Amatl Magazine No.1

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PALO MA LI RA • ÁNGEL BOLIVER • J O S UÉ R O D RÍG U E Z • ARTE • C U LT U RA • M O DA

EDITORIAL AMATL de origen náhuatl cuyo significado es papel.

AMATL nace como un poema, un recuerdo constante de amor a mi familia, amigos y al hombre que ha formado una cultura hermosa llena de arte; colores, sonidos, sabores y texturas.

Al iniciar con esta aventura pensé en la línea visual y editorial que tendría AMATL. Cuando llegaba con amigos y familiares les platicaba la idea general; moda sí, gastronomía sí, arte y cultura sí, unidas en periodismo e imágenes artísticas. Siempre con la idea de la empresa, porque cuando piensas en emprender en automático piensas en el proyecto como un todo.

Ahora es difícil pensar en AMATL un poco fuera de ese margen, pero al cierre de esta edición, la primera, cargado con tanta energía, entiendo que va más allá, que el fin de formar una revista nace por la necesidad primordial de comunicar, de aportar un poco de conciencia social, de hacer de los textos e imágenes una crítica a paradigmas caducos. Y a su vez generar cambios.

Esta primera edición la pensé en carretera, reflexionando sobre la cercanía que tenemos todos con nuestro entorno, a veces consientes otras no. Entonces esta primera edición se rige sobre la unidad.

El centro histórico de la Ciudad de México es un ejemplo constante de enlaces. Es un desfile ininterrumpido de personas que se mezclan con el pasado y presente de la antigua Tenochtitlan. Clases sociales diversas que se fusionan con los edificios en esa marea de vida en búsqueda de trascendencia.

La cultura rica y vasta del Centro Histórico sirve a su vez como inspiración, un arrebato de diferentes estilos, y en los 60’s y 70’s fue cuna de movimientos que gritaban a una voz “libertad”. Paloma Lira viaja con sus colecciones a través de ellos, son el numen de su creación.

Es en estas fechas donde Ángel Boliver se consagra como poeta y muralista, un artista que absorbió

diferentes estilos. Abril su hija, nos lleva por sus memorias a conocer el mundo íntimo de Boliver, el delirium iluminae lo llama ella.

Son las luces creativas que hacen de los artistas personas que buscan una constante conversación con su entorno, como lo hace Josué Maya, un chef que explora el mundo a través del color y el sabor.

Polo Morin abre esta primera edición, hablamos con él más allá de los reflectores, la unidad entre su día a día y su trabajo han hecho de Polo un ser humano consiente de su entorno, un millenial que al verse rodeado de información hace con ella cambios. A su vez expresa con su vestir.

La moda es un lugar diverso que acoge a todo aquel que quiera expresar y que, en estos momentos es un diálogo con el sentir social.

La unión es un todo, somos un instante constante en la vida de lugares, paisajes, personas y momentos.

Espero puedan disfrutarla tanto como yo al hacerla; gocen de este increible equipo que ha puesto corazón y trabajo en ella. AMATL Magazine es tierra fértil para las mentes creativas y para los artistas.

Los abrazo.

Jhovany Adain Sánchez Martínez @jhovaadain

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CULTURA

EXPERIENCIAS/ILUSTRACIÓN

LGBT+

LA CIUDAD DE LAS MÁSCARAS El centro de ciudad de México se levanta alto, imponente, mirando sin juzgar, indiferente a los mortales que circulan sus calles; la gente, al contrario, avanza y observa, juzga y se mezcla, una fusión de diferentes estilos, pensamientos y clases sociales, conviviendo, si bien no en un equilibrio, sí como un reflejo de la antigua Tenochtitlan, grande y magnifica, en la búsqueda constante de una utopía que se percibe lejana.

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EXPERIENCIAS/CINE

CLIMAX EXPERIENCIAS/TEATRO

MODA

CARPEDIEM

PALOMA LIRA Libre en cuerpo y alma, Lira tiene un romance con los 60’s y 70’s, se percibe en su esencia, no es nostalgia, es inspiración, y se refleja en cada una de sus prendas, los trazados y colores que irradian atemporalidad.

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PORTADA

POLO MORÍN

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ARTE

ÁNGEL BOLIVER

EDITORIALES

La visión de Ángel, pulcra, clara y franca, se ve reflejada en cada mural, cuadro y poema que pinto y escribió. Abril, hija del aclamado muralista nos platica de la vida y legado de su padre.

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BIÓNICO

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PÁNUCO IRREAL

GASTRONOMÍA

CAMPO ABIERTO

JOSUÉ RODRÍGUEZ MAYA

CARMESÍ

La cocina es un mar en constante cambio, Maya lo sabe; su experiencia y su gran acervo cultural y gastronómico se ve reflejado en cada platillo que prepara, lleno de colores y explosiones de sabores.

DULCE ARMONÍA BELLEZA

FLORECIÓ AMOR

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FRANCA

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@ A M A T L MAGAZINE

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D I R E CC I Ó N

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JHOVANY SÁNCHEZ / @ jh ova a da in D I R E CC I Ó N C RE AT IVA

YONIEL FIGUEROA / @ yon h f i g u er o a ED I CI Ó N DE MODA

BENJAMÍN ORNELAS / @ a r t _be nj a m in D I R E CC I Ó N C OME RC IAL

MÓNICA VARGAS / @ n i c ka m o88 D I R E CC I Ó N DE DIS E ÑO GRÁFICO

LUIS ARROYO / @ l u i s . a n g e l . a r royo AG EN C I A C RE AT IVA

TSUKI MARKETING / @ t s u ki m kt

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P O R TA D A

POLO MORÍN FOTOGRAFÍA: ABRAHAM SALCIDO, ASISTENTE: DAN CRUZ ESTILISMO: MAURO S. BLANC MAQUILLAJE Y PELO: BENJAMÍN ORNELAS, ASISTENTE: YANEL GARCIA REALIZACIÓN: YONIEL FIGUEROA ROCHA ENTREVISTA: JHOVANY SÁNCHEZ MARTÍNEZ ROPA: PINEDA COVALIN, STEVE MADDEN Y GALO BERTIN LOCACIÓN: ART HOUSE

G E N E R A L

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A CIUDAD DE LAS MÁSCARAS

Por Rocio Hernández • Foto: Tonatiuh Cortes @tona_shot • Gerardo Larios @glg00

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n este lugar, con el corazón perdido en el tiempo, no existen los espejos más que aquellos que nos contemplan mientras se dirigen a un destino ajeno en esta ciudad; que también nos mira.

Aquí no aparentamos. Aquí somos: de la Condesa, del barrio bravo, de cualquier parte. El rico es vecino del pobre y ni siquiera se van a enterar contemplando, los dos, el mismo escenario. El de la cotidianidad.

Tan cotidiano como juzgarnos sólo con un parpadeo viéndonos no simplemente la ropa, también las maneras, las formas, la vida... cómo desnudos ante miles de ojos que nos apuntan con el dedo construyendo una imagen mientras otros tantos dedos les señalan las espaldas.

Así somos todos recorriéndonos unos a otros entre las telas, los pantalones, entre lo que escondemos debajo de la máscara que nos ponemos mientras nos guarda esta ciudad de una historia extensa y sangrante que preserva celosa los misterios suyos entre las formas, entre las calles, entre las esquinas olvidadas, los edificios derruidos.

Entre su hueco corazón.

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También nos observan las estatuas, los monumentos, los parques, con la indiferencia debida, porque ellos miran a la eternidad; no la miseria ni los pecados o la decadencia y tampoco el color o la luz, el alma etérea y homogénea que somos todos vengamos de donde vengamos, vistamos lo que vistamos y seamos como seamos.

