paisaje
becerra arthur arquitectos
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guillermo ashida
1983-2020
paisaje
¿Quién hace al sol ocultarse tras las montañas?, ¿Al río sortear las piedras en su caída?, ¿A las nubes pintarse de oro y naranja, violeta y azul oscuro?... Algo de magia tiene el paisaje que nos subyuga, enigma que nos impulsa a recorrerlo; oculto tras una roca el helecho sacude su cuerpo, a nuestro paso se levantan los insectos y brincan a otra espiga, el agua de la cascada se antoja cercana pero no la vemos, solo se escucha, se huele, se saborea, el misterio existe. Será que paisaje es no lo que vemos, si no aquello que escuchamos y sentimos, las nubes y las montañas, el viento al mover los pastizales, una enredadera y el crujir de los troncos en el bosque, el camino y la banca, la calle y su peldaño, el ladrido de los perros y el olor a pan recién horneado, todo lo que inunda nuestros sentidos es paisaje. Persuasivo, provocativo, inquietante, el paisaje te quita el aliento y hace que te cuestiones la existencia misma de las cosas, instante sublime en que los sentidos pierden la conciencia y son todo instinto. No existe la arquitectura de paisaje, toda arquitectura es paisaje, el paisaje es arquitectura. Hacer paisaje es jugar a imitar a la naturaleza y en el camino, atreverse a dejar un sutil, casi oculto pero a la vez potente, rasgo de voluntad creativa, invocar ese caos ordenado, magnífico azar inalcanzable, brevísimo límite entre lo que la naturaleza dispuso y lo que el hombre propone.
becerra arthur arquitectos + guillermo ashida
Acumulada a lo largo de poco más de treinta años, la presente muestra resume un proceso de imaginación creativa que aprovecha lo que se tiene a la mano para hacer con el mínimo recurso disponible lo más posible. Acostumbrados a colaborar desde hace poco más de diez años, Becerra Arthur Arquitectos y Guillermo Ashida, conjuntan dos perfiles distintos en una búsqueda común: la creación de una realidad aparte, desde la pequeña escala hasta los grandes espacios, la construcción del paisaje es reflejo del universo y a su vez evocación de una utopía. Enigma al que no todos se acostumbran, la creación es un quehacer cotidiano de Becerra Arthur Arquitectos, todos los días se levantan para imaginarse como modelar el espacio, en un proceso similar, Guillermo Ashida, biólogo y paisajista conoce a fondo los secretos de su oficio y permanece inquieto en su búsqueda diaria de nuevas maneras de hacer las cosas. Algún hilo conductor ha de existir tejiendo estas diferentes perspectivas, que provoca una sinergia inquietante, afortunado y virtuoso encuentro de visiones complementarias. Oficio de imaginación y experiencia, invitar a la naturaleza a posarse en una hoja de papel así como a una mariposa en la rama de un árbol, es un desafío trepidante.
Jardín Japonés, Bosque de los Colomos Jalisco 1994
Plaza Las Fuentes Jalisco 2009
Juegos infantiles Guerrero 1984
Ixcateopan de Cuauhtémoc Guerrero 1983
Parque Matute Remus Jalisco 2011
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Parque Metropolitano Guadalajara Jalisco 2009
Parque Natural Cerro del Huizteco Guerrero 1983
espacio público
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Parque San Ignacio Jalisco 2012
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Reserva Cuixmala Jalisco 1989
jardines privados
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El Banco Nayarit 2005
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Hacienda San Antonio Colima 1991
JardĂn del Desierto EdoMex 2014
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Benavento Jalisco 2006
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Rancho Tequilero Jalisco 2014
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Snake Lake Jalisco 2015
Parque Natural Cerro del Huizteco Taxco, Guerrero. 1983 Filigrana de luces y sombras, magnĂďŹ co tobogĂĄn trazado con certeza para caer a la velocidad adecuada en un foso de hojas secas, piedras de colores que detienen el terreno y forman breves patios, retenes de estacas, caminos de piedras, puentes de madera, biombos de lianas, un mundo de duendes en lo profundo del bosque. + Arq. Psj. Betina Roger
Parque Natural Cerro del Huizteco / Guerrero 1983
Ixcateopan de Cuauhtémoc Guerrero. 1983
El pueblo duerme la siesta, al atardecer la caída del sol alarga las sombras sobre las nuevas calles de mármol blanco, piedras sobrantes de la mina cercana, al centro y en un trazo continuo el agua reconoce el dren superficial que corre sobre una línea de teyolote, especie de obsidiana negra-verdosa, un escalón de piedra muestra el esmero en el detalle. + Arq. Psj. Betina Roger
Ixcateopan de CuauhtĂŠmoc / Guerrero 1983
Juegos infantiles Iguala, Guerrero. 1984 Jugar es despertar la imaginación, la vida es un campo de juegos, oportunidad ilimitada de exploración sin fin. En el sitio de juegos reina una realidad alterna, el tiempo transcurre distinto y las cosas pierden su nombre y así un acueducto abandonado no es ni columpio ni resbaladillas, ni mirador ni puente si no todo y cualquier otra cosa al mismo tiempo. + Arq. Psj. Teresa Reyes + Arq. Oscar Reyes
Juegos Infantiles, Iguala / Guerrero 1984
Jardín Japonés, Bosque de los Colomos Guadalajara, Jalisco. 1994 Imitar a la naturaleza, detenerse en su contemplación con fugas visuales y vistas contenidas, el agua como centro de vida, las piedras al borde del lago y como un sistema circulatorio, las veredas no tienen fin. Réplica oficial de uno de los jardines patrimoniales japoneses, por primera ocasión Japón autoriza duplicar el jardín del templo Daigoji-Sanboin de Kyoto, éxito cultural y de atracción turística, en menos de un año triplicó la afluencia al parque de los Colomos. + Asociación de Jardineros y Arquitectos de Paisaje de la Ciudad de Kyoto, Japón.
