100 años del nacimiento de José D’Elía Abanderado de la unidad sindical
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D’Elía fue factótum de la unidad del movimiento obrero
Una vida plagada de luchas en búsqueda del bien común
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A finales de la década de 1950 coa vida de José D’Elía es par- ticular con la Unión Soviética, y el Por la unidad te fundamental de la historia movimiento contra el nazismo du- Ni bien comenzó a trabajar se afi- menzó a participar activamente política y sindical de Uruguay. rante la Segunda Guerra Mundial. lió a la Federación Uruguaya de en la formación de un plenario de José Artigas Pepe D’Elía nació el 21 Participó personalmente e impulsó Empleados de Comercio e Indus- obreros y estudiantes. Además, inde junio de 1916 en Treinta y Tres, el compromiso del movimiento sin- tria (Fueci) y participó en marzo de sistiendo siempre en lo que sería pero al mes y medio su familia se dical uruguayo con Vietnam, con 1942 en el congreso constituyente una misión autoimpuesta: la unimudó a Rocha. Tenía nueve herma- Argelia y en particular con Cuba y de la Unión General de Trabajado- dad de los trabajadores. nos; fue el sexto hijo de ese hogar Nicaragua. En los últimos años este res (UGT). En ese congreso, resul- Esas movilizaciones conjuntas lohumilde. En Montevideo realizó compromiso se expresó en un re- taron electos Enrique Rodríguez, gran importantes conquistas lasus estudios en la escuela del Cor- chazo fundamentado y enérgico a luego senador del Partido Comu- borales para los trabajadores, audón. Se casó con Delma Bauzá en las invasiones a Irak y Afganistán, nista y dirigente de los trabajado- mentan el nivel de organización y julio de 1941, con la que tuvo dos la denuncia del imperialismo y su res del calzado,como secretario consolidan el funcionamiento de hijas, Elisa y Lídice, siete nietos y compromiso con la paz mundial. general y José D’Elía, por Fueci, los consejos de salarios, un instruEn el marco de esa concepción par- como prosecretario. mento clave para los trabajadores ocho bisnietos. En 1934 se afilió al Partido Socia- ticipó en la fundación de la Federa- Un conflicto en la industria frigorí- de la industria privada. Pero, adelista. Participó en la lucha contra ción Sindical Mundial, de la Coor- fica del Cerro en el verano de 1943 más, esas luchas, en las que surge el fascismo y abrazó la causa de la dinadora Sindical del Mercosur y desencadenó un duro enfrentamien- la consigna “obreros y estudiantes España Republicana. También fue tuvo relación personal y directa to en el seno de la UGT. Ello derivó unidos y adelante”, culminan tammilitante de primera línea en la con los líderes sindicales y políti- en el alejamiento de Fueci –el gremio bién con la aprobación de la Ley Orgánica de la Universidad, que solidaridad con los aliados, en par- cos del continente. de D’Elía– de la central sindical.
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consagra el cogobierno de nuestra El proceso de creación de la CTU comenzó en 1959 y tiene como casa mayor de estudios. Esto que, por supuesto, implica mojones el congreso de 1961 que un momento histórico para la so- culmina en 1963, cuando D’Elía fue ciedad uruguaya, sella una alianza electo presidente. De esta organientre los trabajadores, la intelec- zación participaron gremios, funtualidad y las capas medias juveni- damentalmente bajo orientación les urbanas, y consolida el protago- comunista y socialista, con el exnismo político de los trabajadores preso objetivo de lograr la unidad como clases social, más allá, mucho sindical. más allá de las reivindicaciones sa- Las discusiones eran duras y difíciles, pero en el proceso de unidad lariales o laborales. Esas luchas también permiten re- sindical, ocupó un lugar central crear un clima de unidad mayor D’Elía. en el movimiento sindical y D’Elía participa como delegado de Fue- Se funda la CNT ci d espués de una dura discusión El proceso de unificación sindical interna en su gremioen un nuevo llegó a un momento clave en la intento de unidad: la CTU, cuya di- década de 1960 a impulso de una rección integró. crisis económica y estructural cre-
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ciente, y al influjo de la acción de los entes, en reclamo de respeto varios referentes sindicales que a las libertades y en rechazo de la promovieron la unidad. Comenzó aplicación sistemática de Medidas a plasmarse la unidad desde una Prontas de Seguridad. perspectiva de clase y con el objetivo de transformar y potenciar El golpe y la huelga general a los trabajadores como actores En medio de la crisis y mientras políticos centrales de la sociedad enfrentaba la represión y defendía uruguaya. las libertades, la CNT dejó en claro En 1964, junto a Héctor Rodríguez, que “ante el avasallamiento de las Gerardo Cuesta, Gerardo Gatti, libertades, la respuesta es la huelga Wladimir Turiansky, León Duarte, general”. Luis Muñoz, Hugo Cores y Jorgeli- El 1º de mayo de 1973, con rumona Martínez, entre otros, dio naci- res de golpe, el acto de la CNT se miento a una nueva central sindical realizó bajo las consignas “Unidad, con un programa común, popular y Solidaridad y Lucha” y “Salario, liantiimperialista. bertades y soluciones”. D’Elía cerró No es casual que primero haya te- el acto y además hablaron: Ramón nido lugar el Congreso del Pueblo Martínez, de la Unión Ferroviaria; (1965), que aprobó con la partici- Álvaro Jaume, de la FEUU; Ignacio pación de cientos de militantes so- Huguet, del Congreso Obrero Texciales e intelectualesun programa til; José Gutiérrez, de la Federación denominado Soluciones a la crisis. Obrera de la Industria de la Carne; Esa discusión