi cuerpo y salió a vagar en la noche, en el infinito, pero mi cuerpo celoso quizás lo recobró después. Quedéme quieto. Silencio, oscuridad, yo y la realidad. Pude ver que el silencio era roto por un ruido lejano y comparé a éste con la oscuridad que es rasgada por un punto de luz. Entonces surgió la pregunta, ¿todo es igual a todo?. Pero entonces todo sería una sola cosa, ¿y si todo fuera una nada?. Quería decir que vivimos en la nada y que en la nada soñamos una vida, entonces la vida sería un sueño del cual despertamos en la muerte, que es la nada. ¿No sientes muchas veces que al tocar las cosas es como si no las tocaras, como si no las sintieras?. Puede ser que sólo toquemos nada más que un sueño, una ilusión, un espejismo, un engaño de nuestros sentidos. Y al dormise, ¿no han sentido, no han soñado que van por un camino, por una parte, por un paisaje que en otros sueños anteriores también pudieron ver?. En suma de todo esto, tan sólo queda un vacío lleno de preguntas e incógnitas. Por último pregúntate si no has vivido antes o si continuarás viviendo mas allá de la muerte. Podrá uno hacerse muchas preguntas de este tipo y se quedará sin respuesta, quizás hasta te aburras de todo, de la vida que es la palabra que encierra una de las más grandes incógnitas para las gentes y del mundo. Pregúntate a ti mismo o a los demás y te complicarás la vida. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 58 31.05.76

UN VIAJE. Me he encontrado solo, he pensado, he estado triste y he recordado. Suavemente a mí llega un Tren que viste de recuerdo y niebla. Se acerca, lo tomo. Viajo en él adonde él quiera. Ah, la estación de ayer Que triste y vacío me veo, desde el anden me observo: Voy caminando, piso fantasía Y después me desilusiono. Sigue la marcha el vehículo pensado, Me acomodo en un asiento de sueño Y sigo viajando. ¡Ah!, la estación de Octubre: Me veo feliz y río. Oigo música y después beso a esa muchacha logrando mi objetivo. Pasa un rato y vuelvo de adonde tuve que ir, vengo solo y es de noche no se porqué pero a llovido, las luces se reflejan en la calzada, entonces pienso mirando el cielo: ¿Qué es lo que soy? Un punto diminuto en la tierra Y en una parte del universo, donde no es mi ocaso Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 59 ni mi comienzo, sólo sé que existo y pienso. Vuelvo a mi asiento y me doy cuenta de que viajo hacia atrás. Una parada en un día de fiesta, pero no importa quiero seguir. ¡Ah!, la estación del invierno me da miedo pisar las baldosas de llanto que posee, pero viajaré. Todos me hablan con palabras mudas y yo lloro con lágrimas secas, me curan las heridas con leche dolorosa que poco a poco me calma el dolor hasta salir de la estación. El Tren avanza por rieles de imaginación con ruido silencioso y suave, me ven pasar gentes que no ven por que no están ahí donde yo las veo. Ah, la estación de Enero seco recuerdo tranquilo y aburrido de no salir y de ser el mismo. Mejor sigo y que cercana de la anterior está la estación de Navidad, las gentes lloran alegres y parten tortas y panes que se comparten entre los amigos, Mejor sigo. ¡Ah! Noviembre donde escribí aquel poema, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 60 donde lloré aquel poema.

No sé si seguir. He viajado un año mejor me quedo aquí, ¿Porque podré regresar?. Sí, es fácil, me digo vuelvo, subo al Tren que emprende el regreso tan rápido que no puedo ver las estaciones y ya he regresado. 27.11.75

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Río de Vida en Racimos – Pag. 61

¿SOY, SERÉ, EXISTIRÉ... ¿Cuántas veces me he olvidado de que existo? ¿Cuántas veces he pensado sólo en que vivo? Y hoy, ¿Qué me hace pensar en que mañana viviré?. Estoy Viviendo... Ah, la vida. Vivo soñando en los sueños, sueño soñando de día, lloro riendo alegrías me entristezco con el llanto y mi llanto brota de agonía. He soñado..., he llorado..., He reído... , he vivido... ...Estoy viviendo, quizás siga con vida o tal vez muera hoy día. Soy... y seré uno solo repartido en dos medidas, uno en mi realidad, otro en mi fantasía buena y de crueldad, de valor y como porquería pero mía y solo mía. He ido..., he venido..., He estado..., me he quedado... ... He vivido. ¿Seguiré viviendo aunque muera?. Sólo sé que estoy y soy en la vida alguien que sufre, piensa, ama y nada porque nada somos, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 62 como nada es el día como la nada cuando acaba. 27.11.75

JOVEN... AÑOS... VIEJO... Son los años los que han dejado en él una muestra de cansancio y hoy el mocetón fuerte, sólo es el viejo cara de brujo que pasa por la calle con un cigarrillo en los labios tan arrugado como la piel y que no le importa a nadie. Son los años los que le han pegado la piel al cuerpo, que le hacen parecer un muerto que camina siempre solo, que sólo habla con la noche y que llora con el viento, el que recoge las flores para ir a soñar y llorar en un huerto, para anclar sus esperanzas como anclaba su barco en el puerto en todas aquellas andanzas que las ha arrancado de un cuento. Son los años los que le hacen contar anécdotas, que se la contó un marino el que ha anclado en su puerto y que tiene la piel de vino, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 63 como las manchas que él lleva porque es su retrato vivo, aquel que le conversa y son así dos mendigos los que en la noche se alejan, son dos buenos amigos los que nunca se pelean. Y con los años sobre el hombro se aleja él y su retrato, después de hablar un rato sin que le escucharan, porque ese es el trato que siempre le darán y lo verán siempre vagar con una melodía en los labios que no la reconocerán porque tiene sus mismos años. 17.12.75

ADIOS, UN AÑO ADIOS. Adiós... Un año más se va, uno que he vivido y no sé si habrá sido un año de dolor, uno de alegrías, un año de amor. Porque he hecho el recuento y sólo sé que he vivido, sólo sé que no estoy muerto Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 64 y no sé como ha sido. Hoy el tiempo parece dejarnos parte de él. Pero él jamás perece como el noble laurel, ni tampoco él crece; pero es él y sólo él. Se va un segmento, ya lo dejamos atrás, pero estamos tan lejos del fin del tiempo, ni siquiera en la mitad. Adiós, un año adiós que ya muchos vendrán pues nunca se acabarán aunque se haga la oscuridad, cuando no quede nada, el tiempo seguirá. 29.12.75

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Río de Vida en Racimos – Pag. 65

MEDIA HORA DE ESPERANZA. Ya había pasado el tiempo y lo dejaba a mis espaldas, como un trasto de basura, como una vieja lata, que de nada podría servirme y que demás estaba. Sentado sobre mi lecho tembloroso meditaba y sentía como en mi pecho la espera se revelaba. Aún no llegaba. Aún no aparecía aquella persona esperada y que aún yo no veía. Paréme de improviso, los ruidos me sobresaltaban y nuevamente me quedaba observando el reloj, que los nervios me destrozaba con su ruido tan monótono y los punteros avanzaban uno tras de otro. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 66 Media hora me quedaba No sabía si era mucho o poco. Media hora de esperanza, media hora me quedaba más parecía una danza que el tiempo mismo bailaba. 29.12.75

ADIOS A LA TARDE. Tarde tibia tranquila y despejada, con sentimientos grandes y sin sentir nada, con aroma de flores y de hojas verdes, con melodías imaginadas, pero sin ruido, tíernamente callada. Va pasando por mí la tarde, se va hacia la noche, va chirriando con ruido de hojas y de ruedas de distintos coches. La tarde me invita a pasear y a respirar bajo los árboles, a coger frutos verdes y a escribir en los papeles. La tarde está envejeciendo entre ruidos, gritos y vientos, las aves se van durmiendo entre los árboles y su lamento.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 67 Se aleja, se aleja la tarde, acercándose viene la noche despacio, tranquila; cada una en su coche uno de sol y el otro de luna, sin que el uno ni el otro se choquen, cada una tan pura; es la tarde y es la noche. 15.01.76

CABALLERO EL VIENTO. Viento de Enero tibio y trastornado, enloquecido, sonriente y avergonzado, te juegas con las hojas como niño de su casa alejado. Es verano y tú eres el viento, es verano y te has aprovechado del sol para verte asoleado. Oh, jinete de polvareda, de hierba en desorden y de flores destrozadas. Oh, jinete de hojas, de aguas evaporadas, sigues tu marcha infatigada. ¿Hacia dónde tienes tu morada que galopas sobre la arbolada?. ¿Hacia dónde te lleva el camino que te enseñó el sol en la mañana?. Adiós Don Quijote invisible. Adiós caballero andante, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 68 llevas flores quebradas de coraza, has tomado el camino equivocado, ese te lleva a la plaza. Ah, allá encontrarás a tu Dulcinea, es la brisa de la noche que te abraza. 15.01.76

UN POCO MÁS DE FANTASÍA. Antes yo tuve un reino que nacía en la floresta era de flores y de viento, de brisa y de rocas frescas. Había un organillo de oro que tocaba melodías, las flores bailaban en la brisa cuando la noche moría, las rocas eran el pan que los príncipes comían, eran blandas y transparentes como aquellas melodías. Y hoy, me queda tan sólo el recuerdo de aquel reino encantado, todas las flores han muerto, el viento las ha quebrado, el organillo era de un cuento que cuando niño me contaron. Pero hoy como bohemio Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 69 también tengo mi reino, la noche es mi consejera y el vino, el pan más tierno; tengo vida pasajera, como el día y como el tiempo, vivo solo como hierba, como cuervo hijo de cuervo. Y se me van pasando los días y de a poco me voy muriendo, soy como todos y como nadie y como nadie estoy viviendo. Es mi vida y yo soy el Rey, mientras voy conduciendo un carruaje de fantasía embriaga en el ir y venir de mis viajes; es la vida que he querido y estos son unos pasajes. Porque viajo y vago siempre, porque soy un peregrino llevo estampado en el rostro mi vivir y mi destino de alegrías y tristezas, de agonías y de alivios. Porque voy siguiendo siempre, siempre un mismo camino y aunque vaya sobre espinas, vivo y he vivido. Yo acaricio las tristezas como niño inadvertido, como el viento a las hojas de un árbol florecido, porque vivo de ensueños, porque vivo y he vivido. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 70 Porque vivo y estoy viviendo embriagado de fantasía que corre por mis venas como aquellas melodías, en un cuento inventado, en un imaginado día que por ir creciendo se me olvidaba, se me iba. Ya le he dicho al tiempo la verdad que es sólo mía, la que nace con la noche y que muere con el día.

21.01.76

UN PERRO EN LA NOCHE. Sólo, al parecer abandonado, deteniéndose a descansar de su paso aligerado, automático al pasar, tremendamente ignorado. Parece nunca descansar. Llevando a cuestas las sombras como sonámbulo embrujado con el aullar hundido en el pecho. Amargamente callado. Sus ojos parecen estrellas. No, dos diamantes semidestrozados, sus patas parecen quebradas con su cuerpo que de débil es pesado. Si, yo sé, solo es un vagabundo más, un andante, un peregrino Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 71 que va buscando una meta, en su andar, en su camino. Su piel es el mudo testigo del que ha sido su destino, se puede leer en sus formas como en un viejo pergamino. Se va perdiendo en la noche con ligero paso cansino, se va siguiendo la huella que le ha marcado el destino. Adiós, adiós vagabundo. Adiós momentáneo amigo.

22.01.76

NO SOMOS DE UN CUENTO. Tanta vida que teníamos un día, toda nuestra para vivirla, más luego todo acabó con tu partida. Te fuiste lentamente, lentamente como herida, yo sé que debías marcharte aunque tú no lo querías, te era triste también dejarme pero te ibas, te ibas. Nos miramos deseando volver a vernos, nos besamos con el beso más tierno, nos alejamos cada uno sufriendo. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 72 Todo había terminado cuando teníamos tanta vida, yo no quería dejarte cuando eras tan mía, y en sueños me veía besarte cuando aún no me dormía. Y es seguro que tú entonces lo mismo por mí sentías, querías vivir nuestra vida cuando ya no podrías, todo había acabado con nuestra despedida. Más luego separados debimos continuar viviendo, lentamente tu recuerdo se me ha ido oscureciendo, tu tan lejos de mí, lejos de mí viviendo. Y allá en la distancia quizás me puedas recordar, como yo te recuerdo ahora y cuando no me debo acordar de un pasado que he olvidado y que no puedo olvidar. Porque va y viene a mi mente como un mágico carrusel, como jinete de fantasía en un mágico corcel, como llega la noche siguiendo el atardecer. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 73 Pero ya no me entristeces, porque no es como en los cuentos en que al irse la Princesa el Príncipe se prefiere muerto con el silicio más ancho y el agonizar más lento. 22.01.76.

MELODÍAS. Melodías: Evocando el recuerdo y viajando en el tiempo, llegando de tan lejos por un sendero viejo que permanece en la vida de aquel que un día quizás las interpretó en un pasado viejo, viejo como el tiempo. Melodías que entristecen con el romántico recuerdo de aquel que entonces quizás amó, y que una y tantas veces Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 74 quizás las escucho y que aunque aquello haya acabado su melodía no la olvidó, y siempre vuelve a recordarlo. Melodías no olvidadas y vueltas a recordar por la mente del que un día quizás las pudo cantar, llevando del brazo a su dama la que quizás debió amar, porque tal vez no era nada y hoy se lo puede explicar con una melodía escuchada. Melodías: Embriagadoras como licor, bebidas por los oídos y perfumadas como flor, compartidas por los sentidos, por los cabellos y el corazón, palpadas con lágrimas y con palabras de ilusión, sentidas con todo el cuerpo, dando frío de calor. Melodías: Alegres, cómicas y hasta divertidas. De recuerdos tristes si son entristecidas. Rápidas, veloces y casi atrevidas, de melancólicas voces Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 75 e introvertidas, oscuras como la noche. Melodías: Constantes, grata compañía hoy, ayer y siempre como un día que ha quedado en el pasado lleno de melancolía, que aunque se diga olvidado uno sabe que no se olvida como hoy en que he escuchado. 22.01.76

CANARIO PETRIFICADO. Ahí, entre los barrotes es el reo más entonado, su plumaje amarillo pero petrificado, es él, el pajarillo que canta enjaulado, es él, el cantorcillo que la vida ha cantado. Su escenario de rejas, de fúnebre poco espacio, su cantar es de quejas, pero de un gran palacio de aquellas historias viejas que los libros me han contado. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 76 Pero sin embargo es una piedra que canta al no tener libertad, su vista es una manta de una espesa niebla que de su corazón se levanta. Sus alitas no conocen el aire, ni siquiera saben volar, sus lágrimas son la tarde que no se sabe adentrar, su libertad es el destino que una jaula se quedará, más con ese melodioso trino él no lo puede contar, es su gorjeo tan cantarino nada más que su llorar.

25.01.76

SUCEDE. Sucede que en el tiempo hay vida pasajera, el tren es el viento y el sol es una hoguera. Con las manos en el cielo, con la vista en las estrellas, con lágrimas de anhelo por las cosas bellas. Son las vivencias del hombre las que se acercan y huyen, sufriendo el más pobre, pidiendo que le ayuden. Llamando compañía Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 77 de los tiempos mejores, llamando alegría. (Llorando están las flores). Es vivir la vida que el destino dictó, es soñar con el día que el sol alumbró. (Las aves en los montes poseen sus nidos, los jueces en las cortes condenan a un detenido). Con la ventana entreabierta me saluda el viento, por una hoja muerta está llorando el huerto. Se va, se va la tarde Llorando su lamento. (Las hojas de los árboles mecidas por el viento). Durmiendo en su lecho está soñando un canto, prendido de mi pecho está cantando el llanto. Soy hombre pasajero como todas las gentes, soy gente del recuerdo que vive el presente. Voy en busca de un sendero que me lo ha dicho la noche, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 78 lo espero en silencio y sin hacerme reproches. Y mientras sigo esperando ya sé que estoy viviendo, lo que dije ya es pasado también lo que estoy diciendo. Adiós, adiós futuro ya te vas con el tiempo, eso eras hace poco, ahora eres recuerdo. 04.02.76

TU, UN RECUERDO. La noche ha llegado, ya sé que estoy viviendo, la tarde se ha marchado ahora es un recuerdo. Y hay veces que en el tiempo me encuentro un recuerdo que llega desde el cielo y que se va muriendo. Pero después regresa y vuelvo a lo mismo mi corazón se embelesa y se mueve como un sismo. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 79 Ahora estoy temblando, se estremece mi cuerpo, porque estoy recordando que no eres un recuerdo. Tu vives y te he vivido, no sé si estás sufriendo, yo vivo y te he querido, los dos estamos viviendo. Ahora que te recuerdo se ve más bello el cielo, me saludan las estrellas pero no cumplen mi anhelo. Y por seguir la vida no te veo desde hace tiempo, pero sé que algún día ya no serás recuerdo. Y ahora en el tiempo yo me encuentro viviendo, es el viento de la noche el que las flores va moviendo. Ya sé que no he soñado, porque he estado despierto, ya sé que te he amado pero ahora ya no es cierto. Porque amar a un recuerdo es como besar al viento, el que siempre está presente aunque uno haya muerto. Y yo quiero olvidarte, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 80 ya no más tu recuerdo ve y márchate en la noche y que te acompañe el viento. 04.02.76

HOY PUDE VER. Hoy, al leer tus cartas me han dicho que todo no fue un recuerdo, que de cualquier modo nos encontramos viviendo, pero tan lejos, tan lejos uno del otro. Hoy al escuchar nuestra canción, comprendí el pasado, en ese que he estado y porque no si también he llorado, pero hoy es pasado, nada más que pasado. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 81 Hoy pude comprender todo lo malo, todo lo triste del ayer, todo el pecado de querer, aquello anhelado en un atardecer. Hoy supe decirme las verdades de un amor, de uno pasajero que se esfumó, pero que fue verdadero y que dolor me causó, pero se marchó, se marchó. Hoy supe que sólo fue un ave que en el invierno en mi vida anidó, y que al llegar el verano ya no me necesitó, así que voló, muy lejos emigró. Hoy he sabido ver la realidad de tu vida, y he podido comprender porque tal vez me odias, pero no he podido ver entre mi memoria tu extraño proceder. Hoy he sido sincero, contigo y conmigo mismo, hoy en el mes de Febrero Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 82 he salido del abismo, de un amor embustero y tan lleno de cinismo. Hoy sé que ya no te quiero. 06.02.76

UNA FLOR DEL RECUERDO. Quise coger una flor de un jardín encantado, y cuando la tuve muy cerca ya la habían tomado. Todo fue un espejismo que de improviso desapareció, pero con un aroma tan suave que los sentidos me turbó. La vi y pude sentirla muy adentro de mi corazón, me vio y pudo sentirme, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 83 mas luego se marchó. (Por un sendero de luz va cabalgando la oscuridad, por un sendero de recuerdo va caminando mi vida. Con el viento de la tarde una plumilla se marchó, en los pétalos de una hortensia su imagen se quedó). Quise tomar una flor, pero se desvaneció y cuando pude darme cuenta sólo me encontraba yo. Parece suspirar un trébol y sólo ha sido el viento, hoy mi vida ha dado un paso en los peldaños del tiempo. Va caminando mi vida y ella se ha marchado, yo con un triste silencio, entre recuerdos me he quedado. ¿Volverá, volverá algún día de nuevo aquella flor?. ¿Volverá con esa melodía que el jardín interpretó?. Se ha ido, muy lejos se ha marchado, yo he seguido viviendo. (La vida se la ha llevado). Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 84 Quise coger una flor y me ha quedado sólo el recuerdo, solamente pude mirarla con mi mirar más tierno. 08.02.76

LA REALIDAD DE UN DULCE SUEÑO. La vi y que extraña sensación me causó, al posar sus ojos en los míos, mi corazón muy fuerte latió. Estoy recordando su sonrisa que en el mar se enjugó, fue acompañada por la brisa y por sus ansias de amor. ¡Oh! bella desconocida ¿Dónde te encontrarás? ¿Dónde vagará tu sonrisa? ¿Dónde estarás?. Quizás puedas recordarme como antes me mirabas, Cuando el sol te acompañaba, cuando el sol ahí estaba, sobre la playa serena y sobre las aguas saladas, sobre tu cuerpo morena y cuando tu me mirabas. Contigo podría partir rumbo hacia el fin, contigo ir y venir Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 85 sobre rocas de marfil. Quiero mi mejor canción para ti, quiero mi mejor poema nacido de mí todo tuyo, todo para ti. Cabellos al viento, sonrisa en el agua, manos de espuma, (de la más clara), murmullo de olas que el mar cantaba. Confesora profunda la playa fue, de nuestros deseos y del mío que es.

Viajé, viajé sin saber que estarías allá como esperándome, llegué no conociéndote y después tu encantándome. Gaviotas cansadas de alas, cansadas gaviotas de volar, toda ellas también encantadas con tan profundo mirar, rencores como cascadas, odios con ansias de amar. Besos de profundas miradas, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 86 como besos de un dulce mar, ojos tiernos de miradas extasiadas, como éxtasis de un dulce mirar, tantas cosas como palabras en el más tierno expresar. El verano ha seguido su curso porque debe continuar, tu también seguiste el tuyo, pero me habrás de recordar. Yo con el verano, contigo y tu mirar voy a seguir por los años hasta que deba terminar. Y allá en el fin de todo, allá te encontraré en un mar de niebla y sueño como el sueño que soñé, que aunque fue una realidad creo la soñé, la soñé. Cuando acabe, cuando todo termine, cuando ya no haya realidad, cuando el viento sea un recuerdo, cuando acabe la eternidad yo te veré de nuevo, allá me encontrarás. 19.02.76

EL SILBADOR NOCTURNO. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 87 Como ignorando al mundo con un silbido en los labios, como un vil vagabundo, solamente acompañado un silbador a pasado con un paso como cansado, un silbador a silbado. Como olvidándose de todo, de la noche y las cosas, como ignorando al mundo, a las flores y a las rosas, como un vil vagabundo sin madre ni esposa, con un silbar profundo. Con aquel silbido ha pasado en la noche, como poniendo olvido y sin hacer reproches, con todos los sentidos inspirados en su canción, como llenándola de ilusión. Pasó, se alejó silbando con la melodía en sus pasos, con el ritmo en su andar, olvidándose de los lazos que lo llegarán a atar. Es uno entre tantos y yo lo he visto pasar. 21.02.76.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 88

EL GIRAR DEL MUNDO. Quiero ser como el marinero que besa al pasar se va en su barco hacia el destino sin saber si regresará, se va cantando sus canciones enamorado de la mar. Siempre he sido el mismo, pero a veces deseo cambiar, quiero salir del abismo, el que no puedo olvidar ese que como un sismo a veces me hace temblar. Deseo abrir la ventana y encontrarme un mundo nuevo, salir y compartir con las gentes donde todos sean sinceros, poder lavar las mentes de aquellos embusteros. Ser un médico fabuloso Para lograr mi objetivo, cambiar todas las mentes empezando conmigo mismo, traer a todos los ausentes y entregarles cariño. Y cuando al abrir las ventanas todos en coro riamos, comprender todos juntos que debemos amarnos, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 89 hacer del sufrir un bulto y dejarlo abandonado. Contar todas las estrellas al poder ayudarnos, hacer la vida más bella sin quejarnos, que las flores sean doncellas las que deban acompañarnos. No puedo ni debo hacerlo el destino ha sido trazado quizás por la imaginación lo que no puedo explicarlo, el mundo sigue girando y nadie podrá alcanzarlo. 21.02.76

BUSCO. Busco las cosas lejanas, como una mañana que pueda olvidar... Busco las rosas marchitas, como colegialas que puedan amar... Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 90 Busco las canciones, como mariposas que sepan volar... Busco la luna encantada, como en una balada que sepa callar... Busco los frutos verdes, como sábanas blancas que sepan madurar... Busco las flores quebradas, como palomas negras que solo saben llorar. Busco las hojas muertas, como vestimentas que vistan al mar... Busco las aguas turbias, como nocturnas que sepan clarear... Busco una noche de invierno, como infierno que sepa enfriar... Busco la explicación de mi vida, como toda herida que no puede curar... 22.02.76

NO SOY JUEZ. Crees entender la vida tan solo porque vives, pero no te das cuenta que todo lo consigues con un despliegue de ironía, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 91 que todo lo persigues si es que no viene a ti y así logras tus fines sin don ni frenesí, y antes que se termine ya tienes otro aquí porque nada se te prohibe como me pasa a mí, yo no soy así. Crees entender la vida, porque vives en un pedestal forjado de fantasía y del más fino metal, pero no te das cuenta que eres de manera tal, que aún después de muerta podrías resucitar para cobrar las cuentas que no se te pudieron pagar y no es necesario que mientas para poderlo negar, si ya sé lo que piensas pero debes dejarme hablar.

