Semanario Orientacion (14 de Junio 2015)

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S • E • M • A • N • A • R • I • O Año LXIII Nº 5864

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ÓRGANO OFICIOSO DEL ARZOBISPADO DE SAN SALVADOR. 14 de junio de 2015

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Solemnidad

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Sagrado Corazón de Jesús e Inmaculado Corazón de María

Papa en Bosnia

“¡Nunca más la guerra!” – Pág. 5 –

Catequesis

¿Qué es ser Beato? Por Mons. Jesús Delgado

– Pág. 7 –

La Basílica del Sagrado Corazón de Jesús invita hoy domingo 14 de junio a la clausura de sus fiestas patronales en honor al Sagrado Corazón de Jesús 8:00 a.m. ………… Santa Misa Procesión con la imagen del Sagrado Corazón Eucaristías ………… 6:30 y 11:00 a.m. 5:00 p.m.


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IGLESIA LOCAL

Palabras del Arzobispo

MAGNA CELEBRACIÓN DE LA BEATIFICACIÓN DE MONSEÑOR OSCAR ARNULFO ROMERO GALDÁMEZ. ORDENACIÓN DIACONAL EN CATEDRAL METROPOLITANA. 28º ANIVERSARIO DEL HOGAR VITO GUARATO. ORDENACIONES SACERDOTALES EN REDEMPTORIS MATER. CELEBRACIÓN DEL CORPUS CHRISTI – 280 – A lo largo de este tiempo hemos estado realizando todas las actividades ordinarias; pero quiero destacar los grandes acontecimientos que hemos vivido, entre ellos el principal la Beatificación de nuestro amadísimo Monseñor Oscar Romero, Obispo y Mártir: El 23 de mayo, sin duda, es el día más importante y más feliz en la historia de la Iglesia en nuestro país. A las 10:00 a.m. dio inicio la santa Misa de Beatificación de Monseñor Oscar Romero, en la Plaza del Divino Salvador del Mundo. Presidió el señor Cardenal Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos y concelebramos con él, más de 100 obispos y más de 1,400 sacerdotes, procedentes de distintos países del mundo. Participaron más de 500,000 personas. Fue un acontecimiento verdaderamente apoteósico, como nunca lo habíamos tenido en nuestro país. Ese magno acontecimiento significó mucha preparación, pero valió la pena todo esfuerzo, es la glorificación del primer salvadoreño. Ahora tenemos un gran intercesor y protector como nos lo dijo el Papa en su Mensaje para ese día. Quiero agradecer a todas la comisiones y subcomisiones, lo mismo que a todos los voluntarios y a todos los organismos que prepararon tal evento. También agradecemos la visita a nuestro país por parte de tantas personas, a los Jefes de Estado, a las autoridades nacionales y a todos los que cuidaron el orden. Felicitamos la manera tan devota como la multitud participó. Dios por intercesión del Beato Monseñor Romero les recompensará con creces. E l s á b a d o 3 0 , e n n u e s t r a C a t e d r al Metropolitana, a las 10:00 a.m. presidí la santa Misa de Ordenación Diaconal del seminarista Juan Carlos Tejada Morales, originario de San José Villanueva, que recientemente ha terminado sus estudios eclesiásticos en el Seminario de la Asunción, en San Antonio, Texas, Estados Unidos de Norte América. La celebración litúrgica fue muy solemne; concelebraron conmigo, el Ilmo. Mons. Ricardo Ayala y un buen número de sacerdotes. Tuvimos la presencia de nuestros seminaristas y un gran número de fieles.

El domingo 31 de mayo, presidí la celebración Eucarística en la hermosa Capilla del Hogar de Niños “Padre Vito Guarato”, en los Planes de Renderos, que estaban celebrando el 28 aniversario de su fundación. Concelebró conmigo la santa Misa, el señor Capellán de esa obra el Rvdo. Padre Pedro Hernández y estuvieron presentes los miembros de la Directiva y un buen número de personas. El sábado 6 de junio, presidí la celebración eucarística a las 6:30 p.m. en la Catedral Metropolitana, en la que recibieron la Ordenación Sacerdotal los diáconos del Seminario Misionero Arquidiocesano Redemptoris Mater, Oswaldo Patricio Ortega Pañora y Ángel Rafael Rustrían Lara. La celebración fue muy linda, con una gran participación de todos, en un ambiente de fe y de alegría. Concelebraron conmigo más de veinte sacerdotes, algunos de Ecuador y de Guatemala, acompañando a los ordenandos puesto que el Padre Ángel Rafael es originario de Guatemala y el Padre Oswaldo Patricio del Ecuador. Estaba presente el Equipo Itinerante nacional, una gran cantidad de fieles y, por supuesto, los familiares de ambos neo sacerdotes. Les felicitamos de corazón al Padre Oswaldo Patricio y al Padre Ángel Rafael por su ordenación sacerdotal y les encomendamos al Señor. El domingo 7, a la 8:00 a.m. presidí la celebración de la santa Misa de Corpus Christi en nuestra Catedral Metropolitana. Este año la celebración del Corpus Christi tuvo mayor relevancia, porque la hicimos a nivel vicarial, pues participaron todas las parroquias de la Vicaría del Divino Salvador. Concelebraron conmigo nuestro querido Mons. Gregorio Rosa Chávez, quien además de ser nuestro Obispo Auxiliar, es también párroco de la Parroquia San Francisco, y todos los sacerdotes de la Vicaría El Divino Salvador. La majestuosa Catedral estaba completamente llena de fieles. Fue una celebración verdaderamente maravillosa, en la que se irradiaba la fe. Después de la santa Misa realizamos la Procesión del Santísimo Sacramento, por las principales calles del centro de la ciudad. Al finalizar la procesión entramos de nuevo a la Catedral para impartir la bendición

con el Santísimo a todos. Felicito el profundo amor a Jesús Sacramentado el cual es muy manifiesto en sacerdotes y fieles. El Santísimo Sacramento bendecirá a todos. Quiero compartirles algunas ideas para reflexionar sobre el santo Evangelio de este domingo, XI del Tiempo Ordinario: San Marcos 4, 26-34. En dos preciosas parábolas nos presenta San Marcos el Reino de Dios. La de los versículos 26-29 la trae sólo este Evangelista. La del grano de mostaza coincide con San Mateo y San Lucas. − Jesús deja en la tierra la semilla del Reino de Dios. Una fuerza secreta, divina, lo hará crecer hasta su total desarrollo y perfección. Entonces volverá Cristo para la siega (Ap 14, 15). − Debemos, por tanto, confiar en la virtud de la semilla. Y no debemos atribuirnos a nosotros su vitalidad. Nos lo dice maravillosamente uno de los mejores trabajadores que ha tenido el Reino de Dios, San Pablo: «Ahora bien: ¿Qué es Apolo? ¿Qué es Pablo? Ministros por medio de los cuales recibisteis la fe; cada uno según la medida que Dios le otorgó. Yo planté, Apolo regó. Pero era Dios quien obraba el crecimiento. De modo que ni el que planta es algo ni el que riega, sino el que hace crecer, Dios» (1 Cor 3, 5-7). Esta parábola a más de mantener en humildad a cuantos trabajan en el campo del Señor, nos dará serenidad y esperanza: «De Dios somos colaboradores», recuerda San Pablo a todo Apóstol. «Y vosotros sois labrantío o campo de Dios», dice a los fieles (1 Cor 3, 9). − El Reino de Dios, la Iglesia de Cristo, siempre humilde y sin apoyos humanos, tiene una riqueza y una virtualidad divina que la capacitan para vigorizar a cuantos a ella se acojan. Este Reino nada tiene de espectacular. Su fuerza es recatada, silenciosa, pero incoercible. † Mons. José Luis Escobar Alas Arzobispo Metropolitano de San Salvador


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Siete nacionalidades, una misión P. Bryan Arriola, CSsR

El 15 de julio del año 2012 fuimos nombrados como “Provincia redentorista de América Central”. Los primeros redentoristas españoles llegaron procedentes de México a estas tierras en 1927 y desde entonces se predica la redención de Jesús al estilo de San Alfonso. Hoy somos alrededor de sesenta religiosos redentoristas, congregados por una sola razón: la misión. Nuestra congregación religiosa en América Central tiene una característica única, debido a la internacionalidad de sus miembros, pues tenemos presencia en Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá. Actualmente estamos realizando una misión especial en Belice, con el fin de tener presencia en ese país. A esto hay que agregar la herencia española, para decir que estamos en siete países con ocho nacionalidades distintas. Para los miembros de nuestra provincia es algo natural no servir exclusivamente en el país de origen. Ya desde la formación inicial nos toca dejar tierra y emprender éxodo. No hay una sola comunidad que esté compuesta

Si tienes interés en la vocación misionera redentorista, llama al teléfono 2222-3660, de la Parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, San Salvador. solamente por nativos del lugar. El contacto internacional es algo común desde que ingresamos a la congregación. Lo que siempre tenemos es esperanza, alegría y trabajo para seguir adelante. Seguimos confiando en el Dios que nos ha llamado y apostamos nuestras propias vidas a su causa. En este lugar hemos sido sembrados y nos corresponde dar frutos. Esa es nuestra misión y así compartimos la alegría de ser redentoristas en América Central.