programática con- Víctor Cayota, de la Asociación de junta, unida a luchas y movilizacio- Docentes de Secundaria, y Turiansnes, abonó la central única. ky, de AUTE. En 1964, buscando la unidad sin- Cuando 58 días después Juan dical se constituyó un organismo María Bordaberry dio el golpe, el coordinador que integró, e ntre Secretariado Ejecutivo de la CNT, otros,D’Elía. En enero de 1966, la presidido por D’Elía, se reunió en Asamblea Nacional de Sindicatos la noche del 27 de junio en el local convocó a la unidad. El Congreso de la Federación del Vidrio. La decide Unidad Sindical culminó en oc- sión ya estaba tomada y había que tubre de ese año, transformando instrumentarla: huelga con ocupaal organismo coordinador en una ción de lugares de trabajo en todo central. el territorio nacional. La huelga En 1969, en el primer Congreso de la CNT fue acompañada por la Ordinario, D’Elía fue electo presi- FEUU, que ocupó facultades, esdente de la CNT; lo acompañaban cuelas universitarias y liceos. D’Elía como vicepresidentes Turiansky, estuvo en la conducción de esa lude UTE, y Cores, de los bancarios. cha en defensa de las libertades y La CNT se define como clasista, y la democracia. fue, junto con organizaciones estu- Quince días después, por mayoría, diantiles y de izquierda, el corazón la Mesa Representativa de la CNT del enfrentamiento a la escalada decidió levantar la huelga y pasar represiva del gobierno del Parti- a otras formas de lucha. Entonces do Colorado presidido por Jorge adhiere y convoca a una marcha Pacheco Areco. Duros conflictos contra la dictadura el 9 de julio en se libraron contra la congelación 18 de Julio, la que es multitudinade los salarios, la militarización de ria y duramente reprimida. La CNT
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es ilegalizada, todos sus dirigentes Incursión en política son requeridos y muchos encarce- Ese mismo año, y ante la proscriplados. ción de Liber Seregni, integró la D’Elía fue encarcelado y al recuperar fórmula presidencial del Frente su libertad permaneció en el país du- Amplio, como vicepresidente de rante toda la dictadura bajo estricta Juan José Crottogini. Desde esa vigilancia, pero en ningún momento fecha integró el Plenario del Frendejó de participar y apoyar a los sin- te Amplio como personalidad indedicatos clandestinos e impulsar la pendiente. solidaridad con los presos. En el movimiento sindical fue imFue uno de los activos impulsores pulsor e integró la Comisión Naciode la campaña por el “No” a la re- nal Pro Referéndum y la Campaña forma constitucional de la dictadu- por el Voto Verde contra la Ley de ra, que resultó rechazada el 30 de Impunidad. Además, encabezó los noviembre de 1980. referéndum contra la privatización En los años 1981, 1982 y 1983 de Antel y Ancap. En 1993 pasó a D’Elía participó del proceso de ser presidente honorario del Pitreorganización legal del movi- Cnt, responsabilidad que cumplió miento sindical, que utilizando la hasta su muerte. Ley de Asociaciones Profesionales En el año 2000 fue convocado por promovió la organización de los el presidente Jorge Batlle para intrabajadores y mantuvo a su vez la tegrar a título personal la Comisión estructura clandestina. para la Paz para investigar el destiEn 1983 nació el Plenario Inter- no de los detenidos desaparecidos. sindical de Trabajadores (PIT) y se El 7 de diciembre de 2004 la Uniconvocó al 1º de Mayo. D’Elía es- versidad de la República le otorgó tuvo presente y fue homenajeado el título Doctor honoris causa. En el por la multitud que asistió a la con- año 2005 fue declarado Ciudadavocatoria. no Ilustre de la ciudad de MonteTambién participó del gigantesco video por la intendencia capitalina, acto multipartidario realizado en decisión respaldada por todos los el Obelisco el 27 de noviembre de partidos políticos en la Junta De1983, en el que el actor Alberto Can- partamental. Varias juntas depardeau leyó la proclama “Por un Uru- tamentales del interior también le guay democrático sin exclusiones”. rindieron homenaje. En 1984 encabezó el 1º de Mayo, Falleció a los 90 años, a las nueve celebrado bajo la consigna “Un solo de la noche del lunes 29 de enero movimiento sindical”, y es impulsor de 2007. A su sepelio concurriede la unificación orgánica del PIT ron miles de personas; el Pit-Cnt legal, la CNT clandestina y el coor- declaró un paro general en su dinador de la CNT en el exilio. Pre- homenaje. En el último acto, reasidió el unificado Pit-Cnt. lizado frente a la sede del Pit-Cnt,
hablaron Luis Iguini, histórico dirigente de Cofe, y Juan Castillo, trabajador portuario y dirigente
de la central sindical. En el cementerio lo despidió Ignacio Huguet, histórico dirigente textil.
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Con Fernando Pereira, presidente del Pit-Cnt
Un legado: el diálogo de los sindicatos con la sociedad El presidente del Pit-Cnt, Fernando Pereira, aseguró que el diálogo que en su momento impulsó el desaparecido titular de la central, José D’Elía, con todos los sectores políticos y sociales “sigue siendo patrimonio del movimiento sindical”. En diálogo con Caras y Caretas, Pereira remarcó además que D’Elía tuvo especial participación en el Instituto Cuesta Duarte, el cual promueve la formación de los dirigentes sindicales y los prepara para los múltiples desafíos que hoy les presentan estos tiempos. dirigentes y líderes de todos los sectores. Sus nietas contaban que les asombraba que pese a ser un hombre firme y por momentos duro, cuando estaba con ellas modificaba su personalidad y se adaptaba a jugar con ellas. Que mis compañeros me hayan colocado en ese lugar es un enorme honor, pero nunca podría llenar el enorme espacio que su figura dejó.
