

Aquella noche, mientras Masela, la mamá de Iluku, la trenzaba, ella preguntó:
—Mamá, ¿por qué las mujeres tenemos la regla?
—Pues nadie sabe la razón, pero quizás este cuento nos dé alguna respuesta…
—¡Sííí, chicos, hora de cuento! —exclamaron emocionados.

Matías, Santi e Iluku se sentaron en círculo para ver bien los dibujos. Pepe, el papá, también se acercó a escuchar el cuento tradicional.
—Esta es una historia antigua, casi, casi ancestral —dijo Masela con aire misterioso.

Cuentan que, en aquellos tiempos, las hijas de Mololo, Seliky y Dolachei, vivían en uno de los pueblos de Eone.
Kombwé se llamaba; un pueblecito rodeado de cacaotales y bañado por las grandes olas del océano Atlántico.
r Escucha y vive Kombwé: el ritmo de la naturaleza en la canción 1.