La edad promedio ronda los 46 años de edad. Contamos este año con veinticinco postulantes, dos novicios, nueve juniores y un diácono para el mes de julio

DIRECTORIO

Mons. Jesús Delgado DIRECTOR

Roger Herrera EDITOR EN JEFE

Oración para pedir favores por la intercesión de MONSEÑOR ROMERO Oh Dios Padre Misericordioso: que por mediación de Jesucristo y la intercesión de la Virgen María, Reina de la Paz; y la acción del Espíritu Santo concediste al Beato Oscar Romero la gracia de ser un Pastor ejemplar al servicio de la Iglesia; y en ella preferencialmente a los pobres y los necesitados. Haz Señor, yo sepa también vivir conforme al Evangelio de tu Hijo y dígnate glorificar a tu Beato Oscar Romero y concédeme, por tu intercesión el favor que te pido… Así sea. (Si recibe el favor solicitado, repórtelo por escrito a la Oficina de Canonización de Monseñor Romero en el Arzobispado de San Salvador)

STER

ORACIÓN DE

Misión Internacional de los Redentoristas en América Central

E

para tiempos de violencia

Oh Dios, que dominas todo, oye el clamor de los desesperados: Líbranos del poder de los malvados y líbrame a mí del miedo. Amén. (Ester 14,19)

Dios Padre nuestro, que, con admirable providencia gobiernas el mundo, atiende nuestros ruegos por la Patria, para que la sabiduría de sus autoridades y la honestidad de sus ciudadanos robustezcan la concordia y la justicia, y podamos vivir en paz y progreso constante. Por Jesucristo nuestro Señor.

Efraín Caravantes DISEÑO GRÁFICO

Amén.

Roger Herrera DISEÑO DE PORTADA


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Papa en Bosnia

VOZ DEL PAPA

“¡Nunca más la guerra!” “también en nuestro tiempo, el deseo de paz y el compromiso por construirla contrastan con el hecho de que en el mundo existen numerosos conflictos armados”. Fue en este punto cuando habló de “una especie de Tercera Guerra Mundial combatida por partes” que provoca la percepción de “un clima de guerra”.

El Papa llevó el 8 de junio a Sarajevo un mensaje de paz y de reconciliación. Se convirtió así en embajador de la cultura del encuentro y del diálogo ecuménico en un país golpeado brutalmente por la guerra. Sus palabras buscaron, por un lado, arrojar la esperanza que algunos perdieron en el conflicto, junto a sus familiares y pertenencias, y por otro, sanar las heridas que muchos conservan. Según manifestó, la “Jerusalén de Europa”, como muchos llaman a Sarajevo, puede servir de modelo de libertad, convivencia y respeto para el resto del mundo. El Papa tuvo varios encuentros pero, sin duda, el acto más multitudinario del Pontífice fue la misa que celebró en el estadio olímpico de la ciudad, a la que asistieron unas 65,000 personas. La ceremonia se desarrolló sin incidentes. En su Homilía, Francisco recordó que la paz “es un proyecto que encuentra siempre oposición por parte del hombre y por parte del maligno”. En este sentido, alertó de cómo

No aguar identidad cristiana en religión “soft” CIUDAD DEL VATICANO. El Papa Francisco pidió el 9 de junio, durante la Misa en la Casa de Santa Marta, no “aguar” la identidad cristiana en una religión “soft”. El pontífice, refirió Radio Vaticana, advirtió sobre quienes quieren transformar al cristianismo en una “bella idea”. También reiteró que otro riesgo para el testimonio cristiano es la mundanidad de quien “amplía la conciencia” tanto como para hacer entrar todo dentro. Francisco citó las palabras de San Pablo a los Corintios, donde habla de la identidad de los discípulos de Jesús. Es cierto, dijo, que para “llegar a esta identidad cristiana” Dios “nos hizo hacer un largo camino de historia” hasta que envió a su hijo. “También nosotros −afirmó− debemos hacer de nuestra vida un largo camino, para que esta identidad cristiana sea fuerte”, como para poder dar “testimonio”. Por eso advirtió sobre dos peligros: “Primero el de pasar del testimonio a las ideas, aguar el testimonio”, y así de esta identidad concreta se pasa “a esta religión un poco soft, en el aire y en el camino de los gnósticos”. Luego están “los que siempre necesitan novedad en la identidad cristiana” y olvidaron que “fueron elegidos, ungidos”, que tienen “la garantía del Espíritu”. Otro camino para retroceder en la identidad cristiana es la mundanidad: “Ampliar tanto la conciencia que allí entra todo” y vemos “comunidades cristianas, también cristianos, que se dicen cristianos, pero no pueden y no saben dar testimonio de Jesucristo”.

(Cf. Ansalatina.com 9 jun. 2015)

Francisco lamentó que existan quienes fomentan la confrontación “entre las distintas culturas y civilizaciones, y también cuantos especulan con las guerras para vender armas”. Como ha hecho ya otras veces desde que los ataques del autodenominado Estado Islámico hacia los cristianos se hayan agravado en Irak y Siria, recordó que “la guerra significa niños, mujeres y ancianos en campos de refugiados; significa desplazamientos forzados; significa casas, calles, fábricas destruidas; significa, sobre todo, vidas truncadas”. Por ello, gritó fuerte un “¡nunca más a la guerra!”, que originó un inmenso aplauso de todos los fieles. El Papa resumió su mensaje de paz asegurando entonces que “la verdadera justicia es hacer a esa persona, a ese pueblo, lo que me gustaría que me hiciesen a mí, a mi pueblo”. La agenda del Pontífice continuó en la tarde con un encuentro interreligioso en el que hablaron los representantes de las comunidades católica, ortodoxa, judía y musulmana ante unas 300 personas y el broche final fue el encuentro con los jóvenes. (Cf. Larazon.es 9 jun. 2015)

Sobre Medjugorje

“Estamos por tomar decisiones”

Durante el vuelo de vuelta de BosniaHerzegovina, Francisco respondió a las preguntas de periodistas, entre ellas sobre las apariciones marianas en Medjugorje. Explicó que la comisión que lo estudia “ha hecho un buen trabajo”. “Benedicto XVI en su tiempo creó una comisión presidida por el Cardenal Camillo Ruini y con otros cardenales, teólogos y especialistas. Han hecho el estudio y el cardenal Ruini me lo ha entregado después de muchos años, no sé, tres o cuatro años, más o menos. Han hecho un buen trabajo, un buen trabajo. El Cardenal Müller me ha dicho que haría una reunión especial en este tiempo. Creo que se hizo el último miércoles del mes pasado, pero no estoy seguro. Pero estamos ahí por tomar decisiones y después se dirá”, dijo Francisco. (Cf. Ansalatina.com 9 jun. 2015)

Papa se conmueve por el testimonio de torturados Francisco entró en la Catedral acompañado por el Cardenal de Sarajevo. El Papa de la sonrisa, no dejó de reírse ni de abrazar a la gente. Lo primero fueron los regalos. El Papa dejó como recuerdo un cáliz y recibió un cuadro. Después escuchó tres duros relatos de testigos directos de la guerra de los Balcanes, que concluyó hace 20 años y dejó unos 250 mil muertos en Bosnia-Herzegovina. Una religiosa trabajaba como enfermera en un hospital civil, pero fue arrestada por soldados extranjeros junto a un sacerdote y varios laicos. “Los milicianos obligaron al párroco don Vinko a pisotear el rosario. Él se negó. Uno de los milicianos desenvainó su espada y lo amenazó con masacrarme si no hubiera pisoteado y profanado el rosario. Entonces dije al párroco: ¡Don Vinko, déjeles que me maten, pero por el amor de Dios, no pisotee nuestro rosario”, indicó la religiosa.