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omo presidente del Pit-Cnt, da, con la clase obrera y con el pue¿qué se siente estar cumpliendo blo y las causas populares. hoy el mismo papel que desem- Venir después de D’Elía es una enorme responsabilidad y en cierpeñaba D’Elía? El rol sí, pero cometería un tremen- ta medida sentí lo mismo cuando do error si quisiese emular su figu- se fue [Héctor] Florit de la Federa. Somos personas distintas y de ración Uruguaya de Magisterio diferentes generaciones, aunque –en otra dimensión–, pero se tralos dos procedemos de familias ta de dirigentes de tal caudal de muy comprometidas con la izquier- conocimientos, de vínculos y de
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¿Cuánto tiempo llegó a trabajar junto a D’Elía? ¿Qué enseñanzas le dejó ese período? Con él llegué a trabajar diez años. Yo entré joven al Secretariado Ejecutivo del Pit-Cnt y recuerdo que él junto con Lalo Fernández (exdirigente del sindicato bancario) me pidieron que me hiciera cargo de la Secretaría de Formación Sindical. Yo sentía que era muy joven, pero me advirtieron que para asumir esa responsabilidad no necesariamente tenía que saber, sino que tenía que aprender. Y estuve meses aprendiendo con dirigentes como Alicia Pintos o el Cholo Brindisi y otros compañeros, y así me fui capacitando. En ese momento comprendí que no había sido ingenua la idea del Pepe de colocarme experiencia que lograron marcar en ese lugar, ya que entendí cuán una época en las funciones que importante era la formación para las futuras generaciones y que no desempeñaron. Además, yo creo que D’Elía estu- solamente se trataba de tener un vo dentro de las diez figuras más buen discurso, poder emocionar a resaltables de la historia recien- una asamblea o lograr el aplauso. te de Uruguay. D’Elía defendía Se trata de dirigir un movimiento los intereses de los menos privi- sindical que debía estar formado legiados y al mismo tiempo tenía en derecho, en psicología, en sociodiálogo y relacionamiento con logía, en salud laboral, en filosofía,
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en historia, y que ninguna de estas que venían a buscar una solución, ticipar. Obvio que tenemos múlcosas te iba a dar un diploma, pero aunque para ello tuviera que ha- tiples alianzas a los más diversos que, sin ellas, era imposible parti- blar con ministros o líderes polí- niveles, pero también tenemos el cipar en las negociaciones futuras. ticos como [Jorge] Batlle, [Luis A.] respeto de quienes no son nuesY hoy es una cuestión imprescin- Lacalle, [Julio] Sanguinetti, [Taba- tros aliados. Ese es un patrimonio que el modible; si no tuviéramos el Instituto ré] Vázquez o quien fuera. vimiento sindical debe preservar Cuesta Duarte gestionando miles de cursos sindicales por año, no po- ¿Hoy se mantiene esa comunicación? ya que su fuerza depende mucho de ello. dríamos atender la demanda que ¿Es posible? implica tener cientos de grupos Nosotros la mantenemos, es un de negociación en los Consejos de privilegio de Uruguay, pero no sé Usted entiende, entonces, que todo Salarios y tener compañeros para si en la sociedad se le da el valor esto fue construido por dirigentes llevarlos adelante. En cierta medi- que tiene esa comunicación hori- como D’Elía. da, por la importancia que el Pepe zontal. Yo le doy una importancia Sí, fue una forma de construir sindile daba a la formación –él estuvo superlativa porque podemos ha- catos. La idea es que el sindicato no en la creación del Cuesta Duarte y blar con los líderes y dirigentes se agota en sus reivindicaciones. Ni fue su primer presidente–, es que que sea necesario. Esa forma de en el salario, ni en la salud, ni en las hoy podemos hacer frente a los re- diálogo, que impulsó D’Elía como condiciones de empleo. Va más allá, querimientos. Fue tal vez su última presidente sigue siendo patrimo- va en la construcción de la sociegran obra, junto a otros grandes nio de Uruguay y del movimiento dad. Y un día se puede estar en el compañeros como Brindisi, Alicia sindical. Es excepcional que des- peor conflicto, y al siguiente, en la Pintos, Eduardo Fernández, Juan de el movimiento sindical se lla- construcción de una colonia de vame a una figura pública del país caciones, armando una guardería, José Bentancour, Zulema Arenas. El Pepe dedicaba muchas horas y no se obtenga una respuesta. o un club deportivo o un camping. del día a trasmitir su experiencia Por ejemplo, en el festejo de los Tenemos 50 años o más en los que y su confianza en que las cosas se 50 años del movimiento sindical se ha ido construyendo la unidad deben construir de forma colecti- y los 100 años del nacimiento de que se cristalizó con la fundación va. Por su escritorio, que era una D’Elía no hubo una persona a la de la CNT el 1º de octubre de 1966. pieza pequeña de tres por dos, que llamáramos para invitarla y Pero ya en la década del 50 D’Elía pasaban infinidad de compañeros que nos dijera que no iba a par- estaba embarcado en esa tarea
y así lo demuestra un cuadro que nos regalaron días pasados los trabajadores de la industria del medicamento: 16 años antes de que se lograra la unidad de la CNT, D’Elía ya venía trabajando en ella. Y así lo estaban haciendo dirigentes de otros sindicatos como Rosario Pietrarroia o Gerardo Cuesta. D’Elía no se quedaba en la mera reivindicación salarial. Él sabía muy bien que debía ir más allá, como era el caso de hablar sobre el empleo, el desarrollo del país y otros temas relacionados con el desarrollo de la nación y el bienestar de los trabajadores. Nosotros queremos dirigentes sindicales que rescaten estos valores, que mezclen firmeza y ternura. No pretendemos que haya dirigentes tan duros que no sean capaces de sensibilizarse con un niño. Los queremos firmes de convicciones, pero que ayuden a los compañeros que están en la mala, que no les sea indiferente que un niño haga malabares con bolos en una esquina. Eso es parte del legado que el Pepe nos dejó.
