UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA DE EL SALVADOR FACULT AD DE EDUCACIÓN ESCUELA DE SA LUD Y MEDIO AMB IENTE
FACTORES QUE INFLUYEN EN LA INSERC IÓN LABORAL DE LOS JÓVENES VINCULADOS A LA VIOLENC IA O A LAS MA RAS, QUE HA N SIDO CAPAC ITA DOS EN EL CENTRO DE FOR MAC IÓN Y OR IENTAC IÓN PADRE “R AFAEL PALA CIOS” DE LA IGLESIA CA TÓLIC A DE MEJICANOS; AÑO 2006.
INTEGRAN TES: MARIN A GUA DALUPE TOVAR FLORES REINA ELE NA C ARR ILLO CARR ILLO ROBERTO GUAR DADO ME NJÍVAR
PARA OPTAR AL GRADO DE: LICENC IATURA EN TR ABAJO SOCIAL
SAN SALVADOR , M ARZO DE 2007.
AUTO RIDADES UNIVERSITARIAS
________________________. ING. LUIS MAR IO APAR ICIO RECTOR
_________________________________ LICDA . CATA LIN A M ACHU CA DE MERINO VICE RECTOR A AC ADÉMICA
_________________________________ LIC. JORGE ALBER TO ESCOBAR DECANO DE E DUCA CIÓN
MIEMBROS DEL JURA DO CA LIFICA DOR
__________________________________. LIC. SANTOS ANTON IO RAM ÍREZ AZC UNAGA PRESIDENTE
_________________________________. LIC. SALVADOR ELÍAS JOYA 1 er. VOCAL
__________________________________. LICDA . MARINA DEL C ARMEN CAM ACHO 2 da. VOCAL
ASESOR DE TESIS
__________________________________.
LIC. ROGELIO DE JESÚS FIGUEROA LA RA
AGRADECIM IENTOS DE L GRUPO
A
la
Univers idad
Pedagógica
de
El
Salvador
por
formarnos
profesionalmente en nuestra carrera. Al Centro de Form ación y Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia
Católica
de
Me jicanos:
por
permitirnos
realizar
nuestra
investigación y apoyarnos en el proceso. Al Licencia do Roge lio de Jesús Figueroa La ra: Asesor de nuestra investigación. Al Jura do Evaluador: Por habernos brindado sus conocimientos en cada avance de nuestra investigación, de manera especial al Licenciado Santos Antonio Ramírez Azcúnaga, quien nos brindó su apoyo y comprensión en todo momento
A todos m uchas gracias.
Marina Guadalupe Tovar Reina Elena Carrillo Carrillo Roberto Guardado Menjivar
DEDICA TORIA
Este trabajo lo dedico en primer lugar a Dios Todopoderoso que me brindo la sabiduría y la fuerza para culminar mis e studios y lograr mis propósito s. A mis Padres Joaquín Tovar y Rosa Ester de Tovar por su apoyo y esfuerzo incondicional que me brindaron siempre en las alegrías, tristezas y en mis momentos de desmayo para lograr mis meta s. A mi Mamita Marina motivo por el cual estoy aquí logrando mis éxitos; mis hermanas y hermanos por haberme apoyado moral y económicamente para llevar a cabo mis sueños. A mi futuro Esposo Joaquín Bondanza que me apoyo en los momentos de angustia dándome fuerzas para continuar y sobre todo contar con su amor. A mis Amigos y Amigas a quienes les agradezco que estuvieron de forma indirecta conmigo Gracias por todo. A Mis Compañeros de Tesis Reina Elena y Roberto Guardado por los momentos de alegrías, enojos y sobre todo por el de nuestro triunfo.
Marina Gua dalupe Tovar Flores
DEDICA TORIA
Quiero dar Gracias a Dios Todopoderoso por haberme dado sabiduría y fortaleza para alcanzar mis metas propuestas.
A mis Padres Don Sebastián Carrillo y Doña Natalia de Carrillo por haberme apoyado moral y económicamente en toda mi carrera y en todo momento para alcanzar mis objetivos, por impulsarme siempre a seguir adelante a pesar de las dificultades.
A mis Hermanos: Luis Orlando, Blanca Senaida, Ana María, Manuel Humberto, por haberme apoyado siempre y en todo momento.
A mis compañeros de tesis Marina Tovar y Roberto Guardado.
Reina Elena Carrillo Carrillo
AGRADECIM IENTOS:
A Dios Todopoderoso: por darme inteligencia y fortaleza en todos los momentos difíciles de mis estudios. A Mi Esposa Reina Doris Cartagena: por ayudarm e en todo momento. A Mis Hijos Héctor Salomón, Roberto Josué y David Alejandro por comprenderme en mis ausencias a causa del estudio. A Mis Padres Juan Ramón Guardado y María Aracely Menjivar por sus oraciones y apoyo moral en todo momento. A Mis Hermanos: Ana Gladis, Bety, Fredy y Oscar René; de manera especial a René por brindarme apoyo y hospitalidad en su casa, a Fredy por brindarme en muchos casos transporte y comprensión en horas nocturnas. A Mis Suegros Elisa y Alfonso también por su apoyo. A Mi Cuñada Daisy Esther por su apoyo, igual que a su esposo Ricardo Ebim por su comprensión y consideración en mi trabajo. A Mis Amigos y Amigas que de una u otra manera brindaron su apoyo y me inspiraron. A Mis Compañeros de Tesis Reina Elena Carrillo y Marina Gu adalupe Tovar por los duros y gratos momentos que vivimo s.
De Verdad Muchas Gracias,
Roberto Guardado Menjívar
ÍNDICE Contenido
Páginas
INTROD UCC IÓN ............................................................................................. i CAPITULO I: MAR CO CONCEPTUAL .............................................................1
1.1. Ante cedentes del Problema ......................................................................1 1.1.1. Origen de las Maras ............................................................................1 1.1 .2. Re spuestas del E stado ante el fenómeno de la violencia .................................................................................................. 7 1.2. Justifica ción .................................................................................................14 1.3. Planteamiento del Problema .....................................................................15 1.4. Alcances y Limitaciones .............................................................................21 1.5. Recuento de conceptos y categorías ........................................................26
CAPITULO II: MARCO TEÓR ICO .....................................................................29
2.1. Fundamentación teórico metodológica ......................................................29 2.2. Construcción del marco e mpírico ..............................................................40 2.2.1 . Hallazgos ...........................................................................................40 2.3. Formulación teórico metodológica de lo investigado.. .............................68 2.4. Desarrollo y definición teórica ....................................................................72
CAPITULO III: MAR CO OPERATIVO
3.1. Descripción de los sujetos investigados ....................................................76 3.2. Procedimiento para la recopilación de datos ............................................77 3.3. Desarrollo de la prueba piloto ....................................................................79 3.4. Técnica s para el análisis de da tos .............................................................80 Recursos Humanos y logístico s ........................................................................81
Cronograma de actividades ...............................................................................82 4. Indice preliminar del informe final .................................................................83 BIBLIOGRAFĂ?A .................................................................................................88 ANEXOS............................................................................................................90
INTRODU CCIÓN
La violencia es un fenómeno social que se encuentra presente en la vida de todo ser humano, incluso antes de nacer ya está en algunos casos marcando la vida del futuro ser, sobre todo en aquellos hogares donde la violencia es cotidiana.
La violencia, siendo un paradigma que se practica, se sufre y se observa a diario, trunca vidas y provoca muertes.
El desarrollo óptimo del sector juventud es el único camino viable para frenar y detener este terrible fenómeno que presenta múltiples expresiones y que no son más que un reclamo implícito a la sociedad salvadoreña por la desatención y falta de una visión integral de desarrollo humano hacia los jóvenes, ya sea por la familia o el Estado.
Por
esta
razón
el
grupo
de
investigadores
del
área
social,
específicamente de la Licenciatura en Trabajo Social de la Universidad Pedagógica de El Salvador, realizó la presente investigación, para conocer como se manifiesta este fenómeno en un grupo de jóve nes que reciben capacitación en el Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica del Municipio de Mejicanos.
Los esfuerzos de esta Iglesia se orientan a capacitar a esto s jóvenes como una forma de insertarse en la vida so cial y convertirlos en personas útiles a su grupo familiar y a la sociedad en general; pero sobre todo tratar de disminuir en ellos esas acciones de violencia que caracterizan a estos grupos. i
El presente trabajo se ha dividido en tres apartados capitulares; el primer capítulo es el Marco Conceptual; el segundo capítulo es el Marco Teórico y el tercer capítulo e s el Marco Operativo.
El primer capítulo se inicia con los antecedentes del problema, en donde se describe el surgimiento de estos grupos y su evolución hasta los momentos actuales en los que su incidencia en la vida social es preocupante.
Se trabaja en este mismo capítulo la justificación de la investigación como una necesidad sentida ante el flagelo de la violencia juvenil desde e l punto de vista del Trabajo Social.
En el planteamiento del problema se trabaja la situación problemática del fenómeno de la violencia juvenil y la falta de interés del Estado por atender a los jóvenes de manera integral, capacitándolos y reinsertándolo s a la vida laboral y productiva.
Al final de este capítulo se presentan los alcance s y limitaciones de la investigación, así como , el recuento de lo s concepto s y categorías utilizadas en la presente investigación.
En
el
capítulo
dos
se
presenta
la
F undamentación
–
Teórico
Metodológico en el cual se desarrolla el planteamiento teórico que han realizado algunos autores para explicar el fenómeno investigado; entre ellos: Martín Baró que explica los factores que desatan los actos violentos; Reiss y Roth que
ii
define la violencia como el comportamiento interpersonal que intencionalmente amenaza, atenta o de hecho inflige un daño físico. El numeral 2.2. hace referencia a la construcción del Marco Empírico, en el cual se presentan los hallazgos del trabajo de investigación; con la información recolectada a través del cuestionario, la guía de entrevista y la guía de observación. En el numeral 2.3. se trabaja la parte referida a la formulación teórico – metodológico de lo investigado, es decir, los grupos de ma ras, la violencia y finaliza con algunas conclusiones propias de este grupo. Siempre en este capítulo se deja señalado el desarrollo y definición teórico
propia
de
esta
investigación
elaborada
por
este
equipo
de
investigadores apoyada en la metodología y teoría propia del Trabajo Social. El capítulo tres se refiere al Marco Operativo, que contiene la descripción de los sujetos, con una descripción inicial, es decir, se partió de que todos integraban grupos de maras y que desarrollaban acciones de violenci a. Sin embargo finalizada la investigación se valora que no todos los jóvenes son integrantes de maras y por tanto no todos desarrollan acciones de violencia. Significa que como grupo de investigadores se tiene ahora una percepción diferente de estos jóve nes. En el numeral dos se trabajan los instrumentos utilizados para la recolección de la información, la fórmula para determinar la muestra y las primeras valoraciones de los sujetos que se entrevistaron, el género en que se ubicaron, la aceptación de pertenecer a un grupo de maras, así como los sujetos que han buscado su incorporación en un trabajo. En el numeral 3.3. se especifica que este equipo de investigadores valoró la necesidad de realizar la prueba piloto, ya que ello permitió mejorar el instrumento. iii
En la parte última de e ste capítulo se describen las técnicas utilizadas para el análisis de datos, contiene también el detalle de los recursos humanos y logísticos que fueron necesarios para desarrollar este trabajo de investigación.
También forma parte de este capítulo el cronograma de actividades, en el que se muestra las actividades de la investigación documental y las a ctividades de la investigación de campo.
Por último se agregan varios anexos, entre ellos: el cuestionario, la guía de entrevista, la guía de observación, papelería del centro y las fotografías que dan fe de este trabajo realizado; así co mo la carta de la Universidad solicitando el permiso para desarrollarlo.
iv
CAPITU LO I. MA RCO CON CEPTUAL
1.1. Antecedentes del problem a 1.1.1. Origen de las m aras
Existen muy pocos documentos que dan cuenta de los orígenes exactos de las maras, sin embargo ya por la década de los años 50 y 60 del siglo pasado existían ciertos grupos constituidos por jóvenes pertenecientes a diferentes centros educativos de la capital que expresaban rivalidad relacionada con los resultados de los partidos de básquetbol en lo que estos jóvenes participaban; a estos grupos se les reconocía como mara estudiantil. Los enfrentamientos tenían lugar en la calle pero sin mayores consecuencias. Por otro lado, también se daba el caso de diferentes grupos de amigos o vecinos que se reunían en sus colonias o barrios para jugar, platicar u organizar diferentes actividades, sin que e sto implicara que e stas personas perteneciera n a un grupo determinado o se organizaran para delinquir. Tampoco se sabe en qué momento estos grupos de amigos o estas “pandillas estudiantiles” comenzaron a desarrollar
las características de las
pandillas callejeras actuales, tales como el uso fre cuente de la violencia y las prácticas de tipo delictivo, son los antecedentes mas directo s de lo que ahora se conoce como pandillas callejeras o maras. Hasta finales del conflicto armado (1981 – 1991), el tema de la s maras tenía poca relevancia en la opinión pública, ya que las acciones que en la capital se desarrollaban se relacionaban con los comandos urbanos de la guerrilla, pues se estaba en guerra; será en la década de los años 90, como resultado de la firma de los Acuerdos de Paz que las acciones de los comandos urbanos ya no se realizan, quedando al descubierto las acciones que las maras
realizaban, ya no eran de la mara estudiantil, sino que, se habían conformado la MS y la 18, integradas por algunos miembros de la mara estudiantil. Los investigadores Cruz y Portillo (1998), sostienen “que a pesar de la dificultad de determinar o distinguir los factores causales de aquellos que sólo se asocian al surgimiento de estos grupos es posible enumerar una serie de factores que están relacionadas con el fenómeno. Tales factores pertenecen a distintas ca tegorías, ya sean: estructurales, medio ambientales, personales, familiares, comunitarios, políticos y económicos,”
1
La pandilla de la calle 18 surge en los Estados Unidos según los mismos pandilleros es la que tiene mas larga trayectoria, surge aproximadamente por los años 50 como parte del movimiento de pandillas, dentro de la dinámica del movimiento chicano del Sur de California. Este movimiento buscaba la defensa de los derechos de la minoría hispana radicada en los Estados Unidos que no era protegida frente a las actitudes de racismo y de conducta social de los sectores
de
la
sociedad
norteamericana.
De
e sa
forma
los
jóvenes
latinoamericanos que emigraban a esa zona se integraban a dicha pandilla, la cual contaba en su mayoría con mexicanos.” 2 A principios de los años ochenta, con la masiva emigración y asentamiento de
salvadoreños
en
los
Ángeles,
toma
cuerpo
otra
pandilla
que
se
autodenominó Salvatrucha, por el origen de sus integrantes y como un inte nto por definir su origen étnico frente a la diversidad de nacionalidades. El enfrentamiento declarado entre ambas pandillas, la mara Salvatrucha y la pandilla de la calle 18 (Los Angeles, Estados Unidos) , no toma lugar sino hasta comienzos del año 1990.
Cruz José M iguel, Portillo Peña Nelson. “Solidaridad y Violencia en las pandillas del gran San Salvador; más allá de la vida loca” UCA – Editores El Salvador. 1998. Pág. 156 2 Op. Cit. Pág. 56 1
Por otra parte, el control de territorio está asociado al control que la pandilla ejerce en un área determinada; y tiene que ver además con los grafitti y todas aquellas manifestaciones de poder territorial que la misma ostenta y que en ningún m omento está dispuesta a ceder o permitir que sea invadida o violentada por otra pandilla o miembro contrario. Es tal el celo por el territorio, que incluso llegan a protagonizar riñas y balaceras propiciando consecuencias fatales. En los momentos actuales, la sociedad salvadoreña está siendo castigada por la delincuencia y el crimen , como puede constatarse, en los medios de comunicación social, puesto que se levanta de frontera a frontera y la vida humana y demás bienes jurídicos son irrespetad os de manera tal que la sociedad vive bajo signos de constante violencia e inseguridad, desde delitos de mínima cuantía hasta los más horrendos crímenes contra la vida, la in tegridad personal, violación sexual y otro s. La sociedad salvadoreña día tras día es conmovida por las imágenes de muertes violentas y otros graves hechos delincuenciales, en donde la inseguridad ciudadana es la nota del día, a nadie escapa que los jóvenes aglutinados en Maras o pandillas cometen estos actos ilícitos, que transgreden el orden jurídico y la tranquilidad de las personas; sus acciones van desde pedir una “cora”, que es equivalente a $0.25 hasta asaltar a mano armada para obtener dinero con el que posteriormente adquirirán droga, como: marihuana, cocaína, crack y otras. Sin mencionar que en los
últimos meses según los
medios de comunicación (Radio y T.V.) se han dedicado a la tarea de extorsionar a personas, negocios, rutas de buses y microbuses, etc. e incluso asesinan a quienes no acceden a sus peticiones eco nómicas. Vale aclarar que en algunas circunstancias los mismos empresarios han sido utilizados para contribuir a las extorsiones.