Un sacerdote fue arrestado y recibió tantos golpes que tuvo que recibir 6 litros de sangre en transfusiones. “Perdono de corazón a todos los que me hicieron daño, y rezo por ellos, para que Dios misericordioso los perdone, se conviertan y emprendan el camino del bien”, explicó. En 1992, el fraile franciscano fue llevado a un campo de concentración junto a muchas de las personas que iban a su parroquia. “Allí vivimos sin las mínimas condiciones higiénicas, sin podernos lavar, afeitar, cortar el pelo; cada día nos maltrataban físicamente, nos pegaban y torturaban con varios objetos, con las manos y con los pies. Dios me ha enviado su ayuda con la comida a través de una mujer musulmana, Fátima, y su familia, que ahora viven en América”, relató el sacerdote. Visiblemente conmovido, el Papa dejó de lado el discurso que tenía preparado y habló sobre lo que acababa de escuchar. “No tenéis derecho a olvidar vuestra historia. No para vengaros sino para hacer la paz. No para mirarlos como algo curioso, sino para amar como ellos han amado”, exhortó Francisco. (Cf. Ansalatina.com 9 jun. 2015)

Quienes no escatiman fuerzas para cuidar a familiares enfermos son héroes

Luego, en su catequesis del diez de junio, el Santo Padre habló sobre las personas que tienen que afrontar la enfermedad de un ser querido. Dijo que las familias son los primeros hospitales, y que allí se experimenta el heroísmo todos los días.

“Todos lo hemos visto: Un hombre o una mujer con el rostro cansado, se mueve cansado... “¿Pero qué te pasa?” “He dormido sólo dos horas porque en casa hacemos turnos para estar cerca del niño, la niña, el enfermo, el abuelo, la abuela”... Y luego continúan su

día en el trabajo. Esto es heroico”, explicó el papa Francisco. Su Santidad dijo que el dolor de ver a un ser querido que sufre, es una oportunidad para fortalecer el corazón, la fe y el alma. El Papa pidió que enseñen a los niños a mostrar su solidaridad cuando hay un enfermo en la familia, para que cuando sean grandes no sean insensibles ante el sufrimiento de los demás. (Cf. Ansalatina.com 9 jun. 2015)


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ditorial

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Misericordia

He sido publicado últimamente un precioso libro con el título de “Misericordia”. Su autor es el Cardenal Walter Kasper. Uno de los juicios escuchados recientemente sobre este libro es nada menos el del papa Francisco que dijo: “¡Este libro del Cardenal Kasper me ha hecho tanto bien, tanto bien!”. El autor reflexiona teológicamente sobre la Misericordia Divina desde la perspectiva bíblica. Su reflexión teológica es enriquecida de consideraciones espirituales de fondo, y plantea además consideraciones prácticas orientadas a hacer de la misericordia el eje central de la acción pastoral y evangelizadora de las comunidades cristianas, incluyendo proyecciones hacia el compromiso social de las mismas en el mundo de hoy. A pesar de ser un tema central en la Biblia, el autor constata que la misericordia ha sido olvidada por los teólogos de las recientes décadas pasadas. Afortunadamente, la espiritualidad católica y, en parte también la pastoral de la Iglesia, han mantenido vivo el tema de la misericordia. Lastimosamente, por falta de una reflexión teológica seria sobre el tema, la espiritualidad y la pastoral se han limitado a un abordaje sentimental y piadoso del mismo. A este propósito el autor comenta que “lejos de ser un teoría lejana del mundo y de la práctica cristiana, la misericordia de Dios no se limita a aflorar sentimientos nobles y humanos en el corazón del hombre, sino que nos pone a la puerta misma del misterio de Dios”. Hace tanto bien leer este libro con ocasión de la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús. El autor dedica también una conclusión hermosa al Corazón de María. Ve en los dos corazones la síntesis de la misericordia humana y cristiana. Una visión que está ya

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presente en la conciencia de los primeros cristianos. Convicción que comparten con él no solamente los cristianos ortodoxos sino también los hermanos protestantes evangélicos. No podemos borrar de un plumazo el testimonio de tantísimos cristianos que a lo largo de veinte siglos, en múltiples situaciones históricas recurrieron a la Madre de Dios, invocándola como Madre de la misericordia. Esta afirmación no es una pía exageración, o un desborde de emoción. María recorre las páginas del Evangelio en una dimensión eminente. Ella es, entre todas las creaturas, aquella que encarna el evangelio de la misericordia de Dios en la forma más pura y más bella. María es la representación creada más tierna de la misericordia de Dios. Ella es el espejo de lo que constituye el centro y la cumbre del Evangelio. María refleja todo el encanto de la Misericordia Divina y nos muestra el resplandor y la belleza que todo lo transforma y que desciende al mundo llena de benignidad. Por todo esto, María es para nosotros el modelo y la guía luminosa para la construcción de una nueva civilización de la misericordia, precisamente en medio de las miserables condiciones de vida de hoy, y en medio de un concepto tan banal de la existencia, tan difundido hoy día. María resurge en nuestro tiempo a la luz de la misericordia de Dios, como el modelo del que nos podemos inspirar para la construcción de una renovada civilización cristiana y para lanzar una rica espiritualidad cristiana de la misericordia en nuestra sociedad. El autor del libro que ponderamos, está convencido de que María es el modelo y el ideal de una renovada civilización y espiritualidad cristiana de la misericordia.

Por Mons. Jesús Delgado Acevedo, Director de Semanario Orientación

tioziggi@hotmail.com • Sigfrido Munés

En El Salvador: 160 personas poseen 21 mil millones de dólares La organización internacional Oxfam dio a conocer hace unas tres semanas que apenas 160 personas tienen un patrimonio de 21 mil millones de dólares en El Salvador, dentro de un panorama regional centroamericano que suma 142 mil millones repartidos entre 1,075 fortunas. En el primer caso, en El Salvador esa concentración de riqueza equivale al 87% del PIB (Producto Interno Bruto anual) mientras que en Centroamérica alcanza el 80%. El informe de Oxfam no desglosa

cuánto corresponde al capital tradicional y cuánto a los nuevos ricos. Ignoro cuáles son las fuentes que proveen de información a Oxfam y si tienen alguna marcada inclinación política, pero de una simple observación puede deducirse que no andan muy lejos de la realidad. Los hechos son los hechos y no tienen viñetas. El estudio, en su parte más impactante, señala que de la población salvadoreña que está en edad de trabajar, el 65.7% lo hace en el sector informal y señala que “de ese segmento, el 44% vive en condiciones de pobreza”, mientras que en Centroamérica la mitad de los habitantes tienen menos de un dólar diario de ingreso y sufren de

altos índices de subnutrición. Oxfam propone entre otras soluciones, el aumento de los salarios mínimos, particularmente en el campo, y un alza en la recolección fiscal. ( Para esto último, los contribuyentes reales y potenciales, exigen del sector público una disciplina fiscal estricta y una transparencia total de las inversiones y los gastos del estado). Un aumento en el salario mínimo del sector agrícola probablemente inyecte algún dinamismo a la aletargada economía del país. El aumento constante de los precios de la canasta básica marca el empobrecimiento de nuestra gente, agudizado en los últimos años. Es tiempo que la “gente de bien” piense en los demás, de verdad. En Dios confiamos.


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Diócesis de Sonsonate

Jornada de Formación permanente para el Clero

Pbro. Dennis Doren, de la CECOM, ofreció la ponencia denominada “Habitar las Redes Sociales”

La tercera Jornada de Formación permanente para el Clero de la diócesis de Sonsonate se desarrolló este 9 de junio. La actividad se centró en la prioridad que hoy en día tiene la Pastoral de Comunicaciones en las parroquias, y cómo fortalecer su relación con los Medios y el uso de las Redes Sociales. Diversas ponencias ofrecieron invitados como el Pbro. Dennis Doren, quién habló sobre “Habitar las

redes sociales”; Mons. Jesús Delgado disertó sobre la “Fundamentación magisterial de los medios de comunicación” y Roberto Sermeño, locutor de Agape Stereo, compartió el tema “Buen uso de los medios de comunicación y redes sociales en la evangelización”. El señor Obispo de la Diócesis, Mons. Constantino Barrera, acompañó la jornada que continuó el miércoles diez con la Reunión mensual del Clero.