Crees entender la vida porque tienes casi todo, pero llegará el día en que de cualquier modo se acabe tu fantasía y debas doblar el codo, en que toda tu ironía Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 92 se quede en un recodo de tu falsa vida, y tengas que pedir socorro porque te verás hundida en el más negro barro, en la mugre escupida y en el más fétido sarro. Crees entender la vida, porque eres siempre mimada, porque eres consentida y no se te niega nada, sí hasta eres advertida por tu fantástica hada, que te tiene convertida en la más calurosa parada en una ciudad perdida y de todos alejada. Perdona mi palabrería y por ser por mí juzgada, yo jamás he sido juez, pero tú tampoco eres nada. 23.02.76

EL CUENTO DE LA VIDA. Hay cosas que causan pena como condena que se prefiere olvidar, pero a veces cuesta tanto Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 93 llegarlo a lograr, así que uno sigue ahí tendido como un manto de triste frenesí, debiendo callar y ocultar su llanto. La vida gira en torno de nosotros, o nosotros giramos en torno a ella, todo esto es un cuento que se lo relatan a uno un día en el de su nacimiento, pero que se olvida cuando uno yace muerto, cuando llega su despedida, cuando uno ya es polvo, polvo y tierra confundida. 25.02.76.

PUEDE SER. Ha sonado un arpa a lo lejos, estando sola la ha tocado el viento Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 94 y una guitarra perdida ha querido emprender su regreso, pero la cítara como encendida le ha mostrado su desprecio y la deja abandonada entre los músicos viejos. Han tocado un violín y un clarín lastimero, como unidos en la noche se encuentran los chelos, pero un trompón de reproche a mostrado celos del piano que en un coche de notas y de anhelo enamora a los violonchelos. La trompeta está llorando entre los trenes del pueblo, la música se van estirando entre unos andenes viejos, va cantando el poeta, se va perdiendo a lo lejos, son sus ojos como veta tristes y perplejos que perforan como saeta.

Rompieron el banjo que dejó un músico andante, sus pedazos son las notas que recogen los amantes y son como flores rotas Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 95 que rompieron los farzantes, triste llora la muchacha que no encuentra su baluarte el de su estilo y facha. Cansadas se ven las cuerdas de un viejo contrabajo, triste suspira la quinceañera que anhela su niñera al cambiarla por su trabajo (la vida tiene sus vueltas, sus altos y bajos). hay hojas como muertas penadas por los escarabajos. Se han dormido los instrumentos de la conciencia del mundo, se han dormido los pensamientos en el sueño más profundo, se han ido los sueños con los tristes iracundos, todo parece pequeño aunque sea un conjunto de los más grandes bultos. 27.02.76.

AMIGO DE PECADORES. Cansado de nostalgias y tristezas quiero olvidarme de las penas y el dolor, cantando siempre, siempre con alteza, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 96 fingiendo el olvido de tu amor, como iba a imaginar que una simple pasión arraigara tan fuerte mi corazón. Quiero poder cantar con la más dulce emoción, que se llene el estanque de vagar forjado de la luna y el sol, que se evapore el andar y se olvide el rencor. Que se detenga el caminante y se quede para siempre, que bebe las aguas dulces de una dulce vertiente, que se olviden de las cruces y crucifiquen a las serpientes. Hay una novia que viste de blanco con el corazón púrpura, hay pecadores que pecan incansables pero ellos no tienen culpa, hay seres al parecer indeseables pero que no pecaron nunca. Soy como cualquier cosa en la vida que es mirada e ignorada, que a veces causa entusiasmo y que después es olvidada, que trata de ver la realidad y encuentra fantasía y nada. Voy cantando las tristezas al compás de pecadores, tengo amigos como nadie, veo lanchas, barcos y pescadores, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 97 me alejo con el viento de la tarde para oír canciones y trobadores. Y ahí me veo yo mismo emborrachado de vivencias, teniendo ansias y deseos, como rico en pobreza, a veces dejo una lágrima cuando la emoción me embelesa. Sí, soy yo uno solo el que se alegra y entristece, el que ríe enardecido como si todo lo tuviese, el que ha pagado muy barato y el que ha pagado con creces. 28.02.76.

ESTÁ MI AMIGO ENFERMO. En mi corazón: una trompeta toca silencio, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 98 en mi mano: un cigarrillo se consume y mi mente está muy lejos, viajando por la inconsciencia, llevada por el viento. Está mi amigo enfermo, aquel que es más que un amigo, con él nos hemos alegrado, ese que ha sufrido conmigo, aquel que me ha consolado, con el que hemos recorrido ese camino espinado. ¿Cuál camino? Me pregunto: nada más que el de los años que hemos pasado juntos y no han logrado separarnos. Mi mente está viajando, volviendo hacia el pasado; estoy recordando a un amigo con el que he reído y llorado, (lejos se fue la tarde, a solas me he quedado). Con aguas turbias, con viento helado, con lluvia tibia, con él he estado. Se ha quedado el recuerdo en mi corazón impregnado, está tatuado en mi pecho la amistad que me ha dado, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 99 aquella que es de roca, roca y hierro forjado, el que ha sido henchido en fragua y que jamás se ha enfriado. Están tocando silencio las trompetas del palacio, aquel que hemos construido lento y siempre despacio, con sueños y anhelos fornidos, con zapato y descalzos. Silencio para el señor su sonido va dictando, silencio para mi hermano. ( las doncellas están orando) 04.03.76.

LA REALIDAD. He visto la realidad una vez más, caras nuevas me dicen otra verdad. He sentido tiritar mi cuerpo una vez más con una nueva verdad. He querido escapar de las cosas malas para ver las simples y aunque sencillas y raras poder sentirlas con claridad. ( ver reír a un cantorcillo y clarear la oscuridad). Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 100 He sido uno más cruzando por la vida de realidad duras, claras y sencillas, palpando frutas maduras que son frutos de la vida y de la verdad más pura. He visto a un trovador callejero decir sus versos y cantar ligero, para trovar nuevamente por más dinero, el que es poderosamente vil, bueno y pasajero. He cantado sin ser cantante con un sueño soberano que es como baluarte, que se me escapa de las manos volviendo a la realidad como todo ser humano que conoce su verdad. He pasado nuevamente al sentimiento de vivir, como trovador callejero que trovando debe seguir, para decir sus versos, para poder existir. Hoy la realidad pude sentir. 10.03.76.

MI VIDA A CUESTAS. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 101 Quiero ir con el caminante rumbo hacia el Sur, que las estrellas nos acompañan con un fino manto de tul, hacer de la vida un baluarte y sentir la luz, beberla como calmante para sentir el sol. Quiero ir vagando siempre, siempre vagando estar, cortar los frutos verdes y sentirlos madurar, con las aguas de las vertientes poder su verdor lavar, con las piedras calientes poder el frío calmar. Quiero llevar mi vida a cuestas como el más liviano morral, como melodía sin canto, como la luz al clarear, clareando, clareando la vida sin tierra, hijos ni pan, con fantasía de loco, loco sin casa ni hogar. (Ser uno entre pocos). Quiero que el sol sea mi amigo porque siempre va vagando, que me dicte los caminos mientras vaya acompañado, que lea mi destino cuando me halle descansando, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 102 que me diga peregrino contigo yo estoy llorando. Quiero ir por caminos nuevos aunque sean de peñascos, aunque sean de piedras vírgenes y aunque éstas me den asco; porque quiero y querré siempre el sonido de mis tacos ellos los que nunca me mienten cuando yo voy caminando. Quiero partir con la mañana rumbo hacia el Sur, que me salude la montaña y que brinde a mi salud, pasar por viejas cabañas al sonido del laud, sentir dentro de mis entrañas la más dulce virtud. (conocer las caras más extrañas). 17.03.76.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 103

PLEGARIA DEL PECADOR. Señor: Yo pecador voy a rogarte, no por mí, sino por ellos. Señor, dígname al escucharme, no por mí, sino por aquellos que sufren y lloran desde grandes a pequeños, sin embargo, te oran y no se cumplen sus anhelos. Señor: Yo no voy a reprocharte la injusticia del mundo, solo vengo a rogarte con mi sentir más profundo. Señor, dígname al escucharme que en mi plegaria me hundo. Señor permíteme recordarte lo bueno del un mar profundo. Señor: Mi súplica no es por mí si no por los que amo, permite que más allá en el fin nos cojamos de las manos. Deja que todos riamos, incluso los que pecamos, tú sabes que somos iguales, sin embargo, no nos amamos. Señor: Quita el llanto de los niños, la pobreza y la mugre, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 104 los pecados inmorales que por dentro nos pudren. Has de aquellos ilegales los que más les ayuden. Sana con tu sabiduría a todo aquel que a ti concurre. Señor: Baja la montaña para el desvalido, disminuye las tristezas para lo que ya han sufrido. Deja volar al pájaro que se haya triste y herido. Has crecer las alegrías de los que en ti han creído. Señor: Si puedes borrar un capricho, perdona a los caprichosos, escucha lo que yo he dicho y perdona a los vanidosos, has reír a los que lloran, transfórmalos en dichosos, escucha a los que te imploran, permíteles el gozo. Señor: Yo pecador te imploro, entre Ateo y Creyente, compréndeme si es que lloro, porque en la vida soy inocente y hoy vengo a suplicarte con mi corazón candente por los que se hayan en la vida Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 105 y por lo que están ausentes. Señor: Gracias por dejarme hacerlo, ya sé que es grande tu perdón, nos has dado un Universo, no has brindado calor, has hecho brotar mis versos y me has dado amor, has escuchado mi plegaria aunque soy un pecador. 24.03.76

A UN LUGAR. La tarde se vuelve hoja y el sol color de vino, los árboles se despojan del viento tardecino. El lugar se oculta en los cerros, como vil villano siendo bueno, las aves se alejan del llano y penetran en sus nidos, los niños se toman de las manos mientras juegan enardecidos. Ya vuelven los hombres marcando traen el sol en sus cabellos de pobres, pero de gran valor, como espartanos sin nombres, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 106 como invierno con calor, como estatuas de cobre, pero con sentimientos de amor. La tarde se vuelve hoja y los perros peregrinos, la noche a veces se enoja con sus tristes aullidos. En él se vive la vida que el mismo a forjado de espinos, hierbas y olivos, de amar siendo amado, de tristezas, penas y olvidos, de reír habiendo llorado. Lugar, lugar querido, bulliciosamente callado, en ti cuando he sufrido, en ti cuanto he gozado, déjame hoy recordarte cuando lejos he estado, déjame volver a soñarte porque no te he olvidado. Sí, ¿cuántas veces he llegado a odiarte?, ¿ Cuántas veces en ti he pecado? Pero deja que hoy te diga mis versos, y que grite por ti callado con gritos tiernos y espesos. Oh, lugar amigo perdóname el estar lejos, déjame ser vagabundo pero emprender el regreso. 03.04.76. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 107

PERDONA MI VERDAD. No, quizás no me comprenderás, jamás mis caprichos y tus sollozos me dirán que es verdad, ¿por qué, por qué será que cuando me aman yo no puedo amar?. Sé que difícil es ver la realidad, pero hoy y en este momento te diré toda la verdad, aunque un estremecimiento de culpa y malestar me nuble las palabras. Sí, ya no puedo más, así que pronto he de comenzar: Son tus caricias, una delicia que me han hecho continuar, pero ya es inútil y te digo mi pensar. Yo no te puedo amar, no sé el porqué , aunque tu me amas, no puede ser que yo te mienta una vez más. Sí, si quieres podemos continuar Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 108 pero ahora y aquí en el centro de la ciudad te digo: vete ya, déjame solo, vete a caminar a cualquier lugar; quiero estar solo y tú sola debes estar, para meditar. Dentro de un tiempo yo volveré para ver sí, Si quieres continuar; en este mismo lugar, pero recuerda que yo jamás te podré amar. Vamos, déjame que ya no puedo más, me siento inquieto y no sé qué pensar, ocúltate entre la gente que camina por la ciudad, adiós y no te culpo si tu amor, ahora es rencor, pero fui sincero aunque dolor me causó. Vamos, vamos no esperes más, no, un beso no sería peor para ti, por tu amor, para mí, por mi dolor. Perdona si he sido cruel, no te pido que me comprendas, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 109 ve y aléjate de aquí y vuelve cuando quieras, cuando te lo diga tu conciencia que yo cuando no soy feliz jamás tengo paciencia. Chao, chao pequeña y procúrate una noche bella no te acuerdes de mí que yo no pensaré en ti. 04.04.76.

MI PUEBLO. Mi pueblo es como cualquier pueblo. Mi pueblo es un velero que navega sobre cerros con camisa de hojas, de espigas y becerros; con camisa de hojas, de aguas tristes y rosas rojas. Mi pueblo va y viene quedándose donde mismo, con el sol se entretiene, se asusta con un sismo, se hunde en un abismo y surge de entre rieles con marchito pesimismo pegado de nuestras pieles. Mi pueblo es vertiente seca, seco manantial dorado, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 110 es trigo puro de primavera, lejos, triste y desolado que se alegra de cualquier manera, llora, ama y es amado, es planta tibia de invierno, seco manantial dorado. Mi pueblo trabaja estando quieto, sin moverse de su estrado; es señor de las alegrías, es risa pura de los llanos, es canto de aves negras, es llanto de hermanos, es sermón de suegras, hacia sus yernos amados. Mi pueblo llora con su gente cuando algo malo ha pasado, es recuerdo puro de los ausentes, de los que no están y se han marchado, de aquellos que fueron siempre el vivir de su poblado cuando la luna en creciente hacía ver el cielo mas claro. Mi pueblo saluda y despide a sus hijos siempre amados; al saludar siempre sonríe pero llora cuando se han marchado. Mi pueblo con camisa de hojas ha reído y llorado, ha ordenado sus flores rojas, ha crecido y ha madurado. 13.04.76.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 111

RIMAS PARA UNA MARIPOSA. Me has hecho pensar mariposa con tus colores de rosa, me he puesto a pensar mariposa en mi alegría que es poca, he pensado en ti mariposa y en la alegría de tu boca. Si lograra tu amor mariposa, oh, luz real; esplendorosa, marfil blanco, tierno; preciosa, frágil, bello; candorosa. Si lograra tu amor mariposa de marfil, rubíes y rosas. Si tuviera tus cabellos oh, peinada mariposa, no existen otros tan bellos ni en verso ni en prosa, largos, suaves, pequeños, dorados con polen de rosas. Si lograra tu amor mariposa, mucho más que candorosa, mucho más que mariposa; más real y esplendorosa, más marfil, mas rubíes de rosa Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 112 más amor, mucho más preciosa. 13.04.76.

NOCHE Y DIA. No la realidad, no la fantasía. Sí los sueños, sí la noche y el día. Quisiera en realidad decirte no en mi fantasía, Sí en los sueños, Sí de noche también de día. Lo que en realidad es amarte no en mi fantasía, Sí en mis sueños también de noche y de día. Pero debo consolarme con verte en mi fantasía, en mis sueños de noche también de día. Sí, sólo debo consolarme tan solo en mi fantasía, con mis sueños de noche y de día. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 113 Quisiera poder contarte toda mi realidad, toda mi fantasía, todos mis sueños (tuyos), todas mis noches y mis días. 13.04.76.

COMO UNA FLOR. Como una rosa marchita se quedó mi amor, tendida sobre la hierba (el viento la deshojó), sus pétalos se dispersaron, el sol se los bebió. Como una rosa marchita hoy yace mi amor, perdido entre tinieblas (el tiempo lo olvidó), sus recuerdos ya olvidados la noche hoy me los contó. Como flor perdida en la noche vaga mi corazón, besando boca tras boca fingiendo eterna pasión, sabiendo que la vida es poca. Olvidando el rencor. Como flor perdida en la noche siempre voy buscando yo un camino que no choque Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 114 contra rocas de dolor, que me lleve hacia los montes con árboles de ilusión. 15.04.76.

ME HACES MAL. Me hace daño la seda de tus manos, me hace daño sabiendo que todo es en vano, pero sabes como flor aparecida entre llanos. Algo me dice que no piense en ti, algo me detiene y me dice que no es así, así como yo pienso y sólo pienso en ser feliz. (Hay un murmullo entre los árboles, el viento juega entre las hojas, hay una hoja muerta sin madre esperando que la recojas, el viento parece ser su padre y la tarde la que fue su esposa). No, no más tu sonrisa, no el océano de tus ojos, no la dulzura de tus caricias, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 115 no más tus labios rojos, no el oro de tus cabellos que aunque muchos son pocos. Basta, basta me digo, pero no puedo contenerme, basta, basta me dicen, pero no logran detenerme; hay un magnetismo invisible el que me lleva siempre a verte. Me haces daño con tus manos, con tus ojos y tus labios, con el néctar de tu risa y tus requiebros sabios. La noche me dice vete, mi corazón quédate, está indeciso, mis palabras amarte porque saben lo que preciso, y mi conciencia, márchate. Me voy, me voy adiós, he escuchado a la noche que asomó por la ventana, he escuchado a mi conciencia, pero tan solo por hoy, quizás vuelva manaña. 20.01.76

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Río de Vida en Racimos – Pag. 116

CANTO A MI REINA. Majestad: Silencio tocan las trompetas porque traigo para ti mi cantar bordado de flores violetas y de pajarillos al pasar, con aguja de pensamiento y es él quien me ha hecho cantar. Blanca novia coronada, rojos los labios, quietas las palabras con el corazón púrpura y el alma clara, con las manos púrpuras y corona plateada. Novia, novia de espuma, de sal y hierba sana, de cantar y alegría suma, de bailar y reír mañana con rayos tiernos de luna, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 117 con discos de oro en la montaña. Perlinos los ojos, rayos las miradas, cantarinos los labios con murmullos de cascadas, pensamientos de sabio, nochecita clareada en el bullir de los años.

(En un manto de hojas el otoño está durmiendo, en un cristal de alegría el viento se va escurriendo, como rosa marchita y tardía las penas están gimiendo; envidia de ti sentían). Majestad, ante ti las ofrendas de príncipes, doncellas y esclavos, de trovadores y cantorcillos; todos ante ti estamos arrodillados. 23.04.76 Premio al Poeta Laureado Aniversario INCOSAF 29.04.76

EL LAMENTO DEL SOLITARIO. Quiero darle amor a todo el mundo y que éste me ame a mí, quiero tan sólo una vez en la vida Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 118 ser totalmente feliz; que cuando me sienta solo las gentes se vengan con el viento en un alegre reír olvidando los lamentos. Tener al lado a mi Madre mis hermanos y mis amigos que la soledad se aleje de mis manos porque ellos están conmigo, que sean ellos la soledad, que ellos sean mi única verdad, la ruta, el sol y el camino que me lleven hacia el mar. Que estén conmigo todos ellos, pero en el mismo momento, que sean ellos la lluvia, el viento en mar abierto. Bailar las danzas más dulces, oír gritos de puerto, correr por prados con flores y después, descanzar en un huerto. Que al dar las doce campanadas, al estar en el pasado y en el presente, al decir adiós a un día y al dar a otro la bienvenida, esperar con ansias y sentir la verdad que es mía, mía y de las gentes queridas. 13.05.76

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Río de Vida en Racimos – Pag. 119

¿QUÉ TE HAN HECHO NIÑA? ¿Qué es lo que tienen tus ojos niña, que se muestran opacos hoy día?. ¿Qué le han hecho a tu pelo niña, que yace como flor sin vida?. ¿Qué se ha hecho tu risa niña, que estás llorando hoy día?. Van las hojas cayendo, cayendo, cayendo sin vida, van tus manos acariciando lo que es recuerdo hoy día, va el recuerdo nublando lo que antes era tu risa. Hoy tienes el alma triste, triste el corazón y las manos, triste los ojos de niña, triste el pelo y los labios; llanto marcado en el rostro el que quizás dure por años. Con las hojas padece tu corazón, con las hojas y los nublados, con la lluvia que no ha caído, con la hierba que se ha secado, con el viento que sopla como herido y que parece siempre cansado. Has llorado niña, herida con el alma y el corazón, has sentido tu vida perdida entre rocas de dolor, has besado la boca querida Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 120 la que ya te ha dicho adiós. ¿Vas a seguir llorando niña? Por favor dime que no, dime que olvidarás un día, dime que sí por favor; ve y sé feliz cuanto puedas, ve hazlo con valor. Pregúntale al viento si él realmente te quiso, no digas jamás un lamento cuando no sea preciso, deja ya los sufrimientos y has las cosas que él no hizo.

Te ha separado la vida, lo ha hecho con dolor, pero trata de olvidar un día y no sientas jamás rencor, trata de olvidarte niña del amor, que quizás no es amor. 15.05.76

LA VIDA ME CAMBIA. Sé que nunca seré el mismo, también sé que la vida me cambia; hoy soy uno y mañana otro, otro, con otros pensamientos y otra habla. ¿Cómo voy cambiando?. No lo sé. Quizás explicación no haya, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 121 quizás tan sólo sea un sueño en el cual mi mente calla. Sé que apenas me doy cuenta, pero sé que he cambiado, mi vida de ayer yace muerta, muerta como rosa sin prado. ¿Sólo tengo un presente o un futuro cambiado?. He creído ser el mismo. Un roble firmemente plantado, pero el tiempo y el viento lo han doblado. 25.05.76

UN RELATO MÁS. ¿Cuántas veces me ha pasado?. Creo tenerlo todo y me siento muy en alto, el trato de las gentes me hacen sentir realizado, pero cuando me doy cuenta veo que yo mismo me he engañado, que todo ha sido un sueño el cual se ha derrumbado. Me quedo triste meditando lo que creí haber vivido, no, no es tristeza ni quebranto, es tan sólo un camino que se toma como cansado, es tan solo un pergamino Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 122 que se encuentra arrugado. Me ha pasado muchas veces y cuando logro darme cuenta, veo que mi vida es un cuento y mis sueños una página dada vuelta en que los esclavos han muerto y una princesa yace muerta. ¿Cuántas veces?. No lo sé. ¿Cuántos derrumbes?. No estoy seguro, porque he pasado como inseguro, como cansado, pero he vivido un sueño grande y honrado, porque siempre he seguido un camino ya trazado, en que después se han ido aquellos sueños honrados y me he quedado solo, solo como ave que no ha emigrado. 25.05.76

MIS SUEÑOS Y MI DOLOR. Quisiera poder contarte toda mi realidad que es forjada de ilusión y fantasía y después, crueldad, porque las veces que he soñado y de las cuales hay un despertar me han hecho sentirme triste, me han hecho sollozar; he querido tal vez herirte pero algo me hace desertar. Solamente voy a decirte algo que realmente he vivido, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 123 no sé si quieres oírme, pero te juro que he sufrido al soñar y después triste sentirme, al ver que eso no ha sido, eso que he soñado, pero que no se ha cumplido: Veo que la oscuridad en mi cuarto pronto se transforma en luz, estoy yo y tú me quieres desde el amanecer a la senectud, hay trovadores, palomas blancas y una varita de virtud que nos concede todo lo bueno alejándonos del sufrir, que dibuja mi nombre en tus cabellos haciéndome sentir feliz. Hay prados con flores rojas, invierno, otoño y primavera, hay árboles de dulces hojas celosas de que tú me quieras, hay lluvia que a veces no moja el calor de la hoguera que se ha encendido en tu pecho con llamas que no queman. Ante mis ojos todo eso, mi fantasía que es sincera, la ilusión que invade el aire y la realidad que después me quema, porque aún no ha llegado el día, ese en que tú me quieras, en que me digas vida mía, la mía tómala entera. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 124 Ya conoces mi realidad, mi fantasía y mi ilusión, mis deseos de seguirte amando y que me entregues amor; por favor comprende si estoy llorando, amándote con gran dolor. Si pudiera hablar este papel escucharías mi voz, si pudieran mirar los versos, comprenderías mi pasión, si pudieras sentir lo que siento, sabrías que no te digo adiós. 25.05.76

UN RETRATO DE MI MADRE. Madre, déjame verte en verso, déjame palparte con palabras escritas, déjame decirte lo que pienso, déjame decirte porqué mi corazón palpita y lo que dentro de él yo siento. Tus manos la ternura infinita, tus ojos dulzor incomparado, tus labios como siempre sabios por buen camino me han guiado, tus cabellos retrato de los años, en ellos el cansancio dibujado. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 125 En ti Madre va todo lo bueno no lo malo ni el pecado, no la avaricia y el dinero, Sí el amor y lo sano. Madre, mamá, mamacita no hay palabras dignas de ti, no hay versos que puedan decirte la alegría de verte feliz, no hay flores para regalarte, no hay don ni frenesí. Todo es poco cuando de ti me acuerdo, todo es nada ante tu bondad, todo es malo ante tus caricias, mentiras ante tu verdad. 25.05.76

PUEBLO NATAL. "Yerbas Buenas" en flor pedazo de historia, recuerdo tangible y callado, pasado vivo en color presente en la memoria de cada estación. Casas viejas: Reliquias de antaño son ellas como quejas que han cantado los años, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 126 son también como rejas, como escalas, como peldaños por lo cuales ha subido el tiempo y no han logrado olvidarlo. Polvo puro: Aroma del pasado, cristales de agua, vida de los prados. Sauces viejos, viejos álamos callados, rocas tiernas, tiernos frutos madurados. Eres historia misma, pasado en el presente. Eres recuerdo palpable, eres vida de los ausentes. Reliquia de noble nombre, eres pasado presente. Quieto el día, quieta la noche, aullar de perros perdidos, chirriar de viejos coches, de carretas desvensijadas, de relinchos y choques, de las rocas en los esteros entre aguas sin reproche. Vida vieja, vida del recuerdo. Yerbas Buenas presente en cada rincón latente, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 127 mi Pueblo Natal del cual ahora estoy ausente, pero te llevo muy adentro siendo uno más que te quiere, soy uno más que te siente en carne propia y de él pendiente. 25.05.76

PALABRAS PARA TI. Te dije que la vida era linda, también te dije que llovería. Y a mí: ¿Cuántas cosas me dice el silencio?. ¿Cuántas veces he escuchado una melodía?. Sí, he sentido miedo del día y apoyo de la noche. No he tenido más compañía que tu recuerdo.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 128 Voy buscando la oscuridad, para perderme entre sombras, para encontrarme conmigo mismo y decirme la verdad. Quizás así podré encontrar a ese alguien que he esperado, a ese alguien que he querido, pero se ha ido, se ha alejado, no ha llegado o que no podré encontrar. Quizás ¿...?. 25.05.76

OTOÑO... RAMAS... PAL... Otoño:... La lluvia escribe en los charcos, las hojas de los árboles muertas empapadas de lluvia y de otoño. Ramas:... Ondulando, movidas por el viento. Mi vista se escurre entre las gotas y llega muy lejos, lejos, lejos. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 129 Palidez:... Pálido el día, ¿triste?, quizás no. Humedad en la tierra y en las ventanas, en las paredes, en el alma y en el tiempo. Viento:... Jugando por entre hojas, por entre la lluvia, por entre las gentes. Paraguas:... Desfilando con sus colores, actores de la película "Llueve en los Corazones". Frío:... Palpando los cuerpos, palpando la mirada, el alma y el corazón. Gris:... El cielo, las lágrimas, las manos, los cristales, las ventanas, la lluvia, El otoño gris, ¿triste?, quizás no. Aves:... Mojadas, volando sobre ramas, deteniéndose, tiritando entre aguas. Viviendo, viviendo, viviendo. Gentes:... Silencio, ruidos, día. Tarde fría, quieta, tranquila, Lluviosa, bella. Vida. Lluvia:... Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 130 Protagonista del otoño, amiga, ¿enemiga?, quizás no. Otoño. Lluvia. Viento. Vivir. 28.05.76

FRASES VAGAS Hay madres que aunque son mujeres, son más Madres que mujeres, pero hay mujeres que aunque son Madres no llegan a ser Mamá, porque Mamá va más allá de ser Madre mujer. 27.11.75 Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 131 Quiero sembrar nuestro huerto para que fructifique más amor de nuestro amor y tener el arca del amor lleno de semillas de amor, hijas de los frutos de nuestro amor. 27.11.75

Inspiración es: Escribir lo que uno vive. Inspiración es, Vivir. 22.01.76

El alba es el despertar del día, la noche es el dormir y ambos son la propia vida que uno debe vivir. 22.01.76

Salí a caminar solo en la noche buscando a un alguien y me encontré yo mismo. 08.02.76

Vivo entre márgenes de vida y muerte, de saludo y despedida. Moriré entre márgenes Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 132 de muerte y bienvenida en el lugar de los ausentes. 25.02.76

Cualquier ser, hacia cualquier lugar que camine va rumbo de la muerte. 13.04.76

El Amor, es como un ave enjaulada, al dejar la puerta abierta se va. 13.05.76

Los recuerdos son sueños de los cuales despertamos en el presente. 01.06.76 La Mujer suele ser una flor que se toma porque es tierna, pero al marchitarse se abandona. 09.06.76

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... de mis siembras, las cosechas y el fruto para quien las comprenda, para cualquier persona que pueda leer en ellas. A quien tiene unas manos como las mías. A quien tiene hoy mi carne. A la carne que me dio vida. A un hombre, a una mujer.

