Nº 10 / 2008
el nuevo
ciudadano GOBIERNO DIGITAL
Nº 10 / 2008
El vasto panorama de interactividad que ofrecen las plataformas digitales está transformando la relación entre el Estado y la ciudadanía al abrir nuevos canales de participación democrática.
Es una publicación de
MORÓN
ENFOQUES
Tecnología y transparencia, ejes de la gestión municipal
Internet, el único recurso capaz de cambiar el sistema político argentino
www.gobiernodigital.org.ar
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19/06/2008 07:49:58 p.m.
tema central e-Ciudadanía
elnuevociudadano La ciudadanía digital es la nueva forma de participación de los individuos ante el vasto panorama de interactividad que ofrecen las plataformas digitales. Ese espacio virtual, la cibercomunidad, se incorpora al real en la medida que crece el número de conexiones a Internet y el acceso a computadoras. Un nuevo esquema de consumo de mensajes convierte al habitante de esta nueva ciudad en un ser democráticamente participavio. Pero, ¿qué están haciendo los países para construir este nuevo tipo de ciudadanía? ¿Qué experiencias exitosas existen en el mundo y qué se está haciendo en la Argentina?
Escribe
Por Esteban Wood y el Staff Editorial 18
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os medios son prolongaciones de los sentidos: la rueda fue la extensión del pie; el libro, del ojo; la ropa, de la piel; los sistemas y circuitos electrónicos, del sistema nervioso central”, sostenía Marshall MacLuhan. La sociedad de la información y la explosión informática han permitido el desarrollo de un nuevo esquema de consumo de mensajes, que convierte al habitante de una cibercomunidad en un ser democráticamente participativo. El entorno urbano cotidiano va cediendo su paso al entorno virtual, en cuyo dominio millones de usuarios se conectan a través de sitios web, interactúan, viven en mundos virtuales tan reales como el real. Vivimos en una gran Babilonia hipertextual, donde la dirección de correo electrónico es la cédula de identidad en el ciberespacio. El portador de esa identidad es un individuo activo, capaz de ejercer su ciudadanía bajo un panorama de interactividad ofrecido por una plataforma digital, en una agrupación social denominada cibercomunidad. El e-ciudadano se asume como total simplemente por su participación en el mundo globalizado, que trasciende los espacios geográficos de cada comunidad. Pero también se constituye como tal al ser reconocido por los organismos del Estado como partícipe necesario y válido del debate de los asuntos públicos, y como destinatario primario de sus servicios. De todas formas, esta distinción no es taxativa. Uno no abandona su ciudadanía real a expensas de constituirse en ciudadano virtual. Un espacio virtual que se incorpora al real en la medida que crece el número de conexiones y el acceso a computadores, lo que difumina aquella separación inicial entre lo real y lo virtual. Internet, la comunicación a través de este medio, pasa a incorporarse en la vida diaria de los ciudadanos. Y viceversa.
L
En los últimos años se han intentado vías ideológicamente diversas, desde la consideración del ciudadano como cliente y la relación entre la ciudadanía y la sociedad de manera análoga a las relaciones del mercado, hasta la participación ciudadana en lo público como práctica social de ejercicio de lo político. Cualquiera sea la perspectiva, de lo que no quedan dudas es de que la participación ciudadana es un proceso irreversible en su tendencia y que las sociedades y las administraciones están construyendo y reconstruyendo constantemente los mecanismos. Uno de ellos, el más importante, es la eadministración, aquella que se orienta hacia los ciudadanos y les permite el uso y el acceso a la información, al conocimiento y a los servicios digitalmente.
l El ciudadano como eje
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l Benchmarking en prestación de servicios
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l Portales de diseño centrado en el usuario
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l El florecimiento de la participación electrónica
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l Sobre el periodismo ciudadano y las smart mobs pág. 24 l La transformación, punto de inicio
El ciudadano como eje Las administraciones públicas de alto rendimiento comparten algunas características comunes: generan un valor público máximo y se centran permanentemente en el ciudadano. Este es el caso destacado del gobierno de Holanda, y su orientación radicalmente ciudadanocéntrica con el e-Citizen Charter. Se trata de un código de conducta que consta de 10 requisitos de calidad (Elección del canal, Sector público transparente, Derechos y obligaciones completos, Información personalizada, Servicios oportunos, Procedimientos oportunos, Confianza y fiabilidad, Administración considerada, Rendición de cuentas y benchmarking, Implicación y empoderamiento) y que ha sido adoptado como un estándar para la evaluación de servicios de administración electrónica por el gobierno holandés y por la comisión de interoperabilidad. Se considera una declaración de derechos civiles de la e-ciudadanía.
El autor es Director Ejecutivo de Actuar Asociación Civil.
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Vivimos en una gran Babilonia hipertextual, donde la dirección de correo electrónico es la cédula de identidad en el ciberespacio. El portador de esa identidad es un individuo activo, capaz de ejercer su ciudadanía bajo un panorama de interactividad ofrecido por una plataforma digital, en una agrupación social denominada cibercomunidad.
La potencia de este modelo radica en que es sencillo, claro, comprensible por la ciudadanía, al tiempo que recoge los parámetros que realmente dan razón de la relación digital entre la administración y la ciudadanía, en términos de servicio, información y participación está absolutamente orientado a la ciudadanía, a la que considera evaluadora de los servicios y motor del desarrollo de la administración electrónica.
Benchmarking en prestación de servicios La siguiente selección de casos exitosos destaca innovaciones que pretenden difuminar los límites existentes entre las estructuras organizativas internas de las administraciones públicas, y trasladarlas a una única entidad, presentada como una ventanilla al ciudadano. 1. 311 New York. El 311 es un centro de atención telefónica multifunción que ofrece a las personas información que necesitan sobre cualquier servicio de público de la ciudad. Los ciudadanos pueden utilizarlo para casi todo: quejas por ruidos, reclamos de propietarios, información sobre transportes públicos, desperfectos en las señales de tránsito, baches y vehículos retirados por la grúa, por citar unas cuantas cosas.
