LA FRONTERA: PRIORIDAD

Felipe Céspedes Tejera

TTe. CoRoNeL, (DeM), eRD

La Frontera: Prioridad en la Agenda del Siglo 21

Los desafíos en la Seguridad y Defensa Fronteriza hacen que las Fuerzas Armadas dominicanas se percaten de que sus oficiales deben de conocer la cotidianidad de la frontera desde el inicio de la carrera militar. Por ello, fue emitido el decreto 58109 que crea la pasantía militar, para luego establecerse formalmente dentro de la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas No. 139-13. Con su desarrollo y aplicación, se demuestra que el programa de pasantía fronteriza es un instrumento fundamental para el éxito del oficial profesional del siglo 21. Es esta comprensión común de todos los egresados de las academias, lo que influye, de manera positiva, en la consolidación de la capacitación de habilidades comunes y programas de entrenamientos descritos por la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas.

En ese tenor, en el presente documento se detallan brevemente dos temas fundamentales. En primer lugar, la importancia que tiene la región fronteriza en el ámbito de la Seguridad y Defensa; y, en segundo lugar, el marco de actividades en que se desarrolla el programa de pasantía en la frontera. El propósito principal es dar a conocer las razones y beneficios de los programas de pasantía militar respecto de la región fronteriza. La pasantía militar aspira a que el egresado de las academias adquiera experiencia operativa, ya que esta le proporciona la oportunidad de emplear, afinar y aumentar lo que aprendieron por medio del proceso de educación formal. Por consiguiente, el Decreto 298-14, Reglamento de aplicación Ley Orgánica

de las Fuerzas Armadas en su Artículo 58, dispone dos (2) tipos de Pasantías Militar, que son: 1) EL PROGRAMA DE PASANTÍA FRONTERIZA: desarrollado por el Programa de Educación y Capacitación Militar «General Gregorio Luperón», del Ministerio de Defensa; y 2) LOS PROGRAMAS DE PASANTÍA MILITAR, NAVAL, Y AÉREA: desarrollados por las Direcciones de Entrenamiento del Ejército, Armada y Fuerza Aérea de República Dominicana, respectivamente, para ser realizados en unidades tácticas operativas.

Nos referiremos de manera particular al número 1, «El Programa de Pasantía Fronteriza» que desarrolla el Programa de Educación y Capacitación Militar del Ministerio de Defensa. Dentro del marco conceptual que tiene el contenido en dicho programa, debe desta carse la importancia del conocimiento de la problemática que representa la frontera dominico-haitiana, respecto al ambiente operacional actual. La misma, demanda la acción consistente en relacionar el área con múltiples realidades geográficas y políticas del Estado, donde suelen primar diversas consideraciones básicas. Entre las características principales se destaca la realidad geográfica particular del asiento regional fronterizo y, en segundo lugar, la capacidad e influencia del Estado en todo territorio.

Por otra parte, los artículos 5 y 6 de la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas de República Dominicana, (Ley 139-13), disponen que este Organismo deba encargarse de la Defensa Territorial de República Dominicana ante cualquier amenaza a su soberanía y a la paz dominicana. Además, en el literal 4 del referido artículo establece, que se debe de asumir, de manera integral y constante, el precepto constitucional de declarar como supremo y permanente el interés nacional de la seguridad fronteriza. Por tanto, es una prioridad de sus instituciones militares, cuerpos especializados, comandos conjuntos y demás dependencias, la elaboración y ejecución de planes, proyectos y programas destinados a que sus recursos humanos y materiales sean empleados en dicha zona; cuya finalidad principal es la de contribuir con la voluntad nacional expresada en nuestro texto constitucional.

Dicho esto, las Fuerzas Armadas dominicanas tienen la responsabilidad de asumir la defensa y seguridad nacional de su frontera. La custodia del espacio territorial se ejecuta empleando componentes de fuerzas terrestres y conjuntas con capacidad para contener y neutralizar cualquier amenaza externa. Para la región fronteriza se cuenta con diversos organismos e instituciones que intervienen en el ámbito de Seguridad y Defensa como son el Ejército de República Dominicana, la Armada y la Fuerza Aérea. Además, por el Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza (CESFRONT), Servicio Nacional de Protección al Medio Ambiente (SENPA) y una Fuerza de Tarea Interagencial (DEPROSER), cuyas siglas se deben a su lema «Defender, Proteger y Servir».