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Jorge Bermúdez, dirigente de la FUS y del Pit-Cnt
La unidad sindical “se mantuvo por hombres como D’Elía” El dirigente de la Federación Uruguaya de la Salud (FUS) e integrante del Secretariado Ejecutivo del Pit-Cnt, Jorge Bermúdez, consideró que “pese a los embates de la derecha”, la unidad del movimiento sindical “se mantuvo por hombres como [José] D’Elía, “quien trabajó denodadamente para sostenerla”. Bermúdez resaltó la figura del desaparecido dirigente y advirtió a Caras y Caretas que “aun cuando le fue más difícil, por la presión que ejerció sobre él la dictadura, D’Elía no pasó un sólo día sin hacer política”.
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Qué siente un dirigente del PitCnt de hoy en relación a la figura de D’Elía? Nadie puede llenar el vacío que dejó D’Elía, ni Wladimir Turiansky, ni Luis Iguini, ni Héctor Rodríguez ni el de ninguno de los fundadores de la Convención Nacional de Trabajadores (CNT). Sería un anacronismo plantearse con esos ropajes en esta realidad. Sentimos un profundo orgullo por la obra que implicó la creación de una central única que es ejemplo en el mundo entero. Si algo dejó la generación que también integraron Gerardo Cuesta y León Duarte –como bien escribió Carlos Bouzas en su libro–, es que en medio de los grandes debates ideológicos y de la lucha contra el imperialismo, tenían claro que la unidad del movimiento obrero era fundamental para enfrentar ese mundo que iba cambiando y que auguraba a los trabajadores que deberían tener una presencia mucho más firme, mucho más fuerte. Por tanto, tratar de vestirse con las ropas de D’Elía es como tratar de ponerse la 10 del Santos de
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Pelé. No hay posibilidad. El papel de D’Elía se engrandece aun más porque se da en el marco de una generación de dirigentes sindicales brillantes. Ahí había gente como Cuesta, dirigente de la Mesa Representativa de la CNT y uno de los principales organizadores de la huelga general de junio de 1973. En ese marco es que brilla la figura de D’Elía, que tenía la capacidad de articular a las fuerzas políticas y sociales que eran el progresismo del país. Era una época en la que había un debate ideológico muy fuerte. Sí, era una central fermental y de izquierda, que en su carta fundacional habla de la creación de una sociedad sin explotados ni explotadores. Eso no es de derecha, no es de centro, es de izquierda. Por tanto, nosotros tenemos que rescatar la figura de D’Elía en ese escenario particular, en ese momento de la historia. Hablar del Pepe como un bronce es un error, porque vive en todos nosotros. Yo tuve la desgracia de conocerlo muy poco e inclu-
so alguna vez hasta me rezongó. portante a rescatar en momentos Pero fue un símbolo intachable e como este, cuando la derecha sigue integrante de una CNT que formó hostigando. parte de la génesis de la unidad de la izquierda uruguaya; estuvo en ¿Intenta pensar qué haría D’Elía ante la primera fila del enfrentamiento determinada situación? con la dictadura y también tuvo la Yo insisto en que soy un producto capacidad de amalgamar a la CNT tardío de la generación de 1983, con el Plenario Intersindical de Tra- por lo que mi conocimiento del bajadores a la salida del gobierno Pepe es menor que el que tuvieron dirigentes como Juan Castillo, de facto. Logró unir la lucha de la CNT desde Eduardo Fernández o Juan José la cárcel y el exilio con la lucha que Bentancour. Yo venía después, libraron las jóvenes generaciones. pero siempre tengo presente su Esa fue una prueba histórica muy imagen. Muchas veces pienso cómo habrían reaccionado ante importante. una situación grandes figuras como ¿Pudo haber dos centrales sindicales Rodney Arismendi, Salvador Allende o Hugo Chávez. Y cuesta poneren el país? Hubo muchos intentos, la historia se en ese lugar, aunque se trata de recoge muchos de ellos. Desde el ver con los ojos de esos dirigentes. mismo momento en que se con- No se pueden repetir fórmulas, no formó la unidad del movimiento se puede hacer un recetario de sindical, las clases dominantes, la cocina, sería lo más antidialéctico burguesía y la oligarquía nacio- porque sería ponerlo en un bronce nales –la derecha en su conjunto– vacío de contenido. trabajaron para eso. A fuerza de di- Hoy sería más difícil comprender nero, de violencia y de asesinatos cómo hizo Pepe para ser candidato intentaron romper la unidad del a la vicepresidencia de la Repúblimovimiento sindical, como tam- ca por el Frente Amplio y, una vez bién se intentó hacer en la época terminada la elección, volver a ocude la dictadura. Pero la unidad se par su cargo en la central. Las clamantuvo por hombres como D’Elía, ses dominantes harían imposible quien trabajó denodadamente hoy que eso pasara por su discurpara sostenerla. Y eso fue muy im- so machacón y destructivo. Hoy el portante. Fue una suerte que Pepe Frente es policlasista, algo que no no se fuera al exilio porque de esa sucedía antes. manera pudo trabajar en pos de En la actualidad hay quienes quiela unidad del movimiento sindical. ren imponer que la economía está Aun cuando le fue más difícil por la por encima de la política. Cuando presión que ejerció sobre él la dic- eso sucede es que tenemos probletadura, D’Elía no pasó un sólo día mas. Hoy en la izquierda hay musin hacer política. A nosotros nos cho de la visión tecnocrática de los parece que es el ejemplo más im- años 90.
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Platero: fue “el gran articulador” Del movimiento obrero
“Pepe nos enseñaba que la unidad requiere de paciencia” de su extensa vida sindical estuvo en todos los intentos de unificación que hubo en el movimiento obrero uruguayo”, recordó Platero a Caras y Caretas.