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En la práctica, es el primer “rostro” de la administración de la ciudad y elimina las barreras de comunicación en todo el sistema público. 2. Canadá en contacto. El servicio eContact es un proyecto de colaboración multijurisdiccional diseñado para mejorar el acceso a los servicios de la administración pública en todo el país. Dirige a los ciudadanos a la información, con independencia de la jurisdicción y el lugar de destino. Uno de los aspectos más sorprendentes del programa es que utiliza un procesador de lenguaje natural y un motor de búsqueda para interpretar la consulta. Luego localiza una pregunta similar en una base de datos facilitados por las jurisdicciones del país. La administración pública consigue reducción de costos porque evita el traslado de la consulta a otras jurisdicciones y, al mismo tiempo, el ciudadano recibe un mejor servicio. 3. Servicio Postal en Malasia. Es un buen ejemplo de liderazgo en el servicio al cliente. Pos Malaysia (www. pos.com.my) funciona como un centro único de servicio al ciudadano para que éste realice los trámites relacionados con la administración pública. Por ejemplo, la renovación del permiso de conducir, la inscripción para ejercer el derecho al voto, el pago de facturas de suministros de red, la devolución de préstamos para estudiantes, el pago de aportes a la Seguridad Social y el de muchos otros impuestos. 4. Proyecto Paymaster to the Nation del Servicio Postal sudafricano. Promete simplificar la vida a los pensionados, en especial a los que viven en zonas rurales lejanas. Gracias al programa, los subsidios sociales, y las pensiones se pagarán en una cuenta de banco vinculada a una tarjeta inteligente que tiene una cinta magnética y un chip, que
contiene las huellas dactilares y la fotografía del beneficiario. El proyecto les permitirá disfrutar por primera vez de las ventajas de una cuenta bancaria. 5. Historias Clínicas en el Reino Unido. El Servicio Nacional de Salud (NHS) del Reino Unido empezó a desarrollar historiales electrónicos de toda la vida sanitaria de 50 millones de pacientes. La conexión de los sistemas locales proporcionará al NHS una infraestructura de TI en cinco regiones y, al mismo tiempo, facilitará respaldo de TI a los 30.000 médicos, y a las 270 organizaciones de asistencia sanitaria de Inglaterra, que se espera, participarán en los próximos 10 años. El programa permitirá a los médicos tener acceso a historiales actualizados para tratar a los pacientes. La introducción de datos procederá de diversas fuentes clínicas y será actualizado por el facultativo. Las normativas de seguridad serán estrictas, y ningún otro departamento administrativo tendrá acceso a esta parte del sistema. 6. Elecciones libres y justas. Sudáfrica promovió las elecciones nacionales libres y justas en 2004. Desde la inscripción, el recuento y la publicación de los resultados al público, todos los aspectos estuvieron apoyados en tecnología. Para empezar, la Comisión Electoral Independiente (IEC) se asoció con proveedores de servicios de telefonía móvil, para que los votantes enviaran (SMS) con su número de identidad, y se les indicara si tenían derecho a votar y los datos de su colegio electoral. A continuación, se escaneó y optimizó el proceso de inscribir al votante. En todo momento, el público y los miembros de la IEC utilizaron los SMS para informarse de cualquier problema en los colegios electorales, y remitirla a su vez a la sede central.
7. Pago del Impuesto de la Renta Nacional por SMS. En Suecia, el Consejo Nacional Tributario amplió sus canales de prestación de servicios con la opción de utilizar el SMS para presentar el Impuesto sobre la Renta Nacional. Los ciudadanos suecos reciben un formulario precalculado del Consejo Nacional Tributario, basado en la información de sus empresas, instituciones financieras y otras entidades. Si la información es correcta, el ciudadano tiene que aceptar el formulario del impuesto firmando un documento. Entonces, sólo tiene que enviar por SMS un código al Consejo Tributario para aceptar el formulario del impuesto. El Consejo Tributario responde con un SMS en el que se confirma que se ha recibido la aceptación del ciudadano. 8. Pago Fácil Japonés. Pay-easy es el sistema de una nueva generación de Japón que hace posibles los pagos on line utilizando la web, los cajeros automáticos y los teléfonos móviles (www.pay-easy.jp). Fue lanzado en enero de 2004, y se usa paras las transacciones comerciales, y los Impuesto sobre la Renta, Sociedades, las aportaciones nacionales para pensiones y las cuotas de abono para la Japan Broadcasting Corporation. 9. Tarjeta inteligente en Malasia. La tarjeta inteligente MyKad en Malasia se introdujo con el fin de reemplazar al Documento Nacional de Identidad tradicional. Desde fines de 2005, 15 millones de ciudadanos (el 58% de la población) ya la utilizan. La administración pública implantó la infraestructura para impulsar la utilización de MyKad: la información de identidad personal está protegida con PKI y ya se han repartido 200.000 lectores de tarjetas. Es impresionante la variedad de servicios que ya están disponibles: pasaporte, acceso a gobiernodigital10
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Desde que los ciudadanos, Internet y teléfonos celulares mediante, se encargaron de difundir las terribles imágenes del atentado terrorista en Madrid de 2004, los medios tradicionales y la política formal fueron superados por las nuevas formas de activismo cívico en red.
información médica confidencial, mejora de la seguridad al agilizar el tratamiento adecuado en caso de emergencias. Funciona también para cajeros automáticos y como sistema de pago electrónico para pequeñas compras y peajes. 10. Ticket Único de transporte. En 2005, Holanda introdujo un innovador sistema de ticket electrónico para el transporte público. Es el primer sistema de pago y billete electrónico del mundo que se implanta a escala nacional. Los viajeros utilizan una tarjeta inteligente que se carga utilizando las máquinas de las estaciones, o con cargos automáticos contra una cuenta bancaria. El objetivo es reducir el número de pasajeros que viajan sin billete, aumentar la seguridad, mejorar la comodidad de y la información de gestión de los operadores del transporte público.