La mayoría de sacerdotes de la diócesis participó de las ponencias del día 9 y de la Reunión mensual del Clero el 10 de junio

¡Fiestas tras fiestas!

Siempre me gustó la expresión “mayo florido”, y en efecto así fue nuestro mes pasado. Aunque lastimosamente se fue mayo como “agua de mayo”: un mes en el que la Iglesia nos inundó de gracias espirituales. Randa Hasfura Por un lado, teníamos a María, Anastas recordándonos la importancia de rezar el Rosario para pedir por la paz, por la reconciliación, por la hermandad. Por otro lado, el mes estuvo cargado de Domingos de Pascua, desbordantes de gracias. Y para cerrar con “broche de oro” tanto el mes como la Pascua misma, tuvimos la dicha de tener al primer salvadoreño en los altares: Beato Oscar Romero. ¡Cuánta gracia, cuánta bendición, cuánto regocijo… en tan solo un mes! Pero la fiesta continuaba para la Iglesia, apenas el domingo pasado celebrábamos el regalo más grande que Dios nos ha dejado: Corpus Christi. Como decía San Agustín: “Jesús, movido por ese amor que nos tiene quiso quedarse con nosotros después de la Ascensión”; o como decía San Josemaría: “Vemos la humildad de Jesús: en Belén, en Nazaret, en el Calvario... pero más humillación y más anonadamiento que en el Establo, que en Nazaret y que en la Cruz: en la Hostia Santísima”. ¡Y así, saciados de fiestas quedamos empapados de gracias! Pero como todo en esta vida tiene límites… también la Liturgia nos da un descanso para que no se desgaste ella misma en tanta fiesta, y así hoy retomamos el tiempo ordinario que dejamos atrás (antes de Cuaresma), podríamos decir que arrancamos nuevamente un tiempo más relajado. Tiempo en el que podemos descubrir y conocer más a fondo al personaje que puso a nuestro país en la “mira del mundo”, al personaje que hizo que tuviéramos el acontecimiento del Año, al personaje que hizo que nuestra Iglesia se sintiera ensalzada y grande luego de ser perseguida, atacada y humillada en pleno siglo XX. Y así, luego de tantas pancartas, periódicos y libros sobre este personaje, ¿hemos examinado “a conciencia” lo grandioso que significó para

nuestro país y para nuestra Iglesia que se nos haya enaltecido con el primer Beato salvadoreño? Por eso dije que jamás olvidaremos el mes de mayo: mes en que cientos de salvadoreños se dedicaron a conocer un poco al Beato Romero (incluso sólo por curiosidad), mientras que miles de peregrinos alistaban su boleto aéreo para ser partícipes del gran evento. Fue impactante oír en las calles de San Salvador, en las librerías, en las Iglesias, diferentes acentos, diferentes idiomas, ¡extranjeros todos!, como los reunidos en Pentecostés: aquí habían chilenos y españoles, mexicanos y estadounidenses, todos bajo un sentimiento de júbilo; mientras que en ciertas casas, en ciertos cafés, se escuchaba todavía la “crítica” de un buen número de salvadoreños que no querían aceptar lo que tres Papas estudiaron y concluyeron. Al final, lo cierto es que los “suyos”, con el corazón hinchado de amor, estuvieron bajo el sol inundando los cuatro costados de la Plaza. Jesús ya lo decía, pero hoy más que nunca se hizo presente esta frase: “Nadie es profeta en su propia tierra”. Desde mucho tiempo atrás, hemos sido testigos de cómo Monseñor Romero viene siendo más venerado en otras partes del mundo. Por ejemplo, en Suramérica, en Europa y en muchas partes de Estados Unidos se dieron siempre conferencias y conversatorios sobre su mensaje y su incansable lucha por los Derechos Humanos. Frases como: “una religión de misa dominical pero de semanas injustas no son del Señor/ una religión de mucho rezo pero con hipocresías en el corazón no es cristiana/ un cristiano que defiende posiciones injustas ya no es cristiano/ la justicia es como las serpientes, solo muerden a los que están descalzos”, han dado la vuelta al mundo, se pueden ver en internet y la gente las admira y las aplaude. Pero aquí en nuestro país, Romero, por querer vivir como un cristiano de los orígenes: despojado de poder, viviendo con y como los pobres, firme en sus discursos y en su proceder, murió como tal. Tener a todos en contra sí que es sufrir una oscuridad muy cristiana. Muchos no le entendían, otros lo desprestigiaban, y los suyos le dejaron solo.

Pero no murió abandonado, aquel Domingo de Ramos, su funeral, fue una manifestación popular de amor: entre llantos y escombros, campesinos y obreros, ancianos y niños, sacerdotes e intelectuales… ¡la gente no cabía! Y lo mismo sucedió el sábado 23 de mayo: entre júbilo y templetes, extranjeros y salvadoreños, sacerdotes y laicos… ¡la gente no cabía! De esa manera nos damos cuenta cómo el tiempo de Dios no es el tiempo del hombre y quiso que muriera en Cuaresma, para ser Beatificado en Pascua, justamente en la antesala de Pentecostés, la conclusión de nuestra Pascua: una fiesta de plenitud y no de inicio, una fiesta en donde tuvimos la oportunidad de vivir intensamente la relación existente entre la Resurrección de Cristo, su Ascensión y la venida del Espíritu Santo. Allí la primera comunidad sale a predicar el Evangelio y vemos personajes diferentes: pescadores y mercaderes; lenguas distintas: cretenses y árabes; capacidades distintas, pero son uno mismo, una sola comunidad. Y así, nuestra comunidad tan diversa y dividida se vio unida desde el cielo: la Iglesia, el gobierno, locales y extranjeros, juntos todos como la Comunidad de Pentecostés, en la Plaza del Divino Salvador del Mundo, símbolo de nuestra patria. ¿Cómo no iba a formarse una señal en el cielo? Que aunque algunos lo atribuyen a “solo una casualidad meteorológica”, está el hecho que dicho fenómeno se produjo “precisamente” en el momento en que era proclamado solemnemente como Beato, para desaparecer poco después. Que cada cual lo interprete como quiera, pero lo cierto es que fue un signo claro y bello con el que Dios quiso subrayar que monseñor Romero es, con toda verdad, un Beato que quiso unir y no dividir. Y es en ese signo dónde se cumple ese “estilo divino” de dejar suficiente luz para el que quiera creer y suficiente oscuridad para el que no quiera creer. ¡Qué complacencia para este país! Dios enviando flores en medio de la maleza. ¡Dios fijándose en un país tan pequeño pero tan controversial para darnos un Santo!


14 de junio de 2015

7 Catequesis

1. Respuesta desde la cultura. En sentido lato se llama beatitud el bien poseído que satisface algún apetito racional del hombre. También se llama así el estado de felicidad relativo que se goza en la tierra, y a veces el reposo y la tranquilidad de la vida sin accidentes que vengan a perturbarla. En sentido lato e impropio esta palabra puede significar, no ciertamente la exclusión de todos los contratiempos de esta vida, sino la posesión de un bien relativo, que por el momento preserva de algunos males y proporciona algunos goces. El nacimiento, la familia, la inteligencia, la salud, los bienes de fortuna, la posición social, la gloria en las empresas, etc., suelen ser motivos de beatitud temporal según el mundo.

¿Qué es ser Beato? contemplación; los animales nunca son beatos, por carecer de actividad contemplativa (Ét. Nic., X, 8, 1178 b 9 ss.). Es evidente que entre los hombres el sabio es el más beato (Ibid., I, 11, 1101 b 24). Del neoplatonismo en adelante se puede decir que el concepto de beatitud se ha distinguido en forma cada vez más precisa del de felicidad, relacionándose estrechamente con la vida contemplativa, con la actitud de la reflexión interior y del retorno a sí mismo. La tradición cristiana obró en el mismo sentido, relacionando la beatitud con una condición o estado independiente de las vicisitudes mundanas, aunque dependiente de la disposición interna del alma.