Así no hay diferencia entre los que se cruzan infinitamente en las interminables calles de la Ciudad de México y se reúnen, tan variopintos todos, donde también lo hacen la historia y el tiempo.

Así sólo podremos poner los prejuicios por lo que llevamos encima, por la ropa de Chanel o la del tianguis del miércoles, los zapatos de Louis Vuitton o las chanclas que llevan años debajo de la cama y reconocer que son tan superfluos como los ojos con los que miramos y las bocas con las que sentenciamos porque estamos construidos de la misma sustancia que llena cada rincón del Palacio de Bellas Artes, del Palacio azul, del Zócalo, del Templo Mayor. La misma que recorre al de Tepito y al de Polanco.

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Inmersos en esta ciudad de belleza decadente que asoma su esencia por la ventana de cada uno haciéndonos lo que somos, entrelazándonos los destinos de todas las maneras posibles y aun, las imposibles.

Te cruzarás, sólo un segundo, con aquél del semáforo, con aquélla de la esquina con sus vidas tan distintas. No vas a preguntarte qué pasa después, a dónde van, de dónde vienen porque no te importa y sin embargo has notado el bolso Hermès que llevaba ella tan combinado con esa falda de sabe cúal diseñador y lo has visto a él con la camisa por la que nadie daría tres pesos siquiera y la chamarra que se le está cayendo a pedazos y los reconoces porque son diferentes a ti. Y porque son iguales caminando por este lugar que los sabe de su pertenencia porque aquí viven.

PORQUE ASÍ EXISTEN Ésa es quizá la magia de la convivencia acostumbrada en el alma de una ciudad tan llena de contrastes: nos quita las etiquetas y nos hace tan similares como podrían hacerlo la vejez o la muerte o la vida y la humanidad porque detrás de las ropas se encuentra el reflejo de todos nosotros y la incontrovertible verdad de que no podríamos entendernos sin los que van de paso, de los que no sabemos nada. Ésta es una ciudad con bipolaridades, con los intermedios grises que mira en asombro desmedido, e igual, el Palacio de correos, el Palacio de Bellas Artes, el Gran Hotel Ciudad De México o que escucha al pasado en la Catedral metropolitana como parte de una rutina que deja su indeleble huella en el tiempo y en el todo.

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Es el recóndito espacio donde se encuentran las caras los claroscuros, donde el pasado irreparable se encuentra de lado al cambiante presente frente al incierto futuro en una danza invisible a los ojos de todos los que se miran banalmente por la ropa, espiándose las geografías; riendo calladamente porque piensan que harían falta distancias, tiempos, vidas y universos para que fueran sólo pálidamente parecidos ignorando, sabiéndolo o no, que por la sencilla razón de caminar por la misma calle adoquinada ya les da un sentido de pertenencia, que escuchar la misma música que rellena los vacíos ya les hace similares.

Aunque… tampoco hay que mentirnos acerca de la ambigüedad visceral que da recorrer una ciudad de tal naturaleza. Que contemplando la magnificencia casi cegadora de sus más preciados lugares no se pueda dejar de notar, también, el abandono, la mugre y el desencanto de otros que han tenido momentos mejores. Es imperfecta, humana.

Verdadera.

Como verdaderos somos debajo de la piel, sin las tapas de las vestiduras… del qué dirán; con la misma vaguedad de sentimiento sobre qué somos, quiénes y cómo ante los demás ojos que devoran la fachada que les damos día tras día entre los senderos de este corazón de pavimento.

Conscientes de que esta ciudad tan brillante proyecta sombras largamente oscuras reconociendo sobre todos y sobre sí misma los paralelismos y las paridades, que unen o alejan en un conflicto anacrónico tan perdurable como el propio escenario.

Sin embargo parece que es más aquello que sincretiza. Que hay algo que sentimos tan propio,

tan nuestro. ¿Será acaso, en una ironía, el ritmo tan ecléctico que se siente en todo momento?

Quién sabe. Tal vez la posibilidad de ver a una Frida Kahlo, voltear al otro lado y escuchar “Besame mucho” en la tonada del jazz callejero para que nos quite la pasividad de la existencia, para que nos rompa el desgaste y nos quede el recuerdo.

O emocionarnos por los desfiles de septiembre, los festejos con los muertos en noviembre. El vibrante color de nuestras raíces más profundas, el rosa mexicano, los churros, el águila sobre el nopal, el ombligo de la luna.

México.

Ya no hay diferencias ni grandes ni sutiles. Sólo la fortuna de vernos los pecados y las alegrías, sin filtros y sin poses.

A pesar de las fachadas construidas, de las barreras del estilo, de la procedencia. A pesar de que así nos diferenciamos los unos de los otros hay algo que entreteje los ayeres y los porvenires en el ligero canto del cenzontle de las cuatrocientas voces que flota entre los siglos, hay algo en la identidad barroca y criolla del México colonial con su imagen grandilocuente y dramática, en lo moderno y lo contemporáneo que mira desde lo lejos, desde lo imperceptible y nos ata fuertemente las pasiones a esta tierra que nos vio nacer.

Para así reconocer entre las individualidades, entre el sentir, lo que nos hace iguales. El hechizante sonido del organillero que entona “La llorona” en algún lugar de esta ciudad que encierra a todos entre sus manos, entre el beso de su cielo.

Amándonos profundamente en un cuento de volcanes encendidos por una pasión que trascendió la muerte, de viajeros que cruzaron los mares para verse

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como dioses en el horizonte del sol. De traiciones y del Árbol de la noche triste. De penas interminables y el candor del espíritu de la legendaria Aztlán.

También se ven ligeras disonancias de las notas de “La vie en rose” colándose por las jacarandas en primavera, de los turistas sentados a la mesa de un restaurante cualquiera, de los amores iguales, que tan malamente se siguen mirando, mientras se toman de la mano jurándose inmortales por la eternidad que les quede; libres de ser como son y de vivir como se les pegue la gana.

Porque aquí se juntan todos en una mezcolanza de seres muy dignos de representarse con divergencia en la ropa, en el estilo, en el pensamiento, marcados por la indeleble huella de un azar que los puso en el cuerno de la abundancia, en el centro de las posibilidades para que griten quiénes son y cómo sin vergüenza. También los que decidieron cruzar las fronteras al encuentro de una vida distinta entre el art decó y la Colonia, para perderse entre las muñecas de trapo y las juguetes de madera que les rememoren una infancia lejana, como a todos, en la que

a los ojos de un niño todo era más puro, más limpio.

Con la misma ansia armarnos el traje, la moda en los escaparates de las tiendas de ropa, de los bazares y los tianguis formando una tapadera distinta combinándose hasta el infinito como la imaginación nos dé, siendo diametralmente distintos en el exterior con faldas y pantalones de Chanel que se ven de frente a los tenis y las zapatillas de algún diseñador sin nombre, pero hondamente unidos en lo más esencial: el aroma del rocío en la mañana, el canto de la paloma.

El cielito lindo.

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ALOMA IRA L A L I B E R TA D D E CR E A R Paloma Lira @palomalirastudio Por Lupita Villalobos • @lupita_villalobos_ Fotografía: Jessy Nambo • @justme_jessynambo

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ivir tu momento y ser libre es lo más importante y Paloma Lira lo entiende y lo expresa en cada una de sus colecciones inspiradas en los años 60’s y 70’s con música de fondo que grita revolución y se concreta con la liberación femenina y sexual, claro, con Beatles sonando de fondo, alternando con The Doors, Pink Floyd y Gloria Gaynor catando I Will Survive.

Simplemente basta con ingresar a @palomalirastudio para darte cuenta de todo este feeling que tiene y que contagia. “Paz y amor” dirían muchos. Un perfil que refleja a una artista franca, que aporta prendas para la expresión, arriesgadas y que van más allá de la nostalgia.