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Portales de diseño centrado en el usuario Una administración pública que incorpora como factor clave de éxito la participación del ciudadano/funcionario no puede descuidar la fase inicial de concepción de su portal web, con el objetivo de definir una arquitectura de información y una agrupación de servicios que permita un alto nivel de satisfacción en la experiencia de servicio del usuario. “Nosotros tenemos también que fortalecer nuestros lazos entre el gobierno y la gente y entre la gente misma” Este llamado fue hecho por el Primer Ministro de Singapur Goh Chok Tong en Noviembre de 2001, he inspiró la búsqueda de nuevas vías para promover la participación activa de los singapurenses en el proceso de re-hacer la nación y estrechar los lazos de sus comunidades. Para enfrentar este desafío, el Servicio Público de Singapur se convirtió en una empresa del conocimiento donde el saber colectivo se administra con eficacia, para mejorar la calidad del servicio y agregar mayor valor a los usuarios. En este sentido, se comprometió a transformar los trámites desde la perspectiva de las necesidades de sus usuarios. El modelo de portal de ciudadano de Singapur, eCitizen (www. ecitizen. gov.sg), pretendía cubrir todas las actividades que podía tener un ciudadano, desde su nacimiento a su defunción. Su lanzamiento en el año 1999, con una metáfora de accesos a los servicios denominada “el río de la vida”, significó un profundo avance en la comprensión de las necesidades de los ciudadanos y su traducción a un portal de eAdministración. El portal eCitizen era un sistema de ventanilla única virtual que se enfocaba hacia las necesidades de los ciudadanos. Los servicios estaban organizados utilizando la metáfora del viaje a través
de la vida. Trataba de ser algo más que un nuevo web y presentaba la información siempre desde la perspectiva del usuario. Ya hace varios años, hacia el 2003, que el portal eCitizen cambió su estructura de navegación, abandonando la metáfora del río de la vida, pero su enfoque de acontecimientos vitales se sigue usando en una mayoría de portales de eAdministración, clara
señal de su importancia como pioneros de una nueva forma de entender las relaciones con los ciudadanos. Otra área que el gobierno está buscando desarrollar es la personalización. El portal ciudadano de Singapur tiene la posibilidad de configurar personalizadamente el portal, por ejemplo definiendo sus trámites preferidos. Puede elegir entre cinco categorías: estudiante, dueña/o de casa, trabajador adulto,
OPINION / Por Alejandro Prince / Presidente Prince & Cooke
CIUDADANOS AL CENTRO En sentido estricto, definimos como Gobierno Digital, a la aplicación extensiva, intensiva y estratégica de las TICs a las actividades del Estado Nacional, los Estados provinciales, los Municipios y los entes públicos, tanto en sus aspectos administrativos como de gobierno, de modo tal que en sucesivas reingenierías se cumpla el objetivo de la reinvención del Estado. Se trata no sólo de aumentar la eficiencia de las actividades del Estado y la trasparencia de sus actos, sino y fundamentalmente de la mejora de su relación con los administrados y gobernados, sus ciudadanos, otorgándoles herramientas para su mayor participación y control de la cosa pública de modo más republicano. Es el ciudadano al centro, como alfa y omega del Estado. Es el ciudadano que, gracias a las TIC reduce sus asimetrías de información y poder respecto de la cosa pública, y también en sus otras esferas. Es casi la posibilidad de retomar los principios tocquevilianos de la democracia. Por eso, en un sentido más amplio, Gobierno Digital debe implicar asimismo promover o facilitar la inclusión digital más equitativa posible de todas las organizaciones, empresas y personas de la Sociedad. No sólo en búsqueda de la eficiencia, productividad, y transparencia de los actos y relaciones públicas y privadas, sino de la construcción de ciudadanía y desarrollo de la esfera pública, así como de promover en el plano científico y económico la innovación y la creación de conocimiento a través de redes. Se trata de construir una sociedad más abierta, dinámica, diversa, libre, inclusiva, heterárquica, participativa, innovativa, horizontal y ascendente. Los límites a esto no son tecnológicos, sino políticos, antropológicos, sociales. Una Sociedad en Red transformará las relaciones de poder y autoridad de modos impredecibles, pero seguros y profundos. Lo digital atravesará todas y cada una de nuestras formas de relacionamiento. Es, un cambio de paradigmas, un cambio de mente, de sentido y de consciencia, tal como lo significa la palabra griega metanoia. Por eso, hoy, en Argentina debemos debatir el camino (o Agenda Digital) del país hacia la Sociedad del Conocimiento. Por eso debemos hoy retomar el ideal republicano. Para que “el” Gobierno Digital sea un Gobierno del Conocimiento, un Gobierno Inteligente. Un “buen gobierno” como dice la Declaración del Milenio.
“La calidad institucional no es consecuencia sino prerequisito de Gobierno Digital”
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Aunque el concepto de ciudadano se remonta a la antigüedad, la aplicación de mecanismos prácticos de participación ciudadana en la gestión de lo público y la instalación de este concepto en la conciencia colectiva son parte de las innovaciones recientes en las relaciones entre el Estado y la sociedad.
persona de negocios y ciudadano adulto mayor. Existe también un sistema personalizado de alerta My eCitizen que le envía un e-mail al usuario para recordarle por ejemplo que debe devolver tales libros a la biblioteca. Otras alertas son para la renovación pasaporte, pago de impuestos, chequeo médico semestral, entre otros. Todo esto expresa, por un lado, una integración de los sistemas de información de todo sistema público, y, por otro, ubica al usuario en el centro del diseño de los proyectos de gobierno electrónico.
El florecimiento de la participación electrónica Aunque el concepto de ciudadano se remonta a la antigüedad, la aplicación de mecanismos prácticos de participación ciudadana en la gestión de lo público y la instalación de este concepto en la conciencia colectiva son parte de las innovaciones recientes en las relaciones entre el Estado y la sociedad. La participación ciudadana no es necesariamente e-dependiente. Pero
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es innegable que las nuevas tecnologías han abierto un campo de herramientas muy importantes para estos procesos. El catalán José Antonio Donaire escribió un decálogo para una Sociedad 2.0 y se lo presentó al conceller de la Generalitat de Catalunya. Uno de sus principales preceptos afirma que la Sociedad 2.0 no es aquella en la que los ciudadanos pueden acceder a la información, sino que es aquella en la que los ciudadanos participan en el proceso de construcción de la información. Tampoco es aquella en la que los ciudadanos deciden entre dos o tres opciones (democracia participativa), sino que es aquella en la que los ciudadanos intervienen desde el inicio del planteamiento del problema y, por lo tanto, de todas las soluciones posibles (democracia deliberativa). Madrid Participa es, sin dudas, la mayor y más destacada experiencia de democracia electrónica. Se trató de una experiencia de participación ciudadana que tuvo lugar en junio de 2004 y que buscó establecer canales directos y ágiles de expresión de la opinión de los ciudadanos ante el Ayuntamiento de Madrid. Durante tres días, 136.000 residentes mayores de 16 años fueron consultados y pudieron manifestar su opinión sobre diversas cuestiones, bien a través de Internet o de teléfonos móviles. La finalidad de este proceso era ayudar a identificar las iniciativas públicas más deseadas para revitalizar el distrito.
