La propuesta expositiva de Emilio Narciso se vale de argumentos diversos para reflexionar su experiencia cotidiana, relacionada con el entorno geográfico y la historia del arte universal. De esta manera, establece diálogos y correspondencias entre la tradición moderna del paisaje y las estrategias abstracto geométricas, para configurar un discurso visual híbrido que trasciende el diálogo revisionista de estas tendencias.
Su obra se centra en la representación de la naturaleza de la luz como fenómeno físico y simbólico, haciendo énfasis en los principios de serialidad, repetición y superposición de elementos estructurales; en las transparencias, en el ritmo de las armonías cromáticas y en el equilibrio de las proporciones.
Desde una perspectiva anímica, individual e intransferible, la mirada fragmentada del artista sobre el paisaje queda revelada mediante técnicas y procesos mixtos incorporando en su práctica, el fotomontaje digital, la inmediatez de la fotografía instantánea.
Ruth Auerbach
