DIVERSIÓN UNO, DOS, TRES… ¡QUINCE!
EN LA CASA DE PEDRO, ÉL Y SUS AMIGOS JUEGAN A LAS ESCONDIDAS.
UNO DEBÍA QUEDARSE CONTANDO ”UNO, DOS, TRES“ HASTA VEINTE Y A ESPALDAS DE ÉL, LOS DEMÁS SE ESCONDÍAN.
DESPUÉS DEL JUEGO DE LAS ESCONDIDAS, PEDRO LES CONTÓ QUE COMERÍAN UN DELICIOSO PASTEL.
LA PRIMERA VEZ CONTÓ TONY… ¡Y TONY ENCONTRÓ Y ATRAPÓ ENSEGUIDA A PEDRO!
DESPUÉS LE TOCÓ CONTAR A PEDRO, PERO TENÍA UN PROBLEMA Y ERA QUE CUANDO LLEGABA A QUINCE SE HACÍA UN LÍO CON LOS NÚMEROS Y TENÍA QUE VOLVER A EMPEZAR DESDE CERO.
PEDRO SE PONÍA NERVIOSO Y VOLVÍA A EMPEZAR UNA Y OTRA VEZ.
DESDE SU ESCONDITE, LOS CHICOS LE DIJERON QUE CONTARA HASTA QUINCE, QUE VALÍA IGUAL PARA EL JUEGO. PEDRO, ALIVIADO, CONTÓ HASTA QUINCE.
Y DESPUÉS BUSCÓ AQUÍ Y ALLÁ Y ENCONTRÓ A ANA ESCONDIDA DETRÁS DE UN ÁRBOL. ELLA ES SU MEJOR AMIGA EN LA ESCUELA.
CUANDO TERMINARON DE JUGAR, SE FUERON TODOS CORRIENDO A COMER PASTEL.
Y AUNQUE PEDRO NO HABÍA SIDO EL MEJOR JUGADOR DE ESCONDIDAS, SE DIVIRTIÓ MUCHÍSIMO.
LA DIVERSIÓN POR PATRICIA SUÁREZ
LA DIVERSIÓN NOS HACE REÍR Y DISFRUTAR. SUCEDE CUANDO ESTAMOS HACIENDO ALGO QUE NOS LLENA DE FELICIDAD Y NOS OLVIDAMOS DE NUESTROS PROBLEMAS. PUEDE SER CUANDO JUGAMOS CON AMIGOS, EXPLORAMOS NUEVOS LUGARES O CREAMOS COSAS COMO MUÑECOS DE PLASTILINA O TÍTERES. PEDRO SE DIVIRTIÓ MUCHÍSIMO EN SU CUMPLEAÑOS JUGANDO A LAS ESCONDIDAS CON SUS AMIGOS. ¿Y A TI QUÉ TE DIVIERTE?
TRISTEZA EL PEZ DORADO DE MARÍA
ESA MAÑANA, CUANDO DESPERTÓ, MARÍA VIO QUE SU PEZ DORADO NO ESTABA DENTRO DE LA PECERA.
SE ACERCÓ PARA REVISAR BIEN, PORQUE SOLÍA ESCONDERSE ENTRE LOS CORALES DE PLÁSTICO QUE ADORNABAN LA PECERA.
MARÍA NO PODÍA METER LA MANO ADENTRO DEL AGUA Y REMOVERLA PARA ENCONTRARLO, PORQUE PODÍA CONTAMINAR EL AGUA LIMPIA DEL PECECITO.
¿Y SI RESULTABA QUE HABÍA SALTADO DEL AGUA AL EXTERIOR?
¿O SI HUBIERA ENTRADO UN GATO CALLEJERO POR LA VENTANA Y SE LO COMIÓ?
MARÍA SE PUSO A LLORAR SENTADA EN EL SUELO.
SU MAMÁ Y SU PAPÁ FUERON A CONSOLARLA. LOS GATOS NO ENTRABAN POR LA VENTANA DE LAS CASAS ASÍ COMO ASÍ, PORQUE TENÍAN MIEDO DE LA GENTE.
Y EL PECECITO NO ERA VOLADOR, NO PODÍA SALIR VOLANDO DE SU PECERA E IRSE HASTA LAS NUBES.
SEGURO QUE EL PEZ ESTABA DURMIENDO ENTRE LOS CORALES, SOLO HABÍA QUE ESPERAR QUE AL DORMILÓN LE DIERAN GANAS DE NADAR Y JUGAR DE NUEVO.
Y ASÍ FUE, PORQUE, DE PRONTO: ¿QUIÉN CREEN QUE ESTABA MOVIENDO SUS ALETAS DORADAS EN EL AGUA PARA FELICIDAD DE MARÍA?
LA TRISTEZA POR PATRICIA SUÁREZ
LA TRISTEZA ES COMO UNA NOCHE MUY OSCURA, SIN LUNA. PODEMOS SENTIRLA POR MUCHOS MOTIVOS, COMO EXTRAÑAR A ALGUIEN, O SI ALGO NO SALIÓ COMO ESPERÁBAMOS. A VECES, LOS OJOS SE LLENAN DE LÁGRIMAS Y NOS SENTIMOS UN POCO CANSADOS. COMPARTIR NUESTRAS TRISTEZAS CON AMIGOS O FAMILIARES PUEDE HACER QUE NOS SINTAMOS MEJOR Y TARDE O TEMPRANO LA TRISTEZA SE VA, DANDO LUGAR A MOMENTOS MÁS ALEGRES, ¡TAL COMO LE PASÓ A MARÍA, CUANDO VOLVIÓ A VER A SU PECECITO JUGUETÓN!