Sobre el periodismo ciudadano y las A lo largo de los últimos años, muchas administraciones del Estado han decidido acercar sus servicios a los ciudadanos. Se decía que mucho tenía que ver una decisión política de apertura. Pero ahora, el poder real ha comenzado a migrar hacia cuestiones algo más igualitarias. Las nuevas tec-
nologías han puesto en manos de la ciudadanía diferentes medios de expresión para hacer valer sus derechos y para que los gobernantes escuchen abiertamente los reclamos y necesidades. Los ciudadanos se han apropiado de la información a través de los medios sociales y ejercen su derecho a expresarse. La crisis de credibilidad de la política tradicional, el cuestionamiento a ciertas prácticas hegemónicas de los medios de comunicación y la aparición de herramientas digitales accesibles a todos convirtieron al ejercicio de la ciudadanía en algo así como una conversación permanente. Algunos identifican al 11M (el atentado terrorista del 11 de marzo del 2004 en Atocha, Madrid) como la fecha de nacimiento de este nuevo periodismo social que desafía a las fuentes oficiales de información y a lo que los medios de comunicación –en forma voluntaria o involuntaria– quieren hacer que la gente piense. La famosa consigna “¡Pásalo!” en mensajes electrónicos es la piedra basal de la historia de los movimientos cívicos de la nueva era. Internet rebosaba de mensajes, informaciones, consignas y llamamientos a la movilización. Algunos medios siguieron en directo la movilización y se convirtieron, conscientemente o a su pesar, en agentes de la protesta. Fue la presentación en sociedad de los medios sociales. Fue la presentación en sociedad de las smart mobs, término acuñado en 2002 por Howard Rheingold. “Las muchedumbres inteligentes se componen de personas que pueden actuar de común acuerdo, incluso sin conocerse entre sí, cuando utilizan aparatos portátiles capaces a la vez de comunicar y procesar la información”, sostiene Rheingold Desde entonces, los medios tradicionales y la política formal fueron superados por las nuevas formas de activismo cívico en red.
La transformación, punto de inicio El concepto de gobierno centrado en el ciudadano es un proceso evolutivo más que una mera instrumentación de herramientas tecnológicas. Si trasladamos este tema a todos los ámbitos en los cuales la tecnología puede ayudar a transparentar y echar luz a ciertas prácticas de gobierno, queda claro por dónde pasa el desafío de la dirigencia. Básicamente, un cambio de mentalidad. Y ese cambio cultural sólo es posible si se ingresa en otro concepto tan importante como el del e-gov o el m-gov: el T-gov, también conocido como de transformación. El T-gov propicia el cambio endógeno antes de trasladarlo hacia el ciudadano. De nada sirve el desarrollo de ventanillas únicas de trámites o la participación electrónica, si en definitiva el ciudadano no es aún eje ni razón de ser de cada funcionario público y de cada organismo.
El T-gov propicia el cambio endógeno antes de trasladarlo hacia el ciudadano. De nada sirve el desarrollo de ventanillas únicas de trámites o la participación electrónica, si en definitiva el ciudadano no es aún eje ni razón de ser de cada funcionario público y de cada organismo.
© GOBIERNO DIGITAL, 2008
fuentes http://www.cibersociedad.net http://www.eadminblog.net http://www.gov-exchange.org.uk http://www.burger.overheid.nl http://www.hypergene.net/wemedia “Nosotros, el medio” http://www.arvo.es “eCitizen, el Río de la Vida de Singapur” Revista Latinoamericana de Comunicación Chasqui edición Web “El ciudadano digital”
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cia de todos los actos de gobierno y el compromiso de garantizar el acceso a la información pública, el control ciudadano y la rendición de cuentas periódica, porque estamos convencidos de que la apertura a la intervención directa de los vecinos y vecinas es fundamental para construir un Estado local que funcione de manera honesta y combine eficiencia con transparencia. Esa apuesta permanente por un municipio ágil, cercano a los ciudadanos y ciudadanas, abierto a la participación y a sus inquietudes plantea nuevos desafíos y mayores esfuerzos de creatividad en la gestión municipal. En ese sentido, las oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías son fundamentales y las vamos incorporando paulatinamente a los asuntos públicos de Morón.
Web municipal Morón fue pionero en poner a disposición de los ciudadanos y las ciudadanas información pública, rompiendo con la cultura del secreto en la administración local. Desde hace unos años se pueden consultar en la web (www. moron.gov.ar/transparencia) las declaraciones juradas patrimoniales de quienes integran el equipo de gobierno, las audiencias de gestión de intereses que mantienen los funcionarios, la nómina completa de los trabajadores y trabajadoras municipales con el sueldo que perciben, el presupuesto municipal, los informes trimestrales de ejecución de recursos y gastos, los decretos y otras informaciones de interés para la comunidad. Por este impulso, la página web municipal fue premiada en la categoría transparencia por la Universidad de San Andrés (Udesa) y el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec) en el marco del Índice Nacional de Páginas Web Municipales
2007 que se elabora a partir de la observación y el análisis de los sitios gubernamentales del país.
Morón Compra Lanzamos recientemente el portal Morón Compra (www.moron.gov. ar/moroncompra), primer espacio web del país destinado a gestionar las compras municipales y una herramienta inédita para transparentar el destino de los recursos públicos y facilitar el control ciudadano de los actos de gobierno. Las compras de un municipio por primera vez se hacen públicas para que la comunidad sepa qué se adquiere, a quiénes y a qué precio. Este portal tiene dos secciones bien definidas: - Portal ciudadano Las vecinas y los vecinos interesados encuentra allí toda la información referida a las compras en proceso de adjudicación y las que ya se ejecutaron; el listado de los precios testigos de los bienes e insumos adquiridos para el funcionamiento del gobierno municipal; los pliegos de las licitaciones públicas, los concursos de precios y las licitaciones privadas a las que se convoca. Además, a través de un buscador, se puede conocer quiénes son los proveedores inscriptos.
l Introducción
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l Web municipal
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l Morón Compra
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l Morón en el celular
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l Programa Demostrar
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artículos vinculados
Jundaí, Brasil: Compraventa abierta, ágil y transparante Por Vanildo José Ministro EN GOBIERNO DIGITAL, Nº 5, 2008
El Estado argentino e-comprador Por Jorge Srur y Pablo Fraga EN GOBIERNO DIGITAL, Nº 3, 2004
El autor es intendente municipal de Morón.
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mejores prácticas Ciudades Digitales
La apuesta permanente por un municipio ágil, cercano a los ciudadanos, abierto a la participación y a sus inquietudes plantea nuevos desafíos y mayores esfuerzos de creatividad. En ese sentido, las oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías son fundamentales y las vamos incorporando paulatinamente a los asuntos públicos de Morón.