Paloma Lira nos recibe en su estudio, un lugar hecho para crear, con paredes blancas y

ventanas altas, con vista al sur de CDMX. Hay telas, bocetos, libros, revistas y racks con sus colecciones. —Cada colección tiene su historia, todas van de la mano, pero siempre me inspiro en películas y canciones de la época.— Sonríe, lleva una blusa con estampado de aves, unos pantalones cafés y botas.

Al mirarla te das cuenta que diseña también para ella, que no es ajena a su arte, que vive y expresa con cada pieza.

“La ropa ya no sigue estereotipos, que la gente use lo que quiera, la ropa sirve para expresar, que puedan ser ellos mismos”

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@ p a l o m a l i ra s t u d i o • w w w. m o t o rd i g i t a l . x y z / p a l o m a - l i ra 19

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—Empecé con un préstamo de mis papás, hice las fotos con amigos, mi idea era hacer una marca y venderla por internet y ya está.— Esta visión creció y se volvió en la marca consolidada que es ahora, con esencia propia, que no sigue tendencias, que es atemporal. La ropa por su parte sigue al personaje que la porte —es para almas libres— remarca. Pasa por el centro de la estancia y se recarga en un sofá vintage, que encaja a la perfección con el resto del decorado a tonos cálidos.

Paloma forma parte del boom del diseño mexicano; una industria en crecimiento, que avanza con pasos firmes y que se consolida en el mercado global; —el objetivo siempre es mostrar que la ropa mexicana es de calidad y con propuestas, ahora va más allá del folklor, siempre cuidando la esencia mexicana sí, pero siempre defendiendo el ADN de la marca—, busca entre sus prendas y nos muestra una camisa con estampados, te das cuenta que cada prenda es única, que sin saberlo o sabiéndolo ya forma parte del mercado global.

—Mi idea es que la gente pueda usar mi ropa, que ellos la vean funcional y se sientan cómodos y puedan expresar su estilo.— 20

Tiene un lugar especial para sus revistas, libros y un sinfín de objetos de colección que fungen a su vez de inspiración, entre todos ellos se encuentran playeras con la frase “freedom” a colores de la bandera LGBT+, una colección que hizo para el mes del Pride, —la ropa ya no sigue estereotipos, que la gente use lo que quiera, la ropa sirve para expresar, que puedan ser ellos mismos.— Su ropa no busca tener un género, tiene la esencia de los movimientos de libertad de los 60’s, toques de disco de los 70’s y que hoy en día están más vigentes que nunca. La moda como puente para expresar ideales, nos sonríe.

los sentidos: política, religiosa y sexual.—

¿POR QUÉ ESTE GUSTO POR LA ÉPOCA DE LOS 60’s Y 70’s?

Nos guía a su taller y nos muestra en lo que está trabajando ahora, una pieza con estampados con tintes vaqueros, —mi objetivo es crecer sí, pero con conciencia—, cada pieza es hecha a la medida; el perfil de Paloma refleja a la mujer contemporánea, fuerte e independiente, inclusiva y su marca no es ajena a su contexto, su inspiración en la década de los 60’s y 70’s le da vida propia —tomar estos tintes retro, pero traducirlos a lo que esté pasando— es la primicia de PALOMA LIRA.

—Mis papás fueron jóvenes en esa época, crecí escuchando esa música y siempre me llamo la atención como se vestía la gente desde chiquita, yo veía a mis tíos, a mis papás y me gustaba su estilo, además es una época donde surgió la libertar de pensamiento y libertad en todos

La idea inicial de venderse en internet responde a su época, ella es millennial, la generación que al igual que los chicos de los 60’s y 70’s ha venido a romper estereotipos. —Lo que me despego fue Instagram, o sea ni siquiera puedo pensar qué sería de mi sin redes sociales, y sí, creo que las redes sociales han ayudado mucho al desarrollo de la moda en México y bueno a todo el mundo.— Las colecciones responden a Prêt-à-porter, y tiene como eje de venta Instagram, pero sin dejar a un lado Twitter y Facebook.

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E L BOLIVER

Caminante de espacios, recolector de personajes

Ángel Boliver @angelboliver Abril Boliver @abril_boliver

Por Tonatiuh Cortés @Tona_God, Jhovany Sánchez @jhovaadain Producción: Yoniel Figueroa @YonhFigueroa

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© ÁNGEL BOLIVER (“LA TOMA DE ZACATECAS”, 1965).

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ngel por segunda vez es castigado en el cuartel — rebelde tenía que ser— seguro piensa su comandante al mando. Es llevado al lugar de las sanciones, ahí, ya caída la noche, la fogata crece con una llama vibrante, iluminando el lugar; las luces y las sombras generan figuras en la pared. Ángel toma carbón y empieza a trazar, las líneas se cruzan y forman caballos negros osados.

A la mañana lo vuelven a castigar, no se creen que ahora raye caballos en los pisos y paredes.

Molesto, su comandante al mando va con el General Alberto Bello. —Rebelde y pinta las paredes mi general— comenta —pinta caballos en las paredes— finaliza, enojado, tal vez acompañado de palabrotas. El general ríe y pide que lo lleven con Boliver.

Observa lo hecho, y él, amante de los caballos y al ver el talento de Ángel decide tomarlo a su cuidado. Reímos en la sala.

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—Y ese es el paso realmente importante de la milicia: haber llegado con esa libertad de manifestarse como poblador del mundo. Con un espíritu rebelde pero con entrega y disciplina— Dice Abril sonriendo. Sabemos que no está aquí, está recordando las anécdotas de su papá.

Nos voltea a ver con unos ojos cálidos.

—En la milicia para mí, lo interesante y amado es que encontró un padre, encontró una casa y una familia y alguien que reconoció su valor plástico— Ángel Boliver nace un 2 de agosto de 1926 en la ciudad de Durango. Pintor y Poeta, egresado de la Academia Nacional de San Carlos con título de Maestro en Artes Plásticas con especialidad en Pintura, explora diferentes mundos a través de la pluma y brochas; participante en producción de programas de TV

en canal 5 (XHGC). Su acervo es vasto, poemas y pinturas con 10 ejes temáticos: Concierto lineal, Caósmosis, Realismo Sacro, Personajes de Flandes, Su majestad la geometría, Pintura de Género, Obra mexicanista, Mascherata, Las tentaciones de la Carne y 11 murales, de los cuales destaca “La toma de Zacatecas” en el castillo de Chapultepec. Versátil y curioso, un artista completo, perteneciente a la tercera generación de los muralistas mexicanos. Abril nos abre el mundo de su padre.

Abril Boliver es una de 9 hijos, en mayoría de un quehacer artístico.

Tiene un semblante sereno, los millennial dirán de ella que tiene “una energía positiva” y tal vez, para varios en la ciudad “de sangre blandita”, cualquier sinónimo queda perfecto. Es una mujer que impone, elegante al hablar y al caminar. Sus ojos son profundos y cada que sonríe lo hace ampliamente, con sinceridad. Su objeto

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de estudio es Ángel Boliver, su padre y mentor, así lo dice y no deja dudas, cada palabra dicha es pensada, enriquecida con anécdotas.

Nos recibe en su casa al sur de la Ciudad de México con una sonrisa franca, pelo corto, labios rojos, y una blusa negra. Nos saluda de mano, acompañado de un beso en la mejilla.

—Pasen, ¿qué tal el camino?— —Hola Abril, bien, bien gracias— La sala tiene ventanales al patio, los sofás blancos hacen juego con los muros a blancos y azules. La iluminación es perfecta. Arriba, nos cuenta, esta la bodega con cuadros, poemas, fotos, que aún están por ser seccionados. Camino a la sala, en la pared cuelgan las pinturas de Ángel, me quedo observando una.

