Noel Schajris

Noel Schajris 2.0

El cantautor latino celebra 20 años en la industria con el lanzamiento de su carrera independiente y su propio modelo de suscripción.

POR LEILA COBO

En el verano de 1997, Noel Schajris llegó a México desde Argentina con 600 dólares en el bolsillo, las ganancias de la venta de su piano vertical. Había dejado atrás a su madre enferma y una incipiente carrera musical por la promesa del estrellato como cantante de una banda de funk mexicana.

El grupo no llegó a ninguna parte, pero Schajris firmó como solista con

Sony México y lanzó su álbum debut, Cita en las Nubes (Fecha en las nubes), en 1999. Marcó el comienzo de una carrera que ha durado dos décadas y siete en solitario. álbumes, así como cinco más como la mitad del dúo Sin Bandera, nominado al premio Grammy.

El sonido de Schajris, tanto solo como con Sin Bandera, toma prestado de diferentes épocas, tradiciones y géneros, trazando un futuro que cruza fronteras y generaciones en la música latina. Sin Bandera, que se traduce como “Without a Flag”, se formó apenas un año después del lanzamiento del debut en solitario de Schajris. Junto al cantautor y guitarrista mexicano Leonel García,

Schajris creó una forma única de balada latina, con toques de jazz y

R&B, que muestra su tenor conmovedor y lastimero.

Comenzando con De Viaje (2003), el dúo colocó tres títulos en el top 10 en la lista de Top Latin Albums de Billboard, incluido el campeón de una semana Una

Ultima Vez en 2016. El acto también obtuvo cinco top 10 en la lista

Hot Latin Songs, liderado por el éxito número uno “Mientes Tan

Bien”, que gobernó durante ocho semanas en 2003. Schajris también consiguió un top 10 en solitario en álbumes de pop latino con Uno Es

Uno en 2009.

Si bien la pandemia de CO-

VID-19 retrasó los planes del vigésimo aniversario de Schajris, también lo abrió a nuevas empresas creativas. “Fue un despertar”, dice. En 2020, lanzó una plataforma multimedia en su sitio web (noelschajris.fan) que brinda acceso exclusivo a contenido, mercadería, boletos, transmisión y venta de álbumes a más de 500 suscriptores mensuales.

“La pandemia me hizo darme cuenta de dónde estaba parado y dije: ‘Es hora de mudarse’”, dice. “Mi objetivo era estar muy cerca de los aficionados; para llevar todo de la cocina directamente a ellos. Para hacer eso, necesitaba tener mi propio negocio “. Schajris todavía graba y realiza giras con Sin Bandera, que es administrado y reservado por Westwood Entertainment y firmado bajo la bandera de Sony.

Durante los últimos dos años, ha sido totalmente independiente en su propio sello Dynamo Productions, que se distribuye a través de Altafonte, con sede en España; y está dirigido por Diana Rodríguez de Criteria Entertainment, cuyos clientes incluyen a Moby y Draco Rosa.

“Noel tiene un rango vocal espectacular, y su dominio del piano, así como su habilidad para componer, crece día a día”, dice García. “A través de los años, hemos llegado a comprender la importancia sentimental y musical que tiene este proyecto, tanto para nosotros como para nuestros fans. Nuestras carreras en solitario le han permitido a Sin Bandera alimentarse de nuestras experiencias individuales”.

En octubre, Schajris comenzará una gira por 15 ciudades por América del Norte, promovida por Sound Talent Group, en apoyo de Mi Presente (My Present), un nuevo álbum con 20 pistas. Mientras celebra el vigésimo aniversario de su debut en solitario, el compositor de 46 años habla sobre su fandom de Elon Musk y por qué dejar atrás las Grandes Ligas le permitió apostar por sí mismo. Has tenido éxito tanto como solista como con Sin Bandera. ¿Cómo sucedió eso por primera vez? - Me estaba preparando para componer mi segundo disco en solitario y Leo [García] me dijo: “¿Quieres probar algunas canciones? Sonamos bien juntos “. Mucha gente pensó que estaba loco por formar parte de un dúo. Pero tuve conciertos por toda la Ciudad de México, y cada vez que invitaba a Leo a cantar conmigo, recibíamos la mayor ovación de la noche, tocando canciones que nadie conocía. Sin Bandera fue diferente. Al principio, la gente pensaba que era aburrido: las canciones eran demasiado largas, demasiado lentas; no tenían un gran coro. Tomó un tiempo, pero cuando explotamos, realmente explotamos. El éxito es mucho trabajo y es agotador, y Leo necesitaba un descanso.

No había lanzado un álbum en solitario y necesitaba explorar su identidad. Y ahora, cuando miro hacia atrás en mis 20 años, celebrando tantas cosas, veo el crecimiento de nuestras carreras en solitario y Sin Bandera, y ambos brillan. Es un momento hermoso para celebrar la música.

¿Cuál es la mayor diferencia entre los discos de Noel Schajris y Sin Bandera? - Es una exploración musical diferente. Sin Bandera es balada y R&B y un poco de hip-hop. Es una tercera energía sónica que Leo y yo solo generamos cuando nos juntamos. Es imposible de explicar. Pero es como el yin y el yang. Soy un poco la sonrisa, Leo el ceño fruncido. Históricamente, soy el tipo de la melodía. Soy como Elton John y él es Bernie Taupin. Pero cada vez más, quizás no me estoy volviendo “un pequeño Taupin” sino quizás un “pequeño ‘Pin’”. (Risas.) Estoy aprendiendo y adquiriendo más confianza en mi composición, que tiene que ver con la libertad de tener mi propia etiqueta y tomando mis propias decisiones.