Por otra parte, cualquier empresa interesada en ser proveedora de las compras municipales puede realizar por esta vía la preinscripción on line y luego, personalmente, presentar la documentación requerida para finalizar el trámite. - Portal Proveedores Está dirigida específicamente a las empresas proveedoras. Apunta a optimizar la utilización de los recursos, a reducir los costos de los insumos y servicios que absorben las áreas municipales para su funcionamiento y agilizar el proceso de compras. Los proveedores municipales podrán cotizar de una manera ágil y sencilla para todas las compras directas o consultar el estado de su trámite on line mediante una clave de acceso al
sistema. A partir de la digitalización, el municipio invitará a participar del proceso de compra, por correo electrónico, a cada uno de los proveedores inscriptos que pertenezcan al rubro solicitado para garantizar una amplia participación de oferentes. Antes de esta facilidad, los pedidos de cotización se realizaban -por teléfono o fax- a la cantidad de proveedores que la Dirección de Compras y Contrataciones municipal estimaba conveniente. Me interesa especialmente destacar que el desarrollo de esta herramienta informática estuvo a cargo de técnicos municipales, quienes observaron experiencias similares en el mundo y supervisaron cada paso con responsables de la nación y la provincia. Tenemos el orgullo de haber elaborado, en Morón, un recurso tecnológico que puede ser utilizado por cualquier otro municipio que persiga los mismos objetivos. Además de los beneficios en la eficacia de los procesos administrativos y en la reducción del valor de los insumos, Morón Compra marca un antes y un después en la historia del control ciudadano sobre los gastos municipales.
Morón en el celular Para establecer un vínculo cercano y dinámico con los y las moronenses, el municipio puso en marcha un novedoso servicio gratuito de información. Se trata de un sistema de avisos y noticias municipales sobre actividades deportivas, culturales, de derechos humanos, servicios de salud, noticias de tránsito, inscripción a cursos y talleres e inicio de obras que llegan por mensaje de texto a los teléfonos celulares. Para adherirse, sólo es necesario enviar un SMS al 11-3174-3359 especificando el número del celular, edad, barrio de residencia y las opciones sobre las cuales desea recibir información Solamente en el primer mes de funcionamiento se suscribieron más de
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tres mil personas. Por el momento, es un servicio de difusión de actividades. Próximamente funcionará también para consultas y reclamos. Además, quincenalmente miles de vecinos y vecinas reciben por mail el Boletín Electrónico del Municipio con una agenda de propuestas culturales gratuitas, información relevante sobre obras públicas e intervenciones urbanas de las últimas semanas, etcétera.
Programa Demostrar El municipio puso en marcha el Programa Demostrar, una herramienta más para garantizar la transparencia y el control ciudadano en la administración de los programas sociales, a partir del Convenio de Transparencia en la Implementación de Políticas Sociales que suscribió con el Centro de Implementación para las Políticas Públicas en Equidad y Crecimiento (Cippec). Entre otros puntos, esta iniciativa contempla la publicación en la página oficial (www.moron.gov.ar/transparencia/demostrar) de los padrones de receptores de todos los programas sociales o subsidios que se ejecute por intermedio de la administración municipal con presupuesto nacional, provincial, municipal o de cualquier otra fuente de financiamiento; el presupuesto anual del área; los criterios de incorporación de cada programa social o subsidio; y otras informaciones. No hay dudas de que la incorporación de diferentes herramientas informáticas es fundamental para una gestión municipal comprometida con la participación ciudadana, que promueve el acceso a la información pública, que apuesta a modernizar la estructura administrativa y a dotar de mayor eficacia sus procedimientos. Sin embargo, queda un largo camino para reducir las desigualdades en el acceso a las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones.
Quienes tomamos decisiones sobre la inversión de los dineros municipales tenemos el deber de hacer público su destino y origen; además, tenemos la obligación de garantizar el efectivo cumplimiento del derecho de acceso a la información pública de todos y todas las contribuyentes. Por eso, como un complemento de las iniciativas para la transparencia con soporte tecnológico, diseñamos otros instrumentos. Cada tres meses, lleva a todos los hogares del partido el Boletín Informativo sobre Recursos Públicos e Inversión Comunal Cuentas Claras. En cada edición se publican las cifras oficiales y exactas sobre los ingresos y los gastos. En 2005 abrimos la Oficina de Acceso a la Información Pública que recibe las consultas, en forma verbal o escrita, sobre aquella información del gobierno municipal a la que no se puede acceder mediante los procedimientos ordinarios; impulsa las actuaciones derivadas de dicha solicitud; y pone a disposición de los interesados los datos solicitados. Asimismo, fuimos pioneros en la implementación del programa Presupuesto Participativo, por medio del cual los vecinos y las vecinas deciden el destino de parte de los recursos públicos. Los y las moronenses de cada uno de los barrios proponen, elaboran y eligen proyectos que el Gobierno municipal ejecutará el año siguiente. Se trata de una iniciativa que apunta a la consolidación democrática y al protagonismo ciudadano. La firma digital o la web. 2.0 son herramientas que formarán parte de las futuras reformas de la estructura del Estado. Los aportes tecnológicos son fundamentales para nosotros en la medida en que contribuyan a mejorar el funcionamiento de los procedimientos administrativos, a una mayor integración de la comunidad y a la construcción de una sociedad más justa, equitativa y solidaria. © GOBIERNO DIGITAL, 2008
Morón Provincia de Buenos Aires Argentina
en la web http://www.moron.gov.ar
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enfoques e-Democracia
Internet, el único recurso capaz de cambiar el sistema político argentino
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Javier del Rey Morató javierey@ccinf.ucm.es
Hace una década que hemos ingresado en la era internáutica y todavía no acertamos en el diagnóstico de lo que está pasando, acaso porque eso que está pasando somos nosotros, trepados a un nuevo rol, que es el de internauta, que está modificando nuestro trabajo, nuestro ocio, nuestras costumbres y nuestra sociedad. Entre otras cosas, la transformación que estamos viviendo tal vez permita, ahora sí, una renovación de la clase política argentina, hecha desde fuera del subsistema político, desde la iniciativa y la audacia de jóvenes que canalizan sus inquietudes y su intenso deseo de participación y de representación auténtica -y no meramente formal- a través de redes sociales que se van creando y ampliando desde Internet. Con economía de medios, audacia y ganas de cambiar el mundo, Internet aparece como el único recurso capaz de cambiar el sistema político argentino, abriéndolo hacia nuevas y desconocidas formas de participación y de representación. Es pronto para dibujar el perfil de esa sociedad que no puede tardar mucho en irrumpir, en Argentina y en muchos otros países. No tenemos sus rasgos, pero nada nos impide trazar su retrato. 74
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uando una nueva tecnología aparece en el ámbito de una cultura, lo obvio es la función que se le asigna, y para la que ha sido inventada. Pero hay algo menos obvio relacionado con esa función, que acompaña a toda tecnología, y es lo inesperado de los efectos que tiene en aquella cultura que la ha inventado. Pensamos en Internet, analizamos sus contenidos, reparamos en las funciones que cumple, y no tardamos en caer en la cuenta de que acaso se está produciendo un tsunami bajo nuestros pies, sin que nos demos cuenta de que más cosas de las que creemos están cambiando a nuestro alrededor. Y, sobre todo, lo que está cambiando, es el hombre, y es la sociedad. Hace una década que hemos ingresado en la era internáutica y todavía no acertamos en el diagnóstico de lo que está pasando, acaso porque eso que está pasando somos nosotros, trepados a un nuevo rol, que es el de internauta, que está modificando nuestro trabajo, nuestro ocio, nuestras costumbres y nuestra sociedad. Y si al hilo de una nueva tecnología irrumpen en sociedad nuevas elites, y nuevos modos de reclutamiento social para el protagonismo de esas elites -sucedió con el cine, que dio a Ronald Reagan y a Arnold Schwartzeneger-, habrá que pensar que no es imposible que esté a punto de acontecer algo parecido en relación con Internet.