Estamos hablando de la posesión del sumo bien, que es Dios, el Único que puede hacernos completamente felices. Nada es comparable a esta beatitud, incluso la bienaventuranza de que goza un hombre por vivir en gracia de Dios en este mundo. El hombre que goza de la posesión del sumo Bien, se le llama hombre de Dios, es un Beato.

Todos los bienes antes señalados, y sus semejantes, nada tienen de sólido, ni la verdadera felicidad se encuentra ni en cada uno de ellos ni en todos reunidos. Antes, por el contrario, muchas veces suelen servir de amargura, de inquietud y de pesadumbre, y en medio de tales goces, el corazón queda vacío. Aun en esta vida, la única felicidad más pura y sólida que puede hallarse, es la unión con Dios por el conocimiento y el amor, en cuanto se puede adquirir en la tierra. De aquí nace la satisfacción interior, la tranquilidad de la conciencia, la paz y el gozo que más satisfacen al corazón. El sentido verdadero y propio de beatitud es el de felicidad completa y absoluta, posesión de todo bien sin mezcla alguna de mal. Esta felicidad sólo se goza en el cielo por la posesión del sumo bien, que es Dios. En sentido estricto, beatitud es la felicidad eterna que los justos disfrutan en el cielo por su unión con Dios. 2. Respuesta desde la filosofía. Considerada filosóficamente, el significado de beatitud puede distinguirla del concepto de “felicidad” del que es sinónimo, porque designa un estado de satisfacción completa, perfectamente independiente de los problemas del mundo. Aristóteles, que a veces usa indistintamente este término y el de felicidad, relaciona la beatitud con la contemplación y la aplica, a la medida que en los diferentes seres vivientes tiene la actividad contemplativa. Así, toda la vida de los dioses es beata, por ser totalmente contemplativa. A los hombres corresponde una especie similar de vida, porque sólo de tanto en tanto se dan a la

Santo Tomás de Aquino dice que la beatitud es «la última perfección del hombre», o sea la actividad de su más alta facultad, el entendimiento, en la contemplación de la realidad superior, o sea la de Dios y de los ángeles. «En la vida contemplativa el hombre se comunica con las realidades superiores, es decir, con Dios y con los ángeles, a los cuales se asimila también en la beatitud». Por lo tanto, el hombre obtendrá la beatitud perfecta en la vida futura que será totalmente contemplativa. En la vida terrena el hombre sólo puede alcanzar una beatitud imperfecta, en primer lugar por la contemplación y en segundo lugar por la actividad del entendimiento práctico que ordena las acciones y las pasiones humanas, esto es, por la virtud (S. Th., II, I, q. 3, a. 5).

Elaborada por Mons. Jesús Delgado A. ámbito religioso en donde el concepto y la realidad de beatitud cobran mayor importancia. 3. Respuesta desde la religión. En lenguaje religioso la beatitud es siempre eterna. No tratamos de aquella felicidad natural que puede granjearse por medio de las fuerzas naturales y que consiste en la posesión de los bienes creados, cuyo conjunto no basta a llenar cumplidamente nuestro corazón, sino de esa otra bienaventuranza sobrenatural que el hombre no alcanza a conseguir por su propio esfuerzo, sino, sólo, con el poder de la gracia de Dios. Estamos hablando de la posesión del sumo bien, que es Dios, el Único que puede hacernos completamente felices. Nada es comparable a esta beatitud, incluso la bienaventuranza de que goza un hombre por vivir en gracia de Dios en este mundo. El hombre que goza de la posesión del sumo Bien, se le llama hombre de Dios, es un Beato. Hay dos facetas de la beatitud que podemos definirlas con dos términos: “amor beatífico” y “visión beatífica”. Tiene “amor beatífico” el hombre que camina en este mundo y vive en gracia de Dios, prodigando el bien a los demás, según el mandato de Jesús: “ámense los unos a los otros como yo los he amado”. Ahora, si a la práctica exterior de la caridad fraterna el hombre añade la búsqueda de una vida interior de la fe, como San Pablo que llegó a decir “vivo yo, pero ya no yo, Cristo vive en mí”, entonces el hombre encuentra el camino de la “visión beatífica”, que sólo será perfecta en el cielo. Puntos para reflexión personal. 1) La cultura es un camino del Espíritu que, bien enderezada hacia Dios, nos abre el camino hacia la beatitud. ¿Cómo ves tú nuestra cultura salvadoreña? ¿No ayuda a enderezar nuestros pasos a Dios? 2) El ser del hombre ha sido creado para gozar de la eterna bienaventuranza de Dios, una visión filosófica del ser humano ayuda a ello. ¿Tenemos los salvadoreños una visión antropológica adecuada para lograr, ya desde este tierra, vivir con Dios?

3) ¿Qué notas de En la edad moderna Reliquias del Beato Mons. Romero son admiradas beatitud encuentras la noción y la palabra tú en la persona y en beatitud han dejado por los feligreses en Catedral Metropolitana la vida de Monseñor de tener un uso propiamente filosófico. Algunos psicólogos la Romero? ¿Crees que aquí en El Salvador, la consideran útil para indicar determinados estados comunidad cristiana en general y la católica en patológicos de alegría, que se caracterizan por particular, caminamos por el mismo sendero por el completo olvido de la realidad. Pero, es en el donde Monseñor Romero alcanzó la beatitud?


EN EL MUNDO

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Siete preguntas sobre la nueva encíclica del Papa Francisco Durante meses, Francisco ha estado preparando una encíclica sobre ecología y el respeto de la creación, un documento que no ha sido publicado y ya ha levantado algunas críticas. Recogemos las siete preguntas básicas para entender lo que está pasando. 1. ¿Qué es una encíclica? Una encíclica es simplemente una carta escrita por el Papa. Sin embargo, tiene gran solemnidad porque está dirigida a los obispos y a todas las personas de buena voluntad. Es el principal documento de enseñanza papal. 2. ¿Por qué son importantes? Los Papas se comunican oficialmente a través de escritos o documentos. Es importante porque concreta la doctrina católica sobre una cuestión específica. 3. ¿Cada cuánto tiempo se publica una encíclica? Depende de su autor. Él lo decide. La primera encíclica fue escrita por Benedicto XIV y se publicó en el año 1740. Desde entonces se han publicado más de 300.

La próxima encíclica se llamará “Laudato Sii”, “Alabado seas”. Se trata de una frase del Canto de las Criaturas de San Francisco de Asís, en donde alaba a Dios por los dones de la Creación. Hablará sobre ecología natural y también humana. 5. ¿Por qué generará controversia? La mayor parte de la encíclica no generará controversia ya que está comúnmente aceptado que el cuidado del medio ambiente es necesario. Sin embargo revelará la postura del Papa en cuestiones delicadas como el cambio climático. Y pedirá a los gobiernos una implicación mayor.

7. ¿La encíclica provocará cambios? Con la publicación de la encíclica el Papa Francisco pretende invitar al debate antes de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de París, prevista para el próximo mes de diciembre.

4. ¿Cómo se llamará la próxima encíclica?

(Cf. Romereports.com 8 jun. 2015)

Documental sobre la Tras el escándalo de Sábana Santa investiga corrupción, parece que las imagen en relieve cosas se ponen en orden SAN PEDRO SULA. El Obispo Auxiliar de San Pedro Sula, Su Exc. Mons. Rómulo Emiliani, tiene la impresión de que “en Honduras ya se están poniendo las cosas en orden”, además “se siente que la justicia está actuando de manera mucho más eficaz”.

Sus palabras hacen referencia al escándalo de corrupción que estalló el mes pasado en el Instituto Nacional para la Asistencia Sanitaria.