La extorsión, el tráfico de droga y el crimen organizado son las principales fuentes de ingresos económicos de e stos grupos, por lo que pagan cualquier favor recibido. La violencia en El Salvador, muestra la incapacidad del Estado
para
generar instrumentos de integración social, ejercer au toridad y administrar justicia. Además, hace evidente, la marginación y la exclusión social; e s decir, que las instituciones del Estado excluyen de toda actividad y desición a estos jóvenes quienes al final generan la violencia juvenil. violencia en: “política,
El Conferencista Rosales Carlos, clasifica la intrafamiliar (aquí se da so bre todo a mujeres,
niños, niñas y ancianos),
violencia sexual (a niñas y mujeres), laboral (mujeres y niñas) en medios de comunicación, violencia común y violencia intelectual.”
3
Para muchos entendidos en la materia el ciclo de la violencia inicia en la familia (intrafamiliar), ya que es ahí donde se adoptan los primeros patrones de respeto o irrespeto, es el lugar donde se forma y moldea la personalidad del individuo, y es esta personalidad con la que se presentará el joven ante la sociedad. Por otra parte, es importante delimitar el costo social de la violencia , que para la autora Gloria Mirian Rubio (1998) lo define como “Los traumas causados por la violencia, tanto en la violencia que conlleva a la muerte, como en la que no, pero siempre hay un trauma social.” 4 La pérdida irreparable de un ser humano, es un costo social de la violencia , que no se puede medir en términos monetarios como lo hacen los economistas. Los daños físicos, los trastornos
3
VIII Coloquio, Violencia y Salud. Universidad de El Salvador, Facultad de M edicina del 23 al 27 de nov. 1998. P. 14 4 Op. Cit. P. 84
psicológicos que limitan temporal o permanentemente la
capacidad del
individuo o la funcionalidad de una sociedad, son costos difíciles de medir”. Por otra
parte, la
población
salvadoreña
históricamente
ha
sido
desatendida por el Estado en cuanto a la satisfacción de sus necesidades mas fundamentales; además los jóvenes al no tener acceso a la escuela, a una fuente de empleo se van sintiendo marginados, generando un resentimiento social, que trasciende a los niveles ideológicos y políticos. La población rural principalmente y la urbano -marginal, enfrentó estas situaciones de una sociedad agraria exportadora, con claras estructuras autoritarias que han sometido y excluyen de la participación en las decisiones nacionales a estos sectores, lo que generó la pobreza rural, agravada con los doce años de conflicto armado. El conflicto armado de (1981 – 1991), sirvió como disolvente de aquella sociedad autoritaria y de las escasas estru cturas sociales que regulaban e integraban a la población; además, los desastres socionaturales, es decir, aquellos provocados por la intervención del hombre han generado otros problemas, entre ellos: la desin tegración familiar, en donde la fa milia que es el entorno de la formación fundamental e inicial de los nuevos miembros. En este seno familiar donde se desarrolla los niños y adolescentes sufrió profundos cambios en su estructura co mo familia nuclear, generando familias desunidas o bien familias ampliadas que incorporan a otros miembros del grupo. De ahí que los cambios sociales sucedidos en los últimos dieciocho año s afectó sensiblemente la institución básica de la sociedad , la familia en su forma y
estructura
tradicional
y
nuclear;
puesto
que
el
conflicto
provocó
desplazamientos internos, (emigración) nacional/internacional y un proceso de concentración poblacional a nivel de la capita l, que se ha traducido en una sobre población que vuelve más difícil la atención por parte de las instituciones
del Estado, especialmente en: educación, salud, vivienda, y sobre todo empleo; su ausencia dificulta toda forma de sobre vivencia . En este proceso de modificación de la estructura familiar, los niños y adolescentes, fueron los más directamente afectados, al ser sometido su entorno inmediato familiar a tensiones destructivas y dañinas. La mayoría de ellos tiene como referencia familiar de vida una situación socioeconómica difícil, un contexto de conflicto, de violencia familiar y social, el desplazamiento, la migración, la muerte y la ausencia de sus padres o familiares cercanos obligaron a que se criara con sus abuelos, tíos y en ciertos casos, los vecinos que tomaron la responsabilidad de manutención y educación. Existen cuatro grupos que sufren procesos diversos de exclusión social vinculados de diferentes formas, en su origen; por su capacidad de generación paradigmática, hacia la población joven
salvadoreña, se
convierten en
población altamente desintegradora. Estos grupos son:
Los jóvenes empobrecidos, marginados y excluidos
Los grupos de maras
Los deportados por actividades delictiva s, los desmovilizados de ambos bandos que fácilmente pueden enrolar a otros jóvenes en bandas de delincuencia y
Los niños de la calle.
Equivocadamente hay sectores sociales que piensan que la gente pobre es la causante de la violencia; por el contrario, aunque la violencia se puede definir como los sín tomas de la inequidad, o como el resentimiento frente a la exclusión, no son lo s pobres los causantes de su propia exclusión, ni mucho menos
de
la
violencia;
la
gente
pobre
y
las
personas
vulnerables
económicamente son las principales víctimas de la violencia, ejercida por el Estado a través de sus aparatos de control social.
Sin embargo en El Salvador son muy pocas las instituciones que brindan apoyo a los jóvenes que tienen la intención de transformar o modificar sus vidas; y si existen tienen que trabajar con instituciones extranjeras para costearse los gastos que ésta s generan, ya que por parte del Estado no existen políticas de inserción o prevención de estos fenómenos.
La exclusión hace evidente la falta de oportunidades educativas sobre todo en el campo, en dond e la exclusión territorial persiste y los jóvenes deben emigrar a las ciudades, buscando mejorar sus condiciones de vida, lo que influye en el desarrollo de conductas urbanas en un ambiente hostil, siendo esto parte de la exclusión social y la migración po r medio del trabajo doméstico infantil, explotación sexual y trabajo en las calles.
Esta realidad urbana que los excluye, hace que los jóvenes construyan su propia realidad urbana paralela, si se quiere y en donde coexisten
en el
mismo espacio, pero en dimensiones diferentes.
Todo lo anterior demuestra que son varios los factores que posibilitan el desarrollo de conductas delictivas o desintegradotas de los jóvenes.
1.1.2. Respuestas del E stado ante el fenóm eno de la viole ncia .
El gobierno de El Salvador, en su desesperación por controlar a los grupos de Maras, de pandillas y de crimen organizado, se ha dado a la tarea
de promulgar leyes que le faciliten el desarrollo de acciones orientadas al castigo y encarcelamiento de los integrantes. Por estar orientados a estos grupos son llamadas “Leyes Antimaras”, para legitimar el Plan Mano Dura. Este plan y este tipo de normas que endurecen las penas, promueven el control social tal como lo a firma Santos de Escobar, Aída Luz y o tros , en su Ensayo Sobre Justicia Juvenil (2005, Pág.77), “tal control es promovido desde la administración Bush de los Estados Unidos, obedeciendo intereses domésticos de ese país, relacionados al combate del terrorismo.”
Esta visión se hace notar en la declaración conjunta de los presidentes de El Salvador, Guatemala, Honduras, y N icaragua sobre las pandillas “m ara Salvatrucha y la Mara 18” suscrita el 15 de enero de 2004, en lo que se llamó: “Declaración de San Salvador”: “La multiplicación de leyes o proyectos de ley an tiMaras”, como el “plan mano dura” en El Salvador, el “plan libertad” en Honduras y el “plan escoba” en Guatemala, discriminantes, represivos e innecesarios, inquietó a un grupo de asociaciones civiles no gubernamentales, preocupados por la niñez, la adolescencia y juventud, así como por otros grupos participantes activamente en la recuperación del marero.
El gobierno de El Salvador, viene aplicando el Plan Mano Dura, que a juicio de Santos de Escobar, Aída Luz y otros. Ensayo sobre Justicia Juvenil (2005, Pág. 13 ), “El plan mano dura es en buena medida, la forma de gestión de la
política de seguridad pública del gobierno, destacando su apuesta por el carácter represivo de ésta, su manipulación y utilización política, su selectividad discriminativa e irrespeto por la normas constitucionales y de derechos humanos; así como por la institucionalidad, ” sin embargo, el plan mano dura se
extendió hasta mediados del año 2004, apoyado por la vigencia de la ley antiMaras que fue declarada inconstitucional.
La otra cara del plan mano dura, es el Plan Mano Amiga; que busca tenderles la mano a todos aquellos integrantes de estos grupos que voluntariamente deseen reincorporarse a la sociedad como personas útiles. El plan comprende una serie de acciones orientadas a la prevención y a la reinserción de estos jóvenes.
Básicamente, se busca capacitar a los jó venes en varios oficios y preparación técnica, para ello el Estado a través del Instituto Salvadoreño de Formación Profesional (INSAFORP), que opera y funciona median te el 1% que aporta todo trabajador que recibe su sueldo por planilla, a través de la institución sean estos privados o públicos.
En
los
últimos
años
el
INSAFORP
ha
desarrollado
algunas
investigaciones sobre desempleo juvenil en El Salvador, las cuales han ayudado a elaborar un diagnóstico y a sugerir la formulación de una serie de políticas que le ayuden a mejorar el acceso de los jóvenes al mercado laboral. En el estudio sobre empleo y juven tud urbana se parte de tres presupuestos que dan el marco general de la problemática del desempleo en El Salvador, en las que se basa para hacer sus sugerencias finales: Primero, el sistema económico no está generando suficientes fuentes de empleo como para satisfacer un alto porcentaje de la demanda de trabajo.
La segunda afirmación del INSAFORP, es que los jóvenes requieren de una atención específica como grupo social vulnerable y de importancia estratégica para el desarrollo económico y social de la nación.
Finalmente, la investigación afirma que, “los jóvenes co mo grupo social requieren de una atención coordinada por parte de las instituciones nacionales correspondientes, que hagan posible una actuación cada vez mas integral de sus necesidades para lograr una adecuada inserción laboral. Es por eso que en sus recomendaciones de política s laborales se sugiere la creación de una Red Interinstitucional a favor de la formación e in serción laboral de los jóvenes salvadoreños, donde tendrían que involucrarse los Ministerios de Salud , Educación, Economía; junto a otras in stituciones como las Universidades e inversionistas extranjeros.
La reinserción social, laboral y familiar, requiere en primer lugar terminar con el Estigma Social de Marginación y Exclusión Social, requiere además de otorgarles confianza y creer en ello s, que se preparen y se insertarán nuevamente. Pero además, se necesita mayores niveles de educación formal que permitan la creación de capital humano capaz de crear oportunidades reales económicamente y por otro lado es imperiosa la necesidad de políticas estatales y privadas de mediano y largo plazo que ayuden a enfrentar el problema con seriedad y convicción real.
En este proceso, juega un papel muy importante, en primer lugar el grupo familiar, el Estado a través de sus diversas instituciones, las Orga nizaciones no
Gubernamentales y los Organismos Internacionales para el financiamiento de las iniciativas.
De manera más específica el INSAFORP apoya a la población vulnerable desempleada o subempleada, a través de su estrategia de capacitación para el abordaje de la problemática de la juventud, como se ctor más afectado por la falta de formación profesional y empleo, así como otros sectores tales como madres solteras, población urbano -marginal, jóvenes en riesgo de exclusión social, población penitenciaria, adultos mayores y discapacitados entre otros. Además de los esfuerzos del Estado están lo que realiza la iglesia católica
a
travé s de
los
Religiosos Salesianos que
trabajan
en
toda
Centroamérica, quienes preocupados, por este problema han buscado la inserción socio laboral de la juventud marginada; los Salesianos se han enfocado en crear procesos educativos adaptados a las necesidades de estos jóvenes con el lema: casa que acoge, parroquia que evangeliza, escuela que encamina hacia la vida, patio donde se comparte la amistad en un ambiente salesiano.
El Centro Juvenil “Don Bosco” se ha convertido en un lugar de la ciudad donde todo joven es bienvenido, y es atendido por sacerdotes y hermanos religiosos, además cuenta con los servicios de psicólogos, profes ores y voluntarios de diversas especialidades. El centro cuenta con patios de juego, lo que lo ha convertido en escuela, en donde los jóvenes pueden socializarse con muchachos de otros barrios, comparten experiencias y sobre todo reciben orientación espiritual, que muchos la nece sitan para encausar sus acciones. A este esfuerzo se ha sumado la Iglesia Católica del Municipio de Mejicanos, que comienza a funcionar en el año de 1986 como Centro Técnico
Vocacional, y estaba abierto a los jóvenes provenientes de l área metropolitana de San Salvador (AMSS ) y del interior de la Republica. El centro fue fundado por la Pastoral Social de la Parroquia “San Francisco de Asís de Mejicanos en 1986, orientado a la búsqueda de soluciones para la problemática de capacitación e inserción laboral. El centro daba prioridad a personas de escasos recurso s económicos y luego de capacitarlos les ofrecía los servicios de colocación de empleos.
Cabe mencionar que el Centro “Rafael Palacios” de Mejicanos obtiene financiamientos del ayuntamiento de Bilbao (España) o sea de la Cooperación Española.
Para el año 2004, el centro se planteó un cambio estratégico, tanto en sus objetivos como en la s expectativas; denominándose a partir de ese año como: Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios”, en honor al sacerdote salvadoreño asesinado durante el pasado conflicto armado por fuerzas de seguridad nacional.
Este centro a tiende en cinco áreas, ellas son:
Formación técnica
Inserción laboral
Participación juvenil ciudadana
Atención psicológica
Adiós Tatuajes.
El proyecto “Adiós Tatuajes” es clave para el logro de la inserción o reinserción social, ya que
a pesar de capacitarse el tatuaje representa la marca y el
estigma que le impide acceder a un e mpleo.
Hasta agosto del 2006 se han inscrito en los diversos cursos 770 personas entre adolescentes, jóvenes y adultos, con pertenencia o no a los grupos de maras.
Los cursos que el centro ofrece actualmente son: Computación, Cosmetología, Dibujo y Pintura, Panadería. Electricidad l y ll, Modistería, Música, Piñatería, Reparación y Mantenimiento de PC, Sastrería, Taller de Velas y Taller de Floristería.
En este trabajo de investigación se busca, descubrir algunos factores que están incidiendo positiva o negativamente, para que lo s jóvenes capacitados se inserten laboralmente, ya sea ofreciéndoles un trabajo, o facilitándole fondos económicos para que instale n su propio taller.
Se mantiene especial interés en conocer las acciones que en torno a la inserción laboral realiza este ce ntro, y o tras institu ciones del Estado que trabajan con este propósito.
La problemática investigada permite hacer algunos aportes orientados a valorar las acciones que se realizan actualmente, a sí como aportar algunos elementos que ayuden a mejorar estas acciones sobre todo las que viene realizando la Iglesia Católica de Mejicanos, a través del Centro de Formación y Orientación “Padre Rafael Palacios”
1.2. Justificación
Uno de los flagelos que enfrenta la sociedad salvadoreña, en los últimos años es sin duda alguna el problema de la violencia, de manera específica la violencia juvenil, con todas su s formas y consecuencias; a tal grado que el Estado ha resultado incapaz de encontrar soluciones que ayuden al joven con pertenencia a los grupos de maras o pandillas; y sin que ello conlleve a generar más violencia, capturas e incluso la muerte. No resulta ético ni humano combatir la violencia con más violencia, como lo está haciendo el Estado Salvadoreño.