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ara el veterano dirigente del ponía freno a las locuras” y quien sindicato de trabajadores “nos enseñaba que la unidad remunicipales de Montevi- quiere de paciencia”. deo y del Pit-Cnt, Eduardo Platero, “El gran papel que cumplió fue su José Pepe D’Elía fue “el gran arti- capacidad para saber cuánto una culador” que tuvo el movimiento idea podía avanzar sin chocar con obrero uruguayo, “el tipo que le las ideas de los demás. A lo largo
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hubo un intento de golpe desde un cuartel de Treinta y Tres. A raíz de eso, Gerardo Gatti propuso que si había una ruptura institucional, la central sindical habría de ir a la huelga general, lo que se aprobó. La idea era tener la gente movilizada e informada porque si se quedaban en sus casas, sólo iban a tener las noticias que les dieran los golpistas. Pepe participó activamente y, cuando se dio el golpe de Estado, fue sencillo hacer el paro porque había sido discutido durante años a todos los niveles, desde los máximos dirigentes a la última asamblea de sector de una fábrica o empresa.
¿Cuál fue el rol de D’Elía frente al golpe de Estado? Desde el principio tuvo una participación fundamental y totalmente comprometida. Estuvo presente ¿En esos días, que rol jugó D’Elía? en la huelga y en Ahí cumplió el rol de articulador la discusión. Su de todos nosotros. El gran papel actitud fue muy que cumplió fue su capacidad valorada en las para saber cuánto una idea podía asambleas sindi- avanzar sin chocar con las ideas cales. Para noso- de los demás. A lo largo de su tros, el golpe de extensa vida sindical estuvo en Estado era una todos los intentos de unificación crónica de una que hubo en el movimiento obremuerte anuncia- ro uruguayo. El conocía al detalle da. La pregunta cuál era la posición de cada uno no era si habría y qué tenían y qué no tenían en golpe, sino cuán- común. do y dónde, porque el sistema político se estaba Ahí Pepe cae preso y después es liberado. hundiendo. De esa etapa no puedo contar muLa Convención Nacional de Trabaja- cho porque casi enseguida caí predores (CNT) ya tenía previsto ir a la so y estuve hasta el 25 de agosto de 1984. Pero sí puedo decir que huelga general si había golpe. Sí, porque allá por 1964-1965 tuvo una militancia muy activa a
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pesar de las limitaciones y de que había estado preso. Siguió siendo el presidente de la CNT a pesar de que los comunicados oficiales hablaban de la “extinta CNT”. La central se mantuvo en una semilegalidad. Los dirigentes sabían que podían ir presos en cualquier momento, pero al mismo tiempo sentían el apoyo de la gente, que con pequeñas acciones los protegía de la represión que se había desatado. Incluso nos avisaban cuando venían los militares. Después viene la reapertura y el surgimiento del Plenario Intersindical de Trabajadores (PIT) como herramienta para volver a reflotar la actividad sindical. ¿Qué papel cumplió D’Elía en esa etapa? Pepe se había instalado en una oficina que había armado en Montevideo –por la plaza de los Treinta y Tres–, la Unión Internacional de Trabajadores de la Alimentación (UITA), que era filial de la Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres (Ciosl). Ese era un lugar fijo en el cual se lo podía encontrar porque el principio fundamental de toda dirección de una organización es que tenga un lugar permanente. Y la gente comenzó a conocer el lugar y así, si alguien tenía alguna duda, podía ir allí a hablar con él. Por ejemplo, Pepe tuvo mucho que ver en la unión de la Asceep con la vieja Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU), ya que sus dirigentes en muchos casos no se conocían entre sí. Cuando uno pone un faro, todos los barcos saben que ahí hay rocas; bueno, donde estaba Pepe, todos sabíamos que estaba la CNT.
A eso hay que sumarle que era el pesar de que había excepciones. que trabajar mucho, y en ello Pepe fue un factótum principal. Los za- contacto visible con el nuevo gobier- A esto se sumaba la necesidad pallos se acomodaron en el carro no democrático, que encabezaba Ju- de acordar con los partidos políticos para consolidar la salida después de que el carro dio varias lio María Sanguinetti. volteretas. No fue fácil. Hubo una Que era difícil, a pesar de que se democrática. En esa etapa fue corriente que nos acusó a los más había iniciado antes, cuando se es- fundamental la experiencia de viejos de ahogar a los jóvenes, pero tableció la Concertación Nacional Pepe para darse cuenta de que seguíamos siendo los más conoci- Programática. Hay que pensar que era necesario guiar a las nuevas dos y los referentes de los traba- la inexperiencia era muy grande y generaciones que estaban trabajadores porque no habían pasado que en sólo un mes el compañero jando en el movimiento sindical tantos años desde que habíamos más animado de su sección resul- y que habían logrado su resurgitenido que dejar nuestros lugares. tó electo como delegado de la em- miento. Fue un factor de unidad Fue difícil, pero en eso Pepe tam- presa y a los pocos días tuvo que y su papel fue fundamental tras la fractura que sufrió el Congrebién fue el gran articulador y el tipo hablar. que le ponía freno a las locuras, a A esto debe sumarse que los sa- so de la central en 1985. Pepe fue las disputas por los cargos, y nos larios de los trabajadores habían para las dos partes un garante del enseñaba que la unidad requiere perdido mucho poder adquisiti- entendimiento y la buena fe de lo vo durante el gobierno militar, a conversado. de paciencia.
