CIRUGÍA URBANÍSTICA El soterramiento de las vías férreas ha sido clave para la mejora de los espacios urbanos. Estas actuaciones han permitido desarrollar Abandoibarra, Ametzola o más recientemente el barrio de Basurto hasta Rekalde.
Frente a los vistosos edificios de Abandoibarra, algunas actuaciones no tan decorativas han sido también clave en la transformación de Bilbao para hacer una ciudad más habitable. Se puede hablar, desde luego, de cirugía urbanística, ya que se ha diseccionado el suelo urbano para habilitar sobre el mismo espacios para una movilidad más amable, para el ocio y para el encuentro ciudadano. Cuando la capital era una urbe industrial, el ferrocarril se adentraba por el corazón de la ciudad. Tras la crisis industrial de los 80, se puso sobre la mesa la idea de sumergir las vías bajo tierra por el centro de la ciudad: invisibles, silenciosas e igualmente útiles. El 3 de marzo de 1999 el tren comenzó a circular por el nuevo trazado subterráneo, y paralelamente se comenzaron a levantar las vías que recorrían el tramo entre la zona del Parque de Doña Casilda y la estación de La Naja, para entonces inútiles y que separaban la ciudad de su Ría.
En febrero de 2002 se inauguró el paseo de la nueva Avenida del Ferrocarril, con una longitud de 930 metros y una anchura de hasta 50 metros que unía los barrios de Basurto y Rekalde con el Ensanche. La inversión fue de 35 millones de euros. Sobre la superficie, cubierta en parte de hierba, los vecinos disfrutan de un espacio verde que ha ensanchado la ciudad. Donde había un muro, ahora hay una alfombra.
Dentro de la urbanización de la Avenida del Ferrocarril, la Glorieta de Gordóniz -La Luz del Vientoconstituye un hito urbano de conexión entre el Ensanche y el barrio de Rekalde. Proyectada en coherencia con la estación de Ametzola, también obra de IMB Arquitectos, el gabinete ideó un espacio urbano con una marcada personalidad donde la piedra, el acero, la luz y el agua componen un conjunto que transmite una imagen tecnológica y poética a la vez.
La Luz del Viento se plantea como un plano inclinado que permite establecer una cascada de agua que discurre por encima de una superficie de costeros, unas piezas de granito de superficie rugosa. Este efecto queda complementado con la instalaci贸n de un centenar de pulverizadores que emiten agua nebulizada, produciendo una sensaci贸n de neblina sobre la piedra.
Dos años más tarde, en 2004 se concluyeron las obras de la estación de cercanías de San Mamés y la prolongación del tranvía hasta Basurto. En San Mamés se sitúa la estación intermodal en la que confluyen RENFE, el Metro y, en la superficie, el tranvía y Termibus, la estación de autobuses. Ese mismo año, el Consejo Europeo de Urbanistas premió la operación urbanística en Bilbao, con una mención especial a la operación en Ametzola y a la Variante Sur Ferroviaria, seleccionada de un total de 186 candidaturas procedentes de 12 países europeos.
Junto a San Mamés se encuentra el barrio de Basurto donde se está llevando a cabo el soterramiento de la línea de los Ferrocarriles de Vía Estrecha (FEVE). El 13 de septiembre de 2005, el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, puso la primera piedra de este proyecto, el más costoso económica y técnicamente que ha afrontado la sociedad Bilbao Ría 2000. El resultado será la creación de un gran centro peatonal de ocio polivalente en la nueva zona existente entre Masustegi y Basurto. Se construirá un bulevar de 40 metros de anchura y 200 metros de longitud. El gran paseo dispondrá de aceras de seis metros de ancho y un carril de circulación de una anchura 3,5 metros.