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INTRODUCCIÓN

n manojo hetereogéneo, sutil y bello es la composición de Valentín Gajardo. Hetereogéneo, porque aún no se nota un solo y definido estilo; Sutil, por su agudeza, su perspicacia y su ingeniosidad; y bello por su uso del lenguaje, de un lenguaje sencillo lo que hace más perceptible y profundo al lector. Gajardo, un poeta triste, como los hay muchos, la sombra de su luctuosidad se nota en sus versos, porque las palabras lágrimas, sangre, muerte..., son sonrisa, son tristezas. Pero en medio de toda esa pesadumbre, nace el patriotismo, nace la chilenidad, nace el " Huaso invisible" Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 138 y se presenta el poeta criollo, un poeta que irradia alegría e ingeniosidad al hablar de su patria. También este poeta le canta al amor, amor, esta palabra que lo es todo; le canta al amor de HombreMujer en "Invitación al amor", el amor hacia la naturaleza: "Año ...3005 PM", y el amor por sobre todo, ese amor que hace soñar, ese amor que hace llorar, que hace enloquecer, que hace morir; por sobre todo a ese amor le canta Valentín Gajardo. Un poeta, un hombre, un hombre que ríe a carcajadas, un hombre que ríe en forma leve, un hombre que piensa, un hombre triste, un hombre que llora a torrentes; dirán un orate, no es un poeta. Un poeta que transmite su vida en obras, sus alegrías, sus pesadumbres quedan impresas en versos, versos hetereogénos, sutiles y bellos como los que emanan del alma de Valentín Gajardo, del alma de un poeta y esos son los versos que conforman este volumen. Un volumen, no de un romántico Becker, no de un realista Machado, no de un Neruda, no de un Huidobro; es solamente la poesía bella, sutil, aguda, perspicaz... de un poeta como otros, de un joven poeta, de un poeta joven, como lo es Valentín Gajardo. Miguel Angel Díaz. Octubre de 1977.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 139

C A N C I O N E S VIENTO CANTOR. El viento me dijo que tú estabas lejos, allá donde mis ojos no te distinguen. El viento me ha herido con su fuerza franca y me he quedado sombrío entre mi esperanza. (Va el viento caminando arrastrando hojas secas, están mis manos sangrando, suspirando las tristezas. El como yo está gimiendo en canto, tratando de tener fuerzas. El viento está suspirando arrastrando hojas muertas. Suelo ser viento triste, pero canto con entereza. Soy frío cantor marchito del viento en las penas, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 140 y partiré al infinito al cumplirse mi quimera. Soy poeta del viento, de alegrías y de penas). 15.06.77

VOZ CALLADA DE MI ALMA PÁLIDA. Se me ha quedado el alma pálida pensando y haciendo relaciones de mi vida, como la tarde misma que alejando su cabalgata de cosas ocurridas y por ocurrir, en el mundo de todo. Alma, como la tarde sumergida en andenes de imaginadas imágenes que dan figura a la sombra de mi vida, con sabor de aguas evaporadas salidas al Universo indómito flexible. Y con todo se queda mi cuerpo flojo, esperando la llamada de alguna cosa viva que pueda decirme con entereza: Ven, que el mundo siempre ha llamado los acontecimientos para que los hombres vivan. Y yo mismo me digo: Nadie me dirá mi perdón, entonces me perdonaré yo mismo por las falcedades mías, aunque sea ésa una falsedad más, que deba también ser perdonada. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 141 05.02.77

CANCIÓN DE TREN EN MI PUEBLO. Lejos se escucha el Tren que ha llegado ya a mi pueblo. Mi pueblo le esperaba casi dormido y sin palabras, perdido entre rieles con las manos de escarcha. Como mi pueblo dormido están todas las manos, meciéndose en suave ritmo con un cantar cansado, y casi sin tener himno nuestras manos siempre han cantado, dormida canción de rieles, de quietas aguas y trigo madurado. Invierno canción de trenes, de mi pueblo que ha llorado con un llanto también cansado. Se va lejos el tren. Mi pueblo sólo ha quedado, con sus rieles de escarcha, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 142 de canto amargo y casi sin palabras esperando el letargo. 17.07.77

CREPÚSCULO Y AURORA ALBA. Maravilloso trigal el que florece en tus sienes. Es el fruto de la palidez de tu vida ante el mundo de falsedad que ha florecido en la tierra por ser los hombres crueles, y crueles se tornan sin querer. Espejo dorado, sedoso por la ternura de tu alma, como la canción tenue, blanda para el alba, en alas de palomas claras que van en busca de la mañana. La coronación perfecta que Dios a puesto a tus plantas, por no querer ser injusto, pero que el viento levanta, llevándola y ondeándola al cielo para quedar en ti posada, sobre dos lunas imanadas. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 143 (Néctar sencillo pero sofocante que han deseado mis palmas para saciar el dolor que amarga la cercanía de mirarla, mirarla sin límites y no lograrla, por ser reina encantada). 10.01.77

SONETO DE VIDA SIMPLE. Clamas por la aurora en tu noche, aún cuando sabes porque ha anochecido, y cuando sientes que vives en el día vuelves nuevamente a perderte en sombras. ¿Por qué juegas en la vida?. Para perderte en la noche y sentirte en agonía. Se quedan los recodos de tu camino mirando el juego que llevas a escondidas. No juegues niña, no juegues sollozando, que en el camino te encontrarás perdida y por la aurora clamando. Lloras con tristeza pasajera para terminar riendo en una calle sin aceras. Alza las manos y quédate en la luz, no busques aventuras jugando por disfrutar tu juventud, que en la noche te quedarás llorando. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 144 Si en ti pasó el invierno pues ama la primavera, cógela en un beso tierno y lograrás tu quimera. No busques ya el otoño ni la lluvia en tus ojos, y no permitas los retoños.

Escoge el camino viviendo con luz de día y no llamarás a la aurora con sollozos. 21.10.76

HUASO INVISIBLE. Señores yo soy el viento y vengo desde muy lejos, por un sendero viejo copado de sentimientos, de canto, guitarras y vivas, de llanto en horas de alegría. De tonadas y cuecas sentidas palpadas con el corazón, con flores y penas perdidas y abandonadas en un rincón. Traigo conmigo un canto, verde y de aguas cristalinas, dejé abandonado el llanto, porque vengo a celebrar las fiestas que son de todos Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 145 y que a todos nos hacen vibrar. Chile revive en huifas en medio de tonadas y guitarras, con huasos y chinas lindas vestidas con hojas de parras, bajo unas estrellas que vibran con el humor de la tonada. Pasé por una ramada en que se olía el vino bueno, donde el asado humo echaba y las mozas decían te quiero. ( Mijita: ¿Una cueca por Chile?. — Altiro po's huaso ladino, ¿y que te ha pasado en la cara que tienes color de vino? — — no es el vino mijita, es Chile en el corazón, en la alegría que siento cuando llega la ocasión; si no lo sabe, yo soy el viento y aquí celebrando estoy —). Yo vengo de todo Chile y conozco su historia. Yo soy el huaso invisible, pero de buena memoria. También soy muy sensible en estas fiestas de gloria, en que me pongo mi traje y celebro hasta lo imposible. 08.09.96.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 146

CANTO A LA REINA. Trinó una voz en lo alto, y las cascadas murmuraron con risas de espuma. Alas de ruiseñor dormidas, y las alas fueron canto, canto de rayos de luna en la estancia de la vida. Abrieron pasos las flores, y los peces emergieron. Dormidos estaban halcones y en un sueño descendieron; como soñando colores bajaron ellos del cielo, para admirar sus dones. Majestad, vos sois la naturaleza y ante ti las estrellas se inclinan. Déjame verte en mi flaqueza, que de verte radiante suspira. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 147 Déjame decirte lo que piense sin tener en mi mirar fatiga, y hablar de ti con entereza: Vuelo de gaviotas en la mirada. De espuma hechas tus palabras, de pétalos pintados los labios. Tierra palpitante, callada. De nubes vestida eres hada, canción sonriente de sabio. Mujer, naturaleza admirada.

Abran, abran la luz del cielo y cierren las sombras para siempre. Extiendan de sol un velo que quiero verla sonriente. Soy lacayo, esclavo que quiere Cantar, cantar con voz ardiente. Derretir así el frío hielo, y que escuche ella mi canto, porque palpitando está mi verso. Que vuelen palomas blancas y que dejen a sus píes mi beso, que mi beso está cantando. (Hay dos mil en el Universo mariposas que están llorando). Déjalas Majestad que lloren, porque por ellas yo no canto, mi verso es plegado de colores, colores de espuma un manto, para ti Mujer Naturaleza, belleza: Cascada murmurando Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 148 admirando tu grandeza. Majestad, acepta mis flores, Mis hojas, mi huerto, mi fuego. Déjame, voy caminando con mis ofrendas de labriego. Mi canto está suplicando, de ti sólo la venia espero. Acéptalas y ya más nada quiero. ( Aniversario INCOSAF 25.04.77 ).

ÁRBOL VIEJO. Madera dura y henchida por el tiempo. Arbol viejo, besado por el viento. Hojas tristes, testigos de lamentos que en los años has lanzado gimiendo, gimiendo, gimiendo como llorando, llorando, llorando, pero riendo. Ríes con el sol y la lluvia, con la brisa y con el viento. Lloras cuando caen tus hojas Y té quedas desnudo en invierno esperando que alguien recoja tu pena mientras de a poco te vas muriendo. Tu corteza que lustraron los años con opaco color de tiempo, ha sido testigo de engaños, de alegrías y conciertos que han cantado pajarillos hermanos llegados desde lejanos huertos. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 149 ¿Y tus ramas, que me dicen?. Sí, sólo son bastones de un viejo que tiene por piernas un tronco, un tronco doblado y añejo que ha vivido estático como muerto, pero que ha soñado viajar lejos, allá donde tienes hermanos que no has logrado conocer, allá donde encuentres unas manos que logren al fin comprender tus anécdotas en el tiempo que te ha hecho envejecer. Arbol viejo. Mitad de humano, mitad de madero esculpido, por la naturaleza que siempre ha sido el mejor escultor que ha habido, de la cual tú eres historia y de la cual hemos nacido. 03.08.76

SINFONÍA DE PRIMAVERA. Han cuajado los frutos. Verdes y tímidos aún, nace la primavera mientras se abren y crecen las flores; caerán sus pétalos en la hoguera del día, cuando logren que el viento las bese. Los árboles nublados de hojas dicen notas y cantan versos esperando que alguien las recoja lustradas por el viento, mientras un beso las moja. Un cristal infinito y grueso, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 150 lavado sin límites e impalpable me muestra todo lo espeso, pero no logro ver nada cuando se abre el cielo en una nada de beso. El viento suave que llega hasta mí me trae todo el aroma, me envuelve, me impulsa en su frenesí llevándome con las palomas hasta morir y vivir en un sí. ¡Viento! ¿Me llevas?, ¿Adónde?. No me importa, sólo llévame. Llévame donde la brisa se esconde para decir riendo: " Amame", mientras de la nada risa se desprende. ¡Ah!. Soñar con la fantasía de encontrar la realidad, tranquila pero con recodos en que la primavera es una verdad, pero fantástica de cualquier modo, como la oscura claridad. Como la claridad de las aves al trinar que van tendiendo su canto sobre las hojas, las flores y el mar. Un mar de eterno llanto, pero también de alegría y felicidad sin par. Toca el piano primaveral, bailan y danzan flores, como en el tiempo ancestral, en un enjambre de colores que se ha perdido, pero hoy se puede restaurar. 07.10.76

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Río de Vida en Racimos – Pag. 151

AMANECER. Se han quedado quietas las nubes y el sol asomó su cara de rayos como cortina de agua colgando del infinito en una ventana lejana, sonriendo de claridad entre cristales de agua. Viaje el sol sin huella, sin marcar pasos pero arrastrando una cadena, una cadena de claridad soñando con mirada de viento en una sonata pequeña, plena de sentimiento.

1976.

V I A J E S TIEMPO PARA ESPERAR. Cuando nuestra amistad se acentuaba más y después de tanto tiempo en que nuestras ideas se comprendieron, aún no queriendo se tuvo que alejar. Sí, una noche que no olvido y que está en el pasado, me dijo:"Hoy hay que despedirse", y cuando me creía resignado ví lo que puede sentirse cuando alguien que te ha acompañado y te ha dado amistad, entre un quedarse he irse Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 152 debe batirse resignado, en un adiós embriagado con gotas de licor que te fluyen desde la garganta y asoman por los ojos con un amargo sabor. Un hasta luego solamente que ha quedado pegado en los cristales de la ventana y entre abrigos colgados de las paredes coloreantes, con el llanto que nunca lloraron. Una Amistad pendiente y que debe continuar, en la distancia que no es lejos porque se puede borrar con velocidad y deseos, que sólo saben llamar cercanía entre amigos viejos. Si hay tiempo para vivir, se puede entonces esperar el regreso de un amigo que no te ha de olvidar, que por siempre llevarás contigo porque tú no olvidarás. Pasen, pasen los días porque el tiempo se va. Lloren, lloren melodías que en mi recuerdo están. Canten, canten alegrías que algún día vendrá. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 153 ¿Soñé?. No lo creo. Más bien viví una realidad, una verdad. ¡Pero que presente está el Amigo ausente que me dió su lealtad!. Espera, espera contento que algún día volverá. 14.09.76

PALPITAR. Tus ojos me miraron desde el fondo del mar oscuro y tus manos se aferraron a los últimos minutos, como queriendo detenerlos hasta saciarte de ellos. Después tus ojos ondearon sus olas transparentes, y en tus manos se te rompieron las uñas, desangrándote en un beso. El alma se te filtró a través de las palabras, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 154 y comprendí que mi alma necesitaba escapar a través de las mías para hundirse en el oscuro mar de tus ojos transparentes y aferrarse a tus manos sangrantes de nuestro amor. Los minutos me traspasaron el pecho ardiente, y quise deshacerme en el beso último de entonces, para sentirlo hasta ahora vivo y palpitante correr a través de mis venas navegando mi sangre y bebiéndome la vida. Estampaste tus ojos en míos y me marcaron tus manos. Se besaron nuestras almas y todo el mundo quedó callado, invadiéndose de nosotros hasta dejarnos separados, pero nuestras manos alcanzándose. 01.01.77

REGRESO. En mi pecho un ramo de rosas rojas, en que cada pétalo es una espina se va cuajando en la distancia. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 155 Mi cuerpo se queda siempre aquí, allá de donde partí y el mundo viaja bajo de mí, bajo este salón caminante de tiempo y me aleja. El mundo viaja al Sur y yo me he quedado allá. Le ví alzar la mano para despedirse cuando el mundo partió. Le ví sonreír triste cuando todo empezó a deslizarse. Se quedó. Me quedé. El mundo tomó el Automotor. Estoy detenido y los árboles se escurren a mi lado. ¿Hacia dónde viaja el mundo?. Porque yo estoy en la estación, Parado, inquieto en el andén. ¡Pero no!. Me veo yo mismo a través de la ventanilla, sonriéndome triste y siguiendo al mundo con la mirada, deslizándose y llevándome hacia el Sur. (El cine natural fresco, como suspiro muerto). Mi pecho ya se acostumbra a los pétalos de espinas y al rojo de las rosas. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 156 Pero volveré otro día a sentir sus heridas: Primero llegaré triste y alegre, después partiré alegre y triste. Voy hacia el Sur y toda la distancia penetra en mí y en mis rosas: La niebla, los árboles, los ríos ... 1976.

OLVIDO TU OLVIDO. Dejé vagar mi canción para que llegara a ti, cristalizándose en el aire no la pudiste oír, regresó a mi corazón donde se quedó al fin. Dejé volar una mariposa para que fuera por tu amor, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 157 no llegó jamás a su destino, el viento la extravió, quedó perdida en el tiempo, en el tiempo se quedó. Hice tomar una rosa que tú pudieras querer, se marchitaron sus hojas, comenzó a envejecer, sus pétalos fueron prosa que no pude contener. En sueños te regalé un mundo de dicha y nada más, pero esa vida tú no quisiste, la dejaste que se esfumara, sin embargo vivir fingiste como más te acomodaba. 14.09.76

BALADA DE LAS PALOMAS. Oh¡ qué bello ideal cuando lo nuestro aún despertaba y tu alba era mi aurora. Mi sed encontró en ti el manantial y tus besos fueron fuente fresca de dulzura, que saciaron mi vida hasta desangrarse en caricias. Oh, para entonces sembré en ti la semilla de todo mi futuro, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 158 y hundí en tus aguas el velero de mi recuerdo, que fue deshaciéndose y cayó como miel en el polen, y fui trobador y mensajero de un futuro por llegar. Para entonces cogí la luz y forjé para ti una lámpara que diera el amanecer en tu vida. Y al vuelo nacieron mil palomas blancas, que llevaban sobre sí el arcoiris de mi suerte para enterrarlo en tu selva. Balada, balada de alegría y vida cantaba la palidez de sus alas y el dulzor de sus ojos se esparcía al vuelo. Rocío de ternura y el alba amanecida, vaciaron sobre nosotros y coronaron mis sueños con el perfume que esperé siempre. Y el sol que llevabas tú era la luna que en mí nacía, y tus manos se quedaban tristes en el placer de mis ansias, para tener amanecer en cada instante y comenzar a vivir, pero de día y no deseábamos mas nada que el fruto de nuestro huerto. Moría la sencillez de la vida y nacía nuestra sencillez, para inundarse en nosotros, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 159 en cuando las fuerzas estuvieran vírgenes nuevamente en nuestros cuerpos y pudiéramos tener el valor de cantar nuestra canción con entereza. Mañana tibia y plena que surgió de una noche en que las estrellas estaban ausentes y todo nuestro día se cubrió con el sol que ambos encendimos, para que no acabara nunca, y se nos entraron los minutos, y las horas traspasaron nuestras manos hasta llegar a la tarde que no quisimos, ni menos que brillara la luna no teniendo la luz para coger. Pero lo sabíamos y la noche no esperó a que yo estuviera preparado para lanzar mis palomas negras con el luto de mi amor por nuestro día muerto, y alzaron vuelo hasta tocar mi estrella, y le quitaron la luz que tenía. ¿Qué pasa que el día se oscurece con el luto de su vuelo, y nuestra noche está en el día para ocultarme el sol y decirme que no habrá ya un nuevo amanecer?. —Porque a mí quebraste las alas y apagaste mi estrella con el luto que aún no quiero ver. Y el olvido, ¿ dónde está el olvido?. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 160 ¿por qué también no se pone el sol en el recuerdo que está en mí? Dejaré volar mis palomas oscuras, pero enviaré una blanca de esperanza para que el futuro se me quede claro. —Vuelen, vuelen palomas pero aléjense que aún en mi hay vida, y dejen luto por el recuerdo con el olvido, que ha de venir porque soy hombre y viviré aunque no lo quiera. 29.12.76

ESPEJO OSCURO, DE NOCHE EN MI ALMA. El espejo de la habitación oscura me ha mirado turbio, y la noche dejó recordándote. Pero yo no quiero recordarte, déjame seguir sólo, que mi sombra llore con el espejo oscuro de noche, de nostalgia turbia y recuerdos sombríos. El alma se me quedó arrugada Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 161 cual pergamino inconcluso y no sentí mis manos mas que cuando el calor quiso arrancarme las uñas para quemar mi sangre fría, helada y sin más vida que darle a mi ser. Con el alma arrugada, reflejada en el oscuro cristal y las uñas ardiéndome de dolor, ( Mi mundo quiso escapar por ellas para mirarse en la habitación oscura). el corazón quería morir resignado en la ancianidad de un recuerdo cercano, que tal vez era presente por no olvidarlo. Todo mi mundo en cuatro paredes, ocultas por la profundidad. Era como llegar al fondo del mar en la noche vestida de carbón, llorando lágrimas de vino para embriagar al mar nocturno.

Era viajar con la vista quemada, supurando esperma de cera ardiendo por entre los juncos de cuarzo filosos, exalando un vapor rojizo de amanecer olvidado entre los cardos. Así, pisando uvas putrefactas, pero con un olor llamativo que invitaba a permanecer: Mis sentidos encontraron respuesta inventada para la tormenta interior, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 162 que fluía a través de mis poros y se esfumaba inadvertida. Miles de luces con tanto fulgor me dejaban ciego en la oscuridad hasta morir en manos de hojas soñadoras, venidas para verme cantar mis piedras o mi espuma, mis agujas o mis anillos, Mis llamas o mi hielo, de bien o de mal, pero que me hacen vivir. 31.01.77

DORMIDO EL AMOR. ¿Quién cerró mi ventana, dime que el amor no puede entrar?. Fue siempre mariposa recia y hoy los cristales no rompe. No quiero verla sangrar. ¿Dónde está su vuelo, dime?. Ni siquiera sabe volar. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 163 Yo no quiero ni rosas leves ni tu lluvia de esperanzas. Quisiera cogerlas todas, Pero, ¿quién cerró mi ventana?. Si no puedes tu abrirla no habrá ya quien la abra. Mi alma está cerrada. Abriéndose quiero sentirla. ¿Y si algún día, no sé, lograra el viento quebrarla?. Querré entonces tus rosas, tu vida y esperanzas. Pero hoy ni el viento llama para decir que es cruel mi alma con su ventana cerrada. 1977.