¿Cuál es tu mayor activo como compositor? - Cuando se trata de escribir canciones, soy un poco de la vieja escuela. No entiendo esas canciones que tienen 10 escritores. Una canción es algo muy personal, muy del corazón. Yo diría [que] como máximo, cuatro personas pueden coescribir. De lo contrario, es demasiado. Es un proceso que debe tratarse con mucho respeto.

Tienes tanto una carrera independiente como una de las grandes discográficas. Eso es muy inusual en este negocio, ¿no? - Sí, y muy original, porque los que rompemos con las mayores solemos hacerlo al 100%. Quería hacer lo mejor para mí. Quería explorar mi carrera en solitario a través de mi propia plataforma, pero con Sin Bandera, todavía estamos con una especialización. Tengo un pie en los canales convencionales y no estoy luchando contra lo que funciona. Sony administra mi publicación y estoy muy contento con eso. El catálogo que he creado es importante; es mi legado. Simplemente miro la realidad y decido cómo puedo administrar mejor mi carrera en solitario, que es lo que controlo al 100%.

¿Estabas preocupado por dejar un contrato con una gran discográfica? - Lo pensé durante mucho tiempo. No busqué otro acuerdo de sello porque todos tienen la misma estructura y filosofía. Lo que llegué a comprender poco a poco, y especialmente durante la pandemia, que nos obligó a quedarnos en casa, es que

los programas representan entre el 70% y el 80% de mis ingresos. Y ahí fue cuando me di cuenta de cuánto genera mi música [para mí], y no genera mucho. Estaba tratando de hacer crecer esas métricas, pero si no eres dueño de tus masters y tu música, no obtienes mucho.

¿Cómo están tus ingresos ahora? - Sin Bandera genera entre ocho y diez veces más ingresos. Después de todo, he sido artista de grabación durante 20 años, pero he sido dueño de mis masters durante solo dos. Como puede imaginar, existe un catálogo importante de álbumes y canciones exitosos que todavía son administrados y pertenecen a Sony. Pero si mi catálogo genera una gran cantidad por mes, es posible que solo obtenga el 10% de eso. Pero en mi propia plataforma, lanzada hace solo seis meses,

Consigo el 100%. La belleza será cuando hablemos en un par de años, podré decir que soy dueño de mi catálogo y tengo más de 10,000 suscriptores, y podemos tomarnos unas excelentes vacaciones.

Para ir solo, también tenías que construir un nuevo equipo. ¿Cómo te acercaste a eso? - Algo que he aprendido en los últimos años es que necesitas un gerente que esté a tu lado y, si quiere estar contigo, un apretón de manos es suficiente. Si quieres hacer algo, lo harás tanto si tienes un papel firmado como si no. Cuando tienes ese impulso y esa fe en un proyecto, eso es todo lo que importa. Tengo a Diana Rodríguez; Manuel Vera, mi publicista, que anteriormente fue mi gerente; y Altafonte me distribuye. Todo es un gran trabajo en equipo. Todas mis relaciones en este momento se basan en apretones de manos.

Su nuevo orgullo y alegría es su sitio web, que funciona como una plataforma multimedia que ofrece un modelo de suscripción. ¿Como funciona? - Nuestro equipo de ingenieros lo construyó desde cero. Ricardo Arjona tenía algo similar, pero en realidad, construimos una plataforma completamente nueva. En mi caso, mi objetivo era estar muy cerca de la afición y llevarles todo directamente. Esa cercanía e interacción ha sido fundamental. Ofrezco clases magistrales de canto. Vendemos camisetas. Si compra su CD, lo firmo y se lo envío por correo. Es una experiencia que nunca antes había tenido. Hemos enviado unos 500 CD y unos 600 álbumes de vinilo. Definitivamente hay nostalgia por los formatos físicos y presto mucha atención a los créditos.

¿Ha invertido mucho en esta nueva empresa? - Si. No puedo dejar de ver videos de Elon Musk donde habla de sus inversiones. Obviamente, no me estoy comparando con Elon Musk, pero seis meses después del lanzamiento, las señales indican que vamos en la dirección correcta. En mi opinión, aquí es hacia donde se dirige la industria. La cuota de mercado de las indies está creciendo. Puedes controlar tu contenido, conectarte con tus fans y obtener un retorno de lo que genera tu música. Tienes cerca de 800.000 seguidores en Spotify y más de 500.000 suscriptores en YouTube. ¿Está aprovechando esas audiencias para hacer crecer la nueva plataforma? - Sí, pero también se trata de volver a la realidad.

Ya sea que tengas 500, 600 o 1,000 personas que te siguen, es un logro increíble como artista. Y esos 1,000 suscriptores en su plataforma son iguales o mejores a un millón en otros lugares. Puedes vender millones de álbumes, como hicimos nosotros [con Sin Bandera], pero lo que obtienes después de avances y devoluciones es mínimo. Lo que genero con mi plataforma, mi producto y mi tienda puede ser pequeño por ahora, pero es mucho más gratificante porque me acerca a mis fans y a mi arte. ¿Por qué este modelo de negocio tiene sentido para ti? - Como solista, me di cuenta de que algunas personas estaban interesadas en grandes cantidades de dinero y no en desarrollar conceptos. Hay una audiencia, y me voy a conectar con ellos y voy a generar números reales, no esos números inflados que te hacen pensar que cualquier video que tenga menos de 200 millones de vistas es un fracaso. Es una locura. Que cualquier número de personas vea y aprecie lo que haces es algo increíble. Noel Schajris, el guerito [chico rubio] de Sin Bandera es un artista en desarrollo. A mi modo de ver, me encanta la música en cualquier formato o estilo, y tengo la suerte de vivir de ello. Gracias a Dios, lo he hecho durante más de 20 años.