Aceites esenciales para protegernos de los mosquitos

El uso de insecticidas químicos, no solo resulta tóxico para los insectos (cosa que a veces ni ocurre porque se hacen más resistentes), sino también para los demás seres vivos y el medio ambiente. Las investigaciones sobre los efectos negativos de los pesticidas en general, en fauna, flora, suelos, acuíferos... son innumerables.

Los niños son particularmente sensibles a la exposición a sustancias tóxicas, ya que sus cuerpos son más pequeños, sus sistemas de desintoxicación no están maduros y su sistema nervioso central, digestivo, inmune y reproductivo, se encuentran en desarrollo. Además, su piel es más permeable y sustancias como el DEET (dietiltoluamida), presente en la mayoría de los repelentes químicos, tiene un alto grado de absorción cutánea. En EEUU se ha encontrado presente en el 75 % de ríos y fuentes naturales de agua.

Los aceites esenciales (AE), aunque necesiten una aplicación más frecuente, son una alternativa eficaz y natural para protegernos de las picaduras de los mosquitos. Aún así, dependiendo de la composición, no se recomiendan en bebés, embarazadas, ni niños muy pequeños.

Algunas de las moléculas que más se emplean son:

• Citriodiol: presente en el AE de Eucalipto azul (Eucalyptus citriodora). A la concentración adecuada puede utilizarse incluso en zonas donde hay malaria. Su olor es agradable y es bien tolerado en la piel.

• Geraniol: extraído del AE del Geranio de Egipto. Investigaciones recientes de la Universidad de Florida señalan que demuestra efectividad para repeler no sólo mosquitos sino una amplia variedad de insectos.

• Citronelol y citronelal: presentes en el AE de Citronela de Java (Cymbopogon winterianus), y también en el mencionado aceite esencial de Eucalipto azul. Se caracterizan por su intenso olor cítrico y sus múltiples propiedades. Con potente acción repulsiva no solo frente a mosquitos, sino también arañas, avispas, abejas, etc. También se utilizan para desinfectar picaduras, gracias a sus propiedades antisépticas y antiinflamatorias.

• Linalol: del AE de Lavanda (Lavandula angustifolia), aroma adorado por los seres humanos pero detestado por los mosquitos.

• Alcanfor: presente en el AE del Espliego macho (Lavandula spica), con magníficas propiedades anti-bacterianas y fungicidas.

También complementan el AE de Menta piperita (por sus propiedades anti-inflamatorias, antisépticas y astringentes) y el de Manzanilla romana (como analgésico natural y eficaz antiinflamatorio frente a la picadura).

Pranarôm

PRANAROM, laboratorio científico y médico, líder en aromaterapia científica, fundado por el farmacéutico aromatólogo Dominique Baudoux, cuenta con un equipo de científicos e investigadores que analizan y desarrollan cada uno de los perfiles de más de 250 aceites esenciales. Todos ellos están quimiotipados y son 100% puros y naturales y proceden de plantas botánica y bioquímicamente definidas.

PRANAROM ofrece diferentes formas galénicas: soluciones, cápsulas, geles, cremas, lociones oleosas, óvulos, supositorios, etc.

Dentro de la gama Aromapic, para combatir las picaduras de forma natural, la leche corporal CITRONELA+, permite disfrutar de las noches de verano con total tranquilidad gracias al aceite esencial de eucalipto azul y al Citriodiol®. Esta leche corporal, enriquecida con aceite vegetal de coco y gel de aloe vera, tiene una textura fluida y no grasa, de rápida absorción. Además, alivia la piel tras la exposición al sol gracias a la sinergia de aceites esenciales de espliego macho y menta de campo.

Marta Gandarillas, Periodista especializada en Salud Natural, Titulada superior en Naturopatía y Terapeuta de Jin Shin Jyutsu | mgbioecoactual@gmail.com

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