—“El origen de los cantos”— dice acercándose —Y este son “las bodas de Oceanía”— Ángel era conocido por un carácter fuerte, luchador, batallador del arte —Mi papá fue un hombre bastante introspectivo, un caminante de espacios y recolector de personajes— reflexiona Abril —no se podía andar facilito por la vida, se tenía que ir definitivo— El viaje que lleva Ángel es de constante aprendizaje, una mente creativa que no se calla y explota en las

telas, paredes y hojas —Al entrar a la academia de San Carlos, es llegar a la técnica, comprender cómo se ocupan las herramientas y a partir de ese momento una nueva experimentación— El crecer implica ser osado, sus cuadros estarán llenos de colores —no es necesariamente los colores que conocemos como los buganvilias, no, va a tener una paleta de azules, de rosas, de magentas menos amarillos muchos ocres mucho manejo de los grises.— Para entender a Ángel es importante analizar el contexto en el que creció, un país con crisis socio-político, y un margen mundial dolido por la segunda guerra mundial. Al igual que sus contemporáneos inicia con la manifestación de lo mexicano, de la protesta, de lo suyo.

—Boliver comprende que no podemos estándonos sobando las heridas, no estamos para decir pobrecitos de los mexicanos mínimos, él reconoce el gran talento del ser mexicano, del hombre mexicano, de la mujer mexicana, del paisaje mexicano, de la costumbre mexicana, de la ritualización, para él, el color es manifiesto.— —Los Gollozcos— empieza — así le puse yo, hay muchas cosas que él le puso nombre, todas las dejo de manera muy nombrada, pero esos Gollozcos son una

crítica a la sociedad, una crítica a la religión— Después se redescubre en un tema astral, lleno de magia, su punto de partida, ZIhuatanejo, donde las sirenas se le aparecen —va a dar una vuelta, entonces sus personajes van a estar influenciados por todo el mundo europeo y por el mundo oriental, pero lo mexicano siempre va a estar— teniendo constantes conversaciones con la naturaleza, una analogía de lo espiritual y místico —la mayoría de las obras, el mismo “Origen de los cantos”, tiene un drama, el drama de la vida, que contiene la muerte pero tiene la potencia del canto, donde se escuchan las campanas, donde aparecen las flores, donde la luna es creciente, donde se está creando, donde se está creyendo, donde se está acrecentando.— Podríamos pensar incluso en esta etapa, la etapa que Abril entiende como Caósmosis, una entrada a lo surreal, porque con Boliver nunca se sabe, tiene un universo propio y grande.

— “Las bodas de Oceanía” en donde ya te encuentras que no sabes si la cola del velo es de un pez o es la cabeza de la novia, que tiene un pez, o son los langostinos del novio o todo pertenece a un mundo diferente y entonces la magia se organiza, es otra vez ese realismo mágico

latinoamericano en el que cada uno lo va expresando de manera distintas, entonces si encuentras de este lado un Dalí con su gran locura mágica, potente fuerte, te encuentras a un Gabriel García Márquez con un Macondo, encontramos a un Boliver con arlequines, con faunos, con fareros, con viejas en carruaje.— Sobre la Caósmosis Abril cuenta —es un nombre tomado por el gusto de ponerle nombre a algo que es mi deseo de comprensión al mundo más íntimo de Boliver; la caósmosis, donde está el caos, donde está la osmosis, la creación— Son las 9 de la mañana, Ángel se levanta de su cama, toma lápiz y cuaderno y corre al patio. Se tira de panza en un lugar de mosaicos verdes y blancos, y empieza a colorear, a esbozar; pinta barcos —porque sí, no importa que en Durango no haya barcos, ni mar si quiera— A la tarde pinta naranjas, duraznos, plátanos y más frutas. Ángel a su corta edad inicia a comprender a su manera el mundo que lo rodea. Más tarde, durante ese día o algunos días después —el tiempo es un mundo lleno de acciones que crean memorias que nos moldean y guardan a posteridad y aquí el tiempo es solo la línea de comprensión de una acción que

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marca un antes y un después— Ángela, su mamá regresa del trabajo. Labora en un hogar, y hoy sus jefes le han regalado unos libros. Viene la Ilíada, La Odisea, el Quijote y algunos de Shakespeare. Llama al pequeño Ángel.

—Toma, son para ti— dice con amor y la cara de Ángel se ilumina, brilla cual sol —los niños y sus alegrías, puras, al igual que el amor de madre.— Ángel los lleva emocionado a su cuarto e inicia la aventura con Odiseo, Don Quijote de la Mancha y su fiel escudero Sancho Panza y su caballo Rocinante.

Con Shakespeare descubre la poesía, el romance, el drama.

La literatura lo ha ayudado a imaginarse tanto, que empieza a inventarse su mundo.

—Es una persona muy observadora, todo el tiempo tiene una atención, su asunto es el hombre, como él lo dijo muchas veces— nos dice Abril —pero también no solo es el hombre que transita, sino el que es interpretado, el que hay que interpretar, es el que siente, el que se imagina, el que está creando, el que hace el amor. Para él, el asunto del amor es un asunto de una locura luminosa y él decía que es en la creación, en el amor y en la locura, en la imaginación donde el hombre se realiza, donde el hombre va a proyectarse de manera más pronunciada. Es el Delirium Iluminae. No la locura oscura, la locura oscura esa nos lleva a la catástrofe, nos lleva a la sinrazón, a la pérdida, pero el hombre iluminado es el que está creando.— Delirium Iluminae poema de Ángel, también es el nombre que lleva el libro que explora su obra, y que, a su vez, es el nombre para su primera exposición con curaduría de Abril.

En todo este vasto mundo, hay también textos, poemas, con personajes que no están pintados y que son personajes físicamente claros a la pintura —Yo digo que Boliver manda cartas o tele26

gramas en sus escritos y manda postales en sus pinturas, en ese viaje que va haciendo a través del mundo de su colección de espacios y tiempos, hay relatividades en el tiempo en la escritura, en la pintura el tiempo es más difícil de apresar. Todo el mundo mágico poético, narrativo de evento que tiene la caósmosis.— Ángel es un artista que absorbió diferentes estilos, que no dejó de explorar y aprender, hablaba a la naturaleza, a la religión —tú hablabas y te decía Boliver sí, el mundo de los mexicas, el mundo de los mayas, el de Jesús, el de Sai Baba, lo oriental, la meditación, el guerrero.— En este tiempo de realización el Instituto Nacional de Bellas Artes le otorga el Premio y Medalla de Oro en la Exposición de Maestros, Abril habla sobre ella, piensa la respuesta y dice —me siento orgullosa, igual de orgullosa que cuando abrimos una botella de vino aquí en la casa, igual, que cuando lo veíamos de lejos y nos venía a buscar para comer tacos de servilleta y licuados de palillos y brincaba por el gusto de vernos, creo que esos reconocimientos dejan en el tiempo y en el espacio una acción, sobre todo la acción de los otros que a veces tienen que designar a personas importantes o momentos importantes, no es que no le de valor, creo que es importante. Pero sobre todo el festejo de la vida diaria, a ese no se puede renunciar, y es uno, el que se pone medallas y flores y anzuelos y lágrimas y sonrisas y expectativas, escenarios, y es el gran juego, sino jugamos no tiene sentido vivir.— Abril se detiene, medita las palabras, nos mira, sus ojos reflejan profundidad —es muy sabroso tener un padre o a un personaje cercano que es una gran esfera, que te permite desde cualquier punto de la superficie llegar al centro, es un filósofo, todo el tiempo te hace reflexionar.— —Durante muchos años había un mural que es la “Abstracción

del mito” y durante años yo no sabía, yo veía y decía, me gusta mucho porque es geométrico y hace poco acabo de encontrar que es, porque está escrito por él, la abstracción de Quetzalcóatl, y lo ves y dices, ¡claro! Ahí está la serpiente emplumada— Reímos.