Sin embargo, muchas organizaciones no gubernamentales, iglesias y universidades vienen proponiendo e incluso realizando acciones un tanto diferentes orientadas a formar y capacitar en un oficio a ésto s jóvenes para que tengan una alternativa de ser ú tiles a su familia y a la sociedad.
La juventud salvadoreña, históricamente no ha tenido la facilidad de encontrar un empleo que le asegure su reproducción soc ial, igual podría decirse del acceso a la educación que lo prepara para enfrentar la vida de una manera diferente a la de sus padres u otros familiares.
En este trabajo de investigación se ha abordado los esfuerzos del Estado y de otras organizaciones no gubernamentales, orientadas a la capacita ción y tecnificación de los jóvenes con pertenencia o no a los grupos de maras, ya que la capacitación y la inserción laboral son acciones de prevención, tanto para el ingreso a la mara o para la violencia social; la ju venil principalmente, pue sto que
es un mecanismo de rechazo a la falta de atención por parte del Estado, ya que es más e vidente la exclusión institucional que la prevención y la inclusión social.
Por estas y otras razones el equipo investigador consideró como muy relevante el estudio de la problemática de la inserción social y la violencia juvenil ya que se relaciona con la calidad de vida del salvado reño, con su productividad, con su marco jurídico, con sus relaciones familiares y sociales, con los niveles educativos, etc.; así mismo es un problema de actualidad que involucra a todo el tejido social e incluso rebasa las fronteras patrias, siendo hoy día una problemática regional y por que no decirlo mundial, sólo que las formas de atacarlo son diferentes en cada país.
La problemática investigada permite valorar las acciones que se realizan actualmente, así como aportar algunos elementos que ayude n a mejorar estas acciones, sobre todo las que viene realizando la Iglesia Católica de Mejicanos, a través del Centro de Formación y Orientación, “Padre Rafael Palacios”.
1.3. Planteam iento del problem a
En El Salvador previamente al conflicto armado (década 1970 – 1980), la sociedad agro exportadora generaba y mantenía su propia dinámica de exclusión y, dada su naturaleza agraria, este fenómeno se expresaba principalmente en el área rural. A este mundo agrario, en lo económico y político, correspondía estructuras autoritarias, que sometían o excluían a las mayorías de la participación en las decisiones nacionales. Para esos años era evidente la presión social rural, manifestándose principalmente en la población
sin asentar y sin tierra. La presencia de vivien das de paja dispersas indicaba la residencia temporal de campesinos en búsqueda de una parcela de tierra para cultivar maíz o esperando una oportunidad de trabajo en las plantaciones agrícolas.
En la zona norte del país, a lo largo de las tierras fronteri zas, era evidentes los asentamientos espontáneos y las formas primitivas del uso de la tierra para obtener su subsistencia .
La presión social y demográfica se canalizaba con la migración hacia la costa Atlántica de Honduras y una vez cerrada esta oportuni dad con la guerra de 1969, en ambos países, la presión se orientó directamente hacia el área urbana de San Salvador y los Estados Unidos, en esos momentos.
Aunado a esta situación el conflicto armado de los años ochenta motiv ó más para la emigración internacional, especialmente hacia Estados Unidos, Canadá y Australia, este fenómeno se dió con mayor intensidad en el área rural, provocando la desintegración acelerada de los grupos familiares; los jóvenes emigraban por seguridad en sus vidas o por no ser re clutados por ambos bandos. Los jefes de hogar no tenían la misma suerte.
La guerra provocó una serie de traumas en los jóvenes que vivieron esa experiencia y significó el debilitamiento de las estructuras de forma ción y transferencia de valores, así como de los mecanismos sociales familiares de control y seguridad social.
Durante los 12 años de conflicto crecieron y se desarrollaron los grupos de maras o pandillas que son agrupaciones nacidas en Estados Unidos
producto del racismo, y se constituyen como una forma de autoprotección e integración ante un medio que los rechaza y los persigue, son mecanismos de respuestas adaptativas para la sobre vivencia de la población excluida y se reciben en el país por medio de las deportaciones, produciéndose a la vez un fenómeno de transculturación. Los deportados, sobre todos los mayores, han conocido otros ambientes y han adquirido nuevas experiencias, lo cual, al socializar sus aventuras; les permite asumir liderazgo, respeto y capacidad de reclutamiento; paralelo a esto están los medios de comunicación social, quienes no establecen como punto prioritario la formación de los jóvenes, por el contrario impulsan una línea de diversión, evasión de su realidad y alta incitación al consumismo desmedido en los hábitos y preferencias. La violencia se ha convertido en un problema serio de salud pública por la cuantía del daño a la salud y la integridad de la persona y a la vida misma; por eso no puede pasarse por alto, ya que estadísticamente hablando es un serio problema. Desde el año 1995 hasta la fecha, prácticamente los homicidios a causa de la violencia, ocupan el primer lugar de mortalidad del país. En los traumas causados por la violencia, tanto en la violencia que conlleva a la muerte, como en la que no, siempre hay u n trauma social.
Sin embargo, en nuestro país son muy pocas las institu ciones que brindan apoyo a los jóvenes que tienen la intención de transformar o modificar sus vidas; y si existen tienen que trabajar con instituciones extranjeras para costearse los gastos que ésta s generan, ya que por parte del Estado no existen políticas de inserción o prevención ante estos fenómenos que nos están consumiendo cada vez má s.
En varios documentos se señala a El Salvador como uno de los países mas violentos de América Latina, después de Colombia, y má s sí recién ha
salido de un conflicto armado de doce años de guerra civil, en el que aproximadamente 1.5 millones de salvadoreños y salvadoreñas tuvieron que emigrar, principalmente a los Estados Unidos, en calida de indoc umentados o ilegales, siendo el segundo grupo en esta categoría después de México. Según FEPADE, en el fenómeno de las migraciones y retornados a El Salvador se puede constatar que:
“a) Las acciones de reinserción de emigrantes y refugiados provenientes de Centroamérica y a fectados por la guerra, han sido responsabilidad fundamentalmente de las organizaciones no gubernamentales (ONG’S) e iglesias, con el apoyo de organizaciones internacionales, en el marco de aliviar situaciones vinculadas al conflicto . b) Se constata la ausencia de una política de reinserción o integración para los deportados” 5
El modelo económico neoliberal y los tratados de libre comercio han venido a agravar aún más la situación de pobreza de los amplios sectores sociales, y por tanto aumenta el fenómeno de la exclusión social que viven los jóvenes en El Salvador. Esta exclusión hace evidente la falta de oportunidades educativas sobre todo en el campo, en donde la exclusión territorial persiste y los jóvenes deben emigrar a las ciudades, buscando mejorar sus condiciones de vida, lo que influye en el desarrollo de conductas urbanas en un ambiente hostil, siendo esto parte de la exclusión social y la migración por medio del trabajo doméstico infantil, explotación sexual, trabajo en las calles, entre otros.
Un estudio realizado por Cruz José Miguel y Portillo Peña Nelson, en su libro “Solidaridad y Violencia en las Pandillas del Gran San Salvador . Más Allá
5
Fundación Empresarial para el Desarrollo Educativo. Los Jóvenes en situación de Exclusión Social. Capítulo 2. Colección FEPADE. El Salvador, 1997. Pág. 21
de la vida loca” (1998 p. 56) muestra “que el 93.3% de los miembros integrantes de maras saben leer y escribir y el 75.9% actualmente no estudia, además, el 74.5% no trabaja, o sea que de 4 jóvenes 3 no estudian ni trabajan”. 6
De todo lo anterior se puede inferir que se necesita una política de prevención o mejor aún de inclusión social que dé soporte e integre a estos jóvenes, tanto a su familia, como al trabajo y a la so ciedad.
Es importante mencionar en este trabajo , la posición y visión de la iglesia católica en torno a exclusión y marginación de la que son víctimas los jóvenes de América Latina y por supuesto los jóvenes salvadoreños. En el documento de Puebla; Conferencia General del Episcopado Latinoamericana (1984) en el número 28 dice: “Vemos, a la luz de la fe, como un escándalo y una contradicción con el ser cristiano, la creciente brecha entre ricos y pobres. El lujo de unos pocos se convierte en insulto contra la miseria de las grandes masas” 7 . Lo anterior hace referencia a las grandes diferencias existentes en el mundo de hoy, sobre todo urbano; barrios pobres donde no exi sten condiciones mínimas de vida, para el desarrollo y la sobrevivencia digna de las y los jóvenes.
Además, el documento de Puebla (1984) señala, que se observan; “rostros de jóvenes, desorientados por no encontrar lugar en la sociedad; frustrados, sobre todo en zonas rurales y urbanas marginales, por falta de oportunidades de capacitación y ocupación”. 8
6
Fundación Empresarial para el Desarrollo Educativo. Los Jóvenes en situación de Exclusión Social. Capítulo 2. Colección FEPADE. El Salvador, 1997. Pág. 21 7 III Conferencia General del Episcopado Latino americano. PUEBLA La Evangelización en el presente y en el futuro de América Latina. M éxico, 1984 Pág. 48. 8 Op. Cit Pág. 49
Es en este contexto en el que se enmarca la investigación teniendo como punto de referencia el Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica de Mejicanos; puesto que viene desarrollando actividades de capacitación y orientación a niños, jóvenes y adultos, desde el año 1986 como alternativa de inserción o reinserción productiva de los integrantes de estos grupos.
El trabajo de capacitación y orientación de la Iglesia Católica de Mejicanos se orienta a ayudar a los jóvenes para que se capaciten en un oficio o trabajo técnico y se inserten o reinserten laboralmente en la sociedad; y como consecuencia se alejen de la violencia, y se conviertan en jó venes útiles a su familia y productivo s para la so ciedad.
Personas capacitadas por la institución en los últimos o cho años Año
No. de pers onas form adas
1998
200
1999
440
2000
450
2001
356
2002
368
2003
250
2004
450
2005
405
Para el año 2006 se incluyeron los siguientes cursos:
Floristería
Taller de Velas
Modistería y
Cosmetología; totalizando hasta el mes de agosto 770 personas atendidas, en los diferentes cursos.
Ante la problemática antes descrita y con el fin de co nocer mejor la situación, el grupo investigador se plantea como objetivo general:
Evaluar
los
factores
que
están
incidiendo
positiva
o
negativamente en jóvenes con pertenencia o no a las maras, que han sido capacitados en el Centro de Formación y Orientaci ón Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica de Mejicanos.
Para alcanzar el objetivo general se formulan los siguientes objetivos específicos:
Identificar factores sociales e institucionales que influyen de manera positiva o negativa la inserción lab oral de jóvenes vinculados a la violencia o a las maras.
Analizar los esfuerzos estatales o privados que conlleven a la inserción laboral de jóvenes vinculados a la violencia o a las maras.
1.4. A lcances y lim itaciones Alcances La violencia juvenil es una expresión del joven para hacerse notar y reclamar espacios de atención tanto familiar como social; la violencia es el resultado de múltiples problemas, tanto de orden estructural como social; en cuanto los excluye y margina.
La atención a los jóvenes p or parte del Estado se lleva acabo con un abordaje y tratamiento distinto de los adultos; tanto que
ha construido centros de
internamientos para jóvenes en donde deben incorporarse a los talleres para
aprender un oficio; con ello el Estado busca prepara rlos para que se inserten al mercado laboral. Además de estos esfuerzos están los que desarrolla el Institu to Salvadoreño de Formación Profesional (INSAFORP). En el ca so de los jóvenes con problemas de delincuencia y que han sido detenidos y privados de libertad; el juez les da la oportunidad de asistir a un centro de capacitación bajo la modalidad de Libertad Asistida.
La Procuraduría Para la Defensa de los Derechos Humanos, es la responsable de velar porque el Estado a través de sus cuerpos de policía n o violenten los derechos de los jóvenes; además de pedirle al Estado el desarrollo de programas de atención integral. Por su parte la iglesia católica también ejecuta programas de capacitación laboral y la inserción en una fuente de trabajo, como una de la s formas efectivas para incorporar a los jóvenes productivamente y por tanto evitar su incorporación a los grupos de mara y su participación en las acciones de violencia.
El Plan de Educación 2021 elaborada por una comisión de alto nivel , ha identificado una serie de factores que están incidiendo en los jóvenes; para el caso señala que en la búsqueda de modelos referentes muchas veces provoca que los jóvenes se desorienten y tomen caminos equivocados.
Además una investigación realizada por la Federación Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) refleja que 37 de cada cien estudiantes del nivel medio en el Área metropolitana de San Salvador han participado en riñas callejeras.
El Plan de educación
2021
enfatiza
que
los fenómenos delincuencia,
desintegración familiar, marginalidad y violencia , siguen incidiendo sobre todo
en los centros escolares de Educación media, acelerando el fenómeno de la violencia estudiantil expresados en maras o pandillas juveniles.
Para contrarrestar esta situación propone la creación de ambientes de convivencia armoniosa, y el desarrollo de acciones que contribuyan a generar espacios de interacción y desarrollo juvenil, a fin de presentar nuevos desafíos a los jóvenes para canalizar creativa y positivamente sus energías.
El Plan 2021, se plantean una serie de programas, con los cuales busca incidir en la situación que enfrenta la población escolar a nivel general y con ello contribuir a la prevención de acciones de violencia
y preparar a los jóvenes
para la vida; es decir educarlos, capacitarlos e insertarlos en un puesto de trabajo.
Los programas básicos son: EDU CAME, COMPITE, PODER, COMPRENDO Y REDES.
Lim itaciones.
Los trabajos de investigación realizados en torno al fenómeno de la violencia de los jóvenes vinculados a las maras y su inserción laboral, dejan entrever algunas limitantes; entre ellas, que los trabajos tienen un punto de partida de carácter político, con claras tendencias a señalar a los jóvenes como los causantes de una serie de problemas, sin considerar la contraparte institu cional y social que margina y excluye a las amplias mayorías empobrecidas; y que a la larga vino generando estos grupos de maras, que para hacerse notar en la sociedad realizan todo tipo de acciones, en su mayoría violentas y por tan to ilícitas, es decir penadas por la ley.
Sólo el hecho de pertenecer a la mara los tipifica como integrantes de asociaciones ilícitas, lo que ya da lugar a la detención y procedimiento judicial.
El Plan de Educación 2021 con sus programas planteados enfrenta una serie de limitantes, siendo la principal de ellos que su propuesta tiene un carácter político, alejado de toda realidad y por tanto difícil de implementar; además est á orientado a un sector muy especial de la población y de las ciudades principales. La población rural tiene poca participación en este Plan de educación.
Mediante el Plan Mano Amiga, el Estado desarrolla una serie de programas orientados a capacitar a los jóvenes en un oficio o en un trabajo técnico, ya sea a través del Ministerio de Gobernación o de la Policía Nacional Civil (PNC); sin embargo, se percibe que estos programas están cargados de Estigma Social e institucionales, lo cual deja claro que no se busca una solución integral al problema, es decir, que se percibe una limitante de orden objetivo e ideológico.
Por otra parte, la violencia juvenil no tiene expresiones individuales, sino que obedece a una expresión social de grupo, un defensor de sus propios intereses de grupo, los cuales son muy cohesionados y coercitivos por su s in tegrantes.
Por eso nos preguntamos: ¿son los jóvenes violentos, o son ellos los que han sido violentados?, a lo que e ste grupo de investigadores llegó a la conclusión de que son los jóvenes los que han sido violentados, debido a los procesos de marginación y exclusión so cial ya descritas en e ste trabajo.
