En lo más hondo del subsuelo, donde no llega la luz del sol, vive Sócrates, un pequeño y muy ambicioso ratón.
Sueña con subir allí donde todos temen, dicen que hay peligros y que muy pocos vuelven. Pero él se niega a pensar que no hay nada bueno en aquel lugar; por el contrario, imagina un paraíso sin igual.
Sócrates emprende el gran viaje de ascensión y se frota los ojos cuando ve por primera vez el Sol. Entre las rendijas de la alcantarilla escucha el ruido extraño, ¡era tan diferente a aquel lugar subterráneo!