RECUERDOS RELACIÓN DISTANTE. Al compás de la brisa movíase su cuerpo. ¡Oh escultura fantástica!. Joven rumbo de la vida, habilidad desarrollándose. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 164 Cayó mi vista humilde en tu figura de cristal deslizando su palpitar sobre un mundo de llamas a encenderse, para no quemar en llamas, pero sí con su mundo. Su cuerpo claro y tierno abríase ante mis ojos y su mundo interior me dejaba indeciso, vasilante, como su piel al caminar suave y nervioso ante mi mirada insistente. Tranquilidad fingida en los ojos soñadores, en los labios de pétalos, en las manos transparentes y en su cuerpo juvenil, como el mío, que ansioso, como el de ella quería acortar la distancia. Hoy el mundo de su ser me ha dejado pensando en los atardeceres rojizos, en la lluvia estrellándose al compás de una brisa suave, en una escultura de cristal deslizando su canto. Recuerdo transparente que me ha dejado extasiado Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 165 entre dos vida diferentes, y en nuestras vidas pensando, y en que sus ojos los míos buscaron, para mirar como suplicando un entendimiento preciso de lo que ambos buscamos. Y la tranquilidad en mí no quería estar, lo ha notado quizás, y quizás hasta cuando seguirá el juego indeciso del amor a encontrarlo, a encontrarle, yo he buscado, y te buscaré hasta cuando tus ojos me miren opacos y su cuerpo para mí esté callado. 10.01.77

ANÓNIMO. Un nombre de mujer, que no conozco me ha llamado desde lejos. ¿Será tan bello como ella, habrá tanta dulzura en él, como en su cuerpo de mujer serena?. Una voz poseída de alas Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 166 ha tocado a mis sentidos, con la más dulce caricia de un recuerdo lejano. Unos ojos cálidos invisibles que nadaron en el recuerdo, me han llamado desde lejos. ¿mirarán mi recuerdo en ella, o sabrán recordar lo que siento?. Unas manos de espuma recordada, han acariciado mis cabellos, rizándolos levemente en el tiempo y me dejaron soñando en ellos. He recordado a una mujer cuyo nombre no conozco, y que deseo conocer, tal como sus ojos, como sus manos para llegarla a querer.

BARCAZA EN EL TIEMPO. Voy a anclar un minuto en un día nublado, para decir que mis pensamientos también se han nublado. ¡Oh! Si puedo escuchar el murmullo Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 167 de mil recuerdos en mi mente, como si fuese una noche de tormenta, con insomnio a través de la ventana. Y los rayos se estrellan en mi vista dejándome ciego de luz ardiente. Así como si viese mi imagen en el espejo, cada mañana, de cada día a comenzar. Así, así están anclados mis pensamientos en un pasado exasperante que ronda toda mi mente. (Barcaza. Anclada en un día: La imagen mía y otras...) (Uno de los 365 días del año 1977).

TRISTEZAS ALEGORÍA DE UN CISNE. Hace tanto tiempo que no lloras, —y me hablo a mí mismo— que cuando logre salir tu llanto Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 168 formará un gran charco con lágrimas de pena, en el cual nadará un cisne de cuello largo y hecho de tu propio llanto. Hace tanto tiempo que piensas —y miro en un espejo invisible— que tus pensamientos son un manto que abriga tu mente, envolviéndote en aquel llanto que llevas guardado adentro desde que la alegría está ausente, desde que estás pensado, pensando en tu llanto. Hoy ya una confusión, —y me miro sin llorar, pensando— de pensamientos y no lágrimas ocultas dentro de ti, —y nuevamente me miro— formando un gran charco que abriga a un cisne blanco, con el cuello largo y hecho de llanto. 04.09.76.

PROSTRERA CORTINA. Revelada la luz del día y renegadas las sombras nocturnas, me quedé en nada pensando, en una nada moribunda. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 169 Me dijieron que no estaba y cuando dejé caer la cortina que cubriera los cristales, que en mis ojos se derretían, sentí que dentro de mí los trigales en espinas florecían. Que ya no estaba me contaron y que volver no quería, que hacía días se había marchado. Y cuando la cortina sobre mí caía, sentí que dentro de mí los trigales, por florecer espinas se morían. Se reveló la luz del día y las sombras se renegaron. Envuelto en anda me sentía, mi hermana se había marchado. Que no volvería, pensaba, y en mi mente se abría la ventana del recuerdo, recordaba: la niñez en que había tan solo ganas de jugar y vivir, y en nada más se pensaba. Los sueños que siempre tuvimos, y cuando el peine del viento el agua de los charcos encrespaba, con un silbido de lamento a través de la ventana, allá en un lugar de sufrimiento. Con la luz del día revelada Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 170 y las sombras renegadas, en mi casa un lugar vacío y una cama desocupada

22.09.76.

CANCIÓN DE ALAS ROJAS. Dos palomas de alas rojas salieron ayer del nido. A volar con alas sangrantes, con recuerdos de sollozos y con el alma en la imagen. Y los cazadores, que de casualidad fueron cazadores, quedaron también llorando y sus ojos fueron palomas de sangre que en el rostro se les están secando, símbolo de una cicatriz que arde. Dos palomas que están sangrando quisieran volver al nido. Con alas curadas de recuerdos, tantos para contarlos a los cazadores temidos, que todavía están llorando... Y una paloma se verá arrullando entre sus rojas alas, un palomito de claro blanco. Vuelve paloma al nido, vuelve cantando con tu palomito blanco llorando. Vuelve paloma, te están esperando. 26.03.77

DESCENSO. El agua cae de un punto del sol y se evapora al llegar a mis sentimientos. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 171 El agua y el sol caen de un punto y mis sentimientos se evaporan. No cae nada, todo se queda allá, en medio de una melodía. Mi yo quiere quedarse también allá y me hundo en medio de todo, como todo se hunde en mí. Me voy a quedar en medio el agua, bajo un punto del sol, con sentimientos. También todo se va a quedar en mí, dejando que se escape en mi el sol, de ver caídas sobre mí las piedras, por ser pecadora que vive aquí, copiando agua, sol y nada, sobre mi cuerpo que se queda vacío. 11.06.77.

AMOR INVITACIÓN AL AMOR. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 172 Ven y anda mis pasos ahora que tu vida florece y haremos nuestra mesa sobre el mar, antes que el tiempo me quiebre las alas y nuestras semillas se esfumen. Ven, camina mi vida ahora que el tiempo comienza, y nuestro lecho será de agua, para que florezcan en ti mis semillas, andando nuestras vidas. Ven, que un sol mojado nos llama a sembrar las semillas de las cuales somos frutos, y nuestras vidas estarán cubiertas de hojas risueñas, en nuestro hogar de tierra. Ven, que mi vida está caminando y la tuya comienza a andar. Unamos nuestros caminos en un lecho sobre el mar, para coger frutos maduros en una edad temprana.

Ven, que mi huerto está lleno, y el arca de mi sed nunca ha buscado la humedad, para llorar sus rosas mojadas Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 173 sobre una tierra palpitante en que deben quedarse. Ven, que el tiempo agrietará nuestras palmas, y tu luna no será de sol, para secar la humedad que anidará en nuestro invierno de tarde, y el viento matará nuestras hojas. Ven a caminar viviendo el sol que llevas adentro, y nuestro lecho de agua será tibio y sofocante, hasta embriagarnos con humedad vaciada sobre nosotros. Ven que las noches suelen llegar antes que el sol se ponga, y tu vida o la mía se quedaran oscuras de soledad, con ansias de amanecer de nuevo a otro día. Ven que la tierra y el agua parecen ser madera y lino, y las hojas tendrán manos, como las nuestras para sangrar nuestra sangre, de hombre y de mujer florecientes. 11.12.76

RELATO HÚMEDO. La tarde se me entró en el alma Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 174 y toda mi voz se vació en verso, y un mundo de besos se me quedó en la garganta apretándome el pecho, mordiéndome y nublándome la mirada. Después un mundo de besos cristalizó mis ojos, y te besé con mis lágrimas hasta empapar tu rostro húmedo, y no tuviste nada más que darme que una mirada mojada. La tarde se me entró en el alma y toda tu voz se quedó callada, y el mundo de besos que me dabas se te quedó apretado en la garganta, nublándote la mirada, hasta desahogarte en lágrimas. Ni una migaja de mi cuerpo mereció una de tus perlas y sin embargo lloraste hasta vaciarte en ellas, y así con ellas mojaste toda la tarde aquella. El mundo pareció llamarnos y nos quedamos abrazados, mordiendo el beso mojado en que queríamos quedarnos. Pero la tarde entraba en la noche y nos separaba sin alejarnos. Después el rumor del río parecía el mundo estrellándose Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 175 contra las rocas en sinfonía, la que se alejaba, internándose en la noche, mientras tu mano y la mía iban unidas y sin reproches. Atrás quedaba la tarde y mis dueños que te relaté, la humedad de nuestras miradas, y el deseo que en ti encontré, los versos míos en palabras, y nuestras palabras calladas. 13.12.76.

MUJER MÍA, PERO DE AYER. Después de tanto tiempo tuviste hoy que aparecer: ¡pero que cambiada estabas, ahora eres mujer!. No eres la joven que jugaba a esconder su mirada en mi querer. Mujer, mujer, ¡cómo has cambiado!, pero tu alma la misma parece ser. Niña, mujer tus ojos han buscado los míos, tus ojos negros de ayer, ante los míos hoy han brillado y que fuerzas tenías en mirada que la mía dejaste extasiada, pero tú escondiste la cara, ¿Por que?. Sí, yo también he cambiado, soy más hombre que aquel niño que tuviste enamorado, ese que creyó enloquecer. Hoy tus ojos en los míos, ¿para qué?. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 176 Trataste de comprender, ¡Pero como brillaban, bailaban también!. Y tu mano ocultaba algo que yo no quería ver, brillaba una argolla dorada, eres mujer casada que hoy no quisiste ser. Tanto tiempo había pasado que te tenía olvidada, pero al mirarnos del pasado quisimos ser. Tu silueta, ¡qué esbelta!, eres bella, jamás lo negué. ¿Te acuerdas?: Tu mano y la mía. Te acuerdas, es seguro, hoy lo comprobé, juntas nuestras vidas y después eso... ¿por qué?. Me acuerdo, nos acordamos. Hoy nos hemos mirado con timidez ¿Y porqué?. Miedo de volvernos a querer. Y si ayer lo fue, hoy es más imposible el uno al otro vivirnos. No, basta, sigue tu camino y deja tus ojos tranquilos. ¡¿Pero cómo no me di cuenta, es tuyo?! Que hermoso. ¿Y de quién más es eso tan blanco como el armiño, y ese cabello de embeleso?. ¡Oh, que precioso niño!. 07.11.77 Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 177

TU VIDA ME LLAMA. Comienzo a acostumbrarme a ti. Algo extraño me llama desde lejos: Parecen ser tus brazos abiertos a distancia, en un lejano país de vida feliz en que el sol con su constancia derrite la nieve y rompe las peñas, empujándolas hacia el valle cristalizadas en gotas pequeñas, mientras hace que los llantos callen. Adivino algo en mi pensamiento, pero no me atrevo a confesármelo. Sí, sólo parece ser el viento el que me llega por las venas, y aflorar en mi mirada siento como invisibles cadenas de alma, deseos y vida nueva, sin penas, llanto ni sufrimiento. ¿Vida nueva, pero que es eso si día a día la vida me quema?. Ah, pero no, si también me llena de alegría, y hoy una hoguera que se enciende poco a poco como el sol que derritiera la nieve en aquel país lejano y donde las rocas se partieran en cristales de aguas puras para regar las hierbas buenas. Me voy hacia ti, como el ave al anochecer Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 178 va en busca de su nido. Me voy llevándote en mí la busca de algo perdido, que quiero encontrar en ti, en los dos, sin barreras ni cinismos y ver florecer algo nuevo, transponiendo el abismo para llegar al mundo sincero por el cual me desespero. Déjame llevarte conmigo al mundo de mis sueños, verás que el amor va contigo: Podrás caminar sobre una melodía y volver traída por el trueno, en un tren de espuma disuelta en verso bordada de fantasía, para respirar la filosofía que tiene un ave fabulosa que trina melancolía. Si quieres tendrá una nube para vestirte con ella, o para forjarte una sábana blanca en que mis brazos hayan de arrullarte mientras mi alma canta y mientras la tuya también cante. 20.09.76

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Río de Vida en Racimos – Pag. 179

CELOS, POR MI AMOR. Tengo celos por mi amor mujer, del pasado que de ti conozco y del que no quiero conocer. Somos ambos un presente que se devora entre risas, que muestra la verdad latente y se pierde entre caricias, para vivir la vida ardiente en que el amor es una delicia. Tengo celos, por mi amor mujer, del futuro que a ti vendrá y que no puedo detener. Cuando yo haya pasado, ¿quién será el próximo que hasta ti vendrá?. El que te hablará de rosas y te mostrará las cosas hermosas, o aquel que mis canciones te cantará para llagar mi soledad penosa. Tengo celos, por mi amor mujer, de aquel que dará alegrías a tus penas cuando yo ya no esté. Tú le dirás que soy sólo un recuerdo, Pero, ¿quién borrará la huella que en ti ha dejado mi cuerpo sereno?. Cuando yo ya no esté y no te acuerdes de mí Tu cuerpo sentirá que con mis caricias te quemo Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 180 y sabrás sufrir así. Tengo celos, por mi amor mujer, de todo lo que has amado y de lo que logres querer. No guardarás luto por mi amor porque seré sólo un recuerdo más, pero, ¿quién te dará el calor viviendo nuestras vidas amarillas de dolor?. ¿Quien las cosas que yo te dije te dirá cuando andes los caminos sin mi pasión?. Tengo celos, por mi amor mujer, de todo lo que por tu vida pasa y hasta de mi querer. 01.11.76

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Río de Vida en Racimos – Pag. 181

PENSAMIENTOS. (Propuesta) Déjame dormir en tu beso de primavera y que yo humedezca tu cuerpo con el mío. Dame tu aroma de azucenas, deja que lloren las palmeras, ven y cúbreme del frío. Abre los pétalos de tus labios, para yo deshacerlos con mi beso, hasta que nuestras almas sangren entre requiebros sabios perdidos en el embeleso. Que caigan las hojas de tus manos sobre el trébol de mi esperanza, que se deslice por mi mirada en llano, que cansada de mirar en vano hoy se viste de añoranzas. Caída la noche sobre nosotros, bésame hasta enloquecer. Amémonos por sobre todo el mundo y en el sueño más profundo Sé mía y yo tuyo en un eterno amanecer. 05.10.76

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Río de Vida en Racimos – Pag. 182

ROSAS OSCURAS AL PARTIR. Ayer murieron mis rosas. No estabas, ¿qué pasó, no estabas?. Sí, pero desde hoy yo también no estaré más, porque han quedado mis rosas muertas y el cielo se oscureció con sus pétalos dispersos hasta llorar la sangre de mis esperanzas. Al igual que ellos mis sueños también lloraron. Yo no sé si en tus ojos habrá sangre, pero los míos se han quedado pálidos mirando el luto por mis rosas. Iré andando el mismo camino, pero miraré gentes distintas, con otros ojos. Te dejo la posible prolongación de mi vida y encarno en ti los versos que te di, para que florezcan reencarnados más allá de mi muerte solitaria. Ya nunca más seré juglar para los besos, pero sí trataré de llevar mi propia resignación. No sé cómo. Dejaré girando al mundo con mi voz continua de recuerdos. Acepta la sangre y la esencia de mis rosas, los sueños y las palabras perfumadas de noche. ¡Noche aquella!. ¿Recuerdas?. La palidez de tu nombre, requiebros en los labios, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 183 en mis manos y en mis ojos todo tu cuerpo. Tomé tus flores, pero hoy te doy las mías. Déjame ir más allá y lejos de lo soñado, en busca de los mismo sueños pero sin ti. ¿Cómo, si pienso olvidarte?. No lo sé, pero iré sin ti. Es que no puedo decirte quise, porque tal vez te quiero. Toma la melodía de aquella noche y las otras que oímos sin escuchar, por pertenecernos más. Acepta mis flores muertas y con mi juventud la parte de mi ser que sembré en ti, hasta que cansada del mundo mi alma las reclame, para morir entero. 29.01.77

DEDICATORIA. Deja llenar tu mirada con mis ojos en el camino que la vida ha enseñado. Ven a andar en mis pasos como el sol camina al medio día, con tus pasos que han caminado ya otra vida y no la mía. No quiero ver llorar a las hojas que en mis manos han florecido, pero en el camino hay distancia, como en el hielo hay frío. No quiero que tu sangre recoja La nostalgia de mi ansia.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 184 No sé marchitar al mundo, son cabellos son oscuros. Mis manos aún no se queman con el dolor de saber herir, pero déjame soñar en susurros que mis ojos de ti se llenan. No hay más vida en mi sangre, ni más metáfora en mi canto. Hay sólo una puerta que abre el canto de estar llorando. Vida llévame lejos del sol que su calor me está llamando. Y no hay más que sol en tus ojos. tu mirada me esta quemando, por tu silueta de sol cubierta hay mariposas que están llorando. (Mariposa, ¿dónde están tus colores que en mis manos los estás buscando?). En dónde se ha quedado la rima que mi verso está callando. Un millón de frases tristes hay en mi corazón esperando. No quiero las hojas tuyas verlas por mí llorando. 10.06.77

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Río de Vida en Racimos – Pag. 185

AMOR AL FUTURO. Habrá una nube oscura que vestirá de luto al sol, hasta congelarlo y dejarlo sin más don que el vivir sombrío, lejos, sin más sentido que el de vivir olvidado. Se quedarán sin alas las aves y sus pulmones no tendrán aire, debiendo pisar la tierra para hacer sus viajes, sintiendo el calor de las piedras, y los peces sentirán sed y no sabrán nadar, debiendo también caminar y respirando el aire de las aves, llorando lágrimas de sol oscuras la lluvia secará las fuentes pues el calor será de lluvia. Oh! las cosas serán distintas pues el mundo ya no girará, sino que las cosas se moverán girando en el mundo detenido con un sol oscuro, con aves caminantes, con lluvia calurosa y de llamas. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 186 Todo, todo será distinto y las gentes cantarán diversidades. Pero aunque todo cambie mi mundo será tu mundo y tu mundo el mío, porque hay un mundo entre nosotros que liga nuestras vidas, hasta dejarnos sin aliento, pero con ansias de seguir. Miremos al mundo inconcluso con cualidades diferentes, pero con una cualidad igual que ambos continuaremos, y aumentarán nuestras ansias hasta que el mundo vuelva a cambiar, siendo la lluvia de agua, y las aves puedan volar embriagadas por nuestras ansias hasta morir en el hastío, sin que en nosotros nada cambie y sin que yo te deje de amar. 18.01.77

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Río de Vida en Racimos – Pag. 187

EN EL MARGEN DE TUS OJOS. En el fondo de tus ojos nuevos encontré la perla naciente, que daría mas tarde luz a mi esperanza y crecimiento a mi sentir dormido en el tiempo. Y no pensé que caería mi broma en el círculo infinito de tu alegría, que aunque buscada entre rosas lleva siempre dormida la pena. Y me has dejado en las noches recordándote como a mi lado sin que estés presente, más luego te veré para decir: No es la broma reída, es la verdad dormida en palabras. Deja dormir mis frases en la plenitud de tu beso, con las ansias despiertas y el placer en las manos. Pero no sé si en tus ojos Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 188 dormidos de futuro, haya para mí la perla y la luz de tu mirada. ¿Dejarás dormir mi beso en tu plenitud venidera?. 01.10.77

MUERTE LA MUERTE ANDA VAGANDO. En la noche: Pasa volando un ave negra invisible con alas de viento y cabellos de niebla, con suspiros de lamentos, con ojos negros de apagada hoguera, con fríos sentimientos y manos de greda. La muerte está paseando por andenes de hastío. La muerte anda vagando vestida de hierba y rocío, envuelta en niebla. Pasea sus ojos fríos sobre las casas viejas y sobre perros perdidos. Trae un arpa de silencio y una espada de sal, con cascabeles de uva la muerte sigue su pasear, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 189 por las calles empedradas, en las hojas de un nogal, en los cristales de escarcha y en el filo de un puñal. Va caminando la muerte con ropa de los ausentes, por los charcos de agua de filos transparentes, en la inmensidad de la noche quieta, tranquila sin boche, en un tren de ruedas planas con gentes que son de llamas. Está caminando la muerte lo marchitos faroles negros, las luces amarillas, las letras ya conocidas con testimonio de heridas por donde sangran las vidas. En las viejas caras pulidas que se retocan y se pintan sin evitar que se extingan. Se estira la muerte, pero no llega a cortarse. Es como un hilo de bronce el que sirve de enlace entre la nada y la vida, que son como ríos sin cause, que son como la noche y el día, así como aves perdidas. En un manto de agua se oculta de la luz. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 190 La muerte anda vagando en la tierra de Norte a Sur. Con un trigal de estrellas apagadas ha diseñado una cruz, para crucificar las almas vanas con lanzas que son de llamas. La muerte no se ha ido, en cada uno de nosotros está. Está en los cabellos de las vírgenes y en las maestras de escuelas. En las aves, en los árboles, en las criaturas grandes y pequeñas, en las manos de nuestras madres, en los niños y en sus niñeras. La muerte sigue vagando por los andenes, por los prados, por los rieles, por los valles y llanos, por entre los trenes, por lo que son mis hermanos y en todo lo que uno quiere. 06.07.76

LA ÚLTIMA CANCIÓN. Ya pronto dejaré mi día para adentrarme en mi noche, y me iré lejos, muy lejos donde no se siente el viento Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 191 y uno no se ve en los espejos, allá donde no hay sufrimientos. Ya no me verán las estrellas porque no estaré como soy. Pero antes miraré el paisaje por última vez antes del viaje. Me iré, ¿hacia dónde?. No lo sé. Ya está cayendo mi noche y la tarde pesa en mi espalda como atmósfera, como nubes blandas. (Señor, caballero me llaman algunos, porque hablo con vaganbundos y doy una frase a pordioseros). Mendigaré mi vida y le diré Señor a quien me dé un minuto. Se me pasan los días y vivo, Y mi risa por mi cuerpo guarda luto, porque después mi risa habrá sido, sólo un luto por vivir, cuando en mi noche doblen las campanas y cuando se dejen de oír. (Ya el gorrión se ha dormido y si el gorrión se duerme, también tendré que dormirme yo, y cuando duerma y sueñe, me soñaré recordando el que soy). De mis labios soñolientos y con la primera estrella comenzará mi canción, no soy como el Cisne, no será bella pero me dirá mi propio Adiós: Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 192 "Me voy larara la ra al fin, vagaré la eternidad. Huumm huumm". Y cuando el cielo esté todo lleno de estrellas callará la Canción de mi Adiós, se me olvidarán las penas y ya no tendré dolor. Sé que mi noche viene y la esperaré, como esperé a una mujer, porque mi noche sin ser noche tiene nombre de mujer. "Viví, como todos, viví y hasta ahora sentí el calor de vivir. Huumm huumm". Ya mi Canción comienza a flotar, y mis labios se preparan para cantarla, y así las sombras me encontrarán cantando, y mi río llegará al mar de sombras. Sé que el día se me va, más yo cantaré. Los días algunos se oscurecen jóvenes en primavera y las noches llegan pronto cuando no se esperan. "... Ya no esperaré la aurora de ver mis siembras florecer. Huumm huumm". Y con la primera estrella mis lágrimas serán Mi Canción, y todo mi cuerpo oscuro cantará, para callar con la última estrella. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 193 Cuando yo esté en mi noche ya no seré mi canción, ni cantará mi cuerpo porque habrá dicho Adiós, con las doce campanadas de un negro reloj, y doblarán las campanas con la última campanada de mi corazón. 18.11.76

RONDA DE TERROR FÚNEBRE. Que cerca anda la muerte. ¡Oh Dios, que no se acerque a mi casa!. He de cerrar bien las ventanas y pondré llave a las puertas para que no salga nadie, ni siquiera al jardín. Que oscuro color viste, lo he sentido pasar, pero es transparente, aún así es oscuro. He visto pasar la muerte. Trataré de que no llegue a mi casa, poniendo fuego, cercando con hielo. ¡Cuidado Padre, cuidado Madre!, avísenles a mis hermanos. Me ha dado miedo la muerte al sentirla cerca y no sé qué pasará mañana y después. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 194 Detengan a ese niño, que no cruce la calle, ¡Cuidado!. Se ha presentado la muerte con un color rojizo húmedo. Oh Dios, que no llegue hasta mi casa. 25.02.77

FUNERALES EN EL SUR. Hoy la muerte tocó mi casa con lejano rumor firme. A encontrarse en sureñas tristezas partió la mañana al abrirse, y me he quedado con uñas de poeta entre versos que se extinguen, como la mañana que al irse me dejó en la tarde sin fuerzas. Y vino sin ser llamada de entre sureña lluvia de invierno. Hoy en mi casa hay quejas, lamentos y fuego en los leños. (Es ella como la noche, más inmensa aún que el día. Casi como llamas frías y eterno cerco de humo de innumerables líneas dormidas). Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 195 Y aunque su voz fue siempre firme y sus manos eran rocas, llegó su susurro de sueño en la mañana al abrirse, trayendo rumor de invierno hasta el calor de los leños. Marchito quedó el fuego, como huesos en la hierba que se pierden sin ser vistos y desaparecen en la niebla. De la mañana a la tarde hubo solo susurros. ¿Y después en la tarde qué hubo?, me preguntó el fuego desesperado, quizás lluvia en el Sur y varios hermanos llorando. En el Sur penas amigas se estarán ahora besando, quizás sin leños encendidos, sólo con calor humano. Con mucha lluvia quizás y con más dolor de hermanos en sureña oscuridad. Marcharán mañana triste, con una flor en las manos, hecha jirones la garganta y palabras en los labios, que de quien debió escucharlas jamás responderán los años. Sureño rumor de voces, de cuerpos firmes y sanos, que estarán ahora flaqueando. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 196 Hoy se abrió la mañana y nos hemos quedado pensando, en que puede morir la carne y el alma sigue escuchando las oraciones en el Sur. Espero que Sur siempre guarde una canción de alabanza, para quien hoy ha dejado sin luz el fuego que arde en mi hogar a la distancia donde la muerte ha golpeado. 17.07.77

CAMINO DE MUERTE. (Preguntas) ¿Adónde me lleva la vida que a veces suelo morir o busco en el tiempo mi muerte?. La desesperación me toma de las manos, me hace tiritar y me estremece en el camino de vivir. Me lleva lejos, pero logro detenerme un minuto antes de mi hora para quedarme viviendo y no ser uno más ausente. Me quedo aquí en la vida escudriñando mi tiempo. ¿Adónde me iré una vez que deje la vida?. La muerte me llama de noche, habla conmigo de día Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 197 y creo que así seguiré. No sé cuándo ni dónde, pero sé que ocurrirá. Llegará la hora de la nada. Apresuro mi tiempo en el tiempo, soy un cobarde quizás. ¿Por qué no vienes?. Te espero. Muchas veces en mi cantar fluyen palabras de ahogo que no logran descifrar.

