Las apariencias engañan: ¿De qué están compuestos sus perfiles de poliamida?

Los sistemas de ruptura de puente térmico (también llamado RPT o Thermal break) con perfiles de poliamida se han utilizado con éxito en sistemas de ventanas de aluminio desde hace 50 años. Con un rendimiento térmico cada vez más exigido por los códigos y normativas, se están utilizando perfiles de poliamida cada vez más grandes y complejos. Los perfiles de poliamida son una parte integral del conjunto estructural, así como del rendimiento térmico de la abertura. También brindan ventajas adicionales, como facilitar los acabados bicolores entre otras ventajas.

A medida que los fabricantes buscan optimizar los costos de la cadena de suministros, existen varios criterios importantes para garantizar que las elecciones relacionadas con los perfiles de poliamida no afecten negativamente el rendimiento estructural de la abertura.

Si bien los perfiles de poliamida provenientes de diferentes proveedores pueden parecerse, su rendimiento estructural, la resistencia a la temperatura y otros factores pueden ser sustancialmente diferentes. Dado que los sistemas de ventanas están diseñados en torno a las características y geometría de los perfiles de poliamida, es extremadamente importante evaluar el resultado final obtenido en función de los criterios de rendimiento en los que se basa el diseño. Típicamente, los perfiles de poliamida contienen fibra de vidrio al 25% para mayor resistencia, que deben orientarse en las tres dimensiones para proporcionar una resistencia uniforme. Las sustituciones de carbonato de calcio por fibras de vidrio, la utilización de fibras de vidrio unidireccionales, o la no homogeneidad de la misma, debilita considerablemente el material. La alteración del contenido o la orientación de la fibra de vidrio reduce la capacidad de los

perfiles de poliamida para transferir cargas y, por lo tanto, reducir la integridad estructural del sistema.

La presencia de burbujas e impurezas en el material (problemas de extrusión) también puede reducir considerablemente la resistencia de la poliamida. Incluso el proceso de extrusión tiene un alto impacto, con diferencias en la resistencia a la tracción de hasta un 65% menor. Las tolerancias dimensionales en la extrusión también es una situación crítica. Si bien ninguna de estas propiedades del material es visualmente perceptible, fácilmente podría confirmarse.

Si un sistema de ventanas ha sido diseñado utilizando un perfil de poliamida PA 6.6, el tipo de termoplástico más frecuente utilizado para esta aplicación, la sustitución del mismo por otras mezclas termoplásticas menos costosas también puede afectar significativamente su capacidad para cumplir con los criterios de diseño originales. Se debe realizar una evaluación de ingeniería antes de realizar dicho cambio. El reemplazo de la poliamida PA 6.6 y la de fibra de vidrio por otros materiales menos costosos, o el uso de materiales de menor calidad pueden bajar el costo de los perfiles de poliamida, pero hacerlo presenta un riesgo que no quisiéramos correr. Además de cambiar la resistencia del perfil, pueden darse cambios en las propiedades de adhesión de las superficies, lo que afectaría la estanqueidad al aire y al agua del sistema de ventanas. Los reemplazos de material o impurezas también pueden reducir la temperatura máxima de flexión del material, que es un parámetro de crítico en los perfiles expuestos a altas temperaturas.

Por lo tanto, es crucial asegurarse que las propiedades de los perfiles de poliamida que tenemos para la producción de nuestras ventanas cumplan con los requerimientos de los cálculos de Ingeniería. Se deben realizar controles de calidad al evaluar un nuevo suministro de material e inspecciones periódicas. Los fabricantes deben medir la densidad del material y la resistencia a la tracción como buenos primeros indicadores de la calidad del producto. Las pruebas más sofisticadas de “huella digital”, como el análisis termogravimétrico (TGA) y la calorimetría diferencial de barrido (DSC), identifican los polímeros presentes y el contenido de fibra de vidrio. Se recomienda utilizar perfiles de fabricantes con procesos con certificación ISO 9001 y exigir los certificados de su plan de control de fabricación y pruebas de materiales. ¡Evalúe minuciosamente cualquier material nuevo en comparación con el rendimiento del diseño, ya que las apariencias engañan!

COLABORACIÓN: Technoform por Nazarena Rodríguez