Además se identifican otras limitantes, como el caso de no abordar la problemática en forma integral y mucho menos de darle seguimiento a la reinserción o inserción en el área productiva, tal es el ca so de los e sfuerzos del
INSAFORP, que únicamente capacita a los jóvenes pero no da seguimiento a la inserción laboral a pesar de contar con la estrecha colaboración del Instituto Salvadoreño de la Niñez y la adolescencia (ISNA), y del Instituto Salvadoreño de Desarrollo de la mujer (ISDEMU) ambas instituciones cuentan con un grupo de profesionales del área social entre Trabajadores Sociales, Psicólogos y Educadores.
Lo mismo ocurre con lo s esfuerzos que hacen otras institu ciones y organismos, que no le dan seguimiento a la inserción laboral, argumentando escasez de personal o inseguridad para sus vidas en los lugares de residencia de estos jóvenes.
Existe una limitante institucional con respecto al apoyo financiero, y es que, el Centro no cuenta con apoyo de la empresa privada mucho menos de parte del sector estatal, quien es el ente indicado para apoyar estos procesos de inserción o reinserción social.
Entre algunas limitantes para darle seguimiento a la inserción laboral están: el grado de peligrosidad de estos grupos, la inseguridad existen te en los lugares de residencia, así como el hecho de brindar una dirección falsa ; además las instituciones privadas tienen pocos recursos para llevar a cabo estas tareas.
Para superar estas limitantes, el grupo investigador busca recolectar toda la información que requiere el trabajo a través de los jóvenes que están recibiendo capacitación en el Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios ” para luego hacer el análisis cualitativo de la información obteni da y valorar el alcance de los objetivos propuestos.
1.5. Recuento de conceptos y categorías a utilizar
Agresión: proviene del latín
Agressio, acción y efecto de agredir, que
implica agresión, provocación o ataque; este concepto e stá íntimamente relacionado con el de violencia; se entiende por violento aquella acción o persona que está fuera de su estado natural; es una situación en la que se aplica la fuerza de manera irracional y generalmente se hace uso de las armas de “fuego” o arma “blanca” con el objetivo de agredir, e incluso ma tar.
En el caló pandilleril los actos delictivos o violentos experimentan diversos nombres; por ejemplo una persona que ha sido herida en un acto violento se le denomina “hacer un corte”, el robo se llama “ponerle a alguien”.
Otro concepto de gran utilidad en el presente trabajo es el de Cultura, el cual literalmente expresa el conjunto de rasgos que caracterizan los modos de vida de las personas actuando en sociedad, tales rasgos se manifiestan a través del modo de actuar y pensar de los individuos que forman la sociedad. De ahí que la cultura se relaciona con el de transculturación ya que en el estudio de la violencia que nos ocupa se plantean algunos modos violentos de actuar y han sido traídos al país por jóvenes ag rupados en maras y que han vivido en los Estados Unidos; en ese proceso han sido transculturizados.
Con esto no se quiere decir que la llamada “Cultura de la violencia” ha sido importada desde el exterior, sino más bien que ha sido agravada o acrecentada por modos y rasgos de acción e xterna.
No menos importante e s la categoría de Exclu sión Social, ya que, ésta es entendida para efectos del presente trabajo , como la privación de espacios, y condiciones de las personas, y habilidades de estas para el desa rrollo integral del ser humano y para que éste pueda convivir armónicamente con los demás en convivencia social. En esta misma línea de interpretación se ve claramente que Exclusión Social, es el no participar activamente en las decisiones y modos de proceder en lo que a convivencia social se refiere, ya que, excluido es o son todos aquellos que están ausentes de la participación social, tal interpretación se relaciona fuertemente con el de marginación, ya que marginados son todos los individuos que están excluidos de la participación social, vale decir que no son tomados en cuenta en la construcción de políticas o estrategias de desarrollo social y económico.
En su mayoría, los grupos de Maras o pandillas, son personas marginados y excluidos de los proce sos de desarrollo de la familia y de la sociedad.
Para finalizar, tenemos el concepto de la pobreza que denota no sólo privación de oportunidades, sino también la carencia de bienes materiales, falta de oportunidades educativas, jurídicas, económicas, etc. La pobreza está íntimamente ligada a la Exclusión Social y marginación del individuo como ente social. En resumen, esos aspectos negativos que se aplican a los grupos de maras y pandillas, se hacen más evidentes, cuando estos jóvenes buscan la forma de capacitarse para insertarse laboralmente, puesto que prevalece en la sociedad el estigma social para con ellos, lo que imposibili ta la inserción laboral
y por tanto, los esfuerzos gubernamentales, individuales y sociales quedan nada mĂĄs como buenas volun tades.
Por eso es necesario revertir estos conceptos negativos para los jĂłvenes , para que puedan en el corto tiempo convertirse en seres Ăştiles a su familia y a la sociedad.
CAPITU LO II MA RCO TEÓR ICO
2.1. Fundam entación Teórico – Metodológica
En la actualidad se manifiestan diferentes puntos de vista acerca de la violencia, que día a día enfrentan los salvadoreños y salvadoreñas. Por ello se hace necesario realizar un análisis histórico de la realidad violenta que se vive desde hace muchos años. Autores como Martín Baró , considera necesario tener presente “La perspectiva histórica para encontrar un sentido psico – social de las diversas formas de violencia. De hecho, la guerra es la realidad más totalizadora en la vida actual de El Salvador, e in cluso las otras muchas formas de violencia que aparecen sólo se pueden entender adecuadamente por referencia al contexto de confrontación bélica.” 9
Para este autor, es importante considerar el aspecto psico – social de la violencia humana enmarcada en el contexto del pasado conflicto armado, el cual generó vicios y condiciones tendientes a la reproducción de conductas y acciones violentas. También este autor plantea que “El modelo histórico sobre la violencia humana parte de dos presupuestos fundamentales: a) Existe una naturaleza específica del ser humano, naturaleza abierta a potencialidades de todo tipo, entre ellas la de la violencia y la agresión; b)Esta naturaleza es de carácter histórico, la historicidad de la naturaleza humana significa desde el punto de vista social que cada persona se materializará en el marco de otra sociedad concreta, como parte y expresión de unas fuerzas sociales”. 10
9
M artín Baró, Ignacio. Acción e Ideología. El Salvador 1997. UCA Editores P. 360. Op cit. 401
10
Es decir, el ser humano es un ser abierto a la violencia y a la agresión de acuerdo a las circunstancias de exclusión y marginación en que se encuentren los individuos y las exigencias que cada persona experimenta.
Esto es más claro en la medida que comprendemos el funcionamiento de la sociedad salvadoreña, la cual se encuentra dividida en dos grupos sociales antagónicos, cuyos intereses también lo son: la burguesía frente al proletariado, que en sentido más amplio es lo que se conoce como lucha de clases. “Expresándose como producto del dominio de una minoría rica sobre una mayoría pobre, lo que hace más grave y evidente el estado de violencia dominadora de los pocos sobre los muchos, de los poderosos sobre los impotentes. Esto se ha denominado violencia estructural y que ha sido denunciada como un desorden establecido.” 11 Entendiéndose como violencia estructural aquella organización social en la que el Estado deliberadamente protege y fomenta mediante mecanismos jurídicos, económicos, educativos y políticos.
Otro modelo presentado por Martín Baró es el “enfoque instintivista”, el cual presenta la violencia como el p roducto de fuerzas instintivas en el ser humano. Este enfoque fue explicado mucho antes por Segismundo Freud, el cual consiste en un impulso (carga energética) que hace tender el organismo hacia ese fin (pulsión) Se trata de una visión meramente biológica y que tiene como principal limitante el hecho de que la violencia es y constituye una visión ahistórica que se contrapone al enfoque histórico .
El enfoque ambientalista por el contrario presenta la violencia y agresión como el producto de fuerza presente s en el medio externo. Este enfoque
11
Op cit. 405
presenta dos modalidades: primero el modelo frustración – agresión y el modelo más aceptado actualmente del aprendizaje social de la violencia.
El primero plantea la agresión como producto de la frustración, en donde la conducta agresiva es producto de un cúmulo de frustraciones. Esta visión sociológica plantea que existen momentos o situaciones en las cuales las personas no pueden lograr sus objetivos más soñados o deseados socialmente por medios comunes. La agresión se vuelve entonces una forma peculiar de lograr los objetivos, aunque muchas veces como suele suceder al margen de la ley.
El aprendizaje social sostiene que la mejor forma y más efectiva para adquirir comportamientos violentos y/o agresivos lo constituye el aprendizaje directo, es decir, mediante procesos que refuerzan los comportamientos agresivos realizados por la misma persona. Dicho de otra manera basta con observar el espectáculo de la violencia para que se produzca el aprendizaje.
Esta visión se manifiesta en la realidad salvadoreña y de hecho posee un doble aspecto: por un lado, los jóvenes adquieren el conocimiento sobre nuevas formas de comportarse agresivamente y por otro experimentan un refuerzo positivo o negativo, según la conducta violenta ob servada, ya sea premiada o castigada.
Para Martín Baró. “Uno de los factores que con má s facilidad desata los comportamientos violentos es la posibilidad de realizarlos. La configuración de situaciones de poder, real o simbólico, es una de las fuentes pri ncipales de la violencia social”. 12
12
Op. Cit. 413
El joven que se encuentra en un momento dado, al frente de una agrupación como las maras o pandillas, apoyado por las armas en la mano se vuelve uno o varios sujetos potencialmente listos para ejercer violencia en cualquier lugar.
La violencia también está relacionada con la cultura de la violencia, que en los últimos años se define como “Una sociedad que ha utilizado la violencia en el establecimiento de reglas y asignación de recursos y los ha hecho recurrentes en el tiempo, termina por institucionalizar la violencia a tal punto que se convierte en un componente del sistema cultural que dinamiza el ser y quehacer de una sociedad”. 13 Este fenómeno tiene sus raíces en la historia de la violencia misma, y es el resultado de la pobreza, exclusión social y profundas injusticias; de hecho no es un fenómeno nuevo como tampoco puede ser adjudicado al pasado conflicto armado. La cultura de la violencia a la que están acostumbrados (as) los y las salvadoreñas se remonta a los tiemp os de conformación de la República, en donde hubo entre otras cosas autoritarismo, represión, explotación, censura, desprestigio, persecu ción y muerte. Dicho problema no parece reconocer límites, credos, ideologías, inclu so esta tus socioeconómico, de ahí la preocupación por la progresiva y constante magnitud del problema que día a día va incidiendo asombrosamente en la población salvadoreña, sin que se esté generando propuestas de solución, por el contrario se está fomentando.
Otros autores como Reiss y R o th definen la violencia “como el comportamiento interpersonal que intencionalmente amen aza, atenta o de hecho inflige un daño físico”. 14
13
Violencia en una sociedad en transición PNUD. Pág. 116 Eric. Ideso, Idies. Iudop M aras y Pandillas de Centroamérica, Vol. I. UCA, Publicaciones, Nicaragua, 2001. Pág. 22. 14
Puede verse que este autor, comparte con los otros autores, la definición pero él señala que el fin último de la violencia es siempre causar daño físico o psicológico de manera planificada o preconcebida. Esto s mismos autores, Reiss y Roth (1999) Pág. 27, han señalado la importancia de ciertos factores de riesgo que contribuyen a que se materialice el hecho violento, tant o en individuos como grupos sociales. Entre los factores principales están :
Factores Macrosociales: concentración
de
la
pobreza, estructura
de
oportunidades, declive del capital social, socialización sexual, acceso a armas entre otros.
Factores Microsociales: tipo de organización comunitaria, los mercados ilegales, las pandillas, la desorganización y destrucción familiar.
Factores Individuales de orden psicosocial: El temperamento, el consumo de drogas y alcohol, respuestas sociales aprendidas, percepción sobre la penalización o sobre los dividendos de la violencia, habilidades sociales y de comunicación, etc.
Factores Individuales de orden Biológico: capacidades neurobiológicas determinadas por el nacimiento y proceso s de envejecimiento, historial de uso de sustancia s psicoactivas, exposición a neurotoxinas, etc.
En el mismo sentido, Orpinas (citado en la obra Maras y Pandillas en Centroamérica), propone “un modelo de análisis más circunscrito según el cual los factores de riesgo de la violencia juvenil están constituidos por una serie de elementos que al interactuar en conjunto, aumentan las probabilidades de que el joven se conduzca en forma violenta” 15 Los factores que identifica este autor son:
Factores Ambientales: una cultura de violencia; medios de comunicación promoviendo la violencia en sus contenidos, condiciones de pobreza,
15
Op. Cit. 27 – 28
exposición
a
la
violencia
comunitaria,
in fluencia
de
los
padres,
características familiares.
Factores Personales: retoma la noción de autosuficiencia, despreocupación por consecuencias de actos, habilidades/destrezas para resolver problemas (habilidades sociales) creencias y valores que apoyan la agresión.
Factores de orden conductual: se encuentra el consumo de alcohol, de sustancias p sicoactivas y la tenencia de armas.
Puede inferirse la coincidencia y similitud de estos autores en su señalamiento, respecto a la violencia, en el sentido de tomar
en cuenta
factores conductuales, personales y ambientales para explicar las causas de la misma. Además se puede evidenciar cómo la violencia se justifica en la medida del entorno en que se ha desarrollado el joven desde su concepción, que se va transmitiendo de generación en generación, convirtiéndose en su modus vivendi.
De igual manera al señalar el consumo de drogas y de bebida s alcohólicas,
como
desencadenantes
del
fenómeno
de
la
violencia.
La
Organización Mundial de la Salud, en la Conferencia Mundial para la Salud (1981) citado en el documento Violencia y Salud, define la violencia como la imposición interhumana que produce d olor y sufrimiento inevitable.
Además, la violencia en El Salvador, a través de los años ha sido ejercida por personas o grupos dominantes en cada época de la historia, en un principio para apropiarse de las tierras, para dominar y hacer prevalecer el trabajo forzado y para resistir y ejercer el poder político entre o tros, lo que se traduce en el desarrollo de una cultura de violencia, significa que una sociedad que ha utilizado la violencia en el establecimiento de reglas y asignación de recursos y los ha hecho recurrentes en el tiempo, “termina por institucionalizar
la violencia, a tal punto que se convierte en un componente del sistema cultural que dinamiza el ser y que hacer de una sociedad”. 16 Para efectos de la presente investigación se entiende por cu ltura: Un concepto que engloba la conducta humana, “vista como una construcción personal y social capaz de generar en individuos y grupos humanos, signos de identificación y diferenciación, así como establecer pautas de lo “socialmente aceptable”, establecer una normativa cu yo cumplimiento in tegra o en caso contrario, excluye y sanciona”. 17
Significa entonces que esta conceptualización incluye toda la actividad humana, tanto las formas de convivencia como el lenguaje, las creencias y las costumbres entre o tras formas.
De acuerdo con los autores aquí mencion ados se puede resumir que el fenómeno de la violencia juvenil está ligado directamente con factores si se quiere integrados, es decir, pobreza, falta de oportunidades de todo tipo: educativas, laborales, de salud, desintegración de la familia producto de la emigración forzada a la que obligó en gran medida el pasado conflicto armado que vivió El Salvador y que continúa siendo una dinámica constante a raíz de las condiciones de vida (exclusión social y ma rginación), entendida esta última como la exclusión de grandes grupos sociales que no participan de las decisiones y programas de desarrollo social del país a la cual se enfrentan las mayorías, de manera especial los jóvenes.
Con todo este escenario pued e visualizarse claramente que las penas drásticas no han sido ni serán solución a tan agudos problemas de la juventud y que por el contrario deberá trabajarse preferentemente en la prevención,
16 17
Violencia en una sociedad en transición: PNUD, 2000. Pág. 116 Op. Cit. 116
capacitación y generación de empleo. Esta idea debe ser retomad a por instituciones esta tales o privadas de manera especial por el Viceministerio de la Juventud, Secretaría Nacional de la Fa milia, el Instituto Salvadoreño de la Niñez y Adolescencia (ISNA), por el Instituto Salvadoreño de Desarrollo de la Mujer (ISDEMU), por el Instituto Salvadoreño de Formación Profesional (INSAFORP) y la empresa privada. Solo de esta manera puede aspirarse a detener y afrontar el flagelo de la violencia social que hoy por hoy constituye uno de los más grandes y difíciles retos para la familia, el estado y la so ciedad en general.