“Está rodado con cámaras cinematográficas y tiene un gran trabajo de tratamiento del color. Todo esto permite al espectador poder seguir, en 50 minutos, un pequeño debate sobre la Síndone con gran soltura y sin dificultad”, dijo Mons. Dario Viganò, director del Centro Televisivo Vaticano. Con argumentos a favor y argumentos en contra, el documental intenta aproximarse a la historia detrás del lienzo que pudo envolver el cuerpo de Cristo. “Es un intento de llevar al espectador dentro del misterio de la imagen de la Síndone que es una imagen que continúa generando preguntas más allá de las pruebas sobre su autenticidad u origen medieval”, expresó Andrea Tornielli, autor documental. El documental profundiza además sobre el misterio del relieve que presenta la imagen tomada por el fotógrafo Segundo Pia en 1898. Desde entonces, científicos, historiadores e investigadores han encontrado más preguntas que respuestas. (Cf. Ansalatina.com 9 jun. 2015)

El grupo de nueve cardenales que asesora al Papa Francisco en la reforma de la Curia y el Gobierno de la Iglesia universal, el conocido como “G9 Vaticano”, se reunieron desde el lunes 8 hasta el miércoles 9. Se trató del décimo encuentro que mantienen desde que el Pontífice instituyera este órgano un mes después de ser elegido Papa. La primera reunión tuvo lugar en octubre de 2013.

6. ¿Ofrecerá Francisco un enfoque innovador sobre la ecología? Sí y no. De las centenares de encíclicas publicadas ninguna se ha centrado exclusivamente en la ecología, aunque Juan Pablo II y Benedicto XVI ya hablaron ampliamente sobre la cuestión, especialmente el cambio climático.

Juan Pablo II escribió 14, una cada dos años de pontificado aproximadamente. Benedicto XVI publicó 3 en los casi 8 años como Papa. El Papa Francisco publicó por el momento solo una encíclica sobre la fe.

Algunos detalles de la Síndone puede que escapen al ojo humano, pero la tecnología ha llegado hasta el último milímetro de la tela en el documental “Síndone, historia de un misterio”.

G9 Vaticano se reúne para continuar con la reforma de la Curia

Mons. Emiliani ha hecho notar que “son tantas las víctimas: enfermos que no han sido curados y otros que incluso han muerto. Es una situación muy delicada porque no solamente es robar, son las consecuencias del robo”, ha añadido. (Cf. Fides.org 6 jun. 2015)

Durante la última reunión, que se celebró el pasado mes de abril, el cardenal Sean O'Malley, que preside la Comisión para la Protección de los Menores –impulsada por el propio consejo de cardenales–, propuso abordar el tema de la “responsabilidad” en la tutela de los menores adoptando procedimientos para juzgar el “abuso de oficio” por parte de responsables de la Iglesia. Por otra parte, el Consejo confirmó la orientación de instituir dos dicasterios competentes, el primero sobre Caridad, Justicia y Paz y el segundo sobre Laicos, Familia y Vida. También estudiaron la reorganización de los medios de comunicación vaticanos y el presidente de la Comisión dedicada a este asunto, Lord Chris Patten, presentó el informe final. Unos días después, el Papa Francisco creó una nueva comisión que acometerá las reformas de los medios de comunicación del Vaticano. Está previsto que las próximas reuniones de este consejo de nueve cardenales se celebren del 14 al 16 de septiembre y del 10 al 12 de diciembre de 2015. (Cf. Larazon.es 9 jun. 2015)

¿Por qué Dios es casi siempre un hombre?

Según escribe Stephen Tomkins, la cuestión del género de Dios se remonta al cristianismo primitivo. La Iglesia cristiana siempre ha tenido un pequeño problema con el género de Dios. Dios no tiene uno, pero tal y como lo demuestra ese llamado, es difícil hablar sobre Dios sin darle un género. Para referirnos a Dios tenemos que llamarlo “algo”, pero evitar los pronombres es engorroso. “Eso” parece un poco rudo. Así que Dios tiene que ser “él” o “ella”. Como dice el Catecismo de la Iglesia Católica: Dios no es ni hombre ni mujer, Dios es espíritu puro. Desde la década de 1980, nuevas traducciones de la Biblia han utilizado un lenguaje no sexista. Un ejemplo: en la Biblia del Rey Jacobo (1611) dice: “¿Qué es hombre para que te acuerdes de

él, y el hijo del hombre, para que lo visites?”. Luego, en la versión en la Biblia revisada (1989) se usó la expresión: “¿Qué son los seres humanos de los que usted es consciente, los mortales de los que usted se preocupa?”. Otros grupos cristianos han ido más allá. Una iglesia en Siria en el siglo III parece que tenía la costumbre de orarle al Espíritu Santo en términos femeninos. También Julian de Norwich, una monja de clausura y mística inglesa del Medioevo, en sus “Revelaciones del amor divino” del siglo XIV dice: “Así como Dios es nuestro Padre, Dios es también nuestra Madre”. (Cf. Bbcmundo.com 6 jun. 2015)


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14 de junio de 2015 Carta Pastoral de la Conferencia Episcopal de El Salvador

Beato Monseñor Oscar Romero, Pastor y Mártir – Tercera entrega –

Parte tercera El pastor que ilumina el compromiso social del cristiano 29. Uno de los temas de debate más candentes sobre Monseñor Romero es el de su conversión. Al respecto existen dos tesis: la de Monseñor Rivera, Monseñor Ricardo Urioste y muchos más, quienes afirma que Monseñor Romero vivió en permanente conversión; y la de quienes hablan de una conversión al estilo de la San Pablo, provocada por el asesinato del Padre Rutilio Grande. El mismo arzobispo mártir dejó en claro quién tiene razón. Lo hizo, por ejemplo, cuando un periodista suizo le preguntó: “Monseñor, dicen que usted se ha convertido”. Y él respondió textualmente: “Yo no diría que es una conversión sino una evolución”. Y luego explicó cuál fue su proceso interior: mientras era pastor en San Miguel o en Santiago de María, veía la realidad desde la periferia. Pero cuando llegó a la sede de San Salvador, centro del poder político, económico y militar, descubrió en forma brutal lo que significa la injusticia estructural de la que hablan los documentos de Medellín. Desde entonces, basándose en la palabra de Dios y en la enseñanza social de la Iglesia clamó con fuerte voz pidiendo la conversión no sólo personal sino también social. Abundan los textos que confirman esta manera de entender las cosas. En una palabra, Monseñor Romero siempre estuvo abierto a la voluntad de Dios, fue siempre dócil a las inspiraciones del Espíritu Santo y por eso ha merecido la gloria de los altares. 30. Cuando San Juan Pablo II nos visitó por segunda vez quiso orar de nuevo junto a la tumba de nuestro pastor, pero antes de ese momento de oración profunda se dirigió a la juventud que le aclamaba en la Plaza Cívica. El Santo Padre habló de Monseñor Luis Chávez y González, de Monseñor Arturo Rivera Damas y de Monseñor Oscar Arnulfo Romero, calificándolos como “las tres columnas que sostienen la Iglesia arquidiocesana”. Y al referirse al futuro beato, dejó a un lado su discurso para exclamar en forma espontánea: “Y me alegro de que su memoria permanezca viva entre ustedes”. 31. Es altamente simbólico que la beatificación se realice junto al monumento al Divino Salvador del Mundo, que fue construido en 1942 para conmemorar el primer centenario de la erección de la primera diócesis de El Salvador. La silueta del titular de nuestra república se ha convertido en el símbolo del país. Allí deseamos reafirmar nuestro compromiso de llevar adelante la misión evangelizadora de la Iglesia que quiere salir a las periferias geográficas y existenciales como lo proclama sin descanso el Papa Francisco. Pero no podemos ponernos de nuevo en camino sin saber quiénes somos y de dónde venimos; y, sobre todo, sin tener claro quién es Monseñor Romero. Hagamos, pues, un ejercicio de memoria. 32. Cuando manos sacrílegas segaron la vida de Monseñor Romero, los Obispos de El Salvador elevaron indignados su voz para protestar por tan grave magnicidio que hería profundamente el corazón de la Iglesia. Al día siguiente, denunciaban tan vil asesinato con estas palabras: “Desde que Monseñor Romero

