Nacimiento de la Aviación Policial “Un sueño con alas policiales”

Por invitación de Casur, Institución de la cual guardo gratos recuerdos por haber sido su director en dos ocasiones (enero 1992 a noviembre 1992 y julio 1998 a junio 2002), me complace presentar mi libro “Etapa fundacional del servicio aéreo y escuela de aviación policial”, en el que se registra una de las etapas más innovadoras, prósperas y visionarias de la Policía Nacional que hizo realidad un sueño de más de seis décadas.

Después de varios intentos de tener un servicio aéreo policial, el Decreto 2137 del 29 de julio de 1983, Estatuto Orgánico de la Policía Nacional, creó la especialidad de la Aviación Policial, que a su vez, paradójicamente, tuvo su origen en el auge del narcotráfico en Colombia en los años 60 y 70 y en el convenio firmado entre Colombia y los Estados Unidos para la lucha con - tra el narcotráfico. A partir de ese momento, se inicia una intensa actividad en la que tuve el honor de ser nombrado como su primer comandante por disposición del señor general Víctor Alberto Delgado Mallarino, director general de la Policía Nacional.

La publicación narra en detalle cómo de la noche a la mañana y casi de la nada, se convirtió en una poderosa aviación policial cubriendo las áreas de mantenimiento, abastecimiento y talleres con la debida asistencia técnica y tecnológica, concurriendo lo científico y lo administrativo así como la formación profesional de oficiales pilotos y de personal aeronáutico (técnicos y tecnólogos), la implementación de la medicina de aviación y un rápido crecimiento del parque aéreo (helicópteros y aviones), al igual que la creación de las primeras cuatro ba- ses aéreas policiales (Guaymaral, Valledupar, Santa Marta y San José del Guaviare).

La aviación policial era una necesidad urgente y esperada para atender los servicios policiales en todo el país, los operativos antinarcóticos de alto riesgo, la fumigación o aspersión aérea, la lucha contra los carteles de la droga, grupos subversivos y la delincuencia organizada, así como los vuelos humanitarios y los suministros logísticos que requería la institución.

Entre los múltiples y más importantes operativos aéreos, se destacan el de Tranquilandia que se llevó a cabo el 11 de marzo de 1984, en la zona de los llanos del Yarí, catalogado como el mayor centro de producción de cocaína del mundo, con siembras de cultivos ilícitos, la producción, tráfico y comercialización del alcaloide en el mundo, en el que se destruyeron 19 laboratorios con sus insumos, ocho pistas aéreas clandestinas, una voluminosa producción de cocaína de 13.8 toneladas métricas avaluadas en USD 1.200 millones, 45 personas capturadas, incautación de siete aeronaves, siete vehículos y cuatro embarcaciones; éxito de gran resonancia nacional e internacional.

La creación de la Escuela de Aviación Policial en Guaymaral, el 20 de febrero de 1985, fue otro de los grandes aciertos y éxitos; egresaron de sus aulas los 13 primeros cursos de oficiales pilotos para un total de 123, hasta que la Escuela fue trasladada a Mariquita, Tolima, allí se convirtió en una escuela internacional y se vinculó a la mujer en las actividades aero- náuticas, con excelentes resultados.

La aviación policial en sus primeros tres años de vida tuvo un desarrollo acelerado, con notables repercusiones en el servicio policial, facilitó la presen- cia oportuna en cualquier parte del territorio nacional, ejerció dominio en zonas de difícil acceso por tierra, combatió con superioridad a la guerrilla, las bandas criminales y desvertebró carteles del narcotráfico; mejoró la lucha contra la delincuencia, brindó apoyo oportuno a las unidades policiales atacadas por la subversión, trasladó a los muertos y heridos, prestó ayuda humanitaria en desastres naturales y tragedias, el mando policial pudo ejercer mayor y mejor control, asesoría y supervisión de las unidades. La aviación ha sido fundamental para el mantenimiento de la democracia y el sometimiento de los grupos ilegales armados que se acogieron al proceso de paz.

Fue importante y oportuna la reforma estatutaria, de reglamentos y manuales para adaptar este nuevo servicio a la estructura institucional, con su respectiva simbología propia de la especialidad, uniformes, insignias, distintivos y su himno, entre otras muchas características que le dieron su propia identidad.

Para la creación de esta emblemática unidad fueron muchas las personas y organizaciones que nos asesoraron, apoyaron y contribuyeron con este admirable propósito institucional a quienes se les hace un especial reconocimiento. Se rinde un homenaje a los pioneros de la aviación policial, al mando policial de todos los tiempos, a los oficiales pilotos, suboficiales, agentes, personal no uniformado y civil a contrato, quienes con mística y empeño lo hicieron posible.

En este breve y somero recuento es imperioso nombrar al personal antinarcóticos, por su valeroso y heroico servicio, con quienes la aviación policial trabajó hombro a hombro, conformando un poderoso binomio, compartiendo los éxitos y adversidades que el servicio les deparó. Igualmente, a los héroes que ofrendaron sus vidas en aras del servicio a la policía y a la comunidad, entre algunos de ellos, menciono al brigadier general Jaime Ramírez Gómez, director Antinarcóticos asesinado por el narcotráfico; al capitán Fernando Álvarez Bonilla Primer piloto policial asesinado por el narcotráfico, en cumplimiento de actos meritorios del servicio; y al mayor Héctor Aníbal Talero Cruz, héroe del Palacio de Justicia; así como a todos nuestros héroes de la aviación policial y de la Dirección Antinarcóticos.

Esta aproximación histórica cubre los años 1984, 1985 y 1986, época en que tuve el alto honor de ser primer comandante del Servicio Aéreo de Policía, en el grado- nel, que a no dudarlo, conformará el primer tomo de la variada y rica historia de la aviación policial y de su Escuela de Aviación, que Yo, como expresidente de la Academia Colombiana de Historia Policial, consideré oportuno y necesario relatar, tarea que debe continuar para que se registre con orgullo los grandes avances y desarrollos, así como los aportes de la aviación policial a la Institución, a la sociedad y al país en general.

Dios y Patria

P. D. El libro está disponible para consulta virtual en el portal web https://www.policia.gov.co/centro-estudios-narcotrafico/productos