En la reinserción democrática, ¿cómo fue la intervención de D’Elía? También fue importante porque llegó un momento en que había hasta tres dirigentes para un mismo cargo: estaban los del exilio, los que habíamos salido de la cárcel y los que en ese momento conducían los sindicatos y que habían hecho la tarea de reconstrucción del movimiento sindical bajo la sigla del PIT. Había llegado el punto en que las direcciones sindicales tenían que ser únicas, pero para ello hubo
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Luis Iguini y sus años de militancia con D’Elía
Era “buen amigo, muy derecho, muy bueno y muy sencillo” Luis Iguini recordó sus años de militancia junto a José Pepe D’Elía, sobre quien destacó especialmente su capacidad para alcanzar entendimientos: “Siempre trató de buscar los acuerdos para hacer congeniar las diferentes posiciones en un punto que dejase satisfechos a todos”, reseñó. Iguini, exdirigente de la central obrera y de la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE), rememoró para Caras y Caretas los años de consolidación de la unidad del movimiento sindical, de lucha contra la dictadura y de la reapertura democrática, en los cuales militó codo a codo con D’Elía. forma separada, pero los caminos de la vida nos llevaron a trabajar juntos para construir la ansiada central única de los trabajadores uruguayos. Esa tarea nos llevó nada más ni nada menos que diez años.
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omo dirigente que compartió años de militancia en la central sindical, ¿qué es lo que más recuerda de D’Elía?
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bajo vigilancia continua y hasta que me apresaron tuvimos un contacto casi permanente. Él vivía por la Costa de Oro y yo lo iba a ver para analizar lo que sucedía e intercambiar información.
¿Y qué recuerda de la reunificación ¿Y cómo fueron sus contactos con de la central y el papel de D’Elía en D’Elía en los días que siguieron al aquella época? golpe de Estado del 27 de junio de Mucha gente nueva ayudó a la reorganización de los sindicatos y 1973? Durante la huelga a la que se con- del movimiento obrero que tuvo vocó tras el golpe estuvimos muy uno de sus principales hitos en el juntos, codo con codo, porque multitudinario acto que se desarroaunque vivíamos en lugares muy lló con motivo del 1° de Mayo del distintos, integrábamos el coman- año 1983. En esa etapa la figura de do de dirección que primero actuó Pepe fue de consulta permanente por separado y luego se unificó. En para los que hacían sus primeras esos momentos con Pepe debimos armas, así como para las organizamantener reuniones con dirigentes ciones de derechos humanos que sociales y políticos para coordinar se habían creado. las acciones que se estaban desarrollando para enfrentar a la inci- ¿Cómo fue la participación de D’Elía en el intercambio con los partidos piente dictadura. En ese momento Pepe era el pre- políticos tras la reapertura demosidente de la CNT (Convención crática? Nacional de Trabajadores) y yo Pepe tenía contactos con todos era el secretario de Relaciones los partidos políticos y fue fuenInternacionales, a lo que sumaba te de consulta y referente de inmi cargo de secretario general de tercambio para todos. Entonces también volvió a ocupar la preCOFE. sidencia del movimiento sindical ¿Durante la dictadura cortaron unificado. los contactos porque usted estuvo Fue un hombre que siempre supo ganarse el aprecio de la gente, era preso? Sí, yo estuve varias veces deteni- muy humilde, muy querido y muy do, pero en 1976 me encarcela- respetuoso. Siempre trató de Que era un tipo formidable, un ron ocho años, recién salí en 1984 buscar los acuerdos para hacer buen amigo, un hombre muy dere- cuando ya estaba en funcionamien- congeniar las diferentes posicioto el Plenario Intersindical de Tra- nes en un punto que dejase satischo, muy bueno, muy sencillo. Primero comenzamos a militar en bajadores (PIT). A Pepe lo tuvieron fechos a todos.
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Acto en el Paraninfo de la Universidad
La sociedad entera rindió su homenaje a José Pepe D’Elía
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on motivo del centenario del sindicalista, político y luchador por la justicia social José Pepe D’Elía, el Paraninfo de la Universidad de la República se vistió de gala este martes 21 para rendirle honor a este “incansable buscador de la unidad”, según lo expresado en la oportunidad por el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto
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Murro. “Este hombre que hoy homenajeamos contribuyó al desarrollo de Uruguay”, precisó. Con un fuerte aplauso de los presentes, comenzó el homenaje a D’Elía en la tardecita del martes 21, ocasión en la que se presentó una serie de fotografías y se presenció una intervención de músicos clásicos, previo a las palabras de Murro,
del rector de la Universidad, Roberto Markarian, y del presidente del Pit-Cnt, Fernando Pereira. Murro hizo mención al saludo enviado por el presidente de la República, Tabaré Vázquez, en el cual se excusa de no poder estar presente. Recordó la figura del Pepe y sus valores y resaltó que durante toda su vida abogó por la unidad.