Abril sabe que dentro del cosmos del arte de su progenitor aún esconde mucho; pero se mantiene en su labor de evaluar y organizar, curiosa y expectante —mucha de mi filosofía, está basada en eso Jhovany— me mira y sonríe serena —hazlo de tal manera que el otro entienda, para que el otro lo haga como quiera hacerlo— Asiento, lleva la línea de libertad de su padre.

La formación de Abril y sus hermanos estuvo a mano de sus padres, unos locos apasionados.

Que no dejaban de asombrase y maravillarse con su entorno.

—Eran personas que siempre tenían el “ya viste que verde tan especial, cuantos verdes vemos ahí, es que tenemos treinta y seis”, y tú decías, “no veo treinta y seis”— Ríe, ya no está aquí, está viajando —mi madre igual, mi madre era así de “¡oh! es que es precioso, precioso” y los dos eran fuertes y eran duros y cada quien hacía lo que quería.— —Háblanos de tu mamá— —Mi madre era de las que viviendo en el Ajusco cosía y lo hacía muy bien y de repente decía —“¡tengo que ir al centro!”, ¿y a qué vas al centro? —“por una aguja”. ¡Por una aguja! y se iba al centro por una aguja y se pasaba el día en el centro, entonces se metía a un lugarcito y se tomaba su vino y su champaña y entonces tomaba unos caracoles y regresaba con su aguja del centro porque le daba la gana.

Suspira. —Hablar de Pilar Jiménez, es el Pilar, cuando las cosas tienen cuña, una mesa, una puerta, no se desvencija porque tiene una cuña, permite que las cosas se sostengan. Mi madre logró eso. Escuchaba demasiado

cerca a mi padre, a eso él respondía con grandes besos, con grandes alegrías, con la creencia en el otro. Era una mujer que estaba preocupada por todos y nos daba batería.

—Eso hizo Pilar. Me la tocas muy cerca.

—También hay que decirlo Beatriz Eugenia, que fue su primera esposa porque con mi madre no se casa nunca. Beatriz le enseña igualmente a florecer a Ángel.

Si con Pilar es una pasión, con Beatriz es otra pasión. De una luminosidad y de una gran imaginación— La madurez artística de Ángel y su auto contemplación, le ayudo a poblar su mundo con criaturas y paisajes tan distintos e iguales.

Sus retratos, sus geometrías, su mundo erótico y sacro, todo da fe de su imaginativo.

—Cuando llega con Pilar, mi madre, después del General Bello, ya está amasado, ya no es la tierra finita con la que uno nace, ya te empiezan a caer soles y aguas que te van dando una amalgama, cuando llega con Pilar ya se está cociendo, ya no es ese barro líquido, ya es un barro que empieza a tomar forma y cuando llega con Beatriz se hace un cristal, un crisol de luces y después de eso, cuando Boliver se queda con Boliver, sí, se hace un buen diamante, se hace nota nada más, se hace único— —Buenas tardes, maestro me puede conceder una entrevista— soltó el periodista de cultura al teléfono, Ángel espera, y contesta “háblame mañana” y cuelga.

Cuando llega la fecha, el periodista se acerca al taller, toca la puerta y mira a la persona que se encuentra frente a él —el maestro no se encuentra— contesta y cierra.

—No se dejaba hacer la entrevista, era complicado— nos cuenta Abril —tiene el deseo de ser visto pero pone muchas barreras, pone complicaciones, o lo quiere

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de su forma, y entonces las cosas no fluyen— Boliver no era fácil —era un hombre solitario, de grandes fiestas, contradictorio, era un padre muy rígido, sí, fue un ser polémico— Llevaba su ritmo, en su tiempo defendió su arte ante un gobierno que poco o nada hacía por los artistas. Ahí está el mural “La toma de Zacatecas” en el castillo de Chapultepec que no fue derribado porque él se impuso.

—Yo no entiendo mucho por qué México se caracteriza por tener buenos muralistas y muy buenos destructores de los murales que son muy importantes de México— Nos cuenta Abril, refiriéndose a “Los grandes valores nacionales de México” que se encuentra en un edificio que perteneció a la contraloría y la secretaria de turismo.

El recurso destinado a cultura es limitado, el gobierno mexicano da la espalda a sus artistas y ellos al igual que los deportistas que no son famosos o no están en algún deporte de masas, hacen

su quehacer y a su vez su batalla para ser vistos. Abril junto con su familia lleva una labor titánica para poder devolver a los mexicanos un tanto de la obra de Ángel.

—Presumen a los muralistas mexicanos y entonces está Orozco, está Diego, y está Siqueiros ah y Frida sí, no hizo murales, no, no importa pero también está Frida. Y esa no es la plástica mexicana, definitivamente esa no es la plástica mexicana. Gente de gran talento de arte, gastronomía, de colecciones de música de danza, ¿de qué quieren?, del tema que quieran, lo que sea, tenemos muchísimo. ¿Cómo sacarlo? ¿Cómo rescatarlo?— Abril lleva una tarea doble y lo sabe; hacer que el mexicano conozca las piezas de su padre y a su vez, ser un puente para ayudar a que más gente, sin importar la disciplina sea vista por la sociedad y por gobierno.

La familia Boliver confía en que más gente se acerque al acervo cultural de Ángel Boliver

y por suerte para ellos nuestra generación, los millennials y las que vienen atrás tienen un gran interés por lo que se hace en el país. Las redes sociales hacen lo propio.

Abril —comienza Tonatiuh— ¿crees que el arte salve a México?

—Sí, el arte siempre nos salva, es necesario, el arte de la economía, el arte de la política, el arte de la visión, el arte del silencio, el arte del color y el arte de la música. Es necesario, lo creo profundamente— Abril es una mujer que causa admiración. Feroz, aguerrida y artista. Con conciencia social.

Nos platica que no ha sido sencillo su trabajo en el mundo de su padre, a veces, su parte artística le reclama —Ángel fue un buen artista, trabajar en el ordenamiento y en la constitución de este mundo más hecho, es otro arte distinto, mi parte creativa hay ratos que se queda enojada y digo a qué hora voy a escribir yo, a qué hora voy hacer esto y esto otro. Pero me siento una gran vicaria. Mi objeto de estudio es Boliver y espero que ese objeto de estudio sea para

otros también su objetivo— el amor es palpable, y pese a todo ella se mantiene de pie y busca los momentos para hacer como ella dice lo suyo. Sigue firme.

La difusión del legado de Ángel Boliver en sus manos y la de sus hermanos es ahora una realidad, con exposiciones en México y con miras a otros países.

—Lo que hay que hacer es que se oiga, eso va a permitir que otros vengan y hagan lo que sigue, él hizo la semilla, a mí me toca abrir surco, regar, si veo verdecito unas ramitas que se vean en el campo ya es ganancia, tendrá que jilotear, tendrá que salir un buen maíz de aquí para otros nuevos panes, para otras nuevas tortillas, entonces para qué, para que el alimento nos de energía a los demás— Sonríe, franca.

—Los voy a invitar a que conozcan acá arriba— nosotros emocionados la seguimos, el lugar está lleno, y no era para menos. Ángel es, me aventuro a decir, uno de los artistas más completos que ha dado la historia.