llegó a la Sede Metropolitana como cuarto Arzobispo de San Salvador, fiel a su lema de decir la verdad para construir la paz fundamentada en la justicia, anunció incansablemente el mensaje de Salvación y denunció con vigor implacable la situación de injusticia institucionalizada y los abusos en contra de los derechos humanos y de la dignidad inalienable del hombre, hecho a imagen y semejanza de Dios. Esto le mereció el aprecio de propios y extraños, pero también suscitó la aversión de los que se sentían incómodos por la fuerza de su palabra evangélica y de su testimonio”. A renglón seguido los obispos afirmaban: “ L a C o n f e re n c i a E p i s c o p a l c o n d e n a enérgicamente el asesinato del Pastor de la Arquidiócesis de San Salvador, condena también la violencia como medio para impedir o para apoyar las reformas necesarias para el país. Espera que la muerte del Excelentísimo Señor Arzobispo Metropolitano al inicio de la Semana de Pasión, contribuya eficazmente a la conversión y reconciliación de las familia salvadoreña; conversión que debe favorecer las justas aspiraciones por una convivencia más justa y más fraterna” (Pronunciamiento del 25-03-80) 33. Siete años más tarde, en su Tercera Exhortación Pastoral, de fecha 19 de abril de 1987, Monseñor Arturo Rivera Damas, se expresaba así: “El paso de Monseñor Romero por la sede metropolitana (22 febrero 1977 ̶ 24 marzo 1980), aunque fecundo y en circunstancias difíciles, fue breve ( ). El Magisterio de Monseñor Romero está contenido en Cuatro Cartas Pastorales, en sus homilías, especialmente las dominicales y en numerosas entrevistas. A la profundidad de la doctrina y don de descifrar los signos de los tiempos, unió su denuncia clara y muchas veces detallada de los abusos de la autoridad, la cual reprimió en forma brutal, tanto las manifestaciones reivindicativas de las organizaciones populares, como las provocativas lideradas por la cúpula marxista”. “El testimonio y servicio más grande de Monseñor Romero fue su muerte martirial, precedida y seguida por la muerte violenta de varios sacerdotes, religiosas y catequistas. En alguna ocasión el Papa Juan Pablo II expresó que Monseñor Romero no necesita mayores procesos y milagros para ser declarado beato, sino que se evite la manipulación política de su memoria”. Comentaba allí mismo Monseñor Rivera Damas: “Creo que esto no será fácil por el momento; pero esa debe ser la meta a que tiendan nuestros esfuerzos, ya que se exalta mucho la memoria de Monseñor Romero como figura política, pero poco como Pastor coherente con su misión”. Permítannos expresar públicamente nuestro reconocimiento a Monseñor Rivera, quien no sólo conservó celosamente la herencia de Monseñor Romero sino que luchó tenazmente para que no se manipulara políticamente su figura. Fue una lucha difícil, pero poco a poco se vieron los frutos. 34. Cuando se inició el proceso de canonización de Monseñor Romero las autoridades romanas encargadas de su caso preguntaron a los postuladores por qué mataron a Monseñor Romero y en qué contexto ejerció su ministerio pastoral. Ahora ya tenemos la respuesta, emanada de la más alta

autoridad de la Iglesia: lo mataron “por odio a la fe”. Lo mataron porque tomó en serio la enseñanza de Jesús, su pasión por el reino y su compasión por el pueblo. Lo mataron porque hizo suyas las enseñanzas del Concilio Vaticano II que nos manda hacer nuestras “los gozos y las esperanzas, las tristezas y las alegrías” de cada ser humano y de cada comunidad. Lo mataron por vivir hasta las últimas consecuencias la convicción que repetía sin cesar: “Nada me importa como la vida humana”. Lo mataron por “ser voz de los que no tienen voz”. Y en cuanto al contexto, sabemos que estaba marcado por el conflicto este-oeste, ya que en territorio centroamericano se libraba la batalla entre dos bloques ideológicos opuestos. Lo dijo muy bien San Juan Pablo II cuando, el 1 de octubre de 1984, apoyó desde la Plaza de San Pedro, a la hora del ángelus, el proceso de diálogo que se iniciaba en la ciudad de La Palma entre los grupos alzados en armas y el gobierno salvadoreño. Citando palabras de Monseñor Rivera, el Santo Padre afirmó: “Las armas vienen del exterior, pero los muertos son todos salvadoreños”. La Iglesia, Cuerpo der Cristo en la historia. 35. Al leer el Diario de Monseñor Romero, encontramos muchas alusiones al proceso de preparación de su segunda carta pastoral, que fue publicada el 6 de agosto de l977 con el título “La Iglesia, cuerpo de Cristo en la historia”. La intención de la misma es tratar explicar por qué la Iglesia, desde que Monseñor Romero empuñó el timón de la Iglesia particular de San Salvador, ha tomado posición en la compleja realidad de la vida nacional: “Porque los acontecimientos que se han sucedido en el país antes y después de aquella Pascua inolvidable y la intensa vida eclesial que, en nuestra arquidiócesis, ha acompañado a estos acontecimientos, exigen una razón de nuestras actuaciones. Y nada me parece más propicio para ello, que esta nueva presencia luminosa y litúrgica del Divino Salvador para confrontar con sus designios divinos de salvación, el camino por donde juntos hemos marchado como pueblo de Dios”. En otras palabras, el pastor escribe esta carta para defenderse de múltiples ataques, muchos de ellos realmente venenosos. 36. Por tratarse de un documento prácticamente desconocido, vamos a recoger algunas de sus afirmaciones centrales, las cuales explican con claridad meridiana el pensamiento pastoral de Monseñor con relación a la compleja realidad salvadoreña. ¿Por qué Monseñor Romero escribe esta carta pastoral?: “He creído un deber de mi magisterio episcopal dirigirme a todos los queridos hijos de nuestra Iglesia y también a otros cristianos hermanos nuestros y a todos los salvadoreños que buscan y esperan una palabra razonable que ilumine, desde nuestra fe y desde nuestra esperanza cristiana, lo que realmente está pasando. Sí. Es la palabra de nuestra fe. Por tanto, no pretendo suplantar al necesario esfuerzo de la razón humana en buscar soluciones concretas y viables a nuestros graves problemas. Pero con la luz de la fe estoy seguro de ofrecer la contribución que la Iglesia tiene que aportar para purificar y fortalecer esos esfuerzos razonables porque los libera de torcidos intereses y les garantiza la complacencia de Dios” (2ª Carta pastoral, Introducción). (pasa a la página 10)


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Puedes consultar la edición e l e c t r ó n i c a d e Orientación e n

www.arzobispadosansalvador.org (viene de la página 9) Se trata, de una palabra de esperanza: “Es también la palabra de nuestra esperanza. No puede ser otra la palabra de la Iglesia, porque es la palabra de la Buena Nueva, del Evangelio, de la liberación que, por medio de la Iglesia, sigue anunciando Jesús a los hombres. Y no es una esperanza ingenua la que proclama la Iglesia, porque va acompañada por la sangre de sus sacerdotes y sus campesinos: sangre y dolor que denuncian la existencia de dificultades objetivas y de malas voluntades que se oponen a su realización, pero sangre que también es expresión de voluntad de martirio y que, por tanto, es la mejor razón y testimonio de una esperanza que, desde Cristo, la Iglesia ofrece con toda seguridad al mundo” (2ª CP Int.) Pero es también una palabra profética que denuncia el pecado: “El pensamiento actual de la iglesia siempre es severo con la gravedad del pecado individual; pero la Iglesia de hoy acentúa más que antes la gravedad del pecado por sus consecuencia sociales. La malicia del pecado interior cristaliza en la malicia de las situaciones externas e históricas el pecado social, es decir, la cristalización de los egoísmos individuales en estructuras permanentes que mantienen ese pecado y dejan sentir su poder sobre las grandes mayorías” (2ª CP. I).

Es, ante todo, una palabra que nace de la opción por los pobres: “San Lucas nos presenta en el discurso programático de Jesús, la profecía de Isaías que se cumplía en Cristo: “El Espíritu del Señor sobre mí, porque me ha ungido. Me ha enviado a anunciar a los pobres la Buena Nueva, a proclamar la liberación de los cautivos y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del señor” (Lc 4, 18-19) Esta preferencia de Jesús hacia los pobres recorre todo el Evangelio. La opción por los pobres y las denuncias de pecados públicos le ocasionaron a Jesús frecuentes polémicas, incluso la persecución, y por ello fue condenado y ajusticiado” (2ª CP.II). Es una palabra que no excluye a nadie:

“Sólo realizando así su misión, la Iglesia realiza su propio misterio de ser el Cuerpo de Cristo en la historia. Sólo viviendo así su misión, con el mismo espíritu con que lo viviría Cristo en este tiempo y en este país, puede mantener su fe y darle el sentido trascendente a su mensaje, sin reducirlo a meras ideologías ni dejar que manipulen el egoísmo humano o el falso tradicionalismo” (2ª CP II). A manera de conclusión. Concluimos nuestra reflexión agradeciendo la acogida tan entusiasta que ha tenido el acontecimiento que nos reunirá en torno al altar el 23 de mayo. Y compartimos la opinión generalizada de que esta gracia extraordinaria de poder contar con el primer beato salvadoreño debe marcar un antes y un después.