Con todo este panorama, es necesario visualizar la problemática que nos ocupa desde la perspectiva del Trabajo Social a fin de darle un enfoque adecuado. El Trabajo Social cuenta con tres niveles específicos d e intervención: individual, grupal y comunal; aclarando que para efectos de la presente investigación se enfo cará a la atención grupal, ya que la institución investigada trabaja con jóvenes capacitándolos de manera grupal.
El Trabajo Social, como profesión humanística, considera que todo acto humano incluye dos elementos, persona y situación, o sea que se trata de un conjunto de realidades y aspectos subjetivos que influyen mutuamente . El método de Trabajo Social de grupos es un proceso socio – educativo que ayuda
a los individuos a mejorar el funcionamiento social por medio del
intercambio de experiencias. Refuerza los valores sociales ubicándolos en la realidad para promover su cooperación y responsabilidad en una acción integradora con el proceso de de sarrollo humano.
Para comprender porqué es un proceso social, es necesario realimentar la presencia de los actores a través de la interacción constante que conlleva a la capacitación del individuo en el grupo para su desarrollo social. El proceso educativo enfoca el desarrollo de la personalidad del individuo con integridad,
con actitudes positivas que le permiten reflejar en su ambiente (en su entorno) un
desarrollo
humano
basado
en
aspiraciones
y
satisfa cciones
con
trascendencia a la familia, comunidad y nación.
Las funciones del método de Trabajo Social de grupo son:
“Sociales
Educativas
Promocionales
Preventivas
Rehabilitadoras y
Autogestionarias “ 18
En este sentido, el Trabajo Social de G rupo toma en cuenta al individuo como sujeto de la sociedad , tratando en todo momento de promover la integración del mismo, para incorporarlo en el desarrollo local, nacional y regional. Es un medio para alcanzar niveles de participación que conlleven a un desarrollo, promoviendo condiciones de vida digna y relacio nes sociales satisfactorias.
Los objetivos de Trabajo Social están enfocados a:
“Capacitar a los miembros del grupo para que: conozcan la importancia de una sociedad democrática, basada en los derechos humanos , y participen en forma eficaz en el cumplimiento de obligaciones y derechos sociales.
Orientar a los integrantes del grupo, para la reflexión continua y sistemática sobre la importancia de generar redes de
relaciones sociales
satisfactorias que eliminen acciones que promuevan violencia familiar, comunal y nacional.
18
M uñoz Elías, Enma Ruvilia, M etodología de Trabajo Social II, Guatemala, 1995 Pag. 14
Estim ular
el
crecim iento
personal,
para
promover
alcances
autogestionarios, fortaleciendo la organización social.
Prom over la acción integral del individuo dentro del grupo, para el desarrollo de la creatividad como fuente de crecimiento personal y grupal” 19
Vale la pena entonces recordar que el ser humano necesita lograr la satisfacción y que se le reconozca, desarrollando actitudes de ayuda y cooperación, a través del estímulo y el reconocimiento de su propio valor como joven. Además de la aceptación como necesidad de afecto, comprensión y amistad, lo cual provoca como resultado seguridad en sí mismo, y en el entorno en que se desarrolla.
Por otra parte, y como un esfuerzo de la Iglesia Católica de Mejicanos, a través del Centro de Forma ción y Orientación Padre “Rafael Palacios”, viene trabajando con los sectores sociales de bajos recursos o ingresos económicos, varios cursos entre: oficios y capacitación técnica , con los que busca contrarrestar la incorporación de los jóvenes a los grupo s de maras y por tanto evitar las acciones de violencia, protagonizadas por estos grupos.
El Centro de Formación y Orientación cuenta con un cuerpo de profesores capacitados y de calidad para lograr la capacitación y el aprendizaje de un oficio; además de contar estructuralmente con una unidad de búsqueda de colocación de estos jóvenes denominada como “bolsa de trabajo”, que consiste en un banco de dato s de los jóvenes capacitados para proporcionar sus datos a las posibles empresas empleadoras.
Las acciones de la bolsa de trabajo se orienta en dos direcciones; la primera que se limita a orientar a los jóvenes cuando estos buscan un empleo; 19
Op Cit. Pag. 15
la segunda busca colocar de manera directa a los jóvenes capacitados. E ste proceso se define como in serción laboral. Es decir, que una vez la persona ha sido capacitada, lo lógico es que se inserte en un puesto de trabajo. La iglesia tiene como finalidad con este centro, capacitar a los jóvenes en un oficio o técnica para facilitarle la inserción laboral. Sin embargo, también es necesario señalar que la inserción de estos jóvenes no se da tan fácilmente, ya que se enfrenta al estigma social; es decir, que se enfrentan a un fenómeno de rechazo, infundado quizá o bien como resultado de la valoración o experiencias vividas por la población.
El estigma no valora el empeño y el esfuerzo de los jóvenes por capacitarse o instalar su propio negocio, que al igual que busca un empleo, merece y necesita se le tenga confianza, ya sea por apoyarlo económicamente o para la venta y aceptación de su s servicios y/o productos.
La lucha por superar el estigma social es una tarea de todos, tanto del Estado como de la familia y la sociedad en general, si realmente se quiere hacer de ellos seres útiles.
2.2. Construcción de l Ma rco Em pírico
2.2.1. Ha llazgos Este trabajo se orientó a recolectar información de los sujetos que están siendo capacitados en un oficio o preparación técnica, en el Centro de Formación y Orientación, Padre “Rafael Palacios”, de la Iglesia Católica de Mejicanos que busca hacer de los jóvenes seres útiles a su familia y a la sociedad; pero sobre todo prevenir la incorporación de ellos en los grupos de maras o pandillas: y si tienen pertenencia, ayudarlos en su rehabilitación y reinserción laboral.
Para recolectar la información se diseñó un instrumento de preguntas cerradas, orientadas a valorar los objetivos de e sta inve stigación. E ste instrumento se administró a los jóvenes entre 12 y 30 años de edad, y se hizo en el Centro de Formación y en algunas comunidades do nde residen. Este trabajo de campo requirió de 5 días hábiles y un fin de semana en un período comprendido del día 11 al día 17 de Diciembre de 2006. Una vez completado los cuestionarios se procedió a vaciarlos en tablas para facilitar su presentación.
Además, se diseñó una Guía de Entrevista que contiene ocho aspecto s , y fue administrada al recurso humano responsable del Centro y profesores encargados del desarrollo de los cursos. Esta información sirvió para completar o verificar la información proporcionada por los jóvenes. Además se diseñó una Guía de Observación, con la que el equipo de investigadores buscó establecer las características de los jóvenes para valorar su pertenencia o simpatía por los grupos de maras. Los resultados de esta información s on los que a continuación se presentan .
Se partió de una muestra de 91 personas que por razones ajenas a este grupo sólo se obtuvo una muestra real de 70, los cuales se distribuyen en el género siguiente:
TABLA 1 Género de personas encuestadas Género
Fr
%
Masculino
61
87.14
Femenino
9
12.86
70
100
TOTAL
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
El cuadro muestra que el 87.14% de las personas que se capacitan son del género masculino, lo que nos induce a sostener que es el género que más se inclina por participar en estas organizaciones y el 12.86% corresponden al género femenino. Puede decirse que los patrones culturales están presentes, ya que son los hombres los que siguen teniendo participación en su preparación; sin embargo, puede inferirse que un grupo de mujeres aún cuando es reducido ha buscado su preparación técnica. Es claro por los resultados que las mujeres tienen aspiraciones por aprender un oficio y de esta manera generar ingreso económico pa ra su grupo familiar.
TABLA 2 Edades de las personas enc uestada s Edades
Fr
%
10 – 15 años
24
34.28
16 – 20 años
27
38.57
21 – 25 años
8
11.43
26 – 30 años
2
2.86
M as de 30 años
9
12.86
70
100
TOTAL
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes c apacitados en la institución
Los datos resultan mu y interesantes, ya que el 34.28% de ellos se ubican entre las edades de 10 y 15 años, están entre la pubertad y la adolescencia; son fáciles de incorporarlos a los grupos de maras o pandillas, pero también tienen interés en capacitarse o en aprender un oficio , que les permita insertarse a un puesto de trabajo; un 65.72% se ubicaron entre los 16 y 30 años, que igualmente muestra el interés por aprender un oficio, siendo estos quienes tienen mayor posibilidad de insertarse en la actividad laboral.
TABLA 3 Estado Fam ilia r de las pe rsonas encuestadas Estado Fam ilia r
Fr
%
Solteros (as)
58
82.86
Casados (as)
7
10.00
Acompañados (as)
2
2.86
Divorciados (as)
1
1.43
Viudos
2
2.85
TOTAL
70
100%
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
El cuadro muestra que el 82.86% de las personas son solteros, esto indica que son jóvenes sin más compromiso que su grupo familiar; y por lo tan to son los más propensos a participar en grupo s de conducta irregular. Aunque en menor escala, pero es importante mencionar que existe un 10% de personas unidas en matrimonio.
TABLA 4 Integración de estos grupos fam iliares Integrantes
Fr
%
38
54.29
Padre y hermanos
4
5.71
Madre y hermanos
23
32.86
5
7.14
70
100
Padre, madre y hermanos
Otros parientes TOTAL
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
La desintegración familiar está presente en estas personas, ya que el 32.86% de ellos viven únicamente con la madre y hermanos, o sea que hay ausencia del padre en estos grupos familiares; es decir,
que hace falta el modelo
paternal que es quien debe ayudar a orientar y proteger a los hijos; hay adem ás un 5.71% que vive con su padre y hermanos, faltando el modelo ma ternal. Sin embargo, un 54.29% forman una familia integrada, conformada por los progenitores y los hijos; además, el 7 .14% expresaron que viven con sus abuelos, la razón es que los papás se fueron para los Estados Unidos y quedaron al cuidado de ellos.
TABLA 5 Tenencia de la viv ienda de estos grupos fam ilia res Tenencia
Fr
%
Propia
50
71.43
Alquilada
15
21.43
Con promesa de venta
2
2.86
En comodato
3
4.28
70
100
TOTAL
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
En cuanto a la tenencia de la vivienda , el 71.43% expresó que es propia , es decir que es del grupo familiar y no pagan ningún valor por ella, el 21.4 3% la alquila, el 2.86% la está pagando todavía y el 4.28% la tiene en comodato, es decir, que le han dado lugar donde vivir, a cambio de que la cuiden para evitar que la destruyan o saqueen, ya que están en lugares de alto grado de peligrosidad, en las zonas de Mejicanos y Cu scatancingo. La tenencia de la vivienda en alguna forma está sujeta a la obtención de ingresos, y é stos dependen de contar con trabajo remunerado.
TABLA 6 Trabajaba a nteriorm ente Respuestas
Fr
%
SI
29
41.43
NO
41
58.57
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
Puede verse que el 41.43% de estas personas ha tenido anteriormente un trabajo, y muchos de ellos lo tienen todavía; sin embargo, el 58.57% no ha trabajado antes. En este grupo se ubican los jóv enes entre 10 y 15 años de edad, razón por la cual están bajo el dominio de su s padres o familiares y no tienen necesidad de trabajar.
TABLA 7 Pertenecen o sim patizan con algún grupo de m aras Respuestas SI NO NO CONTESTA TOTAL
Fr
%
2
2.86
60
85.71
8
11.43
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
Como era de esperar, los jóvenes no aceptan fácilmente pertenecer o simpatizar con algún grupo de maras. Del grupo investigado únicamente el 2.86% expresó categóricamente su pertenencia a estos grupos, mientras el 85.71% manifestó no tener ninguna afinidad con dichos grupos, el 11.43% se negó a contestar la pregunta; sin embargo, por sus características pueden inferirse que si pertenecen a cualquiera de los grupos de maras, pero les es difícil aceptar esta situación.
TABLA 8 Presencia de grupos de m aras en el lugar de reside ncia de las pe rsonas. Respuestas
Fr
%
SI
28
40.00
NO
26
37.14
LO DESCONOCE
16
22.86
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
El 40% de los encuestados reconocen que donde ellos residen , existe presencia de grupos de maras, pero no por ello pertenecen a estos grupos; el 37.14% manifestó que no hay grupos de maras, mientras el 22.86% expresó desconocer la existencia o presencia de éstos
grupos en sus lugares d e
residencia, lo cual es preocupante desconocer esta situación, dado la influencia que ejercen sobre la juventud y su capacidad de persuasión y convencimiento de nuevos miembros, quienes en algún momento pueden realizar acciones violentas o delictivas, perjudiciales para la población, en especial para la juventud.
TABLA 9 Participación de estos jóvenes en acciones de los grupos de m aras. Respuestas
Fr
%
6
8.57
NO
64
91.43
TOTAL
70
100
SI
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
Como se puede observar en la tabla, es m ínima la acepción de los jóvenes en cuanto a su partición directa en acciones delictivas que identifican a los grupos de maras. Es evidente el temor que tienen en aceptar está situa ción, pues en cuadro # 7 únicamente dos jóvenes dijeron pertenecer a los grupos de maras; sin embargo, en acciones de estos grupos han participado cuatro jóvenes más. Pero, el 91.43% manifestó que no ha participado en ninguna acción de estos grupos, lo cual no es del todo confiable.
TABLA 10 Han realizado acciones ilícitas alguna vez Respuestas
Fr
%
SI
9
12.86
NO
61
87.14
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
Puede observarse la tendencia de los jóvenes a n o aceptar su pertenencia a los grupos de maras así como la s acciones que identifican a estos grupos, ya que sólo el 12.86% ha reconocido haber cometido acciones de tipo ilícitas , es decir contrarios a la ley. Sin embargo la gran mayoría o sea el 87.14% nie ga categóricamente todo vínculo con las acciones de estos grupos.
TABLA 11 Ha sido detenido a lguna vez por realizar estas acciones. Respuestas SI NO TOTAL
Fr
%
9
12.86
61
87.14
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en l a institución
El 12.86% de los jóvenes afirmaron haber participado en acciones ilícitas propias de los grupos de maras, por lo cual en su momento fueron detenidos por la Policía Nacional Civil. Como se puede observar , es el mismo porcentaje del cuadro #10 que aceptaron haber realizado acciones ilícitas, esto indica que son los mismos jóvenes. Mientras el 87.14% negó toda relación con este tipo de acciones.
TABLA 12 Tipo de acción realizada Tipo de acción
Fr
%
Robo
5
55.55
Lesiones
4
44.45
TOTAL
9
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
Tal como se mostró en la tabla #11, sólo nueve personas han reconocido tener afinidad con los grupos de maras, y han manifestado que fueron detenidos por la autoridad, aceptando además que el tipo de delito más frecuente fue el robo con un 55.55% seguido del delito de lesiones con el 44.45% no se reporta la extorsión, que es el delito que últimamente se está come tiendo por las maras.
TABLA 13 Com o llegaron a este centro de form ación y orientación Respuestas
Fr
%
12
17.14
Remitido por Tribunal
5
7.14
Por medio de amigos
13
18.57
Reclutado por el centro
40
57.15
TOTAL
70
100
Por vivir en el lugar
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la inst itución
La razón de ser de este centro, es a yudar a las personas integrantes de grupos de maras, acción que realizan directamente a través de su personal; de ahí que el 57.15% expresó que ha sido reclutado por el centro; significa que la institución está logrando sus objetivos incorporando cada vez más a los jóvenes para prevenir su incorporación a cualquier grupo de maras; el 17.14% manifestó que reside en el lugar y vale la pena hacer uso de sus servicios, el 7.14% son jóvenes remitidos por un tribuna l; estos jóvenes gozan de libertad asistida; es decir, que evalúan su comportamiento y le dan un voto de confianza, para que salgan del centro en el día a prepararse, un 18.57% han llegado al centro porque los han invitado sus amigos que están capacitándos e o bien han concluido su capacitación.