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SENCILLEZ EL RELOJ MARCA 11 AM

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aminamos por la avenida Presidente Masaryk en Polanco, Ciudad de México, hasta llegar al 298, damos vuelta en Aristóteles, donde se encuentra la entrada del personal de Rosa Negra. Josué nos recibe sonriente. A primera impresión, se ve relajado, trae el uniforme típico de chef, pantalón negro y filipina blanca. Nos saluda y guía a lo más íntimo del restaurante, la cocina. El lugar es bullicioso. Los cocineros, chefs y jefes de piso se preparan para los servicios del día, afuera el barman y los meseros hacen lo propio.

—Damos un sentimiento a lo que hacemos, un propósito.—

Todos en la cocina están en su hacer; al fondo una chica toma Josué Rodríguez Maya diferentes verduras y las empieza @chefjoshrm a picar, a su lado un chico coloca Por Job Morales @school_798546 especias en una cazuela. De conteo rápido hay 6 personas, Foto: Karla López @kl.foto 28

más los que faltan por llegar.

Josué se recarga en una plancha —cuando logras hacer match con la gente haces una buena brigada y el clima laborar es espectacular— Josué Rodríguez Maya es un chef entregado y apasionado, amante del color, tanto en la cocina como en su vestir —los colores siempre deben estar.— Es su sello. Llegó a la cocina por casualidad —fue una circunstancia de la vida, yo quería ser piloto aviador de la fuerza aérea—, pero al entrar a cocina y la labor en ella, descubrió su talento y gusto.

Inicio su carrera en cocina mexicana, en el restaurante Tezka, dirigido en ese entonces por Mikel Alonzo. Ahí se le abrieron muchas puertas y oportunidades: estuvo en Bakea, como jefe de línea, en el Hotel Camino Real, China Grill, y viajo a países

de Europa, a Estados Unidos y a Emiratos Árabes. Gracias a todas esas experiencias tuvo un crecimiento cultural y social.

Su regreso a México marca un antes y después en su carrera —uno busca trascender.— Abre Rosa Negra. Un restaurante con toques latinos.

Rosa Negra es un restaurante ubicado en el corazón de Polanco, en Ciudad de México, su arquitectura con ventanales que dan a la calle, música latina y sillas forradas dan al comensal una fusión entre un lugar casero y un restaurante de alta cocina.

Su estilo latino es una mezcla de cocina peruana, mexicana, argentina, chilena y brasileña.

—Lo que hace rosa negra es unificar su excelente servicio con su cocina, y la música, acá es también importante no es tanto encasillarse en una cuestión de reguetón, hay música latina actual, también de los 80’s, la

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cosa es hacer pasar a la gente un momento agradable.— Para llegar a la sala donde se encuentran las mesas y sillas se necesita recorrer el pasillo que el equipo de Rosa Negra anda a su día a día, la iluminación es perfecta. De salida a la derecha está el bar y a izquierda un lugar amplio con un mural a fondo.

Josué nos guía a una mesa que se presume cotizada; se encuentra frente al mural, con vista a la avenida Masaryk y a la calle Aristóteles. Todos se preparan para la apertura. —El nombre de Rosa Negra surgió por una zona en Rusia, donde crecen rosas de tono negro, por cuestiones de minerales que existen en el agua y la tierra, luego la parte del clima.— Maya se toca las manos y sonríe al hablar. Los platillos en Rosa Negra son sencillos y elegantes, — nunca nos quisimos meter en algo

complejo, porque no queremos que pase de moda, hoy por hoy la gastronomía exitosa de nuestro país es la sencillez.— Agregando a su vez el efecto WOW, —El efecto WOW en los montajes tiene que ir muy acorde con el sabor, el montaje es espectacular y basto, pero los sabores siempre tienen que estar ahí.— Su línea de no manejar técnicas complejas y llevar acabo cocciones de tradición, junto a su montaje WOW, ha sido aceptada por sus clientes, quienes han colocado a Rosa Negra como referente en la zona.

La interacción no puede terminar sin más en la cocina, en la actualidad muchos de los post son de comida alrededor del mundo, y Maya lo sabe, por eso al igual que muchos utiliza instagram para comunicarse — Mi transmisión con la gente es visual, con pequeñas frases.— Es fan de Facebook y Twitter, pero

Instagram es su preferida. Cada oportunidad que tiene muestra lo cercana que la cocina puede ser con la gente.

—Una persona que no tiene pasión en lo que hace yo no creo que este viviendo.— La cocina a través de los sabores, colores y aromas puede tocar el corazón de las personas. Maya nos cuenta —En nuestra carta tenemos un pescado a la Talla, y tengo historia con él, a mí me encantaba ir a Acapulco siempre a la zona de Barra Vieja a comerme mi pescado de Talla con mi familia y esos son sabores que tengo bien marcados, entonces cada vez que llego a probar el platillo me recuerda esa experiencia, y estoy seguro que hay comensales que les pasa lo mismo con ese u otro platillo.— La experiencia de Maya y su acervo cultural fortalecen cada platillo.

—Al plasmar un platillo, para mí es importante hacerlo natural, lo hermético da flojera; que si una gotita se derramo es algo de las circunstancias que plasmo tu plato y está bien.— Ser arriesgado en la cocina es esencial, por ello trata de transmitirlo a su brigada, no temer y hacer de los platillos una experiencia propia y no solo del comensal. También hacer de la cocina un lugar tranquilo, donde pueda fluir el talento y la calidez humana — hay que valorar día a día lo que tenemos, entonces eso es lo que parte de mí, trata de inculcar a toda la gente.— Toma un poco de agua, nos mira, la experiencia habla por sí sola, estar en Rosa Negra, es encontrarse en un sitio personal, una extensión más del cuerpo — Una persona que no tiene pasión en lo que hace yo no creo que este viviendo.— Sonríe.

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JACINTO Por Aldo Quiroga @AldoQuiroga

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CLIMAX, LA POTENCIA DEL DESEO Climax, Gaspar Noe, 2018 Por Gabriela Vilchis @gabby_madness

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a más reciente creación de Gaspar Noe, es sin duda la oda al hedonismo, al desenfreno, al culto al cuerpo y a su devastación, es el devenir del orgasmo prolongado, forzado a permanecer, soltar no es opción y Noé lo sabe, se vierte en todo momento, se autorefiere y se enfrasca en demostrar que tiene aún mucho que dar en la pantalla.

La pasión es una constante en el cine de Noé, donde el inicio aparentemente inocuo de presentación del casting de los bailarines sólo es el comienzo de este viaje ácido, provocativo, deconstructivo, visualmente poderoso incluso obsceno, donde el exceso no es un pretexto ramplón, es la incitación a la experimentación, al devenir del cuerpo en expresión, vehículo, máquina de guerra, a la voracidad.

La secuencia inicial, un plano secuencia llevado con maestría, donde los bailarines transforman sus cuerpos es formas para generar una marcha hipnótica, demuestra el deseo vouyerista del director, recurso recurrente en filmes como “Irreversible” impregnado de morbo por la transformación de esta máquina de guerra deleuzianas, sometidas a sus más profundos deseos y a su placer, goce que sin duda los destrurá poco a poco a diferencia de “Love”, en este infierno de pista de baile, en donde incluso el más cuerdo, puede convertirse en la más perversa y terrible de las creaturas, la violencia tampoco es ajena a los filmes de Gaspar, pero nunca es gratuita.

Para muchos el resultado es un terrible resaca, pero justo ahí radica el poder del cine de Noé, permea-

do por el LSD nos traslada como en “Enter the Void” al estado alterado necesario para transitar la agobiante existencia misma.

