Adelaide Carmichael y Damien Allen no podrían ser más diferentes.
La madre de Adelaide la abandonó cuando tenía diez años, dejándola ser criada por su abusivo y alcohólico padre.
Damien por otro lado, proviene de una familia acomodada, es una celebridad local, y parece tener un futuro brillante frente a él.
A pesar de sus diferencias, Adelaide y Damien son jóvenes, rebeldes, y están fieramente enamorados.
Y tienen un plan.
Van a huir.
Estarán juntos para siempre.
Y su plan salía como lo planearon, hasta que ocurrió una tragedia y por alguna razón, Adelaide terminó en el hospital para enfermos mentales de Oakhill.
Adelaide no tiene idea de lo que hizo para terminar en Oakhill, pero sabe que una cosa es segura…
No quiere estar allí.
Y después de que Damien la siguiera para ayudarla a escapar, Adelaide poco a poco une todas las piezas que su memoria había perdido.
Y no le toma mucho tiempo a Adelaide entender que algunas veces…
el amor verdadero nunca muere.