Pero te busco. ¿O no te busco quizás?. No tiene importancia el recuerdo, recuerdo en el tiempo será. ¿Viene caminando o yo voy al más allá?. Me quedo vacío pensando. Pasan las noches por mis ojos y la luz de cada día. Vendrán mis días de oscuridad. ¿Adónde voy con el tiempo si de apoco me voy muriendo?. Camino por mi vida plana y mis venas se desangran. ¿Por qué y para qué vivo?. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 198 Llora la muerte en mi vida. 11.10.76

VIDA-VIVIR CAMINO DE VIDA (Respuestas). ... no busques en el tiempo, el tiempo de tu muerte, sigue sin dudar el camino de la vida que te llevará hasta tu hora y no te gritarán cobarde en tu hora por morir. Si llevas la muerte dentro de ti, para que buscarla en el tiempo. Si la tienes en el presente y día a día te mueres y no te gritan cobarde por vivir muriendo. ...Justifica tu vida en la partida, de tal manera que a tu muerte Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 199 sea una entera realización, y no te gritarán cobarde por morir con justificación. Espera en las horas tu hora. Si te mueres día a día, para que buscar en tu vida la muerte que llevas adentro y que va siguiendo el camino hacia la tierra del silencio. ... y cuando tengas más muerte que vida y sientas susurrar en tus cabellos el paso de los años, verás que vivir querías. Vivir y retroceder de tu hora, para encontrar en tu vida el ya pasado tiempo y más vida que muerte. ... y te gritarán cobarde, al no querer morir por seguir viviendo. Entonces justificarás tu miedo, lo que será sólo un recuerdo de tu antiguo tiempo. ...Vivir, vivir sin seguir muriendo, lejos de tu hora de partir, sin buscar en el tiempo el tiempo de morir. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 200 ... La vida y la muerte unidas, sin ser cobarde por ambas. 11.10.77

PINCELADAS DE VIDA. El sol me dice adiós y yo le digo adiós a la tarde. Las aves elevan su vuelo último del día, mientras suelen cantarse entre trinos de melodías un hasta mañana donde habrán de reencontrarse. Adiós sencillo, casi vano. Me estrecha la tierra húmeda, para despedirse las manos con las suyas que son de barro, de hierba verde y hojas del mismo color. Quietud y un disco estropeado Repite monótonamente sus mismos sones, como viejo cansado y sin oratoria que sólo tiene memoria Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 201 para algunos colores. Me observa la habitación tranquila y sin alterarse: Parece estar acostumbrada a lo mismo, a esto que hoy vivo. ¿Y qué es?. Sólo quietud y un vivir sencillo, con una gran multitud de yo solo y tranquilo, en donde el humo de un cigarrillo es artista y pinta modérnamente sin pinceles y sin banquillo, con colores transparentes y continuados como hilos, como hilos desvanecientes en el aire y sin filos. 04.09.76

PIES EN EL CAMINO. Han caído ya los pedazos y el cielo se sigue destrozando. Quedará deshecho como poeta. Me gusta andar, pero me duele el camino y las piedras me golpean los pies hasta hacer sangrar herido. A cada paso camino. No sé si caminar o quedarme. Soy capaz de seguir adelante. El camino me hiere y le temo. Las piedras no me ignoran y se muestran ante mi serenas.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 202 Un paso, una piedra, una piedra, un paso. Vienen muchos como yo y hay rocas. En cada uno de ellos hay también pasos. 11.06.77

RÍO DE VIDA EN RACIMOS. Yazgo en la vida como cualquier otro, con las mismas gentes, pero con mis propios ojos. Me han dicho que soy yo igual a ellos. Lo sé, quizás somos iguales. Pero yo tengo mi verdad distinta, mis pesares, mis rencores, todo distinto hasta mis despojos. Río de la vida llévame hasta el mar. Déjame ser parte de tus aguas. Soy agua de la vida. Soy vida en la vida sin par. Soy uva en racimo, en la viña. Vida déjame después ser tu vino. Fui tu semilla, fructifiqué. Serán semillas lo que yo deje. Canten, canten las aguas y el racimo, y mi ser es agua de vino. Agua de vino en todo, todo en un río de nada. Me han dicho que soy como ellos Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 203 porque yazgo como otros, pero yo soy Río, soy Agua, soy Racimo. Vida, déjame después ser tu vino. Porque mi vida es de uva me embriaga el vino de sus racimos. 12.10.76

CASI VEINTE CANCIONES DE VIDA. Quisiera ser como el ave que pasó ayer rumbo hacia el Sur, y no sentir el ruido del tiempo en mis pies, ni ver hincharse mi estómago al respirar. Que mi carne y mi alma vayan unidas, logrando que el viento sea de vino y las enaguas de papel quemado con un color llamativo. (Hace ya tanto tiempo lo mismo: mi cuerpo y mi alma divididos). Tres millones de años que he nacido y cinco que comencé a soñar, sin poder jamás lograr haber vivido. Trato de engendrarme yo mismo y nacer yo de mis entrañas, a la senda de vivir unido con mi carne y mi alma amarradas, fuértemente atadas entre sí para que la realidad no me deje perdido. (Innumerables golpes a mi puerta, ha dado la distancia sin que le pueda abrir).

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Río de Vida en Racimos – Pag. 204 La mirada a escapado de mis ojos hacia un horizonte perdido, dejando a mi vista sin luz como soñadores despojos, como ave en la noche de vino azul, así como un gato maldito por la mano de Dios. Soñador nocturno, hombre al oscurecer. Igual, distinto, pero siendo tan sólo yo. ( Del brazo a una gitana bellísima para diferenciarme de otros). Y no son Mar las Montañas, ni los Ríos son quebradas, aunque quizás lograrían serlo. Pero si tienen cristales en las ventanas y han puesto cuarzo en la loza, y se beben vino, de uva al parecer, y las gentes que se dicen cristianas rezan enfáticas oraciones a un Dios, cuando corta el tiempo una vida con llanto, con pena, con dolor. (Y esa piedra nunca se ha movido del camino en que la dejó el poeta). Tres mil pasos más que ayer mis piernas han dado en círculo. Por obra de circular en la vida, mis piernas sienten mareos y con nauseas en el fondo de mí mis sentimientos expiran versos, si estos rociaran al mundo tendría la vida mía. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 205 (¿Cuántos nombres he olvidado?. ¿Cuántos nombres me han olvidado?). Casi veinte canciones han cantado mi vida, en mi escenario y yo como mi público. Me he hecho llorar yo mismo, admirándome de ser yo único sin tener conmigo cinismos, y si los tengo no he reconocido ninguno. Casi veinte canciones que han tenido mis años y que el tiempo ha conocido. (Cada canto mi vida, de cada vida mía un canto). 22.03.77

SERENATA DE AGUA AL PARRÓN. Dormido el parrón. Dormía y se inquietaron sus brazos. Susurro de voces húmedas, como mil mariposas de agua. Nocturno susurro de voces, se durmió en sus ramas. La noche en un sueño dormía bajo mil mariposas de agua. Un soplo de vida helada, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 206 torció el vuelo húmedo hacia la noche callada, susurrando sus palabras. Mariposas, mariposas claras, transparentes de noche de agua, torcidas por suspiro frío, vestido de noche helada. Melodía natural y simple en sus ramas se formaba. Aletear de mariposas húmedas, de alas nocturnas y de agua. Cristalino rumor de noche desprendido sobre sábanas, teñidas de otoño y tiempo. Hojas tristes y lloradas. Un mar de voces calladas en el parrón dormían, con ramas y hojas tristes. Lluvia susurrada y fría. Canción nocturna clara. Serenata natural y simple como el parrón dormido. Nocturno murmullo de agua. 24.01.77

UN VIVIR MÁS. Me he visto vivir como ha vivido cualquiera, y te invito a caminar Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 207 en el vivir de paz y guerra, como dos siluetas de sol que en la noche se alejan. Te he sentido llorando y viviendo lo imposible. Cantando alto, cantando, sintiéndote solo y triste. Como yo que también he vivido al sentir lo que sentiste. Coge tus alas de mañana y vamos rumbo del sol, que están llorando campanas de inconfundible color. Vamos a vivir hoy las vivencias calladas de noche, camino y cielo. De noche, día y luz, que en mi vivir hay un velo del más delicioso tul. Ven a vivir de anhelos en mi cielo que es azul.

15.06.77

HOJAS DE LLUVIA. Has visto el espectáculo de llorar la lluvia. Sus lágrimas siempre han sido húmedas, como las mías. Mi vida es como un tren, deteniéndose en cada estación. Mi vida es como un árbol, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 208 se ha quedado sin hojas. Pero un árbol siempre da frutos. Así como la lluvia ha llorado sus lágrimas húmedas, el árbol de mi vida ha llorado también sus hojas muertas. He visto caer mis hojas y llorar mi lluvia. (He vivido). 1977.

MANCHA DE SOL. ¿Has visto a la mañana llorar sus lágrimas opacas de sol?. Como esas lágrimas el sol ha llorado su mañana casi sin luz. Yo he sido mañana sin sol o con sol opaco, con lágrimas. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 209 Ha estado en mí la vida de otoño y han susurrado sus hojas muertas. Mi rabia ardiente de sol en la mañana opaca. Seré después rabia sombría y dormido beso de sol susurrado. Aunque sea mañana, aunque sea sol. Seré hombre, uno más en mi Epigrama, como cualquiera de un hombre más. Buscaré las mañanas tibias y los besos de sol agradables, con canto de hojas verdes y tierra seca, sin dormirme en mi rabia, siendo el mismo, sin ser otro, aunque deba cambiar. Buscaré mis versos y las mañanas con rabia para dejarlas abandonadas. Dejaré vivir mi vida en cada hoja amarilla y en cada pétalo florecido que acepta un nuevo nacer. 28.05.77

POEMA NOCTURNO. Oscuridad. Siluetas espesas y arrastradas. Silencio, mi hermana dormida. Luces lejanas, sencillas y apagadas. Ruido de sueño. Noche callada. Lejanía. Mis recuerdos oscuros y mi mente pesada no habla de nada. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 210 Presente tranquilo, con siluetas, con sueño, con lejanía callada. Rumor de noche: Suave y cerca, rodeándome, envolviéndome en todo, en libros, fósforos, sal, mesa y puerta. Cae mi poema lleno y vacío. Lloran mis versos sus llantos, Y riman, y hablan, gimen. Escribo. Y dormiré el resto de la noche, para despertar siendo el mismo y saber que cada día nazco para vivir un día más. 14.11.76

CONTACTO CON EL MAR. ... y ante mis ojos el Mar, y ante mis manos el Mar. Ante todo mi cuerpo el mar, en el recuerdo y en mi piel. Y el viento poco a poco Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 211 se bebió mis castillos, al mismo tiempo que una mano invisible juega con el agua encrespándola monótonamente, llevándola y trayéndola hacia la playa. Y el mar, la arena, el sol..., todo gira al compás de la melodía tenue y robusta que bordea las orillas de un mundo deshecho. Y el horizonte..., allá donde una guillotina corta suave y brúscamente las aguas, para poner límite en vista. ¡Oh lecho blando y húmedo!. Almohada de espuma en los ojos y sábanas palpitantes, con seres vivientes en un cielo de agua. Mar escultor. Naturaleza en las rocas y en el tiempo. Sácianse mis ojos de cielo, arena, de aguas encrespadas (las blondas del mar) por el viento. Ante mí el Mar en la relación Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 212 con mi ser, con mi recuerdo en el presente. 09.01.77

AUTOMOTOR AL SUR. Llévame por entre la lluvia en esta noche de invierno tardío, para encontrar las verdades ocultas y sentir tu peso como el mío. Llévame lejos, al Sur y por entre la lluvia, para que en un charco que haya olvidado el viento vea mi rostro oculto del frío, y en una noche de invierno tardío, sin aliento, traspasar la oscuridad y sentirme perdido. Llévame más allá de todo y de la nada, para encontrar más que nada un vacío donde no hayan almas pecadoras, ni espíritus y sentimientos sombríos. Llévame hasta donde pueda respirar sin pedir ayuda ni hablar de morir. Quiero llegar hasta donde cante la lluvia y el viento llore de alegría, hasta donde las hojas de los árboles rimen y bailen en armonía al compás del canto de los peces y el trinar de una rosa perdida.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 213 Quiero ir más allá de donde murió el agua y se hizo astillas la brisa herida: (Se enamoró de un Señor llamado Sol el que no la quiso y la dejó encendida). Mejor me iré al Sur, pero al Sur, donde el carbón tiñe los pulmones, donde el viento siempre es tardío y se esparce como rumores, donde una lámpara de luz es acompañada por el frío. Ahí quiero llegar, para ser el que en verdad soy y no fastidiar el peso mío, diciéndome que por estar estoy sin ser nadie en la vida y pensando en morir. Automotor, contigo me voy... ¿Al Sur?. No, a mi tiempo de vivir. 14.11.76

ILUSIÓN AL DESCANSO. Sé que por esta noche el mundo partirá lejos y no volverá hasta mañana con el amanecer. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 214 Habrán dos mil estrellas que se irán alejando con todo el mundo. No seré carne ni espíritu. Espíritu en mis huesos tampoco. Quizás sangre en mis sentimientos. Dos mil estrellas mirarán como una piedra se ha dormido. (Una hoja se ha visto soñando prendida de una rama sin más hojas, sin embargo frondoso era el follaje y mil hojas más tenían su color). Puede que sea hoja, puedo ser tal vez una piedra. Y hay cientos de hojas y miles de rocas. No culminará mi obra con el partir del mundo y el amanecer me mirará mañana.

Ya no quiero que por esta noche de mis ojos fluya el agua, ni que se cubran de rocío mis piedras, quedando mis manos opacas con el corazón palpitando aprisa. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 215 Que no sangren mis uñas, ni mis dedos busquen mis ojos, para extraer la mirada lejana perdida entre la niebla y el sol, buscando un horizonte de vidrio. Juntaré los párpados y ya no existiré más hasta el amanecer próximo. Quizás llegue a ser otro, Pero sólo por esta noche, lejos del mundo y de las hojas. Voy a morir una eternidad y volveré para recordarme ahora, cuando las hojas se estén secando y cuando las piedras se quiten el rocío, si es que sale para mí el sol. 06.06.77

ESPERANZA PLEGARIA DE UN SOL DE ENERO. Mundo háblame de ella. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 216 Llévale mi voz doliente hasta sus sentidos esperanzados y déjale escuchar mi palpitar hasta que comprenda mi esperanza. Soy el Sol que se funde en su calor propio de sed por la Luna lejana de Enero. Y en sus manos de llamas el recuerdo cálido de su cuerpo, y en mis labios el mismo recuerdo. Caigan, caigan las horas sobre las horas de espera. Y el tiempo nos aleja, como la distancia, sin saber que nos une en la distancia misma. Cada vez el Sol se funde más y su sed se advierte en mi ser de Enero, en llamas esperanzadas. Mundo déjame ver la Luna. Háblame de ella, dime como está, para que el Sol mío calme su sed. Luz, déjame ver la oscuridad que hay en el corazón del Sol de Enero y las posibles sombras de la Luna al encontrarse los dos astros lejos sin tener el placer de reencontrarse. Y la noche oculta al Sol, y la Luna sólo es recuerdo, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 217 recuerdo en el tiempo. Nadie, nadie corre la cortina que la distancia a puesto de noche, en el tiempo... entre los astros. ¡Hay de los pliegues de la Luna cansados de mi aliento, pero ansiosos de más de él, y de mis manos su cuerpo, y mis manos de ella, y todo mi cuerpo, y todo mi ser!. 19.01.77

ESPERANDO POR OTRA MITAD DE MI SER. Golpeará a tu vientre y el cielo té bendecirá, pués culminará tu senda de ser Madre, Mujer. Golpeará al mundo con sus puños y el dolor se olvidará en tu cuerpo, para quedar un mundo de amor en tu cuerpo, en el mío y el de él. (La obra divina, el éxtasis que significa cambiará nuestras vidas, y tu vida será repartida en dos y la mía aún sin ser divididas). Quiero conocer el cuerpo que navega en tu mar de mujer, como yo lo hice en mi Madre antes que sus ojos me vieran nacer. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 218 Es poco el tiempo en su ruta y tu cuerpo abrirá sus ojos, para recibir su barca que anclará en la vida. Amanecerá en sus días y acompañará la sonata del mundo con su llanto, como tú, como yo, como ellos en época de nacer. Que vengan sus ojos, pues las estrellas los llamaron. La noche se hizo trizas, ¿recuerdas?, sus pedazos envidiosos lloraron. Que lleguen sus manos a golpear las mías pecadoras y así yo me encontraré con tu ser y el mío unidos ambos. Y vendrá a reinar en nuestros mundos con supremo susurro de vida, para prolongar nuestros mundos de noche, estrellas y caricias. 09.02.77

SONETOS PARA UN RECUERDO. I Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 219 Regresa al mundo soñado por nuestras mentes ilusionadas. Ven que sólo me he alimentado con la sombra de la soledad. Hay tantas cosas que perdimos, pero que es tiempo de recuperarlas. Tomemos un mundo nuevo. Coge nuestras ilusiones. Ayúdame a recuperarlas. Ven, regresa que aún te quiero.

II Toma mi mano helada que tiene uñas de escarcha, dale el calor que anhelaba, que anhela y está descalza. Rasguemos la noche oscura con la luz de nuestras miradas. Abramos de par en par los cielos, para oír nuestras voces que de deseos hablan. Recoge mi llanto frío en tus manos imanadas, que llaman al corazón mío hasta la claridad esperada, que caiga como el rocío en tu alma que es clara. 14.09.76

NOCHE SIN TI. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 220 No sé, pero esta noche te siento tan lejos. Es como si el tiempo hubiese puesto una cortina entre nosotros. No sé, pero te he buscado y el tiempo no me ayudó a encontrarte esta noche. No te he hallado, aunque mis ojos encontraron tu imagen entre mis recuerdos cercanos. Y mañana no podré buscarte. El tiempo pondrá una cortina y esperaré con ansias otro día con temor de no encontrarte otra vez. Te verán mis ojos en el recuerdo cercano que tengo, y mis sentimientos estarán en las pasadas imágenes, para quedarse en un sueño que me distraiga y me calme. No sé, pero esta noche te siento tan lejos. Te han buscado mis sentimientos y no te han encontrado. ¿Dónde estarás en estos momentos?. La noche me dio tu aroma. Quizás cruzamos nuestros caminos en horas diferentes y el viento guardó tu recuerdo Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 221 para que se encontrara conmigo. ¿Dónde estarás que te siento tan lejos?. Y mañana no te encontraré, no podré buscarte. Y tú no me encontrarás, Quizás me busques, pero todo te dirá que no estoy. ¿Dónde estarás esta noche que te siento tan lejos?. No sé, pero no quiero que la confianza huya de mí. Te he buscado. Quizás me busques, sueñas tal vez con encontrarme cuando yo me he cansado de buscarte y pienso más allá de mañana en que podré verte quizás, para saber qué ha ocurrido. Te he buscado esta noche y tú quizás me has buscado. Todo me deja recordándote y confiando en que no me encontraste. De ninguna forma ha sido un sueño, aunque hemos soñado. No sé, pero te siento tan cerca, quizás me sientas cerca. Quédate conmigo allá, vente conmigo aquí y ya no te siento lejos. 07.10.77 Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 222

FICCIÓN SUEÑO: UN DIA DE AGUA. ... el mar se sintió húmedo y sin embargo tuvo sed y las nubes comprendiendo su dolor vaciaron sobre él el más entero vapor empapándolo y saciándole sus ansias, para perderse en olas gruesas. Surgió la melodía suave y todo se convirtió en agua: Aves de espuma sobrevolaron la sal disuelta en humedad, la humedad misma era agua y el vapor era humedad penosa. El tiempo era hilo de plata, desplazándose a través de la nada, como río nocturno a la luz del plenilunio suave, sin tener un comienzo y sin esperar el fín. Los molinos de viento con sus aspas de escarcha diseñadas, dejaban caer una llovizna en la tarde quejumbrosa al ser movidas por el rumor del mar cercano. Se evaporaron los árboles y germinaron siendo ríos, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 223 y de pronto se alzaban mil gotas de agua como hojas, para perderse en la atmósfera y estrellarse en el pavimento de hielo. Habían millones de peces, que al cantar producían burbujas como perlas, queriendo simbolizar un himno al amor que inventaron con notas salidas desde el fondo de un corazón de agua expresado en lágrimas. Movían su ritmo y las olas bailaban el vals húmedo escrito en el agua, con notas de lágrimas que aun perdura en el mar y que el viento canta. 05.01.77

SOY UN EXTRATERRESTRE. ...lo demás no lo sé, pero de cualquier forma me vi dentro de una nave y ésta era impulsada al espacio. (La sensación más común de toda persona es esa. La más simple es ver funcionar los motores y activar los circuitos que casi no necesitan de uno. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 224 Las nubes que se dejan al partir con un color grisáceo en medio de la oscuridad. Ya no está parada la nave en esa especie de globo de agua oscura que pareciera ser blanda). Iba yo navegando sin saber el rumbo, ni a que distancia estaba de cualquier planeta. (Es un mundo maravilloso el pilotear una nave de esa forma indefinible, sin escuchar un solo ruido; un silencio tan blando como espuma, y los instrumentos también son blandos, aunque creo no haberlos tocado). De pronto no sé qué pasa todo se agita en la nave. En un instante pierdo el conocimiento a causa del irresistible calor. Debe haber sido una falla en los mecanismos y creí morir quemado en ello. Despierto en un túnel oblicuo construido de porcelana —similar a la china— con pinturas exquisitas de frágiles contorciones. (Iba yo en un ascenso suave que impulsaba mi cuerpo, sólo sé decir que subía sin saber para qué. Era algo que alzaba Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 225 mi cuerpo tenso, blando y recto, con los brazos a los costados, pegados fuertemente a mis lados. Quizás no me impulsaba nada, y algo me llamaba desde arriba, algo como la vida. Todo en una semioscuridad, era como si los costados del túnel iluminaran su interior). Me vi de pronto ante un mundo desconocido con una claridad de luz natural, y todo me pareció extraño. Sentado a veces, otras de pie. Comenzó mi lucha con el medio ambiente: Recogí clavos y madera para construir mi choza. Supe entonces que debía obedecer órdenes Y me disgusté por esto. —Yo que siempre he tomado iniciativas y he tratado de hacer mi autenticidad, debía obedecer a alguien que no podía ver, pero estaba seguro que existíaYa no recuerdo más de esto. Todo ese sueño me ha dicho: " Eres un Extraterrestre". Lo he aceptado porque pienso: Fui engendrado, vengo de las entrañas de mi Madre. He nacido y tengo vida como un humano más. 29.08.77

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Río de Vida en Racimos – Pag. 226

AÑO 3.005... PM. Me preguntáis: ¿Por qué no ha quedado nada y que se hicieron las cosas?. Y yo te respondo: Aquí veis la obra del hombre avanzado, aquel bárbaro que progresó para destruirse. Y yo os digo: La ciencia se hizo reina, entre átomos, fracciones y ecuaciones. Se desconoció el arte, la literatura era vomitada por computadoras. Cada pájaro tenía un número, y se gastaron las uñas presionando botones, y se contaminó el aire con gases. Los pájaros con números nadaron en el humo, cada hombre tenía un alma petrificada sin sentimiento alguno. Cada lágrima era de ácido que les quemaba las solapas sintéticas. Cada hombre poseía piernas mecánicas para evitar el cansancio y se robaban la vida entre hermanos. Se desconoció el placer por amor y la reproducción fue hecha en probetas que daban a luz seres especializados: Unos con sólo cerebro, para pensar. Otros con sólo manos, para golpear... Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 227 Vivieron 100, 200 y 300 años hasta aburrirse de prolongarse la vida con trasplantes y drogas. Se olvidó la religión, fue quemada la Biblia, pues cada uno fue su propio Dios. Cada cual mató a su enemigo con la mirada infectada de un soplo de muerte que el otro aspiraba sin saber, por estar lejos. ¿Y las escuelas?. Ah, esas con maestros. Las computadoras fueron más fuertes, y los niños leyeron sonidos ultrasónicos, y dibujaron con pinceles mecánicos siluetas oscuras y frías que simbolizaban una ecuación; los colores fueron grises pues todo el cielo estaba nublado, oscuro de smog, y todo el tiempo fue noche, y se alumbraban con lámparas atómicas, y el sol era un gran disco infrarojo. La superpoblación les quitó el lugar a los peces, y se alimentó con píldoras de extacto de cuarzo, y excrementaron el fruto de la ciencia contaminando los mares. El tabaco les pudrió los pulmones, pero lo reemplazaron por un invento nuevo llamado "Mecanic Pullmon", y después el corazón por un marca pasos Ideal. Los brazos ortopédicos fueron más fuertes que los naturales, y la piel de polietileno era irrompible Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 228 pudiendo abrirse un cierre-eclair para comprobar el funcionamiento de los mecanismos en un taller de montaje.