Climax es todo Gaspar Noé, todo el tiempo, desenfrenado, bestial, es una experiencia estética inflamada por un soundtrack lleno de beats anacrónicos, secuencias funk y R&B, creaciones propias de la escene electrónica Francesa, donde además de mostrar la vertiginosa transformación de estos cuerpos entrenados pero corruptos, enmarca la conformación de un estado Francés enriquecido y viciado por la diversidad cultural. Uno no puede salir incólume de la sala después de presenciar el alargamiento del goce, de la búsqueda incansable e irresponsable del placer perenne.

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‘CARPE DIEM M A L D I TA S E A’ Por Cristian Flores-Verdad @crisfloresverdad

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a Sociedad de los Poetas Muertos es una obra que se presentó en el Nuevo Teatro Libanés. La historia va de un maestro, el Sr. Keating (Alfonso Herrera), que llega a la Academia Welton y logra revolucionar a sus alumnos. Logra incitarlos a apasionarse por la poesía y a encontrar su propia voz para así poder tomar las riendas de sus vidas, evitando que sus padres y maestros les digan qué hacer con ella. En esta obra se pudo ver a Neil Perry (Sebastián Aguirre), con mucha valentía, confesarle a su padre sus deseos de ser actor teniendo en cuenta las altas expectativas que tenían de él su familia y la Academia Welton.

También el tímido y asustadizo Todd Anderson (Alejandro Puente) logró sorprender a todos con el poeta que lleva dentro y a lo largo de la obra hacerse escuchar y que su voz conmoviera a todos con el icónico “Oh capitán, mi capitán”.

Basada en el film protagonizada por Robin Williams, esta obra nos invitó a ser seres pensantes que “aprovechan el día”, que cuestionan el valor de sus ideas, que escuchan sus impulsos más profundos, que hacen escuchar su bramido, que declaran su amor sin importar las consecuencias, que se atreven a ser Puck en Sueño de una noche de

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verano y que deciden “extraerle el tuétano a la vida”, sea lo que sea que esto signifique para cada quien. Se agradece que se apueste por esta historia y que se haya contado tan bien como lo hizo la compañía dirigida por Francisco Franco.

A pesar del bonito mensaje de la obra y lo que te pueda a llegar a inspirar el Sr. Keating, me pregunto qué tanto más hubiera podido “aprovechar el día” esta producción de OCESA. Cuando se comenzó a promocionar la obra y se pudo ver la publicidad desplegada alrededor de la ciudad, donde aparecía Alfonso Herrera en el centro y los alumnos de la Academia Welton a los lados, me preguntaba por qué no figuraba nadie con piel morena.

Entiendo perfectamente que la obra se sitúa en una academia de elite en Nueva Inglaterra y que difícilmente asociemos el nombre de Steven Meeks o Charlie Dalton a una persona de color.

Pero me cuestiono, ¿qué sentirá un niño de piel morena al toparse con esta historia y ver que aquel a quien se le invita a soñar y a afirmarse es alguien con tono de piel distinta a la de él? ¿Qué sentiría al ver a alguien con su mismo color de piel contar la misma historia? ¿Le resonaría diferente?

Las grandes productoras entienden a su público y saben qué vender y a quién, y por esto entiendo el porque se escogió el elenco de la manera de la que se hizo. Mi punto no es condenar la producción ni mucho menos. La Sociedad de los Poetas Muertos es solo un punto de partida para entrar al tema. Simplemente me cuestiono hasta cuándo dejaremos que se nos haga normal que en el teatro y el cine mexicano (principalmente en el comercial) veamos un elenco que no refleja la diversidad en México. Tal vez el problema no sea completamente de las productoras sino también del público. En Estados Unidos se habla del racismo y de la inequidad de oportunidades en Hollywood para todas las diferentes etnicidades y todos los diferentes tonos de piel. En México, muy poco.

Tal vez solo se requiera un enfoque distinto. Tal vez solo haga falta observar más detenidamente. Observarnos más detenidamente. Con el éxito que ha sido Roma de Cuarón, una película hecha por mexicanos, pudimos ser testigos del poder y el valor que radica en contar nuestra propia historia. Entendamos que ya no hay vuelta atrás. El mundo observó, con

un lente muy detallado llamado Cuarón, un microretrato de nuestras entrañas, y lo celebró, aplaudió, y hasta premió. Queda en evidencia que somos más que lo que la televisión nos ha hecho creer que somos. ¿Y ahora? ¿Cuál es el siguiente paso? ¿Cómo concretar la unión de un país con su escena nacional? Sea teatro, cine, o televisión. Afortunadamente con Coco de Pixar, que celebra nuestra cultura y que curiosamente nos apropiamos como logro nacional, y Roma, que tornó los reflectores a una parte de la población un tanto menospreciada, se puede vislumbrar un cambio o lo que bien se podría tomar como una invitación a pensar en las historias que como país queremos contar y escuchar.

Historias incluyentes. Historias representadas por todo tipo de pieles en cualquier papel, no solo en los que permite el cliché.

Historias que unen, no que separan. Historias que resuenan a México. Tengamos el valor para elegir nuestra propia historia, para saborearnos, para expresarnos, compartirnos, y, aún más importante, aceptarnos.

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Polo Morín @polo_morin Fotografía: Abraham Salcido @abraham_salcido Asistente de fotografía: Dan Cruz @mr.dancruz Estilismo: Mauro S. Blanc @maublanc Maquillaje y Pelo: Benjamín Ornelas @art_benjamin Asistente de maquillaje: Yanel Garcia @yannii.gp Realización: Yoniel Figueroa Rocha @yonhfigueroa Entrevista: Jhovany Sánchez Martínez @jhovaadain Ropa: Pineda Covalin, Steve Madden, Galo Bertin.

Locación: Art House. @arthousemexico 36

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olo Morín es el reflejo de la versatilidad en un actor, con una carrera fructífera en crecimiento en televisión y con miras a cine y teatro. Oriundo de Celaya Guanajuato, llegó a la actuación por pasión a la interpretación. Licenciado en Negocios internacionales. Con más de 1.5 millones de seguidores en Instagram, va más allá de ser un influencer. Su oficio en la actuación le ha brindado un crecimiento personal. Más humano.

Los personajes fluyen en TV teatro o cine; llevan a una realidad nueva. Los creados toman una parte del ser humano que lo encarna, y a su vez dejan esencia en la piel del dramaturgo.

“Cada historia tiene muchas versiones, dependiendo del foco con el que se vea, esa es una de las maravillas de la actuación” La estancia es alta, el equipo se prepara para la sesión. Polo Morín entra y nos saludamos. Él sonríe en todo momento. Se nota relajado. Viste camisa de mezclilla y jeans. Se presenta con el equipo. Nos encontramos en el lobby de ArtHouse, un teatro en la colonia Roma en Ciudad de México. Toma una botella de agua. Es disciplinado, escucha con atención y atiende las primeras indicaciones para la prueba de luz. Hablamos de la actuación, —cada historia tiene muchas versiones, dependiendo del foco con el que se vea, esa es una de las maravillas de la actuación.—

La maduración de un actor se manifiesta en la comprensión del personaje y de su entorno. Durante su carrera ha hecho personajes con diferentes matices. La televisión mexicana es complicada, ya que los personajes suelen tener muchos estereotipos; aun así el crecimiento a mejores historias es palpable. Poco queda ya atópicos. Polo lo sabe y busca personajes que sean un reto y ayuden a crecer a su público, la audiencia es grande y él entiende esa responsabilidad, —tratro de buscar personajes que sean inclusivos y respetuosos.—

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Es un actor millenial, con todos los beneficios y defectos que conlleva. Es un chico en una generación con cambios constantes en su entorno y en su labor de actor. Subimos a la terraza. Iniciamos con el primer cambio.