La importancia de la zona fronteriza radica en que la franja está amenazada en los ámbitos del medio ambiente, la migración ilegal, nuestra identidad, nuestra cultura, nuestra religión, nuestra historia, la salud, y es la parte de la isla que se encuentra más propensa a la marginalidad de la Ley. Por lo que, si se examina el plan estratégico institucional, se puede destacar que el alto mando militar desde el año 2012 ha incrementado la cobertura de vigilancia y protección del territorio en la frontera terrestre, marítima y espacio aéreo.

Ejemplo de ello fue que en el mes de septiembre del año 2012, el Jefe de Estado Mayor del Ejército Nacional, Mayor General Rubén Darío Paulino SEM, E.N, reforzó la frontera domínico-haitiana, al crear la Fuerza de Tarea Frontera Segura. Su propósito principal fue contrarrestar el tráfico ilícito de drogas y el contrabando en la frontera.

Posteriormente, al asumir la Comandancia General del Ejército el Mayor General José E. Matos de la Cruz, mantuvo a la exitosa Fuerza de Tarea Frontera Segura, mediante la que implementó el Plan Integral de Seguridad Fronteriza, orientado a contrarrestar la penetración ilegal de ciudadanos extranjeros, el tráfico de personas, y el contrabando de mercancías, y con el fin de mantener la integridad territorial y proteger las actividades lícitas del comercio.

Además, en dicha gestión se destaca la construcción de las plazas patrióticas a lo largo de la franja fronteriza, con el propósito de reavivar el amor a los símbolos patrios de los habitantes de esa zona.

En lo relativo a la importancia que tiene la región fronteriza en la pasantía militar, la misma provee los conocimientos teóricos y prácticos al oficial pasante, sobre las interioridades de las instituciones militares y gubernamentales que interactúan en el ámbito de la citada región, así como de familiarizarse con la forma de vida de sus habitantes. Dicha actividad educativa actualmente está concebida en dos fases: la inductiva y la operativa. La fase inductiva se enmarca en el origen y la evolución de la delimitación de la isla. También, con apoyo del Ministerio de Relaciones Exteriores los pasantes reciben un Diplomado sobre relaciones DominicoHaitianas. Además, reciben charlas sobre la actualidad de la política migratoria por la Dirección General de Migración, Aduanas, Salud Pública e Inteligencia fronteriza.

En la fase operativa se realiza el recorrido fronterizo para reconocer todos los caminos y carreteras que colindan con el lado oeste de la isla. Luego, pasan a ser parte del Servicio Nacional de Protección Ambiental (SENPA), con el objetivo de proteger el medio ambiente y contrarrestar el conuquismo que impera en la zona fronteriza. De la misma manera, los pasantes se integran a trabajar con el Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza (CESFRONT), en los cuatro puntos de entrada y salida del país que son: Pedernales, Jimaní, Elías Piña y Dajabón, y a reportarse ante el Coordinador Interagencial quien es que tiene la función de la coordinación, sincronización e integración de las agencias gubernamentales de aplicar las leyes.

Las precitadas actividades han sido de vital importancia para obtener resultados positivos en las operaciones para contener el flujo ilegal migratorio de drogas ilícitas y armas a través de la zona fronteriza, no sólo terrestre, sino, también, marítimo y aéreo. Nos referimos a una gran cantidad de instituciones que intervienen para contener estas amenazas, como son: La Dirección General de Aduanas (DGA), Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), Dirección General de Migración, entre otras.

Como resultado de los conocimientos y esa experiencia operativa interagencial, los pasantes analizan y comparan prácticas entre los distintos organismos e instituciones, reflexionando acerca de los diversos retos, técnicas y procedimientos, y a la vez se perfeccionan las denominadas «mejores prácticas», las cuales informa y configura nuestra doctrina. También, adquieren una idea de los retos y las soluciones a los que se enfrentan mientras apoyan nuestro interés nacional de la seguridad fronteriza. Esto se constituye en un avance y aporte positivo al entrenamiento militar, la inclusión de esta pasantía, la cual representa la piedra angular del futuro de la defensa de la soberanía nacional.