Aún cuando el centro fue creado en 1986 para ayudar a los sectores de baj os recursos o en condiciones de extrema pobreza, en la actualidad otorga becas a los de escasos recurso s, pero también cobra una cuota por los cursos que imparten.
TABLA 14 Costo de sus estudios en e l Ce ntro de Form ación Costo Mensua l
Fr
%
$4.00
2
2.86
$5.00
20
28.57
$10.00
3
4.29
$15.00
9
12.86
$20.00
4
5.71
Becados
32
45.71
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes c apacitados en la institución
Los datos del cuadro son evidentes
por sí solos, ya que permite ver que los
jóvenes pagan un valor por su capacitación, los precios oscilan entre $ 4 y $20.00 dólares, en algunos casos reciben media beca o beca completa esto depende de la condición económica que tengan los aspirantes a aprender un oficio. Existe un porcentaje bastante considerable (45.7% ) que son becados por los tribunales correspondientes, o por otras instituciones.
TABLA 15 Persona o instituc ión que paga los estudios de estos jóvenes Respuestas
Fr
%
36
51.43
Tribunal
2
2.86
Becados por la Iglesia
7
10.00
Becados por otras instituciones
25
35.71
TOTAL
70
100
Padre y Madre
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
Los datos muestran que el 51.4 3% cancelan una cuota, y se la pagan sus padres, el 2.86% es el tribunal quien le paga la cuota; becados directamente por la iglesia el 10.00% y becados por otras instituciones representa el 35.71% . Es de hacer notar que los jóvenes tienen quién les financié sus estudios, lo que demuestra el fácil acceso a los cursos de capacitación por parte del centro. Es más, los jóvenes con más dificultad para acceder a los cursos, son becados incluso por la Iglesia (10% ).
TABLA 16 Cursos y /o capacitaciones que im parte la institución Cursos que se ofrecen
Fr
%
12
17.14
5
7.14
Electricidad domiciliar
20
28.57
Reparación y Mantenimiento de computadora
20
28.57
Computación
13
18.57
TOTAL
70
100
Dibujo y pintura Corte y Confección
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
La tabla nos muestra que entre lo s oficio s de mayor predilección por estos jóvenes están: electricidad domiciliar,
y reparación y mantenimiento de
computadoras (20% cada uno) lo cual está acorde a los avances tecnológicos de la sociedad, y que por tanto pueden accesar más rápidamente a un empleo dependiente, o en último caso instalar su propio taller.
TABLA 17 Tiem po de estar capacitándose en la institución Tiem po de estar preparándose
Fr
%
1- 3 meses
55
78.57
3 – 6 meses
13
18.57
6 – 12 meses
1
1.43
Mas de 12 mese s
1
1.43
70
100
TOTAL
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
El centro ofrece cursos que van de los 3 a los 6 meses, aún cuando algunos pasan hasta un año por diversos motivos ; como todo proceso de aprendizaje , este
tipo
de
capacitación
debe
ser
evaluado;
correspondientes, lo cual no fue nuestro objetivo.
por
las
instancias
TABLA 18 Valoración que hacen los jóvenes de su proceso de aprendizaje Respuestas
Fr
%
Excelente
32
45.71
Muy bueno
29
41.43
Bueno
6
8.57
Regular
3
4.29
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
La valoración que los usuarios del servicio hace d e la institución está entre muy bueno y excelente con un 87% , lo que muestra la importancia y grado de aceptación que se tiene de dichas capacitaciones.
TABLA 19 La enseñanza está de acuerdo a las habilida des a estas personas . Respuestas
Fr
%
SI
57
81.43
NO
13
18.57
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
Para el 81.43% de estos jóvenes, la enseñanza responde a sus habilidades, sin embargo, para el 18.57% no responde a sus habilidades, lo cual p uede deberse a la falta de orientación pertinente. Por otra parte, uno de los principales problemas que enfrentan los salvadoreños una vez capacitados es la falta de un puesto de trabajo, lo cual es más difícil para los jóvenes con pertenencia a los grupos de maras. Este
centro
no
sólo
capacita
a
los
jóvenes,
si
no
que
además
administrativamente cuenta con una Bolsa de Trabajo, que está a cargo de una persona; sin embargo, no todos los jóvenes conocen de esta instancia creada para ayudarlos a obtener un trabajo.
TABLA 20 Conocim iento de estas personas s obre la B olsa de Traba jo Respuestas
Fr
%
SI
25
35.71
NO
45
64.29
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
En base a esta información el 35.71% de las personas tienen conocimientos de la Bolsa de Trabajo que tienen esta institu ción, lo que ofrece a ellos alguna oportunidad para conseguir un empleo una vez capacitados; pero la gran mayoría 64.29% de las personas e xpresaron no saber de su existencia. Al indagar en el centro acerca de la efectividad de la Bolsa de Trabajo, se conoció que hacen una labor de dos formas; a la primera le llaman de Orientación, en la que brindan información de empresas donde pueden ser colocados y la forma cómo deben de presentarse en estos lugares; del año 2004 al 2006 ha orientado un total de 350 jóvenes, pero no saben cuantos realmente han sido colocados en un puesto de trabajo; la segunda forma, es la que definen como Inducción; es una acción más directa con los jóvenes, y a decir verdad del centro, bajo esta forma directa, han logrado insertar 80 jóvenes capacitados del año 2005 al 2006. Creemos que esta Bolsa de Trabajo, debe fortalecerse en cuanto a recursos humanos para que cumpla el objetivo de una manera más eficaz, ya q ue la inserción laboral es la estrategia más viable y humana ante el flagelo de la delincuencia juvenil.
TABLA 21 Lo que esperan las pe rsonas una vez concluyan su capacitación Respuestas
Fr
%
Que lo empleen
30
42.86
Instalar su propio taller
15
21.43
No sabe
25
35.71
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
Es claro que toda persona que se esté preparando en un oficio o en un área técnica, espera que una vez concluida su formación logre coloca rse en un empleo. Tal como lo muestra la presente tabla, el 42.86% de los jóvenes esperan insertarse en un puesto de trabajo, o en su caso el 21.43% desea instalar su propio taller, desde luego que esto hace necesario otro elemento como es el apoyo o finan ciamiento para el establecimiento del mismo. E s aquí donde hace falta una política real de integración del sector juvenil por parte del Estado, que atienda y promueva estas opciones de inserción como mecanismo para prevenir el flagelo de la violencia juven il, o en su defecto evitar que los jóvenes vean en las pandillas la “solución a sus problemas”.
TABLA 22 Está buscando tra bajo Respuestas
Fr
%
SI
16
22.86
NO
41
58.57
NO QUIERE TRABAJAR
13
18.57
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
El 22.86% de estas personas expresaron que si han buscado trabajo, y que a la fecha no han logrado obtenerlo, el 58.57% fue categórico al decir que no han buscado un trabajo, y lo peor aún es que el 18.57% no quiere trabajar, esto es comprensible pues puede ser las personas que están en el rango de edades entre 10 y 15 años y que no necesitan un trabajo de manera urgente, ya que no tienen compromisos de hogar e hijos a quien sostener.
TABLA 23 Respuestas recibidas por estas personas al buscar un em ple o.Respuestas
Fr
%
De aceptación
6
8.57
De rechazo total
6
8.57
De indiferencia
4
5.71
No han buscado
54
77.15
TOTAL
70
100.00
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
En la presente tabla se ratifica que 16 personas (22.86% ) han hecho gestiones para obtener trabajo, y de ellos sólo 6 fueron objeto de buena aceptación por parte de quien les atendió, pero sin lograr el objetivo propuesto (empleo), los restantes 10 solicitantes fueron objeto de rechazo o indiferencia por su presunta participación en maras. El mayor porcentaje (77.15% ) no han buscado trabajo o no quieren trabajar.
TABLA 24 Valoración que hacen estas personas con relación al rechazo rec ibido. Respuestas Estigma con estos grupos
Fr
%
70
100.00
70
100
Falta de confianza Para evitar problemas TOTAL
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
Los jóvenes creen que el rechazo obedece al E stigma que la sociedad tiene con estos grupos, es decir, el 100% expresó que el rechazo obedece al estigma que se ha creado hacia ellos, o sea que no creen que están rehabilitados y preparados para enfrentar nuevas situaciones, sobre todo la de convivir con otros jóvenes y de sentirse personas útiles. Por otra parte, vale la pena recordar los discursos del gobierno y de sus instituciones, que por largos años han venido expresando el deseo del Estado por hacer de estos jóvenes entes útiles a su familia, a la productividad y a la sociedad; para ello han hablado del desarrollo de programas y proyectos orientados a capacitarlos, a rehabilitarlos y a reinsertarlos en un puesto de trabajo; reconocen que es la única forma de evitar su pertenencia a esto s grupos y su accionar violento como único med io para lograr sus objetivos no satisfechos.
TABLA 25 Cree usted que el Estado está interesado en reinsertarlo laboralm ente Respuestas
Fr
%
SI
11
15.71
NO
59
84.29
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la i nstitución
La percepción que tienen los jóvenes de los programas que impulsa el Estado para insertarlos en un puesto de trabajo e s más que evidente, ya que el 84 .29% manifestó que el Estado no muestra ningún interés para inse rtarlos en un puesto de trabajo. Este equipo investigador considera que el Estado Salvadoreño intenta únicamente adaptar y ajustar al joven a un proceso de reducir sus actitudes violentas, para impedir o eliminar conflictos a travé s del ajuste y la adaptación; sin embargo esto no es suficiente, debe trabajarse en políticas estatales de inclusión juvenil y sobre todo en donde se tome en cuenta la realidad de este grupo social vulnerado.
TABLA 26 Conocim ientos de estas personas de un program a o proyecto orientado a capacitarlos y a reinsertarlos laboralm ente.
Respuestas
Fr
%
Si
20
28.57
No
50
71.43
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
De estas personas, únicamente el 28.57% manifestó tener conocimientos de la existencia de otros esfuerzos como el que realiza la iglesia de Mejicanos, mientras que el 71.43% fue claro en decir; que no saben que existan otros centros como éste. El grupo investigador considera que son poquísimos los centros que capacitan a jóvenes; esto hace evidente el descuido por parte del Estado de la atención a este grupo vulnerado en sus derechos más elementales, como es la de recibir educación o capacitación técnica para enfrentarse a la etapa productiva de todo ser humano.
TABLA 27 Ha sido benefic iado co n algún program a o proyecto anteriorm ente Respuestas
Fr
%
Si
20
28.57
No
50
71.43
TOTAL
70
100
FUENTE: Cuestionario adm inistrado a los jóvenes capacitados en la institución
Puede verse que el mismo porcentaje que manifestó conocer de otros programas de esta índole, es el mismo que hoy está expresando haber sido beneficiado 28.57% , supuestamente refiriéndose al centro de formación investigado; mientras que un 71.43% expresó que no han recibido ningún beneficio hasta ahora por parte d el Estado o de otra institución; muy a pesar de que el Estado ha manifestado por los medios de comunicación , interés por la reinserción de los jóvenes pertenecientes a grupos de pandillas especialmente .
2.3. Fo rm ulación Teórico – Metodológico de lo Investigado
Este trabajo de investigación tiene como propósito evaluar los factores que inciden positiva o negativamente en jóvenes que están vinculados o no a las maras y que son capacitados en el Centro de Formación y Orientación, Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia de M ejicanos: al final del trabajo de campo y vaciada la información este equipo de investigación puede afirmar la relación que existe entre los factores sociales, la capacitación y los esfuerzos institucionales y esta tales por insertar a los jóvenes en un pue sto de trabajo.
El trabajo de investigación lo realizaron estudiantes egresados de la Carrera Licenciatura en Trabajo Social, con el objetivo de poner en práctica los conocimientos teóricos me todológicos en el abordaje de un problema que afecta a los sectores sociales, como es la violencia expresada por los jóvenes simpatizantes o no con los grupos de maras, o con pertenencia.
Los grupos de maras tienen una gran facilidad por enrolar a otros jóvenes a su grupo, la manera de hacerlo es haciéndolo sentir bien, valorar algunas habilidades y sobre todo darles el apoyo que en sus hogares no se les brinda.
Este Centro de Formación y Orientación de la Iglesia Católica de Mejicanos, orienta sus esfuerzos a capacitar a los jóvenes en un oficio para que puedan insertarse en el mercado laboral. En función del trabajo , este equipo de investigadores identifica algunas conclusiones o inferencias:
Al inicio del trabajo se hacía mención a la categoría de jóvenes y que hoy se identifica del género masculino 61 y del género femenino 9; lo que
permite señalar que los patrones de la cultura machista en este grupo están presentes, ya que participan ma s personas del género masculino.
Además, podemos decir que estas personas se concentraron en las edades de 10 a 20 años (51) y entre 21 y más de 30 años (19). Este equipo de investigadores definió que se iban a investigar personas entre 12 y 30 años; sin embargo , las personas mayores de 30 son las que acompañan a la mayoría de jóvenes, quienes son hijos o nietos.
Es interesante hacer notar que en este grupo de personas investigadas 58 de ellas se ubican en la categoría de solteros, es decir, sin mayores compromisos familiares, que bien puede ser un elemento negativo o positivo para aprender un oficio o insertarse laboralmente.
Con mucha frecuencia se señala que los jóvenes integrantes de grupos de maras
pertenecen a familias desintegradas, que en este caso 38
(54.29% ) integran una familia tradicional, el resto viven con la madre, el padre y otros parientes.
Se señala además, que los jóvenes que integran estos grupos forman familias de pocos ingresos o de extrema pobreza; en este caso el 100% dispone de una vivienda, ya sea propia, alquilada, con promesa de venta o dada en comodato; por lo que puede decirse que el factor económico en estos jóvenes es aceptable.
En un principio el equipo de investigadores dedujo que muchos de estos jóvenes pertenecían o simpatizaban con los grupos de maras, sin embargo, en forma categórica únicamente dos reconocieron pertenecer a estos grupos, pero al contrastar e sta informació n con la tabla No. 9 y 10; se concluyó que 6 jóvenes reconocen haber participado en acciones de estos grupos, y que 9 han realizado acciones ilícitas entre ellas robo y lesiones y por ello han sido cap turados.
En cuanto a la capacitación que reciben en el centro , las personas tienen que cancelar un valor económico para ser atendido , valor que va desde
$4.00 hasta $20.00. Del grupo objeto de investigación 32 de ellas estudian becados: (7 son becados por la iglesia y 25 por otras instituciones) y el resto si paga su cuota.
La capacitación técnica o el aprendizaje de un oficio se concentró en tres cursos:
Electricidad
Residencial,
Reparación
y
Mantenimiento
de
computadoras y Computa ción, 53 personas reciben estos cursos; 17 reciben Dibujo y Pintura y Corte y Confección. El curso de Corte y confección tiene una duración de 6 meses, Dibujo y Pintura 10 meses, Reparación y Mantenimiento de computa doras, tiene un promedio entre 3 y 9 meses, Electricidad entre 5 y 6 meses y manejo de Programas de Computación, 6 me ses.
Aún cuando no es el objetivo de este trabajo evaluar el aprendizaje que han tenido las personas en esto s curso s, a partir de la valoración que ellos hacen puede decirse que 67 calificaron su aprendizaje entre bueno y excelente, únicamente 3, la calificaron de regular; esta información fue verificada por medio de los profesores, quienes reafirmaron que todos ellos muestran interés por aprender un oficio o capacitarse técnicamente, señalando que es el área de computación lo que m ás les atrae, por otra parte, 57 personas (81.43% ) expresaron que los cursos que reciben están de acuerdo a sus habilidades.
Una limitante encontrada en esta institución es el desconocimiento que la mayoría de entrevistados tienen sobre la Bolsa de Trabajo , ya que únicamente 25 (35.71% ) manifestaron conocer de esta iniciativa del centro.
