LA CALIDAD EMPIEZA POR TRABAJAR EN EQUIPO. En la globalización empresarial actual, contar con certificaciones de Sistemas de Gestión de Calidad se ha transformado más que en una posibilidad de mejora de procesos y despegue comercial, en un verdadero requerimiento. Es por esta causa, que empresas de amplios sectores y escalas, disputan entre si por obtener las certificaciones pertinentes acordes a su objetivo comercial. Contamos con libros, expertos, eventos y recomendaciones que aspiran a enseñarnos como trabajar la calidad en una empresa, pero la mayoría de ellas nos resultan decepcionantes ante nuestras expectativas, generando un sentimiento de frustración cuando se quiere adaptar la información a la realidad del sistema.
La causa principal del fracaso es el error de las actitudes personales. En calidad la frase “trabajar en equipo”, seguramente es una de las mencionadas en más ocasiones por los gerentes de las empresas. Es muy marketinero decir: …….."Yo, en mi empresa, siempre trabajo en equipo". Pero si seguimos hablando, seguramente terminaría de esta forma la conversación: - ¿Qué haces para trabajar en equipo en tu empresa? - Me reúno muchas veces con mis empleados y les pongo al día de las decisiones que tome o voy a tomar. De vez en cuando me dan su opinión, habitualmemte para consensuar lo que vamos a hacer. - ¿Quién dirige las reuniones? - Yo, sino quién. Soy el Gerente de la empresa. - ¿Y cómo se realizan los acciones acordadas en las reuniones? - Cada uno sale conociendo muy bien lo que tiene que hacer. Yo les controlo. Les lanzo una pregunta… ¿Consideran esto trabajar en equipo? A mi parecer, lo que hemos descubierto, es sólo un grupo de trabajo dirigido por un jefe. De esta situación al verdadero TRABAJO EN EQUIPO, hay una gran distancia y abismo. Esencialmente, en calidad, el buen trabajo en equipo, es una cuestión de actitudes personales, más que de herramientas.
Muchos gerentes saben poco sobre dinámica de grupos. Ponen sus esfuerzos en dirigir a individuos en lugar de generar equipos eficaces. Es algo antagónico, ya que los gerentes pasan casi todo su tiempo realizando actividades en grupo. Un insecto, cualquiera de ellos, posee más probabilidades de supervivencia en medio de una selva que un ser humano solo. Tenemos que pensar en nuestras limitaciones, los humanos estamos obligados y predestinados a trabajar en equipo, somos dependientes e interdependientes. Si nos paramos hacer memoria se nos vienen a la cabeza las siguientes frases o pensamientos: Yo soy el mando, yo necesito tal cosa, hoy ganamos gracias a mí, el proyecto fue un éxito porque lo hice yo, menos mal que estaba ahí, esta empresa sin mí se va al tacho, si este negocio sale mal es por culpa de..... Siempre el Yo por delante. La falta de autocrítica, es el eslabón perdido. Es fundamental realizarla para poder avanzar en un crecimiento sostenido y lograr la superación personal y laboral. Desde pequeños en la escuela, en el club nos alientan a ese individualismo para ser abanderados, por ganar torneos, por ser los mejores, y ya de grandes no entendemos porque eso tenía más valor que ser el mejor compañero, el más comunicativo, expresivo o el más solidario. Un equipo se construye sobre la base de las coincidencias pero aceptando las discrepancias, con el sentido de similitud que no es el de igualdad, con el propósito y satisfacción de pertenencia, con metas concretas de equipo, el respeto en común, con la comunicación y asertividad. Con las responsabilidades claras y dinámicas y una actitud compartida. El gerenciamiento de la calidad, su compresión e implementación parece demasiado complejo y estructurado. En cambio, el verdadero significado del manejo y aplicación de la calidad se basa en principios y prácticas que son parte de una manera de hacer las cosas para convertirlas en hábitos eficaces que facilitan la tarea diaria. El inicio de cualquier programa de calidad comienza con la implementación de prácticas comunes en un equipo de trabajo. Una vez conseguido el equipo ya podremos incorporar cuántas herramientas se quieran o requieran, con la seguridad de un correcto funcionamiento. Mariano Larrazabal Manager – Bialar mlarrazabal@bialar.com www.bialar.com Autor:
Consultor Internacional en Cultivos Intensivos – Bialar.