Fue un ser humano en el cual primó la modestia, la austeridad y la vida sencilla, valores por los cuales luchó toda su vida, aplicando a su vez la puntualidad como el respeto por el otro, el diálogo entre todos los actores y la importancia de respetar para ser respetado. “Era un hombre capaz de pensar en las cosas generales y no sólo en los aspectos reivindicativos ni corporativos, inclusive fue capaz en su juventud de apoyar solidariamente la lucha por la república en la guerra civil española”, dijo, y añadió: “En ese camino debemos valorar hechos como la huelga general de la Central Nacional de Trabajadores (CNT), que contó con el apoyo del pueblo y sin la cual el Uruguay de hoy no sería el mismo”. “Este Uruguay de hoy, con los cambios que estamos viviendo y que tenemos que encarar para seguir progresando, tiene en este hombre que hoy homenajeamos un actor fundamental, porque es cierto que las historias son de los pueblos, pero también las personalidades como el Pepe D’Elía inciden y contribuyen en el desarrollo de la historia”. Por su parte, el rector Markarian repasó datos biográficos de D’Elía, nacido en Treinta y Tres el 21 de junio de 1916 y fallecido el 29 de enero de 2007. Desde muy joven participó activamente en la actividad sindical, integró la Federación Uruguaya de Empleados del Co-
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mercio y la Industria (Fueci) y participó en la creación de la Unión General de Trabajadores (UGT). Militó desde muy joven en el Partido Socialista y fue protagonista clave en la unificación del movimiento sindical que creó la Convención Nacional de Trabajadores (CNT), de la cual fue su presidente. Tras el golpe de Estado del 27 de junio de 1973 fue proscripto y perseguido durante la siguiente dictadura (1973-1985) y participó de la formación del Plenario Intersindical de Trabajadores, conformado como Pit-Cnt en 1984. En las primeras elecciones luego de la dictadura, D’Elía, que fue cofundador del Frente Amplio y miembro de su Plenario Nacional, fue candidato a vicepresidente de la República por dicha fuerza política. En 1993 fue designado presidente honorario del Pit-Cnt y entre los años 2000 y 2003 integró la Comilo eligieron para encabezarlo”. sión para la Paz. En febrero de 2005 la Universidad “Hoy homenajeamos al Pepe desde la República lo nombró Doctor pués de que murió, pero le hicimos honoris causa por su “notable contri- muchos homenajes mientras vivió: bución a la cultura y el bienestar del hay calles, plazas y salones de inspueblo uruguayo”, primer galardón tituciones públicas que llevan su nombre. Fue un hombre destacado entregado a un no universitario. Finalizando el encuentro, Fernan- que colocó siempre lo colectivo sodo Pereira dijo no imaginarse un bre lo individual y transitó su vida acto del Pepe sin su familia, sin en pos de la tolerancia y la justicia”. la presencia de estudiantes de la Un 28 de setiembre, en un congreFederación de Estudiantes Uni- so, afirmó: “Tendremos una central versitarios del Uruguay (FEUU), de trabajadores, y la idea surgió representantes de todos los par- del mismo seno de la clase obretidos políticos, gente del teatro o ra”. “Hoy, 50 años después de ese cuatro generaciones de militan- congreso, podemos decir con hotes sindicales. Lo recordó como nor y alegría que nos ha enseñado un hombre de gran personalidad que otra sociedad es posible, con la que supo conjugar la firmeza de unidad solidaria”. sus convicciones con la ternura por su familia. Pensar en D’Elía es pensar en su Tabaré Vázquez saludó el centenario del líder sindical vínculo con la intelectualidad y el estudiantado y “cómo no emocio- “Pepe D’Elía perteneció a esa rara pero hermosa categoría de seres humanos que viven como son. De ahí su narnos cuando nuestro principal legado, que más que invocarlo hay que practicarlo. Pertinaz, firme, leal y modestamente; como era él”. Así rehombre no faltó a ninguna cita y cordó el presidente Vázquez a José D’Elía en el centenario de su nacimiento, celebrado en la Universidad de la dijo presente en todos los aconRepública por los trabajadores uruguayos organizados que, a su vez, festejan 50 años de unidad sindical. tecimientos que construyeron el El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, en representación del presidente de la República, Tapaís”, aseguró. baré Vázquez, y de todo el Poder Ejecutivo, entregó una carta para acompañar el centenario del nacimiento de “Era un hombre que respetaba toJosé D’Elía y de los cincuenta años del Congreso de Unificación Sindical, en el cual el aporte del homenajeado das las ideas, pero creía firmemenfue vital para la congregación de los trabajadores en una central única. te en el socialismo y en la igualdad En la carta, el presidente Vázquez expresó su deseo de participar “como uno más de ustedes” para brindar de clases, pero desde la profundihomenaje a “una figura emblemática del movimiento sindical” y un “ciudadano irrenunciablemente compromedad, sin demagogias. Cómo no quetido con su país”. rerlo como padre del movimiento “Honrarlo también nos honra”, subrayó en su misiva el jefe de Estado. sindical, porque encarnó el pensamiento de mujeres y hombres que
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José Pepe D’Elía
Honrar la vida
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scribir sobre el Pepe D’Elía se presenta como una tarea ardua y complicada por varias razones. Hace un par de años el Parlamento le realizó un homenaje y nos tocó en ese momento hacer uso de la palabra y sentíamos la misma sensación de impotencia que a la hora de escribir unas breves líneas de homenaje sobre una figura tan inmensa, con tantas facetas, de un aporte tan excepcional a las mejores tradiciones del movimiento obrero, entendiendo a este en un amplio sentido. José Pepe D’Elía fue un símbolo de la clase obrera, pero no un símbolo hueco de bronce o mármol, sino un símbolo que abreva las mejores tradiciones del campo popular, y es
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eso mismo lo que lo hace inmortal. Pepe es símbolo de un movimiento obrero con mirada de conjunto, que lucha por el plato de lentejas, pero que no se agota en esa lucha, de la capacidad de unir la reivindicación al programa, la táctica a la estrategia, de construir una mirada programática por encima de concepciones economicistas, de atar los intereses del pueblo trabajador a los del conjunto de la nación. Pepe es símbolo de internacionalismo. Contribuyó a un movimiento obrero sensible con las luchas de los pueblos del mundo, honrando una de las más importantes características de nuestro campo popular; la lucha es nacional por su forma, pero internacional por su contenido, por tanto, llevó a la
práctica esa máxima del Che “de sentir en lo más hondo la injusticia cometida contra cualquiera en cualquier parte del mundo”. Este movimiento sindical que hoy reclama por los maestros asesinados en México, que luchó por la liberación de los patriotas cubanos, que condena el golpe en Brasil o el drama de los refugiados de guerra en Europa es heredero de esa tradición. Pepe es símbolo de un movimiento obrero solidario con las luchas y con su pueblo, el de las misiones sociopedagógicas que con gigantes como Julio Castro a la cabeza recorrían las zonas más pobres del interior, los llamados “pueblos de ratas”, donde los expulsados de las estancias vivían en condiciones de extrema pobreza y de analfabetis-
mo. Las actuales brigadas Agustín Pedroza, que siguen poniéndole el hombro a la reconstrucción de Dolores y realizan más que contundentes demostraciones del conjunto del movimiento popular, son continuidad de esas historias Pepe es símbolo de un movimiento sindical independiente, insubordinable; he aquí una de las más grandes fortalezas, un movimiento de clase no indiferente al escenario en el que la lucha se da, pero que no es polea de trasmisión ni de patrones, ni de gobiernos, ni de partidos políticos, ni siquiera de aquellos con los que comparte aspectos del programa. Pepe es símbolo de lucha, de una tradición clasista, que negocia, pero que sabe que “sólo con la lucha se lograrán los cambios”, como lo escuché decir hace más de veinte años en el primer congreso del Sunca en el que me tocó participar. Pepe es un símbolo ético. Ejemplo de un movimiento sindical honesto, que entiende la militancia como una responsabilidad y nunca como un privilegio. Austero, de firmes principios, que nace y muere en las mismas condiciones que la clase que representa. Pepe es una bandera de la unidad, que pasó de ser un criterio de organización para luchar más eficazmente a un principio, después de que, durante doce años, la dictadura fascista intentara una y otra y otra vez quebrar el movimiento sindical, y ni con jaulas ni tortura lo logró. Y dicen que los héroes no mueren, que se siembran, y algo de eso debe haber, porque José D’Elía es inmortal, y cada vez que se instala un debate sobre estos temas en el campo popular su vida, sus historias, sus luchas, que también son nuestras, marcan la cancha y el camino.