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Internet y el ámbito de la política Vivimos en un sistema tecnológico -como nos recuerda Jaguaribe-, que nos rodea como un nuevo entorno, y que nos modela a su imagen y semejanza. A ese sistema tecnológico, a finales del siglo pasado, se sumó una novedad cuyas consecuencias todavía no estamos en condiciones de calibrar: esa novedad es una red, que atraviesa la sociedad, que entra en las sedes de los partidos políticos, de los bancos, de la administración, del Estado, de los gobiernos, de las instituciones religiosas, y de los hogares de los ciudadanos, inundando la vida cotidiana con textos y con imágenes, y con invitaciones a visitar lugares hasta hace poco tiempo inimaginables. La actividad política empieza a acusar la existencia de la red, y parece a punto de superar la manía de utilizar las herramientas de hoy con las rutinas de ayer. Si las páginas web de los partidos empezaron a ser poco más que tablones de anuncios, o boletines electrónicos, cada vez admiten más posibilidades de interacción, aumentando la libertad del navegante, y su posibilidad de ingresar en la red, como una nueva realidad, esto es, no como una terminal pasiva -el caso de la televisión- sino como parte activa de la red, capaz de incidir en ella, con iniciativas creativas, con opiniones, y acaso con lo que todavía no hemos visto, pero que llegará sin duda, transformando el actual sistema político tal y como lo conocemos. Porque el actual sistema político, que nos han legado nuestros mayores, y al que seguimos llamando democracia, de democracia tiene poco, y, además, quedó terriblemente envejecido desde que Internet irrumpió en el espacio público y privado. En efecto, nuestros rutinarios y ya superados comportamientos como ciudadanos de la moderna democracia se nos han quedado antiguos. Y la relación entre gobernantes y gobernados está pidiendo a gritos nuevas manifestaciones y nuevos comportamientos, que impulsen este presente tan deficitario hacia un futuro cuya realidad querríamos alcanzar.
El autor es profesor de Comunicación Política y de Teoría de la Información en la Universidad Complutense de Madrid, da clases en el Master de Periodismo de la misma universidad y en el Master de Comunicación Política de la Fundación Ortega y Gasset. Ha dado cursos en Perú, Paraguay, Bolivia y Uruguay. Es autor de trece libros y de numerosos artículos sobre comunicación política, periodismo, televisión y democracia. En su último libro, Comunicación Política, Internet y Campañas Electorales, de la Teledemocracia a la Ciberdemocracia (2007), analiza los juegos de lenguaje de los políticos en las campañas electorales, el populismo latinoamericano y el fenómeno de Internet. En una obra de próxima aparición, América Latina: 18102010. Brasil y las Repúblicas Hispanoamericanas: Una Teoría de la Comunicación y de la Cultura Política, expone su pensamiento sobre la evolución del espacio antropológico latinoamericano.
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Existe la posibilidad de que surja un candidato en la red, un ciudadano espabilado, que sepa abrirse camino desde su web, con un lenguaje fresco, con iniciativas que formen parte de ese movimiento cuya orientación acelere el ingreso del presente en ese futuro que está, ahora sí, al alcance de la mano, y que hasta hace muy pocos años parecía una fantasía propia de los libros de ciencia ficción.
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Internet no ha dicho su última palabra Y alguna vez hemos hablado de la posibilidad de que surja un candidato en la red, un ciudadano espabilado, que sepa abrirse camino desde su web, con un lenguaje fresco, con iniciativas que formen parte de ese movimiento cuya orientación acelere el ingreso del presente en ese futuro que está, ahora sí, al alcance de la mano, y que hasta hace muy pocos años parecía una fantasía propia de los libros de ciencia ficción. Si la rueda supuso una aceleración de procesos de producción y de intercambio de experiencias -una actuación del hombre sobre entornos lejanos-, y la aplicación del motor de vapor a la locomotora permitió multiplicar la velocidad para el traslado de viajeros y productos, y a esos inventos se han sumado luego el automóvil y el avión, no parece equivocada la hipótesis de que Internet no ha dicho todavía su última palabra. Por el contrario, hay motivos para pensar que los cambios cualitativos de su presencia en sociedad todavía no se han producido. En nuestros días, la red supone una multiplicación de experiencias humanas de participación, de relación y de comunicación. Los hombres y mujeres solos, tras fracasar en su matrimonio, no van a un pub a relacionarse: encienden el ordenador, se asoman al mundo desde la pantalla, y alivian su soledad, pues a través de Internet muchos encuentran otra vez el amor. Decimos que una tecnología es a un medio lo que el cerebro a la mente. Como el cerebro, una tecnología es un aparato físico. Como la mente, un medio es el uso que se hace de un aparato físico. Y una tecnología se convierte en medio cuando emplea un código simbólico particular, cuando descubre su lugar en un ámbito social específico, cuando se insinúa en contextos políticos y económicos. Dicho en otras palabras: si Internet es sólo una máquina, un medio es el entorno social e intelectual que Internet está creando. Y si la máquina está ahí desde hace una década, el medio se está construyendo, y nos deparará no pocas sorpresas en un futuro nada lejano.