37. “En cuanto a la opción preferencial por los pobres, no signifi ca esto un rechazo de las demás clases sociales, a las cuales también la Iglesia quiere servir e iluminar y a las cuales también exige su cooperación a la construcción del Reino. Preferencia a los pobres, significa la preferencia de Jesús hacia aquellos que han sido más objeto de los intereses de los hombres que sujetos de su propio destino” (2ª CP II).

Que seamos dignos de la gracia recibida y que nos pongamos de nuevo en marcha hacia un país diferente, del país que Dios quiere y el país por cuya transformación Monseñor Romero entregó su vida.

Es una palabra de una Iglesia encarnada en la historia:

Y que María, nuestra Señora de la Paz, sostenga nuestra esperanza.

† Mons. José Luis Escobar Alas Arzobispo Metropolitano de San Salvador Presidente de la CEDES

Mons. Rodrigo Orlando Cabrera Cuellar Obispo de Santiago de María

Mons. Miguel Ángel Morán Aquino Obispo de San Miguel

Mons. Gregorio Rosa Chávez Obispo Auxiliar de San Salvador

Mons. Fabio Reynaldo Colíndres Abarca Obispo del Ordinariato Militar Vicepresidente de la CEDES

Mons. Luis Morao , OFM Obispo de Chalatenango

Les bendecimos en el nombre de Jesucristo, el Salvador del Mundo.

Mons. Romeo Tovar Astorga, OFM Obispo de Santa Ana Secretario General de la CEDES

Mons. Elías Samuel Bolaños Avelar, SDB Obispo de Zacatecoluca

Mons. José Elías Rauda Gutiérrez , OFM Obispo de San Vicente

Mons. Constantino Barrera Morales Obispo del Sonsonate

Mons. Fernando Sáenz Lacalle Arzobispo Emérito de San Salvador

Mons. Eduardo Alas Alfaro Obispo Emérito de Chalatenango

(continúa semana próxima)

A nuestros lectores

Esperamos sus sugerencias, comentarios o avisos de actividades parroquiales a los números:

2298-6268 o 7737-3760, y su correspondencia a: 1a. Calle Poniente Nº 3412, Col. Escalón, S.S. o bien al correo electrónico:

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La Palabra de Dios para cada semana Lecturas: Ez 17, 22-24; Sal 91, 2-3.13-16; 2Cor 5, 6-10; † Mc 4, 26-34 Preparado por:

Domingo 14 de junio de 2015 • Décimo primer domingo de Tiempo Ordinario • Ciclo “B” • Año I impar

Pbro. Patxi Loidi cirsol6@integra.com.sv

Como una semilla que crece sola Queridas amigas y amigos, saludos fraternales. El Evangelio de hoy nos presenta dos parábolas muy optimistas. Así era Jesús, optimista y entusiasta, incluso en esta fase de su apostolado, en la que ya habían comenzado las dificultades, algunas bien grandes por cierto. En estos tiempos de crisis y poca esperanza nos vienen muy bien estos textos que nos levantan el ánimo. Ojalá nos lo levanten a nosotros.

Previamente se nos presenta una pregunta obligada. El texto afirma que Jesús hablaba a la gente en parábolas, según podían entenderle. Pero luego nos dice que a los discípulos se las explicaba en privado. ¿En qué quedamos: la gente le entendía y los discípulos no? ¿Tan torpes eran? O ¿hay algo raro por ahí? Posiblemente. Sin que podamos afirmarlo con seguridad, da la impresión de que las parábolas fueron –hablo siempre de este Evangelio– un instrumento de semiclandestinidad. Jesús comenzó con un entusiasmo desbordante; pero muy pronto tuvo serios problemas con todo el mundo: fariseos y maestros de la ley; discípulos del Bautista; herodianos; su familia, que quiso llevárselo a casa por considerarlo loco. ¿Será que después evita la confrontación directa hablando en parábolas? Pero sigue anunciando con enorme optimismo el Reino de Dios. Es como una

semilla que crece sola bajo tierra; como un grano de mostaza, que se hace casi un árbol y cobija toda clase de aves. Y es más que la Iglesia, aunque ésta sea su instrumento. Así es la persona convertida al Reino de Dios: crece y crece, internamente con sus valores; externamente c o n s u extensión. ¿Cuánta gente, sin pertenecer a la institución eclesial, vive de los ideales del Reino de Dios y lucha por ellos? Y ¿qué decir de esa esperanza que anida en el seno de la Historia humana y resurge una y otra vez, con gente creyente y no creyente? Permitidme un detalle más. Las cosas de Dios no son tan espectaculares como nos quieren hacer ver determinados eventos grandiosos promovidos desde la altura en los últimos treinta años. Las cosas de Dios empiezan de abajo. Y crecen poco a poco sin espectacularidad, como el grano de mostaza y la semilla que crece sola. Y tú y yo, que somos gente sin relieve, ¿no podríamos hacer hoy mismo un acto de fe como el de Jesús y empezar a sembrar semillas bajo tierra y granos de mostaza? El Dios de Jesús es diferente, ilógico, como estas dos parábolas, y nos resulta extraño… hasta que creemos en Él.

• Del 15 al 20 de junio de 2015 • Lunes 15: 2 Cor 6, 1-10; Sal 97, 1-4; † Mt 5, 38-42 Martes 16: 2 Cor 8, 1-9; Sal 145, 2.5-9; † Mt 5, 43-48 Miércoles 17: 2 Cor 9, 6-11; Sal 111, 1-4.9; † Mt 6, 1-6.16-18 Jueves 18: 2 Cor 11, 1-11; Sal 110; † Mt 6, 7-15 Viernes 19: 2 Cor 11, 18.21-30; Sal 33, 2-7; † Mt 6, 19-23 (Misa de feria) Flp 3, 8-14; Sal 130; † Lc 14, 25-33 (Memoria) Sábado 20: 2 Cor 12, 1-10; Sal 33, 8-13; † Mt 6, 24-34

Plegaria.

Entusiasmo Sonríenos, Señor, con tu entusiasmo contagioso. El horizonte está muy negro. Sólo vemos los rayos que nos manda la tormenta. Necesitamos la alegría de tu Reino, el optimismo de tus bellas historietas. Levántanos el ánimo hasta el cerro, -el monte de tus bienaventuranzasy del monte a la sierra, al firmamento, donde los cóndores pasean majestuosos dominando las sombras de este pobre suelo. Hoy se nos ha marchado el optimismo. Nos cuesta alzar hasta el azul del cielo nuestra vista cansada. Nos arrastramos repitiendo los lamentos tantas veces oídos y leídos. Nos refugiamos en los juegos, que invaden con sus goles nuestras casas. Y entonces apareces tú de nuevo, incombustible, contra la corriente, a sembrar nuevamente tu Evangelio. Y decimos que está muy visto, que lo escuchamos hace tanto tiempo, sin caer en la cuenta de que somos nosotros quienes nos hemos vuelto viejos. Ven otra vez, Señor, sacúdenos, con aquel impetuoso Viento, que devolvió la juventud a los discípulos. Y arderán nuestras almas con tu fuego.

Lecturas de la Semana

Saludos cordiales, queridas amigas y amigos. Hemos entrado de lleno en el llamado Tiempo Ordinario de la Liturgia Católica, que es el tiempo de la Iglesia y del Espíritu Santo. Tenemos hoy dos parábolas optimistas al cien por cien, que reflejan el entusiasmo de Jesús por el Reino de Dios.


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14 de junio de 2015

Diócesis de Sonsonate

Jornada de Formación permanente para el Clero – Pág. 6 – La III Jornada de Formación permanente para el Clero de la diócesis de Sonsonate se desarrolló este 9 de junio.

IGLESIA LOCAL

Mons. Jesús Delgado habló sobre la “Fundamentación magisterial de los medios de comunicación”


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