Jardín Japonés, Bosque de los Colomos / Guadalajara 1994
Plaza las fuentes Zapotlán el Grande, Jalisco, 2009 Restringiendo el paso vehicular a un carril frente a catedral, se logró la recuperación del atrio mediante un diseño de pavimentos en círculos que se integran al jardín central con 5 fuentes danzarinas que al atardecer entre luces y juegos de agua atrapan la imaginación de los niños, la nueva dinámica espacial genera un hito de convivencia social. + BNKR arquitectura
Plaza las Fuentes, Zapotlรกn el Grande / Jalisco 2009
Parque Metropolitano de Guadalajara Zapopan, Jalisco. 2010 Inmenso anillo de tezontle negro, como si fuese un cráter volcánico con tres filas de jacarandas alineadas, cuando sus flores caigan el lila y el negro contrastarán, al centro de la oquedad conviven 3 lagos, el parque es un depósito natural y vaso regulador de los escurrimientos pluviales de la primavera y el cerro del Colli, veredas, carriles de trote y escurrimientos superficiales complementan la intervención. + Harari Landscape Architecture
Parque Metropolitano de Guadalajara / Jalisco 2010
Parque Lineal Matute Remus Guadalajara, Jalisco. 2011 En medio de la ciudad en el cruce de dos vĂas rĂĄpidas surge bajo el puente un parque lineal que juega con la luz del sol y las sombras, la enredadera trepa por las columnas y entre ellas brota la hoja elegante. + ZAP arquitectura + paisaje
Parque Lineal Matute Remus / Jalisco 2011
Parque Lineal San Ignacio-Niño Obrero Zapopan, Jalisco. 2012 Sobre la losa tapa de un túnel vehicular se concibió un parque lineal con lomeríos aprovechando la tierra extraída tras la construcción del túnel. Pabellones cubiertos de enredadera donde el sol juguetea entre las hojas, cubrepisos de colores y pastizales, los tabachines recién sembrados con sus raíces superficiales crecerán y bañarán con sus flores los caminos. La escultura urbana “Guardianes de San Ignacio” fabricada con sobrantes del andamiaje del puente Matute Remus, un skatoparque/ágora y canchas de usos múltiples acompañan los recorridos del parque. + ZAP arquitectura + paisaje
Parque Lineal San Ignacio-NiĂąo Obrero / Jalisco 2012
Reserva Cuixmala Costa alegre, Jalisco. 1989 Cuesta abajo las olas truenan indómitas, se deja escurrir la selva por las escaleras, hacer paisaje no es necesariamente imponer, en ocasiones se trata de reconstruir, encontrar las piezas dispersas de lo que había antes. La intervención aportó principios de restitución con una selección de especies adecuadas al entorno junto al mar, lo agresivo del viento, la sal y la brisa abrasiva en un contexto natural alterado y árido. + Arq. Robert Couturier
Reserva Cuixmala / Jalisco 1989
Hacienda San Antonio Comala, Colima. 1991 Estos corredores tienen memoria y murmuran historias de otros tiempos, teniendo como fondo el volcán de Colima y como lienzo abierto una antigua hacienda cafetalera, se conciben complejos jardines clásicos en fiel interpretación de los lineamientos conceptuales de la escuela europea tradicional. + Arq. Robert Couturier
Hacienda San Antonio/ Colima 1991
El Banco Punta Mita, Nayarit. 2005 El ingreso de este desarrollo demanda especial atención, generar un hito, sembrar en la memoria un instante monumental. Maniobra de trasplante de 200 palmas reales cubanas de 14 metros de altura, esta maniobra evidenció la capacidad de ejecutar obras de madurez de mayor escala, el basamento de dicha composición está conformado por un cuerpo de 2 mil helechos cola de pez. + Arq. Juan Manuel Munguía
El Banco, Punta Mita / Nayarit 2005
Benavento Guadalajara, Jalisco. 2006 La primavera y el guayacán, ceibas, palmeras y sauces llorones, aves del paraíso, papiros y piedras dentro del agua, la orquesta en pleno concierto sinfónico, explosión de carnaval y festín de colores y texturas en el paisaje. + SWA Landscape
Benavento / Jalisco 2006
Jardín del Desierto Nido de Quetzalcóatl, Edo. Mex. 2014 Al alba los primeros rayos del sol bañan los colores exuberantes del mosaico, la coraza piel de serpiente despierta entre espinas, piedras y arena. En un contexto de arquitectura colorida y de formas fluidas, se implementó un jardín de desierto con cactáceas, órganos, biznagas, agaves y rodales de copales y papelillos, arboles de corteza caducifolia. + Arq. Javier Senosiain
JardĂn del Desierto / Edo.Mex. 2014
Rancho Tequilero Amatitán, Jalisco. 2014 Junto a la barranca de Huentitán, el mezquite palo verde luce luminoso con el tierno color de su follaje y las chispas amarillas de sus flores, contrasta con la tierra, las piedras y los grises verdosos de mezcales y magueyes, en respeto al contexto rural se planea una intervención con vegetación endémica, que pasa casi desapercibida y a la vez deja en claro la voluntad de composición, movimiento y atmósferas, términos comunes en el vocabulario del paisaje. + Arq. Juan Palomar
Rancho Tequilero / Jalisco 2014
Snake Lake Bosque de la Primavera, Jalisco. 2015 En las tardes cargadas de lluvia se oye cantar al lago, cuando la lluvia pasa queda el olor de los huizaches mojados, sus maderas y la tierra que destila aromas a jazmín y lavandas, incrustado en el bosque de la primavera, crear un lago que parezca que siempre ha estado ahí, de tal sutileza la intervención como si no estuviese así pensado. Al despertar el día la bruma se eleva somnolienta acariciando por última vez la superficie tersa del agua.