Por esto la medicina fue absorbida por la Mecánica, Electromecánica, Técnica en Electrónica y otras. Ya no quedaban plantas ni árboles y en los museos televisivos se observaban especies del recuerdo, pero un caucho especial; habían también animales, pero en definiciones, y se comprobaba su extinción con relaciones numéricas. La filosofía se resumía a : 5ª + 8X- yA2= 5(3.3M-1) Después la ciencia encontró como perfeccionar la falla en los circuitos, y todo explotó: Los cerebros, los números quedaron esparcidos en la nada, desintegrados en el espacio, la ortopédica, la computación, las drogas. Me preguntáis: ¿Qué fue de todo?. Y yo te he respondido desde la Estrella Z15 La única que ha quedado. 09.11.76 (Mención Honrosa Concurso Nacional de Poesía Juvenil Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 229 Año 1978, Organizado por la Secretaría de Relaciones Culturales de Gobierno y Televisión Nacional de Chile)

EPIGRAMAS EPIGRAMA N° 1 Soy un hombre como todos. Soy tan sólo uno más . Soy menos que Dios: No camino sobre aguas, Pero soy Poeta y sin esfuerzo alguno, cuando la tarde cae me adentro en la noche sin moverme ni caminar. 09.11.76

EPIGRAMA N° 2 ¡¿Qué hacia dónde queda el Sur?! En esa dirección Señor, pero si quiere más de la vida tome rumbo Norte y llegará también al Sur. 03.06.77

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Río de Vida en Racimos – Pag. 230

DEDICATORIAS MARGARITA ALBA. Flor carnal Margarita, —y te miro de distancia con timidez respetuosa, serena y llana de ansias— Margarita flor Mujer, Margarita Mujer alba, Margarita carnal y blanda, Alba Mujer, carnal y blanca. Seria Margarita. —Está seria y pensativa, pero interrumpe su calma una risa que es de alma, alma suave de flor y franca— Ríe, quédase y calla... Amó más confiesa su olvido y después canta. Margarita ríe y quizás ama. (Es distantemente cercana y cuando su voz calla yo soy poeta en busca de la rima, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 231 la más suave y blanda para la flor Mujer cercana que se va lejos cuando su voz calla). Margarita ríe, Margarita habla, pero va distante aunque está cercana. Lleva en las manos ilusiones de loza dura, quebrante y quebrada. ¿Amas Margarita?.¿Quizás una lágrima?. Lloran tus ojos sencillos, sencillos de calma, vivaces y casi intranquilos. ¿Lloras Margarita, o amas?. Mujer carnal floreciente, (Margarita ríe y calla) flor Mujer alba y blanda. Margarita ríe, Margarita lágrimas. 04.09.76

NOTA DE RECONOCIMIENTO. Tu cultivo aún no termina y tiene espina aunque no son rosas. Yo soy tu siembra, de aguas Padre, tú el forjador de mi semilla y de mis heridas, pero te perdono, como no he de perdonarte el don mágico de vivir. Me he bebido tus años, tu trabajo antiguo de presente y día a día te absorbo la vida. Deja abrir mis venas para regar la tierra seca Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 232 con el pecado de ser tu hijo. Si te miento Padre. me hundo más en el pecado y tú cada día eres más grande. Si me crees Padre, es mejor que me creas y no sientas como me hundo.

Aunque vaciara mis venas y pusiera en ellas vertientes, agua solamente pura no sería pecar el mirarte, ni hablar y decirte: Padre yo soy parte de tu mar. Me he bebido tus años y cada día te pido más. De ti soy pecador. De tus años tu vida. De cada hora tuya tomo miles de minutos y tu esfuerzo yo lo aspiro dejándote sólo un poco. Soy como ellos todos, quizás fuiste como ellos: Pago con tus horas, invito con tu esfuerzo. Pérdoname por ser tu hijo y agradecerte con tus palabras, que yo las he hecho mías. Haz triunfado Padre Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 233 Porque he triunfado yo, y no quiero fracasar porque fracasarías tú. Déjame seguir pecando, porque en mi pecado —no lo sientes— hay también gratitud. 19.06.77

CONFESIÓN. Perdóname Señor, pero hoy conocí a una Diosa: Tenía tanto en sus cabellos que me costó comprenderla hermosa. Tenía tanta nieve su piel que sentí mi alma llorosa y cantaba tan dulce su voz que la mía era espinosa. Había dulzura en su nombre y era más tierna que rosa, que no bastaron mis versos ni la palidez de mi prosa para tender a sus pies mi alfombra de lirios, violetas y rosas. Perdóname Señor, pero me ha mirado una Diosa, porque ha hablado conmigo, por creerla mariposa. Perdóname Señor, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 234 pero era Mujer y no Diosa. 15.12.76

ELEGÍA A MI PADRE EN CONFESIÓN A MÍ MISMO. Ves a ese hombre. Ese semiperdido en preocupaciones. Ese es mi Padre. El mismo que hace ya muchos años fuera como yo lo soy hoy. Aquel que desposara a mi Madre y tuvo la caricia de sentirla cerca como su esposa. Viviendo como yo esperó mi llegada, y la de mis hermanos, y así se le han ido los años. Puedes ver la luna que aparece en sus cabellos sembrando rosas blancas, y mirar en sus manos, son las mías, pero más al futuro —ojalá sea así— pienso. Mira las mías, son sus manos, pero hacia el pasado, pues mira en ellas y verás Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 235 la subdivisión de la vida en odios, amor, rencores, alegrías y penas, como todo hombre que ha vivido siendo hombre. Si tocaras la fuerza de su vida harías explotar la tuya sin experiencias, pero desearías que estuviesen en tus brazos, como yo deseo que sus ojos estén en los míos, y su piel sea mi piel, sin confusiones. Y aunque pertenezco a su carne como fruto de su siembra, en la culminación del éxtasis de la vida, quisiera ser más hijo, que él sea más padre de su carne y más árbol de su rama. Déjalo tranquilo que piense, ya que yo no puedo pensar por él. Quizás algún día sea yo mi padre, pero hoy él no permite que su rama se rompa. Ves es bonito, déjalo callado, rabiando y moviendo la cabeza disgustado. Puede que tú seas su preocupación Sin embargo... nada... Y esa fe en el futuro que muchas veces parece turbia ha estado siempre acentuada, tanto que el huracán de cosas que pasa por casa no llega a tocarla. Déjalo golpearte y hablarte duro, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 236 porque habla con su carne y en ella caen sus golpes. Padre gracias por ser tu Carne. 25.02.77

TU RIMA EN MIS PALABRAS. Maestro, guíame hacia el mar de tus palabras y navegaré en mi balsa de espuma enseñada, y tendré cien puertas al mar por donde saldrán mis ojos a encontrar tus palabras. Déjame ir en busca de bordada espuma dormida, de sereno dormir en los ojos, y cantaré con voz de profeta la canción de tu enseñanza. Quiero que mis ojos miren con tus manos banderas blancas hacia donde la guillotina abre el sol cada mañana. Iré andando en tus pasos Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 237 y cantará mi mañana clara. El horizonte estará cubierto de bordada franela plateada. Ay de la voz dolida, del que no ha visto tu mirada y lloran sus mudos labios eterna canción de escarcha, y no hay sonrisa blanca que tenga brillo de serenata, y no tienen dormido beso sobre tus manos blanquedas.

Dejan llorar su cuerpo y les gime dentro el alma, ¿Dónde está el Maestro humilde?. ¿Dónde está la Maestra alba?. Con llorada canción te buscan y el pan no responde nada, quedo callado el silencio, y el silencio se hizo agua. ¿Maestro, dónde está el pan que buscan cada mañana?. El horizonte se viste oscuro y lloran lágrimas sus ventanas. De dormida canción el niño rima tus palabras, y coge los frutos el padre que en ti puso la esperanza. Encontraron el pan en tú alma y no hay niebla hacia la playa. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 238 Me has enseñado tu puerta abierta hacia el mar y la esperanza. De sentida canción cuando joven recibe hoy mis palabras. 13.10.77

RAÍCES DE ELVIS PRESLEY. Ha caído la ceniza sobre el pan, léntamente nevó con sol. No alcanzó la primavera vecina a florecer con su voz una vez más. Color luto viste la primavera llegada. Llanto oscuro cae de las banderas. Cuarenta y dos canciones, como su Madre, sin que ella cantara. El sol se disuelve en el agua. La vida se va con el tiempo. El río canta con las piedras, se queda mudo en el aire. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 239 Mil notas se quedaron en la escuela de su canto, y el mundo llora. ¿Por qué su vida no tendría seis cuerdas como su guitarra?. Se rompió la única cuerda de la guitarra de su vida, y el mundo llora. Era una guitarra su vida de un millón de notas, de un millón de melodías en cuarenta y dos canciones.

Rey, ven a ver tus raíces florecidas aún después de tu muerte. Como aún florece tu vida. Como aún canta tu río. Como aún se rompen y no se rompen tus cuerdas. Ven a ver como canta una guitarra. Tus raíces con flores. No está tu agua en el viento y la primavera llora, pero se consuela. Aún está tu canto y el mundo sigue llorando. Ven a ver como lloran. Ven a ver tus raíces, tus flores, tu agua entre las piedras, tu canto en un millón de notas. Recuérdate tú mismo. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 240 Ven a escucharte. Déjales regar con tu agua tus raíces de flores, tus canciones con tu recuerdo de notas y de cuerdas. No envejecerá tu tiempo ido, porque el mundo llora en tu recuerdo, porque aún hay agua en tu río y el sol no la evapora, como la nieve que es de agua. Mira tus racimos, en cada uno de ellos hay vino, y el vino también canta y hace cantar tus racimos. Ven a vivirte recordado que el mundo no se cansa de llorar y está regando tu río con su sangre para embellecer tu canto. 08.09.77

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Río de Vida en Racimos – Pag. 241

A UNA MUJER. Si durmiera el cuerpo mío en tu cuerpo de papel, donde no hay tinta oscura, y mis ojos encontraran el verso en tu forma desnuda, el poema de tu cuerpo sería mi canción de cuna. En la mañana brilla el sol y a veces quema mis manos. La mañana no me ha mostrado su desnuda figura, y queda mi voz temblando entre el placer y la locura. Si el sol que tengo en los ojos Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 242 viera sin hojas a la mañana, por el pecado de verte pura pecaría mi Sol y tu Luna, sintiendo que el placer nos baña. Y tiemblan mis manos errantes por tu mundo de papel buscando el verso amante de tu calor a enloquecer. Y están las hojas oscuras que me niegan el pecado de ver tu carne pura. En las llamas de mis ojos se consume tu figura. Quiero alcanzar el pecado.

18.10.77

EXISTENCIA REVÉS. En el umbral de la noche me detendré, para dejar que la noche penetre en mí y no ser yo el que penetre en ella. Y para salir me quedaré parado también en el umbral de la aurora sin moverme. Dejaré que la vida gire en torno a mí y no buscar la vida para vivirla, que mi razón sea quedarme, para que mi razón corra por mis venas. Me detendré en el umbral de todo y mi todo no será más que yo tranquilo, viviendo, pero la vida viviendo en mi. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 243 Ya no buscaré las cosas con esmero, cogeré lo que pueda, como vagabundo, y si el hambre siento, que no sea así, que yo no sienta el hambre, que ésta me sienta a mí. Y si transpiro, ya no transpiraré, Seré transpirado hacia fuera por mis poros. Así la vida me caminará, me leerán los libros, el espejo se mirará en mi. Me sentirá la sed. Seré cuerpo en el espíritu y me llegará la distancia, me tendrán las peocupaciones y me tendrán las ansias. 15.11.76

RÍO DE SERENATA PALPITANTE. Noche dame tu serenata de quietud y deja que mi vista cabalgue infinitamente tus estrellas. Caudal de luces en eterna distancia. Río de diamantes con pulsación de fuego azulino sin color cercano. Noche, madre de las sombras. Inmensidad soñadora en brasas de cristal centelleantes, amante empedernida, y los ojos se cierran hasta que el girar Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 244 nos lleve al lado opuesto. Noche, déjame comprender el éxtasis de todo lo creado, del Universo, de los cuerpos, de la existencia. 09.02.77

VISIÓN DEL MUNDO. Hoy he nacido para ver al mundo y he visto: Todos están lejos de todos, ¿Por qué no todos uno?. ¿Por qué la guerra y la avaricia de mando si después de todo somos los mismos?. ¿Si hemos nacido de la misma manera y crecido de la misma forma, por qué estando tan cerca de los otros hay una distancia entre todos y cuando el viento sopla fuerte en una parte, en otra por no respirar se mueren?. ¿Si los mismos somos capaces de amar, por qué entregarnos odios sin par?. Cuando la mirada busque a las demás que no sea sólo por mirar, que vaya con un mensaje de paz predicando la amistad. Que la risa sea una sola y no repartida en pedazos, esparcidas por las calles lográndola los que tienen mando, mientras que los otros se pudren en llanto sin tener para cubrirse un manto. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 245 Somos tan expertos en el mentir que lograremos engañar a Dios, diciéndole que todo el mundo es feliz, cuando él mismo lo palpó en un tiempo pasado muy distinto, pero igual al de hoy. He nacido para ver al mundo y he visto sólo de él pedazos, entre los cuales me confundo y grito mi súplica de cualquier modo. Hoy he nacido para rogar por todos. 30.10.77

AGUA DE TARDE. El viento mueve su agua en la atmósfera de calor. La tarde ruge en silencio: Claro, seco y dormido. La tarde me llora confusión y me pierde entre las cosas, para salir en un raudo soplido hacia imaginadas rosas. Tarde... te recibo en mi beso. De calor llorosa. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 246 Suave... embeleso. Y un manto de agua el viento, y en una nada de todo la tarde llora su tibio aliento. 10.12.76

DESCRIPCIÓN DE UNA TARDE. He visto a la tarde llorar sus lágrimas cálidas y tomar las hojas hasta dejarlas sin agua. No se como, pero ha esparcido su enagua transparente de rosas pálidas. Revolcándose sobre un vestido de desagradable sabor a nada, el viento ha perseguido mil ruidos y palabras, para unirlas en un silbido y luego olvidarlas como algas lejos de la tierra y el agua. Luchando con fuerza invisible y de sonriente color a perlas, las hojas sin agua y secas han querido ser reinas, en la tarde de moralejas en que cada piedra se quema. La tierra flor marchita Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 247 y de color a cenizas, a piedras deshechas sin nombre ni camisa ha extendido sus labios secos para que los bese la brisa y ésta su beso lleva lejos. Confundiéndose en el aire va caminando el beso con color a polvo y a vinagre en la atmósfera de calor grueso, sin color, sin aire, con cansancio, con sueño y brillantes reflejos. Con nubes destrozadas como sonámbulos de agua, que no contienen más que su propio aliento, y en su sueño quiebran rosas de incomparable vapor de viento para mezclarse en el infinito cielo. 22.12.76

CIUDAD, ... 11 AM. La ciudad gira con sus edificios quietos, y el rumor del día me eleva sobre los techos, para hacerme girar también en ellos. Las gentes en bandadas y desordenadas sin límites Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 248 me marean con su caminar: Trajín de peces, de aves, de mar. La ciudad me siente levemente en su regazo, me deja tranquilo, me mueve, me hace girar sin rechazo, y después soy ciudad leve, soy transeunte, soy pedazo de ciudad viviente con vitrinas y vehículos, con maniquíes que saludan en un eterno ridículo. Ven, me llama la ciudad. Camina mis veredas, cruza mis calles y mis aceras, háblame al medio día con voz serena, pero deja que yo me exalte en esta incansable faena. ¡Cuidado que han tendido camillas de loza, no se por qué, y yo soy camilla de tendida en mi asfáltico parquet. Habla, habla sin cansancio con vos de gentes, de autos, de microbuses y trastos. Mira, mira sin cansancio con ojos de tiendas y canastos, de vendedores callejeros y artefactos. La ciudad gira y todo gira en ella, incluso yo también me muevo Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 249 aún cuando mi caminar termina. 22.12.76

TARDE. Tarde vacía, Tranquila, casi aburrida. La plaza de siempre, pero ahora de día. Desde mi banco percibo Un murmullo de todo: — de la fuente con sus hilillos de plata Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 250 brotando como de la nada y confundiéndose en cristales semejantes — de música brotando en los altoparlantes y esparciéndose en el aire, como en un simulacro de nadar en la atmósfera. — de las gentes caminando y de los niños vaciándose de alegrías, gritos palabras y llantos. Un murmullo de todo, de mucho, de poco, de tarde. Tranquilidad, quietud, silencio neutro de árboles quietos y plantas sin flor, de estudiantes, de sol. Invierno de tierra húmeda y blanda, como espuma lustrada, como llanto oscuro de lágrimas secas. 30.07.76.

EPÍLOGO Dejó el viento llena de burbujas la atmósfera: No terminará aquí mi vida y mi verso seguirá hasta donde. El tiempo ha recogido mis burbujas, como la atmósfera en la tarde tomó las del viento en espuma. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 251 He dejado en el tiempo Mis penas de espuma y rocas, mis alegrías de luz y sombras. Pero el tiempo sigue, el viento avanza y parece no cansarse nunca; sin embargo hay veces en que yo me canso. No soy el viento. Las luces opacas de brillo amarillo han ido siempre conmigo. Las ventanas semioscuras, de cristales rotos y lágrimas, en las manos y en el agua.

I EL RECUENTO DE LAS SOMBRAS Leche dolorosa fue la medicina que tuve una vez aquel día. La sangre vertida en palabras y apretadas en la garganta de tal manera que mi voz fue muchas veces roja, y tuve sed de agua a tal extremo Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 252 que me he bebido mis lágrimas. Sed de lluvia y de palabras Amigas de amor y de esperanza Que muchas veces he creído cerca, pero aún tengo esperanzas. Se han deshojado mis sueños y las rocas tienen espinas, como muchas palabras que me han dicho y que yo también he lanzado al agua. El agua es persona, las gentes son de agua, hay también de rocas, de espinas y de lana. Las sombras son de vino, el vino embriagaba mi cuerpo y las palabras eran lejanas, muchas veces, como la lana. Vino en casas de rocas frías he tenido ante mi cara, y mis ojos no miraban el veneno de esas casas que reciben siempre con risas y después crecen en nada. De los vasos he tomado entre mis manos la venganza, contra mi cuerpo joven que aún tiene esperanza. En mi hogar lejano siempre han tenido para mi confiaza: Crece el fruto y siembra, la siembra nace y se desangra. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 253 Se ha desangrado mi siembra, porque la vida queda siempre esperando un nuevo fruto; tomé del placer en la noche la semilla que regada sobre hierba dormida tiene hoy mis manos. Y sin querer ser sembrada Cogió la tierra mis palabras, pero la Luces Amarillas brillan siempre y se aclaran. En el Negro Color de luto quiero que se vean reflejadas las penas mías de entonces, de aquellos días de aguas que el viento hace burbujear casi siempre en mi cara. Y el dinero que busca siempre hacer que piensen en él, me ha hecho odiarle tanto que he aprendido a coger de los árboles las hojas engañándome y queriendo así tener mil castillos y cascadas, cuántas túnicas y lámparas. Se me han roto las uñas y gastado la esperanza, mientras se me han ido muriendo en mi alma las lámparas. En Rostro de Amigos he visto yo cuántas lágrimas, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 254 les he visto caerse y lanzar al cielo trompadas, me han pedido ayuda porque las manos les sangran; se han quedado mis ojos, mis palabras y mis ansias ayudándoles a dar trompadas. Y en mis oídos no cicatriza la marca de llamas que puso un día, la noche que quiso venganza, y la marca sigue hundida hoy en mi pecho, que no olvida las palabras fétidas en mala hora y que veré un día cobradas. Y una habitación lejana me ha conocido más que nadie, ha escuchado mis ruegos y ha sentido derrumbadas cuántas ideas de suave brisa, tantas cosas y cascadas. Si he tenido hambre de todo, he tenido también de algas, de fruta, de pan y carne, de música, de manos y de alma. (Ay de la memoria frágil que se quiebra y no avanza sobre los días pasados, ante la vida olvidada). Ay de la memoria frágil que se curva como vara: Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 255 el Maestro quedó tan lejos, el amigo de mi infancia, lo dejó lejos la tierra en un lugar de agua. ¿Dónde estará el Amigo que tocó trompetas en mi alba?. El Sur siembra en charcos, el agua y la lluvia se desangran. Quizás sea hoy tan sólo tierra. ¿Por qué no viajan las palabras al Sur en la mañana?. De las sombras las memorias en el amor que se ha quebrado, quizás por el pecado de amar sin que me amaran, y de no haber querido cuando rogaban por mis besos. En el vacío de mi alma por no haber quebrado el ruego de amar cuando me amaban tengo hoy el gran pecado. Y el amor que he sentido no han querido comprender, cuánta sed sentía, y en mis labios las flores en deseo se escondían, y jamás tomaron sus pétalos cuando yo los ofrecía. Creo podridas mis entrañas por tanta mala intensión, por sin querer haber hecho infeliz a quien me quiere, sin quererle yo. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 256 Cuántos golpes en mi vida he dado en inconsciencia, creo no pagar nunca mi no intencionada deuda. He visto en las manos de mi Padre sin piel sus palmas, y en sus cabellos tristezas. ¿Y en su alma...? he sentido de mi Padre las flores y las he olido, de sangre pintadas casi todas. (¿Para que lo sufrido?) Y en el jardín Mi Madre ha dejado ellas cuántas lágrimas: —¿Por qué lloras Madre?. —¿Dónde está tu pena?. Mi Madre siembra, el cultivo la escuchaba: —Dime hijo: ¿Dónde ha ido tu hermana?. ¿Qué le ha pasado hijo...? ¿Por qué...? ¿Cuándo...? En las sombras... ¿Qué ha pasado que el tiempo a veces se olvida?. A veces quiere ser olvidado. De burbujas oscuras se han teñido mis palmas, cuántas mas como ellas no quieren verse dibujadas. El Campo Santo se alumbra Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 257 con la imagen de un niño y se queda mirando la lumbre que puso mi madre. Las luces alumbran, se edifican castillos.

II EL RECUENTO DE LAS LUCES Por sonrisas no se ha quedado mi canción de joven. Por reír, han reído mis ojos. Inmensa obra de conseguir la amistad joven y buscadora de experiencias, como letanía de cobre que siempre se aleja sin tener años la luz cuando se hayan las tinieblas. Letanía suave que abre siempre las tristezas, dejando un vacío enorme para llenarlo de experiencias. Por recoger frutos mis manos que siembran no han sentido cansancio; del sembrador las cosechas. He sembrado mi tierra y he conseguido riquezas. (He sembrado versos para cosechar poemas, he regado mi tierra de infinitas letras). Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 258 De dar gracias debo darlas porque he conseguido grandezas: El rebaño más hermoso en mi hogar lo he tenido, y el pastor que admirado se ve humilde ante sus ovejas. De extraordinaria Mujer soy Carne, Madre Naturaleza que me ha dado a la Naturaleza por Madre. De hojas como yo se ha visto sembrada su tierra, gracias por las hojas que tengo en mi primavera. Y aunque no vestidas con túnicas púrpuras hemos tenido las hojas franela, para escapar del frío no estando en primavera. De un hogar de hojas franeladas doy gracias con agudeza, y no callan mis palabras ante toda su grandeza. Por haber aprendido a saber quiero pintar mis notas, y he sabido y sé que aprendiendo de las gotas se sabe conocer el agua, y el mar espera a que llega el aprendido a cantar sus letras.

Canto hoy mis letras, cantará después mi recuerdo lo que hoy es mi canción Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 259 de haber tenido esto que hoy dejo con temor, porque no sé que vendrá caminando en el tiempo, y quizás sean éstas mis últimas letras, dejaré conocer mi recuerdo: DESPEDIDA DE UN ESTUDIANTE Hoy naceré para el mundo, son casi veinte años que he nacido para mí. Y el fuego sabrá de tu obra, y el agua comprenderá que he pertenecido a éste mar inmenso de palabras. En época de abrir los ojos hacia un horizonte próximo tengo mudas las palabras. Es época de mirar al mundo con el fruto de mi adolescencia pasada. Es época de fuego, es tiempo de agua. Vengo de un sueño en un día, despierta mi vida a la vida. Amanecerán mis años jóvenes y las estrellas que estuvieron en mis días de juventud hoy están alegres y tienen pena.

