Todas nuestras acciones van dejando un rastro en el cerebro de las personas que nos rodean, ligando atribuciones que pueden ser positivas o negativas a nuestra persona (nuestra imagen). Con la repetición de estos actos (nuestra esencia) convertimos estas acciones en nuestra reputación. ¿Por qué es importante entender la relevancia de nuestra reputación (ya sea en el ámbito profesional o personal)? Todas las personas, productos, empresas y hasta los países construyen su reputación con base a las acciones diarias y la forma en que las comunican a las audiencias. Esto tiene como resultado el poder de influencia que puede llegar a ejercer en diferentes situaciones. Para empresas y productos, la reputación se convierte en su posición en el mercado, la demanda que tengan de sus servicios o productos y la fidelidad que tengan los consumidores. Para países, lo conocemos como el “poder blando” o “soft power”, la influencia que una nación tiene sobre distintos temas internacionales en los que lleva la punta de lanza. La seducción que una nación tiene hacia el resto del mundo y el deseo de los demás en convertirnos en esa parte específica de dicha nación. Ej, Japón con su disciplina y desarrollo
tecnológico, Singapur con su crecimiento sostenido, India y su mercado creciente de innovación y patentes. Y en personas (también personajes públicos) la reputación la equiparamos con su credibilidad, respeto y la confianza que generan con las personas. Dando seguridad acerca de nuestra capacidad para resolver o desempeñarnos en los diferentes escenarios de la sociedad. Crear una reputación sólida es un proceso que se desarrolla en el tiempo, se requiere paciencia y una estrategia integral para lograr nuestros objetivos. Tomemos como ejemplo un caso de actualidad: “Avengers: Endgame”. Esta película es la conclusión de poco más de 10 años y 22 películas en las que, Disney y Marvel fueron paso a paso construyendo sus piezas con diferentes resultados, algunas con mucho éxito taquillero y otras sin pena ni gloria. Cada una de estas películas corresponde a una acción que hizo la franquicia con el fin de generar una línea argumental coherente, fidelizar a sus audiencias y una forma de comunicar contundente. Todos sabíamos que iban a hacer un crossover, todos sabíamos que los buenos ganan, todos sabíamos muchas cosas que se nos presentaron, sin embargo las expectativas generadas por la estrategia y la reputación de Marvel fue tan
contundente que, nos gusten o no ese tipo de películas, son un éxito rotundo, analicemos: 1) Económico: Avengers Endgame es la película más taquillera de la historia (2,400 millones de dólares, también los recaudó más rápido que las anteriores), rompió todos los récords que podían romperse. Atrás quedó el record de Star Wars: The force awakens y Avatar 2) Percepción: ser ‘nerd’ y leer cómics es cool. Si no entendíamos algo de lo que ocurría en pantalla, todos teníamos que recurrir a la persona que tiene el conocimiento, volviéndolos importantes para la cultura popular 3) Relevancia de marca: “son mejores las películas de Marvel”, “DC no sabe lo que hace”, “¡si no le van a echar ganas, para qué hacen películas!”, todos hemos escuchado o dicho estás frases. Marvel, actualmente, es líder en la industria. Todo este conjunto de acciones e interacciones, de circunstancias controlables e incontrolables generan una imagen pública, que a lo largo del tiempo (poco más de 10 años en este caso) construyen reputaciones sólidas y casos de éxito. ¿Sabes cuál es tu reputación y su valor? Jorge Villegas. Instagram @insight.ic, LinkedIn: Jorge Villegas Luna Twitter: @22villegas