El potencial de Internet para impulsar una auténtica democracia Suele decirse que a veces la realidad supera a la ficción, y el potencial de actividad que admite la red permite aventurar que dentro de no demasiados años, los ciudadanos que estudien nuestras actuales democracias sentirán pena por nosotros. Porque entonces se habrá avanzado en dos direcciones que eran impensables hasta finales del siglo pasado: la participación y la representación, y también la exigencia de responsabilidades a los hombres públicos, a través de una vigilancia más exigente de su gestión. Sabemos que el sistema político en el que vivimos, al que seguimos llamando democracia, ni es una democracia no puede serlo. De todas maneras, no se define como democracia participativa, sino como democracia representativa. Decimos que es una mera partitocracia, y también que es una poliarquía, es decir, un sistema político relativamente abierto al debate sobre las cuestiones socialmente controvertidas -y sobre las políticas a adoptar para resolver esas cuestiones-, en el que distintas elites, vertebradas en partidos políticos, compiten por la captación de un recurso finito -el electorado- mediante estrategias de comunicación. Y si no hay participación -o ésta es mínima-, y no hay representación -o ésta es meramente formal, y gravemente deficitaria-, la pregunta por la calidad de la democracia, o por la realidad de la democracia, no puede seguir durmiendo su cómoda siesta en los libros de ciencia política: tiene que bajar a la calle, porque ahora sí puede haber respuestas. Y esas respuestas no vienen de la mano de los politó-
logos ni de sesudos pensadores de la filosofía política, sino de la mano de la tecnología: desde hace una década, todo lo que no impulse la participación y la representación, todo lo que no abra el sistema político hacia nuevas e imaginativas formas de inclusión activa de la ciudadanía, es un mero arcaísmo. Y nuestra democracia actual -porque convenimos en seguir asignando ese nombre a una realidad que ni es democrática ni puede serlo- es ya un puro arcaísmo. Porque, ¿qué tiene de participativa? ¿Y de representativa? ¿Cuál es -en la realidad, y no en la doctrina- la responsabilidad de los políticos? Esas y otras preguntas nos abocan a reconocer que nuestro sistema político está ante auténticas asignaturas pendientes, y que Internet aparece como una interpelación ante la que los jóvenes de nuestro tiempo sabrán responder con respuestas de nuestro tiempo.
¿Hacia una renovación de la política en Argentina? Acaso América Latina es un laboratorio en el que observar la evolución de Internet en relación con las graves carencias de la vida política. Porque si la democracia atraviesa una etapa crítica, en los países latinoamericanos su situación es tal vez más dramática. Porque a la crisis de la representación, y a la insuficiente participación, se le suma el hecho de que en muchos países de la región la democracia nunca fue mucho más que una cáscara, un hecho meramente formal, y, por cierto, tan inestable que cada tanto tiempo era sustituida por una dictadura. Si pensamos en Bolivia o en Perú parece claro lo que decimos: ¿Qué tienen que ver los ciudadanos de los Andes y de la Puna con la democracia predominantemente blanca que han tenido hasta hace poco tiempo? Tal vez algún día, en algún país de la región -¿Por qué no Argentina?- habrá un ciudadano que vislumbre el futuro, con un lenguaje nuevo, acorde a los nuevos tiempos, que, con una inversión relativamente modesta -muy lejana de las dispendiosas sumas de dinero que manejan los partidos políticos en sus festivas y banales campañas electorales-, será capaz de ampliar el grupo inicial de sus seguidores, mediante relaciones en red, que le permitirán llegar cada vez más a más ciudadanos. Naturalmente, los medios de comunicación de masas terminarán por recoger su protagonismo, y conseguirá entrar en el circuito mediático sin pagar el peaje de los partidos políticos, a los que podrá superar en algo que no siempre se compra con dinero: visión del futuro, lo que conlleva visión de un presente que está pidiendo a gritos nuevas políticas, y nuevas formas de ejecutar esas políticas, compromiso con los auténticos problemas de los ciudadanos, y capacidad de actuar desde la red. Si la política que se hace en cada momento, en cada sociedad, es subsidiaria de los recursos técnicos disponibles para su ejecución, y si la prensa de masas tuvo su política y sus políticos, como los tuvo la radio, y luego la televisión, en la nueva época en la que estamos ingresando el protagonismo absoluto no lo tendrá nadie, y acaso Internet vaya acaparando cada vez más protagonismo. Porque la época del reinado exclusivo y excluyente de la televisión concluyó, o está a punto de concluir. Y en Argentina la época del reinado partitocrático -predominantemente justicialista- puede que esté próximo a su fin. No hace mucho los argentinos clamaban “Que se vayan todos”, grito que implicaba una demanda social intensamente sentida, y una exigencia moral: ellos proclamaban urbi et urbi que ya no querían seguir gobernados por una clase política ineficaz y corrupta.
Tal vez algún día, en algún país de la región -¿Por qué no Argentina?- habrá un ciudadano que vislumbre el futuro, con un lenguaje nuevo, acorde a los nuevos tiempos, que, con una inversión relativamente modesta -muy lejana de las dispendiosas sumas de dinero que manejan los partidos políticos en sus festivas y banales campañas electorales, será capaz de ampliar el grupo inicial de sus seguidores, mediante relaciones en red, que le permitirán llegar cada vez más a más ciudadanos.
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El potencial de actividad que admite la red permite aventurar que dentro de no demasiados años la democracia habrá avanzado en dos direcciones que eran impensables hasta finales del siglo pasado: la participación y la representación, y también la exigencia de responsabilidades a los hombres públicos, a través de una vigilancia más exigente de su gestión.
