uso más frecuente. Por ejemplo, en el zapoteco colonial de Valles Centrales el número “uno” se podía expresar como chaga (en contextos calendáricos y algunos otros) o tobi. Hoy día, en el dí’zdéh se conserva una cognada de chaga fosilizada en pocos contextos, por ejemplo “una tortilla” es tzá guéeth. Empero, en el contexto calendárico, el uso de estos números especiales se ha perdido y se usan los mismos números que en otros contextos en la lengua. El día trece tiene un nombre especial que se explica en §2.6. El ciclo de 13 días corre simultáneamente al ciclo de nueve seres. Esto es ilustrado en la Figura 2, donde se puede apreciar que el calendario empieza en el día uno, wíizthíb, y ese día reina Nhwdáan, pero cuando llegamos al día 10, witzi’, de nuevo reina Nhwdáan, porque solamente hay nueve seres reinantes.
FIGURA 2. Una trecena. Elaborado por Rosemary G. Beam de Azcona.
2017 / 22 [43]: 6-43
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