A la desfloración de mis sueños partirán los años que dejo. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 260 Quizás haya otoño y de mi árbol caigan las hojas. En época de nacer de nuevo siento miedo del viento. Es tiempo de fuego, es época de viento. Son días de camino. ¿Adónde irán mis pasos por lo caminos del tiempo?. Voy a caminar en los pasos que me dieron mis años de joven con innumerables líneas sobre libros, pupitres y fuego. Voy a beber mi agua tomada al pasar por el tiempo. Cuan profundo suele ser el mar cuando le buscan con fuego. ¿Adónde irán mis pasos en esta época de deshielo?. ¿Endónde quedarán las líneas, los pupitres y los esfuerzos?. Con caminos de líneas voy a llegar con esfuerzo, a tomar el agua saciadora que los pupitres me iluminaron de viento. Y la verde hierba sabrá que mi esperanza también es verde, que las flores de mis sueños son frutos también verdes. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 261 En época de pintar mis palabras se oscurecen. Creo que abriré las ventanas para mirar hacia mi madurez.

III LA ESPERANZA DE LAS LUCES Quiero que florescan en mis manos los sueños, tener del viento el agua que riegue mis deseos. Tomar del viento el agua. Vivir de mis años enteros rumores de tiempo: Tomad Madre promesa que tuve una vez para ti. Tomad Padre de mis manos Tu trabajo y tus días. Que venga el rebaño a tomar de mí los frutos que han sembrado en mis manos. Iré a andar en los pasos que me enseñaron a dar, porque aprenden los pasos en el hombre a caminar. Y voy a tomar de la carne el más entero placer, viviré mis años con alguien que sepa en mi creer. La carne tendrá de mí, mi cuerpo y nacerán las manos múltiples Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 262 que quiero sean tan mías, como yo de mi Padre. Ya no quiero sentir sed de lejana amistad, caudal de experiencias cantará nuestra verdad. Estará el amigo cerca, el fruto florecerá. Y seguiré en el mar buscando mis infinitas letras, para recoger del recuerdo las miradas que ellas esperan. Tendré entonces mi mundo. Sanará por entero mi cuerpo, lejos tendré a la muerte; ni cicatrices, ni llagas, ni palpitar que crece. Sanará mi alma del rencor, del odio y la maldad que hasta ahora he tenido cuando me traicionan. De las Luces; las Sombras y Las Ventanas mis letras se quedan para terminar. Dejó el viento llena de burbujas la atmósfera y mi verso ha cantado, y cantará quizás hasta tocar la atmósfera y ese mundo de burbujas en el tiempo de luces, de sombras y de horizonte. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 263 08.11.77

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Río de Vida en Racimos – Pag. 264

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Río de Vida en Racimos – Pag. 266

HUERTO DE MUJER. Puso Dios la semilla en una tierra de Mujer, y hoy se llenan de vida sus entrañas. Abrió la Tierra sus ojos para coger el agua llovida en sus entrañas de vida con peces a fecundar. Y hoy caminan dos cuerpos en paralela dirección: La vida nueva a nacer y la vida antigua empollada. Ondea el Mar sus olas internas y los peces nacen del mar. El Mar tiene manos de Madre y entrañas de olas. Se hincha el cuerpo en el cuerpo y crece el fruto florecido, se mueve en espacio marino endonde la Carne es Mar. Siembra Dios en su huerto y su huerto germina en bondad. Beberá de la Tierra el Fruto la vida pintada de blanca humedad. Mirad como brillan los ojos puestos en una inmensa Tierra. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 267 Sentid como pulsan los pechos de la Tierra fecundada. La siembra del Creador es carne palpitante. La Mujer es de carne. La carne será Madre. 21.11.77

A UNA ROSA PÁLIDA. Cuando la eternidad cayó en los pétalos, las nubes tardecinas se cuajaron en blancura, de esa claridad inmensa se forjó la piel de una Rosa sin pétalos. He visto la plenitud de la vida en una Rosa de carne dibujada. La Mujer que lleva manos en los ojos. La Mujer que lleva en las manos miradas. Cuando el cielo rasgó su lienzo, para mirar a través de una ventana, hubo nubes tardecinas blancas de piel, Mujer y esperanza. La Rosa con blandor de espuma. La Rosa con firmeza de palabras. La tierra que es Madre. La Madre que es espuma bordada.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 268 Cuando una ventana quedó abierta, miré sin rasgar el lienzo hacia el planeta de mujer que es ventana de cielo, luz y mar inmenso. La ventana abierta a los ojos. Las manos que brindan miradas. La Mujer que es Rosa. La Rosa que es Madre, ojos y palabras.

24.12.77

EL MAR Y YO. Estuviste despierto toda la noche y en la mañana despertaste con un toque de diana, con ese rugido inmenso de león de agua. Te encendiste ayer tarde Y después te vestiste de luto Sin quedarte mudo. Te rinde culto mi carne. Creo que soy hijo tuyo, creo que también eres mi padre. El silbido de roca. Las manos porosas. La saliva de peces. El inmenso cristal que parece blando, como mi carne. Tú el Mar con voz de Poeta, yo con ruido de olas Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 269 y ya somos amigos. Tú de carne. Yo de agua, y ya somos uno.

08.01.78

DE TU VIDA SOY. Vengo desde el fondo de tu pensamiento. No me niegues que existo en tu mente, que en tus dominios de sueños yo soy el que te ciñe a lo más alto, a la eternidad inmensa, a las sombras estrechas, al umbral de la locura. Vengo de un reino sonriente, de profundidad incalculable. Vengo de ti. Voy más allá del horizonte, y más lejos que el día. Más al fin que el infinito. Soy la esperanza de tu antes. Soy tu imagen soñadora y triste. Soy el deseo de tu carne. Tengo tus ojos y tu luz. Tengo tus manos y tu alcance. Tus pensamientos de llama eterna. Perduraré en tu placer y en tu cuerpo, en el deseo perenne de eternizarte, en la quietud pacífica de tu espera.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 270 Vengo desde tu cuerpo y tu mente. Soy tu mundo antiguo y de siempre. Tengo tus virtudes y tu aceptación. Perduraré como tu Poeta. 21.01.78

ANTE LA VENTANA Y LA ESPERANZA. La ventana me invita a esperar el segundo eterno en que pueda verte. El cielo me mira con sus lágrimas partidas, y me voy quedando tan desnudo y tan lleno de esperanzas. El cielo quiere azotarme con su llanto. Quiere entrar en mí. (La ventana está cerrada). El cielo se desahoga en lluvia. Mis fuerzas son tan débiles que no se mojarían entre dos gotas. Y mis esperanzas son tan fuertes que absorverían toda la lluvia. Se encadenan los pensamientos cual docenas de páginas inmortales. Gime el tiempo. Quiero ir donde madure con más rapidez mi carne. Dejaré reserva de sueños escondidas dentro de mí. La ventana inmóvil. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 271 El cielo inmóvil. Mi mente confusa. Te veré pasar amazona de orgullo. Me mirarás casi indiferente. Mi esperanza te desciende de la negra ave que montas y te posa en mis manos. Los minutos pasan en mi palpitar, la ventana insiste en su invitación. Tiene acento de segundo. Tiene voz de sonámbulo. Grita con palabras cristalinas de agua y de canción. A veces me habla en un idioma que desconozco. A veces no logro descifrar lo que dice. Creo que trataré de ser tierra, sólo por ser un poco más y abarcar todo un planeta, para ser parte de la naturaleza y no sólo sueños y esperanzas. Quiere abrirse la ventana. La lluvia va a entrar en mi. No deseo que ella recorra mi cuerpo y después salga por mis ojos. Un segundo te veré casi confundida, distinta a otras veces, vestida de agua. Querré entonces palparte sin agua. Todo se quedó inmóvil. La ventana cayó su voz. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 272 El corazón me ensordeció y casi no te vi pasar. 08.06.78

PARALELO. Me voy de pronto, pensando, al lugar donde viví tanto. Me voy con los ojos tardíos, con la mirada inversa, con las manos más gastadas en busca de las manos que tuvieron rumor de mañana. No sé si vestirme como antes o caminar con menos seguridad y más sueños de aire, o ir inscrustando la mirada en mi presente que fue esperanza de alguien. No sé si viajar caminando o ir en bus o en taxi. Quiero caminar pensando, ir por la ruta más fácil. Llegaré soñando. Recuerdo: Las calles mojadas, mi esperanza húmeda, las alegrías lloradas. Los cuchillos de agua Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 273 destrozando mi cara. Pienso: Antes tuve luz y palabras y hoy, parece, tengo menos palabras, menos fuerzas, más rutina y menos agua. Me vi parado en una esquina en medio de mí sólo yo, cuando el otoño en su vendimia descolgaba la última hoja de su pezón. Cuando entre los árboles el viento tocaba cien violines, mientras las ramas en un concierto movían sus brazos danzarines. La calzada en la noche lustrada, mientras las luces lloraban trecientas lágrimas de agua, y cuando miles de cuchillos rompían mi cara taladrándome el alma. Mi alma soñaba. Mi alma lloraba. Mi alma cantaba. Hoy sueña menos mi alma. Hay menos palabras, se abandonan sepultadas. Tuve caminos, tuve esperanzas de mañana. Hoy tengo caminos sin agua. El agua casi siempre lavaba Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 274 mis esperanzas no claras. No sé si vestirme como antes y caminar con la mirada inversa. Tengo el tiempo y los sueños de alguien, pero no encuentro en mis versos las ansias de pararme en una esquina para sentir pasar la vida. Tuve futuro, hoy tengo presente, pero encierra mi alma y mi mente cuando tropiezo con el poeta para ver lo que él siente. 25.09.78

TREN DE PICHILEMU EN VERANO. Solía verlo pasar el día domingo por la noche. Era una gran serpiente cascabel, tirando y empujando a reventar, abriendo los brazos para sacar más fuerza, poner un píe adelante y frenar para sostener el peso de su cuerpo y detenerse finalmente. El Tren de Pichilemu llegaba hundiendo su metal en los rieles y hundiendo los rieles en la tierra. Tenía algo de agradable, pero mucho más de desagradable. Tenía impresión de intestinos, vaporizando un olor a cuerpo que se ha olvidado del agua. Era un obrero transpirado por la noche. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 275 Daba la impresión de que dormía sin bañarse. Era un pedazo de estómago abierto, con microbios, con gentes que fumaban y bebían, con gentes que volvían a fumar. Parecía que despertaba siempre en día Lunes, con sed, con el estómago reseco, con la piel picada y cubierta de viruela. Le asomaban cicatrices por todas partes, y tenía heridas sin curar aún. Le miraba pasar con entusiasmo. Todas las gentes eran una sola. Se quedaba parado en Marchigue para mostrar su espectáculo, su escena de acuario turbio, sus luces de carnicería sucia. Sin embargo invitaba a una copa, a un trago de vino ahumado. Invitaba a seguirle con entusiasmo y muchos le seguían. Yo también le seguía a veces, me olvidaba con gusto que parecía intestino. Me dejaba llevar hasta su meta y le pedía que me regresara después. Me veía arriba fumando, ayudándole a avanzar, a enterrar sus ruedas con costras. Rugía furioso y se esforzaba, no le gustaba que le creyeran débil. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 276 Se alejaba como una cascabel, con escamas trasnochadas, pero sin avergonzarse. Se iba pidiendo camino, doblando su espina dorsal con flexibilidad de anciano fuerte, fumando su pipa de petróleo, haciendo gestos de despedida cansada. Era un estómago que se cerraba. Tenía poros por donde las gentes miraban, por donde se veían gentes fumando, apagándose los cigarrillos en las ropas, empujándose, riendo y disgustándose, bebiendo vino en melones, contando anécdotas de playa. Muchachas tostadas daban la impresión de haber besado haciendo el amor en la arena. Sin embargo el Tren no se avergonzaba. Tenía gran personalidad, me conmovía y le envidiaba, y cuando se había alejado me quedaba con el deseo de que me hubiera llevado con él. 26.09.78

CAMINO DULCE Y AMARGO. Te vi llegar con la mirada tan limpia Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 277 y tan enormes sueños y esperanzas. Te palpé desnuda de maldad y de pensamientos negros. Sentí tu carne tan transparente y tan tibia de mañana. Te despejé de ideas antiguas y te hice pensar como mujer. Llegaste a ser tan mía como mis ojos y tan apegada a mis sentimientos. Te tomé como carne nueva y madura y te hice sangrar en besos casi eternos. Caíste rendida ante mis ansias y mis manos de llamas. Te quemé tanto con mis manos y con mis besos de infierno. Lloraste de placer en mis brazos y en mi cuerpo ardiente. Té ví entrar en las llamas y no quise que escaparas. Sentí tus palabras envueltas de placer y de aceptación continua. Te cubrí con mis manos y con mis labios de verdugo. Dejaste que destrozara tu cuerpo y tus pensamientos de mañana. Te hice madurar en la carne mía y en mi cuerpo de abrazo. Subías con alas de águila y de placer a eternizarse. Te ayudé a subir sin dolor a las nubes Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 278 y a tu infinidad de mujer. No querías bajar a la realidad y a la cordura de tu vida. Te vi descender dolorida y jadeante, y sin palabras de transparencia. Lloraste envuelta en humedad y no quise verte llorar. Te vi arrepentida y alegre y a mi lado como mía, Mujer. 03.08.78 RECUERDOS POR BERNARDO O'HIGGINS. Porque tengo en los ojos memoria dejo vagar en la historia la inmensa plenitud de los hombres, los hechos y las manos nobles: Cuando terminaba la lluvia y el sol florecía en los castaños la tierra sintió fuerte el llanto de quien sería más tarde, en los años, Padre de Chile, hijo y Soldado. La cuna no dijo nada. Fueron los hechos quienes hablaron. Las piedras de Chillán, Agosto y el agua en el Sur secreto guardaron. Crecido; Hombre y Soldado. Sangre, Tierra y Caballo unieron las voces todas para pedir en buena hora, la Libertad de quienes fueron siempre los hermanos Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 279 de Bernardo O'Higgins Riquelme, cuando la luna en creciente hizo ver el cielo más claro. Tenía la voz firme. Manos y plenitud de bravo. Ojos de Chilena Esperanza. Cariño y ternura de hermano. Sería él quien nos diera Valor, Tierra firme y sembrado. Libertad, Patria y quimera, luz, claridad y dominio quebrado. Porque tengo en los ojos memoria Sé regocija en la historia el recuerdo que guardo siempre a Bernardo O'Higgins Riquelme. 03.10.78

DE LA NIEBLA A LA NADA. Te vi aparecer de entre la niebla y me sentí poeta, una vez mas me vi ilusionado pensando en las cosas bellas. Una vez más me sentí poeta, te acaricié en ilusiones y un concierto brotó de mis sueños. Te vi y me vi flotando en mil notas. La guitarra que estaba herida tocó para nosotros. La niebla se fue borrando, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 280 comprendí tu mirada de esperanzas. La niebla ya no nos separaba, nos separaban las palabras. Eras como un concierto sensible, como una multitud de migajas que me confundían los días. Ya no tendré las horas junto a la ventana que me acompañaba. Ya no tendré el segundo eterno. Tendré sí el concierto de miradas, el murmullo de recuerdos, el susurro de tu paso sencible, la caricia de un segundo, la rabia de no poder alcanzarte, la maldición de mi rabia, la rabia tuya por mi inseguridad y por mi maldita indecisión. Tu cuerpo frágil casi detenido. Mi ventana que no te ve. Tendré la tristeza de un poeta ante la ventana que se ha quedado solo otra vez. 28.11.78

MONÓLOGO CON MARCHIGÜE. La tarde viene cayendo montada en potro de suave lienzo. El día va envejeciendo y entre los árboles Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 281 asoma un rumor de noche. Marchigüe empieza a quedarse con colores que son eternos. Marchigüe empieza a olvidar que tiene calles polvorientas, que tiene gentes de acero, y que sufre. La tarde viene tiñendo, viene poniendo color en los hombres, haciendo pensar con sentimiento. La noche que asoma comienza a esconder los niños. Comienza a encrespar los nidos y a sacar calor de las luces, de las luces como cerillos escondidos, como puntos infinitos y sin brillo. Nace a la noche el canturreo cansado de polvo, el tono viejo y largo del obrero sin hombros, el aullido eterno del galgo. Para Marchigüe comienza la segunda estrofa, la metáfora de sus pasos, el nocturno aroma de las rosas. Con los años se está envejeciendo mi pueblo. Sin querer se está pintando de negro, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 282 se va tiñendo en silencio, en silencio con el viento, cuando asoma de entre el cerro con mil notas de concierto. Pueblo, mi pueblo enterrado en el infinito mar, mar de la noche oscura, pinta de color sin par sus alegrías y locuras, canta con lento cantar tus penas y tus bravuras. Deja que me sienta poeta y que grite con voz alta. Que descubra mis letras y la inmensidad que tú alcanzas. ¿Por qué estás envejeciendo cuando tienes fuerzas enterradas?. Saca tu azadón y tu pala, levanta quinientas casas, tres ríos y una cascada. No te quedes tendido sobre el pasto que es escarcha, que enfría lo que consigue la sangre y destruye la labranza. Tienes guitarras enormes, tienes voces alargadas; pues no dejes que el tiempo por entre los días asome, poniendo cansado sueño en las voces que tu derramas. Tienes manos tan grandes Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 283 y tantas Madres que trabajan, hombres que son capaces de formar mil barricadas para detener el invierno que está cayendo en tu alma. Hay muchos niños esperando, que saques fuerzas enterradas, que tomes a todos tus hermanos y les entregues una esperanza. ¿Por qué te has quedado quieto cuando tienes puertas y ventanas?. Tienes veredas que terminar, construir y sembrar mañana, hacer brotar en la tarde un árbol, regar y hacer brotar el agua.

Marchigüe aún no eres viejo, no pienses en el recuerdo porque te irás envejeciendo y te quedarás sin manos cuando mañana ladre el primer perro, y hasta los perros irán partiendo en busca de mejores amos. Marchigüe, eres el pueblo que aún tiene regreso, que tiene manos descansando, que tienes niños esperando por un pueblo en mejor tiempo. Mira a tus hombres por la noche caminando como cansados, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 284 sin haber tenido esfuerzo, y sin haber logrado lo que lograban en otro tiempo. No te reproches nada, porque más que de alguien la culpa es de nada, camina con alta mirada y respirando con buen aliento, canta con voz clara y fuerza en el sentimiento. Marchigüe, Marchigüe canta con tu eterno murmullo de viento, mira hacia la luz del cerro y pide cien sacos de cemento, que se acabe el polvo en las calles, que haya pan, vino y dinero para copar de alegrías a aquellos que están sufriendo. Marchigüe, tú eres sentimiento, Madres con hijos lejos que están llorando por ellos. Eres folclore puro arraigado, hijo, espino y sembrado. Eres señor de alegrías, eres cantor renombrado. Tienes voces de canto amplio, pero mucho canto no encontrado. Sabes ayudar cuando quieres, ayudas, amas y te han ayudado. Pero criticas mal cuando puedes y hundes a los buenos esforzados, en levantar la voz sobre los llanos Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 285 hasta alcanzar el don que quieren. Marchigüe, Marchigüe canta, canta con tu puente, con tu cerro. Marchigüe, Marchigüe ríe, ríe, canta. Marchigüe mi Pueblo. 21.12.78

GÉNESIS. Más allá del perfume de la rosa. Antes del tiempo y de la verdad, Riendo con infinita gracia Invadida de amor y fragancia: Así es María Soledad. Sofoca su figura frágil. Ordena y llama al placer. Limpia el pecado de sentir Enhebra el sentimiento ágil De dar gracias al nacer. Abre cien puertas su cuerpo De hojas, mar y marfil. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 286 27.12.78

DONDE LA MUJER. Ahí, donde la mirada comienza a perderse nace la Mujer, como la tierra brava del Sur. Como los recuerdos de niño. Ahí, donde se quiebra la sombra, donde muere el lamento eterno, nace la Mujer. Como aureola de cristal de luna. Como rumor goteado de susurro. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 287 Ahí, donde termina la niña, comienza la Mujer y se olvida la niña. Nace la Mujer. Como blando palpitar de ensueño. Como fuego que quema desde lejos. Donde nace la Mujer y se olvida la niña, crece un sentimiento. Donde se eterniza el sueño y se quiebra la locura, hiere la figura frágil de una Mujer. Donde toman rumbo los ojos y se derrite el deseo, hay una Mujer. 27.12.78

VIDA HACIA LA FELICIDAD. Cuando dejes la tierra de los hombres Te verás tú mismo como hombre recordado, Y estarás tan feliz de haber dejado la tierra, Y tendrás más de lo que siempre tuviste. Sabrás tanto como el que nada sabe. Tendrás voz de profeta y mirada de niño. Y no necesitarás saber más que eso. No estarás pidiendo conocer. Irás y vendrás cuando quieras. Doblarás miles de curvas sin cansarte. Subirás tan alto como lo necesites. No se mancharán tus pies de sangre. El camino no tendrá piedras. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 288 Las manos no golpearán. No necesitarás golpear. Vivirás eternamente sin pensar en morir. Amarás cuanto te sea posible. Querrás sufrir, no tendrás que sufrir. Tendrás más amor que el que siempre tuviste. No tendrás que llorar pidiendo ayuda. No tendrás que pedir ayuda. Estarás libre de suciedades y de vicios. Gritarás hasta el infinito. Tu eco se doblará cuantas veces quieras. Respirarás un millón de veces por segundo. Tu tiempo será eterno. El mal cambiará y será parte del bien. Estás libre de pecados. No necesitarás pecar para gozar un poco. Te escucharán cuantas veces así lo quieras. El odio no existirá, no habrás de odiar. Lograrás ser más feliz de lo que quieres hoy. Serás libre, eterno, perenne. Vivirás libre, libre, libre... 30.08.79

REENCUENTRO CON EL POEMA. ¿De dónde viene el tiempo a encontrarme tan lejos y sin nombre?. ¿De qué astillas me arranca la tarde con rostro perdido?. Quieren ayudarme en otro nacer. Vienen a darme ánimo y a dejarme pensando en el ayer. ¿Qué ocaso presiente en mí?. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 289 ¿Qué final escondido en las sombras?. ¿En qué materia me transformo?. La encontrada forma de mis sueños y la estática virtud que pierdo se aferran y no desprecian el reencuentro con mis letras. Y el programa cambia. Ya no es como el de hace horas atrás, como el de anoche y anteanoche. Es como el de hace años. 20.10.79

VUELO BLANCO TIBIO. Me dijo que me quería. Fue tan sólo ayer. (Dos luciérnagas revolotearon ante mis ojos). Una silueta se quedó transparente en la noche. (Dos ojos se cerraron ante las luciérnagas). Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 290 De un punto infinito hasta la gran esfera. (Se agrandan los corazones con la brisa de verano en ellos). Me dijo que me quería. Dulce martirio que canta en mí. Le dije también que la quería. (La luz abre su ventana a la luz). 04.01.80

SONETO DE. Indigno de mí, por no coger tan lindo vuelo que esta tarde me ofrecieron. Pecado inmenso de enturbiar la tarde en ella, con un viento de fuego. Déjenme pálido y triste. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 291 Quiero remediar mi falta, pero no miren con ojos simples la tortura que me amarga. Odiosa situación de orgullo que nos vino a nublar las miradas. Bendito y tierno murmullo que me hace saber amarla. 30.01.80

MEDITACIÓN ACERCA DE UNA RELACIÓN CON UNA ESTACIÓN PASADA. La Primavera se marchó tan deprisa, ni siquiera dejó una huella ni me dijo adiós. Alcancé tan sólo a guiñarle un ojo. Hizo como si no me hubiera visto nunca. Empezó asomando una ceja cuando terminaba el Invierno. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 292 Yo estaba demasiado ocupado como para atenderla. Quizás se molestara y pensó vengarse después. Traía un color fuerte en los ojos. Sus manos eran ásperas. Su aliento tibio parecía huella de nicotina. ¡Qué cosas nos presenta el tiempo, le creí tan lento en su caminar!. Quedaban varios minutos de Septiembre, cuando la Primavera tocó mis cabellos. Sus pasos silenciosos fueron penetrando en mí. — La carne es tan blanda, los días son como agujas, pero agujas delgadísimas, casi como un microbio— Uno piensa que no dejan huella, Se equivoca, No lo siente que es distinto. Si no fuera por el calendario creería que la Primavera aún no comienza. Cada vez que me miraba tenía algo distinto en los ojos, A veces con alegría, optimista o triste. Me encontraba siempre que quería verme, sin embargo, cuando yo la necesitaba me daba la impresión que se escondía, o había una cortina nocturna de vino, o tenía un velo de papel teñido. Cuando ya comenzaba a aburrirme empezamos a comprendernos. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 293 Algo cambió. Sus manos ya no fueron tan ásperas, su aliento tenía menos nicotina. —Bueno, todo el tiempo no puede ser igual— Todo iba en forma normal, creí que yo sería como el sol para la Primavera. Casi llegué a ser como el sol. Pero toda estación debe tener noches y no pudimos detener la entrada de la tarde y ésta nos llevó hacia las sombras, y yo que ya le había entregado algo de mí, hoy parece faltarme algo. Es lógico no fue poco lo que le di y se fue llevándome en ella. Creo que no merecí haber vivido su estación y que lleve consigo. La Primavera pasó tan deprisa y más de alguna huella me ha dejado. Estoy sin ojos, pero ella sabe que me conoció. Yo también le he marcado mis pasos. Ninguno ha dicho adiós, pero hace como si no me conociera, como si no hubiera visto nunca. 18.02.80

PUNTO DE PECADO Y CASTIGO. Los Poetas se quedan dormidos pensando, con los ojos abiertos y mirando hacia el Sur. Se van extinguiendo en pedazos y goteando su fantasía enorme. Los hombres se sienten Poetas y sueñan, se hacen viejos en gotas de alma y derraman su pausada inmensidad. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 294 El Sur abre su horizonte y pliega con lluvia los ojos abiertos de los hombres que se desarman. Los rostros pujan por las verdades Y, sin embargo, mienten y se atacan. Los Poetas piensan y seguirán pensando siempre. El Mar de un costado esgrime su grito de rabia y casi no le escuchan, pero seguirá gritando hasta imponerse. Le escucharán entonces con humildad, pero el Mar no nos perdonará entonces. Desde el otro costado las Montañas observan con ojos de águila, y mudas graban todos los hechos, se hacen viejas en su permanencia con cerebro sabio y juzgan calladas. Derramarán algún día su sentencia de rocas y no podrá haber arrepentidos.

