BATATA ARGENTINA. UN OPCIÓN DE IMPORTACIÓN EUROPEA. Con 600.000 hectáreas de cultivos comerciales hortícolas, más de ciento quince especies cultivadas, una producción de 10.500.000 toneladas, la horticultura Argentina se presenta a Europa como un sector en constante crecimiento, innovación y desafíos. El cultivo de batata posee una historia que pueden contar y memorar los abuelos agricultores argentinos, que desde siempre han contado con la inmensidad y diversidad de sus suelos y climas, la aptitud de sus aguas de montañas, la investigación y transferencia, el saber hacer de sus profesionales y el posicionamiento estratégico en contra-estación que sitúa a la Argentina como una tierra de facultades concretas para cruzar el charco y desembarcar en los expectantes mercados europeos. En diciembre del año pasado junto a empresarios españoles de alto conocimiento de este cultivo, he realizado una gira técnica y comercial enseñándoles de forma directa los sistemas, detectando llaves productivas y perfiles de negocios de producto batata. Al recorrer el largo y ancho del territorio, uno encuentra que la batata esta difundida con una logística presentida en regiones de mayor concentración en cuanto a producto, superficie y estructura de procesamiento, al contrario de esto los institutos, universidades o centros de investigación y tecnología están inmersos y vinculados en cada rincón productivo del país. Los mercados/subastas de centralización de las hortalizas y frutas (44 mercados a nivel nacional) están localizados como satélites a las grandes urbes de consumo, distribuyendo internamente batata todos los días del año. Relevando estadísticas observo que en décadas anteriores la Argentina sembraba más de 20.000 ha de batata y en la actualidad se estima que se plantan una superficie de 11.500 ha, arrojando una producción total anual de 128.520 Tn. de las cuales unas 19.500 Tn. se comercializaron en el Mercado Central de Buenos Aires. El consumo en los años 90 en Argentina alcanzaba los10 kg por habitante pero causas globales, socioeconómicas, productivas y de promoción han provocado un retroceso del consumo hasta los 3,10 kg / per capita (92% raíz fresca) y un descenso constante en superficie productiva. Por mencionar las épocas de plantación encontramos que hay cuatro bien definidas, la Temprana que comienza en el mes de agosto y septiembre, la de Estación que es a partir de la segunda quincena de septiembre, octubre y noviembre, la Tardía en el mes de diciembre, enero y febrero y la época extra tardía en el mes de febrero y marzo. Las fincas poseen superficies que van de 5 a 150 ha, con clara tendencia a la concentración y desaparición de pequeños agricultores. En cuanto a las variedades mas difundidas son las de piel morada y blanca/crema con pulpas amarillas y blancas que pueden tener un ciclo que
varía entre 120 y 150 días desde su plantación, cuya densidad de plantas ronda entre 25.000 a 35.500 por hectárea, dependiendo de varios factores como son el largo de las guías, herramientas, línea simple o doble y fertilización. La plantación se realiza de forma manual en agricultores pequeños y mecanizada dotada con inyección de agua y apoyo manual en los grandes. La rotación de cultivos es una acción habitual, dado la planificación en conjunto con cereales y disponibilidad de tierras. En relación a los rendimientos, los mismos varían entre 14000 a 25000 kg/ha de acuerdo a las regiones, fechas de plantación, manejo del cultivo, tecnología, variedades y otros.
La forma de llevar adelante la comercialización por parte de los agricultores es elemental, carecen de asociaciones, grupos o cooperativas representativas y especialista en el producto. Un gran porcentaje de los agricultores venden su producto directamente en la finca, previo a su recolección, obteniendo precios muchas veces por debajo de sus costos. Existen contados agricultores con grandes superficies que procesan y comercializan por su cuenta en el Mercado Central de Buenos Aires Los acopiadores son los que se llevan el papel protagónico, son sin duda los que poseen la sartén por el mango, se encargan del lavado, clasificado, embolsado y comercialización del producto. El formato más habitual de comercialización interna es en bolsas de 20 - 22 – 25 y 30 kg, cada una según la región de venta. En los negocios minoristas se vende a granel, en los supermercados el formato es en bolsas de red de 1 kg. Las exportaciones argentinas de batata en los últimos años según registros no actualizados se acercan a las 200 toneladas anuales. Las mismas se realizan en bines de madera tratada o de cartón rígido de diferentes pesos. Las certificaciones de calidad y seguridad alimentaria en este producto están ausentes, como también diferenciación por calidad, categorías y el uso de herramientas de marketing. Cabe destacar, las aptitudes innatas de la Argentina para la producción orgánica de este producto y otros. El desarrollo de variedades de pulpa anaranjada en el país es incipiente, en crecimiento y con un alto impacto exportador. El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) lleva adelante la investigación de clones con mejoras en cuanto a color de pulpa, nutrición y salud (antioxidantes), calidad culinaria y productividad entre otros objetivos. El INTA ha evaluado Beauregard en varias localidades del país con resultados satisfactorios. Cabe destacar la carencia de maquinaria adecuada para el lavado y procesado de las variedades de piel delgada.
Como conocedor del mercado argentino y del producto, sumado al proyecto de desarrollo, investigaciรณn y comercializaciรณn que impulso en la provincia de Santiago del Estero (aporta casi 17% de la producciรณn nacional de hortalizas), considero importante tomar en cuenta la capacidad tecnolรณgica para obtener producciones de altos rendimientos, el perfil de sus suelos arenosos, la adaptabilidad de variedades de pulpa anaranjada, la factibilidad y competitividad de los costos de producciรณn, una calidad รณptima de producto entre algunos de sus pilares diferenciales. La Argentina posee un creciente y sรณlido potencial de exportaciรณn con destino a Europa de variedades de batata de pulpa anaranjada avalado por la gestiรณn empresarial de sus agricultores, la ventana de contra-estaciรณn, la competitividad en precios internacionales y la denominaciรณn de calidad de sus productos. Mariano Larrazabal Manager โ Bialar mlarrazabal@bialar.com www.bialar.com