Al indagar acerca de las acciones realizadas p or el Centro para colocar a esta s personas en un puesto de trabajo, se conoció que las acciones las realizan de dos formas: una a través de la orientación e inducción, que consiste en indicarle dónde debe presentarse y la forma en que debe hacerlo; en este proceso el
Centro ha orientado a 350 personas; sin embargo, no sabe cuantos de ellos fueron colocados. La otra forma es la colocación directa , que consiste en atender solicitudes de los posibles empleadores, en este esfuerzo , este centro colocó 80 personas entre enero y agosto de 2006. Puede decirse que esta institu ción está logrando su objetivo de capacitar e insertar a los jóvenes en un puesto de trabajo.
Además del total de la muestra que se investigó únicamente 25 de ellos no saben que hará una vez finalice su capacitación; lo anterior es un grave problema, ya que la colocación no depende del centro, si no de la persona.
Relacionado con lo anterior puede decirse que únicamente 16 personas de las investigadas, han buscado colocarse en un puesto de trabajo; 6 recibieron respuestas de aceptación, 6 fueron de rechazo total, 4 fueron recibidos con indiferencia; es más, la s 16 personas fueron categóricos al decir que las respuestas obtenidas estaban influenciadas por el estigma que la sociedad tiene con los grupos de mara.
Además en la parte referida a los alcances se señaló los esfuerzos que hace el Estado por preparar a estos jóvenes que integran grupos de mara e insertarlos laboralmente, puesto que considera que es la forma de evitar las acciones violentas o la incorporación de más jóvenes a estos grupos; sin embargo, de acuerdo a la información obtenida en este trabajo , únicamente 11 personas creen que el Estado tiene interés por hacer de ellos personas útiles, ya sea a su familia o a la sociedad, 20 personas manifestaron
haber sido
desarrollados por el Estado.
beneficiado
con
este
tipo
de
programas
2.4. Desarrollo y Definic ión Teórica
Partiendo de la lectura y el análisis realizado para conocer, comprender y explicar el fenómeno de la violencia expresada por los jóvenes , este equipo de investigadores egresados de la Carrera de Trabajo Social, considera que los modelos o enfoques acerca de la violencia, tienen que ver con la historia de la violencia misma y con la historicidad de la naturaleza humana ; esto implica que la violencia; se concreta en cada realidad social y momento , de acuerdo a las circunstancias en las cuales se desarrolla la persona; para el caso salvadoreño esta conducta se materializa en una sociedad dividida en dos clases sociales opuestas entre si; ésto de acuerdo al materialismo histórico , es decir, la burguesía frente al proletariado, situación que ha con ducido a una violencia estructural por parte de ese grupo, apoyado por el Estado, ejercida contra una mayoría sin condiciones de vida digna. Esta idea se apoya en los hallazgos encontrados en el grupo de personas entrevistadas del Centro de Forma ción y Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica de Mejicanos; donde se reafirma que las secuelas del pasado conflicto armado (de los años (1980 – 1991)
continúan
reproduciéndose
generacionalmente,
apoyado
en
el
aprendizaje social directo de la violencia (modelaje) y de las condiciones sociales que desatan la posibilidad de realizarlas, tales como el poder real o simbólico, acceso a la s armas, e xclusión y marginación social, entre otras condiciones.
En este mismo sentido la percepción de los jóvenes investigados acerca de los programas de capacitación que impulsa el Estado para capacitarlos y reinsertarlos, es negativa ver (Tabla 25); ya que el 84.29% opina que el Estado no está interesado en tal propósito, e sto explica el comportamiento antisocial expresado por los jóvenes, induciéndolos a acciones violentas y actos ilícitos.
En este escenario social, la función del profesional de Trabajo Social, es importante, ya que parte de su quehacer profesional y operativo , es habilitar a los miembros del grupo hacia un proceso de sensibilización y concientización personal, capaz de establecer las relaciones sociales a un nivel óptimo de funcionamiento, lo que conduce paulatinamente a mejorar la interacción social de cada miembro del grupo.
En este orden, la cultura de la violencia, es un aspecto de suma importancia para la comprensión y abordaje del fenómeno, ya que ésta se arraiga en la cultura de la pobreza, la exclusión y la marginación social y económica, aunado a profundas injusticias sociales como el a utoritarismo , la represión, la censura y muerte. En este sentido se constató que las personas en proceso de capacitación en la institución , cancelan una cuota que oscila entre los $ 4 y $ 20 dólares, lo que hace difícil a juicio del grupo de investigadores una capacitación masiva de personas (ver cuadro 14 y 15), aún cuando pareciera
que
la
cantidad
no
es mucha;
sin
e mbargo, para
muchos
salvadoreños es difícil obtener esta cantidad, ya que amplios sectores sociales no cuentan con un trabajo estable que les asegure ingresos mensuales.
De igual manera la aplicación por parte del Estado de penas drásticas en el orden jurídico, como el Plan Mano Dura y Super Mano Dura, difícilmente serán parte de una solución real a la problemática de la violencia y las maras; en opinión del equipo, cualquier plan o iniciativa (privada o estatal) que no parta de las necesidades reales y concretas de lo s jóvenes, e stará condenada al fracaso; y sobre todo, alejada de una salida ética y humana, que respete los derechos de este sector vulnerado, como es la juventud, que según la Constitución de la República son la base de la socie dad, y por tanto, son el futuro inmediato, siendo responsabilidad del Estado prepararlos para hacer de ellos personas productivas, útiles a su familia y a la sociedad.
La labor del profesional en Trabajo Social a nivel institucional, debe ser la de orientar, habilitar y animar a las personas para pensar, sentir y actuar con claridad y responsabilidad; además deberá traba jarse en el descubrimiento de las potencialidades de cada uno de sus miembros, situación que no se desarrolla en el Centro donde se llevó a cabo la investigación y que a juicio del equipo de investigación es determinante para el éxito de esta iniciativa de la Iglesia Católica o de cualquier otra institución, que trabaja en la formación técnica de las personas para facilitarles su incorporación laboral.
Kisnerman, Natalio. (Citado por Emma Ruvilia Muñoz Elías) , sostiene que: “el método de Trabajo Social de grupo , es un instrumento esencial de motivación y de educación social de los ciudadanos, tendientes a restablecer las relaciones sociales a nivel óptimo y orientar a los integrantes del grupo para reflexionar sistemáticamente sobre redes de relaciones sociales satisfactorias, que eliminen las acciones que promuevan violencia familiar y social a distintos niveles” 20 . Se constató que en este Centro de Formación y Orientación se realiza un pequeño esfuerzo por trabajar algunos aspectos educativos de orden cívico – democrático, es decir, de respeto, de colaboración, de solidaridad y de ayuda mutua. Sin embargo , no existe un proceso educativo que se oriente al desarrollo de la personalidad con actitudes positivas y en un ambiente óptimo de desarrollo humano.
De igual manera el equipo investigador considera que la labor del profesional en Trabajo Social, debe ir encaminada al establecimiento de relaciones de empatía, respetando en todo momento la s necesidades por las cuales el individuo se asocia y sobre todo estimulando las acciones creadoras y
20
M uñoz Elías; Emma Ruvilia: M etodología de Trabajo Social II: Universidad Rafael Landivar: Guatemala. 1995. Pag. 16
de bienestar social, tan necesaria en este estado de crisis social que se vive actualmente en El Salvador. Finalmente, este equipo de investigadores considera que en tanto los Centros de Capacitación como el investigado y otros, no form en parte de un proyecto de nación, difícilmente las personas participarán de tales iniciativas, ya que éstas no parten de su propia realidad y sobre todo no hay seguimiento a la labor de capacitación realizada, ni mucho menos esfuerzos su ficientes por insertarlos en un puesto d e trabajo.
CAPITU LO III: M ARCO OPERA TIVO
3.1. Descripción de los s ujetos investigados
Este trabajo de investigación se realizó en el Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica del municipio de Mejicanos, partiendo de que en el se atendían jóvenes con pertenencia o simpatizantes de los grupos de maras; y que además realiza ban acciones violentas; tanto que el trabajo de investigación inicial llevaba como título “Impacto de los Programas realizados por la Iglesia Ca tólica en la disminución de la violencia juvenil en el municipio de Mejicanos, San Salvador, junio – diciembre 2005.”
Sin embargo, luego de recolectar la información que el trabajo requería se verificó la pertenencia de estos jóvenes a los grupos de mara s y puede inferirse que por apariencia física y conductual no sobrepasan el número de nueve, dos aceptando pertenecer a un grupo de maras y siete reconociendo el desarrollo de acciones de violencia callejera con el agravante de haber sido detenido s por la Policía Nacional Civil.
Puede ser que como fruto de e star recibiendo capacitación o tecnificación en un oficio, así como esta r recibiendo orientación de tipo religiosa y de comportamiento,
puede
percibirse
que
ya
estos
jóvenes,
no
participan
directamente en las a cciones de estos grupos y má s bien se encuentran en un proceso de reintegración familiar, social, educativa y con miras a la búsqueda de insertarse en un puesto de trabajo.
Además, un buen número de ellos demostraron interés por instalar su propio taller o una pequeña empresa , dependiendo del oficio o tecnificación recibida, vale destacar que en esta labor de capacitación y orientación que desarrolla el centro, ha logrado involucrar a miembros del grupo familiar, que en algunos casos son la mad re, el padre o hermanos mayores. Por ello podemos conceptualizar que el grupo inicial que se tuvo como objeto de investigación con pertenencia o vinculación a las maras, actualmente es un grupo más bien de integración familiar de amigos o compañeros, que tienen un único propósito , el cual es, desvincularse por completo de la mara y convertirse en personas útiles , tanto a su grupo familiar como a la sociedad; y si logran colocarse en un puesto de trabajo,
poner su propio negocio o taller, se convertirán en
un grupo
económicamente productivo que vendrá a generar ingresos propios y a lo mejor, más fuentes de trabajo.
Puede afirmarse entonces que aún cuando el centro no está realizando a cabalidad un proceso de inserción laboral si ha logrado que estos jóven es vean desde otra óptica los problemas que enfrentaban y busquen la forma de ser útiles o bien servir de ejemplo para sus antiguos compañeros.
3.2. Procedim iento para la recopilación de datos . El trabajo de investigación se realizó en el Centro de Formac ión y Orientación Padre “Rafael Palacios”, de la Iglesia Católica de Mejicanos; en la aproximación inicial que se hizo, se conoció que el centro atiende jóvenes de ambos géneros, que buscan aprender un oficio o tecnificarse. La Iglesia Católica de Mejicanos busca evitar el desarrollo de acciones violen tas, o bien prevenir que se incorporen a los grupos de mara, que en la actualidad son un fenómeno so cial.
Con ese conocimiento previo se reorientó el trabajo de investigación, titulado: “Factores que influye n en la inserción laboral de los jóvenes vinculados a la violencia o a las maras, que han sido capacitados en el Centro de Formación y
Orientación Padre “Rafael Palacios”, de la Iglesia Católica de Mejicanos; año 2006”.
Para definir la muestra se conside ró trabajar con los jóvenes de ambos géneros que su edad fuera entre 12 y 30 años, los cuales sumaros 240 personas. Para determinar la muestra se empleó la fórmula estadística para poblaciones finitas, la cual se denota de la siguiente manera:
n=
Z 2 .P.Q.N ( N 1) Z 2 .P.Q
Mediante la aplicación matemática se determinó una muestra de 91 personas de ambos géneros; sin embargo, en el Centro de Formación se logró administrar 51 cuestionarios a igual número de personas; para co mpletar la muestra se buscaron dom iciliarmente, pero las direcciones proporcionadas en el Centro, no eran correctas y únicamente se obtuvieron 19 direcciones correctas. Finalmente se tuvo una muestra de 70 personas de ambos géneros entre 1 0 y 30 años.
Para recolectar la información se diseño un cuestionario de 27 preguntas; 4 de identificación general y 23 de datos específicos, con relación a los objetivos propuestos.
El
cuestionario
fue
llenado
directamente
por
el
equipo
de
investigadores con la información proporcionada por las personas; esto para evitar que proporcionaran información que no fuera útil a este trabajo.
Además, se diseñó una guía de entrevista para llevarla a cabo con el personal que labora en el Centro; también se diseñó una guía de observación , para observar los aspectos de apariencia física y de comportamiento de los jóvenes.
Luego de administrar el instrumento se tiene una muestra de 61 personas del género masculino y 9 del género femenino, y en las edades de: entre 10 y 15 años, 24; entre 16 y 20 años 27; entre 21 y 25 años 8; entre 26 y 30 años 2; y con más de 30 años 9. Este último grupo corresponde a personas adultas que acompañan a los más jóvenes, y que también están aprendiendo un oficio. De este grupo 58 personas poseen estado
familiar de solteros, mientras
que 7 son casados, 2 acompañados, 1 viudos y 2 divorciados. De los jó venes únicamente 2 aceptan pertenecer a los grupos de mara, sin embargo, 9 reconocen que han realizado acciones ilícitas y además han sido detenidos por la Policía Nacional Civil; 5 de ellos detenidos por robo y 4 por lesiones.
Por otra parte únicamente 16 personas, han buscado trabajo, 41 no lo han hecho y 13 no quieren trabajar; 6 personas expresaron haber sido rechazados; sin embargo, las 70 personas expresaron de alguna manera que la sociedad tiene con ellos un estigma so cial, lo que dificulta su inserción laboral.
Completada la muestra, se diseñ ó un cuadro de frecuencia simple, para vaciar la información; la tabulación se realizó por conteo simple de respuestas proporcionadas a los atributos evaluados; con ello, se llenó la columna de las frecuencias; la columna del porcentaje se obtuvo aplicando la fórmula de la Regla de Tres Simple.
3.3. Desarrollo de la P rueba Piloto
El equipo de investigadores y el asesor, consideraron que era necesario realizar una prueba piloto, antes de proceder a administrar el cuestionario; la prueba piloto se aplicó a 15 personas de ambos géneros; luego de revisar la información obtenida y dada la dificultad en algunos casos para dar respuestas, el cuestionario fue corregido, en el sentido de mejorar la redacción, suprimir y agregar preguntas.
3.4. Técnicas para el análisis de datos Un método que ayuda al análisis de este tipo de información , es proceder a realizar interpretación de los valores porcentuales de cada atributo evaluado; y luego completar el proceso con un análisis cualitativo del porqué se obtuvieron esos resultados. En ese proceso se realiza una descripción de los resultados, utilizando la información trabajada en el avance uno; en lo con cerniente a los antecedentes del problema, alcances y limitaciones y el recuento de las categorías y conceptos.
Finalizado el proceso de interpretación y análisis, se procedió a la construcción del Marco Empírico, que contiene los hallazgos en el trabajo de campo; utilizando para ello la información de los cuadros en el orden que el equipo de investigadores consideró que eran útiles.
Una parte muy importante en este trabajo , es el esfuerzo del equipo para construir un cuerpo teórico del fenómeno investigado, utilizando para ello teoría y método propio del Trabajo Social, lo que le proporciona a los resultados finales un carácter objetivo del problema investigado.