Cada tanto checa Instagram. Se toma selfies. —Procuro dejar mensajes positivos en mis redes, de inspirar. Trato de abrirme con problemas que he tenido yo. Sé que tengo un público grande y quiero ser un buen ejemplo.— Morín ha forjado un fandom fuerte. Sus tweet dan seña del compromiso con su carrera y la cercanía con sus seguidores. De fondo suena el bullicio de una ciudad que nunca para.

La sesión para esta editorial transcurre, la ropa va y viene, hay retoques en el pelo y cambios al set. Tomo un vaso de agua y a mi lado Polo pica fruta.

—¿Cómo ayudas al medio ambiente?- suelto después de un rato.

—Apoyo a un par de fundaciones— Empieza, después calla un momento y sigue —no me gusta andarlo diciendo ni publicarlo, no es algo que haga para presumir, pero también cuentan mucho las pequeñas acciones y creo son las más importantes, llevar tu bolsa al súper, reciclar, etcétera.

La conciencia social de Morín empezó desde antes de la actuación en Celaya con sus padres, quienes le ayudaron a romper paradigmas. —Somos un grupo de compañeros del universo— reflexiona.

México es un país con alto índice de discriminación, racismo, homofobia y violencia de género. Ante esto la comunidad artística del país alza la voz en cada uno de sus espacios. Todos con el mismo mensaje, “ya no más”. Las redes sociales juegan un papel importante, y ante la ola de violencia hacia la mujer y en el marco del día internacional de la mujer y las movilizaciones del #8M Polo deja un tweet —No, calladita no te ves más bonita…

Tú eres preciosa cuando luchas, cuando peleas por lo tuyo.— 42

“Hay mujeres independientes y que vaya, ya ni si quiera hace falta decirlo, hace falta enseñárselo a la gente, pero no hace falta comprobar que somos exactamente iguales tanto hombres como mujeres, como homosexuales, heterosexuales, todos somos humanos y tenemos las mismas capacidades y tenemos diferentes habilidades eso sí, pero no tiene que ver con un órgano sexual, la diferencia de posibilidades”.

La diversidad sexual y la igualdad de derechos entre hombres y mujeres es un tema a seguir. La inclusión del colectivo LGBT+ es para Polo importante, me cuenta que vivir sin etiquetas es lo que todos necesitamos. —Sé feliz sin importar tus preferencias, sé libre.— Polo Morín desde sus redes busca alentar y brindar seguridad al colectivo. Los pasos en el país son firmes y museos como el Museo Memoria y Tolerancia que expuso —LGBT+: identidad amor y sexualidad— abren las puertas a diálogos con las nuevas generaciones y hacer que la sociedad sea más inclusiva.

Pasamos entre los pasillos del teatro por puertas que dan a los foros hasta llegar a las escaleras que bajan al Lobby. Polo se alista con el siguiente cambio.

Y vuelve a subir. Yo espero un poco más, checando los últimos detalles y subo. Arriba empezamos a bromear con todo el equipo. Polo esta por subir al ciclorama. Hablamos un poco de sus experiencias.

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—Algo que me sucede muchísimo es que me suelen estereotipar— empieza —me suelen dar el personaje de niño rico, por ser gÜerito y yo contesto ojalá, que por haber nacido gÜerito hubiera nacido rico, pero no, yo vengo desde abajo, he tenido que trabajar para llegar hasta donde lo he hecho. Y justo es eso, luchar contra los estereotipos.

México es uno de los países con mayor índice de racismo, y los medios de comunicación han hecho poco para quitarlos. Son unos cuantos los que se atreven a retratar al mexicano en todos sus matices y colores.

A su vez la industria de la moda está llena de etiquetas, pero también con oportunidades enormes para cambiar el canon

ya impuesto, se puede jugar con la ropa y romper las reglas sociales, buscar la libertad y el arte.

Polo sabe que la moda es una forma de comunicar, —al quitar etiquetas, puedes buscar la libertad y estilos que se ajustan a tu personalidad... y que chingón—, y como buen millenial añade —puedes buscar inspiración en tu Face, en Twitter, Tumblr o en Pinterest.— Ya casi es medio día, en el set el estilista arregla los looks que se utilizaran, mira los tenis y zapatos y elige, del lado opuesto el maquillista saca de su estuche todo lo necesario y prepara la mesa. El fotógrafo y los asistentes buscan la mejor iluminación; los tripiés y los flashes empiezan a moldearse a la atmósfera. Las

aguas, frutas y barras de cereales se encuentran al fondo. Polo Morín llega, nos saludamos, recorremos el pasillo que da al lobby de la locación, saluda a todos, sonríe y empezamos.

Polo Morín es un actor con una carrera sólida en televisión, los proyectos en los que ha estado son variados, Tenías que ser tú, El bienamado, Sueño de amor, son algunos de los títulos en los que ha tenido personajes con matices distintos los cuales le han ayudado a ser más consciente de su entorno. Su perfil en redes sociales es un lugar íntimo y que da fe de la cercanía con sus fans. El compromiso con su oficio lo mantiene activo, en una industria que al igual que su generación cambia y se vuelve más inclusiva.

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y estilos que se ajustan a tu personalidad... y que chingón”

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NICO Fotografía: Pedro Lollett @pedrolollett Estilismo: Emma Chávez Maquillaje & Pelo: Emilio Becerrill @emmimua Modelo: Joice Bruhmuller @yoyce_bruhmullerofc Agencia: Wanted Model Management @wanted_models Ropa: Bernarda, Ocelote Lentes: Dior Locación: SABE @sabe_cdmx 48

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PÁ N U CO Fotografía: Leo Garcidueñas @alce.fotografico Estilismo: Valentín Solís @valentinms Agencia: Paragon Models @paragonmodelm Ropa: H&M, Massimo Dutti, Zara Sombreros: Artesanos de México 54

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I R R E A L Fotografía y Producción: Mauricio Sahagun @mauriciosahagun18 Asistente de producción: Mario Battezzati @mariobattezzati Estilismo: Emma Chávez Pelo: Marck Anguy @marck_anguiie Maquillaje: Elizabeth Garfias @garfias71 Modelo: Mariana Coffler @marianacoffler Agencia: Model Zone Agency @mzagency Modelo: Marie Martin @mariegrrrr Agencia: The Face Models @theface.models Ropa: H&M y Zara.

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Fotografía: Ramón Arana @ramonesmoncho Estilismo: Midory Aguileta @verdeenjapones Maquillaje y Pelo: Simri Abner @simri_abner Modelo: Tereza Fiser @tezfiser Agencia: GH Management @ghmanagement Ropa: Ángel Grave, Vintage, Mila Milu, Bimba y Lola, Levi’s, H&M, Zara.

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Fotografía: Renato Santos & Mario Pino Díaz @mp_retouch Estilismo: Mauro S. Blanc @maublanc Maquillaje: Benjamin Ornelas @art_benjamin Modelo: Samantha Ochoa @sam.8am Agencia: New Icon Models @newiconmodels Ropa: Pineda Covalin

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Fotografía: Agustín Paredes @agusparedesmx Estilismo & Pelo: Adrián Higuera @higueraadri Maquillaje: José Rangel @jose_rangelini Modelo: Rada Bohdanova @rados000 Agencia: Queta Rojas @quetarojas Ropa: Yeshua Herrera, Laura Arrieta, Forever 21

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Fotografía: Daniel Muñoz @daniel.muñoz89 Asistente de fotografía: César Briseño @cesarbrisenomx Maquillaje: Benjamín Ornelas @art_benjamin Modelo: Sandra Aparicio @sandraapariciopons Agencia: Gonrod Management @gonrodmanagement 89

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R FotografĂ­a: HĂŠctor Paris @hectorparisph Maquillaje: Simri Abner @simri_abner Modelo: Matiana @matidall Agencia: Contempo Models @contempomodels

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