Snake Lake / Jalisco 2015
Desde un jarrĂłn con alcatraces sobre la mesa hasta la sombra de un sauce llorĂłn a orillas del estanque, la contemplaciĂłn y el disfrute del paisaje es inherente al espĂritu humano, complemento gozo y placer de estar vivo
Guillermo Ashida es un hacedor de paisajes, biólogo por la Universidad Autónoma de Guadalajara con estudios de postgrado en Chapingo Estado de México, en el Campus Davis de la Universidad de California, en la Universidad de Hawaii y en la Asociación de Paisajistas y Jardineros de la ciudad de Kyoto, Japón. La biología es el sustento científico que le da una plataforma segura para sus planteamientos estéticos, su mirada ha sido atrapada por el mundo vegetal, esas pequeñas y grandiosas cosas vivas que nos rodean como el color de una flor, la textura de un tallo, el movimiento de las hojas por el viento, el olor de la tierra después de la lluvia. Heredero de tradiciones ancestrales, es blanco fácil de la crítica académica que no nos permite brincar las trancas, es en esa búsqueda de lo inédito en el paisaje donde el valor de Ashida finca sus reales: amontonar una veintena de ceibas majestuosas en 10 metros cuadrados en contra de todos los cánones aceptados, armar ramilletes de varios árboles inclinados que a la larga parezcan ramas de un solo árbol, son algunos de sus recursos favoritos. Poco importa si es su invento o si lo aprendió en el camino, lo importante son sus ojos y su atrevimiento, si lo aprendió por su curiosidad inquisitiva o en una caminata por la selva lo valioso es que lo recrea y lo lleva a cabo, se atreve a la diferencia, tan acostumbrado está a faltarle el respeto a lo común y corriente. “Su arte provoca y desafía, reinterpreta y reconstruye, su mayor motivación es reconocerse en el origen del proceso creativo, allí habita su historia, abreva de la imaginación” (Consuelo Saizar acerca de Gabriel Orozco). Si algún reclamo se le puede adjudicar a Guillermo Ashida es la exuberancia de pensamiento, demasiadas ideas al mismo tiempo, despliega términos y palabras cuando de improviso brotan nuevas intenciones, es como cuando se desgrana una piñata y hay que atrapar las frutas/ideas al vuelo.
Hay un afán que existe, inquietante y cotidiano en Becerra Arthur Arquitectos; aquel por lograr el mejor resultado en todo lo que se inicia, un instinto de hurgar en las emociones que les lleva a explorar cada proyecto como un reto único, oportunidad de provocar atmósferas y situaciones que nacen de una historia soñada, poner los sentimientos a flor de piel, sacudirse los prejuicios para dejar volar libre la imaginación, no hay fórmulas previstas ni respuestas preconcebidas, es el recorrido en el sitio y lo que la intuición nos dicta, contar el cuento que sucederá mañana, dejar el escenario preparado para que se despliegue la realidad que deseamos; la bruma, la luz, los planos del paisaje, el ambiente se concibe en el inconsciente antes que en papel como una película que aún no hemos visto o quizás una memoria. Acostumbrados a dialogar con el atrevimiento, sus obras provocan emoción y sorpresa, enigma y arraigo, ingredientes esenciales del encantamiento que el paisaje y el espacio necesitan para sobrevivir al olvido. Becerra Arthur Arquitectos es un despacho de arquitectura y diseño integral liderado por Manuel Becerra Arthur (Arq./UNAM/1979) y Adrian Becerra Villaseñor (Arq./ESARQ/2014). El despacho aprovecha las cualidades de sus integrantes asegurando un proceso de experimentación donde la experiencia se entrelaza con la innovación en cada día del taller.