RECURSOS HUM ANOS -
3 alumnos egresados de Trabajo Social
-
1 Asesor
-
3 miembros actuando como Jurados Evaluadores
RECURSOS LOGÍSTICOS: -
Transporte
-
Compra de libros
-
Fotocopias
-
Utilería de escritorio
-
Digitación
-
Reproducción de instrumentos
-
Anillados
Cronograma de actividades TIEMPO
2 0 0 6 OCTUBRE 1
ACTIVIDADES DE INVESTIGACIÓN DOCUMENTAL 1. BÚSQUEDA DE INFORMACIÓN BIBLIOGRÁFICA UCA 2. BÚSQUEDA DE INFORMACIÓN BIBLIOGRÁFICA UES 3. BÚSQUEDA DE INFORMACIÓN BIBLIOGRÁFICA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA. 4. BÚSQUEDA DE INFORMACIÓN BIBLIOGRÁFICA UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA. 5. LECTURA Y FICHADO DE MATERIALES 6. DISCUSIÓN DE CATEGORÍAS Y CONCEPTOS. 7. DISCUSIÓN DEL USO DE LOS MATERIALES. 8. ELABORACIÓN DEL AVANCE No. 1 INVESTIGACIÓN DE CAMPO 9. VISITAS PREVIAS AL CENTRO DE FORMACIÓN Y ORIENTACIÓN PADRE “RAFAEL PALACIOS” 10. ELABORACIÓN DE INSTRUMENTOS 11. ADMINISTRACIÓN DEL INSTRUMENTO 12. PROCESAMIENTO DE LA INFORMACIÓN 13. INTERPRETACIÓN Y ANÁLISIS DE DATOS 14. ELABORACIÓN DEL MARCO EMPÍRICO 15. ELABORACIÓN DEL AVANCE No. 2 16. ELABORACIÓN DEL AVANCE No. 3
2
3
4
2 0 0 7
NOVIEMBRE
DICIEMBRE
1
1
2
3
4
2
3
4
ENERO 1
2
3
FEBRERO 4
1
2
3
4
MARZO 1
2
3
4
Marco C onceptual
4. Índice prelim inar
Este trabajo de investigación se orientó al conocim iento teórico de los grupos de maras y sus acciones de violencia; así como al conocimiento de las acciones que viene desarrollando el Estado y otras instituciones orientadas a brindar capacitaciones técnicas y en un oficio a éstos jóvenes, para insultarlos en un puesto de trabajo.
Es ese orden, en el marco conceptual se hace referencia al origen de las maras, que queda señalado para la década de los años 50, 60 y que son un problema causados por múltiples factores, se señala que surgieron en los Estados Unidos y fueron trasladadas a El Salvador de una manera forzada, ya que fueron deportados. El problema de las maras se vuelve internacional y hasta cierto punto tienen un carácter cultural.
En El Salvador se reconoce la mara 18 y la MS, las dos realizan acc iones entre ellas para control de territorio y control del mercado de la droga. Estos grupos son señalados por el gobierno como los promotores de la violencia, del tráfico de drogas, del crimen organizado y de las extorsiones.
Este grupo plantea que los jóvenes integrantes de maras son el resultado de la poca comunicación con sus padres, de la marginación y de la exclusión , que se da tanto en el hogar como en la sociedad en general. Además , son el resultado del proceso de modificación de la estructura familiar, es decir, ausencia de un miembro progenitor, ya sea por migración a Estados Unidos, muerte o abandono del grupo. Como bien señala FEPADE en su estudio , que como resultado de esta exclusión es fácil identificar cuatro grupos, e stos son:
Los jóvenes empobrecidos, marginados y excluidos Los grupos de maras Los deportados por actividades delictivas, los desmo vilizados de ambos bandos y Los niños de la calle.
En esta misma parte del marco conceptual se hace referencia a las respuestas del Estado para enfrentar el fenómeno de las maras, acciones que se identifican con la capacitación y la búsqueda de la inserción familiar, laboral y social; estas acciones se identifica con las que realiza el INSAFORP así como las que realiza la Iglesia Católica a través de l Centro “Juvenil Don Bosco” y del Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica de Mejicanos.
Además, contiene el planteamiento del problema que hace referencia a la estructura agro – exportadora, que para mantenerse incorporó la exclusión de los sectores rurales; además los efectos del conflicto armado que tuvo lugar durante 12 años con efectos negativos para la familia rural principalmente, que al no encontrar formas de reproducción en su lugar de origen emigraron hací a los Estados Unidos, que como resultado de su poca preparación y educación , rápidamente fueron incorporados a estos grupos de maras, que al cometer un ilícito son deportados hacía el lugar de origen en este caso El Salvador.
En este apartado se ha traba jado la parte referida a la violencia juvenil, vista como una expresión del joven para hacerse notar y reclamar espacios de atención, tanto familiares como sociales; y es que la violencia como queda señalada en este trabajo es el resultado de múltiples pro blemas, siendo el principal los de orden estructural, puesto que los excluye y los margina.
Sin embargo, algunos esfuerzos se vienen realizando por parte del Estado y sus institu ciones, así como de otros organismos; entre ellos el INSAFORP y la Iglesia Católica, específicamente la de Mejicanos, que es el lugar donde se ha realizado el presente estudio.
Las principales limitaciones identificadas, es que los esfuerzos que se realizan , tiene como punto de partida una visión política, con claras tendencias a señalar a los jóvenes como causantes de muchos problemas, principalmente de la violencia social y de algunas acciones ilícitas.
El plan mano dura y el plan mano amiga , aún cuando consideren que es necesario capacitar a los jóvenes en un oficio para inse rtarlos en un puesto de trabajo, en esencia no logra concretarse la inserción laboral, puesto que estos jóvenes se enfrentan a un problema de rechazo social, que es el resultado del Estigma Social que la sociedad tiene para con estos grupos.
Marco Teórico
En este apartado, se resume el esfuerzo de este grupo de investigadores por elaborar estas categorías de orden teórico , que sirva como base para otros trabajos orientados a esta misma situación.
La percepción de los jóvenes acerca de esto s programas qu e impulsa el Estado es negativa, un 84.29% opina de esta manera , dejando en claro un comportamiento antisocial de éstos jóvenes y generando por ello acciones violentas y a ctos delictivos.
Además, el Centro les da cierta orientación cívico - democrá tica, lo cual de alguna manera ha modificado el comportamiento de e stos jóvenes, tanto así, que
ya no participan directamente en las acciones de violencia , por el contrario, se encuentran en un proceso de acercamiento familiar, social y educativo, y con miras, a la búsqueda de lograr insertarse a un puesto de trabajo.
Por eso, puede afirmarse que aún cuando el Centro no está realizando a cabalidad el proceso de inserción laboral, si ha logrado que éstos jóvenes vean desde otra óptica los problemas que enfrenta y busquen la forma de ser útiles , así como servir de ejemplos a otro s jó venes que aún pertenecen a e stos grupos.
Especial abordaje teórico tiene en este apartado la función social del profesional
en
Trabajo
Social,
caracterizado
por
su
sensibilización
y
concientización, puesta al servicio de e stos grupos. El profesional en Trabajo Social es capaz de lograr establecer relaciones sociales a un nivel óptimo de funcionamiento, lo cual conduce necesariamente a mejorar la interacción social de cada miembro de un grupo.
En este trabajo de orden teórico , especial atención tiene la cultura de la violencia y por tanto requiere todo un proceso de comprensión y abordaje del fenómeno, ya que la violencia está enmarcada en la cultura de la pobreza, la exclusión, la marginación social y económica ; aunado además, a las injusticias sociales, al autoritarismo, la represión, la censura y la muerte.
Se deja señalado que la labor del profesional en Trabajo Social, debe ir encaminada al establecimiento de relaciones de empatía, respetando en todo momento las necesidades personales por las cuales el individuo se asocia y sobre todo estimulando las acciones creadoras y de bienestar social, tan necesarias en el Estado de crisis social que vive El Salvador actualmente.
Marco Operativo Los hallazgos de la investigación de campo realizada en el Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica de Mejicanos, permitió conocer que atienden personas que buscan ser capacitad as técnicamente o en un oficio co mo alternativa para insertarse en un puesto de trabajo o bien, reinsertarse en su grupo familiar. Es de aclarar que el número de menores de edad no han buscado trabajo precisamente por ser menores.
Cuando se inició el trabajo de la inve stigación se partió de que todos los que se encontraban recibiendo capacitación, pertenecían a las maras o simpatizaban con ellos; sin embargo del total de la muestra que en un principio se asumió que tenían pertenencia o simpatizaban con los grupos de maras, una vez realiza do este trabajo únicamente 2 aceptan pertenecer a este grupo, sin embargo 9 en total han sido detenidos por la policía bajo cargos de a cciones ilícitas.
Además, a pesar de que el objetivo básico del Centro es capacitarlo e insertarlos en un puesto de trabajo, no todas las personas han buscado la forma de hacerlo, los y las que lo han hecho, expresaron haber sido rechazados/as, basado en el E stigma Social que se tienen con ellos; además, la instancia creada en el Centro para hacer esta labor, no le da mayor seguimiento, e inclu so no tiene la divulgación suficiente, para que éstos jóvenes la reconozcan
como medio a
través del cual ellos pueden ser colocados en un puesto de trabajo.
En principio las personas de esta investigación, eran jóvenes con pertenencia o simpatizantes a grupos de maras, y que además r ealizaban acciones de violencia; pero una vez realizado el trabajo de investigación se verifico la pertenencia de éstas personas a grupos de maras y puede inferirse por apariencia física y conductual con pertenencia a grupos de maras, no sobre pasa a un grupo de 9.
BIBLIOGRAFÍA
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15. Santos de Escobar, Aída Luz y otro s. Ensayo s sobre Ju sticia Juvenil El Salvador 2004.
UNIVERSIDA D PEDAGÓGICA DE EL SALVADOR FACULTAD DE EDU CAC IÓN ESCUELA DE SA LUD Y MEDIO AMB IENTE LICENC IATURA EN TR ABAJO SOCIAL
PRUEBA PILOTO CUESTIONAR IO El objetivo de este instrumento, es recolectar información de estos jóvenes para inferir si el centro está logrando los objetivos a través de lo s programas de formación y orientación; es decir, si lo s jóvenes logran capacitarse , insertarse o reinsertarse laboralmente y sobre todo si se persiguen en ello que ha habido una disminución de sus acciones violentas. DATOS DE IDEN TIFICAC IÓN: 1. Género ___________ 2. Edad: ____________ 3. Nivel Educativo: ________________________________________________ 4. Estado Familiar: ____________________________________________ ____ DATOS ESPECÍFICOS 1. Tenencia de vivienda Propia ______ alquilada _____ promesa de venta _____ comodato _______ 2. Quienes integran su grupo familiar? Padre - madre – hermanos _______ Padre – hermanos ________ Madre – hermanos __________ 3. Ha trabajado anteriormente? SI ____
NO ____
4. Ha buscado trabajo actualmente ? SI ____ NO ____ 5. Cual ha sido la respuesta recibida ? De Aceptación: ________________
De rechazo: _______________ De indiferencia: ____________
6. Si fue de rechazo la respuesta , a que cree usted que se deba ? Estigma con estos grupos: __________
Falta de confianza: __________
Evitar problemas: _________________ 7. Pertenece o simpatiza con algún grupo de mara? SI ____
NO ____
No contesta _________
8. En su lugar de residencia hay presencia de estos grupos? SI ____
NO ____
Lo desconoce ________
9. Ha participado alguna vez en acciones de estos grupos ? SI ____NO _____ 10. Ha sido detenido alguna vez por realizar acciones con estos grupos ? SI ____
NO ____
11. Ha realizado algunas vez acciones ilícitas? SI ____
NO ____
12. Qué tipo de acciones: __________________________________________ ____________________________________________________________ 13. Ha sido privado de libertad por algunas acciones realizadas ? SI ____ NO __ 14. Cómo llegó a este centro: Por vivir en el lugar
_______
Remitido por tribunal competente
_______
Por amigos (as)
_______
Reclutado por el centro
_______
Para aprender un oficio
_______
15. Cuánto paga por su asistencia al Centro? ____________________________ 16. Quién le paga la asistencia al Centro? Becado ________
Tribunal ___________
Padres ________
Iglesia ___________
Otros _________
17. En qué área se está capacitando? Reparación y mantenimiento de computadoras ______________
Computación
__________ Floristería
__________
Corte y confección
__________ Cosmetología
__________
Modistería
__________ Elaboración de velas
__________
panadería
__________ Electricidad
__________
Piñatería
__________ Dibujo y Pintura
__________
18. Cuánto tiempo tiene de estar en los cursos? 1 a 3 meses ____________ 6 a 1 año
3 a 6 meses ________
_____________ más de 1 año _______
19. Cómo valora su proceso de aprendizaje? Excelente ____ Muy bueno ____ Bueno _____ Regular _____ deficiente _____ 20. Considera usted que la enseñanza está de acuerdo a sus habilidades y destrezas? SI ____
NO ____ No sabe _________
21. Sabe usted si el Centro se encarga de colocar a los jóvenes una vez han finalizado su curso: SI ____
NO ____ No sabe _________
22. Considera usted que es efectiva la bolsa de trabajo del Centro para buscarles colocación? SI ____
NO ____ No la conoce _________
23. Que le gustaría hacer una vez finalizado su curso ? Que lo empleen _______
pone su propio taller ______
otros ______
24. Cree usted que el Estado está interesado actualmente en insertar lab oralmente a los jóvenes con pertenencia o no a los grupos de maras? SI ____
NO ____
25. Conoce usted algún programa de este tipo aparte del Centro? SI ____
NO ____
26. Ha sido usted beneficiado con un programa de este tipo? SI ____
NO ____
27. Qué tipo de trabajo le consiguieron? _______________________________
UNIVERSIDA D PEDAGÓGICA DE EL SALVADOR FACULTAD DE EDU CAC IÓN ESCUELA DE SA LUD Y MEDIO AMB IENTE LICENC IATURA EN TR ABAJO SOCIAL
GUÍA DE ENTREVISTA Objetivo: Mediante este instrumento se buscará obte ner información de las personas encargadas del Centro de Formación y Orientación “Padre Rafael Palacios” de Mejicanos, así como de los responsables de la formación y orientación. Aspectos a abordar:
¿Desde cuando trabaja en el centro?______________________ _________
¿Cuál es su rol dentro del centro? _________________________________
¿En qué programas percibe que hay mayor participación de los jóvenes? _____________________________________________________________
¿A su juicio, el joven se siente interesado e n los programas? SI ___ NO ____ A veces ______
¿Cree usted que a partir de la capacitación recibida el joven se incorpora laboralmente? _________________________________________________
¿Considera usted que persiste en la sociedad el estigma con los jóvene s en cuanto a la mara? SI ___ NO ____
¿Considera usted que el joven ha sido realmente rehabilitado? SI ___ NO __
¿Todos los jóvenes que inician los programas, realmente los finalizan? SI ___ NO ____ ¿Por qué? ________________
Si no
los finaliza, ¿Cuál cree
usted
que
es la
causa
o la
razón?
____________________________________________________________
El Centro le da seguimiento a los jóvenes preparados para insertarlos laboralmente? SI ___ NO ____
Si no le da seguimiento, cu ál cree que es la razón : _______ _____________ _____________________________________________________________
Cuál es la efectividad de la bolsa laboral del centro:____________________ _____________________________________________________________
A cuántos jóvenes logra colocar el centro e n el año: ___________________ _____________________________________________________________
En qué áreas es más fácil colocar a los jó venes capacitados: ____________ _____________________________________________________________
Además de colocarlos laboralmente, que otro tipo de ayuda les proporcionan en el Centro: _________________________________________________
UNIVERSIDA D PEDAGÓGICA DE EL SALVADOR FACULTAD DE EDU CAC IÓN ESCUELA DE SA LUD Y MEDIO AMB IENTE LICENC IATURA EN TR ABAJO SOCIAL
GUÍA DE O BSERVACIÓN Dentro del proceso de investigación científica la observación es nece saria y elemental, ya que mediante ella se establece una relación directa entre el investigador y el sujeto investigado. El objetivo de esta observación es captar algunos aspec tos físicos y acciones conductuales de estos jóvenes, los cuales servirán para el análisis final de los resultados.
Aspectos a observar:
Aspecto Físico: Vestuario Cabello Tatuaje Aditamentos Vocabulario Forma de caminar
FACHADA PRINC IPAL DEL CENTRO DE FORMACION Y ORIENTAC ION PADRE “RAFAEL PALACIOS” DE LA IGLESIA CATOLICA DE MEJICA NOS.
UNIDA D DE BOLSA DE TRABAJO DEL CENTRO DE FORMACION Y ORIENTACION PA DRE “RAFAEL PALACIOS”.
COMPUTACION.
MANTENIMIENTO Y REPARA CION DE COMPUTA DORAS.
DIBUJO Y PINTU RA.
PANADER ÍA