Atrás el Norte con la boca seca prepara su castigo de sal. No tendrá compasión para las heridas, y quizás sin culpa escupirán solo arena, con la garganta hinchada y roja estarán muriendo, despedazándose los hombres. La ardiente brisa que hace falta en el Sur está sobrando en el norte. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 295 Ahí falta con demasía la lluvia. La nieve de los Andes algún día en el año llega al Mar convertida en agua. Los Hombres y los Poetas Están entre los Cuatro Puntos Cardinales. (Roguemos por ellos). 26.03.80

NOCHE DE INVIERNO. Viene el viento a gemirme como mortal sin brazos entre millones de cuervos dormidos, y los árboles alzan su plegaria casi sin hojas, casi sin palabras, con sueño eterno de invierno. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 296 Ni fuego que arde. Ni leños quemándose. Ni luz brillando opaca. El tiempo me detiene en las letras, en el invierno, con rumor de mundo dormido, con silencio gimiendo de viento. Se aprieta la noche. Quiere abrirse y siente frío. Parece querer derramar humedad, Entonces los gemidos son como aspas enrrollándose, hilando viento. Y en los huesos, y en la carne, el fuego que no quema, el leño que no arde, comienza a tener impresión de cadáver. La oscuridad es atravesada y sus huesos crujen al romperse, entonces oran los árboles con plegaria desnuda y con impresión de desamparo. El viento cumple su misión de invierno.

POEMA INCONCLUSO. Me llegarán distancias de donde estuviste entonces y amanecerán esperanzas en nido de ilusiones.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 297 Donde se arrulla el trino de pájaros cantores, donde gravita el filo de mustios gorriones se contenta la añoranza que te recibe y recoge. Brindaré más de mil letras, hago trizas los renglones para expresar aquí mis versos, que expresado en canciones torna loca la guitarra y destroza corazones. Un Pueblo cálido de día y atardecer de aliento frío recibe hoy a un hijo que quiere ser por él querido.

TRAS EL MURO. He visto de lejos como la primavera se despereza de su sueño invernal y se abre a los trinos. Lejos, más allá del muro Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 298 el campo parece tan distante, como los sueños. Y el inmenso espacio es inalcanzable. Yazgo en un retazo de mi vida, todo se reduce y estrecha. No es tiempo para alegrías, las risas son escapes frustrados hacia la Libertad. El tiempo es hermoso, más no la felicidad. Las rejas cuelan hasta la brisa. La tranquilidad resonga y se comprime. Los hombres se muestran opacos, se destrozan en ansias insatisfechas. En los ojos tienen pintado el hormigón y el metal que les limitan el horizonte. Se contagian las miradas y las esperanzas, Se arruman en las manos vacías. Se les ha congelado la sangre, endurecido la carne y las palabras. Su canto se ahoga ante el de los lejanos pájaros, ante el verde de los árboles y el azul del cielo. Toda esa claridad que hay más allá se oscurece por la dureza del muro. Se mueven limitados, se agitan inertes, se rompen incapacitados. Y pensar que con tan poco podrían despertar a la primavera. Con solo unos pasos renacerían para estar vivos enteramente. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 299 Pero han de quedarse, tienen esperanzas en el tiempo, cuando caiga el Muro en la espera, cuando se desarmen las rejas en la primavera, cuando traspongan la pena de su condena. 15.08.84

REFLEXIÓN. Desde lo más profundo, oscuro y remoto de esta noche lluviosa de invierno, aquí en mi alejada, intranquila y triste resignación todo parece un recuerdo, el abismo frío y desconsolado que cierra la visión, aun me deja tiempo para pensar en lo que quiero, para aliviarme teniendo presente en el sentimiento que allá tan lejos, tras la pesada lluvia, de la noche y del viento, están todavía esperándome. Aún tengo fuerzas y pienso. Para acercarme a ti, en los recuerdos te veo en desdichada ventana. ¡Ah!, como he desperdiciado aquellos momentos, la tibieza de estar juntos abrazados y viviendo lo que de ambos es fruto. (La delicada y hermosa semilla, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 300 para la cual no he tenido momento de entera y tranquila dedicación, ni que para esa bella y mágica realización he tenido tranquilo beso). Cuanta ambición y deseo, cuanto frustrado esfuerzo para regresar a mi más ambicionado anhelo, al mundo que me pertenece y que me espera. Desde aquí, sobre el lecho azul, oscuro y frío como la noche suspiro por la desaprovechada realidad de la cual estoy tan lejos. Mas, sé que en mis sueños una vez más estarás presente. Déjame soñarte esta noche para aliviar los sufrimientos, déjame dormirme en el recuerdo al que volver yo quiero. Ámame también en los sueños, sueña con mis recuerdos, siénteme cerca de ti, acércame hasta tu lecho, tocaré yo el dulce calor de tus besos y tu cuerpo, bésame en nuestra Hija, protégela y dale aliento. Duerme junto a ella, siéntela que yo también la siento. 21.08.84

AGONÍA DE LA ESPERANZA. Cada vez que el sol asoma junto a los trinos, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 301 desde lo alto me llega una leve esperanza. Con cada instante de calor y en cada armonía tibia revivo un poco más, pero en todo paso limitado que doy me vuelve siempre la reñida angustia, y más aún, este mundo oprimido en cada sentimiento me hace morir un minuto, en todos sus tramos repasados se queda un poco de mi esperanza. En la espera se cae y se levanta, se recoge, se alarga, después descansa. Y más allá todo marcha con la misma velocidad. Acá se detiene el tiempo, la ilusión se desgasta, así como se corroe el metal con lentitud cansada, igual que se opacan los muros, se agrietan las miradas, se oscurecen los ojos, se adelgazan las palmas, se comprimen los nervios, se rompen fuerzas y se quiebran las palabras. Acá todo se hunde, Se sumergen los hombres, se ahogan las gargantas, bajo pesada loza Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 302 se sepulta y se destroza cada vida, cada esperanza. 23.08.84

ALLÁ EN LA NOCHE. Lejos en mi apartada soledad hasta mí llega el rumor del mundo que me conmueve, que me acosa y persigue, ni el retiro logra apartar tan pesado dolor, y más, cuando estoy solo siento aferrarse el temor a mi piel y a la sangre. Allá al pie del cerro, sobre el pasto que se reseca la noche oculta su mundo y como sitio tranquilo de inmensa paz la noche descansa, se desliza suave y se acaricia con el viento. Allá donde las sombras reposan sobre los espinos y se abrazan amorosos. Lejos, allá donde es serena la calma que embelesa el deseo y que invita amable a unirse y a participar de tan fragante olvido, de tan liviano estar. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 303 Todo cubierto de lienzo oscuro, cual melancólica ventana, donde susurra la bruma que tibia como mano amada te hace soñar y te descansa. Allá me esperan y me llaman los sentimientos y el alma, al reposo del dolor que me amarga, al respiro libre y a la paz esperada, al olvido y a la calma, a la quietud en que se regocija toda añorada esperanza. He de escapar a la noche hasta que me despierta el alba, mientras soñando esté sobre oscurecida sábana, no tendré ojos de horizonte ni lejana mirada, me quedaré cubierto de cortinas opacas que oculten a mi vista todo sentimiento, todo temor, toda angustia. En medio de ese mundo apartado, donde no hay distancias ni tiempos marcados, quiero dormir esta noche sin pensamientos ni ojos, sin manos y palabras, sólo con olvido, con desnudez descubierta, con vida liberada, con sencillo reposo, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 304 en un mundo escondido. 07.09.85

¿DÓNDE EL PARAISO? Debe haber entre el mar y el camino un algo que señale, que guíe y marque el ritmo para que el pie cansado ande, para que las desde fuerzas ocultas más allá del abismo surjan y se agranden. Mas allá que el mar, mas cerca que el camino, un lugar escondido ha de estarme esperando, oculto y tímido, con miedo quizás a que aparezca yo con mi tonta pena. No importa cuan pequeño sea, ni a qué distancia esté, ni a qué distancia se vea cuanto más lejos y más bajo, cuanto más alto o más hondo. Un otoño con hojas felices por partir de su lugar de origen, una primavera escondida con flores que se alegran con enviar lejos en el viento su polen y fragancia viva. Un desierto de paz, de arenas blandas, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 305 de tibio sol para el descanso del alma, para el sosiego y la calma, para recostarse sin temor, para olvidar el dolor. Entre todo el espacio y en la misma nada, en todo y en algo, en la vida, en la esperanza, donde ante lo agradable huya el sabor amargo y la pena agria. ¿Dónde buscas que haya tan esperada calma?. ¿Cómo encontrar de pronto la plena y perenne mañana?. ¿En qué día, en qué tiempo?. ¿En qué frontera no alcanzada?. ¿Dónde tendré lugar para volver con mis palabras, a contar los versos que compuse antes, antes de buscar el sitio que hoy persiguen mis lágrimas?. 06.11.85

DESPERTAR A LOS RECUERDOS. Para que nacieran de nuevo a ti mis pensamientos vino la lluvia a despertarme cuando yo soñaba contigo y la oscuridad me envolvió con un rumor helado, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 306 que llego hasta destrozarme el pecho dejando que mi carne lloviera toda su sangre hacia los recuerdos. Vienen mil gotas de agua a preguntar a mi ventana si aún te quiero. Se destrozan oscuras como el tiempo y me tumban con un susurro neutro. Cuando yo vivía en ti mis sueños vino la noche de mar a hacer llorar mis pensamientos y me he deshecho en recuerdos preguntándome si aún te quiero. Para vivir la película pasada enviaste quizás la lluvia a golpear a mi ventana oscura, cuando yo vivía en ti mis sueños en recuerdos de sol y luna.

OCULTO PECADO. Cuan dulce puede ser la pena, tan sentido el dolor, entre la noche y el alba, corriendo por entre las venas cual líquido de fuego siento navegar mi pasión. Como en los años pasados de agitada adolescencia, volviendo como ardiente hierro ha asomado con fuerza y rezongada impaciencia el aliento grave del amor.

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Río de Vida en Racimos – Pag. 307 He de quedarme pensando aislado y temeroso, para saborear con gozo tan extraño y brumoso aparecido clamor. (Débil resignación sujétame a vivir, hazme sentir fuerte que es tan grave mi sentir). ¿Por qué se limita el aire al pensar en ti?. ¿Por qué me trae la brisa aroma suave y gentil?. Como entre la lluvia, ¿recuerdas? de un día llorado de gris, como el agua en la calzada corriendo en loco desliz. Y cuando a oscuras el viento de este invierno lento me despierta para hablar de ti, dejo volar el pensamiento a buscarte en el recuerdo para soñarme feliz. Cruel pecado que se apodera de mí, cierto que amarte no es malo, mas no controla mi ansia y me impulsa y me lanza a abrazarte en la mirada y a estrecharte sin manos. Más aún cuando te encuentran mis ojos Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 308 se ilumina la mañana, hay aromas de primavera, flores de suaves fronteras que me queman el alma llorada. He de seguir oculto y con el pecho agitado, con la razón en tumulto saboreando agridulce fruto nacido recientemente. Si a la lluvia el viento puede besar complacido, ¿por qué no he ser viento para besarte escondido?. Si a mi insomnio de esta noche puedo presentir que llegaras, mientras en mi tierno secreto provisto de buscada calma, te amaré en mí una vez más, y escapando a la inmensa oscuridad, olvidándome del temor que siento apretaré en mi pensamiento tus últimas palabras, tu voz que no derribará esta energía que siento de recordarte en todo momento, que alimentan mi esperanza de forjar en ti mis sentimientos. Estaré soñándote esta noche antes incluso de dormirme, y al despertarme más tarde volveré de nuevo a reñirme, por pecar oculto en el sueño Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 309 cuando no debo soñarte, y menos podré tocarte, porque es pecado el amarte.

RENIEGO AL PENSAMIENTO. Paso mis horas pensando, en verdad debiera pensar algo inteligente, ¿Si en cada paso que surca mi mente ando miles de segundos, a dónde avanzo?. Me entra la mañana cual fuese hilo de tiempo dormido, dentro de mí explota y me deja confundido, con las carnes abiertas como rosas. Me he puesto la túnica del día. Me ahogaré con viento en la cara, me mantendrá despierto. Me envolverán sus horas, me quedaré quieto y me surtiré de oxígeno, de tiempo, de trayectoria, de liviandad, de simple vuelo, de fin, de comienzo, de paz alzada, de esperanza, de etcéteras. Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 310 Estoy naciendo. Me estoy creando. Cuando pienso me hago al nuevo nacimiento y me palpo, no me siento. Me estoy viviendo en un presente que admite en mí apenas un poco de él, solo un rato. Y fuera de mí el mundo explota, me mira en silencio me recoge a disfrutarlo y yo me voy en él adentro. Cuando me sonríe me hace sentir feliz y a veces cuando sangrando me ve descubre en mí la vergüenza, mas yo muestro implacable desprecio y lo miro cuan lejos pueda con los ojos que tengo y en frío desafío nos dañamos al máximo donde ambos podemos. Cuando más quieto estoy se agita más mi aliento, por todo el recorrido enorme Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 311 que hace el pensamiento. Que no se gasten las fuerzas, porque estando en movimiento me evito estar pensando. Hay que despedirse callado, dejemos todo en su puesto, muchas tardes y varias noches. Hasta siempre eternidad, luz y mañanas de claro cielo.

26.03.89

GANCHO TA'O. Por el triste camino bajó despacio en suave mañana pasos abajo. Carisbajo. Resignado el semblante toma el atajo: (Buenos días Camilito. Buenos días Gancho Ta'o). Y sigue bajando, marcando sus pasos llegó a mi encuentro silbando, para verle pasar de largo a mezclarse entre las gentes que amanecían en mi poblado: ( Buenos días mi Gancho. Buenos días gancho Ta'o). Amanecerán los días, se oscurecerán las flores, y cuando ya no venga sobre el horizonte Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 312 le esperaremos dormidos en el tiempo de entonces, me sentiré herido con gran puñal enorme en el pecho que no ha sabido palabra en contra de ese hombre. Si yo pudiera adentrarme en su obrera mente, sacar sus pensamientos y hacerme con ellos fuerte, doblaría malos momentos, sentiría distintas las gentes; pero me quedo inerte y no reconozco que viene, que entre los trinos aparece con su manta paciente, que se aleja hacia el olvido y hasta siempre.

PUEBLO CÁLIDO. Me llegarán distancias de donde estuve entonces y amanecerán esperanzas en nido de ilusiones. Donde se arrulla el trino de pájaros cantores, donde gravita el filo de mustios gorriones se contenta la añoranza que te recibe y recoge. Brindaré más de mil letras, hago trizas los renglones para expresar aquí mis versos Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 313 que conjugados en canciones torna loca la guitarra y destroza corazones. Mi pueblo de cálido día y atardecer de aliento frío, que me recibe hoy como a su hijo para quien se ha hecho en si querido. ¿ADÓNDE VAN LOS MUERTOS? Mas si volando hacia desconocida dimensión de donde nadie ni siquiera el regreso nunca tornó. Desapareciendo lo mejor de ti, porque sí en tu vuelo el Alma partió, acá sobre el suelo no más tu sangre enjugando la tierra quedó. Y si al fecundar se unen, dos instancias en un mismo cuerpo y sin nacer explicación unidas marchan por el tiempo, cuando al separarse el Alma del Terrenal Cuerpo, ¿Dónde va la primera, a qué instancia y silencio? ¿Porqué no se escuchan sus voces? ¿A qué comunicación me atengo para encontrarte hoy de nuevo? Porque sí tras los espejos la imagen guarda silencio se desvanece como el Alma Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 314 al alejar mis movimientos, y aún cuando imita mis gestos no tiene mayor relevancia pues está vacía y fría de sentimientos.

Así, al mezclarse la luz en las sombras, endonde primero hay más sombras que luz. Al girarse la vuelta del mundo las sombras escapan a la luz del Sol, y comienza todo de nuevo y marchando con agitado aliento vuelve el nacimiento: La hoja seca que cayó del árbol no perece, con el nuevo amanecer siendo tierra renace, más nosotros que muertos nos convertimos en tierra, se pierde el sentido sin tener el Alma en ella, porque separadas esas instancias que unidas en un comienzo fueron en realidad un sueño, una se desvanece en el aire y penetra en insondable cielo, del cual mucho no hablan y nos asustan sus infiernos. Es por eso que ahora estando en este terrenal huerto, desde aquí lo miro resignado y su pasar acepto, Valentín Gajardo Ríos PDF created with pdfFactory Pro trial version www.pdffactory.com

Río de Vida en Racimos – Pag. 315 no si bien regañar un poco cuando se me alejan los que quiero, pero, sin embargo, disfruto en él lo que puedo, cojo de él los frutos y en el trajín de la vida engendro y doy carne y alma a hermosos cuerpos.

¿Cuanto más lloraré entonces si caminando mi tiempo en los pasos del camino voy dejando atrás mis huesos?. Si los que ayer conocí y sin querer no dejaron, ¿dónde les encontraré si no tarde, temprano?. ¿En que circunstancias les veré, o en que vuelo levantado que me llevará hasta ellos mientras atrás voy dejando, lo que en terrenal huerto tanto quiero y he amado? Y así en pensamientos ahogado sólo recordarles puedo, respóndanme por favor con inexplicable acierto porqué camino inevitable, ¿Adónde se nos van los Muertos? 01.07.2000

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Río de Vida en Racimos – Pag. 316

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Río de Vida en Racimos – Pag. 318

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Río de Vida en Racimos – Pag. 319

INDICE PRIMERA ETAPA ESTAMPAS DE LA VIDA MISMA 3 7 9 10 13 15 16 19 20 21 22 23 26 27 28 29

PROLOGO INTRODUCCION Solo una Flor Lluvia de Noviembre Llora mi Amigo Llega el Otoño Nubes en la Noche ¿Cómo? Hasta Pronto Elegía para un Querer Incógnita Pablo Oda a Isla Negra Pacífico te dieron por nombre Alma de Gitanos Desilusión Recuerdos en la Noche Es el Viento Ojalá Valentín Gajardo Ríos

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Río de Vida en Racimos – Pag. 320 30 31 32 33 34

35 36 37 38 40 42 43 47 48

Llovizna en mis ojos A mi Madre Paz y Amor Quisiera Lo que es mi Amor Como es mi amor Tu mirada Mi Amor seguirá Amor desesperado Amor Imposible Noche de Otoño Una estampa del Otoño Ventanas al Amor Tarde... Viento..." Frío de Otoño Alegoría para un Querer Siluetas bajo la Lluvia Hoy un Mes Eglogas de un Ave Negra Frases Vagas Mi Madre, la Ventana y la Noche

SEGUNDA ETAPA EL CANTO DE LA VIDA 55 57 60 61 62 64 65 66

INTRODUCCIÓN Un Viaje ¿Soy, Seré, Existiré...? Joven... Años...Viejo... Adiós, un Año Adiós Media hora de esperanza Adiós a la Tarde Caballero el Viento Valentín Gajardo Ríos

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Río de Vida en Racimos – Pag. 321 67 69 70 72 74 75 77 79 81 82

Un poco más de Fantasía Un Perro en la Noche No somos de un cuento Melodías Canario Petrificado Sucede Tú, un Recuerdo Hoy pude ver Una Flor del Recuerdo La Realidad de un Dulce Sueño

85 86 88 89 91 92 94 96 97 99 101 103 105 107 109 110 111 112 114 115 116 118 119 120

El Silbador Nocturno El Girar del Mundo Busco No soy Juez El Cuento de la Vida Puede Ser Amigo de Pecadores Está mi Amigo enfermo La Realidad Mi Vida Acuestas Plegaria del Pecador A un Lugar Perdona mi Verdad Mi Pueblo Rimas para una Mariposa Noche y Día Como una Flor Me haces mal Canto a mi Reina El Lamento del Solitario ¿Qué te han hecho Niña? La Vida me Cambia Un Relato Más Mis Sueños y mi Dolor Valentín Gajardo Ríos

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Río de Vida en Racimos – Pag. 322 122 123 125 126 128

Un Retrato de mi Madre Pueblo Natal Palabras para Ti Otoño... Ramas... Pal... Frases Vagas

TERCERA ETAPA RIO DE VIDA EN RACIMOS 133 135

MENSAJE DEL AUTOR INTRODUCCIÓN CANCIONES

137 138 139 140 141 142 144 146 147 148

Viento Cantor Voz callada de mi Alma Pálida Canción de Tren en mi Pueblo Crepúsculo y Aurora Alba Soneto de Vida Simple Huaso Invisible Canto a la Reina Arbol Viejo Sinfonía de Primavera Amanecer

149 151 152

VIAJES Tiempo para esperar Palpitar Regreso Valentín Gajardo Ríos

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Río de Vida en Racimos – Pag. 323 154 155 158 160

OLVIDO Tú Olvido Balada de las Palomas Espejo Oscuro, de Noche en mi Alma Dormido el Amor

161 163 164

RECUERDOS Relación Distante Anónimo Barcaza en el Tiempo

165 166 167 168

TRISTEZAS Alegoría de un Cisne Postrera Cortina Canción de Alas Rojas Descenso

169 171 172 174 176 178 179 180 182 184

AMOR Invitación al Amor Relato Húmedo Mujer Mía, pero de Ayer Tú Vida me llama Celos por mi Amor Pensamientos (Propuesta) Rosas Oscuras al partir Dedicatoria Amor al Futuro En el Margen de tus Ojos

185 187 190 191

MUERTE La Muerte Anda Vagando La Ultima Canción Ronda de Terror Fúnebre Funerales en el Sur Valentín Gajardo Ríos

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Río de Vida en Racimos – Pag. 324 193

Camino de Muerte (Preguntas)

199 202 203 204 205 106 207 208 210

VIDA -VIVIR Camino de Vida (Respuestas) Pinceladas de Vida Pies en el Camino Río de Vida en Racimos Casi Veinte Canciones de Vida Serenata de Agua al Parrón Un Vivir Más Hojas de Lluvia Mancha de Sol Poema Nocturno Contacto con el Mar Automotor al Sur Ilusión al Descanso

212 213 215 216

ESPERANZA Plegaria de un Sol de Enero Esperando por otra Mitad de mi Ser Sonetos para un Recuerdo Noche sin Ti

218 219 222

FICCIÓN Sueño: Un Día de agua Soy un Extraterrestre Año 3005... PM

195 197 198

EPIGRAMAS 225

226 227

Epigrama N° 1 Epigrama N° 2 DEDICATORIAS Margarita Alba Nota de Reconocimiento Valentín Gajardo Ríos

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Río de Vida en Racimos – Pag. 325 229 230 232 234 237

Confesión Elegía a mi Padre en Confesión a mí Mismo Tu Rima en mis Palabras Raíces de Elvis Presley A una Mujer

243 245 246

EXISTENCIA Revés Río de Serenata Palpitante Visión del Mundo Agua de Tarde Descripción de una Tarde Ciudad,... 11AM Tarde EPÍLOGO

247 252 254 256

El Recuento de las Sombras El Recuento de las Luces Despedida de un Estudiante La Esperanza de las Luces

238 239 241

CUARTA ETAPA EL LETARGO 261 262 263 264 265 267 269 271 273 274

Huerto de Mujer A una Rosa Pálida El Mar y Yo De tu Vida Soy Ante la Ventana y la Esperanza Paralelo Tren de Pichilemu en Verano Camino Dulce y Amargo Recuerdos por Bernardo O'Higgins De la Niebla a la Nada Valentín Gajardo Ríos

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Río de Vida en Racimos – Pag. 326 275 280 281 282 283 284 285 286 288 290 291 292 293 295 296 298 299 300 303 305 306 307 310 311 313

Monólogo con Marchigüe Génesis Donde la Mujer Vida Hacia la Felicidad Reencuentro con el Poema Vuelo Blanco Tibio Soneto de Meditación a cerca de una Relación con una Estación Pasada Punto de Pecado y Castigo Noche de Invierno Poema Nocturno Tras el Muro Reflexión Agonía de la Esperanza Allá en la Noche ¿Dónde el Paraíso? Despertar a los Recuerdos Oculto Pecado Reniego al Pensamiento Gancho Ta'o Pueblo Cálido ¿Dónde van los Muertos? Resultado Concurso Nacional Telegrama Mención Honrosa Indice

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Río de Vida en Racimos – Pag. 327

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Río de Vida en Racimos – Pag. 328

Fotografías de Miguel Angel Franco. Este Libro se terminó de Imprimir en Marchigue en una Edición Particular del Autor en Abril del 2002. Registro Propiedad Intelectual N° 124.458

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