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Pepe por siempre
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Lo primero que hay que hacer inevitable recordar su trayectoria es cuidar la unidad”, decía Pepe siempre límpida. Según cuentan D’Elía, cuya religión única consis- Jorge Chagas y Gustavo Trullen en tió en mantener viva la llama que su libro Memorias de la esperanza, su avivamos en AEBU día a día desde primera aparición política fue para oponerse a la dictadura de Terra en hace 50 años. A un siglo de su nacimiento es marzo de 1933. Dos años después,
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se incorporó al Partido Socialista, del Plenario Intersindical de Trabadel cual fue fundador de su sector jadores conformado el 1º de mayo juvenil y se inició como sindicalista como Pit-Cnt y ocupó un cargo en su secretaría. en la antigua Fueci. Participó en la formación de la D’Elía fue además fundador del Unión General de Trabajadores Frente Amplio en 1971, y una vez (UGT) en 1942. Creó en 1948 la recuperada la democracia, en las Agrupación Socialista Obrera y elecciones nacionales de 1984, fue una figura fundamental en la acompañó, como postulante a la unificación del movimiento sindi- vicepresidencia, al candidato a precal uruguayo, que desembocó en la sidente Juan José Crottogini. creación de la CNT, de la que fue Diez años después renunció a la secretaría del Pit-Cnt, pero fue desigpresidente. Fue una pieza clave en la resisten- nado presidente honorario hasta el cia a la dictadura (fue proscripto y día de su muerte, el 29 de enero de perseguido por los militares) y en 2007. Transitó por dos siglos y nos la huelga general de 15 días que servirá de guía por muchos más. resistió el golpe de Estado del 27 Asociación de Bancarios de junio de 1973. del Uruguay (AEBU) En 1983 contribuyó a la formación
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Fue inaugurada en 2015
Plaza recuerda a Pepe D’Elía en el centro del barrio Goes
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a plaza, que rinde tributo al desaparecido líder del movimiento sindical uruguayo, se encuentra delimitada por las calles Libres, Porongos, Juan José de Amézaga y Ramón del Valle Inclán. El diseño se compone de diferentes espacios: uno semiabierto para deportes y espectáculos culturales, sector de juegos de agua, juegos de niños y aparatos para deportes. Será un lugar en el cual se desarrollarán diferentes actividades recreativas, deportivas y de encuentro colectivo. En su inauguración, desarrollada en setiembre del año pasado, participaron el intendente de Montevideo, Daniel Martínez, la ministra de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Eneida de León, la subsecretaria del Ministerio de Desarrollo Social, Ana Olivera, el edil Mariano Arana y Fernando Pereira, en representación del PitCnt. También asistieron familiares del dirigente desaparecido. Martínez expresó: “José D’Elía sólo podía hablar con el corazón porque, para mí, fue como un segundo padre, además de un maestro de generaciones por su ejemplo de vida. Lo conocí en la reorganización del movimiento sindical clandestino y es difícil poder explicar lo que significó el Pepe D’Elía a lo largo de mi vida como militante sindical”. Agregó que “muchas veces discrepé con él, porque a veces veníamos con un ímpetu y siempre el Pepe nos enseñaba con su tranquilidad, su respeto, con su capacidad de relacionarse con quien fuera, siendo tolerante”. El intendente recordó que José D’Elía siempre enseñaba que “el movimiento sindical clasista no está sólo para temas reivindicativos; siempre tiene que contribuir a la toma de conciencia, a dar un salto cualitativo que permita valorizar el salto de conciencia en sí, por lo que se podrá ganar el con-
flicto, se podrá triunfar en lo económico, pero si ese conflicto no logró que el pueblo comprenda la lucha de los trabajadores, sino que la juzgue negativamente, se habrá perdido”. Martínez concluyó rememorando
otra de las experiencias vividas junto a D’Elía, cuando señalaba que la solidaridad hay que devolverla a quien la necesita, al que no tiene nada, al que está desposeído, al que se encuentra luchando por una causa justa y no tiene a quien
recurrir. “Por eso es tan justo y bienvenido este homenaje, porque el Pepe D’Elía representó lo mejor de la lucha del movimiento sindical uruguayo, la mejor historia de hacer política y de contribuir a luchar por una sociedad mejor”, resaltó.
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