Durante el sexenio de Calderón y como resultado de su guerra contra el narcotráfico, 25 mil 276 personas adquirieron la imprecisa categoría de “desaparecidas”. Son 25 mil 276 seres humanos que oficialmente no están vivos ni muertos. Simplemente no están. Sólo son cifras, pero detrás de cada una hay una mujer, un hombre o un niño con nombres, apellidos y familias y de quienes hasta la fecha no se sabe nada. Este semanario tuvo acceso a la Base Integrada de Personas no Localizadas y al informe de todas las procuradurías del país, presentado el pasado 17 de julio. Del análisis de ambos documentos surge el primer recuento oficial de los desaparecidos en México, un fenómeno que forma parte de la herencia que, quiera o no, recibe y debe enfrentar el gobierno de Enrique Peña Nieto.