La e-democracia, una profecía nada fantasiosa Nuestro punto de vista es que acaso ahora sí es posible una renovación de la clase política argentina, hecha desde fuera del subsistema político, desde la iniciativa y la audacia de jóvenes que canalizan sus inquietudes y su intenso deseo de participación y de representación auténtica -y no meramente formal- a través de redes sociales que se van creando y ampliando desde Internet. Con economía de medios y audacia, Internet aparece como el único recurso capaz de cambiar el sistema político argentino, abriéndolo hacia nuevas y desconocidas formas de participación y de representación. Es pronto para dibujar el perfil de esa sociedad que no puede tardar mucho en irrumpir, en Argentina y en muchos otros países. No tenemos sus rasgos, pero nada nos impide trazar su retrato. Porque la e-democracia no supone sólo experiencias generadas desde el poder, como agilización en las relaciones entre la administración y los ciudadanos, gestiones directas para evitar pasar por la taquilla de esta o aquella oficina, facilidad para hacer la declaración de la renta o para renovar el carné de identidad o el permiso de conducir, y también para convocar consultas a los ciudadanos sobre algunas decisiones políticas que les atañen directamente. Eso es algo menos que e-democracia, y diríamos que se inscribe en el ámbito de la administración, como parte del sistema político que tiene que ver con la eficacia y la rapidez en las relaciones existentes entre el Estado y los ciudadanos, entre los ciudadanos y el Estado. Cuando escribimos estas líneas tenemos el pensamiento puesto en la iniciativa del ciudadano, consciente de que hoy dispone del recurso para hacer frente a los políticos, y al inmenso poder acumulado por los partidos políticos, que nos llevan a hablar de partitocracia mejor que de democracia. No sólo hay la posibilidad de impulsar este o aquel referéndum electrónico, cuyo resultado se conoce inmediatamente -lo cual constituye una práctica de democratización de nuestras arcaicas democracias-, y no sólo las elecciones se pueden hacer sin que el ciudadano tenga que desplazarse al colegio electoral -el colegio electoral tiene su terminal en cada domicilio-, sino que la propia democracia puede producirse todos los días en la red. Seguirán funcionando los parlamentos, seguirán existiendo los partidos políticos, y los medios masivos de comunicación seguirán difundiendo sus versiones de la realidad social y política a millones de ciudadanos. La televisión seguirá ahí, pero transformada, adaptada a un espacio de comunicación del que no será propietaria exclusiva, porque lo tendrá que compartir con nuevas formas de comunicación desplegadas desde la red. Second Life, Facebook y muchas otras alternativas que irán surgiendo nos hacen ver que lo virtual puede ser el primer paso para incidir en la realidad política. El internauta es un nuevo rol que el ciudadano asume, y no siempre será para divertirse, evadirse, buscar sexo o pasar el rato visitando webs de interés discutible. Internet irá ampliando el minipopulus necesario para que la influencia de la e-ciudadanía llegue a ser un dato relevante de las nuevas e-democracias.
Los primeros pasos de la e-democracia Será -ya lo está siendo- un universo juvenil, en el que personas de entre veinticinco y treinta y cinco nos estarán definiendo la realidad, y marcando el camino por donde evolucionarán nuestras democracias. Los estudiantes universitarios están mucho más formados en esa nueva realidad que los que pasamos de los cuarenta años, que tenemos que hacer esfuerzos para adaptarnos al mundo que están diseñando los jóvenes, que, hoy como nunca, dan lecciones a los que son menos jóvenes que ellos.
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En Madrid, la empresa Tuenti aspira a ser útil a la sociedad, apuesta por los canales de información relevante, y a través de la red consigue activar las redes sociales ya existentes en el mundo, pero en estado potencial, como son los antiguos compañeros de colegio. Si Facebook tiene a 380.000 internautas registrados, Tuenti dice tener más, pero no revela los datos. Los internautas comparten aficiones informaciones, videos, recuperan el contacto con amigos, amplían el círculo inicial, intercambiar mensajes, preparar y participar en eventos preparados desde la red. En Galicia -región tan implicada en la vida argentina, por tantos emigrantes cuyos hijos han hecho su vida en Argentina-, la Conselleria de Industria de la Xunta de Galicia estudia actualmente la viabilidad del uso del satélite para que Internet llegue a zonas rurales. En la red, los inmigrantes ecuatorianos compran desde Madrid casas en Ecuador, o adquieren electrodomésticos que pagan en Madrid y son entregados en Loja o en Cuenca, en Quito o en Guayaquil. Como saben los que se dedican al comercio, creadas las redes, ya es posible trasladar lo que sea: si al principio eran productos agrícolas, luego pueden ser productos sofisticados, libros, ordenadores, y también viajeros, turistas, gestión de inmigrantes. Si añadimos a esa realidad algunos ingredientes -un objetivo, una inquietud y unos valores- tenemos el carril por el que rodará en los próximos años la edemocracia del siglo XXI. Y no es inimaginable -porque no es imposible- que surja una iniciativa política desde las redes sociales tejidas desde Internet, capaz de competir con los ya arcaicos pero todavía todopoderosos partidos políticos, y no es improbable que un joven de 25 o de 27 años irrumpa como líder capaz de arrastrar a distintos grupos sociales hacia un protagonismo que no pasará desapercibido por los medios de comunicación tradicionales. Irremediablemente, llegará un momento en que cruzará un umbral a partir del cual el candidato se impondrá en el espacio público, para sorpresa y pasmo de los candidatos instalados, aquellos que tienen lujosas sedes, aparatosos protocolos, despachos, secretarios, consejeros, asesores de imagen y redactores de discursos.
Si la política que se hace en cada momento, en cada sociedad, es subsidiaria de los recursos técnicos disponibles para su ejecución, y si la prensa de masas tuvo su política y sus políticos, como los tuvo la radio, y luego la televisión, en la nueva época en la que estamos ingresando el protagonismo absoluto no lo tendrá nadie, y acaso Internet vaya acaparando cada vez más protagonismo.
Conclusión A más de un lector todo esto podrá parecerle una fantasía, porque lo es, pero no es improbable que pronto deje de serlo. Además, si alguien hubiera escrito en 1990 que tendríamos Internet hubiera sido tachado de loco, o de confundir el tocino con la velocidad y la ciencia ficción o la literatura. Borges anticipó en cierto sentido la red, cuando, en un ángulo del sótano de la casa de la calle Garay, donde había vivido Beatriz Viterbo, vio el Aleph, el lugar donde están, sin confundirse, todos los lugares del orbe, vistos desde todos los ángulos. En aquel sótano oscuro el escritor porteño vio el inconcebible universo, y al final de su relato da en decir que lo que vio era un falso Aleph. Borges tenía razón, pero no estaba en condiciones de escribir que el Aleph auténtico, ese que nos permite asomarnos al inconcebible universo, no está en la mezquita de Amr, en El Cairo: el Aleph auténtico está en Internet, y el sótano de la calle Garay está en el domicilio de todos los ciudadanos. Y desde ese ámbito privado tal vez se está gestando la revolución política que cambie nuestro sistema político, asunto en el que Argentina, tan desilusionada de su clase política, seguro que tiene algo que decir. © GOBIERNO DIGITAL, 2008
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